-¡Pido la palabra! -dijo, saliendo a primera fila un hombre muy entrado en años, cano de greña, enjuto y ahumado de carnes y ronquillo de voz.
En las ráfagas veladas de su vaticinio
ahumado se engendraron los espectros de la esfinge que lo retaba en sus andanzas trípodes, que lo lanzaba a la pregunta paranoica, que lo sangraba en su respuesta absurda.
Antonio Domínguez Hidalgo
Sabía yo que esta modesta e idílica prosperidad era obra de un hombre, pobre como los demás labradores, que viven en madrigueras y se mantienen de berzas cocidas y mendrugos de pan de maíz, pero más activo, más emprendedor; dotado de la perseverancia que caracteriza a los anglosajones, de iniciativa y laboriosidad, y que, a fuerza de economía, trabajo, desvelos e industria había llegado a adquirir aquellas productivas heredades, aquel huerto con su arroyo y a construir en vez de ahumado y desmantelado tugurio, la vivienda de «señor», saludable, capaz, aspirando y respirando holgadamente por sus seis ventanas y su alta chimenea...
No hace mucho tiempo que un hombre de la Noruega reprendía a un holandés por su lujo ¿Qué se ha hecho, le decía, aquel tiempo feliz, en que un comerciante, que salía de Ámsterdam para las Indias, dejaba en su cocina un cuarto de buey ahumado, y lo encontraba a su vuelta?
Esta se miraba resplandeciente con su serena belleza de prisma
ahumado, y no se sabe si porque iba a la cabeza y su luminosidad rompía en primer término la oscuridad del espacio ilimitado, o porque tenía ciertos aires de sacerdotisa cósmica, era que se veía avanzar tan segura de su verdad y de su búsqueda, de sus propósitos y de su fin.
Antonio Domínguez Hidalgo
Jarabes o concentrados para preparar refrescos que se expendan en envases abiertos utilizando aparatos eléctricos o mecánicos, así como los concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores que al diluirse permitan obtener refrescos. 3. Caviar, salmón ahumado y angulas. 4.
En ese instante acertó a pasar por allí un águila que veloz penetró imprudentemente en la hoguera y aunque alcanzó a salir, su plumaje se quemó y quedó ahumado.
Aquella piedra era un TECPATL, es decir, un pedernal, un cuarzo duro y lustroso, como si fuera de cera, cuyos bordes, cual cristal opaco, despedían chispas y hacían que relumbrara su color grisáceo con tonos amarillentos. Parecía un largo corazón ahumado que palpitaba luminoso, como esas lámparas de luz intermitente.
ENERGÍA He vencido una vez más la muerte, puta consuetudinaria, amortajadora hipócrita, y sobre su cráneo roto, tras su risotada loca, encendí votivas, derramé las ceras y tras el recuerdo de su cuerpo
ahumado, tiré su osamenta a fosos sin llantos.
Antonio Domínguez Hidalgo
¿Cómo armoniza usted esto con su teoría?» El sueño a que la enferma alude es el siguiente: «Quiero dar una comida, pero no dispongo sino de un poco de salmón
ahumado.
Sigmund Freud
De otra parte, quiero decir, por otra parte, esos rebaños de cabras no es una otra particularidad; son otra particularidad, que no le va en zaga al muslo ahumado de la vieja, ni a lo que el insigne hablista vio por adentro en Roma.
Coloca enseguida a la entrada de la caverna que se halla más cerca de la gran roca unos pequeños zuecos muy relucientes, de color amarillo ahumado, y esconde alguno a poca distancia para que haga su efecto en el momento que convenga.