Reflexiones Sobre Taichi Marcial
Reflexiones Sobre Taichi Marcial
Reflexiones Sobre Taichi Marcial
Actualmente todos los practicantes de Tai Chi Chuan aceptan que se trata de un
arte marcial ya que a lo largo de sus formas se realizan movimientos que simulan golpes
con el puño, palma, codo, hombro, rodilla, pie, palancas, luxaciones, proyecciones,
barridos, desplazamientos. Cada gesto de Tai Chi Chuan, se practique o no, nos guste o
no, es un gesto marcial, ya que se trata de un arte marcial y fue creado como tal.
Recordar que fue Yang Chen Fu, nieto del fundador Yang Lu Chan (estilo Yang) quien por
vez primera extendió este arte con fines exclusivamente terapeúticos.
Es en mi opinión obsoleto decir que tal estilo tiene ataques que otro carece si con
ello creemos que por hacer esas formas ya somos eficaces marcialmente. Pongamos un
ejemplo, un boxeador tiene una serie corta de golpes: jab, cross, uppercut, crochet,
swing y hook. Todo eso es el boxeo, no existe ni un golpe diferente a esos. No por ello un
experto pongamos en un arte marcial donde existan otros golpes, por ejemplo, Karate,
con manos, dedos, revés, etc. quiere decir que es superior al boxeador. Hablar de
marcial debe implicar su práctica, su puesta en acción real. Por lo tanto, no son los
estilos los que son más marciales, sino el entrenamiento y la eficacia derivada de tal
práctica. Aún así, en el Tai Chi que enseñamos, la parte marcial se puede elevar a
extremos de eficacia mediante el uso del Dim Mak, enseñanza del maestro Erle
Montaigue. Según tal afirmación nuestro estilo sería uno de los más eficaces… si somos
capaces de hacerlo funcionar.
Una de las razones por las que trabajo con ciertos maestros es porque pueden
demostrar en sus ámbitos de defensa personal o combate las teorías que postulan para
sus fundamentos. Esta evidencia marcial se encuentra ausente en algunos círculos donde
existe la creencia de que para ser eficaz en Tai Chi no hay que mojarse… lo cual
sencillamente es imposible.
La segunda reflexión se centra en el tiempo necesario para lograr
eficacia en el entrenamiento marcial del Tai Chi Chuan. Parece común escuchar que ser
eficaz en la parte marcial del Tai Chi Chuan requiere de muchos años de práctica, se dice
que 20, 25 o 30 años. En los estilos externos (mal llamados así puesto que todo arte
marcial presenta elementos internos y externos, basta entenderlo con profundidad), se
citan del orden de 5, 6 o 7 años para gestionar cierta eficacia. En deportes de contacto el
tiempo es menor: 2 ó 3 años. En sistemas de defensa personal, Wing Chun, se requiere a
veces de meses para tener cierto “oficio”. Es sin duda, algo muy relativo ya que
dependerá de muchos factores (talento, entrenamiento,…). Sin embargo nos cuesta creer
que un arte utilizado en la calle en China en 1900 requiera de 25 a 30 años de práctica
para ser eficaz. Si era un arte de la calle, y en ciertas épocas el Tai Chi lo fue, es porque
permitía obtener eficacia, salud y longevidad: eficacia en el ejercicio del combate, salud
como respuesta a su práctica y longevidad mantenida, puesto que las calles eran
peligrosas para todos; ricos, pobres, jóvenes o mayores, pesos pesados o pesos ligeros.
Por lo tanto se puede deducir que debía ser un arte pensado para ser eficaz en poco
tiempo, y no en 30 años. Por supuesto que la maestría, la perfección técnica puede durar
toda una vida, pero la eficacia marcial digamos “media” al parecer no requería de
semejante cantidad de tiempo. Afortunadamente hemos comprobado este hecho.
Creemos que es más importante el tipo de entrenamiento, el no entretener al alumno
con técnicas que no funcionan y sobre todo, practicar la parte marcial de manera real, no
como una gimnasia de aspecto marcial y además entrenar desde el primer día. La
utilización de protecciones se vuelve en ciertos casos indispensable y permite realizar las
técnicas con alto grado de realismo buscando la eficacia y reconociendo los errores. El
casco, sea para defensa personal o combate, puede ser una de las mejores herramientas
para el ego. Hasta que no se enfunda no salimos del “sueño marcial virtual”. A veces esa
afirmación sobre el largo tiempo para lo marcial puede esconder desconocimiento real de
cómo funcionan estas técnicas o estreñimiento técnico (no querer enseñar para que otros
no sepan). No creemos que este “estreñimiento técnico” sea productivo ni obedezca a
una reflexión fundada en base a la peligrosidad de las técnicas o al posible crecimiento
del ego del practicante. Cualquiera hoy en día tiene la disposición de realizar un acto
violento sin tener que aprender artes marciales para ello. Los violentos generalmente no
practican artes marciales. Por ello defendemos la posibilidad de aprender Tai Chi marcial
en un plazo moderado de tiempo y no nos asustamos de la eficacia de sus técnicas.
Tampoco de la edad de comienzo de práctica puesto que es posible empezar “tarde” y
progresar realmente.
“Una onza de lógica puede ser mucho mejor que una tonelada
de tradición que ha quedado obsoleta a lo largo del tiempo”
Ed Parker, leyenda del Kenpo Karate.