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Respuesta al foro: iniciar la fe.
He leído con suma atención sus aportes en el foro. A esta altura de la cursada quiero compartir
con ustedes algunos puntos que pueden ser de ayuda para las diferentes cursadas.
Como docente siempre me preocupó (sobre todo en secundaria) el tema de las técnicas de estudio
y sobretodo el tema de la interpretación de consignas. Siempre queremos adelantar y cortar
caminos, porque el tiempo que dispongo quizá no sea el suficiente, porque hay temas que no me
interesan o simplemente quiero cumplir y después profundizo. Y ojo lo digo pura y exclusivamente
desde mi propia experiencia que después veía replicada en mis alumnos.
Muchas veces cometemos el error de no leer profundamente, de saltar los pies de página (donde
a veces se encuentra la solución a mis dudas) las referencias a otros autores que se nombran y no
tengo idea de quienes son pero entendiendo de donde vienen entiendo el enfoque del texto que
leo. Si ya se es una lata, pero una lata donde se va colocando cada moneda y a fin de año puedo
darme un gustito (sabiduría de vacas flacas).
A veces se piensa que haciendo largos relatos estoy diciendo mucho y es pura sanata (me lo decía
un profe en la universidad) otras veces la respuesta es tan corta que no se entiende lo que se
desea transmitir y el alumno piensa que lo dijo todo porque relaciono el texto con la clase y
supone que lo entendió todo pero el docente no puede seguir su lógica si no lo expone. Por lo
tanto comprender la consigna hace que se responda lo que se pregunta desde la elaboración del
propio pensamiento que es necesario desarrollar, explicitarlo.
Si la consigna me dice: Compartí algo de la lectura de Malajovich significativo para tú ser y hacer
docente, ¿cuál es el centro de la cuestión? Primero transcribir el texto que me pareció
significativo, todos lo hicieron, pero ¿cómo ve la docente que ese algo va a influir en su ser y hacer
docente? Que es justo el centro de lo que se plantea. Bajándolo a la realidad, a veces es a través
de una pregunta o duda (algunos lo han planteado a sí) porque todavía no tengo la situación real
experiencial, pero puedo soñar, imaginar, crear un posible escenario y zambullirme en él, no
quedarme con la letra, empezar a “jugar” con ella. La consigna queda completa cuando logro (en
este caso) ponerme en el centro de ella porque está cuestionando mi ser y hacer docente. ¿Me
explico? Si el texto da características cual es para mí la más adecuada para llevar a mí nivel.
Si tengo rasgos de cómo se aprende en el nivel inicial:
Priorizar la curiosidad, el interés por conocer y cuestionar sobre lo que se observa.
Organizar actividades desde preguntas
Contextualizar conceptos porque no aprenden conceptos generales.
Escenificar lo que van a aprender
Si el nivel inicial tiene como finalidad el desarrollo afectivo, el movimiento, los hábitos de control
corporal, desarrollar el lenguaje y la comunicación, aprender pautas de convivencia, adquirir
autonomía personal, respetar las diferencias, observar y explorar los diferentes entornos,
reconocer que el otro del cual se depende tiene y establece una ley que muchas veces le impide
hacer lo que desea pero que aceptarla y reconocerla lo hace autónomo, más independiente, lo
aleja del otro del cual depende para todo, trabajar a la par con la familia.
Afectividad, cognición, espiritualidad, identidad todo se forma en estos momentos del desarrollo
de cada persona.
Y el juego es tomado como motor de desarrollo porque favorece la elaboración y desarrollo de las
estructuras de conocimiento y sus esquemas de relación. Entonces como integro todo esto en el
juego, como yo docente lo desarrollo, lo pongo en práctica, lo manejo. Que puedo yo (ser) adoptar
y adaptar para mí hacer.
Esta observación intenta ser un aporte no es poner un regular, bueno o excelente nada más
alejado del proceso de enseñanza aprendizaje, intenta solo ser un disparador para ustedes, para
que al situarse frente a una consigna digan: a ver, este profe adónde va, que quiere, como debo
posicionarme y responder. A esta altura del partido ya se imaginan por donde y hacia dónde voy,
que es lo que me interesa transmitir o conseguir de ustedes, bueno desde ahí actúen pero siempre
mirando sus propios procesos, por eso insisto tanto en la comunicación, no llegan: griten, no
pueden: pataleen, den señales de vida, no está mal es necesario, y cuando no pueda ayudarlos le
diré lo siento no puedo salir de la normativa que me imponen o impongo y entonces ambos
trataremos de aceptar el límite respetar la norma y crecer sin frustrarnos, aceptar la realidad que
es tan sano. O reconocer: la verdad no tengo idea buceemos juntos.
Muchas veces me encontré en encuentros de catequistas o espacios de formación la idea de juego

como descarga de energía. –Los dejo jugar un partido de futbol o una escondida para que se
descarguen, después les doy una merienda para que no tengan necesidad de salir durante el
encuentro- en definitiva el niño/a ¿iba a la capilla o al club del barrio?, en que se diferencia un
lugar del otro, en nada, porque dudo que esos niños estén esperando impacientemente el
mensaje que Jesús tiene preparado para ellos. Pero si el juego dispara una idea del mensaje, los
introduce, pueden relacionar lo que acaban de jugar con el mensaje de Jesús la cosa cambia, no es
un entretenimiento nada más, es concepto que se aprende jugando. Y si eso que se jugó se asocia
a todo el encuentro y se termina nuevamente con el mismo juego y se celebra con una merienda
seguro que el mensaje se hizo vida, se aprendió algo nuevo, se vivió el mensaje ¿no?
Una vez me invitaron a dar una charla en un retiro para adolescentes. Habían terminado de comer
y comenzaron a jugar con los vasos, un juego que en esa época era muy conocido. Una hora de
reloj, y sin querer pasaron a un truco, los coordinadores no podían cortarlo. Imposible volver al
silencio que habían impuesto durante toda la mañana. Ese juego gritaba el sin sentido de lo que
estaban haciendo, no entendían para que estaban ahí, yo no podía transmitirles lo que los
coordinadores me habían pedido porque me estaban gritando que hasta ahora estaba rica la
comida, muy buenos los caramelos y un plomo las charlas. Retomar desde ahí es flor de desafío,
me quería ir no podía creer lo que estaba viendo pero sirvió para empezar desde cero. Los senté
en círculo e hice lo que no hicieron al principio les pedí su nombre y que me dijeran porque
vinieron y todo a través de una dinámica juego que les gusto y permitió que fueran aplacando su
energía y prestando atención a lo que cada uno expresaba, le dije lo que podían llegar a encontrar
ahí, en ese lugar retirado donde tanta gente había pensado en ellos porque ellos eran
importantes, y me fui, no quise saber cómo termino todo pero creo que a veces no podemos o no
sabemos leer las necesidades y originamos actividades o respuestas que necesito yo pero nada
que ver con el otro, con la realidad, con la situación.
Usemos todos los recursos que conocemos pero en el momento justo y de la mejor manera
posible y cuando es necesario.
Perdón nuevamente por la experiencia personal pero he vivido tantos momentos incomodos y
vividos como infartantes que no puedo dejar de comentarlos.
Nos seguimos leyendo, compartiendo y construyendo un camino personal y comunitario. Stella

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