Adme de Alcohol

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 24

INDICE

RESUMEN ...........................................................................................................................................2
INTRODUCCIÓN ..................................................................................................................................3
DESCRIPCIÓN GENERAL ......................................................................................................................4
1. INTOXICACIÓN – ADME DE ALCOHOL.........................................................................................5
1.1. CONOCIMIENTOS GENERALES DEL ALCOHOL .....................................................................5
1.1.1. Etanol .........................................................................................................................5
1.1.2. Síntomas .....................................................................................................................6
1.1.3. Causas.........................................................................................................................7
1.1.4. ¿Qué cantidad de alcohol es excesiva? .......................................................................7
1.1.5. Factores de riesgo.......................................................................................................8
1.1.6. Complicaciones ...........................................................................................................8
1.1.7. Prevención ..................................................................................................................9
1.1.8. ALCOHOL COMO FACTOR DE RIESGO .......................................................................10
1.2. ABSORCIÓN DEL ALCOHOL ...............................................................................................12
1.2.1. Factores determinantes ............................................................................................13
1.2.2. La incidencia de la alimentación ...............................................................................13
1.3. DISTRIBUCIÓN DEL ALCOHOL ...........................................................................................14
1.4. METABOLIZACIÓN DEL ALCOHOL .....................................................................................15
1.4.1. Las enzimas del metabolismo de etanol ...................................................................17
1.4.2. Efectos agudos de metabolismo del etanol ..............................................................19
1.4.3. Efectos crónicos del metabolismo del etanol ...........................................................22
1.4.4. Trastornos metabólicos en el hígado ........................................................................22
1.5. ELIMINACIÓN DE ALCOHOL ..............................................................................................23
CONCLUSION ....................................................................................................................................24
RESUMEN

La intoxicación etílica es la primera toxicomanía en muchos países del mundo. Afecta a


todos los tramos de edad, en los dos sexos y en casi todos los grupos sociales. La mortalidad
asociada sólo a la intoxicación etílica aguda es excepcional, pero puede ser un importante
factor si coexiste con ingesta de otras drogas de abuso. Es responsable directo de más de la
mitad de los accidentes de tráfico. El diagnóstico es fácil por la anamnesis y la clínica y se
puede confirmar determinando el nivel de etanol en sangre. El tratamiento es de sostén,
intentando proteger al paciente de complicaciones secundarias.
El metanol o alcohol de quemar se utiliza como disolvente, encontrándose también como
adulterante de bebidas alcohólicas. La intoxicación vía oral es la más frecuente. Oxidado en
el hígado a través de la enzima alcohol deshidrogenasa, la toxicidad se debe a sus
metabolitos, formaldehído y ácido fórmico. La clínica consiste fundamentalmente en
cefalea, náuseas, vómitos, hipotensión y depresión del SNC. El nervio óptico es
especialmente sensible pudiendo producirse una ceguera total e irreversible.
El etilenglicol se utiliza como disolvente y anticongelante; la toxicidad se debe a la
acumulación de sus metabolitos. La clínica incluye síntomas comunes con la intoxicación
metílica. Puede ocurrir fallo renal por necrosis tubular y depósito de cristales de oxalato.
Palabras clave. Etanol. Metanol. Intoxicación. Fomepizol. Etilenglicol.

pág. 2
INTRODUCCIÓN

El consumo crónico de alcohol es la causa de 3,3 millones de muertes alrededor del mundo,
que corresponde al 5,9% del total anual, siendo 7,6% en varones y 4,0% en mujeres;
asimismo, es uno de los factores de riesgo con mayor morbilidad y mortalidad en
enfermedad general. Adicionalmente, se le atribuye el 5,1% de la carga global e invalidez.
Existe evidencia de la relación causal entre el consumo de alcohol y por lo menos 200
enfermedades como gastritis, pancreatitis, enfermedad cardiovascular, cirrosis hepática,
carcinoma hepatocelular, cáncer gástrico, entre otros; las patologías asociadas con el
consumo crónico de alcohol son determinadas por el volumen consumido, el patrón de
bebida y la calidad del alcohol ingerido. El metabolismo del alcohol es un proceso complejo
que implica absorción, distribución y eliminación; en el hígado se metaboliza más del 90%
del alcohol en el organismo, se convierte en acetaldehído mediante la acción de las enzimas
alcohol deshidrogenasa (ADH), citocromo P540-2E1 (CYP2E1) o catalasa; luego el
acetaldehído se convierte en acetato y agua por la enzima aldehído deshidrogenasa (ALDH).
Se ha demostrado in vitro que algunos polimorfismos en los genes que codifican las enzimas
ADH, CYP2E1 y ALDH estarían asociados con mayor actividad enzimática y con la
acumulación de metabolitos, como el acetaldehído, que presenta un efecto tóxico en el
organismo y produce daño en el tejido hepático.

pág. 3
DESCRIPCIÓN GENERAL

La intoxicación alcohólica es una consecuencia grave y, en ocasiones, mortal, de tomar


grandes cantidades de alcohol en un período corto de tiempo. Tomar demasiada cantidad
demasiado rápidamente puede afectar la respiración, la frecuencia cardíaca, la temperatura
corporal y el reflejo de náuseas y, potencialmente, causar un coma y la muerte.
La intoxicación alcohólica también puede producirse cuando adultos o niños toman
accidentalmente o intencionalmente productos del hogar que contienen alcohol.
Una persona con intoxicación alcohólica necesita atención médica inmediata. Si sospechas
que alguien tiene intoxicación alcohólica, llama inmediatamente a un servicio médico de
emergencia.

pág. 4
1. INTOXICACIÓN – ADME DE ALCOHOL

El alcohol que consumen los seres humanos es el etílico o etanol. Se trata de una sustancia
líquida, de color claro que se basa en la fermentación o destilación de diferentes sustancias.
Es volátil, inflamable y muy hidrosoluble.
El aporte nutritivo de un mililitro de alcohol es de 7,1 kilocalorías. Sin embargo, no hay
aporte de proteínas, vitaminas o minerales.
La palabra alcohol viene del vocablo árabe “alkul”, que significa “lo más fino” o “delicado
polvo”. Esta sustancia se ingiere por vía oral y su consumo produce diversas reacciones en
el cuerpo y en la mente. Los niveles de alcohol en el cuerpo se miden en términos de su
concentración en la sangre.

1.1. CONOCIMIENTOS GENERALES DEL ALCOHOL

1.1.1. Etanol

es un pequeño dos de alcohol de carbono que, debido a su pequeño tamaño y el grupo


hidroxilo alcohólico es soluble tanto en entornos acuosos y lípidos. Esto permite etanol para
pasar libremente a partir de fluidos corporales en las células. Puesto que la circulación
portal de la tripa pasa primero a través del hígado, el grueso de alcohol ingerido se
metaboliza en el hígado. El proceso de oxidación de etanol implica al menos tres vías
enzimáticas distintas. La vía más significativa, responsables del mayor metabolismo de
etanol, se la iniciada por el alcohol deshidrogenasa, ADH. La ADH es un NAD+ enzima que
requiere expresa en altas concentraciones en los hepatocitos. Las células animales
(principalmente los hepatocitos) contienen ADH citosólica que se oxida el etanol para
acetaldehído. El acetaldehído luego entra en la mitocondria donde se oxida a acetato por
uno de varios aldehídos deshidrogenasas (ALDH). Un ALDH citosólica existe, pero es
responsable de sólo una cantidad menor de oxidación acetaldehído.
La segunda vía importante para el metabolismo del etanol es el etanol microsomal oxidante
sistema (siglas en inglés: MEOS) que implica la CYP2E1 enzimático del citocromo P450 y
requiere NADPH en vez de NAD+ En cuanto a la ADH. La vía MEOS se induce en las personas
que crónicamente consumen alcohol.
La tercera vía implica una vía no-oxidativa catalizada por ácido graso de éster etílico (siglas
en inglés: FAEE) sintasa. Esto da como resultado última vía en la formación de etilo de ácido
graso ésteres y tiene lugar principalmente en el hígado y el páncreas, los cuales son
altamente susceptibles a los efectos tóxicos del alcohol.

pág. 5
Oxidación de etanol también puede ocurrir en los peroxisomas a través de la actividad de
la catalasa. Sin embargo, esta vía de la oxidación requiere la presencia de un peróxido de
hidrógeno (H2O2) sistema de generación y, como tal no desempeña ningún papel
importante en el metabolismo del alcohol bajo condiciones fisiológicas normales.
El alcohol es probablemente la droga más antigua que se conoce. Historia del alcohol:
 Una tablilla cuneiforme del 2200 a.C. recomienda la cerveza como tónico para las
mujeres en estado de lactancia. El código del rey babilónico Hamurabi amparaba a
los bebedores de cerveza y vino de palma, y hacía ejecutar a la tabernera que
rebajara la calidad de la bebida.
 Los griegos rendían culto a Dionisio y ofrecían bebidas alcohólicas a sus dioses y a
los soldados antes de que estos entraran en combate. También ellos las utilizaban
para facilitar sus relaciones: constituían el eje de los denominados symposia
(banquetes celebrados con fines recreativos en los que intercambiaban ideas
filosóficas, políticas, etc., mientras ingerían vino, cerveza e hidromiel).
 En la Biblia, el vino aparece en los episodios de Noé.
 Los romanos apreciaron enormemente el vino y contribuyeron a la difusión de la vid
por toda Europa, así como a afianzar la reglamentación de la viticultura.
 Parece ser que fueron los árabes quienes descubrieron la destilación y de cuya mano
se introdujo este proceso en el continente europeo.
 El consumo de bebidas alcohólicas se asoció durante la Edad Media con salud y
bienestar. De hecho, el alcohol adoptó ese nombre a finales del siglo XVI pues hasta
entonces se lo conocía con el elocuente apelativo de aqua vitae.
 Será a partir de la Revolución Industrial del siglo XIX cuando el consumo de esta
sustancia alcance niveles hasta entonces desconocidos y que se verán notablemente
incrementados desde la segunda mitad de esta centuria.

1.1.2. Síntomas

Los signos y síntomas de la intoxicación por alcohol incluyen:


 Confusión
 Vómitos
 Convulsiones
 Respiración lenta (menos de ocho respiraciones por minuto)
 Respiración irregular (intervalos de más de 10 segundos entre respiraciones)
 Piel azulada o pálida
 Temperatura corporal baja (hipotermia)
 Desmayos (pérdida del conocimiento) sin poder despertarse

pág. 6
1.1.3. Causas

El alcohol en forma de etanol (alcohol etílico) se encuentra en las bebidas alcohólicas, los
enjuagues bucales, los extractos para cocinar, en algunos medicamentos y en determinados
productos domésticos. La intoxicación por alcohol etílico suele producirse por consumir
demasiadas bebidas alcohólicas, sobre todo en períodos cortos.
Otras formas de alcohol —como el alcohol isopropílico (que se encuentra en el alcohol para
fricciones, en las lociones y en algunos productos de limpieza) y el metanol o el etilenglicol
(un ingrediente frecuente de los anticongelantes, las pinturas y los solventes)— pueden
causar otros tipos de intoxicación que requieren tratamiento de urgencia.

1.1.4. ¿Qué cantidad de alcohol es excesiva?

A diferencia de los alimentos, que pueden demorar horas en digerirse, el organismo


absorbe el alcohol con rapidez, mucho antes que la mayoría de los nutrientes. Y el
organismo demora mucho más tiempo en deshacerse del alcohol que has consumido. El
hígado procesa (metaboliza) la mayor parte del alcohol.
Mientras más bebes, en especial en períodos cortos, más riesgo tienes de intoxicarte por
alcohol.
Un trago de alcohol se define de la siguiente manera:
 12 onzas (355 mililitros) de cerveza regular (aproximadamente 5 por ciento de
alcohol).
 De 8 a 9 onzas (237 a 266 mililitros) de licor de malta (aproximadamente 7 por ciento
de alcohol).
 5 onzas (148 mililitros) de vino (aproximadamente 12 por ciento de alcohol).
 1,5 onzas (44 mililitros) de licor fuerte (aproximadamente 40 por ciento de
graduación alcohólica).
Las bebidas combinadas pueden contener más de una medida de alcohol y demoran más
en metabolizarse.

pág. 7
1.1.5. Factores de riesgo

Existen varios factores que pueden incrementar el riesgo de intoxicación por alcohol, entre
ellos, los siguientes:
 Tu peso y contextura
 Tu salud general
 Si has comido recientemente
 Si combinas alcohol con otras drogas
 El porcentaje de alcohol que contienen las bebidas que tomas
 El índice y la cantidad de alcohol que consumes
 El nivel de tolerancia

1.1.6. Complicaciones

La intoxicación alcohólica puede producir complicaciones graves, entre ellas, las siguientes:
 Ahogamiento. El alcohol puede producir vómitos. Dado que reduce tu reflejo de
náuseas, aumenta el riesgo de ahogarte con el vómito si estás desmayado.
 Interrupción de la respiración. Inhalar vómito accidentalmente a los pulmones
puede producir una interrupción peligrosa o mortal de la respiración (asfixia).
 Deshidratación grave. Vomitar puede causar deshidratación grave, lo que produce
presión arterial peligrosamente baja y frecuencia cardíaca acelerada.
 Convulsiones. El nivel de azúcar en sangre puede bajar tanto que se producen
convulsiones.
 Hipotermia. Tu temperatura corporal puede bajar tanto que produce un paro
cardíaco.
 Latidos del corazón irregulares. La intoxicación alcohólica puede hacer que el
corazón lata irregularmente o, incluso, que se detenga.
 Daño cerebral. El alcoholismo puede causar daño cerebral irreversible.
 Muerte. Cualquiera de los problemas anteriores puede causar la muerte.

pág. 8
1.1.7. Prevención

Para evitar la intoxicación por alcohol:


 Bebe alcohol con moderación, o no bebas. Si optas por beber alcohol, hazlo con
moderación. En los adultos sanos, beber alcohol con moderación significa beber
hasta una medida de alcohol al día en el caso de las mujeres de todas las edades y
hombres mayores de 65 años, y hasta dos medidas de alcohol al día en el caso de
los hombres de hasta 65 años. Cuando bebas, disfrútalo lentamente.
 No bebas con el estómago vacío. Tener alimentos en el estómago podría enlentecer,
en cierto modo, la absorción de alcohol, pero no evitará la intoxicación si, por
ejemplo, te emborrachas.
 Comunícate con tus hijos adolescentes. Habla con tus hijos adolescentes sobre los
peligros del alcohol, incluida la embriaguez. La evidencia sugiere que los niños que
son alertados acerca del alcohol por parte de sus padres y que informan que
mantienen relaciones cercanas con sus padres tienen menos probabilidades de
empezar a beber.
 Guarda los productos de manera segura. Si tienes niños, guarda los productos que
contienen alcohol, incluidos los cosméticos, los enjuagues bucales y los
medicamentos, fuera de su alcance. Usa armarios en el baño y la cocina a prueba de
niños, a fin de evitar que obtengan acceso a los productos de limpieza. Mantén los
productos tóxicos en el garaje o en un área de almacenamiento seguro, fuera del
alcance de los niños. Ten en cuenta la posibilidad de mantener las bebidas
alcohólicas bajo llave.
 Obtén atención de seguimiento. Si tú o tu hijo adolescente han recibido tratamiento
por intoxicación por alcohol, asegúrate de preguntar acerca de la atención de
seguimiento. Reunirse con un profesional de la salud, en particular, con un
profesional con experiencia en la dependencia de sustancias químicas, puede
ayudar a prevenir futuros episodios de embriaguez.

pág. 9
1.1.8. ALCOHOL COMO FACTOR DE RIESGO

El consumo crónico de alcohol es el factor de riesgo del 20% al 50% de los casos de cirrosis
hepática a nivel mundial; en el año 2010, la cirrosis hepática atribuible al alcohol fue
responsable del 47,9% de las muertes por esta hepatopatía. El 80% al 90% de los
consumidores crónicos de alcohol desarrollan hígado graso y están en riesgo de presentar
complicaciones como este atohepatitis, fibrosis, hepatitis alcohólica, cirrosis alcohólica,
cirrosis caracterizada por fibrosis y distorsión de la arquitectura normal del hígado, y
hepatocarcinoma.

Se ha establecido, en estudios de cohorte y estudios de casos y controles, que el consumo


de >30 gramos/día (g/d) (teniendo en cuenta que la OMS señala un valor aproximado de 10
gramos de etanol por trago de bebida destilada, vino o cerveza) de etanol incrementa 11
veces el riesgo de cirrosis (OR: 10,9, IC 95%: 3,6-33,5) y el consumo de 60 g/d de etanol por
un periodo de 5 años incrementa 7 veces el riesgo de carcinoma hepatocelular (CHC) (OR:
7,0, IC 95%: 4,5-11,1).

En modelos animales se ha demostrado que el consumo crónico de alcohol afecta el


transporte de vitaminas en el intestino delgado; esto se comprobó en ratas Sprague Dawley,
que se alimentaron por 6 a 8 semanas con caseína, vitaminas, minerales, maltosa y altas
concentraciones de tiamina y alcohol. El alcohol disminuyó el transporte de tiamina y la
actividad de la bomba Na-K. Asimismo, tras un seguimiento de 6 años se observó a primates
babuinos (Papio hamadryas) que ingirieron alcohol y desarrollaron el espectro de
enfermedades hepáticas como esteatosis, fibrosis hepática y cirrosis; mientras que los que
no consumieron alcohol no desarrollaron ninguna hepatopatía, lo cual demostró que el
alcohol aceleraba el proceso de fibrosis, llevando al desarrollo de cirrosis.

pág. 10
Igualmente, en humanos se han realizado estudios para determinar el riesgo de desarrollar
cirrosis por el consumo de alcohol y se ha concluido que el 50% de la variación fenotípica,
es decir el desarrollo de enfermedad hepática, puede ser atribuida al factor genético; se ha
observado que gemelos monocigóticos progresan a cirrosis más fácilmente por el consumo
de alcohol, comparado con gemelos dicigóticos.

Adicionalmente, se ha demostrado interacción entre el consumo de alcohol y la infección


por virus de hepatitis B (VHB) y C (VHC). Durante un seguimiento de 5 años, el riesgo de
desarrollar CHC en consumidores de alcohol y con infección viral se duplicó respecto de
consumidores de alcohol (60g/d) sin infección por VHB o VHC. También se ha demostrado
que pacientes con cirrosis (diagnóstico realizado por histología, laboratorio e imagen) y que
consumen alcohol presentan un riesgo 24 veces mayor (OR: 23,8, IC 95%: 7,3-7,9) de
desarrollar CHC comparado con pacientes sin enfermedad hepática. Adicionalmente, se
analizó el efecto sinérgico del alcohol, la obesidad y el tabaquismo y se observó un riesgo
de 7,4 veces (OR: 7,4, IC 95%: 2,1-14,6) de desarrollar CHC comparado con los casos que
solo presentaban un factor de riesgo.

pág. 11
1.2. ABSORCIÓN DEL ALCOHOL

La vía de administración del alcohol es oral, teniendo en cuenta este hecho su absorción se
produce través del sistema digestivo, pero no todas las partes que forman el sistema
digestivo absorben la misma cantidad de alcohol, sino que mayoritariamente su absorción
se produce en el duodeno (primera porción del intestino delgado) y en la parte proximal del
yeyuno, de esta forma el intestino delgado absorbe casi el 80% del alcohol que ingerimos.
El 20% restante se ha absorbido previamente en el estómago.
Cuando se consume una bebida alcohólica, ésta pasa a lo largo del esófago, atraviesa el
estómago y entra al intestino delgado. Aunque una pequeña cantidad de alcohol pasa al
torrente sanguíneo a través de la mucosa del estómago, la mayor parte del alcohol pasa a
la circulación sanguínea a través de las paredes del intestino delgado. El alcohol, debido a
su bajo peso molecular (46), no requiere de un proceso de digestión y es absorbido
directamente en su estado original a través de la pared del intestino delgado y de la mucosa
estomacal.
La absorción a la sangre es rápida, entrando en el riego sanguíneo en tan solo 5 minutos y
alcanzando las máximas concentraciones en sangre en un tiempo estimado de 30 a 90
minutos.
En relación con la velocidad de absorción del etanol (alcohol), depende de muchos factores
entre ellos destacamos:
 Haber ingerido el alcohol con el estómago vacío, hace que su absorción sea más
rápida, ya que no hay alimentos que interfieran con su absorción.
 La concentración de alcohol de la bebida también influye, de forma que a mayor
concentración se produce una absorción más rápida, pero cuando la concentración
supera el 30% o 40%, la velocidad de absorción pasa a ser más lenta puesto que se
inhibe la motilidad gástrica, de forma que no se produce el vaciamiento gástrico y
ya hemos comentado que es en el intestino delgado donde se produce
mayoritariamente la absorción del alcohol.
 La presencia de gas en la bebida hace que su velocidad de absorción sea mayor.

La velocidad con la que se produce la absorción del alcohol depende en gran medida de su
concentración en una bebida. Si la concentración de alcohol en la bebida está entre el 20%
y el 30% es más rápida. A su vez, resulta más lenta cuando esta concentración es menor o
mayor a ese porcentaje.
Una bebida como el sherry o algunos tipos de vino, que tienen una concentración de alcohol
del 20%, aumentan rápido los niveles de esta sustancia en la sangre. Es más veloz que la
cerveza, por ejemplo. Esta tiene una concentración de entre 3 y 8%.

pág. 12
Sin embargo, la absorción del alcohol en bebidas como el whisky, que tiene una
concentración de más del 40%, es más lenta. Eso se debe a que las altas concentraciones
retrasan el vaciamiento del estómago y hacen que se inhiba la absorción del alcohol.

1.2.1. Factores determinantes

Hay algunos factores que afectan el tiempo el grado de absorción del alcohol. Estos son:
 Hay factores genéticos que inciden en la capacidad del organismo para metabolizar
el etanol. Esto depende de la forma como se expresa la enzima alcohol (ADH).
 Entre más tiempo permanece el alcohol en el estómago, más lenta es la absorción.
 El nivel de concentración en la bebida alcohólica.
 Nivel de circulación sanguínea.
En síntesis, la absorción del alcohol comienza en la boca, el esófago y el estómago. Sin
embargo, allí solo se absorbe entre el 20 y el 25% de esta sustancia.
En cambio, en el intestino delgado se produce la máxima absorción. Entre el 75 y el 80%
pasa desde allí a la sangre.

1.2.2. La incidencia de la alimentación

El otro factor que determina la velocidad en la absorción del alcohol es la comida. Algunos
alimentos, en especial los hidratos de carbono, hacen que la absorción sea más lenta. Si el
estómago está lleno, la concentración de alcohol en la sangre puede disminuir hasta en un
25%.
Cuando se ingiere alcohol, este se distribuye en el agua corporal. Esto hace que la mayoría
de los tejidos en el organismo presenten la misma concentración de alcohol que hay en la
sangre.
En otras palabras, los tejidos de órganos como el cerebro, el corazón, los músculos,
etcétera. También reciben la sustancia alcohólica. La única excepción a esto es el hígado.
A las mujeres les afecta más
Por último, esta concentración de alcohol en la sangre y los tejidos es mayor en la mujer.
Esto se debe a que las mujeres tienen más grasa subcutánea.
Además, esta no retiene el alcohol y por eso pasa con más facilidad a la sangre y los tejidos.
Asimismo, las mujeres tienen un volumen sanguíneo más bajo que el de los hombres.

pág. 13
1.3. DISTRIBUCIÓN DEL ALCOHOL

El alcohol, una vez absorbido (la mayor parte por las paredes del intestino delgado) viaja a
través de la sangre por todo el organismo, difundiéndose fácilmente hacia las células de los
distintos órganos y tejidos, donde el alcohol es absorbido en proporción a su contenido de
agua.
También la cantidad de alcohol que pasa a las células y, por ende, su efecto en el organismo
depende de su concentración en la sangre o alcoholemia (gramos de alcohol puro por litro
de sangre circulante).
El alcohol se distribuye con facilidad hacia el Sistema Nervioso Central, donde ejerce un
efecto depresor de sus funciones, lo que llamamos Intoxicación Alcohólica (borrachera).
Una vez ya se ha producido la absorción del alcohol, éste se distribuye en el organismo, y
puesto que es una molécula muy hidrosoluble, las concentraciones en los órganos y tejidos
bien irrigados (como pulmón, hígado o cerebro), enseguida acaban siendo similares a las de
la sangre. Con lo cual, podemos decir que el alcohol tiene una buena distribución debido a
su hidrosolubilidad.

pág. 14
1.4. METABOLIZACIÓN DEL ALCOHOL

La metabolización es un proceso de transformación, mediante cambios bioquímicos, de las


sustancias ingeridas en otros compuestos asimilables por nuestro organismo.

Uno de estos procesos de transformación es la oxidación. A través de la oxidación, alrededor


del 90% del alcohol absorbido es metabolizado en el hígado, gracias a la acción de enzimas
(ADH) y co-factores (NAD, NADH), que lo transforman en compuestos asimilables como
agua (H2O) o anhídrido carbónico (CO2) entre otros.

La mayor parte del alcohol (90-98%) se elimina por degradación metabólica en el hígado
(aunque también existe un metabolismo extrahepático del alcohol, en órganos como el
cerebro, aunque de menor relevancia), mediante un mecanismo de oxidación hepática, que
consiste en transformar el alcohol en acetaldehído mediante la acción de tres enzimas
diferentes:
 Deshidrogenasa en personas no alcohólicas es la principal responsable del
metabolismo oxidativo del alcohol.
 Sistema oxidativo microsomal del etanol en principio no tiene una gran relevancia,
sólo tiene un efecto importante en personas que ingieren grandes cantidades de
alcohol o que tienen un déficit en el sistema del alcohol deshidrogenasa.
 Sistema catalasa-peroxidasa prácticamente no tiene importancia, ya que su
contribución al metabolismo del alcohol es mínima.

A continuación, el mecanismo de oxidación hepática, metaboliza el acetaldehído a ácido


acético gracias a la aldehído-deshidrogenasa.

Y por último, para acabar con el metabolismo oxidativo, el acetato que se ha formado se
transforma en acetil-coA gracias a la reacción del acetato con la coenzima A, y finalmente
dicho acetil-coA se utiliza para la síntesis de ácidos grasos o colesterol o por el contrario es
oxidado a CO2 y agua.

Además del metabolismo oxidativo del alcohol que acabamos de comentar y que es la vía
de eliminación mayoritaria del alcohol, también existe un metabolismo no oxidativo del
alcohol basado en la formación de ésteres etílicos a partir del etanol gracias a la enzima etil-
ester-sintetasa.

Por último, comentar que hay una pequeña parte del alcohol (entre el 2 y el 10%) que es
eliminado directamente sin metabolizar por la orina, el sudor y la respiración.

pág. 15
El etanol se absorbe por el tracto intestinal para ser transportado al hígado, donde se
metaboliza el 90% del alcohol; el 2% al 10% restante se metaboliza en los pulmones y
riñones.

En el metabolismo del alcohol en el hígado intervienen 3 sistemas. El más importante es la


ADH; esta enzima está en el citosol de los hepatocitos y cataliza la formación de
acetaldehído por transferencia del hidrógeno del grupo OH al cofactor nicotinamida
adenina dinucleótido (NAD) para convertirlo en NADH y luego, por transhidrogenación, en
NADPH. Durante la oxidación del acetaldehído a acetato por la enzima aldehído
deshidrogenasa (ALDH) se produce un exceso de NADH que incrementa la relación
NADH/NAD y tiene efectos en el metabolismo de los carbohidratos y lípidos; el NADH
interfiere con el transporte de ácidos grasos libres (AGL) y facilita la formación de ácidos
grasos esterificados, ya que los ácidos grasos estarían reaccionando con el alcohol, el cual
extrae 1 hidrógeno de 1 ácido graso poliinsaturado, lo que lleva a la degradación. El exceso
de NADH limitaría la disponibilidad del NAD necesario para el transporte de los AGL (9). El
acetato se incorpora en el ciclo de Krebs como acetil coenzima A (acetil CoA) y en caso de
no transferirse al ciclo, su acumulación puede resultar en la producción de cuerpos
cetónicos, ocasionando cetonemia y cetonuria.

El segundo sistema que interviene es el microsomal de oxidación del etanol (MEOS), un


sistema inducible en el que participa el citocromo P450 (CYP450). Específicamente, el
CYP2E1 cumple una función principal metabólica en los microsomas del hígado; la
transcripción de este gen se activa en condiciones de alto consumo de alcohol, se

pág. 16
metaboliza a acetaldehído utilizando el NAD fosforilado o el NAD reducido (NADPH) y
oxígeno (O2). Este sistema contribuye con el 3% al 8% del metabolismo del alcohol.

El tercer sistema funciona en los peroxisomas de la célula hepática mediante la actividad de


la catalasa, que metaboliza el alcohol a acetaldehído a través de la peroxidación, en
presencia de peróxido de hidrogeno (H2O2), que luego se transforma en agua. Este sistema
metaboliza menos del 2% del alcohol ingerido.

1.4.1. Las enzimas del metabolismo de etanol

1.4.1.1. Alcohol Deshidrogenasas

En los seres humanos existen múltiples isoformas de la ADH codificadas por siete diferentes
genes de la ADH. Los siete Genes de la ADH residen en el cromosoma 4q21–p24. Todos los
genes humanos de ADH son miembros de una gran familia de enzimas conocida como la de
cadena media deshidrogenasa / reductasa (siglas en inglés: MDR) superfamilia. Dentro del
genoma humano hay en al menos 25 miembros de la familia de genes MDR. Funcional ADH
existe ya sea como un homo o un heterodímero y las enzimas activas se dividen en cinco
clases distintas denotados I–V. Cabe señalar que los humanos evolucionaron para expresar
múltiples genes isoformas de ADH y, alcoholes no para el metabolismo de etanol, pero para
metabolizar natural que se encuentra en los alimentos, así como los producidos por las
bacterias intestinales. Como un ejemplo, una forma de ADH (codificada por el gen gen
ADH7) es responsable del metabolismo de etanol no sólo sino también retinol a
retinaldehído que es la forma de vitamina A necesaria para la visión.
Las formas hepáticas de ADH se derivan de las subunidades de proteínas codificadas por los
genes de clase I: ADH1A, ADH1B, y ADH1C. La α, β, y γ subunidades codificadas por estos
tres genes, respectivamente, pueden formar homo y heterodímeros y se ha indicado
anteriormente. Estas isoformas de la ADH dar cuenta de la gran mayoría de etanol oxidación
en el hígado. A medida que la concentración de etanol en el hígado aumenta la π-ADH
isoforma, codificado por el gen ADH4, contribuye significativamente a la oxidación global
etanol hepática.
Como consecuencia de polimorfismos de nucleótido único (siglas en Inglés: SNP) en varios
de los genes de la ADH hay isoformas derivados del mismo gen que exhiben diferentes
características cinéticas. Como se muestra en la Tabla anterior hay tres polimorfismos
conocidos en el gen ADH1B y dos en el gen de la Alcohol Deshidrogenasa 1C. El ADH1B*1
alelo, que codifica la β1 subunidad, se conoce como la referencia ADH1 alelo. Esta alelo
particular codifica Arg(R) en las posiciones 48 y 370. El ADH1B*2 alelo codifica la β2
subunidad que tiene His(H) en la posición 48. El ADH1B*3 alelo codifica la β3 subunidad que

pág. 17
tiene Cys(C) en la posición 370. Tanto el ADH1B*2 y ADH1B*3 subunidades codificadas
albergar las sustituciones de aminoácidos que afectan al la unión del NAD+ cofactor. La
consecuencia de estos alelos es que la enzima ADH tiene un índice de rotación mucho mayor
debido a que el NAD es más fácilmente liberado en la terminación de la reacción. El
ADH1B*2 alelo es común en personas de ascendencia asiática, mientras que el ADH1B*3
alelo es común en personas de ascendencia africana. También hay tres alelos conocidos en
el gen ADH1C. El ADH1C*1 alelo codifica la γ1 subunidad que contiene Arg(R) en la posición
272 y Ile(I) en la posición 350. El ADH1C*2 alelo codifica los γ2 subunidad que tiene Gln(Q)
en la posición 272 y Val(V) en la posición 350. En casi todos los casos los dímeros formado
de las subunidades codificadas por estos dos alelos son ADH1C homodimérica (por ejemplo
γ1γ1). Un alelo ADH1C tercera codifica una Thr(T) en la posición 352 (identificado como el
ADH1C*Thr352 alelo) que ha sido se encuentran en poblaciones de nativos americanos,
pero la proteína aún no se ha caracterizado por completo.

ALCOHOL DESHIDROGENASAS DE MAMÍFEROS

Gene Protein KM(mM) para el Tejido


Gene Nombre
Clase Name Etanol Primario
ADH1A I α 4.0 hígado

ADH1B*1 I β1 0.05 hígado, pulmón

ADH1B*2 I β2 0.9

ADH1B*3 I β3 40

ADH1C*1 I γ1 1.0 hígado, estómago

ADH1C*2 I γ2 0.6

ADH4 II π 30 hígado, córnea

ADH5
ampliamente
(también identificado III χ >1,000
expresado
como ADHX)

ADH6 V ADH6 desconocida estómago

ADH7 IV μ or σ 30 hígado, estómago

pág. 18
1.4.2. Efectos agudos de metabolismo del etanol

Los principales efectos agudos del consumo de etanol son el resultado de la alteración de
NADH / NAD+ relación que es la consecuencia tanto de la ADH y ALDH reacción catalizada.
Los efectos agudos como resultado del metabolismo de etanol son también debido al hecho
de que el acetaldehído forma aductos con proteínas, nucleico ácidos y otros compuestos
resultantes de la actividad alterada de los compuestos afectadas. adicional agudas
consecuencias del metabolismo del etanol incluyen el déficit de oxígeno (hipoxia es decir,)
en el hígado y la formación de altamente reactivas que contienen oxígeno (es decir,
moléculas, especies reactivas de oxígeno; siglas en Inglés: ROS) que pueden dañar otros
componentes celulares.
Como se ha indicado anteriormente, tanto la ADH y ALDH reacciones de oxidación
catalizadas conducir a la reducción concomitante de NAD+ a NADH. La mayoría de los
efectos metabólicos aberrantes de etanol las intoxicaciones se derivan de las acciones de la
ADH y ALDH y la resultante celular desequilibrio en la NADH / NAD+ relación. El NADH
producido en el citosol por la ADH se debe reducir a NAD+ ya sea a través de la lanzadera
malato-aspartato o el glicerol-fosfato lanzadera. Así, la capacidad de un individuo para
metabolizar el etanol es dependiente de la capacidad de los hepatocitos para llevar a cabo
cualquiera de estas dos lanzaderas, que a su vez se ve afectada por la tasa del ciclo de Krebs
en las mitocondrias. La tasa de flujo a través del ciclo de Krebs es en sí mismo siendo
afectada negativamente por el NADH producido por las reacciones ADH y ALDH. La
reducción de NAD+ dificulta el flujo de la glucosa a través de glucólisis en el gliceraldehído-
3-fosfato deshidrogenasa de reacción, lo que limita la producción de energía. Además, hay
un aumento en la tasa de producción hepática de lactato debido al efecto del incremento
de NADH en la dirección de hepática del lactato deshidrogenasa (LDH) de reacción. Esta
inversión de la reacción de la LDH en los hepatocitos desvía piruvato de gluconeogénesis
que conduce a una reducción en la capacidad del hígado para entregar la glucosa a la sangre.
Además de los efectos en las reacciones bioquímicas que acabamos de mencionar, el NADH
/ NAD+ relación, y como consecuencia el estado rojo-buey de la célula, también se alteró
dramáticamente como resultado del metabolismo de etanol. Las alteraciones en celular
rojo-ox estado se sabe que afectan el nivel de expresión de ciertos genes. Para apreciar este
hecho, uno puede mirar a la investigación realizada en las dietas de restricción calórica. La
investigación sobre la ingesta de alimentos reducida (restricción calórica) ha demostrado
que el NAD+ niveles puede actuar como un sensor que regula la actividad de ciertos genes.
La activación de estos genes, a su vez, se ha demostrado estar relacionada con periodos de
vida extendidos en una amplia variedad de organismos. Además, el NAD+-redes de genes
regulados han demostrado reducir la incidencia de enfermedades relacionadas con la edad,
tales como la diabetes, el cáncer, inmunodeficiencias y trastornos cardiovasculares. Por lo
tanto, alteraciones en la NADH / NAD+ relación (en particular, la reducción de NAD+) como

pág. 19
resultado del metabolismo de etanol puede dar lugar a que se altera negativamente la
expresión de las redes de genes promover que las células sanas.
En última instancia, el NADH producido por la ADH y ALDH se oxida en la mitocondria través
de la vía de la fosforilación oxidativa que requiere una entrada de oxígeno. Para tener
suficiente oxígeno disponible para aceptar los electrones desde el NADH, hepatocitos debe
tomar más oxígeno de lo normal de la sangre. De hecho, estudios han demostrado que el
metabolismo del etanol resulta en la absorción de oxígeno por aumento de los hepatocitos.
Los hepatocitos que residen cerca de la arteria que suministra sangre rica en oxígeno al
hígado tienden a ocupan más de su cuota normal de oxígeno. Esto se traduce en
limitaciones a la cantidad de oxígeno que queda en la sangre para suministrar
adecuadamente otras regiones del hígado. La evidencia experimental muestra que el
consumo de alcohol en efecto, dar lugar a la hipoxia significativa en los hepatocitos
perivenosos (hepatocitos que se encuentran cerca de la vena por donde sale sangre limpia
el hígado). Los hepatocitos perivenosos también son los primeros que muestran evidencias
de daños por el consumo crónico de alcohol, indicando las posibles consecuencias nocivas
de la hipoxia inducida por el metabolismo del etanol.
Además de incrementar directamente el consumo de oxígeno por los hepatocitos, el
metabolismo del etanol aumenta indirectamente De oxígeno de células de Kupffer usar. Las
células de Kupffer son células inmunes especializadas que residen en el hígado. Cuando las
células de Kupffer se activan en respuesta al consumo de etanol, liberan varios moléculas
estimulantes como la prostaglandina E2 (PGE2). La liberación de PGE2 resultados aumento
de la actividad metabólica de los hepatocitos que conducen al consumo de oxígeno incluso
más. Como resultado, inducida por el alcohol activación de las células de Kupffer también
contribuye a la aparición de la hipoxia.
El acetaldehído producido por la reacción de ADH, así como la producida a través de ROS
CYP2E1 oxidación, tanto puede interactuar con proteínas y otras biomoléculas en la célula
para formar tanto estable y aductos inestables. El acetaldehído preferiblemente interactúa
con ciertos aminoácidos en las proteínas pero no todos aminoácidos son igualmente
susceptibles a la formación de aductos con acetaldehído. Lisina, cisteína, y los aminoácidos
aromáticos son comúnmente alterado por la interacción de acetaldehído. Además, ciertas
proteínas son particularmente susceptible a la formación de aductos con acetaldehído.
Estos incluyen las proteínas que se encuentran en las membranas de células sanguíneas
rojas, las lipoproteínas, hemoglobina, albúmina, colágeno, tubulina, y varios citocromos
incluyendo CYP2E1. Formación de aductos con hemoglobina puede resultar en la reducción
de oxígeno capacidad de unión. La albúmina es una proteína principal de la sangre y entre
sus funciones es transporte de los ácidos grasos del tejido adiposo. Por lo tanto, la función
alterada albúmina podría perjudicar el acceso a la energía de tejido oxidación de ácidos
grasos. Tubulina está implicado en la formación de microtúbulos que son necesarias para el

pág. 20
transporte intracelular y la división celular. El colágeno es la proteína más abundante en el
cuerpo formando una porción significativa del tejido conectivo.
El acetaldehído-lisina aductos pueden contribuir indirectamente a daños en el hígado,
porque el cuerpo las reconoce como extrañas resultando en una respuesta inmune y la
producción de anticuerpos. La presencia de estos anticuerpos se ha demostrado tras
consumo crónico de alcohol. La producción de estos anticuerpos conduce a la del sistema
inmune mediada por destrucción de los hepatocitos que contienen estos aductos. Este
proceso se conoce como inmune mediada por anticuerpos o hepatotoxicidad dependiente-
citotoxicidad mediada por células (siglas en Inglés: ADCC). Aductos formados por la
interacción de acetaldehído con eritrocitos Las membranas pueden estar asociados con
etanol inducida macrocitosis, una condición caracterizada por inusualmente grande
número de eritrocitos agrandados en la sangre. De hecho, macrocitosis es un marcador de
abuso de alcohol. El acetaldehído también puede formar aductos con aminas biogénicas
tales como los neurotransmisores serotonina y dopamina. Estos aductos pueden tener
efectos farmacológicos sobre el sistema nervioso.

Como se discutió anteriormente, etanol metabolismo por oxidación CYP2E1 y NADH por el
transporte de electrones de la cadena generan ROS que conducen a la peroxidación lipídica.
El etanol inducida por la peroxidación de lípidos está asociada con la formación de
malondialdehído (MDA) y 4-hidroxi-2-nonenal (HNE), ambos de los cuales pueden formar
aductos con proteínas. El acetaldehído y MDA juntos pueden reaccionar con las proteínas
para generar una estable MDA-acetaldehído-proteína aducto (MAA). Al igual que los
aductos de ácido amino-acetaldehye, peroxylipid-aductos de acetaldehído puede inducir
inmunidad respuestas resultantes en la formación de anticuerpos. Es importante destacar
que, aductos MAA puede inducir procesos inflamatorios en estrelladas y Las células
endoteliales del hígado. Por lo tanto, existe una estrecha relación entre la producción de
MDA y HNE, y el formación de aductos MAA y el desarrollo posterior de la enfermedad
hepática.
El metabolismo del etanol a través de los resultados de la vía de CYP2E1 en un aumento de
la producción de ROS, incluyendo dismutasa, peróxido de hidrógeno (H2O2), y los radicales
hidroxilo. La producción de ROS se asocia con el desarrollo del cáncer, aterosclerosis, la
diabetes, la inflamación, el envejecimiento y otros procesos nocivos. La célula regula los
niveles de ROS a través de numerosos sistemas de defensa que implican una variedad de
compuestos antioxidantes diferentes (por ejemplo, el glutatión, GSH). bajo condiciones
normales, un equilibrio entre la producción de ROS y la eliminación antioxidante que existe
en las células, pero este equilibrio puede ser alterado. Durante la oxidación del etanol la
producción de ROS se incrementa de manera espectacular debido a la inducción de CYP2E1
y por la activación de Kupffer Las células en el hígado. El consumo de alcohol, tanto aguda
como crónica, puede aumentar ROS la producción y dar lugar a estrés oxidativo.

pág. 21
1.4.3. Efectos crónicos del metabolismo del etanol

Además de los efectos negativos de la alteración NADH / NAD+ relación del gluconeogénesis
hepática, la oxidación de ácidos grasos es también se reduce ya que este proceso requiere
NAD+ como cofactor. Concomitante con la reducción de oxidación de ácidos grasos se
mejora la síntesis de ácidos grasos y el aumento de la producción de triglicéridos en el
hígado. En la mitocondria, la producción de acetato de acetaldehído conduce a mayores
niveles de acetil-CoA. Dado que la mayor generación de NADH también reduce la actividad
del ciclo de Krebs, el acetil-CoA se desvía a la síntesis de ácidos grasos. la reducción de la
citosólica de NAD+ conduce a la reducción de la actividad de la glicerol-3-fosfato
deshidrogenasa (en el glicerol 3-fosfato a DHAP dirección) que resulta en aumento de los
niveles de glicerol-3-fosfato, que es la columna vertebral de la síntesis de la triacilglicéridos.
Ambos de estos dos eventos llevan a la grasa deposición ácida en el hígado que conduce al
síndrome de hígado graso y los niveles excesivos de lípidos en la sangre, conocido como la
hiperlipidemia.

1.4.4. Trastornos metabólicos en el hígado

metabolismo hepático de de etanol (alcohol) da como resultado la generación de grandes


cantidades de citosólica y NADH mitocondrial que conduce a alteraciones en el normal, los
procesos metabólicos en el hígado. Etanol resultados metabólicos agudos y crónicos de la
alteración de la gluconeogénesis que conduce a la hipoglucemia potencialmente grave. Los
elevados niveles de NADH citosólicas conducen a desviación de piruvato en lactato, así
como una incapacidad para convertir el lactato a piruvato que representa la interrupción
importante en la gluconeogénesis hepática normal. El aumento de la producción de lactato
a su vez resulta en excesiva lactato de entrega a la sangre y una acidemia láctica. Además,
el metabolismo del etanol crónico conduce a alteración de la oxidación de ácidos grasos y
un desvío de carbonos en grasas que se traduce en un aumento de los triglicéridos y de la
producción de VLDL causando infiltración grasa y, finalmente, daños en el hígado y el
fracaso. Contribuir a la progresión a daño en el hígado y el fracaso es el aumento de la
producción de reactivos especies de oxígeno (siglas en Inglés: ROS) dentro de la
mitocondria, como consecuencia del aumento niveles de NADH mitocondrial. El ROS causa
estrés mitocondrial que conduce a la la activación de la vía de la apoptosis mitocondrial y la
muerte de hepatocitos.

pág. 22
1.5. ELIMINACIÓN DE ALCOHOL

El 10% del alcohol restante es eliminación directamente, sin transformación, a través del
aire espirado y la orina.
Cantidades pequeñas son excretadas también por la transpiración (piel), las lágrimas y la
leche materna.
El hecho de que le alcohol sea eliminado de esta manera ha permitido desarrollar métodos
que posibilitan su detección en el aire aspirado, la orina y las lágrimas, y así poder estimar
de manera bastante aproximada el nivel de alcoholemia.
La ingestión de metanol debe considerarse siempre como una intoxicación muy grave, en
la que es preferible una excesiva toma de precauciones o actuaciones a la posterior
lamentación por una inhibición terapéutica. Por tanto, a la hora de tratarla10 se aconseja
iniciar la administración de su antídoto (etanol) cuando sospechemos una intoxicación de
metanol importante (> 30 ml en adultos y > 0,4ml/kg en niños) y/o ante al presencia de una
acidosis metabólica y/o clínica, aunque no conozcamos la dosis ingerida ni los niveles de
metanol.

pág. 23
CONCLUSION

El etanol es un importante tóxico celular que genera diferentes tipos de sustancias, como
el metabolito acetaldehído y ROS, que causan daños directos en la célula, y activación de
células estrelladas del hígado con producción anormal de colágeno y cambio en la
estructura del hígado, ocasionando una fibrosis que puede evolucionar en cirrosis. Existe
evidencia que la combinación de los polimorfismos en los genes que codifican para las
enzimas que metabolizan el alcohol, como ADH1B*2, ADH1C*1, ALDH2*2 y CYP2E1*5,
incrementan la susceptibilidad de desarrollar la enfermedad hepática por la acumulación
de acetaldehído en el organismo
El presente reporte indica la necesidad de continuar desarrollando estudios sobre la
toxicidad del alcohol en el organismo, teniendo en cuenta el genotipo presente para las
enzimas que metabolicen el etanol y que a futuro contribuyan con el pronóstico de la
capacidad de un individuo para el eliminar el contenido del etanol en el organismo.

pág. 24

También podría gustarte