Dialogo Borges y Sabato
Dialogo Borges y Sabato
Dialogo Borges y Sabato
A fines de 1974 Orlando Barone tuvo la iniciativa de reunir a Jorge Luis Borges y
Ernesto Sabato para que intercambiaran sus ideas. Con el minucioso registro de los
encuentros realizados entre ambos escritores, compagin luego los Dilogos que
integran este volumen.
En esas largas y lcidas conversaciones dejaron en claro sus raras coincidencias y sus
numerosas diferencias acerca de los temas que atarearon su quehacer literario. La
realidad y los sueos, la idea de Dios, el amor, el arte de traducir, el tango, el teatro y el
cine; entre personas y personajes, ideas y obsesiones, componen un vasto collage.
"Dialogos: Borges/Sabato" es un libro que rene las conversaciones entre Ernesto
Sabato y Jorge Luis Borges, quizs, los dos escritores ms importantes de la literatura
argentina. Esos encuentros se realizaron entre 14 de diciembre de 1974 y el 15 de marzo
de 1975. A instancias de Orlando Barone se produjo el reencuentro de los dos escritores,
en bares y en el departamento de una amiga en comn. "...En esas largas y lcidas
conversaciones Borges y Sabato dejaron en claro sus raras coincidencias y sus
numerosas diferencias acerca de los temas que atarearon su quehacer literario. La
realidad y los sueos, la idea de Dios, el amor, el arte de traducir, el tango, el teatro y el
cine; entre personas y personajes, ideas y obsesiones, componen un vasto collage".
14 de diciembre de 1974
Creo que se tocaron las manos. Y un brazo o el hombro tal vez. Suelo imaginar ms que
lo que veo. Se deben de haber dicho, no obstante, esas cosas comunes y triviales de
todos: Hola,
Dialogos Borges/Sabato
Borges: Cundo nos conocimos? A ver... Yo he perdido la cuenta de los aos. Pero creo
que fue en casa de Bioy Casares, en la poca de Uno y el Universo.
Sbato: No, Borges. Ese libro sali en 1945. Nos conocimos en lo de Bioy, pero unos
aos antes, creo que hacia 1940.
Borges: (Pensativo) S, aquellas reuniones... Podamos estar toda la noche hablando
sobre literatura o filosofa... Era un mundo diferente... Ahora me dicen, s, que se habla
mucho de poltica. En mi opinin les interesan los polticos. La poltica abstracta, no. A
nosotros nos preocupaban otras cosas.
Sbato: Yo dira, ms bien, que en aquellas reuniones hablbamos de lo que nos
apasionaba en comn a usted, a Bioy, a Silvina, a m. Es decir, de la literatura, de la
msica. No porque no nos preocupara la poltica. A m, al menos.
Borges: Quiero decir, Sbato, que no se haca ninguna referencia a las noticias
cotidianas, fugaces.
Sbato: S, eso es verdad. Tocbamos temas permanentes. La noticia cotidiana, en
general, se la lleva el viento. Lo ms nuevo que hay es el diario, y lo ms viejo, al da
siguiente.
Borges: Claro. Nadie piensa que deba recordarse lo que est escrito en un diario. Un
diario, digo, se escribe para el olvido, deliberadamente para el olvido.
Sbato: Sera mejor publicar un peridico cada ao, o cada siglo. O cuando sucede algo
verdaderamente importante: "El seor Cristbal Colon acaba de descubrir Amrica".
Ttulo a ocho columnas.
Borges: (Sonriendo) S... creo que s.
Bueno,
Borges,
pero
aquel
tiempo
no
fue
el
mo.
haba que hacer lo mismo. Una broma que se convirti en programa de la literatura
argentina.
Sbato: Recuerda, Borges, que, aparte de la literatura y la filosofa, usted y Bioy
sentan una gran curiosidad por las matemticas? La cuarta dimensin, el tiempo...
aquellas discusiones sobre Dunne y el Universo Serial...
Borges: (Aprieta el bastn con las dos manos, se yergue un tanto, casi con entusiasmo)
Caramba! Claro... los nmeros transfinitos, Kantor...
Sbato: El Eterno Retorno, Nietzsche, Blanqui...
Borges: Y, siglos antes, los pitagricos, o los estoicos!
Sbato: Las aporas, Aquiles y la tortuga... Nos divertamos mucho, s. Recuerdo cuando
Bioy lea los cuentos de Bustos Domecq recin salidos del horno. Pero a Silvina no le
gustaban, permaneca muy seria.
Borges: Bueno, Silvina sola leer esos textos con indulgencia y gesto maternal. A m, sin
embargo, los cuentos de Bustos Domecq me causaban gracia.
Sbato: Recuerdo que tambin hablbamos mucho de Stevenson, de sus silencios. Lo
que calla, a veces ms significativo que lo que expresa.
Borges: Claro, los silencios de Stevenson... y tambin Chesterton, Henry James... no,
creo que de James se hablaba menos.
Sbato: Al que le interesaba mucho era a Pepe Bianco.
Borges: S, l haba traducido The Turn of the Screw. Mejor el ttulo, es cierto. Otra
vuelta de tuerca es superior a La vuelta de tuerca no?
Sbato: Representa con ms claridad la idea de la obra. Al revs que con ese libro de
Saint-Exupry llamado Terre des Homme que aparece traducido como Tierra de
hombres. Como quien dice "Tierra de machos". Si hasta parece un ttulo para Quiroga o
Jack London. Cuando lo que en realidad quiere significar (adems lo dice literalmente)
es Tierra de los Hombres, la tierra de estos pobres diablos que viven en este planeta. No
slo ese traductor no sabe francs sino que no entendi nada de Saint-Exupry ni de su
obra entera. Pero a propsito, Borges, recuerdo algo que me llam la atencin hace un
tiempo en su traduccin del Orlando, de Virginia Woolf...
Borges: (Melanclico) Bueno, la hizo mi madre... yo la ayud.
Sbato: Pero est su nombre. Adems, lo que quiero decirle es que encontr dos frases
que me hicieron gracia porque eran borgeanas, o as me parecieron. Una cuando dice,
ms o menos, que el padre de Orlando haba cercenado la cabeza de los hombres de "un
vasto infiel". Y la otra, cuando aquel escritor que volvi hacia Orlando y "le infiri un
borrador". Me sonaba tanto a Borges que busqu el original y vi que deca, si no
recuerdo mal, algo as como presented her a rough draft.
Borges: (Rindose) Bueno, s, caramba...
Sbato: No tiene nada de malo. Slo muestra que casi es preferible que un autor sea
traducido por un escritor medio borroso e impersonal no? Recuerdo que hace mucho
tiempo vi una representacin de Macbeth. La traduccin era tan mala como los actores y
la pintarrajeada escenografa. Pero sal a la calle deshecho de pasin trgica.
Shakespeare haba logrado vencer a su traductor.
Borges: Es que hay ciertas traducciones espantosas... Hay un film ingls cuyo ttulo
original The Imperfect Lady lo tradujeron aqu como La cortesana o La ramera. Perdi
toda la gracia. Precisamente alterar de esa forma el ttulo, que es donde ms ha trabajado
el autor. Cuando eligi uno es porque lo ha pensado mucho. Nadie, ni el traductor, debe
creerse con derecho a cambiarlo.
Sbato: Y acaso el ttulo no es la metfora esencial del libro? Del ttulo podra decirse
lo que se ha afirmado de los sistemas filosficos, que casi siempre son desarrollo de una
metfora central: El Ro de Herclito, La Esfera de Parmnides...
Borges: Claro, suponiendo que los ttulos no sean casuales. Bueno, y que los libros
tampoco no?
Borges parece buscar algo en el pasado. Sbato debe intuir esa bsqueda de la
evocacin y tambin el inminente monlogo. Quedan muchas horas, mucho tiempo
delante.
Borges: Hablando de libros, los primeros que se ocuparon aqu de "promover" sus libros
fueron Jos Hernndez y Enrique Larreta. Despus, Girondo. De l todos recuerdan
cuando se public El espantapjaros y desfil en un coche con uno de esos muecos por
la calle Florida... En cambio, en un tiempo anterior, el de Lugones y de Groussac,
cuando editaban sus libros slo trascendan en el mbito de las libreras. Mi propia
experiencia no fue distinta. Con trescientos pesos que me dio mi padre hice imprimir
trescientos ejemplares de mi primer libro. Qu otra cosa pude hacer que repartirlos y
regalarlos a los amigos? A quin le importaba alguien que escriba poemas y se llamaba
Borges?
Sbato: El editor le publica al escritor que todos se disputan. Eso hace difcil cualquier
comienzo. Sin embargo, es extrao, uno ve ahora los estantes de las libreras y es como
una invasin de ttulos. Debe haber ms autores que lectores. Y otro fenmeno: el de los
kioscos. Antes, por el ao 35, solamente Arlt se venda en la calle.
Borges: (Lleno de asombro) Libros en los kioscos?
Sbato: (Sonriendo) S, tambin los suyos: El Aleph, Ficciones y los clsicos.
Borges alza an ms la cabeza como para asombrarse de cerca, inquiere ms con un
gesto.
Sbato: S, y me parece bien que sus libros estn all en la calle, al paso de cada lector.
Borges: Pero... es que antes no era as, claro...
Sbato: Sin embargo, hubo un tiempo en que en los almacenes de campo, cuando hacan
sus pedidos a Buenos Aires, junto a las bolsas de yerba y aperos, pedan ejemplares
del Martn Fierro.
Borges: Esa noticia ha sido divulgada o imaginada por el propio Hernndez. La
poblacin rural era analfabeta.
Hay un silencio apenas fastidiado por el ruido de los vasos. Hace calor, pero creo que
todos lo hemos olvidado. Queda flotando la ltima palabra.
Borges: Martn Fierro... Un personaje que no es un ejemplo. Es admirable el poema
como arte, pero no el personaje.
Los ojos de Sbato, ahora escudrian el rostro de Borges. Se le nota la ansiedad por
hablar, pero espera.
Borges: Fierro es un desertor que paradjicamente deleita a los militares. Pero si usted
le dice eso a un hombre de armas, se indigna. Hasta Ricardo Rojas en la Historia de la
Literatura Argentina lo defiende con argumentos inexistentes. Alega que en el libro se ve
la conquista del desierto, la fundacin de ciudades. Francamente nadie ha ledo una sola
palabra de eso.
Sbato: Creo que Fierro es un iracundo, un rebelde ante el tratamiento de frontera, y
ante muchas de las injusticias de su tiempo.
Borges cierra y abre los ojos, se mueve un poco sin perder esa posicin arrogante, pero
no agresiva.
Borges: No, no pienso as, Martn Fierro no fue un rebelde. Desert porque no le
pagaban sus haberes y se pas al enemigo, no sin esperanza de participar fructuosamente
en algn maln. Pero tampoco el autor fue rebelde. Jos Hernndez Pueyrredn
perteneca a la alta clase de los estancieros, era pariente de los Lynch y los Udaondo. Si
le hubieran dicho "gaucho" se habra indignado. Un gaucho era algo comn, pero Martn
Fierro es una excepcin en la llanura. Porque un matrero lo es y por eso recordamos a
unos pocos: Hormiga Negra, que muri por 1905 tal vez. Es que el gaucho matrero es
tiempo.
Borges: (Que ha escuchado con atencin. La cara orientada hacia el exacto lugar
donde est Sbato.) Reconozco que Fierro es un personaje viviente, que como pasa con
las personas reales puede ser juzgado muy diversamente, segn se lo mire.
Sbato: De all las muchas interpretaciones que permite: sociolgicas, polticas,
metafsicas.
Borges: (Como disculpndose) Pero yo no he dicho una sola palabra en contra de la
obra...
Sbato: Es que ha habido reportajes donde usted aparece diciendo ciertas cosas... Me
parece til que se aclare.
Borges: He dicho, s, que proponer a Martn Fierro como personaje ejemplar es un error.
Es como si se propusiera a Macbeth como buen modelo de ciudadano britnico no?
Como tragedia me parece admirable, como personaje de valores morales, no lo es.
Sbato: Lo que prueba que un gran escritor no tiene por qu crear buenas personas. Ni
Raskolnikov ni Julien Sorel, por citar algunos, pueden juzgarse como buenas personas.
Casi nadie en la gran literatura.
Borges: Qu extrao. Ahora recuerdo que Macedonio Fernndez tena una teora que yo
creo errnea. l deca que todo personaje de novela tena que ser moralmente perfecto.
Desde esa perspectiva, sin conflictos, resultara difcil escribir algo... l se basaba en el
concepto: "El arquetipo ideal de la pica".
Sbato: Parecera un chiste.
Borges: No. Era en serio. Bueno, sera como anular la novela no?
Sbato: Basta considerar los grandes protagonistas de novelas. Siempre marginados,
tipos casi siempre fuera de la ley outsiders.
Borges: Hay una frase de Kipling que escribi al final de su vida: "A un escritor puede
estarle permitido inventar una fbula pero no la moraleja". El ejemplo que eligi para
sostener su teora fue el de Swift, que intent un alegato contra el gnero humano y
ahora ha quedado Gulliver, un libro para chicos. Es decir: el libro vivi, pero no con el
propsito del autor.
Sbato: Es lo bastante complejo para ser un espantoso alegato y a la vez un libro de
aventuras
para
chicos.
Esa
ambigedad
es
frecuente
en
la
novela.
Borges: Se me ocurre algo. Supongamos que Esopo existi y que escribi sus fbulas.
Pero posiblemente le diverta ms la idea de animales que hablan como hombrecitos que
las moralejas. Esas moralejas se agregaron despus.
Sbato: Es que ninguna obra de arte es moralizadora en el sentido edificante de la
palabra. Si sirven al hombre es en un sentido ms profundo, como sirven los sueos, que
casi siempre son terribles. O las tragedias. Usted habl de Macbeth: es espantoso, pero
sirve. Y no s si lo justo no sera suprimir ese "pero", o en su lugar poner "y por eso
mismo.
Borges: Sin duda. Uno de los libros que le es Le Feu, de Barbusse. Lo escribi contra la
guerra y el resultado es casi una exaltacin de la guerra.
Sbato: Sarmiento se propuso escribir un libro contra la barbarie y la conclusin fue un
libro brbaro. Porque Facundo expresa lo que hay en el fondo del corazn de Sarmiento:
un brbaro. El lter ego del Sarmiento de jacket.
Borges: S, es... el libro ms montonero de nuestra literatura, segn Groussac.
Sbato: Lo admirable del Facundo es la fuerza de sus pasiones. Est lleno de defectos
sociolgicos e histricos, es un libro mentiroso, pero es una gran novela.
Borges: Solamente cuando una obra no vale es cuando cumple los propsitos del autor...
Sbato: En tiempos de la revolucin francesa haba libros que se llamaban cosas como
Virgen y republicana, con moraleja desde el ttulo. Ya podemos imaginar lo que valdran.
Pero todas las revoluciones son moralistas y puritanas. En Rusia se han escrito obras de
teatro con ttulos como La tractorista ejemplar... Las revoluciones son conservadoras en
el arte. La revolucin francesa no tom como paradigma a Delacroix, el de la pintura
pasional y rebelde, sino el acadmico David, el de los pompiers.
Borges: Cuando Bernard Shaw estuvo en Rusia les aconsej que cerraran el museo de la
Revolucin. Claro, no haba que influir con el mal ejemplo...
Sbato: Es que el artista es por excelencia un rebelde. Por eso en las revoluciones nunca
les va bien.
Borges: Recuerdo que en Rusia hicieron dos films sobre Ivn el Terrible: uno, al
comienzo (el bueno) contra el zarismo; el otro, cuando Stalin se haba convertido en un
nuevo zar, en favor del zarismo...
Sbato: Sabemos que slo puede hacerse arte grande en absoluta libertad. Lo otro es
sometimiento, arte convencional y por lo tanto falso. Y por lo tanto no sirve al hombre.
Los sueos son tiles porque son libres
Barone: A propsito de esa libertad... Es un obstculo la fama? La entorpece? Me
refiero al caso de un escritor reconocido por sus contemporneos. . . Pienso que Van
Gogh y Kafka, que no fueron famosos, pudieron hacer su obra en total libertad...
Ustedes son famosos.
Borges: Lugones y Daro fueron famosos...
Sbato: Si un artista tiene algo importante que decir, lo dir igual. No lo va a atrapar
nada. Ni la fama, ni la polica secreta, ni el Estado. Adems la historia lo prueba:
Dostoievsky era muy famoso cuando escribi Los Karamazov y nadie se atrevera a
decir que con ese libro est coartado. Y tambin fueron famosos Tolstoi, Chejov,
Hemingway, Faulkner..
Borges: Y Mark Twain, y Bernard Shaw.
Sbato: Y el caso inverso: gente que jams logr trascendencia sin que por eso su obra
necesariamente deba ser importante.
Borges: Conozco a alguien que se consuela pensando que tambin fueron ignorados los
artistas A, B y C, que ahora son famosos. No piensa que tambin fueron ignorado
escritores psimos.
Sbato: Kafka no fue conocido por la simple razn de que no quiso publicar. Tomemos
el caso de Borges que es un escritor bastante hermtico, y sin embargo es famoso.
Borges: (Tmidamente) Yo?.
Sbato: (Irnico) Vamos, Borges. Piense tambin en la fama que tuvieron artistas tan
hermticos como Mallarm y Rimbaud. Para no hablar de Joyce.
Borges: Y Vctor Hugo y Byron...
Sbato: Byron quiz debi su fama a la vida que hizo.
Borges: S, Byron dej un personaje vivido por l... Ah! y famosos tambin fueron los
filsofos franceses: Voltaire y Rousseau.
Sbato: A propsito, conoce la traduccin alemana del Neveu de Rameau? Borges
niega con la cabeza.
Sbato: Usted sabe que lo tradujo Goethe, no?
Borges: S, s, claro.
Sbato: Pero, saba que la versin francesa es traduccin de esa traduccin alemana?
Borges: (Con profunda sorpresa) Cmo? No, no lo saba realmente. . .
Sbato: S, creo que la versin original se perdi y no s si luego se recuper. Pero
durante mucho tiempo, al menos, la versin francesa que circul fue la retraducida desde
el alemn. Dicho sea de paso, esa obra de Diderot es otro ejemplo de lo que decamos
antes, sobre la pluralidad de las interpretaciones. Lo admiraron a la vez Goethe y Marx,
aunque no por los mismos motivos.
Borges: El siglo XVIII francs tuvo la mejor prosa de la historia de la literatura de
Francia. Voltaire es admirable.
bibliotecario que toda la vida so ser, Borges pondra en el primer lugar la Biblia no?
Borges: Y sobre todo un libro como la Summa Teologica. Es una obra fantstica muy
superior a las de Wells. (Sonre.)
Sbato: Claro, Wells es demasiado mecanizado. Un poco la literatura fantstica de la
Revolucin Industrial.
Borges: S, tengo discusiones con Bioy Casares sobre eso. Yo le digo que es ms fcil
creer en talismanes que en mquinas.
Sbato: Tiene razn. La invencin de Morel es una obra magnfica Pero personalmente
la habra preferido sin maquinarias ni explicaciones.
Borges: Habra sido mejor que eso ocurriera. Uno acepta un talismn, digamos un anillo
que hace invisibles a los hombres; en cambio Wells tiene que recurrir a experimentos
qumicos, y eso es menos creble. El anillo slo exige un acto de fe, lo otro, todo un
proceso.
Sbato: Por otra parte la ciencia progresa. Einstein es superior a Newton, de algn modo
refuta a Newton. Un talismn siempre es el mismo, siempre sigue valiendo. Wells era en
el fondo un positivista de la literatura fantstica. Suena el telfono. Alguien pregunta por
Sbato. Hay una breve pausa y retomamos la charla.
Barone: Les voy a proponer saltar a otro tema, si el salto no les molesta.
Borges: He venido saltando desde hace setenta y cinco aos.
Sbato: Todos. Qu le parece como salto eso del despertar cada maana?
"Recurdenme a las nueve". As se deca antes, en el campo, cuando yo era chico.
"Recordarlo", como quien se ha olvidado de la existencia. Cuando dormimos el alma
viaja fuera del espacio y del tiempo. Borges se ha quedado pensativo. Inmvil, parece
evocar algo. Hay un silencio en Sbato, esperando.
Borges: Todas las maanas cuando me despierto, pienso: "Soy Borges, estoy viviendo
XVIII fue tan grande que Federico II ley la metafsica de Christian Wolff en francs, no
en alemn, su lengua de origen.
Borges: Es que Federico II tena un conocimiento rudimentario del alemn. Lo
consideraba una lengua brbara.
Sbato: S, el alemn no tena an suficiente prestigio como lengua culta. Pero hubo
algo ms impresionante todava. El romanticismo alemn se impuso gracias al impulso
desde Francia y sin embargo es un movimiento esencialmente germnico. Es la
dialctica de ciertos procesos espirituales: nos conocemos a travs de otros. Aqu
Echeverra introdujo los romnticos europeos y as Alberdi pudo darse cuenta de la
belleza del ceibo. Nada menos.
Barone: Disculpen, me perd esa parte cuando hablaban de Baudelaire y Poe.
Borges: Deca que si Baudelaire no traduce a Poe, quiz mucha gente en Amrica no
habra ledo sus poesas.
Sbato: Hay que reconocer que lo mejor.
Borges: S, es cierto, El cuervo es sencillamente espantoso.
Borges: Parece extrao, Borges, pero por qu, entonces, ese poema pas a ser tan
conocido?
Borges: Poe dice que quiso hacer un poema que fuera popular. Explica que se propuso
cierto nmero de lneas... tambin debe haber influido el hecho de que el cuervo es un
animal prestigioso... Con un loro no habra podido, no? De todas maneras s que en
Estados Unidos lo consideran un mal poeta. Los cuentos en cambio son muy buenos.
Tampoco Omar Kahyyam es considerado buen poeta en Persia, pero su traductor ingls
lo hizo famoso.
Barone: Siempre me pregunt como ser eso de traducir a otros idiomas como el chino
por ejemplo.