Plan de Clase
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Curso: 4° Año.
Respecto a los rasgos históricos centrales, nació en el 1900, junto con la Estación
dl Ferrocarril. Su primer nombre fue “Escuela Rural de estación Maciá”. Siendo la
primera escuela de la localidad, primero funcionó en un rancho de adobe frente al
ferrocarril, y también en casas particulares, hasta que comenzó su construcción
en un terreno donado por Martín Lecumberry.
Fue ampliad en 1914 con un aula más y en 1919 pasa a llamarse “Escuela
Elemental N° 20 de Estación Maciá”. La primera directora fue Irene Orlandi.
Su organización estaba dada por Primer Grado inferior y Primer Grado Superior.
En 1954 la escuela contaba con más de 700 alumno, razón por la cual se tuvieron
que construir nuevas aulas, biblioteca escolar y museo.
Esta Institución participa del Programa “Todos pueden aprender” que busca la no
repitencia y la sobre edad en las aulas, considerando así la alfabetización inicial
un proceso que dura 3 años.
En el año 2013 la escuela pasó a “Jornada Escolar NINA” para el 2° Ciclo, siendo
la extensión horaria desde las 8:00 hasta las 16:00 horas, creada por Resolución
N° 0265/13. Además se incorporaron otros talleres como Folclore, Rescate
Cultural Barrial y Local, Expresión Corporal y y taller de Eco-Juegos (Reciclado, el
que luego pasó a Eco- Arte.)
1
Gvirtz, Silvina; Abregú, M. Victoria, “Mejorar la Escuela: Acerca de la Gestión y la Enseñanza”, “Es posible
mejorar la Escuela?, pág. 13.
las acciones educativas que se intentan comunicar. También, otra de las ventanas
que utiliza la Institución son los medios de comunicación de la zona, como modo
de búsqueda de la participación de la comunidad y para lograr que no se pierda el
contenido rico en valores, actitudes, información y destreza que trabajan y
alcanzan día a día los niños. A su vez, el potenciamiento de las habilidades
cognitivas se ve reflejado y difundido a través de los trabajos de Feria de Ciencias
en donde se ve la participación de todos los niños. Al igual que en el apartado de
Gvirtz, se reafirma la mirada progresista, para nada aislada del entorno o contexto
de demandas 2“Es fundamental comprender que el desarrollo y mejoramiento
escolar pueden producirse desde adentro y no “solo desde arriba” (…), la
escuela es parte del ambiente en el que se inserta y está conectada con él,
pero se mueve en sus propios caminos elegidos”.
2
Gvirtz, Silvina, “Mejorar la Escuela: Acerca de la Gestión y la Enseñanza”, “¿Es posible mejorar la Escuela?”,
Pág. 31.
la institución o cuando se organizan actividades abiertas a la Comunidad
Educativa.
3
Frigerio, Graciela; Poggi, Margarita y Tiramonti, Guillermina, “Cara y ceca”, pág. 97.
se erigía en el pasado de nuestro sistema educativo, pregonando y reproduciendo
el trabajo en equipo para un tratado democrático en donde se consideran los
aportes que cada actor puede ofrecer. Además, La misma tiene sus bases en la
valoración productiva, 4“La participación es un vehículo para el desarrollo de
sentimientos de pertenencia”.
Sin dejar de lado el rol que cumple en particular esta escuela, el de enseñar
además de educar, y por las realidades socioeducativas a las que se enfrenta (la
situación socio-económica de los alumnos que recibe es, en su mayoría, clase
media-baja), debemos recordar que uno de los principales modos de acompañar y
sostener la base sobre la que los niños aprenden, es a través del asistencialismo.
Por ello, se podría llegar a pensar que los riesgos que puede llegar a correr como
institución son: el hecho de responder a una excesiva demanda de
asistencialismo, lo cual iría aparejado al detrimento de las actividades específicas
4
Frigerio, Graciela; Poggi, Margarita; Tiramonti, Guillermina. “Las instituciones Educativas: Cara y Ceca”, La
Dimensión Comunitaria, Pág. 104.
de brindar conocimientos o enseñar; pero no obstante ello, dicha escuela se define
como portadora de uno de los factores considerados por Gvirtz como claves para
una “escuela efectiva”: 5“altas expectativas con respecto al rendimiento de los
alumnos: Creer en ellos, confiar en sus capacidades, no subestimarlos, y
desterrar de la escuela el “con estos chicos no se puede”. Asumir día a día
el fascinante desafío de encontrar estrategias para que todos puedan
aprender, respetando sus diferencias.” A raíz de esto, se puede decir que la
dirección o rumbo que toma la incidencia es de tipo bidireccional, por lo que
entorno y escuela se influyen mutuamente, es decir, la realidad social ve a la
escuela como Institución que no solo debe enseñar sino también asistir las
necesidades de sus niños, y a su vez la escuela siente que de alguna manera
tiene que hacerse cargo de las demandas muchas veces insatisfechas de familias
generalmente ausentes. Por ello, quienes son actores educativos creen que la
familia presente es necesaria para la contención y para la continuidad de los
procesos que en la escuela se inician. A pesar de la contención que allí se brinda,
afirman que como escuela tienen el deber de enseñar y que quien debe educar y
contener es la institución familia, y así todos los roles serían más fáciles de llevar.
5
Gvirtz, Silvina; “Mejorar la Escuela: Acerca de la Gestión y la Enseñanza”, “¿Es posible mejorar la Escuela?,
pág. 32.
de los cursos e invitaciones, como así también se toma una jornada institucional
por mes para el tratado de cuestiones específicas.
Desde esta idea muchas otras pueden surgir, y muchos son los factores
que se pueden rescatar. Muy posiblemente ayudarían a la Escuela,
independientemente de la situación en la que se encuentre, a que pueda asumir
su responsabilidad primordial en el rol de enseñar. Se podría nombrar la
priorización del trabajo en equipo, la valoración del alumno como sujeto cargado
de saberes para potenciar, la consolidación de una política de trabajo que
incentive, apoye, y se responsabilice de las situaciones que representan un
desafío, la conformación de un proyecto conjuntamente pautado y articulado,
respetando el profesionalismo de quienes lo conforman, la inclusión de la familia
como estructura fundamental en el crecimiento del educando, como así también el
trabajo mancomunado con la sociedad, entre otros tantos factores que pueden ser
explotados desde el lugar en el que la institución se encuentre.