Cuidado Paternal Lucia Camin
Cuidado Paternal Lucia Camin
Cuidado Paternal Lucia Camin
NDICE
RESUMEN
1. APROXIMACIN CIENTFICA AL ESTUDIO DEL PARENTAMIENTO
1.1 Una aproximacin etolgica al estudio del parentamiento
1.1.1 Parentamiento y mundo animal
1.1.2 Parentamiento en humanos
1.2 Neurobiologa del parentamiento
2. EL PARENTAMIENTO: UN ENFOQUE CLNICO
2.1 Psicoanlisis y cuidado parental
2.2 Gestalt y parentalizacin
2.3 Anlisis Transaccional y parentalizacin
2.3.1 Los Estados del Yo y la influencia paterna
2.3.2 El guin de vida y el cuidado parental
2.4 Etapas del desarrollo evolutivo del nio y sus necesidades
3. EL REPARENTAMIENTO: RESOLUCIN DE CONFLICTOS INFANTILES
3.1 Las psicoterapias humanistas y el cuidado parental
3.2 Reparentamiento en psicoterapia
3.2.1 Un primer paso: toma de consciencia y descontaminacin
3.2.2 El Reparentamiento en la prctica
Los inicios de un nuevo enfoque: El reparentamiento de los Shiff
El vnculo teraputico: la reparentalizacin transversal
Parentalizacin correctora
El reparentamiento puntual
El Minithon del desarrollo
La entrevista con el Padre
El autoparentamiento
CONCLUSIONES
BIBLIOGRAFA
RESUMEN
El cuidado parental, o parentamiento, se define como el trato que los progenitores
ofrecen a sus descendientes. Se manifiesta en todos los comportamientos de proteccin,
cuidado y sustento, tendentes a satisfacer las necesidades de sus hijos, especialmente
en las primeras etapas del desarrollo. Este trato parental, compartido por diferentes
especies, suscita ciertas preguntas de gran calado para comprender el funcionamiento
de
conflictos
parentales
tempranos,
conocidas
como
tcnicas
de
reparentamiento.
BOLBWY, J. Un enfoque etolgico de la investigacin del desarrollo infantil. 30:230-40. England: British Journal of Medical
Psychology, 1957.
2
CUADRA, J. Mdulo: Parentamiento y Reparentamiento. Madrid: Instituto Galene de Psicoterapia, 2010.
CASTRO-FRANCO, R et al. Del cuidado parental al refinamiento de una conducta para la sobrevivencia. Boletn de la
academia general de biologa. Mjico: Laboratorio de Herpetologa CIB - U. A. E. M, 2004.
4
RICE, F. Desarrollo humano: estudio del ciclo vital. Mxico: Prentice Hall, 1997.
(por ejemplo la provisin de alimentos por parte de la madre), existen numerosos tipos
de mamferos y aves, en los que tal comportamiento innato esperado (por ejemplo el
picoteo del pollito) no se materializar nunca transcurrido el periodo crtico necesario.
Adems, la intensidad, de estos estmulos externos facilitados por los cuidadores, puede
as mismo condicionar la forma en que se materializarn las pautas fijas de accin. Por
ejemplo, las ratas que en el periodo de lactancia son sometidas a una severa escasez de
alimentos (si la madre por ejemplo no ha logrado conseguir el alimento suficiente) son
ms tendentes al comportamiento de almacenamiento. En esta lnea, el profesor
Jonathan Seckl, profesor de medicina molecular en el Endocrinology Unit Centre For
Cardiovascular Science del Queens Medical Research Institute5, realiz una
experimento, sometiendo a altos niveles de estrs a ratas preadas, cuyos
descendientes tuvieron niveles de estrs cronificados y menor capacidad de
planificacin. Este experimento supuso una importante fuente de informacin: no slo el
comportamiento materno directo afecta al desarrollo evolutivo animal, tambin sus
estados internos en etapas prenatales. Desde esta perspectiva, si las respuestas de los
cuidadores no son las apropiadas, las cras se vern enfrentadas a diferentes
situaciones conflictivas con importantes consecuencias evolutivas. Los experimentos de
Seckl, ponen de manifiesto que las dificultades o restricciones parentales enfrentan a un
animal a resolver situaciones novedosas o adversas, produciendo en muchos casos,
patrones de conducta desadaptativos6, que podrn legar a las siguientes generaciones.
De esta forma, y como afirma Bolbwy: el comportamiento animal de apego tiene lugar
en las cras de casi todas las especies de mamferos, y en cierto nmero de ellos,
contina durante la edad adulta (). La regla general es el mantenimiento de
proximidad, por parte de un animal inmaduro, a un adulto preferido, casi siempre la
madre, lo cual indica que tal comportamiento tiene un valor para la supervivencia. La
cercana constante de la madre, proporciona al animal los primeros y ms valiosos
aprendizajes de contacto con el mundo: el aprendizaje de imitacin de las conductas
maternas, la proteccin climatolgica, la proteccin frente a depredadores, el aprendizaje
de las principales formas de socializacin en la manada. Si esta necesidad de apego
adaptativo no se satisface correctamente, el animal ver limitado el desarrollo de los
diferentes sistemas de accin asociados (exploracin, integracin en la manada) o
incluso paralizarlos.
La clave del correcto desarrollo animal se basa en la interrelacin del organismoambiente para la satisfaccin de las necesidades propias a cada especie. Los
progenitores se convierten en actores fundamentales del desarrollo de su prole 8,
especialmente mediante la provisin de una fuente de apego constante. Las especies
con mayores tendencias o necesidades de acompaamiento primario, como los
mamferos, requerirn de unos progenitores ms implicados, capaces y adaptados a sus
necesidades evolutivas.
CASTRO-FRANCO, R et al. Del cuidado parental al refinamiento de una conducta para la sobrevivencia. Boletn de la
academia general de biologa. Mjico: Laboratorio de Herpetologa CIB - U. A. E. M, 2004.
9
10
Para dar respuesta a esta cuestin, John Bowlby, psicoanalista ingls, fruto de su
experiencia clnica con nios en situacin de abandono y basndose en los
descubrimientos etolgicos del pasado siglo, formul la ya clsica teora del apego. La
tesis central se basa en que los bebs se desarrollarn de manera satisfactoria, si en su
relacin con la madre establecen una relacin de apego seguro. Segn el autor, la
necesidad de apego que un beb experimenta de forma innata hacia su madre (presente
adems en otras especies animales), se ver satisfecho si stas ofrecen un espacio de
cuidado y proximidad constantes, o si, en otras palabras, el beb percibe una aceptacin
y proteccin incondicional. Este entorno maternal proporcionar al beb un estado de
seguridad bsico para la supervivencia, que ayudar al nio a superar las situaciones de
ansiedad o miedo, favoreciendo as el desarrollo de una sana capacidad de resiliencia
(capacidad para enfrentarse a las situaciones adversas), exploracin y contacto con el
entorno. El desarrollo de esta capacidad estar entonces determinada en gran medida
por la accesibilidad y capacidad de respuesta de la principal figura con la que el beb
establece el vnculo.
A pesar de que nacemos con pocos recursos innatos, los humanos disponemos de unas
pautas predeterminadas de accin. Nacemos con unos reflejos de supervivencia
inmediata (succin, prensin), y con unos particulares patrones innatos centrados en
la interaccin social y ms en concreto con la interaccin con la madre. Desde la etologa
se afirma que estos patrones de conducta filogenticos humanos estn casi
exclusivamente al servicio de la interaccin con la madre. Estos patrones innatos de
comportamiento son mucho ms limitados y bsicos en comparacin con el resto de las
especies animales. Nos hemos ido alejando de las pautas fijas de accin a favor del
aprendizaje en interaccin, lo cual nos ha proporcionado una enorme capacidad de
adaptacin, variabilidad y flexibilidad ante las demandas ambientales y sociales. Para
Bowlby, estas tendencias innatas se basan en la necesidad del beb (igual que en otras
muchas especies) a estar vinculado y prximo a la madre. Este autor postula que estas
armas de contacto con la madre son: el llanto, la sonrisa, la tendencia a extender los
brazos, conductas hacia los que los padres parecen ser especialmente sensibles y estn
motivadas o reguladas por los impulsos internos que el beb no puede satisfacer de
manera autnoma: hambre, dolor, necesidad de proximidad. El llanto puede ser
considerado con un desencadenante social, es la ms primitiva forma de lenguaje
mediante el cual el beb indica que alguna de sus necesidades est insatisfecha y se
calmar cuando la madre la resuelva rpida y adecuadamente11. Pronto, las madres
comienzan a identificar diferentes tipos de llanto, ya que segn Bolbwy, ests estn
preprogramadas para responder a las seales del beb. La sonrisa es as mismo, un
patrn especfico de interaccin con la madre, bsico para la supervivencia infantil y
centrado casi exclusivamente en la necesidad de filiacin. Varios estudios han
demostrado que existe una cuota de supervivencia diferencial que ha favorecido a los
bebs que sonrean ms12, y que los bebs sonren preferentemente al nacer a los
rostros humanos y conocidos de manera espontnea sin condicionamiento inicial. As
mismo, el trabajo de Harlow sobre contacto tctil de las cras con las madres, puso de
manifiesto que el contacto es igualmente una respuesta preadaptada que promueve en
desarrollo del vnculo con la madre. Mediante sus conductas, madre e hijo van
reproduciendo diversas rutinas sincrnicas (conocidas tambin como bailes13), en las
que cada participante asume un papel y un ritmo alternante de intercambio, van
consolidando as un espacio de vinculacin afectiva. Con su repertorio, los bebs buscan
mantener la proximidad con la figura de apego, resistindose a la separacin, y
protestando si se lleva a cabo (ansiedad de separacin), utilizando a la madre como
trampoln desde el que explorar el mundo.
Bolwby, en su experiencia clnica, pudo observar las consecuencias que un inadecuado
desarrollo del apego seguro en la interaccin madre-hijo tiene para la salud mental de las
personas, hasta el punto de afirmar que: si queremos ayudar teraputicamente a un
paciente es necesario que le permitamos considerar en detalle cmo su actual modo de
percibir y tratar con personas que tienen importancia emocional para l, puede estar
influido y quizs alterado por las experiencias que tuvo con sus padres durante su niez.
Las causas a las que Bolwby alude frecuentemente para explicar las patologas clnicas
son: 1) que los padres no atienden las demandas del nio o incluso las rechazan, 2) la
asistencia parental es discontinua, 3) se producen frecuentes amenazas como forma de
control filial (de abandono, de violencia fsica, de abuso), 4) se induce al nio a
sentirse culpable de su comportamiento. Este tipo de comportamientos paternos, pueden
producir en el nio diferentes tipos de patrones de apego (apego angustiado, apego
11
compulsivo). Mary Ainsworth, en su trabajo con nios en Uganda, encontr unas pistas
adicionales sobre las consecuencias de la calidad de la interaccin madre-hijo y su
influencia sobre la formacin del apego. Ainsworth encontr tres patrones principales de
apego: nios de apego seguro (lloraban poco y se mostraban contentos y activos en las
actividades de exploracin); nios de apego inseguro (lloraban mucho, aun en brazos de
sus madres); y nios que parecan no mostrar apego ni conductas diferenciales hacia
sus madres. Estos comportamientos se configuraban, como anticip Bowlby, en funcin
de la sensibilidad y respuestas de los cuidadores a las peticiones del nio.
14
15
SALVADOR, M. Mdulo: Tratamiento del trauma. Madrid, Instituto Galene de Psicoterapia, 2011.
SIEGEL, D. La mente en desarrollo. Ed. De BROUWER, 2007
VAN DER KOLL, B. The Body Keeps the Score: Memory & the Evolving Psychobiology of Post Traumatic
Stress. HRI Trauma Center, Harvard Review of Psychiatry, 1994, 1(5), 253-265.
17
BENJAMIN, K. et. al. Neuropsin cleaves EphB2 in the amygdala to control anxiety. Nature, abril 20/2011.
Desde la etologa se afirma que los patrones de conducta filogenticos humanos estn
casi exclusivamente al servicio de la interaccin con la madre, las corrientes
neurobiolgicas ms recientes sostienen igualmente la importancia de la interaccin
madre-hijo en el desarrollo de las estructuras cerebrales, y por ende de la regulacin
emocional, comportamental e intelectual del nio. Para la teora del apego el correcto
desarrollo infantil, se basa en la consolidacin de base de apego seguro en la
interrelacin materno-filial. Con estos datos, no es de extraar que las principales
corrientes psicolgicas de corte relacional o transaccional, den una especial relevancia a
las experiencias de interrelacin familiar tempranas del paciente, como medio para
conocer, diagnosticar y tratar las problemticas o patologas humanas. Desde este punto
de vista, la parentalizacin, es un concepto de profundo calado en la psicologa humana,
un proceso que marcar el proceso de construccin de la personalidad
por parte de los padres en modo alguno, de manera que el nio ha aprendido a
desconectarse de ellas para sobrevivir. El egotismo, una tendencia tpicamente narcisista
de utilizar a los otros como objetos de satisfaccin, puede aparecer ante una
parentalizacin carente de lmites y con una denotada incapacidad para la frustracin y
el manejo de la ambivalencia.
Estos cuatro mecanismos de defensa estn fuertemente vinculados con el tipo de trato
parental que los nios reciben de sus cuidadores, y se asocian a la rigidez y limitaciones
culturales existentes en nuestras sociedades y que los padres aplican con sus hijos.
El anlisis transaccional creado por el mdico psiquiatra Eric Berne, concede una
importancia vital a las experiencias tempranas en el desarrollo de la personalidad del
individuo, y ms concretamente a las experiencias relacionales entre padres e hijos
como medio de satisfaccin de las necesidades infantiles.
Segn este modelo, las necesidades bsicas para garantizar la salud psicolgica del
individuo son: la necesidad de caricias (entendida como una unidad de reconocimiento) y
el deseo humano de estructurar el tiempo. El objetivo perseguido por todo nio en su
infancia se basa en conseguir un amor y una aceptacin incondicional que nos ayude a
satisfacer nuestra necesidad de contacto y de estructuracin temporal. La forma en que
los padres han ido satisfaciendo estas necesidades bsicas, tendr un profundo impacto
en el desarrollo infantil.
Los contenidos de estos tres estamentos de nuestro psiquismo, son conocidos como el
modelo estructural de primer orden (el contenido de nuestra personalidad). Cuando
una persona se comporta, piensa y acta en respuesta directa a lo que sucede a su
22
Kertesz, 1985
alrededor, decimos que est en su estado del yo Adulto. Sin embargo, es habitual
encontrar a personas que no siempre actan en respuesta a la realidad presente, si no
en relacin a experiencias pasadas. Cuando respondemos al entorno de la misma forma
que lo hacan nuestros padres, entonces diremos que estamos en el estado de yo Padre,
compuesto por los comportamientos, pensamientos y sentimientos copiados (o
introyectados) de nuestras figuras parentales. Cuando respondemos en la vida actual, de
la misma forma a cmo lo hacamos de pequeos, decimos que estamos en el estado
Nio, compuesto de todos lo comportamientos, pensamientos y sentimientos
experimentados y decididos en la niez en respuesta al trato parental.
Adems, Berne describi el modo en que se materializan estos estados en el da a da
en su modelo funcional de los estados del yo (el proceso de nuestra personalidad), que
est igualmente influido por el trato parental recibido. Cuando nos comportamos como lo
hacan nuestros padres (estamos en el estado del yo Padre), podemos actuar de dos
maneras: como un Padre Crtico, utilizando las antiguas estrategias paternas de
proteccin, o como un Padre Nutricio, cuando las respuestas imitadas son de cuidado y
atencin. Ambas formas pueden ser positivas, si los mecanismos de proteccin y
cuidado de los padres eran adaptativos (de proteccin o apoyo genuinos), o negativas, si
estos mecanismos tendan a anular a la persona (nos hoy las mismas cosas que nos
decan entonces lo has hecho fatal, eres un intil). El estado del yo Nio, se manifiesta
en dos tipos de sistemas: Nio adaptado (todas las respuestas y decisiones que
realizamos para adaptarnos a las demandas parentales) y Nio Libre (todas las
respuestas espontneas y genuinas no condicionadas que experimentamos de
pequeos). Igualmente ambas formas de regulacin pueden ser adaptativas o no.
Pero, cmo nos influyeron nuestros padres en la construccin de nuestra personalidad?
Para responder a esta cuestin, Berne propuso el modelo estructural de segundo
orden (la formacin de nuestra personalidad), que se refiere a cmo se formaron el
conjunto de huellas de memoria grabadas en nuestra personalidad, es decir en nuestros
tres estados del yo. En primer lugar archivamos toda la informacin recibida
directamente en nuestro estado del Yo Padre. Integramos, tanto el mensaje: no toques
el enchufe, procedentes del estado del yo Padre del cuidador, como las razones
explcitas: te vas a quemar, provenientes del estado del yo Adulto del cuidador, e
implcitas: tengo miedo, provenientes del estado Nio del cuidador. Adems, el
mensaje produjo en nosotros determinados pensamientos o conclusiones objetivos que
almacenamos en nuestro estado del yo Adulto encargado de poner a prueba la realidad.
Por ltimo, en la estructuracin de nuestro estado del yo Nio, almacenamos las huellas
de memoria de todas las experiencias infantiles que las actitudes de nuestros padres
dejaron en nosotros. Para clasificar las experiencias y decisiones del impacto de los
mensajes parentales en el Nio, Fanita English, propuso la siguiente clasificacin. El
El guin de vida se estructura en torno a estas decisiones tempranas que los nios
toman en respuesta a los mensajes parentales desadaptativos. En el libro AT Hoy,
una nueva introduccin al Anlisis Transaccional Ian Stewart plantea que: desde los
das ms tempranos del nio, sus padres le dan mensajes, en base a los cuales forma
conclusiones sobre l mismo, otros y el mundo. Estos mensajes de guin son tanto
verbales como no verbales. Forman el entorno en cuya respuesta se toman las
decisiones principales de guin del nio.
Estos mensajes de guin que los nios reciben y procesan pueden ser verbales (eres
un plasta!) o no verbales (una mueca de desagrado) y sern interpretados por el nio
(soy muy pesado y por eso mi madre no me acepta, mis necesidades no son
importantes para ella). La importancia de los mensajes no-verbales es crucial ya que se
integran en las etapas ms tempranas del desarrollo, son inconscientes y se manifiestan
en un nivel somtico. Adems estos mensajes tempranos pueden ser directos (lo que
23
STEWART, I. AT Hoy, una nueva introduccin al Anlisis Transaccional, Cap. 11. Madrid, Plaza Edicin, 2007.
hacer), o pueden ser emitidos mediante atribuciones, o expectativas sobre lo que el nio
debe ser (inteligente, divertido, resolutivo).
Todos estos mensajes, tendrn un profundo calado en la configuracin de la persona,
especialmente aquellos que son repetidos en el tiempo, es decir aquellas pautas de
accin consistentes en los que los nios aprenden a desenvolverse.
Un modelo explicativo e integrador de los mensajes de guin que reciben y procesan los
nios de sus padres, es el ofrecido por Claude Steiner en su propuesta de matriz de
guin. Steiner clasifica los tipos de mensajes de guin, en funcin del estado del yo de
los cuidadores, desde el que son emitidos. Propone que los mensajes que se originan
desde los estados del yo Padre de los cuidadores (dirigidos al estado del yo Padre del
hijo), se denominan contramandatos, y son rdenes sobre cmo son las cosas, sobre lo
que se debe hacer o ser: s bueno, no seas inquieto, el mundo es injusto, seducir
es malo. Los cinco contra-mandatos ms estudiados, tambin conocidos como
impulsores, son: s perfecto, s fuerte, esfurzate, complace (me) y date prisa. De esta
forma, cuando la persona est en su estado Padre, tender a reproducir las formas de
cuidado y proteccin incorporados de sus padres. Los mensajes que son emitidos por los
estados del yo Adulto de los padres y se dirigen hacia el Adulto del hijo, se denominan
programas (mensajes procedimentales). Los mensajes enviados desde el Nio de la
madre y/o el padre, se denominan mandatos. Los mandatos son mensajes negativos
pre-verbales de la infancia temprana (los contra-mandatos se originan ms adelante).
Estos mensajes se manifiestan como sentimientos de miedo, inseguridad, ira o
frustracin, que los nios perciben, traducen a su propio lenguaje y transforman en
decisiones vitales de accin. Bob y Mary Goulding24, descubrieron cmo frecuentemente
estas decisiones tempranas, giran en torno a 12 temas o lemas, estos son: no existas,
no seas t, no seas nio, no crezcas, no lo hagas, no hagas nada, no seas importante,
no pertenezcas, no ests cerca, no ests bien, no pienses y no sientas.
24
GOULDING, R; GOULDING, M. Changing Lives Through Redecision Therapy. New York: Brunner/Mazel,
Publishers, and Lennox, C. 1997.
25
STEWART, I. AT Hoy, una nueva introduccin al Anlisis Transaccional. Madrid, Plaza Edicin, 2007.
Las diversas corrientes mencionadas tienen en comn una cuestin esencial: la mayor
parte de las patologas humanas guardan una estrecha relacin con la incapacidad de
los padres para gestionar y satisfacer las necesidades infantiles. Para el psicoanlisis,
los nios apoyados por sus padres, deben aprender a regular los conflictos internos que
aparecen en la confluencia de sus impulsos, la Gestalt confa en los padres para
fomentar el bueno desarrollo en sus hijos del ciclo de contacto y retirada, y para el AT los
padres deben proveer a sus hijos de un amor incondicional, mediante mensajes y
actitudes que favorezcan su consolidacin psquica. Siguiendo este ltimo enfoque,
Pamela Levin, en su obra Becoming the way we are realiza una propuesta cronolgica
de las necesidades evolutivas del nio, as como las principales causas y consecuencias
de su insatisfaccin. Este modelo presenta un desarrollo secuencial en seis etapas
aditivas (cada etapa se basa en la anterior), y un modelo cclico en el que las personas
vamos reviviendo las etapas inconclusas, obteniendo as una nueva oportunidad de
satisfacer las necesidades pendientes27.
Durante la primera etapa, denominada la etapa del ser (etapa oral temprana en
psicoanlisis que se extiende aproximadamente desde los 0 a los 6 meses de edad), los
bebs desarrollarn el estado del yo Nio del Nio (almacn de memorias somticas).
Los bebs aprenden a contactar y expresar sus necesidades internas, a regular el
contacto temprano con el otro y a reconocerse y sentirse fsicamente.
En esta fase, el lactante necesita que los padres respondan de manera inmediata a sus
necesidades de alimentacin y proximidad, siendo el llanto la principal seal de contacto,
y las caricias fsicas y la provisin de leche, los medios parentales de respuesta. Si estas
respuestas se ajustan a sus necesidades reales de manera constante, los bebs sacarn
unas tempranas y vlidas conclusiones sobre ellos y el mundo. Tendrn la sensacin
somtica de ser aceptados, respetados por su singularidad, de ser protegidos y amados.
Desarrollarn la capacidad de intuicin y empata, el compromiso y la constancia
(mediante la atencin regular y los actos repetitivos como mecerlos y acunarlos), la
capacidad de recibir caricias verbales y fsicas, aprendern a estructurar el tiempo en
26
relacin con el otro. Ante un correcto parentamiento, el nio pasar a la siguiente etapa
en palabras de la autora, con un correcto sentido del self emergente, esto es con un
adecuado recuerdo sensorial del contacto con el otro por ser quien es, un sentimiento de
Okness (Yo estoy bien, t ests bien). Para el psiclogo evolutivo Erick Ericsson, el
beb desarrollar de esta manera, una adecuada confianza bsica, lo que Bolwby
denominara como unas buenas bases para el desarrollo de un apego seguro. El nio,
asentar los cimientos necesarios de una sana autoestima y confianza en el mundo. Sin
embargo, lagunas en esta etapa, sern caldo de cultivo para el desarrollo de una dbil
confianza en ellos mismos y en el entorno. Los recuerdos somticos sern de tensin,
miedo, intrusin o desconfianza, dependiendo del tipo de mal trato recibido. Se vern
limitados en su capacidad para atender sus necesidades (ya que sus principales
mecanismos bsicos, como el llanto, no han funcionado), e incorporarn somticamente
distintos mensajes implcitos (no seas, no sientas, no tengas necesidades).
La segunda fase se denomina la etapa del hacer, y se extiende de los 6 a los 18 meses
(va oral exploratoria en psicoanlisis). En esta etapa el beb est desarrollando su
musculatura, sus habilidades motoras, est emprendiendo el camino hacia la actividad
(en la mitad de esta etapa el nio empezar a caminar). Se siente poderosamente
atrado por muchos estmulos ambientales. En este proceso, comenzar a desarrollar su
pequeo profesor (el Adulto del Nio), que ser el encargado de entender las
relaciones causales del mundo (si tiro un jarrn se rompe). Tienen por lo tanto la
necesidad de moverse y explorar, de experimentar sensaciones sin realizar un anlisis
consciente de sus movimientos o acercamientos.
Los padres en esta etapa debern ofrecer al nio la libertad y seguridad bsicas para
este desarrollo activo, controlar que no les ocurra nada malo (recordaremos en este
punto que los padres son el apndice cortical del nio), pero permitiendo que
experimente con la realidad. Debern proporcionar al nio las caricias incondicionales de
respeto y aceptacin (ya que las caricias condicionadas en esta etapa aun no pueden
ser corticalmente integradas). Adems, segn la autora, es necesario que en esta etapa
el beb pueda desarrollar un cierta y sana sensacin de omnipotencia, un cierto
narcisismo positivo que le permitir incorporar el poder esencial de hacer y seguir con
ello consolidando su posicin existencial de Okness. Esto supone que los padres
inviertan una considerable cantidad de tiempo y energa en el nio. Segn Stern, el nio
desarrollar un correcto self intersubjetivo, que le permitir establecer sanas relaciones
con el ambiente. Toda la experiencia recibida, ser transformada y disfrutada, lo cual
favorecer el desarrollo de la creatividad y la intuicin.
Si la actividad parental no facilita esta exploracin, el nio podr desarrollar diferentes
problemas fsicos relacionados con la falta o represin de la actividad (como estrs
adrenal, problemas de migraas), e incorporarn mensajes de guin del tipo: no me
La cuarta etapa del desarrollo evolutivo es la etapa de la identidad (de los 3 a los 6
aos). Corresponde con la etapa genital en psicoanlisis, en la que los nios desarrollan
el estado del yo Padre del Nio. Es una fase de polos opuestos: por un lado los nios
desarrollan su genuina habilidad para transformar la energa, mediante el desarrollo de
su creatividad, fantasa y poder, y por el otro continan interiorizando las restricciones y
condiciones externas. En esta fase, las emociones estn ms vivas que nunca, los
sentimientos de ira, odio y medio son intensos y extremos, y son alimentados por las
fantasas que van elaborando. Aprenden a competir intensamente frente a los que ponen
a prueba su poder, a manipular al otro con el uso de esas intensas emociones. Es una
etapa vital ya que los nios adoptan su decisin identitaria bsica: quin quiero ser, o
cmo mis padres quieren que sea.
Un buen parentamiento se basa en dar el permiso para que el nio descubra su propia
identidad, dentro del respeto a los lmites externos. De esta forma, los padres debern
dar, de manera regular y amorosa, las directrices adecuadas, veraces, claras y
autnticas sobre los permisos y limitaciones vitales, para que sus hijos aprendan las
reglas del juego sin manipulacin. Con estas directrices los nios aprenden a distinguir la
fantasa de la realidad (sin negar la imaginacin), e integran el orden social (mediante su
incorporacin en la estructura familiar con roles bien definidos). Los padres adems,
debern proporcionar los permisos adecuados para que el nio sea quien es, para que
pida lo que necesite, para que se enfade, para que aprenda a acudir a quien le puede
ayudar. Sino, lo nios pueden recibir mensajes paternos del tipo: pierde la cabeza, no
seas sano, no seas poderoso, no seas amoroso, no seas t, complceme, vigila.
La quinta etapa, se extiende entre los 6 y los 12 aos, y es conocida como la etapa del
desarrollo de habilidades, en las que lo nios desarrollan el estado del yo Padre, esta es,
la estructura psicolgica dnde los nios interiorizan las figuras paternas. En esta etapa,
los nios necesitan experimentar con actividades que requieran de reglas e interaccin
con el otro. Van aprendiendo a hacer las cosas segn su propio modo de accin y a
regular el contacto social. En esta etapa, los padres debern ensear a sus hijos
diversas habilidades procedimentales, pudiendo emplear caricias condicionadas para
estimular su desarrollo (nunca con castigos). As mismo, debern fomentar una sana
capacidad de frustracin y renuncia, como medio para alcanzar sus objetivos.
Si los padres no proporcionan a los hijos estas habilidades de funcionamiento y
aplicacin de las actividades vitales de la manera apropiada, los nios pueden
interiorizar mensajes del tipo: no pienses, hazlo, no estructures, no cometas errores.
Finalmente la sexta y ltima etapa del desarrollo infantil, que va desde los 13 a los 18
aos, se denomina como la etapa de regeneracin (la pubertad en psicoanlisis). Es una
fase de reciclaje de todas las etapas anteriores, pero con la novedad hormonal de
sentirse en relacin con el otro sexo. El objetivo es establecer la capacidad integrativa de
moverse en el mundo sin los cuidados paternos. En esta etapa el comportamiento de los
padres deber proveer todos los cuidados dedicados en etapas anteriores: ofrecer
caricias incondicionales (en pocos casos condicionales), brindar tiempo, dedicacin,
explicacin, informacin, aplicar los lmites externos siempre con un respeto absoluto a
su autenticidad y a sus capacidades de autorregulacin.
Si no se producen estas condiciones parentales, los nios pueden no conseguir su plena
autonoma, y recibir mensajes del tipo no crezcas, no lo hagas, no te aproximes al otro
sexo, no me abandones.
En definitiva, con este interesante anlisis, Pamela Levin, ha puesto de manifiesto las
principales necesidades evolutivas de los nios, las mejores formas de satisfacerlas, as
como las conductas y actitudes parentales explcitas e implcitas que pueden poner freno
a su desarrollo.
28
29
CASTANEDO, C. Terapia Gestalt. Enfoque centrado en el aqu y el ahora. Barcelona: Herder, 1987.
CUADRA, J. Mdulo:Parentamiento y Reparentamiento. Madrid: Instituto Galene de Psicoterapia, 2010.
reforzado por el Padre (lo que me hicieron). Por lo tanto la reparentalizacin30 consiste
en actualizar los contenidos del Estado del Yo Padre a las necesidades reales del
paciente y en ofrecer un estilo de apego seguro, para que el estado del yo Nio, redecida
nuevas estrategias de vida y saque conclusiones ms favorables sobre l mismo, los
dems y el mundo.
Para llevar a cabo estas nuevas decisiones, el trabajo de reparentamiento se basar en
tres premisas fundamentales:
1) Toma de consciencia sobre las problemticas infantiles, a travs de la
descontaminacin del adulto
2) Incorporacin de nuevas formas de parentamiento (reparentamiento en el Padre)
3) Lo que promover la generacin de nuevas decisiones (redecisin en el Nio)
30
MELLOR, K. Reparentalizando al Padre como apoyo a las Redecisiones. Andrewartha: TAJ, vol. 10, N3, julio
1980.
31
LEVIN, P. Parentalizacin correctora: una odisea de desarrollo. TAJ, Vol. 28, N1, enero 1998.
estable,
con
las
condiciones
necesarias
para
que
los
pacientes
ofreciendo
sencillos
mensajes
de
amor
aceptacin
incondicional,
32
consistir en un apoyo por parte del terapeuta, para que el paciente logre tomar
consciencia de sus interrupciones en el ciclo gestltico.
Parentalizacin correctora35
Aunque el vnculo teraputico es vital para el desarrollo de una adecuada
reparentalizacin, y aunque en general durante las terpias se produzcan numerosas
clarificaciones y modificaciones estructurales; en trminos tericos, no se consideran
estrictamente como tcnicas de reparentalizacin. Para que una tcnica se considere
como tal, debe existir un contrato explcito, en el que las dos partes asuman sus roles en
el proceso. Pamela Levin, denomin parentalizacin correctora, a una tcnica de terapia
global que defini retomando la definicin de los Schiff como:
un proceso de crecimiento personal que valida y legitima la capacidad humana para
volver a estados previos del ser (regresin), abandonar viejos modelos (trabajo original
de dolor), abrir un nuevo modelo, e interiorizar nuevas maneras de ser (parentalizacin
correctora) y por tanto curar36.
Esta tcnica parte de los principios de parentalizacin expuestos por los creadores de la
tcnica. Las patologas humanas se encuentran estrechamente vinculadas con
experiencias de cuidado parental deficitario y han ido moldeando unos estados del yo
desadaptativos que limitan nuestra forma de ser en el mundo. El trabajo consiste en
desentramar las principales claves del guin de vida, y sanar las estructuras psquicas a
travs de un nuevo trato parentalizador. Este nuevo trato ofrecido por el terapeuta, se
manifestar a lo largo de toda la terapia en las formas constantes y nutricias de actuar
del terapeuta y en tcnicas concretas de reparentalizacin, todo ello en base a las
necesidades evolutivas insatisfechas. Favoreciendo en ambos casos, la incorporacin de
nuevos permisos y mensajes en el estado del yo Padre, y fomentando las redecisiones
del estado del yo Nio.
Para aplicar esta tcnica, es preciso que los terapeutas se entrenen como expertos
parentalizadores y apliquen diferentes principios y prcticas. Un buen experto debe estar
en primer lugar bien informado, lo cual implica por un lado, tener resueltos sus
principales conflictos personales, para relacionarse compasiva y empticamente con las
necesidades del nio interno del paciente, por otro, comprometerse con el aprendizaje
de los asuntos centrales del guin del paciente y finalmente conocer y dominar la
aplicacin de las principales tcnicas regresivas a aplicar (regresiones, reparentalizacin
puntual, entrevista con el padre, minithones del desarrollo). Esta tcnica necesita de
un contrato explcito con el paciente, de modo a que ambos establezcan desde el inicio
las reglas del juego y adopten unos roles claramente diferenciados. El terapeuta en este
35
36
LEVIN, P. Parentalizacin correctora: una odisea de desarrollo. TAJ, Vol. 28, N1, enero 1998.
Schiff et al. 1975
punto deber animar al paciente desde su Nio Libre, a identificar los principales
cambios que quiere establecer. Esta autora sita la conexin del vnculo emocional
entre el terapeuta y el cliente no en la periferia si no como un estadio central. El
terapeuta, para ofrecer unos nuevos mensajes de cuidado y proteccin debe velar por el
bienestar del paciente. Para ello, segn esta autora el terapeuta puede emplear distintas
herramientas. Por un lado puede comprometer al paciente a realizar un contrato de
autocuidado y compromiso37. Adems el terapeuta educar sobre el proceso, animando
a resolver y a identificar los principales fundamentos del Anlisis Transaccional que
operan en la historia de vida (estados del yo, juegos, pasividad, el ciclo del desarrollo),
as como fortalecer la descontaminacin del Adulto. Finalmente, la autora establece,
que para aplicar las tcnicas regresivas puntuales, ser necesario no slo un contrato
previo, sino que tanto paciente como terapeuta estn empleando los recursos de
proteccin necesarios en el aqu y el ahora.
El reparentamiento puntual38
En terapia, la inversin en trminos de tiempo y dedicacin no es tan extensa como en el
caso de los Schiff. Es comn que los pacientes no quieran aventurarse en una estrategia
parentalizadora tan larga y costosa como la expuesta por Pamela Levin. Como hemos
visto, en trminos generales, la terapia es un espacio de relacin asimtrica en el que es
probable que aparezcan problemticas de interaccin familiar temprana en las que
merezca la pena profundizar. As, los terapeutas no expertos en parentalizacin deseen
tal vez aplicar slo ocasionalmente ciertas tcnica regresivas. Para todos estos casos
Osnes, basndose en las tcnicas de Levin y Schiff, cre la denominada tcnica de
reparentamiento puntual (spot reparenting en ingls), consistente en ofrecer una
regresin puntual a una etapa infantil traumtica previamente identificada, en la cual el
terapeuta brindar una nueva respuesta parental adaptativa y nutricia, sustituyendo el
dao traumtico por una experiencia de cario clido e incondicional.
Esta tcnica se basa en las aportaciones de Berne ya ampliamente abordadas en este
artculo: los individuos incorporan en sus estados del yo decisiones pasadas, siendo
posible sustituir los contenidos arcaicos del Padre y animar al Nio a que re-escriba
nuevas conclusiones. Se centra en tres cuestiones fundamentales. Por un lado utiliza la
regresin para revivir una situacin traumtica previamente identificada y acordada
mediante un contrato explcito, por otro, el terapeuta acta como Padre Nutricio positivo
durante y al final de la re-vivencia de la escena y por ltimo es un trabajo que se
desarrolla en grupo, con el objetivo de ampliar la base de confianza del cliente.
37
Para una amplicacin sobre las puertas de escape consultar: Berne, 1972, Boyd & Cowles-Boyd, 1980, Hailberg,
Sefenes, Berne, 1963,Holloway, 1983)
38
OSNES, R. Reparentamiento Puntual. M.S.C. TAJ, 4:3, julio de 1974.
Como paciente he podido observar la potencia de estas peticiones y las implicaciones en el desarrollo de mi contacto
con el otro.
40
OSNES, R; ILLSLEY, J. El minithon de desarrollo. TAJ, Vol. 28, N1, enero de 1998.
41
MC NEEL, J. La entrevista al Padre. TAJ, vol 6:1, enero 1976.
resueltas de la historia de vida, enfrentando al paciente a hablar con esa parte conflictiva
(una persona, una parte de s mismo), y a expresar lo que sinti y vivi. Una vez
expresado, el terapeuta anima al paciente a tomar el lugar de la otra parte y responder a
las cuestiones planteadas.
En la entrevista con el padre, la silla vaca se realizar con uno o ambos progenitores,
una vez que tanto paciente como terapeuta, han identificado y acordado una
problemtica parental en la fase de toma de consciencia. La tcnica consiste en realizar
un dilogo entre el padre del paciente (en realidad el estado del yo Padre introyectado).
Es posible que al inicio, el paciente en su papel de padre, se vea tentado a responder
con cierto rencor y falta de concentracin (ya que aun tiene la fantasa de que su padre
verdaderamente cambiar y no consigue meterse en el papel), sin embargo y gracias a
la indagacin respetuosa del paciente dirigindose siempre al personaje que est
representando, pronto descubrir que los motivos paternos no fueron intencionadamente
maliciosos, si no motivados por sus propias limitaciones personales y generalmente con
motivos protectores. En esta postura, el paciente, comenzar a sentir las respuestas
viscerales de los padres y en definitiva a comprender porqu hicieron lo que hicieron. En
varias ocasiones de mi experiencia clnica he podido observar, cmo adems de
comprender y perdonar al progenitor representado, en mis dilogos con el padre
teatralizado, ste toma consciencia de las consecuencias de sus actos en su hijo y
acaba comprendiendo realmente sus necesidades. Este matiz resulta fundamental, ya
que mediante esta transformacin del padre imaginado, los pacientes van modificando
los contenidos de su Padre introyectado e incorporando adems de la comprensin
propia de la historia paterna, nuevos permisos y mensajes. En ms de una ocasin he
podido comprobar como los padres representados acaban verbalizando los permisos
que el paciente necesit en su momento como: puedes ser feliz, tmate tu tiempo,
disfruta de la vida. Al terminar la entrevista, los pacientes acaban comprendiendo y
perdonando a sus padres y la experiencia puede resultar realmente liberadora.
El autoparentamiento42
La finalidad del Anlisis Transaccional es que los individuos consigan actuar de forma
autnoma, a travs del contacto con el aqu y el ahora, gracias a la resolucin de sus
conflictos de guin. En este sentido la autora Muriel James, enfatiza en el proceso de
auto-construccin de la personalidad para reforzar esta autonoma, y propone la tcnica
de auto-parentamiento.
Este mtodo consiste en animar al paciente a que tome consciencia de sus dficits
propios en el desarrollo de su historia de vida, y que analice las consecuencias que se
manifiestan en el aqu y el ahora. Este mtodo de auto-anlisis, es proporcionado por el
42
CONCLUSIONES
En este artculo se ha analizado la vital importancia del trato parental en el desarrollo
evolutivo de las cras, llegando a limitar y en ocasiones a anular el desarrollo de las
distintas habilidades necesarias para la supervivencia y provocando patrones de
conducta desadaptativos. Igualmente en humanos, se ha puesto de manifiesto que los
padres son actores clave para la satisfaccin de la necesidad de filiacin, mediante la
provisin de un espacio de apego seguro como base para el desarrollo de la mayor parte
de nuestras habilidades humanas. Las psicoterapias humanistas advierten de las
principales consecuencias psicopatolgicas que un cuidado parental deficitario tendr
sobre sus hijos; y muestran cmo nuestra manera de ser, lo que pensamos, hacemos y
sentimos, est poderosamente influido por la calidad de las interrelaciones tempranas.
Estas corrientes, ofrecen adems, diversos mtodos clnicos encaminados a solventar
las carencias tempranas de las relaciones padre-hijo. A la luz de todas estas
aportaciones, y dada la vital importancia de la parentalizacin en nuestras vidas, en mi
opinin sera muy recomendable que los terapeutas de distintas corrientes, incorporasen
una perspectiva parentalizadora tanto en su abanico de tcnicas especficas, como en el
modo de establecer un vnculo sanador con el paciente.
BIBLIOGRAFA
LIBROS Y ARTCULOS
MDULOS DE GALENE
Para la elaboracin de este artculo, me he basado el muchos de los mdulos,
experiencias y aprendizajes brindados por el Instituto Galene de Psicoterapia, en casi
dos intensos aos de formacin. Las referencias ms concretas las he encontrado
particularmente en los siguientes mdulos: