La Columna de Opinión
La Columna de Opinión
La Columna de Opinión
La columna
La columna es un espacio fijo y
peridico en un medio. Generalmente,
est a cargo de un periodista, pero
tambin puede ser escrita por un
especialista como por ejemplo o mdico o
un deportista. Normalmente, una
columna tiene el objetivo de mostrar
puntos de vista ante una noticia y pude
expresar un punto de vista diferente al
editorial.
Columna de autor
Generalmente identificadas con el nombre del periodista ! a veces, incluso "asta con su
foto#, estn basadas en la idea de crear cierta complicidad entre el autor y el lector dadas
por la familiaridad y la frecuencia con $ue aparecen sus comentarios.
Columna de tema
%n este caso no estn a cargo de un solo columnista ,sino de varios $ue vierten su opinin
sobre un mismo tema. %l tema puede ser el deporte, las noticias internacionales o un
suplemento de salud o cocina.
La columna es el gnero periodstico que analiza, interpreta y orienta al pblico
sobre un determinado suceso con una asiduidad, extensin y ubicacin
concretas en un medio determinado.
Algunos estudiosos sitan tambin el origen del auge de la columna en la
progresiva complejidad de los peridicos. uando crecen y su organizacin se
complica, los editoriales que !rmaba el director y con los que orientaba a la
opinin se vuelven annimos" o, si el nombre sigue atrayendo seguidores, se
convierten en !rmas.
La columna es un arte y una tcnica que se adapta, por tanto, a la
personalidad del articulista. #e a$ el %uerte grado de identi!cacin que existe
entre el comentarista y el lector. &no de los secretos de la columna es la
atms%era de intimidad que promueve en el lector. La columna responde a la
necesidad de conocer al que $abla e indica la pre%erencia del lector por el
contacto directo con un individuo m's que con el producto editorial annimo de
una corporacin.
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La columna es un ejemplo de lenguaje periodstico personal, un instrumento de
comunicacin que persigue la de%ensa de unas ideas, la creacin de un estado
de opinin y la adopcin de una postura determinada respecto a un $ec$o
actual y relevante. )s un comentario valorativo, analtico y razonador con una
!nalidad idntica a la del editorial, crear opinin a partir de la propia. (u
di%erencia estriba en la identidad individual de la !rma. )s un ve$culo de
comunicacin personal que $uye de la anonimia y la solemnidad del editorial"
de la densidad y la pro%undidad del artculo y de la simpleza y la asepsia de la
noticia.
-ay tantas columnas como columnistas. )l estilo es libre y re.eja las
$abilidades discursivas del autor. )l columnista dice lo que quiere y cmo
quiere. /eneralmente, el medio busca una correlacin entre su concepcin
ideolgica y las opiniones expresadas en las columnas. A veces, se incluyen
comentarios que distorsionan la lnea editorial del peridico porque se cree
necesario o%recer una imagen plural del mismo.
#esde un punto de vista %ormal, la columna tiene una serie de caractersticas
b'sicas, extensin uni%orme, ubicacin !ja, libertad tem'tica, periodicidad en la
di%usin, asiduidad, ttulo genrico y un tratamiento tipogr'!co especial que la
distingue del resto de contenidos de la p'gina donde se incluye.
omo gnero periodstico, la columna tiene tres caractersticas %undamentales
que con!guran su esencia, su periodicidad, la titulacin !ja en nombre y en
tipogra%a, y su car'cter eminentemente personal y emotivo. La columna es el
gnero periodstico que con una %recuencia determinada, interpreta, analiza,
valora y orienta al pblico respecto de sucesos noticiosos diversos.
A di%erencia del editorial y del artculo, no es preciso que el columnista asuma
una posicin ante los $ec$os. )l columnista escribe sobre asuntos conocidos,
pero a los cuales no se les $a prestado la debida atencin" o bien se interesa
por relatar alguna experiencia personal y para $acerlo aprovec$a algn suceso
noticioso.
La columna es el gnero periodstico de opinin que da lugar a un tipo de
comunicacin m's personal, de menos %ormalidad que el editorial o el artculo,
y que puede incluso proporcionar momentos de recreacin.
)scribir una columna no es tarea %'cil. 0equiere conocimiento del tema, pero
tambin $abilidad para proyectar una personalidad %uerte y atraer al pblico,
simpatizar con l y mantener su atencin.
)l columnista goza de amplia libertad tem'tica para expresar sus puntos de
vista, para de%ender una postura y para censurar el comportamiento de las
personas y de los grupos sociales.
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La distincin mayor entre editorial y columna tal vez estribe en que la gama de
tipos es muc$o mayor en el caso de la columna que en el del editorial. *uede
$aber columnas intrascendentes, sobre temas menores, mientras que un
editorial $a de tener necesariamente una trascendencia mayor. 1ambin en el
lenguaje del editorial $ay mayor limitacin de posibilidades que en la columna.
La columna puede oscilar desde un estilo grandilocuente $asta el m's ligero e
insustancial. Los editoriales, por el contrario, se mueven todos dentro de una
cierta uni%ormidad de lenguaje que responde al estilo literario que la empresa
adopta para exponer y ponti!car acerca de aquellas cuestiones que tienen la
su!ciente entidad social como para que el peridico se pronuncie acerca de
ellas.
#e todas %ormas, puede decirse que en el periodismo moderno $ay un
desplazamiento de cuestiones desde el editorial a otros gneros de opinin,
particularmente de aquellos comentaristas que tienen prestigio ante los
lectores y que gozan al mismo tiempo de la con!anza ideolgica del peridico.
)ste desplazamiento del editorial a la columna o el artculo sirve para
desdramatizar ciertos asuntos ante el pblico, siempre es pre%erible que se
equivoque un periodista que un peridico. *ero tambin se puede encontrar
una justi!cacin a esta tendencia en el mayor atractivo de lo personal y
!rmado %rente a lo annimo y colectivo.
)n teora, el columnista que !rma sus escritos puede expresarse con la mayor
libertad. *uede, de $ec$o, sustentar un punto de vista contrario al que
sostengan los editoriales del mismo peridico. *uede, incluso, contradecir las
ideas de los editores. -ay algunos peridicos que se es%uerzan en escoger
columnistas que sostienen puntos de vista totalmente opuestos a la poltica
editorial. Adem's de esto, est' %uera de toda duda que el lector busca un
columnista determinado y se identi!ca con l. )l columnista escribe para su
lector, que aunque es desconocido, de alguna manera le llegan sus escritos.
uando un columnista muy ledo se marc$a de un peridico a otro,
normalmente se lleva a un buen nmero de lectores que le siguen.
*or lo que se re!ere al contenido, se escriben columnas en las que se abordan
los temas m's variados, poltica, deportes, economa, sociales, radio, cine,
televisin y arte, entre otros.
La columna, como gnero periodstico de opinin, adopta la siguiente
estructura, 2ntroduccin, desarrollo 3comentarios4 y conclusin.
La estructura de la columna, en general, no puede ajustarse a un modelo
preestablecido, puesto que este gnero periodstico es el m's personal y libre
de todos. ada columnista integra su escrito como m's conviene a la
in%ormacin con que cuenta y al propsito de sus comentarios.
#e este modo, existen diversas opciones para redactar las columnas,
+. La columna que se escribe mezclando la in%ormacin y los comentarios.
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5. La columna de comentario, que slo usa la in%ormacin para re%erirse al
suceso, de manera que la mayor parte est' compuesta por los juicios del
columnista.
6. La columna esencialmente in%ormativa, pero que incluye algn comentario
para lograr el e%ecto argumentativo de la totalidad del texto.
)n cuanto al estilo, el tono de las colaboraciones de los columnistas puede ser
serio o ligero, %ormal o in%ormal, objetivo o subjetivo, etc. *or tanto, el estilo
resulta muy variado, narrativo, descriptivo, expositivo, argumentativo, como a
menudo sucede, puede ser una combinacin de dos o m's de estas %ormas
discursivas.
La eleccin de una u otra %orma de expresin ling7stica depende del tipo y de
la %uncin de la columna. *or ejemplo, el periodista que en su columna sugiere
un comentario mediante el uso de palabras, pero no lo $ace abiertamente,
utiliza principalmente la %orma expositiva. *ero si ordena los datos de tal
manera que el grado de inters vaya en aumento 3suspenso4, la %orma
narrativa resulta m's conveniente. (i su intencin es reproducir un suceso o
8pintar8 una situacin, la %orma del discurso adecuada es la descriptiva. *or
ltimo, si el propsito del columnista es convencer a los lectores con sus
comentarios, persuadirlos respecto de las ventajas o desventajas de su
proposicin central, la %orma indicada es la argumentacin.
*ara concluir, entre las recomendaciones generales para redactar la columna,
podramos aconsejar la redaccin de la columna en bene!cio social, evitando
presentar en ella los pleitos personales o los ataques a quienes no tienen igual
posibilidad de de%enderse que el columnista.
La columna es, en de!nitiva, el resultado de un acto de creacin individual, un
elemento de comunicacin que, dentro del 'mbito de los gneros de
solicitacin de opinin, re.eja la %orma de pensar de una persona determinada
y la posicin que $a adoptado respecto a un tema de cierta importancia.
Matrimonio homosexual: una discusin
retrica
&or 'uan &ablo Gutirre(
)e parece $ue la discusin sobre el matrimonio "omosexual es
singularmente retrica y los argumentos $ue esgrimen los $ue
se oponen a ella pecan de una circularidad supina* el
matrimonio es una institucin eminentemente civil, cuya
existencia antropolgica es incluso anterior a la civili(acin
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misma !comen( a existir desde $ue el cromagnon agarr del pelo a una mujer y se la llev
a vivir con l a las cavernas rupestres#, por lo tanto, como derec"o civil $ue es, no
corresponde te+irlo de una determinada ideolog,a o religin !para efectos de transparencia
dir $ue soy catlico desde la cuna#, por lo tanto, no corresponde $ue conforme a la
naturale(a del ser "umano, se coarte la manifestacin de este derec"o civil para con un
sector minoritario pero no por eso menos importante en nuestra sociedad. Creo $ue negar la
posibilidad de $ue "aya matrimonio !y s, matrimonio, no unin civil o contrato o acuerdo,
no es necesario someter a una segunda discriminacin intentando ma$uillar el mecanismo
jur,dico# entre personas del mismo sexo adems de atentar contra el principio de igualdad
ante la ley!dictada por un estado laico desde -./0# es $uitarle al derec"o su carcter
objetivo, por cuanto en la realidad emp,ricamente sabemos $ue existen muc"as parejas $ue
se encuentran en esta situacin !no es el n1mero en todo caso lo $ue debe motivar su
regulacin* aun$ue existiera una sola pareja debe "aber matrimonio "omosexual#y merecen
tener una solucin ms all de lo puramente legal $ue les permita sentirse dignamente
reconocidos por el estado c"ileno y por la sociedad en general. La 2glesia est en su
derec"o a manifestar su opinin, como puede estarlo la 'unta de 3ecinos n4- de
Concepcin, el presidente del curso de mi "ermano c"ico, etc, pero no se debe confundir el
manifestar su opinin con el entrometerse indebidamente en temas $ue ata+en a los
derec"os "umanos de todos y todas. Creo tambin prudente se+alar $ue en este tema a la
derec"a se le cae toda la argumentacin cuando se+ala $ue en los temas de estado debe
primar lo tcnico, por cuanto si fuera por consideraciones tcnicas "ace rato $ue este tema
deber,a estar resuelto. 5 no slo este tema, sino $ue otra arista en particular la adopcin
por parte de personas del mismo sexo. Confieso $ue no creo ser llamado a dilucidar esa
interrogante. Creo $ue $uienes estn autnticamente ms capacitados son los siclogos, y
seg1n tengo entendido tanto ellos, como innumerables testimonios de "ijos criados por
padres "omosexuales son abrumadoramente favorables al establecimiento de esa
posibilidad.
La ciencia avisa y los polticos miran hacia
otro lado
&or 6ida 3ila
3arios informes sobre cambio climtico "an
visto la lu( estos d,as, coincidiendo con un
verano !boreal# lleno de fenmenos
meteorolgicos extremos en todo el mundo.
La 6dministracin Nacional 7cenica y
6tmosfrica de %stados 8nidos !N766#
desvela, en su 1ltimo informe mensual, $ue el
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mes de junio de este a+o "a sido el ms caluroso de la 9istoria. La temperatura media de la
:ierra y la de la superficie de los ocanos "a sido de -;,/<C* =,;><C por encima del
promedio del siglo ?? !-0,0<C#. &ero no se trata solo del mes de junio. %l periodo enero@
junio tambin tiene el rcord respecto al A.?? en cuanto a calor.
Bui(s lo ms sorprendente de este informe sea el "ec"o de $ue ms del .=C del
calentamiento de los 1ltimos 0= a+os se detecta en aguas marinas, lo $ue e$uivale a arrojar
al mar la energ,a necesaria para mantener 0== bombillas de -==D encendidas para cada
uno de los "abitantes del planeta. %l resultado del calentamiento del mar es, como sabemos,
la expansin de los ocanos y el derretimiento del "ielo marino como el del Ertico, $ue es
este a+o un -=,;C menor $ue la media del periodo -.F.@/===.
7tras oficinas meteorolgicas mundiales "an presentado tambin informes en los $ue
declaran el mes de junio como el cuarto ms clido de la 9istoria !6ustralia# o califican el
primer semestre de /=-= como el ms seco desde -./. !Geino 8nido# y, en %spa+a, la
6gencia %statal de )eteorolog,a proyecta aumentos de la temperatura de "asta seis grados
y una disminucin considerablemente las lluvias a lo largo de este siglo.
&ero, al margen de los datos cient,ficos, basta con ver las noticias para ser conscientes del
poder destructor $ue est teniendo el cambio climtico este verano una de las peores olas
de calor en %stados 8nidos, las peores inundaciones de la dcada en una parte de C"ina y el
mes de junio ms seco de la "istoria en la otra, la peor se$u,a de los 1ltimos -H= a+os en
Gusia, temperaturas de H0 grados en los pa,ses nrdicos y en %spa+a, Iun verano de
infiernoJ
9oy empie(a en Konn otra ronda de negociaciones para preparar los acuerdos $ue deben
tomarse, el prximo mes de noviembre, en la cumbre climtica de Canc1n. La reunin se
inaugura con la mala noticia de $ue la 6dministracin 7bama no va a aprobar su ley de
cambio climtico este a+o.
%s curioso $ue los informes sobre cambio climtico de las agencias oficiales de todo el
mundo sean tan contundentes y $ue las posiciones pol,ticas y los compromisos de
reduccin de emisiones sigan dejando tanto $ue desearL
%n la crisis climtica no sirve el recurso fcil de Mmirar "acia otro ladoN por$ue no "ay
territorio en el mundo $ue no est sufriendo ya los impactos del cambio climtico tanto a
nivel ecolgico, como econmico y social. O3an a $uedarse nuestros pol,ticos con los ojos
cerrados para siempreP
QQQQQQ
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