El Mito de Sísifo Resumen
El Mito de Sísifo Resumen
El Mito de Sísifo Resumen
Para Albert Camus lo absurdo implica que nada tendría sentido, y como respuesta
se daría el suicidio filosófico o salto, la esperanza que conlleva la noción
religiosa, y la rebelión que es asumir lo absurdo, como impulsores de un
entendimiento o aceptación del mundo y sus verdades, que no son
necesariamente las verdades. De pensadores como Chestov la razón en lo
absurdo no existe y no hay nada más que la razón.
El razonamiento absurdo
El suicidio como salida. La fatal confesión de que la vida nos ha superado, que no
la entendemos, que no la podemos explicar y que concluimos que no vale la pena
vivirla.
Es evidente, entonces, que cuando Camus habla de los muros absurdos, alude al
tiempo y la rutina, a los decorados con que construimos la realidad a la que nos
circunscribimos y limitamos. Cuando llegan la lasitud y el hartazgo, la frustración y
el sinsentido; el despertar del absurdo derrumba los decorados y nos deja frente a
la realidad desnuda: La vida no tiene sentido, la vida es absurda.
El suicidio filosófico
Es llamativo que Camus use la metáfora de “el salto” para identificar el momento
en que dos de los pensadores que cita, Chestov y Husserl, dan paso a algo eterno
e inexplicable con la razón humana, pero a la vez, en ese acto niegan el absurdo e
intentan explicarlo.
Según Chestov, donde la razón se queda corta, entra el concepto de Dios. Según
Camus, Chestov reemplaza la frase correcta: “Miren, he aquí el absurdo” y en su
lugar dice: “Miren, he aquí Dios”.
La libertad absurda