Ensayo - Cristología 2015
Ensayo - Cristología 2015
Ensayo - Cristología 2015
INTRODUCCIN
En el presente ensayo se intentar establecer los lmites propuestos por la
Comisin Teolgica Internacional para definir los objetivos as como tambin los lmites y
expectativas para el buen estudio de la Cristologa.
DESARROLLO:
Nos encontramos en una poca de crisis espiritual muy grande, dado que el
avance de la ciencia es cada vez mayor y las personas por lo general dan por cierto y slo
aceptan aquello que sus ojos pueden comprobar y que su razn les dicte que al ser
comprobados empricamente, entonces se puede confiar de estos datos.
El hombre actual se caracteriza por tener alguna idea acerca de Dios y as tomar una
postura frente a la divinidad, el atesmo es una de stas posturas se da en muchas
personas que como haba mencionado necesitan tener certeza de lo que creen, as
stas personas tienen una actitud contra lo recibido (Dios) 1, as la vida de estos hombres
tiene profundas quiebras que ni la ciencia, ni la poltica , ni la sociedad pueden llegar a
saciar, necesitan algo ms, me refiero a que el hombre moderno est necesitado de
Salvacin2.
La salvacin que nos ofrece Cristo es el momento constitutivo de lo que denominamos
Cristianismo y no un momento consecutivo a ste, a mi parecer este es el punto central y
1 Cf. Xavier ZUBIRI, El problema teologal del hombre, en Teologa y mundo contemporneo.
Homenaje a K. Rahner , Ediciones Cristianidad, Madrid, 1975, p. 55-64,Ediciones Cristianidad,
Madrid, 1975, p. 55-64
Para poder estudiar la Cristologa tenemos que tener presente que tenemos que estudiar
a la luz de las Escrituras, ms la Biblia necesita ser interpretada no por ser la Biblia sino
por ser histrica6.
As, tenemos que tener claro que Jess no deja de ser Dios para ser hombre. No es un
Dios de segunda categora por el hecho de ser hombre. Al mismo tiempo, como
acabamos de decir, Jess no es menos hombre que nosotros por ser Dios, sino ms
perfectamente hombre que nosotros, precisamente porque, al habitar en l la Divinidad,
realiza la ms perfecta imagen de Dios7, por eso es tan importante no darle ms peso a
una realidad que a otra, pero en nuestros das se hace totalmente lo contrario, que tratan
de reducir al mnimo, sin que desaparezca el nombre de Cristo, y es cuando se cae en el
error de entender el Cristianismo como un sistema de valores, de actitudes morales,
religiosas, de vida interior, etc., los cuales en definitiva, no tienen nada que ver con la
realidad absolutamente histrica y concreta de Cristo8.
Otro problema que afronta el hombre moderno es la total ignorancia, y en muchos casos
el nulo intento por obtener un conocimiento racional de Dios, lo que nos lleva a que no se
entienda la Trinidad desde que sta fue planteada y la evolucin del trmino a travs de
los siglos. Todo es un problema de conceptualizacin ya que se dice que en la Trinidad
son tres personas. Pero la palabra persona no aparece jams en el Nuevo Testamento,
sino ms tarde en la historia de la Iglesia, con Tertuliano, porque los griegos emplearon la
palabra u(po/stasij, que en realidad significa sustancia, y fue ms adelante cuando
lograron distinguir la sustancia de la persona, llamando a la sustancia ou)si/a y a la
persona u(po/stasij.
El hombre es deiforme porque trata de ser como Dios al seguir el ejemplo de Cristo, de
esa manera de deifica, al ser una suidad que se posee a s misma es capaz de
aprehensin, es una nota esencial del hombre, tener a la totalidad de su ser enmarcada
por su dimensin teolgica, siendo cual fuere su nivel de aceptacin o vinculacin a
cualquier religin, en el caso del Cristianismo, nosotros estamos adheridos a Cristo y a su
Iglesia, los seres humanos aprehendemos una vida desde otra gracias a la aprehensin
conceptiva, histrica y hermenutica , as el logos humano se propone comprender a otro,
as la vida del otro es aprehendida como algo convivido por el aprehensor 9, as es como
debemos de afrontar el estudio de Cristo en toda su amplitud.
CONCLUSIN.
Quedo claro cules son los lmites y los objetivos planteados para el estudio de la
Cristologa
conforme
lo
marcan
las
exigencias
del
mundo
moderno
as
las
9 Ibid, pag 35