El Aparato Ideologico, Althusser, Louis.
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Decimos que los AIE no se confunden con el aparato (represivo) de Estado. En qu consiste su diferencia? En un primer momento podemos observar que si existe un aparato (represivo) de Estado, existe una pluralidad de aparatos ideolgicos de Estado. Suponiendo que ella exista, la unidad que constituye esta pluralidad de AIE en un cuerpo no es visible inmediatamente. En un segundo momento, podemos comprobar que mientras que el aparato (represivo) de Estado (unificado) pertenece enteramente al dominio pblico, la mayor parte de los aparatos ideolgicos de Estado (en su aparente dispersin) provienen en cambio del dominio privado. Son privadas las Iglesias, los partidos, los sindicatos, las familias, algunas escuelas, la mayora de los diarios, las familias, las instituciones culturales, etc., etc. Dejemos de lado por ahora nuestra primera observacin. Pero ser necesario tomar en cuenta la segunda y preguntarnos con qu derecho podemos considerar como aparatos ideolgicos de Estado instituciones que en su mayora no poseen carcter pblico sino que son simplemente privadas. Gramsci, marxista consciente, ya haba previsto esta objecin. La distincin entre lo pblico y lo privado es una distincin interna del derecho burgus, vlida en los dominios (subordinados) donde el derecho burgus ejerce sus poderes. No alcanza al dominio del Estado, pues ste est ms all del Derecho: el Estado, que es el Estado de la clase dominante, no es ni pblico ni privado; por el contrario, es la condicin de toda distincin entre pblico y privado. Digamos lo mismo partiendo esta vez de nuestros aparatos ideolgicos de Estado. Poco importa si las instituciones que los materializan son pblicas o privadas; lo que importa es su funcionamiento. Las instituciones privadas pueden funcionar perfectamente como aparatos ideolgicos de Estado. Para demostrarlo bastara analizar un poco ms cualquiera de los AIE.
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Resulta entonces que la interpelacin a los individuos como sujetos supone la existencia de otro Sujeto, Unico y central en Nombre del cual la ideologa religiosa interpela a todos los individuos como sujetos. Todo esto est claramente escrito 20 en las justamente llamadas Escrituras. En aquellos tiempos, el Seor Dios (Yahv) habl a Moiss en la zarza. Y el Seor llam a Moiss: Moiss! Soy (precisamente) yo!, dijo Moiss, yo soy Moiss tu servidor, habla y yo te escuchar! y el Seor habl a Moiss y dijo: Yo Soy El que Soy. Dios se defini a s mismo como el Sujeto por excelencia, aquel que es por s y para s (Yo soy Aquel que soy), y aquel que interpela a su sujeto, el individuo que le est sometido por su interpelacin misma, a saber el individuo denominado Moiss. Y Moiss, interpelado-llamado por su Nombre, reconociendo que era precisamente l quien era llamado por Dios, reconoce que es sujeto, sujeto de Dios, sujeto sometido a Dios, sujeto por el Sujeto y sometido al Sujeto. La prueba es que lo obedece y hace obedecer a su pueblo las rdenes de Dios. Dios es pues el Sujeto, y Moiss, y los innumerables sujetos del pueblo de dios, sus interlocutores-interpelados: sus espejos, sus reflejos. Acaso los hombres no fueron creados a imagen de Dios? Como toda la reflexin teolgica lo prueba, mientras que El podra perfectamente prescindir de ellos... Dios necesita a los hombres, el Sujeto necesita a los sujetos, tanto como los hombres necesitan a Dios, los sujetos necesitan al Sujeto. Mejor dicho: Dios necesita a los hombres, el gran Sujeto necesita a los sujetos incluso en la espantosa inversin de su imagen en ellos (cuando los sujetos se revuelcan en el desenfreno, en el pecado). Mejor aun: Dios se desdobla y enva su Hijo a la tierra, como simple sujeto abandonado por l (la larga queja del Huerto de los Olivos que termina en la Cruz), sujeto pero tambin Sujeto, hombre pero Dios, para cumplir aquello para lo cual se prepara la Redencin final, la Resurreccin del Cristo. Dios necesita pues hacerse hombre l mismo, el Sujeto necesita convertirse en sujeto, como para demostrar empricamente, de manera visible para los ojos, tangible para las manos (vase Santo Toms) de los sujetos que, si son sujetos sometidos al Sujeto, es nicamente para regresar finalmente, el da del Juicio Final, al seno del Seor, como el Cristo, es decir al Sujeto. 21 Descifremos en lenguaje terico esta admirable necesidad del desdoblamiento del Sujeto en sujetos y del Sujeto mismo en sujeto-Sujeto.
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El mecanismo de la ideologa en general es una cosa. Se ha visto que se reduca a ciertos principios contenidos en pocas palabras (tan pobres como las que definen segn Marx la produccin en general, o en Freud el inconsciente en general). Si hay en l algo de verdad, ese mecanismo es abstracto con respecto a toda formacin ideolgica real.
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* Antiguamente, obreros pertenecientes a un mismo gremio (compagnonnage ). (N. del T.) 14 Utilizo adrede este trmino tan moderno. Pues aun en esferas comunistas es lamentablemente moneda corriente explicar las desviaciones polticas (oportunismo de derecha o de izquierda) por la accin de una camarilla. 15 Que utiliza la categora jurdica de sujeto de derecho para convertirla en una nocin ideolgica: el hombre es por naturaleza un sujeto.
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