Tema 2
Tema 2
Tema 2
norteamericano. Su influencia en el
contexto Asia-Pacífico
[2.1] ¿Cómo estudiar este tema?
Esquema
Ideas clave
Para estudiar este tema lee las «Ideas clave» que se desarrollan a continuación.
El repaso que se presenta a continuación subraya las siguientes ideas básicas relativas a
la protección de la privacidad en Estados Unidos:
Samuel Warren y Louis Brandeis partieron del análisis de esta forma de protección
para afirmar, en su famoso artículo de 1890 «The Right to Privacy», la existencia de un
derecho a la privacy o a ser dejado en paz. Este artículo tuvo una gran repercusión en la
doctrina norteamericana e influenció numerosas decisiones jurisprudenciales
posteriores. Se fue desarrollando así, poco a poco, una importante jurisprudencia
donde los tribunales apreciaban la existencia de «torts» específicamente relacionados
con daños provocados por la intromisión en la intimidad de las personas.
En 1960, William Prosser, gran especialista en «tort law», decidió estudiar con
detenimiento esta jurisprudencia emergente sobre la protección de la privacy.
Descubrió que desde la publicación del artículo de Warren y Brandeis se habían
decidido centeneras de casos referidos a interferencias en el derecho a ser dejado en
paz. Los clasificó por tipo de agravio e identificó así cuatro grandes categorías de lo que
se conocen como «privacy torts»:
Enmiendas
Enmienda III: Ningún militar será, en tiempo de paz, alojado en casa alguna sin el
consentimiento del propietario, ni tampoco en tiempo de guerra, como no sea en la
forma que prescriba la ley.
Enmienda XIV: Esta Enmienda incluye varias secciones. La Sección 1 prevé, entre
otras cosas, que ningún Estado puede privar a una persona de su vida, libertad o
propiedad sin un debido proceso legal.
Evolución de la jurisprudencia
Otra sentencia especialmente importante es Katz v United States (389 U.S. 347), de
1967, que introdujo el criterio jurisprudencial conocido como el principio de
«expectativa razonable de privacidad» (o reasonable expectation of privacy). El caso se
refería a la posibilidad por parte de la policía de interceptar llamadas realizadas a través
de una cabina telefónica. En concreto, el Tribunal Supremo tenía que decidir si la
Cuarta Enmienda era aplicable en este particular y si, por lo tanto, la policía requería o
no mandato judicial para intervenir las llamadas. El Tribunal contestó afirmativamente
y extendió las garantías de la Cuarta Enmienda a toda circunstancia en la que los
individuos tengan una «expectativa razonable de privacidad», como podría ser una
cabina.
La sentencia Katz v United States resultó muy influyente porque en ella el Tribunal
Supremo aclaró que la Cuarta Enmienda no protege lugares o formas de comunicación,
sino personas, y, más concretamente, las circunstancias en que las personas puedan
razonablemente suponer que gozan de cierta privacidad. Otras sentencias posteriores
delimitaron los contornos de esta doctrina, según la cual en general nadie puede tener
«expectativas razonables» de que goce de privacidad la información que se revela de
manera voluntaria a un tercero, salvo en casos especialmente reconocidos (tal y como
se desprende, por ejemplo, de United States v White, 401 US 745, de 1971).
En Roe v Wade (410 U.S. 113), de 1973, el Tribunal Supremo dio un paso importante en
la construcción del derecho constitucional a la privacidad como derecho a la autonomía
al afirmar que este derecho incluye el derecho al aborto. Por lo que se refiere a la
dimensión informativa del derecho a la privacidad, una sentencia particularmente
influyente fue Whalen v Roe (429 U.S. 589), de 1977, en la que el Tribunal hizo
referencia expresa a la existencia de dos vertientes de protección: además de la
Por último, otra sentencia capital es Smith v Maryland (442 US 735), de 1979, en la
que el Tribunal Supremo sintetizó los principios derivados de sus decisiones en Katz y
Miller: es decir, que la Cuarta Enmienda solo es aplicable cuando existan expectativas
razonables de privacidad y que no caben dichas expectativas cuando se transmiten
voluntariamente datos a terceros, salvo en determinadas circunstancias excepcionales.
En Smith v Maryland la policía había instalado un dispositivo en las oficinas centrales
de una compañía telefónica y a través de dicho dispositivo registraba los números que
marcaba el abonado. El Tribunal Supremo consideró que no se trataba de una
interferencia que tuviera que cumplir con los requisitos de la Cuarta Enmienda porque
el abonado no podía tener expectativas razonables de privacidad para los números que
marcaba, que exponía de forma voluntaria para que se llevara a cabo la comunicación.
Otras constituciones
Normativa
Las primeras leyes sobre protección de la privacidad en el sentido de control sobre las
informaciones personales surgieron a principios de los años 70. En aquella época Alan
F. Westin acababa de proponer una redefinición de la noción de privacidad como
privacidad informativa y estaban gestándose los llamados Fair Information
Practice Principles (FIPPs), o principios básicos aplicables al tratamiento de datos. En
1970 se adoptó en Fair Credit Reporting Act, una ley destinada a limitar el poder
cada vez mayor que tenían las empresas privadas que facilitaban crédito al consumo,
poder basado en un seguimiento del comportamiento de pago de los consumidores
especialmente invasivo.
En 1974 fue promulgado el Privacy Act, ley destinada a evitar el uso indebido por
parte de las autoridades de información sobre los individuos conservada en bases de
datos federales. Fue precisamente este Privacy Act el instrumento que incorporó en la
legislación estadounidense la idea de privacy como control sobre la información y, más
concretamente, como control sobre información conservada en bases de datos. Su
aprobación inspiró la adopción de instrumentos similares regulando otras bases de
datos públicas. A pesar de su gran relevancia, el Privacy Act de 1974 dejó abierta la
cuestión de cómo regular (si debía regularse) el tratamiento de datos relativos a las
personas en el sector privado.
Ejemplos de legislación
La autorregulación
A pesar del considerable número de leyes sobre privacidad que existen en Estados
Unidos, no hay que perder de vista que el país carece de instrumentos de
aplicación global que cubran todos los ámbitos y se apliquen a cualquier tratamiento
de datos personales. Por lo general, la protección de la privacidad de las personas se
persigue mediante instrumentos de autorregulación: es decir, se deja
principalmente en manos de las organizaciones responsables del tratamiento de los
datos.
En este contexto se han ido configurando como elemento clave las llamadas «privacy
policies» o políticas de privacidad de las empresas. Estos documentos recogen
En algunos casos (como, por ejemplo, la COPPA) son las mismas leyes las que
imponen o estimulan la autorregulación por parte de la industria.
Las políticas de privacidad, elemento paradigmático de la autorregulación, se han
ido convirtiendo a través de los años en un compromiso exigible también ante una
autoridad reguladora, la Federal Trade Commission.
APEC
En 2007, APEC adoptó la Data Privacy Pathfinder Initiative, una iniciativa destinada a
promover la puesta en práctica de los principios de privacidad APEC. Entre sus
objetivos principales destacan el ayudar a las empresas a cumplir con dichos principios
y promover la confianza de los consumidores. En este contexto se desarrolló el llamado
Sistema de Reglas de Privacidad Transfronterizas (CBPRs, por sus siglas en
inglés).
Las reglas en cuestión constituyen las normas que aplican internamente las
organizaciones, que son también las promesas que realizan ante sus clientes. Deben ser
conformes con los principios del Marco de Privacidad de APEC y con la normativa
nacional aplicable, donde la haya.
A modo de balance
Por lo que se refiere a la influencia del Marco APEC en la evolución de las legislaciones
nacionales en la región Asia-Pacífico, hay que resaltar que ha sido particularmente
limitada. Las legislaciones de los países del entorno APEC han destacado
siempre por su diversidad. La elaboración de los principios del Marco APEC no
aspiró nunca a integrar las diferencias existentes, sino que tenía como objetivo
principal facilitar los flujos transfronterizos de datos.
Lo + recomendado
No dejes de leer…
Martínez, R. (2014). Privacidad, Estados Unidos y España: tan lejos, tana cerca.
Cuadernos de Comunicación e innovación, 1, 1-9.
Este trabajo compara los mecanismos de tutea del derecho a la privacidad en Estados
Unidos y en España.
Accede al artículo a través del aula virtual o desde la siguiente dirección web:
http://telos.fundaciontelefonica.com/url-direct/pdf-
generator?tipoContenido=articuloTelos&idContenido=2014042309560001&idioma=e
s
+ Información
Webgrafía
Página web oficial de la FTC. La versión oficial en español tiene un contenido más
limitado. En la versión inglesa está todo el contenido actualizado.
Accede a la página web a través del aula virtual o desde la siguiente dirección:
En español: https://www.ftc.gov/es
En inglés: https://www.ftc.gov/
Página web oficial de EPIC, una de las ONGs más importantes de Estados Unidos activa
en el ámbito de la vida privada.
Accede a la página web a través del aula virtual o desde la siguiente dirección:
https://www.epic.org/
Bibliografía
Kennedy, G., Doyle, S. y Lui, B. (2009). Data protection in the Asia-Pacific Region.
Computer Law & Security Review, 25, 59-68.
Solove, D.J., Rotenberg, M. y Schwartz, P.M. (2006). Information Privacy Law. New
York: Aspen Publishers.
Pagallo, U. (2008). La tutela della privacy negli Stati Uniti d’America e in Europa.
Milano: Giuffrè.
Turkington, R.C. y Allen, A.L. (1999). Privacy Law: cases and materials. Minnesota:
West group.
Test
2. William Prosser:
A. Identificó varias categorías de «privacy torts».
B. Definió el derecho a la privacidad como el control sobre la información.
C. Firmó un artículo con Samuel Warren y Louis Brandeis.
D. Elaboró los Fair Information Practice Principles (FIPPs).