Este poema narra la adoración del Niño Dios recién nacido en Belén. Consiste en varias estrofas que describen a María y José con el bebé Jesús, y los pastores, reyes y ángeles que llegan a adorarlo. La última sección trata sobre la tradición de "levantar al Niño Dios" por la mañana con cánticos.
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Este poema narra la adoración del Niño Dios recién nacido en Belén. Consiste en varias estrofas que describen a María y José con el bebé Jesús, y los pastores, reyes y ángeles que llegan a adorarlo. La última sección trata sobre la tradición de "levantar al Niño Dios" por la mañana con cánticos.
Este poema narra la adoración del Niño Dios recién nacido en Belén. Consiste en varias estrofas que describen a María y José con el bebé Jesús, y los pastores, reyes y ángeles que llegan a adorarlo. La última sección trata sobre la tradición de "levantar al Niño Dios" por la mañana con cánticos.
Este poema narra la adoración del Niño Dios recién nacido en Belén. Consiste en varias estrofas que describen a María y José con el bebé Jesús, y los pastores, reyes y ángeles que llegan a adorarlo. La última sección trata sobre la tradición de "levantar al Niño Dios" por la mañana con cánticos.
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Los Aromas.
Tu linda y cándida madre Del campo las flores
te da besos y te mira muy gratas serán Aromas se quemen de plácido olor y te acaricia y suspira Al que con su risa Delante del niño derrámense flores pensando en Getsemaní. les hace brotar. Adórenle reyes y pobres pastores Y cantos entonen al Dios Salvador. Aromas se quemen... Adoración. Son bellísimos tus ojos Abrazarte conmovida Llega llega pescador Y rizado tu cabello y llora y te da besos llega llega de rodillas Como alabastro tu cuello al contemplar los excesos llega ya adorar al niño Pura tu boca infantil. de tu pueblo contra tí. que nos de su bendición.
Aromas se quemen... Venid Pastorcillos. Debajo de un portalejo
donde nace el agua fría ¡Qué agraciados son tus brazos! Venid pastorcillos, yo te doy mi corazón Y tus manos que delicadas venid a adorar, Virgen sagrada María. Suavísimas tus miradas al Rey de los Cielos, como las flores de abril. que ha nacido ya. Titiritando de frío y llorando de dolor Aromas se quemen... Un rústico techo abrigo le da; en los brazos de María por cuna un pesebre se contempla el Salvador. Acostado sobre yerbas por templo un portal Estás ceñido de pajas En el lecho de pajas Entren entren los padrinos Tú que el orbe desencajas reclinado está entren entren de rodillas En los actos de furor. quien ve a las estrellas que este Dios es verdadero a sus pies brillar. de los cielos placenteros. Aromas se quemen... Su madre en los brazos Entren entren los padrinos A donde apagaste el rayo meciéndole está, entren entren de rodillas A donde dejaste el trueno Y quiere dormirle que este Dios es verdadero Amor te acostó en el heno con dulce cantar. Reparte sus maravillas. Te ha desarmado el amor. Un ángel responde al mismo compás De los antiguos profetas Aromas se quemen... ¡Gloria en las alturas todo su deleite fue y en la tierra paz!. Ensalzar su castidad Juega en tu boca preciosa de Jesús, María y José. Pura inocente sonrisa Hermoso lucero lo vino anunciar cual suele jugar la brisa y magos de oriente Hasta la lengua más muda con el botón de la flor. buscándole van. Desenmudece y se ve Delante se postran muy libre de alabar Aromas se quemen... del rey de Judá a Jesús, María y José. de incienso, oro y mirra Mas unas lágrimas tiernas tributo le dan. Tu rostro mojan ¡Oh niño! es el llanto del cariño Sin ricas ofrendas o es el llanto del dolor. No temás llegar Que el niño desea Aromas se quemen... la Fé y voluntad. Levantamiento del Que ya tocaron las dianas, Niño Dios. que el mismo Dios las mandó, Que ya tocaron las dianas... que ya tocaron los ángeles, Santos peregrinos, luego que ya amaneció, Virgen Sagrada María, divinos esposos, luego que ya amaneció. alúmbranos con tu luz, caminen gozosos ruégale a tu niño hermoso, hacía Nazareth, Que bonito Manuelito, Manuelito de Jesús. se levanta el Niño, al que vengo a levantar, con gran devoción, le canto con alegría, Que ya tocaron las dianas... y deja su cuna en su divino portal. en la alta mansión. Viva el niño portentoso, Que ya tocaron las dianas... viva su madre también, Levantate Manuelito, viva el patriarca su esposo, levántate del portal, Levántate Niño hermoso, en el portal de Belén. que ya vienen tus padrinos, que la luz del día nos dio, que te van a levantar. recuerda niño precioso, Que ya tocaron las dianas... mira que ya amaneció.