1 Timoteo 4
1 Timoteo 4
Génesis 1,1
A. En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2Y la tierra estaba desordenada y
vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía
sobre la faz de las aguas.
B. En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2Y la tierra estaba en orden y llena, y
las luz estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz
de las aguas.
Mateo 12, 22
A. 22Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo; y le sanó, de tal manera
que el ciego y mudo veía y hablaba. 23Y toda la gente estaba atónita, y decía: ¿Será
este aquel Hijo de David?
B. 22Entonces fue traído a Pedro un endemoniado, Con la mano seca; y le sanó, de
tal manera que el hablaba. 23Y toda la gente estaba atónita, y decía: ¿Será este
aquel Hijo de David?
Juan 3, 16
A. 16Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo primogénito,
para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
B. 16Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para
que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
1 Timoteo 2, 11
A. 11La mujer aprenda, con toda sujeción. 12Porque permito a la mujer enseñar,
ejercer dominio sobre su familia, y no estar en silencio.
B. 11La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción. 12Porque no permito a la mujer
enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar en silencio.
Santiago 1, 12
A. 12Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido
la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
B. 12Bienaventurado el varón que no está en tentación; porque cuando haya resistido
la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
1 Juan 1,1
A. 1Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros
ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de
vida
B. 1Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros
ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Dios de vida.
Apocalipsis 12,1
A. 1Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo
de sus pies, y sobre su cabeza una corona de siete estrellas.
B. 1Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo
de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.