Clase Social y Tipos de Clases Sociales
Clase Social y Tipos de Clases Sociales
Clase Social y Tipos de Clases Sociales
Índice
Introducción............................................................................................................................2
¿Qué entendemos por clase social?.........................................................................................3
Historia de las clases sociales y desigualdad social................................................................4
Tipos de clases sociales...........................................................................................................6
Tipos de clases sociales según Karl Marx..............................................................................9
Conclusiones.........................................................................................................................11
Bibliografía...........................................................................................................................12
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Introducción
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¿Qué entendemos por clase social?
El concepto de clase social es una mera herramienta analítica, y por lo tanto tiene una
función heurística que ayuda a la persona que se embarca en el estudio social. Como tal
herramienta, puede ser concebida de múltiples formas en función al marco teórico desde el
que se trabaje. Las sociedades están estratificadas de una manera u otra: siguiendo lógicas
diferentes, basándose en conceptos clasificadores distintos, etcétera. En las sociedades
capitalistas dicha estratificación sigue una lógica predominantemente económica al estar
centrada (pero no exclusivamente) en la producción.
Así pues, en ese contexto, podemos decir que las clases son grandes grupos de hombres que
se diferencian entre sí por el lugar que ocupan en un sistema de producción social
históricamente determinado, con respecto la producción, que desempeña en la organización
social del trabajo, por el modo y la proporción en que perciben la parte de la riqueza social
de que disponen.
Lenin define las clases sociales de la siguiente manera: “Las clases son grandes grupos de
hombres que se diferencian entre sí por el lugar que ocupan en un sistema de producción
social históricamente determinado, por las relaciones en que se encuentran con respecto a
los medios de producción (relaciones que las leyes refrendan y formulan en gran parte), por
el papel que desempeñan en la organización social del trabajo, y, consiguientemente, por el
modo y la proporción en que perciben la parte de la riqueza social de que disponen. Las
clases son grupos humanos, uno de los cuales puede apropiarse el trabajo de otro por
ocupar puestos diferentes en un régimen determinado de economía social”.
Está definición nos lleva a caracterizar las clases como grupos de la sociedad que tienen
contradicciones entre sí, ya que las relaciones que se establecen entre ellos son relaciones
de explotador hacia explotado (uno se apropia el trabajo de otro). Por otro lado, Karl Marx
decía que las clases sociales pueden entenderse de dos formas, sea como: 1) grupos de
individuos que se definen por una misma categorización de sus formas de relacionarse con
los medios materiales de producción (particularmente la forma de obtención de sus rentas),
o 2) una conciencia de clase entendida como la creencia en una comunidad de intereses
entre un tipo específico de relaciones socioeconómicas.
Sin embargo, pese a la importancia histórica de los comentarios y definiciones tanto de
Lenin como Marx, a día de hoy, son prácticamente obsoletos, pues éstas están hechas desde
una perspectiva a la cual, en palabras simples, podemos llamar “de izquierda” o
“socialista”. Es por ello que en la actualidad, una clase social suele entenderse mejor como
grupos de personas que tienen cosas en común y que se crean según su situación
económica, social, el lugar donde viven y su educación. Las clases sociales implican la
presencia de grupos claramente diferenciados, uno de los cuales disfrutan por lo general de
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una serie de privilegios y tiene mayor acceso y a los bienes y comodidades existentes en
una sociedad, y otro u otros grupos que se encuentran por debajo del primero.
Los grupos humanos, desde que se conformaron las primeras tribus, se agrupaban de
acuerdo a las características y ubicación geográfica correspondiente, es decir, iban ya
formando lo que se le denomina como “tribus”. Con la evolución de las civilizaciones, se
fue abriendo paso a diversas formas de organización humana, que por lo general iban de
acorde a sus necesidades, ideologías, y en busca de un bien común. Con la conformación de
aldeas aparecen así las primeras formas de gobierno, en las que aparecían ya, las primeras
células que conformaban una sociedad.
En el principio de la humanidad cuando el hombre se alimentaba de lo que recolectaba o
cazaba, no se podía hablar de clases sociales y por lo tanto tampoco de desigualdad social,
sin embargo, el desarrollo de las herramientas, las jerarquías religiosas, el desarrollo de la
agricultura y las guerras comenzaron a producir un remanente por el cual una familia podría
apropiarse de medios de producción, es decir esclavos, éstos trabajaban a costa de sus
amos, formándose así una marcada diferencia entre esclavos (explotados) y esclavistas
(explotadores).
En el sistema esclavista, por ejemplo, el amo era dueño no sólo de la tierra y otros medios
de producción, sino que también era dueño de los hombres que trabajaban la tierra, que
remaban en sus barcos, que servían en sus casas. Estos hombres eran considerados por él
como un instrumento de trabajo más, y por ello los obligaba a trabajar hasta donde dieran
sus fuerzas, dándoles de comer y permitiéndoles descansar sólo para que pudieran reponer
la energía gastada durante el trabajo, y así estar listos para salir a trabajar al día siguiente.
En el sistema servil, el terrateniente, dueño del medio de producción más importante: la
tierra, concedía pequeños pedazos de ella a los campesinos, los que en cambio se veían
obligados a trabajar en el terreno que el terrateniente se guardaba para sí. Esto lo hacían
durante una gran cantidad de días al año sin recibir ningún pago por ese trabajo, debiendo
sobrevivir con los frutos obtenidos del trabajo de su pequeño terreno.
Con el tiempo los esclavos comenzaron a revelarse contra sus amos y los pueblos
esclavizados dejaron de ser rentables, surgiendo así el feudalismo, el cual puede definirse
como “el modo de organización de la propiedad y gobierno, por el cual los soberanos o
grandes señores concedían en la edad media tierras en usufructo”. En este sistema la
desigualdad social estaba formada por estamentos y éstos eran designados
por el rey, obligándose a quien los recibía guardar fidelidad de vasallo al donante.
Al igual que el esclavismo, el feudalismo comenzó a hacerse obsoleto, el avance técnico de
las herramientas hizo que la importancia de la producción estuviera en la industria y ya no
en la tierra, creando una desigualdad social entre capitalistas o burgueses, quienes eran los
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poseedores de los medios de producción y los proletarios o trabajadores directos. Estos
últimos representaban la fuerza de trabajo.
En el sistema capitalista, los obreros, para poder vivir, necesitan ir a ofrecer su fuerza de
trabajo a los capitalistas; estos les pagan un determinado salario y obtienen, gracias a este
trabajo, grandes ganancias, las cuales, una pequeña parte es pagada a los trabajadores y el
resto es destinado al dueño de la fábrica/empresa o patrón.
En los sistemas de producción mencionados anteriormente, los medios producción están en
manos de unos pocos, los dueños de estos medios se apoderan del trabajo ajeno, explotan a
los trabajadores. Por lo tanto, podemos darnos cuenta que la desigualdad social en el pasado
estaba dada por la transmisión hereditaria o por mandato divino, pues podíamos hablar de
estamentos y castas. En la sociedad actual, la desigualdad social forma clases sociales, y
éstas no se rigen por la herencia ni por el designio de Dios, sino más bien tienen que ver
con la profesión y la graduación.
Sin embargo, la explotación no ha existido siempre. Como se mencionaba anteriormente,
en los pueblos primitivos, donde se produce apenas para sobrevivir, no existe propiedad
privada de los medios de producción: ellos pertenecen a toda la comunidad y los frutos del
trabajo de sus miembros se reparten entre todos en forma igualitaria.
En estos pueblos no existen relaciones de explotación, sino relaciones de colaboración
recíproca entre todos los miembros de la sociedad. La explotación no es, por lo tanto, algo
eterno, tiene un origen histórico bien determinado. Ella aparece cuando un grupo de
individuos de la sociedad logra concentrar en sus manos los medios de producción
fundamentales, despojando de ellos a la mayor parte de la población. Y ella desaparecerá
cuándo desaparezca la propiedad privada de los medios de producción y éstos pasen a ser
propiedad colectiva de todo el pueblo. Pero como es de suponer, que ocurra esto en la
actualidad es inmensamente improbable, pues esto implicaría un estado fallido, aunque aún
puede observarse en algunas comunidades indígenas y tribus en determinadas partes del
mundo.
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Tipos de clases sociales
En la actualidad nuestra sociedad está estratificada por clases sociales. Las clases son
grupos más o menos cerrados, determinados por el género de trabajo, por la propiedad, por
la formación del espíritu y los derechos políticos. Por otra parte, podemos mencionar
también que las clases sociales son las capas sociales, fundadas sobre las diferencias de
propiedad o sobre el hecho de la propiedad o la no propiedad, pues ambas definiciones
describen el concepto de clase de acuerdo elementos totalmente materiales.
Existen algunos factores para determinar la estratificación social, los cuales son:
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e) Aptitudes o cualidades excepcionales: Todas aquellas actividades realizada por los
individuos que conforman una sociedad, pero que tienen un plus, que es lo que lleva
a que los demás individuos los reconozcan, esto se debe a aptitudes como las que
tienen los deportistas de alto rendimiento, artistas, escultores, etcétera.
Dado que las clases son grupos más o menos cerrados, la movilidad entre las clases es
frecuente, es decir un individuo puede ser desclasificado o por el contrario, subir de clase,
podemos describir la división de clases en las siguientes tres: la clase alta; la clase media y
la clase baja. Esta definición contempla las clases en función de los bienes materiales con
que cuenta cada uno de estos grupos, lo que depende en gran medida de sus ingresos.
I. Clase alta: Esta es una definición descriptiva que se limita a señalar que existe
individuos más ricos que otros y que mete en un mismo saco a personas que tienen
funciones e intereses muy diferentes dentro de la sociedad. Dentro ésta clase, tiende
a haber divisiones entre los “viejos y nuevos ricos”, los primeros tienden a
menospreciar o excluir a los segundos, pues los viejos ricos han pasado su herencia
de generación en generación.
II. Clase media: En esta clase se encuentran personas con ocupaciones muy diferentes,
a los miembros de esta clase, en ocasiones de les conoce como “empleados
de cuello blanco”. La situación de éstos es contradictoria pues no son capitalistas y
aunque tengan que poner su fuerza de trabajo al servicio de los empresarios, no
son obreros. La clase media se divide en la vieja clase media, formada por
propietarios de pequeños negocios, la clase media alta incluye a profesionales que
ocupan puestos directivos y la clase media baja, en donde los miembros de ésta,
suelen tener actitudes sociales y políticas diferentes a los trabajadores manuales.
Aquí también se incluiría a un sector de las fuerzas armadas, a los profesores, a los
profesionales, sea que ejerzan libremente o como empleados, etcétera. Asimismo,
también encontramos al gremio de gerentes, directores, profesionistas y la
comúnmente llamada burocracia, son aquellos que no tienen la propiedad de los
medios de producción, pero tienden a imitar el comportamiento de la Clase Alta.
III. Clase baja: Considerada como la masa trabajadora es la que en cierta medida sirve
de soporte para las dos clases que están por encima de ella, por decirlo así de alguna
manera. Abarca a quienes tienen oficios manuales, ésta se subdivide en clase obrera
alta, formada por los trabajadores cualificados, clase obrera baja, en donde
se encuentran aquellos que realizan trabajos no cualificados (que necesitan poco
aprendizaje).
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La riqueza, el estado y la instrucción, son causas de desigualdad social, la escuela
desde la educación elemental hasta la educación superior y universidades forman una
superestructura, en donde ambos representan un peldaño o nivel, el más bajo (educación
elemental y secundaria) representa la educación común y es la base del nivel superior, éste
último representa una educación especializada, por lo tanto, los individuos que alcanzan
solo la educación elemental, por su brevedad y orientación a oficios manuales y mecánicos,
se ubican en una clase más baja, a diferencia de los individuos que logran cursar una
carrera profesional, los cuales se ubican en una clase superior a los anteriores
Podemos decir entonces que la profesión elegida, determina el género de vida y por lo tanto
es un signo de clase. Ya que triunfan más los individuos provenientes de clases media y
alta, y fracasan más los de clase baja, la escuela funge como reproductora de desigualdades.
La socióloga ha tratado de observar en qué condiciones puede llegar la escuela a hacer
posible el triunfo de todos, sin importar la clase de la que provengan, aunque en los
individuos exista una desigualdad natural de facultades.
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Tipos de clases sociales según Karl Marx
Karl Marx, sin lugar a dudas, fue una de las mentes más lúcidas de su tiempo. Sus aportes
atraviesan todas las ciencias sociales: la economía, la sociología y las ciencias políticas, en
cuanto que disciplinas en el sentido más amplio del término, no pueden sino reconocerse
tributarias de los valiosos aportes del pensamiento marxista.
Las clases sociales están destinadas a luchar entre sí, entre los explotadores y los
explotados. Estas clases sociales no son sino una nueva estructura de poder que
anteriormente al capitalismo estaba representada por la nobleza y los siervos de la gleba en
el feudalismo o por los propietarios y los esclavos en periodos anteriores, como el imperio
romano, la Grecia clásica o el Egipto de los faraones. Los pequeños artesanos, labriegos,
pequeños industriales, etcétera, son una clase media que poco a poco va a convertirse en
parte del proletariado. Eso es porque su posición no puede mantenerse ante el caudal del
capital de la burguesía.
En las clases sociales marxistas tenemos tres aspectos: El objetivo, que es su relación con
los medios de producción, el subjetivo que sería la conciencia de clase (o como se
reproducen los valores) y por último la reproducción de las clases sociales, mediante las
cuales se transmiten. A mediados del siglo XIX, Marx y Engels escribieron El Manifiesto
Comunista, antes de que Marx sacara su Best Seller, El Capital, definían las clases sociales
de la siguiente manera:
I. La burguesía: Es una clase social dominante sobre la clase social del trabajador, es
decir el dueño de los medios de producción domina al proletariado, simplemente
por ser el propietario de las industrias y empresas, en el transcurrir de la historia la
clase dominante, la burguesía siempre ha conquistado los medios industriales y
políticos por ser los dueños del dinero y el capital, de acuerdo a Marx en algún
momento se presentará una revolución de la clase trabajadora que tomara los
medios de producción.
II. La pequeña burguesía: Está situada entre la clase capitalista y el proletariado. Es un
grupo impreciso, ya por la variedad de las actividades económicas a las que se
dedican sus miembros, ya por la disparidad de su patrimonio. Incluye a personas de
diversas actividades laborales, como profesores, artesanos, pequeños comerciantes,
intelectuales, artistas y, en general, personas de ingresos medios.
Son pequeño-burgueses los campesinos que trabajan tierra propia, los artesanos
dueños de sus talleres, los pequeños comerciantes que gestionan negocios propios.
La característica común entre ellos es que son propietarios de los reducidos
instrumentos de producción y que, a diferencia de los burgueses, no viven de la
explotación del trabajo ajeno.
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III. Proletariado: El proletario responde al perfil de un individuo obrero que desarrolla
una labor profesional por la que es pagado. Por esta misma práctica, depende
económicamente de su labor frente a una parte contratante. La agregación de los
muchos proletarios de una sociedad supone la existencia del proletariado, clase
trabajadora mayoritaria en una economía y que se entiende como la clase obrera del
país. Esta clase, al no tener propiedades ni poseer medios de producción, los cuales
están en manos de la burguesía, debe vender su fuerza de trabajo a cambio de un
salario para poder subsistir.
Para Marx y Engels este es el mundo establecido tras la revolución francesa, se abole la
propiedad feudal por el establecimiento de la propiedad burguesa. Cambian los explotados
y oprimidos, pero sigue habiendo una versión de explotación. Eso aboca a una revolución
por parte del proletariado, de aquí es dónde surge el Partido Comunista.
Si bien, esto podría ser una descripción de la sociedad de la primera y quizás la segunda
revolución industrial, en el mundo actual hemos cambiado tanto tras la segunda, la tercera y
la cuarta en la que nos encontramos, que no tiene sentido alguno seguir pensando en estos
términos. Marx murió en 1883, sin llegar a ver la primera Guerra Mundial, Engels un poco
más tarde, en 1895, pero tampoco vio los cambios. El gran mérito de Marx es haber
demostrado que la desigualdad social no depende de naturalezas humanas mejor o peor
dotadas, sino que dependen fundamentalmente del tipo de relación que tienen los
individuos con los medios de producción.
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Conclusiones
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