DECÍDETE
DECÍDETE
DECÍDETE
Ideas fundamentales
• Es necesario contar con un proceso de toma de decisiones para evitar los sesgos
que aquejan a la mente.
• Para tomar buenas decisiones, hay que variar el foco de atención para no ignorar el
panorama más amplio.
• Los cuatro “villanos” que obstaculizan la toma de decisiones son la “visión
estrecha”, el “sesgo de confirmación”, la “emoción a corto plazo” y la “confianza
desmedida”, que se combaten con el “proceso WRAP”.
• Las posibilidades son más abundantes de lo que la visión estrecha muestra, por lo
que hay que incrementar las alternativas.
• La mente favorece la información que apoya nuestros conocimientos; para variar el
enfoque, busca la contradicción y el desacuerdo.
• La crítica es necesaria y noble, y debe aceptarse con humildad para combatir el
sesgo de confirmación.
• Las emociones pueden ser útiles, pero deben ser reconocidas y encauzadas.
• Es sensato tomar distancia emocional para decidir con claridad.
• Hay que prepararse para todos los posibles resultados de una decisión.
• El proceso WRAP se concibió para ayudar en la toma de decisiones sin sesgos
mentales y sin anular las emociones.
Resumen
Decidir mediante un proceso de toma de decisiones
Las decisiones a las que te enfrentarás en tu vida son muchas y muy variadas. En
casi todos los casos, para tomar una decisión, la mayoría de las personas se limita a
contemplar la información que tiene a la mano y olvida buscar más allá de lo que
está en su “foco”.
Un proceso de toma de decisiones debe resolver los sesgos más comunes que se han
hallado en la investigación científica. Eliminar estos sesgos que aquejan a nuestro
pensamiento al tomar una decisión es como liberarse de cuatro villanos.
Por lo general, al tomar una decisión la gente tiende a concentrarse en los datos a
los que tiene acceso y olvida que al enfocarse en ellos está dejando de lado un
panorama más amplio que debe considerarse.
“El simple acto de hacer aflorar otra opción (incluso aunque acabemos
decidiéndonos en contra) nos ayuda a tomar mejores decisiones”.
Es recomendable que varíes tu foco de atención. No cambiar el foco genera cuatro
villanos que actúan en contra de un buen proceso de toma de decisiones: la visión
estrecha, el sesgo de confirmación, la emoción a corto plazo y la confianza
desmedida. Estos villanos pueden combatirse con los “cuatro pasos” del proceso
WRAP, que significa, por sus siglas en inglés: Widen your options (“Aumenta tus
opciones”), Reality-Test Your Assumptions (“Contrasta tus suposiciones”), Attain
Distance Before Deciding (“Toma distancia antes de decidir”) y Prepare to Be
Wrong (“Prepárate para el error”).
La mente resalta y halla con más facilidad la información que apoya nuestros
conocimientos iniciales. Hay que variar el foco e ir en pos de la datos que no hemos
contemplado o información que contradice lo que creemos saber. Aplica estos
consejos:
“Cuando la vida nos plantea una elección entre ‘esto o aquello’, deberíamos tener
las agallas de preguntar si la respuesta correcta podría ser ‘ambos’”.
El sesgo de confirmación dejará de obrar en contra de la toma de decisiones cuando
se valore la necesidad de la crítica. Se debe “entender la crítica como una actividad
noble” y ser lo suficientemente humilde como para aceptar que otras opiniones y
otros datos que no habíamos considerado pueden ser correctos.
Las emociones forman parte de la toma de decisiones. En ocasiones son útiles para
hacer que las opciones sean más evidentes. Sin embargo, otras veces, pueden
empañar los procesos mentales al momento de tomar decisiones.
“Para tomar buenas decisiones, los consejeros delegados necesitan tener el valor
de buscar el desacuerdo”.
Es importante encauzar las emociones. Para que las emociones sirvan y no
interrumpan un buen proceso de toma de decisión se recomienda:
“A los expertos se les dan de maravilla las ratios base y son mediocres
prediciendo”.
“Un área relativamente nueva en psicología, llamada teoría formal, demuestra que
con más distancia podemos ver más claramente las dimensiones más importantes
del problema con el que nos enfrentamos”. Es sensato intentar separarse
emocionalmente de los factores implicados en la toma de decisión.
“El tipo adecuado de emoción puede ser exactamente lo que necesitamos para
tomar una decisión sensata”.
Hay que prepararse para todos los posibles resultados de una decisión, incluso los
imprevistos. Para ello se aconseja:
El objetivo del proceso WRAP es mejorar la toma de decisiones y evitar los sesgos
mentales, pero no contempla anular las emociones. Incluso usando el método
WRAP puede que “dos personas que tengan que tomar la misma decisión hagan
elecciones diametralmente opuestas; ¡y quizá sea lo más conveniente para ambos!”.
“Tantear es preguntar: ¿por qué predecir algo que podemos probar? ¿Por qué
adivinar cuando podemos saber?”
Al final de cuentas, se trata de tomar decisiones que sean idóneas para cada
individuo en particular. Cada persona y cada organización debe decidir de acuerdo
con su conveniencia, su pasión, sus intereses. El proceso WRAP ayuda a tomar las
decisiones que conducen a ser el tipo de persona o de organización que se aspira
ser.