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Los Economistas Clásicos - D. P. O'Brien

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Alianza Universidad ‘Los economistas clasicos Versin espaaola de Carlos Rodriguez Braun ‘ t ’ t Alianza Editorial ‘Tul i eG nies tn a a pith mine pt Oded Ue re 8 Sess Ba PS a, oe Suan go ee nos se libro Fe eserito en Blfsty Durbar, La comencé y redat los cin «0 primeroseapulos en Beast y estoy paricalarmeate en dea com todo {| Departamento de Economia de la Queen's University de dicha ciudad, an ‘ispuesto siempre a apoyar los wabsos de historia del pensacato exon ‘ico yen especial al profesor RD. C. Black, El Wbeo es tn esto sobre ln economia cliscay procedis de mi libor en este campo que ya s habia oneretao en JR. MeCllch y The Conepondence of Lord Oventone, por lo que dedo agradecer» ls que guiaton mis prmeros pasos como hiss toriador dels economia, cspeciiment- Lord Robbing, le profesor Maran Bowley, os prolesores TW Hutchison y RS. Sayers, y tambien el prof: sor lack, oy gracias ambi al personal de las biblioceas de Ie Queen's Univer- sity de Belfast y ln Durham University, que atendieron mis roquerimientos, ‘peilmenteen cuanto pristarmoninterbilinecarios. ‘Sheila Drake mecanograts los sucesivos borradores del libro y le debo ‘mo por Raber lida con un extenso manaserito una y ota vex en el me Mio de una aca secretes departamental. Finalmente doy gecins& i mo jee por s ayuda en a revision de los veatos mecanografindory tbe todo por haber soportado esa situaién que bien puede defnitse como sl emba- fazo del ators. Como los eseitores denen genralmente wn periodo de ges- ‘acin bastante mis prolongido queef dels elfaner, ello revel un consi- Alemble grado de lemenci 7 87U554 ~ INDICE, Reconociient oF — Prélogo del autor ale edicién cstllana tc0d ein ene El cacenario de I esonomi lisa on iB pare des eomoracisis 17 iE dena dele economia ci ties oa alone de leona clin 26 gna e- ‘unad cevibes, 3 Lahiri conn de pcs cn, Las races de economia isis, = i modes, 36. El ambiente intel, 4. Ada Sih, 54": Ded Rida, (Sv. Lor economia cliscos poe 7, ‘Caracteiicas ideas fundamentals de ls economia cscs 1.8 ied sonra csi, 8-5 olan, 87 i, Elm tod des eomonia eles, 10 0 4. La eos lisa dl val one i, Ada mith, 118-—i Did Rand, 124 i, Teor sos depo Stein del lor despues de Redo. 1538 Los ces de lor Sabla. 12-—1. | By, 482, KEW. Seior. 5.3. ME Long Fide te WF Lyd, 1525. Ores sure 186 Conc a, 5. Latworia elsica dels dstrbucion, i Slarion 159k Reece, PO Rens, 1 elias 1.0, Conan, 198 6 Teoria montis lite eneneannnnnstencne 1 Bl cena iii, 197 i. La ues el dinero, 198i La teri fondamena 252i El debe sobre el buin, 28», Com tol mone’ el debate sabe ef Banco de Inger, 213i Tirorbuoca? 284i flan, 25 7. Comercio internacional o i Yous abla: comer y ein, 237i Vena compscs: {ih I Demands recipe, 286-—iePoisn Somer 264 El pole 8 le ransrenin,26°— Conlon 25, La eora elisa del erecmientoy el desarrollo. iL El proceso decrecimiosenihien, 28. La iin sca del ce Seno depute Smth, 294.1 Mahar, 3962 FR MeCalach, HES. | SIM 2a, Maguewiay peor 3102-1, La csi ele ona 3103 iin de cpt 7 las ples, 316k Trbao producie cipro, S21-w. Candann, 3 9. Hacienda plea lsca i Primcipos ier de la hacinds pin, 331i. Impuenos, Saat impostor Gin, 32, tepwese indo, Bo Deu pbs, 361 Canclasn, 370 10, Loe ctiteroe slic de police condi 1. El papel lepine del Estado, 375i La iervencion en cos cone freon, B41 Las lye de iby 4-2. Mecanirain, 387, Pobre 3894 Educ, 392-5. Sinica 394 Pals Hain [dana 396i. Colo polis cla 01, Cancun, 7 Indice ce nombres y macerias Indice 15: 7 a7 285 ot as a PROLOGO DEL AUTOR ‘ALA EDICION CASTELLANA ‘Me es muy grato el presenta esta traduccion de un libro euys versén inglesa sé que ht sido utiizads en el pasido por extudiosos cspatoles ¢ iberoamericanos. En gran medida, si volvise a escribir el libro hoy lo esribiria igual que como lo hice en su dia, puesto {que el objetivo apunta alo que los propios economistasclascosdie- Yon y 10 las inacabables interpretaciones, renterpretaciones y (al menos desde mi punto de vista) confusiones. Creo que serfa impo- sible, sin subvert le natraleza del libro, dar euenta por un lado de fa lecuura«neoclisica» que el Profesor S. Hollander hace de los eco- ‘omistas clisicos, y por otro de la lectara en la linea de Marx (0 ‘Marx-Sraffa) que caracteriza sla historia del pensamiento econdmico dde Cambridge, Inglaterra. Afortunadamente, no tengo necesidad de hacerlo, Fl Profesor Mark Blaug ha escrito un brillance arculo en The New Palgrave que indaga sobre estas dos (y varias ots) co- rrientes de interpretacin'. (Fs qutds irdnico que su articlo ex "NC Bug, «Chis! Economie en. stwel, M. Mig, P. Newnan (ee), The New Palgrave A Dacionny of Eememte (eae, 1), Val ett He ‘tide el aniiae gue hace Hollander sdbee Ricardo care «Board Econoict {nd th Bcoomis of Dad Rierdos, Oxford Ecpomie Papers, 33 (186) 35238, 2 Los economia isos includo en lo que es, en buena parte, un dzcinario de economia estilo Mare Saft.) Por supuest, si volviese a esrb este ibro hoy, cambiar a: agunas cosas. En particular, avanzara em el anise del crecimiento conémico a la hi de los trabajos de Waker Elie que ami jicio hi incrementado nuestea comprension sobre la visinclsica del cre- cimiem aunque vodavisextemos lejos de apreir esta vision cabal ‘mente —de hecho, algunas de ls contribuciones de Malthus, xqui- ‘as pero relevant, estén mis lejanas que munea debido al empleo, algunos crabejos recientes, de le epresentaign unisectoral ‘Aungue no conzenga modificacionesfundamentales, tengo ei pla cer de asegurar a mis lecores de habla hspana que el libro que tienen on sus manos ha sido sigafiativamente mejorado gracias Jncxcelene labor de su taductor. El De. Rodriguez Braun me plan= 166 una multiud de interroganes —elevados em nimero pero eam- bin n calidad y cl resultado ha ido Ia correcion de eratas, errores y ambigiclades, con lo. que tambien las fururas ediciones ingless del libro obtendrin benfiios gracias & su trabajo. ‘Los economistasclscosalbergaron en sus fsa varios inde duos de notable itligencia—algunos habran sido personas de re lieve en cualquier cpoca. Su obra tivo como punto de parida a un libro, la Wealth of Nations, que no tiene mucha competencia para ‘stent el teal del uato mat importante que janis se haya exeito Sobre nuestra disiplina, Algunos de lor logros de Is economa cl Sica, en especial en teria monetariay del comerso, fueron impere- cederos. Conf en que el presente libro puedsbrindar al lector una idea acerca de dichos logros y espero también que elo impulie « leer los propioseconominas clisicos, Tal debe sr, en ima ins tanca, el objetivo, D. P. O'BRIEN Durham, octubre de 1988 * Une samen della eee punto ea M. Blas, Ema rong the Looking Gls (Londres, 198). Vine tmbien GS, owna of Econ tie embre 8 Stan em parc el arlo de Ekis «Adam Saith Theory of Economic (Growth en AS Skinner yT Walon le Ey Ada Sh (Ont 979, p65, ys io The Clana! Thay of Economie Growth (Lond, 14). INTRODUCCION Ente libro abarca la economia clisica en general y esté pensado tanco para el economista intresado en la historia del pensamiento ‘como pars el historitdor econémico. He intentado cubrir todos los aspectos de la economia clisica y suministrar una guis, en las biblio is correspondiente 3 cada capitulo, para lecturasadicionales. Di- ‘has bibliogafias son inevitablemente una selecci6n porque [a obra de Tos economistar clisicos ha generado una vasta literatura secun- dasia, Al mismo tempo, y a pesar de dicho proceso de seleccdn, el Tector hallaré diferencias de énfasis —a veees considerables— entre las referencias y lo que se dice en el texto del libro. Pero de todas formas y dada Is gran diversidad de los escrtos clisics es notable el grado de consenso aleanzado por los distintos especialistas. El libro se apoya en la Investigacion conereta en las obras y aniculos que aparecen en las bibliografias. Lo que he intentado ee- Randolph Churchill, Wnty: Chath (Londres 196), Vl? Companion, Pare np 38, n Les econmina ico sule de ayuda alguna referencia lest de los economists lis ‘La mejor forma de abordar ests desripcion sed probablemente la de dvi alow micmbros dela excucl cise en res grupon Toda agrupacion enraaabitravedsdy er seguro que la inelsién de avore epeifios en uno 0 tro grape provocsré que algunos iccores eximen que al indviduo en euendn tele ha tao con pocs (0 con demasiads) justicin. Aunque tal pueda sere eso, I Eetumienta den agrupain es tnpleads para aelarr ls cone 00 como ssn de prelacon de seuerd 3 los mérton TEL Grupo Ise reduce a dos personas: Adam Smith (1723-90) y David Ricardo (1772-1823) A tenor dels inflencn que cjerieron, tmios fueron sin fogar a dadas las dos figuras sobreaienes de fa économia clea, No eran hombres parcios. Smith, queen tnt0 tutor de la Weal of Nations poede rvindcr el lo del econo Insta con mayor aicendiente de ls 160 shor que sigieron += Publican, brio ‘irtaimente todos los campos de la inveigae {isn economia, Su gran obra, sung a vets se extravia en ro- Tongass dgresioness ene derecho a ser considerada de las mas influyene de todos los Gemposy so prestige mucho mis ail de quienes escrbian sobre economia. Es fecsenemente un libro ben razonado persica, pero tambien podia slbergar diferentes {tora sobre fv mamosfenomenos econdmicon sin ifetar en ver dad resolver ese problema. En cierto sentido alt ex el seco de in‘infvencia de Smith: ln Weal of Nations fue capa de suger rnchas lines deinvenigacion extemadamente nteresants 8 peso: mas muy divas Uinta de ests persons fue David Ricardo, Por mosivos de salad de su rjer fetus na vst a Buty alli, sburido, ley a bro Ae Smith de eva lector sepirian importantes consecvenis. Rice ‘do era un hombre de mentalidad muy diferente lade Smith: er tl wetivo puro por extlenia Api nica anal la materia prima de Smith y cl reahado fue desarrollo de'una forma de Fazonar y un enfoque dels temas econdmicos que todavia siguen tigen, Aungue tenis ens limits etasion de cen naturales, pusce mds bien que figoi se mérodo de scién iniotvo, Ene Eonsiaenplancir unos supucson sumamente renicivory 20 tar a parr Ge ellos baa a contain, con frecuencia sn ad oe tna referencia desided la vida real. Een ari plenamente iegkimo y te lo conoce como sconsrucin de modelos; n0 be- descend economia cisien 2 tant, el procedimiento es muy susceptible a le sbusor cuando de los revultador del ceria se cbienen Ibmativas conclusiones de polis, Ricardo ser culpable de exo que Schumpeter" en su mag fea History of Economie Anals (Historia del nals economic) lam «vic iardlanos, ero durante tn tempo acho mie be- ve que one cso de Sth el prestgio de Ricardo fue enorme, tanto por su teoriss como por las conclusiones politeas de ella. Tal fue ol caso entre los economisis; In opini6n publica rel menos impresionada y su visi del fncionaminto dal sistema eeo- némico pareca tan extraordiariamente simplficada que en una ‘oportunidad Henry Brougham sug en la Camara de ls Comenes Ge Ricsrdo «haba descends de otro plantar Su peso entre los economists fue sin embargo, durante un tem: po, may apresiable. Debe destacarse aq que ex preisamente por Inouivo de‘ influencia que Smith y Ricardo ocupan el Grupo 1 Filo no suponejuicio wtrario algtno sobre Laelia de 10 que escrbiron en eomparacion con quienes se halla en lo grupos ee tantes, Muchos de extos autores electuaron eontibuciones muy #2- Hrsasy au dicernimiento ba a verse despues que haba sido tas- cendemal. Pero ex fl rebtr que a pondersen de Smith y Ri cardo (aunque lade éste fue mucho menor que la de agua) resulta sobrestlinte cuando se observa sla iteraturs ecouGmia clisiea en $0 conjure. Ello ne es Sbice para deslarar [a mportancia extrema de muchos de los stores del Grupo Tl, Agu est T, R: Malthus (1766-1834), aque tabajé sobre bases smithiaas,consguis estar en desreverdo con Ricardo en eas odo y fue carmen una figura capital en I economics, pes l fracso dels intetos de conver en tin precursor de Keynes, Malthus suministr la teria de a pobla Gin auc date macho campo ve noble sence sek Scones elisicosy que foe incorporads por Ricardo en mo- delo bdsico de ls evoluctén conic ‘Otro nombre de relieve en el Gropo I fue un corresponsal tanto de Smith como de Ricardo, el economist francés J. By Say (1767-1832), Smith conté mucho en su abr, como en lade Malthus en la que destacan la afamada Ley de Say (eon posteioridad mal T] AcSshumpese, Mary of Ecnomic Anais (Lone, 1954), 9.473 (hay ead att Avil Were uml oe Captor Py 3 dl pest be. ® Means los Works de Rede ed rl 98 ay Wet BCE 2 Lox economical tratada y confundids) y una teoria subjetva del valor. Tambiga for ‘ma parte del Grupo Tf James Mill (1773-1836), discipulo de utlita- rista Jeremy Bentham y una persona que congenio bien con la forma rieardiana de pensar: fue ol ms fiel de los seguidores de Rica. ‘También ests en el Grapo TI su hijo, el célebre John Stuart Mill (1806-73) oct inteletsal Hider de su tiempor pero bastante menos rieardiano que su padre y en muehos sspectos més préximo a Sich tanto en su perspeetiva general como en sus conelusiones. Junto a los dos Mil se encontraban John Ramsay McCulloch (1789-1864), Naseaw Senior (1790-1864), Robert Torrens (1780-1864), Thomas Tooke (1774-1858) y quienes fueron quizis los dos ukimos representantes de la economia clisica: J. F. Caimes (1825-75) y Henry Fawoere (1835-84), McCullach fue considerable- mente influido por Ricardo, pese a que su carrera habia comenzado fen la linea de Smith y Malthus y aunque el inflajo de Ricardo sobre 1 sera en gran medida transtorio. Autor de un manual de amplia dlifasidn, su producciGn fue vastisima porque durante anos vivié de ‘su pluma. Escribio profasamente sobre politica econémica y fue un [precursor en la recogida y publicacin ce cifras econémicas. Senior fue el que encabené la revucla contra la teoria demografica de Mal hus. Fue el arquitecto de Ia Nueva Ley de Pobres de 1834 y un tedrica del valor cortado por un patzén que diferia tanto de Smith ‘como de Ricardo, Robert Torrens, que lleg6 a ser oficial de Ja Ma- fina Real con una tempestuosa cstrera militar, siguié el camino de economists y polemista ea cucstioncs tales como dinero y bancos, aris y politica del comercio internacional: su carera seré aqui asi igual de urbulenta, En muchos agpectos au vida fue un perma- Inente conflicto; sus huchas con sucesivas administraciones en busca de compensacion finzneiera por lo que consideraba injustcias son ‘una historia aparee. Pero ademis de Ricatdo, fue Torseas el mejor tedrico puro de los economistaseliscos; en algunos aspectos le su perd. A’ Tooke se lo recuerda principalmente por su monumental Hiseory of Prices (Historia de los precios). Esta obra y 1a anterior High and Love Prices (Precas ales 7 baot)clsifican a Tooke como ¢lprincipal recoleetor de informacin moneraria del siglo xix y como ‘un controverssta monetaro formidable. Se percepeidn sobre estos temas fue muy signifcaiva, aunque tambign efectu6 aporcaciones de ierés en otros campos, ¥ puede destacarse su carificacién de la idea de beneficio en sus Considerations on the State of the Currency (Consideraciones sobre la situacion monetaria). Cairnes y Faweett eens dea ecmeis elisa 2 on quis as dot figuras menotes del Grupo I, no ano por no Baber plantado nade nuevo aunque tl een ees el aso sino porgue ures «través del pra del inf lenla spor taney a ena evades al fel de ua etapa, foe neceusiamente Hint Elo fueron en muchos aspects o blanco lio por la revolucién marginal, Fawoe ha sido tradconalmemte considrado tn reptidor de | 8. Mill lo que es sgo iajsto porge eran verdad conscens dela brecha que extant a pista 7 Jos Tevuador deduces dela toi asimismo oo 9 pusde nega que desde su pueto de cateriio en Cambridge era capa de hacer Ot sx vor. Algo puecica le cara 4 Carnes desde tu cited ena University College de Londres, au obra acao sea mis alos que Jade Faweer. Bn sis certo sobre el metodo y en los Leading Principles form ona serie de preguntas sobre as Uses del cor nomi lisa si hubiesecontntado en busca dels respuestas qu 34thabsaprolngado laa dela vis ecula De tos moder sdf Hbrarse de la sensacin de ue Fawcest 1 Canes, inca aq en ot Grupo Il poral peso que teitn a tae de sus pleas univeraras, fueron analicamente infront ‘arora no's muchos de low tembros del Grupo ID. A ee lo formaron perinss de gran capaciad intclecial qu vers tuvee ron un enorie eto sobre un fea retringsda del penamsentoo de In poles pero-que no intenaron protgonzse daa lnflnca exe tena a buena pare de ls economia ytampoco (con un par de ‘eepcone)esieron trate ornicomprentves tl com hii ron vrtalmente todos lor iterantes del Grupo Ts exceplon de Tooke Ta eaaceiicasnifcadora de los autores del Grupo Iles que sus comtibicone fron may especies, cil tods els en eror bom monet (cambios interaaconle ined) y tora del vo for Muchos delle parciparon en debates ible sobre eos temas y sobre oro sunt plimico ales come las Leyes Caer leas, [x proncign eo gener, as colons y lay Leyes de Pobres Cslgier seein ene lle habrk de ser, por tnt, smameste arbitra y sin dada In presetads ag habe Ge disgust algunos Icrores. Pero we hard dead que, en primer Iga, ning ss isis del ecooana lsc eer completo somite toda referencia 4 os eapeclinasy, en segundo haga, ltr de nlite a todos Tesuarhen dimentones encsiopeics, La eleciGn reas re ponde aque ca todonefectuaron diversas pablicaciones de imerts 2” Los ecm disios sobre alguna cuesti6n particular —no fueron econdomistat de «un sélo disparo»— y lo que dijeron fue easi sin excepeién de notable ines snalitico. I niimero més grande correspond a los autores monetatis: Henry Drummond (1786-1860), Thomas Joplin (¢. 1790-1847), Geor ige Warde Norman (1793-1882), Samuel Jones Loyd, Lord Oversto- ze (1796-1883), Henry Thornton (1760-1815), William Blake (6. 1774-1852), Francis Homer (1778-1817), John Wheatley (1772-1830), William Newmarch (1820-82) y Richard Page. Drummond y Joplin, junto a Page y MeCulloch y James Pennington, fueron los deseu bridores del principio dela «fluccuacin metalicas que tendri mucho relieve en Ia controversia monetaria del siglo xix. G. W. Norman y. en especial Overstone (recurriendo a ls argumentacién de Ricardo) trazaron el marco teérico fundamental de la Ley Bancaria de 1844 ¥ respondieron a quienes la stacaron antes y después de ser promnul- sada. Norman también se ocupé de impuestos y de teoria del co ‘mercio internacional. Hay muchas razones para conceptuar a Thorn ton como el mis grande teérico monetario del siglo XIX y, en rea- lidad, como uno de los més sobresalientes de todos los tiempos. Fue tuna de los actores principales de la controversia cbullionista» en los aiios de inconvertbilidad en el Banco de Inglaterra duraate ls gue- ‘ras napoleénicas, y expuso wna variante del bullionismo que se apar- taba bastante dela rigida senciller del andlisisrieatdiano e incorpo- raba sutileas propias de una teoria monetaria muy posterior. Un diagnéstico semejante se merece Wiliam Blake, de ponderado desem- peo en el campo de los cambios internacionales. Thornton, Francis Horner y William Huskisson fueron los costtores del Bulion Report ide 1810, uno de los documentos més asombrosos que nunca haya brotado de una Comisién Parlamentaris. John Wheatley fue otro polemista en la cuestién del metal y llamé la atencin sobre la rela ‘in entre las emisiones de los bancos provincales y la oferta mo- netaria, un punto que habia sido descuidado por ls tegricos al estilo de Ricardo y que iba a ser redescubierto por McCulloch y Overs tone. La categoria de William Newmarch n0 proviene de haber sido ‘cosutor con Tooke de la History of Prices (y probablemente el autor principal) sino de su propio papel como investigador de la signti- ‘acién monetaria de las letras de cambio y tambiéa como opasitor (junto a Tooke) ala Esevela monetaiay a la Ley Bancaria de 1844 Con los autores monetarios del Grupo Il habria que agregar al gran David Hume (1711-76). Hume et evidentemente un hombre omar de economia cise 3 ‘crucial en cualquier historia de ls ideas y su relevancia excede con ‘mucho el campo de la economia. Sin embargo sus dos ensayos «Del dinero» y «De la balanza de comercio» representan nada menos que Iz base de le economia monetariaclisic, Los miembros restantes del Grupo IIT obtienen trascendencia por sus escrtos sobre teoria del valor aunque en modo alguno exclusivamente por ellos, Son Thomas de Quincey (1785-1859) —co- nocido por el piblico como el fumador de opio pero de relevancia aqui como el nico discipulo cabal de Ricardo aparte de Mill, Samuel Bailey (1791-1870), autor de ua brillante aunque muy eritco ‘examen de la teorfa del valor y Mountifore Longfield (1802-84), EL ‘ikimo de los nombrados, cuya mezcla de percepcion y solidez en ‘casiones Jo cleva a Ia clase de David Hume, escribis sobre teoria el valor pero también sobre transferencias internacionales, salaios Y otros asuntos. “Edward West (1782-1828), formulador inter alia de la tcoria de la centaricardian, cae en este grupo como también George Pou lette Serope (1797-1876), uno de los dos tnicos autores del Grupo HI que redact6 un tratado general, sus Principles of Political Eco riomy (Principios de economia politica) de 1833. Trato cuestiones de valor y distibucién, dinero, fluctuactones econémieas, poblacién y Leyes de Pobres. Aunque se opuso a buena parte de la evonomia clisica, sus métodos y conclusiones fueron clisicos en esenciay aun «que muchas de sus erties derivaron de su incapacidad de compren dler plenamente [a postura de sus adversarios, no hay discusion de Ja economia clisica que pueda reputarse de completa silo ignora. El jotto autor de uns obra general fue Samuel Read, que public en 1829 su Political Eeonommy, An Enquiry into the Natural Grounds of Right to Vendible Property or Wealeh (Economia politica, Una in ‘vesigacion sobre las bases naturales del derecho a la riqueza 0 4 la propiedad verde). Fil seguidor de Ia Wealth of Nations de Adam Smith, eseribio sobre impuestos, dinero y Ia leislacion bancatia, Por Ultimo escin James Maitland (1759-1839), octavo conde de Lauder dale, célebre por sus escrtos sobre la deuda publica y John Barton (1789-1852) que consiguis que Ricardo cambiase su opinién con respecto 2 los efectos de la maguinara, Estos fueron entonces [os hombrer mis importantes de la eco- noma clisica, Es obvio que el eriterio de agrupacién aqui empleado es arbitrario en lo que excluye y en lo que incluye, Pero al menos suuministra al lector que deseeaveriguar quignes eran los economistas clisicas una cierta guia de dénde mirar, después de detenerse ante Smith y Ricardo, ‘Se habla muchas veces de los clisicos como los elisicas «ingle- sex, lo que es algo imprecso. Si tienen un fundador reconocide, te fue un escocés, Adam Smith, La tradiién escocess de pensa- ‘miento eeonémico ¥ socal penet#6 en el siglo XIX, con su mezcla dle teoria y realidad y su pretension de contratar una con ou. ‘Varios autores inglses prosigucroe esa senda, como Tooke y New. march. En la medida en que hubo tna tradicin ingless éta fue czencialmente lade Ricardo, al que siguieron de Quincey, el irlandés ‘Torrens y el escocés James Mill El hijo de est dltimo, John Stoart Mill, navegs entre es3s dos aguas principales del desarolioclisico. La economia clisica fue en esencia producto de un pensamiento que se extend lo largo del conjunto de Is Isls Brinicas. (Asi, aun- {que Torrens estuvo cerca de Ricardo en vars cvestiones tebricss, mantwo caticterstcasirlandesss peculiare, entre las que se conta” ba una aguda preocupacién por la necesidad de la emancipacién de los catéicos. Eseribié novelas en las que descibia su situacion; quie~ res earezean de estémago para soportar los originales podein recw tir alos deliciosos zesimenes de Lord Robbins.) Se extendié tam- bign a Francia (donde Say fue un sobresaliente representante) in- coneiben a la comunidad como un pre- Freguisito para una de esas revoluciones. Este segundo aspecto no seri tratado aqui aunque en la bibliografia de este capitulo se vier- ten referencias para que el lector que lo desee pueda avanzar en dlcha materia, Peco el primer aspecto es de un interés general muy grande Se ha destacado ya que los economists clésicos son una muestra, tun corte transversal de Ia sociedad. Es sugesivo-demostrar que pese 2 ello llegaron 2 formar lo que en esas circunstancias fue un grupo ‘orprendentemente apinado. Dos vinculs los mantenfan unidos, is tituciones y publicciones Los lazos institacionales fueron bisicamente eustro: el Club de Economia Politica, la Sociedad (Real) de Estadistca, la Asociaci6n Britinicay la Sociedad Real. El més importante, con mucho, fae el Club de Economis Politica. La inmensa mayoris de quienes inclu ‘mos en Jos tres grupos fueron miembros del Club y varios fueron fundadores del mismo: Ricardo, Malthus, James Mill, Torrens, Too- ke y G. W. Norman. Entre los miembros estaban J.S. Mill, MeCu- loch, Senior, Caimnes, Fawcett, Newmarch, Overstone y Blake. J. B. Say fue elegide miembro honorario en 1822 y visits el Club en 1828; aunque no pudo figurar Henry Thornton, que murié antes de su fundcidn, s extuvo su socio y amigo Zachary Macaulay, el padre de T. B. Macaulay. FI Club fue fundado en Londres en 1821 en unt cena & a que asisteron algunos de los socios fundadores y parece que debe su origen 1 In luminoss y magnética personalidad de Ricardo y a sv desea de coaverser con otros economistas, Pero hay que advertir que el Club no puede ser acusado de haber sido una sociedad para TE propagacion de la ideas de Ricardo ni de la de ninggn otro. Se lob acusado de ello y de haber sido el medio de disemiar las opiniones de un veducido nmero de uslitarisas. E] examen tanto 2 Lor economia iscor de Ta relacin de socios y de las cuestiones dseutidas como de las fctas de los debates tomadas por J. L. Mallet prueba que dichas fcusaciones son falss. La propia fuerza y vitalidad del Club, que Sin duda habrian menguaso de haber sido meramente una instituci6n de propaganda, son de por si un testimonio. Lo més que puede

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