Actions

Work Header

Rating:
Archive Warning:
Category:
Fandom:
Relationships:
Characters:
Additional Tags:
Language:
Español
Series:
Part 1 of Mientras el sol sale de nuevo
Collections:
GabeNath Book Club and Art Club Server
Stats:
Published:
2023-11-14
Updated:
2024-11-16
Words:
91,598
Chapters:
20/40
Comments:
6
Kudos:
11
Bookmarks:
1
Hits:
406

Mientras el sol sale de nuevo

Summary:

Ladybug decide salvar a Gabriel y a Nathalie; de modo que Adrien no termine solo como estaba predestinado. Pero cuando pensaron que ya todo estaba resuelto, su mortal destino vuelve para perseguirlos. ¿Podrán Nathalie y Gabriel salvarse o terminarán encontrando su fin a costa de sus malas decisiones?

Notes:

Chapter 1: Una nueva oportunidad

Notes:

ADVERTENCIA: Esta historia contiene spoilers del final de la temporada 5 de Miraculous Ladybug y algunos spoilers del especial Miraculous World Paris. También tomo el doblaje francés como referencia así que tal vez algunos diálogos sean diferentes con respecto a otros doblajes.

Lamento haberme desaparecido durante todo este tiempo. Estaba muy triste con el final de la temporada 5 de Miraculous y por mi Gabenath. Aunque de todas maneras sigo shipeando el Gabenath, por lo que seguí trabajando en este fic todo este tiempo, ya que lo tenía desde el año pasado antes que sucediera la situación de los leaks. Era como me imaginaba que iba a ser la temporada 6 pero ya veo que me equivoque.

Esta historia será un What if: Si Gabriel hubiera escuchado a Marinette cuando le dio una segunda oportunidad (y también si hubiera escuchado a Nathalie).

Chapter Text

 


 

Estoy desesperadamente solo.

Me aferro a la última cosa que me queda: La esperanza.  La esperanza de un mundo mejor. La esperanza de que la gente pueda evolucionar. Ya que basta a veces con una sola decisión para cambiar el rumbo de una vida.  

—Gabriel Agreste, Miraculous World Paris.

 


—Nathalie, no estés triste. Sabes bien que estuve de acuerdo, Gabriel jamás me obligo a nada. Pero no intenten traerme de vuelta.

El sonido de una grabación resonaba en la guardia de Hawkmoth.

—Entiende, no quiero que alguien borre su vida a causa de un error que nosotros cometimos. Ustedes dos deben continuar siendo felices, incluso si yo no estoy a su lado.   

Gabriel estaba tratando de contener las lágrimas después de escuchar esas palabras de la boca de su difunta esposa. Aunque la grabación estaba dirigida a Nathalie específicamente, sentía que Emilie también le estaba hablando directamente a él.

—Mientras que haya amor, la felicidad es posible. Adrien estará muy bien cuidado. Te tiene a ti Nathalie y también tiene a su padre.

«¿Sería este parte del mensaje que me dejo a mí?» Gabriel pensó.

—Si Gabriel acepta finalmente renunciar a su locura, y de renunciar a mí —Gabriel sintió como si un cuchillo se enterrara en su pecho cuando Emilie dijo esas palabras— Adrien tendrá todo el amor que necesita para ser feliz.

—Y eso fue lo que sucedió— Bug Noire dice cuando termina la grabación. —Adrien aprendió a vivir su vida y a construir su propia felicidad mientras apreciaba la memoria de su madre. Ella estaría orgullosa de él.

Gabriel vio al celular de nuevo.

—No puedo vivir sin ella. Ella es el amor de mi vida.

Gabriel cerro los ojos recordando todos esos bellos recuerdos que tenia de Emilie de todos los años desde que Adrien llego al mundo. 

— Cuando ella se fue, todo se apagó a mi alrededor.

 Empezó a recordar con mucha nostalgia todos esos momentos felices con los que había pasado con Adrien y su esposa. Incapaz de ver a Ladybug a los ojos, dirigió su mirada al suelo.

—Aún recuerdo su sonrisa el día que Adrien nació, y cuando lo abrace junto a ella. Durante mucho tiempo, creíamos que nunca íbamos a poder tener un hijo.  

Gabriel rememoro cuando celebraron uno de los cumpleaños de Adrien solos los tres.

—Adrien era nuestro pequeño milagro. Todo era tan… perfecto.

Gabriel recordó el día en que Emilie empezó a enfermar.

—Hasta que Emilie se enfermó.

Gabriel tomo aire. Él se dio cuenta de algo que lo carcomía por dentro durante meses.

Emilie tenía razón. Nathalie tenía razón.

—Ella… ella tenía razón— Gabriel razono rápidamente—Adrien no estaba solo, quedábamos a Nathalie y yo.

El volvió a mirar el teléfono.

—Y yo lo arruine todo.

Él se mantuvo viendo a la imagen de Emilie en el teléfono.

—Nathalie va a fallecer —hizo una mueca cuando una parte de su dedo de deshizo como piedra desmoronándose —Y yo también.

—¡Adrien no tendrá a nadie! — dijo de manera desesperada.

Bug Noire sabía que tenía razón. No deseaba que Adrien se quedara huérfano, y tampoco quería que Adrien tuviera que cargar con la muerte de su propio padre siendo que la situación del cataclismo fue un accidente.

—Estoy segura de que podemos encontrar una solución, si trabajamos mano a mano —Gabriel cerro los ojos ante las palabras de Bug Noire —Usted y yo.   

Eso encendió una luz de esperanza en el pecho de Gabriel.

—¡Por supuesto! ¡Vas a hacer el deseo! — Gabriel no había sonreído tanto en su vida— Siempre encuentras soluciones imposibles. ¡Sabrás hacer el deseo perfecto! ¡Sabrás reparar todo!

La cara de Bug Noire cambio a una de tristeza.

—No, un deseo perfecto no existe. Cada vez que el poder es usado para razones personales provoca catástrofes— Bug Noire continuo —Sea cual sea el poder, debe ser usado solo para el bien común.

Bug Noire le sonríe para tratar de calmarlo.

—Pero podemos pensar en ello y encontrar una solución a escala humana —Marinette borro su sonrisa— Incluso si, evidentemente, jamás será tan perfecto como lo deseamos.

Gabriel asintió. Tal vez, esta vez escuchar a Ladybug sería de ayuda.

Bug Noire retiro su mano de la mano de Gabriel delicadamente.

Ella estaba pensando en una solución. Si quería salvar a Gabriel y a Nathalie necesitaba alguna clase milagro.

Milagro.

Eso es.

—Vamos a usar los Miraculous — resolvió Marinette.  

—¿De que habla? —Gabriel pregunto afligido.

—Gabriel, ¿Ha intentado usted usar los Miraculous para curarse a sí mismo?

—¿Como lo supo? —Gabriel pregunto sorprendido.

—¿Entonces si lo intento? — Bug Noire le pregunto, sorprendida también por su respuesta.

—Si— Gabriel asintió —Pero eso solo provoco que el cataclismo se esparciera más por mi cuerpo y mucho más rápido. No veo como esa podría ser una solución.

Para Bug Noire a la vez eso esa era una posible solución.

—¿Y si lo intentamos con los Miraculous de la creación y la destrucción?

—¿Está segura? —Gabriel pregunto un poco inseguro de la idea de Bug Noire —Cuando yo mismo lo intente, los kwamis me dijeron que necesitaba su permiso para poder llevarlo a cabo. Ni siquiera la mejor tecnología de Madame Tsurugi pudo ayudarme a mi o a Nathalie. 

—Debemos intentarlo, ¿Qué más tenemos que perder?  —declaro BugNoire.

Gabriel sabía que Bug Noire tenía la razón.  

—Está bien Ladybug, pero por favor, ayúdeme, ayude a Nathalie. Se que solo tú puedes ayudarnos a los dos.

Bug Noire se quedó pensando en cómo podría hacer funcionar su idea. Necesitaba ir a ver a Nathalie también. Por lo que, debía llevar a Gabriel con ella. 

—Por favor, Ladybug —Escucho a Gabriel decir.

Bug Noire asintió. Ella recogió los Miraculous restantes del boomerang y los guardo en su yoyó. Bug Noire extendió su mano ofreciéndosela al señor Agreste. Aunque dudoso, él la tomo. Si bien había pensado en traicionar a Ladybug por un momento, tal vez era la hora de escuchar los consejos que ella y Nathalie tenían para él.

Bug Noire lo ayudo a levantarse, pasando su brazo por su hombro. Gabriel estaba bastante débil después de la pelea que acaban de tener por lo que le ayudaría a llegar a su destino. Bug Noire dio algunos pasos despacio para ver si Gabriel podía seguirle el ritmo. Ella acelero al ver que Gabriel estaba más estable. 

—Trate de mantener el paso, señor Agreste.

Bug Noire vio hacia el agujero que habían creado. Tenía que sacarlos de allí primero antes de usar su Lucky Charm.  

Bug Noire los guio hasta estar más cerca del agujero.  Usando su yoyo lo lanzo en dirección de uno de los pilares de la mansión que ella apenas alcanzaba a divisar desde donde se encontraban.

—Sujétese de mi señor Agreste — Bug Noire lo sujeto firmemente y Gabriel se sujetó a ella y Los jalo a ambos hacia el piso de arriba.

Al estar arriba, Gabriel se soltó de ella y subió el solo las escaleras hasta la habitación de Nathalie.

Bug Noire se adelantó para abrir la puerta. Nathalie seguía ahí donde la habían dejado.

Pero ella no se movía.

Al llegar al lado de Nathalie, Gabriel se derrumbó junto a ella, arrodillado ante la cama. Por primera vez en días, vio con más claridad el terrible estado en el que ella se encontraba. Su mechón rojo se había transformado en un color blanco, su cara estaba completamente pálida, sus ojos estaban hundidos al igual que sus mejillas. Sus labios estaban agrietados, como si no hubiera tomado agua en mucho tiempo.

Era la misma imagen de su esposa antes de fallecer.

Gabriel se aferró a la cama y se acercó a más a ella.

—Nathalie...

Gabriel puso su cabeza en el pecho de Nathalie, escuchando el palpitar de su corazón.

Era débil, como si su corazón se fuera a apagar en cualquier momento.

—Por favor, Ladybug. Sálvela a ella. Te lo suplico. Nathalie no merece terminar así. Todo esto es mi culpa, Nathalie no tiene porque… pagar por mis estúpidas decisiones —Un par de lágrimas cayeron por su rostro, al ver el estado en el que se encontraba Nathalie.

Bug Noire sintió compasión.

Incluso a pesar de que Gabriel le había hecho la vida imposible tanto como Ladybug cómo Marinette.

Gabriel se levantó de su posición. El cataclismo creció un poco más, sintiendo una punzada en su pecho, su brazo y el cuello, lo que hizo que cayera de nuevo al suelo.

Bug Noire se arrodilló frente a él. A Gabriel se le estaba acabando el tiempo.

—Haremos lo siguiente, señor Agreste. Vamos a usar el poder del Miraculous de la creación y la destrucción para curarlos a ambos.

—Ladybug, espere—Gabriel agarro su mano antes que le ayudara a levantarse —No creo que Adrien este contento de volver a verme.

—¿Por qué dice eso? — Bug Noire sabía muy bien que Adrien quería mucho a su papá, incluso si se había portado mal con él.

—Adrien debe odiarme por todo lo que le hice. Especialmente cuando lo forcé a irse a Londres en contra de su voluntad. Y por no haber escuchado que era lo que en verdad él quería. Por haberla tratado así, Marinette.

Bug Noire entendía a lo que él se refería.

—Pero Adrien lo quiere a usted también. ¿Lo sabe? —ella le aseguro.

Gabriel rio de manera sarcástica.

—Si, lo se. Solo Dios sabe por qué —Ni el mismo entendía por qué Adrien seguía queriéndolo a pesar de todo lo que le hizo. Aunque fuera un sentimonstruo, seguía siendo su hijo.

El bebé milagro que habían traído al mundo gracias al Miraculous.

Bug Noire lo tomo del brazo para que Gabriel se levantará y se sentará en la cama.

—¡Tikki, Plagg! Destransformación.

Marinette ahora estaba en el lugar de BugNoire.

—¡Es imposible! —Tikki voló hacia su portadora con preocupación.

—Marinette, no confíes en él —exclamo Plagg.

Gabriel alzo las manos, indicando que no iba hacer nada.

—Marinette, ¿Estas segura de que podemos confiar en él? — Tikki le pregunto.

—Quiero ayudarlos ¿Hay alguna forma de arreglarlo? —Marinette pregunto mirando primero a los kwamis y luego hacia Gabriel.

—Podríamos intentar usar un poco de nuestro poder en ellos —Tikki dijo con cara de tristeza —Pero tienen que tener en cuenta que esto no será una solución definitiva.

—El poder de la destrucción está muy subestimado, Marinette. Un daño como ese no se arregla tan fácil. Ni los mismos guardianes lograron encontrar una solución definitiva para ese problema — Plagg explico.

—Está bien —Marinette tenía la voz temblorosa con lo que acababa de decir Plagg. Aun así, estaba la posibilidad de intentarlo. Respiro profundo —Ya averiguaremos como arreglarlo todo, pero, ¿Cómo puedo usar su poder al mismo tiempo?

—Vuelve a fusionar los Miraculous. Tendrás que concentrar el poder de ambos Miraculous en ambas manos, así—Tikki le hizo gestos con sus patitas para indicarle como posicionar sus manos —Y lo tendrás que dirigir hacia el señor Agreste.

—Y a Nathalie —Marinette dijo entendiendo lo que tenía que hacer.

—Exactamente, y recuerda pensar cosas positivas, es la única forma —Tikki agrego.

Marinette saco un macarrón de su bolso. Necesitaba tanta energía como fuera posible, para que lo que estaba a punto de hacer fuera exitoso. Rápidamente los kwamis comieron una mitad del macarrón cada uno.

Cuando terminaron, Marinette volvió a transformarse.

—Señor Agreste, tome a la señorita Sancoeur en sus brazos.

Gabriel recogió a Nathalie gentilmente, acomodándola en sus brazos. Su cabeza se fue a un lado, así que tomo su cabeza suavemente y la atrajo hacia él. Podía sentir la leve y débil respiración de Nathalie en su cuello.

Bug Noire se posiciono en frente de ellos. Ella respiro profundo y soltó el aire cerrando los ojos. Acomodo las manos tal y como Tikki le había mostrado.

Se enfoco en pensar cosas felices, recordando su infancia, el amor de sus padres, Adrien…

Adrien.

Bug Noire se concentró en dirigir la energía de los Miraculous hacia la palma de sus manos. Una onda de energía salió de las manos de Ladybug, rodeándolos de esa energía positiva. La onda empezó a rodear el cuerpo de ambos adultos hasta cubrirlos por completo.

Gabriel se empezaba a sentir mucho mejor, a pesar de que le quedaban solo unas pocas horas de vida.

Gabriel retiro un poco el cuello de su camisa y vio como el cataclismo retrocedió lentamente de su cuerpo, exactamente igual que cuando intento usar a los kwamis para curarse el mismo. La piel de su cuello y su pecho volvía a la normalidad. El cataclismo volvió hasta su origen en el brazo desapareciendo por completo.

Ya no sentía dolor en el cuerpo. Estaba curado.

Dirigió su mirada al rostro de Nathalie. El aspecto de Nathalie también mejoro rápidamente. Sus ojeras habían desparecido, su rostro recupero mucha vida y ya no estaba tan pálida como antes. Su respiración estaba mucho más tranquila.

Gabriel soltó el aire que había estado contenido todo ese tiempo, de puro alivio. Por lo menos sabía que Nathalie estaba bien.

Gabriel vio como Nathalie abrió los ojos, tratando de enfocarse en él.

—¿Qué sucedió? —Vio la cara preocupada de Gabriel mirándola. El acomodó sus gafas que estaban torcidas. Fue ahí cuando Nathalie pudo enfocar su mirada en la persona que estaba sosteniéndola.

El rostro de Nathalie se convirtió en una expresión de ira.

—Suélteme Gabriel —dijo ella firmemente.

—Lo siento— Gabriel la puso en la cama nuevamente del lado izquierdo. Él se sentó a los pies de la cama, desviando la mirada.

Marinette deshizo su transformación en esos momentos. Sintió que se le iban las fuerzas y se fue al suelo.

—Señorita, ¿Está bien? —Gabriel miro en dirección a Marinette.

—Si, use un gran poder en ustedes, no sé preocupe. Es normal.

Gabriel le ofreció su mano y ella la tomo. La ayudo a levantar y Marinette se sentó lentamente en la cama de Nathalie.

Nathalie estaba extrañada. Hace unos momentos, estaba muriendo.

Pero ahora estaba viva, como si nada hubiera pasado. Vio a las dos personas que se encontraban a su lado. Reconoció a Gabriel y luego a Marinette. Ahí fue cuando su cabeza empezó a hacer las conexiones.

—No me digan que… ¿Usted es Ladybug? —Nathalie estaba preocupada.

—Si lo soy — Marinette le tomo la mano —Gracias por la advertencia de hace rato, Nathalie.

Nathalie la vio de manera comprensiva.

Los tres se quedaron callados.

—¿Y ahora que haremos? —Gabriel estaba un poco preocupado por lo que los kwamis y Marinette le habían dicho, la solución que la había dado no era una solución definitiva ni perfecta.

—No lo se. Posiblemente los guardianes tengan la respuesta para nuestro dilema, pero ya vere que puedo hacer por ustedes —Marinette respondió.

Nathalie examino el cuello de Gabriel y noto que algo faltaba. Algo que Gabriel cuidaba recelosamente.

—¿Dónde está el Miraculous de la mariposa?

Gabriel y Marinette se miraron. Se habían olvidado completamente del Miraculous de la Mariposa que aún estaba en la planta baja. Por alguna razón, tenían un mal presentimiento.

—Ahora volvemos.

Marinette salto de la cama y corrió rápido hacia el otro piso. Los kwamis iban detrás de ella. Gabriel salió alarmado de la habitación tras ella. Con la sola mención del Miraculous, la adrenalina le subió a tope.

Marinette se transformó en Ladybug y bajo de nuevo al piso inferior.

Gabriel bajo corriendo hasta el primer piso. Se agachó para tumbarse cerca del agujero tratando de divisar si Nooroo había vuelto con el Miraculous como se lo pidió. No lo vio por ninguna parte.

—¡Nooroo! ¿Nooroo? ¿¡Estas ahí!? —Gabriel grito desde donde estaba.

Pero no hubo respuesta.

Ladybug había visto que el Miraculous de la mariposa había caído al agua, por lo que ella corrió por el pasillo y al llegar al final se lanzó al agua comiendo uno de los macarrones que tenía preparado para una eventualidad.

—Tikki ¡Transformación Aqua!

AquaBug aterrizo en el agua tratando de distinguir en ella algún signo de que el Miraculous se encontrara ahí. Busco en el fondo de manera meticulosa, revisando de un lado a otro.

Pero no encontró absolutamente nada. Ni un solo rastro del Miraculous.

Eso era un problema.

Volvió a subir a la superficie. 

AquaBug salto de vuelta a la plataforma. Se deshizo de nueva cuenta su transformación y miro desesperadamente en los alrededores, con la esperanza de que el Miraculous aun estuviera allí.

—¡El Miraculous, no está, no puede haber desaparecido de nuevo!

—No te desesperes Marinette, sigamos buscando, debe estar por aquí—Tikki trato de tranquilizarla.

Marinette se volvió a transformar en Ladybug y busco alrededor de la plataforma donde se encontraba Emilie, sin encontrar nada. Ambos kwamis estaban ayudándola, examinado los lugares en donde podría haber caído el Miraculous.

«No, no, no, no…»

—¡Ladybug! —Gabriel grito desde donde estaba —¿Lo encontró?

—¡No! —respondió ella afligida.

Con el corazón desbocado, Marinette tomo uso su yoyo para subir nuevamente al piso superior.  

Los kwamis volvieron a su lado, sin resultados.

Ladybug se arrodillo al borde del agujero buscando entre los escombros si el Miraculous estaba ahí. Arrojaba los escombros hacia un lado, con la esperanza de que estuviera allí.

—Ladybug, espere —Gabriel intento detenerla.

—No, tiene que estar aquí, no puede haber desaparecido. —Ladybug arrojo algunos de los escombros hacia un lado, buscando entre ellos el Miraculous de la Mariposa.

—¡Ladybug! —Ladybug se detuvo al escuchar la voz de Gabriel.  

—¿Y el Miraculous? —Gabriel la miro a los ojos.

—No lo encontré, no pude encontrarlo — Marinette se movía de manera frenética —No está por ninguna parte.

—Usa tu Lucky Charm, Ladybug—Plagg le recordó.

Ladybug tomo el tubo de pegamento en sus manos y lo tiro al aire.

—¡Miraculous Ladybug! —Las mariquitas recorrieron todo el lugar arreglando todo a su paso por todo el mundo. La gente dejo de tener pesadillas y todo parecía haber vuelto a la normalidad.

Todo excepto por el Miraculous de la mariposa.

—¡Oh no! —Ladybug exclamo desesperada.

Gabriel la agarró de los hombros para que se calmara.

—Ladybug aun podemos saber dónde está el Miraculous. Tengo cámaras instaladas en esta dirección. Nathalie puede ver esas cámaras.

Ambos volvieron a la habitación de Nathalie. Gabriel le ayudo a acomodar el computador que usaba para su trabajo. Nathalie ingreso en el sistema con su contraseña.

Nathalie reviso entre las cámaras de seguridad. Selecciono la cámara que apuntaba hacia el vestíbulo, y acelero la grabación hasta que llego a esa misma fecha y hora.   

Vieron en la grabación como una persona desconocida entro a la mansión, no podían distinguir mucho de esa persona, más allá del color de su cabello.  

Nathalie pauso justo cuando la cara de aquella persona se vio lo suficientemente visible. Gabriel acerco la imagen en la computadora, pero no pudo distinguir el rostro de esa persona.

«Maldición…»

Vieron como esa persona bajaba a la guarida con un dispositivo. Nathalie adelanto el video hasta el momento en el que bajaba hasta la guarida.

Nathalie adelanto la grabación unos minutos nuevamente. La persona que había bajado volvió a parecer en cámara y llevaba algo en la mano. Gabriel acerco la grabación hacia la mano de esa persona.

Un objeto brillaba en ella.

Al examinarlo detenidamente lo reconoció.

Era el Miraculous de la Mariposa.

«Alguien estuvo aquí y se robó el Miraculous». Ese era el único pensamiento en la cabeza de Marinette.

A Marinette se le fue el alma al piso. Sus sospechas se confirmaron.

Y lo peor es que era casi imposible averiguar quién era la persona que se llevó el Miraculous consigo. 

—Falle, falle de nuevo —Marinette respiraba rápido y se agarró la cabeza desesperada—Esto no debía pasar. Se suponía que debía recuperar todos los Miraculous.

—Marinette—Nathalie trato de tranquilizarla agarrándole ambas manos —Ya veremos qué podemos hacer para recuperar el Miraculous de quien sea que lo haya tomado. 

—Por ahora, hay alguien con quien debemos hablar —Nathalie se dirigió a Gabriel.

Gabriel sabia a lo que se refería.

—Adrien.


Adrien miraba a las blancas paredes. Había perdido la noción del tiempo, sin siquiera saber cuándo saldría de allí. Al menos sabía que el Miraculous del gato estaba en buenas manos. Tal vez cuando Plagg volviera saldría el mismo de allí como Chat Noir. El único problema era como evadiría la cámara de seguridad que estaba en la habitación.

Podría pedirle a Plagg que la destruyera para poder salir de una manera segura.  

Se preguntaba como estaría Ladybug. ¿Estaría bien? No había visto nada ni escuchado nada desde que Plagg se fue de allí con el Miraculous.

¿Plagg lograría encontrar a Ladybug? ¿Ladybug necesitaba de su ayuda?

Tantas preguntas a las que no encontraba respuesta. Pero tenía que evitar a toda costa usar el Alliance.

Si tan solo pudiera recuperar su teléfono. 

Al menos las pesadillas ya habían parado. Suponía que Ladybug había lanzado su Lucky Charm.   

Adrien dejo de estar en posición fetal. La blanca habitación en la que se encontraba lo estaba volviendo loco. Se sentía como estar en un manicomio.

Todavía se preguntaba qué estaba pasando por la cabeza de su padre cuando lo encerró allí.

Durmió un rato tratando de despejar su mente.


Gabriel daba vueltas en la habitación de Nathalie.

—La verdad ya no sé qué hacer. ¿Debería hacer que Placide lo traiga de vuelta ya?

—Debería Gabriel. Lo llevaste lejos en contra de su voluntad, lo menos que puedes hacer es traerlo de vuelta —Nathalie le dijo sin mirarlo directamente. Lo inquieto que estaba Gabriel la estaba poniendo nerviosa.

—Pero…—Antes de que Gabriel pudiera terminar lo que iba a decir, Nathalie lo interrumpió.

—Adrien merece saber la verdad, Gabriel —afirmo Nathalie, con furia y devolviéndole la mirada. Gabriel pudo notar el fuego en sus ojos.  

—Y también merece una disculpa —Marinette se unió a las protestas de Nathalie.  

—Lo sé, lo sé — Gabriel dio una vuelta nuevamente antes de detenerse —¿Debería llamar a Adrien?

—No sé qué está esperando Gabriel — Nathalie se cruzó de brazos.

—Está bien —Gabriel busco el número de Adrien. Espero al tono. Uno, dos, tres, cuatro…

No contestaba.

—¿No contesta? —Marinette se empezó a preocupar.

—Debe de estar dormido— Nathalie argumento.

—Entonces le enviare un mensaje — Gabriel empezó a redactar un mensaje para Adrien en su teléfono —Pero, es cierto. Adrien no tiene su celular con él.

Gabriel se puso a pensar en la manera de sacarlo de allí. A Tomoe no le iba a gustar.

Plagg llamo la atención de todos.

—Yo podría desactivar los sistemas de seguridad de la habitación mientras que lo sacan de allí.

—Buena idea, Plagg. Pero sería mejor abrir un portal con el Miraculous del caballo lejos de aquí para que llegues más rápido —Marinette le mostro el Miraculous en su mano.   

—Entonces le pediré al guardaespaldas de Adrien que esté preparado —Gabriel decidió que era hora de llamar al Gorila. Usando el marcado rápido, espero hasta que finalmente obtuvo una respuesta.

—Placide. Traiga a Adrien de inmediato aquí. No importa si tiene que destruir algunos robots, solo tráigalo aquí. Cuando le dé la orden, vuelva lo más pronto posible. El aeroplano estará listo para su llegada.

—¿Y qué va a hacer con Tomoe, Gabriel? — Gabriel sintió la daga de la voz de Nathalie a sus espaldas.   

—Lo sabrá algún día de estos. No va a estar feliz, pero… El gorila se encargará de sacarlo de allí, así sea a la fuerza.

Ahora tenían que pensar cómo iban a encargarse de Adrien.

—¿Quién le va a decir la verdad a Adrien? — Marinette pregunto con incertidumbre.

Gabriel volvió a caminar en círculos en la habitación hasta que una idea llego a su mente y luego la miro a ella.

—Usted podría decirle, Marinette. Como Ladybug— Gabriel se acercó a ella un poco neurótico —Adrien te escuchará a ti y no tendrá hablar directamente conmigo…

—Gabriel, señor —Marinette le llamo la atención, pero Gabriel seguía hablando el solo.

—Y entonces Nathalie podrá entrar y le dará todas las explicaciones…

—¡Señor! — Nathalie dijo firme. Ella también lo miro, como si le pidiera que se callara.

—¡No es mi trabajo decirle a Adrien la verdad! —Marinette dijo de golpe, mirando a Gabriel y luego mirando a Nathalie. —A Adrien le gustaría escuchar la verdad de parte de ustedes ¿No?

Ambos adultos se miraron. Ellos sabían que decirle la verdad a Adrien sería algo muy duro para él.

—Ambos se lo diremos cuando vuelva. No podemos esperar más —Nathalie le dijo —Adrien debe estar sospechando que algo paso. Que de repente hayas decidido traerlo de vuelta a París debe ser una decisión muy rara para él. Él no es estúpido.

Gabriel sabía que Nathalie tenía razón.

Gabriel le hizo un gesto con los ojos señalando a los anillos de Graham de Vanily. Algo que Marinette y Nathalie captaron enseguida.

—¡Ni se le ocurra hacer eso! —Marinette y Nathalie exclamaron. Gabriel jugo un poco con los anillos hasta que se quitó uno de ellos. Lo observo por algunos segundos antes de dirigirse a Nathalie. Lo que no se explicaba era porque Marinette sabia los orígenes de Adrien. Luego ya lo averiguaría.

—Nathalie quiero que cuide de uno de los anillos —Gabriel se quitó uno de los anillos y se lo ofreció.

—¿No dijo usted que no era digna de cargar con el legado Agreste? —espeto ella con furia.

Marinette no estaba entendiendo mucho de lo que sucedió entre Gabriel y Nathalie, pero aparentemente las cosas no estaban muy bien entre ellos. El ambiente era muy tenso.

«¿Qué sucedió en esta casa?»

—Tengo miedo de que pierda los anillos una vez se los entreguemos.

Nathalie suavizo la mirada después de todo ese rato.

—Oh, lo entiendo. Pero Gabriel, Adrien necesita ser libre. No puede mantenerlo encerrado como un pájaro en una jaula de oro, sigue siendo…  

—Una jaula, lo sé — Gabriel se sentó en frente del ajedrez, pasándose las manos por el rostro.

—Gabriel, Adrien debe saber la verdad, algún día lo sabrá. Es mejor que suavicemos el golpe si se lo decimos de una vez —Nathalie dijo.

Nathalie estaba esperando la respuesta negativa de Gabriel. Pero lo que saldría de su boca a continuación la sorprendió de sobremanera.

—Está bien se lo diremos cuando llegue.

Pero Gabriel no sabía por dónde empezar.

Plagg lucia nervioso. Tikki también lo parecía

—¿Sucede algo? —Marinette pregunto, viendo la expresión de preocupación de ambos kwamis.

Ambos kwamis se miraron

—Yo me encargo, Tikki—Plagg floto hacia Marinette cerca de su oído.

—Marinette hay algo muy importante que tienes que saber, pero preferiría que habláramos en privado —Plagg le susurro en el oído

Marinette le susurro de vuelta  

—Está bien.

—¿Tikki te quedas con ellos? —Marinette se dirigió a Tikki antes de salir.

—Voy a ayudar a que Nathalie se vea presentable para Adrien —Tikki floto hasta la mujer.

Ambos salieron de la habitación

Marinette y Plagg se alejaron lo suficiente del cuarto de Nathalie para que no pudiera escucharlos.

—¿Qué es lo que me tienes que decir Plagg? —Marinette estaba muy confundida, ¿Por qué estarían tan preocupados los kwamis?

—Creo que deberías hablar con Chat Noir primero. Y un consejo, deberían revelar sus identidades

—¡Revelar nuestras identidades! —Marinette no podía creer lo que Plagg le acababa de decir

—Es que…—Plagg estaba sin palabras. —Es muy complicado Marinette. Si te lo digo yo, mi portador me va a odiar por el resto de su vida. Quisiera que el mismo te lo dijera.

—E-Está bien —Marinette se mordió el labio. No estaba muy contenta con revelarle su identidad a Chat Noir, pero si Plagg se lo decía, es que era algo muy importante.

—Pero, ¿Como lo hago? Tengo miedo… de que la historia de Chat Blanc se repita.

—¿Chat Blanc? —Plagg había escuchado de Adrien haber tenido las mismas pesadillas.  —Chat Noir parece estar sufriendo lo mismo que tu Marinette.

—¿En serio? —Marinette estaba sorprendida —Pero, ¿Cómo?

—Cuando Nightormentor, su padre, apareció logro hechizarlo con el poder de la pesadilla que el poseía. Ese día se fue a buscarte.

—¿A Ladybug?

—No se fue a buscar a Marinette—Plagg la señalo. —Te quería revelar su verdadera identidad.

—¿¡Qué!?, ¿Por qué?

—El mismo lo decidió. Lo hizo porque te ama Marinette—Plagg vio a Marinette sonrojarse—No puedo profundizar en detalles, quiero darle la oportunidad a mi portador de decírtelo en persona. Mi punto es que estoy seguro de que, si hablan de sus miedos, podrán afrontarlo juntos.

Marinette suspiro.

— Esta bien. Solo espero que no estemos cometiendo un error—Marinette tomo a Plagg en sus manos y lo beso —Gracias Plagg.

—¡Puaj! De nada. Todos eso sentimientos me hacen sentir raro —Plagg sonrió —Si algo malo pasa, yo y Tikki nos encargaremos de ayudarlos.

Marinette y Plagg regresaron a la habitación de Nathalie.

Gabriel estaba tiñendo el mechón de Nathalie de vuelta a su color rojo. Sabía que volvería a la normalidad con el tiempo, pero no tenían tiempo para esperar. Adrien no podía sospechar que era lo que le había sucedido a Nathalie cuando se fue.

Ya era suficiente que hubiera visto a su madre enfermándose poco a poco.

Nathalie seguía sin mirarlo directamente. Ella solo le estaba poniendo atención a la kwami que la estaba peinando en esos momentos.

—Tengo que agradecerte, kwami de la creación. Nos dieron su permiso para usar su poder en nosotros, a pesar de que no lo merecíamos.

—Solo llámame Tikki, no me importa—Tikki dijo antes de acomodar uno de los cabellos de Nathalie en su lugar. —Lo hicimos por un bien mayor.

—Gracias Tikki — Nathalie dejo que Tikki aterrizara en sus manos.

Marinette ahora entendía porque Adrien quería mucho a Nathalie. Ella fue muy gentil con Tikki.

Marinette reviso su celular y vio lo tarde que era. Y aun necesitaba contactar con Chat Noir.

—Necesito retirarme —Marinette le dijo.

—¿Ahora? —cuestiono Gabriel. Marinette pudo notar la expresión de preocupación de Gabriel.

—Si, tengo que hablar con Chat Noir. Él tiene que saber qué es lo que acaba de suceder. Necesito de su apoyo —Marinette se abrazó a sí misma.

—Entiendo —Gabriel miro a Ladybug un poco nervioso. El tema de cataclismo era algo delicado para él. No estaba listo para que Chat Noir viniera y esperar a que el los ayudara.

—Pero primero, necesito que me entregue los Miraculous restantes —La chica estiro la mano.

Gabriel se miró ambas manos, recordando que aún tenía algunos Miraculous consigo. Nathalie se quedó mirándolo de manera sospechosa.

—Oh claro —Gabriel se removió uno por uno los anillos entregándoselos en las manos extendidas de Marinette. Ella conto todos hasta que se aseguró de que los hubiera entregado todos. Nathalie se sorprendió cuando entrego todos y cada uno de los anillos.

—Muchas gracias, Gabriel —Marinette guardo todos los anillos dentro de su bolso. —¿Me pueden dar sus números de teléfono?

—Yo le doy el mío, Marinette —Nathalie dijo, tomando su teléfono de la mesita de noche.

Marinette procedió a guardar el número de Nathalie y aprovecho a darle el suyo. Gabriel le dio su número para estar en contacto también.

—Volveré tan pronto como pueda, para ver cómo vamos a solucionar el problema con Adrien.

—Entonces te acompaño hasta la salida. —Gabriel se ofreció.

Marinette se despidió de Nathalie y Gabriel la llevo hasta la salida de la mansión. Abrió la puerta por ella, quedándose en la entrada.

—¿Va a volver? ¿Necesita que la lleve? —Eso era lo más hospitalario que Gabriel había hecho por Marinette nunca.

—No, no... se preocupe, yo misma puedo regresar a mi casa. Yo regresare mañana aquí, si eso es lo que le preocupa. Creo que debería tomarse este tiempo para descansar. Mañana será un largo día.  

—Oh claro — Gabriel dijo incomodo —Buenas noches, Marinette.

Marinette salió hacia la verja y esta se cerró detrás de ella. Soltando el aire que tenía contenido todo el tiempo que estuvo en la mansión y redirigió sus pasos directo a su casa.

Gabriel espero hasta que se hubiera alejado para cerrar la puerta.

Volvió en sus pasos para poder sacar a Adrien de donde lo tenía encerrado.