Aparato Digestivo Del Pez
Aparato Digestivo Del Pez
Aparato Digestivo Del Pez
generalmente ectotérmicos, la mayoría de ellos recubiertos por escamas, y dotados de aletas, que
permiten su movimiento continuo en los medios acuáticos, y branquias, con las que captan el
oxígeno disuelto en el agua.
Los peces son abundantes tanto en agua salada como en agua dulce, pudiéndose encontrar
especies desde los arroyos de montaña (por ejemplo, el gobio), así como en lo más profundo del
océano (por ejemplo, anguilas tragonas).
Los alimentos preparados con pescado son una importante fuente de nutrición para los seres
humanos. Pueden ser pescados a partir de ejemplares silvestres, o criados de manera similar al
ganado (véase acuicultura). Hoy en día la llamada pesca deportiva cada día se vuelve una actividad
más popular. Los peces han tenido un papel importante en muchas culturas a través de la historia,
que van desde las deidades religiosas a temas de libros y películas. La especialidad de la zoología
que se ocupa específicamente de los peces se denomina ictiología.
Sistema digestivo
Si bien todas las especies de peces poseen boca, no todas han desarrollado mandíbulas (ejemplo
de esto son los agnatos). En el caso de las especies que si desarrollaron mandíbulas, esto les
permitió acceder a una variedad mucho más amplia de alimentos, incluyendo las plantas y otros
organismos.
En los peces, al ser la comida ingerida a través de la boca, es desglosada en el estómago. Órganos
como el hígado y el páncreas añaden enzimas digestivas. La absorción de nutrientes se realiza a
través del intestino.
Sistema locomotor
(1) - Opérculo, (2) - Línea lateral, (3) - Aleta dorsal, (4) - Aleta adiposa, (5) - Pedúnculo caudal, (6) -
Aleta caudal, (7) - Aleta anal, (8) - Fotóforo, (9) - Aleta pélvica, (10) - Aleta pectoral
Con el fin de desplazarse de la mejor manera en el medio acuático (principalmente), los peces han
desarrollado una serie de aletas, con diferentes funciones, algunas de ellas son:
Sistema circulatorio
Los peces tienen un sistema circulatorio cerrado con un corazón que bombea la sangre a través de
un circuito único por todo el cuerpo. La sangre va del corazón a las branquias, de éstas al resto del
cuerpo, y finalmente regresa al corazón. En la mayoría de los peces el corazón consta de cuatro
partes: el seno venoso, el atrio, el ventrículo y el bulbo arterioso. A pesar de consistir en cuatro
partes, el corazón de los peces está constituido por dos cavidades situadas en serie, una aurícula y
un ventrículo.3 El seno venoso es una cámara de paredes delgadas que recibe la sangre de las
venas del pez antes de permitirle fluir al atrio, una cámara muscular grande y que sirve como un
compartimento de dirección única que dirige la sangre hacia el ventrículo. El ventrículo es una
bolsa muscular de paredes gruesas encargada del bombeo hacia el corazón. El ventrículo se
contrae y empuja la sangre a un tubo amplio llamado bulbo arterioso. Al final de la parte opuesta,
el bulbo arterioso se une con un gran vaso sanguíneo llamado aorta, por la cual la sangre fluye
hacia las branquias del pez.
Sistema excretor
Al igual que muchos animales acuáticos, la mayor parte de los peces excretan residuos
nitrogenados en forma de amoníaco.4 Parte de sus excreciones se difunden a través de las
branquias en el agua circundante. El resto es expulsado por los riñones, órganos excretorios que
filtran la basura de la sangre. Los riñones ayudan a los peces a controlar la cantidad amoníaco en
sus cuerpos. Los peces de agua salada tienden a perder agua debido a la ósmosis. En los peces de
agua salada, los riñones concentran la basura y expulsan del cuerpo tan poca agua como les sea
posible. En el caso de los peces de agua dulce, la situación es a la inversa y tienden a obtener agua
continuamente. Los riñones de los peces de agua dulce están especialmente adaptados para
desechar grandes cantidades de orina diluida (o sea, con mucha agua).5 Algunos peces han
desarrollado riñones especialmente adaptados que cambian su función, permitiéndoles
trasladarse de agua dulce a agua de mar.
Sistema nervioso
Comparándolos con otros vertebrados, los peces tienen generalmente un cerebro pequeño en
relación al tamaño de su cuerpo, en torno a un quinceavo de la masa cerebral de aves o
mamíferos de un tamaño similar.6 Sin embargo, algunos peces tienen un cerebro relativamente
grande, como es el caso de los peces de la familia Mormyridae y los tiburones, cuyo cerebro tiene
una proporción entre masa cerebral y corporal similar al de las aves y los marsupiales.7
El cerebro está dividido en varias regiones. En la parte frontal se encuentran los lóbulos olfativos,
un par de estructuras que reciben y procesan señales de las narinas a través de dos nervios
olfativos.6 Los lóbulos olfativos están más desarrollados en peces que cazan principalmente por el
olor, como los mixinos, tiburones y peces gato. Tras los lóbulos olfativos se encuentra el
telencéfalo o cerebro anterior, estructura bilobular que en los peces concierne sobre todo al
olfato.6
El cerebro medio contiene los dos lóbulos ópticos. Éstos lóbulos son de mayor tamaño en especies
que cazan con la vista, como la trucha arcoíris y los cíclidos.6
El mielencéfalo la parte más posterior del cerebro.6 Además de controlar las funciones de algunos
músculos y órganos de cuerpo, en los peces óseos también se encarga de la respiración y la
osmorregulación.6
Muchos peces poseen órganos sensoriales muy desarrollados. Casi todos los peces diurnos tienen
ojos bien desarrollados que perciben el color al menos tan bien como los seres humanos. Muchos
peces también tienen células especializadas conocidas como quimiorreceptores que son
responsables de los sentidos del gusto y del olfato. Aunque disponen de oídos en sus cabezas,
muchos peces no perciben bien los sonidos. Sin embargo, la mayor parte de peces tienen
receptores sensibles que forman la línea lateral. La línea lateral permite a muchos peces detectar
corrientes suaves y vibraciones, así como sentir el movimiento de sus presas o de otros peces
cercanos.8 Algunos peces, como los tiburones o los peces globo, tienen órganos que perciben
niveles bajos corriente eléctrica.9 Otros, como la anguila eléctrica, puede producir su propia
electricidad.
Los peces se orientan usando puntos de referencia y pueden utilizar mapas mentales de relaciones
geométricas basadas en señales múltiples o símbolos. En estudios realizados con peces en
laberintos, se ha determinado que los peces utilizan rutinariamente la memoria espacial y la
discriminación visual.10
Capacidad para sentir dolor. Experimentos realizados por el Dr. William Tavolga, zoólogo del Mote
Marine Laboratory, aportan pruebas de que los peces muestran respuestas de miedo y dolor. Por
ejemplo, en losexperimentos de Tavolga, los peces sapo gruñían cuando se le aplicaban descargas
eléctricas, y con el tiempo comprobaron que ya gruñían ante la mera vista de un electrodo.11
El profesor James D. Rose de la Universidad de Wyoming criticó el estudio, afirmando que era
erróneo, principalmente por que éste no aportaba pruebas de que los peces poseen «percepción
consciente, en particular un tipo de percepción que se parezca de forma significativa a la
nuestra».15 Rose sostiene que ya que el cerebro de los peces es muy diferente del nuestro, los
peces probablemente no son conscientes (en la forma en que los son las personas), por lo que las
reacciones similares a las reacciones humanas al dolor tienen otras causas. Rose había publicado
su propia opinión un año antes sosteniendo que los peces no puede sentir dolor dado que sus
cerebros carecen de neocórtex.16 Sin embargo, la conductista animal Temple Grandin sostiene
que los peces podrían tener consciencia aún sin neocórtex, porque «especies distintas pueden
usar sistemas y estructuras cerebrales diferentes para tratar las mismas funciones.»14
Los defensores de los derechos de los animales han mostrado su inquietud sobre el posible
sufrimiento de los peces a causa de la pesca con caña. A la vista de recientes investigaciones,
algunos países como Alemania han prohibido determinados tipos de pesca, y la Royal Society for
the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA) británica, que considera que los peces es poco
probable que perciban el dolor del mismo modo que las personas, pero que hay evidencias
actualmente que indican que los peces realmente tienen la capacidad de percibir dolor y
sufrimiento, por lo que persigue judicialmente a los individuos que son crueles con los peces.
Descripción y funciones
Desde la boca hasta el ano, el tubo digestivo mide unos once metros de longitud. En la boca
empieza propiamente la digestión. Los dientes trituran los alimentos y las secreciones de las
glándulas salivales los humedecen e inician su descomposición química transformándose en el
bolo alimenticio. Luego, el bolo alimenticio cruza la faringe, sigue por el esófago y llega al
estómago, una bolsa muscular de litro y medio de capacidad, en condiciones normales, cuya
mucosa segrega el potente jugo gástrico, en el estómago, el alimento es agitado hasta convertirse
en el quimo.
A la salida del estómago, el tubo digestivo se prolonga con el intestino delgado, de unos seis
metros de largo, aunque muy replegado sobre sí mismo. En su primera porción o duodeno recibe
secreciones de las glándulas intestinales, la bilis y los jugos del páncreas. Todas estas secreciones
contienen una gran cantidad de enzimas que degradan los alimentos y los transforman en
sustancias solubles simples.
El tubo digestivo continúa por el intestino grueso, de algo más de metro y medio de longitud. Su
porción final es el recto, que termina en el ano, por donde se evacuan al exterior los restos
indigeribles de los alimentos.
En su trayecto a lo largo del tronco del cuerpo, discurre por delante de la columna vertebral.
Comienza en la cara, desciende luego por el cuello, atraviesa las tres grandes cavidades del
cuerpo: torácica, abdominal y pélvica. En el cuello está en relación con el conducto respiratorio, en
el tórax se sitúa en el mediastino posterior entre los dos pulmones y el corazón, y en el abdomen y
pelvis se relaciona con los diferentes órganos del aparato genitourinario.
El tubo digestivo procede embriológicamente del endodermo, al igual que el aparato respiratorio.
El tubo digestivo y las glándulas anexas (glándulas salivales, hígado y páncreas), forman el aparato
digestivo.
Histológicamente está formado por cuatro capas concéntricas que son de adentro hacia afuera:
Capa interna o mucosa (donde pueden encontrarse glándulas secretoras de moco y HCl, vasos
linfáticos y algunos nódulos linfoides). Incluye una capa muscular interna o muscularis mucosae
compuesta de una capa circular interna y una longitudinal externa de músculo liso.
Capa submucosa compuesta de tejido conectivo denso irregular fibroelástico. La capa submucosa
contiene el llamado plexo submucoso de Meissner, que es un componente del sistema nervioso
entérico y controla la motilidad de la mucosa y en menor grado la de la submucosa, y las
actividades secretorias de las glándulas.
Capa muscular externa, compuesta al igual que la muscularis mucosae, por una capa circular
interna y otra longitudinal externa de músculo liso (excepto en el esófago, donde hay músculo
estriado). Esta capa muscular tiene a su cargo los movimientos peristálticos que desplazan el
contenido de la luz a lo largo del tubo digestivo. Entre sus dos capas se encuentra otro
componente del sistema nervioso entérico, el plexo mientérico de Auerbach, que regula la
actividad de esta capa.
Capa serosa o adventicia. Se denomina según la región del tubo digestivo que reviste, como serosa
si es intraperitoneal o adventicia si es retroperitoneal. La adventicia está conformada por un tejido
conectivo laxo. La serosa aparece cuando el tubo digestivo ingresa al abdomen, y la adventicia
pasa a ser reemplazada por el peritoneo.
Los plexos submucoso y mientérico constituyen el sistema nervioso entérico que se distribuye a lo
largo de todo el tubo digestivo, desde el esófago hasta el ano.
Por debajo del diafragma, existe una cuarta capa llamada serosa, formada por el peritoneo.
El bolo alimenticio pasa a través del tubo digestivo y se desplaza así, con ayuda tanto de
secreciones como de movimiento peristáltico que es la elongación o estiramiento de las fibras
longitudinales y el movimiento para afuera y hacia adentro de las fibras circulares. A través de
éstos el bolo alimenticio puede llegar a la válvula cardial que conecta directamente con el
estómago.Si el nivel de corte es favorable, se pueden ver los mesos. El peritoneo puede presentar
subserosa desarrollada, en especial en la zona del intestino grueso, donde aparecen los apéndices
epiploicos.
Según el sector del tubo digestivo, la capa muscular de la mucosa puede tener sólo músculo
longitudinal o longitudinal y circular.
El grosor de la pared cambia según el lugar anatómico, al igual que la superficie, que puede ser lisa
o no. El epitelio que puede presentarse es un plano pluriestratificado no cornificado o un
prismático simple con microvellosidades.
Descripción anatómica
Esófago
Estómago
Es el encargado de hacer la transformación química ya que los jugos gástricos transforman el bolo
alimenticio que anteriormente había sido transformado mecánicamente (desde la boca).
En su interior encontramos principalmente dos tipos de células, las células parietales, las cuales
secretan el ácido clorhídrico (HCl) y el factor intrínseco, una glucoproteína utilizada en la absorción
de vitamina B12 en el intestino delgado; además contiene las células principales u Oxínticas las
cuales secretan pepsinógeno, precursor enzimático que se activa con el HCl formando 3 pepsinas
cada uno.
La secreción de jugo gástrico está regulada tanto por el sistema nervioso como el sistema
endocrino, proceso en el que actúan: la gastrina, la colecistoquinina (CCK), la secretina y el péptido
inhibidor gástrico (PIG).
Lípidos.
Otras funciones del estómago son la eliminación de la flora bacteriana que viene con los alimentos
por acción del ácido clorhídrico.
Es una glándula íntimamente relacionada con el duodeno, es de origen mixto, segrega hormonas a
la sangre para controlar los azúcares y jugo pancreático que se vierte al intestino a través del
conducto pancreático, e interviene y facilita la digestión, sus secreciones son de gran importancia
en la digestión de los alimentos.
Hígado
El hígado es la mayor víscera del cuerpo. Pesa 1500 gramos. Consta de cuatro lóbulos, derecho,
izquierdo, cuadrado y caudado; los cuales a su vez se dividen en segmentos. Las vías biliares son
las vías excretoras del hígado, por ellas la bilis es conducida al duodeno. Normalmente salen dos
conductos: derecho e izquierdo, que confluyen entre sí formando un conducto único. El conducto
hepático, recibe un conducto más fino, el conducto cístico, que proviene de la vesícula biliar
alojada en la cara visceral de hígado. De la reunión de los conductos císticos y el hepático se forma
el colédoco, que desciende al duodeno, en el que desemboca junto con el conducto excretor del
páncreas. La vesícula biliar es una víscera hueca pequeña. Su función es la de almacenar y
concentrar la bilis segregada por el hígado, hasta ser requerida por los procesos de la digestión. En
este momento se contrae y expulsa la bilis concentrada hacia el duodeno. Es de forma ovalada o
ligeramente piriforme y su diámetro mayor es de unos 5 a 8 cm.
Intestino delgado
En el intestino delgado se absorben los nutrientes de los alimentos ya digeridos. El tubo está
repleto de vellosidades que amplían la superficie de absorción.
El duodeno, que forma parte del intestino delgado, mide unos 25-30 cm de longitud; el intestino
delgado consta de una parte próxima o yeyuno y una distal o íleon; el límite entre las dos
porciones no es muy aparente. El duodeno se une al yeyuno después de los 30 cm a partir del
píloro.
El yeyuno-íleon es una parte del intestino delgado que se caracteriza por presentar unos extremos
relativamente fijos: El primero que se origina en el duodeno y el segundo se limita con la válvula
ileocecal y primera porción del ciego. Su calibre disminuye lenta pero progresivamente en
dirección al intestino grueso. El límite entre el yeyuno y el íleon no es apreciable. El intestino
delgado presenta numerosas vellosidades intestinales que aumentan la superficie de absorción
intestinal de los nutrientes y de las proteínas. Al intestino delgado, principalmente al duodeno, se
vierten una diversidad de secreciones, como la bilis y el jugo pancreático.
Intestino grueso
El intestino grueso se inicia a partir de la válvula ileocecal en un fondo de saco denominado ciego
de donde sale el apéndice vermiforme y termina en el recto. Desde el ciego al recto describe una
serie de curvas, formando un marco en cuyo centro están las asas del yeyuno íleon. Su longitud es
variable, entre 120 y 160 cm, y su calibre disminuye progresivamente, siendo la porción más
estrecha la región donde se une con el recto o unión rectosigmoidea donde su diámetro no suele
sobrepasar los 3 cm, mientras que el ciego es de 6 o 7 cm.
Tras el ciego, la del intestino grueso es denominada como colon ascendente con una longitud de
15 cm, para dar origen a la tercera porción que es el colon transverso con una longitud media de
50 cm, originándose una cuarta porción que es el colon descendente con 10 cm de longitud. Por
último se diferencia el colon sigmoideo, recto y ano. El recto es la parte terminal del tubo
digestivo.