Besos de Chocolate. - Mara Young
Besos de Chocolate. - Mara Young
Besos de Chocolate. - Mara Young
MARA YOUNG
Texto 2013 Todos los derechos reservados
Dedicado a todas las personas imperfectas;
esas que algn da se han visto envueltas en mentiras,
meteduras de pata o caminos incorrectos.
Dedicado a ti, a m y a cualquiera que lo niegue.
CAPTULO 1
Uauuu, Martina, te queda fenomenal.
En serio? T crees? le pregunto indecisa. Desde luego yo no tengo las curvas tan
voluptuosas como Malena. Ella es casi como una diosa. Doy un par de vueltas sobre m misma para
verme desde todos los ngulos el carsimo vestido color esmeralda de mi amiga. Bueno, no me queda
mal, yo no tengo mal cuerpo, pero saldra perdiendo en la tpica comparacin de Quin lo lleva
mejor?; la estrellita sera para Malena.
No lo pienses ms! Ests fantstica! me recrimina tirando de mi brazo y apartndome
del espejo. Ella est impresionante con un minivestido azuln. Me pasa el bolso y, cogindome de la
cara, me repite la frase que lleva aos dicindome: Dnde les queremos?
A nuestros pies! le contesto con cierto aire militar, lo que hace que nos carcajeemos a la
vez.
Pues a por ellos, nenacomenta cerrando la puerta a nuestra espalda.
Ya en el coche, cantamos a voces I love it, de Icona Pop es nuestro grito de guerra desde que la
omos por primera vez. Eso es, somos unas zorras de los noventa y nos encanta.
Esas somos nosotras, dos depredadoras, Malena y Martina M&M pone en nuestro tatuaje. Lo
tenemos en la parte de dentro de la mueca para que no se nos olvide lo que prometimos hace cinco
aos. Hicimos un juramento con sangre y desde entonces nuestra vida es nuestra. frvola,
escandalosa, egosta, pero libre y nuestra.
Jams podr pagar lo que Malena ha hecho por m. Nos conocimos en la universidad. Coincidimos en
la carrera de derecho y, durante cinco largos aos, fue mi fiel confidente. Harta de escuchar lo infeliz
que era con mi novio de entonces, me sac de una vida aburrida y montona y me hizo ver la luz.
Desde entonces no puedo ser ms feliz. Me instal en su casa y no nos hemos separado desde hace un
lustro. Ella ha cuidado de m, ha conseguido que me quiera, me ha hecho rer y ha sacado a la mujer
potencialmente sexy y atrevida que dorma en mi interior. Ahora voy por la vida pisando fuerte.
Trabajamos juntas en el bufete de su padre, el gran Hctor San Cristbal. Ese nombre cuadra a
cualquier abogado del pas. Le debo mucho a esta familia, desde siempre ellos me han acogido como
una ms. La ma vive en Alicante y no saco tiempo para ir a verles desde que me mud a Madrid. Mis
dos hermanos y mis padres se dedican a la hostelera y apenas tienen das libres, por lo que nuestra
comunicacin se reduce a alguna llamada por telfono a la semana.
La msica suena muy alta en nuestra discoteca favorita, Feeling. Nos encanta el ambiente y
conocemos a muchsima gente, estamos como en casa. Alguna vez que otra hemos trabajado de
camareras cuando han necesitado personal al verse desbordados y nosotras encantadas. Poner copas
tras la barra es divertido y sexy, puedes jugar con los clientes, rerte con ellos y, por qu no, conocer a
alguien con quien echar un buen polvo esa noche.
Hoy es una de esas noches
Me siento juguetona y busco con la mirada algn objetivo decente, mientras tomo mi ron con
CocaCola con pajita. La aprieto entre mis labios y succiono a la vez que mis ojos barren el horizonte.
Veo a mi alrededor parejas, un grupo de hombres entrado en aos, una despedida de soltera, algunos
chavales jvenes Esto no tiene pinta de animarse. Un cincuentn, con la camisa sudada y los tres
primeros botones desabrochados, se acerca a m con mirada de asquerosa lascivia. Argggg, me dan
mucho asco este tipo de tos.
Rubita puedo probar? me pregunta sealando mi copa. Yo le miro perpleja y l insiste
. Me encantara chupar esa pajita que ha estado entre tus labios <<Dios, no lo soporto, es
repugnante>>, y decido darle una leccin.
En serio quieres chupar mi copa? le digo pasndome ligeramente la lengua por el labio
superior. l asiente babeando, como un jodido salido que se ha matado a pajas y no se ha duchado en
un mes. Toda tuya. Y entonces le lanzo la copa a la cara. El hombre me mira con gesto de odio.
Sers puta me insulta y yo me parto de risa. Qu se ha credo ese gilipollas? Hace un
amago de acercarse a m, pero se lo piensa mejor y, girando sobre sus talones, se va por donde ha
venido echando humo por las orejas.
Sin inmutarme y sintindome victoriosa, me dirijo de nuevo a la barra a pedirme otro ron. Una sonrisa
asoma en mi boca al recordar la cara del tipo asqueroso. Una cosa tengo clara, el control lo tengo yo
sobre cualquier hombre. Malena y yo nos hemos entrenado a conciencia. Atrs quedaron los
remordimientos y los sentimientos de culpabilidad; ahora eso no existe en mi cabeza. Usar y tirar es
la expresin que mejor define a nuestros amantes y ellos lo saben desde el principio, as no hay
confusiones. Algo les compensar para acceder a ello
Alonso, un camarero moreno gay con el que me llevo fenomenal, me invita a bailar sobre la barra con
l. Adoro hacer estas cosas, me encanta exhibirme. David Getta suena muy alto y nosotros nos
contoneamos en un baile ms que sensual. Percibo decenas de pares de ojos posados en mi cuerpo y
eso me excita. Juntamos las caderas y las hacemos girar a un ritmo lento. Alonso tiene una rodilla
entre mis muslos y yo he depositado mis brazos sobre sus hombros. Nos miramos a los ojos,
divertidos por el espectculo que estamos dando. Con una mirada suya, entiendo a lo que quiere jugar,
as que accediendo de forma imperceptible para los dems, nos acercamos y comenzamos a besarnos
de una manera ardiente. Omos algunos silbidos y gritos animndonos y eso nos hace rer.
Te encontr! dice mi amiga mientras me da una palmada en la pierna.
Tampoco me haba escondido Me agacho para estar a su altura.
Yo s he encontrado petrleo, nena Sube exageradamente sus cejas y yo me parto de
risa.
Quin? le pregunto intrigada mientras miro a mi alrededor.
A tus siete en punto Me giro disimuladamente y visualizo tres torres. No deben tener
ms de cuarenta. Visten con elegancia, son muy altos y atractivos. Estn rindose mientras comentan
algo. Uno de ellos es de raza negra y los otros dos parecen mulatos. Mmmmm mi amiga sabe buscar
una presa. De nuevo me vuelvo hacia ella.
Han invitado a jugadores de la NBA?
Quieres que hablemos de proporciones? dice haciendo caer sus pestaas una y otra vez,
con una sonrisa tontorrona en la boca.
Nenaaaa, comienza el show!
S, pero me pido al bombn de chocolate negro.
No te preocupes, el chocolate con leche tambin me va o los dos a la vez o por
turnos Nos carcajeamos juntas antes de darle un gran trago a nuestra copa. Sabemos bien lo que
tenemos que hacer. Alonso me ayuda a bajarme de la barra y se lo agradezco con un gran beso.
Malena se acerca distradamente al grupo, moviendo el culo con exageracin para hacerme rer. A su
paso, los hombres dejan un reguero de babas; no es para menos, mi amiga es un can. Los tres chicos
todava no se han dado cuenta de su presencia, sern gays? Son los nicos que no han girado la
cabeza. Cuando est lo suficientemente cerca, finge torcerse un pie y las manos enormes del dios de
bano la agarran por la cintura antes de que toque el suelo. Un guio rpido hacia m hace que me ra y
corro en su auxilio.
Ay madre, qu torpe soy! Malena es muy buena actriz.
Te encuentras bien? le digo a mi amiga, yo tambin s actuar bien. Descaradamente
ignoramos a los tres monumentos.
Martina, no s si podr andar bien, creo que se me est hinchando dice haciendo un mohn
y se agacha mientras se toca el tobillo con deliberada sensualidad sin soltar el brazo de su objetivo.
Mientras, deja entrever su ms que generoso escote.
Deja que te ayude. Esa voz esa voz me acaba de poner los pelos de punta y ha
acariciado mi cuerpo con su lengua en el tiempo que ha tardado en decir esas cuatro palabras. Levanto
la vista y trago saliva, no me haba fijado bien en l hasta ahora. Envidio a Malena en este momento.
Como si ella fuera una pluma, la lleva cogida de la cintura hasta un silln cercano y la deposita con
cuidado. Me quedo embobada mirndole. Sus facciones son rudas, pero poderosas. Una mirada intensa
dentro de esos ojos grandes pero rasgados dejaran sin habla a cualquiera. Y esa boca carnosa y
amplia, pero sin ser exagerada, con unos labios perfectamente perfilados cubriendo una ms que
blanca dentadura. Joder, no tiene desperdicio. Me recuerda a alguien ya lo tengo!, me recuerda a
Lenny Kravitz! A travs de su camisa se puede adivinar un cuerpo bien formado, con grandes y
musculados brazos Me encantara verle desnudo. Sigo con la vista puesta en l, mientras mi amiga
hace un gesto de fingido dolor cuando el dueo de mis deseos le quita seductoramente el zapato y
masajea su pierna con deleite. Otra voz me saca de mis ensoaciones.
No te preocupes, lo de tu amiga no creo que sea importante. Doy un respingo y me giro,
an con la boca abierta. Esta vez es Chocolate con Leche nmero 1 el que me habla.
Cmo? le digo algo aturdida.
El tobillo de tu amiga contesta sealando hacia el silln. Que tienes cara de preocupada,
pero no ser nada. Me doy cuenta de la cara que debo estar poniendo y en dcimas de segundo me
recompongo. Chocolate con Leche nmero 2 se acerca y yo despliego mi mejor sonrisa hacia ellos.
Ah, s, seguro que s. Es el momento de seguir con nuestra actuacin algn chocolate
me tengo que llevar a la cama hoy. Queris una copa? digo agitando los hielos de la ma.
No, ya voy yo, qu bebes? Bien, Chocolate con Leche nmero 2 es bastante solcito.
Brugal con CocaCola le digo con una sonrisa y l asiente y se va.
Perdona, no nos hemos presentado, yo soy John. Por fin, Chocolate con Leche nmero 1
ya tiene nombre.
Encantada, yo soy Martina. Y le doy dos besos encaramndome a l con mi mano en su
nuca. Al separarme, me muerdo el labio y le sonro. Veo cmo sus ojos me penetran y entonces es el
momento de volver a hacerme la interesante. Si me disculpas, voy al bao un momento. Asiente y
no deja de observarme, mientras camino con paso sensual y deslizo de manera distrada la mano por
mi cadera, casi rozando mi culo. S que me ha visto y s lo que eso provoca en un hombre Ay John,
John de esta no te escapas.
Cuando salgo despus de retocar mi maquillaje y perfumarme, Chocolate con Leche nmero 2 ya ha
trado mi copa. Mientras camino, o mejor dicho me pavoneo, una mirada fugaz hacia los sillones me
hace perder la concentracin: Malena se est enrollando con Mr. Oro Lquido y yo me muero de la
envidia. Yo quiero a ese hombre! Pero claro, qu esperabas? Creas que Malena no lo iba a
conseguir? Su enorme brazo la rodea los hombros y, con la otra mano, coge con delicadeza su mejilla
mientras sus lenguas bailan y los labios de l oh, los labios de l cada vez que los mueve siento
una sacudida. Mi amiga tiene la palma de la mano abierta sobre su pecho y cierra los dedos,
hincndole las uas en la piel. Mmmmmm, me estremezco. Con total descaro busco su entrepierna y
ah lo veo un enorme bulto sobresale de su paquete qu calor tengo! La quiero para m!,
dice una vocecita en mi cabeza mientras levanta una mano y da saltitos en el sitio. Lo de los negros y
el tamao es una leyenda urbana? Parece que no
Te gusta lo que ves? oigo en mi odo en forma de susurro. Al levantar la vista, John me
observa con mirada profunda y la boca entreabierta. Pasados dos segundos no lo dudo, me pongo de
puntillas y le beso, necesito liberar la tensin que ha acumulado mi cuerpo y John no es mala opcin,
est bastante bueno. Subo mis brazos a sus hombros y l rodea mi cintura, levantndome a su altura
para hacer la tarea ms fcil. Sabe bien, siento frescor en su lengua, seguro que acababa de dar un
trago a su copa. Siento que tiene unas manos grandes, porque con una casi abarca la parte baja de mi
espalda, me siento la protagonista de King Kong y eso me pone mucho. Tengo debilidad por los
hombres grandes. Quiero irme de ah y liberar mi presin o montar otro numerito en medio de la
discoteca.
Nos vamos a otra parte? le comento agitada sin separarme de su boca. Me estrecha ms
fuerte y suelta un leve gemido de satisfaccin sin dejar de devorarme los labios.
Un momento dice con pesar, antes tengo que hacer una llamada.
Me deposita de nuevo en el suelo y yo tengo la respiracin acelerada. Saca su mvil y marca un
nmero. Mientras, echo un vistazo a mi alrededor. Doy gracias porque las luces sean apenas
perceptibles, debo estar colorada como un tomate, me he puesto a cien. De pronto, noto unos ojos
clavados en m y cuando me giro, veo a mi rockero de bano penetrarme con esa mirada de pantera
mientras mi amiga juega con el lbulo de su oreja. Contengo el aire y no soy capaz de apartar la
mirada. Siento como si sus pupilas hablasen y se crea entre nosotros una conexin potencialmente
sexual. Estamos excitados, enrollndonos con distintas personas, pero esa mirada me est pidiendo
que sea yo la que sucumba en su cama. Me acaloro y, de manera inconsciente, me toco el labio
inferior con el dedo ndice. En ese momento l hincha su pecho y se muerde el suyo, mientras sigue
follndome con la mirada y mi amiga sigue rindindose a su cuello.
Todo es muy extrao Ese hombre rezuma sexo por todos sus poros.
Noto que me abrazan por detrs y John hunde su nariz en mi pelo, mientras siento su ereccin pegada
a mi espalda. No dejo de mantener contacto visual con el hombre que tengo enfrente; veo que su
mirada se entorna y el gesto se vuelve serio. <<Oh a esto tambin s jugar, seor Chocolate Eres
t el que ha empezado enrollndose con mi amiga>>. Sin girarme, subo los brazos para enredar mis
dedos en el pelo de John y este enloquece, pegndose ms a mi cuerpo y mordindome la mandbula.
Yo sigo con los ojos dirigidos a su amigo y este endurece an ms su cara al notar que John sube una
de sus manos, acariciando sutilmente mi pecho izquierdo. Abre la boca y la vuelve a cerrar, pasndose
una mano por el pelo, con semblante confundido.
Ests lista? me pregunta John totalmente excitado.
Claro que s, deja que le diga a mi amiga que me voy.
Muy despacio camino hacia ellos y siento un nudo en el estmago. Segn me acerco, Mr. bano abre
sus piernas inconscientemente, como si me invitara a cabalgar encima de su gran pene y mi vagina
protesta, contrayndose a cada paso. Al llegar, me inclino sin dejar de mirarle y le susurro a Malena
en el odo que abandono el barco. Esta se gira y me sonre, obligndome a centrar mi mirada en ella.
Tiene cara de perra en celo: los labios hinchados, los ojos cristalinos y la piel sonrosada; seguro que
su ropa interior est igual de hmeda que la ma.
A casa? me pregunta ella.
S.
Pues luego nos vemos, nena que lo disfrutes. Nos damos un beso en la boca y me voy.
Nos encanta hacer eso, todos los tos enloquecen cuando ven que dos chicas guapas se besan. Para
ellos se abre un mundo de sexo grupal, Sodoma y Gomorra en vivo y en directo y ms de uno se habr
masturbado pensando en ello. Para nosotras es un juego ms el arte de la seduccin con un toque de
exhibicionismo.
CAPTULO 2
Ah est tu ropa digo mientras me dirijo al bao con ganas de darme una ducha. El sexo ha
estado bien tirando a normalito. Demasiado centrado en l quizs. En definitiva, no hay nada ms
que ver game over
No me vas a invitar a dormir? me contesta John con cara de incredulidad. Son las
cinco de la maana.
No duermo con nadie, lo siento le comento levantando mis hombros.
Y ya est?
Ummmm, s qu quieres?
No s Martina, a lo mejor una situacin algo menos fra.
El polvo te ha parecido fro? le pregunto con los brazos en jarra. l niega con la cabeza
. Es tarde, debes irte.
Percibo la decepcin en sus ojos, que se cierran y se dirigen al montn de ropa. Con lentitud, se va
vistiendo y yo cierro la puerta del aseo. A los pocos minutos oigo un portazo y s que ya se ha ido
<<Ciao, John>>.
Me doy una ducha mientras hago inventario de las ltimas dos horas. El cuerpo de John es
espectacular Una lstima que no lo sepa usar como es debido. Me hubiera gustado sentir alguna
conexin, pero lo cierto es que he estado pensando en Lenny Kravitz mientras le tena entre mis
piernas. De pronto me pongo nerviosa estar en casa? Mi corazn empieza a latir con fuerza y me
doy mucha prisa por terminar y secarme cuanto antes.
La casa de Malena es enorme y casi podemos decir que tenemos dos viviendas individuales. Desde la
entrada principal hay un gran saln decorado con aire setentero. Tonos naranjas, grises y morados dan
calidez y aire juvenil a la estancia. Una gran barra americana se sita al fondo. Desde ah, la parte de
la izquierda es ma, con una habitacin, un despacho, una pequea sala de descanso y un enorme bao.
La parte de la derecha es de Malena, parecida a la ma pero con dos habitaciones ms que usamos de
trastero. Todas las estancias tienen acceso a una terraza privada; la ma mide alrededor de veinte
metros cuadrados y en ella tengo montado un rincn chill out donde me relajo leyendo, tomando caf
o una buena copa de champn. Es mi espacio de desconexin.
Me visto con rapidez, me pongo unos pantalones muy cortos y una sexy camiseta estrecha sin
sujetador quiero estar guapa si me lo encuentro. Cruzo la puerta de la habitacin, mi pequeo hall
particular y salgo al saln No hay indicios de que haya venido Malena. Me acerco a su zona y hago
un intento de abrir la puerta de su distribuidor est cerrada con llave, eso significa que estn dentro.
<<Oh Dios, quiero verle!>>. Me sorprendo a m misma intentando escuchar algo, pero es imposible,
su habitacin est al final y nunca omos nada. Con nerviosismo me muevo inquieta sin ser capaz de
separarme de esa maldita puerta cerrada. <<Qu es lo que quieres? Piensas tirarte al rollo de tu
amiga? Dnde estn tus escrpulos?>>. Al final, dejo de morderme la ua del dedo pulgar y me
rindo pero no del todo. Echar un vistazo no matar a nadie, as que me tumbo en el sof del saln y
espero pacientemente a que salgan. Ningn hombre duerme en nuestra casa, eso es una ley
infranqueable dentro de nuestro acuerdo. Para disimular, cojo un libro de mi estantera y lo deposito
abierto sobre mi tripa; me pongo las gafas que uso para leer. Me fumo cuatro cigarros mientras el
tiempo pasa y de ah no sale nadie. Finalmente, oigo ruidos y con rapidez me hago la dormida; esta
chiquillada me pone nerviosa, me siento como si tuviera diez aos.
Nene ha sido un placer dice Malena en un susurro mientras oigo ruidos de saliva y
lenguas chocando. Te llevas todo?
Creo que s pelirroja Oh, vaya, tu amiga est en el saln y la vamos a despertar. <<Bien,
ya me han visto>>.
Qu hace aqu Martina? <<Es verdad qu hago aqu si nunca leo aqu? Algo tengo
que inventarme>>. Me muevo ligeramente haciendo un gesto de dolor para que alguien tenga la
amabilidad de mandarme a mi cmoda cama. El libro resbala de mi tripa y cae al suelo; aprovecho la
oportunidad para despertarme con el ruido.
Uy, he debido quedarme dormida Mi mirada se cruza con Lenny y me estremezco. Est
guapsimo con cara de recin follado; me encantara ser yo la que le produjera ese rubor y brillo en los
ojos.
Cmo que te has quedado aqu dormida? me interroga Malena con suspicacia.
Estaba en mi habitacin, pero me estaba volviendo loca un mosquito No dejaba de
zumbarme en el odo <<Es creble? Por el gesto de mi amiga creo que s>>.
Tendremos que volver a comprar enchufes de esos; aqu hay demasiado campo alrededor.
El Bombn de Oro no ha dejado de observarme en todo el rato, bien!
Bueno, no me presentas a tu amigo? digo distradamente mientras me levanto
quitndome mis gafas de pasta. La mirada de l me recorre entera y yo solo puedo humedecerme los
labios.
Claro, l es Nathan Nathan, ella es mi amiga Martina. Me acerco a l y le planto dos
besos que me saben a poco. El roce con su mejilla me estimula entre mis muslos.
Encantada le digo con una discreta sonrisa. No quiero que mi amiga se percate del tonteo
que quiero tener con l.
Igualmente un placer pronuncia esas palabras a travs de sus labios que son como fruto
jugoso. Me quedo ensimismada en el movimiento de su boca. Luchando contra mi cuerpo, retiro mi
mirada de esa tentacin y la dirijo a mi amiga.
Bueno, os dejo que yo me voy a la cama. Me guia un ojo que dice: Maana te cuento y
yo la contesto con una sonrisa mientras me doy la vuelta pensando en su nombre: Nathan mi
bombn de chocolate ya tiene nombre.
Por cierto, ha estado John aqu? me pregunta l con aire interesado.
Ehhh, s, pero se fue hace un par de horas. Por qu? En mi mente John ha sido totalmente
sustituido.
No simple curiosidad comenta ahora de forma distrada, pero sus ojos arden como el
carbn y yo me inquieto.
Bien, me voy digo algo bloqueada, no me esperaba esa reaccin y me he sentido
intimidada. Si sigo aqu Malena se dar cuenta de que no tengo buenas intenciones.
Ya en la cama no consigo conciliar el sueo, me ha dado muy fuerte con este to, no lo entiendo. El
amanecer asoma a travs de la ventana y no he podido pegar ojo. Sigo repasando sus rasgos. Unos ojos
grandes pero algo rasgados, con largas pestaas que le dan intensidad a su mirada oscura. La boca
ay Dios la boca me perdera horas en ella; sus labios son tan perfectos que parecen hechos para un
modelo de portada. Una piel suave y oscura que necesito ver al completo. Ese cuerpo en general
parece el tipo de cuerpo que tiene un jugador de waterpolo: espaldas anchas, que se van estrechando
hacia su cintura; como una flecha que te indica el lugar donde encontrar el tesoro. Tengo mucha
curiosidad por adivinar lo que esconde ah abajo y quiero saber cmo lo maneja. Quiero verle en mi
cama, quiero que me toque, quiero que me folle, quiero saber cmo gime, quiero saber cmo mueve
su lengua, quiero saborear su piel, quiero ver cmo se corre Este hombre ha despertado a la bestia
que llevo dentro. Tengo que tantear a Malena, no puedo revelarle lo que siento por Nathan. Con un
poco de suerte, como con tantos y tantos tos, me lo pondr fcil: no le volver a llamar y tendr va
libre; espero que sea as esta vez. Por otro lado tengo miedo de que no funcione y si me estoy
imaginando cosas que no son? A lo mejor el to no se maneja bien en la cama Algo en m me dice
que no. El sexto sentido femenino est en guardia por algo.
Despus de estar unas horas pensando en el Bombn de bano, decido levantarme; la inquietud no me
deja vivir y la cabeza me va a explotar. Al salir al saln veo a Malena, que se est preparando un
sndwich mientras bailotea a ritmo de La quiero a morir de Marc Anthony. Mueve sus caderas con
soltura y hace girar los hombros agitando sus pechos al comps. Una pizca de envidia asoma en mi
estmago supongo que ella tiene mucho que celebrar.
Vaya!, parece que ests contenta esta maana le digo acercndome.
Joder Martina, ms que contenta contesta abrazndome. Este s, nena, este to merece la
pena. Qu tal t ayer? Un sentimiento de frustracin absoluto me cruza el corazn. No, esto no
tendra que ser as. Ella tendra que haber dicho que fue una mierda y todos contentos. Y bien?
Bueno, yo bien ms que bien miento con una sonrisa. Chocolate con Leche nmero 1
es realmente bueno en la cama. Y Chocolate Negro qu tal? Me mata la curiosidad.
Chocolate Negro como t dices, ms conocido como Nathan, es brutal. Se me encogen las
tripas. Estuvimos horas follando ese to no es de este mundo Martina. Sabe lo que se hace y a m
me dej como nueva. Quiz esta noche le llame tambin. Mi cara no consigue reflejar la alegra por
ella que pretendo fingir.
Joder Malena, vaya novedad. Pues s que te ha dado fuerte para que le quieras volver a
llamar
S, verdad? Es este, ta, lo siento y lo s. Algo se me remueve cuando pienso en l, en sus
manos Mmmmm, me pongo cardiaca de pensarlo! dice dando pequeos saltos. Perd la cuenta
de las veces que me corr ayer.
Vale ya amiga!, no ms detalles por favor Hay cosas que no hace falta contar
<<Verdaderamente no lo quiero saber, pero no te lo voy a decir>>.
A quin se lo voy a contar si no es a ti? dice carcajendose. Y t suelta cmo se
maneja Chocolate con Leche nmero 1, ms conocido como John? Esa pregunta me pilla
desprevenida y le doy un latigazo a mi cabeza para que se ponga a trabajar de inmediato.
Buah, una pasada Esto me da unos segundos para seguir pensando mientras me hago la
interesante. Ya sabes cmo me ponen los tos grandes y este es gigantesco!... En todos los
sentidos!
Jajajaj, eres incorregible, amiga comenta dndome una palmada en el culo. Nathan
tampoco se queda corto. Al principio tuvimos serios problemas para que diga yo eso dice
agitando la mano.
Ostras, pues s le digo con una sonrisa y me giro de cara a la encimera. Esta conversacin
me est resultando bastante incmoda y no me siento bien siendo tan falsa con alguien que me conoce
tanto Puede pillarme en cualquier momento. De pronto omos un bip.
Ay!, un momento, que tengo un mensaje. Bien, salvada por la campana. Malena corre
como una quinceaera a la mesa del saln donde tiene su mvil cargando y entusiasmada me grita:
S! Nos invita a una fiesta esta noche en casa de un amigo suyo, un tal Luis!
A quin? A ti y a m? Me quedo perpleja.
S, dice que tambin estar John y que quiere que vayas. No entiendo nada John se fue
cabreado de casa y reconozco que no se llev el mejor polvo de su vida, pero ahora no le puedo decir
eso a Malena. Joder. Tengo que decir que s por narices, aunque podra inventarme una excusa Pero
es que quiero verle! En qu lo me estoy metiendo?
CAPTULO 3
Nathan, por qu coo le has dicho a esa ta que viniera a la fiesta? No te he dicho que se
comport como una gilipollas conmigo? Esa es de las de mucho hablar y calentar y poco follar.
Venga amigo, dale una segunda oportunidad le respondo con poco convencimiento. La
conversacin que he tenido esta maana con John deja claro el cabreo monumental que tena con ella.
Pero, a ti qu ms te da? me dice pasndome una llave inglesa mientras arreglamos el
coche en el taller de Luis. Realmente no s muy bien cmo responderle. Solo quiero verla una vez
ms y esta es una excusa perfecta.
To, es una oportunidad cojonuda para rebozarle por la cara lo que se ha perdido. Ante mis
palabras, John se queda pensativo.
Puede que tengas razn la voy a putear! Me quedo algo fro ante esta exclamacin.
Bueno hombre a lo mejor tampoco hace falta ir muy lejos con esto. Solo demustrale lo
que vales.
No, no, se va a cagar! Ya vers cuando ponga en prctica lo que se me est ocurriendo.
La llave inglesa escurre de mi mano y cae al suelo mientras pienso en alguna manera de solucionar
esto. Puede que lo est complicando todo y no se me ocurre nada que decirle.
Joder John, qu cabezn eres! digo mientras me agacho a coger la llave. No seas tan
retorcido, solo has pasado con Martina unas horas; dudo mucho que conozcas algo real de ella. Mi
amigo comienza a rerse.
Ya tendrs noticias Nathan dice mientras me da la espalda y se aleja. Ya las
tendrs
Mierda! Desde luego que no quera que pasara esto. Cmo iba a saber que se iba a comportar como
un imbcil despechado? A lo mejor debera dejarme de gilipolleces, decirle a la pelirroja que ha sido
un placer y largarme con la rubia Pero ellas dos son amigas, seguro que entre ellas se protegen y lo
veran como una traicin fraternal. No. Estoy convencido que Martina no va a querer nada conmigo si
est Malena por medio, ya sea a buenas o a malas. Aunque quiz desde luego no son las tpicas
chicas que esperan sentadas a que se les saque a bailar; ellas bailan solitas o acompaadas, eso ya lo vi
anoche en el Feeling. Joder, qu lo. Si no me hubiera enrollado con la pelirroja tendra va libre,
pero es que me puso cmo me puso! Qu to en su sano juicio puede decirle que no? Pero cuando
vi a Martina con John y ella clav sus preciosos ojos en m esa mirada no se me olvida. S que
haba conexin entre nosotros y me puso a cien solo con ver cmo mova el culo al caminar. Me
encantara verla desnuda; esta madrugada en su casa pude adivinar ms secretos de su cuerpo. Se me
pone dura solo de pensarlo.
Pero la sombra de Malena se vuelve a cruzar por mi cabeza Desde luego ella sobra. Est buensima,
folla de primera, pero tiene pinta de cabrona. Hay algo en ella que no me gusta. Es la tpica abogada
con dinero de pap que va a los juicios con minifalda y unos cuantos botones de la blusa
desabrochados bajo su carsima americana en plan castigadora. A cualquier to eso le debera
encantar a m hay algo que no me cuadra. No creo que sea legal. Aunque lo que estoy haciendo yo
tampoco es muy lcito, que digamos. Me estoy complicando la vida por momentos. Me tiro a la
pelirroja y, como quiero quedar con la rubia, invito a la pelirroja a una fiesta y animo a mi amigo a
que se vuelva a tirar a la rubia, que es con la que quiero follar yo, pero no tengo cojones a deshacer
este entuerto Cundo me he convertido en un idiota? En qu momento se han complicado as las
cosas?
Es que Martina me puede Vale que mi amigo me ha contado que prcticamente le ech de su casa
sin miramientos ella podra ser otra cabrona, pero no me dio esa impresin cuando la vi durmiendo
en el sof. Solo s que no puedo dejar de pensar en ella. Tiene un cuerpo diseado para el pecado: unas
piernas largas, la cintura estrecha, buenas tetas sin ser exageradas, ese pelo rubio Mmmmm, me
encanta. Repasara con mi lengua cada centmetro de esa piel ligeramente caramelizada. Y su cara!
Tiene una boca como una fresa totalmente apetecible y unas cuantas pecas bailan sobre su pequea
nariz Me vuelve loco.
A las nueve me dirijo en mi coche hacia casa de Luis. No puedo decir que estoy nervioso, pero s algo
intranquilo. En cierta manera me divierten este tipo de jaleos, aunque siento que no estoy jugando
limpio. Que sea lo que Dios quiera! A ver lo que sale hoy de aqu.
Luis vive en la sierra de Madrid, en una pequea casa unifamiliar rodeada de jardn con una piscina.
Desde ah se puede ver la Pedriza y es una maravilla para los sentidos. Su novia, Hannah, es la tpica
novia que todos quisiramos tener. Es divertida, guapa, atenta y algo hippie. Su espritu libre te
envuelve cuando ests cerca de ella; jams la he visto triste, siempre est de buen rollo con todo el
mundo.
Luis nunca ha tenido una palabra negativa hacia esta inglesa criada en Espaa la quiere con locura.
En cierta manera le envidio; me encantara tener una relacin as de pura con alguien, sin dobleces.
Pienso en mis 33 aos y, la verdad, yo no he tenido demasiada suerte con las mujeres. Mientras viva
en EEUU tuve la tpica novia de instituto que solo quera ser la mujercita perfecta Yo no
necesitaba una criada, quera a alguien con un poco ms de carcter; as que, cuando vine a Espaa con
18 aos la dej. Lo ltimo que supe fue que se cas con un gilipollas prepotente siempre hay un roto
para un descosido. Ya aqu, fui picoteando pero nunca consegu nada ms duradero de unos meses.
Diversin y punto, no me quera complicar demasiado la vida.
Sin saber cmo he llegado, ya estoy en la puerta de Luis. A veces me asusta que el piloto automtico
conduzca por m, realmente no me acuerdo por dnde he pasado. Llamo al timbre y me abre Hannah,
sonriente como siempre, y se me tira al cuello encantada de verme. Desde dentro, la voz de Bob
Marley retumba en las paredes, el olor a porro inunda mis fosas nasales y pronostico que la velada va
a ser algo transcendental. Hannah y Luis siempre ponen al bueno de Bob cuando se dan un atracn de
marihuana. Le entrego en la puerta la bolsa con cervezas que he trado y paso al saln, donde veo a
mis amigos hablando animadamente en el suelo, alrededor de un par de cachimbas. Alucino porque
han quitado los sofs y han convertido la estancia en una tetera rabe, llena de alfombras y pufs. Ellos
son as; las fiestas temticas las bordan. Junto a ellos, un par de parejas ms que no conozco me
saludan con un gesto de cabeza y yo les digo, antes de sentarme, que soy Nathan. Ellos me dicen sus
nombres y no recuerdo ninguno ya se lo volver a preguntar; de momento no parecen muy
interesados en m.
A las diez suena el timbre y John y yo miramos hacia la puerta algo intranquilos. Sabemos que van a
ser ellas. Cuando Hannah les abre las abraza con efusividad. No puedo evitar rerme ante la cara de
espanto de aquellas dos, que visten con vestidos mnimos y grandes tacones, totalmente fuera de lugar
en casa de Luis. Pero qu buenas estn mi segundo cerebro comienza a trabajar mientras observo
sus curvas. Entre ellas se miran confundidas y algo avergonzadas; se nota que no estn a gusto y que
este no es un entorno donde se puedan mover con soltura. Le dan a Hannah una botella de champn y
yo me parto de risa. No, definitivamente no estn en armona con el medio.
Se han escapado de la pasarela Cibeles? me pregunta John en un susurro y me hace
mucha gracia.
Eso mismo he pensado yo, amigo Ya vers cuando se den cuenta de que tienen que
sentarse en el suelo.
Comienzan a andar hacia nosotros. De pronto, Martina me mira fundindome con esos ojos verdes y
yo me encuentro atrapado dentro de ellos. Me quema. Me abrasa. Hoy lleva el rubio cabello rizado,
que le cae en preciosos tirabuzones hasta el pecho. Solo puedo pensar en ella conmigo en la cama,
teniendo una buena sesin de sexo la de posibilidades que tiene ese cuerpo y esa boca Respira
Nathan
Hola! dice Malena muy animada. Se agacha ante m y me sorprende dndome un beso
muy, muy caliente delante de todos que me deja cortado. No s bien cmo actuar y ella lo nota en mi
cara. Qu pasa? Has visto un fantasma? Yo niego con la cabeza y sonro falsamente, mientras
ella intenta sentarse a mi lado con bastantes problemas. A ver el tiempo que dura en esa postura digna
de La Sirenita.
Echo una mirada furtiva a Martina y veo que John se aproxima a ella y le da un fuerte cachete en el
culo. <<Qu hace este gilipollas?>>. Ella da un respingo y le observa con la boca abierta. Acto
seguido, la agarra de la mueca y la atrae hacia l para devorarle los labios. <<Esos labios son
mos!>>. Pero la rubita no parece muy entusiasmada y pone sus manos en el pecho de John, intentando
separarle. La verdad es que todos nos miramos entre nosotros con gesto contrariado hasta Bob
Marley ha dejado de cantar. Como siempre, Hannah es la que salva la situacin.
Eh, tortolitos, que corra el aire! dice mientras les separa y entrega a John una caja que
lleva en las manos. Toma, llvatela al garaje anda, que pesa mucho. Observo cmo Martina suelta
el aire al ver alejarse a mi amigo y yo tambin, aunque su cara sigue mostrndose perpleja.
Hannah coloca entre nosotros unas mesas rabes con pequeas patas de madera sobre las que se
sostienen unas bandejas plateadas y, mirando a las invitadas con el ceo algo fruncido, les comenta:
Os queris cambiar de ropa? Eso no tiene pinta de cmodo dice sealando con su dedo
ndice los vestidos de ellas dos.
No, estoy bien, gracias responde Malena y todos la miramos escpticos. Es imposible
conservar esa pose durante mucho tiempo.
Yo s, por favor dice Martina con voz quejicosa, que todava no se haba sentado. Vaya!,
parece que mi rubita tiene sentido comn. Asombrosamente, veo cmo la pelirroja la fulmina con la
mirada en un gesto ms que enfadado. Martina se encoge de hombros en seal de disculpa Qu le
pasa a estas dos? No acierto a interpretar cul es el problema.
Genial, acompame! Y Hannah tira de la mano a Martina y se la lleva dando pequeos
saltitos como si fuera Heidi. Es que ella es muy happy, eso me hace rer. Realmente poco tiene en
comn con estas dos estiradas.
Malena sigue seria, con cara de maldecir a su amiga y todava no lo entiendo. Debe de existir algn
cdigo entre ellas, pero sigo sin pillarlo. Luis, muy amablemente, le ofrece una de las cachimbas y
ella, sonriendo, la acepta gustosa. <<Anda, la Barbie pelirroja fuma?>>. No quiero ser malo, pero me
apetece verla con un pedo tremendo a ver si se le cae la corona de princesa. Yo hace un par de aos
que ya no pruebo nada de esto soy demasiado amigo de los vicios y, cuanto ms lejos, mejor.
Observo que Malena deposita su mano en mi muslo, mientras sigue hablando con los dems y
fumando como una loca. Podr aguantar ese ritmo? Lo dudo mucho creo est intentando
integrarse; aunque estoy seguro que acabar integrndose en un grupo de desintoxicacin. De aqu a
una hora me voy a divertir.
Martina aparece por la puerta seguida de Hannah y se me seca la boca. Est preciosa. Lleva una falda
hippie roja con una camiseta ajustada negra. Verla as de sencilla y natural es la mejor imagen del da.
Sus bucles rubios siguen cayendo sobre sus pechos perfectos y tengo que recolocarme sobre mi sitio
para ajustarme la incipiente ereccin. Bella no tengo otra palabra. Se une al grupo sentndose con
las piernas cruzadas, liberada de vestidos fustigadores, totalmente desinhibida y sonriente. Va
descalza tiene unos pies preciosos. De pronto, la mano de Malena me agarra por la mandbula y me
fuerza a quitar la vista de Martina. Eso me molesta enormemente y con un movimiento seco me
separo. Poniendo la excusa de ir al bao, me levanto, separndome de su lado ante su cara de
frustracin. <<Que se joda!>>.
En el lavabo, me miro al espejo y comienzo a hablar conmigo mismo como si fuera gilipollas. <<A
qu ests jugando? Sera muy difcil decirle a la pelirroja que no quieres nada con ella e intentarlo
limpiamente con Martina? Te ests enredando y vas a acabar mal; deja de perder el tiempo!>>.
Despus de un rato convencindome a m mismo salgo de ah y de nuevo me dirijo al saln. La escena
que me encuentro es cuanto menos divertida. Malena lleva una fumada considerable y todos se
descojonan de ella porque no hace ms que decir una chorrada tras otra. Est sentada de cualquier
manera y se le ve el tanga bajo su vestido. Estoy tentado a sacar el mvil y hacerla unas cuantas fotos,
pero me contengo porque no he perdido del todo mi caballerosidad. La nica que se ve algo
preocupada es Martina, que con paciencia intenta levantarla pero no tiene fuerza para cargar con ella.
De pronto, un mordaz comentario de John me deja congelado.
Martina, por qu no subimos a una habitacin y repetimos lo de ayer? Estuviste
fantstica Ella se queda bloqueada y suelta a la pelirroja, cayendo esta al suelo totalmente
despatarrada. Le clavo cien cuchillos a mi amigo con la mirada y me giro hacia Martina para ayudarla
con Malena.
Djame echarte una mano Ignoro deliberadamente a mi amigo, pero veo cmo ella est
cortada y roja como la falda que lleva puesta. Huele deliciosamente bien y el gesto contrariado de su
cara me enternece.
Nena!, ayer estabas ms comunicativa dice con expresin lasciva.
Ya basta John! Eres un gilipollas! Me entra una rabia descomunal y John se enerva
desde su sitio.
Eh, eh, ya vale! Hannah intenta poner algo de orden. T le dice a John, no
consiento que seas as de maleducado con ningn invitado que entre a esta casa, y t me dice a m
, no te calientes tanto y sube a esta chica a mi habitacin, a ver si durmiendo se le pasa el
amarillo. Pocas veces hemos visto enfadada a Hannah y la verdad es que impone. Todos
asentimos arrepentidos con la cabeza como si furamos cros y hacemos lo que nos dice.
Con la ayuda de Martina, que todava est en shock y no ha articulado palabra, cojo a Malena en
brazos y nos dirigimos los tres a la habitacin de la planta de arriba. Una vez all, la deposito con
cuidado en la cama y ella no hace ms que agarrarme medio inconsciente, intentando que me tumbe a
su lado. Con facilidad me quito sus manos de encima y le digo a Martina que voy a por agua para que
se hidrate y a por algo de comer. Tardo dos segundos en volver con una botella de agua fra y un
paquete de croissants con chocolate s que necesita azcar. Martina se sienta a su lado.
Malena oye, me escuchas? Le da ligeros golpecitos en la mejilla con el fin de
espabilarla, pero esta cada vez est ms grogui. Percibo la preocupacin en la voz de su amiga
incluso dira que est angustiada. Con cario le quita los carsimos zapatos y la mete bajo el edredn.
En ningn momento dirige su vista hacia m.
Martina, creo que lo mejor ser que duerma. Con delicadeza le rozo el brazo y siento
cmo su piel me enciende. Creo que a ella le ha pasado lo mismo porque, ante mi contacto, ha dado un
respingo y se le ha puesto el vello de punta.
Me siento un poco culpable No debera haber dejado que fumara tanto dice con los
hombros hundidos.
Bueno, ella es mayorcita. No suele fumar? Esta niega con la cabeza y yo me desespero
porque sus ojos siguen bajos y no me mira. Oye escucha. Le levanto la barbilla con el dedo
ndice y esta vez s. Nuestras miradas chocan a travs del aire cargado de una energa casi elctrica
que enmudece todo lo que tenamos que decir. Me derrito en el color verde, tan fcil de traspasar y
siento cmo viajo por debajo de su piel recorriendo el clido cuerpo que tengo delante. Me empalmo
de inmediato y retiro el contacto de mi mano al notar que tiemblo ligeramente. Ella sigue mirndome
con la boca entreabierta y la respiracin algo acelerada. Sus pupilas se han dilatado y esa preciosa
mirada denota otro tipo de intensidad. Un gruido de la pelirroja destroza toda conexin, haciendo que
giremos nuestras cabezas en su direccin. Est hablando en sueos. Cada vez soporto menos a esta ta.
Vmonos de aqu! me exige Martina y yo la miro boquiabierto. Antes de que pueda
pronunciar palabra, me coge la mano y me conduce al pasillo. Su mano es la mitad que la ma y me
hace gracia que solo le d para agarrarme tres dedos. Observo cmo sus rizos botan segn baja las
escaleras y sigo sintindome enternecido y excitado a partes iguales. A trompicones salimos al jardn
y, fuera de la vista de amigos imbciles, me dice: Ven aqu No puedo expresar el cmulo de
sensaciones que siento cuando veo cmo se encarama de puntillas por mi cuerpo para cogerme por la
nuca con posesin, obligndome a bajar a su altura. A escasos centmetros de mi cara se para y me
observa, siento su aliento en mi boca y no puedo frenar mis impulsos. La agarro bajo el culo
levantndola y ella enreda sus piernas alrededor de mi cintura, entonces ocurre Nuestros labios se
dan la bienvenida y por fin adivino el sabor dulce de su saliva estoy hambriento de ella. Introduzco
mi lengua y ella se deja saquear por m, haciendo lo propio con la suya. Nos besamos con
desesperacin y ansia. Despierta tanta necesidad en m que tengo ganas de morderla, pero me
contengo. Tenerla enroscada en mi cuerpo va a hacer que explote la cremallera de mis pantalones,
nunca me haba alterado tanto una mujer y esta es sencillamente deliciosa. Pequea comparada
conmigo, como un hada de un bosque, pero llena de una carga sexual que hace explotar todas mis
neuronas como latigazos en mi cuerpo. No puedo aguantar mucho ms esta situacin, as que
comienzo a andar con ella hacia una oscura zona del jardn llena de rboles. Necesito poseerla y
colmarme de su excitacin. Ahora mismo mi control est totalmente desbocado y no puedo pensar en
nada ms.
CAPTULO 4
No me puedo creer que est aqu con Nathan. No me puedo creer que bese de esta manera Dios, mi
sexo se lica con cada embestida de su lengua. Me cuesta respirar y no quiero soltarme de su cuello. A
l tambin le percibo agitado y siento su ereccin presionndome entre mis piernas segn andamos
hacia algn lugar; no quiero abrir ni los ojos. Todos mis sentidos estn en carne viva. Sus dedos se
clavan en mi culo y la otra mano se mueve inquieta entre mi espalda y mi pelo! Oh, s, acaba de
agarrarme del pelo y me tira hacia atrs para tener acceso a mi cuello. Esto me pone me pone
demasiado. S que en este momento estoy gimiendo y no me importa, necesito urgentemente liberar la
tensin sexual que estoy sufriendo. Me muerde el hombro y grito de placer, no puedo ms. Noto que
se agacha y se sienta en el suelo; abro los ojos y s que me invita a seguir a horcajadas sobre l.
Deshago el nudo hecho por mis brazos en su cuello y le acaricio las mejillas, mientras sigo bebiendo
de su boca. Una mano ha desaparecido bajo la camiseta y trepa por mi espalda, presionndome contra
l y la otra sigue enredada en mi pelo. Estoy totalmente fuera de m incluso me visualizo como si
fuera un espectador propio de un viaje astral. Me dejo llevar cada vez ms Mis caderas bailan sobre
su pene provocndole, hacindole que sus caricias sean ms rudas.
Me ests poniendo a cien, pequea dice en el umbral de mi boca. Esas palabras con esa
voz me vuelve loca. Voy a follarte aqu y ahora.
S por favor fllame ya. <<Eso o morir de un infarto; necesito tenerle dentro>>.
Rpidamente, una de sus manos desaparece de mi cuerpo y me siento algo hurfana. Cuando me fijo,
observo que ha sacado su cartera y, de ella, un preservativo. Algo dentro de m da palmas como una
imbcil. Con la mirada cargada de prometedor sexo, acerca el envoltorio a mi boca y no dudo en
romperlo con mis dientes, mientras mis manos desabrochan los pantalones y, apartando los
calzoncillos, aparece ante m el pene ms grande que jams he tenido. Podra decir que incluso me
asusto y mira que he estado con tos Nathan sonre con suficiencia ante mi reaccin y yo no me
amilano. Con descaro y sin dejar de mirarle fijamente, agarro semejante miembro y lo empiezo a
acariciar con cuidado arriba y abajo ejerciendo la presin justa. l se desespera y con rapidez me
levanta ligeramente, lo enfunda con el preservativo y, apartando la tela de mi tanga, me deposita sobre
su sexo. <<S estamos a punto>>. Con cuidado, voy deslizndome, introducindolo en m y al
principio tengo la sensacin de partirme en dos. El gesto de su cara se contrae y cierra los ojos,
gimiendo de placer. Sus manos ascienden hasta mis pechos, que pellizca sutilmente para luego
saborearlos con su lengua. Poco a poco mi vagina se va acostumbrando a ese gigante invasor y
comienzo a disfrutar de verdad. Al principio despacio, me deja a m llevar la iniciativa y adelanto la
pelvis una y otra vez, montndole como una buena amazona desnuda en un caballo. Es maravilloso
sentirle as y no puedo evitar soltar el aire cada vez que caigo sobre l una y otra vez. Mis
movimientos se vuelven ms primarios y esta vez es l el que coge las riendas. Agarrndome de la
cintura con sus manos, que abarca con ellas la totalidad de mi contorno, comienza a impulsarse con
sus caderas dentro de m, hasta tal punto que saldra despedida hacia arriba de no ser porque me tiene
bien sujeta. Enloquezco. Tiemblo. Grito. Me agito. No puedo aguantar ms. He perdido la cuenta del
nmero de penetraciones estoy perdida y me dejo ir cada vez ms profundas, ms bruscas, ms
agresivas y ms placenteras. S as es como quiero que me follen. Nunca haba disfrutado tanto y
saba que l me lo dara. Estoy a las puertas de correrme, empiezo a sentir un hormigueo por todo mi
cuerpo y me tenso, comenzando a tener convulsiones mientras su mstil sigue en mi interior y entra y
sale de m sin piedad y cada vez ms rpido. Cubre su boca con la ma para ahogar mis gemidos
agnicos que piden clemencia y yo pierdo el sentido. Al instante, noto que l tambin tiembla y, con
embestidas igual de fuertes pero ms espaciadas, se corre dentro de m. Siento su orgasmo en mi boca
y eso hace que se alargue el mo quedndome exhausta. Me imagino su lquido prisionero dentro del
preservativo y me sobreexcito pensando en que lo quiero en mi piel; quiero sentirme regada de su
fluido.
Tengo la cabeza hundida en su cuello y no puedo dejar de respirar el aroma de este hombre, que me ha
vuelto loca. l tiene mi cuerpo apresado entre sus grandes brazos y no me apetece moverme de esa
crcel de msculos en toda mi vida. Todava le siento dentro de m y, juguetona, contraigo los
msculos de mi vagina para hacerme notar. No s si alguna vez me saciara de l.
Pequea no me apetece nada pero tengo que salir de ti antes de que el condn se salga
dice mientras me acaricia con el pulgar mi labio inferior. Yo me lo muerdo deliberadamente. No
me hagas esto comenta con una maravillosa sonrisa, no me provoques. Ests siendo algo mala,
sabes? Vuelvo a contraer mis msculos y l niega con la cabeza desesperado.
Mala yo? respondo con fingida inocencia, arrancndole de nuevo una sonrisa. Se acerca a
m y de nuevo me besa, pero esta vez con dulzura y delicadeza. Tan extremadamente tierno que me
derrito en sus brazos y sus labios.
S Mala t dice mientras repasa con su lengua mi mandbula y los calores empiezan a
invadirme, aunque noto cmo poco a poco va saliendo de m, dejndome vaca y sola.
Nathan! Dnde estis?! Los gritos de Hannah nos hacen saltar del suelo. Como si nos
hubiera pillado nuestra madre, nos colocamos la ropa entre risas con rapidez.
Lista? pregunta dndome un beso fugaz en los labios y yo asiento embobada. Hannah,
estamos aqu! Ya vamos comenta con pesar.
Ay, menos mal que os encuentro. Se acerca corriendo sin prestarme atencin. Nathan,
tu novia ha empezado a vomitar y no s muy bien lo que hacer. Dice que cada vez se encuentra peor.
Los dos nos miramos a la vez sin saber muy bien cmo gestionar esto tu novia? eso me ha
sentado como una pualada, pero claro quiz hay cosas que tendramos que haber solucionado
antes.
Sigue en la habitacin? le pregunto a Hannah.
S, est en la cama donde la dejasteis.
Bien, pues voy yo digo, pensando que lo que est haciendo Malena es el tpico numerito
para llamar la atencin.
Te acompao. Se ofrece Nathan y yo acepto sin palabras. All vamos
Al entrar en la habitacin, vemos a Malena con un color de cara estupendo, pero con gesto dolorido
Perfecto, est actuando! Se encuentra tumbada sobre el edredn de una manera totalmente sexy,
dejando al descubierto sus largas piernas semicruzadas. Al observar a Nathan, se le ilumina la cara.
Ayyy, cario, me encuentro muy malita dice con voz de nia pequea, mientras tiende
una mano hacia l. Me entran ganas de cortrsela. Nathan me lanza una mirada rpida y, resoplando,
se acerca con paso firme a la cama. Le agarra la mano y se sienta a su lado, visiblemente tenso.
Malena fija sus ojos en m y levanta las cejas, echndome descaradamente.
Bien, esperar abajo digo entre dientes con impotencia.
No! responde Nathan. Malena, necesitas dormir, as que te dejamos mejor sola
comenta mientras se intenta levantar de la cama.
No cario necesito que ests aqu conmigo su voz es como la de una melosa gatita en
celo, que contrasta totalmente con el tirn que pega de su brazo, que casi le hace caer de bruces a la
cama de nuevo.
Que no, joder, sultame! La cara de Malena ante la reaccin de Nathan es de total
estupefaccin. Tiene la mandbula descolgada y no puedo evitar morderme un labio para evitar rerme,
aunque ya s lo que va a pasar plan B.
Me has gritado? Me has hecho sentir fatal La barbilla de mi amiga comienza a temblar
y se lleva las manos a la cara. Efectivamente, el plan B consiste en llorar. Ella es as de predecible
Nathan no sabe dnde meterse ni qu hacer. Martina dice entre fingidos sollozos, puedes
traerme mi bolso, por favor? Sin decir nada, me giro y salgo de la habitacin. Ya he visto
demasiado drama para seguir aguantando ah como una idiota.
Bajo de nuevo las escaleras y entro al saln. Est cargado de una humareda irrespirable y todos estn
hablando medio tumbados, a bajas revoluciones y con los ojos reducidos a una fina lnea.
Ey Martina. Me vuelvo a mirar mientras busco el bolso de Malena entre una montaa de
abrigos.
Ey John le digo sin mucho entusiasmo y sigo a lo mo.
Dnde os habis metido Nathan y t? pregunta con seriedad, pero su voz refleja lo
colocado que est.
Con Malena, cuidando de ella miento. De pronto Hannah entra en la conversacin para
echarme un cable.
S, han estado todo el tiempo con ella. Me guia un ojo y yo sonro discretamente.
Parece que ya est mejor, verdad?
Aj ya es ms ella. Eso es buena seal digo encogindome de hombros. Al momento
aparece Nathan por la puerta y me lanza una mirada exasperada Seguro que mi amiga le ha sacado
de quicio.
Ey to, dnde estabas? vuelve a preguntar John.
Dando un paseo por ah responde este sin pensar. Hannah y yo ponemos los ojos en blanco
y pedimos con la mirada que John no contine con su interrogatorio.
Con quin? Era de esperar Ahora ha despertado su curiosidad.
Con Me mira y al ver mis ojos levanta los hombros sin saber muy bien por dnde salir.
Niego rpidamente y l no reacciona.
Conmigo dice Hannah. Algo ms John? Ah, vale, veamos en las ltimas dos horas
he hecho pis cuatro veces, ayer me hice las ingles y fue dolorosamente espantoso, Luis y yo hemos
probado tres posturas nuevas en la ltima semana y ahora mismo estoy demasiado pedo como para
seguir atendiendo preguntas de hombres preguntones Te ha quedado claro todo, amorcito?
Comenzamos todos a partirnos de risa, incluido John, que simplemente se deja caer hacia atrs y se
queda tumbado en el suelo, tan contento.
Martina, te quieres tumbar aqu conmigo? pregunta sonriente mientras da palmaditas en
el suelo.
No respondo secamente. Veo que Nathan se enerva y le freno con la mirada.
Vale me dice con la misma sonrisa y se queda dormido.
Por fin soltamos el aire que habamos estado conteniendo y notamos nuestra espalda ms relajada.
Nathan se acerca a mi odo con bastante tensin acumulada.
La he dejado. Abro tanto los ojos que se me van a caer.
A Malena? Y no te ha matado? <<Ay, la que se va a liar>>.
No ha llorado, ha fingido que se desmayaba y yo ya me he ido harto de tantas gilipolleces.
Contigo es buena amiga? Asiento de manera automtica. No s Martina, creo que t no eres
como ella
Ella es mi mejor amiga es una buena ta, lo que pasa es que no la conoces bien. Ella es
especial. Le debo mucho, sabes?
Pues espero que no te lo haga pagar no me da buena espina, pero ser eso que dices, no la
conocer bien.
Una cosa Nathan
Me encanta que digas mi nombre dice con una sonrisa seductora y yo trago saliva,
sonriendo tontamente.
Ella no puede saber lo que ha pasado hoy entre nosotros. Su gesto cambia y me mira con
el ceo fruncido. En serio Nathan ella y yo bueno, tenemos un acuerdo es mi amiga Es
complicado de entender, pero de momento esto es secreto, vale?
Pues no no me vale No lo entiendo! dice medio enfadado y yo le mando bajar el
tono algo apurada.
Shhhh, por favor, hazlo por m. l resopla ofuscado y se pasa la mano por el pelo.
Est bien pero que sepas que no me gusta ni un pelo porque lo que me gustara sera andar
metindote mano por cualquier lugar comenta despreocupadamente con media sonrisa y yo me
quedo sin aliento. Bueno puede que sea divertido. Accede mirndome con sensualidad y noto
cmo me voy humedeciendo. Estoy a punto de decirle que comenzamos ya con los encuentros
clandestinos, pero unos tacones bajando las escaleras me distraen.
Martina! Nos largamos de aqu! Yo me encojo ante el tono enfadado de Malena y
escucho cmo Nathan suelta un bufido.
Mi ropa tengo que cambiarme le digo cogindome la falda hippie, que por cierto me
encanta.
No hay tiempo, nos vamos ya, te espero fuera. Cuando me habla as delante de gente
siento la misma vergenza como si tuviera diez aos y me regaara la profesora. Pero por algn
motivo, no soy capaz de rebatirle nada ella siempre acaba teniendo razn y yo acabo claudicando.
Est bien. Me siento humillada. Hannah, gracias por todo le digo con una franca
sonrisa y, volvindome hacia los dems, me despido levantando una mano. Nathan me la agarra,
deposita un papel y me cierra el puo, a la vez que me guia un ojo. Sonro sin muchas ganas,
sintindome ridcula, y salgo de all sin mirar atrs.
Malena arranca su deportivo negro y salimos de esa casa derrapando, dejando un rastro de polvo tras
nuestras ruedas. Durante todo el camino no me dirige la palabra y yo sostengo en mi mano el papel
que me ha dado Nathan, deseosa de llegar a casa para ver lo que es. Est enfadada y presiento que no
es buen momento para intentar tener una conversacin. Aparcamos en el parking y cierra la puerta de
un portazo.
Una vez que entramos en casa, va directa a por un vaso de agua y, con l en la mano, se vuelve hacia
m.
Por qu me has hecho esto? De pronto la miro confundida. <<Cmo se ha podido
enterar de lo mo con Nathan?>>. No s qu decir y me quedo frente a ella con los hombros hundidos.
No s a qu te refieres, Malena
Que no?! No te hagas la tonta conmigo! Sus ojos echan fuego en mi direccin. Me
has dejado sola con un pedo brutal y has permitido que la gente se riera de m! De repente caigo en
la cuenta de que no se est refiriendo a Nathan e internamente suspiro de alivio.
Malena, qu queras que hiciera? Ya eres mayorcita, no voy a controlar lo que fumas
Somos amigas y no has cuidado de m me dice encarndose, casi apuntndome con sus
turgentes pezones. La diferencia de altura ahora que no llevo tacones es abrumadora.
Una cosa es que seamos amigas, Malena y otra es que yo tenga la culpa de las cosas que
haces t le reprocho cansada de tonteras.
Ensame tu tatuaje
Qu? La miro sorprendida.
Que me ensees tu tatuaje! Resoplando, retiro el brazalete de mi mueca y extiendo el
brazo.
M&M, recuerda por qu nos lo hicimos, Martina dice ella enseando tambin el suyo.
No he roto ningn punto del puto pacto! Intento mantener mi gesto sin que se me note
que he incumplido el punto principal: Jams nos quitaremos entre nosotras a los hombres.
No se te ocurra levantarme la voz!
Lo siento, pero es que me ests acusando de cosas que no he hecho esto es injusto,
Malena. Durante unos segundos se hace el silencio entre nosotras y yo lo agradezco. No me gustan
nuestras discusiones, siempre me siento acorralada. Sobre todo ahora, que tengo algo que esconder.
Est bien Perdona Martina, la noche no ha acabado bien para m y lo estoy pagando
contigo.
Qu te ha pasado? pregunto fingiendo inters, aunque ya s lo que me va a contar.
Nathan ha cortado conmigo te lo puedes creer? Nos dirigimos a sentarnos en el sof.
Oh cunto lo siento! Y eso por qu? A travs de esta actitud hipcrita intento saber lo
que l le ha contado espero no estar yo dentro de ningn motivo.
Pues dice que se ha divertido conmigo, pero que no soy lo que busca Qu ms quiere este
to? Es que no tiene ojos en la cara? <<S los tiene, pero para m>>, pienso triunfalmente. Me
estoy haciendo mayor, Martina, o qu puto problema hay?
No, cario, t sigues siendo preciosa. A saber lo que quiere lo mismo es gay. Le arranco
una carcajada.
Segn follaba ayer no creo que sea gay <<Y segn ha follado hoy, tampoco>>, vuelvo a
pensar en mi interior y sonro. Bueno, tengo un dolor de cabeza horrible, as que me tomar una
aspirina y me meter a la cama. Se dirige a m y me abraza. Gracias por ser mi amiga, eres la
mejor. Bajo mi piel suenan miles de cristales rompindose soy peor que Judas; pero lo hecho,
hecho est, no voy a darle ms vueltas. Ella no tiene reparos en portarse mal conmigo cuando quiere,
as que el juego sucio est servido.
CAPTULO 5
Estoy en mi cama y miro ansioso el mvil. Espero que Martina no haya tirado el papel donde he
apuntado mi nmero de telfono. Tengo ganas de hablar con ella y, sobre todo, buscar un rato para que
venga a casa; esta vez me apetece saborearla entera, completamente desnuda y a mi disposicin.
Joder, me pongo duro como una piedra cada vez que pienso en ella esto tiene que ser malo muy
malo.
Con los ojos medio cerrados noto una vibracin y me incorporo de golpe. Es ella.
65116: Hola Lenny!
Nathan: Lenny???
65116: S, Lenny Kravitz ;-p
Nathan: jajajajja, no eres la primera que me lo dice, tendr que empezar a crermelo. Me parece bien
ese nombre, Kate.
65116: Kate???
Nathan: Kate Moss!!! No estuvo enrollada con Lenny Kravitz un tiempo?
65116: Mmmmmm, ni idea. Pero si te gusta, ser Kate, jejeje.
Nathan: Me gusta porque se parece a ti. Ahora mismo grabo tu telfono con ese nombre.
Kate: Venga ya!!! No me parezco a ella!
Nathan: S, s mira alguna foto suya con el pelo rizado y largo Ufff, me pongo malo de pensarlo.
Kate: De pensar en otra? :(
Nathan: De pensar en ti, Kate Cundo te volver a ver?... Y alegra esa cara :)
Kate: No lo s esta semana tenemos un juicio algo complicado y tendremos que echar horas en
casa. Por cierto en qu trabajas t?
Nathan: Soy profesor de matemticas.
Kate: Vaya, te gustan los nmeros?
Nathan: Me gustan los problemas jajajaj.
Kate: Muy gracioso eso es un matechiste???
Nathan: Algo as :D Y volviendo a las ecuaciones con infinitas incgnitas cundo podremos
vernos?
Kate: Digamos que mejor te aviso yo No quiero levantar sospechas.
Nathan: No entiendo tu relacin con Kylie es rara
Kate: Kylie???
Nathan: Kylie Minogue estuvo con Lenny Kravitz antes que Kate Moss
Kate: jajajajajja, me parto!!! Eres un marujo en potencia cmo sabes esos cotilleos?
Nathan: Me lo cuentan mis alumnas
Kate: Anda ya! Cuntos aos tienen tus alumnas?
Nathan: 15 y 16 y son muy rockeras les encanta Lenny Kravitz.
Kate: Suspendern todas, no? Si tienen al clon de su dolo de profe de matemticas Yo ira a clases
de refuerzo aposta.
Nathan: No soy su clon! l es bastante ms bajito que yo XDXDXD
Kate: Mejor me lo pones!!!
Nathan: Bueno, cntrate que te ests desviando del tema cundo te veo otra vez?! Todava me
queda mucho que hacer contigo
Kate: Hummmmm Y qu quieres hacer conmigo?
Nathan: Como buena abogada, de nuevo ests desviando la atencin, Kate. Ser una sorpresa
Cmo puedes darle esquinazo a Kylie?
Kate: Pues es difcil lo hacemos todo juntas: trabajamos juntas, vamos al gimnasio juntas, salimos
juntas, vivimos juntas
Nathan: No te agobia eso?
Kate: No, ella es mi amiga.
Nathan: Y no hay nada que hagas sola?
Kate: Normalmente no pero podra ir el siguiente fin de semana a ver a mis padres a Alicante!
Nathan: Y te quedas conmigo en mi casa?
Kate: No. Iramos a Alicante. Lo mismo Kylie llama a casa de mis padres
Nathan: Tu amiga no es un poco controladora contigo?
Kate: Bueno, a veces un poco, pero su intencin es protegerme.
Nathan: Y de qu te tiene que proteger? No corres ningn peligro que yo sepa
Kate: Lenny, nunca has tenido un buen amigo? No sabes las cosas que ella ha hecho por m.
Nathan: S, tengo varios, por eso no hacemos esas cosas.
Kate: No lo entiendes en las mujeres la amistad es diferente. Podemos cambiar de tema? Me ests
agobiando un poco.
Nathan: Agobiando yo? Es lo ltimo que quisiera Agobiado estoy yo de pensar en Kylie. Vale,
entonces el fin de semana que viene nos vamos a Alicante?
Kate: S. Llamar a mis padres y les dir que voy a verles. Vamos en tren o en avin? Yo no
conduzco.
Nathan: Conduzco yo.
Kate: No, prefiero sacar un billete, para que Kylie se quede convencida.
Nathan: &@#!!!
Kate: Qu demonios significa eso???
Nathan: And arroba almohadilla es una expresin muy comn que indica estrangulamiento No
leas a Mortadelo?
Kate: Me ests vacilando??? Me conoces de hace dos das, as que deja de juzgar mi manera de vivir
(ahora estoy muy seria).
Nathan: (suspirando) Est bien pensar en cosas ms alegres, como el fin de semana que viene.
Iremos en avin, as no perdemos tiempo.
Kate: Me parece bien! Esta semana te digo el nmero de vuelo y el asiento.
Nathan: Ok, Kate estoy impaciente por verte.
Kate: Yo tambin Lenny. (*)(*)!!!
Nathan: Me mandas dos tetas????
Kate: NOOOOO, son dos ojos!!!!!
Nathan: XDXDXD Ay que me parto!!! Esos son dos tetas Kate!!! Deja de enviarme obscenidades o
voy a tu casa a secuestrarte.
Kate: Ni se te ocurra!!! Y son dos ojos!!! Eres imposible!!! Vete a dormir.
Nathan: Soar con tus tetas
Kate: &@#!!!
Nathan: Jajajajajajaj. Buenas noches, pequea.
Kate: Buenas noches, grandulln.
Hablar con Martina me ha encantado, pero me inquieta demasiado su relacin con Malena. Algo se
esconde tras ella y no me hace ninguna gracia. Es una manipuladora en potencia, ya lo he comprobado
esta noche cuando le dije que no quera tener nada con ella. Otra cosa que no entiendo es la actitud de
Martina tan volcada en esa amistad, por qu la est engaando? Realmente es de fiar si es capaz
de mentir en esto a su mejor amiga? Tendr que comprobarlo por m mismo. Ser una especie de todo
o nada, lo mismo caigo en una trampa me interesa arriesgarme? Definitivamente s ya me
lamer las heridas si me las llega a producir. De momento me compensa intentar entender a Kate
Moss o eso creo o a lo mejor solo busco volver a tirrmela yo qu s! Carpe diem, Lenny
Kravitz.
Con todos estos pensamientos agolpados en mi mente me quedo dormido y sueo con rizos rubios
hacindome cosquillas en mi tripa. No logro verla la cara, pero su pelo desperdigado por mi torso me
hace adivinar dnde est su boca, aunque, como todo sueo, hay algo que no cuadra. Realmente no
siento nada, pero s lo que est haciendo. Estoy totalmente excitado, pero a la vez frustrado. Es una
sensacin bastante rara El sonido del telfono me obliga a despertarme y abro los ojos con pesar
quiero que mi sueo dure ms. Cuando me doy cuenta tengo las sbanas mojadas. No me lo puedo
creer! Me he corrido en sueos como un adolescente! Aturdido, me levanto llevndome la sbana de
arriba para limpiarme y casi me mato cuando tropiezo con ella al intentar coger el mvil que est
cargando en la mesa de enfrente. Joder!
Dime Luis respondo cortante.
Qu pasa to?, tienes voz de cabreado.
No, me he tropezado y casi me la pego, eso es todo. El tpico domingo tonto qu te
cuentas?
Nada. Hannah me pregunta que qu hace con la ropa de Martina. Tiene un vestido y unos
zapatos que no sabe cmo devolvrselos.
Y por qu me preguntas a m? Intento disimular y no s si lo consigo.
Pues porque t te enrollaste con ella ayer. Casi me salta el corazn del pecho.
Cmo? Estoy en shock.
No te preocupes amigo, que no digo nada. Hannah me coment que os vio en el jardn, pero
ya sabes lo discretos que somos.
S, s ya veo. Espero que esto no sea lo tpico de te voy a contar una cosa que nadie ms
sabe y unos se lo cuentan a otros y bla bla bla.
Que no! oigo que se parte de risa al otro lado del telfono y yo me contagio. En serio,
creme. Pues lo que te iba diciendo
Y a John ni una palabra! Vuelve a rerse. Que quiero comentrselo yo.
Que s joder, reljate. Que te has enrollado con Martina, no con Letizia Ortiz, coo!
Si t supieras La sombra de Malena planea sobre mi cabeza y me la imagino como
Medusa. Vale, si cuento con vuestra discrecin, la recoger esta semana. Seguramente la ver para
el finde.
Ok. Qu tal vas? Mucho curro? Me encantan las simplicidades de Luis. Es un tipo sin
ningn tipo de enrevesamiento.
Maana empiezo con los finales. Hoy voy a aprovechar para hacer el vago, porque me espera
una semana buena. Pensar en Martina me hace sonrer.
Vale, pues nimo to y ya sabes suspndeles a todos! Siempre me hace el mismo
comentario.
En ello estoy, cada vez explico peor para lograrlo Bueno t, dale un beso a Hannah de mi
parte y ya sabes
Que s que ni una palabra. No te pongas pesado que no eres tan importante. Adis
caraculo!
Adis gilipollas!
Vale, s, quiz esta manera de hablarnos es muy infantil por nuestra parte, pero siempre hace que nos
quedemos con sensacin de buen rollo despus de colgar. Mi amigo mola y no me complica la vida;
no como la pelirroja picapleitos.
De lunes a mircoles no me acuesto antes de la una de la maana. Me paso las tardes corrigiendo y
haciendo medias para obtener cuanto antes las notas finales de mis alumnos, y as quedarme libre para
el fin de semana. Por suerte, un gran porcentaje aprueba, lo que es una satisfaccin para m. Me
encanta mi trabajo. Estamos a las puertas del verano y necesito las vacaciones como respirar.
Realmente este ao me encuentro agotado debe ser la edad.
El jueves, ya ms tranquilo, decido escribir a Martina. No he tenido noticias de ella desde el sbado y
quedamos en que me dira el nmero de vuelo para coger el billete. Por un momento espero que no
haya cambiado de opinin
Nathan: Hola pequea, qu tal?
Kate: Regular estoy con gripe.
Nathan: Vaya, y cmo te encuentras?
Kate: Ya te he dicho que regular! No sabes leer?
Alzo las cejas en una expresin de asombro y miro de nuevo la pantalla. Es la misma Martina con la
que habl el sbado por la noche?
Nathan: No hace falta ser tan borde
Kate: Djame en paz, no necesito ningn sermn ahora mismo.
Nathan: Vale, ya lo capto. Cuando ests de mejor humor me escribes. Adis.
Aunque siento unas ganas tremendas de ponerle Adis gilipollas. Pero, cmo puede ser as de
borde? Qu coo le habr pasado? Entonces supongo que lo de este finde se ha ido a tomar por
culo o no? Joder, qu mierda! Ahora tengo que volver a escribirla.
Nathan: Perdona por molestarte, pero solo quiero saber si lo de este fin de semana se ha anulado. Es
para organizarme, sabes?
Kate: S. Haz tus planes que conmigo no tienes ninguno.
Qu mosca le ha picado? Ahora verdaderamente siento curiosidad y, a riesgo de salir escaldado,
decido insistir. Qu es lo peor que me puede pasar? Qu me ponga and arroba almohadilla?
Nathan: Puedo saber la razn de que de pronto ests as conmigo?
Kate: Tengo gripe, ya te lo he dicho.
Nathan: No te creo. Tiene que haber algo ms.
Kate: No tengo ningn compromiso contigo como para contarte mi vida.
Nathan: No, pero tenas una cita conmigo que has anulado y me gustara saber por qu.
Kate: La vida es as.
Nathan: Es Kylie, verdad?
Durante diez minutos no responde. Ah tengo la respuesta. Qu le debe Martina a esa ta como para
que sea tan complaciente con ella? La verdad es que es un misterio; no parece esa clase de chicas que
se dejan llevar Pero qu s yo si solo me la he tirado?
Nathan: He dado en el clavo. Cuando comiences a pensar por ti me llamas si quieres, mientras tanto
te puedes abstener para no volverme loco. Adis Martina.
Qu mierda! Esto es una maldita mierda!
Lanzo enfadado el mvil contra el sof y me voy a la cocina a abrirme una cerveza. Me la ha jugado
pero bien. Aqu me quedo comindome la olla como un gilipollas. Efectivamente, esta ta tena trampa
y he cado. Todo o nada y ha sido nada que mierda! Que te den, Martina!
CAPTULO 6
Sigo mirando el mvil sin creerme lo que acabo de hacer, mientras Malena me apremia para ayudarla
con la defensa de su caso. Por primera vez en la vida tengo ganas de llorar, pero no quiero
complicarme ms la vida. Estoy siendo totalmente desleal y cada da me siento peor por haber
incumplido el acuerdo. Una zorra mentirosa, eso es lo que soy. Cobarde y mentirosa. Mi amiga se
desvive por m y yo cmo se lo agradezco? enrollndome con el to que ms le ha gustado. Pero
frente a l jams admitira que ha dado en el clavo.
Cuando le coment que quera ir a ver a mis padres se anim a acompaarme sin pensar. Ella lo da
todo por m. En ese momento ya no supe qu hacer y acept gustosa su ofrecimiento. Adems, me dijo
que le vena bien despejarse para olvidarse de Nathan, que por primera vez le haban hecho mucho
dao Y yo qu? Buscando largarme con l. Soy una autntica hija de puta.
En cinco minutos salgo! le grito desde mi despacho. Necesito cerrar esto de una vez.
Martina: Te equivocas. No intentes entender mi vida. Djalo estar.
Lenny: La que no entiende su propia vida eres t. Una pena Yo ya lo he dejado estar hace un rato.
Martina: Me alegro. Espero que te vaya bien.
Lenny: Igualmente.
<<No llores, no llores, no llores! Malena lo notar y te interrogar hasta que te contradigas y te pille.
Te acabar pillando por mentirosa y patosa>>. Me muerdo el puo para contener la rabia que siento,
pero la sensacin de asfixia me ahoga. Parece que tengo una losa sobre mi pecho. <<Pero esto es por
l, por ella o por m? Dios por qu me est pasando esto?>>. Sin respuesta que darme a m misma,
intento recomponerme y salir al saln para despejarme. Cmo no, Malena se alarma al verme.
Qu te ha pasado? Irremediablemente, comienzo a soltar todas las lgrimas que tena
contenidas. Martina, no me asustes. Sintate y cuntame qu ocurre. Por un momento se me pasa
por la cabeza contarle la verdad; pero pienso en las consecuencias y decido inventarme algo.
He vuelto a discutir con mi familia. Ya no vamos a ningn lado este fin de semana. Las
discusiones con ellos han sido tan tpicas, que es un argumento que no levanta ninguna sospecha.
Bueno, no pasa nada cario, sabes cmo son. Aunque te quieren, no saben valorar todo lo
que has conseguido. Ya sabes que es ms envidia que otra cosa me dice limpindome las lgrimas
de las mejillas. Anda, djame a m con esto y vete a relajarte, yo me encargo.
Pero es mucho Malena, te va a llevar todo el da
No me importa. Lo ms importante es que t ests bien. Vamos!, es una orden. Con una
sonrisa me da una palmada en el culo. Antes de irme me giro.
Gracias nena, gracias por todo lo que haces por m.
M&M, recuerdas? dice levantando su mueca. A nuestros pies! Ese comentario me
hace rer y me voy mucho ms contenta.
Salgo a la terraza con una CocaCola light y me enciendo un cigarro ahora queda lo peor, decirle a
mi madre que no voy.
Hola cario! Has sacado ya los billetes? Tanto entusiasmo me rompe el corazn.
Hola mam digo fingiendo voz de enferma.
Qu te pasa, hija?
No puedo ir, tengo gripe.
Vaya Martina, siempre te pasa algo para no venir comenta melanclicamente.
No empieces mam, yo no puedo controlar cundo me pongo mala y cundo no.
Haban venido tus primos de Valencia para verte Te habamos preparado una fiesta
sorpresa en el restaurante. Me siento cada vez peor.
Lo siento, de verdad que lo siento Si lo pudiera cambiar lo hara, ya lo sabes. <<Claro
que sabe que no son mi prioridad, por eso se enfadan conmigo>>.
Bueno hija, qu le vamos a hacer. Otra vez ser.
S, cuando me encuentre mejor. Un beso mam.
Un beso hija, cudate.
Lo peor de todo es que me estoy creyendo mi propia mentira y me siento enferma; pero lo que tengo
enfermo y podrido es el corazn. Por primera vez comienzo a plantearme adnde me lleva esto. Me
duele pensar que con 30 aos no soy capaz de llevar las riendas de mi vida, pero es que,
efectivamente, no puedo. Me he dejado enredar en una madeja de la que no s salir yo sola, pero no
tengo a nadie para pedirle ayuda. Con Malena no puedo hablar de esto, porque es a la primera que he
engaado y despus de ella no tengo a nadie. Todo mi mundo se ha centrado en ella por qu? Yo
tena otras amigas y poco a poco las fui dejando de lado. La verdad es que no s muy bien cmo he
acabado as. Estoy completamente sola. Y si voy a un psiclogo? Puede que funcione, aunque va a
pensar que soy una puta mentirosa. No, definitivamente no.
Al final, opto por dejar de pensar en ello y olvidarme de darle tantas vueltas a la cabeza. Vaya mierda
de da que he pasado, espero levantarme maana mejor.
El viernes, segn salimos del bufete, decidimos irnos a un spa antes de salir esta noche al Feeling.
Unos chorros relajantes, un bao de algas, una sauna y finalizar con un masaje desde la cabeza hasta
los dedos de los pies reviven a un muerto. Me visto para matar; as, mientras ligo con alguien, me
olvido de las historias del da anterior. No necesito ms mierda en mi cabeza.
Hoy la discoteca est especialmente llena. Vamos directas a la barra de Alonso y nos da la bienvenida
con su habitual morreo. Ya empezamos a divertirnos. El momento lgido de la noche llega cuando
suena por los altavoces I love it, de Icona Pop.
Nuestra cancin! me grita Malena.
Emocionadas, salimos corriendo a la pista, cada una con un tercio de cerveza, y nos subimos a una
tarima. Comenzamos a saltar y cantarla a gritos, utilizando la botella como micrfono. La gente se
anima a nuestro alrededor y al final tenemos a toda la pista dando botes gritando I dont care!!! I
love it!!!. No vemos las caras de la gente, solo las luces intermitentes les iluminan durante dcimas
de segundo, pero sentimos cmo todo vibra bajo nuestros pies. A la gente le hace feliz nuestra cancin
y por ello me siento absurdamente contenta.
Cuando termina, unos chicos nos ayudan a bajar y les sonremos agradecidas. Hemos sido las estrellas
del Feeling durante esos minutos. Veo cmo Malena ha echado el lazo a un moreno de pelo largo y a
m me toca aguantar a su amigo el feo. En todos los grupos siempre hay un guapo acompaado de
un feo debe ser una cuestin de equilibrio de fuerzas. Y luego siempre pasa que el feo es
majsimo y una piensa: Qu lstima que seas tan feo.
Abandono a mi acompaante con disimulo y me encamino sola a la barra de Alonso de nuevo. l se
parte de risa en cuanto me ve.
Os deberan contratar de gogs La que habis liado en un momento!
S, ha estado bien le contesto guindole un ojo y dando un sorbo a mi cerveza.
Y la Furia pelirroja? me pregunta refirindose a Malena.
Pues por ah anda, se ha perdido con un moreno.
Y t hoy no te pierdes con nadie?
Mmmmm, no creo que sea hoy el da digo algo desanimada.
A ti te pasa algo a m no me engaas. Apunta su ndice hacia m de forma inquisitiva.
Qu me va a pasar? le respondo con mi mejor sonrisa ensayada y enlatada.
No hay nadie en ese corazoncito?
Venga ya! Sabes que nunca hay nadie en este corazoncito digo imitando su tonillo.
Si t lo dices Y se gira dejndome con tres palmos de narices.
<<Ay madre, tanto se me nota? Pues s, estoy asustada porque desde que he entrado no he dejado que
nadie se me acerque y he huido de cualquier humano con pene que pretendiera hacer algo con l.
Verdaderamente estoy en problemas>>.
Malena se acerca a m con una sonrisa juguetona y la conozco tanto que ya s lo que me va a decir.
Maaaarti Eso lo dice cuando me va a dejar colgada y sola en la discoteca. Te
importa que me vaya con ese morenazo?
No Malena, ya sabes que no me importa <<O s? por qu no le digo que no me gusta
quedarme sola cuando he salido con ella?>>.
Te coges luego un taxi? me pregunta mimosa.
Qu remedio!, no me voy a ir andando. Su boca se abre espantada.
Ests enfadada?! No me digas que no porque lo he notado en tu voz.
Bueno, quizs un poco Malena. Explcame t ahora qu hago aqu sola.
Sera la primera vez Recuerda las veces que t te has ido con alguien y yo estaba en la
misma situacin. <<Bien, tambin tiene razn, ya no tengo motivos para enfadarme>>; de nuevo
ella me avasalla.
Tienes razn, Malena. Hoy estoy algo rara, no me hagas caso digo quitando importancia
con la mano. Ve con tu morenazo, anda. Irs a casa?
S, me lo llevo a casa. Me abraza y me dice: Eres la mejor amiga!, lo sabes, verdad?
T tambin respondo con una sonrisa. <<En serio pienso eso?>> . Psalo bien y
recuerda
A nuestros pies! dice acabando nuestra frase habitual.
Se va por donde ha venido dando saltitos y yo me quedo con cara de gilipollas apoyada en la barra.
Vale ahora me dedicar a qu coo voy a hacer ahora? Poner copas a lo mejor me distrae.
Alonso, puedo meterme un rato contigo en la barra?
Claro que s, princesa. En el momento que entres vendrn los tos buenorros.
El comentario me hace rer y me deslizo por debajo para pasar por una pequea puerta. Una vez dentro
y metida en faena, mi humor mejora. Las bromas de Alonso me ayudan a evadirme y hablo con
algunos clientes que conozco y con los que me llevo bien. El Feeling est hasta arriba y el
encargado agradece mi colaboracin. As mato dos pjaros de un tiro: me distraigo y tengo copas
gratis.
No saba que trabajaras aqu me dice una voz familiar mientras estoy agachada colocando
los refrescos. Al levantar la cabeza me encuentro con Luis e instintivamente miro a su alrededor a ver
si encuentro a Nathan.
Hola Luis le saludo con mi ya habitual sonrisa enlatada. No trabajo, solo les echo una
mano. Qu haces por aqu?
He venido con Nathan le he engaado para salir hoy. Ese comentario me pone alerta
le ha engaado porque l no quera salir? Est mal por m?
Ah, muy bien. Qu tal Hannah? le pregunto para cambiar de tema.
Genial, est con sus amigas en La Latina. A ella no le gusta el rollo discotecas, ya la
conoces.
Y cada uno sals por vuestra cuenta? Me resulta muy extrao este tipo de relacin.
Claro, si la cuestin es divertirnos. Por qu no? Pues tiene razn por qu no? Malena
habra puesto el grito en el cielo
Pues s qu quieres beber?
Si no te importa, me voy a esperar a que venga Nathan para pedir. El corazn se me
desboca. Creo que ha ido un momento al bao.
Ah, vale, sin problema. No s dnde meterme
Con una obsesin absoluta, no hago ms que mirar al pasillo de los baos. En cualquier momento
aparecer por ah y yo me morir. Me tiemblan las piernas y creo que me voy a caer de bruces en
cualquier momento. Me obligo a mantener la calma, pero no lo consigo, sobre todo cuando le veo
cruzar la puerta. Es tan alto que se tiene que agachar. Qu guapo es! Podra estar horas observndole.
Eso no solo lo pienso yo, alrededor hay una cuantas chicas babeando por l y me entran ganas de
espantarlas como moscas. Largo de aqu, zorras!
Cuando me ve se queda quieto. Gira su cabeza buscando otro camino y, cuando se dispone a irse por
otro lado, Luis le llama para que se acerque. Resopla visiblemente molesto con su amigo y,
renqueando, viene hacia mi barra. Siento una punzada de decepcin al saber que no quera acercarse
<<Qu queras imbcil? Te has portado con l como una cabrona sin escrpulos!>>.
Hola me dice escuetamente.
Hola Nathan, qu tal ests? intento ser lo ms amigable posible.
Bien. Por lo que veo tu gripe bien, no? Me quedo cortada y bajo la mirada.
No s qu estoy haciendo si realmente quiero estar con l. Es ms, me muero por estar con l.
Debera dejar de pensar en mi amiga y comenzar a centrarme un poco en m? Me merezco disfrutar,
joder! Adems ella hoy no est. Luis, sutilmente, se acaba de ir al bao, dejndonos a los dos solos
Ahora o nunca, Martina. Jugatela. Qu es lo peor que podra pasar? Titubeando, saco fuerzas para
hablar.
Yo yo siento mucho lo que te dije No soy capaz de mirarle y le hablo mientras paso
una bayeta por la barra.
A qu parte exactamente? Uff, va a ser duro de roer.
A todo lo que te dije ayer a no irme contigo a Alicante a no enfrentarme a Malena
Hago un gesto con las manos que denota la cantidad de cosas que hago y que no alcanzo a comprender
ni yo misma.
Esas son muchas cosas
Demasiadas. No s muy bien qu quiero bueno, s lo s pero me cuesta tener valor para
hacer las cosas.
Y qu es lo que quieres? A travs de su voz percibo un atisbo de sonrisa y eso me da
fuerza para levantar la vista. Ah est su mirada, atravesndome sin piedad. Desnudndome con su
intensidad.
Quiero quiero volver a estar contigo. Hala!, ya lo he dicho. Se me van a descolocar las
costillas de los martilleos de mi corazn. Jams he estado tan nerviosa. Me tiemblan las manos y
aprieto el pao entre mis dedos para que no se me note demasiado. Veo cmo su boca dibuja una gran
sonrisa y por un momento me relajo.
Qu te ha hecho el pao para que lo quieras estrangular? pregunta divertido sealando
mis manos. Rpidamente lo suelto y de repente no s qu hacer con las manos. Las pongo inquieta
sobre las caderas, luego sobre la barra y finalmente lanzo un pequeo suspiro de frustracin. Veo que
le tengo bastante entretenido.
No me dices nada? le pregunto inquieta. Tener la barra entre nosotros me da seguridad.
As me puedo agachar y esconder si las cosas no van bien.
Qu esperas que te diga? responde sin cambiar el gesto.
Por qu respondes con una pregunta? aado exasperada y cambio el peso del cuerpo de
un pie a otro.
Porque t haces lo mismo Cuando voy a quejarme, me corta. Me gustara hablar
contigo, pero no con una barra en medio.
De acuerdo, voy a decirle a Alonso que salgo De pronto niega con una sonrisa.
Ahora no. Ahora me voy a tomar una copa con mi amigo. Hace un gesto con la cabeza
mientras Luis se acerca. Si eso luego hablamos, ya te aviso yo Y como si tal cosa, me da la
espalda.
Me quedo tan cortada que es como si me hubieran echado un cubo de hielos por la cabeza. Est
jugando conmigo. Se est riendo de m la nica persona con la que me he mostrado sincera Qu
coo se supone que tengo que hacer ahora? Le dan por culo? Realmente quiero que le den por
culo?... o espero como una boba a que a l le apetezca hablar conmigo. Por segundo da consecutivo
tengo muchas ganas de llorar pero esta vez me siento humillada ms que dolida. No es justo, joder!
Me he disculpado con l! Cabreada como nunca, lanzo el trapo a un lado de la barra y me dispongo a
largarme de la discoteca. Ya he tenido bastante por hoy. Luis se queda pasmado ante mi reaccin y yo
salgo de la barra sin despedirme de nadie. Aparto a empujones a la gente, que parece que se han unido
tambin en mi contra para formar un tapn en la puerta, y con ciertos problemas consigo salir a las
escaleras que conducen a la salida. Mientras subo, un brazo me atrapa por la cintura y en ese momento
libero mi frustracin, llorando desconsoladamente. No hace falta que le mire, siento que es l.
Oye, oye, Martina tranquila, vale? su tono de voz se torna preocupado pues que se
joda!
Sultame! Intento liberarme pero no lo logro. Su cuerpo es mucho ms fuerte que el mo
. Djame en paz, no quiero verte ms!
Pues no te voy a soltar hasta que me mires.
Pues gritar y a ti te echarn a la calle.
Pues ir a tu casa a buscarte.
Pues Me quedo contrariada no sers capaz.
Venga, en serio, no seas cabezota
Cabezota? Esta vez s que le miro a los ojos y veo que destilan ternura y preocupacin.
Me has humillado gilipollas! Me has dado confianza hacindome creer que eres la nica persona con
la que puedo hablar con sinceridad y me has engaado. Me he sentido peor que si me hubieras soltado
una bofetada en mitad de la pista! Me he sentido como si me hubieras escupido a la cara y!
Sin saber cmo, de pronto tengo sus labios en mi boca y, con una delicadeza que no conozco,
comienza a besarme. En un principio pienso en apartarme, pero estoy muy cansada y me rindo a l.
Dejo que su lengua entre en mi boca y l sujeta mi cabeza con cuidado entre sus manos. Casi como si
estuviera tratando con un objeto frgil, sus movimientos son cuidados y dulces, hecho que agradezco
en este momento, pues me siento bastante vulnerable. Con los pulgares limpia mis ojos de lgrimas y
me besa en las mejillas y los prpados.
Lo siento, pequea, de verdad que lo siento dice con semblante abatido. Me pareca
divertido darte una leccin y me he equivocado por completo.
Deja las lecciones para tus alumnos, por favor observo cmo sonre y me acerca a su
cuerpo, quedando presa entre un montn de msculos que todava no conozco y me encantara
descubrir. Me reparte decenas de besos por mi pelo que, junto con un leve movimiento de vaivn, hace
que me relaje. Cmo puedo negar las sensaciones que me produce este hombre?
Vienes a mi casa? me pregunta algo temeroso. Yo asiento con un gesto y, l emocionado
y yo derrotada, me vuelve a besar con ternura.
CAPTULO 7
<<He estado a punto de cagarla pero bien Qu demonios tena en la cabeza?>>, pienso mientras
nos acercamos a mi coche. Por un momento me he sentido tan culpable que me hubiera dado yo
mismo un puetazo. Ahora est aqu, dispuesta a venir a mi casa conmigo Por primera vez en la
vida tengo muchas dudas. Nunca me haba planteado demasiadas cosas cuando me he enrollado con
una ta, pero esta esta tiene algo que me hace querer estar pegado a ella como una ventosa.
Tengo mi brazo rodeando sus hombros y es tan tan pequea y delicada como una flor <<He
dicho yo eso? Cundo me he vuelto as de cursi? Vale pues jodidamente pequea y delicada. S,
ahora me siento mejor>>. Hace un intento de querer apoyar su cabeza en mi hombro, pero no llega.
Eso me hace bastante gracia. Pero ha conseguido acoplarse en el hueco entre mi pecho y mi brazo y
Uauuu!, acaba de rodearme la cintura con los brazos. Mmmmmm, s nena, achchame
Nos quedan unos quince metros para llegar al coche y ya siento que se tenga que despegar de m tan
pronto. Tener su cuerpecito tan prximo me gusta No s por qu, pero de alguna manera me siento
protector con ella. Cuando la he visto llorar me he descolocado por completo. Solo de pensar que he
sido el culpable de haberla hecho sufrir me pongo hasta nervioso de pensarlo. Aunque en realidad se
lo mereca, se port fatal conmigo ay, pobre! La verdad es que me ha dado mucha pena
Por qu te compraste un coche color rojo? me pregunta de repente mirndome desde
abajo. No s a qu se refiere
Por qu no?
Es un color de chicas dice con una maliciosa sonrisa juguetona.
De chicas? me entra la risa. No te confundas, es para atraer a las chicas le digo
para picarla.
Un Megane rojo no atrae a las chicas un Ferrari rojo s Y se mete en el coche
dejndome plantado y con cara de imbcil. Ser tonta la ta?
Cuando reacciono y entro, veo cmo aguanta una risilla. Tiene la mano apoyada en el mentn y mira
por la ventanilla con aire despreocupado.
Muy graciosa El Ferrari lo tengo en el taller y este es de sustitucin. Por fin comienza a
carcajearse.
Lo siento, era broma, no lo he podido evitar. Sus ojos brillan divertidos.
La risa te va a entrar cuando te tenga en la cama De pronto su mandbula se descuelga y
me mira ojipltica. Donde las dan las toman, Rubita Ahora soy yo el que me parto mientras
arranco mi maravilloso Megan rojo que no tiene nada que envidiar a Bueno, vale arranco mi
Megan rojo y punto.
En menos de media hora hemos llegado a mi casa. Durante el recorrido hemos hablado de sus gustos
por la lectura, por la msica, dnde estudi En realidad no me ha dejado hablar mucho, pero no me
importa; me encanta escucharla as de relajada. Normalmente parece estirada y distante, pero ahora es
natural y encantadora. Me alegra pensar que conmigo no necesita esa pose de destrozahombres
Ya veremos.
Nos acercamos al portal y reconozco que estoy nervioso No me acuerdo de la ltima vez que traje a
una chica Ah, s! Noelia mejor olvidarla. Tena ms silicona que toda la obra de mi casa junta y
no poda ser ms estpida.
Seorita le digo abrindole la puerta de casa e indicndole caballerosamente que puede
pasar.
Caballero hace una pequea reverencia y entra sin dudar. La observo caminar y mirar
con detalle todos los rincones de mi saln. Cojo aire y lo suelto de golpe. <<Bien. Aqu estamos. All
vamos, Lenny Joder, qu nervios coo! Pero qu te pasa?!>>.
Quieres tomar algo? Te pongo una copa? A lo mejor si voy a la cocina puedo calmarme
un poco.
Vale, ron con CocaCola Este eres t? me pregunta cogiendo una foto de mi poca de
instituto.
Ehhh, s Mierda! Se me olvid guardar esa foto en el lbum. Se llevaba el pelo afro
en Estados Unidos Veo cmo aprieta las comisuras de la boca intentando evitar rerse sin
conseguirlo. Puedes rerte si quieres aado resignado y me voy a la cocina muerto de la
vergenza, mientras la escucho descojonarse.
Cuntos aos tenas aqu? Me horrorizo al ver que me persigue con la puetera foto.
No s quince o as t nunca has tenido una poca mala?
Oh, s En el instituto tambin dice mientras se encarama a la encimera de un salto y se
queda sentada en ella con total confianza. Dios me la follara ah mismo.
Y qu tenas? Culo gordo?, aparato?, dos cabezas? Me acerco a ella sutilmente.
Hummmm, era larguirucha. Cuando ve que me aproximo abre sus piernas con
tranquilidad para que siga avanzando hacia ella. Noto el primer tirn en la entrepierna.
Larguirucha?, t? Me ro alojndome descaradamente entre sus muslos.
S creo que me crecieron antes los brazos que las piernas dice elevando sus cejas en un
gesto de asombro.
Pues desde luego ahora tienes unas piernas preciosas No puedo evitar acariciarlas. Noto
cmo ella se remueve sobre mi encimera.
Bueno Acerca sus manos a mi pecho y comienza a desabrocharme la camisa no me
puedo quejar. Tengo que contenerme si no quiero convertirme en un perro salido. Me est poniendo
a cien.
Y qu otras cosas tenas raras? le digo mientras acerco mi pelvis a su sexo y avanzo
con las manos por su culo.
Pues contina con los botones sin apartar los ojos de m. La boca tena los dientes
montados. Arruga su nariz mientras me lo dice y me dan ganas de comrmela a mordiscos.
Ah s? Le cojo el mentn entre mis dedos ndice y pulgar. Ella reacciona
humedecindose los labios. Pues ahora tu boca tambin es preciosa y muy tentadora. Poco a poco
me voy acercando y con mucho cuidado le rozo los labios con los mos. Ese pequeo roce hace que me
ponga ms duro si cabe.
Con descaro, Martina se lanza a besarme mientras me desliza la camisa por mis brazos con
desesperacin. Esa era la chispa que faltaba para detonar el cmulo de testosterona que tena
almacenado en mi cuerpo y desata la locura. Subo su vestido hasta la cintura; ella levanta su precioso
culo y rpidamente le bajo las bragas. Podra follrmela ya, pero quiero verla desnuda. Deslizo mi
mano hacia su sexo y lo encuentro totalmente empapado. Esa sensacin hace que mis besos sean cada
vez ms primitivos y profundos; tengo la impresin de estar a punto de reventar. Agarro su pelo con
fuerza y ella suelta un gemido, mientras introduzco un dedo en su vagina. Su cara oh Dios su cara
con los ojos cerrados y la boca entreabierta es la viva imagen del xtasis en estado puro. Quiero que
siga gimiendo, as que muevo el dedo en su interior, tocando su suave piel apetitosamente resbaladiza.
Su pequeo cuerpo se agita, mientras mi boca se come la suya con absoluta ansiedad. Jadea, y hace
que me suba la tensin. <<Vamos nena sigue movindote por m>>. Como quiero que se vuelva
loca, introduzco un segundo dedo. Mi mano juega con ella presionando su cltoris y mientras, clava
sus uas en mis brazos. Me duele me excita. Encorvo los dedos hacia m y localizo el punto exacto
dentro de ella. Noto que se retuerce y cada vez la piel resbala con mayor facilidad. Mis dedos siguen
torturndola y tengo que apretar los dientes para aguantar las ganas de penetrarla yo. Eso ser despus.
De momento ella est envuelta de una turbadora imagen totalmente ertica y sensual con la que parece
disfrutar. Siento que los msculos internos me presionan la mano y anticipo la culminacin de tanta
excitacin. Acelero las acometidas y sus jadeos pasan a ser pequeos gritos lanzados directos a mi
boca. Me los bebo como si fuera agua en el desierto y la acompao con mi cuerpo de manera
protectora mientras comienza a temblar. Pequeas sacudidas la obligan a tensarse, a la vez que mis
labios acarician la piel de su cuello y ella gime consumida en el jugo de su orgasmo. Percibo su fluido
recorriendo la palma de mi mano y, de alguna manera, me siento orgulloso de habrselo provocado yo.
Me encanta. Relajada, apoya su cabeza en mi pecho y acaricio su pelo con suavidad. Huele
especialmente bien ahora huele a ella mezclado con sexo Mmmmm sublime. Ha sido
maravilloso, brillante toda una revelacin.
Pero aqu no ha terminado todo. Necesito liberar la tensin que me ha producido verla correrse en mi
piel. Por eso, paso mi mano bajo sus rodillas y la cojo en brazos. Me sorprende lo poco que pesa. Ella
da un respingo y se agarra a mi cuello con una sonrisa lasciva. Sus ojos siguen impregnados del brillo
del orgasmo y siento como si mil feromonas volaran a nuestro alrededor como lucirnagas. No veo, no
huelo, no oigo, no toco, ni saboreo otra cosa que no sea ella. Reconozco que estoy completamente
embriagado.
Avanzo por el saln con Martina a cuestas hasta llegar a la habitacin. Observo cmo ella vuelve a
curiosear, pero enseguida se centra en m de nuevo. Se libera de mis brazos y, agarrndome de la
cinturilla de los vaqueros, me lleva hasta el borde de la cama. Yo le sigo como un marinero
hipnotizado por una preciosa sirena. Se detiene frente a m y me agarra las muecas. Las levanta
observando los tatuajes de mis antebrazos y sonre satisfecha?... la verdad es que no lo s. Su
cabello rubio est despeinado y ella tiene un ligero rubor en las mejillas sexy; no tengo otra palabra.
Da un paso hacia atrs y me mira a travs de sus pestaas. Con calma se lleva las manos a un lado y
veo cmo baja con desesperante lentitud la cremallera de su vestido mientras se muerde el labio
deliberadamente. Siento los testculos cada vez ms duros, pero saco fuerzas para seguir mirando
este espectculo no tiene precio. Su ropa se desliza por su cuerpo y por un momento la envidio; yo
quiero hacer lo mismo. Tengo ante m una preciosidad de piel acaramelada y perfecta, con un
sujetador negro de lo ms sugerente. El resto est perfectamente depilado y dispuesto a darme la
bienvenida. Creo que estoy salivando y me obligo a cerrar la boca. Hbilmente suelta el enganche y el
sujetador se rene en el suelo con el resto de la ropa. No puedo ms y me lanzo a ella. Me acerco
sintindome un lobo a punto de comerse a un cordero. Le devoro sus carnosos labios mientras tumbo
su cuerpo en la cama quiz con excesiva efusividad, lo reconozco pero ahora mismo no puedo ser
dueo de mis actos. Estoy pensando con mi segundo cerebro. No parece que a ella le moleste; aparenta
sentirse excitada, eso es buena seal.
Lo primero que necesito es saborear sus pechos Ni grandes, ni pequeos son perfectos. No como
la exageracin que tiene su amiga No, estos tienen el tamao ideal. Barro con mi lengua su contorno
y ella vuelve a gemir mientras se mueve inquieta bajo mi cuerpo. Exquisitos. Despus de catar la
periferia me voy aproximando al plato principal. Me entretengo con su pezn; lo beso y lo chupo,
terminando por morderlo ligeramente. Sabe tan diferente a todo lo dems que he probado que no me
quiero separar de sus tetas. Me estn enloqueciendo. Mientras, mis manos acarician la piel de su tripa
y su cadera, que siento clida y baada por una finsima capa de sudor. Eso tambin lo quiero probar.
Con pesar abandono sus pechos para descender tranquilamente hacia abajo. Oigo cmo suspira
profundamente y s que esto tambin le excita, con lo cual avanzo confiado. Me recreo en su ombligo,
que se encuentra anidado en un vientre liso y seductor. Y contino haciendo mi propio slalom entre
sus piernas, que abro sin miramientos cogindola de los muslos. Ella se estremece ante mi brusco
gesto y por un momento pienso que ha sentido pudor, pero noto que se vuelve a relajar,
abandonndose a mis caricias. Prometindome no volver a ser tan burro, me vuelvo a concentrar en
ella. Su sexo es como una fruta prohibida abierta solo para m. Brillante y rociada de su propio jugo,
me llama, me reclama y me pide que juegue con l cmo negarme? Sus piernas tiemblan al
adentrar mi lengua entre sus suculentos pliegues. Levanta sus caderas retorcindose y yo la agarro del
culo para mantenerla junto a mis labios. Degusto desde el cltoris al perineo, no me quiero perder
ningn manjar. Vuelvo a su cltoris y ah juego dando breves toques a ese trocito de carne ahora
hinchado, para pasar a absorberlo entre mis labios. Frustrada, clava sus dedos en mi pelo y me lo
agarra con fuerza. Eso me pone demasiado cachondo. <<Hasta aqu has llegado, Rubita>>.
Me separo de ella y veo que tiene una ligera expresin de desconcierto. Con rapidez, me deshago de
los zapatos, los calcetines y mis pantalones junto con los calzoncillos. Sonre y contina con las
piernas abiertas otra buena seal. Cojo un preservativo de la mesilla y me lo pongo en tiempo
rcord.
Avanzo a cuatro patas por encima de su cuerpo, mientras doy un repaso con mi boca a todas las zonas
que he degustado por si se me ha olvidado algn detalle, y siento que solo me falta rugir. Una vez que
estoy bien colocado, vuelvo a besarla con desesperacin. Qu tendrn sus labios que me vuelven
loco? Mantengo mi cuerpo sostenido por mis brazos para no aplastarla. Siento un calor tremendo que
me embarga y no puedo demorar ms el momento de poseerla. Sito la punta en su entrada y empujo
lentamente con mis caderas. Ella se desmadeja bajo mi cuerpo y se abre completamente a m,
gimiendo de placer. No hay resistencia, pero s noto que su hmeda vagina succiona mi pene de forma
que tengo que hacer grandes esfuerzos para no correrme ya. Con las medidas tomadas, pruebo a
empujar ms fuerte y ella lo acepta totalmente inundada en un canto sexual de gritos en mi odo. Me
enreda con sus piernas y clava sus talones en mi culo para hacer fuerza contra mi cuerpo. S esto es
el paraso; tengo a mi propia Eva comindose la manzana a grandes mordiscos. Contino
embistindola sin piedad y ella eleva sus manos sobre su cabeza, agarrndose al cabecero. La escena
que presencio no puede ser ms tentadora, pues ahora sus pezones me apuntan y hasta me intimidan.
Como es de esperar, bajo la cabeza para atraparlos entre mis dientes y darles su merecido. Mis caderas
siguen golpeando de manera implacable ese pequeo cuerpo que destila erotismo por cada rincn. Sus
nudillos ya estn blancos de la presin y echa su cabeza hacia atrs, totalmente entregada y rendida a
m. En estos momentos me est estrangulando con su vagina, pero yo sigo invadiendo su interior una y
otra vez. Una y otra, una y otra Quiero castigarla, aunque no s por qu. Quiero que grite porque no
pueda soportar el tamao de mi miembro dentro de ella. Una y otra vez, una y otra vez Quiero que
est dolorida durante al menos una semana por mi culpa. Quiero que todo esto sea mo. Sigo
clavndome en ella sin piedad. El sudor se ha alojado entre sus tetas y la imagen me abruma. Sus
pezones estn disparados y bailan al ritmo de mis embestidas. Vamos nena vamos! Dime que no
lo soportas! Hazme ver tu lmite
Ahhhhh, Nathan! grita elevando sus pechos al cielo.
Me encanta follarte, nena vamos! Su vagina es como un excitante refugio para mi
cuerpo y solo quiero saquearla una y otra vez.
No aguanto ms! Sigue, sigue! Sus ojos apretados y las contracciones cada vez ms
rpidas de su sexo anuncian que se va a desencadenar el final. Acelero las penetraciones y tengo la
sensacin de que va a morir empalada.
Vamos nena, djate ir!... Crrete! Yo necesito lo mismo, pero jams antes que ella. Voy
a explotar como una bomba nuclear de seguir as.
Abandonada al placer, deja escapar el aire contenido en un sonido que me gustara escuchar toda mi
vida y, elevando el culo y su espalda, convulsiona mordindose el labio inferior sobre mis sbanas.
Me succiona el pene como nunca antes lo haba sentido y me arrastra con ella. Aprieto los dientes y
libero el semen contenido dentro de su clida vagina. Percibo cada descarga con los pelos de punta,
cada gota de mis fluidos dedicados a ella, como un animal satisfecho de haber devorado a su presa. Es
ms; de no ser por el maldito condn interpretara este momento como una primitiva marcacin de mi
territorio. Eres para m, nena. Todo tu cuerpo es mo. Despiertas en m los sentimientos ms primarios
y me conviertes en un hombre elemental y brbaro, fuera de los cnones diseados para satisfacer las
buenas maneras.
Mis brazos se relajan y me dejo caer a su lado. Agotado. Exhausto. Envuelto en la resaca de un
orgasmo demoledor. La observo de cerca y me asusto de los sentimientos que despierta en m. Ella
intenta respirar con normalidad, mientras me mira de reojo boca arriba. Su excitante piel est
ligeramente enrojecida y rociada en sudor. Los sensuales labios hinchados se curvan hacia arriba
indicndome que se encuentra a gusto y, de alguna manera presuntuosa, me siento complacido y
satisfecho de que sea as. Ella es bella bella y sensual. Un cctel explosivo.
Ha aprobado usted con nota, profesor me dice girando su cuerpo hacia m.
Ah s? Me encanta que me lo diga. Tengo un ataque de ego en estos momentos. Y
exactamente qu nota me ha puesto? le pregunto divertido.
Del cero al diez?
Aj.
Bien pues en el examen de polvos para recordar ha obtenido un ocho. S que es
absurdamente incomprensible, pero quiero ms nota y hago un mohn. Ella me mira sorprendida por
mi expresin y se re.
Necesito su horario de tutoras para saber cmo llegar al diez soy un hombre muy
competitivo le digo con fingida seriedad, acaricindole los labios con mis dedos.
Pues djame pensar comenta coqueta, pero creo que justo ahora me han anulado una
cita y tengo un momento para usted Esas palabras vuelven a ejercer un efecto en mi cuerpo y
siento de nuevo una ereccin que me reclama. De un gesto me vuelvo a tumbar sobre ella y le apreso
las muecas sobre el colchn. Vuelve el hombre de Cromagnon
Buenas noches profesora, vena a ver si esta vez me merezco un diez
CAPTULO 8
Saco las llaves de casa sin poder deshacerme de la sonrisa tonta que se ha instalado en mi cara. La
excesiva luz del da se me hace extraa sin haber pegado ojo en toda la noche y siento el cuerpo como
si hubiera corrido una maratn. Lenny Kravitz no ha sacado un diez ha sacado un doce por lo
menos! Cuando abro la puerta, me encuentro a Malena sentada en el sof y me inunda la angustia.
Buenos das saludo algo avergonzada. Doy gracias por haber convencido a Nathan de que
no me acompaara en coche.
Y me pregunto yo se puede saber dnde has estado? Te he estado llamando al mvil.
Extraada, lo saco del bolso y me doy cuenta de que no tengo batera.
Muri digo agitndolo frente a ella. Qu tal t? le pregunto para cambiar de tema
descaradamente.
Antes t me dice algo ms relajada y yo me echo a temblar. Con quin te has perdido?
interroga juguetona.
Ehhh con uno que conoc. Estaba de paso este fin de semana por Madrid y hoy volva a
Santiago Una pena porque era de los buenos. Confo que mi versin suene creble.
Y has ido a su casa? Por qu no te lo has trado aqu?
A su casa no, hemos ido a su hotel. Est intentando pillarme? Espero que no Ella es
muy buena en esto. El hotel es el que est al lado del Feeling cuestin de apretones, ya sabes.
Ahora cuntame t qu tal ese morenazo?
Ay, muy bien. Me sonre encantada. Es un to muy atento y bueno en la cama.
<<Genial, puede que si se encapricha con l no diga nada de lo mo con Nathan>>.
Oye, pues me alegro mucho. Ahora comenzaremos la semana mucho ms relajadas Nos
carcajeamos juntas y rpidamente abrimos una botella de champn para brindar por nuestras noches
pervertidas.
Paso prcticamente el sbado durmiendo. Como dira el anuncio: de la cama al sof, del sof a la
mesa y de la mesa al sof. Cada vez que cierro los ojos veo el cuerpo de Nathan y se me acelera el
pulso. Su piel oscura y brillante me pierde. Su agresividad haciendo el amor, su gesto al correrse, sus
msculos contrayndose con cada movimiento ufff, me acaloro! No he tenido noticias de l en todo
el da y, sorprendentemente, le echo de menos. Por qu me tiene que pasar esto con el to que ms me
puede complicar la vida?
Sigo evitando a Malena porque presiento que puedo meter la pata en cualquier momento; cada vez que
se cruza conmigo me pregunta algo nuevo y estoy en tensin todo el da. Maana va a quedar con su
padre para comer y es un respiro para m. Necesito sentirme relajada durante unas horas.
Oigo los primeros acordes de la cancin de Its time, de Imagine Dragons, y corro a coger el mvil.
Cuando llego, Malena lo sostiene en la mano con cara algo extraada.
Lenny? me pregunta intrigada mientras me pasa el mvil. Un sudor fro comienza a
recorrerme el cuerpo. <<Piensa Martina piensa>>.
El to de ayer respondo rpidamente. Pero ahora no me apetece hablar con l. Le doy
a la tecla de rechazar la llamada ante su mirada recelosa.
Le diste tu mvil?
No digamos que se llam desde el mo Tpica trampa de to. Venga, ni caso! Ahora ya
estar de camino a Santiago. Sonro ante mi absurdo juego de palabras. Y cada uno a lo suyo.
A lo mejor quera algo
Que no que luego result ser un poco pesado De nuevo, la inoportuna musiquita
vuelve a sonar y repito la operacin de colgar acordndome de la madre estadounidense que le pari.
Joder Martina, y si le pasa algo? Tengo ganas de largarme corriendo. Quiero una capa
de invisibilidad como la de Harry Potter!
Que de verdad que no! Que quiero que me deje en paz! Cundo te has vuelto tan
sensiblona? Malena sonre ante mi pregunta.
Ya la verdad es que estoy algo tontorrona. Me coge la mano y me lleva al sof para que
me siente con ella. Sabes? Yago, el to de ayer, me encant Pero no puedo quitarme de la cabeza
a Nathan Siento cmo me hago pequeita en el sof y al final me acaba engullendo. Miles de
palabras malsonantes se cruzan por mi cabeza y comienzo a experimentar cierta asfixia. No s ni qu
hacer.
Pueeeessss Al final no se port bien contigo, Malena. Intenta cambiar el chip
<<Me estoy tirando piedras sobre mi propio tejado? No s cmo salir de esta!>>.
Si vieras cmo se mueve en la cama <<Ah, s exactamente esta noche le he visto en
la cama>>. Es de esos tipos que no querras que acabara la noche jams. Siento una punzada de
rabia al imaginrmela con l. Esto no tiene que ser sano
Olvdale, quieres? mi tono suena algo ms borde de lo que pretendo y ella se queda
pasmada. Quiero decir <<A ver cmo arreglo esto>> que es absurdo que te enganches por
l si solo fue una noche.
Tiene que haber algo ms
Cmo?
Que estoy convencida de que hay otra ta. No puedo tragar saliva. La bola se est haciendo
demasiado grande como para contrselo ahora.
Por qu piensas eso?
Porque nadie me rechaza! exclama con arrogancia. Es el primer hombre que no quiere
saber nada de m despus de pasar una noche conmigo comenta malhumorada.
Claro y por eso te atrae ms l que cualquier to que babee por tu culo, no? digo con
algo de pesar en mi interior.
Mmmmm, algo as. Ahora es como una especie de reto, Martina. <<Lo que me
faltaba!>> . Caer a mis pies y t lo vers dice con la misma expresin que Escarlata OHara en
la escena de nunca volver a pasar hambre.
Se te pasar contesto restando importancia. Yago es impresionante yo me centrara
en l y me dejara de gilipolleces.
S tienes razn pero lo de Nathan me parece divertido. Me levanto del sof
exasperada, ya he escuchado suficiente.
Joder ta, qu ganas tienes de complicarte la vida! Y complicrmela a m Tengo ganas
de llorar.
Recuerda que los queremos a nuestros pies, nena dice sonrindome. Ni uno solo se
ir de rositas antes de caer. No voy a cejar en el empeo solo por el mero hecho de ver cumplido
nuestro objetivo lo comenta como si fuera lo ms normal del mundo
Vale, t misma me rindo. Tiene una sonrisa de suficiencia que en estos momentos odio
con todas mis fuerzas. Me encamino a mi zona. Salgo a fumarme un cigarro!
Ok, guapa!
<<Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mieeeeeeerrrrrdaaaaaaaa!>>. Refugio la cara entre mis
manos y no dejo de jurar en arameo una y otra vez. Se puede tener peor suerte? Si la culpa es ma por
no ser sincera desde el principio pero es que nunca he sido sincera; ni siquiera conmigo misma. La
que se va a liar si se entera! He roto el punto ms importante de nuestro acuerdo y eso traer
consecuencias, lo s. No s de qu tipo porque nunca he hecho nada que altere a Malena, pero s que
esto le va a doler mucho. Qu tipo de amiga soy? La ms puta y zorra de todas. S!, yo soy la de la
pualada trapera!, quemadme en la hoguera! Voy a continuar con esto? Durante cunto tiempo se
puede sostener una mentira?
Llevo horas dndole vueltas al asunto. Hasta Malena est preocupada por mi exilio, pero se ha
quedado ms tranquila despus de decirle que estoy enganchada a una nueva novela. Por lo menos
respeta ese espacio. Una y otra vez estoy llegando a la misma conclusin, pero no quiero que sea esa
la solucin. Creo que he entrado en un bucle del que no s salir. Solo veo dos caminos y no me gustan
ninguno de los dos. El primero: le digo a Malena la verdad y entonces arde Troya. El segundo: termino
esta historia con Nathan y aqu paz y despus gloria. Reconozco que siempre he sido una persona de
caminos fciles Tomo aire, intentando convencerme de lo que voy a hacer y cojo el mvil.
Martina: Hola.
Lenny: Hola Kate, qu tal has pasado el da?
Martina: Bien oye, hay algo que quiero decirte.
Lenny: Se lo has contado a Kylie?
Martina: No. No puedo seguir con esto
Lenny: Especifica, por favor.
Martina: Tenemos que dejar de vernos.
Al momento vuelve a sonar Its time <<Es tiempo de qu?>>, me pregunto como si mi mvil
me estuviera revelando algo trascendental. Veo el nombre de Lenny en la pantalla y dudo hacer las
cosas por escrito me resultan algo menos dolorosas. Miro alrededor asegurndome de que Malena no
est en mi zona. Estoy tentada a colgar, pero al final claudico y le cojo la llamada.
Hola le digo intentando aparentar normalidad.
Me puedes explicar qu ha ocurrido? su voz refleja incredulidad y a m se me cae el alma
a los pies.
Que me lo he pensado mejor
Mientes.
No me conoces contesto con cierta altanera.
Vas a hacer esto cada vez que nos acostemos? ahora ha pasado al cabreo ms absoluto.
Que yo sepa, no he firmado ningn compromiso contigo. Tengo que esforzarme para que
no me tiemble la voz.
Conmigo no, pero con tu amiga s, verdad? Touch. Me quedo unos segundos callada
porque no s qu responder. Al final decido abrir mis sentimientos y que sea lo que Dios quiera.
Est bien, Nathan. Ella sigue loca por ti No puedo hacerle eso le digo bajando la voz.
Si fueras sincera con ella, tu amiga no te entendera? Qu clase de amiga es esa?
No te atrevas a cuestionar su amistad! Ella es lo mejor que me ha pasado
Ella te organiza la vida, Martina pronuncia mi nombre con dolor.
No! Ella me ha ayudado mucho y esto es una traicin por mi parte. No s ni cmo me miro
a la cara en el espejo.
Te tienes que mirar a la cara porque eres preciosa Eso me desarma por completo y me
siento descolocada.
Nathan se me rompe la voz de mi propia angustia. Esto se ha complicado mucho
Has pensado bien qu es lo que quieres t? <<S, cientos de veces en la ltima semana
quiz miles>>.
Quiero vivir tranquila. Es lo ms verdadero que he dicho en mucho tiempo.
No vas a vivir tranquila si sales corriendo a la primera de cambio. Ahora ha vuelto el
Nathan comedido.
No puedo de verdad que no soy capaz de enfrentarme a esto.
Martina, no te voy a poner en la tesitura de elegir entre ella o yo en este momento. Por mi
parte te dejo tiempo. No me importa si tenemos que escondernos, pero no quiero perderte tras
esas palabras la sangre vuelve a circular por mis venas y recupero cierta ilusin.
Haras eso por m? le pregunto esperanzada.
S pero con una condicin. Seamos claros, hace poco que nos conocemos y a lo mejor esto
no funciona por s solo. Pero si estamos juntos tiene que haber una fecha un lmite de tiempo para
que le cuentes a Malena la verdad. Escucho atnita. Si estamos en junio murmura echando
cuentas el 1 de septiembre tiene que saber lo nuestro.
Octubre apelo, el 8 es mi cumpleaos.
Prefieres el 8 de octubre? Cuatro meses mintiendo son muchos meses
Se lo acabar contando antes, Nathan le reprocho.
Si t lo dices, confo en ti. Creo que es la primera vez que alguien confa en m sin poner
objeciones y realmente me siento extraa libre.
Gracias.
Aceptas un consejo, pequea? Me encanta orle llamarme con ese apelativo.
S
Deshaz un poco el lazo con Malena Al notar que cojo aire de golpe aclara: djame
explicarme. No hay nada que hagas t sola. Comienza a despegarte y te sentirs ms libre. Es un buen
ejercicio para ser t misma. He visto muchas ms cosas buenas cuando te he visto a solas que cuando
estabas acompaada por ella. <<Pensndolo bien, quiz es buena idea>>.
Lo consultar con la almohada
Buena chica. Ah, estoy deseando volver a verte.
Yo tambin, Lenny le digo con una sonrisa.
Pronto recibir instrucciones, seorita aade con voz grave y yo me ro abiertamente.
Tienes una risa preciosa y los ojos tambin y los pechos, y el cuerpo, y el culo, y
Para! le digo tontamente, pero en el fondo me encanta escucharle decir eso.
No, djame terminar Y el lunar de tu tobillo, y la curva de tu espalda, y las arruguitas de
tus ojos
No tengo arrugas!
Bueno si t lo dices Ya recibirs una lista detallada de la investigacin: Martina,
segn Nathan.
Ufff, prefiero no saberlo.
Nena, tengo que dejarte. Los informes finales de mis alumnos crecen por momentos y me
tengo que poner a ello.
Vale digo con cierta pena. Ah, primera instruccin.
Dime.
No me llames ya me pongo en contacto yo contigo.
Pero hazlo, si no te llamar.
S, s, no te preocupes.
Est bien. Hasta maana, Rubita
Adis, morenito. Oigo que se re al otro lado del telfono.
Me lo tengo merecido comenta divertido. Un beso, guapa.
Otro ciao!
Tengo ganas de abrazar el mvil. Es que este hombre no tiene nada malo? Las veces que hablo con l
consigue siempre dejarme con la sensacin de querer volver a verle. Parece que me hipnotiza con sus
palabras. Es perfecto me tiene loca!
CAPTULO 9
He dormido como una santa toda la noche. Debo haber soado con cosas agradables porque me he
despertado despejada, serena y alegre sobre todo alegre. Malena ya se ha ido a ver a su padre y voy
a disfrutar de uno de los pocos das que paso sola. Tengo que dejar preparado algo de trabajo para el
lunes, pero no me importa. Hoy no tengo que fingir frente a nadie frente a ella, principalmente. Me
preparo un caf, cojo una madalena y voy con la bandeja a mi terraza. Hoy hace un da esplndido; la
temperatura ha subido y el sol me carga las pilas. Definitivamente, hoy estoy positiva y contenta.
Saboreo mi caf como si fuera el nico que me tomar en mi vida y comienzo a pensar en mi
conversacin con Nathan. Est convencido en querer seguir a mi lado y, simplemente por eso, ha
hecho que me sienta especial. He estado con muchos hombres (podra decir que he perdido la cuenta)
y la verdad es que casi todos me han tratado como una reina. Pero no no era lo mismo. Ellos no
miraban a travs de mi piel y Nathan s. S que ha visto en m algo ms que una chica rubia, resultona
y simple, con la que echar un buen polvo. No s tengo confianza en que es algo diferente. Espero!
que sea algo diferente.
No lo pienso dos veces, cojo el telfono con emocin y le llamo.
Hola pequea su voz me acaricia an en la distancia. Ests madrugadora hoy.
Mmmm, s. Me he levantado contenta. Qu haces?
Pues hacindome un caf. Todava tengo un ojo pegado; ayer me qued hasta las tantas
terminando informes. Por cierto, qu llevas puesto?
Qu? comienzo a rerme. Vamos a tener sexo telefnico?
Como no te quedaste a dormir, no averiguaste la actividad que tengo por las maanas dice
con sorna.
Yo no duermo con nadie contesto con esta respuesta totalmente automatizada.
Conmigo dormirs. Esa afirmacin tan rotunda me inquieta.