Teoría de La Administración Por Objetivos
Teoría de La Administración Por Objetivos
Teoría de La Administración Por Objetivos
Según Drucker, la dirección por objetivos se basa en definir áreas claves en la compañía para
establecer retos y evaluar los resultados. Las variables a medir son:
Drucker explica que los directivos se veían envueltos en una rutina diaria que les hacía perder la
noción de hacía donde se dirigían. Pero gracias a la Dirección por Objetivos estos son claramente
definidos y acordados y cada área puede decidir por su cuenta cómo conseguirlos. Esto
proporciona gran flexibilidad a la hora de tomar decisiones. Así el proceso de planificación deja de
ser exclusivo de los directivos para pasar a formar parte del día a día de toda la organización. La
Dirección por Objetivos funciona si conoces los objetivos.
En realidad, la APO es:
§ Un sistema dinámico que integra la necesidad de la empresa de alcanzar sus objetivos de lucro y
crecimiento con la necesidad del gerente de contribuir a su propio desarrollo.
§ Es un estilo exigente y equilibrado de administración de empresas.
§ Es una técnica participativa de planeación y evaluación.
§ A través de ella los superiores y los empleados, conjuntamente, definen aspectos prioritarios.
§ Establece objetivos por alcanzar, en un determinado periodo y en términos cuantitativos,
dimensionando las respectivas contribuciones.
§ Sistemáticamente se hace el seguimiento del desempeño, procediendo a las correcciones que sean
necesarias.
En la búsqueda del equilibrio entre las partes y sus objetivos, Drucker sugiere ideas como la
descentralización y la administración por resultados, aumentando la participación,
descentralizando las decisiones, permitiendo el autocontrol y la autoevaluación y proporcionando
más libertad y flexibilidad a los controles existentes.
CARACTERISTICAS DE LA APO:
4. Énfasis en la medición y el control de resultados: A partir de los objetivos trazados por cada
departamento, el ejecutivo y su superior elaboran los planes tácticos adecuados para alcanzarlos
de la mejor manera. Dichos planes se convierten en herramientas para alcanzar los objetivos de
cada departamento. En todos los planes, la APO hace énfasis en la cuantificación, la medición y el
control, lo que hace necesario medir los resultados alcanzados y compararlos con los resultados
planeados.
7. Apoyo constante del staff: La ampliación de la APO requiere del fuerte apoyo de un STAFF
previamente entrenado y preparado. Exige coordinación e integración de esfuerzos, lo que puede
ser efectuado por el STAFF.
Un objetivo es una declaración escrita, un enunciado, una frase, un conjunto de números que
orientan el desempeño de los gerentes hacia un resultado medible o cuantificable, pertinente,
importante y compatible con los demás resultados.
1. Se hace énfasis en el compromiso propio de los gerentes en relación con las metas.
2. Se hace énfasis en el autoanálisis del desempeño y en el autocontrol, en relación con los
resultados obtenidos frente a las metas preestablecidas.
3. Las desviaciones de los resultados con relación a las metas llevan a la autocorrección en el
desempeño y a la orientación específica por parte del superior.
§ En el establecimiento cuantitativo de los objetivos. Pues a través de ella los superiores y los
empleados, conjuntamente, definen aspectos prioritarios y establecen objetivos por alcanzar en
un determinado periodo, dimensionando las respectivas contribuciones.
§ En el seguimiento sistemático del desempeño. Ya que se procede a efectuar las correcciones
necesarias.
a. Buscar las actividades que tengan mayor impacto sobre los resultados.
b. El objetivo debe ser específico en cuanto a los datos concretos.
c. Centrar los objetivos en metas derivadas.
d. Detallar cada objetivo en metas derivadas.
e. Utilizar un lenguaje comprensible para los gerentes.
f. Mantenerse dentro de los principios de la administración.
g. El objetivo debe indicar los resultados por alcanzar, no debe limitar la libertad para escoger los
métodos.
h. El objetivo debe ser difícil de alcanzar, debe representar una tarea suficiente para todo el
ejercicio fiscal de la empresa. Debe tener alguna relación remota con el plan de utilidades de la
empresa, generalmente es el objetivo final.
a. Los objetivos deben ser graduados según un orden de importancia, relevancia o prioridad, en
una jerarquía de objetivos, en función de su contribución relativa a lo organización como una
totalidad.
b. La jerarquía de objetivos de una organización puede sufrir innumerables cambios, ya sea en la
ubicación relativa de los objetivos o en la situación de ciertos objetivos por otros diferentes.
c. Los objetivos no necesitan traducir inicialmente las grandes aspiraciones fundamentales de la
empresa. Deben lograr que todos los órganos y componentes de la empresa contribuyan con una
parte del esfuerzo general.
d. Deben tener en cuenta la necesidad de varias alternativas para su ejecución, deben ser
periódicamente reexaminados y reformulados, no sólo para ser actualizados de acuerdo con el
cambio de las condiciones del mercado.
Ventajas de la Administración por Objetivos:
Según el libro de Samuel C. Certo nos dice que hay dos ventajas en la APO:
1. Los programas APO enfatizan siempre lo que debe hacerse en la organización para alcanzar los
objetivos organizacionales.
2. El proceso APO asegura un compromiso del empleado para alcanzar los objetivos
organizacionales. Dado que los gerentes y los empleados han desarrollado los objetivos juntos,
ambas partes están genuinamente interesadas en alcanzar esos objetivos.
1. La elaboración de los objetivos puede consumir mucho tiempo, dejando a los gerentes y a los
empleados menos tiempo para hacer el trabajo en sí.
2. La elaboración de objetivos por escrito, la comunicación cuidadosa de los objetivos y las
evaluaciones de desempeño detallada que requiere un programa APO, aumenta el volumen de
papeleo en una empresa.
PLANEACION ESTRATEGICA: Se refiere a la manera como una empresa intenta aplicar una
determinada estrategia para alcanzar los objetivos propuestos. Es generalmente una planeación
global y a largo plazo y exige cuatro fases definidas así:
1. Formulación de los objetivos organizacionales: En esta primera fase, la empresa escoge los
objetivos globales que pretende alcanzar a largo plazo y define el orden de importancia y de
prioridad de cada uno en una jerarquía de objetivos.
2. Análisis de las fortalezas y limitaciones de la empresa: Estudio de las condiciones internas, para
permitir una evaluación de los principales puntos fuertes (fortalezas) y puntos débiles
(debilidades) existentes en la empresa.
3. Análisis del entorno: Se trata de un análisis del ambiente externo, es decir, de las condiciones
externas que rodean la empresa y que le imponen desafíos (amenazas) y retos (oportunidades).
Este análisis generalmente abarca:
- Los mercados atendidos por la empresa.
- La competencia.
- Los factores externos.
4. Formulación de alternativas estratégicas: Se busca formular las diversas y posibles alternativas
estratégicas o medios que la empresa puede adoptar para lograr mejor los objetivos
organizacionales propuestos, teniendo en cuenta sus condiciones internas y las condiciones
externas a su alrededor.
Mientras la planeación táctica se refiere al mediano plazo, el plan operacional es más detallado
y se refiere al corto plazo.
CICLO DE LA APO: La APO tiene un comportamiento cíclico, de tal manera que el resultado de un
ciclo permite efectuar correcciones y ajustes en el ciclo siguiente, a través de la retroalimentación
proporcionada por la evaluación de los resultados. Este ciclo corresponde comúnmente al ejercicio
fiscal de la empresa para facilitar la ejecución y el control. Los principales autores de la APO
presentan modelos muy variados, cuyos ciclos exponen contenidos diferentes.
1. MODELO DE HUMBLE: John W. Humble define la APO como "un sistema dinámico que busca
integrar las necesidades de la empresa de definir y alcanzar sus propósitos de lucro y
crecimiento con la necesidad del gerente de contribuir y desarrollarse. Es un estilo de gerencia
exigente y estimulante". Provee los siguientes aspectos:
DESARROLLO DE EJECUTIVOS
La Administración por Objetivos está estrechamente ligada con el Recurso Humano, esencialmente
en los niveles Gerenciales, por lo tanto, la APO es "... un proceso por el cual los gerentes del rango
superior e inferior de una empresa identifican en conjunto sus objetivos comunes y definen las
áreas principales de responsabilidad de cada individuo, en términos de los resultados que se
esperan de él, empleando esas medidas como orientación para operar la unidad y evaluar la
contribución de cada uno de sus miembros". En el fondo, la APO está estrechamente ligada a la
motivación y al desarrollo personal del ejecutivo.
Algunos administradores de alto nivel cometen el error de ver la APO, principalmente, como una
herramienta de control y evaluación. Ciertamente, la APO pude contener ambos factores,
pero ésa no es su idea principal. En general, el programa de desarrollo de ejecutivos sigue estas
fases:
EVALUACION CRÍTICA DE LA APO: La APO no es una fórmula mágica, sino un medio a desarrollar
un trabajo ordenado y consciente, para conocer con razonable responsabilidad el futuro
resultado de las decisiones.Como la APO incluye un proceso de planeación y un proceso de
dirección, es muy común que uno o más de esos tres procesos no funcionen bien. Allí comienzan a
presentarse problemas con la APO.
Los diez Mandamientos de la APO: Humble asegura el fracaso si no se siguen las siguientes reglas:
CRÍTICAS DE LEVINSON: Levinson destaca que la APO no tomó en cuenta las raíces más profundas,
emocionales y motivacionales de un gerente, pues puede colocarlo en una posición parecida a la
de un conejillo de laboratorio, frente a sólo dos alternativas: acierta el camino en el laberinto y
come, o de lo contrario, pasa hambre. Según Levinson, el proceso "ideal" de la APO debe
desarrollarse en cinco etapas, que son:
1. Discusión del funcionario con su superior acerca de la descripción de funciones hecha por el
propio empleado.
2. Fijación de metas de desempeño a corto plazo.
3. Entrevista con el superior para analizar el proceso alcanzado hasta cierto momento.
4. Establecimiento de puntos de verificación para medir el progreso.
5. Análisis entre superior y empleado, el final de determinado plazo, para evaluar los resultados de
los esfuerzos desarrollados por el empleado.
En conclusión, Levinson afirma que "la administración por objetivos y los procesos de evaluación
del desempeño, tal como se ejecutan usualmente, son inherentemente autodestructivos a largo
plazo, por estar basados en una psicología de la recompensa y el castigo, que intensifica la presión
ejercida sobre cada individuo, al mismo tiempo que le proporciona una selección de objetivos muy
limitados. Tales procesos pueden mejorarse, examinando los presupuestos psicológicos en los
cuales se basan, ampliándolos de modo que incluyan la evaluación colectiva y dándole prioridad a
las metas personales de los funcionarios.
CRÍTICAS DE LODI: El nivel de exigencia sobre los individuos es demasiado alto. Las personas
deben ser preparadas para comprender y aplicar con criterio el método.Lodi asegura que la APO
tiende a exigir mucho de cada uno y que las personas deben ser preparadas para recibir el método
y para poder aplicarlo con criterio. De lo contrario, podrán surgir diversos inconvenientes.
Lodi recuerda, incluso, que la formulación de una estrategia lleva a un conflicto entre los objetivos
a largo y corto plazo. La planeación a largo plazo, permite una mejor comprensión del impacto
futuro de las decisiones actuales, una mayor conciencia de los cambios económicos y sociales, la
anticipación de cambios en las áreas que los requieren, y un incremento en la velocidad de la
información relevante para un rápido control e implementación de las decisiones futuras. A corto
plazo, perciben que el sistema de compensación premia el desempeño espectacular inmediato, en
detrimento de una verdadera contribución a los resultados futuros de la empresa.
Otras Críticas
1. Los objetivos de la empresa se definen de manera muy superficial y no reflejan todos los
intereses de la empresa.
2. No se cuenta con experiencia adecuada para la realización del plan, la implementación es
incompleta o se efectúa fuera de tiempo.
3. Cuando los resultados inmediatos no son accesibles, las personas se impacientan con todo el
proyecto.
4. En general, las empresas fallan en tomar decisiones para revisar y actualizar periódicamente el
plan frente a los cambios de la empresa, las fluctuaciones económicas y los cambios en las
tendencias sociales.
Harold F. Smiddy. Colega de Drucker, vicepresidente de General Electric, y junto con él co-
desarrollador del MBO (management by objectives), organizaron el programa de formación
empresarial más prestigioso de la industria privada.
George Odiorne. Es uno de los principales representantes de la Dirección por Objetivos y el que
hizo las aportaciones más significativas después de Drucker. Entre ellas está el desarrollo de su
conceptualización y la identificación de sus beneficios y exigencias.
John W. Humble. Define la Dirección por objetivos como “sistema dinámico que busca integrar las
necesidades de la empresa, definir y alcanzar sus propósitos de lucro y crecimiento con la
necesidad del gerente de contribuir y desarrollarse. Es un estilo de gerencia exigente y
estimulante”.
Henry Mintzbert. También lo debemos tener en cuenta al hablar de Dirección por Objetivos. Nos
explica los problemas al aplicar este tipo de Management. En su artículo traducido por la revista
Mercado y titulado “La productividad mató a la empresa estadounidense” aseguraba el desastre
de la empresa norteamericana en general en algún momento del 2008, hay que tener en cuenta
que el artículo original fue escrito en el 2006. En dicho artículo Mintzberg nos describe trucos
contables capaces de encubrir las cuentas a corto plazo para que parezca que se han alcanzado los
objetivos, con unos efectos a medio y largo plazo catastróficos.
Harry Levinson. Crítico con la dirección por objetivos, señala que cuanta más alta es la jerarquía de
un empleado y más variadas sus funciones, más difícil resulta identificar bien sus objetivos, los que
representen su trabajo concreto. Ya que no se toma en cuenta las raíces más profundas,
emocionales y motivacionales y, la mayoría de las descripciones de funciones se limitan a la labor
que dicho empleado realiza en su cargo. Además como la Administración por Objetivos no tiene
una visión sistemática de la empresa, no toma en consideración la interdependencia entre las
funciones.
Conclusiones:
La Administración Por Objetivo (APO) ayuda a superar muchos de los problemas críticos de los
administradores y profesionales de una empresa. Realizando una correcta aplicación de este
método es probable que se obtenga un esfuerzo coordinado y un trabajo en equipo, que no solo
estimula la iniciativa personal sino que aumenta las ganancias de la empresa. Provee a la empresa
de una herramienta para establecer sus metas conjuntamente con los empleados. Así, las metas
comunes: rentabilidad, posicionamiento, competitividad, productividad, liderazgo, responsabilidad
y excelentes relaciones se organizan, planifican y ejecutan efectivamente.
Sin embargo, se debe tener en cuenta que la APO no es una fórmula mágica o milagrosa, pues
existe la posibilidad que las metas no sean similares o que éstas no concuerden entre empresa-
empleado, por lo que se debe tener sumo cuidado y aplicar flexibilidad, buena comunicación y
estar abiertos a posibilidades de cambios que beneficien a ambas partes, máxime en situaciones
económicas variables como las de la actual sociedad mundial.