Hacia Una Nueva Arquitectura - Jeff Kipnis

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Jeffrey Kipnis

Hacia una Nueva Arquitectura

En Architecture and Science, Londres, Wiley and Sons, 2001.


Traducción: A. M. R.

Me paro frente a una montaña Nueva Arquitectura, no es nueva; sino que


y la desmenuzo con el canto de mi mano. en realidad sus preocupaciones fueron ya
Luego recojo los pedazos y hago una isla, exploradas con mayor autenticidad y profun-
hasta puedo llegar a hacer algo de arena didad en Europa hace algún tiempo.1
Jimi Hendrix Hoy, historiadores y críticos apoyan la tesis
de que no hay nada nuevo que valga la pena
En los últimos años, unos pocos proyectos destacar, particularmente que no hay formas
de un puñado de arquitectos han puesto en nuevas. Su tabla de valores consiste en
discusión una Nueva Arquitectura. Recién valorar el pasado de donde derivan todas las
ahora pueden hacerse los esfuerzos prelimi- bendiciones. De esa manera nos alejamos
nares para articular los términos de este de lo nuevo y nos sentimos avergonzados
debate. Pero primero debemos considerar de buscarlo. Hay algunos colegas que revi-
qué está en juego en esta empresa. san sus escritos para quitar la palabra nuevo
Una Nueva Arquitectura. Hoy sólo podemos tanto como sea posible: lo he hecho yo
decir esta frase con cierta duda y embarazo. mismo. Como resultado el Posmodernismo,
Para ser sinceros, la mayoría de la arquitec- cuyo principio rector es que no hay nada
tura reciente está tan mal concebida que se nuevo, es la única arquitectura que ha podi-
condena a una muerte piadosa en la tierna do madurar en los últimos 20 años.
infancia. Pero el pronóstico es malo aún Mentira, dirán algunos, durante este perío-
para aquellos casos que tienen la fuerza do ha florecido un revival de las vanguar-
suficiente como para sobrevivir una primera dias históricas señalando la exposición
fase; generalmente son asesinadas por un sobre el Deconstructivismo del MOMA y los
ataque coordinado desde dos frentes. edificios de Eisenman, Gehry, Libeskind,
Hay distintas variaciones pero en general el Tschumi, Koolhaas, Hadid y otros. Sin
esquema de este ataque es bien conocido: embargo, si prestamos atención, veremos
en primer lugar los críticos de la derecha que estos trabajos han sido realizados bajo
cuestionan su anarquismo desestabilizante y un contrato implícito de rechazo. En otras
el egoísmo vacío de sus autores; luego, los palabras, estos proyectos no han sido cele-
críticos de izquierda, se alzan contra la irres- brados como expresiones auráticas, como
ponsabilidad e inmoralidad de estos arqui- edificios de interés por su irreproducible
tectos tildados de colaboracionistas corrup- singularidad o como fuentes de nuevos
tos. Destrozada por estos ataques, sus res- principios para una práctica general. La dis-
tos eviscerados son rápidamente limpiados ciplina los ha reconocido como exóticos
por los historiadores y su asombrosa capaci- para suprimir su contribución a una Nueva
dad para convencernos que esta supuesta Arquitectura.

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Sin embargo en estos trabajos dispares hay rechazada como proceso lineal y teleológico,
intuiciones que podrían contribuir a formular pasó a ser considerada como el pozo sin
el marco de una Nueva Arquitectura capaz fondo de material recombinable, siempre
de proponer vitalidad formal y relevancia lleno, siempre abierto al público.
política. Consideremos el trabajo de Daniel En las prácticas posmodernas más virulen-
Libeskind, por ejemplo. Desde Chamber tas, aquellas que usan la reiteración y
Works hasta sus proyectos más recientes en recombinación para minar los sistemas de
Alemania y en otros países, uno rastrea una poder recibidos, se mantiene una relación
sostenida y penetrante crítica a los ejes y su optimista, hasta progresista, con lo Nuevo,
constelación de organizaciones lineales. aún cuando éste no esté teleológicamente
Considerando la historia social, política y direccionado. En prácticas como la
espacial de los ejes en Arquitectura y Deconstrucción se generaron nuevas formas
Urbanismo, no se trata de un rasgo menor. intelectuales, estéticas e institucionales, no
Sin embargo, muy poco de esto se encuen- por proposición sino por desestabilización de
tra en los escritos críticos; por el contrario se las existentes. Nuevas formas resultan de
lo considera como un avatar esotérico, y el estabilizaciones precarias, para ser luego
poder de los ejes en la práctica cotidiana constantemente desestabilizadas. Una evo-
(tan radicalmente repensada en sus dise- lución acelerada reemplaza a la revolución.
ños), persiste sin cuestionamientos. Se trata de una diseminación en espacios
En la superficie, esta retirada de lo Nuevo heterogéneos que no respaldan jerarquías
parece sólidamente respaldada en términos preestablecidas, se fomenta la diversidad y
teóricos e históricos. Con sus aspiraciones la diferencia. Lejos del nihilismo, esta con-
utópicas, el Modernismo intentó desembara- cepción del Posmodernismo es claramente
zarse de jerarquías espaciales obsoletas y afirmativa.
establecer un espacio más homogéneo y Desafortunadamente, la crítica posmoderna
democrático. Este objetivo estuvo sin dudas a las políticas de borramiento y sustitución, y
vinculado al proyecto del Iluminismo; tam- su énfasis en la recombinación, han condu-
bién estuvo implicado en las tragedias a que cido a grandes abusos. Favorecieron un dis-
dio lugar. La lógica instrumental del proyecto curso reaccionario que tiende al reestableci-
Modernista de lo Nuevo reclamaba tabulas mientos de jerarquías tradicionales, como
rasas y sustituciones radicales: de Paris, por los discursos sobre la preservación de
ejemplo. Reagan y Thatcher.
En nombre de la heterogeneidad, el discurso No se trata del Posmodernismo en sí, sino
posmoderno ha montado una crítica de lo de una patología más insidiosa: una suerte
Nuevo en varios frentes. Ha demostrado la de envejecimiento cultural precoz que sub-
imposibilidad de la invención y celebrado yace en la retirada de lo Nuevo. Los sínto-
aquellas diferencias que el Modernismo se mas ya fueron diagnosticados por Nietzsche
proponía borrar. En su propia versión de la y recientemente por Roberto Unger.2 Se
búsqueda de lo Nuevo, una lógica ligera del manifiesta sosteniendo que el catálogo de
juego -de reiteraciones y recombinaciones, de formas posibles (institucionales, estéticas,
collage y montaje- suplantó la indagación políticas) está completo y es bien conocido.
sobria y seria de un Nuevo Mundo desde el Podemos discutir los méritos relativos de
Modernismo. En la lógica del Posmodernismo, cada una, pero ni descubrir ni inventar algu-
la Historia ganó un respeto renovado pero, na nueva.

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¿Es posible que lo Occidental como experi- para impulsar esta Nueva Arquitectura: sur-
mento cultural esté acabado? Sólo en ese gió de proyectos y desarrollos estrictamente
contexto sería explicable esta veneración disciplinares.
excesiva por los catálogos recibidos. Un factor determinante fue el agotamiento
Francamente, no puedo creer que en el corto del collage como paradigma de la heteroge-
trayecto de nuestra existencia hayamos neidad. Para oponerse a la tendencia del
experimentado y agotado todas las posibili- Modernismo a borrar y sustituir, el
dades. Todos los indicadores actuales seña- Posmodernismo enfatizó el injerto como ins-
lan lo contrario: se trate de Europa Oriental o trumento combinatorio preferido. La conste-
la tecnología. La construcción del catálogo lación del collage y sus variaciones ofreció la
de formas posibles recién comenzó. estrategia más efectiva para estos injertos.3
Indicaré algunos criterios básicos para una Desde Rowe a Venturi o Eisenman, del
Nueva Arquitectura. No debe repetir los erro- Posmodernismo al Deconstructivismo, el
res del Modernismo y su lógica de borrar y collage sirvió de modelo dominante. Hay
sustituir: debe participar en recombinacio- indicios, sin embargo, de que ya no es capaz
nes. Debe buscar una heterogeneidad que de sostener la heterogeneidad a la que aspi-
resista el establecimiento de jerarquías fijas. ra la arquitectura, baste nombrar dos.
Debe proponer principios, y no prescripcio- El collage posmodernista depende de provo-
nes, para el diseño. Finalmente, debe expe- car contradicciones y efectos de incoheren-
rimentar y proyectar formas nuevas. cia dentro del marco dominante; en la medi-
Los dos primeros ya pertenecen al da en que se transformó en una práctica ins-
Posmodernismo, pero los dos últimos la titucionalizada, perdió su fuerza. Por otra
separan de lo actual, aunque se nutran de parte, está limitado a un particular orden de
sus recursos. recombinaciones semióticas: aún en el pro-
Indicativos de esta separación es el despla- ceso aleatorio del collage del Dada, cada
zamiento de la atención de algunos teóricos, elemento debe ser conocido por sí mismo.
especialmente Sanford Kwinter y Greg Lynn, De manera que, aún cuando pueda engen-
de la semiótica postestrucuturalista a des- drar nuevas composiciones, desplazamien-
arrollos recientes en la geometría, la ciencia tos, deslizamientos, accidentes y otros efec-
y las transformaciones del espacio político; tos quiméricos, el efecto que produce en últi-
un desplazamiento que se suele caracterizar ma instancia es el de valorizar un catálogo
como la sustitución del discurso de Derrida finito de elementos y/o procesos. Sólo puede
por el de Deleuze. renovarse identificando materiales no lista-
En estos escritos, el encuadre deleuziano dos previamente: no puede ser proyectivo.
está reforzado con referencias a la Teoría de La voluntad de engendrar un espacio político
la Catástrofe –la geometría de un espacio más amplio en lo relativo a la diversidad y
transformado por acontecimientos- y la diferencia, no puede conseguirse con una
nueva Biología. En tanto sus preocupacio- catalogación minuciosa y la legitimación de
nes tienen que ver con la morfogénesis, la las especies de diferenciación que operan
geometría y la ciencia han sido fuentes tradi- en un espacio. Es económica y políticamen-
cionales de principios y formas arquitectóni- te imposible.4 Si el collage se agotó como
cas. Sin embargo, aunque provocativos e estrategia recombinatoria, el problema es
invalorables como recursos, estos estudios encontrar modos de injerto diferentes: capa-
filosóficos y científicos no fueron suficientes ces de producir heterogeneidad a través de

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una cohesión intensiva en lugar de la inco- Incongruencia, supone el compromiso de
herencia y contradicción extensivas.5 mantener, subvirtiendo, los datos recibidos
En una conferencia en ANYONE de 1990, el del sitio o el programa. Implica revocar los
teórico social Roberto Unger cuestionó las postulados de armonía y proporción, claridad
prácticas posmodernas en arquitectura por estructural y coordinación entre planta, corte
su “distanciamiento irónico”. Propuso algu- y fachada, o entre detalle y organización for-
nos criterios de lo que a su parecer debía ser mal. Coherencia intensiva es una incoheren-
una Nueva Arquitectura comprometida con cia que para diferenciarse de la marca del
la generación de un espacio político no jerár- collage, se trate de una coherencia forjada
quico y heterogéneo con formas de injerto en la incongruencia: arreglos monolíticos que
que podemos interpretar como generaliza- permiten a la arquitectura comprometerse en
ciones de los cinco puntos de Le Corbusier. relaciones múltiples y hasta contradictorias.
Mientras éstos estuvieron orientados a No debemos confundirla con la “difícil totali-
generar un espacio más democrático a tra- dad” de Venturi que unifica compositivamen-
vés de la homogeneidad, para Unger el obje- te la multiplicidad del collage.
tivo debía ser una heterogeneidad que impi- Al iniciar este ensayo, subrayé que un puña-
diera alineamientos y jerarquías. do de proyectos recientes ofrece marcos y
Propuso que la Nueva Arquitectura fuera condiciones específicas para una Nueva
vasta, vacía, orientada, incongruente e inten- Arquitectura. En general se los considera
samente coherente. Vasta como negociación como un desplazamiento de la preocupación
entre el espacio universal infinito y homogé- por la semiótica a la preocupación por la
neo, y las jerarquías fijadas por espacios arti- topología, la geometría, el espacio y los
culados. Reconociendo la necesidad de acontecimientos. A mi criterio pueden dividir-
poner un límite a lo heterogéneo, lo que se se en dos campos la DeFormación y la
busca es una extensión capaz de evitar la InFormación.
inscripción en los patrones espaciales tradi- La DeFormación procura establecer afiliacio-
cionales. Supone la generalización de la nes deslizantes que se resisten a ser inclui-
planta libre para incluir la disyunción y la dis- das en alineamientos estables. Lo hace a
continuidad, y extender el énfasis del corte través de topologías abstractas que no pue-
libre en lo residual e intersticial. Vacío supo- den ser descompuestas en elementos pla-
ne extraponer la abstracción formal del nos y simples, o analizadas a través del len-
modernismo (borrando citas y referencias, guaje del formalismo arquitectónico.
suprimiendo ornamentos y decoraciones, La estrategia de la InFormación -de la cuál
pero sosteniendo tipos y formas canónicas) son ejemplos el proyecto de Koolhaas para
para enrolarse en afiliaciones inesperadas Karlsruhe y el de Tschumi para Fresnoy- es
que impliquen el paso de la fachada libre a la una forma de recolección que encastra ele-
volumetría libre. Orientada implica que la mentos formal y programáticamente incohe-
arquitectura debe ser proyectiva, debe apun- rentes dentro de un contenedor modernista y
tar a la emergencia de nuevas formas socia- neutral. Los espacios residuales e incon-
les e institucionales. Supone desafiar la gruentes son activados por la estratificación
estructura monosémica o polisémica del sig- visual, la innovación programática, efectos
nificante/significado. La indeterminación de tecnológicos y acontecimientos.
esta orientación traslada el énfasis de alinea- Aunque ambas derivas del mismo problema,
ciones estables a afiliaciones provisionales. la DeFormación y la InFormación no son cola-

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borativas. Sin embargo acuerdan en general Para la DeFormación, la contribución más
con algunas de las tácticas propuestas por importante de la arquitectura continúa sien-
Unger: cortes de cajas dentro de cajas, énfa- do estética. No concibe el lenguaje moderno
sis en lo residual e intersticial (vastedad, de la InFormación como vacío, sino como
incongruencia), formas monolíticas y supre- una referencia histórica y, a la proyección de
sión de ornamento aplicado o referencias imágenes como nuevas formas del orna-
figurativas (vacío, cohesión intensiva). mento. Su búsqueda del Vacío tiene que ver
De todos modos las tensiones entre ambas con la extensión de la exploración modernis-
tendencias son pronunciadas. La ta en la forma monolítica, rechazando la
DeFormación enfatiza el rol de la nueva apelación esencialista de las geometrías pla-
forma estética y la generación visual de nue- tónicas, euclidianas o cartesianas. Para
vos espacios; la InFormación quita importan- ellos la Orientación se logra con la estética:
cia a la estética a favor de nuevas formas las formas transforman el contexto al intro-
institucionales, de programas y aconteci- ducir en ellos relaciones formales incon-
mientos. Los espacios/acontecimiento deri- gruentes e indisciplinadas. La InFormación,
vados de nuevas geometrías se relacionan por su parte, ve estas geometrías gestuales
con la primera; los vinculados a nuevas tec- de la DeFormación como una cuestión de
nologías, con la segunda. Estilo.
Uno de los rasgos más característicos de la Para examinar las consecuencias de estos
InFormación es su uso no apologético del problemas en diseños concretos, hagamos
lenguaje ortogonal del Modernismo, conde- una breve comparación entre la operación
nado como opresivo y monótono en los ini- de Tschumi en Fresnoy, y la de Shirdel en el
cios del posmodernismo. Con la profundiza- Nara (Centro nacional de arte contemporá-
ción de la crítica, quedó en claro que este neo).
lenguaje no era esencial sino que constituía En su descripción del problema, Tschumi es
un sistema de signos. La irreductibilidad específico al subrayar las diversas posibili-
semiótica de la arquitectura quitó toda justifi- dades. En la medida que gran parte de las
cación esencialista a la austeridad de este estructuras preexistentes estaban muy dete-
lenguaje, abriendo la puerta para su reutili- rioradas, era totalmente plausible una apro-
zación. ximación del tipo borrar y sustituir. Por otra
La InFormación sostiene que el agotamiento parte, la cualidad de las formas históricas y
del collage es tan completo que se ha trans- espacios de Le Fresnoy, sugería la estrate-
formado en un gesto estético irrelevante.6 La gia renovación/restauración propia del colla-
contribución de la arquitectura a la produc- ge. Tschumi evita ambas y opta por envolver
ción de nuevas formas y a la inflexión del el complejo con una cubierta modernista par-
espacio político no puede ser conseguida cialmente cerrada para crear un injerto cohe-
por una transformación del estilo. La sivo. Esta inserción no produce un collage,
InFormación argumenta que el efecto colec- en lugar de crear una resolución compositiva
tivo de las formas ortogonales del moderno de fragmentos, la cubierta reorganiza y rede-
es tal, que persiste siendo un Vacío: acen- fine cada elemento en una unidad monolíti-
tuando el efecto con el uso de las formas ca, cuyas incongruencias se internalizan.
como pantallas para proyectar imágenes. La Tschumi sutura la amplia colección de espa-
Orientación se consigue por las transforma- cios resultantes con un sistema de escaleras
ciones programáticas. y pasarelas, entrelazándolas visualmente

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con cortes, recintos parciales, ventanas ra una activación diferencial de aconteci-
corridas y amplias trasparencias. Cuando mientos y materia. En el entramado estructu-
uno está en el complejo, tiene vistas parcia- ral de la nueva cubierta, proyecta videos
les y fragmentarias de varias zonas desde el como un material arquitectónico para activar
interior y el exterior al mismo tiempo. esos espacios residuales.
Como los efectos visuales, el rol del progra- El resultado es un proyecto que promete una
ma tiene que ver tanto o más con la produc- heterogeneidad espacial que desafía cual-
ción de espacios que con el acomodamiento quier jerarquía simplificadora: una colección
de funciones. Tanto como le es posible, de espacios diferenciados capaces de alber-
Tschumi programa los espacios resultantes, gar una amplia variedad de encuentros
incluso usando la cubierta de pizarras del sociales sin privilegiar ninguno. Le Fresnoy
antiguo edificio como entrepiso. Cuando no mina la clásica dialéctica arquitectónico/polí-
es posible una programación directa, elabo- tica entre heterogeneidad y homogeneidad,

Bernard Tschumi. Le Fresnoy (1991-97). National Studio for Contemporary Arts. Tourcoing, Francia.

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y se orienta a nuevas formas institucionales Al final volveré al Nara para el desarrollo de
y arquitectónicas. la DeFormación. De todas maneras creo que
Como en el caso anterior, Shirdel emplea esta breve comparación es suficiente para
una colección de fragmentos para unificar indicar tanto las similitudes como las diferen-
una caja dentro de la caja incongruente en cias de los caminos de ambas tendencias
su proyecto del Nara Convention Center. A Hacia una Nueva Arquitectura.
diferencia de Tschumi, moldea la forma y la
estructura interna de esta adición plegando DeFormación
un partido de tres barras con las líneas regu- Como en otros casos de la Teoría
ladoras de dos geometrías complejas. La Arquitectónica, DeFormación es una cons-
primera geometría envuelve el exterior en un trucción de principios surgidos del análisis
monolito no referencial cuya forma fluye de proyectos realizados por arquitectos
construyendo un paisaje en el sitio. La diversos, que fueron ideados inicialmente
segunda tiene un efecto similar en la viga con diferentes intenciones y bajo otras
principal que sostiene los tres teatros sus- condiciones y términos. Todavía no hay
pendidos en corte, cada uno una caja cuya arquitectos DeFormacionistas, del mismo
forma es determinada por requerimientos modo que no había arquitectos barrocos o
estrictamente funcionales. manieristas. Se trata de un aspecto menor,
La geometría interior y exterior se conectan pero debemos ser cuidadosos al avanzar
de modo que el espacio mayor del comple- en la caracterización de principios y un len-
jo termina siendo completamente residual, guaje técnico que los articule, de no cir-
una suerte de callejón hendido entre los vín- cunscribir y regular un movimiento cuya
culos provisionales entre las dos geometrí- fertilidad deriva, en gran parte de la falta de
as. Este efecto es reforzado por el hecho disciplina: si hay DeFormación, ésta recién
que todo el programa específico esté con- ha comenzado.
centrado en las tres salas y sus lobbies que Mucho se ha escrito sobre el vínculo de esta
flotan sobre el espacio principal. En cierto arquitectura con la filosofía contemporánea,
sentido, la postura de Shirdel respecto al particularmente Deleuze. No se puede negar
programa es la opuesta a la de Tschumi. A la fuerte consonancia buscada por estos
pesar de que el edificio funciona de acuerdo arquitectos con Mil mesetas o El pliegue.
a su destino, no hay ningún otro programa Baste referir al gran número de términos que
arquitectónico que la pura función, ninguna se han tomado en préstamos: afiliación, plie-
coreografía o uso de la tecnología para acti- gue, espacio liso o estriado. Sin embargo,
var los espacios. Las imágenes de bailari- tenemos que tomar algunas precauciones.
nes danzando en absoluto aislamiento que Hay una larga tradición que tiende a vincular
se proyectan sobre el espacio residual y toda arquitectura con alguna filosofía o teo-
vaciado, confirman la hipótesis. Toda la ría, considerándola como una suerte de
cuestión de la heterogeneidad descansa en práctica aplicada. Se presta más atención al
la estética de la forma y en la oposición grado en que la arquitectura ejemplifica
entre función y los acontecimientos no pro- dicha filosofía o teoría, que a los nuevos
gramados. También debemos subrayar el efectos arquitectónicos que promueve: como
riesgo de proponer que el espacio más consecuencia, se reduce la arquitectura a
importante y caro de un edificio no sea sino sus limitadas capacidades de representar o
totalmente residual. producir efectos filosóficos.

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En su relectura de El pliegue de Leibniz, que llamaron cosa-negra (black stuff). A
Deleuze inscribe parcialmente su meditación pesar de lo irónico del término, se trata de
en una interpretación del espacio barroco: se una denominación ajustada de los efectos
podría decir que es la Arquitectura la que ofi- que querían lograr. Rechazando los temas
cia como paradigma lo que podría derivar, deconstructivistas del fragmento, los signos,
peligrosamente, en considerar que las confi- los ensamblajes y el espacio aditivo; el obje-
guraciones de la DeFormación no son sino tivo era una nueva y abstracta condición
neo-barrocas. monolítica, sin referencias ni parecidos. Le
Pero no es así. Si bien es adecuado vincular preocupaba generar formas arquitectónicas
el pensamiento sobre el pliegue de Deleuze disciplinadas que no fueran fácilmente des-
a la arquitectura barroca, no sirve para carac- componibles en el formalismo moderno del
terizar los efectos arquitectónicos de aquella punto/línea/plano/volumen. Las llamaremos
arquitectura tan ajena a los efectos contem- geometrías anexactas o superficies no des-
poráneos del pliegue como la filosofía de arrollables, pero el término de cosa-negra
Leibniz lo es del pensamiento de Deleuze. sirve para presentar el principio de abstrac-
En otras palabras ni Deleuze es meramente ción no-referencial y monolítica propia de la
neoleibniziano, ni la DeFormación, simple- DeFormación.
mente neobarroca. Para generarlas, Shirdel desarrolló una téc-
De todas maneras Deleuze saca partido de nica partir de una o más figuras reconocibles
los efectos generativos de los textos de cuya organización diera cuenta de la desea-
Leibniz, pero su originalidad no se circunscri- da complejidad interna. Luego de una serie
be a la calidad de una revisión académica de de pasos, mapeaban la geometría arquitec-
esos textos, sino a la diferencia entre ambos. tónica de estas figuras al detalle, abstrayen-
De la misma manera la DeFormación no se do o borrando en cada paso algunos rasgos
sustenta en la recapitulación de los temas que la hiciera referencial o reconocible: una
barrocos sino en sus diferencias con el barro- operación que en su momento denominé:
co y otros predecesores. relajación disciplinada. Aspectos similares
El costo más alto de una analogía descuida- pueden rastrearse en las otras dos obras de
da es el grado en que esta continua referen- Gehry y Eisenman.
cia al lenguaje de Deleuze pueda afectar al La culminación de esta búsqueda fue su pro-
desarrollo independiente de la arquitectura puesta premiada para el concurso de la
que puede quedar circunscrito a una genealo- Biblioteca de Alejandría, un diseño que
gía. Sin embargo, el vacilante camino recorri- resultó de la evolución disciplinadamente
do por la DeFormación –iluminando los plie- relajada de los pliegues de una túnica en
gues representados en una pintura de Miguel una pintura de Miguel Angel. En esa figura
Angel, dibujando sobre el trabajo previo de Shirdel había encontrado las cualidades
otros- tiene una dignidad propia. Permítanme buscadas de pliegue. A pesar que la solución
reconducirlos por algunos de estos caminos final no muestra ningún rastro obvio de la
deteniéndonos en la propuesta de Shirdel y pintura original, logra capturar en arquitectu-
Zago para el concurso de la Biblioteca, el edi- ra las mismas relaciones entre superficie,
ficio para convenciones en Columbus Ohio de forma y espacio.
Eisenman y el Museo de Vitra de Gehry.7 Casi inmediatamente, Eisenman se presen-
Por varios años, Bahram Shirdel, con to al concurso cerrado del Centro de conven-
Andrew Zago, exploraron una arquitectura ciones de Columbus compitiendo con

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Michael Graves, entre otros. La ciudad había Tomándolo de Deleuze, la DeFormación se
encuadrado la iniciativa en el refiere a estos vínculos formales tentativos
Sesquicentenario del primer viaje de Colón, con condiciones contingentes como afiliacio-
por lo que la primera estrategia fue un pro- nes, y generar estas afiliaciones es la estra-
yecto collage basado en la arquitectura náu- tegia clave de la DeFormación respecto a la
tica de la Santa María. A sólo tres semanas Orientación. Se diferencian de las relaciones
de la entrega, Eisenman se enteró que con el sitio porque no predeterminadas, sino
Graves estaba explorando algo similar y que surgen del carácter formal, topológico o
queriendo ganar, le mandó una postal con espacial intrínseco del proyecto.
un barco hundiéndose y enfrentó una nueva En la forma tradicional, uno identifica influen-
estrategia basada en el principio de la forma cias del sitio como diagramas tipo/morfológi-
débil que recién estaba formulando.8 cos latentes o manifiestos, lenguaje, detalles
Trabajó con dos diagramas extrañamente o materiales prevalecientes, y los incorpora
similares, el corte de un cable óptico y el sis- en el diseño generalmente como collage.
tema de cambios de vías ferroviarias que Estas relaciones no son afiliaciones sino ali-
alguna vez ocuparon el sitio. Produjo una neamientos y sirven para reforzar los modos
caja monolítica tejida desde esquejes con dominantes de relación entre la arquitectura
forma de lombrices. La clave es la similitud y el contexto.
de los diagramas: fue en ese débil parecido Las afiliaciones, por el contrario, son provi-
que Eisenman rastreo la potencialidad de sionales; vínculos ad hoc con contingencias
una forma débil. secundarias del sitio o los alrededores. No
La forma débil se diferencia de la cosa-negra refuerzan rasgos dominantes del lugar, sino
en un aspecto fundamental: mientras Shirdel que amplifican organizaciones menores que
intenta buscar algo radicalmente diferente, la están operando de algún modo, provocando
noción de débil de Eisenman requiere de míni- una reconfiguración del contexto. Al unir
mas semejanzas de modo que pueda general organizaciones estratificadas o desarticula-
relaciones inesperadas, como las que conec- das en una heterogeneidad coherente, el
tan ambos diagramas. Si uno está advertido, término de esta operación de afiliar es ALI-
es fácil descifrar las huellas de las vías y la SAR.9
estructura del cable óptico. Pero lo más llama- Para completar este análisis sobre los efec-
tivo es el vínculo débil que se produce cuando tos afiliativos debemos referirnos a Ghery
se lo localiza en el sitio: refuerza el borde de la cuyo proceso de diseño involucra la explora-
calle y negocia un importante cambio de esca- ción en una serie de maquetas sucesivas de
la, logrando a través de estas formas entrela- una figura o grupo de figura inicial. A pesar
zadas conectar los edificios comerciales de que las distorsiona y deforma, está más pre-
tres pisos de enfrente con la autopista sobree- ocupado aún que Eisenman en preservar el
levada de atrás. Aunque totalmente no planifi- patrimonio representativo del proyecto.
cada, esta conexión tiene el efecto de transfor- El contrato de la comisión de Vitra incluía un
mar la lógica preexistente del sitio. master plan del sitio, la fábrica para el

Peter Eisenman.
Columbus Convention
Center (1989-93).
Ohio, Estados Unidos.

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ensamblaje de las sillas y el museo. En el El efecto fue más dramático aún, porque al
diseño preliminar, Gehry simplemente alineó igual que el centro de convenciones de
la fábrica con las construcciones preexisten- Eisenman, las adiciones tejían vínculos afi-
tes, dejando el museo y su geometría de liativos entre ambos edificios, alisando el
Medusa en franco contraste. A pesar de sitio en una totalidad heterogénea pero
reducir este contraste al optar por una envol- cohesiva. Pero a diferencia de esa obra, las
vente de enlucido blanco que lo relacionaba escaleras se introdujeron en el sitio como un
con las otras construcciones, como un injer- campo más que como un objeto, orientado a
to en el sitio, la forma del museo instaló una la posibilidad de una coherencia intensiva
incoherencia desarticuladora asociada con que generaba un efecto de alisado a escala
el collage. El cliente, preocupado por el urbana. Desde esta perspectiva, estas adi-
rechazo de los empleados que habían inver- ciones contribuyeron más a una arquitectura
tido en el museo, le pidió que desalineara la de DeFormación que el museo mismo.
fábrica. Como respuesta, Gehry le agregó Otras genealogías de la DeFormación podrí-
dos apéndices circulatorios que reiteraban an ser trazadas, de modo que no puede otor-
los tentáculos retorcidos del museo en las garse a estos tres ejemplos un carácter de
dos esquinas más próximas al museo. inicio. De todos modos sirvieron para dejar

Frank Ghery. Vitra Design Museum (1989). Weil am Rhein, Alemania.

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sentado dos de sus principios claves: 1) un Cartier en Montreal, recurrimos a una gran
énfasis en la forma arquitectónica abstracta envolvente propia de la DeFormación con
y monolítica que aborda mínimas referen- tres teatros interdependientes flotantes
cias o semejanzas directas a un sitio dado; como objetos en corte. Como en la
2) el desarrollo de afiliaciones que alisan, InFormación toda la superficie, interior y
suavizan organizaciones menores que ope- exterior, estaba programada de modo que
ran en el contexto a través de las cualidades todos los espacios fueran intersticiales y
geométricas, topológicas y/o espaciales de residuales, y pudiera activárselos en forma
la forma. Pero antes de avanzar en las dis- secuencial y no jerárquica. Sin embargo, las
cusiones que se han desarrollado sobre similitudes entre la forma de la envolvente y
estas cuestiones, conviene trazar la evolu- los teatros dieron como resultado un espacio
ción de uno de estos principios. más homogéneo que intersticial.
Al analizar estos ejemplos es posible consta- Analizados estos principios y tomando como
tar que dejan intacta la congruencia clásica referencia los debates internos de estos pro-
entre la volumetría y el corte. La piel de los yectos, es posible pensar en la
edificios sigue siendo particionada según las DeFormación es un camino a seguir. Entre
jerarquías derivadas del programa en espa- estos debates el más interesante tiene que
cios mayores, menores y de servicio, ya ver con las técnicas para producir afiliacio-
implicados en la volumetría. La cuestión es nes alisantes. En la medida que requieren
cómo evitar el espacio continuo y homogé- de vínculos flojos entre organizaciones
neo de la planta libre, o el espacio finito y dominantes y contingentes operando en un
jerárquico de las estrategias tradicionales de contexto dado, algunos arquitectos trabajan
recintos. identificando estos dos tipos de organización
Varios proyectos sugieren modos de aproxi- y luego orientando el diseño a su conexión;
marse a la cuestión del corte: el Instituto de otros se apoyan en las afiliaciones contex-
investigación Carnegie Mellon de Eisenman, tuales intrínsecas, como Eisenman. En
el proyecto de Nouvel y Starck para el con- ambos casos la mayoría de estos vínculos
curso de la opera de Tokio, y la Biblioteca de no son planificados y ocurren luego de injer-
Francia de Koolhaas. En el caso de tar el proyecto al sitio.
Eisenman se trata de un encadenamiento de El complejo deportivo de Odawara de Shoei
vainas -un gran objeto escultórico que alude Yoh es un ejemplo de la primera opción.
a vainas flotando en forma concéntrica- que
otorgan al espacio principal un carácter resi-
dual. El teatro de Nouvel/Starck está empo-
trado como un objeto incongruente en la
volumetría urbana. En la Biblioteca,
Koolhaas alcanzó el ejemplo seminal de la
idea de InFormación separando al extremo
el espacio en corte de la volumetría.
Junto con Shirdel y A. Zago seguimos inda-
gando en métodos para la generación de for-
mas monolíticas y afiliativas, e innovaciones
en el corte. En nuestra propuesta de una
Estructura-Acontecimiento para la plaza Shoei Yoh. Complejo deportivo de Odawara.

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Diseñó la compleja cubierta mapeando deta- be estas referencias a la DeFormación, del
lladamente las fuerzas contingentes, como el mismo modo que cuestiona las referencias
peso de la nieve, sobre el diagrama estructu- explícitas al modernismo de la InFormación.
ral. Afinó este mapeo abandonando las trian- Otro tipo de técnica es la que parte de un
gulaciones geométricas usuales algo grose- grupo de figuras complejas para derivar a
ras, y resolviendo los diferenciales en una abstracciones no representativas a través
escala mucho más sensible. El resultado fue del camuflaje, los programas de modelado
una forma inusualmente ondulante que le que llevan una forma a otra, o técnicas topo-
permitió evitar los riesgos de las demandas lógicas como el NURBS que unen las super-
estilísticas del proyecto. Con el desarrollo de ficies delimitadas por dos figuras bidimensio-
las técnicas informáticas, este tipo de aproxi- nales separadas en un sólido liso. En tanto
mación maximizando la utilización del mate- estos métodos recurren a geometrías ane-
rial, sin dudas tendrá sus seguidores. xactas y superficies no desarollables, otros
A pesar de su atractivo, tiene sus riesgos. arquitectos se concentraron en su estudio.
Puede transformar la DeFormación en una La geometría anexacta estudia formas no
arquitectura sustentada en la búsqueda de describibles por expresiones algebraicas,
influencias contingentes, como las teorías pero que muestran alto grado de consisten-
dodecafónicas de música atonal de A. cia; las superficies no desarrollables no pue-
Schoenberg derivaron en la música serial y den ser aplastadas en un plano.
en compositores concentrados en identificar Creo que el tema del pliegue se entiende
nuevas líneas tonales. Como lo advirtiera más como técnica arquitectónica que como
Greg Lynn, “pronto estaremos diseñando filosofía aplicada. Para los que nunca oyeron
formas sustentadas en las turbulencias de Deleuze, ni conocen los diagramas de
aéreas generadas por los peatones próxi- Lacan o René Thom, el pliegue como forma
mos al edificio”. Más grave es que se trata y el plegado como proceso transformativo
de procesos de alineación, más que de afi- tiene muchos atractivos. Da lugar a figuras
liación. Predeterminando las influencias monolíticas y plenas de espacios intersticia-
contingentes a tener en cuenta, se está les, genera la posibilidad de espacios urba-
solamente variando el tipo de determinacio- nos que negocien entre la homogeneidad
nes del sitio a considerar. La prueba para infinita de la cuadrícula y la heterogeneidad
determinar hasta qué punto se trata de jerárquica de los patrones geométricos como
DeFormaciones, no va a depender del éxito en Rebstock o permite “alisar” el vínculo
del proyecto para encarnar respuestas a entre organizaciones diversas. Pero ninguno
esas influencias, sino de los efectos contin- de los que recurre a los diagramas de Thom,
gentes que pueda generar. pretende inscribir el espacio acontecimental
El problema reside en pretender encarnar y cuatridimensional que el diagrama descri-
efectos a priori: la cuestión de la be para los matemáticos: se trata de un
DeFormación es la elucidación de métodos hecho arquitectónico; como tampoco pien-
para generar formas monolíticas, no repre- san en Decartes cuando usan la grilla: pocos
sentativas, que tiendan a establecer afiliacio- habitantes de las ciudades americanas
nes a posteriori. Si se tratara simplemente sufren de la cesura entre cuerpo y mente al
de gestos y articulaciones, bastaría con caminar por una ciudad en damero. En todos
recurrir a técnicas expresionistas. Pero el los casos se trata de una utilización del dia-
principio de mínima representación le prohí- grama sólo por sus efectos arquitectónicos.

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Como es típico en Eisenman, inscribe un Al estudiar el famoso tempo Todai-ji de
partido derivado de los Siedlungen de Ernst Nara, Shirdel identificó un espacio domina-
May en el sitio y operando estrictamente en do por tres figuras: un Buda gigante flan-
el campo del dibujo, proyecta ambos en figu- queado por otras dos más pequeños. Con
ras formadas por los límites de ambos siste- ese estímulo decidió encastrar cada uno de
mas que crean la ilusión que ambas organi- los tres teatros como objetos flotantes en el
zaciones fueron plegadas. Intenta transfor- corte. Sus formas fueron simplemente defi-
mar el espacio axonométrico moderno del nidas por las exigencias funcionales. Al
primer esquema, en un espacio visual que ingresar al templo los visitantes se encuen-
planea entre la axonométrica y la perspecti- tran con las tres figuras de Buda de mane-
va con múltiples puntos de fuga. La figura ra frontal como en los ordenamientos clási-
del pliegue –una cita del corte a través de un cos que subrayan la relación entre sujeto y
diagrama de Thom- aparece sobre los edifi- objeto; Shirdel opta por alinear las tres
cios afectando los débiles vínculos transdis- salas axialmente de modo que los que visi-
ciplinarios a los que Eisenman es tan adicto. ten el museo sólo enfrenten un espacio
Muchos diagramas –estado de espejo de vacío donde flotan las tres salas una tras
Lacan, los diagramas del pliegue umbilical otra. Para diseñar la envolvente y configu-
hiperbólico y parabólico de la Teoría de la rar el ingreso como un espacio intersticial,
Catástrofe de Thom- atrajeron a los arquitec- usa dos pliegues: reconfigura la volumetría
tos. Permiten sortear las dificultades de los del injerto original según el diagrama hiper-
procesos expresionistas ofreciendo cierta bólico de Thom, extendiéndolo al paisaje de
disciplina en los proceso, usándolos de tra- modo de alisar las conexiones del edificio
zados reguladores permite diseños de con el sitio. Luego modela la viga que sos-
mayor rigor. Como decía Le Corbusier, los tienen las tres salas y el lobby de una
trazados reguladores son una garantía con- pequeña sala de conciertos, usando el dia-
tra la voluntad. Como no son ni absoluta- grama parabólico. Como resultado el espa-
mente figurativos ni absolutamente abstrac- cio principal residual entre la topología de
tos, permiten generar efectos de semejanza, ambos pliegues, refuerza su carácter de
débiles. Finalmente en tanto organizaciones ingreso constreñido. De esta manera
formales complejas, pueden tener caracte- Shirdel ensaya una forma totalmente nueva
rísticas espaciales deseadas para encarnar en lo arquitectónico e institucional, y sus
en arquitecturas. afiliaciones tienen tanto carácter formal
Un uso más sofisticado es el de Shirdel en como espacial, cumpliendo con los cinco
el Centro de Convenciones Nara. En lugar criterios que hemos señalado como propios
de comenzar con un partido tipológico o for- de la Nueva Arquitectura: es orientada,
mal, inicia el diseño con el injerto en el sitio vacía, vasta, incongruente e intensivamen-
de un fragmento de un proyecto anterior, en te coherente.
el que dos lóbulos se unen oblicuamente Falta ver si la DeFormación y la InFormación
definiendo un espacio intersticial. maduran o no en una Nueva Arquitectura.
Transferido al Nara tiene la ventaja de ser De todos modos, podemos afirmar que
incongruente y coherente al mismo tiempo, ambas han enfrentado el problema de lo
efecto que refuerza usando el espacio Nuevo y ofrecen una cuota de optimismo. Y
intersticial como ingreso principal del nuevo los críticos e historiadores no han comenza-
edificio. do a cercarlos con ahínco, todavía.

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Notas: Shirdel para el distrito de negocios de Montreal.
1. Los historiadores ya han subrayado la similitud de los Respecto a la InFormación, estos temas se pueden
trabajos que voy a comentar con el espacio barroco y verificar en los proyectos de Koolhaas para Lille o La
las formas del expresionismo alemán. Seguramente ter- Defense, o Tschumi para Chartes.
minarán por acusar a los arquitectos y teóricos involu- 8. Uno de los rasgos más fascinantes de Eisenman, es
crados de no haberse dado cuenta porque no salpican su habilidad para derivar toda una tesis arquitectónica
sus proyectos de referencias a Guarini o Borromini o de una palabra clave o frase que, casualmente rastrea-
referencias a Taut, Poelzig, Haring o Scharoun, asumi- da en sus lecturas filosóficas. Sus invenciones general-
remos que estos trabajos fueron realizados en comple- mente derivan de la reacción inicial frente a lo que per-
ta ignorancia de estas similitudes. cibe como implicaciones arquitectónicas de un término
2. Roberto Unger, Knowledge and Politics, Free Press, sacado fuera de contexto. Se trate de la estructura pro-
N. York, 1979. funda de Chomsky, el rastro de Derrida, el scaling frac-
3. El término collage se usa como paraguas para una tal de Mandelbrot o lo débil de Vattimo, sus derivaciones
constelación de prácticas, el bricolage, el ensamblaje y tienen más que ver con su intuición de posibles efectos
distintas formas históricas del collage. A medida que arquitectónicas que con la corporización de las dimen-
avancemos en la argumentacion podríamos pensar que siones filosóficas originales de los términos. Este
el collage surrealista y su énfasis en borrar los injertos comentario no pretende ser menospreciativo, por el
podría proveer de un modelo adecuado; sin embargo no contrario, el mayor aporte de Eisenman es haber sabi-
dejan de enfatizar la ironía de los elementos diversos, y do mantener un diálogo con el discurso filosófico, pero
consecuentemente la incoherencia y disyunción. Mas liberando las exploraciones arquitectónicas de una fun-
adecuado podrían ser las pinturas de Jasper John en el ción ejemplificadora o representativa. Una cualidad que
que organizaciones reticulares ajenas a toda idealiza- no ha sido suficientemente subrayada por la crítica qui-
ción se materializan injertando formas extrañas zás por su propensión a atarse a analogías metafísicas
4. Las dificultades de un modelo de heterogeneidad en lugar de centrar su atención en la arquitectura
sustentado en el listado de especies definibles de diver- misma.
sidad tiene validez en muchos campos. En la reciente 9. El camuflaje es a menudo señalado como un tipo de
elección presidencial en USA, por ejemplo, el problema afiliación que “alisa”. Un camuflaje efectivo es en gene-
fue la frustración de un número oficialmente reconocido ral diferente de las influencias prevalecientes de un con-
de grupos de interés con pretensiones de influenciaren texto y generalmente está por fuera de los modos domi-
el gobierno federal. No importa cuán cínico sea uno, es nantes de una disciplina. Sin embargo su efecto es ali-
la inevitable consecuencia de un arreglo social que pre- sar, suavizar las diferencias entre el sitio y el intruso en
tende negociar el clásico conflicto entre individuo y otro contexto.
comunidad a través de una democracia que de voz a las A pesar que la discusión sobre la afiliación enfatiza los
diferencias, una democracia extensivamente incoheren- efectos entre formas, también sirve para debilitar el
te: implicaría repensar el concepto mismo de democra- énfasis tradicional en el vínculo entre forma y programa.
cia. Si nos detenemos en la historia, veremos que esta rela-
5. Se han visto algunos modos de este tipo de injertos ción es más de afiliación que de alineamiento, cuestión
en los trabajos de Hejduk (con sus fragmentos urbanos demostrada por tantas refuncionalizaciones. Se trata de
escenográficos y mito-poéticos) o Rossi (con su ensam- una relación débil que permitió a Rossi hacer los injer-
blaje incongruente de instituciones a través de su catá- tos tipológicos y a Tschumi a teorizar sobre la decons-
logo de formas arquitectónicas autónomas) trucción programática. ¿acaso algún edificio de la histo-
6. Ver Rem Koolhaas en su corto programa para el con- ria de la Arquitectura alcanzó su estatus por funcionar
curso de viviendas en Shinkenchiku: “No Style” bien? Sin duda fue la debilidad de estas afiliaciones la
7. Para dar cierta concentración me voy a limitar a con- que llevaron a Mies a clavar los mobiliarios en sus
siderar la DeFormación como cuestión de edificios, refi- casas. Este carácter meramente afiliativo entre forma y
riéndome a lo urbano sólo lateralmente. Varios proyec- función caracteriza a la DeFormación, oponiéndose a
tos han extendido estas búsquedas a ese campo, como cierta complacencia de la InFormación sobre la cuestión
Eisenman en el conjunto de Rebstock; o el proyecto de del programa.

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