Azrael El Arcangel de La Muerte
Azrael El Arcangel de La Muerte
Azrael El Arcangel de La Muerte
Azrael tiene el título del Ángel de la Transición porque ayuda al ser humano en el
difícil tránsito de la muerte. Este papel puede ser abordado desde distintas
ópticas, pasando por la clásica visión en que Azrael separa el alma del cuerpo y
acompaña al alma a su destino, hasta aquella perspectiva algo heterodoxa de la
reencarnación entendida de una forma más perteneciente al esoterismo que a la
religión, perspectiva en la cual Azrael es el guía espiritual del alma en el momento
de pasar de una vida a la otra, tanto en el caso en que esa alma tiene que pasar
(antes de encarnar) por diversos planos sutiles o lugares de estancia, como en el
caso (enmarcado en otras teorías) en que esa alma tiene que asumir un cielo o
infierno temporal y transitorio entre una y otra existencia.
Es en esa función de Ángel de la Transición donde Azrael se encarga de dar paz
al alma de quien va a morir, no solo en el momento de la muerte y en los instantes
previos, sino en la difícil crisis que constituye el préambulo de angustia y agonía
propio de aquellos casos en que el individuo sabe que la muerte está próxima, tal
como el caso del enfermo terminal (de SIDA, cáncer, etc.) o, por poner un ejemplo
extremo, el caso de alguien que va a morir ejecutado o torturado. Y es que, y esto
hay que señalarlo, Azrael no requiere que su ayuda sea solicitada para ayudar. Él
simplemente está allí, incluso para muchos de los que no creen en su existencia.
Mas él no se limita a ayudar al sujeto que va a morir: también ayuda a quienes
sufren la agonía y la muerte de quien pasará al otro mundo. Es así que él derrama
su “energía sanadora y luz divina”, otorgando consuelo, serenidad, aceptación y,
sobre todo, una comprensión sabia y profunda de la muerte, no ya como el
inquietante paso del ser a la nada, sino como el tránsito en que el sujeto abandona
sus elementos transitorios
La tradición cristiana nos enseña que el Arcángel Miguel derrotó a los ángeles rebeldes que
se habían apartado de la Luz. Dios envió contra los ángeles rebeldes liderados por Satanás al
Arcángel Miguel y los ángeles permanecieron bajo su autoridad. San Miguel se escuchó
entonces a ambos lados del cielo exclamando: “¿Quién es como Dios?”
Estas palabras fueron tan eficaces que el Arcángel de Dios y sus ángeles se impusieron y
expulsaron a los ángeles rebeldes de las esferas celestes.
De tal forma que el Arcángel Miguel es representado como un caballero con una espada
reluciente preparada para someter al demonio.
La espada que empuña San Miguel Arcángel simboliza una herramienta con la que cuenta el
hombre en la guerra santa contra las aberraciones de la dimensión corporal y así conducir a la
reconciliación con la dimensión espiritual. La espada puede ser vista como el símbolo de la
redención entre la vida externa del hombre y su vida interior (espiritual).
Sin embargo, el mal no solo está representado por crituras, el mal va mucho más
allá, es escurridizo y nos engaña de múltiples formas. Es una fuerza inteligente que
no quiere ser detectada.
La espada del Arcángel Miguel va mucho más allá de un combate físico, es una
herramienta espiritual que Dios nos da para detectar y combatir la presencia del
mal en nuestra vida.
Índice
Historia de la Espada de San Miguel
El Poder de la espada de San Miguel Arcángel
¿Qué Representa la Espada de San Miguel Arcángel?
Historia de la Espada de San Miguel
La historia de la espada de San Miguel se cuenta como una poderosa herramienta
creada por el mismo Dios y regalada a sus hijos, los cuales están hechos a imagen y
semejanza de Él mismo.
La intención de Dios era que cuando sus hijos se alejaran de su hogar en el cielo,
estuvieran equipados con una poderosa arma para combatir con las fuerzas del
engaño, derrotarlas y trascenderse, para de esta manera, volver a hogar.
Se dice que Dios oculto en el interior de cada alma la poderosa espada y solo
aquellos que miraran dentro con fe podrían descubrirla.
No es un arma física sino una espiritual que nos permite vencer al enemigo que se
oculta en lo más profundo de las tendencias negativas de pensamiento y de
comportamiento y logra así oscurecer el corazón de la humanidad.
Es por eso que Dios, a través de San Miguel, nos enseña el total y absoluto
esplendor de la espada del discernimiento, con la esperanza de que miremos
dentro y encontremos esa misa espada.
Hoy en día el mal se viste con el atuendo de los deseos de las personas, invade
nuestros sentidos con las ganas desmedidas por experimentar placer de cualquier
experiencia.
Las ganas por experimentar placer producen una infinidad de deseos en la mente.
Si no utilizamos el discernimiento, nos olvidamos de la presencia de Dios en
nuestra vida.
El placer producido por la satisfacción de deseos crea apegos materiales, estos
apegos nos hacen pensar que la felicidad proviene de objetos, situaciones y
personas en lugar de mirar a Dios como el único hacedor y dador de felicidad.
Una vez que cortamos la presencia del mal de nuestra mente, la espada de San
Miguel permanece activa y en guardia ante las nuevas tentaciones que quieran que
apartemos nuestra conciencia de Dios.
Recuerda siempre que cuentas con la protección de la espada del Arcángel Miguel
en todo momento, esta se manifiesta a través de la voluntad para combatir
tentaciones y malas acciones.
De igual forma está presente en la voz de la conciencia que en todo momento nos
muestra el camino correcto.