Perez de Arce - Botellas Silbadoras

BOLETIN DEL
MUSEO CHILENO
DE ARTE PRECOLOMBINO
Santiago de Chile
N 9 2 0 0 4
FUNDACION FAMILIA LARRAIN ECHENIQUE
Presidente: Juan de Dios Vial Correa, Secretaria: Cecilia Puga Larran, Tesorero: Hernn Rodrguez
Villegas, Consejeros: Rector de la Universidad de Chile, Luis Riveros Cornejo; Rector de la Ponticia
Universidad Catlica de Chile, Pedro Rosso Rosso; Alcalde de la Ilustre Municipalidad de Santiago, Ral
Alcano Lihn; Directora de Bibliotecas, Archivos y Museos, Clara Budnik Sinay; Presidente de la Academia
Chilena de Historia, Fernando Silva Vargas; Francisco Mena Larran; R.P. Gabriel Guarda Gewitz O.S.B.,
Consejeros Honorarios: Mara Luisa Del Ro de Edwards, Luz Irarrzabal de Philippi y Mara Luisa Larran
de Donoso.
MUSEO CHILENO DE ARTE PRECOLOMBINO
Director: Carlos Aldunate del Solar, Subdirector: Francisco Mena Larran, Curador Jefe: Jos Berenguer
Rodrguez, Conservadora: Pilar Alliende Estvez, Jefa Administrativa: Julia Arriagada Palma, Relacionadora
Pblica: Luisa Eyzaguirre Letelier.
BOLETIN DEL MUSEO CHILENO DE ARTE PRECOLOMBINO
Representante Legal: Carlos Aldunate del Solar; Editor: Jos Berenguer Rodrguez; Consejeros: Luis Cornejo
Bustamante, Jos Luis Martnez Cereceda, Francisco Mena Larran y Jos Prez de Arce Antoncich; Asistente
de Edicin: Cecilia Sanhueza Toh; Productor: Fernando Maldonado Roi.
Cuerpo de Consultores: Warwick Bray, Tom D. Dillehay, Christopher B. Donnan, Alberto Rex Gonzlez,
Betty Meggers, Elas Mujica B.
Boletn del Museo Chileno de Arte Precolombino. Revista anual que publica estudios e informes sobre arte
precolombino o de races precolombinas y temas anes. Las opiniones expresadas en estas pginas no
reejan necesariamente el pensamiento de la Institucin, la cual slo responde por el inters cientco de los
artculos. Circulacin autorizada por resolucin exenta N218, del 15 de marzo de 1985, Ministerio del
Interior. Toda correspondencia sobre la revista debe dirigirse al Editor, jberenguer@museoprecolombino.cl
o a la Asistente de Edicin, csanhueza@museoprecolombino.cl, Casilla 3687, Bandera 361, Santiago de
Chile, Fax (562) 697-2779, Tel. (562) 688-7348, www.museoprecolombino.cl
ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE SANTIAGO
FUNDACION FAMILIA LARRAIN ECHENIQUE
BOLETIN DEL
MUSEO CHILENO
DE ARTE PRECOLOMBINO
Santiago de Chile
N 9 2004
5
CONTENIDO
Presentacin 7
Anlisis de las cualidades sonoras de las botellas silbadoras prehispnicas de los Andes 9
Jos Prez de Arce
Un ensayo sobre cultura visual y arte Chim, costa norte del Per 35
Francisco Gallardo I.
Imgenes legibles: La iconografa Tiwanaku como signicante 55

Constantino M. Torres
Cinco milenios de arte rupestre en los Andes atacameos: Imgenes para lo humano,
imgenes para lo divino 75
Jos Berenguer R.
7
PRESENTACION
Se entrega a los lectores un nuevo nmero del Boletn del Museo Chileno de Arte Precolombino. Como
hasta ahora el Boletn haba sido una revista de aparicin ocasional, nos complace mucho anunciar
que, desde este nmero en adelante, saldr regularmente una vez al ao en el mes de diciembre. En
esta nueva etapa, la plana editorial contar con la participacin ejecutiva de la etnohistoriadora Cecilia
Sanhueza Toh en calidad de Asistente de Edicin.
El presente nmero contiene cuatro artculos. Abre con un trabajo de Jos Prez de Arce en que
analiza las dimensiones sonoras de las as denominadas botellas silbadoras de los Andes, su funcionalidad
y su vinculacin con las experiencias psicoacsticas y chamnicas. El segundo artculo es un ensayo
sobre cultura visual de Francisco Gallardo, en que ste desarrolla una aproximacin al conocimiento
y la capacidad adaptativa de los artesanos y artistas de la sociedad Chim frente a las demandas
de la produccin masiva. Constantino M. Torres es el autor del tercer artculo, donde analiza una
interesante y compleja tableta de iconografa Tiwanaku para argumentar que este sistema iconogrco
es independiente de entidades polticas exclusivas, como tambin para refutar la nocin de que es
parte de una ideologa nica y constante a travs de la esfera de inuencia de esa cultura altiplnica.
El Boletn cierra con un artculo de Jos Berenguer, quien traza un amplio panorama del arte rupestre
atacameo y lo contrasta con los cambios climticos, histricos y culturales acaecidos en la antigua
Atacama durante los ltimos 5000 aos, desarrollando la tesis de que pinturas y grabados fueron tanto
transacciones rituales con la deidades para asegurar la subsistencia, como discursos vinculados con el
poder y la identidad de grupo.
No podemos concluir esta presentacin sin referirnos al alejamiento del Consejero de la Fundacin
Familia Larran Echenique, arquitecto Carlos Alberto Cruz Claro. Como Asesor Artstico de este Boletn,
contribuy a jar los estndares de calidad grca y contenido formal que han caracterizado a la revista
desde su primer nmero, en 1986, manteniendo desde entonces una rigurosa atencin sobre estos
aspectos en cada nueva edicin. Estamos muy agradecidos por su creativa y diligente colaboracin a
travs de todos estos aos.
9
BOLETIN DEL MUSEO CHILENO DE ARTE PRECOLOMBINO

N 9, 2004, pp. 9-33, Santiago de Chile
ISSN 0716-1530
ANALISIS DE LAS CUALIDADES SONORAS DE LAS BOTELLAS

SILBADORAS PREHISPANICAS DE LOS ANDES
Jos Prez de Arce*
Carecemos de informacin iconogrca, histrica y arqueolgi- En el Museo Chileno de Arte Precolombino (en
ca que permita interpretar las botellas silbadoras prehispnicas adelante MCHAP) existe una coleccin de 28 bote-
andinas. Desconocemos el motivo de su gran importancia,
extensin, permanencia y adaptabilidad en el pasado. Al es- llas silbadoras, provenientes de diversas culturas
tudiar su dimensin sonora descubrimos que pueden producir prehispnicas del Area Intermedia y de los Andes
diferentes melodas segn las tcnicas de taido que se utilicen. Centrales. En la bibliografa especializada existe
La ms interesante consiste en mover las botellas con agua en una gran cantidad de referencias a este tipo de
su interior, emitiendo el sonido natural del lquido, ltrado,
amplicado y modulado segn un patrn acstico denido botellas, pero la mayora slo las menciona, uti-
por el particular diseo de su estructura interna. Respecto a su lizando adems una nomenclatura muy diversa.
funcionalidad, los datos contextuales insinan un uso funerario. Algunos autores las analizan desde un punto de
Las fuertes experiencias psicoacsticas que puede producir un vista histrico (Bolaos 1997), otros avanzan al-
determinado uso de estas botellas o autas, las vinculan con el
mundo chamnico, estableciendo as una relacin entre auta, guna hiptesis sobre sus usos y funciones (Amaro
muerte y estados de conciencia que podra explicar, en parte, 1994). Todos concuerdan en que su caracterstica
su importancia en las grandes culturas andinas. principal es el sonido, pero con excepcin del
Palabras claves: Botellas silbadoras andinas, instrumentos breve ensayo de Velo (1985) y algunos datos de Ga-
musicales precolombinos, msica prehispnica.
rrett & Statnekov (1977) existe poca informacin
We have no iconographic, historical or archaeological e interpretaciones acerca de sus particularidades
information that allows us to interpret the pre-Hispanic Andean organolgicas. Me reero a su dimensin sonora,
whistling bottles. We do not know the reason for their great a cmo se produce el sonido o a las claves inter-
importance, duration, permanence and adaptability in the past.
After studying their capacity for sound we discovered that they pretativas que puede entregar la variabilidad y la
can produce different melodies depending on the techniques intencionalidad de esta dimensin. En el presente
that are used to play them. The most interesting technique is trabajo, intento llenar este vaco. Me baso en el
to move the bottles with water inside, which produces the estudio de la coleccin del MCHAP, ms otros 32
natural sound of liquid, ltered, amplied and modulated
according to an acoustic pattern dened by the specic design ejemplares provenientes de colecciones y datos
of its internal structure. Contextual data suggests a funerary que aparecen mencionados en las Referencias.
function. Strong psychoacoustic experiences produced when La extensin geogrca que alcanz este tipo
these bottles or utes are used a certain way link them to the de artefactos fue muy grande (g. 1). Los ms an-
shamanistic world, establishing a relationship between ute,
death and states of consciousness that could partly explain tiguos provienen de la cultura Chorrera (Ecuador),
their importance in the great Andean cultures. cerca del ao 1000 AC, donde adquirieron gran
Key words: Andean whistle jars, pre-Columbian musical importancia, continuando en las culturas Baha y
instruments, pre-Hispanic music. Jama-Coaque. Hacia el sur (Per) los encontramos
en Vics, Moche, Recuay, Paracas-Nasca, Chim,
* Jos Prez de Arce, Museo Chileno de Arte Precolombino, Casilla 3687, Santiago de Chile, email: jperezdearce@museoprecolombino.cl
10 Boletn del Museo Chileno de Arte Precolombino, N 9, 2004
Lambayeque, Chancay e Inca; y hacia el norte en

Quimbaya y Calima (Colombia), Zapoteca, Teo-
tihuacn, Mixteca y Nayarit (Mxico). La muestra
estudiada en este artculo, se concentra en los
Andes Septentrionales y en los Andes Centrales
(sensu Lumbreras 1981), que son las reas que
ofrecen una mayor variedad y cantidad de ejem-
plares conocidos.
Al parecer, esta especie organolgica desapareci
en el perodo prehispnico tardo. Conozco un solo
ejemplar, de origen colonial y muy atpico, con un
acabado verde glaceado que representa un pjaro
bicfalo con doble silbato (g. 2). Por su parte, Stat-
nekov (1974), menciona un comentario de Junius
Bird acerca de ejemplares semejantes en la colec-
cin del Museo de Historia Natural de Nueva York.
Adems, se nos ha informado de botellas silbadoras
dobles de esas caractersticas en la coleccin del
Museo de Arqueologa, Antropologa e Historia del Figura 2. CP s/n, Colonial (S. XVI?), 380 mm de alto. Botella
Per (Milano Trejo, comunicacin personal). silbadora con silbato doble. Su forma es muy atpica respecto
al resto de la muestra estudiada. Los silbatos (uno perdido) se
Respecto a la historia, dispersin y estudio de ubicaban en la parte superior del cuello de las aves.
contextos de estos artefactos, queda mucho por
hacer. En Vics se han hallado conjuntos de bo-
tellas silbadoras en un mismo contexto funerario
(Amaro 1994: 74, 76-77) pero desgraciadamente,
no hay descripciones especcas como para esta-
blecer pautas de investigacin.
Bolaos (1988) menciona imitaciones Moche
de botellas silbadoras Vics, y contextos funerarios
Vics con botellas silbadoras Moche asociadas,
lo que plantea una posible relacin recproca de
patrones identitarios. Sin embargo, nuevamente
carecemos de datos para denir este aspecto. En
el Museo del Oro del Per, hay dos imitaciones
Figura 3. Botella silbadora de Cerro Amaro, Huamachuco,
ilustrado por Topic & Topic (1983/85: 27).
Nayarit Teotihuacan
Mixteca
de botellas dobles Chim de oro, sin silbato, con
Zapoteca
un personaje con gorro de cuatro puntas, cuyo
original (g. 3) es una botella doble silbadora de
cermica que encontramos en el Horizonte Medio
Quimbaya de Huamachuco (Cerro Amaro, Mausoleo) (Topic
Colima
& Topic 1983-85: 27). Esto plantea, por una parte,
Jama-Coaque
Bahia Chorrera
una traslacin (de un material a otro y de un con-
texto cultural a otro), y por otra, la prdida de la
Vicus
Lambayeque
Chimu
cualidad sonora del artefacto. Tampoco tenemos
Moche
Recuay ms datos para interpretar este hecho.
Chancay Wari
Parakas Inka
Teniendo en cuenta su enorme dispersin tem-
Nasca poral y espacial, los diversos contextos por los que
atraves este instrumento debern ser estudiados
Figura 1. Mapa con las culturas que aparecen mencionadas por separado para establecer sus diferencias. Por
en el texto. ahora, me interesa algo ms bsico: una identi-
Cualidades sonoras de botellas silbadoras / J. Prez de Arce 11
cacin general, lo ms amplia posible, de sus

cualidades sonoras.
Presento a continuacin, un panorama acstico
del universo de las botellas silbadoras estudiadas.
En primer lugar me reero a la tipologa del objeto
organolgico, es decir, al objeto como artefacto
diseado para obtener un sonido determinado.
Luego analizo las tcnicas de taido que probable-
mente se utilizaron para aprovechar las cualidades
sonoras de este artefacto. Por ltimo, discuto dife-
rentes propuestas e hiptesis sobre el posible uso
y funcin de estas botellas.
TIPOLOGIA
Los distintos nombres que se han usado para

denominar estos artefactos son: Botella Silbado-
ra (Bolaos 1997; Amaro 1994), Botella Silbato
(Crespo 1966; Zeller 1963-64; Lathrap 1977); Vaso
Silbador (Daz Gainza 1977); Vaso Silbante
(Hernndez de Alba 1938); Vasija Silbato (V-
dova 1969-70; Estrada 1957); Huacos Silbadores
(Bakula & Tweedle 1984); Vasse-sifeur (Muse
de Lhomme 1987); Whistling Jar (Mead 1924; b
Izikowitz 1935; Bennett 1946); Whistling Bottles
y Musical Jars (Wilson 1898). Todos estos nombres
coinciden en que hay un silbido involucrado.
Pero no coinciden en la manera de llamar al re-
cipiente. Ambos, silbato y recipiente, se inuyen
recprocamente en la produccin del sonido. A
continuacin me reero a cada uno de ellos por
separado. a
El silbido a que se hace mencin, se reere
a una emisin sonora ms o menos aguda, simple Figura 4. a: CP s/n, Chorrera (1000-300 AC), 50 mm de alto.
meldicamente (puede constar de una o dos notas) Silbato (flauta globular). b: Recreacin de un personaje
tandolo, donde se ve su pequeo tamao. No obstante,
y ms o menos breve. Es interesante notar que el los agujeros de digitacin son cmodos y estn situados
nico autor que habla de msica, se disculpa di- simtricamente a ambos lados, en una disposicin tpica de
ciendo que estos brbaros artefactos difcilmente este tipo de instrumentos.
merecen ser clasicados como instrumentos musi-
cales (Carl Engel citado por Wilson l898: 654). Eso prehispnicos andinos, identicndose cientos de
nos coloca en el borde de lo considerado msica variedades desde la Araucana hasta el norte de
por Engel: voces mnimas, variaciones mnimas, Colombia (Izikovitz 1935; Cruz & Martnez 1988;
generalmente volumen mnimo; en resumen, lo Idrovo 1987; Prez de Arce 1995; Daher 1972). Si
que podramos denir como msica minimalista. a esta auta globular se le aade un conducto que
Desde el punto de vista organolgico, el objeto gue el aire hacia la abertura, se obtiene la ocari-
responsable de producir este silbido el silbato es na, que es ms fcil de tocar. La ocarina es muy
notablemente simple y constante en toda la muestra abundante y variada en los Andes Septentrionales,
estudiada. Este silbato forma parte de la familia de extendindose hasta Arica, en el extremo norte de
las autas de forma esfrica (autas globulares), Chile. Por lo general tiene agujeros para digitar y
provistas de una abertura por la cual se sopla (g. variar la altura del sonido. El silbato de las botellas
4). Estas autas son muy comunes en los registros silbadoras nunca presenta agujeros de digitacin
b
Figura 6. MCHAP 0381. Chorrera (1000 300 aC), 182 mm
alto. Botella silbadora con el silbato visible en la base del
gollete. Actualmente no suena, porque est reparada en el
sector del silbato.
sobre su supercie. Segn esta nomenclatura, este

ltimo debera denominarse ocarina, pero por
motivos de coherencia con la bibliografa citada,
continuar llamndolo silbato.
Respecto a la ubicacin del silbato, existen dos
soluciones bsicas en los objetos estudiados, que
distinguiremos como silbato en el asa y silbato
externo. El primero, consiste en un pequesimo
silbato (de aproximadamente 1 cm de dimetro
interior), ubicado dentro del asa del recipiente. Se
trata de una pequea cavidad que, mirada desde
afuera, se ve como un ligero engrosamiento en
la base del asa (g. 5a). En ausencia de asa, se
ubica junto al gollete (g. 6). Por su parte, el sil-
bato externo, es generalmente de tamao mayor
(unos 2 o 3 cm de dimetro interior) y se ubica
en la parte superior de la botella. Forma parte del
motivo escultrico, frecuentemente la cabeza del
personaje (g. 7), o puede encontrarse en algn
lugar estratgico, como lo ilustra la pieza MCHAP
0542, que representa un pequeo personaje en
el acto de taer (g. 8). El silbato siempre est
ubicado sobre la reserva de aire del recipiente.
Figura 5. a: MCHAP 0091, Chorrera (1000-300 AC), 200 mm de En ocasiones este segundo tipo de silbato
alto. Botella silbadora con el silbato en el asa, visible sobre la
cabeza del personaje. b: Recreacin que muestra la posicin
est alojado en el interior de una esfera mayor,
en que hay que colocar el recipiente para que suene al taer provista de oricios que permiten la salida del
soplando con agua. aire y del sonido (g. 9b). Este elemento ha sido
Figura 7. MCHAP 0050, Jama-Coaque (500 AC - 500 DC), 380 mm Figura 8. MCHAP 0542, Chancay (1000-1450 DC), 245 mm de
de alto. Botella silbadora que representa un msico con siku alto. Botella silbadora que representa un mono taendo una
(auta de pan de caa) y maraca. El silbato est alojado en la auta globular (probablemente de semilla). El silbato est en
cabeza, sin sordina. Es posible que sea pareja con la botella la semilla (sin sordina) y el aire sale por la boca del animal.
silbadora MCHAP 0049, de similares caractersticas (no incluida Posee una gran reserva de aire, y tiene una excelente respuesta
entre las guras). Ambas dan un magnco sonido grave y a la tcnica de taido con agua y vaivn, dando sonidos largos
pausado cuando son taidas con agua y tcnicas de vaivn. El en un tono.
vaso abierto arriba no permite taerlo soplando.
Silbato
Figura 9. a: MCHAP 0045, Chorrera (1000-300 AC), 176 mm de alto. Botella silbadora. b: El corte esquemtico muestra la posicin
del silbato en el interior del pjaro, que hace las veces de sordina. Posee una gran reserva de aire y un ducto largo, dando
sonidos prolongados con dos tonos.
a
Silbato
Figura 10. a: MCHAP 0241, Vics Temprano (500-1 AC), 145 mm de alto. Botella silbadora con dos silbatos. b: El corte esquemtico
muestra los dos silbatos alojados en las cabezas del pjaro y la serpiente, que hacen las veces de sordina. La extraa forma
interior de la botella genera una gran cmara de aire y un largo conducto. Est restaurada y actualmente suena slo uno de los
silbatos.
denominado caja de resonancia (Crespo 1966: que, al ser llenadas con agua, permiten que se
79), enclosed-type whistle (Garrett & Statnekov forme una reserva de aire en un sector, y aquellas
1977), cmara reverberante (Bolaos 1997) y que no lo permiten (g. 11). La clsica botella
protomas que sirven de cmara de resonancia alargada hacia arriba, en forma de pera o similar,
(Amaro 1994). Este ltimo autor interpreta los ori- que en adelante llamaremos botella simple, no
cios como agujeros de digitacin, tema sobre el permite esta reserva de aire. Dicha reserva se
cual volver al tratar las tcnicas de taido. Desde puede producir variando la forma de la botella, o
el punto de vista organolgico, la caja de reso- bien, unindole una segunda botella, estructura
nancia, que cubre la totalidad del instrumento, a la que llamaremos botella doble (ver g. 3).
enmascarando y oscureciendo un tanto el sonido, En todos estos casos el silbato se ubica sobre la
corresponde a una sordina. reserva de aire.
Existen ejemplares que poseen dos silbatos. El La relacin entre las variedades estructurales
ejemplar Vics del MCHAP (g. 10 a y b), posee una mencionadas y las distintas culturas no es espec-
compleja estructura de conductos y dos silbatos ca, salvo contados casos. Al parecer el modelo de
con sordina, que representan una serpiente y un botella simple, sin reserva de aire y con el silbato
pjaro, respectivamente. en el asa, se da slo en Chorrera (MCHAP 0091
El recipiente propiamente tal, forma parte del y 0381; ECBC s/n; CSP 121; Lathrap 1977: Fig. 44;
aeroducto de la ocarina. La botella (recipiente Zeller 1963-64: 22, 25). En Jama-Coaque (Ecuador)
globular con gollete angosto), es la forma ms y tambin en diversas culturas mesoamericanas,
antigua y habitual. En relacin con su incidencia encontramos modicaciones de la botella origi-
en el sonido, distinguimos entre aquellas botellas nal que se transforma en vaso, es decir en un
Aparte de estos casos, no parece haber especi-

cidad cultural en las estructuras de estos artefactos.
Bolaos (1997) plantea que la sordina nace en
Chorrera y se expande hacia Vics hasta alcanzar
su madurez con los Moche; mientras que el mo-
delo sin sordina, nace en Guaape y se desarrolla
hasta ser reemplazado por el modelo Moche con
a b sordina. Luego, Wari impone nuevamente el mo-
delo sin sordina y, posteriormente, sta reaparece
con Lambayeque, Chim y Chancay. Este tipo de
reemplazos culturales son comunes en la organo-
loga surandina, como conocemos bien en el caso
de las antaras Nasca-Wari y Tiwanaku-San Pedro
(Prez de Arce 1993). Sin embargo, no he podido
comprobar la secuencia descrita por Bolaos en
la muestra estudiada, ya que me he encontrado
c
con botellas Chorrera sin sordina (MCHAP 0091,
0381, 0042; ECBC s/n; CSP 121; Lathrap 1977: Fig.
44; Zeller 1963-64: 22, 25); como tambin Vics
(MCHAP 0296, 0254), Chim (MCHAP 0231, 0599) y
Chancay (MCHAP 0542; Velo 1985: 3-4). Asimismo,
he identicado botellas Wari con sordina (MCHAP
0300, 0301).
Garrett & Statnekov (1977) piensan que las
d culturas ms tempranas tienden a generar botellas
silbadoras de doble tono, de baja frecuencia y con
Figura 11. Se presentan aqu cuatro esquemas (a, b, c y d) sordina, y las culturas tardas a producir tonos
que muestran las variaciones del recipiente en relacin a la simples, agudos y sin sordina. Tampoco he podido
existencia y volumen de la reserva de aire. a: En la botella vericar esta hiptesis en la muestra estudiada,
simple no existe reserva de aire y slo se puede taer soplando, como explico ms adelante.
ya sea con agua (en cuyo caso hay que inclinar la botella) o
sin ella. b: En algunos casos la botella simple permite una La variedad formal aparece, desde un inicio, en
pequea reserva de aire. c: En la botella doble se forma una Chorrera Temprano, donde adems de la botella
reserva de aire y es fcil obtener el sistema de taido con simple y sin reserva de aire (ver gs. 5 y 6), en-
agua por vaivn. Al inclinar el recipiente, el agua empuja el contramos botellas con reserva de aire, con silbato
aire contenido en la reserva y, al salir ste, sopla la ocarina
situada de un modo estratgico, producindose el sonido. d: externo y sordina (g. 9). Tambin las hay con
Al estar separadas ambas botellas, la elongacin del conducto silbato externo y sin sordina, as como botellas
que las une permite prolongar el sonido y obtener interesantes dobles con silbato en asa y con dos silbatos ex-
sonidos de respiracin intercalados. ternos (Quinatoa et al. 1997; CSP s/n y 122; Marcos
& Norton 1981: 146; Lathrap 1977: Fig. 40; Estrada
1962; Zeller 1963-64: 18).
recipiente con boca ms ancha que el cuerpo o En el resto de las culturas se mantiene la va-
de cuerpo no restringido, como se denomina riedad de botellas con reserva de aire: en Vics
tcnicamente (ver g. 7). Preferentemente en la hallamos botellas simples con sordina, y botellas
cultura Moche, se da un caso especial de botella dobles (con uno y con dos silbatos) y tambin
provista de un asa-estribo que est conectado por con sordina (gs. 10, 13, 17, 19-21; MCHAP 0224,
su brazo inferior al interior de sta (g. 12; MNAA 0229, 0230, 0233, 0234, 0239, 0241, 0243, 0246,
3585, 1008, 9006 y 3186; Donnan 1978: 110-111). 0254, 0295, 0311, 2076; BCRP 25, 229, 252, 253, 263,
Es posible que en las culturas Teotihuacn, Mixeca, 282, 294, 300, 315, 329; Anton 1972; Lapiner 1976;
Zapoteca y Tlatilco se den slo botellas simples o Lumbreras 1979). En Paracas-Nasca encontramos
dobles con silbato externo (Westheim et al. 1969; una botella simple sin sordina (Dockstader 1967).
Parsons 1980; Mart 1955: 70, 78; 1961: 338; 1970: En Baha se mantiene la botella simple y doble con
110; 1978: 34; Castellanos 1970: Fig. 5). sordina, con dos silbatos sin sordina, y la botella
Figura 12. MNAA 3585, Moche (200 AC 800 DC), 180 mm Figura 13. MCHAP 229, Vics tardo (1-500 DC), 250 mm de
de alto. El silbato est alojado en el interior de la extremidad alto. Silbato en el interior de la cabeza del personaje, que
superior, que acta como sordina. Tiene nueve perforaciones hace las veces de cmara de resonancia. La boca abierta, como
escalonadas (que pueden ser interpretadas como sikus de tres cantando, permite la salida del sonido. La extraa forma de
tubos) y en la parte superior lleva pintada una imagen de la botella permite una gran cmara de aire y un buen sonido
caracol (Strombus sp.), que era utilizado como trompeta. La con la tcnica de vaivn con agua.
forma de la botella es caracterstica de la Cultura Moche, con el
brazo inferior del asa conectado al interior y el brazo superior
clausurado, de modo de formar una reserva de aire en la parte
superior de la botella. Esto permite tocarlo con agua y vaivn
a pesar de ser una botella de forma simple.
triple sin sordina (CSP 116; Lapiner 1976; Meggers En Salinar encontramos botellas con silbato
1966: 84; Porras 1980; Vdova 1969-70). externo con y sin sordina (Lapiner 1976). En
Jama-Coaque presenta, adems del vaso-botella Recuay, botellas con sordina (Schuller 1980). En
con silbato externo mencionado (g. 7; MCHAP Lambayeque botellas dobles con silbato externo
0049, 0050), botellas dobles con silbato externo (g. 14b; MCHAP 0554; CP 17, 20), como tambin
y con dos silbatos con sordina (Salomone 1975; botellas dobles con el silbato ubicado en el con-
Quinatoa et al. 1997). Moche, como dijimos, slo ducto que las une (CP 1), o bien, botellas simples
presenta botella asa-estribo con sordina (g. 12; con silbato en el asa (Ancient Art of the Americas
MNAA 1008, 3585, C03186, 9006; CP s/n). Wari 2004; Fundacin Cristbal Gabarrn 1997). En
presenta botellas con silbato en asa y externo con Chancay, botellas con silbato externo, con y sin
sordina (g. 18; MCHAP 0300, 0301). En Chim sordina (g. 8; MCHAP 0542; Izikowitz 1935: Fig.
encontramos botellas con silbato en asa y botellas 238; Parson 1980), y en Inca con y sin sordina
dobles con sordina (MCHAP 0231, 0599; MP s/n; (Garrett & Statnekov 1977). En Quimbaya hallamos
ODELP 062-V814656, 063-V844694; CP 4; Bennett botellas simples y dobles con sordina (Hernndez
1946: Pl. 60; Donnan 1978). de Alba 1938). En Tierradentro, botellas dobles
Flauta globular
Silbato
c
Figura 14. a: MCHAP 0554, Lambayeque (600 1470 DC), 130 mm de alto. b: El corte esquemtico muestra la botella con el silbato
y, sobre ste, la auta globular con un agujero de digitacin. c: La recreacin de un personaje taendo la auta globular permite
ver como el dedo pulgar puede obturar el agujero situado atrs. No es posible taer la auta globular y la botella silbadora
simultneamente. Esta ltima puede dar un tono corto y suave utilizando la tcnica de vaivn con agua.
con sordina (Duica 1991), y en Calima, botellas

simples con sordina (Duica 1991).
Dentro del terreno especcamente sonoro,
encontramos botellas silbadoras capaces de dar
un solo tono (a veces variable en un reducido
rango), o dos tonos claramente distinguibles. Este
rango, que resulta de las caractersticas morfolgi-
cas del silbato (tamao, posicin, aeroducto, etc.),
tampoco es atribuible a ni especco de alguna
cultura en particular, ya que lo encontramos irregu-
larmente disperso en la muestra, tanto en silbatos
en el asa, como externos y con sordina.
En esta resumida y sin duda incompleta re-
visin, se pueden sacar varias conclusiones para
nuestro caso particular. En primer lugar, respecto a
la muestra del MCHAP estudiada, podemos observar
que no es representativa del universo de botellas
silbadoras, puesto que hay varios ejemplares que
no aparecen en la literatura revisada y vicever-
sa. En segundo lugar y en relacin a la enorme
extensin territorial y temporal que alcanza la
botella silbadora, es imposible entenderla como
una articulacin de los parmetros constructivos
a
(acsticos o formales) que hemos detectado: todas
las generalizaciones parecen desaparecer ante un
anlisis cuidadoso. Incluso las excepciones a esta
regla, ya sealadas (Chorrera, Moche) deberan ser
contrastadas con estudios especcos.
El ejemplar MCHAP 554, por ejemplo, constituye
una variante excepcional de botella silbadora (g.
14 a, b y c). Proveniente de la cultura Lambayeque,
es de tamao muy pequeo, casi una miniatura,
Silbato y posee sobre el silbato una auta globular con
un agujero de digitacin. Para taerla, es preciso
soplar por su parte superior. No existe conexin
entre ambos instrumentos ni es posible hacerlos
sonar simultneamente.
Todas las botellas silbadoras se caracterizan
por poseer un recipiente asociado a un silbato, de
modo que si contiene lquido, ste pueda inuir
en la produccin del sonido. Quedan fuera de
esta categora los objetos cuyo silbato no se halla
conectado con la cavidad del recipiente, pudiendo
separarse ambos sin que se modiquen sus funcio-
nes. En ese caso se encuentran la botella Chorotega
b que posee una ocarina adosada a una botella tr-
Sonajas
pode con sonajas en las patas (g. 15) o los dos
ejemplares Chim que describe Velo (1985).
De todos los aspectos estructurales mencio-
Figura 15. a: MCHAP 0638, Chorotega (600-900 DC). b: El corte
esquemtico muestra el recipiente y el silbato sin conexin,
nados, algunos tienen directa implicancia en el
por lo que no se considera botella silbadora. Permite taer el sonido. Desde la perspectiva de los resultados
silbato y las sonajas de las patas simultneamente. sonoros, podemos referirnos a la anacin (es
decir a la altura de sonidos bsicos que produce sonidos agudos. En los casos en que el silbato
el silbato), a la capacidad de algunos silbatos de forma parte del asa, o en muchos casos de silbato
producir una meloda rudimentaria de dos o ms externo, su tamao es muy pequeo y el sonido,
tonos, a la duracin del sonido y al timbre. por consiguiente, muy agudo (gs. 2, 5, 6, 8 y
9). Cuando el silbato est sobre la botella puede
adquirir un tamao mayor, siendo el sonido un
1. Altura del sonido poco ms grave (gs. 7, 9, 10, 12, 13, 17, 18, 20 y
21). Los nicos ejemplares con un sonido grave,
Esta variable depende del tamao interior del sil- claramente ms bajo que el de los otros estudia-
bato. El sonido se percibe como puro, es decir, se dos, son Jama-Coaque, con grandes ocarinas que
escucha claramente su tono fundamental y muy forman la cabeza del personaje (g. 7; MCHAP 0049
poco sus parciales. A mayor tamao, ms grave y 0050).
es el sonido y a menor dimensin ms agudo. En Garrett & Statnekov (I977; tambin Wright
la muestra estudiada predominan, en general, los 1992), llaman la atencin respecto de la correla-
Figura 16. MCHAP 0453, Vics estilo Vics-Vir (500-1 AC), 170 mm de alto. El silbato es muy pequeo y, por lo tanto, es de
sonido muy agudo. Est en la base del asa, detrs de la nuca del felino. Tiene una pequea reserva de aire que permite un
excelente sonido corto con la tcnica de vaivn con agua.
Silbato
Reserva de aire
Lquido
c d
Sordina
Silbato
Figura 17. a: MCHAP 0243, Vics Temprano (500-1 AC), 258 mm de alto. b: El corte esquemtico muestra las conexiones entre
las botellas y el silbato. La compleja conexin entre los dos personajes representados forma una gran cmara de aire, y el largo
conducto entre ambos cuerpos de la botella hace que el control sonoro sea especialmente exitoso, dando sonidos prolongados.
Fue hallada junto a la 0244, que tambin representa una escena de coito, esta vez anal, cuyo silbato est perdido y por tanto no
suena. c: Radiografa de los dos cuerpos de la botella unidos por el conducto inferior. d: Radiografa que muestra la ubicacin de
la ocarina en el interior de la cabeza del personaje masculino, y los pies y brazos que lo conectan con el personaje inferior. Las
radiografas de esta pieza fueron tomadas dentro del proyecto de ttulo de Daniela Nez (2004) Botellas silbatos: reproduccin
y sonido, Escuela de Artes Aplicadas Ocios del Fuego con especializacin en cermica.
Figura 18. a: MCHAP 0300, Wari (400-1000 DC), 140 mm de

alto. Representa un pjaro falconiforme, probablemente Falco
Spaveris, llamado cerncalo, halconcito o halconprintito,
que dentro de los halcones es el menos agresivo (datos
ornitolgicos de Manuel Marn, comunicacin personal).
Slo permite sonidos soplados con o sin agua. b: El esquema
muestra los tres agujeros comentados en el texto.
Figura 19. MCHAP 0233 Vics Temprano (500-1 AC) 240 mm de

alto (detalle). El silbato est dentro de la cabeza del felino, la
reserva de aire en el cuello permite tocarlo con la tcnica de Figura 20. a: MCHAP 2076, Vics Tardo (1-500 DC), 225 mm
vaivn con agua y da un tono. El detalle muestra parte de los de alto. Representa un personaje taendo una auta antara
26 agujeros de la sordina situados en torno a la cabeza. Estos de seis tubos. b: Detalle de los 29 agujeros de la sordina. De
son imposibles de digitar por su ubicacin y cantidad, pero ellos, 27 se ubican detrs de la cabeza y dos encima. Son
plsticamente son muy expresivos en nariz y boca. imposibles de digitar.
1997; Prez de Arce 1996, 2000b; Stobart 1996).

Un fuerte argumento a favor de esta hiptesis se
da en el hallazgo de varias botellas silbadoras con
idntica anacin en contextos funerarios Vics,
que menciona Amaro (1994:72), aunque, desgra-
ciadamente sin mayores comentarios. El nico par
de botellas silbadoras del MCHAP que proviene del
mismo contexto funerario (N0 243 y 244) no nos
permite comprobar esta hiptesis, ya que una de
ellas actualmente no suena. Sin embargo, el tama-
o del silbato es muy similar y, por lo tanto, su
anacin tambin debi haberlo sido.
Esta hiptesis cobra an ms sentido si se
piensa en la utilizacin simultnea de varias bo-
tellas silbadoras, (aspecto al que volveremos ms
Figura 21. MCHAP 0246, Vics Temprano (500-1DC), 190 mm adelante, al tratar el tema de su uso y funcin).
de alto. Es la tpica forma Vics con el silbato en el extremo
Cuando ocurre esto, sobre todo en los casos en
del cuello y con reserva de aire que permite dar dos sonidos
con la tcnica de vaivn con agua. Es difcil postular en este que los silbatos emiten tonos cercanos, se produce
ejemplo la relacin entre sonido y representacin. un tercer tono grave, claramente audible.
En el caso de las botellas con doble silbato,
cin entre cultura y altura de sonido. Los primeros podemos conocer una superposicin real de
estudiaron 73 botellas silbadoras y encontraron tonos elegida por el fabricante hace siglos. El
que las frecuencias medias de las botellas Galli- nico ejemplar con doble silbato con que he
nazo, Vics, Moche y Wari son de 1320 hz, las logrado producir sonido (CP AN 44), presenta una
de Recuay son de 2000 hz, y las de Chancay, interesante relacin tonal, ya que ambos silbatos
Chim e Inca son de 2670 hz. A partir de esas emiten a una tercera mayor de distancia, y cada
mediciones, concluyen que las alturas de sonido uno emite a su vez dos tonos a una tercera mayor
se pueden agrupar acsticamente por culturas, de distancia. Falta saber cmo se utilizaban estas
existiendo frecuencias caractersticas a cada una. combinaciones de tonos en el pasado. La eviden-
Mi experiencia con los ejemplares del MCHAP me cia etnogrca nos indica que la tendencia es a
impide llegar a esta generalizacin, ya que he utilizarlos en paralelo, ambos tonos subiendo y
encontrado un rango de anacin que vara, hasta bajando al mismo tiempo (Baumann 1982; Prez
3 octavas y media, en los ejemplares de una sola de Arce 2000b).
cultura, como es el caso de Vics. Los rangos ms
bajos los he encontrado en Jama-Coaque y no en
Chorrera, mientras que en esta ltima he hallado 2. Meloda
silbatos muy agudos. Por lo dems, es esperable
que en una cultura encontremos variacin. Si te- Algunas botellas silbadoras dan melodas bsicas,
nemos en cuenta que lo que nosotros llamamos la formadas por dos tonos. Normalmente el silbato
Cultura Vics tiene un rango temporal de 1000 da un tono nico, pero al incrementar la presin
aos, vemos que es imposible pretender encontrar de aire, dependiendo de la geometra interior del
la permanencia de una misma anacin durante silbato y del aeroducto (tamao y forma), se pueden
todo ese perodo de tiempo.1 La hiptesis de Ga- producir una o ms alturas de sonido. Al aumentar
rrett & Statnekov tiene sentido si se restringe a la presin del aire, generalmente se eleva el sonido
grupos sociales pequeos (como el clan familiar o de forma paulatina. La resultante es una meloda
el poblado) que compartan una misma identidad y bsica en forma de arco, que sube para luego bajar.
tenan un tono caracterstico que los diferenciaba La meloda se produce por variacin del tono fun-
del resto. Ello resulta coherente con la nocin de damental, en un intervalo (distancias de altura entre
identidad sonora andina que conocemos bien sonidos) que generalmente es de segunda menor
por la etnografa donde a veces un parmetro (medio tono) o segunda mayor (un tono).
como el timbre sirve para sealar una identidad Sin embargo, en muchos ejemplares se logra
social (Baumann 1982; Feld 1984; Gerard-Ardenois una meloda que sube y luego baja al tono inicial
por saltos, un efecto que depende de sutiles com- Por otra parte hay muchos ejemplos, como el de
binaciones estructurales del instrumento, unido a los bailes chinos, donde la meloda no juega
una regulacin na de las presiones de aire. Los ningn rol relevante.3 El denominar msica o
intervalos pueden ser determinados por la serie de no a ese tipo de expresiones es, en realidad, un
armnicos, siendo los ms frecuentes la quinta y problema cultural nuestro, no de ellos.
la tercera mayor. Esta variacin por saltos puede ir
acompaada por la forma de arco, producindose
entonces algunas guras meldicas ms comple- 3. Duracin
jas. En general todo este proceso, y en especial
los glissando, dependen de sutiles diferencias de La duracin del sonido est sujeta al tiempo que
presin del aire, dentro de un rango de presiones dure el ujo de aire. Si se sopla, esta variable de-
muy bajas. pende del ejecutante. Si la emisin es mecnica,
A estos parmetros meldicos debemos aadir depende de la tcnica utilizada y de la geometra
todos aquellos referentes a las variaciones que del recipiente, que describir a continuacin. En la
introduce en el sonido el uso del agua. Es difcil tcnica de vaivn con agua, el tamao de la reser-
referirse a ellas en los trminos musicales que va de aire y -en el caso de las botellas dobles- el
manejamos en occidente, porque se remiten a largo de la unin entre ambas botellas, determina
cualidades tales como gorgoreos, burbujeos, la duracin del sonido. En el ejemplar MCHAP 243
respiraciones y una serie de alteraciones del so- (g. 17), por ejemplo, las dos botellas estn co-
nido que, genricamente, entran dentro de nuestra nectadas por un largo y estrecho conducto, pero
categora de ruidos. Sin embargo, la muestra adems una de ellas se conecta con el cuerpo del
observada me permite armar que cada una de personaje a travs de otros conductos, aun ms
estas cualidades ha sido buscada y conseguida con estrechos, ubicados en el interior de sus piernas
precisin por los artesanos prehispnicos. y brazos. Se establece as un paso incluso ms
Si tuviera agujeros de digitacin, el instrumento controlado de aire o lquido al silbato.
podra producir melodas ms variadas. Amaro Aunque escasas, existen botellas triples (tres
(1994: 76) piensa que s los tena, opinin que recipientes unidos por conductos), cudruples y
no comparto, por razones que dar a conocer al sxtuples (Garrett & Statnekov 1977), pero no he
hablar de las tcnicas de taido. Pero tambin podido efectuar pruebas en ninguna de ellas y no
pienso que los artesanos que confeccionaron estos tengo datos del ujo de lquido en su interior.
artefactos estaban orientados a un concepto de
sonido muy propio de los Andes y muy extrao
al europeo, cual es moverse en la pura dimensin 4. Timbre
tmbrica de la auta, sin meloda o con el mnimo
de ella. El tipo de esttica sonora que domina El timbre o color del sonido es la cualidad que nos
en los bailes chinos de Chile Central, es un permite distinguir entre un sonido de piano y otro
ejemplo caracterstico de esta tendencia (Prez de violn, por ejemplo. Depende de dos factores:
de Arce 1996). por una parte, la emisin de sonido de cada tipo
Garrett & Statnekov (1977) opinan que, debi- de instrumento musical posee un espectro arm-
do a la pequea fraccin de la octava cubierta nico determinado (envolvente); y por otra, el
por las frecuencias de todas las botellas en cada acto de taerlo le imprime una dinmica propia,
cultura, estamos razonablemente ciertos de que con un ataque, una permanencia y un decaimiento
las botellas no fueron usadas como instrumen- caracterstico.
tos musicales.2 Nuevamente nos encontramos Dentro de las botellas silbadoras las variaciones
con un concepto occidental que presupone ms notables respecto a la envolvente, se reeren
tendencias que no son esperables de hallar en a la presencia o no de la sordina. Cuando no la
la muestra. El concepto msica est ausente hay, el sonido se presenta con bastante pureza.
en las culturas andinas actuales, y suponemos Es decir, con una envolvente restringida a pocos
que con mayor razn en las del pasado. Exis- armnicos (en comparacin con aquella de otras
ten conceptos precisos para cada msica en autas contemporneas a las botellas silbadoras).
particular, ligada a contextos especcos, pero Cuando hay sordina, el sonido es un poco ms
no existe nuestro concepto de msica genrica. apagado, ms aterciopelado, suavizado y sombro.
Tambin puede ser descrito como ms lgubre. pleada. No ha sido descrita en uso por pueblos
La vaguedad de estas deniciones pone de relieve nativos americanos, no hay crnicas histricas que
el carcter leve, sutil y ambiguo de la modica- mencionen ese aspecto, no existen datos iconogr-
cin sonora. La sordina es un rasgo exclusivo de cos ni de huellas de utilizacin. Esta ausencia de
las botellas silbadoras; no conozco ocarinas o informacin es uno de los misterios que rodean
autas globulares prehispnicas con sordina. Sin a este instrumento. Pero an ms intrigante es
embargo, existi en Per colonial un concepto constatar que la misma carencia abarca a toda la
de sordina aplicado a la auta quena, que se familia de las autas globulares y ocarinas que
caracteriz por su sonido lgubre (al punto de ha- pueblan, en cantidad, los registros arqueolgicos
ber sido prohibido por las autoridades coloniales, de los Andes y Mesoamrica. La desaparicin de
segn cuenta la leyenda), al que volveremos ms todo este sector de la organologa, el ms rico,
adelante. Se desconoce la continuidad histrica y interesante y expandido en tiempo y espacio, per-
la antigedad de este objeto (vase Roel Pineda et manece hasta ahora sin solucin. El caso de las
al. 1978: 15; Jimnez Borja 1951: 36-37; DHarcourt botellas silbadoras parece ser slo un aspecto de
& DHarcourt 1925: 60-61; De Lima 1935; Daz esta gran prdida cultural en el continente.
Gainza 1977: 151). Al carecer de antecedentes acerca de la tcnica
La envolvente cambia radicalmente cuando se empleada para taer la botella silbadora, nuestra
taen dos o ms autas al mismo tiempo. Si estn nica opcin es recrearla mediante la experimen-
anadas igual o muy cercanamente, entonces el tacin. Es preciso detenerse en este punto, ya que
efecto es muchsimo ms notorio, producindose implica un factor de creatividad y, por lo tanto,
un sonido de gran potencia, penetrante, disonante es en parte subjetivo y en parte determinado cul-
y con efectos psicoacsticos muy particulares. Vol- turalmente. Nuestra actitud como investigadores
veremos a este tema al hablar de uso y funcin. debe ser explorar todas las posibilidades de taer
Con respecto a la dinmica, sus caractersticas el instrumento, pero no debemos confundir esto
dependen de las tcnicas de taido. Aquellas que con la actitud del ejecutante prehispnico. La ex-
implican agua, imprimen al sonido la dinmica periencia etnogrca nos muestra que la actitud
propia del comportamiento hidrulico: pequeas normal del intrprete andino, al taer una auta
olas y grgoros son reconocibles como tales en u otro instrumento musical, est circunscrita a un
el sonido nal, aunque enmascarados por la ana- grupo discreto y normado de tcnicas, y no a
cin, meloda y timbre de cada botella silbadora. la exploracin sonora propia de nuestra cultura
musical del siglo XX. Este cdigo andino tradicio-
nal es trasmitido de una generacin a otra por
TECNICAS DE TAIDO los ejecutantes y su objetivo no es producir un
discurso musical lo ms variado posible (como
Las tipologas descritas hasta aqu se reeren a ocurre en nuestra tradicin), sino proporcionar el
la estructura del instrumento. Para hacerlo sonar, lenguaje sonoro ms apropiado para las funciones
es preciso contar con una tcnica apropiada de que cumple el instrumento. La inventiva, la sen-
taido. Dependiendo de sta, los resultados so- sibilidad musical, la capacidad de improvisacin
noros pueden ser muy diferentes. El nico modo y de bsqueda, existen, pero al servicio de ese
de conocer la tcnica adecuada y, por lo tanto, propsito cultural.
el sonido que corresponde al instrumento en su Creo que el trabajo de Amaro (1994: 76-77)
medio cultural, es observar su uso en ese contexto. sufre de esta distorsin cuando cree ver aguje-
En nuestro caso carecemos de ese dato, ya que ros de digitacin en las sordinas de las botellas
se trata de instrumentos arqueolgicos. Tampoco silbadoras Vics. Llega a clasicarlas de acuerdo
tenemos datos histricos o etnogrcos que nos a los intervalos obtenidos al tapar cada agujero,
apoyen en esta bsqueda. No se ha encontrado deniendo cinco grupos de intervalos (desde 1/10
iconografa de instrumentistas tandolas (Bolaos de tono hasta un tono) y relacionndolos con las
1997) ni he podido hallar huellas de uso, tanto guras representadas. Considero que esta inter-
en los ejemplares examinados, como en las des- pretacin es errnea, debido a varios factores. En
cripciones de otros autores. primer lugar, la cantidad, posicin y tamao de
En resumen, la botella silbadora carece de los agujeros en la sordina parecen obedecer a la
datos respecto al tipo de tcnica de taido em- necesidad de dejar escapar el aire, unida a crite-
rios estilsticos formales y quiz acstico-tmbricos, autores, responden a un mismo principio: el silbato
pero no meldicos. En segundo lugar, su efectivi- suena cuando el aire es expelido desde el interior
dad como agujeros de digitacin es escasa, como del vaso. Esto ocurre de dos maneras: soplando
he comprobado en nuestros ejemplares, ya que al dentro de la botella, o moviendo el lquido en el
no estar ubicados en la ocarina propiamente tal, interior de ella, sin intervencin del soplo. En el
sino en la sordina, inuyen de manera muy leve segundo caso, el sonido se logra vertiendo agua al
en bajar el tono (a veces a niveles imperceptibles interior de la vasija, balancendola, o bien hirvien-
por el odo humano, como por ejemplo, 1/10 de do el agua con el gollete tapado. En estos casos
tono), al tiempo que producen un tono cada vez la tcnica de taido es mecnica y no implica la
ms apagado. accin directa del soplo. Entonces, las posibilida-
En el ejemplar MCHAP 300 (g. 18) por ejem- des tcnicas de producir sonidos se restringen a
plo, es posible bajar medio tono al obturar un un rango en el que no intervienen los factores de
agujero, pero los otros dos slo alteran el timbre, creatividad individuales, sino slo (o casi slo) los
apagndolo. Podra ser que la intencin de es- factores estructurales mencionados. Esto signica
tos agujeros fuera justamente cambiar el timbre que nuestra reconstruccin sonora se acerca mu-
y no la anacin, argumento muy cercano a la chsimo ms al sonido original, transformando las
sensibilidad andina y aplicable a algunos pocos botellas silbadoras en instrumentos privilegiados
ejemplares (aunque con reservas, en relacin a las para conocer los sonidos prehispnicos.
otras objeciones que hago a este tema). Pero el Wilson (1898: 653) cita la hiptesis de que los
argumento clave es ergonomtrico: no cabe duda jarros emiten sonido cuando se vierte el lquido
de que en la mayora de los ejemplares estudiados desde su interior, la que he escuchado en nume-
y publicados, la tendencia es que estos agujeros rosas ocasiones.5 Tanto l como yo coincidimos
estn dispuestos en lugares y en ordenamientos en que esta armacin es falsa, ya que la accin
sumamente incmodos de taer, en muchos casos de verter el lquido provoca la entrada de aire por
imposibles de digitar por su ubicacin (g. 19) el aeroducto y no la salida de aire necesaria para
o por su nmero. Muchos ejemplares del MCHAP que suene el silbato.
tienen ms de 20 agujeros (g. 20). El ejemplar Vi- Respecto a las tcnicas que implican lquido, es
cs CP 202, tiene 31 agujeros. Si los comparamos posible suponer que distintos lquidos producirn
con aquellos de las ocarinas contemporneas con diversos efectos, dependiendo de su viscosidad
las botellas silbadoras (ver g. 3; Prez de Arce y densidad, pero carezco de antecedentes al
1982), hechos con el evidente propsito de pro- respecto. Para los efectos de mi anlisis utilic
ducir variedad de tonos, encontramos una enorme agua. Por motivos de conservacin, este tipo de
diferencia, tanto en su ergonometra como en su experimentacin, que realic entre 1981 y 1982,
funcionalidad sonora. Son muy cmodos de taer, no podr ser efectuada nuevamente.
adecundose a la posicin de las manos, al tiempo Describir, a continuacin, las diferentes tc-
que su digitacin responde de manera fcil y preci- nicas de taido. La primera consiste en soplar en
sa, con variaciones tonales claramente detectables la botella vaca. Todas las dems implican agua:
por cualquier odo no entrenado (jams con inter- soplando, moviendo el recipiente, llenndolo o
valos inaudibles como 1/10 de tono).4 Es decir, hirviendo el agua.
si nos atenemos a la tecnologa y conocimiento
propios de las culturas estudiadas, los agujeros de
las sordinas de las botellas silbadoras no presentan 1. Sonido obtenido soplando sin agua
ninguno de los rasgos caractersticos de aquellos
de las autas globulares. En cambio, s maniestan En esta tcnica, la dinmica sonora depende direc-
propiedades claramente relacionadas con la fun- tamente de la pericia del ejecutante en controlar
cin acstica de dejar salir el sonido y con la de el ujo de aire durante el ataque, mantenimiento
contribuir a los aspectos iconogrcos de la pieza y nal. En general los sonidos ms interesantes
(muchas veces se aprovechan agujeros de boca, se producen cuando el ujo de aire es muy suave
odos o nariz de las guras representadas). (poca intensidad y poco volumen de aire), lo que
Volviendo al tema de las tcnicas de taido, implica un control del soplo que no es fcil de lo-
todas las que he podido detectar a travs de la ex- grar. Cuando el silbato produce dos o ms sonidos,
perimentacin, y que han sido descritas por otros las posibilidades musicales aumentan.
Al soplar directamente se produce un sonido de agua al desplazarse al interior de un recipiente,

una intensidad que, por lo comn, es mayor que con pero ltrado a travs de una anacin y una
las otras tcnicas. Este dato es de importancia por los meloda determinada. La velocidad de la repeti-
posibles usos que veremos al nal. El mximo de cin, prolongada en el tiempo, se escucha como
intensidad sonora se logra con una presin de aire una respiracin, en que el ujo y reujo del
que vara de botella en botella, pero, en general, es lquido imita el canto humano con respiraciones
sucientemente baja como para permitir que una entremedio.
persona pueda sostener el sonido con comodidad du- En las botellas simples, como las asa-estribo
rante, aproximadamente, medio minuto. Esta tcnica y otras con reserva de aire pequea, el movi-
es posible en todos los ejemplares, con excepcin de miento de vaivn rpido del lquido produce una
algunos de procedencia Jama-Coaque, Chancay y de sucesin rtmica de sonidos cortos, como gorjeos
ciertas culturas mesoamericanas, donde la existencia entrecortados y rpidos (gs. 11b, 12, 16, 18, 20;
de vasos con boca muy ancha hace prcticamente MCHAP 0453, 0296, 0254, 0554). Existen ejemplares
imposible soplar. Se trata de ejemplares que slo de este tipo con dos silbatos (Zeller 1963-1964:
funcionan con lquido (MCHAP 0049, 0050). 98). En las botellas en que se produce una reserva
de aire de mayor tamao, es posible producir un
sonido ms prolongado, ya que el aire contenido
2. Sonido obtenido soplando con agua tarda un cierto tiempo en desalojar la cmara
(gs. 7, 13 y 21). En las botellas dobles, el ujo
Esta tcnica produce los mismos resultados so- de lquido a travs del conducto que comunica
noros de la anterior, pero se aaden los efectos ambas botellas es ms controlado y preciso, y
producidos al soplar a travs de agua. Estos por ende la entonacin y la dinmica del sonido
pueden ser desde un vibrato rpido (rrrrr) hasta son tambin ms controladas y precisas (gs.
un gorjeo lento (glo-glo-glo). Dependen de la 8 y 14). En la medida en que este conducto es
cantidad de lquido, la forma del vaso y su incli- ms largo y ms angosto, el lquido se demora
nacin (ver g. 5b). En el tipo botella simple sin en entrar al segundo vaso, con lo cual la pre-
reserva de aire, stos y el anterior (sonido soplado sin ejercida es menor y ms prolongada, como
sin agua) son los nicos taidos posibles (MCHAP tambin el regreso del lquido al primer vaso y
0091, 0230, 0300, 0310, 0381; CP AN 70, 71). la consiguiente reposicin de aire en la cmara
(gs. 9, 10 y 17). Aprovechando esta cualidad,
se logran sonidos prolongados y con presiones
3. Sonido obtenido de movimiento de de aire muy controladas que producen sonidos
vaivn con agua armnicos en melodas especcas y elaboradas
(MCHAP 0239, 0045, 0049, 0050).
En los ejemplares en que se forma una bolsa de Es posible variar el movimiento del recipiente
aire al introducirles lquido (ver g. 11), el sonido dentro de cierto margen, cambiando el resultado
puede resultar gracias a un movimiento de vai- sonoro.
vn dado al recipiente. El movimiento del lquido En los ejemplares de doble o triple recipiente
empuja el aire que queda encerrado en esta re- que poseen dos o ms silbatos, cada uno de stos
serva, el cual escapa por el aeroducto y pone en produce un canto independiente. La posibilidad
funcionamiento al silbato. Este sistema produce de tocarlos simultnea o alternadamente habra
un chorro de aire suave, que permite los sonidos que explorarla en una rplica, cosa que no se ha
ms interesantes. hecho hasta el momento, que yo sepa. El ejemplar
La dinmica sonora depende, por una par- MCHAP 024I (fig. 10) con dos silbatos, no est en
te, de la acstica y la hidrulica implcita en el condiciones de emitir sonidos.
recipiente y, por otra, del movimiento que se La tcnica de vaivn con agua produce un
le imprime. La cantidad de agua y su recorrido nivel de sonido ms suave que la de soplado
en el interior del recipiente, conguran sonidos directo. Basados en este resultado Statnekov
que varan desde un gorjeo (glo-glo-glo) hasta (1974) y Garrett & Statnekov (1977) suponen
un largo y preciso dibujo meldico. En general, que esta tcnica no fue utilizada, prerindose
se conserva la caracterstica acutica del sonido: la de soplo directo. Esta suposicin no se basa en
se reconoce el sonido que hace normalmente el los resultados sonoros. Creo, que una vez ms,
nos encontramos con una suposicin generada estn al servicio de una bsqueda permanente
dentro de un parmetro occidental (sonidos y cuidadosa, sumamente renada y para nada
fuertes, perceptibles para un auditorio lo ms casual. Esto nos plantea una mayor probabilidad
amplio posible) y no andina. Retomar este tema respecto a su modo de uso.
al tratar el uso y funcin de estos artefactos. En
muchos de los ejemplares estudiados, el resultado
sonoro utilizando esta tcnica es de una sutileza USO Y FUNCION
y suavidad que obliga a prestar la mxima aten-
cin, con hermosas combinaciones de cantos En su doble rol de recipiente para lquido y de
y respiraciones. instrumento sonoro, el uso que se pudo haber
dado en el pasado a las botellas silbadoras, cubre
una amplia gama de posibilidades. Ms an su
4. Hirviendo agua funcin, en trminos de signicado dentro de la
cultura.
Esta tcnica fue empleada, con xito, por la La versin ms antigua, que nos describe una
ceramista Marjorie Fras (comunicacin perso- funcin bastante pintoresca del instrumento, la
nal) en una rplica cocida a alta temperatura. da Wilson (1898: 654), citando al viajero S.S. Hill.
Poniendo un tapn en la boca del recipiente Hablando de las botellas silbadoras de los indios
para forzar la salida de aire hacia el silbato, de Chile6 que se conservaban en el Museo de
funciona en una forma similar a las teteras Santiago, cuenta Hill que, llenas de agua, stas
provistas de silbato, que operan segn el eran suspendidas de un rbol mediante una cuer-
mismo principio. Sin embargo, durante la da y, al moverlas, daban suaves sonidos que se
experimentacin, el vapor pronto obstruy la utilizaban para hacer dormir a los jefes borrachos
ventana del silbato, enmudecindolo. Esto es durante las horas calurosas del da. Como las bo-
hipotticamente posible en todos los tipos de tellas son porosas, a medida que se iban secando,
recipiente, pero ninguno de los objetos estu- el sonido iba muriendo gradualmente. Aparte de la
diados exhibe huellas de fuego que permitan fantasa de esta versin, Wilson repite, con xito,
deducir que la tcnica de hervido fue utilizada el experimento de llenar de agua y mover las bo-
en el pasado. El cocido a baja temperatura de tellas. La mayora de los autores posteriores parte
la cermica prehispnica, la hace ms delicada de la hiptesis de la tcnica de vaivn con agua
para este efecto que aquella utilizada por esta para proponer usos de este instrumento.
ceramista, y la obliga a un mayor cuidado. Crespo (1966) propone un uso derivado de
su evolucin, a partir de una botella de gollete
angosto frecuente en Machalilla (antecesora de
5. Vertiendo lquido al interior del Chorrera, 1500-1200 AC), provista de un aguje-
recipiente ro para permitir el ujo de lquido (que de otro
modo sale con dicultad, a borbotones). Al aadir
Obtener sonido de esta forma es posible slo un asa para transportarla, se producen pequeas
durante el lapso que dura el llenado de la bote- rfagas de aire que salen por el oricio mencio-
lla. Funciona mejor en las botellas asa-estribo y nado. Aprovechando esta cualidad, se le aade
es ms efectivo si se sumerge totalmente el vaso una auta apropiada y nace la botella silbado-
en agua, dejando fuera slo el sector del silbato ra. La hiptesis de origen de Crespo encaja bien
(Wilson 1898: 653). Aun as, la resultante sonora en el pueblo Chorrera, que haba alcanzado un
no presenta mayor inters que la del vaivn, ya gran desarrollo en la manufactura de cermicas
que produce un slo sonido. y que habitaba un mundo de sonidos de autas.
Recapitulando lo sealado acerca de las carac- Aadir una auta que conocan una simple es-
tersticas formales y tcnicas de taido, podemos fera de cermica provista de un mecanismo para
decir que la tcnica de vaivn es la que produce guiar el soplo a esa botella, parece ser un buen
los resultados ms sorprendentes desde el punto argumento acerca de su origen. Sin embargo, la
de vista sonoro, sobre todo si se practica en los evidencia conocida no muestra esta secuencia.
ejemplares de doble botella y conducto largo. La En Chorrera Temprano aparecen simultneamente
estabilidad de estos resultados nos indica que todos los tipos bsicos, desde la botella simple
con sonidos soplados, hasta la botella doble de que habra sido dejado de lado posteriormente.
sonidos prolongados con agua. Al mismo tiempo, De lo anterior se desprende que las botellas
aparecen ocarinas bastante toscas, lo que hace silbadoras, salvo las excepciones sealadas, fue-
postular a Zeller (1963-64: 9-11) que estas ltimas ron diseadas para ser taidas con la tcnica de
se desarrollaron a partir de las primeras. Pienso vaivn con agua. Dejo abierta la posibilidad de
que el enorme caudal de autas globulares y oca- que se utilizara tambin la tcnica de soplo, cues-
rinas que poblaron los Andes, permite postular tin que retomar al nal. Desde luego, cualquier
que existi previamente una variedad de autas hiptesis sobre usos o funciones debe tomar en
globulares elaboradas con materiales perecibles cuenta que pueden haber coincidido varios de
(principalmente semillas), que luego fueron co- ellos simultneamente en un mismo contexto cul-
piadas y sustituidas por otras confeccionadas en tural o que pueden haber cambiado a lo largo
cermica. La hiptesis de una genealoga que va del enorme espacio temporal y geogrco que
desde la auta globular, pasando por la ocarina, abarca nuestra muestra.
hasta llegar a la botella silbadora como un desa- En otra lnea argumental, varios autores (Cres-
rrollo particular, me parece ms coherente. po 1966: 75; Lumbreras: 1979, 1981, 1998; Bolaos
Salvo que exista una especie de eslabn 1981, 1997) coinciden en armar que la relacin
perdido, todo parece indicar que la destreza y entre sonido e iconografa es de carcter imitativo.
genialidad Chorrera, unida a su especializado uso Segn ellos, los jarros reproducen los sonidos de
de la cermica, fueron la causa del tremendo desa- los animales representados. Comparto con Mead
rrollo de este tipo organolgico en un relativamente (1924: 26) y Amaro (1994: 73-77) la conclusin de
breve lapso de tiempo, cerca del ao 1000 AC. que esto carece de fundamento en la gran mayora
Unir la funcin domstica de transportar agua de los casos, ya que hay botellas con diferente
con el vaivn que produce el caminar, para expli- iconografa que suenan igual, o bien botellas con
car la tcnica que hace sonar el instrumento, es una iconografa semejante que emiten sonidos dife-
hiptesis convincente. DHarcourt & DHarcourt rentes, incluso representaciones que difcilmente
(1925) y Daz Gainza (1977) adhieren a ella. De pueden relacionarse con el sonido emitido (g.
todas las tcnicas descritas, la de vaivn es la que 21). Sera necesario hacer un estudio de cantos
produce mayor variedad de sonidos y ms mu- de los pjaros representados, los que podran ser
sicales, ya que su enlazamiento temporal es ms los nicos candidatos a merecer este anlisis, de
controlado e interesante. En otras palabras, es la acuerdo a los antecedentes que poseo.7
tcnica que ms saca partido a las posibilidades El estudio de la iconografa asociada a las bo-
musicales del instrumento. Desgraciadamente, la tellas silbadoras, independientemente del sonido
falta de huellas de uso impide denir si sirvi como que producen, no ha dado resultados hasta ahora,
objeto utilitario en la forma descrita. a pesar de la cantidad y calidad de las representa-
La tcnica de vaivn con agua parece estar ciones involucradas. La nica excepcin a esto es
implcita en la estructura de todos los ejemplares la hiptesis de Amaro (1994: 72-76) quien cree que
estudiados, salvo los que carecen de reserva de este instrumento cumpla una importante funcin
aire. Esto se deduce del estudio de la relacin entre en el ritual funerario Vics. Este autor identica al-
el ujo de lquido, la reserva de aire y la posicin gunos elementos iconogrcos en relacin al tema
del silbato, conjuncin de elementos que permite de la muerte: preparacin (guras de hombres y
concluir que est diseada para lograr una mxima animales vivos exceptuando al pato, el felino, la
efectividad en la emisin de sonido con la tcnica iguana y los falos), muerte (mono cadavrico y
de vaivn con agua. Soluciones estructurales tan sus transformaciones, masturbacin, cpula, bulto
distintas como las botellas Moche simples y con funerario, tocado de cuernos de venado, pato, pri-
asa-estribo, las Vics dobles con conducto largo y sionero) transformacin (prisioneros felinizados,
muchas otras, tienen en comn la particularidad de tomorzados, ornitomorzados; felinos, iguanas
permitir una reserva de aire de tamao, posicin y sus transformaciones).
y relacin formal ptima para sonar con la tcnica No es de extraar la relacin entre botella
sealada. Esta norma se aplica casi al total de las silbadora y muerte, ya que todos los ejemplares
botellas silbadoras estudiadas, quedando fuera tres conocidos forman parte de ofrendas funerarias y
de un total de 60. Esas tres son Chorrera Temprano es justamente la falta de huellas de uso, la que
y pueden corresponder a un modelo germinal, el permite postular su utilizacin como objeto ex-
clusivo, hecho quiz slo para el ritual funerario, El efecto psicoacstico que produce este soni-
y no para necesidades domsticas o recurrentes. do es de gran intensidad. La experiencia de cada
Por otra parte, la relacin entre auta y muerte persona es diferente. Los ejemplos que dan los
no es ajena al espritu andino, donde encontramos autores Statnekov y Wright varan desde una gran
ejemplos de diferentes tipos de autas asociadas sensacin de paz y plenitud, a vivencias fuera del
con personajes cadavricos, especialmente en cuerpo, alucinaciones de paisajes o experiencias
la cultura Moche. Pero donde se da una mayor msticas, percepcin de voces humanas o anima-
coincidencia con las botellas silbadoras, es en la les, o en general, reeren a una sensacin de
sordina de cermica que ya mencion, que pro- acrecentamiento de la sensibilidad auditiva des-
vista de agua hasta cierto nivel, serva para tocar pus de las sesiones. Si bien estas vivencias son
la quena. Cuenta la leyenda que su origen estara muy personales y subjetivas (de hecho el origen
en un cura de Yanaquilla (Condesuyos, Arequipa), de ellas es una extraordinaria sensacin que tuvo
quien haba hecho una quena con la tibia de su Statnekov, detallada en su libro), los resultados son
bien amada difunta, y como los recuerdos de amor tan interesantes y potentes como para prestarles
lo frecuentaban muy violentamente, l exhalaba su atencin. Algunos argumentos avalan el considerar
pena tocando el puytu (Jimnez Borja 1951: 36). este efecto psicoacstico como una de las funcio-
El sonido de esta sordina lquida se transforma nes de las botellas silbato. En primer lugar, este es
en la voz misma de los sepulcros... (DHarcourt un efecto sonoro psicoacstico notable, inscrito
& DHarcourt 1925: 61). El yarav tocado en ese en una muestra amplsima, que difcilmente puede
instrumento, llamado manchaypuytu (inerno ate- ser atribuible al azar.
rrador), fue condenado por la Iglesia, as como la Pero ms importante an, es que, tanto el
sordina y la forma de tocar dentro de un cntaro sonido disonante y penetrante producido de
(Jimnez Borja 1951: 36). La relacin entre auta, este modo, como las experiencias psicoacsticas
sordina, agua y muerte, es elocuente. Se desco- que generan, son ampliamente conocidas en la
noce el pasado de este instrumento, ms all de msica andina prehispnica como parte integral
la leyenda que, segn de Jimnez Borja, parece de la relacin auta-hombre y mundo espiritual.8
bastante improbable. La arqueologa andina, por otra parte, presenta
He dejado para el final las descripciones innumerables casos de ocarinas dobles que pro-
de Garrett & Statnekov (1977) y Wright (1992), ducen sonidos vibrados y disonantes, a veces
quienes mencionan una cantidad de experien- de gran potencia y muy agudos, que provocan
cias psicoacsticas provocadas cuando se toca, una inquietante sensacin al tocarlos. Todos los
soplando sin agua, una o un grupo de botellas investigadores que nos hemos involucrado con
silbadoras simultneamente. Ellos descubren que el sonido de autas prehispnicas, no slo en
varios vasos correspondientes a una cultura comn los Andes sino tambin en Mesoamrica, hemos
estn anados alrededor de una misma frecuencia. conocido la intensa experiencia que resulta de esa
Cuando se tocan simultneamente, se producen proximidad (Prez de Arce 2000b).
efectos de interaccin en el espectro armnico de Statnekov (1974) comprob que los rangos de
los distintos silbatos, de por s agudos, genern- anacin de las botellas silbadoras en general,
dose sonidos compuestos muy complejos, sobre estn dentro de la mayor sensibilidad auditiva (1-4
todo en los agudos. Mientras ms cercanos son los khz), y alcanzan una mxima intensidad (85-105
sonidos, los espectros armnicos son ms inten- db) en la zona del odo de quien las toca, por su
sos, disonantes, con notas graves, uctuaciones y cercana. El fenmeno psicoacstico se produce
alteraciones de diversos tipos. porque el odo se encuentra sobresaturado por
Amaro (1994:72) menciona que en los con- un espectro armnico sumamente amplio pero no
textos funerarios Vics existen grupos de botellas homogneo, de modo que uno puede leer, dentro
silbadoras que presentan la misma anacin. Su de la innita masa armnica, cualquier combina-
uso simultneo producira un interesantsimo soni- cin sonora de las miles que estn ocurriendo.
do con las caractersticas sealadas, acrecentadas Melodas, armonas, disonancias y consonancias
y ms inestables, ya que la mnima variacin en la se superponen en el odo, siendo el mejor caldo
anacin hace aparecer efectos sonoros diferentes, de cultivo para provocar lo que llamamos una
cambiantes y muy potentes. Desgraciadamente, alucinacin o un trance exttico.
el autor nada dice al respecto. Las culturas que usaron botellas silbadoras
tambin utilizaron profusamente la relacin entre direcciones opuestas. Tal vez se utilizaron ambas
los sonidos de autas y las tcnicas chamnicas tcnicas, o bien el efecto psicoacstico, tan nota-
del xtasis, frecuentemente con el consumo de ble para nosotros, no es sino el resultado de un
plantas psicoactivas. Cummins (2003: 453) cree tipo de autas que estaba regido por un patrn
ver representaciones de ayahuasca en algunos de construccin comn a todos los Andes prehis-
ejemplares Jama-Coaque, suposicin muy cohe- pnicos y donde ese efecto era utilizado slo en
rente con lo que conocemos de otras iconografas cierto tipo de ejemplares, no obstante que fuera
prehispnicas. La preparacin de estas plantas se posible en todos ellos, como lo conrma la ex-
puede hacer en forma de bebida, como ocurre perimentacin continua que va aorando en ese
normalmente con la ayahuasca, o con la chicha campo de investigacin. En verdad, al no haber
mezclada con vilca. En este caso, la utilizacin un modelo etnogrco, es intil tratar de avanzar
de un recipiente cobra un nuevo sentido. Hoy ms en este sentido.
en da, despus de varios siglos de represin, el Para resumir lo que sabemos, tenemos que
chamanismo americano, por lo general, ya no usa la botella silbadora representa un caso especial
autas. Sin embargo, hasta hoy el silbido cumple de instrumento, que puede ser taido utilizando
un importante rol en las sesiones de ayahuasca agua o sin ella. Cuando es accionado con agua,
del chamanismo amaznico (Katz & Dobkins de imprimindole un movimiento de vaivn, respon-
Ros 1971: 323, 325), al hacer el llamado a los de de un modo caracterstico y nico, dando los
espritus, as como en otras tradiciones de origen resultados sonoros ms complejos desde el punto
prehispnico. Recordemos que todos los autores de vista esttico. El sonido resultante viene a ser
coinciden en denominar silbido al sonido que como el sonido natural del agua, ltrado, am-
emiten estas botellas. Todos estos argumentos alu- plicado y modulado segn un patrn acstico
den a una direccin comn, en la que el sonido denido por el artesano. Los sonidos ms intere-
que resulta al soplar las botellas silbadoras est santes se producen al imprimrsele un movimiento
al servicio de un cierto tipo de trance o situacin de vaivn continuo, como el que se produce al
psicolgica especial, que se inscribe dentro del caminar, de lo cual podemos suponer que la bote-
universo asociado al chamanismo. lla silbadora puede haber sido un objeto utilitario,
Hasta aqu puedo avanzar en lo relativo a esta ocupado para acarrear agua u otro lquido. Pero
hiptesis. Quedan, por supuesto, cabos sueltos. la falta de huellas de uso, la fragilidad de muchos
Todos los experimentos de Statnekov y Wright, ejemplares y su contexto, hacen suponer tambin
se basan en sonidos obtenidos soplando sin agua que pueden haber sido un objeto exclusivamente
y hemos visto que las botellas silbadoras fueron funerario y no de utilizacin corriente. Los rituales
expresamente diseadas para ser usadas sonora- funerarios parecen ser el escenario ms probable
mente con agua. El efecto psicoacstico producido de su uso y funcin, al menos en el caso de los
por las tcnicas con agua, especialmente la de ejemplares Vics, que quizs es extensible al resto
vaivn, que he descrito como la ms probable, de la muestra.
es mucho menos espectacular en trminos de la Por otra parte, sabemos que el resultado del
transformacin de la percepcin. El resultado de uso mediante el taido de soplo directo provoca
usar simultneamente varias botellas silbadoras fuertes reacciones psicoacsticas, que podemos
con esta tcnica, no es la gran masa sonora llena claramente identicar dentro del complejo cha-
de posibles lecturas simultneas que lleva al tran- mnico panandino prehispnico. Si esta tcnica
ce exttico, sino un cambiante bosque de cantos se utiliza en un contexto ritual chamnico de este
de agua, como pjaros mezclados en una trama tipo, vinculado a la ingesta de plantas psicoactivas,
continuamente variable. el resultado potencia y expande los fenmenos
Las diferencias sonoras entre las tcnicas de psicoacsticos descritos a niveles que no conoce-
soplar directo y la de vaivn con agua, son varias y mos. Si a esto sumamos el universo semntico del
muy interesantes. La primera da sonidos intensos, silbido chamnico, ligado a la llamada y posterior
fuertes, de gran penetracin, audibles a gran dis- llegada de determinados espritus, se nos congura
tancia, con efectos psicoacsticos pronunciados. un cuadro de gran coherencia cultural y de un
La segunda, da sonidos suaves, ms ntimos, de tremendo poder expresivo y catalizador frente al
gran riqueza expresiva, sutil y variada, musical- factor social ms traumtico, cual es la muerte.
mente hablando. Varios de estos rasgos apuntan a
NOTAS REFERENCIAS
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2
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3
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4
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estudio de los instrumentos sonoros prehispnicos. Cada Smithsonian Institute / Bureau of American Ethnology.
vez que nos encontramos con objetos construidos con ese B OLAOS , C.,1981. Msica y danza en el antiguo Per
propsito resulta fcil saber cmo se tocan, con qu digi- (Catlogo de exposicin). Lima: PNUD / UNESCO.
tacin, a la vez que suponen una articulacin de dedaje ---- 1988. Las antaras Nazca. Lima: INDEA / CONCYTEC.
muy fcil y natural. Es tanta la relacin entre el buen diseo ---- 1997 Ms. Las antaras y las botellas silbadoras arqueolgicas
ergonomtrico y el buen diseo sonoro, que este criterio norandinas: Una incgnita a dilucidar.
resulta muy til para denir si los objetos son o no sonoros. BROAD, W. J., 1988. Complex whistles found to play key roles
No slo en el caso de las botellas silbadoras, sino en general in Inca and Maya life. Artculo publicado en The New York
en el instrumental de todas las culturas prehispnicas. Times, Science Times Section, March 29, page C-1.
5
Esta suposicin la menciona tambin Broad (1988). CASTELLANOS, P., 1970. Horizontes de la msica precortesiana.
6
Se trata de un evidente error, ya que en Chile no Mxico, D.F.: Fondo de Cultura Econmica.
existi este tipo de objetos. Probablemente l observ CRESPO, H., 1966. Nacimiento y evolucin de la botella silbato.
la coleccin de jarros peruanos del Museo Nacional de Humanitas VI (1): 66-87. Quito: Editorial Universitaria.
Historia Natural. CRUZ, P. & C. MARTNEZ, 1988. Msica y arqueologa en
7
Hace algunos aos, un visitante del Museo Chileno Amrica precolombina: Estudio de una coleccin de
de Arte Precolombino hizo una observacin respecto a instrumentos y escenas musicales. BAR International
una botella silbadora Chorrera, compuesta por dos cuerpos Series, Vol. 450, Oxford.
globulares, sobre uno de los cuales se halla una casa y so- C UMMINS , T., 2003. Nature as cultures representation:
bre su techo un pjaro, en cuyo interior est el silbato. Al A change of focus in Late Formative iconography.
escuchar el canto producido por vaivn con agua y debido h t t p : / / w w w . d o a k s . o rg / E c u a d o r / E c u a d o r 1 0 . p d f
a sus conocimientos de medicina, me dijo que el sonido (Extracto de Archaeology of Formative Ecuador: A
representaba el que produce un corazn con soplo, un Symposium at Dumbarton Oaks, 7-8 october 1995.
particular silbido apenas audible. Lo traigo a colacin sola- Washington, D.C.: Dumbarton Oaks Research Library
mente como un ejemplo de la innidad de interpretaciones and Collection).
que caben frente a este tipo de sonidos, dependiendo de D HARCOURT, R. & M. D HARCOURT, 1925. La Musique des
la perspectiva de quien escucha. Incas et ses survivances. Paris : Librairie Orientaliste Paul
8
En la msica ritual de los bailes chinos de Chile Central Geuthner.
ocurre un fenmeno parecido que ha sido bien estudiado por DAHER, J. 1972. Pre-columbian Instruments of Mexico. Notes
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