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Enrique Cortés
Navarrete
1. Introducción.
En el último artículo que escribí para Apuntes, sobre la evolución del transporte en
Lima, mencioné al final del mismo, la posibilidad de una continuación, referente a dar
soluciones puntales a la problemática actual del transporte en la ciudad. Así, esta
publicación lo dedico justo al tema prometido, iniciando el mismo con una explicación
metafórica de la visión que tengo sobre la ciudad y su funcionamiento, para luego hacer
una breve reseña de la problemática actual, y finalmente, explicar los lineamientos para
una propuesta integral y jerarquizada de la movilidad urbana e interurbana en Lima.
Siempre he comparado una ciudad, con el cuerpo humano, este nace, crece, se
desarrolla y muere, tiene un espíritu, un alma y una personalidad. Al igual que esta, el
cuerpo humano cuenta con una red de “vías” y “calles”, que vendrían a ser las arterias y
venas, los vasos sanguíneos, los nervios, los diferentes conductos que comunican los
principales órganos como el esófago, los intestinos, etc.., que sirven para la digestión, la
respiración y otras funciones. Si por el exceso de grasa y colesterol malo, las arterias y
venas se saturan, se obstruye la circulación de la sangre, produciendo en la persona un
infarto o un derrame cerebral; una excesiva alimentación puede generar sobre peso y
congestiones estomacales que traería grandes complicaciones para la salud.
Otro caso es el de las personas que fuman mucho, estas terminan con el colapso y
envenenamiento de las vías respiratorias y un posible cáncer a los pulmones. En cambio
si una persona se cuida y lleva una vida sana con una buena alimentación y haciendo
deporte, es poco probable que tenga problemas y viva mucho mas.
Lo mismo sucede con las ciudades, una urbe con grandes congestiones vehiculares,
atascos en las horas punta, problemas de contaminación atmosférica, ruido y perdidas de
hora hombre, es una ciudad enferma. La generación de esta problemática va a depender
mucho de la forma como se ha desarrollado la ciudad y las costumbres urbanas de la
sociedad que la habita. Al igual que una persona obesa, si una ciudad crece de manera
expansiva, con zonas de baja densidad, en donde los usos de suelo están separados unos
de otros, produciéndose grandes distancias en los desplazamientos de la casa al trabajo,
y en donde no existe un sistema de transporte masivo eficiente, se va a terminar por
depender del auto privado, y por ende se generarían grandes procesos de motorización
que terminarían en primer lugar por aumentar el tráfico, y por otro lado, obligaría a los
gobiernos locales a construir costosísimas autopistas y viaductos, que no solucionarían
en nada el problema. En una metrópoli de esas características, es muy probable que sus
habitantes sufran paralelamente muchos problemas de salud, como estrés, irritación,
ansiedad, depresiones y enfermedades respiratorias.
La aplicación de sistemas de movilidad y trasporte de manera masiva, integral y que
sea sostenible en el tiempo, podría ser de alguna forma la solución que necesita la
ciudad enferma, obviamente el tipo de propuesta dependerá de la realidad y las
características sociales, económicas y morfológicas de la misma.
Esta relación metafórica entre ciudad y cuerpo humano es sumamente importante, ya
que esto nos puede dar una idea clara del estado en que se encuentran muchas urbes, no
solo en la parte del trasporte y la movilidad, sino también en el aspecto social y
urbanístico.
Considero el desarrollo de una movilidad y trasporte que respete el medio ambiente
en las ciudades, como una forma saludable de vida urbana, que mejora la calidad y el
nivel de sus habitantes, a la vez que propicia y crea una cultura del respeto, el orden y la
ética.
2. Problemática.
Falta de una única autoridad, como un consorcio, que regule y gestione el transporte en
la ciudad. Así, actualmente, existen una serie de direcciones y entidades que se encargan
de un mismo problema, como el Ministerio de Transporte y Comunicaciones, La
Municipalidad de Lima y sus entes pertinentes (Gerencia de Transporte Urbano y
Protransporte), La Municipalidad del Callao y finalmente, la Región Callao, de tal
forma que cada uno tiene una
visión distinta de la ciudad, desarrollando independientemente sus planes, generando
muchas veces conflictos entre los sistemas propuestos (Metropolitano y Tren Eléctrico),
sin tener una organización integral del sistema.
Gran cantidad de rutas de transporte urbano, que actualmente cuentan con 487 líneas
(1), solo en la Provincia de Lima, además de las 177 rutas que tiene el Callao (2),
muchas de ellas con recorridos de gran longitud, atravesando la ciudad de extremo a
extremo (casi 50 km)(3), en unidades de trasporte pequeños y de mediano tamaño,
inadecuados para desplazarse diariamente en esos recorridos, generando agotamiento y
malestar tanto entre los chóferes como en los pasajeros.
Excesivo numero de unidades de transporte, con 25,874 vehículos en total (4), de las
cuales el 43.60 % son combis (5) que compiten de manera informal por obtener
pasajeros (la guerra del centavo), produciéndose por un lado una sobreoferta y
ocupación del espacio de circulación, lo que ocasiona gran parte del tráfico (para tener
una idea, los pasajeros de 8 combis caben en un bus del metropolitano y 80 combis
caben en uno de los trenes del metro de Lima), y por el otro un aumento del numero de
accidentes en las pistas.
Sobre oferta de taxis (250,000 unidades, cuando debería haber la mitad y 7,000 taxis
colectivos), con el mismo problema de los vehículos de transporte publico.
Falta de un diseño integral y jerarquizado de las redes de transporte masivo por parte de
las autoridades, de tal forma que muchos de los proyectos realizados actualmente, han
sido hechos sin un estudio integral de la ciudad, solo con fines políticos y demagógicos.
Falta de un fomento por parte de los gobiernos locales, del desarrollo de sistemas de
movilidad alternativa de menor escala, como la bicicleta y el transporte a pie.
Crecimiento urbano desordenado de manera expansiva y con muy baja densidad, lo que
ocasiona un gasto enorme en el desarrollo de infraestructuras de transporte y que
además, se de una dependencia en el uso del automóvil como único medio de transporte
(800,000 unidades) (6).
Es alarmante ver por ejemplo, el aumento en los últimos 6 años del uso de camionetas
4x4 entre muchos habitantes de sectores medios y altos, que a veces por necesidad o por
status, usan constantemente esta forma de movilidad contaminante y que fomenta mas
el tráfico en la ciudad.
En este momento, Lima cuenta ya con dos sistemas de transporte que están aliviado
en parte el problema de la movilidad en la ciudad, El Metro, conocido en nuestro medio
como “Tren Eléctrico”, y el Metropolitano, ambos funcionan en paralelo y en sentido
Norte – Sur. Por otro lado, la Municipalidad de Lima implementará el llamado Bus
Patrón, sistema muy parecido al Metropolitano pero mucho mas sencillo y rápido de
construirlo, este consiste en la construcción de una red de corredores para buses con el
modelo Euro 4, con muy baja contaminación ambiental y acústica, en la que
participarían las empresas de transporte que sean legalmente constituidas y formalizas.
Existen propuestas de ampliación de ambas redes, produciéndose una serie conflictos
como ya mencione antes, por la superposición de rutas, como los proyectos de las líneas
2 del Metropolitano y el Tren Eléctrico, que tienen el mismo recorrido, lo que
ocasionaría un problema de competencia y sobre oferta, consecuencia de una
planificación fragmentada y desarticulada.
Para la definición de una propuesta integral, se empieza primero por hacer un estudio
de la estructura urbana, como podemos ver en el grafico de arriba, Lima tiene una
configuración poli nuclear de varios centros comerciales y financieros, que van de norte
a sur a lo largo de grandes ejes como la Panamericana Norte y la Vía Expresa (Los
Olivos, Centro de Lima, San Isidro, Miraflores y Barranco) zonas que son consideradas
de gran demanda comercial, en menor grado están los sectores de la Avenida la Marina,
la Avenida Primavera y Javier Prado, donde se desarrollan núcleos importantes de
comercio. En cuanto a las áreas industriales, estas se dan a lo largo de los ejes de la
Avenida Argentina y la Carretera Central, con algunos núcleos en Lima Norte.
Finalmente, los sectores residenciales, se desarrollan con bajas densidades
poblacionales hacia las periferias y con mayores densificaciones en altura y población
hacia los centros y subcentros mencionados.
Otro punto importante a considerar es el estudio de los flujos de transporte dentro de
la estructura urbana, al ser Lima una ciudad poli céntrica, con una organización
compleja y de gran extensión territorial en toda la provincia, se manejan diferentes
demandas en distintas zonas, por lo que generalmente se definen para el estudio de las
llamadas cuencas de de demanda, estas áreas se organizan en función a criterios
geográficos y estructurales de la ciudad, como zonas consolidadas por su uso de suelo y
densidad.
En los estudios que hicieron Protransporte junto con la consultora ALG – INOCSA,
para el proyecto del Metropolitano en 2006, se definieron las cuencas mencionadas y se
vio que la mayor demanda de transporte se da en las zonas norte y centro, sobre todo en
el eje Norte – Sur (Comas – Centro de Lima – Barranco), las áreas del sur y sur oeste
tienen una demanda menor.
Para efectos de una propuesta mucho mas clara y precisa, basándome en los estudios
anteriores y considerando el tamaño que tiene la provincia de Lima, decidí delimitar las
cuencas de manera diferente a las propuestas de ALG – INOCSA, definiendo dos
grandes zonas:
La zona Urbana, correspondiente a los distritos que forman parte de la cuenca del valle
del Rimac, con un diámetro de extremo a extremo de 30 km aproximadamente, teniendo
como limites norte el río Chillon, por el sur, el limite entre Villa el Salvador y
Pachacamac, y por el Oeste hasta Huaycán. Esta área estaría divida en 8 cuencas de
demanda nombradas con letras.
La zona Sub Urbana, correspondiente a los distritos que están fuera del radio
de 30 km, ubicados en los valles de Lurin y Chillon, los balnearios del sur y los distritos
de Chaclacayo y Chosica. Estos serán divididos en 5 cuencas de demanda nombrados
por números.
Así, esta organización definirá las diferentes escalas de transporte que se deben
desarrollar en la ciudad de manera integrada, estos serian:
Todas estas redes, ordenadas desde la de mayor jerarquía, estarían integradas entre si
en un sistema de estaciones intermodales, las cuales, de acuerdo a la conexión, tendría
varios niveles de embarque, para las distintas tipologías de transporte, así, en algunas
estaciones puede haber paradas para el metro, BRT y bicicleta por ejemplo, la propia
estación central del metropolitano podría formar a la larga parte de este sistema
intermodal. Ahora vamos a analizar cada uno de estos y su aplicación a la realidad de
Lima.
El sistema sub Urbano es tanto una red de trenes de gran capacidad como de buses,
que conectan una ciudad importante con los pueblos y villas de su área metropolitana,
estas recorren distancias de entre 15 y 70km (7), con tiempos de viaje de entre 30 y 60
minutos, generalmente a zonas de baja densidad y suburbanas. Para el caso de los
trenes, estos tienen una velocidad de 50 a 200 km por hora, son de mas capacidad que
los trenes urbanos y sus estaciones tienen una distancia entre si de 2000 mts.
Existió desde hace mucho tiempo la propuesta de usar parte del ferrocarril central
para la construcción de una línea de metro, desde Chosica hasta el Callao, tanto así que
hasta hace unos años, de acuerdo al Plan JICA, se proponía que la línea 2 del metro
pasase por el ferrocarril central, sin embargo esta propuesta fe desechada hace mas de
un año, para desarrollarla mas al sur, entre Ate y el Callao, por la carretera central,
Avenida 28 de Julio, y la Avenida Venezuela, que es la que esta vigente hasta ahora.
La ruta del ferrocarril central se podría aprovechar para la construcción de un sistema
suburbano, debido a la distancia que hay entre estas dos zonas de la ciudad (50 km
respectivamente), además, es bastante conocido el aprovechamiento de las redes férreas
de muchas ciudades para el desarrollo estos proyectos, como los casos de Madrid,
Buenos Aires o Santiago.
Esta propuesta podría organizarse en tres rutas o recorridos diferenciados por colores:
Línea Roja. – Conecta la estación de Chosica con la estación Martinete de la Línea 1
del Metro de Lima, convirtiendo a esta última en terminal intermodal, de tal forma que
las personas que vengan del este se puedan conectar rápidamente mediante el Tren
Eléctrico con otras zonas de la ciudad. Esta ruta se podría construir en dos etapas, una
desde Santa Clara hasta Martinete, y otra desde Chosica hasta Santa Clara, con
estaciones en Chaclacayo, ñaña y Huaycán.
Línea Amarilla.- Esta conecta la estación Martinete con Ancon, haciendo el mismo
recorriendo que la línea Azul hasta la Autopista Néstor Gambetta, allí se iniciaría el
Ramal propuesto por la empresa ferrocarril Central Andino que vaya por la futura
autopista, hacia Ventanilla y de allí hacia Ancon, con una conexión que podría darse
con el aeropuerto, así el este y el norte de la ciudad estarían unidos.
Las otras zonas suburbanas donde no hay tren, como el sur, el sur oeste y el nor oeste
(debido a lo costoso de construir uno), se podría aprovechar para desarrollar un sistema
de buses de mediana capacidad (de 80 a 120 pasajeros) como los que van en los
alimentadores del metropolitano y que pueden usar un carril segregado en la berma de
las autopistas de la Panamericana Sur y Norte, a fin de evitar el trafico de accesos a la
ciudad. Este modelo es usado en Madrid, para el ingreso de los buses interurbanos por
las diferentes autopistas de acceso (8), aquellos recorridos que sean solo carreteras
interurbanas, no necesitaran de un corredor segregado, como el caso del acceso a
Cieneguilla.
Las rutas del tren suburbano por colores, está definido aproximadamente según los
viajes origen destino de las diferentes cuencas suburbanas y urbanas (Ancon, Callao y
Chosica con el Centro de Lima), es muy probable que se manejen diferentes demandas
para cada ruta, por el cual el operador del sistema (uno solo) manejara una cantidad de
trenes adecuados con horarios definidos, para cada una de las líneas, así no utilizaría
trenes en recorridos demasiado largos con diferentes demandas, lo que ocasionaría
grandes pérdidas.
El Metro de Lima, consiste en una red de líneas cuyo diseño ha sido modificada en
varias ocasiones. Las dos ultimas versiones, el Plan JICA del 2005 y la de la empresa
CESEL, aprobada por decreto supremo 059 – 2010 – MTC, y que es el proyecto
actualmente en vigencia, tienen una serie de coincidencias como la conservación de las
principales vías de la ciudad (ejes Javier Prado – La Marina, Avenida Arequipa – Tacna
– Tupac Amaru, Carretera Central – Avenida Venezuela), sin embargo las grandes
diferencias se dan en la ordenación numérica de las líneas, como el cambio de la ruta de
la línea 2, que en el plan JICA ocupaba el Ferrocarril Central (ya mencionada
anteriormente) , la llegada de la línea 4 hasta el Aeropuerto (en el plan JICA, a esta se le
denomina línea 3 y llega hasta la plaza Garibaldi, en el terminal marítimo del Callao),
así como la anulación de la línea 4 (Faucett, Tomas Valle y Universitaria) y la línea 6
(Panamericana sur, Vía de Evitamiento y Panamericana Norte) del Plan JICA.
Línea 5.- Esta iría por toda la Avenida Universitaria, desde la Avenida La Marina
(Línea 3) hasta Carabayllo en el Norte, cruzándose en su recorrido con el Metropolitano
2, el tren suburbano y la línea 6, la idea es conectar el Cono Norte con la zona comercial
e industrial del Callao, el Aeropuerto y la Avenida La Marina. Esta ruta es muy
interesante, debido a la pujanza que tiene Los Olivos como distrito emergente, es muy
probable que en los próximos años, estas zonas sufran un proceso de densificación
urbana bastante grande, por lo que se justificaría la construcción de una línea
subterránea que tendría una longitud de 20 km aproximadamente.
Línea 6.- se tomaría la propuesta del JICA pero con algunas modificaciones, esta
empezaría en el cruce de Faucett con Javier Prado (Línea 2) hasta el Aeropuerto (se
tendría que ver si se da una conexión directa con el actual terminal o con el que
construirán en algunos años como parte del proyecto de ampliación del Jorge Chávez),
luego seguiría directo por Tomas Valle hasta la estación del mismo nombre (línea 3) y
su conexión con el Metropolitano y el Terrapuerto de Lima Norte, en su trayecto tendría
conexiones con el ferrocarril sub urbano y el Metropolitano 2 a la altura de la Avenida
Venezuela. Esta línea tendría una longitud de 12 km aproximadamente.
La gestión de la red tendría que ser operado por una sola empresa, que vele por el
mantenimiento y la buena funcionalidad del sistema.
Tomando como modelo el Transmilenio de Bogota, lo ideal hubiera sido que cada
troncal hubiera tenido un operador, estos definen el numero de buses adecuado a la
demanda de cada troncal y los gastos y ganancias de los mismos, esto sumado a la
eliminación de las rutas del transporte convencional que pasan muy cerca del corredor,
evitaría las perdidas que están teniendo actualmente los operadores a lo largo del
sistema y la reñida competencia con los buses antiguos que cobran menos.
Siguiendo este modelo, El corredor Norte – Sur, se puede dividir hasta en 4
Troncales, administrados cada uno por los 4 operadores actuales, nombrados por letras,
se pueden definir de la siguiente manera:
Para esto se tiene primero que desarrollar un proceso de racionalización de las líneas,
de manera gradual, formalizando a las empresas que cuenten con todas las condiciones
para su legalización (chóferes con planilla y sueldo fijo, seguros, buses de 80 a 120
pasajeros nuevos), y eliminando las empresas que no tengan estas condiciones o que
usen buses como cousters o combis, de tal forma que el numero de estas disminuya sin
que afecte a la demanda de pasajeros.
Por otro lado, se implementará los bonos de chatarreo ya conocidos a las unidades de
transporte mas antiguas para que salgan de circulación. Para la racionalización de las
líneas se consideraría la cuencas de demanda ya explicadas anteriormente para la zona
urbana, de tal forma que cada cuenca maneje un numero de rutas determinadas de
acuerdo a la demanda por colores y letras, eliminando las líneas longitudinalmente
excesivas y permitiendo ser una red alimentadora al Tren Eléctrico y el Metropolitano, o
como un sistema de extensión a los sitios donde no tiene que llegar estos (por un tema
de costo), como el caso del Callao, donde se pueden desarrollar rutas alimentadoras que
unan la Punta y el Puerto con los terminales de ambos sistemas.
Para que esto se aplique, se tendrán que hacer licitaciones en cada cuenca para que uno
o dos empresas de transporte puedan explotar sus rutas. Algunas que pertenezcan a una
determinada cuenca, podrán salir de esta y alimentar otra. Aquellas avenidas en la que
coincidan las alimentadoras con la red del Tren Eléctrico, podrían tener 2 o 3 paraderos
del bus entre dos estaciones del Tren, así, este abastece lo que no puede abastecer el
Metro, o de alguna manera lo descongestiona, ya que este último puede servir para
distancias largas, y el alimentador para distancias intermedias.
La implementación de los sistemas alimentadores debe ser hecha con sumo cuidado,
de tal manera que al momento de reducir algunas rutas antiguas, sobre todo en sitios
periféricos, sea remplazado por un alimentador, de tal forma que los usuarios no sean
perjudicados.
La administración del sistema podrá estar a cargo de la Municipalidad de Lima como
parte del Metropolitano, de tal manera que toda la red de buses de la ciudad funcione de
manera integrada.
Otro modelo que no he mencionado pero que es muy importante incluirlo es el del
mototaxi. Este vehiculo, es usado por transportistas informales en las zonas periféricas
de la ciudad, sobre todo en los asentamientos humanos del sur y del este. Estos, de
alguna manera, sirven actualmente de “sistemas alimentadores” de los buses y combis
en sus rutas habituales, debido a lo inaccesible de llegar a sus hogares desde las
avenidas principales, ya sea por lo empinado de las vías (muchos de estos barrios se
asientan sobre cerros) o por el estado de los caminos, que no permite un acceso a pie
cómodo. Lamentablemente, la mototaxi ha sido siempre rechazada por muchos
pasajeros por ser vehículos inseguros y antiguos, altamente contaminantes en el uso de
combustible, incómodos, donde se han perpetuados asaltos y robos, sobre todo en horas
de la noche.
Una solución al tema de las mototaxi es la racionalización del sistema,
empadronando a las empresas formales y dándoles bonos para el mejoramiento de sus
unidades. Podrían desarrollarse en sitios periféricos donde no lleguen los alimentadores.
La Universidad Nacional de Ingeniería, tiene un proyecto piloto para el diseño de
unidades mototaxi con paneles solares, de tal manera que sean vehículos menos
contaminantes. Estas empresas podrían estar ubicadas en algunos estaciones del Tren
Eléctrico o el Metropolitano con rutas y paraderos ubicadas estratégicamente, de tal
manera que exista un orden en el desarrollo de la red.
Las campañas como el cierre de la Avenida Arequipa para los ciclistas los días
domingos o el cierre de la vía que rodea al Pentagonito son satisfactorias, pero
lamentablemente, si no hay un sistema integrado de ciclo vías en toda la ciudad, va ha
ser bastante difícil que su uso se difunda masivamente.
Pienso que lo que se debería hacer primero son estudios de las vías que son aptas para
el desarrollo de esta actividad, y que servirían para ser espacios articuladores y
alimentadores de los sistemas de transporte antes mencionados. Acá en Lima, siempre
ha existido la costumbre de construir avenidas con grandes bermas verdes con una
función paisajística, pero que no han sido explotados de manera funcional y eficiente.
Se podrían usar estas para el uso de ciclo vías, aprovechando las copas de los árboles
para que den sombra en Verano, una de estas avenidas por ejemplo, son San Borja
Norte y San Borja Sur, o Velasco Astete en Surco, sin embargo, habría que resolver el
problema de los cruces viales, y no generar un conflicto con el pase de los autos, se
colocarían en principio semáforos para ciclistas y señalizaciones adecuadas en estos
puntos, paralelamente, se tendría que concientizar a los automovilistas de respetar a los
ciclistas y manejar adecuadamente el automóvil, a fin de evitar accidentes de transito.
El otro punto tiene que ver con la colocación de estacionamientos para las bicicletas,
tanto en las estaciones del Tren Eléctrico y el Metropolitano, que estarían a su vez
conectadas a la red de ciclo vías, de tal manera que los ciclistas puedan acceder de sus
hogares a los sistemas de transporte masivo de manera rápida y efectiva.
La propuesta de la Municipalidad de San Borja, de alquilar bicicletas en módulos de
servicios me parece una idea buena, aunque debería de desarrollarse algún mecanismo
para que estas sean devueltas, ya que en nuestro medio hay la tendencia muy arraigada,
a que no vuelvan a aparecer o sean robadas. Este modelo ha tenido mucho existo en
Barcelona y en otras ciudades de Europa y Latinoamérica.
4. Conclusiones.