La Bailarina Del Astoria

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 2

La bailarina del Astoria

El hombre dio un sorbo a su caf y le dijo con un suspiro:

-Ella se llamaba Asuncin Velarde y era una bailarina muy


bonita. Ms de uno hubiera dado la mitad de su vida y su
Arcelia se diriga a su cubculo, en un edificio de la calle fortuna entera para recibir una migaja de sus encantos.
Nuevo Len, en la colonia Roma Sur. Era tarde, estaba
cansada y el trabajo an no sala. Ansiaba descansar, quera Arcelia lo mir asombrada, al ver los ojos melanclicos del
tomar una taza de caf en su casa y olvidarse de la oficina, de velador.
los problemas y de todo.
-Usted la conoci?
Al llegar al pasillo donde estaba su lugar, vio salir a una mujer
bellamente ataviada con un vestido de noche peinado de -S, era una mujer bellsima, como pocas; que digo pocas,
saln y zapatos de fino tacn, como para baile. La vio entrar como ninguna que yo haya visto. Tena un cuerpo de diosa:
exactamente a su cubculo. Arcelia la sigui, intrigada. Qu firme, sensual y su piel pareca como un durazno maduro,
haca esa mujer all, a esas horas y vestida de esa manera? jugoso, en su punto, y su sonrisa hubiera cautivado al mismo
Entr en la oficina y se dio cuenta de que estaba diablo. Si ella era una tentacin, benditos los que camos en
completamente sola. La mujer no pudo desaparecer. A media sus garras!
escalera se top con don Goyo, el velador, quien suba Don Goyo le mostr una sonrisa a la asustada Arcelia, quien
despacio, haciendo su primera ronda de la noche. no entenda nada.
-Qu le pasa, seorita? Acaso vio a un aparecido? Est muy -Le voy a explicar para que no crea que desvaro. Hace
asustada. Respire hondo para que se calme. muchos aos, cuando usted ni siquiera haba nacido, aqu
En la planta baja del edificio, Arcelia poco a poco se mismo haba un centro nocturno que se llamaba Astoria, era
tranquiliz y le cont lo que haba visto, mientras el hombre le famoso en esa poca y mucha gente de otras partes del pas
preparaba una taza de caf. vena a visitarlo. Yo era un chamaco imberbe, el mozo que
limpiaba los camerinos y les haca los mandados a las
-Y por eso se asust? Yo hasta la saludo, aunque claro, ella bailarinas. Pero en cuanto lleg Asuncin, desplazo a todas
nunca me contesta. las dems; ella tena el nmero principal, bailaba con una
sensualidad que dejaba absortos a todos los hombres. Yo no
-Pero, cmo es posible, don Goyo? De dnde saca la perda la oportunidad de verla y a veces se me figuraba que
sangre fra para hablarle? bailaba slo para m.
Obviamente, una mujer tan bonita y atractiva no poda estar acuchill varias veces y Asuncin cay al suelo sin que yo
sola; muchos hombres la perseguan, pero ella se haba pudiera evitarlo.
entregado a uno: Ernesto Bustamante de la Sierna. Era un
hombre maduro, guapo con mucho dinero, capaz de cumplirle Desesperado, le grit al viejo que se detuviera y en ese
cualquier capricho. Sin embargo, tena un defecto: era momento reaccion. Tir el cuchillo y se llev las manos a la
inmensamente celoso. Yo todava no me explico cmo siendo cabeza, como si hubiera recuperado la conciencia. Cuando la
as se fue a enamorar de ella, que aventaba besos y risas a vio con tanta sangre, tuvo que detenerse de la pared, estaba
todos los que la vean. En lo personal, yo tuve muchos y an como borracho. Mi pobre Asuncin! Siempre quise tenerla
los conservo en mi casa y los llevo en mi corazn. entre mis brazos pero viva, no as.

Pues bien, muchas veces escuch que en el camerino Don Goyo cort su relato para limpiar las lgrimas que fluan
Asuncin y don Ernesto discutan, pero es vez fue diferente, despacio de sus ojos, mientras Arcelia guardaba un
con nada lograba ella bajarle el coraje y los gritos. Tuve la respetuoso silencio.
intencin de entrar a defenderla, pero me contuve. Quin era -Ella amaba este sitio, deca que se senta como en su casa,
yo para semejante atrevimiento? No obstante, me qued ah, por eso sigue aqu. Exactamente la noche del 21 de cada mes,
por si me necesitaba. Al rato, sali don Ernesto dando un que fue el da de su muerte, ella recorre el lugar donde estaba
portazo que por poco tira el lugar. Casi detrasito de l sali el escenario, los pasillos y su camerino, que es donde est
Asuncin, con los ojos como jitomates de tanto llorar. Pero al ahora la oficina de usted. Hoy es da 21, por eso la vio, pero
da siguiente, los vi bien contentos, como si nada hubiera no le tenga miedo, ella es simplemente un pobre espritu que
pasado. desea encontrar la paz y la tranquilidad recorriendo el lugar
As eran ellos, se enojaban y despus se contentaban. A donde fue feliz.
DIBUJA A ASUNCIN CANTANDO Y BAILANDO EN EL ASTORIA
pesar de esto, yo not que don Ernesto la celaba ms, estaba
ms cerca de ella, por eso le toc recibir un enorme ramo de
rosas rojas que le envi un admirador una noche y eso fue
suficiente para que una noche, luego del nmero de Asuncin,
le gritara y la golpeara. Esa vez s me anim a entrar y vi
cuando l sac un cuchillo que traa quin sabe dnde y se lo
encaj en el vientre le juro que corr lo ms rpido que pude,
pero fue intil. Don Ernesto estaba tan enojado que la

También podría gustarte