Sobre Las Relaciones de Producción
Sobre Las Relaciones de Producción
Sobre Las Relaciones de Producción
lo
que
necesitan
para
vivir,
para
estudiar,
curarse
y
divertirse.
Fuera
del
hombre,
ningn
animal
es
capaz
de
producir
lo
que
necesita
para
vivir,
aunque
algunos
de
ellos
llegan
a
fabricar
sus
viviendas,
como
sucede
con
los
pjaros
que
hacen
sus
nidos;
y
eso
que
hay
animales
muy
inteligentes,
por
ejemplo,
los
monos
y
los
elefantes,
y
los
hay
que
repiten
algunas
palabras
de
las
que
les
oyen
a
los
seres
humanos,
como
la
cotorra
y
el
loro.
Al
desarrollarse
a
lo
largo
de
los
siglos
el
proceso
de
la
produccin
vinieron
a
quedar
establecidos
ciertos
tipos
de
relacin
de
los
hombres
y
las
mujeres
con
todo
lo
que
serva
para
producir
algo.
Lo
que
serva
y
sirve
para
producir
era,
en
primer
lugar,
la
tierra,
de
la
cual
se
sacan
directa
o
indirectamente
la
mayora
de
los
alimentos,
los
.minerales
como
el
hierro
y
muchas
materias
primas,
como
el
algodn,
del
cual
se
hacen
telas;
en
segundo
lugar,
sirven
para
la
produccin
las
mquinas
que
se
usan
en
las
fbricas
y
en
el
transporte
de
mercancas
o
de
pasajeros.
Esas
cosas
que
se
usan
en
la
produccin
de
artculos
necesarios
para
la
humanidad
se
llaman
medios
o
bienes
de
produccin.
Las
personas
acabaron
relacionndose
con
los
medios
o
bienes
de
produccin,
unas
como
propietarias
o
dueas,
y
otras
que
forman
la
gran
mayora
como
trabajadoras
que
aplican
sus
fuerzas
a
hacer
producir
las
tierras
y
las
mquinas
a
cambio
de
un
salario
que
les
pagan
los
dueos
de
esos
medios
de
produccin.
Debido
a
su
condicin
de
dueos
de
esos
medios
de
produccin,
stos
se
quedan
con
los
productos,
y
esos
productos
forman
parte
de
lo
que
se
llama
cientficamente
capital.
Aquellos
que
no
son
dueos
ni
de
la
tierra
ni
de
las
mquinas
ni
del
dinero
ni
de
las
materias
primas
slo
disponen
de
sus
cuerpos
y
de
su
tiempo,
o
lo
que
es
lo
mismo
slo
disponen
de
lo
que
se
llama,
tambin
cientficamente,
fuerza
de
trabajo,
y
como
eso
es
lo
nico
que
tienen,
eso
es
lo
que
venden
para
poder
mantenerse.
Y
a
quin
se
lo
venden?
Pues
a
los
dueos
de
las
tierras,
las
mquinas
y
el
dinero
y
las
materias
primas,
es
decir,
a
los
dueos
de
los
medios
de
produccin.
Los
dueos
de
los
medios
de
produccin
se
llaman
capitalistas
o
burgueses;
los
que
venden
su
fuerza
de
trabajo
se
llaman
obreros
o
proletarios.
l
llegar
aqu
tenemos
que
repetir
de
otra
manera
los
conceptos
que
acaban
ustedes
de
leer
porque
hay
que
aclarar
ciertas
cosas
debido
a
que
abunda
la
gente,
y
hasta
gente
muy
leda,
que
cae
en
confusiones
cuando
se
trata
de
establecer
qu
es
eso
del
lugar
que
ocupa
cada
quien
en
las
relaciones
de
produccin;
pues
sucede
que
una
persona
puede
ser
duea
de
uno
de
todos
los
medios
de
produccin,
esto
es,
de
tierras,
mquinas
o
dinero,
y
sin
embargo
puede
ser
que
no
ocupe
lugar
alguno
en
las
relaciones
de
la
produccin,
es
decir,
puede
ser
que
no
sea
un
capitalista,
as
como
se
da
con
mucha
frecuencia
el
caso
de
personas
que
disponen
de
su
fuerza
de
trabajo,
o
lo
que
es
lo
mismo,
de
su
cuerpo
y
de
su
tiempo,
y
sin
embargo
no
son
obreros
porque
no
han
conseguido
donde
trabajar;
y
cualquiera
de
los
que
leen
esto
conoce
sin
duda
a
muchos
hombres
y
mujeres
que
no
estn
trabajando.
Por
ejemplo,
si
usted
tiene
diez
mil
tareas
de
tierras
buenas,
en
las
que
no
se
produce
nada
porque
nadie
las
trabaja,
usted
es
un
propietario,
pero
no
es
un
capitalista;
si
usted
tiene
una
fbrica
de
cualquiera
cosa,
pero
esa
fbrica
no
produce
nada,
aunque
los
edificios
y
las
mquinas
valgan
un
milln
de
pesos,
usted
es
dueo
de
una
fbrica
muerta,
pero
no
es
un
capitalista;
si
usted
tiene
cinco
millones
de
pesos
enterrados
en
un
hoyo,
y
no
usa
ese
dinero
en
ningn
negocio,
usted
es
un
millonario,
pero
no
es
un
capitalista.
Lo
que
se
llama
cientficamente
capital"
es
nicamente
la
suma
de
los
medios
de
produccin
que
estn
produciendo
algo,
ms
los
artculos
que
esos
medios
estn
produciendo.
Por
eso
los
dueos
de
medios
de
produccin
que
no
producen
pueden
ser
ricos,
pero
no
son
capitalistas,
no
son
burgueses.
Con
esto
queda
dicho
que
las
palabras
rico
y
burgus
no
significan
lo
mismo,
y
que
un
hombre
puede
ser
rico
sin
que
sea
burgus.
Para
que
el
dueo
de
medios
o
bienes
de
produccin
sean
tierras,
sean
mquinas,
sea
dinero
pase
a
ser
capitalista
o
burgus,
tiene
que
entrar
en
relacin
econmica
con
personas
que
le
vendan
su
fuerza
de
trabajo,
es
decir,
con
hombres
y
mujeres
que
pasen
a
ser
obreros
o
proletarios;
y
as
mismo
para
que
hombres
y
mujeres
que
disponen
de
fuerza
de
trabajo
pasen
a
ser
obreros
o
proletarios
tienen
que
entrar
en
relacin
econmica
con
un
dueo
de
medios
de
produccin.
Esas
relaciones
se
establecen
mediante
un
acuerdo
en
virtud
del
cual
el
dueo
de
los
medios
de
produccin
les
pagar
a
los
que
disponen
de
su
fuerza
de
trabajo
tantos
pesos
por
da
o
por
semana
o
por
mes
de
trabajo
a
cambio
de
que
stos
trabajen
para
l
tantas
horas
diarias
o
semanales
o
mensuales.
Como
ustedes
ven,
para
que
se
den
las
relaciones
de
produccin
es
necesario
que
adems
de
la
relacin
de
las
gentes
con
los
medios
de
produccin
se
establezcan
a
su
vez
relaciones
productivas
entre
dos
clases
de
personas
diferentes;
entre
aquellas
que
poseen
los
medios
de
produccin
y
las
que
venden
su
fuerza
de
trabajo.
Antes
de
que
se
establezcan
esas
relaciones
econmicas
y
productivas,
ni
los
primeros
son
capitalistas
ni
los
segundos
son
obreros;
pues
los
primeros
son
nicamente
dueos
de
algo
que
sirve
para
producir
y
los
segundos
son
exclusivamente
dueos
de
fuerza
de
trabajo,
y
si
no
se
ponen
de
acuerdo,
si
no
llegan
a
un
acuerdo
para
reunir
ambos
factores
de
la
produccin,
no
se
produce
nada;
pero
tan
pronto
se
han
puesto
de
acuerdo,
los
ltimos
empiezan
a
trabajar
con
las
mquinas
y
las
materias
primas
y
la
tierra
y
comienzan
a
salir
los
productos
que
la
gente
va
a
consumir;
es
decir,
ha
comenzado
a
producirse
lo
que
se
llama
capital,
y
los
dueos
de
los
medios
de
produccin
quedan
convertidos
en
capitalistas
o
burgueses
y
los
que
trabajan
las
mquinas
o
la
tierra
han
quedado
convertidos
en
obreros
o
proletarios.
Como
se
advierte,
se
han
establecido
unas
relaciones
de
produccin
determinadas,
en
las
cuales
una
clase
ocupa
un
lugar,
el
lugar
de
los
capitalistas,
y
otra
clase
ocupa
otro,
el
lugar
de
los
obreros;
por
esa
razn
la
clase
social
a
que
pertenece
una
persona
se
determina
por
el
lugar
que
ocupa
en
las
relaciones
de
produccin,
no
por
su
nivel
de
vida
ni
por
la
riqueza
que
posea.
Supongamos
que
un
hijo
de
un
hombre
muy
rico,
de
un
millonario,
tiene
el
capricho
de
entrar
a
trabajar
en
una
fbrica
como
obrero,
cosa
que
ha
pasado
ya
ms
de
una
vez
en
otros
pases;
pues
bien,
mientras
es
obrero,
sea
por
un
mes,
por
un
ao
o
por
dos
aos,
ese
hijo
de
millonario
es
un
obrero,
porque
el
lugar
que
ocupa
en
las
relaciones
de
produccin
es
el
de
un
obrero,
no
el
de
capitalista.
Si
ese
joven
sale
de
la
fbrica
en
un
auto
pescuezo
largo
y
va
a
dormir
a
la
casa
de
su
pap,
que
es
lujosa
y
tiene
piscina,
diremos
que
su
nivel
de
vida
es
el
de
un
ricacho,
y
sin
embargo
su
lugar
en
las
relaciones
de
produccin,
que
est
Qu
pas
en
1822,
al
quedar
abolida
la
esclavitud?.
Pasamos
entonces
a
tener
burguesa?
No;
no
pasamos
a
tener
burguesa
porque
la
pobreza
y
el
atraso
del
pas
no
lo
permitan.
Despus
del
1800
la
burguesa
comercial
de
algunos
pases
europeos
tena
representantes
aqu,
especialmente
en
Puerto
Plata,
dedicados
a
comprar
tabaco
y
a
importar
algunos
artculos,
especialmente
tejidos
y
herramientas
agrcolas
como
hachas,
machetes
y
picos;
esos
representantes
de
la
burguesa
comercial
extranjera
usaban
a
los
pequeos
comerciantes
de
Santiago
como
intermediarios
para
comprar
el
tabaco
y
para
vender
los
artculos
de
importacin,
y
en
la
Capital
se
desarroll
tambin
un
pequeo
comercio;
pero
como
veremos
en
otra
oportunidad,
los
pequeos
comerciantes
de
entonces,
as
como
los
cosecheros
de
tabaco,
eran
pequeos
burgueses;
no
formaban
una
burguesa.
Volviendo
atrs,
repetimos
que
los
indios
acabaron
convirtindose
en
una
clase
la
primera
clase
explotada
en
nuestro
pas,
pero
desaparecieron
rpidamente
y
pasaron
a
ser
sustituidos,
como
clase
explotada,
por
los
esclavos
negros.
Si
suponemos
que
el
lugar
que
ocupa
hoy
la
burguesa
en
las
relaciones
de
produccin
de
un
pas
desarrollado
fue
ocupado
en
el
nuestro
por
la
oligarqua
esclavista,
tenemos
que
llegar
a
la
conclusin
de
que
el
lugar
que
ocupan
actualmente
los
obreros
corresponde
al
que
ocupaban
entonces
los
esclavos.
Sin
embargo,
sa
sera
una
apreciacin
falsa,
pues
aunque
la
gente
diga
que
la
historia
se
repite,
no
es
verdad
que
se
repite;
lo
que
pasa
es
que
cada
cierto
tiempo
ocurren
cosas
parecidas
a
otras
que
ya
han
ocurrido.
En
primer
lugar,
la
explotacin
a
que
fueron
sometidos
los
esclavos
en
dos
pocas
cortas
de
nuestra
historia
fue
mucho
ms
dura
que
la
que
sufren
los
obreros
actualmente;
pero
tambin
hay
que
aclarar
que
durante
los
tres
siglos
que
dur
la
esclavitud
en
nuestro
pas,
con
la
excepcin
de
las
dos
pocas
a
que
nos
hemos
referido
hace
un
momento,
los
esclavos
de
aqu
fueron
tratados
de
manera
bastante
diferente
a
como
fueron
tratados
los
de
Hait,
Cuba
y
los
Estados
Unidos
en
los
siglos
XVIIII
y
XIX.
lucha
de
esclavos
contra
amos
fue
muy
dura
y
al
fin
qued
injertada
dentro
de
la
guerra
de
^dependencia
que
comenz
en
1868,
y
menos
violenta
que
la
de
los
Estados
Unidos,
donde
acab
provocando
^llamada
guerra
civil
o
de
Secesin
que
estall
en
abril
de
1861
y
dur
hasta
abril
de
1865.
Como
es
claro,
aunque
la
esclavitud
nuestra
fuera
patriarcal,
los
esclavos
no
podan
estar
contentos,
porque
no
reciban
salario
a
cambio
de
su
trabajo
y
tenan
un
nivel
de
vida
bajsimo.
Es
verdad
que
no
trabajaban
doce,
quince
o
veinte
horas
diarias
bajo
el
ltigo
de
los
capataces;
no
les
ponan
cepos
en
las
piernas
cuando
hacan
algo
que
molestaba
a
los
amos,
cosas
que
les
hacan
a
los
esclavos
de
los
Estados
Unidos,
de
Hait
y
de
Cuba;
pero
no
se
les
pagaba
ni
un
centavo
por
su
trabajo,
de
manera
que
vivan
con
lo
que
ellos
mismos
producan,
como
Dios
les
ayudaba,
y
esa
situacin
no
poda
ser
agradable
para
ellos.
Si
los
amos
de
esclavos
no
sometan
a
stos
a
una
explotacin
despiadada,
el
resultado
era
un
aminora-
miento
de
la
lucha
de
clases,
y
en
consecuencia,
un
estado
general
del
pas
con
muy
pocos
acontecimientos
histricos
de
importancia
en
que
tomaran
parte
los
esclavos
como
iniciadores
o
como
fuerza
decisiva;
y
efectivamente
as
fue.
El
cimarronaje,
es
decir,
la
fuga
de
esclavos
que
se
iban
a
los
montes
y
atacaban
de
vez
en
cuando
algunos
lugares,
fue
menos
violento
en
nuestro
pas
que
en
Jamaica,
en
Hait
o
en
Cuba.
Aunque
la
oligarqua
esclavista,
as
fuera
patriarcal,
termin
entre
nosotros
en
1822,
en
este
siglo
hemos
tenido
un
nuevo
tipo
de
oligarqua
que
no
descansa
en
la
esclavitud;
y
en
el
futuro
hablaremos
de
esta
oligarqua.
Por
ahora
lo
que
debe
decirse
es
que
alguna
gente
ha
credo
que
las
relaciones
de
produccin
que
haba
en
Santo
Domingo
en
los
primeros
siglos
de
nuestra
historia
eran
feudales,
y
por
eso
se
ha
hablado
a
menudo
de
economa
feudal,
de
feudalismo
y
de
seores
feudales
en
nuestro
pas.
Pero
se
trata
de
una
confusin.
En
Santo
Domingo
no
se
conocieron
nunca
las
relaciones
feudales
de
produccin.
La
reina
Isabel
la
Catlica
pretendi
establecer
aqu
algo
parecido
al
feudalismo
cuando
orden
las
encomiendas
de
indios;
y
sin
embargo
ya
para
entonces
en
Castilla,
que
era
la
parte
Espaa
de
la
cual
era
ella
reina,
no
haba
feudalismo
y
los
propios
conquistadores
espaoles
que
haba
en
nuestra
isla
no
tenan
idea
de
cmo
haba
sido
ese
rgimen;
por
eso
convirtieron
rpidamente
el
sistema
de
las
encomiendas
en
esclavitud
y
la
esclavitud
de
hecho,
aunque
no
legal,
de
los
indios
condujo
inmediatamente
a
la
esclavitud
legal
de
los
negros
africanos.
El
sistema
esclavista
no
era
feudal;
era
oligrquico,
y
su
definicin
cientfica
es
oligarqua,
no
feudalismo.