Caso Ana Estrada Informe Etico
Caso Ana Estrada Informe Etico
Caso Ana Estrada Informe Etico
⮚ INTEGRANTES:
2021
UNIVERSIDAD PRIVADA DEL NORTE
GRUPO 07
-Desarrollo del punto 1: “ ¿Por qué Ana Estrada pide la eutanacia?
La ciudadana Ana Milagros Estrada Ugarte solicita la muerte asistida en defensa de su derecho a
elegir cuándo morir y la protección de los derechos fundamentales que le han sido lesionados y
amenazados a causa de la Polimiositis, una enfermedad degenerativa e incurable que ha afectado
progresivamente sus capacidades motoras, hasta el punto de paralizar todos sus músculos y
obligarla a depender de un respirador artificial y asistencia médica.
La Polimiositis es un mal inflamatorio y autoinmune que provoca debilidad muscular, y se vuelve
discapacitante con el pasar del tiempo. Dicha condición causa, en las personas que la padecen,
debilidad muscular que afecta ambos lados del cuerpo, sobre todo aquellas zonas cercanas al
tronco, entre estas: los muslos, los hombros, las caderas, las partes superiores de brazos y el
cuello. La patología progresa gradualmente durante meses y años, hasta que sus efectos generan
una discapacidad casi total. En un inicio, las sensaciones características son debilidad muscular,
hinchazón, sensibilidad y daño a los tejidos, lo que ocasiona que la persona que padece la
enfermedad tenga dificultad para realizar acciones tan cotidianas como subir escaleras,
levantarse, cargar objetos o alcanzar lugares que estén por encima de la cabeza; pero a medida
que la enfermedad avanza, la persona puede padecer dificultades para respirar, cuadros de
neumonía e insuficiencia respiratoria.
Ana Estrada fue diagnosticada con esta enfermedad desde los 12 años. Desde aquel entonces,
tuvo que soportar el dolor y la agonía que la enfermedad trajo consigo. A su corta edad, debía
soportar los pinchazos y extracciones de pedacitos de músculo que los laboratorios realizaban
con el fin de analizarlos, las resonancias magnéticas, visitas al reumatólogo, sesiones de
fisioterapia y el hecho de no poder vivir como una persona normal. La polimiositis avanzaba, a sus
38 años ya estaba postrada en una silla de ruedas y dependía del cuidado de una asistente; sin
embargo, aun con eso Estrada había logrado ser feliz y conseguir una buena vida: en 2015 tenía
una casa propia, se había graduado como Psicóloga psicoanalista en la PUCP, atendía a sus
pacientes y pasaba tiempo con su familia y amigos. Lamentablemente, ese mismo año la
enfermedad la golpeó para apagar el rastro de luz que había en su vida. Lo que era un resfrío
derivó en faringitis y luego en bronquitis; su cuerpo empezó a rechazar el alimento, dada su
pésima condición tuvo que ser entubada. Más adelante la bronquitis terminó en neumonía. Ana
tuvo que ser internada, debía permanecer entubada y postrada en una cama durante casi todo el
día, completamente dependiente de cuidados de terceros, ya que le era imposible defenderse por
su propia cuenta.
Fue este hecho el que marcó un hito en su vida, tal como lo señala en una entrevista “Yo morí
aquel día en que fui internada en el Hospital Rebagliati. Perdí todo lo que había construido, perdí
mi vida”. Dadas las pésimas condiciones de vida en las que se encontraba, y las restricciones
generadas por su enfermedad, Ana Estrada comenzó su lucha por una muerte en condiciones
dignas. A mediados de 2019 creó su blog titulado “Ana busca la muerte digna” mediante el cual
pretendía generar conciencia sobre la libertad de morir dignamente debido a las restricciones
generadas por algunas enfermedades como la Polimiositis y hacer escuchar su pedido, además
de acudir a diversos organismos nacionales para lograr su objetivo.
-Desarrollo del punto 2: DERECHO A DECIDIR
Queremos creer que los tiempos avanzan. Al menos así nos parece o nos gustaría que parezca.
Pero hay algunas cosas que nos resulta más difícil cambiar como los principios que desde
siempre se encuentra en nosotros, al reflexionar cómo la vida y la muerte y nuestra decisión frente
a esta estaríamos planteando algo tan serio como el derecho a morir.
¿Deberían penalizar este tipo de conductas?, podríamos plantearnos otras muchas interrogantes
sobre el derecho a morir logrado con la eutanasia, médicamente entendemos la eutanasia como
muerte sin sufrimiento físico.
¿Quién no quisiera una muerte así para sus seres queridos, o para sí mismo? Sin embargo,
estaríamos hablando de un acto de suicidio, pero no habría ni un castigo ya que desaparece el
autor desaparece la responsabilidad penal. Podríamos hablar también de las figuras de la
inducción o de la cooperación al suicidio o en este caso un homicidio piadoso se describe del
modo siguiente: "El que, por piedad, mata a un enfermo incurable que le solicita de manera
expresa y consciente para poner fin a sus intolerables dolores", figuras como éstas se encuentran
castigadas en el art. 112 de nuestro Código Penal, con la pena de prisión no mayor a tres años.
Las decisiones relacionadas con el final de la vida son complejas y difíciles y hablar de ello, lo es
mucho más. Es una obviedad, por supuesto. Uno de los temas que más preocupan a la bioética y
a la sociedad es el relativo a las cuestiones éticas que plantea el final de la vida. Seguimos dando
la espalda a la muerte, como si no quisiéramos afrontarla, cuando lo único cierto que hay en esta
vida es que en un momento determinado todos pasaremos por ese trance. Tanto escapamos de
ella que recurrimos a figuras retóricas o recursos estilísticos varios (final de la vida, último viaje,
etc.) para no nombrarla directamente. Pero algo está cambiando en los últimos años. Son cada
vez más, desde la aprobación de la muerte digna de Ana Estrada la primera en decidir su muerte
en el Perú.
Uno de los valores sobre el que gira el derecho a decidir es el de la autonomía personal. En la
bioética actual se parte de la asunción de que todo ser humano merece igual consideración y
respeto, y del reconocimiento de las personas como seres intelectual y moralmente autónomos.
Este reconocimiento lleva aparejado la obligación de respetar las decisiones de las personas.
Respeto que ha de mantenerse durante la enfermedad y se extiende al proceso final de la vida.
Respetar la autonomía personal significa respetar la dignidad de la persona y su capacidad de
tomar decisiones de forma voluntaria y consciente. Siento que no se puede hablar de dignidad en
la vida, si no se tiene libertad de decidir, puesto que es la autonomía la que permite hablar de
dignidad.
La dignidad implica la idea de libertad personal. Ser persona es tener entendimiento y voluntad,
autodeterminación, autoconciencia de sí, y autorrealización de sí, actuar libre y
consciente. Decidir, tomar decisiones es ejercer la libertad, y el respeto a la opción elegida en
ejercicio de esa libertad es el fundamento del principio de autonomía. El principio ético por el cual
la persona tiene derecho a la gestión de la propia salud y del que deriva la necesidad de consentir
determinados tratamientos, está enraizado en la misma dignidad del hombre, en su ser realidad
indisponible ante cualquier manipulación ajena.
Teniendo en cuenta todo esto podemos decir que el derecho a decidir sobre nuestra propia
muerte es algo que no es un tema tabú como antes y que con el caso Ana Estrada que tuvo el
derecho a decidir nos abre las puertas a nosotros también podamos decidir sobre nuestra muerte
y tengamos nuestro derecho a decidir.
-Desarrollo del punto 3: “SE INAPLICA EL ARTÍCULO 112 DEL
CÓDIGO PENAL” SENTENCIA DE ANA ESTRADA
● Se entiende por eutanasia (procede del griego: “eu” BIEN y “thanatos” MUERTE)
(homicidio a petición, homicidio eutanásico, suicidio asistido, homicidio por piedad,
derecho a morir o muerte digna), a la muerte a petición de un agente, ocasionada por
un tercero con la finalidad de terminar con los graves dolores o padecimientos
provenientes de enfermedad incurable.
● “Artículo 112°.- El que, por piedad, mata a un enfermo incurable que le solicita de
manera expresa y consciente para poner fin a sus intolerables dolores, será reprimido
con pena privativa de libertad no mayor de tres años.”
Conducta: por acción u omisión, el sujeto activo por móvil de piedad y a solicitud del sujeto
pasivo, le quita la vida con el objetivo de liberarlo de insufribles dolores. Bien jurídico protegido:
Vida independiente (en algunos manuales señalan que el bien jurídico protegido es: la vida
independiente debilitada o dañada; considero incorrecta esa afirmación, porque no se le puede
poner un determinado valor o calidad a la vida). Sujeto activo: cualquier agente motivado por la
piedad. Sujeto pasivo: el agente tiene que padecer enfermedad incurable, sufrir graves dolores y
estar consciente. Medios: los medios utilizados pueden ser cualquiera que logre terminar con la
vida del sujeto pasivo. Consentimiento: precisa que la solicitud realizada por parte del enfermo
incurable sea de manera expresa y consciente. Tipicidad subjetiva: se exige dolo y el móvil de
piedad con la finalidad de librar del sufrimiento al sujeto pasivo. Tipo imperfecto e intervención
delictiva: al ser un tipo que requiere dolo para su configuración, admite tentativa y autoría y
participación. Coste: pena privativa de libertad no mayor de tres años.
La procuraduría pública señaló que el Ministerio de Justicia y Salud no apelará la sentencia del
“Caso Ana Estrada”. Considero un craso error —no estoy en contra de la sentencia y menos en
contra de Ana Estrada—, porque era el momento que las instancias superiores se manifiesten y
se genere un precedente, ya que al indicar en el cuerpo de la sentencia que exclusivamente se
inaplica el artículo 112° del Código Penal para los intervinientes en la eutanasia a Ana Estrada, no
es vinculante para otros casos, no queda claro si se quebranta el principio de legalidad penal o
igualdad ante la ley, entre otros temas que generan interrogantes, además, si otro ciudadano se
encuentra en la misma situación de Ana Estrada y necesita de la eutanasia para mitigar su
sufrimiento, tendría que iniciar un nuevo proceso.
Como podemos ver EsSalud brindara las condiciones administrativas, prestacionales y sanitarias
en el procedimiento de la eutanasia, que se ejecutara dentro de los diez días hábiles contando a
partir del momento o la fecha en que la Sra. Ana Estrada Ugarte manifieste su voluntad de poner
fin a su vida. Lo que es algo que consideramos correcto ya que como podemos ver en el
expediente EsSalud ha estado junto a la enfermedad de la Sra. Ana Estrada Ugarte desde el
inicio, teniendo un historial clínico en EsSalud desde los 12 años que fue el momento de cuando
su enfermedad inicio, siguiendo ahí mismo hasta los 14 cuando le diagnosticaron Dermatomiositis,
incluso a los 20 cuando el deterioro de la enfermedad la obligo a estar en silla de ruedas y
continuando aun en la actualidad atendiéndose en la misma institución médica.
Dando como muestra que EsSalud estuvo al lado de la Sra. Ana Estrada, la institución médica
creó un programa llamado Clínica en casa, con médicos, psicólogos y nutricionistas que
ayudarían a más personas con la enfermedad de la Sra. Estrada. Así que estoy totalmente de
acuerdo en que EsSalud se encargue de la elaboración del protocolo y todos los demás arreglos
para la ejecución del caso, también dándole a EsSalud la responsabilidad como entidad de
encargarse de la gestión de las prestaciones de salud de la Sra. Estrada, respetando su decisión
de poner fin a su vida, además de brindar todas las condiciones administrativas, prestacionales y
sanitarias para ejercer el derecho a la muerte en condiciones muy dignas para la Sra. Estrada,
también se encargara de brindar un protocolo de ejecución del procedimiento especificando los
aspectos asistenciales y técnicos hacia la Sra. Estrada.
EsSalud también está obligado a cumplir con el derecho de los ciudadanos y sus pacientes, como
la Sra. Estrada, dándoles el elemento central del derecho a la dignidad. La Sra. Estrada al tener
un historial clínico asegurado en EsSalud, esta misma está obligada a otorgarle un servicio
prestacional de salud a la Sra. Estrada lo cual considero totalmente correcto, ya que la Sra.
Estrada es una paciente que lleva años tratándose con el centro médico EsSalud.
La Sra. Estrada ha logrado conseguir el permiso para acabar con su vida con el método de la
Eutanasia, en el hospital donde ella es atendida y está asegurada. Como dice el artículo 1 de la
Ley N.º 27056, la finalidad de EsSalud consiste en brindar cobertura a los asegurados y sus
derechohabientes, a través del otorgamiento de prestaciones de prevención, promoción,
recuperación, rehabilitación, prestaciones económicas, y prestaciones sociales que corresponden
al régimen contributivo de la Seguridad Social en Salud, así como otros seguros de riesgos
humanos. Por lo cual la Sra. Estrada siendo asegurada en esta institución médica está recibiendo
sus derechos correspondidos, y puede acabar con su vida de manera legal y con un buen
procedimiento, sin dañar a nadie y en condiciones muy dignas como ella lo merece.
Podemos ver a través de todo este proceso como EsSalud es un gran conducto para la Sra.
Estrada a poder cumplir con su deseo de acabar con el sufrimiento de la enfermedad que durante
años la ha estado matando lentamente.
-Desarrollo del punto 5: ¨CONCLUSIÓN”
Como queda claro para sostener la eutanasia voluntaria debemos tener buenas razones y con
objeción de consciencia debería ser permitido ya que somos una sociedad democrática. Ya que
existe un respecto a la dignidad de cada quien, como por la necesidad de tener una comunidad
con normas que sean justificables para todos los ciudadanos; el estado no debería imponer una
determinada forma de afrontar la muerte a los pacientes terminales e son incurables, no podemos
permitir que sufran más y elegir tener una muerte digna lejos de todo reproche; si no dejando que
sea un tema libre que cada bien defina su final según su creencia, religión y así tener una muerte
tranquila.
¡GRACIAS POR SU
ATENCIÓN!