Duodenopancreatectomía Cefálica
Duodenopancreatectomía Cefálica
Duodenopancreatectomía Cefálica
Duodenopancreatectomía cefálica
E. Buc, A. Sauvanet
Plan Introducción
■ Introducción 1 La duodenopancreatectomía cefálica (DPC) consiste en
■ Preparación, colocación, instrumental y vías la resección en monobloque de la cabeza del páncreas,
de acceso 2 el marco duodenal, con o sin la región antropilórica,
■
y la porción distal de la vía biliar principal (conducto
Descripción de la técnica habitual: DPC con
colédoco, CC) (Fig. 1). Está indicada para tumores malig-
antrectomía, efectuada «de delante hacia atrás»,
nos o benignos o para enfermedades no neoplásicas del
y reconstrucción mediante anastomosis
páncreas cefálico, pero también para tumores coledo-
pancreaticoyeyunal 2
cianos, ampulares o duodenales. Esta resección es más
Exploración 2
complicada desde el punto de vista técnico y conlleva
Resección «de delante hacia atrás» 5
más morbilidad que las exéresis del cuerpo y de la cola.
Reconstrucción 7
Cuando está indicada para tumores pancreáticos malignos
Peritonización y drenaje 9
o lesiones inflamatorias avanzadas (pancreatitis crónica
Fin de la intervención 10
complicada), presenta dificultades relacionadas con la
■ Variantes 10 disección o incluso con la resección de los vasos. En
Circunstancias especiales 10 raras ocasiones, en caso de cáncer, puede incluir la exé-
Variantes según la extensión de la exéresis 12 resis de órganos adyacentes. La DPC puede provocar
Según las modalidades de reconstrucción 16 varias complicaciones abdominales que conviene diag-
nosticar y tratar de forma precoz. Desde el punto de
vista técnico, la DPC se ha realizado durante muchas
décadas según las modalidades descritas por Whipple y
Descripción de la técnica
habitual: DPC con
Preparación, colocación, antrectomía, efectuada «de
instrumental y vías delante hacia atrás», y
de acceso reconstrucción mediante
La DPC no requiere ninguna preparación digestiva espe- anastomosis
cial. Si existe una estenosis duodenal, se coloca una sonda
nasogástrica de descompresión antes de la intervención pancreaticoyeyunal
(para mejorar la comodidad del paciente y reducir el
riesgo de aspiración durante la inducción anestésica). La resección más difundida es una DPC con antrec-
Dependiendo de la enfermedad causal y del estado nutri- tomía, seguida de una reconstrucción por anastomosis
cional del paciente, se debe plantear una realimentación pancreaticoyeyunal y montaje de Child. La descripción
por vía enteral o parenteral y/o una inmunoalimen- siguiente corresponde a una exéresis por un cáncer
tación. periampular.
El paciente se coloca en decúbito supino, con las piernas
juntas y los brazos separados a 90◦ . El brazo derecho puede
colocarse a lo largo del cuerpo, lo que permite que un Exploración
segundo ayudante se coloque a la izquierda del cirujano.
Se puede poner un rodillo bajo la unión toracolumbar El objetivo de este tiempo consiste en buscar las con-
para exponer mejor la región celíaca. El cirujano se sitúa traindicaciones de la DPC, sobre todo de tipo oncológico,
a la derecha del paciente, y el primer ayudante y el ins- antes de los «puntos de no retorno» de la resección, que
trumentista a la izquierda. Un segundo ayudante situado son la sección pancreática y las secciones gástrica y yeyu-
a la derecha o a la izquierda del cirujano puede ser útil nal.
en las DPC complejas (por ejemplo, con reconstrucción En caso de DPC por un adenocarcinoma, indepen-
vascular). dientemente de su origen, debe buscarse la presencia
Además del instrumental clásico de la cirugía digestiva, de metástasis que contraindiquen la resección antes de
se debe poder disponer con rapidez de un instru- cualquier procedimiento de disección. El hígado se ins-
mental vascular que conste como mínimo de pinzas pecciona y se palpa en busca de metástasis, que suelen ser
medianas y pequeñas, de portaagujas y de pinzas de pequeñas. La utilidad de la ecografía intraoperatoria sis-
disección finas, así como de hilo monofilamento de temática no se ha demostrado. La cavidad abdominal se
5/0 y 6/0. inspecciona de forma metódica región por región, desen-
La vía de acceso clásica es una incisión subcostal dere- rollando el intestino delgado y el mesenterio, en busca de
cha prolongada hacia la izquierda (Fig. 2). En caso de carcinomatosis peritoneal o de adenopatías sospechosas.
DPC por un cáncer en la que se acceda primero a la Las lesiones sospechosas de metástasis deben extirparse y
arteria mesentérica superior (AMS) y/o con una probable analizarse mediante un estudio histológico intraoperato-
resección venosa mesentericoporta, la incisión subcos- rio. En caso de metástasis de adenocarcinoma, la DPC no
tal debe ser lo bastante larga a la derecha para permitir está indicada y la muestra histológica del nódulo hepático
una buena visión lateral sobre los vasos mesentéricos. En o peritoneal suele constituir la única prueba del cáncer
los pacientes longilíneos y si la intervención no plan- antes de la quimioterapia. El mesocolon transverso se
tea a priori dificultades especiales, puede ser preferible levanta para inspeccionar la raíz del mesenterio y buscar
una incisión medial, en ocasiones limitada a la región una invasión del mesocolon transverso derecho. El bloque
supraumbilical. duodenopancreático sólo puede explorarse con precisión
El acceso laparoscópico se ha usado muy poco en la después de un despegamiento coloepiploico y duodeno-
DPC [1] y no se puede considerar una técnica estándar. pancreático.
1
2
Figura 13. Exposición de la lámina retroportal por liberación Figura 14. Sección de la lámina retroportal. En esta etapa se
de la cara posterior del eje venoso mesentericoporta. La ligadura- denuda el borde derecho de la arteria mesentérica superior si la
sección de las colaterales venosas del borde derecho y después duodenopancreatectomía cefálica se ha realizado por un cáncer
de la cara posterior del eje venoso mesentericoporta permite y engloba la ligadura-sección de las arterias pancreaticoduodena-
exponer por completo la lámina retroportal. La cara posterior del les posteriores, a ras de la arteria mesentérica superior. La tracción
istmo se moviliza unos 2-3 cm para mejorar la exposición sobre sobre la pieza lleva hacia la derecha a la arteria mesentérica
el eje venoso y facilitar después la realización de la anastomosis superior, que debe mantenerse identificada permanentemente.
pancreática.
mínimo, la lámina retroportal se marca con dos hilos colo-
la altura del borde derecho del TC, donde se detiene la cados en sus extremos superior e inferior o con tinta. La
etapa de resección. Por tanto, esta etapa también permite impronta del tronco porta y la cara posterior del bloque
realizar un vaciamiento ganglionar a la derecha del origen duodenopancreático pueden tatuarse con colores distin-
de la AMS y del TC. La sección de la lámina retroportal tos.
presenta varios aspectos que pueden inducir errores:
• para que sea completa, requiere una movilización total Verificación de la hemostasia y la linfostasia
del eje venoso mesentericoporta hacia la izquierda, Se realiza principalmente a nivel de los vasos mesenté-
disecándolo de forma circunferencial (Fig. 13); ricos superiores y del ligamento de Treitz, así como en la
• el bloque duodenopancreático conserva una perfusión parte alta de la lámina retroportal.
arterial después de haber perdido la parte esencial de su
drenaje venoso, lo que lo convierte en potencialmente
hemorrágico y obliga a realizar también la hemostasia Reconstrucción
en la «pieza», para mantener una buena visibilidad de
la AMS; El esquema clásico propuesto por Child en 1944
• la tracción sobre la pieza de DPC hacia la derecha modi- (anastomosis pancreaticoyeyunal, después anastomosis
fica el trayecto de la AMS, que se somete a una rotación hepaticoyeyunal y, por último, anastomosis gastroyeyu-
axial y se tracciona a la derecha de la VMS, lo que nal) sigue siendo el que prevalece en la actualidad. De
obliga a identificar permanentemente su trayecto para forma más general, para evitar el reflujo de una anasto-
no lesionarla y, al mismo tiempo, a mantenerse alejado mosis hacia otra, esta modalidad de reconstrucción debe
del tumor; cumplir las siguientes reglas:
• debido a su grosor, que a veces está aumentado por • la anastomosis pancreaticoyeyunal es proximal a la
fenómenos inflamatorios, se debe seccionar de forma anastomosis hepaticoyeyunal, que a su vez es proximal
progresiva. Hay que realizar tomas separadas, con tijeras a la anastomosis gastroyeyunal (Fig. 15);
o con el disector, que han de ligarse de forma selectiva • la distancia entre cada anastomosis en el intestino del-
para garantizar una hemostasia adecuada y una buena gado es idealmente de al menos 30-40 cm para limitar
linfostasia. Dichas tomas deben estar en planos separa- el reflujo alimentario hacia la vía biliar y hacia la anas-
dos por delante y por detrás de la AMS (Fig. 14); tomosis pancreática;
• en su parte alta, la lámina retroportal se une al borde • las anastomosis deben ser isoperistálticas. La primera
inferior de la arteria hepática común (por lo que es asa yeyunal suele ser suficientemente móvil para colo-
conveniente acabar de disecarla de forma circunferen- carla en el compartimento supramesocólico y permitir
cial) y a menudo contiene la vena gástrica izquierda estas tres anastomosis.
(coronaria estomáquica), que hay que procurar
respetar. Anastomosis pancreaticoyeyunal
• a un nivel más alto y por detrás, en el borde dere- Esta anastomosis es responsable de la mayor parte de
cho del origen de la AMS y del TC, también contiene la morbimortalidad postoperatoria [7] . El tipo más usado
los elementos derechos del plexo celiomesentérico, de es la anastomosis pancreaticoyeyunal terminolateral sin
consistencia firme, y cuya sección suele provocar una intubación del CPP ni invaginación. La anastomosis ter-
diarrea motora; minolateral en el vértice del asa se utiliza poco, porque
• la arteria diafragmática inferior derecha está muy cerca puede plantear problemas de congruencia. La anastomo-
de estos elementos nerviosos. sis pancreática debe realizarse de forma meticulosa, sobre
todo si el CPP es fino, para no obliterarlo.
Marcado de la pieza de Antes de comenzar la anastomosis, hay que asegurarse:
• de la vascularización adecuada de la zona de sección
duodenopancreatectomía cefálica pancreática, pero también de su hemostasia; en espe-
Para optimizar el estudio anatomopatológico de la cial, hay que prestar mucha atención a la hemostasia
pieza, se deben marcar los márgenes de resección. Como de la arcada pancreática inferior (situada en la parte
Anastomosis hepaticoyeyunal
La pinza de bulldog colocada durante la sección del CC
se retira y se realiza la hemostasia de los vasos coledocia-
nos y pericoledocianos con monofilamento reabsorbible
5/0 o 6/0 en el extremo del CC. Los autores de este artículo
suelen evitar la coagulación, que podría provocar una des-
vascularización o un traumatismo térmico, sobre todo si el
CC es fino. No hay que dudar en recortar el CC más arriba
si su vitalidad es dudosa, siempre que se permanezca por
debajo de la convergencia.
El yeyuno se sitúa detrás del CC. En un punto situado
Figura 15. Reconstrucción tras duodenopancreatectomía a 20-40 cm en sentido distal de la anastomosis pancrea-
cefálica: anastomosis pancreaticoyeyunal, hepaticoyeyunal y ticoyeyunal, se realiza una incisión longitudinal de la
gastroyeyunal precólica (montaje de Child). misma longitud que el diámetro del CC, en el borde anti-
mesentérico del yeyuno (Fig. 17A). Si tiene un diámetro
normal, en ocasiones hay que aumentarlo en su cara ante-
posterior del borde inferior del istmo), de la arcada pan-
rior mediante una incisión de descarga longitudinal corta
creática transversa y/o de la arteria pancreática dorsal
(Fig. 17B) (cf. infra). El plano posterior se comienza con
(que es más bien posterosuperior y está próxima a la
una sutura continua de hilo monofilamento reabsorbi-
vena gástrica izquierda);
ble 5/0 o 6/0. Hay que anudar un punto de ángulo en el
• de la permeabilidad del CPP;
extremo lateral izquierdo del CC que pase por el yeyuno
• de la buena vascularización de la primera asa yeyunal.
de lateral a medial y después por el CC de medial a lateral.
También hay que liberar de su plano posterior el muñón
La sutura continua se comienza con una primera pasada
pancreático residual a lo largo de 2 cm, para realizar el
de lateral a medial en el CC, y después de adentro hacia
plano posterior sin que exista el riesgo de lesionar el eje
afuera en el yeyuno, y así sucesivamente. La sutura conti-
mesentericoporta. Una incisión de 4-5 cm de diámetro en
nua del plano posterior se anuda en un punto de ángulo,
el mesocolon transverso por debajo de la arcada cólica,
a la derecha del CC. La técnica del plano anterior depende
en la vertical del eje mesentérico superior (a la izquierda
sobre todo del diámetro del CC. Si está muy dilatado, se
del pedículo cólico derecho), debe permitir ascender con
puede realizar una sutura continua. Si su dilatación es
facilidad la primera asa y su mesenterio al espacio supra-
moderada, parece preferible emplear puntos sueltos, que
mesocólico. El asa se coloca situando su fondo de saco a
se colocan a partir de cada ángulo; los últimos puntos, en
la izquierda, con una ligera rotación horaria para que su
el medio de la anastomosis, se pasan bajo control visual, se
borde antimesentérico contacte con la zona de sección
dejan sujetos con pinzas y se aprietan después de colocar el
pancreática. Hay que realizar una incisión seromuscu-
último punto y de verificar la permeabilidad de la anasto-
lar longitudinal de una longitud igual a la de la zona
mosis con un disector fino, para evitar cualquier estenosis.
de sección pancreática. La mucosa yeyunal se incide de
Si el CC es fino, se utiliza la misma técnica después de
forma limitada frente al CPP. El plano posterior de la anas-
efectuar una incisión de descarga anterior, utilizando en
tomosis pancreaticoyeyunal terminolateral se comienza
ocasiones un hilo más fino (6/0).
con una sutura continua de hilo monofilamento no reab-
sorbible (polipropileno) o de reabsorción lenta 4/0 de
diámetro. Los autores de este artículo no utilizan hilos
Anastomosis gastroyeyunal
trenzados, que pueden seccionar el páncreas al apretar la El segmento de yeyuno utilizado para esta anastomosis
sutura. Los puntos se pasan de afuera hacia adentro en se encuentra a 30-40 cm en sentido distal de la anastomo-
el páncreas (evitando aplicar una presión excesiva para sis hepaticoyeyunal. Para facilitar el vaciamiento gástrico,
no desgarrarlo) y después de adentro hacia afuera en el se suele realizar una anastomosis en la que el asa eferente
yeyuno. La sutura continua se comienza en el borde supe- está situada en el punto declive del estómago, frente a la
rior de la zona de sección. La primera pasada se anuda y curvatura mayor. Se puede alejar la anastomosis gastro-
después se inicia la sutura continua. El ayudante man- yeyunal de la anastomosis hepaticoyeyunal y colocar el
tiene el hilo tenso, pero no de forma excesiva, para no asa a nivel precólico para realizar la anastomosis gastro-
desgarrar el páncreas, cuya consistencia puede ser frágil yeyunal (Fig. 15); no obstante, es más sencillo realizarla
en los pacientes obesos y/o ancianos. Cuando la sutura sobre el asa justo por encima de su paso transmesocó-
llega a nivel del CPP, el hilo se pasa varias veces por éste, lico (Fig. 18). Un montaje precólico expondría a una tasa
procurando no estenosarlo (Fig. 16): la canalización del menor de gastroparesia postoperatoria (cf. infra) [9, 10] .
CPP con el extremo de un disector o de un estilete per- La anastomosis gastroyeyunal se realiza de forma ter-
mite evitar este riesgo. El hilo se puede pasar también por minolateral con dos suturas continuas extramucosas, una
la mucosa abierta en el lado yeyunal y al mismo nivel, anterior y otra posterior, con hilo monofilamento o
para afrontar el CPP con la luz yeyunal. Sin embargo, una trenzado de 4/0 reabsorbible. Si el estómago se ha sec-
sutura mucomucosa que afronte con precisión la abertura cionado a nivel del antro, la sección gástrica es corta
mucosa yeyunal con la pared del CPP no parece reducir y la anastomosis puede realizarse en toda su longi-
la tasa de fístula pancreática [8] . Después de esta pasada, tud. Si el antro se ha seccionado con una grapadora,
la sutura continua posterior se prosigue de forma idén- habrá que resecar toda la línea de grapas. Hay que ligar
tica a la que se ha realizado por encima del CPP y hasta de forma selectiva los vasos submucosos o bien englo-
Figura 18. Reconstrucción tras una duodenopancreatecto- Figura 19. Colgajo epiploico de cobertura de los vasos celio-
mía cefálica: anastomosis pancreaticoyeyunal, hepaticoyeyunal mesentéricos.
y gastroyeyunal transmesocólica.
bar con la sutura la submucosa y el borde libre de la nal, se recubren con un colgajo epiploico que sirve para
mucosa para limitar el riesgo de hemorragia anastomótica aislarlos del conducto de drenaje de la anastomosis pan-
postoperatoria. creaticoyeyunal, si se deja un drenaje, o de una posible
colección peripancreática. Los autores de este artículo sue-
len colocar un apéndice epiploico no muy grueso de la
Peritonización y drenaje parte derecha del epiplón por detrás del asa yeyunal anas-
tomosada al páncreas y por delante del tronco porta y de la
La ventana retromesentérica se cierra con puntos en X arteria hepática. Este colgajo epiploico puede fijarse hacia
de monofilamento de 4/0 para evitar una incarceración arriba con varios puntos a la porción flácida del epiplón
del intestino delgado. La sutura aproxima el mesenterio menor (Fig. 19).
del mesocolon descendente y transverso, evitando lesio- Se suele colocar un drenaje, aunque no se ha demos-
nar la vena mesentérica inferior y los primeros vasos trado de forma científica su utilidad en las DPC [11, 12, 13] . El
yeyunales. Los puntos no deben inducir una tracción de drenaje permite, en teoría:
la primera asa hacia abajo, lo que podría causar una fístula • evitar que se forme un absceso postoperatorio en caso
anastomótica. de fístula de una de las anastomosis;
Una vez disecados y expuestos los vasos, en especial • realizar análisis de amilasa o de bilirrubina conjugada
la arteria hepática y el muñón de la arteria gastroduode- en el líquido recogido para detectar de forma precoz una
tumoral muy limitada de la pared venosa, por lo que la resección incompleta (R1). En los cánceres periampula-
hipertensión portal estaría relacionada con la compresión res, sigue sin haber un consenso sobre su indicación. Los
tumoral o con excrecencias tumorales endovenosas no autores de este artículo suelen proponerla de forma sis-
adherentes, lo que suele permitir la resección. temática en las lesiones benignas o si existe un interés
por conservar la continuidad de los vasos gástricos dere-
Estenosis del tronco celíaco chos (para limitar el riesgo de desvascularización gástrica
en caso de totalización inmediata o secundaria de la pan-
Cuando el pinzamiento de la arteria gastroduodenal createctomía, como en los tumores intraductales papilares
provoca una disminución evidente de los latidos de la y mucinosos).
arteria hepática, hay que restaurar un flujo normal en el
territorio de la TC, por sección del ligamento arqueado
del diafragma (la mayoría de las veces) o por una deriva- Técnica
ción arterial aortohepática [22] . Para seccionar el ligamento Tanto si la exéresis se realiza «de delante hacia atrás»
arqueado del diafragma, se puede acceder a él por una como «de atrás hacia delante», el duodeno se diseca en
vía anterior (siguiendo la arteria hepática común hasta la vertical del CC, cuya sección previa facilita la disección
el TC) o por una vía lateral (seccionando el pilar derecho del borde superior del duodeno y la ligadura-sección de los
del diafragma por detrás del bloque duodenopancreático). vasos supraduodenales. La arteria pilórica, que suele ori-
A continuación, se sujeta con un disector el ligamento ginarse en la rama izquierda de la arteria hepática común,
arqueado que comprime el TC y se secciona (Fig. 22). La y la vena pilórica, que drena en la cara anterior del tronco
eficacia de este procedimiento debe evaluarse mediante porta, se conservan si es posible. No obstante, se pueden
un nuevo pinzamiento de la arteria gastroduodenal. seccionar, de modo que la movilidad de la región antro-
pilórica aumenta y sigue estando bien vascularizada por
Variantes según la extensión las arcadas de las dos curvaturas gástricas, aunque puede
quedar denervada debido a su desconexión del pedículo
de la exéresis hepático. El pedículo gastroepiploico derecho se secciona
ligando por separado la arteria y la vena, y dejando los
Conservación del píloro
ganglios subpilóricos unidos al bloque duodenopancreá-
Indicación tico. El duodeno se diseca de forma circunferencial en la
La DPC clásica conlleva una antrectomía corta, que punta del bulbo, a aproximadamente 1 cm a la derecha de
permite realizar un vaciamiento ganglionar completo del la arteria gastroduodenal, y se secciona por grapado a 2-
pedículo hepático y de la región antropilórica (ganglios 3 cm del píloro (Fig. 23). Una vez seccionado el duodeno,
suprapilóricos e infrapilóricos y gastroepiploicos dere- la región antropilórica queda expuesta y se identifica el
chos). Se ha descrito la DPC con conservación del píloro origen de la arteria gastroduodenal. Esta última se liga
(Fig. 1) con el fin de reducir las secuelas funcionales a después de realizar una prueba de pinzamiento y luego
largo plazo (síndrome de estómago pequeño, síndrome se secciona.
de vaciamiento gástrico precoz, gastritis biliar) y también El resto de la exéresis no presenta aspectos especia-
porque se consideraba que la invasión de dichos ganglios les. Para restablecer la continuidad, la línea de grapas se
sólo es aislada de forma excepcional o no es compatible reseca y la hemorragia de la zona de sección duodenal
con una supervivencia prolongada pese a su resección. se verifica. Es posible observar un aspecto isquémico del
En la actualidad, se considera que la DPC con conser- borde inferior y/o de la cara posterior de la primera por-
vación pilórica es menos hemorrágica y más rápida que ción del duodeno, lo que obliga a resecarlo parcialmente
la DPC con antrectomía, no mejora el resultado funcio- para que la anastomosis duodenoyeyunal (que se realiza
nal inmediato de la DPC y no modifica el pronóstico a de forma isoperistáltica mediante dos hemisuturas conti-
largo plazo en caso de cáncer [23] . Sólo está contraindicada nuas de monofilamento de 4/0) se efectúe en una zona
para los tumores de la parte alta de la cabeza del páncreas bien vascularizada (Fig. 24). Esta anastomosis puede ser
o del duodeno proximal para los que existe un riesgo de precólica o transmesocólica.
1 2
4
3
6
5
7
9 10
8
11 12
13
Resección vascular
1
Resección venosa
Indicaciones. La extensión al eje venoso mesenteri-
coporta es frecuente en los adenocarcinomas pancreáticos
cefálicos. Debido a las relaciones anatómicas existentes
entre el páncreas y este eje venoso, se trata de una exten-
sión directa por contigüidad más que del reflejo de la
agresividad tumoral. La invasión venosa es excepcional
en los otros tumores, a excepción de algunas neoplasias 2
endocrinas voluminosas, en las que puede coexistir una
invasión parietal y un trombo tumoral endovenoso. De
forma global, la extensión venosa no empeora el pro- 3
nóstico después de la resección si ésta puede ser radical
(R0), salvo si la extensión es transmural, si existe un creci-
miento tumoral endovenoso. No obstante, la extensión a
la pared venosa se asocia con frecuencia a una extensión
tumoral a la lámina retroportal, con riesgo de extensión 4
a las arterias (por lo que debe buscarse de forma sistemá-
tica) o un riesgo elevado de resección R1. Por tanto, la
extensión tumoral a la pared venosa no constituye una
contraindicación para la exéresis si ésta es posible desde
el punto de vista técnico (invasión de menos de 5-6 cm Figura 26. Aspectos técnicos que facilitan la resección venosa
de longitud, ausencia de cavernoma) y puede ser R0 (los mesentericoporta durante una duodenopancreatectomía cefá-
tumores que rodean más del 50% de la circunferencia lica por un cáncer: acceso en primer lugar de la arteria
de la vena pocas veces son accesibles de entrada a una mesentérica superior con sección de la lámina retroportal (3);
resección R0). Otro argumento a favor de la resección sección del páncreas a la izquierda del tumor frente a la vena
venosa es el carácter inconstante de la invasión histo- esplénica (2); movilización de la raíz del mesenterio (4, flecha);
lógica cuando las pruebas de imagen preoperatorias y la descenso temporal del hígado con un paño interhepatodiafrag-
disección quirúrgica muestran una adherencia al tumor, mático (1, flecha).
pues ésta sólo es tumoral en el 66% de los casos y fibrosa
(relacionada con la reacción estromal) en un 33% de los
mismos [26] . ras no montadas, y sobre todo los clips, pueden deslizarse
Técnica. Cuando se requiere una resección venosa, o molestar durante el pinzamiento. El eje venoso mesen-
debe realizarse en último lugar, en monobloque con la tericoporta se diseca hasta visualizar los límites superiores
cabeza del páncreas, para llevar a cabo el procedimiento e inferiores de la adherencia tumoral, lo que puede ser difí-
o procedimientos de reconstrucción venosa una vez rese- cil si existen adherencias que se prolongan por detrás del
cada la pieza, debido a tres motivos: tronco porta. En esta zona no debe realizarse una disec-
• evitar abrir la interfase entre el tumor y la vena inva- ción forzada destinada a disminuir su extensión, pues se
dida, para no provocar una diseminación tumoral; corre el riesgo de que la resección sea R1. Los «puntos de
• evitar agravar la hemorragia a partir de la pieza si es no retorno» sólo se cruzan después de haber verificado la
necesario un pinzamiento portal total. Durante una posibilidad de realizar la exéresis.
resección clásica de la lámina retroportal «de delante Las secciones biliares y digestivas suelen ser fáciles. La
hacia atrás», las colaterales portales se seccionan en pri- sección pancreática debe desviarse hacia la izquierda (des-
mer lugar y después se hace lo propio con las ramas pués de la movilización de la unión istmo-cuerpo y del
arteriales. Si es necesario un pinzamiento portal total cuerpo) si existe una extensión tumoral a la cara ante-
durante la resección, la pieza de DPC aún está perfun- rior de la confluencia mesentericoporta, ya que el tumor
dida por vía arterial, mientras que su retorno venoso se extiende al istmo (Fig. 26). Es obligatorio realizar un
se pinza, lo que ocasiona una hemorragia a partir de la estudio histológico intraoperatorio de la zona de sección
pieza, que sólo se resuelve tras el despinzamiento portal pancreática.
y la sección de la lámina retroportal; La sección de la lámina retroportal se efectúa a con-
• minimizar el tiempo de pinzamiento portal, que tinuación (Fig. 26), procurando no ejercer una tracción
idealmente debe ser inferior a 30 minutos. Un pinza- excesiva sobre la pieza, pues podría causar una lesión
miento prolongado (>30 min) provoca un sufrimiento venosa. No hay que dudar en esqueletizar las arterias para
intestinal, trastornos de la coagulación y alteraciones lograr una exéresis radical, lo que explica que las DPC con
biológicas y hemodinámicas durante el despinza- resección venosa provoquen con frecuencia una diarrea
miento. Cuando se prevé un pinzamiento prolongado, motora. La sección de la lámina retroportal con la pieza
hay que pinzar de forma simultánea la AMS o, en oca- in situ puede resultar difícil en su parte alta, en el ángulo
siones, prever una derivación venovenosa pasiva (por entre el TC y la AMS.
ejemplo, una anastomosis mesentericocava temporal Para alejarse de la zona de adherencia tumoral y/o sim-
por injerto protésico interpuesto). plificar las maniobras de pinzamiento sobre la VMS, en
Por tanto, lo ideal es realizar la intervención «de detrás ocasiones hay que ligar sus últimas colaterales, como las
hacia delante» mediante una disección en primer lugar venas cólicas superior derecha y media y la primera vena
de la AMS y con la toma de biopsias para su estudio yeyunal. En cambio, es mejor pinzar que ligar la vena
intraoperatorio si es preciso. También hay que confirmar mesentérica inferior si drena en el borde derecho de la
la ausencia de metástasis a distancia. La zona de exten- VMS (15% de los pacientes), porque puede permitir una
sión venosa y, en especial, su longitud deben precisarse circulación colateral en caso de trombosis del montaje.
mediante una disección que englobe una movilización Después de esta maniobra, en ocasiones hay que volver
de la VMS (ligando sus colaterales pancreáticas) y, si a medir la longitud de la pérdida de sustancia previsi-
es preciso, la sección del CC e incluso de la arteria ble. La movilización del mesenterio (por despegamiento
gastroduodenal y la creación de un túnel retroístmico que de la fascia de Toldt derecha y de la raíz del mesenterio)
siga un trayecto situado ligeramente a la izquierda del eje y el descenso temporal del hígado mediante uno o dos
venoso mesentericoporta. Las colaterales venosas deben paños interhepatodiafragmáticos son las dos maniobras
seccionarse entre ligaduras montadas, ya que las ligadu- que permiten ganar la longitud necesaria para realizar la
Figura 28. Duodenopancreatectomía cefálica con resección troncular del tronco porta.
A. El pinzamiento proximal se sitúa en la vena mesentérica superior y la vena esplénica para facilitar la movilización de la pared venosa
con vistas a la anastomosis.
B. Anastomosis terminoterminal directa.
C. Sutura continua terminada con factor de crecimiento que garantiza la expansión de la anastomosis.
3 cm
deja sujeto con una pinza de referencia hasta haber pasado Los resultados de esta anastomosis fueron excelentes
todos los puntos del plano. A continuación, el páncreas se en un ensayo clínico aleatorizado llevado a cabo por el
introduce en el yeyuno y se anudan los puntos sucesiva- promotor de esta técnica [34] , pero hasta el momento no
mente. Después, se confecciona el plano anterior según la se han confirmado en dos series francesas [35, 36] .
misma técnica. Se pueden aplicar otros puntos al final de Anastomosis terminolateral con invaginación según
la anastomosis entre el extremo del yeyuno y el páncreas, Blumgart. El principio de esta anastomosis consiste
para solidarizar mejor el conjunto y evitar la retracción en realizar una anastomosis mucomucosa por una inci-
del yeyuno. Esta técnica no se ha evaluado con un ensayo sión yeyunal en el borde antimesentérico del intestino
clínico aleatorizado. delgado y cuyo tamaño es equivalente al del CPP,
Anastomosis terminoterminal por invaginación asociando una invaginación del lecho de sección pan-
según la técnica de Peng. Esta anastomosis, descrita por creática en la capa seromuscular del yeyuno. Para ello,
Peng et al. en 2002 [33] , retoma el concepto de la intusus- las paredes laterales del yeyuno se fijan a la cápsula pan-
cepción y añade tres modificaciones: creática con el fin de recubrir todo el lecho de sección
• el yeyuno se evierte sobre sí mismo para realizar una (Fig. 35).
primera anastomosis entre la mucosa yeyunal y el pán- En la práctica, la anastomosis se realiza de atrás hacia
creas; delante; primero se colocan los puntos que fijan el yeyuno
• para mejorar la cohesión entre el páncreas y el yeyuno, a la cápsula posterior, que son puntos totales, englo-
la mucosa yeyunal que recubre el páncreas a lo largo de bando todo el espesor de la zona de sección a ambos
2-3 cm se destruye previamente con medios químicos o lados del CPP, lo que requiere usar hilos montados con
térmicos, con el fin de crear una zona de adherencias; doble aguja. A continuación, se realiza la abertura yeyu-
• también se aplica una ligadura alrededor de la zona nal y la anastomosis mucomucosa entre el CPP y la
enterrada al final del procedimiento para que el yeyuno mucosa del intestino delgado con varios puntos de hilo
quede bien dispuesto sobre el páncreas (Fig. 34). monofilamento reabsorbibles 6/0, y después se termina
.5 Desde el punto de vista técnico, esta anastomosis se la anastomosis pasando los hilos que salen de la cápsula
realiza en varias fases: eversión del intestino delgado a anterior por la pared del intestino delgado, tras lo que se
lo largo de 3-4 cm, destrucción de la mucosa de la zona aprietan los nudos (Fig. 35).
evertida con fenol o con un bisturí eléctrico, anastomo- Esta anastomosis ha dado buenos resultados en dos
sis entre la zona de sección pancreática y la mucosa en series retrospectivas comparativas [37, 38] y en un ensayo
el límite de la zona evertida (evitando los puntos tota- clínico aleatorizado [39] .
les en el intestino delgado), supresión de la eversión al
colocar el intestino delgado sobre el páncreas, fijación del
extremo del intestino delgado sobre la cápsula pancreática Separación de las anastomosis
con puntos en U que pasan superficialmente por la cáp- El principio de este montaje no consiste en redu-
sula y aplicación de una ligadura concéntrica alrededor de cir la prevalencia de la fístula pancreaticoyeyunal, sino
la anastomosis, pasando entre dos vasos rectos yeyunales, sus repercusiones, evitando la activación in situ de las
ajustando la tensión con la que se aprieta mediante un ins- enzimas pancreáticas o limitando el volumen de las secre-
trumento (e incluso evaluándola después con una inyec- ciones digestivas intraluminales en la proximidad de la
ción a presión de suero fisiológico en el vértice del asa). anastomosis pancreaticoyeyunal dehiscente.
que se retira antes del final de la anastomosis, o un dren puntos extraluminales que engloben esencialmente los
perdido, como el que se puede emplear en una anastomo- bordes superior e inferior de la anastomosis.
sis pancreaticoyeyunal clásica (cf. supra). Cada vez que se Con independencia de la técnica, se coloca una sonda
aprietan los puntos o la sutura continua, hay que rela- nasogástrica de aspiración y se verifica su posición. Esta
jar de forma temporal la tracción sobre el estómago para sonda permite «descomprimir» la anastomosis y, si se des-
no desgarrar el parénquima pancreático y permitir una arrolla una fístula de alto flujo o mal tolerada, permite
coaptación adecuada de los dos órganos. Una vez que se aspirar las secreciones digestivas que contactan con la
ha realizado el plano anterior, se lleva a cabo el posterior sutura. Al final de la intervención, se coloca un colgajo
(y derecho) en sentido craneocaudal según los mismos epiploico por detrás del estómago y en el borde dere-
principios. Hay que procurar no estenosar el CPP al efec- cho de la anastomosis, por delante del tronco porta y
tuar este plano; para ello, los puntos se pasan bajo control de la arteria hepática, para proteger los vasos en caso
visual y sólo se aprietan una vez que se ha pasado el último de fístula pancreática. Este colgajo puede fijarse en el
punto por este conducto. Es esencial, por tanto, tener una epiplón gastrohepático. La anastomosis se drena con un
buena visibilidad. dren no aspirativo flexible tipo lámina multitubulada
Invaginación (intususcepción) del muñón pancreá- infrahepática, que se sitúa por detrás o, más bien,
tico en el estómago. Según el mismo concepto que en por delante de la anastomosis hepaticoyeyunal y cuyo
la anastomosis pancreaticoyeyunal, la zona de sección extremo se pasa a través de la porción flácida del epiplón
pancreática se puede invaginar en el estómago para dis- menor, tras lo que se sitúa en contacto con la anastomosis.
tanciarla de la unión pancreaticogástrica, con el fin de Cuando el páncreas tiene una consistencia normal o fria-
limitar el riesgo de fístula a partir de los puntos que ble, lo que sugiere un riesgo elevado de fístula, los autores
atraviesan la cápsula pancreática. La zona de sección de este artículo se da una forma bífida al extremo de la
pancreática debe movilizarse a lo largo de unos 4 cm y la lámina, de modo que rodee la anastomosis pancreatico-
arteria esplénica se debe disecar desde el borde superior gástrica, o se añade una segunda lámina a la izquierda de
del páncreas y rechazarse hacia arriba. La incisión gás- la anastomosis en la trascavidad de los epiplones. La exte-
trica posterior se distancia ligeramente hacia la izquierda riorización de esta segunda lámina por un trayecto corto
respecto a una anastomosis pancreaticogástrica clásica. susceptible de drenar una fístula suele requerir que se com-
Los vasos submucosos gástricos se ligan de forma selec- plete el despegamiento coloepiploico y que se descienda
tiva y después se realiza una incisión en la mucosa de un parcialmente el ángulo cólico izquierdo.
tamaño que permite el paso del muñón pancreático. El Anastomosis pancreaticogástrica con intubación
enterramiento del páncreas en la luz gástrica y la sutura por un dren exteriorizado. El principio de esta anas-
pancreaticogástrica se pueden realizar a continuación por tomosis consiste en derivar el flujo de las secreciones
vía exogástrica o endogástrica. La vía exogástrica requiere, pancreáticas de una posible fístula anastomótica con
antes de enterrar el páncreas, que se pasen unos puntos ayuda de un catéter que se introduce por el conducto de
separados entre el borde gástrico izquierdo (de lateral a Wirsung y después se exterioriza a través de la pared gás-
medial) y la cara superior del páncreas a 3 cm de la zona trica y de la pared anterior del abdomen. Desde el punto
de sección (de medial a lateral) (Fig. 38A). A continua- de vista técnico, el dren, de tipo transcístico, se exterioriza
ción, el páncreas se entierra en el estómago (ayudándose por la cara anterior del estómago. Es más fácil no colocarlo
en ocasiones de hilos de tracción por vía endogástrica si hasta haber realizado la primera mitad de la anastomosis.
se ha efectuado una antrectomía). Después, se anudan los Hay que identificar un punto en la cara anterior del estó-
puntos que se pasan para el plano anterior. El plano poste- mago, por lo general cercano a la curvatura mayor, que
rior se confecciona a continuación con puntos separados o contacte con la pared anterior del abdomen sin tensión
con una sutura continua (ya que el riesgo de estenosis del ni interposición del hígado. Un disector fino se introduce
CPP es leve, sobre todo si no se ha incluido en la sutura). en la anastomosis y se efectúa una abertura puntiforme
La vía endogástrica requiere una gastrotomía anterior del estómago frente a este punto con bisturí eléctrico.
longitudinal corta, de 6-8 cm, que permita una exposi- El extremo del dren se tracciona hacia el estómago y
ción suficiente sobre la incisión posterior. El páncreas se enseguida se introduce en el conducto de Wirsung y se
entierra en el estómago, ayudándose de hilos de ángulo fija al páncreas con un punto de monofilamento reab-
de tracción (Fig. 38B). La sutura pancreaticogástrica se sorbible 5/0. Después, el dren se fija a la pared anterior
realiza de forma circular, mediante suturas continuas o del estómago, haciendo que describa un bucle en la luz
con puntos separados de monofilamento 3/0 o 4/0 no gástrica, con hilo reabsorbible 4/0 o 5/0, englobando una
reabsorbibles, englobando el páncreas, la mucosa y, si es porción amplia de la pared gástrica que contacte con el
posible, la muscular gástrica (Fig. 38 C). La gastrotomía dren para realizar una hemostasia adecuada del punto de
anterior se cierra en sentido longitudinal con una sutura penetración del dren. El plano posterior (y derecho) de la
continua monofilamento 4/0. Se pueden añadir algunos anastomosis pancreaticogástrica se realiza a continuación,
“ Puntos esenciales
• En caso de adenocarcinoma periampular, la práctica totalidad de los autores coinciden en que las contraindica-
ciones para la DPC son las metástasis hepáticas y peritoneales, las adenopatías metastásicas interaorticocavas y la
extensión arterial (TC, AMS, arteria hepática).
• La DPC se puede realizar «de delante hacia atrás» («exéresis clásica») o «de detrás hacia delante» (disección
primero de la AMS).
• La sospecha de una extensión a la lámina retroportal y una resección asociada del eje venoso mesentericoporta
constituyen las dos indicaciones más sólidas para una exéresis «de detrás hacia delante».
• La conservación del píloro permite una exéresis más rápida y menos hemorrágica, pero el beneficio a largo plazo
de esta variante sobre el estado nutricional y las funciones digestivas no se ha demostrado. Cuando se asocia a la
conservación de los vasos pilóricos, limita el riesgo de desvascularización gástrica en caso de totalización.
• En caso de adenocarcinoma del páncreas o del colédoco, puede ser necesario realizar un estudio histológico
intraoperatorio de la zona de sección pancreática y una sección alta de la vía biliar bajo la convergencia biliar
superior para limitar el riesgo de exéresis R1.
• En caso de adenocarcinoma del páncreas o del colédoco, se recomienda un vaciamiento ganglionar regional
(que englobe los relevos peripancreáticos anteriores y posteriores, pilóricos, gastroepiploicos, hepáticos propios y
comunes, los del borde derecho del pedículo hepático, mesentéricos superiores derechos y celíacos derechos). Un
vaciamiento más extenso no ha demostrado ser beneficioso.
• Si se va a resecar el eje venoso mesentericoporta, la movilización del mesenterio y, en muy pocas ocasiones, la
preparación de un posible injerto venoso autólogo deben realizarse antes de cualquier pinzamiento.
• La lámina retroportal debe identificarse en la pieza marcándola con tinta o colocando hilos de sutura.
• La realización de una anastomosis pancreaticodigestiva debe ser la norma. Las anastomosis pancreaticoyeyunal y
pancreaticogástrica proporcionan resultados equivalentes a nivel global.
• La colocación de un drenaje exteriorizado reduce el riesgo de fístula de una anastomosis hepaticoyeyunal.
• El paso del asa yeyunal por la ventana retromesentérica debe evitarse. Para la anastomosis biliar (y pancreatico-
yeyunal si se opta por ésta), el asa se pasa de forma transmesocólica. El asa puede ser transmesocólica o precólica
frente a la anastomosis digestiva (gastroyeyunal o duodenoyeyunal).
• Se suele dejar un drenaje peritoneal, pero su eficacia no se ha demostrado.
• El riesgo de erosión arterial (como complicación de una fístula pancreática) debe haberse previsto mediante una
omentoplastia de cualquier tipo.
[36] Maggiori L, Sauvanet A, Nagarajan G, Dokmak S, Aussilhou [43] Duffas JP, Suc B, Msika S, Fourtanier G, Muscari
B, Belghiti J. Binding versus conventional pancreaticoje- F, Hay JM, et al. A controlled randomized multicen-
junostomy after pancreaticoduodenectomy: a case-matched ter trial of pancreatogastrostomy or pancreatojejunostomy
study. J Gastrointest Surg 2010;14:1395–400. after pancreatoduodenectomy. Am J Surg 2005;189:
[37] Grobmyer SR, Kooby D, Blumgart LH, Hochwald SN. 720–9.
Novel pancreaticojejunostomy with a low rate of anas- [44] Yeo CJ, Cameron JL, Maher MM, Sauter PK, Zahurak
tomotic failure-related complications. J Am Coll Surg ML, Talamini MA, et al. A prospective randomized trial
2010;210:54–9. of pancreaticogastrostomy versus pancreaticojejunostomy
[38] Kleespies A, Rentsch M, Seeliger H, Albertsmeier M, Jauch after pancreaticoduodenectomy. Ann Surg 1995;222:580–8
KW, Bruns CJ. Blumgart anastomosis for pancreaticojeju- (discussion8–92).
nostomy minimizes severe complications after pancreatic [45] Delpero JR, Paye F, Bachellier P. Mortalité et morbidité pos-
head resection. Br J Surg 2009;96:741–50. topératoires de la DPC. En: Delpero JR, Paye F, Bachellier
[39] Berger AC, Howard TJ, Kennedy EP, Sauter PK, P, editores. Cancer du pancréas. Rapport présenté au 112e
Bower-Cherry M, Dutkevitch S, et al. Does type of pancrea- Congrès français de chirurgie. Rueil Malmaison: Wolters
ticojejunostomy after pancreaticoduodenectomy decrease Kluwer; 2010. p. 209–23.
rate of pancreatic fistula? A randomized, prospective, dual-
institution trial. J Am Coll Surg 2009;208:738–49. [46] Di CarloV, Chiesa R, PontiroliAE, Carlucci M, Staudacher
[40] Parc R, Herbière P. Protection of the pancreaticojejunal anas- C, Zerbi A, et al. Pancreatoduodenectomy with occlusion
tomosis after cephalic duodenopancreatectomy for tumor. of the residual stump by Neoprene injection. World J Surg
Presse Med 1983;12:99–101. 1989;13:105–10 (discussion 10–11).
[41] Grobmyer SR, Hollenbeck ST, Jaques DP, Jarnagin WR, [47] Tran K, Van Eijck C, Di Carlo V, Hop WC, Zerbi A, Balzano
DeMatteo R, Coit DG, et al. Roux-en-Y reconstruction after G, et al. Occlusion of the pancreatic duct versus pancrea-
pancreaticoduodenectomy. Arch Surg 2008;143:1184–8. ticojejunostomy: a prospective randomized trial. Ann Surg
[42] Bassi C, Falconi M, Molinari E, Salvia R, Butturini G, Sartori 2002;236:422–8 (discussion 8).
N, et al. Reconstruction by pancreaticojejunostomy versus [48] Turrini O, Delpero JR. Omental flap for vessel coverage
pancreaticogastrostomy following pancreatectomy: results during pancreaticoduodenectomy: a modified technique. J
of a comparative study. Ann Surg 2005;242:767–71. Chir (Paris) 2009;146:545–8.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Buc E, Sauvanet A. Duodenopancreatectomía cefálica. EMC Técnicas
quirúrgicas - Aparato digestivo 2012;28(1):1-25 [Artículo E–40-880-B].
Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico