Marco Historico Del Neoclasicismo
Marco Historico Del Neoclasicismo
Marco Historico Del Neoclasicismo
Por el año de 1780 se había proclamado la independencia de los Estados Unidos Americanos, y nuevas doctrinas políticas se
difundían por las colonias hispánicas, principalmente a través de los libros franceses, que se leían con no mucho secreto.
Montesquieu, Voltaire y Rousseau, se contaban entre los autores de mayor influencia. Luego vino la Revolución Francesa que
espanto y lleno de sorpresa la imaginación de los coloniales; solo unos cuantos alcanzaron a discernir sus principios esenciales.
El precusor Francisco de Miranda mantenía correspondencia con los descontentos aristócratas venezolanos por los años de
1781 a 1782. Aunque era hombre de amplias lecturas, carecía de ambiciones literarias; sin embargo un diario donde anoto las
impresiones del país acerca de la democracia en las instituciones políticas y costumbres sociales, lo coloco en una posición única
dentro de la literatura hispanoamericana.
Las guerras de independencia comenzaron en las colonias españolas en 1810, las ultimas batallas se libraron en 1825. Brasil se
hizo independiente en 1822. En estos movimientos, muchos de los jefes eran hombres de educación filosófica y literaria. La
literatura desempeño un papel ancilar en su actividad política, en realidad la había anunciado ya, en los escritos de Baquíjano y
Espejo. Los periódicos y folletos fueron instrumentos esenciales en sus campañas. La difusión de las nuevas ideas, la ilustración
y la educación del pueblo en oposición a la cultura restringida y anticuada que había prevalecido en los tiempos coloniales,
juntamente con la perfección de la libertad individual por la abolición de todas las formas de esclavitud y servidumbre, se
concebían como concomitantes naturales de la libertad nacional.
Miguel Hidalgo, el cura de Dolores, había traducido a Moliére y quizá a Racine para representarlos ante sus feligreses indios.
Después de haber dado al pueblo de México la señal dela rebelión, decidió publicar un periódico “El Despertador Mexicano”, el
20 de Diciembre del mismo año; su director fue otro sacerdote, francisco Severo Maldonado, era una especie de socialista nato.
Camilo Henríquez, “El Fraile de la Buena Muerte”, fue el primero en reclamar la independencia para Chile e hizo de ello motivo
de sermones poemas, dramas, panfletos y artículos. Dio a su país su primer periódico “La Aurora de Chile”, su aparición produjo
tal entusiasmo que, según su contemporáneo Fray Melchor Martínez, los hombres corrían por las calles con el periódico en la
mano, paraban a cuanto amigo encontraban, leían y releían su contenido, y se felicitaban de su buena suerte, confiando en que
la ignorancia y la ceguera en la que vivían había desaparecido dejando lugar a la ilustración y a la cultura, que harían de Chile un
país de hombre sabios. Es significativo que el padre Henríquez, en su defensa de la libertad de prensa, citara la Aeropagítica de
Milton; hacia finales del siglo XVIII nuestros hombre de letras habían empezado a leer autores ingleses tanto como franceses; se
traducían o citaban pensadores tan opuestos como Tom Paine y Adam Smith y, por supuesto, los estadistas norteamericanos
Washington, Jefferson, Madison y John Quincy Adams. En la Argentina, Mariano Moreno y Bernardo de Monteagudo
expresaron sus ideas políticas en excelente prosa. El mismo Bolívar, el mas brillante y original de los libertadores, el Libertador
por excelencia, escribió un idioma claro y vivido; escribió hasta una especie de poema en prosa sobre su subida al Chimborazo. Y
José Bonifacio de Andrea e Silva, el que movió los hilos en el curioso proceso de la independencia brasileña, era también el
hombre de letras mejor informado de su país, y , cuando menos, en opinión de Afranio Peixoto, el promotor de su autonomía
literaria.
El deseo de independencia intelectual se hace explicito por vez primera en la Alocución a la Poesía de Andrés Bello, la primera
de sus dos Silvas americanas. Bello había ido a Inglaterra en 1810, junto con Bolívar en representación de los patriotas de
Venezuela. Su Alocución apareció como una especie de programa editorial en las paginas iniciales de una revista que el y el
colombiano Juan García del Río publicaron en Londres, en 1823, con el titulo de “Biblioteca Americana”. Muchos años después,
el argentino Juan María Gutiérrez critico e historiador de la cultura, reprodujo el poema como introducción declaratoria en
nuestra primera gran antología, la “América poética”, su estilo se ha dicho que es clásico, concebido dentro del molde romano,
con un toque del aroma nativo de nuestro suelo. No escribió Bello muchas poesías originales, tenia mas de erudito que de
poeta, tradujo o imito muchos tipos de poesía, desde Plauto y los Nibelungos hasta Byron y Hugo. En ocasiones tomaba un
poema de una lengua extranjera y lo adaptaba a las circunstancias de la propia vida.
El neoclasicismo se presento en el panorama de la literatura a finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII, como la
correspondencia artística a los dictados semánticos y racionalistas de la ideología establecida por la Ilustración. Es un
movimiento espiritual literario y cultural que pretendía recuperar el gusto y los principios del clasicismo. Una corriente literaria
que se opone a los excesos en que había caído el barroco, esta corriente en su lugar es llamado Clasicismo y en los demás países
que la adoptan, ya en el siglo XVIII es conocida como Neoclasicismo.
Mientras en casi toda Europa se seguían los postulados barrocos, en Francia el fenómeno cultural era distinto. En el siglo XVII
francés, el espíritu proveniente de la época clásica y del Renacimiento reapareció con dramaturgos como Pierre Corneille, Jean
Racine, Jean Baptiste Poquelin (Moliere), con fabulistas como Jean de la Fontaine y con preceptistas como Nicolas Boileau, que
ofrecieron los primeros testimonios de las maneras neoclásicas. Surgen también oradores notables como Benigno Bossuett
quien como historiador compuso para su alumno, el futuro Luis XIV, “Discursos sobre la Historia Universal”, y Marie-Madeleine
Pioche de la Vergne escritor de ficción, y condesa de La Flayette.
El siglo XVIII, hizo surgir una nueva tendencia política, el Despotismo Ilustrado, una nueva forma del Absolutismo, con un barniz
de ideas humanitarias surgidas de la ilustración. Los gobernantes de esta tendencia política convivieron con las ideas
racionalistas y favorecieron la literatura neoclásica. En esta época renacieron las academias y surgieron los alones literarios,
participando abiertamente las mujeres
Entre los principales escritores neoclásicos franceses se encuentran los tres grandes ilustrados (Voltaire, Montesquieu y
Rousseau) pero también se debe recordar a Pierre Bayle, Denis Diderot, George Louis Lecler, Carlos de Secondat y a Chamblain
de Marivaux, entre otros.
En Inglaterra, la novela de aventuras de índole neoclásica tuvo una gran cantidad de adeptos, como Daniel Defoe, Jonathan
Swift, Samuel Richardson y Henry Fielding. En la poesía destacaron, John Dryden y Alexander Pope. John Milton quien se puede
decir que es renacentista, es considerado junto con Shakespeare una de las cumbre de la literatura anglosajona. En Italia
destacaron los dramaturgos Carlos Goldoni y Victor Alfieri. En España, también en el teatro sobresale Leandro de Moratín y los
fabulistas Tomas de Iriarte y Felix Maria de Samaniego.
Todos estos personajes revolucionan al mundo y al mismo tiempo sientan las bases del Romanticismo, con su oposición a todo
tipo de Absolutismo.
Si el neoclasicismo mantuvo como teoría estética objetivos eminentemente didácticos es lógico que la literatura se alimentara
de los últimos descubrimientos, de las nuevas teorías científicas y de los postulados de la nueva ideología ilustrada. El arte
estuvo en función de la razón ofreciendo una estética normativa intelectual y objetiva en la que quedaban desplazadas las
afecciones sentimentales. La libertad sentimental era entendida como una forma primitiva de creación que se separaba, en si
misma, de las normas ilustradas del ser humano pensante. Sin embargo, mas que aportar genios ala cultura universal, el
neoclasicismo produjo ingenios. No alcanzo la originalidad de
En la formación de la doctrina clásica desempeño papel muy importante el amplio movimiento de exégesis critica realizada en
Italia, durante la segunda mitad del siglo XVI, en torno a la poética de Aristóteles. “La época de la critica”, así ha llamado a la
segunda mitad del siglo XVI un critico norteamericano contemporáneo, y en verdad, tal designación define bien el carácter de
aquel periodo histórico: la preocupación de conocer analizar racionalmente y sistematizar el fenómeno literario; la necesidad de
establecer un conjunto orgánico de reglas que pudiese disciplinar la actividad de los escritores, desde los aspectos mas simples
de la forma hasta las cuestiones mas complejas del significado.
La influencia de los traductores y exegetas italianos de la poética comenzó a actuar profundamente en la literatura francesa
desde fines del siglo XVI y, sobre todo, a partir de las primeras décadas del XVII. Esta influencia encaminaba los espíritus hacia la
formulación de una estética literaria de tenor intelectualista, caracterizada por la aceptación de reglas, por el gusto del
raciocinio exacto y de la claridad, por la desconfianza frente a la inspiración tumultuosa, el furor animi y la fantasía
desordenada. El clasicismo se estructura progresivamente en este ambiente dominado aun por el barroco, y hacia 1940, la
doctrina clásica triunfa en la literatura francesa.
Pablo de Olavide y Jáuregui, era un conspirador decidido y valiente, afiliado a la secta masónica, propagaba los derechos del
hombre. Antonio Nariño, tradujo, imprimió y divulgo los preceptos de los derechos del hombre y del ciudadano, lo que le costo
la cárcel. Francisco de Miranda tomo parte en la guerra de independencia de los Estados Unidos Americanos, como soldado del
ejercito español, también formo parte de las tropas de Washington después de la batalla de Saratoga, luego perseguido por el
gobierno español huyo a Inglaterra, recorriendo Alemania, Turquía y Rusia. Soñaba con la creación de un gran Estado Americano
que debía abarcar todas las tierras desde California al Cabo de Hornos. Durante la Revolución Francesa milito entre los
girondinos a las ordenes del general Dumouriez, al condenar a este por traición, Miranda huyo a Inglaterra donde despertó el
interés delos poderosos por la independencia de las colonias Hispanoamericanas. Fundo la logia masónica de la “Gran Reunión
Americana” o “Logia Lautaro” inculcando sus ideas libertadoras a los criollos americanos residentes en Inglaterra u otras
naciones europeas. Este elocuente patriotismo, atrajo a Simón Bolívar, Bernardo O´Higgins y Andrés Bello.
En Venezuela, en 1796, se trato de establecer una republica a la francesa, aboliendo la esclavitud de los negros, la servidumbre
de los indios y rebajando las contribuciones. En Brasil, Joaquín José de la Silva Xavier, Ignacio José de Alvarenga y Peixoot, José
Álvarez Maciel, y un grupo de literatos y pensadores, trataron e 1780 de libertara la Brasil de Portugal. De la Silva murió en el
cadalso y los demás fueron deportados a África. A este episodio se le lamo la infidencia mineira. En 1798, mulatos y mestizos
brasileños trataron de establecer la Republica Bahiense.
Los representantes de las juntas Provinciales constituidas en Asamblea el 19 de Marzo de 1812, juraron la Constitución de Cádiz
que proclamo la soberanía nacional, la monarquía limitada, el catolicismo como religión del estado y la división de los poderes
legislativo, ejecutivo y judicial. Este importante código, así como otros decretos mediante los cuales se suprime el Tribunal de la
Inquisición la jurisdicción feudal y se torga la libertad de prensa, representan la introducción en España de las ideas liberales.
Se le dio este nombre por considerarse que vino a ser un nuevo nacimiento de la gran cultura greco-latina a partir de la 2da.
Mitad del siglo XV al siglo XVII.
En su primera fase el Renacimiento tomó el nombre de “humanismo”, en el sentido de un hecho prevalentemente literario, y se
caracterizó un entusiasta regreso a la cultura griega latina, pero vigilado por un severo espíritu crítico que sólo aceptaba el
estudio directo de las fuentes. El humanismo consiste no solamente en una preferencia por la cultura clásica de los griegos y
latinos, sino por su nueva concepción de la vida, con el hombre como centro.
El Renacimiento es una época de ruptura con el oscurantismo medieval, un período de renovación del arte y de las letras, de
recuperación y de acercamiento a los clásicos, de restauración de la Antigüedad, de un uso novedoso de la razón en todos los
campos del saber.
El primer hecho que originó el ambiente del Renacimiento fue la toma de Constantinopla por los turcos otomanos en 1453, lo
que facilitó la penetración de la cultura griega en occidente.
Probablemente la circunstancia que más influyó para la aparición del nuevo fenómeno fue el amplio y floreciente comercio
desarrollado en la Italia del norte, la cual estaba dividida en varias ciudades-estado, a la manera griega.
Dos descubrimientos favorecieron el avance de la cultura: la brújula, que se le atribuye a Flavio Gioja, se supone que el invento
es de origen chino, y gracias a el se originaron, los grandes descubrimientos chinos; y la imprenta, como procedimiento para
reproducir un libro por medio de la prensa y valiéndose de tipos movibles, fue invento de Juan Gutenberg. Esto dio un gran
impulso a la cultura, ya que antes era un imposible para un particular poseer un libro.
Otro hecho que fue determinante para la nueva situación de los europeos, fue el de los descubrimientos geográficos, tanto de
los portugueses en África y en Asia, como de los españoles en América.
En lo político hay que registrar el fin del imperio cristiano, lo que dio origen a diversos estados y diversas naciones. Otro aspecto
fue la crisis en la estructura social de la Edad Media, lo que dio lugar a otras formas de sociedad, sobre todo a las pequeñas
ciudades.
En el aspecto religioso también se produjo a cambios muy significativos. En efecto, en la Edad Media, que había sido una época
de fe, la iglesia adquirió autoridad indiscutible; pero en los finales del siglo XIV, a consecuencia de notorios abusos y debilidades
en el interior de la propia Iglesia, aparecieron críticos muy fuertes, quienes apoyándose en la Biblia, defendieron sus tesis. Este
movimiento fue iniciado formalmente por Martín Lucero en octubre de 1517, se conoce con el nombre de “Reforma”.
Sucesos económicos:
A consecuencia del comercio aparecieron ricos banqueros y poderosos mercaderes, quienes para apreciar mejor las artes y
estudiarlas en general, invitaban a los filósofos y artistas para vivir y trabajar en sus palacios, además hubo también un aumento
y mejoría debido a los nuevos descubrimientos geográficos, lo que facilitó el comercio en todo el mundo.
Cosmovisión:
El hombre del renacimiento estuvo plenamente consciente de sus facultades y las ejerció para lograr sus propósitos; por ello,
trató de desprenderse de la religión, la cual, según decía, se cultivaba por hábito y especulativamente, pero sin finalidad
práctica.
El neoclasicismo fue un estilo inspirado e imitador de la antigüedad clásica, de ahí los temas históricos y
mitológicos. Abundan los desnudos al estilo griego y las poses grandilocuentes y frías, muy estudiadas y académicas. Es un arte
lleno de normas, donde lo importante es el dibujo mientras el color se considera secundario. Normalmente se huye del
movimiento y, cuando está presente, parece congelado, estable y predecible. Podríamos escoger muchos maestros como
Ingres, Greuze o Prudhon, pero el más claro y prolífico fue Jacques Louis David (1748-1825) y suyas son las cinco obras de este
lado de la exposición.
ROMANTICISMO
Es un movimiento cultural que tuvo influencia en todos los aspectos de la vida. Sus características son:
Creatividad: expresión poética y es una cualidad que solo unos pocos poseen. Esta cualidad es la del genio, es una capacidad de
seguir unas normas (valora la originalidad; la inspiración repentina; salto a todo norma,...)
Idealismo: búsqueda de ideales inalcanzables en todos los aspectos, como el amor. El amor pasional e incontrolable, que es el
sentimiento más puro y hondo y que debe superar a lo demás
Exaltación del individualismo y del yo: lo más importante de si mismo está por encima de todo lo demás
Nueva visión hacia la naturaleza: se interesan por las tormentas, los vendavales, ese tipo de fuerzas desatadas.
Nueva visión del mundo y del ser humano: el hombre romántico es un individuo que se enfrenta a la sociedad.
En Europa todas estas características se pueden ver en las obras de poetas como Lord Byron , Walter Scott con “El Iranhoe”; y
Víctor Hugo con “Nuestra señora de París”.
NEOCLASICO
Características
• Inminentemente didáctica y Moral (Actitud crítica).
• Las academias, sociedades, instituciones y publicaciones eran dirigidas por el estado. (Cultura Dirigida por El Estado).
• Exaltación de los placeres sencillos a fin de cubrir la intimidad personal y evitar la develación de los sentimientos.
• Afrancesamiento debido a que el modelo galo se diseminó rápidamente causando fervor en la gente culta.
• En esta literatura el objeto esencial es el hombre, haciendo mayor énfasis de sobremanera el alma.
Neoclasicismo
Es un estilo artístico que se desarrolló especialmente en la arquitectura y las artes decorativas; floreció en Europa y Estados
Unidos aproximadamente desde el año 1750 hasta comienzos de 1800 y se inspiró en las formas grecorromanas.
Los artistas neoclásicos fueron los primeros que intentaron reemplazar la sensualidad y la trivialidad del rococó por un estilo
lógico, de tono solemne y austero.
Cuando los movimientos revolucionarios establecieron repúblicas en Francia y en América del Norte, los nuevos gobiernos
republicanos adoptaron el neoclasicismo como estilo oficial porque relacionaban la democracia con la antigua Grecia y la
República romana
El estilo neoclásico se desarrolló tomando como punto de referencia la excavación en Italia de las ruinas de las ciudades
romanas de Herculano en 1738 y de Pompeya en 1748,
Pintura
- Temática histórica, ética, debe mostrar las virtudes, el heroísmo dentro del estilo de las Vidas de Plutarco. Temas de la
Antigüedad clásica, elementos decorativos, vestimentas, poses de los personajes sacados de la escultura y pintura
grecorromana.
- Racionalidad, apego a las reglas, la ciencia y el orden.
- Claridad y armonía.
- Linealidad, contornos fuertes.
- Composición con predominio de la ortogonalidad.
- El color se subordina al dibujo. Uso de las grisallas (sombreado monocromo).
- Tectónico, no es pictórico, no hay pinceladas sueltas que disuelven los contornos. El volumen se representa a través del
modelado escultórico, con fuertes contornos lineales.
- Interés por lo conceptual y no por lo pictórico- visual.
El pintor francés Jacques-Louis David, uno de los máximos exponentes de la pintura neoclásica. Su Juramento de los
Horacios (1784-1785, Louvre, París) exalta el tema del patriotismo estoico. El cuadro neoclásico concebido como espacio
arquitectónico y el friso como cita de figuras, reflejan la preocupación neoclásica de composición lógica y clara. Los perfiles
definidos y una luz dura proporcionan a estas figuras la cualidad de estatuas
En las pinturas se reproduce con detalle los motivos arqueológicos aunque estén en un segundo o tercer plano
A comienzos de la década de 1790 los artistas empezaron a pintar imitando las siluetas representadas en la cerámica griega. El
exponente más destacado de esta manifestación fue el inglés John Flaxman, cuyos grabados de líneas simples, para las ediciones
de la Iliada y laOdisea de Homero sustituían la perspectiva tradicional, la luz y el modelado, por diseños de líneas puras
En España destacan los pintores neoclásicos José de Madrazo, con La muerte de Viriato (c. 1808, Museo del Prado, Madrid)
Escultura
En general, los escultores neoclásicos tienden a plasmar poses contorsionadas en mármoles de colores. Preferentemente
contornos limpios, una reposada actitud y formas idealizadas ejecutadas en mármol blanco.
Características:
La figura dominante en la historia de la escultura neoclásica fue el italiano Antonio Canova que se convirtió en miembro del círculo
de Roma en el año 1780; después de haber abandonado el estilo barroco, buscó en el estilo neoclásico la severidad y la pureza del
arte antiguo. Teseo y la muerte del minotauro (1781-1782) reflejan más la calma de la victoria que la propia contienda; ésta fue la
primera obra de Canova en su nuevo estilo, y le proporcionó fama inmediata.
Arquitectura
La arquitectura neoclásica reproduce las formas generadas por los griegos y los romanos, prefiriendo el nuevo sistema métrico
adoptado por los franceses y favoreciendo la monumentalidad.
El neoclasicismo representa una simplificación: las líneas rectas dominan sobre las curvas, existen menos contrastes de volúmenes,
menos adornos. La simetría se generaliza, columnas remplazan los arcos. frontones triangulares substituyen los circulares y las
balaustradas reaparecen sobre los edificios
Usa los símbolos y motivos redescubiertos en los muebles y edificios de Pompeya y Herculano.
Romanticismo
Se extiende aproximadamente desde 1800 hasta 1850. Se caracteriza por una aproximación muy imaginativa y subjetiva,
intensidad emocional y por un carácter visionario u onírico. También se caracteriza por esforzarse en expresar estados de ánimo,
sentimientos muy intensos o místicos, así como por eludir la claridad y la definición.
En la elección de temas, los artistas del movimiento romántico mostraron predilección por la naturaleza, especialmente en su
aspecto más salvaje o misterioso, así como con asuntos exóticos, melancólicos o melodramáticos que producen miedo o pasión
Los sentimientos comienzan a ser más importantes que la razón. Los sentimientos y la razón adoptaron forma en las pinturas es
así como aparecen cuadros como “pesadilla” de Henry Fuseli y los grabados de monstruos y demonios de Francisco de Goya
Este movimiento tuvo características muy diferentes dependiendo del país en donde se desarrollo.
Francia
Coincidió con las guerras napoleónicas (1799-1815). Los primeros artistas franceses de este estilo encontraron su fuente de
inspiración en los acontecimientos que les rodeaban.
Se utiliza medios tonos obtenidos de la yuxtaposición de un color con su complementario y no del oscurecimiento de uno de
ellos
La principal figura del romanticismo francés fue Théodore Géricault, que fue quien cambió el sentido heroico de los cuadros de
batallas por el del sufrimiento.
En su Coracero herido (1814) un soldado se desmaya en el campo. Las poderosas pinceladas, la luz y los tonos oscuros
acrecientan el sentido de aislamiento y vulnerabilidad; y esto para Géricault y otros pintores románticos constituía la esencia de
la condición humana.
La obra maestra de Géricault, La balsa de Medusa (1818-1819), retrata a escala heroica el sufrimiento de la humanidad
Delacroix adopta a menudo temas de la literatura, pero resalta los que tienen más transcendencia literaria o didáctica con el uso
de colores que crean un efecto de energía pura o emoción comparado con la música
Alemania
El más grande exponente y el pintor alemán romántico más notable fue Caspar David Friedrich, cuyos paisajes meditabundos,
pintados en un estilo lúcido y meticuloso, cabalgan entre el sentimiento delicado y místico y el sentido de la melancolía, de la
soledad y de la separación.
Su pesimismo romántico se expresa más directamente en su obra Mar polar (1824); el recuerdo de un barco naufragado,
apenas visible debajo de una pirámide de placas de hielo, parece un monumento al triunfo de la naturaleza sobre la aspiración
humana
Inglaterra
Los paisajes impregnados de un sentimiento romántico se convierten en la principal expresión de la pintura romántica, aunque
los artistas ingleses fueron más innovadores en estilo y en técnica.
John Constable, proveniente de un entorno natural salvaje asociado con muchos poetas y pintores románticos, dotó a los
paisajes ingleses de un profundo sentimiento. Fue el primer gran artista en trabajar al aire libre y en llevar al lienzo la frescura
de la visión a través del uso de colores luminosos y llamativos a base de pinceladas densas. estilo seguido por uno de los artistas
mas conocidos de este genero Joseph Mallor William Turner.
España
El romanticismo en España se manifestó sobre todo en la pintura, representado por Federico Madrazo, con sus cuadros
históricos y sus retratos; Antonio María Esquivel, Jenaro Pérez Villaamil, con sus imaginatorios paisajes; Leonardo Alenza, con
sus cuadros costumbristas inspirados en la obra de Goya y Eugenio Lucas Padilla, que representaba el espíritu revolucionario de
la época. En Cataluña surgió una escuela pictórica inspirada en los nazarenos alemanes dentro de la que destacan Joaquín
Espalter y Pelegrín Clavé.
LATINOAMERICA
La crisis del sistema colonial se acentúa en el siglo XVIII. La segunda mitad de la centuria en Latinoamérica se caracteriza por el
surgimiento de movimientos anticoloniales que fueron el desencadenante del proceso independentista. En efecto, hacia 1830 la
casi totalidad de los países de Latinoamérica habían logrado su independencia.
La segunda mitad del XVIII, etapa intermedia y de transición con el Barroco, está caracterizada por la presencia del estilo rococó,
poco productivo en el ámbito literario.
El Neoclasicismo se desarrolla en América en la primera mitad del siglo XIX. Cerca de cuarenta y cinco años, aproximadamente
entre 1845 y 1890, duró la vigencia del Romanticismo en la literatura latinoamericana. Una vez que la mayoría de los países
latinoamericanos lograron su independencia, vino un período de consolidación de los diferentes nacionalismos. Esto implicó una
preocupación por establecer estructuras políticas, económicas, sociales y culturales acordes a la nueva etapa que se estaba
viviendo. En este contexto, el movimiento romántico trascendió lo meramente literario y se constituyó en el signo distintivo de la
nueva realidad latinoamericana. El costumbrismo es la nota predominante de estos años de vigencia romántica, pues sirvió de
pretexto a poetas, novelistas, dramaturgos y ensayistas para criticar y satirizar a una sociedad que atravesaba una etapa de
grandes cambios y que se apegaba peligrosamente a modas extranjeras. Producto de esta situación, la mayoría de los países
latinoamericanos viven una efervescencia literaria que se traduce principalmente en la creación de literaturas nacionales y, por
consiguiente, en la presencia de autores representativos de esta modalidad.
La vigencia del Realismo en Hispanoamérica se puede situar aproximadamente entre 1890 y 1935. Esta tendencia estética cultiva
fundamentalmente la narrativa y, con menor resonancia, el teatro.
Poesía
Dos son los poetas que sobresalen como representativos de una poesía neoclásica: el ecuatoriano José Joaquín de Olmedo
(1780-1847) y el venezolano Andrés Bello (1781-1865). En ellos existe una evidente preocupación métrica y un interés por
resaltar aspectos políticos y sociales, además de hacer patente la presencia de lo americano.
Por su parte, la poesía romántica encontró favorable eco en un abundante número de escritores. Entre ellos destacan los
argentinos que conforman el grupo de los proscritos, opositores a la dictadura de Juan Manuel Rosas (1835-1852). Entre ellos se
encontraba la figura de José Esteban Echeverría (1805-1851). De sus poesías, Elvira o la novia del Plata (1832), Consuelos(1834)
y Rimas (1837), resalta «La cautiva» (del último libro), un largo poema que trata de las desventuras de una mujer blanca, retenida
por los indios. En Cuba son especialmente significativas las obras de Gertrudis Gómez de Avellaneda (1814-1873). Paralelamente,
durante el XIX se desarrolla en torno al Río de la Plata la poesía gauchesca. Centrada en la figura del campesino nómada de la
Pampa, recurre, en general, a un lenguaje que recoge los usos dialectales y vulgares de este colectivo. El interés por el mundo del
gaucho se enmarca en el renacimiento del nacionalismo y la búsqueda de lo autóctono propios del siglo XIX. La fama de José
Hernández (1834-1886) queda ampliamente justificada con el poema narrativo Martín Fierro (ver Obras clave), la obra más
significativa del período. Su éxito provoca la prolongación de la poesía de materia gauchesca en el siglo XX.
Pero, además de estos primeros poetas, destaca un grupo de autores más jóvenes que siguen también la estela de la estética
romántica. Con ellos se desarrolla la última etapa del movimiento. Cabe destacar entre ellos al chileno Guillermo Blest Gana y al
colombiano Rafael Pombo (1833-1912). Así también merece una atención especial la figura del uruguayo Juan Zorrilla de San
Martín (1855-1931), autor de Tabaré, un poema que convierte en mito la figura del indio uruguayo.
NEOCLASISISMO
José Cadalso
Escritor ilustrado español, también considerado introductor del romanticismo en España. Nció en Gibraltar y estudió
en los jesuitas de Cádiz y después en París. Viajó por toda Europa cntagiándose del espíritu de la Ilustración del
momento. Fue cadete en el regimiento de cballería de Borbón y llegó al grado de coronel. Vivió en varias ciudades
españolas, entre ellas Madrid, donde tuvo amores apasionados con la actriz María Ignacia Ibáñez, que parece ser
murió en sus brazos. Amigo de Nicolás Fernández de Moratín y de Tomás de Iriarte, era uno de los asistentes a la
tertulia literaria de la fonda de San Sebastián. Dejó muchos textos autobiográficos y un epistolario extenso con
escritores de la época. Publicó Ocios de juventud (1773), un poemario con regusto entre rococó y romántico.
También compuso sátiras, muchas de ellas firmadas con seudónimo, como Kalendario manual y Guía de forasteros
en Chipre para el Carnaval del año 1768 y otros, este texto circuló manuscrito, o la serie sobre Los eruditos a la
violeta, textos mordaces en los que ridiculizaba el falso barniz cultural que tenían muchos de los petimetres que
poblaban los salones del Madrid de la época. Pero sus dos mejores obras son Cartas marruecas y Noches
lúgubres. Cartas marruecas (1788-1789) es un libro en el que Cadalso finge una correspondencia entre dos amigos
marroquíes, uno se encuentra en España y el otro en Marruecos, y el supuesto viajero, al que el autor le ha dotado de
un gran sentido común, cuenta a su amigo lo que ve en España, por supuesto desde el relativismo de la diferencia de
culturas. Cadalso aprovecha para dar su visión crítica sobre el carácter español, la política del momento y la historia
de España. Noches lúgubres apareció primero por entregas en el diario El Correo de Madrid desde 1789 hasta 1790, y
después recopiladas en 1792 y 1798. El tema central es la noche y todo lo que sugiere en su aspecto lúgubre:
féretros, cementerios, desesperanza y melancolía. No cabe duda de que fue un gran antecedente para el
romanticismo español; por otro lado, dado lo novedoso del tema en su momento, se llegó a especular que el propio
Cadalso era un profanador de tumbas que incluso había desenterrado el cadáver de su amada Ignacia. También
compuso algunas obras dramáticas, como La Numantina (perdida) y Don Sancho García (1781), pero la crítica
literaria no les concede gran valor ni argumental ni estilístico.
José Cadalso
Escritor ilustrado español, también considerado introductor del romanticismo en España. Nació en Gibraltar y estudió
en los jesuitas de Cádiz y después en París. Viajó por toda Europa contagiándose del espíritu de la Ilustración del
momento. Fue cadete en el regimiento de caballería de Borbón y llegó al grado de coronel. Vivió en varias ciudades
españolas, entre ellas Madrid, donde tuvo amores apasionados con la actriz María Ignacia Ibáñez, que parece ser
murió en sus brazos. Amigo de Nicolás Fernández de Moratín y de Tomás de Iriarte, era uno de los asistentes a la
tertulia literaria de la fonda de San Sebastián. Dejó muchos textos autobiográficos y un epistolario extenso con
escritores de la época. Publicó Ocios de juventud (1773), un poemario con regusto entre rococó y romántico.
También compuso sátiras, muchas de ellas firmadas con seudónimo, como Kalendario manual y Guía de forasteros
en Chipre para el Carnaval del año 1768 y otros, este texto circuló manuscrito, o la serie sobre Los eruditos a la
violeta, textos mordaces en los que ridiculizaba el falso barniz cultural que tenían muchos de los petimetres que
poblaban los salones del Madrid de la época. Pero sus dos mejores obras son Cartas marruecas y Noches
lúgubres. Cartas marruecas (1788-1789) es un libro en el que Cadalso finge una correspondencia entre dos amigos
marroquíes, uno se encuentra en España y el otro en Marruecos, y el supuesto viajero, al que el autor le ha dotado de
un gran sentido común, cuenta a su amigo lo que ve en España, por supuesto desde el relativismo de la diferencia de
culturas. Cadalso aprovecha para dar su visión crítica sobre el carácter español, la política del momento y la historia
de España. Noches lúgubres apareció primero por entregas en el diario El Correo de Madrid desde 1789 hasta 1790, y
después recopiladas en 1792 y 1798. El tema central es la noche y todo lo que sugiere en su aspecto lúgubre:
féretros, cementerios, desesperanza y melancolía. No cabe duda de que fue un gran antecedente para el
romanticismo español; por otro lado, dado lo novedoso del tema en su momento, se llegó a especular que el propio
Cadalso era un profanador de tumbas que incluso había desenterrado el cadáver de su amada Ignacia. También
compuso algunas obras dramáticas, como La Numantina (perdida) y Don Sancho García (1781), pero la crítica
literaria no les concede gran valor ni argumental ni estilístico.
ARGUMENTO
Doña Ava, Condesa viuda de Castilla, madre y tutora del Conde Don Sancho García, Príncipe de tierna edad,
enamorada de Almanzor, Rey moro de Córdoba, intenta dar veneno a su hijo por complacer a su amante; cuya
ambición aspiraba a ocupar el trono de Castilla, más que a reinar en el corazón de la Condesa. El cielo, visible y único
Juez de los Soberanos, dispone que la Condesa beba el veneno que sus impías manos habían preparado para su hijo.
Este asunto ha sido tratado en las tablas de nuestro antiguo teatro según el gusto que dominaba en el siglo pasado.
He compuesto este drama conformándome al estilo de esta era. Conozco yo mismo algunos defectos en mi tragedia:
el Público notará muchos más. Creo merecer el perdón de los primeros por la sinceridad con que los confieso; y
espero obtener el de los segundos por el dócil carácter del Público español, acostumbrado a disimular las faltas de los
AA., en cuyas obras se ven afectos de religión, honor, patriotismo y vasallaje.
CARTAS MARRUECAS, de Cadalso
Ejemplo de convivencia y contraste de culturas
Las Cartas marruecas no fueron publicadas en vida de Cadalso, aunque, al parecer durante los últimos años de su vida ya empezaron a
leerse entre sus amistades.
La primera edición fue en 1793 por la imprenta de Antonio Sánchez. A juzgar por la información que dan las cartas, éstas debieron ser
escritas entre 1773-1774, a través de su contacto con el Círculo de Salamanca.
Algunos críticos piensan que algunas cartas fueron escritas con anterioridad (como la Carta número 43, en 1768), por la que éstas no
tienen un orden cronológico.
La obra se compone de 90 cartas que entrecruzan tres corresponsales (Gazel, Ben-Beley y Nuño). Gazel es un joven marroquí que
viene a España acompañando al embajador marroquí y se ha quedado en España. Ben-Beley es un anciano marroquí maestro de
Gazel, que adoptó a éste como hijo cuando quedó huérfano (carta 18). Nuño es un español con quien Gazel ha trabado amistad, y que
se encuentra en un momento de su vida propenso a la melancolía y con un cierto escepticismo sobre los asuntos que le rodean (carta
número 1 "se encuentra encerrado en sí mismo"). Nuño ayuda a Gazel a comprender los asuntos de España y advertir los asuntos
verdaderos de los falsos.
No estamos ante una novela, y al autor no le preocupa de manera excesiva caracterizar los personajes, pero podemos extraer algunas
características de ellos. Gazel demuestra ser un muchacho listo, abierto a conocer un país supuestamente moderno, es apasionado
(típico de su edad) por impresiones superficiales que Nuño le hace matizar, comprender en su justa medida.
En la carta 11, Gazel alaba extraordinariamente la familiaridad del trato social de los españoles en las tertulias, es una alabanza
espontánea. Nuño le hace ver la vanidad que existe detrás de los personajes que tienen las conversaciones. Cada uno representa un
extremo: la juventud frente al escepticismo de Nuño. Progresivamente parece observarse en Gazel el cambio en su mirada crítica, de
acuerdo con las opiniones de Nuño, las cartas se asemejan a un aprendizaje.
Nuño es un personaje típicamente escéptico a pruebas de desengaños, juzga a las personas desapasionada e irónicamente. Se define a
sí mismo como un filósofo estoico. Cadalso se identifica con él. Nuño funciona como otro yo de Cadalso, sin embargo, también se
desdobla en los otros dos personajes. Gazel es el Cadalso joven. Sin embargo, esta teoría no está tan claro en el caso de Ben-Beley,
siempre que intervenga en asuntos de moralidad (en 66 de las 90 cartas, Gazel se dirige a Ben-Beley para contarle sus experiencias, y
éste le contesta en 8 cartas en un lenguaje florido y solemne muy distinto al de los otros dos). Ese lenguaje ayuda a distanciar a Ben-
Beley y es un artificio de distancialidad (en el final de la carta 18 y principios de la 19, Cadalso es superado por su propia escritura).
INTENCIONALIDAD DE LA OBRA
Cadalso prende hacer una "crítica de la nación", profundizar en la esencia de los problemas que han hecho que su patria sea "el
esqueleto de un gigante". Cadalso inicia el tema de España, que continuará Larra, los Regeneracionistas, la Generación del 98, hasta
nuestros días.
Espacial: la sociedad española del XVIII sufre para Cadalso un lastre de vicios y abusos que deben ser criticados, y a ellos se lanza
Cadalso.
Como la crítica a la relajación de costumbres (carta 11), o el dominio de la frivolidad y el lujo, centrándolo en la esclavización de la
sociedad a los dictámenes de la moda extranjera. Cadalso no critica el lujo en sí, sino al lujo despilfarrador, y el extranjero porque no
produce riqueza a España, dice que se ha de lograr el lujo nacional (carta 41); Cadalso ironiza también sobre la nobleza hereditaria y
desprecia la heráldica (carta 13); Crítica a la sociedad: Cadalso como literato la centra en ocasiones en crítica a la interpretación
hipócrita y falseada de tantas palabras (carta 8), la crítica al uso de galicismos pertenece al mismo tipo de ironía, no critica el galicismo
desde una postura castista o nacionalista, sino como falsa apariencia (carta 35); Se critican las bodas de conveniencia, las discusiones
innecesarias, la abundancia de petimetres, la corrupción y el grupo social de los tecnócratas (carta 34); En todas estas críticas se
deduce que los os europeos, y en concreto los españoles, se envanecen con este nuevo siglo, pero no se debían "alucinar de la
apariencia, sino ir a lo sustancial".
Moral: vicios generales de todo tipo que afectan a la moral y a la ética humana son criticados: desde el afán de los hombres por
ridiculizarse unos a otros (carta 18) hasta las desavenencias de padres e hijos (carta 15). Critica el excesivo apego de los hombres al
mundo, y el desapego del mundo en los hombres importantes. La mala amistad (carta 46), el lujo. Encontramos común a todos esos
ataques el enfrentamiento entre las apariencias y lo real, lo sustancial a lo que él llama esencial. Cuando Cadalso critica todo esto,
critica sobre todo las apariencias falsas.
Parte de una idea previa, preconcebida de lo que esencial. En la carta cuarta dice que "no nos dejemos alucinar de la apariencia y
vamos a lo sustancial". Cadalso se basa en una creencia, en una escala de valores por encima de las realidades de espacio y tiempo,
históricas; porque era un filósofo, un intelectual moderado para que España conquistase una prosperidad material, un prestigio
natural.
Estaba influido por lo que llamábamos un "mecanismo regresivo", pretendía hacer andar atrás hacia una cierta época.
Cadalso crea una España típica e intranscendental, una España verdadera que conquista sus ventajas, su progreso, debido a una
superioridad moral.
Esa España mística se ha realizado bajo el reinado de los Reyes Católicos (carta 63), la España "verdadera" ha sido reemplazada por
una España "falsa" establecida en el siglo XVII "siglo que no nos ofrece cosa que pueda lisonjearnos". En el siglo XVIII esa España
"verdadera" ha sido sustituida por la España de las "apariencias", pero no de las "sustancias". Se arroga así Cadalso el ser que
desvelaba la máscara de las cosas, como un Sócrates de su época que ha de descubrirlas y enseñar lo sustancial que hay en ellas. Este
pensamiento es común a todo pensamiento conservador racional. El progreso en Cadalso es el accidente o conjunto de accidentes que
debe cambiar, pero ese progreso por sí solo no puede no puede modificar la sustancia intrínseca del hombre. Todos los siglos Cadalso
los encuentra muy parecidos a otros. El hombre en el siglo XVIII se enfrenta a los mismos problemas básicos que un hombre del siglo I.
En cierto modo esta visión corresponde más a los ascetas españoles que ven al hombre como un ser limitado y corrompido. En la carta
87, narra las limitaciones que tiene un intelectual progresista del siglo ilustrado.
ESTILO
-Presentación de situaciones, acciones y personajes (que a veces roza la anécdota e incluso el chiste): descripción.
El estilo de Cadalso carece de rasgos brillantes o eminentes caracterizadores e individualizantes (es la variedad de registros lo que más
le caracteriza). Su lengua responde a un ideal de claridad y precisión para lo que no rehuye ni del neologismo moderado ni del
arcaísmo. Tampoco él mismo queda inmune del contagio de ésta. Además encontramos agilidad expresiva, brevedad en la exposición,
variedad de ejemplos que lo sitúan como un gran progresista.
Jovellanos es el representante más genuino de la Ilustración española. Fue un hombre culto, abierto, fecundo y ejemplar que se
caracterizó siempre por un hondo patriotismo y una gran preocupación por los distintos problemas de España. Su espíritu crítico
y renovador se plasman en una preocupación constante por reformar las instituciones y costumbres vigentes.
Es asturiano, nacido en Gijón en 1744 de familia noble. Tras sus estudios de filosofía y leyes se dedica a la vida pública: Sevilla,
Madrid, Gijón, ... Durante su estancia en Sevilla entra en contacto con importantes ilustrados de la época (Olavide, ...). Su
ejercicio en Madrid como alcalde de Casa y Corte y como miembro activo de distintas academias y otras instituciones le sirve para
difundir las nuevas ideas.
Tras la muerte de Carlos III su suerte cambia: es apartado de la Corte con pretexto de un cargo en Asturias. En Gijón funda el
Instituto de Estudios Asturianos, con el que pretende favorecer el desarrollo de la región. Además publica una obra - el Instituto -
donde se enseñaba con espíritu crítico, abierto y moderno, ciencias naturales y lenguas modernas.
En 1797 Godoy le nombra Ministro de Justicia. Sin embargo las fuerzas reaccionarias opuestas a su espíritu reformador,
promueven su cese y lo logran. De nuevo regresa a Gijón. Se le acusa de hereje entre otras cosas, y en 1801 es detenido y
deportado a Mallorca donde es mantenido preso en la cartuja de Valldemosa y en el castillo de Bellver.
José Bonaparte le libera tras la invasión francesa (1808) y le ofrece un nuevo cargo de ministro. Jovellanos, con una salud muy
deteriorada ya, lo rechaza sin embargo y no duda en ponerse al lado de quienes se levantaron contra los invasores. Es suya la
frase: "Yo no sigo un partido, sino la santa y justa causa que sostiene mi patria."
El delincuente honrado
El delincuente honrado es una obra teatral de género lacrimógeno o sentimental de Gaspar Melchor de Jovellanos. La vena
sentimental tentó a los autores neoclásicos, que dejaron algunas de las mejores manifestaciones del género: El precipitado,
de Cándido María Trigueros,El viejo y la niña, de Leandro Fernández de Moratín.
Esta comedia lacrimosa de Jovellanos es una de las cumbres del género y una de las obras más renovadoras estética e
ideológicamente de su siglo en España. Escrita en prosa, desarrolla una historia de fuerte sabor melodramático centrada en un
personaje, Torcuato, que se ve a las puertas de la muerte por haber participado, años atrás, en un duelo donde mató al anterior
marido de su esposa. El descubrimiento de que el juez que lo condena es su propio padre no detiene la ejecución, sino que hace
más violento el patetismo de la historia, que tiene, no obstante, un final feliz gracias a la intervención del soberano.
La constante apelación al sentimiento, a la ternura y a la abundante efusión de lágrimas caracterizan la acción de El delincuente
honrado, en donde hay numerosos antecedentes del Romanticismo español, no solamente en el ambiente general de fatalismo,
sino en aspectos concretos de obras como La conjuración de Venecia y Don Álvaro o la fuerza del sino. La obra mantiene las
unidades clásicas, aunque Jovellanos se coloca en los límites de lo permisible en la teoría neoclásica: la acción sucede en distintos
lugares de una sola ciudad, Segovia, y tiene una duración superior a las veinticuatro horas.
Hay que unir el estudio de la Legislación con el de la historia jurídica para ver cómo han ido evolucionando las leyes y cómo han
dado lugar a otras.
Nuevos conceptos de cómo ser historiador, es decir, que se expliquen no sólo batallas y tratados, sino también progresos,
costumbres, errores, etc. que han podido condicionar la historia.
Es partidario de la evolución, no de la revolución, es decir, apoya las mejoras y las reformas progresivas, pero no los saltos en el
vacío.
Se muestra dispuesto a ayudar para profundizar en el estudio de la historia tal como él ha expuesto que debe hacerse.
Gran interés por los problemas lingüísticos, es decir, por la exactitud en el uso del lenguaje que se consigue con la lectura y el
estudio de la Literatura, no simplemente estudiando Gramática.
Elogio de Carlos III
En esta obra vemos síntesis de las ideas sobre la decadencia española y sobre el ideario reformador del despotismo ilustrado que
representaba Carlos III.
Según él, hay unas causas de la decadencia en España y son las siguientes:
(Ribera del Fresno, 1754-Montpellier, 1817) Escritor y magistrado español. Es el más importante poeta español del s. XVIII. Fue
catedrático de humanidades en Salamanca (1781), alcalde del crimen en Zaragoza (1789), oidor en Valladolid (1791) y fiscal en
Madrid (1797). Sufrió destierro en Medina del Campo (1798), confinamiento en Zamora (1800) y cárcel en Asturias (1808). Bajo el
régimen de José Bonaparte, fue consejero de Estado (1809) y presidente de la Junta de Instrucción Pública (1810). Tras la
restauración de Fernando VII, emigró a Francia. Sus tempranas lecturas de Locke, Leibniz, Montesquieu, Rousseau y de los poetas
Gessner, Thompson y Pope marcaron su primera etapa poética, en la que sobresalen sus composiciones anacreónticas, de cuyo
género fue el principal cultivador en España (La paloma de Filis; Besos de amor), y sus Poesías (1875), publicadas a instancias de
Jovellanos; las obras de su segunda etapa poética se caracterizan por su contenido filosófico y por su sentimentalidad
prerromántica; con posterioridad, su obra se orientó hacia el compromiso político y social ( A Llaguno, 1794; Sobre el fanatismo,
1795). Es también autor de una Defensa de la lengua castellana (1811).
Provenía de familia noble y desde joven heredó cinco villas, fue director del Seminario de Nobles de Vergara y participó en la
Sociedad Vascongada de Amigos del País.
Perteneció a los grupos más importantes de la cultura de la ilustración. Viajó a Francia a conocer las ideas nuevas que por allá
florecían, pero finalmente regresó a España.Dedicado a la música (tocaba muy bien el violín y la vihuela ) y la literatura, era con su
ingenio y rapidez de palabra satírica, el centro de entretenimiento de reuniones. Esto también le trajo ciertos problemas
aparejados, pues sus versos burlones y pícaros molestaron a más de uno, y hasta lo llevaron a juicio por causa de unos poemas
satíricos.
Fue un excelente fabulista ilustrado español, autor de las Fábulas morales (1781), destinadas a instruir a sus alumnos. Dichas
Fábulas están formadas por una colección de 137 apólogos que reciben las influencias de Esopo, Fedro, La Fontaine y John Gay.
En esa misma época, existió otro escritor español de fábulas, Tomás de Iriarte (1750-1791), con quien Samaniego mantuvo disputas
y polémicas.
FABULA III
EL MUCHACHO Y LA FORTUNA
A la orilla de un Pozo,
sobre la fresca yerba,
un incauto Mancebo
domía a pierna suelta.
«Gritóle la Fortuna:
Insensato, despierta;
¿no ves que ahogarte puedes,
a poco que te muevas?
Por ti y otros canallas
a veces me motejan,
los unos de inconstante,
y los otros de adversa.
Reveses de Fortuna
llamAis a las miserias;
¿por qué, si son reveses
de la conducta necia?
FABULA IV
LA CODORNIZ
Presa en estrecho lazo
la Codorniz sencilla,
daba quejas al aire,
ya tarde arrepentida.
«¡Ay de mí miserable
infeliz avecilla,
que antes cantaba.libre,
y ya lloro cautiva!
Perdí mi nido amado,
perdí en él mis delicias,
al fin perdílo todos
pues que perdí la vida.
¿Por qué desgracia tanta?
¿Por qué tanta desdicha?
¡Por un grano de trigo!
¡Oh cara golosina!»
El apetito ciego
¡a cuAntos precipita,
que por lograr un nada,
un todo sacrifican!
Juan del Valle y Caviedes
Juan del Valle y Caviedes (Porcuna (Jaén), 11 de abril de 1645 - Lima, 1697), conocido como «El poeta de la Ribera» fue un poeta
y dramaturgo nacido en España que vivió casi toda su vida en el Perú, y la excepción literaria de la literatura peruana del siglo
XVII, junto a otros como el Inca Garcilaso de la Vega o Juan de Espinoza Medrano.
[editar]Reseña Biográfica
Sus padres fueron Don Pedro del Valle y Doña María Caviedes. Al morir su padre en 1661, viajó a Lima siendo un niño, para vivir
con su tío materno Tomás Berjón de Caviedes, gobernador de Huancavelica. Regresó a España por sólo tres años cuando ya tenía
él veinte. Estuvo dedicado a la explotación de minas en Huancavelica, y se casó en 1671 en Lima con Beatriz de Godoy y Ponce,
dama de Moquegua, con quien tuvo seis hijos y luego enviudó. Luego de esto pasó muchas penurias y pobreza, y sufrió de
enfermedades. Sin embargo fue también un bohemio, y tenía amigos a los que leía y con los que festejaba sus escritos satíricos,
puyas y mordacidades. En su literatura hace burla tanto de los médicos como de los curanderos y del «Doctor Corcovado», su
archienemigo. Según algunas fuentes Del Valle dilapidó sus pocos ingresos y murió sumido en el alcoholismo.
Aunque en algunos libros se señala su fecha de nacimiento como 1652, en Porcuna (Andalucía), una placa recordatoria señala la
fecha de nacimiento de Caviedes como 1645.
Escribió poemas amorosos, religiosos, reflexiones morales y apuntes filosóficos. Sin embargo sobresale su libro de versos Diente
del Parnaso, en el que continúa la corriente satírica española iniciada por Quevedo. Gran parte de la vida cotidiana del Perú de
esta época está reflejada en esta obra de Caviedes y Diego Biñil Miranda.