Cactus de Santa Marta
Cactus de Santa Marta
Cactus de Santa Marta
BOTÁNICA
RESUMEN
Se presenta una sinopsis de la familia Cactaceae de la región de Santa Marta, Magdalena, Colombia, que
incluye claves para las especies, nomenclatura actualizada, observaciones taxonómicas e información sobre
nombres vernáculos. Se registran trece especies que representan diez géneros pertenecientes a las subfamilias
Cactoideae, Opuntioideae y Pereskioideae.
ABSTRACT
A synopsis of the plant family Cactaceae from the region of Santa Marta, Magdalena, Colombia, is presented.
Keys to the species, updated nomenclature, taxonomic observations and information on vernacular names are
provided. Thirteen species in ten genera belonging to the subfamilies Cactoideae, Opuntioideae and Pereskioi-
deae are registered for the region.
Introdución alrededor del mundo (Britton & Rose 1963). La familia pre-
VHQWD WUHV JUDQGHV FHQWURV GH GLYHUVL¿FDFLyQ DVt VXGRHVWH
La familia Cactaceae Juss incluye entre 100 y 150 géneros de los Estados Unidos y el desierto central mexicano, el su-
y de 1866 a 2000 especies (Stevens 2001, Godínez-Álvarez doeste de la región andina de Argentina, Perú y Bolivia y la
et al. 2003) y es considerada endémica del continente ame- caatinga del oriente de Brasil (Ogburn & Edwars 2010), y
ricano, excepto por la ocurrencia de 5KLSVDOLVEDFFLIHUD (J. caracteriza a los ambientes áridos y semiáridos, aunque algu-
S. Muell.) Stearn como especie nativa en los paleotrópicos; QRVJpQHURVVRQSODQWDVHSt¿WDVGHVHOYDVK~PHGDV
no obstante, muchas de sus especies han sido introducidas
* Herbario UTMC, Universidad del Magdalena, Carrera 32 No. 22-08, Santa Marta-Colombia. eduinoc@yahoo.com, eduinochz@gmail.com
** Especialista en Biología. adoba65@hotmail.com
*** Especialista en Biología. joaquinjimenezvergara2010@gmail.com
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/DFODVL¿FDFLyQGHODIDPLOLDKDVLGRFRQWURYHUVLDOGHELGRDO llamó “zona seca del Caribe” que abarca desde la isla de Tri-
amplio rango de variabilidad entre las especies y a multipli- nidad hasta el norte de Colombia, caracterizándose por tener
FLGDGGHFRQÀLFWRVQRPHQFODWXUDOHV\WD[RQyPLFRVCroizat una precipitación menor a 1000 mm y tiempo seco durante
1943, 1944, Britton & Rose 1963). En las últimas décadas, buena parte del año.
como resultado del trabajo colaborativo de un grupo amplio
de botánicos del mundo, se ha elaborado un listado de géne- La cobertura vegetal predominante en esta zona está for-
ros (Taylor 1997) con base en el cual se han preparado catá- mada por bosques y matorrales de piso isomegatérmico,
ORJRVGHQRPEUHVHVSHFt¿FRVTXHLQWHQWDQVXSHUDUHVDJUDQ FRQ FDUDFWHUHV [HURPyU¿FRV SURQXQFLDGRV SDLVDMH TXH HV
FRQIXVLyQ WD[RQyPLFD ,QYHVWLJDFLRQHV ¿ORJHQpWLFDV PROH- común sobre el litoral de los departamentos de La Guajira,
culares recientes han contribuido con nuevas hipótesis e in- Magdalena, Atlántico, Bolívar, Córdoba y Sucre (Ruíz et
terpretaciones acerca de las relaciones naturales y tendencias alFX\DVFDUDFWHUtVWLFDV¿VRQyPLFDV\ÀRUtVWLFDVVRQ
evolutivas dentro de la familia, información que ha permi- GH¿QLGDVFRPRODVGHXQ]RQRELRPDVXE[HURItWLFRWURSLFDO
WLGRFODUL¿FDUDVSHFWRVDFHUFDGHODHGDGODGLYHUVL¿FDFLyQ (Hernández-C. & Sánchez-P. 1992).
\ OD FODVL¿FDFLyQ JHQHUDO GHO JUXSR Edwars et al. 2005,
Las asociaciones vegetales y su distribución en el área
*ULI¿WK 3RUWHU 2009, Nyffeller & Eggli 2010, Arakaki
de Santa Marta dependen de las propiedades del suelo, el
et al. 2011, Bárcenas et al. 2011, Hernández-Hernández
PLFURFOLPD \ OD LQÀXHQFLD DQWUySLFD (VWDV DVRFLDFLRQHV
et al. 2011, Majure et al. 2012).
muestran un rango de variación que va desde una vegeta-
En Colombia se han contabilizado 27 géneros y 83 especies ción baja, de pequeños matorrales abiertos de características
(Fernández-Alonso & Estupiñán 2005). Los 27 géneros semidesérticas, hasta un bosque seco que surge en lugares
representan a tres de las cuatro subfamilias integrantes de donde la disponibilidad de agua retenida por el suelo es más
Cactaceae (Nyffeller & Eggli 2010, Bárcenas et al. 2011, favorable y las especies arbóreas pueden alcanzar alturas
Majure et al. 2012). La mayor diversidad de Cactáceas en hasta de 12 y 15 m. (Schnetter /DÀRUDHVWiLQWHJUD-
el país está en los valles secos interandinos donde se han da, especialmente, por especies de las familias Legumino-
registrado 42 especies (Ruíz et al. 2002), en la región Caribe sae, Cactaceae, Euphorbiaceae, Burseraceae y Capparaceae
se encuentran 12 géneros y 26 especies y subespecies (Rive- (Dugand 1970, Sarmiento 1976).
ra Díaz & Rangel-Ch. 2012), varias de ellas de ocurrencia
Este estudio se realizó con base en la recolección de ma-
común en la zona seca de baja altitud de la región de Santa
terial botánico obtenido en salidas de campo entre el occi-
Marta (Schnetter 1968, Cleef 1984, Lozano 1986).
dente del Parque Nacional Natural Tairona, municipio de
A pesar de que se cuenta con numerosos estudios de la ri- Santa Marta y el oriente de la Isla de Salamanca, munici-
TXH]D \ FRPSRVLFLyQ ÀRUtVWLFD GHO ERVTXH VHFR WURSLFDO GH pio de Pueblo Viejo; en la revisión de las colecciones de
la región Caribe colombiana, la familia Cactaceae constituye Cactáceas depositadas en el Herbario de la Universidad del
XQWD[yQGHFDUDFWHUtVWLFDVPRUIROyJLFDV¿VLROyJLFDVHFROy- Magdalena (UTMC) y en información obtenida de biblio-
gicas y taxonómicas poco estudiadas en nuestro medio. Esa grafía especializada. Se analizó el área de distribución ge-
FDUHQFLDGHXQLQYHQWDULRÀRUtVWLFRDFWXDOL]DGRTXHSHUPLWD neral de las especies presentes y el hábitat en que se registra
el conocimiento de la diversidad y composición de la fami- su presencia. La nomenclatura se actualizó con la base de
lia en la región fue el objetivo del trabajo presente; con el datos THE PLANT LIST (http://www.theplantlist.org). Las
HVWXGLRVHSURSXVRFRQWULEXLUDOFRQRFLPLHQWRGHODÀRUDGH claves elaboradas para las especies se basan en los límites
cactus en los alrededores de Santa Marta y elaborar una cla- de variación morfológica encontrados en la zona de estudio
YHTXHSHUPLWDODLGHQWL¿FDFLyQGHODVHVSHFLHV. para estos taxones.
El área de estudio corresponde a la faja de tierra localizada Se encontraron trece especies de Cactaceae, que se incluyen
entre el mar y las estribaciones noroccidentales de la Sie- en diez géneros. Los géneros registrados son pertenecientes a
rra Nevada de Santa Marta, que en algunos sitios alcanza las subfamilias Cactoideae (&HUHXV+\ORFHUHXV0HORFDFWXV
solo algunos cientos de metros de ancho, incluida en lo que 3LORVRFHUHXV3VHXGRUKLSVDOLV5KLSVDOLV6WHQRFHUHXV) Opun-
Sarmiento GH¿QLy FRPR ³&DULEEHDQ 'U\ /DQGV´ tioideae, (1RSDOHD2SXQWLD) y Pereskioideae (3HUHVNLD). Los
presente en forma casi continua a lo largo de la costa desde géneros Cereus y 3HUHVNLDVRQORVPiVGLYHUVL¿FDGRVFRQGRV
la península de Araya en Venezuela (64 ° W) hasta cerca de especies cada uno, de los demás, se registra una especie. Tres
Cartagena, Colombia (75 ° W), en tanto, Sudgen (1982) la GHODVHVSHFLHVFUHFHQFRPRHSt¿WDVHQODUHJLyQ
CARBONÓ-DELAHOZ E., A. BARROS-BARRAZA, J. JIMÉNEZ-VERGARA - CACTACEAE DE SANTA MARTA, MAGDALENA, COLOMBIA 179
Distribución y hábitat: Se encuentra en Grenada, Aruba, Material examinado: MAGDALENA: Santa Marta, Ne-
Curazao, Bonaire y América del Sur. Crece en zonas áridas y guanje, cerca de la playa, 5 m, 1 oct 2000, --LPpQH] $
bosques secos. Naturalizado en el sudeste de Francia. %DUURV(UTMC). 1 oct 2000, $%DUURV --LPp-
nez 099 (UTMC), 16 oct 2000, $%DUURV --LPpQH]
Material examinado: MAGDALENA: Pueblo Viejo, Isla (UTMC); Santa Marta, Alrededores de la Universidad,
de Salamanca, 4 m, 8 oct 2000, $%DUURV --LPpQH] 30 ago 1996, (&DUERQy$ (UTMC).
(UTMC); Santa Marta, Don Jaca, 27 dic 1966, 5RPHUR
Castañeda 10776 (UTMC), Punta de Gaira, 100 m, 20 mar 4. Melocactus Link & Otto, Verh. Vereins. Beförd. Garten-
2000, $%DUURV --LPpQH](UTMC), cerros al este de baues Königl. Preuss. Staaten 3: 417. 1827.
Gaira, 140 m, $%DUURV --LPpQH](UTMC), Cerros
al este de Taganga, 100 m, 20 mar 2000, $%DUURV --L- Tipo: Melocactus communis (Aiton) Link & Otto
PpQH] (UTMC), Cerros del Rodadero, camino a Punta
Plantas solitarias o en grupos; globulares o un cilindro
Gaira, 40 m, 4 mar 2000, --LPpQH] $%DUURV
corto, una sola coyuntura con 9 a 20 costillas; areolas con
(UTMC), Cerro La Llorona, 65 m, 23 abr 2000, $%DUURV
JUXSR GH HVSLQDV ,QÀRUHVFHQFLDV HQ XQD PDVD FRPSDFWD
--LPpQH](UTMC), Cerros del Rodadero, cerca al Ziru-
de pelos y cerdas formando un cephalium en el extremo
ma, 40 m, 5 mar 2000, $%DUURV --LPpQH](UTMC),
superior de la planta, frecuentemente muy grande y alar-
Cerro San Fernando, 230 m, 27 may 2000, $%DUURV -
gado. Flores pequeñas, tubulares. Fruto desnudo, rojo o
-LPpQH](UTMC).
raramente blanco.
3. Hylocereus (A. Berger) Britton & Rose, Contr. U.S. Natl.
Distribución y hábitat: El género tiene cerca de 40 especies
Herb. 12(10): 428. 1909.
que crecen en matorrales secos y abiertos, desde el nivel del
Tipo: +\ORFHUHXVWULDQJXODULV (L.) Britton & Rose mar hasta 2500 m de altitud. Se ha registrado en México,
El Salvador, Puerto Rico, Cuba, Islas Vírgenes, Española,
3ODQWDVWUHSDGRUDVRPiVIUHFXHQWHPHQWHHSt¿WDV7DOORVDODU- Haití, Republica Dominicana, Trinidad y Tobago, Venezu-
gados, decumbentes, normalmente con tres costillas y ramas ela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil.
que emiten raíces aéreas entre las costillas. Areolas promi-
QHQWHVFRQ¿HOWUR\YDULDVHVSLQDVFRUWDV)ORUHVPX\JUDQ- 4.1 Melocactus curvispinus Pfeiff. subsp. lobellii (Suringar)
des, nocturnas en forma de embudo. Ovario y el tubo con Fern. Alonso & Xhonneux, Rev. Acad. Colomb. Cienc.26
grandes escamas foliáceas pero no espinas. Los segmentos (100): 353-365. 2002.
del perianto similares a las escamas del tubo pero más largas.
Nombre vulgar: Gorro de obispo.
Fruto con varias o muchas escamas foliáceas, comestible,
con semillas negras. Sinónimo: Melocactus lobelii Suringar, Verh. Kon. Akad.
Wetensch. Amst. 2 (5): 7, t. 1.1. 1896.
Distribución y hábitat: Las especies son nativas de México,
Honduras, Guatemala, Costa Rica, Cuba, Haití, Républica Distribución y hábitat: Crece en matorrales secos y abi-
Dominicana, Jamaica, Puerto Rico, Grenada y en el noroeste ertos por debajo de 1000 m de altitud. Se registra del norte
de Sudmérica en Colombia y Venezuela. Varias especies tie- de Colombia en Magdalena y La Guajira y en el norte de
nen frutos comestibles y son cultivadas. Venezuela.
3.1. Hylocereus costaricensis (F.A.C. Weber) Britton & Material examinado: MAGDALENA: Santa Marta, Cer-
Rose, &RQWU861DWO+HUE ros al norte de Bastidas, 120 m, 16 mar 2000, $ %DUURV
- -LPpQH] (UTMC), Cerros del Rodadero, cerca
Nombre vulgar: Cardón marica
del Ziruma, 60 m, 8 mar 2002, --LPpQH] $%DUURV
Sinónimos: Cereus trigonus var. costaricensis (Britton & (UTMC), Cerros del Rodadero. Trayecto cerro Ziruma-Bal-
Rose) F.A.C. Weber, %XOO 0XV +LVW 1DW 3DULV neario turístico del Rodadero, 60 m, $%DUURV --LPpQH]
; Cereus costaricensis (Britton & Rose) A. Berger, (UTMC), Cerro San Fernando, 20 m, 16 abr 2000, $%DU-
.DNWHHQ URV --LPpQH](UTMC), Cerro San Fernando, 140 m,
27 may 2002, --LPpQH] $%DUURV(UTMC).
Distribución y hábitat: Se encuentra desde Nicaragua, Cos-
ta Rica y Panamá hasta Perú. Crece en bosques secos desde 5. Nopalea Salm-Dyck, &DFW+RUW'\FN
el nivel del mar hasta 1500 de altitud. Es cultivada por el Tipo: 1RSDOHDFRFKHQLOOLIHUD (L.) Salm-Dyck.
fruto comestible.
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6. Opuntia Mill., Gard. Dict. Abr. vol. 2. 1754. Distribución y hábitat: Es una especie común en el norte de
Sudámerica en Colombia y Venezuela. Crece en matorrales
Tipo: 2SXQWLDYXOJDULV Mill. secos y abiertos por debajo de 1000 m.
$%DUURV --LPpQH] (UTMC); Santa Marta, Ce- de los vientos y la desecación que contienen microambientes
rros al este de Taganga, 85 m, 20 mar 2000, $ %DUURV originados por diferencias en la disponibilidad de humedad,
--LPpQH] (UTMC), Cerro de El Cundí, 60 m, 20 feb una variable crítica para el establecimiento y desarrollo de
2000, $%DUURV --LPpQH] (UTMC), Cerro norte de las especies mencionadas en esta área.
Bastidas, 85 m, 16 abr 2000, - -LPpQH] D %DUURV
(UTMC), Cerro La Llorona, 60 m, 27 ago 2000, --LPpQH] Las zonas áridas y semiáridas del Caribe colombiano ha su-
$ %DUURV (UTMC), Cerro la Llorona, 60 m, 27 ago frido un deterioro ambiental continuo y progresivo, cuyos
2000, $%DUURV --LPpQH]075 (UTMC), Neguanje cerca efectos locales son la transformación y destrucción del hábi-
de la playa, 15 m, 1 oct 2000, $%DUURV --LPpQH] tat (Ruíz et al. 2002). Estas alteraciones de origen antrópico,
(UTMC). principalmente, pueden ejercer un impacto severo y negativo
que provoque la reducción poblacional de varias especies de
cactáceas que crecen en la región. Aunque, se sostiene que
Discusión algunas especies de la familia son capaces de tolerar accio-
Varios investigadores han señalado a la aridez del clima nes moderadas de disturbio e incluso pueden ampliar el ran-
FRPR HO IDFWRU DPELHQWDO PiV VLJQL¿FDWLYR SDUD OD ULTXH]D JRJHRJUi¿FRGHGLVWULEXFLyQSRUDFWLYLGDGHVKXPDQDVHer-
de cactus (Godínez-Álvarez & Ortega-Baes 2007, Araka- nández et al. 2010), la fragmentación y pérdida de hábitat
ki et al. 2011), circunstancia que explicaría la concentración se tienen como factores críticos para la supervivencia de las
de especies registradas en los alrededores de Santa Marta, cactáceas (Hernández-Oria et al. 2007).
zona de clima cálido y seco (Schnetter 1970). Aunque las
La necesidad de incrementar las colecciones taxonómicas
condiciones climáticas en esta región no alcanzan grados ex-
para alcanzar un conocimiento adecuado de la biogeografía
tremos de aridez (Ruíz et alORFXDOGH¿QLUtDORVWLSRV
del grupo, es un imperativo establecido por varios investi-
de vegetación prevalecientes (Schnetter 1968, Rangel-Ch.
gadores en el concierto general de esfuerzos por llenar los
2012), pueden considerarse favorables para el desarrollo de
vacíos existentes (Hernández & Bárcenas 1995, Hernán-
especies del grupo, hecho observado en otras regiones del
dez et al. 2011). Así mismo, es importante avanzar en la
continente americano (Hernández & Bárcenas 1995).
HMHFXFLyQ GH UHYLVLRQHV WD[RQyPLFDV IXQGDPHQWDGDV D ¿Q
Al anotar que las especies registradas en esta región tienen GHVXSHUDUORVFRQÀLFWRVGHPXOWLSOLFLGDGGHFODVL¿FDFLRQHV
un rango de distribución que abarca la zona seca del caribe especialmente en la delimitación genérica. Los esfuerzos en
colombo-venezolano (norte de Venezuela y noroeste de Co- &RORPELDGHEHQLQWHQVL¿FDUVHSDUDSURIXQGL]DUHQHOHQWHQ-
lombia) y valles interandinos secos de Colombia, también dimiento de patrones de distribución y abundancia de espe-
es importante considerar que la distribución y abundancia cies, así como de otros factores relacionados con su biología,
locales pueden ser afectadas tanto por la heterogeneidad am- dirigidos a la formulación de tareas de conservación viables.
ELHQWDOFRPRSRUORVUHTXHULPLHQWRV¿VLROyJLFRVSDUWLFXODUHV
de cada especie (Godínez-Álvarez et al. 2003). Agradecimientos
No se tienen registros de endemismos de cactáceas en la re- Expresamos nuestros agradecimientos al Dr. Enrique Forero
gión estudiada. Un factor que se sugiere puede favorecer el González por la dedicada lectura del manuscrito y sus va-
origen y evolución de linajes es el aislamiento durante perio- liosas sugerencias. A la Dra. Rosalba Ruíz por sus acertadas
dos largos de tiempo en medio de regiones áridas (Godínez- anotaciones. Al biólogo Héctor García Quiñones por el inva-
Álvarez & Ortega-Baes 2007), condición que en este caso luable apoyo en el trabajo de campo y de laboratorio.
no puede establecerse con precisión; pero es posible con-
siderar una colonización reciente de los miembros de este Referencias
JUXSRVLQHOWLHPSRSDUDODGLYHUVL¿FDFLyQHQODVFRQGLFLRQHV
existentes. Arakaki, M., P. Christin, R. Nyffeler, A. Lendel, U. Eggli, R. M. Og-
burn, E. Spriggs, M. J. Moore & E. J. Eduards. 2011. Contem-
poraneus and recent radiations of the world’s major succulent plant
De las trece especies registradas, diez son terrestres o arrai- lineages. Proc. Natl. Acad. Sci. USA. 108 (20): 8379-8384.
JDGDV HQ HO VXHOR \ WUHV VRQ HSt¿WDV 5KLSVDOLV EDFFLIHUD
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