Los Fondos de Inversión

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 19

Los fondos de inversión: Definición y Orígenes

:: Los Fondos de Inversión ::

Definición | Orígenes

Definición

La ley 35/2003 de 4 de noviembre de Instituciones de Inversión Colectiva y el


Reglamento que la desarrolla establece las normas por las que se rigen los
Fondos de Inversión junto con las Sociedades de Inversión, así como las de sus
Gestoras y Depositarios. El objeto de los Fondos y de las Sociedades de Inversión
es constituirse con la finalidad de invertir en valores mobiliarios o inmobiliarios,
según su naturaleza.

Un fondo de inversión es un patrimonio, sin personalidad jurídica, que está


formado por las aportaciones de una serie de inversores o partícipes. El fondo de
inversión está administrado por una sociedad gestora de Instituciones de Inversión
colectiva (SGIIC) y sus derechos de propiedad están representados en un
certificado de participación. Las aportaciones de todos los inversores en los fondos
de inversión se invierten en activos financieros (letras, bonos, obligaciones,
acciones, productos derivados, etc.) o en activos no financieros (filatelia, obras de
arte, inmuebles, etc…).

Mientras que las Sociedades de Inversión se constituyen como Sociedades


Anónimas siendo sus accionistas los propietarios de la sociedad, los Fondos de
Inversión se definen como patrimonios, que pertenecen a una pluralidad de
inversores denominados partícipes.

El patrimonio de un Fondo de Inversión se divide en un número de participaciones


de iguales características, que tienen el carácter de negociable, pero que carecen
de valor nominal. El número de participaciones es ilimitado y el valor de cada una
se calcula dividiendo el valor total del patrimonio entre el número de
participaciones en circulación, a este valor se le va a denominar valor liquidativo.

Orígenes

La primera referencia significativa a los Fondos de Inversión en nuestro país, data


del año 1964 a través del Decreto-Ley 7/1964 de 30 de Abril, que autoriza al
Gobierno a regular los Fondos de Inversión de carácter Financiero (Fondos de
Inversión Mobiliaria). En sus inicios los Fondos de Inversión lo hacían sólo en
renta variable, por lo que su evolución va a ir muy ligada a la de la Bolsa. Hasta
1974 experimentan un gran desarrollo, pero la crisis mundial de los años 70
provoca un constante retroceso en su crecimiento, debido a las bajas
rentabilidades que producían. Es a partir de ese momento, cuando se comienza a
considerar a la renta fija como activo para diversificar el riesgo de cartera, y en
1980 comienzan a introducirse valores de esta categoría en las carteras de los
fondos. Finalmente, la Ley 46/1984, de 26 de Diciembre, consolidad esta
tendencia con al creación de los Fondos de Inversión en activos del Mercado
Monetario (FIAMM).

No obstante, el impulso definitivo de los FIM y FIAMM se produce a comienzos del


los años 90 por varias razones. Desde el punto de vista financiero, cabe destacar
la creación de los Fondtesoros, cuyas campañas estatales de publicidad
promocionan enormemente esta fórmula de inversión y por otro lado tampoco hay
que olvidar en este sentido, la intervención directa de Bancos y Cajas de Ahorros
como promotores de la gran mayoría de los Fondos comercializados en España,
aprovechando sus redes de distribución por el país.

El control y la supervisión de los Fondos corresponde a la Comisión Nacional de


Valores (CNMV), que ejerce su función con las mismas atribuciones y facultades
normativas, reguladores, fiscalizadores y de sanción, de que está investida por la
Ley 1284/98 del Mercado de Valores.

Las Sociedades Gestoras, Depositarios y todos los Folletos e Informes sobre los
Fondos deben inscribirse obligatoriamente en el Registro que lleva la Comisión
Nacional de Valores, se rigen por las disposiciones de la Ley Nº 811/96, los
reglamentos de la CNMV y los respectivos reglamentos internos o de gestión, de
cada uno de los Fondos previamente aprobados por dicha comisión.

Elementos del Fondo

A) Los partícipes

Los partícipes o inversores son las personas que aportan sus ahorros al fondo de
inversión y, cuando lo desean, pueden obtener su reembolso total o parcial. Son
copropietarios del patrimonio del Fondo, del que les corresponde un porcentaje en
función de su aportación (número de participaciones).

En el momento que una persona realiza una aportación al patrimonio común del
fondo se convierte en partícipe del mismo. Esta aportación se puede realizar bien
en el momento de constitución del fono o bien con posterioridad. El titular podrá
ser una persona física o jurídica, residente o no residente, mayor o menor de
edad, pudiendo existir no o varios titulares por cuenta abierta.

B) Las participaciones
Las participaciones del fondo son cada una de las partes iguales en las que se
divide el patrimonio de un fondo de inversión, es decir, son las aportaciones
unitarias de cada uno de los inversores. Todas las participaciones tienen los
mismos derechos y valen lo mismo. Su propiedad da derecho a participar en los
resultados de la gestión, que se harán efectivos convirtiéndose en beneficios o
pérdidas en el momento en que el titular tome la decisión de venta.

La participación es siempre nominativa (está al nombre del partícipe) y no puede


ser al portador. Las participaciones pueden estar representadas bien a través de
certificados o bien a través de anotaciones en cuenta (registros informáticos). Son
valores negociables, pero en realidad no se negocian en ningún mercado de
valores, al comprarse y venderse a través de la sociedad gestora, que es la que
emite y reembolsa estas participaciones.

C) La sociedad gestora de instituciones de inversión colectiva (SGIIC)

Es la que emite gestiona y administra el fondo y sobre todo, decide cual es la


política de inversiones a seguir, es decir, decide los valores e instrumentos
financieros que se van a adquirir y vender con el patrimonio del fondo.

La Sociedad gestora no es propietaria del fondo de inversión, pues los auténticos


propietarios del fondo son los partícipes. Cada fondo de inversión tiene una única
sociedad gestora y cada SGIIC puede gestionar varios fondos de inversión a la
vez, cada uno en función de las necesidades o preferencias de los ahorradores.
Por la gestión cobra directamente al fondo una comisión (comisión de gestión).
Las gestoras están obligadas a remitir a la CNMV periódicamente una información
exhaustiva que relata la trayectoria de los fondos y el grado de cumplimiento de
los requisitos establecidos legalmente, entre los que destacan: los coeficientes de
inversión del activo, del patrimonio, de liquidez, posiciones en el grupo de la
gestora, relación de operaciones de compra y venta, etc. Todas las operaciones
de compra, venta y transmisión de participaciones deben pasar ineludiblemente
por la gestora, no pudiéndose realizar operaciones sin que ésta medie.

D) El depositario

Puede ser cualquier Caja de Ahorros, Banco, Sociedad o Agencia de Valores o


Cooperativa de Crédito debidamente inscrita en los registros especiales de la
CNMV. Su función básica es la custodia de los valores que la IIC tiene en su
cartera, sin bien puede confiar total o parcialmente la misma a un tercero. Al
margen de esta responsabilidad es la encargada de las siguientes funciones:

Recibir y custodiar los valores y todos aquellos activos que constituyan inversiones
de los fondos de inversión, y también realiza la liquidación de las operaciones.
Velar por la regularidad de las suscripciones de participaciones, cobrando el
importe correspondiente, cuyo neto abonarán en la cuenta de los fondos, estando
obligada a comunicar a la CNMV cualquier anomalía detectada.

Satisface, por cuenta de los fondos, los reembolsos de participaciones ordenada


por la sociedad gestora, cuyo importe neto adeudarán en cuenta el fondo.

Percibir una comisión de depósito.

Además, el depositario supervisa y vigila la actuación de la sociedad gestora


velando por el interés de los partícipes del fondo. Cada fondo de inversión tiene
que tener designado un único depositario, lo cual no quiere decir que la relación
entre un fondo y su depositario no pueda desaparecer. La sustitución del
depositario de un fondo de inversión da derecho a los partícipes a solicitar el
reembolso de sus participaciones, sin deducción de comisiones de reembolso ni
gasto alguno.

Por otro lado también son susceptibles de producirse una comisión por la
suscripción y otra por el reembolso de participaciones.

Tipos de fondos de inversión ::

A) Según la naturaleza de los activos

Si tomamos en consideración la naturaleza de los activos, podemos realizar la


siguiente clasificación de Fondos:

i. Fondos de inversión de carácter financiero

Son aquellos que invierten el patrimonio en activos financieros (letras, bonos,


obligaciones, acciones, instrumentos derivados, etc...) Los fondos de inversión
financieros se dividían tradicionalmente en dos grandes grupos FIM y FIAMM,
pero con la nueva legislación y debido a la aparición en cada vez menos tiempo de
nuevos productos, todos los fondos van a pasar a denominarse “Fondos de
Inversión” (FI), desapareciendo las denominaciones de FIM/FIAMM, aunque los
estatutos de cada fondo puedan recoger de que tipo se trata. A continuación se
expone cual ha sido hasta ahora la clasificación habitual de los Fondos.

Fondos de Inversión Mobiliaria (FIM): Son fondos cuyo objeto exclusivo es la


compra, tenencia, disfrute y venta de valores y otros activos financieros. Los FIM
invierten más del 90% de su activo en valores cotizados en mercados de valores:
deuda pública, renta fija privada, acciones e instrumentos derivados. El plazo y
porcentaje invertido en estos activos dependen de la política de inversión del
fondo. A su vez se pueden clasificar en fondos de renta variable, de renta fija y
mixtos, admitiéndose dentro de los mismos otras posibilidades. También existen
fondos garantizados que suelen exigir una inversión mínima y la garantía no suele
ser por periodo indefinido.

Fondos de inversión en activos del mercado monetario (FIAMM): Se trata de


fondos que invierten en activos de renta fija, letras del Tesoro fundamentalmente,
e instrumentos financieros de elevada liquidez, es decir, activos financieros a corto
plazo del mercado monetario. Por tanto, ni los valores de renta variable, ni los
instrumentos derivados cuyo subyacente sean acciones o índices de renta
variable, ni valores de renta fija cuyo vencimiento sea superior a 18 meses,
+pueden formar parte del patrimonio de los FIAMM. Los FIAMM sólo son
recomendables para inversores muy conservadores. A largo plazo saldrá más
rentable invertir en fondos de acciones o en fondos de renta fija a largo plazo, a
pesar de que la fluctuación del valor de estos fondos es mayor.

Fondtesoros: Son fondos que invierten la mayor parte de su patrimonio en Deuda


Pública del Estado y de las autonomías. Pueden ser FIM o FIAMM, dependiendo
de si la inversión se realiza en activos a largo o corto plazo (<18 meses). Están
capitaneados por el Tesoro, que acuerda con las diferentes gestoras la
comercialización de esta marca de productos, pero no aseguran una rentabilidad
ni se encuentran garantizados por el Tesoro. Al igual que los FIM de renta fija, su
rentabilidad estará en función de la evolución de los tipos de interés del mercado,
por lo que en situaciones de subida de tipos, como la sucedida en 1994, pueden
soportar pérdidas de forma transitoria.

Fondos de fondos (FIMF): Son fondos de inversión que invierten su patrimonio


mayoritariamente participaciones de otros fondos de inversión.

Fondos Garantizados (FG): Aseguran al partícipe la recuperación de la totalidad o


de un porcentaje del importe suscrito más una cuantía mínima de beneficio en un
plazo determinado. Estos productos se soportan mayoritariamente (80-90%) en
una cartera de renta fija con la que se asegura en el vencimiento la parte fija de la
garantía dedicándose el resto a opciones y instrumentos derivados (10%) que
permiten participar en el porcentaje adicional y prometido. Suelen tener un periodo
limitado para la aportación de dinero al fondo y, además debe mantenerse el
patrimonio aportado durante todo el periodo fijado (de garantía) para obtener la
rentabilidad ofrecida. Para conseguir que los inversores suscriban estos fondos
durante el periodo limitado de suscripción y se mantenga el patrimonio durante el
periodo fijado se penalizan con elevadas comisiones de suscripción y reembolso
las operaciones realizadas fuera de esos plazos. Existen fondos garantizados de
renta fija (GRF) que pueden asegurar un rendimiento fijo y Fondos Garantizados
de Renta Variable, que aseguran la obtención de una rentabilidad vinculada total o
parcialmente a la evolución de acciones (índices bursátiles) o divisas.

Fondos en valores no cotizados: Son fondos que invierten en valores no


negociados en mercados secundarios. Este tipo de productos resultará
especialmente interesante para quienes busquen un mayor rendimiento de sus
inversiones, aún a costa de asumir un alto riesgo, y para quienes no necesiten
disponer de su dinero en cualquier momento.

i. Fondos de inversión de carácter no financiero

Fondos de inversión inmobiliaria (FII): Son fondos de carácter no financiero que


permiten que el partícipe pueda invertir en bienes inmuebles de naturaleza urbana
a partir de pequeñas cantidades. El propio fondo inmobiliario es el que compra,
arrienda, mantiene y vende los inmuebles. Este tipo de fondos no puede
desarrollar actividades diferentes tales como promoción inmobiliaria, construcción
u otras no especificadas por la ley. El RD 845/1999 de 21 de Mayo incluye
además como objeto de inversión los inmuebles en fase de construcción, opciones
de compra o compromisos de compra a plazos y la titularidad de concesiones
administrativas que permitan el arrendamiento de inmuebles.

La rentabilidad de estos fondos no depende sólo de lo que gane con los alquileres
y las ventas, pues también depende de lo que haya aumentado o no el valor de
los inmuebles con el paso del tiempo. Deben constituirse con un patrimonio inicial
equivalente a 1.500 Millones de pesetas y un número de participaciones de 100 (si
bajan de esta cifra se dispone de un año para cumplir este requisito).En este tipo
de fondos el coeficiente de liquidez es menor y el Valor Liquidativo se publica
mensualmente por entidades especializadas. Deberá existir una oportunidad al
año como mínimo de reembolso de participaciones para los partícipes que lo
soliciten. Las 3 clases de FII existentes son a su vez: Fondos de viviendas,
Fondos Mixtos y Fondos libres.

B) Según las características de la inversión

Si tomamos en cuenta las características de la inversión se pueden clasificar en:

Uninacionales

Sectoriales: sanidad, telecomunicaciones, finanzas, materias primas…

Multinacionales: globales, por áreas geográficas…

Temáticos: Nuevas Tecnologías, Ecológicos, Éticos…


Temáticos: Nuevas Tecnologías, Ecológicos, Éticos…

C) Según el tipo de gestión

Según cual sea el tipo de gestión utilizada por las gestoras de Fondos:

Gestión Activa: en ella el gestor trata de batir al índice con una selección de
valores previamente seleccionados y analizados.

Gestión Pasiva: Se trata de usar fondos referenciados a índices bursátiles (Ibex-


35, Dow Jones, Eurostoxx-50, Morgan Stanley C.I…).

Multigestión: Consiste en reunir a los mejores gestores para que gestionen


distintas partes de la cartera de un Fondo de Inversión.

Alternativa: Busca rentabilidad absoluta con independencia momento del mercado.

D) Según distribuya o no beneficios

Si atendemos a la distribución o no de beneficios, se puede distinguir:

Fondo de Reparto: un fondo es de reparto cuando distribuye dividendos, en


función de los resultados obtenidos y de lo que establezca el propio reglamento
del fondo.

Fondo de capitalización: un fondo es de capitalización cuando no distribuye


dividendos y la única retribución del partícipe proviene del incremento patrimonial
producido, si existe, como consecuencia de la diferencia entre el valor de las
participaciones en el momento en que se incorporó al fondo y el valor de ese
mismo número de participaciones en el momento de su reembolso o venta. Este
tipo de fondos son los predominantes en España, debido a su tratamiento fiscal
más favorable.

A continuación se presenta una clasificación a modo orientativo y no exacto de los


porcentajes y tipos de activo en que invierte cada Fondo. Se trata de una
clasificación consensuada entre la CNMV e Inverco en1999.
Categoría Renta Fijo Duración Renta Divisa no
Peso (%) Años Variable Peso euro Peso
(%) (%)
FIAMM 100 < 1,5 - <5

FIAMM internacional 100 < 1,5 - >5

FIM renta fija corto 100 <2 - <5


plazo

FIM renta fija largo 100 >2 - <5


plazo

FIM renta fija 100 - - >5


internacional

FIM renta variable < 25 - > 75 < 30


nacional

FIM renta variable < 25 - > 75 < 30


euro

FIM renta variable < 25 - > 75


internacional

FIM renta fija mixta > 70 - < 30

FIM renta variable < 70 - 30 - 75


mixta

FIM renta fija mixta > 70 - < 30


internacional

FIM renta variable < 70 - 30 – 75


mixta internacional

FIM garantizado - - - -
renta fija

FIM garantizado - - - -
renta variable
Fondos globales - - - -

Comisiones

A) Soportadas por el fondo

i. Comisión de Gestión:

La percibe la sociedad gestora como remuneración de servicios de gestión y


administración del fondo y se fija en función del rendimiento o del patrimonio del
fondo. Puede calcularse sobre:

El patrimonio medio diario objeto de gestión.

Sobre los resultados obtenidos.

Mediante un sistema mixto que mezcla los anteriores.

En nuestro país el método más utilizado es el primero, si bien algunos productos


nuevos, normalmente de alto riesgo, usan normalmente alguno de los dos últimos.

ii. Comisión de Custodia o depositaria:

La percibe el depositario como remuneración por su labor de custodia y control y


está fijada en función del patrimonio custodiado. Se suele calcular sobre el valor
nominal de los valores que se tienen en cartera en el fondo, si bien algunas
entidades lo hacen en base al valor efectivo limitando los cargos al equivalente en
base nominal.

Ambas comisiones se calculan diariamente y se cargan en el patrimonio del fondo


según los porcentajes de aplicación que consten en el folleto explicativo. Además
están establecidos unos límites máximos legales tanto para la comisión de gestión
como para la de custodia.

B) Soportadas por el partícipe

Su aplicación se traduce en pagar un canon por entrada o salida del fondo, que
puede ser recibido por la gestora (comisiones) o por el mismo fondo (descuentos).
Normalmente su puesta en marcha queda condicionada a un período de
permanencia en el fondo, cancelándose en la mayoría de los casos a partir de un
plazo. El motivo de su existencia es facilitar las labores de la gestión, ya que para
alcanzar una máxima efectividad debe contarse con un volumen patrimonial más o
menos estable y, cuanto menos, creciente.
i. Comisión de suscripción:

Puede percibirla la sociedad gestora y se aplica sobre el importe de la suscripción.

ii. Comisión de reembolso:

Puede percibirla la sociedad gestora y se aplica sobre el importe de reembolso,


disminuyendo el mismo

Fiscalidad de los fondos de inversión

La tributación al IRPF de las plusvalías en Fondos de Inversión ha cambiado


desde el 1 de Enero de 2003. Las plusvalías de los fondos van a tributar al15% a
partir del primer año (inferior a un año tributarán al tipo marginal). Además se optó
porque el traslado o cambio de un Fondo de Inversión a otro, no supusiera ningún
tipo de carga fiscal eliminando el pago del "peaje" fiscal. Antes en el antiguo IRPF,
con las retenciones a cuenta se frenaban las posibilidades de cambiar de fondo
(excepto para los Unit Linked que sí disponían de esta posibilidad), lo que suponía
una discriminación frente a los grandes patrimonios que sí disponían de esta
disponibilidad. Con el cambio las dos modalidades –fondos y sociedades-, se han
aproximado en el nuevo IRPF. Los poseedores de participaciones de Fondos de
Inversión anteriores al 31 de diciembre del 94 conservan los coeficientes
reductores del 14,28% por cada año de permanencia hasta la fecha anteriormente
indicada.

Los fondos extranjeros que se comercializan en España se benefician de la misma


fiscalidad siempre que estén registrados en la CNMV, no provenga de un paraíso
fiscal y se encuentre dentro de la legislación comunitaria. Como ejemplo cabe citar
que la CNMV no permitió hasta Mayo de 2001 el registro de fondos irlandeses
debido a particularidades de la legislación irlandesa lo que afectó a gestoras de
EE.UU. que habían elegido Irlanda para lanzar sus fondos por toda Europa. Lo
mismo ocurrió con algunos fondos de Luxemburgo, que se asimilaron a inversión
en paraísos fiscales.

Fiscalidad de los fondos de inversión

La tributación al IRPF de las plusvalías en Fondos de Inversión ha cambiado


desde el 1 de Enero de 2003. Las plusvalías de los fondos van a tributar al15% a
partir del primer año (inferior a un año tributarán al tipo marginal). Además se optó
porque el traslado o cambio de un Fondo de Inversión a otro, no supusiera ningún
tipo de carga fiscal eliminando el pago del "peaje" fiscal. Antes en el antiguo IRPF,
con las retenciones a cuenta se frenaban las posibilidades de cambiar de fondo
(excepto para los Unit Linked que sí disponían de esta posibilidad), lo que suponía
una discriminación frente a los grandes patrimonios que sí disponían de esta
disponibilidad. Con el cambio las dos modalidades –fondos y sociedades-, se han
aproximado en el nuevo IRPF. Los poseedores de participaciones de Fondos de
Inversión anteriores al 31 de diciembre del 94 conservan los coeficientes
reductores del 14,28% por cada año de permanencia hasta la fecha anteriormente
indicada.

Los fondos extranjeros que se comercializan en España se benefician de la misma


fiscalidad siempre que estén registrados en la CNMV, no provenga de un paraíso
fiscal y se encuentre dentro de la legislación comunitaria. Como ejemplo cabe citar
que la CNMV no permitió hasta Mayo de 2001 el registro de fondos irlandeses
debido a particularidades de la legislación irlandesa lo que afectó a gestoras de
EE.UU. que habían elegido Irlanda para lanzar sus fondos por toda Europa. Lo
mismo ocurrió con algunos fondos de Luxemburgo, que se asimilaron a inversión
en paraísos fiscales.

Los fondos de inversión: marco legal

:: Los Fondos de Inversión ::

El régimen general de las IIC, estaba regulado anteriormente por la Ley 46/1984
de 26 de diciembre y el RD 1393/1990 modificado por RD 91/2001 de 2 de
febrero. Ahora esta ley y su Reglamento han sido sustituidos por la ley 35/2003 de
Instituciones de Inversión Colectiva y se está a la espera de la aprobación
definitiva del Reglamento que desarrolle los aspectos más fundamentales de la
ley, que está anunciado por parte del Ministerio de Economía y Hacienda para la
segunda mitad del presente año 2005.

En la actualidad con el objeto de agilizar al máximo los trámites de constitución y


comercialización de los fondos de inversión, las gestoras y los depositarios solo
requieren la autorización del proyecto de constitución por la CNMV. Estas
entidades alcanzarán sus respectivas condiciones cuando queden inscritas en los
Registros oficiales de la CNMV.

La ley anterior establecía cautelas para asegurar el buen fin de la gestión:

Coeficientes obligatorios de inversión.

Limitaciones a la concentración de inversiones.

Coeficientes mínimos de liquidez.

Requisitos que deben cumplir las sociedades gestoras y depositarios, no


pudiendo, por ejemplo, desempeñas ambas funciones para una misma IIC.
Con la publicación en el BOE de la ley 35/2003 de IIC se afirma que la inversión
colectiva es uno de los canales naturales para la participación de los hogares
españoles en los mercados de capitales. Su doble condición de fórmula de
financiación des intermediada y de instrumento de ahorro privilegiado de los
inversores minoristas la convierten en un sector de atención prioritaria para la
política financiera española. El buen funcionamiento de las Instituciones de
Inversión Colectiva tendrá implicaciones directas para los objetivos fundamentales
de la política financiera del país (eficiencia en la asignación de ahorro a las
oportunidades de inversión, en la gestión de los riesgos y en la protección de los
inversores menos informados).

Esta nueva ley deroga la ley 46/1984 que a pesar de establecer unas bases
sólidas que han dado lugar a un crecimiento espectacular de la inversión colectiva
en España, debía someterse a una reforma en profundidad que adaptase el sector
a las nuevos productos y necesidades de los inversores. Se persigue por un lado,
garantizar la flexibilidad y la capacidad de adaptación a la evolución del mercado,
y por otro lado atender a los desarrollos en el marco de los acuerdos de la Unión
Europea. Ya se han incorporado a la legislación española la Directiva comunitaria
sobre IIC armonizadas que dota de criterios homogéneos para la aprobación,
control, estructura y exigencias de información de los Fondos de Inversión en
todos los países pertenecientes a la UE.

Por otro lado basta con presentar ante el organismo regulador del Estado de
comercialización del fondo de Inversión correspondiente para que el registro sea
válido en todos los países del marco comunitario.

Actualmente, con la ley 35/2003 de 4 de noviembre y el Reglamento, que acabará


definiendo por completo la estructura del sector, las que siguen son las novedades
y objetivos más destacables que van a transformar el sector de los Fondos de
Inversión:

La liberalización de la política de inversión. La experiencia ha mostrado que es


preferible abandonar el enfoque basado en multitud de categorías legales de IIC y
en la limitación de los activos aptos para la inversión, introduciendo más
flexibilidad y libertad a la hora de definir los perfiles inversores de las IIC. El nuevo
marco regulatorio permite a las IIC invertir en casi todo tipo de activos financieros.

El reforzamiento de la protección a los inversores con nuevos instrumentos. El


fortalecimiento de las obligaciones de transparencias y de las normas de conducta
para prevenir conflictos de interés se ha revelado como un medio más eficaz para
proteger a los inversores, que la imposición de restricciones a las posibilidades de
actuación financiera de las IIC. En este marco las gestoras deberán contar con
departamento o servicio de atención al cliente que canalizará las quejas de los
inversores y cuyas decisiones serán vinculantes para la Entidad.

Menos trámites: Se da más flexibilidad a los procedimientos de fusión,


transformación y escisión. También se da más rapidez al proceso de autorización
de IIC y gestoras y se tiene previsto un nuevo régimen para operaciones
vinculadas.

Mayor Información: Será necesario tener a disposición del inversor información lo


más actualizada posible en cualquier momento y dar a los inversores la posibilidad
de conocer esa información a través de las nuevas tecnologías de Información
(Internet…) Será obligación de la gestora continuar enviando los correspondientes
informes ya sean trimestrales, semestrales o los de carácter anual. También se
debe informar al partícipe sobre su posición en las empresas en las que se
inviertan a la hora de acudir y votar en las juntas de accionistas.

Regulación de los Fondos y Sociedades de Inversión por compartimentos, lo que


supone un importante ahorro de coste para las Entidades.

Lo más novedoso del proyecto de ley es la eliminación de las categorías de


fondos. FIM, FIAMM, fondos principales y subordinados y fondos de fondos. Así, la
CNMV realizará una nueva clasificación: agrupará los productos en función de la
vocación inversora del fondo. De esta forma cada partícipe podrá elegir más
fácilmente el fondo que mejor coincida con su perfil de riesgo. Además se amplía
del 10% al 15% de la cartera del fondo el máximo que puede invertir en un solo
valor o activo. El número mínimo para construir un fondo queda establecido en
100 partícipes por compartimento.

Refuerza la separación entre gestora y depositario. Se fortalece su división de


modo que si están en un mismo grupo, se exigen determinadas medidas para
evitar los conflictos de intereses que estarán dentro de unos procedimientos
internos de conducta que serán verificados por una comisión del consejo u órgano
interno de la gestora.

Ventajas de los fondos de inversión

La principal ventaja que ofrecen los fondos de Inversión es que al juntar el dinero
de todos los inversores en un Fondo de Inversión, se logra un gran volumen de
dinero que puede generar mayores rentabilidades y conllevar menores costes de
transacción.

Posibilidad de diversificación y controlar mejor los riesgos: El ahorrador puede


acceder a una cartera de valores muy amplia que en muchos casos no estaría a
su alcance si invirtiese de forma individual, logrando un importante ahorro de
costes (ventajas de las economías de escala). Además existe la posibilidad de
invertir en valores extranjeros de forma sencilla y económica y en productos de
difícil accesibilidad para el inversor individual por su elevada complejidad.

Las decisiones de inversión las toma un inversor profesional, con dedicación plena
y que por lo general, dispone de la información adecuada para realizar las mejores
inversiones posibles teniendo en cuenta la coyuntura de los mercados y la
situación económica general.

Al estar sometidas al control de la CNMV los partícipes tienen la garantía de una


gestión transparente y la seguridad de un control y seguimiento exhaustivos; los
valores liquidativos de los fondos se publican diariamente y la obligación de
publicar Informes (trimestrales, semestrales…) es continúa.

Seguridad, adquirir participaciones de un fondo de inversión, en cualquiera de sus


modalidades hace que por pequeña que sea nuestra inversión, esta se encuentre
diversificada en un gran número de activos con lo que obtenemos una mayor
seguridad en nuestra inversión. Es importante mencionar que los fondos deben
cumplir con ciertas normas legales relacionadas a diversificación de inversiones
(máximos y mínimos para ciertas clases de instrumentos financieros), las cuales
son muy generales. Además, el mismo fondo puede establecer parámetros.

Fiscalidad, los fondos de inversión tienen una fiscalidad ventajosa, partiendo de la


base de que los rendimientos obtenidos no tiene repercusión fiscal hasta que no
reembolsamos parte o la totalidad de nuestra inversión, a la vez que al tributar
como rendimientos patrimoniales se permite la compensación de plusvalías están
sujetos a un tipo impositivo fijo del 15% para cualquier tramo de la escala de
gravamen. Además se ha eliminado el pago del "peaje" fiscal por el traslado de un
fondo de inversión a otro, siempre y cuando estén inscritos en la CNMV.

Liquidez: los fondos de inversión, en general, nos permiten disponer de nuestro


dinero en cualquier momento.

Variedad, al existir una enorme cantidad de fondos de inversión siempre


podremos encontrar aquel que por sus características se ajuste a nuestras
necesidades.

Inconvenientes

Imposibilidad de influir en la gestión, con lo que puede que no se adapte a sus


expectativas.
Dificultad de encontrar un gestor de patrimonio de confianza que anteponga los
intereses del inversor a los suyos propios y que convierta sus objetivos financieros
en realidad. Las comisiones añadidas de estos instrumentos pueden ser elevadas
y condicionar el resultado final de la inversión.

Alternativas a los Fondos de Inversión

El objetivo del inversor al participar en fondos de inversión es invertir en un


conjunto de valores que, mediante su correcta combinación, permitan optimizar su
rentabilidad y minimizar su riesgo, además de permitirle obtener importantes
beneficios fiscales, y una mayor liquidez.

Pues bien, a la vista de estos objetivos, el inversor puede encontrar otras


alternativas de actuación que le permitan alcanzar estos objetivos
fundamentalmente a través de vías alternativas: carteras de inversión, los “unit
link” y a través de otros vehículos de inversión aún poco introducidos en nuestro
país debido a restricciones legales, como son los Hedge Funds y la llamada
gestión alternativa.

A) Cartera de inversión:

Una cartera es el conjunto de activos con un objetivo y plazo determinados para


reducir el riesgo y maximizar la rentabilidad.

Las carteras pueden responder a diferentes criterios, distinta titularidad, plazo de


inversión, objetivo de inversión, banco o entidad. Así, el inversor es quien puede
definir su cartera según sea su perfil de inversión (conservador, moderado o
agresivo) Su elección estará en función de tres variables fundamentales: su
situación personal, el plazo al que piensa invertir y el nivel de riesgo que esté
dispuesto a aceptar. La opción de invertir mediante una cartera de valores exige
un alto grado de conocimiento de mercados y productos por parte del inversor, así
como contar con la asesoría y gestión de entidades especializadas en este tipo de
actividades, como empresas de servicios de inversión o entidades de crédito.

B) Unit Linked

Es un seguro de vida/ahorro que invierte las primas aportadas en fondos de cestas


de fondos de inversión que el inversor elige en función de su perfil y entre las que
se podrá mover sin tener que tributar. Asimismo, se garantiza una cobertura en
caso de fallecimiento y permite la posibilidad de beneficiarse de las ventajas
fiscales de los seguros de vida, así como la de rescatarse en cualquier momento,
sin necesidad de que se produzca el fallecimiento del asegurado.
Así, las principales ventajas de los unit linked son:

Movilidad: en todo momento el inversor podrá cambiar la distribución de cartera


entre las distintas modalidades sin necesidad de tributar, realizando tantas
reasignaciones como desee para maximizar la rentabilidad de su inversión.

Fiscalidad: el inversor no pagará impuestos hasta el momento del rescate y


además los rendimientos se verán minorados en función de la antigüedad de las
aportaciones, a partir de los dos años. Los rendimientos obtenidos por la venta se
consideran rendimientos de capital mobiliario y al tratarse de un seguro de vida se
beneficia de los coeficientes reductores que se aplican a éstos.

Liquidez: el inversor podrá rescatar su inversión en cualquier momento desde el


primer día, lo que le hace más ventajoso respecto a otros tipos de fondos tan de
moda como los garantizados.

Seguro de vida: en caso de fallecimiento los beneficiarios percibirán el capital


asegurado, que consistirá en adicionar al valor del fondo acumulado en fecha de
fallecimiento un 15% del valor de dicho fondo.

C) Gestión Alternativa y Hedge Funds

El comportamiento negativo de la renta variable en el trienio 2000-2003 ha


propiciado el desarrollo de productos de inversión diferenciados de la gestión
convencional, que han venido a conocerse como gestión alternativa. La Gestión
Alternativa recoge toda una serie de productos de inversión que pretenden buscar
rentabilidades absolutas positivas en todos los períodos con independencia de la
que obtengan los índices bursátiles. Tratan de optimizar el binomio riesgo -
rentabilidad y su período de análisis suele ser inferior que en la gestión tradicional.

Bajo la gestión alternativa se agrupan básicamente tres productos:

Inversión en Activos Inmobiliarios.

Private Equity o Capital Riesgo.

Hedge Funds.

Los Hedge Funds son vehículos de inversión de carácter privado y no regulado,


normalmente domiciliados en territorios “off-shore” (paraísos fiscales), que tienen
una libertad casi absoluta en cuanto a criterios o estrategias de inversión. Son
vehículos de inversión colectiva que no necesariamente tienen estructura de
fondo, pudiendo adoptar por tanto forma societaria. Surgen en 1949 en EE.UU
como respuesta a la demanda de grandes patrimonios que buscaban obtener
rentabilidades eludiendo el riesgo característico de los mercados bursátiles.

Utilizan frecuentemente derivados, posiciones cortas o vendidas y, en muchos


casos, con inversiones a crédito a apalancadas. Otra de las cuestiones es su
menor liquidez respecto a otros vehículos de inversión. Es bastante habitual que
los hedge funds contemplen posibilidades de reembolso sólo una vez al mes o al
trimestre.

Otro hecho característico es que las comisiones se devengan a partir del momento
en que el hedge fund supera su objetivo de rentabilidad, quedando estas
comisiones en suspenso cuando la rentabilidad cae por debajo de dicho objetivo y
no vuelve a superarlo. Es importante saber que el gestor suele invertir una parte
importante de su patrimonio en el producto, alineándose de esta forma los
intereses de gestores e inversores. Debido a su carácter privado y poca
información existente (consecuencia de la falta de regulación existente) basan su
captación de dinero de los inversores en la reputación y prestigio dentro del
mercado en base a las rentabilidades históricas conseguidas.

Los hedge funds basan su rentabilidad en la habilidad del gestor (80%) y en los
movimientos del mercado (20%). En los fondos tradicionales esta proporción se
invierte. El riesgo más importante al que nos enfrentamos en los hedge funds es el
llamado “riesgo gestor” por la elevada discrecionalidad que poseen los gestores,
sin olvidarnos del apalancamiento.

Existen cuatro estrategias básicas en los Hedge Funds:

Estrategias de arbitraje: Intentan explotar las discrepancias o ineficiencias que se


observan en los precios de activos relacionados.

Estrategias orientadas a eventos (Even Driven): Invertir en compañías inmersas


en procesos de fusiones, adquisiciones, reducciones de capital, etc. Apuestan por
los beneficios que reportarán sus consiguientes reestructuraciones, nuevas
aportaciones de capital, recompra de acciones, ecuación de canje de compañías
que se fusionan.

Estrategias tácticos o discrecionales: Intentan explotar a nivel global las distintas


tendencias que se desarrollan en la renta variable, la renta fija, los tipos de cambio
y las materias primas.

Estrategia de fondos de fondos: Invierten en Hedge Funds de múltiples gestoras.


Se diseña una cartera diversificada con el objetivo de disminuir el riesgo que
podría asumirse invirtiendo en un único gestor. Se pueden elegir fondos con la
misma estrategia o con estrategia muy distinta. El inversor se beneficia de la
diversificación de gestores y estilos de inversión. Esta estrategia ha resultado
especialmente significativa para mitigar las pérdidas en que muchos fondos han
incurrido (mayo de 2005) debido a la rebaja en la calificación crediticia (lo que ha
provocado la bajada del precio) de la deuda de General Motors.

En España estamos actualmente en fase de espera en la aprobación del


reglamento que desarrolle la nueva ley 35/2003 de Instituciones de Inversión
Colectiva. Los Hedge Funds recibirán el nombre de Inversión Colectiva de Alto
Riesgo (IICAC), en el nuevo Reglamento, y serán accesibles a los particulares.
Hasta ahora, en España estos productos eran exclusivos de inversores
institucionales, pero en el nuevo Reglamento, se limitará el endeudamiento de los
Hedge Funds con domicilio español a cinco veces su patrimonio, y para los
inversores particulares se establecerá una inversión mínima de 100.000 euros.

La intención del legislador es poner todas las garantías necesarias para que el
inversor que finalmente invierte en este tipo de fondos invierta sabiendo el riesgo
que está asumiendo.

Situación actual

En la actualidad, tienen una gran importancia social ya que cuentan con más de 8
millones de inversores, para los cuales resultan difícil hacer la elección ya que
existen más de 2000 fondos comercializables, decisión que será más compleja
desde ahora debido a que la (CNMV) y la Dirección General del Tesoro han dado
el visto bueno a tres categorías:

Los FIMP o fondos de inversión mobiliaria principales son IIC cuyos partícipes sólo
pueden ser otros fondos de inversión (los FIM subordinados). Su patrimonio
destina a la adquisición de activos de renta fija o variable, nacional o internacional.

Los FIMS o fondos de inversión mobiliaria subordinados, que destinan su


patrimonio a la compra de participaciones de los fondos principales (FIMP).

Los FIMF o fondos de fondos se caracterizan por invertir la mayor parte de su


patrimonio en otras instituciones de inversión colectiva nacionales o extranjeras.

El éxito comercial de estas instituciones ha estado íntimamente ligada al contexto


del mercado, así hasta 1995 los más demandados eran los FIAM de renta fija, por
los altos tipos de interés, pero, a consecuencia de las bajadas en los tipos,
comenzaron a desarrollarse de manera espectacular los fondos garantizados y
modalidades como los sectoriales o los mixtos, que permitían disfrutar al partícipe
de la Bolsa sin asumir todo el riesgo que esta conllevaba.
El volumen de patrimonio en Fondos de Inversión (Mobiliaria e Inmobiliaria) se
situó en 231.018 millones de euros en abril de 2005 (algo más de 38 billones de
pesetas) y el número de partícipes y accionistas en 8.151.380, según datos
suministrados por Inverco. La rentabilidad media ponderada obtenida por los
Fondos de Inversión en los últimos doce meses ha sido del 2,58%. El incremento
más significativo de partícipes sigue correspondiendo a los Fondos Garantizados
de Renta Variable, con un 7,3% más en lo que va de año, lo que continúa con el
tirón de los fondos garantizados entre los inversores en los últimos años (en 2004
tres de cada 4€ captados se destinaron a garantizados).

El futuro de los Fondos de Inversión

Si se tiene en cuenta la evolución que han presentado los fondos de inversión en


los últimos años, sobre todo como consecuencia del mayor conocimiento del
producto por parte de las familias, no hay duda de que en el futuro este producto
seguirá captando una parte considerable del ahorro de los inversores.

En el futuro, se espera que la evolución de los fondos de inversión en España


vaya acompañada de un incremento en la cultura financiera de las familias y de la
necesidad de prever rentas para el futuro, ya que las prestaciones sociales por
jubilación van a cubrir, previsiblemente, menor proporción de las rentas con que se
abandone la vida laboral.

Los fondos de inversión van a seguir evolucionando en el futuro, atendiendo al


objetivo por el que se crearon, que no es otro que facilitar el acceso de los
pequeños y medianos ahorradores al mundo de la inversión financiera, y así
posibilitar la tenencia de instrumentos a los que el acceso de modo individual
podría ser complejo.

En resumen, los fondos de inversión son un producto consolidado con un pasado


corto, pero brillante, y unas inmejorables expectativas de futuro.

:: Los Fondos de Inversión ::

Los fondos de inversión constituyen en la actualidad una de las alternativas de


inversión más demandada por los inversores. En España existen ya más de 8
millones de inversores, más de 2000 fondos comercializables y no hay duda de
que en el futuro este producto seguirá captando una parte considerable del ahorro
de los inversores.

También podría gustarte