Responsabilidad Civil Extracontractual Por Hecho Ajeno

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RESPONSABILIDAD CIVIL

EXTRACONTRACTUAL
POR HECHO AJENO

Mg. Hugo
BRAVO ABANTO
Nuestra legislación (Art. 1969° del C.
C.) presume que una vez probada la
relación de causalidad entre el daño y
el acto u omisión del autor se supone
que éste es responsable, pero como es
una presunción relativa (‘juris tantum’)
“El descargo por falta de dolo o culpa
corresponde a su autor”.
Responsabilidad por
daño del subordinado
1. RESPONSABILIDAD CIVIL DE LOS PADRES Y TUTORES
LA RESPONSABILIDAD
EXTRACONTRACTUAL DE LOS
EMPRESARIOSC Y CENTROS
EDUCATIVOS
RESPONSABILIDAD
CIVIL DE
EMPRESARIOS

Existe una determinación absoluta sobre el


espacio físico en el que se va a desenvolver la
prestación laboral, cadenas de producción,
almacenes, espacios de exposición y venta al
público, áreas de servicios, sistemas de
seguridad, etc. son diseñados e instalados
bajo la supervisión del empresario dominante,
de tal forma que es incoherente que no le
corresponda responsabilidad alguna, sobre
las condiciones de seguridad que el diseña e
impone
A nivel del desarrollo de la Ley Regulaciones en el supuesto de
tampoco se ha considerado el responsabilidad directa.
supuesto de las contratas y
subcontratas que prestan
servicios fuera del centro de Mas no en los casos de
trabajo de la empresa principal, responsabilidad por
es por ello que el Decreto incumplimientos del deber de
Supremo N° 005-2012-TR,. vigilancia del artículo 68 de la Ley.

En los casos de empleadores de


intermediación o tercerización, el
empleador usuario principal 1 Bajo modalidad
también debe implementar los formativa
registros para el caso de los
trabajadores en régimen de
intermediación o tercerización, Los que prestan servicios
para las personas de: 2 de manera
independiente,
Debe poner en conocimiento de
todos los trabajadores, mediante
medio físico o digital, bajo cargo
El empleador el Reglamento Interno de
Seguridad y Salud en el Trabajo y
sus posteriores modificatorias.

En el caso del micro y pequeñas empresas, el Ministerio


de Trabajo y Promoción del Empleo establece un
sistema simplificado de documentos y registros,
siempre que el Ministerio lo determine mediante
Resolución Ministerial, el referido sistema simplificado
puede ser establecido en determinados sectores o
actividades de baja complejidad o riesgo en materia
de seguridad y salud en el trabajo.
El empresario principal no responde
únicamente por las infracciones que
se cometan por el incumplimiento del
deber de garantizar la seguridad y
salud de los trabajadores que
desarrollen actividades en sus
instalaciones, si no también cuando
los servicios se presten en el centro de
trabajo o lugar de trabajo

Los trabajadores de terceros


asignados a la prestación de servicios
de una determinada entidad, sea que
el servicio sea prestado en el centro
de trabajo o en el ámbito de
operaciones de dicha entidad, será
esta ultima la que deberá garantizar
su seguridad y salud.
RESPONSABILIDAD
CIVIL DE LOS
CENTROS
EDUCATIVOS

La obligación que impone el artículo


anterior de reparar el daño causado
es exigible no solo por los actos u
omisiones propios, sino por los de
aquellas personas de quienes se debe
responder: así por ejemplo, los padres
por los daños causados por sus hijos
menores de quince años
En el caso de los encargados de un centro educativo
se trata de una típica responsabilidad extracontractual
En los Centros por hecho ajeno, que recae sobre los jefes de escuelas
Educativos o colegios por el hecho de tener al cuidado los
alumnos, en términos que significan una gran amplitud
de su ámbito subjetivo, en cuanto que se extiende a
todos y cada uno de los alumnos que asisten al centro
educativo.

Liberación de la
responsabilidad

El jefe del establecimiento


educativo si demuestra haber
tenido el cuidado o vigilancia
común u ordinaria, con la cual
enerva su responsabilidad si así lo
demuestra, porque el deber de
vigilancia es el motivo de la
responsabilidad de acuerdo al
horario que le tocaba.
Dentro de la responsabilidad por acto
ilícito o funcionamiento
Administración
normal

La Administración responderá por


todos los daños que cause su Descuido grave en la vigilancia de un
funcionamiento legítimo o menor quien provoca un daño por el que
ilegítimo, normal o anormal, salvo debe responder el director de un centro
fuerza mayor, culpa de la víctima educativo, sino simplemente por el riesgo
o hecho de un tercero. que supone su actividad, de modo que
en caso de que la misma produzca una
lesión al administrado, el mismo está
legitimado para reclamarlo conforme a
la ley.

El servidor público será responsable ante


la Administración por todos los daños que
cause a ésta por dolo o culpa grave,
aunque no se haya producido daño a un
Es el encargado de velar tercero.
por la buena marcha y
organización del centro y
del cuidado de sus
alumnos.
LA RESPONSABILIDAD
EXTRACONTRACTUAL EN LOS
ACCIDENTESCDE TRÁNSITO

La Ley General de Tránsito y Transporte Terrestre, ley 27181 (en adelante LGTTT)
• El Texto Único Ordenado del Reglamento Nacional de
Transito - Código de Tránsito lo define de la siguiente
manera: “Accidente: Evento que cause daño a
personas o cosas, que se produce como consecuencia
directa de la circulación de vehículos”.

• Asimismo, el Reglamento Nacional de Responsabilidad


civil y seguros obligatorios por accidentes de tránsito
aprobado por Decreto Supremo N° 024-2002-MTC define
accidente de tránsito en los siguientes términos:
“Accidente de Tránsito. - Evento súbito, imprevisto y
(incluyendo incendio y acto terrorista) en el que
participa un vehículo automotor en marcha o en reposo
en la vía de uso público, causando daño a personas,
sean ocupantes o terceros no ocupantes de vehículo
automotor, que pueda ser determinado de una manera
cierta”.
El art. 29 de la LGTTT dispone que la víctima podrá reclamar tanto al
conductor del vehículo, el propietario y, de ser el caso, el prestador del
servicio de transporte terrestre, y a la aseguradora también en el caso de que
el vehículo este asegurado.

Es decir: el actor solo deberá probar el accidente, la relación de causalidad y


la existencia del daño, mientras que al demandado le corresponderá
acreditar la culpa de la víctima o de un tercero por el que no debe
responder o el caso fortuito para poder eximirse de responsabilidad.

El régimen de solidaridad en la materia de responsabilidad civil


extracontractual está regulado en el art. 1983 del CC. El cual señala que si
varios son responsables del daño responderán solidariamente. Para la
aplicación de este régimen es importante determinar si es posible o no una
individualización del comportamiento del causante del daño
LA RESPONSABILIDAD
EXTRACONTRACTUAL
POR EL HECCHO AJENO

OTROS AUTORES
YZQUIERDO TOLSADA se reafirma en lo establecido por DIEZ-PICAZO, si bien matiza que ¨la prueba de la
culpa no la ha de aportar la víctima, sino que se presume de los padres tutores, empresarios…¨ esto no
es más que una inversión en la carga de la prueba, es decir, los que ostentaban la guarda del menor, han
de probar que actuaron diligentemente, en vez de que sean los dañados los que han de aportar pruebas
de la negligencia.
PLANTEAMIENTO
Don “A” tiene una empresa de reparto y hace repartos en furgonetas a nivel
nacional. Uno de sus repartidores a la salida de la nave con la furgoneta, cuando iba a
empezar un reparto, rozó un coche aparcado en la entrada. El coche quedó rascado en la
parte trasera, con una abolladura y un faro roto. El repartidor siguió su reparto igual
porque tenía prisa, y al volver olvidó comentárselo a Don “A”. Unos días después, recibió
una demanda del propietario del vehículo dañado solicitándole el pago de la
correspondiente indemnización.

Don “A” hizo frente a la demanda y pagó la indemnización pertinente, ya que existían numerosos testigos
que vieron el momento en el que el repartidor golpeó el coche, incluso apuntaron la matrícula.
Finalmente tuvo que pagar la cantidad que le reclamaba. Don “A” quiere reclamarle ahora su repartidor
que le devuelva el dinero que tuvo que desembolsar por la indemnización, pero el repartidor cree eso es
cosa del propietario de la empresa y que él no tiene que pagar nada porque fue en horario de trabajo
En este caso estamos ante una situación de responsabilidad
por hecho ajeno. El empresario es el que debe
responsabilizarse, pero los hechos no han sido realizados por
él, sino por uno de sus trabajadores, por lo que, hace frente a
un hecho ajeno.

Los empresarios deben pagar los daños que provocan sus empleados y en ejercicio
de su trabajo. En este caso se cumplían todos los requisitos porque, el repartidor
estaba trabajando cuando tuvo el golpe, y estaba cumpliendo las normas del
empresario. La actividad que estaba desempeñando el repartidor era la propia de su
trabajo, por tanto está recogida en la actividad que le corresponde y debe hacer
frente a los daños el empresario.

La culpa del empresario es porque debe saber qué hacen sus trabajadores en el
ejercicio de sus funciones, y saber si realizan el trabajo correctamente conforme a lo
exigido por él y sin provocar daños a nadie. Por ello surge la culpa del empresario, ya
que, en este caso el repartidor provocó un daño que el empresario debería de haber
sabido, se debería haber preocupado por el trabajo del repartidor y saber de este,
debe vigilar a sus trabajadores y dirigirlos correctamente
• 1. Mónica Lucía Fernández Muñoz, (La culpa en el régimen de
responsabilidad por el hecho ajeno):
• * Abogada de la Universidad del Cauca, especialista en
Responsabilidad y Daño Resarcible de la Universidad Externado de
Colombia.

Dentro del hecho generador de la responsabilidad civil, además


de la responsabilidad por el hecho personal y de la
responsabilidad por el hecho de las cosas, encontramos la
responsabilidad por el hecho ajeno

Para la escuela clásica la responsabilidad por el hecho ajeno se


fundamenta no sólo en la culpa in eligendo, sino también en la
culpa in vigilando. Por su parte, la doctrina moderna da otro
fundamento7 a dicha responsabilidad, consistente en el poder de
dirección, de control, de autoridad, la subordinación o la
dependencia en que una persona puede hallarse respecto a otra
El directamente responsable con capacidad aquiliana:
Si se trata de un directamente responsable con capacidad aquiliana,
esto es, mayor de diez años y mentalmente sano, la presunción de
responsabilidad en cabeza del civilmente responsable sólo surgirá
cuando exista culpa del directamente responsable

Sin embargo, si bien se ha establecido que la culpa del


responsable directo con capacidad aquiliana es presupuesto
imprescindible para que nazca la presunción contra el
civilmente responsable, no por ello se está afirmando que
esa culpa necesariamente deba ser probada

En consecuencia, para saber si la culpa del directamente responsable


con capacidad aquiliana debe ser o no probada, debe a su vez
establecerse si el daño ha sido causado en ejercicio de una actividad
peligrosa que está bajo la guarda del civilmente responsable, bajo la
guarda de un tercero o bajo la guarda del mismo directamente
responsable, o si por el contrario, el daño ha sido causado sin
actividad peligrosa de por medio.
• 1.1 Primer caso
• En el primer supuesto, es decir, cuando el daño es causado por un
directamente responsable con capacidad aquiliana y en ejercicio de
una actividad peligrosa que está bajo la guarda del civilmente
responsable, la culpa del directamente responsable se presume por
el simple hecho de ejercer una actividad peligrosa, que está bajo la
guarda del civilmente responsable. Como se observa, en este caso, la
culpa del directamente responsable no debe ser probada por la
víctima, pues ésta se presume, esto es, se presumen ambas culpas:
la del directamente responsable y la del civilmente responsable

• 1.2 Segundo caso


• En la segunda hipótesis, esto es, cuando el daño es causado por un
directamente responsable con capacidad aquiliana y en ejercicio de
una actividad peligrosa que está bajo la guarda de un tercero o bajo
la guarda del mismo directamente responsable en ambos casos, la
víctima deberá probar la culpa del directamente responsable. Por lo
tanto, mientras esta culpa no se demuestre, el civilmente
responsable no se presumirá culpable por el hecho ajeno
• 1.3 Tercer caso
• En el último supuesto, es decir, cuando el daño es causado por un
directamente responsable con capacidad aquiliana, pero sin el ejercicio de
una actividad peligrosa de por medio la víctima también deberá probar la
culpa del directamente responsable, para que funcione la presunción de
responsabilidad contra el civilmente responsable.
• De los tres supuestos anteriores, puede concluirse que el daño causado por un
directamente responsable con capacidad aquiliana compromete la
responsabilidad del civilmente responsable bajo el régimen de
responsabilidad por el hecho ajeno, siempre que haya culpa de su parte. Sin
embargo, dicha culpa en unos casos se presume y en otros debe ser probada
por la víctima. En efecto, la víctima no tendrá que probar la culpa del
directamente responsable, pues ésta se presume en aquellos casos en que el
daño es causado en ejercicio de una actividad peligrosa perteneciente o bajo
la guarda del civilmente responsable. Por el contrario, la víctima tendrá que
probar la culpa del directamente responsable cuando el daño se produce sin
que haya de por medio una actividad peligrosa o, cuando habiéndola, está
bajo la guarda de un tercero o del propio directo responsable.
LA RESPONSABILIDAD
EXTRACONTRACTUAL POR HECHO
AJENO EN EL DCERECHO CIVIL
ITALIANO
Es una manifestación de la responsabilidad por hecho propio, ya que no existe responsabilidad
civil más allá de la responsabilidad personal (allende la responsabilidad por hecho imputable a la
persona).
• En los ordenamientos modernos derivados del Derecho
común, es en donde surge la separación de la
responsabilidad civil de la responsabilidad penal.
• LA RESPONSABILIDAD = RESPONSABILIDAD POR HECHO
PROPIO = RESPONSABILIDAD POR CULPA
• La responsabilidad por hecho ajeno no puede existir si es
que no media imputabilidad del hecho a la persona que
debe responder por el mismo.
• COMO POR EJEMPLO:
1. La discusión en torno de la responsabilidad del padre
por los hechos del menor hijo que, en la senda trazada
por Pothier (Padre del código civil), hubo de afirmarse,
no por la posición paternal de la persona, sino sólo y en
cuanto el padre no hubiera impedido el hecho que
habría podido impedir
2. La responsabilidad del comitente, donde se presuponía
la existencia de una convención tácita frente a los
terceros, por medio de la cual aquél asumía para sí la
responsabilidad por el eventual hecho ilícito del
dependiente - locador.
• Se experimentó el fenómeno de la responsabilidad por hecho ajeno bajo el
Código Civil italiano de 1865 ("personalidad" de la responsabilidad y como
"referibilidad" del hecho ajeno hacia una persona distinta). Durante la
sistematización de las fuentes de las obligaciones ocurrió lo mismo, incluso
antes al Código de Napoleón.
• Se discutía, no el ligamen entre el hecho ajeno y el comportamiento del
responsable, sino la posibilidad de afirmar la relevancia de dicho ligamen
más allá de los casos previstos en la ley (padres, preceptores, comitentes).
• Afirmar una idea general de la responsabilidad por hecho ajeno, era muy
peligrosa, por ende defender la idea de que otros vínculos, que
sobrepasara los supuestos previstos en la ley, diferentes de los surgidos de la
potestad de los padres y de los preceptores (continuadores, estos últimos,
de la potestad de los padres), pudieran dar lugar a dicho efecto.

1. Para Domat existía responsabilidad, en un supuesto en el que no se


hubiera impedido un hecho dañoso ajeno, que habría sido posible
impedir; responsabilidad demasiado genérica y dudosa (con excepción
de la tradición certera de los casos del vínculo de la potestad del
padre).
2. Pothier la había limitado a los casos de los hijos, alumnos y dependientes
(la doctrina, posteriormente, la había afirmado para el caso de los
daños provocados por medio de cosas y de animales).
LA CODIFICACIÓN ITALIANA VIGENTE
a) Se rehúsa juntar los diversos supuestos indicados
con la etiqueta de responsabilidad por hecho ajeno,
propia del Código Civil de 1865, y evita también la
expresión: "responsabilidad por los hechos de las
personas de las cuales se debe responder";
b) No utiliza dos disposiciones diferentes para el caso
de dolo y de culpa en el hecho ilícito.
c) Separa la responsabilidad civil de la responsabilidad
penal, al equiparar dolo y culpa con referencia a la
responsabilidad.
d) señala casos específicos de responsabilidad por
hecho ajeno, que acompañan al principio general de
la responsabilidad por culpa.
La responsabilidad por hecho ajeno se manifiesta bajo
dos formas:
a) como responsabilidad por hecho ajeno en sentido
estricto, es decir, como el deber de responder por un
hecho cometido exclusivamente por otro, sin que se
pueda reprochar nada a la persona responsable, en
términos de diligencia, o, en todo caso,
independientemente de cualquier consideración en
torno de su diligencia.
b) como responsabilidad por hecho propio, es decir,
dependiente de un comportamiento culposo propio, o
sea, de un comportamiento inútil para impedir, o idóneo
para facilitar o hacer posible (de algún modo), el hecho
ilícito ajeno.

En el caso de la responsabilidad del comitente, del padre, del


preceptor, el hecho ajeno (del dependiente o del menor) es
un hecho ilícito, completo en sus elementos estructurales,
incluida la culpa del autor material del hecho; En el caso de
la responsabilidad del guarda del incapaz, el hecho ajeno es
solamente un hecho dañoso (la ley misma no toma en cuenta
el elemento de la culpa, en vista de que su autor, al momento
de la codificación, es incapaz de incurrir en culpa).
Podemos concluir, que puede acaecer que, junto al responsable, responda del ilícito una persona
distinta, que no tiene culpa, pero que responde, sin embargo, en virtud de una carga razonable que le
es impuesta por la ley, esto ocasionado por hechos antijurídicos; es decir, violatorios de reglas de
conducta. Existiendo de igual manera, hechos ilícitos propiamente dichos, por los que deben responden
sus responsables respectivos y hechos de los que no responderá el responsable, ya que éste, en virtud de
la disposición general sobre la imputabilidad, no resulta ser responsable por su propio comportamiento
antijurídico en dichas hipótesis (no tienen culpa). En ocasiones, el responsable por el hecho ajeno
responderá independientemente de la culpa propia, y en otros casos, en cambio, la culpa en la que
incurra será esencial para que exista responsabilidad. En este contexto, la responsabilidad por hecho
ajeno no constituye ni una negación del principio de la culpa como fuente de la responsabilidad, ni un
fenómeno que prescinda, necesariamente, de la culpa de la persona llamada a responder del hecho
ajeno. El problema de la responsabilidad por hecho ajeno concierne a la persona del responsable, su
comportamiento, su posición en el ámbito del fenómeno en cuestión, sin que tenga importancia el
hecho que ocasiona el daño, ni su objetiva antijuridicidad, ni la culpa del autor del comportamiento
dañoso. Por ello interesa apreciar internamente las hipótesis de responsabilidad por hecho ajeno, para
intentar entender sus significados actuales en el sistema de la responsabilidad civil.

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