ManualMosquitosv 02
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(DIPTERA: CULICIDAE)
DE LA ZONA NORTE Y CENTRO DE CHILE,
INCLUYENDO ISLA DE PASCUA
MANUAL DE CULÍCIDOS
(DIPTERA: CULICIDAE)
DE LA ZONA NORTE Y CENTRO DE CHILE,
INCLUYENDO ISLA DE PASCUA
I. AGRADECIMIENTOS
Todo trabajo que culmina, sólo se hace posible toglia, Jorge González, Claudia Adones, Claudio
gracias a la colaboración de muchas personas que Puebla, Fernando Mercado, Alejandra Poblete,
aportan con su entusiasmo, dedicación y empuje. Samuel Serrano, Ivan Wainright, Pedro Bodor, An-
La segunda edición del libro que entregamos, para nelise Fritz y José Segura; y sus equipos de traba-
acercarnos al conocimiento más certero de la bio- jo, quienes facilitaron e hicieron posible nuestro
diversidad de los mosquitos de Chile, no es distin- trabajo en terreno.
to a lo anteriormente señalado, es decir su concre- Debemos agradecer también el apoyo del Dr.
ción es el fruto de muchas personas e instituciones Alex Figueroa, Director del Instituto de Salud Pú-
que aportaron para su publicación. Es para noso- blica de Chile, quien hizo posible la segunda edi-
tros una obligación agradecer muy sinceramente el ción de este manual.
aporte del Dr. Gerardo Mejías, SEREMI Valparaíso
Oficina Provincial Viña del Mar (hoy en la Oficina
Provincial Quillota), quien ha colaborado desde el
inicio de esta ambiciosa tarea entregándonos ma-
terial para estudiar y a la Dra. Ximena Goya, SERE-
MI Valparaíso Oficina Provincial Isla de Pascua, a
Flora Tuki y Romina Araki quienes colaboraron en
la colecta de material. A Salvador Ayala, Geógrafo
del Departamento de Asuntos Científicos del Insti-
tuto de Salud Pública de Chile, quién elaboró los
mapas que acompañan este trabajo. Agradecemos
también a Luis Núñez por su apoyo en diseño y
diagramación.
Especiales palabras dedicamos a Claudio
Araya de la SEREMI Atacama/Oficina Provincial
Vallenar, y Carlos Aguilera SEREMI Atacama,
quienes hicieron posible obtener material de Ano-
pheles (Ny.) atacamensis y Aedes (Och.) sallumi,
su colaboración y entusiasmo trascendió más allá
de sus obligaciones y tiempo. También agradece-
mos a los Doctores Pamela Peña, Manuel Gajar-
do, Emilio Paredes, Lissy Alvarado, Mauricio Ber-
5
II. INTRODUCCIÓN
No existe otro grupo de insectos, y artrópodos Los Diptera se distribuyen en todas las re-
como por ejemplo garrapatas, que presente tanto giones biogeográficas, presentando una alta
impacto en la salud del hombre y los animales abundancia especialmente en zonas donde otros
que los Dípteros, favoreciendo la propagación grupos de Insecta se hacen escasos (Arroyo et al.
de patógenos que causan graves enfermedades 1983). El grupo ha sido catalogado y bien estu-
que afectan a millones de personas. Al menos 11 diado en distintas zonas (Brown 2001), aunque en
familias de Dípteros reúnen especies que actúan Chile su estudio se ha centrado preferentemente
como vectores biológicos y mecánicos de patóge- en algunas familias (González 1995).
nos causantes de patologías que abarcan desde la Los Diptera son un grupo monofilético bien de-
Leishmaniasis, Bartonelosis, Filariasis, Tripano- finido que se apoya en 2 caracteres, alas posteriores
somiasis hasta las Miasis, destacando entre ellas reducidas (= halteres) y piezas bucales adaptadas
la familia Culicidae (mosquitos, zancudos) los para succionar líquidos. Recientes estudios molecu-
que se asocian a enfermedades tan graves como la lares sugieren que los Diptera estarían más relacio-
Malaria, Dengue, Fiebre Amarilla y Zika(González nados al Orden Strepsiptera que a los Siphonaptera
& Mac-Lean 2008). (pulgas) y Mecoptera (moscas escorpión).
7
III. MORFOLOGÍA DIPTERA
Los Diptera, al igual que todos los insectos, no pareadas: labro, labio e hipofaringe; y 2 parea-
presentan su cuerpo dividido en 3 regiones cor- das: mandíbulas y maxilas) se presentan altamen-
porales (tagmas), cabeza, tórax y abdomen, cada te variables y modificadas, una situación extrema
uno de ellas con apéndices modificados y carac- ocurre con las mandíbulas que sólo se presentan
teres de importancia en la sistemática del orden funcionales en las hembras de 12 familias (mu-
(McAlpine 1981). La cabeza presenta áreas y, en chas de ellas hematófagas), el resto ha perdido
algunas familias, desarrolladas cerdas que tie- esta estructura por una adaptación a un tipo de
nen importancia en la taxonomía del grupo; las alimentación particular.
antenas y las piezas bucales son los apéndices El tórax está formado por 3 segmentos (protó-
de este tagma, destacando entre éstas los palpos rax, mesotórax y metatórax), siendo el mesotórax
maxilares, particularmente importantes en los díp- el más desarrollado ya que aloja, internamente,
teros hematófagos ya que éstos llevan receptores los músculos del vuelo del único par de alas. Cada
capaces de detectar la temperatura, ácido láctico segmento lleva un par de patas, el mesotórax el
y el CO2 de un hospedero. Los ojos compues- primer par de alas y el metatórax los halteres. El
tos son desarrollados ocupando gran parte de la tagma torácico presenta una serie de caracteres
cabeza; generalmente en el área superior de la utilizados en la identificación y caracterización de
cabeza llevan 3 ocelos que completan los foto- las familias. El único par de alas exhibe distintas
rreceptores. Las antenas varían en su estructura, características, entre las que destaca la venación
exhibiendo, en algunos casos, dimorfismo sexual; y la setulación de éstas. La venación, reducida
se componen de un segmento basal, unido a la en términos generales si es comparada con otros
cabeza, el escapo, uno intermedio, el pedicelo y órdenes de Insecta, varía a través del Orden y es
otro terminal formado por un número variable de de fundamental valor taxonómico. Los halteres o
unidades, mayor en las familias más primitivas y balancines sirven como órganos para mantener la
reducido hasta 3, en las moscas más evolucio- estabilidad durante el vuelo. Las patas, y su diver-
nadas. Las piezas bucales forman un órgano tu- sidad de estructura, también provee útiles carac-
bular conocido como probóscide formado por un teres taxonómicos, particularmente destacado es
número variable de estructuras y que se presenta el acrópodo (extremo del tarso terminal de la pata)
en dos tipos principales, el tipo picador chupador que entrega importantes caracteres.
(encontrado en las formas hematófagas y preda- El abdomen está constituido primitivamente, al
doras, tales como Culicidae y Asilidae respecti- igual que el resto de los insectos, por 11 segmentos.
vamente) y el tipo chupador (como en Muscidae). Sin embargo, existe una tendencia al acortamiento
Las estructuras que conforman la probóscide (3 de este tagma por coalescencia, reducción o retrac-
8
III
ción de los segmentos terminales hacia el interior de divididos. El caracter más distintivo de las larvas
los segmentos proximales. El tamaño y disposición de Diptera, es la ausencia de patas torácicas, aun-
de la pilosidad y las cerdas de los tergitos o ester- que este carácter también está presente en otros
nitos entrega útiles caracteres de valor taxonómico. órdenes de insectos. El hábitat de desarrollo de
Los elementos que forman tanto la genitalia feme- los estados inmaduros es variable y puede abar-
nina como masculina se utilizan, y presentan gran car desde hábitats acuáticos (Tipulidae, Culici-
utilidad, en la diferenciación de los taxones tanto a dae, Blephariceridae), semiacuáticos (Tabanidae,
nivel de categorías superiores (Subórdenes) como algunos Ephydridae) y terrestres (Bibionidae,
de rango inferior (familias, géneros). Anisopodidae, Xylophagidae, Mydidae, Asilidae).
Los estados inmaduros de Diptera son varia- Otras se desarrollan en tejidos vegetales (Ceci-
bles respecto de su morfología externa, con todas domyiidae, Tephritidae) o bien son endoparásitas
las larvas ápodas (sin patas). Las estructuras de la en distintos grupos animales (Acroceridae, Ne-
cabeza de las larvas van desde las bien desarro- mestrinidae, Tachinidae) (Foote 1991). El número
lladas y expuestas con piezas bucales adaptadas de estados en el desarrollo larval varía entre 4 y
para picar y succionar hasta las que presentan 9 (usualmente 4) para los Diptera más primitivos
estructuras reducidas parcial o completamente y de sólo 3 para los Diptera superiores. El ciclo
y retraídas dentro del tórax y con piezas bucales de desarrollo larval puede comprender desde po-
adaptadas para perforar y raspar. El número de cos días (Culicidae, Muscidae) hasta 2 o 3 años
segmentos del cuerpo larval es variable ya que, especialmente bajos condiciones ambientales ex-
algunos de ellos, pueden estar fusionados o sub- tremas (Tabanidae) (Coscarón & González 1991).
9
IV. TAXONOMÍA DIPTERA
Los Diptera han sido clasificados en al menos Los Brachycera presentan características an-
130 familias, entre 22-32 superfamilias, 8 a 10 in- tenas cortas, aunque también varios otros carac-
fraórdenes y 2 subórdenes (Yeates & Wiegmann teres (McAlpine & Wood 1989), e incluyen más
1999). Esta proposición de clasificación vino a de 82.000 especies y sus larvas se encuentran en
modificar la utilizada y muy extendida clasificación variados ambientes (Brown 2001). Se subdividen
que agrupaba a los dípteros en 3 subórdenes; Ne- en 4 Infraórdenes, destacando Tabanomorpha
matocera, Brachycera y Cyclorrhapha y este último que reúne especies de las familias Tabanidae y
con las Secciones Aschiza y Schizophora, la cual Athericidae, ambas con representantes hemató-
fue frecuentemente subdividida en Calyptratae fagos. El infraorden Muscomorpha comprende
(Calíptrados), Acalyptratate (Acalíptrados) y Pupi- el 92% de las especies de Brachycera e incluye
para (Richards & Davies 1984). especies importantes desde un punto de vista de
Los Nematocera, hoy en día llamados “Diptera salud pública como las encontradas en las fami-
Inferiores”, se distinguen, entre otros caracteres lias Muscidae (mosca doméstica), Fannidae y
de los adultos por presentar patas largas y del- Calliphoridae (moscos).
gadas además de antenas multisegmentadas. Las La Familia Culicidae (zancudos, mosquitos)
larvas presentan una bien desarrollada cápsula merece particular atención en todo el mundo,
cefálica, siendo la gran mayoría de ellas acuáticas dada la importancia médica y veterinaria de és-
o semiacuáticas (McAlpine & Wood 1989). Los tos como reservorio y vectores de enfermedades.
Dípteros inferiores incluyen 40 familias y algo Son potenciales vectores biológicos de distintos
más de 52.000 especies conocidas (Brown 2001). tipos de virus, protozoos y nematodos, afectan-
Se subdivide en 7 Infraórdenes, dentro de los que do tanto al hombre como a los animales do-
destacan Culicomorpha y Psychodomorpha que mésticos, tales como Malaria (Lounibos, 2002),
incluyen especies de familias de Diptera de há- Dengue (Moncayo et al., 2004), Fiebre Amarilla
bitos hematófagos tales como Culicidae (zancu- (Vasconcelos et al., 2004), Virus del Nilo Occi-
dos), Ceratopogonidae (polvoritas), Simuliidae dental (Kilpatrick et al., 2005), Fiebre del Valle
(jerjeles) y Psychodidae y, por consiguiente, de del Rift (Diallo et al., 2005) y algunos nemátodos
importancia médica y veterinaria. (Gratz, 2004), entre otras. También, dadas las ca-
10
IV
pacidades de las distintas especies de Culicidae, Se reconocen por su probóscide alargada y las es-
para colonizar nuevas regiones con éxito, como camas sobre la mayor parte de sus cuerpos. Los
es el caso de Aedes aegypti y varias especies de culícidos tienen una distribución mundial, siendo
Anopheles los riesgos potenciales de su acción particularmente abundantes en las regiones tropi-
son concretos (Aviles et al., 1999; Domínguez y cales y subtropicales. Se encuentran ausentes solo
Lagos, 2001; Gratz, 2004). en la Antártica y en algunas islas. Se han encontra-
La familia se subdivide en 2 subfamilias, Ano- do en alturas de hasta 5.500 msnm y en profundas
phelinae y Culicinae, 41 géneros y más de 3.400 minas a 1.250 m bajo el nivel del mar.
especies conocidas en el mundo (Harbach 2007).
11
V. LA FAMILIA CULICIDAE
Proboscide
Abdomen
Ala
Tibia
Tarsos
Fig. 2.
Ala de Culex (Culex)
sp mostrando
venación. (4X)
Fig. 3.
Aspecto general de la larva de un
culícido
Cabeza
Tórax X Segmento anal
4X
Silla
Antenas
Abdomen Sifón
respiratorio
Setas
Trompetas
respiratorias
Fig. 4.
Aspecto general de la pupa de un culícido. Segmentos
abdominales
Cefalotórax
Paletas
V
Fig. 5 B.
Colecta de material inmaduro de mosquitos
desde el agua.
Fig. 6.
Frascos de crianza de material inmaduro de
mosquitos
5. PREPARACIÓN DE ADULTOS en base al material colectado en los alrededores
de Valdivia; el primer catálogo para la familia, pu-
Una vez emergidos los adultos se retiran desde
blicado por Reed (1888); la serie de “Diptera of
los recipientes de crianza con una bolsa plástica
Patagonia and South Chile” (Edwards, 1930), ba-
y son traspasados a frascos color ámbar cubier-
sada principalmente en las colectas realizadas por
tos con parafilm, se rotulan y mantienen por 24
Edwards y Shannon y la obra de Stuardo (1946),
h. en oscuridad favoreciendo con esto la rotación
que publica el último catálogo para el Orden.
en 180° de la genitalia del macho, característica
González et al. (2005), citan para el país sólo
importante para su posterior identificación.
13 especies agrupadas en 4 géneros, con Culex
Una vez pasadas 24 h los adultos, ubicados
Linnaeus como el taxón más diversificado en
dentro de los frascos ámbar, se introducen en el
cuanto a número de especies. En vista del ende-
freezer a -20ºC durante 2 horas produciendo la
mismo de muchos elementos de la fauna chilena,
muerte del ejemplar. Esta técnica tiene la venta-
es probable que una fauna muy interesante de cu-
ja de ser inocua para el manipulador, económica
lícidos quede por describir (Ward, 1977).
y fácil de realizar. Los adultos luego de muertos,
se trasladan a placas petri debidamente rotuladas
con el número de la muestra de origen y posterior-
mente son montados en alfileres entomológicos 7. ANTECEDENTES BIOLÓGICOS
para su estudio e identificación bajo microscopio Los mosquitos cuentan, al igual que otras es-
estereoscópico. pecies de insectos, con especiales adaptaciones
para colonizar prácticamente cualquier hábitat
acuático, desde aquellos que son temporales o
6. ESTUDIOS TAXONÓMICOS DE permanentes, con alta cantidad de nutrientes
CULICIDAE EN CHILE (“agua sucia”) o escasos nutrientes (“agua lim-
pia”). Algunas especies “invasoras” como por
El estudio taxonómico de las distintas fami- ejemplo Aedes aegypti, Aedes albopictus, Culex
lias de Diptera en Chile es exiguo y está centrado pipiens, tienen la capacidad de desarrollarse en
en un reducido grupo de taxones, desatendiendo pequeños recipientes con muy escasa cantidad
aspectos relevantes de la taxonomía, biología, de agua. Aedes aegypti y Aedes albopictus se
conocimiento de las formas inmaduras de las adaptan muy bien a los cambios climáticos y
especies y su asociación con los adultos, situa- medio ambientales, por ejemplo la resistencia de
ción que ante eventuales riesgos de la llegada sus huevos a la desecación lo que les permite,
de enfermedades, pudiera dificultar su adecuado con esta característica, sobrevivir por más de seis
tratamiento y combate (González, 1995, Pates y meses. Esta característica, de su ciclo biológico,
Curtis, 2005). les entrega la posibilidad de colonizar extensas
Las especies chilenas de Culicidae, han sido áreas geográficas.
conocidas y estudiadas gracias al trabajo y las Las hembras de mosquitos pueden llegar a
colectas efectuadas por naturalistas europeos en colocar, dependiendo de la especie, hasta más
nuestro territorio durante el siglo XVII (Papavero, de 500 huevos. La oviposición, en la mayoría de
1973), además de los aportes de Philippi (1865) las especies, ocurre unos 4 días después de la
18
V
primera ingesta de sangre (especies anautogéni- copular con varios machos y guardar los esperma-
cas), aunque existen otras especies que pueden tozoides en estructuras especializadas denomina-
colocar, una primera postura de huevos, sin haber das espermatecas. Las hembras no vuelven a ser
ingerido sangre (especies autogénicas). Las hem- receptivas a los machos. Después de la insemina-
bras pueden disponer sus huevos individualmen- ción, las hembras buscan un hospedero para obte-
te (Anopheles, Aedes) o bien en grupos (balsas) ner sangre y así estar en condiciones de oviponer
que pueden tener cientos de huevos (Culex). Los sus huevos.
huevos, en ambos grupos, tienen adaptaciones
para la flotación. El tiempo de duración de eclo-
sión de los huevos, varía entre las especies y las 8. ESPECIES DE MOSQUITOS
adaptaciones abióticas que tengan a un determi- DISTRIBUIDOS EN EL AREA NORTE
nado ambiente.
Las larvas se alimentan de microrganis-
Y CENTRO DE CHILE, INCLUYENDO
mos, algas, protozoos y otros invertebrados, ISLA DE PASCUA.
pudiendo clasificarse en filtradores (por ejem- Las especies de Culicidae que se encuentran
plo las larvas de Culex y algunas especies de actualmente citadas para Chile, fueron descritas
Aedes), nadadores (la mayoría de las especies por Macquart (1838), Blanchard (1852) y Philip-
de Anopheles y Aedes). Las larvas de Anophe- pi (1865). Angulo (1988) estudia los zancudos
les se mantienen horizontales a la superficie de Hualpén, citando 3 especies para la zona,
del agua, mientras que las de Aedes y Culex se y Olivares (1991) describe el huevo de Aedes
mantienen “colgadas” de la superficie del agua (Ochlerotatus) albifasciatus (Macquart) y entrega
por el sifón respiratorio. antecedentes de su biología. Angulo y Olivares
Las larvas de mosquitos pasan por cuatro (1993) describen 2 nuevas especies de la zona de
estadios larvarios, antes de alcanzar el estado de Concepción, aporte en el cual entregan además
pupa. La duración de cada estadio larval depende un catálogo para la familia, citando para el país
de la disponibilidad de nutrientes, la densidad lar- 23 especies en 5 géneros. Sin embargo, incluyen
val, aunque la mayoría de las especies son depen- a Psorophora Robineau-Desvoidy no distribuido
dientes de la temperatura del agua; temperaturas en Chile, pero abundante en toda América con
elevadas acortaran el ciclo larval. sus 3 subgéneros. Además, dentro de su trabajo
Las pupas demoran en promedio unos dos y siguiendo la proposición de Edwards (1932),
días en completar los cambios fisiológicos y mor- ubican al género Nothodixa Edwards que es un
fológicos, aunque este período de tiempo es tam- Dixidae (Hennig 1973; Wood & Borkent 1989)
bién dependiente de la temperatura. dentro de Culicidae, el cual fue removido por
En la fase adulta, se produce primeramente la Stone (1957) y finalmente por Knight & Stone
emergencia de los machos, uno a dos días antes (1977) de los Culicidae, razón por la cual no es
que las hembras, los cuales deben experimentar considerado en este trabajo.
la rotación de su genitalia antes de estar sexual- Se ofrece, a continuación, una clave dicotómica
mente activos, lo cual puede tardar 1 día. Una vez para la diferenciación e identificación de los distin-
que emergen las hembras y endurecen su exoes- tos taxones distribuidos en el área de estudio.
queleto, vuelan hasta enjambres de machos para
19
8.1. Clave para los géneros de Culícidos adultos hembras distribuidos en la
zona norte y centro de Chile, incluyendo Isla de Pascua.
4(3) -Cabeza. Clípeo con escamas blancas (Fig. 15); Tórax. Aedes (Stegomyia)
Scutum con patrones de escamas blancas; Pata. Tarsos Theobald
bandeados
-Cabeza. Clípeo sin escamas (Fig. 16); Tórax. Scutum con Aedes (Ochlerotatus)
patrones de escamas doradas; Pata. Tarsos no bandeados. Lynch-Arribalzaga
20
Palpos maxilares
Fig. 7.
Palpos maxilares de Anopheles
(Nys.) atacamensis
Probóscide
Cabeza
Antenas
Fig. 8.
Palpos maxilares Palpos maxilares de Aedes (Oc.) albifasciatus
Probóscide
Tarsomeros
Fig. 9.
Segmentos tarsales de la pata 5
posterior de Anopheles (An.) 4
pseudopunctipennis.
3
Scutum
Fig. 10.
Vista dorsal del scutum
de Anopheles (An.)
pseudopunctipennis.
Tarsomeros
Fig. 11.
Segmentos tarsales pata
posterior de Anopheles
(Nys.) atacamensis
4 5
3
Scutum
Fig. 12.
Vista dorsal del scutum de
Anopheles (Nys.) atacamensis
Fig. 13.
Pleura torácica de Culex (Cx.) pipiens mostrando el
espiráculo torácico
Espiráculo
Torácico
Fig. 14.
Pleura torácica de Aedes (Oc.) albifasciatus
mostrando el espiráculo torácico Espiráculo
Torácico
Fig. 15.
Vista frontal de la cabeza de Aedes (Stegomyia)
aegypti mostrando las escamas blanquecinas sobre
el clípeo.
Clípeo
Cabeza
Fig. 16.
Vista frontal de la cabeza de Aedes (Oc.) albifasciatus Clípeo
mostrando la ausencia de escamas blanquecinas
sobre el clípeo
8.2 Clave para la identificación de larvas de 4° estado de géneros de mosquitos
distribuidos en el área norte y centro de Chile, incluyendo Isla de Pascua.
24
Sifón respiratorio ausente
Fig. 17.
Segmentos terminales del abdomen de
la larva de Anopheles sp.
Fig. 18.
Segmentos terminales del
abdomen de la larva de Culex
(Cx.) sp.
Sifón
Cerda 1 abdomen
Fig. 19.
Cerda 1 del abdomen de la larva de
Anopheles (Nys.) atacamensis.
Fig. 20.
Cerda 1 del abdomen de la
larva de Anopheles (An.)
pseudopunctipennis.
Cerda 1 abdomen
Sifón
Fig. 21.
Sifón respiratorio de la larva de Culex
(Cx.) quinquefasciatus mostrando varias
cerdas 1-S.
1-S
Cerda 1 S
Fig. 22.
Sifón respiratorio de la larva de
Aedes (Oc.) albifasciatus
Dientes del peine
Fig. 23.
Dientes del peine del segmento
abdominal VIII de la larva de
Aedes (St.) aegypti.
Fig. 24.
Sifón respiratorio de Aedes
(St.) aegypti mostrando la
cerda 1S del sifón. Sifón
1-S
8.3 SUBFAMILIA CULICINAE Hembra: Probóscide negruzca. Palpos maxila-
La subfamilia se divide en 11 tribus, 41 géne- res del mismo color que la probóscide y de al
ros y más de 3.000 especies. Los adultos presen- menos un quinto del largo de la probóscide (Fig.
tan alta variabilidad morfológica, aunque pueden 25 A). Clípeo con escamas blanquecinas. Ante-
ser caracterizados por presentar palpos maxilares nas negruzcas y tan largas como la probóscide.
cortos en la hembra, escutelo trilobulado y la pre- Occipucio con delgadas escamas doradas, su-
sencia de sifón respiratorio en las larvas. blateralmente con escamas oscuras. Tórax café;
mesonoto lateralmente con una ancha banda y
TRIBU AEDINI manchas laterales al lado del escutelo de esca-
8.3.1 GÉNERO Aedes Meigen, 1818:374 mas cafés, el resto del mesonoto con escamas
doradas. Escutelo con escamas doradas. Pleuras
con escamas y setas blanquecinas, abundantes
SUBGÉNERO
en los distintos escleritos (Fig. 25 B). Patas con
Ochlerotatus Lynch-Arribálzaga, 1891a:374
las coxas con escamas blancas. Alas con esca-
Especie tipo: Ochlerotatus confirmatus Lynch-
mas oscuras y claras entremezcladas. Abdomen
Arribálzaga.
con los tergitos oscuros excepto por una banda
media longitudinal mas ancha en el ápice de los
tergitos de escamas blanquecinas (Fig. 25 C). Es-
Aedes (Ochlerotatus) albifasciatus
ternitos blanquecinos.
(Macquart, 1838): 35 (Culex). Localidad-tipo: Macho: palpos más largos que la probóscide
Guanabara, Río de Janeiro, Brasil (tipo en MNHP). y con escamas blanquecinas basalmente en al-
= Aedes (O.) flavipes Macquart, 1838: 35 (Culex). gunos palpómeros. Antena plumosa y tan larga
Localidad-tipo: Concepción, Chile (MNHP). como la probóscide. Genitalia: gonocoxito unifor-
me, lóbulo apical inconspicuo; gonostilo delgado
= Aedes (O.) annuliferus Blanchard, 1852 : 333
con 2 cerdas en el margen superior (Fig. 26)
(Culex). Localidad-tipo: Coquimbo, cerca Illa-
pel, Chile (MNHP). Larva 4° estado: cabeza con cerda 6C simple
y más corta que la 7C que es múltiple. Sifón con
= Aedes (O.) vittatus Philippi, 1865: 596. Locali-
pecten formado por una fila de espinas, de los
dad-tipo: Santiago (tipo inexistente).
cuales los distales son lisos y el resto son irre-
= Aedes (O.) philippii Dyar, 1924:129 (nombre gularmente dentados en la base; cerda 1S trífida o
nuevo para Culex vittatus Philippi, no Bigot). con más ramas e insertada junto o insertada mas
= Aedes (O.) colonarius Dyar, 1924 : 130. Locali- allá de la ultima espina del pecten (Fig. 27). Seg-
dad-tipo: Valle de Azapa, Chile (USNM). mento X con silla incompleta. (Fig. 28).
Diagnosis: Cuerpo café. Probóscide negruz- Distribución geográfica: Esta especie ha sido
ca, clípeo con escamas blanquecinas. Antenas colectada en la zona de Lampa y Batuco (Región
negruzcas. Tórax café, escutelo con escamas Metropolitana) (Fig. 29)
doradas. Alas con escamas oscuras y claras en-
tremezcladas. Adomen con los tergitos oscuros
y con una banda media longitudinal de escamas
28 blanquecinas.
A
Fig. 25 A, B y C.
A. Cabeza, B. Tórax. C. abdomen
del adulto hembra de Aedes (Oc.)
albifasciatus
C
Gonostilo
Fig. 26.
Gonocoxito y gonostilo de Aedes
(Oc.) albifasciatus
Gonocoxito
Fig. 27.
Dientes del peine del segmento
abdominal VIII de Aedes (Oc.) Dientes del peine
albifasciatus
Fig. 28.
Sifón respiratorio de Aedes (Oc.)
albifasciatus
Cerda 1 S
Fig. 29.
Distribución geográfica de Aedes (Och.) albifasciatus
LEYENDA:
32
Fig. 30.
Cabeza del adulto de Aedes (Oc.)
sallumi
Fig. 31.
Tórax del adulto de Aedes (Oc.)
sallumi
Fig. 32.
Abdomen del adulto de Aedes
(Oc.) sallumi
Fig. 33.
Genitalia del adulto de Aedes
(Oc.) sallumi
Cerda 1 S
Fig. 34.
Sifón de la larva Aedes (Oc.)
sallumi, mostrando la cerda 1-S
Sifón
Fig. 35.
Distribución geográfica de Aedes (Och.) sallumi
III REGIÓN
LEYENDA:
36
Fig. 36.
Adulto de Aedes (St.) aegypti
Fig. 37.
Huevo de Aedes (St.) aegypti colocado
en paleta de ovitrampa en Isla de
Pascua
Fig. 38 A y B.
A A. Segmento anal de la larva de
Aedes (St.) aegypti. B. Dientes del
pecten del segmento abdominal VIII
de la larva de Aedes (St.) aegypti
B
Fig. 39.
Distribución geográfica de Aedes (St.) aegypti
ISLA DE PASCUA
LEYENDA:
TRIBU CULICINI
SUBGÉNERO Culex Linnaeus, 1758:602
8.3.2 GÉNERO Se ofrecen claves tanto para los adultos como
Culex Linnaeus, 1758: 602 Especie-tipo: para las larvas de 4° estado de las especies de
Culex L. encontradas en la zona de estudio, en
Culex pipiens Linnaeus
base a características morfológicas externas.
8.4 Clave para las hembras de las especies de Culex (Culex) L. de la zona
Norte y Centro de Chile
1 Alas con escamas claras en la base de la vena costa (Fig. 40) Culex apicinus
Alas totalmente cubiertas con escamas oscuras (Fig. 41) 2
Fig. 41.
Ala de Culex (Cx.) pipiens mostrando Escamas oscuras
las escamas oscuras en la base de la
vena Costa
Targos abdominales
Fig. 43.
Tergos abdominales de Culex (Cx.)
articularis con bandas angostas de
escamas claras
8.5 Clave para larvas de 4º estado de las especies de Culex (Culex) L. de la
zona Norte y Centro de Chile.
42
V
43
Fig. 44.
Adulto de Culex (Cx.)
acharistus
Gonostito
Fig. 45.
Gonocoxito y gonostilo
de macho Culex (Culex)
acharistus Root. (10X)
Gonocoxito
Fig. 46:
VI Segmento abdominal VI de larva de 4º
estado Culex (Culex) acharistus Root.
(10X)
Seta 6
Fig. 47.
Distribución geográfica Culex (Cx.) acharistus
IV REGIÓN V REGIÓN
REGIÓN METROPOLITANA
LEYENDA:
Fig. 48.
Adulto de Culex (Cx.)
apicinus
Gonostito
Fig. 49.
Gonocoxito y gonostilo del macho
Culex (Culex) apicinus Philippi. (10X)
Gonocoxito
Fig. 50.
Cabeza de larva de 4º estado
Culex (Culex) apicinus
Philippi, mostrando la cerda 5C
de la cabeza. (10X) vista dorsal
5C
Sifón
Fig.51.
Sifón respiratorio y segmento anal
de larva de 4º estado Culex (Culex)
apicinus Philippi. (4X)
Fig.52.
Sifón de larva de 4º estado
Culex (Culex) apicinus
Philippi, mostrando las espinas
del pecten. (10X)
Fig. 53.
Distribución geográfica Culex (Cx.) apicinus
XV REGIÓN I REGIÓN III REGIÓN
IV REGIÓN V REGIÓN
LEYENDA:
50
Fig. 54.
Adulto de Culex (Cx.)
articularis
Fig. 55.
Gonocoxito y gonostilo del macho Gonostito
Culex (Culex) articularis Philippi.
Gonocoxito
Fig.56.
Sifón respiratorio de larva de 4º
estado Culex (Culex) articularis
Philippi, mostrando las espinas
del pecten. (10X)
Seta 1C
espiculada
Fig. 57.
Distribución geográfica Culex (Cx.) articularis
V REGIÓN
LEYENDA:
53
Fig. 58.
Adulto de Culex (Cx.) dolosus
Gonocoxito
Fig.60.
Cabeza de larva de 4º estado
Culex (Culex) dolosus Lynch-
Arribálzaga, mostrando la
cerda 1C de la cabeza. (40X)
Cerda 1C
Sifón
Fig.61.
Sifón respiratorio de larva de 4º
estado Culex (Culex) dolosus
Lynch-Arribálzaga, mostrando
las espinas del pecten. (10X)
Espinas del
pecten
Fig. 62.
Distribución geográfica Culex (Cx.) dolosus
III REGIÓN V REGIÓN
REGIÓN METROPOLITANA
LEYENDA:
Culex (Culex) pipiens rotizada dorsal. 30-58 dientes del peine con todo
el borde en flequillo, distribuidos en dos o más
Linnaeus, 1758:602. Localidad-tipo: cerca Lago filas irregulares. Seta 7-I con 2 ramas y más corta
Kranjesko, Suecia (tipo en USNM). que seta 6-I. Seta 6-VI con 2 ramas (Fig. 66). Seta
Diagnosis: Probóscide con escamas negruz- 1-III y 1-IV single. Sifón: Largo del pecten menor
cas, con parches ventrales de escamas blancas. a 1/3 del largo del sifón, con 12-16 espinas de
Mesoscuto café oscuro, pleuras café amarillentas. 4-5 dentículos en forma de escala cada una. Sifón
Escutelo con escamas estrechas amarillentas. Pa- con 3 a 6 pares de setas 1S con 4 o menos ramas,
tas enteramente café pálido. Tergitos abdominales las que nacen caudal al pecten y no se encuentran
con bandas basales estrechas de escamas blan- insertadas en una sola fila presentando de 1-3
cas. Larva con índice sifonal con un rango entre setas anterolaterales. Índice sifonal con un rango
4,2-6,0; seta 1C, no espiculada. Genitalia macho, entre 4,2-6,0 (Fig. 67). Segmento anal: Montura
con gonocoxito cónico cubierto con setas; no rodea completamente el segmento anal, seta 1X
anulado; seta basal del lóbulo apical del gonoco- usualmente con 1 rama, seta 4X con mínimo 4
xito más gruesa y terminando como garfio. pares de setas que nacen de un promontorio, 4
papilas anales de menor o igual largo que el seg-
Hembra: Escutelo con escamas amarillentas.
mento anal.
Patas enteramente café pálido. Pleura con parche
de escamas blancas. Segmento abdominal con Distribución geográfica: Esta especie ha sido
estrechas bandas basales blanca (Fig. 63). colectada entre la Región XV y la Región Metropo-
litana (Fig. 68).
Genitalia: gonocoxito cónico, cubierto por finas
setas. Lóbulo apical del Gonocoxito con tres se-
tas; la basal más gruesa que las otras y con el
ápex como garfio, la del medio y la distal de si-
milar largo ambas terminadas cono garfio, siendo
la dorsal mas delgada que las otras. Hoja: Ovoide,
presenta una seta “ancha” casi transparente que
asemeja una segunda hoja de menor tamaño que
la hoja propiamente tal, más dos setas delgadas
con el extremo terminado como gancho. Gonosti-
lo no anulado (Fig. 64).
Larva de 4° estado. Cabeza más ancha que
larga. Seta 1C no espiculada y más gruesa que
seta 5C (Fig. 65). Seta 5C con 5-7 ramas. Antena
más corta que el largo de la cabeza y cubierta por
pequeñas espículas. Maxila sin espinas apicales,
peine maxilar presente, interno y desarrollado.
Maxila y palpos fusionados a nivel de la base de la
antena. Abdomen: Segmento VIII sin placa escle-
57
A
Antenas
Fig. 63.
A, B y C. Adulto de Culex (Cx) pipiens
probóscide
Abdomen
C
Gonostito
Fig. 64.
Gonocoxito y gonostilo del macho
Culex (Cx.) pipiens Linnaeus.
(10X)
Gonocoxito
Fig.65.
Cabeza de larva de 4º
estado Culex (Cx.) pipiens
Linnaeus, mostrando la
cerda 1C de la cabeza.
(40X)
Seta 1C no
espiculada
Fig.66.
Segmento abdominal VI de larva
de 4º estado Culex (Cx.) pipiens
VI Linnaeus, mostrando seta 6 del
segmento VI del abdomen (10X)
Seta 6
Fig.67.
Sifón respiratorio y segmento
anal de larva de 4º estado
Culex (Cx.) pipiens Linnaeus.
(4X)
Sifón
Fig. 68.
Distribución geográfica Culex (Cx.) pipiens
LEYENDA:
Proboscide
Abdomen
Gonostito
Fig. 70.
Gonocoxito y gonostilo de Culex
(Cx.) quinquefasciatus
Gonocoxito
Fig. 71.
Phallosoma y proctiger de
Culex (Cx.) quinquefasciatus
Fig.72.
Cabeza de larva de 4º estado
Culex (Cx.) quinquefasciatus
Say, mostrando la ceda 5C de
la cabeza (10X) vista dorsal
5C
Fig.73.
Sifón de larva de 4º estado Culex
(Cx.) quinquefasciatus Say. (10X)
Sifón
Fig. 74.
Distribución geográfica Culex (Cx) quinquefasciatus
XV REGIÓN
II REGIÓN
I REGIÓN
LEYENDA:
8.4 SUBFAMILIA ANOPHELINAE largas setas a lo largo del margen posterior. Pa-
La subfamilia reúne 3 géneros y más de tas con tarsómero posterior blanco con un anillo
460 especies. Los adultos se caracterizan por apical oscuro. Alas con escamas café oscuras y
con escamas pálidas blancas en la mayoría de las
presentar el primer tergito abdominal sin es-
manchas y las venas posteriores. Abdomen con
camas, los palpos maxilares en ambos sexos
integumento café oscuro, tergo II-VII cubierto con
son tan largos como la probóscide y las larvas escamas blanquecinas medialmente.
carecen de sifón respiratorio.
Genitalia: gonocoxito cilíndrico, mesalmente
recto, superficie dorsal con largas escamas desde
8.4.1 GÉNERO
la base al ápice. Gonostilo curvado mesalmente,
Anopheles Meigen, 1818:10 Especie ligeramente ancho en la base terminando en un
tipo: Anopheles maculipennis Meigen ápice truncado, uña gonostilar corta. Aedeagus
con el ápice más largo que ancho fuertemente
SUBGÉNERO esclerotizado lateralmente, escasamente sobre el
Nyssorhynchus Blanchard, 1902:795 Especie ápice y los márgenes laterales.
tipo: Anopheles argyritarsis Robineau-Desvoidy.
Larva 4° estado: Cabeza con áreas pigmenta-
Anopheles (Nyssorhynchus) atacamensis das oscuras. Flagelo antenal fuertemente acicula-
do con fuertes espículas en las superficies dorsal,
González & Sallum, 2010. Localidad tipo: Los ventral y mesal; seta 1-A más larga que el ancho
Perales, Copiapó del flagelo en el punto de inserción. Seta 1-P tipo
abanico con delgadas ramas y no insertada en un
Diagnosis: Adultos con pruinosidad grisácea
tubérculo común con 2-P. Abdomen con placas
oscura, porción central de la cabeza desnuda,
tergales medias presentes, fuertemente esclerosa-
escuto grisáceo, escamas escutales grandes, con
das. Pecten con 7 largos dientes mezclados con
un par de anchas marcas que se extienden poste-
12 cortos; dientes usualmente curvados dorsal-
riormente desde el ángulo escutal anterior hasta
mente y con serraciones en la base. Placa media
el escutelo. Área escutal con 2 líneas de escamas
fuertemente pigmentada sin brazos laterales; seta
espatuladas blancas que alcanzan el margen del
1-S fuertemente desarrollada con 4 ramas.; silla
escutelo. Tarsómero posterior 5 principalmente
incompleta, 1-X sencilla bien desarrollada, larga
con escamas blancas y con un anillo oscuro en el
insertada fuera de la silla, 2-X fuertemente plu-
ápice. Integumento abdominal café oscuro, tergo
mosa, seta 4-X con 8,5 pares de largas, plumosas
II-VII medialmente con escamas blanquecinas, sin
setas (Figs. 76 A y B).
escamas caudolaterales (Figs. 75 A y B).
Distribución geográfica: Esta especie ha sido
Hembra: Oscuro con pruinosidad grisácea. Pe-
colectada solo en la III Región. (Fig. 77)
dicelo de la antena con escamas blancas. Palpo
maxilar predominantemente con escamas café
oscuro. Probóscide con escamas oscuras y lar-
gas setas en la superficie ventral. Mesoescuto
con pruinosidad grisácea. Escutelo pálido con
67
A
Antenas
Fig. 75 A y B.
Adulto macho de Anopheles
(Nys.) atacamensis
Palpos
Probóscide
B
A
Fig. 76 A y B.
Larva de Anopheles (Nys.) atacamensis
B
Fig. 77.
Distribución geográfica de Anopheles (Nys.) atacamensis
III REGIÓN
LEYENDA:
Fig. 78.
Gonocoxito y gonostilo del
macho de Anopheles (Nys.)
pictipennis
71
SUBGÉNERO Genitalia: gonocoxito 1.8 veces más largo que
Anopheles Meigen, 1818:10 ancho, superficie dorsal con cortas y largas cerdas
entremezcladas. Gonostilo 1.5 veces el gonocoxi-
Anopheles (An.) pseudopunctipennis to y con muchas pequeñas cerdas en la superficie
dorsal. Aedeagus cilíndrico, ancho y furcado en la
Theobald, 1901: 305. Localidad-tipo: Granada. base, con 2 pares de hojas en el ápice, delgado,
(tipo inexistente). ligeramente curvo y de bordes aserrados.
= Anopheles (An.) peruvianus Tamayo, 1907:35. Larva 4° estado: cerdas 2 y 3-C largas y sim-
Localidad-tipo: Huacachina, Chanchamayo, ples, equidistantes y separadas por una distancia
Lima, Perú (tipo inexistente). mayor del diámetro del tubérculo de inserción de
= Anopheles (An.) argentinus Brethes, 1912:15. cada una de ellas. Abdomen con cerda 1 palmea-
Localidad-tipo: Tucumán, Salta, Jujuy, Santia- da y presente en los segmentos III a VII; lóbulo
go del Estero, Argentina (tipo en MACN). espiracular posterolateral con una prolongación
= Anopheles (An.) tucumanus Lahille, 1912:253. esclerotizada (Fig. 80 A y B).
Localidad-tipo: Río Sali, Argentina (tipo Distribución geográfica: Esta especie ha sido
inexistente). colectada solo en la regiones XV y I (Fig. 81)
= Anopheles (An.) pseudopunctipennis negh-
mei Mann, 1950:34. Localidad-tipo: Qda. de
Miñe-Miñe, Tarapacá, Chile (tipo en IBJN).
= Anopheles (An.) pseudopunctipennis noei
Mann, 1950:37. Localidad-tipo: Oasis de
Suca, Tarapacá, Chile (tipo en IBJN).
Diagnosis: Probóscide oscura, palpos negros.
Tórax café oscuro con línea longitudinal mediana
de escamas amarillentas. Abdomen café, oscure-
cido epicalmente.
Hembra: probóscide oscura. Palpos maxilares
negros con los palpómeros 1 a 3 con anillo apical
claro; palpómero 4 enteramente claro. Occipucio
con integumento café y con escamas cafés. Tó-
rax con tegumento café oscuro; escudo con faja
longitudinal mediana con escamas angostas
amarillas y cerdas claras; escutelo más oscuro
medialmente. Pleuras café con áreas más oscu-
ras. Alas dotadas de áreas claras y oscuras; Costa
oscura hasta la unión con la subcosta. Abdomen
café, más oscuro apicalmente, cubierto con pelos
dorados. (Fig. 79).
72
Fig. 79.
Adulto macho de Anopheles
(An.) pseudopunctipennis
Fig. 80 A y B.
Larva de Anopheles (An.)
pseudopunctipennis
B
Fig. 81.
Distribución geográfica de Anopheles (An.) pseudopunctipennis
XV REGIÓN I REGIÓN
LEYENDA:
74
VI
1. Relevancia de las enfermedades trans- les, transmisores de malaria; varias especies del
mitidas por mosquitos género Culex, responsables de la transmisión de
Las enfermedades vectoriales tienen gran im- virus como el de la Fiebre del Nilo Occidental; Ae-
portancia en salud pública por su magnitud, dis- des aegypti y Aedes albopictus, que participan en
persión, provocando, además de los efectos sani- la transmisión de Dengue y otros arbovirus, como
tarios, impactos en diversos ámbitos que afectan Chikungunya y Zika. Las dos últimas enfermeda-
la calidad de vida y posibilidad de desarrollo de des han aumentado su relevancia en los últimos
las comunidades afectadas. Estas enfermedades se años por el aumento sostenido de las áreas en-
caracterizan por ser transmitidas entre individuos démicas y la co-circulación viral, que se asocia a
infectantes y otros susceptibles por medio de un aumento del riesgo de letalidad y complicaciones
vector sanitario, habitualmente un artrópodo. Re- severas, como artrosis crónica, en el caso de virus
presentan alrededor de un 17% de la carga mun- Chikungunya, Guillian Barre y Microcefalias, en el
dial estimada entre las enfermedades infecciosas, caso de virus Zika.
El área de presentación de estas enfermedades
está estrechamente relacionado con la distribución
de los vectores. Aun cuando se presentan con ma- 2. Situación Nacional de Enfermedades
yor intensidad en zonas tropicales y subtropica- Transmitidas por Mosquitos
les, existe una tendencia a aumentar su dispersión Chile mantiene de una situación excepcional
hacia áreas templadas por efecto de los mismo dentro del contexto internacional debido al éxito
factores que están incidiendo en la emergencia y de acciones de control, como la campaña contra
reemergencia del resto de enfermedades transmi- la Malaria efectuada durante la primera mitad del
sibles, tales como los cambio medioambientales, siglo XX, que logró eliminar esta enfermedad, lo
contaminación ambiental, globalización, migra- que fue certificado oficialmente en 1945, persis-
ciones, comercio internacional, aumento de la tiendo focos remanentes de Anophelinos vectores
rapidez de los medios de transporte, fenómenos en algunas quebradas de la Región de Arica-Pa-
de resistencia a tratamiento y medidas de control rinacota y en la Quebrada de Tarapacá, Región de
habituales, debilitamiento de los programas de Tarapacá. Estos focos se mantienen bajo control,
control, entre otros (fig. 82). existiendo una población en niveles tan bajos
Dentro de la gran diversidad de vectores sa- que es incapaz de sustentar la transmisión de la
nitarios, los zancudos o mosquitos ocupan un enfermedad. En este escenario, en el país, sólo
rol relevante. Entre los más importantes, cabe se registran casos importados, aislados y espo-
destacar diversas especies del género Anophe- rádicos. Para mantener este logro, se mantienen
75
Fig. 82.
Principales determinantes que inciden en la emergencia y reemergencia de las enfermedades vectoriales
Fig. 83.
Tasa de incidencia y mortalidad por Malaria en Chile entre el año 2001 y 2014.
VI
las acciones de vigilancia y control de los focos medad según la clasificación de OPS/OMS, sin la
remanentes. Estos focos se intensifican en verano presencia de casos fatales.
debido a las lluvias en el altiplano. Las acciones En el mes de febrero de 2016, se detectó un
de vigilancia permiten tener identificadas las áreas nuevo brote de Dengue, causado por el mismo
remanentes, así mismo permiten focalizar las ac- serotipo DEN-1, el que puede ser explicado por
ciones control y, de este modo, evitar que se dis- la existencia de un gran número de personas sus-
persen a sectores poblados, previniendo el riesgo ceptibles que incluye a personas residentes que
de reingreso de la enfermedad. Cabe señalar que no se infectaron en el brote de 2002, menores na-
anualmente se confirman entre 2-10 casos de Ma- cidos posterior al brote, además de continentales
laria, todos importados, prácticamente sin letali- que se han trasladado a vivir a la isla. Cabe seña-
dad asociada (Fig. 83). La mayoría de los casos lar que la población prácticamente se ha duplica-
provienen de África y, en menor medida, de Amé- do desde el brote del 2002. Por otra parte, como
rica del Sur. Durante el año 2015, el ISP confirmó ya se indicó, persisten altos índices de infestación
8 casos de Malaria. de Aedes aegypti en la Isla asociado a condiciones
El control vectorial de Malaria en Chile, ade- ambientales y antrópicas.
más permitió eliminar la presencia de Aedes ae- Por su parte, en Chile continental se registran
gypti, el que se extendía entre el extremo norte y habitualmente importados de casos de Dengue,
Caldera en la Región de Atacama. El último regis- correspondiente a personas que han visitado o
tro oficial data del año 1961. Sin embargo, como provienen de zonas endémicas. Debido al aumen-
consecuencia de la reemergencia de Dengue a ni- to del acceso al turismo y oportunidades laborales
vel mundial, ingresa Aedes aegypti a Isla de Pas- en el extranjero, así como la inmigración desde
cua, registrando oficialmente su presencia en el países endémicos, los casos de Dengue pueden
año 2000. Desde entonces, se han implementado ser detectados en cualquier región del país, tanto
acciones de control, las que lamentablemente no en centros asistenciales públicos como privados.
han logrado ser efectivas, debido a la existencia de En Isla de Pascua, además del riesgo de pre-
factores ambientales y socioculturales altamente sentación de nuevos brotes de Dengue, causados
favorables. Como consecuencia de este vector en por serotipos distintas al DEN-1, con posibilidad
Isla de Pascua, el año 2002, se presentó un bro- de casos graves, incluso fatales, existe riesgo
te de Dengue que afectó clínicamente al 17% de permanente de introducción de otros arbovirus.
la población residente de la época, es decir 636 Esta situación se confirmó con el brote de Zika,
casos de 3.500 habitantes aproximadamente. El registrado en el año 2014, producido como con-
brote fue producido por serotipo DEN-1, se estima secuencia del intenso brote sufrido en la Polinesia
que el 80% de la población quedó sensibilizada Francesa, con la cual existe fuertes lazos sociales
para este serotipo. Luego del brote, han existido y culturales, manifestado, por ejemplo, en conti-
años silentes o se han presentado casos aislados nuos viajes especialmente de la Población Rapa
o pequeños brotes en Isla de Pascua, todos ellos Nui hacia Tahití, Islas Marquesas, Moorea y otras
producidos por DEN-1, a excepción de dos casos islas de la Polinesia. En total, se identificaron 173
de DEN-4 identificados en el año 2009 (tabla 1). casos, principalmente subfebriles y exantemáti-
Todos los casos, incluidos los del brote del 2002, cos, no observándose complicaciones neurológi-
corresponden a la manifestación leve de la enfer- cas ni en recién nacidos.
77
Además, existe un alto riesgo de introducción los vectores ya son endémicos, la vigilancia vec-
de Chikungunya en Isla de Pascua, producto del torial orienta la implementación y evaluación de
alto flujo turístico entre la Isla y Polinesia o zonas las acciones de control, además de contribuir a la
donde se ha detectado circulación viral de Amé- estimación del riesgo de presentación de casos o
rica. Solo se registran casos importados de esta brotes de estas enfermedades.
enfermedad, durante el año 2014 hubo 19 notifi- Los principales objetivos de la vigilancia vec-
caciones, 3 de ellos residentes en Isla de Pascua torial, son:
con antecedentes de viaje a Tahití, los que afortu-
• Identificación oportuna de la presencia de vec-
nadamente no generaron casos secundarios. Du-
tores de interés sanitario
rante el año 2015 se registran 8 casos importados
de Chikungunya, 5 de ellos con antecedentes de • Conocer el área de dispersión
viaje a Bolivia. • Determinar el nivel de infestación
En este contexto, los principales desafíos para
los equipos técnicos encargados de la prevención • Estimar nivel de infección de agentes etiológi-
y control de las enfermedades vectoriales, es for- cos de interés sanitario
talecer las capacidades de vigilancia y reforzar las • Conocer aspectos biológicos del vector rele-
acciones de control de manera de lograr mantener vantes para la dinámica de transmisión de la
los logros alcanzados, minimizar los focos rema- enfermedad o de interés para las acciones de
nentes de Anophelinos, evitando su dispersión a control
otras área vulnerables y controlar Aedes aegypti
• Identificar factores ambientales y antrópicos
en Isla de Pascua. La integración de la vigilancia
que inciden en la dinámica de la población
en las personas, de los vectores y de los agentes
vectorial
es fundamental para actuar de manera oportuna y
eficiente frente al ingreso y dispersión de vectores • Determinar resistencia a plaguicidas y otras
o las enfermedades que transmiten. medidas de control
2002 636
2007 27
2008 25
2009 25
2015 2
2016 20
*Semana Epidemiológica xx
Fuente: Departamento de Epidemiología, MINSAL
Fig. 84.
Vigilancia Sanitaria Integrada de Enfermedades Vectoriales
Vigilancia
Epidemiológica
Vigilancia Vigilancia
Vectorial del Agente
los niveles de infestación, el desafío es agregar logía Médica de la Sección de Parasitología del
información sobre factores antrópicos que influ- Instituto de Salud Pública actúa como referente
yen en la persistencia de la especie y conocer la nacional en el diagnóstico y servicios de apoyo
existencia de resistencia a plaguicidas. en el ámbito entomológico. La Oficina de Zoono-
Por otra parte, el riesgo de expansión de Ano- sis y Vectores de la División de Políticas Públicas
pheles (An.) psuedopunctipennis de interés vecto- Saludables y Promoción, de la Subsecretaría de
rial, son las quebradas ubicadas en las Regiones Salud Pública del Ministerio de Salud, cumple
de Arica – Parinacota y la Región de Tarapacá y su el rol normativo, establece las directrices y los
desplazamiento a zonas más pobladas. lineamientos técnicos, coordina y supervisa las
Los responsable de la ejecución de las activi- acciones regionales.
dades de vigilancia, son los Equipos de Zoonosis En Chile existen 457 puntos de muestreo dis-
y Vectores de las Seremis de Salud de las regio- tribuidos desde la Región de Arica-Parinacota a la
nes del área de riesgo. El Laboratorio de Entomo- Región Metropolitana (Tabla 2).
Tabla 2.
Puntos de muestreo de mosquitos vectores por Región, Chile, 2015 (Fuente: Oficina de Zoonosis y Vectores,
División de Políticas Públicas Saludables y Promoción, Subsecretaría de Salud Pública).
Arica Parinacota 24
Tarapacá 10
Antofagasta 60
Atacama 26
Coquimbo 38
Valparaíso 257
Región Metropolitana 80
Total 457
80
VI
82
Fig. 85.
Infusión atractante de
mosquitos para ovitrampas y
larvitrampas
Fig. 86.
Ovitrampas (Fuente: Seremi
de Salud RM)
Fig. 87.
Larvitrampa ubicada en
terreno (Fuente, Seremi de
Salud RM)
Identificación Taxonómica - Para confirmar los pre-diagnósticos los hue-
vos, larvas y pupas deben ser enviados al La-
Pre-identificación Nivel Regional boratorio de Referencia.
Las muestras recolectadas en terreno son
transportadas al laboratorio local de la Seremi de
Salud donde se observan las muestras bajo mi- Confirmación de diagnóstico entomológico
croscopio estereoscópico, de acuerdo al siguiente El Laboratorio Entomología Médica de la
procedimiento: Sección de Parasitología del Instituto de Salud
Pública de Chile, es el Laboratorio de Referencia
- Extraer las larvas con ayuda de una pipeta Nacional de los Programas de Vigilancia Vectorial
Pasteur. ejecutados por las Seremis de Salud, en temas de
- Depositar las larvas en una placa Petri. diagnóstico entomológico.
Este laboratorio se encargará de la confirma-
- Observar bajo microscopio estereoscópico
ción diagnóstica de las muestras enviadas por las
con ocular de 10X para pre-identificación de
Seremis de Salud.
especie siguiendo el sistema de claves instrui-
Así mismo, en coordinación con la Oficina de
do por el Laboratorio de Referencia1.
Zoonosis y Vectores del nivel central2, planificará
- Enviar las muestras sospechosas a confirma- prospecciones entomológicas. En conjunto desa-
ción al Laboratorio de referencia de acuerdo a rrollarán lineamientos y directrices para perfec-
las instrucciones correspondientes. cionar la vigilancia entomológica y ejecutarán ac-
En el caso de las ovitrampas el procedimiento es: ciones de capacitación y perfeccionamiento para
los equipos de terreno.
- Observar paleta bajo microscopio estereoscó- Además, este Laboratorio coordina, con otros
pico desde la zona al cual llegaba el nivel del equipos del ISP, servicios complementarios de
agua y luego observar hacia los extremos. diagnóstico molecular, parasitológico, virológico,
- En caso de detección de huevos, se pueden entre otros.
disponer en bandejas independientes teniendo
la precaución de identificar correctamente la
bandeja según la larvitrampa observada, hasta Comunicación de los hallazgos
la eclosión de de la larva desde el huevo; pos- En el caso que a nivel regional se detecte un
teriormente las larvas deben mantenerse en ejemplar sospechoso de Aedes aegypti o Anophe-
recipientes con alimento (puede utilizarse ali- lino de interés vectorial, se debe efectuar una co-
mento para mascotas finamente molido) hasta municación inmediata, por la vía más expedita, a
que éstas alcancen su último estadio y puedan los referentes nacionales de la Oficina de Zoonosis
ser identificadas, siguiendo el procedimiento y Vectores, con copia a los referentes del Laborato-
antes señalado. rio de Entomología Médica del ISP, los que deberán
confirmar recepción para fines de registro.
2 Oficina de Zoonosis y Vectores, División de Políticas
1 Laboratorio de Entomología Médica, Sección de Públicas Saludables y Promoción, Subsecretaría de
Parasitología, ISP Salud Pública, Ministerio de Salud de Chile
84
VI
Una vez efectuada la confirmación de la detec- y promoción de la salud, entre otros, de manera
ción de Aedes aegypti o Anophelinos de interés que se disponga de un programa sustentado en
vectorial, el laboratorio, además de comunicar por la evidencia científica disponible, con una amplia
los canales oficiales, informará por la vía más ex- cobertura, niveles óptimos de sensibilidad y ope-
pedita, idealmente por correo electrónico, tanto al ratividad permanente.
nivel regional como al nivel central, quienes debe- Además, es necesario implementar equipos y
rán confirmar recepción. lugares de trabajo, para el adecuado desarrollo de
La mantención de flujos de comunicación ex- las actividades, particularmente para los análisis e
peditos y oportunos es fundamental para la imple- investigaciones entomológicas.
mentación de una respuesta temprana y efectiva. La renovación tecnológica es una demanda
importante, teniendo en cuenta las nuevas herra-
mientas, por ejemplo las herramientas genéticas y
4. Desafíos moleculares que permiten precisar el diagnóstico
La existencia de un Sistema de Vigilancia In- entomológico y de los agentes etiológicos que es-
tegrada de enfermedades transmitidas por mos- tos pueden portar.
quitos, es una necesidad imperiosa para nuestro La vigilancia y control de las enfermedades
país, considerando la situación de emergencia y transmisibles, en particular de las enfermedades
reemergencia de estas patologías en el escenario vectoriales, supera las capacidades sectoriales,
internacional. De este modo será posible mantener por lo que es necesario establecer una fuerte coor-
los logros alcanzados y actuar, oportunamente, en dinación con diversos actores, públicos y priva-
el caso que se produzca el reingreso o dispersión dos, especialmente con las autoridades de salud
de mosquitos vectores al territorio nacional. animal y medioambiente, la academia, tanto en
La vigilancia vectorial, como componente in- su rol de investigación como en su rol formador
dispensable de esta vigilancia integrada, requiere de profesionales y técnicos, las sociedades cien-
disponer de recursos humanos, técnicos, logís- tíficas y agrupaciones profesionales también son
ticos y financieros suficientes para efectuar, de relevantes en la investigación, comunicación de
manera sistemática y sostenida, las acciones de eventos de interés y en la comunicación del ries-
vigilancia. Por lo tanto, uno de los desafíos pri- go. La participación y adhesión de la comunidad
mordiales es promover la percepción de riesgo, también es un requisito importante para el éxito
en los distintos niveles, sean estos gerenciales, de las acciones.
técnicos y operativos, así como en la comunidad,
de esta forma podrán gestionarse los recursos
para satisfacer, de manera adecuada, los requeri-
mientos de recursos.
Así mismo, es necesario generar las capacida-
des necesarias para diseñar y ejecutar las acciones
de vigilancia. Se requiere capacitar y perfeccionar,
de manera continua, a profesionales y técnicos en
aspectos epidemiológicos, entomológicos, clíni-
cos, medidas de prevención y control, de gestión
85
VII. USO DE HERRAMIENTAS MOLECULARES EN LA IDENTIFI-
CACIÓN DE ESPECIES VECTORAS
Una de las problemáticas desde el punto de Los marcadores pueden ser de origen mito-
vista taxonómico en los Culícidos es la existen- condrial o nuclear y su elección depende del tipo
cia de complejos de especies, híbridos y especies de pregunta de investigación a resolver. En los
cripticas. La caracterización de estos grupos, con marcadores de origen mitocondrial su polimorfis-
el fin de resolver su estatus taxonómico o diferen- mo es debido a las mutaciones y su información
ciarlo de otro por motivos epidemiológicos, fo- genética es monoparental, mientras que en los
renses o de conservación, ha sido llevada a cabo marcadores de origen nuclear, su polimorfismo
con mayor frecuencia por taxónomos especialis- se debe a mutaciones y recombinación y su in-
tas mediante caracteres morfológicos. Sin embar- formación genética es biparental. Por lo tanto, la
go, actualmente, esta caracterización es llevada a elección del tipo de marcador depende del nivel
cabo además, con marcadores de tipo bioquímico, taxonómico en el cual se esté desarrollando la in-
genético o cromosómico. vestigación, es decir si es a nivel intraespecifico
Para realizar una correcta identificación de un debe ser un marcador con una tasa de mutación
espécimen, es fundamental el tipo de muestra a más alta, como Microsatélites o Citocromo b y si
partir de la cual se realizará la caracterización. es a nivel inter especifico un marcador molecular
Esta puede estar representada por parte de un es- mas conservado con una tasa de mutación más
pécimen o el individuo completo, en buen o mal lenta, como genes ribosomales (12S, 16S).
estado de preservación. Si el espécimen no está Un marcador molecular de origen mitocon-
completo o en mal estado, se dificulta la identifi- drial utilizado ampliamente para la identificación
cación mediante caracteres morfológicos o la ex- de especies patógenas con importancia médica,
tracción del ADN para su identificación mediante ecológica y agronómica, cuando la morfología no
marcadores moleculares. es discriminatoria es el DNA Barcode. Este mé-
Los marcadores moleculares son fragmentos todo estándar de identificación de especies fue
de ADN que sirven de referencia para seguir la propuesto por Hebert et al. (2003a), y está consti-
transmisión de un segmento de un cromosoma de tuido por un fragmento de 648 pares de bases (pb)
una generación a otra. En un sentido restringido, en dirección 5`del gen Citocromo Oxidasa I (COI)
un marcador es una entidad genética que mani- que hace parte del complejo IV de la mitocondria.
fiesta polimorfismo y se hereda en forma mende- El supuesto para la identificación de especies es
liana. En este sentido, el nivel de polimorfismo es que el individuo a caracterizar tenga un DNA Bar-
una característica importante para la elección de code en que la variación genética inter específica
un marcador molecular, ya que un marcador mo- exceda la variación intra especifica (Hebert et al.
nomorfico no permite establecer diferencias. 2003b). Toda la información de las especies que
86
VII
han sido identificadas con este marcador esta al- especialistas en el grupo que se está estudiando,
macenada en una base de datos pública nombra- los holotipos están perdidos o en mal estado, o el
da “DNA barcodes” (DNA Barcode of Life Project; grupo de estudio no es monofiletico. Es así como
http://www.barcoding.si.edu). las herramientas moleculares no constituyen una
El DNA barcode tiene limitaciones, una de amenaza para la taxonomía tradicional debido a
ellas respecto a la base de datos cuando la taxo- que una caracterización correcta de un organismo
nomía del grupo estudiado no está resuelta y por debe considerar un enfoque integral con varias lí-
consiguiente no hay información suficiente y las neas de evidencia como la molecular, morfológica
otras, inherentes a las características del ADN y ecológica.
mitocondrial, por su herencia vía materna y la
presencia de NUMT (fragmentos nucleares inser-
tos dentro de la mitocondria), los cuales pueden
generar una identificación errónea si no son de-
tectados mediante la determinación de codones
de términos en el marco de lectura de la proteína.
A modo de ejemplo, en un estudio realizado por
Behura et al (2011) fueron evidenciados NUMT en
los intrones de genes que codifican para proteínas
de Aedes aegypti (0.008%) y Culex quinquefas-
ciatus (0.001%).
El Citocromo b, es un gen que hace parte del
complejo III de la mitocondria y es otro marcador
de elección para la identificación de especímenes,
ya que al igual que el COI es polimórfico (Nico-
las et al., 2012). Una de las bases de datos que
permiten buscar similitud entre la secuencia de
este marcador, obtenido del individuo sin identi-
ficación con secuencias de referencia es el Gen-
Bank, mediante un BLAST (http://blast.ncbi.nlm.
nih.gov/Blast.cgi). Por otra parte, los marcadores
nucleares de elección para realizar estudios ge-
nético poblacionales, que permitan anticipar los
patrones de distribución de las enfermedades y
así hacer una intervención desde el punto de vista
epidemiológico son los microsatélites y los SNP
(polimorfismos de un solo nucleótido).
En este sentido, las herramientas molecula-
res para la identificación de especies constituyen
entonces un complemento a la taxonomía tradi-
cional, y son una alternativa cuando no existen
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