I.

ANÁLISIS DE LA LECTURA DEL CAPÍTULO 4 DEL LIBRO:

“PRIMEROS MIL DÍAS DEL BEBÉ Y SALUD BUCAL”

Los estudios nacionales e internacionales, han demostrado una alta

prevalencia en el uso del biberón, tanto en el ambiente urbano como
rural, mientras que el uso de chupetes es utilizado en menor escala
en los ámbitos rural y urbano, siendo éste último el que presenta la
mayor prevalencia.

La utilización de biberones está asociada a la necesidad de brindar al

bebé algún tipo de líquido como leche artificial, agua o té,
considerados como de succión nutritiva; siendo el chupete como en
medio de succión no nutritiva.

El uso de chupón y biberones está desaconsejado, ya que

interrumpen precozmente la lactancia materna exclusiva y a la vez
repercuten en la salud y desarrollo infantil.

A. Uso de Tetinas Artificiales y la Salud Infantil:

El uso de tetinas artificiales causa un gran impacto en la salud
del niño, por lo que a continuación presentamos las principales
evidencias científicas:
a. Funciones Orales:
Siendo el sistema estomatognático el responsable de la
ejecución de las funciones orales de succión,
respiración, masticación, deglución y fono articulación,
van a permitir al bebé un adecuado proceso de
nutrición, crecimiento, comunicación y biogénesis de la
dentición.
La lactancia materna exclusiva, va a permitir una
adecuada actividad muscular, siendo esencial en el
desarrollo orofacial, al estimular el tono muscular y el
crecimiento equilibrado del sistema estomatognático.
El uso de tetinas artificiales pueden afectar al
funcionamiento del sistema estomatognatico en:
 i. Succión: siendo la succión uno de los reflejos orales
del recién nacido a término, la lactancia materna
(succión de pecho) cumple una función muy
importante en el desarrollo estomatognático del
recién nacido, lo cual le va favorecer al desarrollo
muscular de la lengua, labios, mandíbula y
coordinación entre succión, respiración y deglución;
mientras que la succión con tetina del biberón, trae
al bebé consecuencias negativas al permitir una fácil
fluidez de la leche, sobrecargando la musculatura
orofacial, produciendo una disminución de la base
nasal y ocasionando problemas oclusales y
respiratorios futuros.
ii. Masticación y Deglución: la masticación del niño
se verá afectada por el uso del biberón al producirle
una masticación anormal, reduciendo los
movimientos mandibulares y llevando al bebé a
mover la lengua hacia atrás, aumentando las
posibilidades de hipo o hiperactividad de la misma,
produciendo dificultad al masticar alimentos sólidos
afectando al desarrollo orofacial, muscular y óseo.
El efecto negativo del uso del biberón en la
masticación puede desencadenar una serie de
alteraciones a las articulaciones
temporomandibulares, las cuales pueden producir
una deglución atípica ocasionando maloclusiones
como mordida abierta anterior o lateral debido a la
presión de la lengua sobre los dientes.
iii. Respiración: durante la infancia es muy frecuente la
respiración bucal, ya sea por cansancio,
somnolencia diurna, bajo apetito o enuresis
nocturna; siendo más frecuente en niños no
amamantados y que se alimentan por medio del
biberón, ocasionando una hipo-tonicidad muscular
 de los labios y la lengua; llevándolos a desarrollar
una respiración oral, siendo visibles características
los labios entreabiertos, lengua rebajada,
hiperfunción del músculo mentoniano durante la
oclusión de los labios, musculatura flácida,
maloclusiones, labio inferior invertido, entre otras;
desarrollando modificaciones de sus funciones
orales.
iv. Habla y Lenguaje Oral: el uso prolongado de
tetinas artificiales producen efectos negativos en la
adquisición y producción del habla, debido a la
disminución del balbuceo y emisión de palabras
ocasionando una vocalización distorsionada.
b. Dentición:
i. Caries: los niños que tienen uso frecuente del
biberón son más propensos a contraer caries dental
debido al consumo de líquidos/alimentos con
presencia y/o agregados de azúcar en su mezcla,
siendo el consumo de azúcar la principal causa para
el desarrollo de caries dental.
ii. Maloclusión: al realizar una comparación entre el
uso del chupete y la succión digital, se puede
observar una alta incidencia de alteraciones
oclusales ocasionando mordida abierta anterior y la
mordida cruzada posterior.
La dentición temporal o el inicio de la dentición
mixta, se ve afectada por el uso de chupetes, siendo
la frecuencia, intensidad y duración (mayor a 2
años), lo que va a influir en la gravedad dela
maloclusion, pudiéndose presentar alteraciones
oclusales graves antes de los 2 años de edad. Por
tal motivo, es recomendable que ante el uso de
chupetes, éstos sean retirados de preferencia a
 partir de los 6 meses de edad de una manera
progresiva.
c. Otitis Media Severa: el uso de tetinas, especialmente
el chupete, produce un 1.8 veces más riesgo de
producir una otitis media aguda, severa o recurrente en
el desarrollo infantil a consecuencia de la falta de
estímulo adecuado del músculo tensor del paladar
membranoso, responsable de la tuba auditiva,
aumentando el riesgo de contraer la enfermedad.
d. Seguridad Inmunológica Física y Química: la higiene
inadecuada de tetinas artificiales, puede aumentar el
riesgo de contraer infecciones que afectan al sistema
inmunológico. Además, el mal uso y/o mal estado de
estas tetinas, puede producir asfixia y/o
estrangulamiento causados por partes o accesorios de
éstos.
En el látex de las tetinas se puede encontrar la
presencia de N-nitrosamina, que al entrar en contacto
con la saliva puede producir riesgos a la salud del bebé.
e. Niveles de Inteligencia: la reacción innata del niño de
poder expresarse por medio del llanto, es suprimida en
gran medida por el chupete, el cual es considerado
como un accesorio paliativo para calmar y/o evitar el
llanto del niño, disminuyendo enormemente su
desarrollo de vocalización y comunicación, conllevando
a la baja atención de las demandas fisiológicas y al
desarrollo cognitivo y emocional adecuado para el
bebé.
f. Vicios Orales en la Vida Adulta: el uso prolongado del
chupete (más de 2años), produce en el adulto la
necesidad de calmarse por medio de vicios orales como
el cigarrillo.
g. Factores Emocionales: a mayor frecuencia y duración
del uso prolongado del chupete, es más común ver en
 niños una alteración de las expresiones faciales y
reducción de sus habilidades emocionales.
B. Tópicos Polémicos sobre el Uso de Chupetes y Biberones
en la Salud Infantil:
a. Uso de Chupete y el Riesgo de Destete Precoz: el
uso del chupete produce un efecto negativo en la
lactancia materna, ya que al ofrecer el chupete en lugar
del seno materno, se ocasiona una disminución en la
frecuencia de la lactancia materna, provocando el
destete precoz debido a la saciedad neural, cansancio
muscular o por la confusión del pezón
b. Muerte Súbita: la muerte súbita en lactantes ocurre
principalmente en niños menores de 1 año, habiendo
mayor prevalencia entre los 2 y 4 meses de vida.
No se puede precisar con certeza que el uso de
chupetes influye en la muerte súbita del lactante, ya
que los bebés al entrar en sueño profundo,
generalmente suelen soltar el chupete de la boca,
haciendo difícil una asociación entre el uso del chupete
y la muerte súbita del lactante.
Las medidas preventivas para el Síndrome de Muerte
Súbita del Lactante (SMSL) en un 70%, son efectivos,
siendo una de ellas el hacer dormir al lactante boca
arriba, no consumir cigarrillos dentro de casa; dejar
fuera de la cama del bebé almohadas, juguetes y
cojines, principalmente durante el primer año de vida.
c. Confusión de Pezón: el uso de tetinas artificiales, le
dificulta al bebé a realizar una configuración oral para
coger y succionar el pezón.
d. Dedo o Chupete: el ofrecer el uso del chupete como
sustituto de la succión del dedo, es muy frecuente,
aflorando en el niño la necesidad neural de succión
común durante el desarrollo infantil, el cual se inicia en
la vida intra-uterina entre los 18 – 24 semanas, cuando
 el feto comienza a desarrollar el reflejo de succión,
entrenando con el propio dedo o el cordón umbilical.
Por lo tanto, la succión de dedos y/o manos debe ser
considerada como una reacción fisiológica y
beneficiosa para el bebé.
e. Vasitos, Tetinas Ortodónticas o tetinas
convencionales: el uso prolongado de chupete y
biberón, producirá una interferencia en el sistema
estomatognático del niño, independientemente del uso
de tetina ortodóncica o tradicional.
La recomendación ante la imposibilidad de brindar
lactancia materna, se recomienda el uso de vasitos con
boca ancha desde el inicio de la alimentación
complementaria, evitando de ésta manera, el uso de
biberón y/o chupete que interfieran en el desarrollo del
sistema estomatognático, ni en la ejecución de
funciones orales (masticación, habla, respiración y
deglución).
f. Consideraciones sobre el Uso de Fórmula Infantil
por medio del Biberón: la sustitución de la leche
materna por fórmula infantil, no brinda todas las
características que proporciona la leche materna, al
proveer al bebé de hormonas, enzimas e
inmunoglobulinas que proporcionan protección al bebé,
siendo considerad como patrón de oro en la nutrición
infantil.
Durante el uso de fórmula se puede evidenciar una
considerable ganancia de peso y presencia de mayor
masa libre de grasa durante el primer año de vida en
relación a niños amamantados. El realizar una
preparación de la fórmula, siguiendo estrictamente las
indicaciones del rótulo del producto nos garantiza que el
niño reciba la cantidad suficiente ofrecida por el tipo de
fórmula, sin incurrir en el exceso o disminución de
 nutrientes que sólo puede provocar obesidad o
desnutrición en la infancia.
Se debe evitar el riesgo de contaminación haciendo una
correcta esterilización del biberón y uso de agua de
buena calidad.

II. SÍNTESIS DE LA LECTURA DEL CAPÍTULO 4 DEL LIBRO:

“PRIMEROS MIL DÍAS DEL BEBÉ Y SALUD BUCAL”
Los estudios nacionales e internacionales han demostrado una alta
prevalencia en el uso del biberón, tanto en el ambiente urbano como
rural, mientras que el uso de chupetes es utilizado en menor escala
en zonas rurales y urbanas, siendo ésta última la que presenta mayor
prevalencia.
La utilización de biberones está asociada a la necesidad de brindar al
bebé algún líquido, como leche artificial, agua o té, considerados
como de succión nutritiva, siendo el chupete considerado como de
succión no nutritiva.
El uso de chupetes y biberones está desaconsejado, ya que
interrumpen precozmente la lactancia materna exclusiva, y a la vez
repercute en la salud y desarrollo infantil.