Rtyhnntynr

Descargar como pdf
Descargar como pdf
Está en la página 1de 4
El incrédulo Flexible Uega de vuelta a su_ hogar. Entonces en mi suefio vi a Flexible que habia vuelto a su casa, y sus amigos que venian a visitarle. Algunos dijeron que habia demostrado sentido comin al regresar. Algunos lo Ilamaron un tonto por haberse aventurado a ir con Cristiano. Aun otros se burlaron de su cobardia diciendo, “‘Una vez que habias empren- dido el viaje, gpor qué abandonaste por unas’ pocas dificultades?” Al principio Flexible estaba medio aver- gonzado, y no se atrevia a levantar la cabeza, pero después de un tiempito recobré su confianza y comenzé a hacer burla del pobre Cristiano. 34 Cristiano se encuentra con Sabio Mundano. Cristiano prosiguié su camino solo, hasta que vio alguien a lo lejos que venia hacia él a través del campo. Este hombre era un caballero muy culto, Hamado Sabio Mundano, quien vivia en la Ciudad de Politica Carnal (Sabidurfa. Mundana), una gran ciudad no muy lejos del hogar de Cristiano. 35 Comienzan a hablar. Al ver a Gristiano quejéndose y suspirando bajo su pésada carga, Sabio Mundano le pregunté: “Donde vas tan agobiado, mi buen amigo?” Cristiano: {Muy agobiado por cierto! No creo que haya en todo el mundo alguien mas agobiado que yo. Me preguntas adénde voy? Alli, hacia aquella puerta estrecha. He oido que alli vive alguien que me puede decir cémo librarme de esta carga. Sabio Munpano: ¢Tienes mujer ¢ hijos? Cristiano: Si, pero debido a esta pesada carga que me agobia no puedo disfrutar de su compafia como antes, y me parece como que no tuviera ninguno. 36 El consejo de Sabio Mundano. Sasio. Munpano: Tengo un buen consejo para ti. éQuieres escucharme? Cristiano: Nunca me niego a escuchar un buen consejo. SaBio MUNDANO: Bueno, entonces te aconsejo que te libres de ese bulto cuanto antes. Hasta que no lo hagas nunca podrds encontrarte a gusto o podras disfrutar de las bendiciones que Dios te ha dado. Cristiano: jEsto es justamente lo que estoy buscando —~cémo librarme de esta carga! Pero no puedo hacerlo yo mismo, ni hay ninguno en mi ciudad que pueda ayudarme. Voy por este camino para averiguar dénde puedo librarme de ella. - Sasio MuNpano: ¢Quién te dijo que podias librarte de esa carga yendo por este camino? Cristiano: Un hombre Uamado Evangelista. Sasio Munvano: ;Buh! jBah! {Qué consejo mds mal intencionado! {No hay un camino més peligroso en todo el mundo! - Puede ser que no me creas ahora, pero lo descubriras mas tarde. 37

También podría gustarte