Laboratorio ANK
Laboratorio ANK
Laboratorio ANK
Valencia, 2019
1. HEMATOLOGÍA
A. Serie roja:
Sexo/Edad Valor normal Disminución Aumento
Niños 35%
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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B. Índices hematimétricos:
Volumen corpuscular medio (VCM): valora el volumen medio de los glóbulos rojos. Pueden
presentarse alteraciones hematológicas con eritrocitos de menor volumen (microcíticas) o de
mayor volumen (macrocíticas).
Hemoglobina corpuscular media (HCM): es la cantidad de Hb que tiene un glóbulo rojo.
Indica el peso medio y cantidad real de Hb en cada eritrocito.
Concentración de hemoglobina corpuscular media (CHCM): representa la concentración
Hb en relación con el paquete de eritrocitos. Depende del tamaño del GR y de la cantidad de
Hb en cada uno de ellos.
CHCM 32-36 % - -
C. Serie blanca:
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Existen causas no infecciosas de leucocitosis como el dolor agudo, los procesos inflamatorios, la
colagenosis, situaciones posthemorrágicas, hipertermia no infecciosa, quemaduras extensas, coma
diabético, intoxicaciones por metales pesados, entre otras.
Con relación a la fórmula leucocitaria podemos mencionar algunos aspectos básicos de interés:
D. Plaquetas o trombocitos:
El hemograma nos aporta información acerca del recuento plaquetario. Los valores normales oscilan
entre 150.000 y 450.000 mm₃. Cuando la cifra de plaquetas se encuentra por encima de la
normalidad se trata de una trombocitosis, mientras que se entiende por trombocitopenia la
presencia de una cifra de plaquetas por debajo de la normalidad.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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2. PANTALLA DE COAGULACIÓN
VALOR
FUNCIÓN
NORMAL
Los procesos inflamatorios, cuando son de cierta entidad, tienen una repercusión en todo el
organismo, que se traduce, entre otras manifestaciones, por un aumento de los reactantes de fase
aguda. Su determinación es importante en la práctica clínica para diferenciar cuadros funcionales de
procesos con compromiso orgánico. La inflamación acompaña a cuadros muy diversos que incluyen la
infección, las vasculitis, los traumatismos, las neoplasias y la isquemia. Cursa con una serie de
modificaciones adaptativas de orden metabólico, vegetativo, hematológico y hormonal que contribuyen
a la defensa del organismo, tanto en situaciones agudas como crónicas.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Los reactantes (o proteínas) de fase aguda son productos sintetizados principalmente en el hígado
cuyas concentraciones séricas varían significativamente por efecto de las citocinas generadas en la
inflamación. Pueden ser positivos o negativos si su concentración plasmática aumenta o disminuye al
menos un 25% durante los estados inflamatorios. Los marcadores de inflamación más utilizados en la
práctica diaria son la velocidad de sedimentación globular (VSG) y la proteína C reactiva
(PCR). Aunque no son específicos de ninguna enfermedad su determinación proporciona información
útil en el diagnóstico diferencial de enfermedades inflamatorias frente a las no inflamatorias y en la
valoración de los efectos del tratamiento.
A. VSG: es una prueba fácil y simple de realizar que representa una medida indirecta de los
reactantes de fase aguda.
Valores normales
Hombres 0-15 mm/h
Menores de 50 años
Mujeres 0-20 mm/h
Hombres 0-20 mm/h
Mayores de 50 años Mujeres 0-30 mm/h
4. QUÍMICA SANGUÍNEA
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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B. BUN (Blood Urea Nitrogen), Nitrógeno ureico: la urea es el producto final del
catabolismo proteico, se consideran cifras normales valores entre 12 y 54 mg/dL. En
determinados laboratorios la determinación plasmática de urea se sustituye por la del nitrógeno
ureico (BUN), cuyo valor normal es de 8-25 mg/dL. Es utilizado como índice de función
glomerular, midiendo el equilibrio entre el metabolismo de proteínas exógenas, endógenas y el
índice de filtración renal.
MUJER
0,3 - 1,1 mg/dL HOMBRE
0,5 - 1,3 mg/dL
D. Perfil lipídico
Colesterol*:
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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I. Las LDL (low density lipoprotein), que transportan el colesterol desde el hígado a las células. El
70% del colesterol circulante es vehiculizado por esta lipoproteína, y es la fracción de colesterol
más aterogénica (la que se deposita en vasos sanguíneos, con la consiguiente formación de la
placa de ateroma).
II. Las VLDL (very low density lipoprotein), que después de liberarse de los triglicéridos endógenos
absorbidos vehiculiza colesterol de la circulación al hígado. Sólo el 10% del colesterol circulante
va ligado a esta lipoproteína y es ligeramente aterogénico.
III. Las HDL (high density lipoprotein), que transportan el colesterol cedido por las células hasta el
hígado. Por llevar a cabo el transporte centrípeto del colesterol, son protectoras frente a la
aterogénesis. El 20-25% del colesterol está ligado a estas lipoproteínas.
Las cifras normales de colesterol en el plasma varían fundamentalmente según el tramo horario, el sexo
y el laboratorio, pero de forma general oscilan en una persona de mediana edad entre:
HDL 40 – 60 mg/dL
Las recomendaciones básicas para realizar la prueba son que el paciente no debe cambiar sus hábitos
alimenticios en las 3 semanas previas a la prueba, no ingerir bebidas alcohólicas en las 72 h previas y un
ayuno completo 12 h antes de la muestra.
Triglicéridos*:
Los triglicéridos son lípidos cuya función principal es transportar energía hasta los órganos de depósito.
El interés de su medición viene dado por constituir uno de los factores de riesgo cardiovascular,
aunque más débil que los clásicos -hipercolesterolemia, hipertensión, diabetes y consumo tabáquico-.
Los triglicéridos son transportados por lipoproteínas, el 80% por las VLDL y el 15% por las LDL. Su
valor normal en plasma, variable según el laboratorio, oscila entre 40 y 150 mg/dL.
*en el caso de los adolescentes existen tablas para graficar los valores normales según la
edad, tanto para el colesterol total como para los triglicéridos.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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5. ELECTROLITOS SÉRICOS
Bilirrubina:
La bilirrubina es un compuesto derivado del catabolismo del grupo HEM de la hemoglobina y de las
enzimas hemínicas. En condiciones normales la mayor parte de la bilirrubina se produce por
destrucción de eritrocitos viejos en las células del sistema mononuclear fagocítico en el bazo. Se
encuentra en 2 formas: conjugada (directa) y no conjugada (indirecta).
Directa:
La bilirrubina indirecta o no conjugada pasa al torrente
< 0,25 mg/dL
sanguíneo por difusión pasiva y circula unida a la albúmina. Total:
Una o varias proteínas transportadoras captan la < 1 mg/dL
bilirrubina y la transportan al interior del hepatocito, Indirecta:
<0,75 mg/dL
donde se conjuga con una o dos moléculas de ácido glucurónico
mediante la acción de la enzima UDP-GT (bilirrubina uridinofosfato glucuroniltransferasa).
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Transaminasas
Son marcadores fundamentales de lesión hepatocelular con un aumento significativo en hepatitis virales
(TGP), en el infarto del miocardio (TGO), así como en mononucleosis, cirrosis, pancreatitis aguda.
TGO o AST
(Transaminasa glutámico oxaloacética o aspartato 0 – 30 UI/L
aminotransferasa)
TGP o ALT
(Transaminasa glutámico pirúvica o alanino 0 – 24 UI/L
aminotransferasa)
Fosfatasa alcalina:
La fosfatasa alcalina sérica tiene varios orígenes (hígado, riñón, placenta, intestino, huesos y leucocitos),
aunque las fuentes más importantes son el hígado, los huesos y el intestino. Los valores séricos
normales son: en hombres 80-306 U/L y en mujeres 64-306 U/L. Durante la adolescencia
(crecimiento puberal), embarazadas y postmenopáusicas los valores se encuentran fisiológicamente
muy elevados.
7. UROANÁLISIS
El uroanálisis está compuesto por varias pruebas que identifican las distintas sustancias eliminadas por
el riñón; su resultado es de gran importancia en el estudio inicial de enfermedades de origen urinario o
sistémico, esto hace necesario que sus datos sean correctamente interpretados.
Técnica de recolección:
Primera orina de la mañana (más concentrada).
Higiene de los genitales.
Desechar el primer chorro, recoger la muestra del medio de la micción.
La cantidad ideal es entre 75-100 ml.
En niños pequeños debe usarse una bolsa recolectora.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Color: la orina es de color amarillo claro. Dependiendo de su concentración, puede ser clara
y transparente (diluida) o amarilla oscura (más concentrada).
Olor: la orina fresca normal es inodora (olor “sui generis”). En los pacientes con infecciones de
las vías urinarias por microorganismos que degradan la urea huele a amoníaco, en tanto que la
de los pacientes con cetoacidosis metabólica huele a acetona. Un olor dulce desagradable
sugiere pus o inflamación.
Volumen: el volumen de orina que se produce diariamente puede variar de individuo a
individuo, dependiendo de la ingesta de líquidos y de la función renal.
Densidad: refleja capacidad del riñón concentración de la orina. Su rango va entre 1.001 a
1.034 (1.020 de promedio).
Osmolaridad: tiene una relación lineal con la densidad, de modo que en adultos jóvenes varía
entre 50 a 1300 mOsm/kg, aunque los valores normales son de 300 a 1200 mOsm/kg para
adultos y 200 a 220 mOsm/kg para lactantes. Se mide en pacientes con alteraciones de la
hidratación y en el diagnóstico diferencial de oligurias.
B. Examen químico:
pH: en condiciones normales puede variar entre 5-8 dependiendo de factores como la dieta y
el consumo de fármacos.
Glucosa: no presenta. Si hay es indicativo de hiperglicemia.
Proteínas: debe ser negativo. De ser positivo está relacionado con: infecciones, diabetes,
síndrome nefrótico, diabetes. También pudiera estar presentes en fiebre muy elevada,
embarazo y esfuerzo físico excesivo.
Hemoglobina: debe ser negativo.
Cetonuria: debe ser negativo. Presentes en ayunos prolongados, desnutrición, vómitos,
cetoacidosis, alcoholismo.
Nitritos: negativo, de estar presentes indican infección urinaria ya que las bacterias (Gram
negativas) reducen nitratos a nitritos.
Urobilinógeno: normal en pocas cantidades. Aumenta en las enfermedades hepáticas y/o
hemolíticas, las cuales aumentan concentración de bilirrubina en sangre. Ausente en Colestasis.
C. Examen Microscópico
Células epiteliales: pueden ser 3 tipos: escamosas, transicionales y renales. La presencia de
un número elevado de células escamosas sugiere contaminación vaginal o uretritis. Las células
transicionales en casos de litiasis renal. Y las renales son signo de enfermedad o daño renal:
pielonefritis, necrosis tubular, reacciones tóxicas.
Leucocitos: el valor normal de glóbulos blancos en la orina es de 0-4 por campo,
principalmente neutrófilos. Se denomina leucocituria a la presencia de más de 5 células blancas
por campo en orina centrifugada y piura a la presencia de más de 10 glóbulos blancos en orina
sin centrifugar.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Hematíes: la orina normal contiene 2-3 hematíes por microlitro, cifras superiores se deben
considerar patológicas, definiéndose hematuria cuando existen más de 5 GR por campo. Su
aumento se debe a infecciones, cálculos, traumatismos, neoplasias.
Mucina: su aumento se relaciona con infección o inflamación.
Bacterias: la orina siempre debe estar libre de bacterias, su presencia pueden indicar
infección o contaminación de la muestra.
Cristales: los más comunes son los de oxalato de calcio (alto consumo de lácteos y alimentos
ricos en calcio) y los de ácido úrico (personas con alto consumo de carnes rojas).
Cilindros: con excepción de los hialinos, la presencia de cualquier otro tipo es signo de
patología renal.
8. COPROANÁLISIS
A. EXAMEN MACROSCÓPICO:
• Consistencia: puede ser líquida, blanda, pastosa, dura.
• Color: normalmente es marrón. Es negro en las melenas, blanca en acolia. El tipo de
alimentación puede cambiar el color.
• Presencia de pus, moco, sangre, restos alimenticios, helmintos.
• Olor: fecal característico (“sui generis”).
• Cantidad: dependerá de los residuos alimenticios (celulosa) de la dieta. Presencia de diarrea
o estreñimiento.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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B. CARACTERÍSTICAS QUÍMICAS:
• pH: entre 6,5 y 6,9. Menor a 6 en diarreas de origen bacteriano. En las de origen viral es
mayor la acidez.
• Azúcares reductores: negativo. Su presencia puede ser característico de rotavirus u otra
infección viral. También es indicador de diarreas por intolerancia a la lactosa (lactantes
menores).
• Sangre oculta: sangre proveniente del tracto digestivo superior. Se recomienda evitar
comer carne, alimentos o medicamentos ricos en hierro 48 h previas al examen.
C. EXAMEN MICROSCÓPICO
• Leucocitos: normalmente no están presentes o están por debajo de 5 por campo.
• Flora bacteriana: normal o disminuida. En adultos predominan las bacterias Gram (-) y en
lactantes las Gram (+).
• Restos alimenticios: de origen vegetal se asocian a síndromes de malabsorción por
deficiencia de jugos digestivos, y son productos de diarreas inespecíficas.
• Levaduras: se pueden encontrar en pequeña cantidad, <19 por campo (xc)
• Formas parasitarias: depende de la forma parasitaria que esté presente en las heces.
El LCR se obtiene mediante la introducción de agujas raquídeas en las áreas por donde circula éste.
Hay tres regiones en las cuales se puede tomar la muestra:
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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Características citomorfológicas (análisis cualitativo): Se clasifica en: Grado I: Normal, Grado II:
Inflamatoria, Grado III: Atipias sin evidencia de malignidad, Grado IV: Sospecha de malignidad, y
Grado V: Neoplasia maligna.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo
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BIBLIOGRAFÍA.
Longo D.L., Fauci A.S., Kasper D.L., Hauser S.L., Jameson J.L., Loscalzo J, Editores. Harrison Principios
de medicina interna. Vol 1 y 2. 18a ed. México: Mcgraw‐Hill; 2012.
Prieto Valtueña J, Garrido Alegre F, Ávila M. Balcells. La clínica y el laboratorio. 20° edición. España:
MASSON; 2006.
Caraballo, A.; Chalbaud, C. y Gabaldon, F. Pruebas de laboratorio interpretación clínica. 1era edición,
5ta reimpresión. Venezuela, Mérida: Editorial Venezolana; 2013.
Gómez Gutiérrez, A. y Casas Gómez, M.C. Interpretación clínica del laboratorio. 8va edición,
Colombia: Editorial Médica Panamericana, 2014.
Elaborado por: Brs. Andrea V. Rivero C. y Marian F. Rodríguez H. Revisado: Dr. Jesús Ignacio Carrillo