En El Vertice Del Ecuador

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II

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


ÍNDICE
semper et ubique fidelis
VI

Esta publicación forma parte de las actividades que el Gobierno Federal organiza en Conmemoración del
Bicentenario del inicio del movimiento de Independencia Nacional y del Centenario del inicio de la Revo-
lución Mexicana

EN EL VÉRTICE DEL ECUADOR

DR © Ismael Arturo Montero García

Primera edición: 2010


Primera reimpresión: 2012

ISBN:
México: 978-607-00-3447-3
Digital PDF: 978-607-00-3451-0

Diseño de interiores y composición tipográfica:


Ricardo Bonilla / concepto editorial

Portada:
Ana María Hernández Nieto / diseño & punto

Cuidado de la edición:
Arturo Montero

Corrección:
Alma Villagrán

Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de tapa, puede


ser reproducida, almacenada, transmitida o utilizada de manera algu-
na ni por ningún medio, ya sea electrónico, químico, óptico de graba- Foto de portada: Juan Rivera
ción o electrográfico sin el previo permiso por escrito de su autor.
Foto de entrada: Adrián Olguín

Impreso en México / Printed in Mexico Foto de salida: Jesús Martínez

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


Índice general
ix Presentación
xi Prólogo
xiii Prefacio
xvii Introducción
3 1. El ecuador
3 1.1. Apuntes históricos
3 1.1.1 Imago mundi
15 1.1.2 Alcanzando el círculo ecuatorial
22 1.1.3 Misión Geodésica Francesa
25 1.1.4 La República del Ecuador
27 1.1.5 Monumentos y remembranzas por el mundo
33 1.2 Consideraciones físicas
33 1.2.1 La forma de la Tierra y su variación en el ecuador
36 1.2.2 La intensidad del campo gravitatorio en el ecuador
37 1.2.3 El ecuador magnético
38 1.2.4 Un planeta en movimiento
40 1.2.5 El efecto Coriolis
41 1.2.6 Los océanos y el ecuador
42 1.2.7 El clima ecuatorial
46 1.2.8 El ecuador celeste
47 1.2.9 Un ecuador que mira al espacio exterior
51 2. La Expedición 0° / 0°C
51 2.1 Introducción
52 2.2 Antecedentes
52 2.2.1 Primicias literarias
53 2.2.2 La expedición Cobo-Boada, 2007
55 2.2.3 Trabajos arqueoastronómicos en el cerro Catequilla, 2009
58 2.3 Un proyecto interdisciplinario
58 2.3.1 Formulando una hipótesis desde la cartografía
59 2.3.2 Objetivos
62 2.3.3 Metodología
65 2.3.4 Materiales, equipos y financiamiento

ÍNDICE
VIII

66 2.4 Integrando la expedición


66 2.4.1 Una empresa autofinanciada, no lucrativa y de autogestión
66 2.4.2 La expedición se incorpora a los trabajos del Año Internacional de la Astronomía
67 2.4.3 Conmemorando el Bicentenario de la Independencia
68 2.4.4 Emblema
69 2.4.5 Participantes, colaboradores y patrocinadores
77 3. El descubrimiento
77 3.1 Introducción
77 3.2 Aproximación
79 3.3 En el vértice
79 3.3.1 Primer ascenso, Glaciar Bicentenario
86 3.3.2 Segundo ascenso, Glaciar Ecuador
87 3.3.3 Tercer ascenso: mal tiempo y frustración
91 3.3.4 Cuarto ascenso, Arista del Águila y el Cóndor
94 3.3.5 Quinto ascenso, buscando una nueva ruta
95 3.4 Actividades complementarias
95 3.4.1 Trabajos de astrofotografía en Pambamarca
98 3.4.2 Reconocimiento ambiental al somonte
99 3.4.3 Recorrido cultural
100 3.4.4 Participación en el Primer Congreso Internacional de Arqueoastronomía
100 3.4.5 Ascenso a la cumbre del Nevado Cayambe
103 4. El volcán Cayambe
103 4.1 Medio ambiente
103 4.1.1 Geología
109 4.1.2 Glaciología
114 4.1.3 Geomorfología
119 4.1.4 Pisos altitudinales térmicos
120 4.1.5 Clima
122 4.1.6 Flora y fauna
129 4.2 Sociedad y montaña
129 4.2.1 Semblanza histórica
141 4.2.2 El culto a la montaña
143 4.2.3 Arqueoastronomía
151 Conclusiones
153 Bibliografía
160 Lista de acrónimos y abreviaturas
161 Créditos fotográficos y de ilustraciones

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


IX

Presentación
N O EXAGERO SI AFIRMO que estamos ante un libro excepcional. No sólo
por la cantidad de información que contiene (ese también, al final, es
un mérito de las enciclopedias), sino por la experiencia de vida que
transmite. Es un estudio que se sumerge en las profundidades de los
tiempos para desentrañar el significado histórico, geográfico y mito-
lógico de la palabra Ecuador –la o el gran protagonista del libro– para
luego elevarse a las cimas más altas, de la mano de la ciencia y la
técnica, sobre esa misma palabra, convertida ya no en línea imagina-
ria, como cantaban los poetas pesimistas, sino en un accidente geo-
gráfico y físico tan poderoso como una cordillera o un río que rodea el
mundo.
Y si las dos primeras partes del libro están dedicadas a desentrañar
significados, marcar rutas, pronosticar proezas, la segunda y tercera
están dedicadas a contar la forma como se soñó y luego se armó y
culminó una expedición que marcará un hito en la ciencia, pero sobre
todo unirá más a dos pueblos que aunque distantes en la geografía
tienen poderosos vínculos y coincidencias a lo largo de la historia.
Pero vayamos por partes: quien lea con atención la primera sección
de este libro quedará fascinado por todo lo que brota en torno a la
palabra Ecuador (del latín aequatoris). Es como si el autor hubiese
descubierto un manantial del cual brotaran las más increíbles imáge-
nes, reflexiones y leyendas: desde los estudios de Pitágoras en el siglo
VI aC hasta los cantos del Dante, en La Divina Comedia. Aquí encontra-
mos las reflexiones de Euxodo de Cnidos y de Aristóteles, así como los
cálculos del astrónomo Piteas y del gran Eratóstenes de Cirene que
llegó a establecer casi con exactitud matemática la extensión de la
circunferencia terrestre. Nos acercaremos a los pensamientos de los
sabios chinos, como Chia Dao, quien llamaba “camino rojo” al ecuador
celeste, y a la paciencia de Hiparco de Nicea que inventó el astrolabio,
esa maravillosa herramienta para escudriñar el cielo. Conoceremos la
esfera de Eratóstenes y las imágenes míticas del sabio hindú
Aryabhatiya (476-550 dC).

PRESENTACIÓN
X

En fin, por estas páginas, bellamente ilustradas, además, con gráfi- Pero este libro tiene más. Hay un capítulo entero que trata de las
cos y fotografías de calidad, que hacen más grata su lectura, cruzarán fuerzas físicas y naturales que se perciben en estas regiones cruzadas
Plinio el Viejo, Macrobios Theodosius (que dibujó por primera vez la por la línea ecuatorial. La intensidad de su campo gravitatorio que
línea ecuatorial sobre un mapa), Ptolomeo, Haly y Cantino (creador hace pesar menos a los cuerpos, la fuerza inusual de sus mareas, la
del Planisferio), Marcator, quien decía que los mapas son los ojos de la existencia de los ríos más extensos del planeta: el Nilo, el Congo, el
historia. Y también los grandes exploradores chinos, árabes y portu- Amazonas y las montañas más altas: el Chimborazo que medido desde
gueses, con los cuales se inicia la “Era de los descubrimientos”: Zhang el centro de la Tierra es más alto que el Everest. La posibilidad de que
He, Femando Games, Joao de Santarem, Pedro Escobar, seguidos de los en el futuro se puedan instalar ascensores espaciales, como ya lo in-
españoles e italianos: Bartolomé Ruíz (que llegó por primera vez al tenta la NASA , emulando las novelas de ciencia ficción de Charles
ecuador continental), Vasco de Gama, Américo Vespucio, Magallanes, Sheffieeld (La telaraña de los mundos) y Arthur Clarke (3001: Odisea
Sebastián Elcano. final). Un capítulo que sirve para demostrar, definitivamente, que el
Más adelante, el autor centra su mirada en los países por los cuales Ecuador no es una línea imaginaria.
pasa la línea ecuatorial –15 en total– y presenta con igual dedicación Y todo ese cúmulo de datos, nombres, circunstancias culminan con
un mosaico de naciones, monumentos y mitos que nos dejan igual- la descripción y estudio del volcán Cayambe (“la Montaña del Sol”,
mente fascinados y, por momentos, conmovidos, porque sin duda que como la llamaban los antiguos habitantes de la zona) y la minuciosa
esta es una de las regiones del mundo con mayor biodiversidad y en- descripción –en verdad un diario documentado– de la expedición diri-
canto pero también con mayor concentración de sufrimiento humano, gida por el autor del libro, doctor Ismael Arturo Montero García, y
como bien observa el autor. Basta que nos fijemos en las naciones conformada por montañistas, científicos, fotógrafos, pintores del Ecua-
africanas o asiáticas donde el colonialismo más feroz hincó sus garras dor, México y España que viajaron al Ecuador para determinar el sitio
o donde los desastres naturales: como terremotos y tsunamis han gol- a más altura en el globo terráqueo por donde cruza la línea ecuatorial
peado con mayor fuerza y dramatismo. y que está precisamente en los glaciares del volcán Cayambe.
Por ello, cuando llegamos a territorio americano, siempre siguien- Un libro excepcional, digo, que quedará como el testimonio de un
do el trayecto de la línea ecuatorial, y entramos primero en las Islas sueño hecho realidad. Fui testigo del entusiasmo que pusieron los
Galápagos (islas encantadas, como las llamaron los marineros de anta- expedicionarios desde un primer momento cuando me visitaron en la
ño) y luego en la actual República del Ecuador, con su bella capital Embajada antes de emprender su viaje al Ecuador y atestigüé la ale-
Quito y sus regiones geográficas tan marcadas, no podemos sino sen- gría con que describieron su hazaña a su retorno. Un sueño hecho
tir un respiro de alivio. Sentimiento que, por cierto, deben haber expe- realidad con base en la tenacidad, el coraje y el amor que pusieron en
rimentado los expedicionarios franceses que llegaron a esta región en la empresa un puñado de hombres y mujeres, quienes en una fecha
el año 1736, dirigidos por La Condamine y Bouguer, para establecer la clave de la historia, cuando Ecuador y México conmemoran el bicente-
forma de la Tierra y determinar el sitio por donde cruzaba la línea nario del inicio de sus independencias, dejaron sobre el glaciar de
ecuatorial. Entonces, según sus crónicas, la llamada Real Audiencia uno de los volcanes más altos y bellos de la tierra, el emblema del
de Quito también les dio un remanso de seguridad para su trabajo. De águila y el cóndor, enlazados en dos banderas tricolores que simboli-
todas formas, era el único lugar de los existentes en la línea ecuatorial zan la amistad eterna de dos pueblos.
donde estaban instaladas universidades, imprentas y colegios. Ellos
fueron los que bautizaron a esa región como “las tierras del Ecuador”, Galo Galarza Dávila
como se la conoció en Europa en el siglo XVIII y que sirvió como motivo Embajador del Ecuador en México
fundamental para que se adoptara ese nombre cuando se separó de la
Gran Colombia, en 1830. México, D.F., septiembre de 2010.

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XI

Prólogo
E SCRIBIR ESTAS LÍNEAS representa, de alguna manera, volver a participar
de aquel enorme entusiasmo que vertió el autor de esta obra, al imagi-
nar que podría hacer realidad un sueño largamente atesorado.
La eventualidad, día con día, con cada noticia, de que se acercaba a
los glaciales ecuatoriales del volcán Cayambe en Ecuador, le desperta-
ba a este investigador y humanista, nuevas hipótesis acerca de lo que
sería su descubrimiento: el vértice del ecuador terrestre.
Apenas cinco meses antes de la partida de la expedición, el ecuato-
riano Cristóbal Cobo, desde el Cerro Catequilla, levantó el brazo y apun-
tó hacia el horizonte montañoso para señalar al volcán Cayambe, y
nos advirtió que por aquel punto, siguiendo la línea equinoccial, se
encuentra el glacial más alto de Ecuador. Fueron estas palabras, como
anuncio de un destino previamente pactado, las que se clavaron cual
aguijón en el espíritu aventurero y entusiasta de Arturo Montero, ar-
queólogo de cuevas y cavernas, de montañas y alturas, investigador y
humanista, quien no descansaría hasta conseguir lo que habría de
convertirse en su principal objetivo: llegar a las cumbres de la monta-
ña sagrada de los antiguos habitantes del Sol.
Las tareas y preparativos para organizar la expedición, en los escasos
cinco meses previos a la partida estuvo matizada por una búsqueda
constante de información, datos cartográficos y fotográficos de la mon-
taña, equipo adecuado para soportar el paso de los glaciales, instru-
mentación especializada y de precisión para documentar y procesar los
hallazgos, pero particularmente preocupada por conformar un equipo
humano capaz de cubrir todas las disciplinas necesarias para su éxito.
Se convocó entonces a montañistas ecuatorianos y mexicanos, mé-
dicos y fotógrafos para que participaran, bajo la coordinación general
de Arturo Montero y el soporte técnico de Cristóbal Cobo, acompaña-
dos de guías especializados, en la organización de esta histórica expe-
dición que partiría, finalmente, en el mes de septiembre con motivo de
las actividades del Año Internacional de la Astronomía y el Congreso
Internacional de Arqueoastronomía, que se llevarían a cabo en la ciu-
dad de Quito.

PRÓLOGO
XII

Luego de varios ascensos e inconvenientes, propios de tan arriesga- Aborda consideraciones físicas, geográficas y científicas, que serán
da marcha, ecuatorianos y mexicanos celebraríamos, a las faldas del el deleite de todo lector antes de adentrarnos en los detalles y misión
volcán Cayambe y bajo el cielo enrojecido por el atardecer de octubre, de la expedición llena de información complementaria como la geolo-
el feliz hallazgo de esta expedición científica: el punto más alto en el gía, glaciología, clima, flora y fauna existentes. Sin pasar por alto, cla-
globo terráqueo por donde cruza la línea equinoccial. ro está, los tratados antropológicos para entender culturalmente a la
Sin embargo, este retorno al pie del volcán no era más que el inicio sociedad del lugar, así como acontecimientos históricos de las épocas
de otro largo camino por recorrer, como lo es el proseguir con la labor prehispánica, colonial y la moderna arqueoastronomía que se lleva a
para documentar científicamente lo descubierto. cabo en este país que, a decir de su autor, une los dos hemisferios
Registrar, interpretar e informar lo hallado es una labor intrínseca a terrestres.
todo descubrimiento e investigador, por lo que con ese mismo espíritu Estoy seguro de que todo lector quedará cautivado por la hazaña
de conquista y gloria que llevó a esculpir lo que parecía un sueño y enseñanzas de este libro, por lo que sólo me resta agradecer a Arturo
largamente preservado, y que no lo abandonó jamás, se ocupó inme- Montero por haberme pedido el prólogo de su obra, la que estoy
diata e intensamente, hasta alcanzar el volumen que hoy tenemos en seguro se insertará en niños y jóvenes ecuatorianos, como el antece-
nuestras manos. Una obra donde no se narran únicamente los hechos dente a su identidad territorial; y al mundo, como ejemplo de que el
ocurridos durante la expedición, ni sólo los puntos geográficos alcan- final de un camino no es otro que el principio de otro próximo a
zados, que serían suficientes para estimar su valor; sino que el autor empezar.
va aún mucho más lejos al investigar y recordarnos históricamente, el
conocimiento que se tenía desde hace más de dos milenios acerca del Enrique Aguilar Montalvo
ecuador terrestre. Pueblos de América.

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XIII

Prefacio
Los Andes equinocciales

L A REGIÓN DE LOSANDES EQUINOCCIALES, también conocida como el Valle de Quito, siempre se ha considerado
un centro generador de varios anhelos, sueños, mitos, leyendas y sobre todo, de desafíos relacionados con
el conocimiento y la ciencia; desde épocas prehispánicas, por lo que se ha llegado a conocer gracias a
varios testimonios de los cronistas tempranos de la Colonia. Esta singular región despertó uno de los
destinos más importantes, por no decir el más importante, para el imperio inca, quienes anhelaron la
conquista de este espacio por ser considerado más sagrado que el Cuzco. Según lo que interpretamos de
los escritos del Inca Garcilaso de la Vega (1609), quien afirma que por esa razón los incas reverenciaban
más las columnas quiteñas que las columnas cuzqueñas.
Juan Magnín, Cristóbal de Acuña, Fernando de Montesinos, Pedro de Cieza de León, entre otros cronis-
tas de la Colonia describen la geografía única en la que se asienta este Valle de Quito. Toda esta informa-
ción llegó a influenciar en el ambiente científico de diferente índole, atrayendo a innumerables explorado-
res entre los cuales, sin duda alguna, la más importante fue la expedición científica francesa del siglo XVIII ,
que gracias a la información geográfica de la región, decidieron escoger a los Andes equinocciales, en ese
entonces conocido por la Real Audiencia de Quito, como el único sitio recomendable para las expedicio-
nes geodésicas francesas, españolas y quiteñas. Esta misión tenía como objetivo la medición de un grado
del cuadrante terrestre en la línea equinoccial, para comprobar las dimensiones reales de la Tierra y dilu-
cidar, de una vez por todas, la gran discusión y polémica de esos tiempos que se generó entre el escolasti-
cismo francés y las teorías académicas de Inglaterra, con la teoría de Isaac Newton.
La Tierra es achatada en los polos, vitoreó Voltaire, en la época cuando la Ilustración entraba en auge,
y fueron estas ideas revolucionarias las que no sólo permitieron a la ciencia dar pasos hacia adelante,
también fueron la fragua de las primeras correrías revolucionarias de América, ideas importadas en parte
por las misiones geodésicas, y la posterior denominación de “Ecuador” para la república naciente, en el
siglo posterior.
Pero aquí cabe una pregunta: ¿por qué las misiones francesas decidieron viajar a estas tierras tan remo-
tas? teniendo en cuenta que la cercanía a Gabón, una colonia portuguesa y francesa, estaba más cercana al
océano Atlántico, y por ende, el viaje y las expediciones podían resultar más económicas.
La razón es muy simple: se debe a la geografía que brindan los Andes equinocciales, ya que es el único
sitio alrededor de la línea equinoccial, con más de 40 mil kilómetros alrededor del mundo donde se dispo-
ne de relieves montañosos que permiten una observación horizontal definida. Esta singularidad geográfi-
ca hace de los Andes equinocciales el mejor sitio del mundo para observaciones astronómicas horizonta-

PREFACIO
XIV

les y mediciones geodésicas y debido a esta orografía las misiones posicionamiento de la línea equinoccial en la Antigua Hacienda Gua-
geodésicas del siglo XVIII realizaron sus observaciones de montaña a chalá,1 donde se hospedó para realizar cálculos geodésicos. La Conda-
montaña, construyendo una red de triangulaciones trigonométricas mine dejó una inscripción de este posicionamiento de la misma manera,
que permitieron la medida de aproximadamente tres grados del meri- en una lápida de piedra, la cual sufrió muchos maltratos y sus inscripcio-
diano en el ecuador terrestre y obtener así de promedio el anhelado nes se borraron con el tiempo; ahora dicha lápida reposa en el Antiguo
grado del cuadrante terrestre. Observatorio Astronómico de la alameda en Quito. Desafortunadamen-
La influencia de aspectos naturales de los Andes equinocciales, pro- te, no se conoce la precisión lograda por este académico, ya que no
movió la inquietud de otros exploradores como Alphons Stübel, Edward existen registros exactos de dónde se encontraba dicha lápida.
Whimper y Alexander von Humboldt, quienes realizaron descripciones Son estas y otras inquietudes más las que motivan al autor de este
gráficas y escritas de diferentes índoles, desde aspectos medio-ambien- texto a emprender un desafío. La falta de hitos confiables en la ubica-
tales, como los diferentes pisos ecológicos, geológicos, minerales, botá- ción de la línea equinoccial recientemente ha sido resuelto, pues el
nicos, faunísticos e incluso de aspectos sociales y culturales. estudio cartográfico de la región hasta ese entonces se había realiza-
do con base en un datum geográfico tomado de una geoide de la Ca-
Cero grados latitud noa-Venezuela del año 1956, llamado PSAD 56, el cual no tiene relación
alguna con la geografía de los Andes, las respectivas cotas y su nexo
El conocimiento geográfico de la región tiene su curso; sin embargo, con el océano Pacífico. No debemos olvidar que en la década de 1990
existe un antecedente de connotaciones culturales, lo que hace única la aplicación de la tecnología satelital con el GPS y el datum más preci-
la influencia que la región ha tenido en el pasado, presente y para so hasta ese momento –utilizando el mismo WGS 84–, comenzaron a
siguientes generaciones de exploradores, el tener una comprensión y tener auge y fue así que en octubre de 1996, después de largas explora-
conciencia del paralelo cero o línea equinoccial o línea del ecuador ciones costeras, se logró el posicionamiento de la línea equinoccial
terrestre. Inquietud que parte no sólo del desafío de lograr su posicio- en la costa en la punta Coaque, a orillas del Pacífico. Posteriormente,
namiento con precisión, sino también de su alcance conceptual, su debido a la inquietud por desentrañar la astronomía antigua guardada
trascendencia para el pueblo en la cual se asienta y, por supuesto, en los Andes equinocciales, en el mes de junio de 1997 se consigió el
su significado. posicionamiento de la latitud cero en el sitio arqueológico sobre
Es posible que los astrónomos quitus, en la época pre-inca ya hubie- el monte llamado Catequilla. Y fue en febrero de 1998, guiado por esta
ran logrado este posicionamiento en la latitud cero sobre el monte Cate- pasión, cuando se logró el posicionamiento oficial de la línea equino-
quilla, pero aún queda por confirmar esta hipótesis, ya que no se han ccial en las islas Galápagos, específicamente en la isla Isabela, entre el
encontrado registros etnohistóricos que nos aclaren esta incógnita. Fue volcán Ecuador y el volcán Wolf.
en la época colonial cuando se comienzó a mencionar al paso de las No fue sino hasta el equinoccio de septiembre de 2007, cuando una
embarcaciones españolas en las costas de la región y del Pacífico, pero pequeña expedición conformada por Pablo Boada y Cristóbal Cobo,
no fue sino hasta la visita de las misiones francesas, que por parte de decidieron tratar de ubicar la latitud cero en la nieve. Este objetivo se
uno de sus miembros, el geodesta Charles Marie de La Condamine, que tornó aún más ambicioso al constatar tecnológicamente, gracias a la
se propuso la incursión hacia los Andes por la parte norte de la costa disponibilidad de Google Earth, que al navegar en Internet por la línea
de la Real Audiencia de Quito, exactamente en la ensenada de Coaque, equinoccial alrededor del mundo se confirmó lo que ya hace algunos
donde se aprovechó para medir su posicionamiento latitudinal y reali- años atrás suponíamos: que el único sitio en el mundo alrededor de la
zar uno de sus cometidos, el posicionar la línea equinoccial en la Punta
Gallinazo; ahí dejó una inscripción en una lápida de piedra en la playa
1
Cuando alguien pedía algo y no se lo concedían, el pedigüeño insistía y argumentaba “no
de la zona, evidencia que se ha perdido en el tiempo debido a la erosión te pido Guachalá”. Guachalá tenía fama de ser la hacienda más antigua e importante del
causada por las olas del mar. Unos meses más tarde logró su segundo Ecuador.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


XV

línea ecuador, donde ésta cruza por nieve y, posiblemente, por un captación del planeta, su desembocadura de 240 km de ancho dosifica
glaciar que es el Nevado Cayambe, ahora sólo debíamos constatarlo agua dulce y nutre el océano Atlántico hasta 320 km hacia fuera, apor-
empíricamente y el objetivo fue logrado. Al mismo tiempo, nos perca- tando 121 millones de litros por segundo y dosifica tres millones de
tamos de que la línea equinoccial también cruzaba por un glaciar ha- toneladas de sedimentos al día. Lo más interesante es que los mayores
cia el oriente de nuestro posicionamiento inicial. La aventura prosi- caudales que alimentan a este río equinoccial son los ríos del Ecua-
guió el año 2009, gracias a la conformación de la expedición Cero-cero, dor, como el Napo, Upano, Aguarico, Pastaza, Coca y muchos más. Así
iniciativa del expedicionario mexicano Ismael Arturo Montero García. como el Amazonas es el pulmón del mundo, los Andes equinocciales
son el corazón del mundo.
Cero-cero Del mismo modo, los ríos más importantes para el océano Pacífico
oriental, como el Guayas y Esmeraldas, nacen en los Andes equinoc-
Fue gracias a una pequeña pero fructífera visita de los amigos Enrique ciales reafirmando la condición del corazón del mundo. Y es justa-
Aguilar (ecuatoriano), Jesús Galindo Trejo (mexicano) y Arturo mente, el Glaciar Ecuador en el flanco sur del Nevado Cayambe, en la
Montero (mexicano), en mayo del 2009, que se sembró la inquietud, al latitud cero que presenta un divortium aquarum, donde además sus
comentarles que en la línea equinoccial, particularmente en el Neva- deshielos se enrumban hacia el oriente, al Amazonas y al Atlántico,
do Cayambe, existe un glaciar al cual no se había llegado, debido en por otro lado, parte de sus deshielos van al occidente, al Esmeraldas, y
gran parte a la falta de equipamiento. Sí, en efecto, era un sitio que al Pacífico, convirtiéndose en el eje medular del corazón del mundo.
jamás se había registrado, y peor aún, posicionado. Entonces se en- Es el sitio ideal para observar y medir la salud del planeta, ya que
cendió el desafío de buscarlo y encontrarlo. Fue así que la expedición todas las influencias de la naturaleza y del hombre en este sitio se
organizada y liderada por Montero en septiembre del mismo año, en presentan equivalentes. En el futuro este sitio deberá ser estudiado y
ocasión del equinoccio y aprovechando la celebración del Primer Con- monitoreado con especial atención por parte de la sociedad académi-
greso de Arqueoastronomía en el Ecuador, iniciativa del documentalista ca y científica internacional. Existe una razón muy simple para esta
Enrique Aguilar, se emprendió la expedición con 16 hermanos mexica- recomendación: el glaciar ecuatorial es el menos influenciado por los
nos, un español y cinco ecuatorianos. Expedición que duró un par de cambios extremos de los climas en las estaciones dadas por
semanas entre idas y venidas al campamento principal, la Hacienda los solsticios y equinoccios, por tanto, el comportamiento del glaciar
Guachalá, la cual fue la casa de la expedición Cero-cero. Una expedi- y su monitoreo es absolutamente más confiable que el estudio de
ción profesionalmente calificada, sobre todo con un excelente senti- glaciares en zonas boreales o australes.
do de compañerismo, buen humor y alegría. Lo que hasta ahora conocemos como el Ecuador, no solamente es
El objetivo fue conquistado el lunes 21 de septiembre, logrando un territorio pequeño, es un centro de convergencia y de evolución,
ubicar el Glaciar Ecuador, en una cota de 4 681 metros sobre el nivel del donde han tenido que correlacionarse varios factores que hacen de
mar, que comprende un extenso glaciar de oriente a occidente en el esta región el sitio más diverso del planeta por excelencia.
flanco sur del nevado el Corazón del Mundo. No existe ningún lugar sobre la Tierra que cumpla con tantas carac-
terísticas que singularizan a esta región como el centro: el Corazón del
EL CORAZÓN DEL MUNDO Mundo.

Encontrarnos en la latitud cero grados permite que podamos recibir E L Á GUILA Y EL C ÓNDOR
los rayos solares perpendicularmente y que la fotosíntesis sea más
efectiva, gracias a esto, la flora de esta región es tan exuberante. La El haber conquistado el glaciar más alto de la línea equinoccial de
cuenca del Amazonas es una resultante de esta región. El río Amazo- ninguna manera significa haber alcanzado el punto más alto de esta
nas nace en el volcán Mismi en Arequipa, Perú y es el río de más alta línea alrededor del mundo, porque resulta que en el lado occidental

PREFACIO
XVI

del glaciar apareció un peñasco 45 metros más alto que éste, por lo los alcances del ser humano por el bien de nuestra historia. Justamen-
tanto, teníamos ante nosotros otro desafío por alcanzar durante los te ese momento en el cual confirmamos que la línea equinoccial defi-
días posteriores. Fue el 27 de septiembre cuando dos grupos –uno nitivamente no es la línea que divide al mundo en dos hemisferios,
conformado por dos mexicanos y un español, y el otro conformado donde unos están sobre otros. No, nunca fue así. El mundo ni siquiera
por tres ecuatorianos– se encontraron exactamente en el paralelo cero, está dividido, posiblemente el ser humano sí lo esté. No obstante, este
sitio al que bautizamos como el Águila y el Cóndor, honrando a un encuentro nos debe alentar y motivar a luchar porque tengamos un
mito que dice: “Algún día el águila del norte se encontrará con el cón- concepto renovador de nuestra idea del mundo, del planeta, de nues-
dor andino y desde ese momento comienza un nuevo ciclo de vida con tra naturaleza y desde ese momento simplemente hemos escogido que
nuevas fronteras de esperanza y porvenir para América”. a nuestros hijos les transmitiremos lo que la misma naturaleza nos ha
Un mito es utópico, pero lo rescatable de este encuentro en el cual enseñado: que la línea equinoccial es la línea que une a los dos hemis-
el primer grupo logró llegar antes, subiendo por el lado sur y el segun- ferios para hacer un mundo.
do grupo bajando por el lado norte, es que la unidad, la amistad y los
buenos propósitos son los que deben prevalecer en la concordia de Cristóbal Cobo A.
Hacienda de Guachalá, agosto de 2010.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


XVII

Introducción
A FINALES DE NOVIEMBRE DE 2009 se publicó en uno de los semanarios de
mayor prestigio en México1 un artículo en cuyo encabezado se lee:
“Expedición descubre hito geográfico, sobre territorio inexplorado de
Ecuador.” Por cinco meses los trabajos de la Expedición cero grados
latitud, cero grados Celsius (0° / 0°C), fueron seguidos en medios
impresos, televisoras y radiodifusoras de Ecuador* y México. Desde
agosto, con los primeros reportajes sobre los preparativos, hasta un
año después, con la exposición montada en el Centro Cultural Mexicano
en Quito, conmemorando el Bicentenario de la Independencia de Méxi-
co, se ha prestado atención a esta empresa de autogestión, que para
algunos es la primera en su tipo que ha partido de México al extranje-
ro en la búsqueda de un punto extremo de la geografía mundial.
Sorprende que en pleno siglo XXI, cuando la moderna tecnología
nos mira desde el espacio, aún queden lugares por descubrir, enigmas
por desentrañar, y maravillas nunca antes vistas por compartir. La ex-
pedición ecuatoriano-mexicana alcanzó en septiembre de 2009 un si-
tio sin registro en los mapas, una tierra desconocida, un territorio que
no había sido explorado por el hombre: el descubrimiento del sitio a
más altitud en el globo terráqueo por donde cruza la línea ecuatorial.
Los avances realizados por colegas del Ecuador desde 2007, nos
llevaron a los Andes septentrionales. Estando allá, los 27 participan-
tes de ambas naciones y uno de nacionalidad española, nos dimos a la
tarea de determinar la posición y la altura de la trayectoria ecuatorial
sobre la ladera meridional del volcán Cayambe. La prospección sistemá-
tica del área utilizando un adecuado banco de datos cartográfico y el
manejo de instrumentos especializados, permitió que el 27 de septiem-
bre de 2009 se alcanzara el vértice del ecuador terrestre a 4 740 m/nm, a
este sitio le pusimos por nombre Arista del Águila y el Cóndor. *
Para comodidad del lector, utilizamos
Descubrir no es sólo llegar, implica dejar constancia de que se ha el siguiente criterio: Ecuador (con ma-
llegado. Escribir sobre el acontecimiento, saber con mayor o menor yúscula), es que nos referimos a la Repú-
blica del Ecuador; ecuador (con minús-
cula) cuando hablamos de la línea
1
Gerardo Yong, Siempre!, 22 de noviembre de 2009, pp. 66-65. geográfica.

INTRODUCCIÓN
XVIII

exactitud a dónde se ha llegado, medir, cartografiar pero, sobre todo, En el último y cuarto capítulo atendemos al Nevado Cayambe, las
informar. Por eso hemos tenido una intensa labor frente a los medios investigaciones toman las páginas del volumen: la naturaleza de la mon-
de comunicación, también nos hemos encargado de la difusión con taña y la cultura que se cultiva en sus laderas son las protagonistas.
seis exposiciones y una página en la Red Informática Mundial.2 Dentro Así pues, el ecuador partiendo del Cayambe es un espacio donde la
del área académica hemos preparado un simposio en la Universidad geografía universal es conmemorada y, con ello, los alcances del cono-
Iberoamericana, campus Ciudad de México, en abril de 2009. Pero lo cimiento humano, pues la noción de la línea ecuatorial es producto de
dicho, es esencial escribir, por eso este volumen se entrega dividido un proceso matemático, astronómico, geográfico y de exploración que
en cuatro capítulos. ha ocupado a la humanidad por varios siglos.
En el primero, el protagonista es el la línea ecuatorial, su historia Por todo esto, es motivo de satisfacción publicar este libro, cuando
abarca más de dos mil años, inicia cuando ingeniosos geómetras grie- la UNESCO ha declarado el 2010, Año Internacional de Acercamiento de las
gos determinaron que la tierra es redonda y, por tanto, su mitad es el Culturas, celebramos el Bicentenario de Ecuador (2009) y de México
ecuador, una historia que aún se sigue escribiendo, pero ahora desde (2010), así como el Año Internacional de la Astronomía (2009).
una plataforma para emprender viajes espaciales. El ecuador es algo Un proyecto como esta expedición realizada en un ambiente extre-
más que una línea imaginaria, la naturaleza de la Tierra así lo demues- madamente agreste, nunca es un trabajo individual. Como toda empre-
tra, de eso nos ocupamos también en este primer capítulo. sa humana diversa es un trabajo colectivo, que en este caso se ha
El segundo capítulo es la presentación al lector de la Expedición valido de la altruista participación de ciudadanos comprometidos con
0° / 0°C, quiénes somos, cómo nos organizamos y cómo lo hicimos. la intención de preservar el patrimonio cultural y natural del orbe.
En el tercer capítulo distraemos al lector con nuestro periplo, es un Reconozco la colaboración de investigadores, artistas y montañistas,
anecdotario de tenacidad y amistad que encontró, no obstante los en su esfuerzo por sumarse a este proyecto. Agradecemos también el
obstáculos técnicos propios del andinismo y las complicaciones del apoyo de familiares, amigos, patrocinadores, organizaciones civiles,
temporal amazónico-andino, un feliz término con el descubrimiento medios de comunicación, autoridades del gobierno de Ecuador, la
del vértice y de tres sitios más que nos parecen muy relevantes por su Embajada de la República del Ecuador en México, la Embajada de Méxi-
ubicación. co en Ecuador e instituciones académicas en ambos países.

Ismael Arturo Montero García


Quito, equinoccio de 2010.

Derecha: ladera sur del Nevado


Cayambe; destaca el área que corres-
2
En Internet con la publicación de la página <www.montero.org.mx/cayambe.htm> desde ponde al vértice del ecuador terrestre.
noviembre de 2009. Fotografía de Juan Rivera.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


…que el ecuador atraviesa la cima del Cayambe,
que puede considerarse como uno de esos monumentos eternos
por medio de los cuales ha señalado la Naturaleza las grandes divisiones del globo terrestre.
Alexander von Humboldt, 1878.
2
3

1. El ecuador
1.1 Apuntes históricos

Izquierda: fragmento del Mapamundi de


Diego Ribero (1529), se destaca la línea
C ONTINUAMENTE NOS ENCONTRAMOS
con el criterio de que el ecuador
misferios Norte y Sur. La trayecto-
ria del ecuador es perpendicular
equinoccial o ecuador. Escala gráfica en
leguas, 205 x 85 cm. Manuscrito a tinta y es una línea ficticia, un producto al eje de rotación, que encuentra
temple sobre pergamino. del imaginario geográfico que no en sus extremos a los polos Norte
Biblioteca Apostólica Vaticana, Ciudad logra una representación tangible. y Sur (fig. 1).
del Vaticano. En las siguientes páginas se con-
templan hechos históricos, políti-
cos y culturales que permiten
abordar la noción del ecuador te-
rrestre de manera más amplia.

1.1.1 IMAGO MUNDI 1

Si aceptamos como algunas cultu-


ras de la antigüedad que la Tierra
es plana y no redonda, entonces
no cabe entre nosotros el concep-
to de ecuador. Para lograr definir-
lo es necesario considerar que la
forma de la Tierra es esférica, de
tal suerte que el ecuador es la lí-
Fig. 1. El ecuador (del latín aequâtôris:
nea que divide por la mitad la su-
igualador) es el plano perpendicular al
perficie del planeta en dos partes eje de rotación del planeta, el cual pasa
iguales, que determinan así los he- por su centro.

1
Expresión en latín que se traduce al español como imagen del mundo. El término
históricamente aparece como título de la obra de Pierre d´Ailly (1410 dC), con la cual
Cristóbal Colón se encontró motivado, pues defendía la propuesta de una Tierra esférica.
4

Por estudios de arqueogeodesia 2 sabemos que el conocimiento de siempre es circular, sin importar cuán alta esté la Luna sobre el hori-
que la Tierra era redonda se compartía en Occidente desde siglos zonte. Aún más, midió de manera rudimentaria la curvatura observada
atrás. Incluso antes de que se hubiera circunnavegado el planeta, en los eclipses y llegó a la conclusión de que la Tierra debía ser entre
algunos ingeniosos geómetras griegos ya habían encontrado la ma- tres y cuatro veces mayor que la Luna, un resultado muy aproximado
nera de medir su circunferencia a partir de cálculos astronómicos al que hoy se acepta de 3.66 más.
sin equivocarse por mucho. Se ha conjeturado que la primera pro- Los contemporáneos de Aristóteles no sólo asumían la esfericidad
puesta de una tierra esférica fue de Pitágoras, durante el siglo VI aC, de la Tierra, sino que poseían la capacidad de calcular la latitud de
pero esa idea contradice el hecho de que la mayoría de los cualquier posición. Se valían de la observación del Sol para determi-
presocráticos pitagóricos consideraban que la tierra era plana. Tal nar la distancia angular entre un ecuador no conocido, pero matemá-
vez esta propuesta fue más aceptada doscientos años después con ticamente definido y un punto determinado. Ese logro se le atribuye al
Euxodo de Cnidos3 (ca. 390 - 337 aC) quien, a partir de la astronomía astrónomo Piteas, quien estableció la latitud de su nativa Massilia, la
matemática, introdujo un modelo de esfera celeste para comprender actual Marsella, que para entonces era una colonia griega, con un mí-
el movimiento de los planetas, las estrellas, el Sol, y la Luna; valién- nimo error de 43° 03´ en lugar de 43° 17´ (Roller, 2006).
dose de una esfera homocéntrica le era posible conocer la posición La circunferencia de la Tierra fue calculada para el año 240 aC por
de cualquier objeto en el firmamento (Thrower, 2008:19). Su propues- Eratóstenes de Cirene, quien procedió a medir la longitud de su cir-
ta cosmológica afirmaba que la Tierra era el centro del universo y cunferencia máxima de la siguiente manera: se había enterado de que
que el resto de los cuerpos celestes la rodeaban, fijados a un total de el día del solsticio de verano, que se origina el 21 de junio, el Sol caía
27 esferas reunidas en siete grupos. En este modelo se basó Aristóteles al mediodía verticalmente, sin producir sombra sobre la ciudad egip-
(siglo IV aC) para desarrollar sus estimaciones cosmológicas; en su cia de Siena, hoy Asuán. Mientras que en Alejandría, donde Eratóste-
obra De Caelo, ofrece una explicación razonada de por qué la Tierra nes residía, los rayos solares daban, el mismo día y a la misma hora,
es una esfera, y cita un valor para su circunferencia, que algunos una sombra correspondiente a un ángulo de siete grados (fig. 2). Él
consideran se debe al mismo Euxodo. suponía, correctamente, que el Sol está muy lejos y que sus rayos, por
Aristóteles argumenta a favor de la esfericidad, no sólo de la Tierra, tanto, son paralelos al llegar a la Tierra. El ángulo de siete grados sig-
sino de todo el universo y los astros, así como la dependencia de sus nifica que la superficie terrestre entre Siena y Alejandría está curvada.
movimientos; en los últimos capítulos de su Libro I se dedica a caracte- Considerando que la distancia entre ambas ciudades es de cinco mil
rizar la Tierra como esférica e inmóvil por su ubicación en el centro estadios (unos 785 kilómetros), la solución al problema se resuelve
del cosmos y presenta como evidencias sus observaciones, apuntan- con una regla de tres: si a un ángulo de siete grados le corresponden
do que los viajeros que se dirigen hacia el sur ven las constelaciones cinco mil estadios, a la circunferencia entera de 360 grados le equiva-
de ese hemisferio subir su posición en el firmamento, lo cual sólo es len 257 143 estadios, unos 40 371 kilómetros, asombrosamente cerca-
posible si dicho horizonte se encuentra formando un ángulo con res- na a la actualmente aceptada para el ecuador terrestre de 40 075 kiló-
pecto al horizonte de alguien ubicado más al norte. Por lo tanto, la metros (Gallo y Anfossi, 1973).
forma de la Tierra no podía ser plana. Además, el borde de la sombra En el continente americano, tampoco pasó desapercibido el fenó-
de la Tierra en la Luna, durante la fase parcial de un eclipse lunar meno de la ausencia de sombra al mediodía durante el solsticio de
verano en la latitud que corresponde al plano de la eclíptica.4 El sitio
arqueológico de Alta Vista permite esta conjetura, pues se construyó
2
Arqueogeodesia, término propuesto por James Q. Jacobs a finales del siglo pasado, para un centro ceremonial de tradición teotihuacana durante el periodo
el estudio que incluye la determinación de la posición de lugares, la navegación, la
astronomía, la medición y la representación de la Tierra en tiempos antiguos. Clásico (siglo V dC) dispuesto en alineamientos de astronomía solar, lo
3 Cnidos actualmente es una localidad que se encuentra en territorio de Turquía. Euxodo
4
fue discípulo de Platón. Línea imaginaria a través de la cual viaja el Sol durante un año.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


5

Alejandría, se proyecta una sombra que


forma un ángulo de 7°.

Figura 2. La circunferencia de la Tierra fue calculada hacia el año 240 aC por


Siena, no se proyecta sombra alguna.
Eratóstenes de Cirene comparando la diferencia en la sombra proyectada al medio
día durante el solsticio de verano en latitudes diferentes.

cual se supone fue significativo Tierra era plana; utilizando para los astros, de la ascensión recta y meridianos y paralelos, con lo cual
para los sacerdotes y astrónomos ello un gnomon a la manera de un de la declinación para ofrecer un se dio inició a la cartografía basa-
dedicados a observar el aparente reloj solar. Por cierto, los chinos método por medio del cual se po- da en el posicionamiento astronó-
movimiento del Sol. Siena en Egip- denominaban al ecuador celeste día determinar con más exactitud mico. En tanto a Eratóstenes se
to, y Alta Vista en México, se alzan Chia Dao, traducido como el Ca- la posición de los puntos geográ- debe la esfera armilar (fig. 3) que
sobre el trópico de Cáncer. mino rojo, y a partir de éste deter- ficos con su longitud y latitud. vino a suplir la dioptra que data
En Asia los chinos realizaron minaban la latitud de los astros Con referencia a los instrumentos del siglo III aC.
una medición similar a la de Era- (véase Cullen, 1996 y Swetz et al., utilizados en estas observaciones, La trascendencia de Hiparco es
tóstenes, en el tratado matemáti- 1995:57). para algunos a Hiparco se debe la relevante, pues los astrónomos
co conocido como el Zhou bi Los avances de Eratóstenes fue- invención del astrolabio, herra- hindúes conocían su obra. Así que
Suanjing, del siglo I aC, ahí la som- ron incrementados durante el si- mienta que se utilizó para escudri- en algún momento entre los años
bra fue estudiada para medir la dis- glo II aC por Hiparco de Nicea, ñar el cielo y precisar las coorde- 150 aC y 140 dC ocurrió una im-
tancia al Sol, pero asumían que la quien se valió de la posición de nadas de los mapas definiendo portante difusión cultural desde

EL ECUADOR
6

Occidente, que posterior al año este periodo, la Tierra se solía con-


664 dC se perdió, como resultado siderar dividida en zonas cli-
de las invasiones musulmanas. máticas, con una temperatura fría
Cabe mencionar que en su en los polos Norte y Sur, un mortal
Magnum opus, el astrónomo hindú clima tórrido cerca del ecuador, y
Aryabhatiya (476 - 550 dC), descri- un suave y habitable clima
be una Tierra esférica, pero va más temperado entre ambos. Se pensa-
allá, pues da cuenta de que es ló- ba que las distintas temperaturas
gico pensar: si ves muchos objetos en las regiones dependían de su
moverse juntos, el que se mueve distancia al Sol, suponían que na-
eres tú. En sus propias palabras: die podía cruzar la línea del clima
Al igual que un hombre en un bote tórrido en el ecuador, y que alcan-
ve los objetos estacionarios mover- zar las tierras de la otra mitad del
se hacia atrás, los habitantes de globo (hemisferio Sur) era imposi-
Lañkâ (el ecuador, hoy Sri Lanka) ble; esas tierras ecuatoriales,
ven las estrellas moverse justo ha- inhóspitas y sus habitantes fueron
cia el oeste (Balachandra, 2000: 82). llamados antípodas. Tito Lucrecio
De estas líneas nos resulta por Caro se opuso al concepto de una
igual que hindúes y griegos con- Tierra esférica, porque encontra-
cebían un ecuador terrestre, el ba absurda la idea de las antípo-
cual sólo era percibido por sus das, proponía una Tierra plana con-
nociones de astronomía y no por- tenida en una esfera celeste (Hiatt,
que físicamente se hubiera alcan- 2002).
Figura 3. Esfera armilar, instrumento as-
tronómico antiguo que muestra las divi- zado dicha latitud. La idea de una Tierra esférica
siones principales de los cielos y el mo- Para el siglo I dC, Plinio el Viejo dividida en regiones climáticas
vimiento de los cuerpos celestes. Está se consideraba en posición de afir- perduró, y en el siglo IV dC se hizo
formada por anillos graduados que re- mar que todo el mundo estaba de manifiesta en la proyección de
presentan los círculos celestes esencia-
les, como el meridiano celeste, el ecua- acuerdo en la propuesta de la for- Macrobius Theodosius, el mundo
dor celeste, la eclíptica, los trópicos y ma esférica de la Tierra, no obs- habitado al norte del ecuador es
los coluros (círculos que se cortan en los tante que entre sus contemporá- equilibrado por un continente al
polos formando ángulos rectos). Este ins- neos se mantenían disputas acerca sur que corresponde a las Antípo-
trumento fue inventado aproximadamen-
te en el 255 aC por Eratóstenes. Las esfe-
de la naturaleza de las antípo- das, ambos continentes son divi-
ras armilares se utilizaron hasta el siglo das, 5 y cómo era posible mantener didos en el ecuador por una fran-
XVII. el océano formando una curva. En ja marítima denominada Alveus
forma muy interesante, Plinio con- oceani (fig. 4). La proyección de
sidera, como “teoría intermedia”, Macrobius está efectuada desde la
5
la posibilidad de una esfera im- vertical al ecuador; por lo cual, el
Se dice de cualquier habitante del globo
terrestre con respecto a otro que more
perfecta, “con forma de piña” orbis terrarum o mundo conocido,
en un lugar diametralmente opuesto. (Naturalis Historia, 2.65). Durante situado geográficamente en la

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


7

parte boreal o norte, aparece en la mitad superior del mapa, y en los que resulta difícil decir si son hombres o bestias, según la expresión
la parte austral o sur, aparece dibujada la terra incognita o alter orbis 6 del bienaventurado Agustín.
de los antípodas postulado por exigencias cosmográficas. Sin embargo,
los macrobianos medievales, conservando más o menos la circularidad, Una mezcla de realidad y fantasía se apoderó del imaginario Occiden-
se las arreglan para eliminar totalmente la parte austral, limitándose a tal para explicarse un mundo que les era desconocido, los mapas se
representar sólo la boreal donde se encuentra el orbis terrarum. Ello lo ilustraron con seres fantásticos en las regiones equinocciales,7 con
consiguen haciendo coincidir la circunferencia que cierra el círculo alegorías de serpientes marinas, dragones flotantes y seres voladores
con la línea ecuatorial. Su punto de proyección, por tanto, no es la extraordinarios como el Ave Roc,8 pero entre los seres más destacados
línea ecuatorial, sino desde lo que consideraban ser el centro geográ- tenemos a los esciápodas, los habitantes de la región cercana al ecua-
fico del mismo orbis terrarum, esto es, la vertical de Jerusalén, como dor. Se caracterizaban por ser criaturas muy ágiles, rápidas y veloces
veremos páginas adelante con el Planisferio de Cantino (fig. 7). Las ideas en la carrera, todo ello a pesar de estar dotadas de una sola pierna de
de Macrobius influirán a los cristianos a través de san Isidro desde el rodilla rígida y un único y enorme pie. Los griegos les dieron el nombre
siglo VII , y en los musulmanes, a partir del siglo IX (Pérez, 1989: 64). de sciápoda, que significa “a la sombra del pie”, porque cuando el Sol
Las Antípodas plantearon entonces un enigma: ¿existen o no, y bajo apretaba en esas regiones tan insoladas el gran calor hacía la vida casi
qué forma? Porque en palabras de Macrobius “una de ellas habitada imposible, se tumbaban de espaldas en el suelo y utilizaban su único y
por nosotros; la otra por hombres de especie desconocida” Pierre formidable pie como sombrilla (fig. 5). Plinio el Viejo habló de ellos en
d´Ailly (cit. por Kappler, 2004: 45) resume esta opinión:

Ptolomeo, Haly y otros antiguos autores pretendían que en esas dos


regiones extremas hay hombres salvajes antropófagos, de rostro disfor-
me y horrible. Haly atribuye este hecho a la distribución desigual del
calor y del frío en dichas regiones, causa de complexiones anormales y
de espantosas deformaciones, causa también de la perversión de cos-
tumbres y de la imperfección grosera del lenguaje: se trata de seres de

Figura 5. Un esciápoda en una ilustra-


ción renacentista, según el Catalogo dei
manoscritti di Ulisse Aldrovandi, conser-
Figura 4. Reproducción tardía del si- vado en la Biblioteca de Bolonia. Tam-
glo I X dC, de un mapamundi de bién denominados: sciápodas, sciapodi,
Macrobius Theodosius (IV- V d. C.). Se sciápodos, skiòpodes, monoclos, y
destacan en rojo las zonas cálidas del unípodos.
planeta, en blanco las templadas y en
azul las frías, tal y como desde los 6
Las palabras alter orbis se traducen de modo natural como “el otro mundo”.
griegos antiguos se venía aceptado. 7
Paris, Bibliothque Nationale de Equinoccial como sinónimo de ecuatorial, por hallarse el Sol sobre el ecuador durante
los equinoccios de primavera y otoño.
France, MS lat. 6370, fol. 89v.
Appendix 1, no. 1. 8 Sobre estos seres, véase El libro de los seres imaginarios, de Jorge Luis Borges, 2007.

EL ECUADOR
8

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


9

Figura 6. En el Renacimiento se realiza- su Naturalis Historia, incluso san idea de trazar una cuadrícula en sugiriendo una proyección de
ron múltiples reconstrucciones de los Agustín los aceptó como hijos de las cartas de navegación. Sin res- compromiso, en donde los meri-
mapas de Ptolomeo. Esta carta de 1482
es una copia de Johannes de Armsshein. Adán y Eva, san Isidro los incluyó tarle mérito a Marinus, el trabajo dianos podrían establecerse como
Aquí se destacan tres líneas rojas que en el libro XI –Acerca del hombre y de Ptolomeo es trascendental por- líneas rectas equidistantes al ecua-
atraviesan el mundo conocido o Ecúmene, seres prodigiosos– de sus Etimolo- que incorpora en una proyección dor y convergían en un punto co-
son los trópicos de Cáncer y Capricornio gías. El espacio propio de estas cria- esférica un sistema de latitud, lon- mún en el Polo Norte. Los parale-
en los extremos, por en medio la línea
del ecuador terrestre, el Circulus Æqui-
turas míticas y prodigiosas estuvo gitud, y climas (Snyder, 1993: 5-8). los, sin embargo, se establecían
noctialis. Llama la atención la ubicación siempre en la periferia del mundo De tal suerte que no es aventura- como arcos de círculos tenien-
de las fuentes del Nilo, diez grados al conocido y no es extraño encon- do consentir que el concepto con- do como centro común también el
sur del ecuador, actualmente sabemos trarlas representadas en los mapas temporáneo de ecuador se origi- Polo Norte. Sus escritos se convir-
que están justo sobre él. Lo que parece
ser un hecho incontrovertible es que
medievales. Pero el mito de las ra- ne en los mapas de Ptolomeo, tieron en la base de la astronomía
hace 1 800 años Ptolomeo conocía su po- zas humanas monstruosas se pro- quien al medir la latitud tomó europea durante la Edad Media,
sición, probablemente a raíz de relatos longó en el tiempo más allá de la como referencia el ecuador terres- aunque en la antigüedad tardía y
de viajeros, principalmente griegos, que Edad Media. Durante el Renaci- tre, y que por cierto no constitu- la Alta Edad Media se vieron argu-
recorrieron el área con amplios conoci-
miento, una época particularmen- yó una elección arbitraria sino mentos ocasionales en favor de
mientos geográficos para registrar la la-
titud. te fascinada por lo prodigioso, las derivada de astrónomos ante- una Tierra plana (Brown, 1979:
fronteras del mundo conocido se riores quienes, a su vez, lo obtu- 69). 11 Actualmente, el ecuador es
ampliaron tanto, que estas criatu- vieron por la observación del mo- el plano fundamental que se adop-
ras míticas cambiaron de continen- vimiento de los cuerpos celestes, ta en la astronomía y en la geogra-
te y se trasladaron a las nuevas e basados en que tanto el Sol, como fía para realizar cálculos de posi-
ignotas tierras de América y a las los demás astros que cruzaban ción, tanto en el cielo como en la
de un hipotético continente aus- aquella línea imaginaria lo hacen superficie del planeta; la latitud
tral (Kappler, 2004: 141).9 exactamente por su cenit a 90° de del ecuador es por definición 0
Más allá de los mitos antiguos, altura, lo cual los llevó a conside- grados.
la cartografía del siglo II dC, desta- rar que se trataba de la cintura del El cuidado de los eruditos ára-
ca por las aportaciones geográfi- globo terrestre. Ptolomeo conci- bes a los trabajos e instrumen-
cas y astronómicas de Claudio bió por tanto al ecuador como un tos de los geógrafos y astrónomos
Ptolomeo en el trazado de un círculo máximo de origen astronó- griegos permitió que este acervo
mapa innovador (fig. 6), aunque mico en el cual podría basar la me- llegara hasta nuestros días, ellos
para algunos se valió del trabajo dición matemática de las latitudes. preservaron mapas y documentos,
de Marinus de Tiro,10 un fenicio del En sus mapas mantenía una apa- y en algunos casos hasta renova-
siglo I dC al que se le ocurrió la riencia de esféricas proporciones ron ciertas herramientas, como es
el caso del sextante de Ptolomeo,
9
que posteriormente sería perfec-
Véase también en línea <http://valdeperrillos.com/books/pasos-perdidos/-libro-mons-
truos/-pueblos-monstruosos-razas-extraordinarias/diccionario-monstr-1> cionado por los portugueses. El
10 Claudio Ptolomeo asegura ser su inventor en torno al año 100 dC.
sextante constituyó durante si-
11
glos el precursor del octante, el
El error moderno que considera que la cultura de la Edad Media aceptaba unánimemen-
te que la Tierra era plana se introdujo por primera vez en el imaginario popular durante cual hizo su aparición hasta el si-
el siglo XIX . glo XVIII. Referente a la geografía

EL ECUADOR
10

Figura 7. Planisferio de Cantino, 1502.


Fuente: Biblioteca Estense, Módena, Ita-
lia.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


11

EL ECUADOR
12

árabe, Muhammad al-Idrisi elabo- Mundo: Castilla y Portugal, ya se están interpretadas según la con- rio, y arriesgándose por un mar que
ró su atlas Tabula Rogeriana en habían repartido lo que intuían cepción ptolemaica del mundo, lo no pertenecía al ámbito de sus
1154 dC, donde incorpora el Áfri- era el planeta. Vasco de Gama, al cual informa sobre la autoridad y dominios. Espacios y cielos leja-
ca conocida, el océano Índico y partir hacia el Oriente por segun- la influencia árabe en temas náu- nos nunca vistos por Occidente
parcialmente el Extremo Oriente, da vez, aseguraba la ruta hacia la ticos, incluso en una época en que aparecen en los versos de La Di-
compilando así la información de India; y Américo Vespucio regre- los navegantes portugueses ya co- vina Comedia, ofreciendo una ex-
los comerciantes y exploradores saba a Lisboa después de haber nocían las costas. Cabe pensar, por traña mezcla de concepción tradi-
árabes, junto con la heredada de navegado hasta el Río de la Plata lo tanto, que Occidente se servía cional –preconcebida– y una
los geógrafos clásicos para crear y la Patagonia, siguiendo la actual ya de los conocimientos de los pi- innovadora Imago mundi. Las cua-
el mapa más exacto del mundo de costa brasileña. Cualquier nave- lotos, cartógrafos y navegantes de tro estrellas de las que habla
su tiempo, el cual mantuvo vi- gante experto podía observar que las costas índicas (Soler, 2002). Dante corresponden, desde el
gencia hasta el siglo XV (Tous, 1996: en el planisferio de Cantino apa- En el Cantino, las costas de Áfri- simbolismo medieval, a las cuatro
14). recía una extraña mezcla de infor- ca aparecen meticulosamente virtudes: prudencia, justicia, for-
A principios del siglo XVI, el ita- maciones, conocimientos geográ- detalladas en sus contornos oceá- taleza y templanza. Son también
liano Alberto Cantino compró en ficos y técnicas de navegación. Es nicos, demuestran una férrea vo- las cuatro estrellas que dibujan la
Lisboa el planisferio de un cartó- un documento en el que persisten luntad de representación de la rea- Cruz del Sur observada en latitu-
grafo desconocido, fechado en espacios tratados según los pro- lidad, muestra en su interior la des australes. La estrella Polar
1502 para el duque de Ferrara. cedimientos de navegación esti- persistencia de concepciones fan- marca el camino del mundo cono-
En el documento, la imagen del mada, que los primeros portu- tásticas del espacio incógnito, cido, en tanto que la Cruz del Sur,
mundo empezaba a aproximarse a lanos 12 habían establecido –esto mezcla de la idea ptolomaica del el mundo desconocido y por ex-
la realidad. La carta concentraba se comprueba en el tratamiento mundo y de la interpretación me- plorar. Este criterio de un norte
el saber occidental del mundo que recibe el Mediterráneo, el dieval de éste. La prueba más con- conocido y un sur por descubrir
yuxtaponiendo, sin perspectiva Atlántico Norte y las islas descu- tundente del medievalismo del conduce a una reflexión geográ-
histórica, la concepción geográfi- biertas por Cristóbal Colón– y al Cantino es que Jerusalén se repre- fica y cosmológica donde el ecua-
ca del pensamiento clásico, la re- mismo tiempo presenta, por pri- senta todavía en el lugar preferen- dor divide al mundo en dos he-
presentación simbólica medieval mera vez en una carta náutica, las te y central del mapa. La novedad misferios como lo afirmaba la
y la lectura renacentista del espa- líneas del ecuador y de los trópi- del planisferio es América, desta- concepción clásica del espacio: en
cio ya conocido. Cuando se fechó cos, lo cual indica que los nave- cando las delimitaciones del Tra- el hemisferio Norte se situó el
el planisferio que compró Cantino, gantes ya sabían situarse en el tado de Tordesillas. mundo conocido, Occidente,
hacía diez años que el cosmógra- océano mediante el cálculo de la- Para Soler (2002), el Planisferio el mundo cristiano; y el hemisfe-
fo alemán Martín Behaimn había titudes y no se limitaban única- de Cantino es una metáfora que re- rio Sur se destinó a lo desconoci-
construido el primer mapamundi mente a rumbos y distancias. El presenta, al mismo tiempo, al do, sobre todo a lo infiel, es decir,
esférico en la historia de la carto- Cantino (fig. 7), asimismo, ofrece hombre que parte y al hombre que todo aquello que no pertenecía al
grafía. Desde aquel momento, y a datos y representaciones geográ- regresa del viaje. El mapa demues- catolicismo. Esta idea se arraigó
lo largo de una década, el mundo ficas de zonas orientales que no tra que los navegantes empezaban de tal manera que aún era persis-
y la manera de pensar en él cam- a dominar las rutas que los lleva- tente en las mentalidades del si-
biaron ostensiblemente. En 1502, ron hasta el otro lado del mundo, glo XVIII, el siglo de los grandes via-
12
España ya había entendido que Portulano, colección de planos de va- orientándose en un cielo desco- jes europeos a Australia, cuando
rios puertos, encuadernada en forma de
las Indias de Colón eran el Nuevo atlas. nocido desde su propio hemisfe- todavía no se podía aceptar que

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


13

ese fuera el único continente del planeta que perteneciera en su tota-


lidad al hemisferio Sur: la mayor parte del territorio africano se en-
cuentra al norte del ecuador y ni siquiera Sudamérica se halla plena-
mente en este hemisferio.
A mediados del siglo XVI, la cartografía abandona la tradición ptole-
maica y medieval con Gerardus Mercator. En sus mapas, Mercator plas-
ma los avances científicos y técnicos del Renacimiento, en convergen-
cia con las necesidades prácticas de la navegación. En 1569 elaboró
un mapamundi, en el cual empleó la que desde entonces se conoce
como proyección de Mercator: una solución consistente en represen-
tar la superficie terrestre proyectada sobre un cilindro tangente al
planeta por el ecuador,13 distorsionando desmesuradamente las áreas
cercanas a los polos, a fin de lograr que los meridianos aparezcan como
líneas rectas verticales que corten a los paralelos en ángulo recto. Es
necesario apuntar que este tipo de proyección también se alcanzó en
Oriente, independientemente de los conocimientos occidentales, pues
en el libro del Xin Yi Xiang Fa Yao, publicado en 1092 por el científico
chino Su Song (fig. 8) hay una carta astronómica con una proyección
cilíndrica que hoy reconoceríamos como del tipo Mercator (Needham,
1995: 227 y 569).
Con mapas más confiables y reales como el mapamundi de Mercator
(fig. 9) se concretó la era de los descubrimientos que abarcó los siglos Figura 8. En el Xin Yi Xiang Fa Yao del año
1092 dC, se representan 14 constelacio-
xv al XVII. Durante esa época, los navíos que surcaron los mares del nes en una proyección que hoy denomi-
mundo alcanzaron por fin el ecuador, descubrieron naciones y carto- namos de Mercator. El ecuador celeste
grafiaron territorios. Afrontaron la navegación oceánica con medios está representado por la línea recta ho-
precarios, pues no podían determinar con precisión la longitud, sus rizontal que atraviesa el mapa estelar
por la mitad.
naves eran inseguras, y las condiciones de vida a bordo eran malas.
Sin embargo, impulsados por la economía, y para acrecentar territo-
rios se realizaron expediciones que ensancharon el mundo conocido.
Su historia está en los mapas, pues en palabras de Mercator, “los ma-
pas son los ojos de la historia”. Para finales del siglo XIX quedaba por
explorar alrededor de 5 % de la superficie terrestre; actualmente, con
ayuda de los satélites artificiales y el uso de técnicas geodésicas,
fotogramétricas y de fotointerpretación, la exploración de la Tierra
está casi en su totalidad realizada. Hasta estas líneas, hemos presentado un ecuador imaginado,
porque para quienes así lo describieron era un territorio desconoci-
13
do, que sólo se explicaba deductivamente por teorías en los mapas.
Tiene la ventaja de que la distancia más corta entre dos puntos en el globo (círculo
máximo) viene representada como una línea recta, una loxodromia, por ello, esta pro-
Corresponde al siguiente apartado mostrar el encuentro efectivo y
yección se sigue utilizando hoy en día para navegar. consciente entre el hombre y el ecuador terrestre.

EL ECUADOR
14

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


15

Figura 9. Theatrum Orbis 1.1.2 A LCANZANDO EL CÍRCULO ECUATORIAL este viaje fenicio encargado por que empezó a abrirse desde el
Terrarum, del año de el faraón Necao II, alrededor del Nilo, despachó en unas naves a
1570 de Abraham Orte-
lius, considerado el pri- La especie humana ocupa el pla- siglo VII aC, hay un dato que apor- ciertos fenicios, dándoles orden
mer atlas moderno por neta entero desde hace miles de ta Heródoto, que más que incier- que volviesen por las columnas
aplicar la proyección años, vivió en las tierras equinoc- to, ofrece veracidad al relato al ver de Hércules (estrecho de Gibral-
de Mercator. ciales del ecuador desde tiempos el Sol de mediodía al norte: 14 tar) al mar Boreal o Mediterrá-
inmemoriales; es más, procesos neo hasta llegar al Egipto. Salien-
significativos de la hominización La Libia (África) se presenta a los do, pues, los fenicios del mar
se desarrollaron en regiones pró- ojos en verdad como rodeada de Eritreo, iban navegando por el
ximas al ecuador en África. Por lo mar, menos por aquel trecho por mar del Noto: durante el tiempo
cual parece ocioso determinar donde linda con el Asia. Este des- de su navegación, así que venía
cuándo el hombre cruzó la línea cubrimiento se debe a Neco, rey el otoño salían a tierra en cual-
ecuatorial por primera ocasión, de Egipto (faraón Necao II, pro- quier costa de Libia que les co-
pues éste fue su hábitat original. clamado en 610 aC) que fue el giese, y allí hacían sus semente-
Por tanto, a este apartado encarga- primero, a lo que yo sepa, en man- ras y esperaban hasta la siega.
mos la atención no al encuentro dar hacer la averiguación, pues Recogida su cosecha, navegaban
casual, sino al descubrimiento ca- habiendo alzado por aquel canal otra vez; de suerte que, pasados
bal de la latitud 0.
Por el Mapamundi de Ptolomeo
de hace 1800 años (fig. 6), deduci-
mos que en la antigüedad viajeros
y comerciantes griegos, fenicios o
egipcios alcanzaron el ecuador,
ciertos de esa latitud. De alguna
forma calcularon su posición, po-
siblemente al igual que lo hizo en
su momento Eratóstenes, valién-
dose del paso cenital del Sol para
el día equinoccial (fig. 2). Dos ru-
tas son posibles: una a través del
Nilo, como lo ilustra Ptolomeo al
mostrar las fuentes de este río; la
otra, por la circunnavegación de
África, de la cual hay constancia
por un relato egipcio mencio-
nado por el historiador griego
Figura 10. Reconstrucción del Oikoumene
Heródoto (fig. 10), aunque no se 14
Esto sólo se pudo comprender hasta el
siglo X V I con el mapa planetario de basado en la descripción de Heródo-
dispone de documentación de la Copérnico. Véase p. 46, sobre el ecuador to (siglo V aC), con África (Libia) rodea-
época que avale la historicidad de celeste. da de mar.

EL ECUADOR
16

así dos años, al tercero, doblando por las columnas de Hércules, llega-
ron al Egipto, y referían lo que a mí no se me hará creíble, aunque
acaso lo sea para algún otro, a saber, que navegando alrededor de la
Libia tenían el Sol a mano derecha. Este fue el modo como la primera
vez se hizo tal descubrimiento.
Heródoto, Los nueve libros de la Historia, IV, XLII.

Acaso la empresa del faraón Necao II abrió la posibilidad de que el


golfo de Guinea fuera explorado posteriormente por Hannón, 15 un ge-
neral cartaginés que realizó su travesía bordeando las costas de África
hacia finales del siglo VI aC o comienzos del siglo v aC Hannón tenía la
intensión de fundar varias colonias, al parecer se adentró en el río
Senegal y en el río Gambia, estas experiencias quedaron reflejadas a
su regreso a Cartago en una tablilla que dejó como testimonio en el
templo de Cronos (Gozalbes, 2003:59). Posteriormente, este grabado
se tradujo al griego con el nombre de Periplus,16 la historia era también
conocida por Plinio el Viejo y por Flavio Arriano (siglo II dC) quien la
menciona al final de su Anábasis de Alejandro VIII.
Una transcripción bizantina de esta exploración ha llegado hasta
nuestros días en el Codex Heidelbergensis 398, editado por Segismundo
Gelenius (fig. 11). De este periplo algunos especialistas deducen que
Hannón pudo alcanzar la región ecuatorial, porque describe caracte-
rísticas del golfo de Guinea como las erupciones del Monte Camerún
que los nativos denominaban Mongana-loba (Montaña de los dioses),
y de la fauna que para ellos era extraordinaria y que especulativamente
se identifica con los gorilas. En la literatura especializada en geografía
histórica la discusión sobre la identificación de los sitios descritos
por Hannón no encuentra consenso (véase Mederos y Escribano, 2000).
Ya sea que el texto sea apócrifo, interpolado o auténtico, no se des-
carta la posibilidad de navegaciones antiguas por el África ecuatorial,
pues se dispone de evidencias arqueológicas con la presencia de
monedas del Mediterráneo del siglo IV al III aC distribuidas por la re-
gión (ibidem, p. 92), esto nos invita a imaginar si la isla de Hespérides
descrita por Hannón es la actual Santo Tomé; sucede que para los grie-

15
Véase detalles sobre el viaje de Hannón en http://www.metrum.org/mapping/hanno.htm
Figura 11. El Codex Heidelbergensis 398, Basilea (1533), es una copia de un 16 Un periplo era un documento manuscrito donde se enumeran, en orden, los puertos y
documento del siglo X dC que relata el periplo de Hannón por la costa lugares costeros, con distancias aproximadas, que el capitán de un buque podría espe-
africana para el siglo v aC. rar encontrar a lo largo de la costa (Kish, 1978:21).

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


17

gos las Hespérides se manifiestan aceptamos, como ya hemos visto


como estrellas, 17 y no sería aven- páginas atrás, que para el siglo v
turado considerar que el nombre dC el astrónomo Aryabhatiya sitúa
se derivó del asombro que signifi- el ecuador en Lañkâ (Sri Lanka),18
có para esos navegantes una bó- a estas tierras no pudieron llegar
veda celeste diferente. La descrip- sino navegando con instrumentos
ción que Hannón elaboró del básicos que permitieran calcular
amanecer y la configuración de las su latitud, así que les fue posible
estrellas del cielo, fue criticada en alcanzar el ecuador al SW de Sri
la antigüedad por los geógrafos Lanka (Ceilán), siguiendo una tra-
griegos que encontraron absurda vesía interinsular por las islas
e imposible tal descripción, pero Maldivas (Balachandra, 2000:
podría ser determinante para acre- 137).
ditar si alcanzó o no el ecuador. La navegación árabe se inició
Hannón describe que la navega- a partir del año 650 dC con la ex-
ción hacia el sur encontraba resis- pansión islámica surcando con
tencia, lo cual es congruente, pues sus naves las rutas comerciales
es de suponerse que se enfrentó a hacia el Occidente; su destreza Figura 12. Mapa hemisférico árabe de 1728 realizado por Ibrahim Müteferrika,
lo que hoy se conoce como la co- náutica para determinar la latitud Cambridge University Library.
rriente de Benguela. El interés de dependía de métodos estelares
Hannón, fue compartido por su basados en la trigonometría
contemporáneo persa Sataspes, esférica de gran relevancia para Estrella Polar (Al-jah), y cuando en 1408, y Ceilán para 1411. Llega-
quien por encargo de Jerjes I se la astronomía náutica. Ahmad Ibn ésta no era visible por estar al sur ron a tierras aún más lejanas: In-
dio a la tarea de circunnavegar Majid (1500 dC), uno de los últi- del ecuador, se valían de otras es- dia, Persia, la península Arábiga,
África; por desgracia, de la expe- mos y más famoso navegantes del trellas del hemisferio Sur (Clark, las costas de África Oriental, e in-
riencia de Sataspes no se tienen Océano Índico antes de la llega- 1993). cluso se adentraron en el Mar
mayores datos más que algunos da de los portugueses, proporcio- A inicios del siglo XV dC, duran- Rojo, hasta llegar a la ciudad de
comentarios de Heródoto que no nó datos específicos sobre 70 es- te el mandato del emperador Zhu Jidda en 1412 (Levathes, 1994: 125).
son suficientes para determinar si trellas para determinar la latitud. Di (Yonglè) de la dinastía Ming, Sin embargo, el resultado prácti-
alcanzó la línea equinoccial Sulaiman al-Mahri (1550 dC), otro zarpó de China una impresionante co de estas largas expediciones
(Gozalbes, 2003: 57). famoso navegante, redujo esta lis- flota, que estaba al mando de fue escaso, dada la falta de objeti-
Lamentablemente, no cuento ta a 15 estrellas. El método prefe- Zheng He, un eunuco musulmán, vos estratégicos; no había en ellas
con datos sobre la navegación rido para determinar la latitud que había emprendido primero afán religioso, comercial, territo-
hindú de tiempos remotos, pero si consistía en la observación de la una travesía que le llevó hasta las rial o militar que animase a los go-
principales islas indonesias de bernantes posteriores a continuar
17
En algunos casos son las estrellas próximas a la constelación del Dragón y en otras son Java y Sumatra. Realizó en total la empresa. Por otra parte, el em-
las estrellas errantes o luceros que son los mismos planetas. siete expediciones navales entre perador tuvo pronto que concen-
18 Es necesario mencionar que el extremo sur de Sri Lanka dista 600 km de la franja 1405 y 1430, alcanzando las actua- trar su atención en la frontera te-
ecuatorial. les costas de Vietnam y Tailandia rrestre del Imperio ante una nueva

EL ECUADOR
18

Zheng He están rodeados de leyenda. Tras la conclusión de sus viajes,


buena parte de la documentación compilada durante éstos fue des-
truida o desapareció, y el emperador ordenó el regreso de todas las
flotas en el extranjero, cerrándose así la época de mayor gloria de
la navegación china. Sea como fuere, los viajes de Zheng He tuvieron
un enorme impacto histórico y demuestran el conocimiento náutico
que debieron tener para determinar su posición, de tal suerte que co-
nocían bien la trayectoria ecuatorial por la posición del Sol y las estre-
llas (fig. 13).
Con el desarrollo de la navegación marítima de chinos, árabes y
portugueses se inició la Era de los descubrimientos, que cambiaría para
siempre el mundo. Porque descubrir no es sólo llegar, es tomar pose-
sión, dejar constancia de que se ha llegado, hacer que un escribano
levante acta del acontecimiento, saber con mayor o menor exactitud a
dónde se ha llegado, medir, cartografiar y, sobre todo, informar a reyes,
cosmógrafos, cronistas y marinos, de tal manera que las tierras a
las que se ha llegado se incorporen al general conocimiento de la cul-
tura que envía esa expedición.
Al parecer, los marinos Fernando Gomes, João de Santarém y Pêro
Escobar fueron los primeros portugueses en cruzar la línea ecuatorial
en 1471 cuando se internaron en lo que hoy conocemos como el Golfo
de Guinea (fig. 14). Siguiendo esta ruta por la costa occidental africa-
na al sur, Bartolomé Díaz en 1488 alcanzó los 34° sur, llegando al Cabo
Figura 13. El Mapa Kangnido, realizado en Corea, ca. 1402, a partir de un de Buena Esperanza. Posteriormente, Vasco de Gama, con cuatro pe-
informe chino. El mapa describe parcialmente Europa y África en el oeste; Corea y queños barcos y con apenas 150 hombres, realizó su viaje a la India,
Japón en el este, con una China de gran tamaño en el centro. Este documento pre- una vez que pasó el cabo de Buena Esperanza tomó al norte, hasta
cede los primeros viajes europeos de exploración, y hasta los viajes del famoso llegar a Kenia; ahí un piloto musulmán de nombre Ahmad Bin Majad,
almirante Zheng He, sugiriendo un conocimiento geográfico detallado apoyado en
exploraciones de fechas más tempranas. conocedor del océano Índico, lo guío hasta Calicut en la India, a la que
llegó después de 10 meses de navegación en abril de 1498 (Tibbetts,
1981). Cuando los portugueses alcanzaron las costas de África y el
amenaza de invasión mongola. He, varios años antes de la llegada océano Índico no causaron la impresión que la portentosa flota china
Zheng He abrió rutas marítimas y de Colón a América, en el que apa- de Zheng He ocasionó años antes con cientos de barcos y miles de
algunas teorías, como la de Gavin recen los continentes casi en su hombres. A finales del siglo XV los portugueses confeccionaron tablas
Menzies (2003), quien en su obra totalidad, incluyendo Oceanía. de inclinación del Sol impresas en Venecia, éstas eran instrumentos
1421, sugiere que pudo llegar al Esta teoría no cuenta con el apo- muy precisos para la navegación en altamar, que recibieron una gran
continente americano. Para ello, yo de historiadores académicos, difusión, como otras tablas que contenían las correcciones necesa-
se apoya en una copia del siglo XVIII quienes critican la falta de docu- rias al cálculo a través de la Estrella Polar.
de un mapa original del siglo XV , mentación y pruebas fehacientes. Hemos presentado cronológicamente y de manera somera cómo las
supuestamente trazado por Zheng Lo cierto es que los viajes de civilizaciones del Viejo Mundo alcanzaron el ecuador terrestre, pero

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


19

también existe un periplo prehis- estar el sol a plomo, no hacía se-


pánico para el Nuevo Mundo. En ñal de sombra alguna al medio
efecto, el apego al conocimiento día. Por esta razón las tuvieron
y una visión ordenadora del mun- en mayor veneración, porque de-
do en la que el Sol en alineación cían que aquéllas eran asiento
cenital con el equinoccio fue sig- más agradable para el sol, por-
nificativo, incorpora en esta his- que en ellas se asentaba derecha-
toria ecuatorial a un pueblo indí- mente y en las otras de lado.
gena de América. A mediados del
siglo XV , los incas buscaron en la Regresando a la historia europea,
región que hoy ocupa la Repúbli- para el año 1500, Vicente Yáñez
ca del Ecuador un sitio en el que Pinzón fondeó en Cabo Verde y
se pudiera apreciar el ascenso rec- empujado por una tormenta, lle-
to y no oblicuo del Sol como en gó al cabo de San Agustín, en Bra-
otras latitudes, y que además co- sil, que él llamó de Santa María de
incidiera con su paso cenital para la Consolación. Fue el primer na-
el día del equinoccio, esto los lle- vegante en cruzar el ecuador cer-
vó hasta el ecuador terrestre. Una ca de las costas del continente
cita española del siglo XVII lo de- americano y fondear en las costas
muestra, corresponde al insigne brasileñas.19 En su peculiar y flori-
Inca Garcilaso de la Vega en su do lenguaje, Anglería informa que,
obra Comentarios Reales de los pasadas las Canarias y las islas Figura 14. Portulano del Golfo de Guinea, atribuido a Freire Joao, 1546. Se destaca
Incas, capítulo XLVIII : de Cabo Verde, las naves de Vicen- la línea ecuatorial.
te Yáñez tomaron rumbo sudoes-
También alcanzaron los equinoc- te hasta perder de vista la Estrella […] a 13 días de enero de 1500 años, tomaron la vía del Austro y
cios y los solemnizaron muy mu- Polar. Por primera vez, los marinos después al Levante, y andadas, según dijeron, 700 leguas, perdieron el
cho… Y es de notar que los reyes españoles pasaban el ecuador y se Norte y pasaron la línea equinoccial. Pasados della, tuvieron una
incas y sus amautas, que eran los adentraban en el hemisferio Sur. terribilísima tormenta que pensaron perecer; anduvieron por aquella
filósofos, así como iban ganando Contingencia grave, porque lógi- vía del Oriente o Levante otras 240 leguas.
las provincias, iban experimen- camente no sabían guiarse por las Pedro Mártir de Anglería, Decadas de Orbe Novo, 1501.
tando que cuanto más se acerca- estrellas del cielo austral.
ban a la línea equinoccial, tanto Sin duda, el hecho más sobresaliente para los navegantes occidenta-
menos sombra hacia la columna les de saberse al sur de la línea equinoccial es perder de vista la Estre-
del mediodía, por lo cual fueron lla Polar. En la siguiente cita, que corresponde a Américo Vespucio
19
Para algunos el primero en llegar a las (Morales, 1990: 214-215), relata cómo llegaron hasta una latitud de 6°
estimando más y más las colum- costas brasileñas fue el portugués Duarte
nas que estaban cercanas de la Pacheco en 1498, ya que revelaciones sur, perdiendo de vista la Estrella Polar:
ciudad de Quito; y sobre todas las cartográficas de su expedición estaban
contenidas en el Planisferio de Cantino,
otras estimaron las que pusieron véase en este volumen la figura 7 (Duarte,
Y porque, si bien me recuerdo, Vuestra Magnificencia sé que entiende
en la misma ciudad… donde por 1892: libro I, capítulo 2). algún tanto de cosmografía, pienso describíos hasta dónde fuimos en

EL ECUADOR
20

nuestra navegación en longitud y latitud. Digo que navegamos tanto porque yo noté cuatro estrellas formando como una almendra, que
hacia la parte del mediodía que entramos en la zona tórrida y dentro tenían poco movimiento; y si Dios me da vida y salud, espero volver
del círculo de Cáncer; y habéis de tener por cierto que en pocos días, pronto a aquel hemisferio, y no regresar sin señalar el polo. En con-
navegando por la zona tórrida hemos visto cuatro sombras del sol, y clusión digo que navegamos tanto hacia la parte del mediodía que
cuando el sol se hallaba en el cenit a mediodía, digo que estando el nos alejamos por el camino de la latitud de la ciudad de Cádiz 60
sol en nuestro meridiano, no teníamos sombra ninguna, que todo esto grados y medio, porque sobre la ciudad de Cádiz alza el polo 35 gra-
me ocurrió muchas veces mostrarlo a toda mi tripulación y tomarla dos y medio, y nosotros nos encontramos que habíamos pasado de la
por testigo a causa de la gente grosera, que no saben cómo la esfera línea equinoccial 6 grados: esto baste en cuanto a la latitud. Habéis
del sol va por su círculo del Zodíaco: que una vez veía la sombra al de notar que esta navegación fue en los meses de julio, agosto y sep-
mediodía, y otra al septentrión, y otra al occidente, y otra al oriente, tiembre, que como sabéis el sol reina más continuamente en este
y alguna vez una hora o dos del día no teníamos sombra alguna. nuestro hemisferio, y recorre un arco mayor durante el día, y menor
Y tanto navegamos por la zona tórrida hacia la parte del austro, que el de la noche: mientras que nos hallábamos en la línea equinoccial,
nos encontramos bajo la línea equinoccial, y teniendo un polo y el o a 4 ó 6 grados cerca de ella, que fue durante los meses de julio y
otro a final de nuestro horizonte, y la pasamos por seis grados perdiendo agosto, la diferencia del día sobre la noche no se notaba, y casi el día
totalmente la estrella tramontana, que apenas se nos mostraban las era igual a la noche, y era muy poca la diferencia.
estrellas de la Osa Menor, o, por mejor decir, las guardias que giran Américo Vespucio, Carta del 18 de julio de 1500.
alrededor del firmamento. Deseoso de ser yo el autor que señalara la
estrella del firmamento del otro polo, perdí muchas veces el sueño de La primera circunnavegación de la historia fue realizada por la expedi-
noche en contemplar el movimiento de las estrellas del otro polo, ción Magallanes-Elcano en 1519 a 1522, partieron de Sevilla cinco na-
para señalar cuál de ellas tuviese menor movimiento y se hallase más ves tripuladas por 250 hombres que incluían españoles, portugueses,
cerca del firmamento; y no pude con tantas malas noches que pasé, y italianos, franceses, alemanes, flamencos, moros y negros. El viaje no
con cuantos instrumentos usé, que fueron el cuadrante y el astrolabio, fue fácil, Magallanes murió en la empresa; tras su muerte, Elcano termi-
señalar estrella que tuviese menos de 10 grados de movimiento alre- nó la travesía en un solo barco con 18 supervivientes. Es interesante
dedor del firmamento, de modo que no quedé satisfecho conmigo mis- para nuestro tema, que el primer paso realizado por el círculo
mo de nombrar ninguna que señalase el polo del mediodía a causa equinoccial en 1519 fue desalentador, lo efectuaron al oeste de la cos-
del gran círculo que hacían alrededor del firmamento. Y mientras que ta africana con una calma en el mar que los dejó por tres semanas
en esto andaba, me acordé de un dicho de nuestro poeta Dante, del inmovilizados, el calor era tal que la brea se derretía y los palos se
cual hace mención en el primer capítulo del Purgatorio, cuando finge resquebrajaban. Según consta en la bitácora, los marinos empezaron a
salir de este hemisferio y encontrarse en el otro, que queriendo des- rezongar sospechando que el viaje era inútil, era apenas el comienzo
cribir el polo antártico dice: de un viaje azaroso.20 La expedición cruzó el ecuador al menos en cua-
Me volví a la derecha y me hallé enfrente tro ocasiones: la ya mencionada al oeste de la costa africana, después
del otro polo, y vi en él cuatro estrellas al SE de las Islas Marianas, posteriormente a través del mar de las
que sólo ha visto la primera gente. Molucas al sur de Filipinas, y de regreso, de nueva cuenta en África por
Gozaba el cielo de sus llamas bellas: el golfo de Guinea. Con la expedición de Magallanes-Elcano quedó
¡oh viudo septentrión, pues qué privado demostrada la redondez de la Tierra y con ello, resuelto el argumento
tú por siempre jamás has de estar de ellas
Que según a mí me parece, que el poeta en estos versos quiere descri-
20
Se refiere al fenómeno conocido como calmas ecuatoriales o zona de convergencia
bir por las “cuatro estrellas” (la Cruz del Sur) el polo del otro firma-
intertropical (doldrums), que se trata en este volumen, en el apartado 1.2.6 Los océanos
mento, y no dudo hasta ahora que aquello que dice no sea verdad: y el ecuador.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


21

inicial de este capítulo: el ecua- toria por tierra al ecuador sea la que son a once de marzo y trece natural tiene, puesto que acciden-
dor sólo se puede concebir en una realizada por la Misión Geodésica de setiembre [fechas desprendi- talmente en algunas partes hace
Tierra esférica y no plana. Francesa de 1736 que trataremos das del calendario Juliano y no diferencia.
A España le cabía la gloria de en el siguiente apartado, no sin del moderno Gregoriano]. Y es Cieza de León, La Crónica del
haber descubierto dos de las cin- antes presentar una cita de Cieza de saber que [como dicho tengo] Perú, capítulo XLVI.
co partes del mundo y el haber de León,21 quien estuvo de paso en fue opinión de algunos autores
medido la magnitud de éste con Quito en 1547 y se refiere de ma- antiguos que debajo desta línea Para cerrar este apartado sobre
las quillas de sus naves. Vendrían nera por demás significativa al equinoccial era inhabitable; lo exploraciones ecuatoriales, deseo
después las exploraciones británi- ecuador terrestre: cual creyeron porque, como allí compartir con el lector la emo-
cas, francesas y holandesas. La Era envía el sol sus rayos derecha- ción que aún hoy en día significa
de las exploraciones fue seguida En lo tocante a la línea [ecua- mente a la tierra, habría tan ex- entre los marinos alcanzar la línea
por una revolución comercial en dor], algunos de los cosmógrafos cesivo calor, que no se podría equinoccial; sobre todo para aque-
la que el intercambio de produc- antiguos variaron y erraron en habitar. Desta opinión fueron llos que habitan lejos de su po-
tos transoceánicos se generalizó. afirmar que por ser cálida no se Virgilio y Ovidio y otros singula- sición, su cruce es siempre un
Para el siglo XVIII, los navíos esta- podía habitar. Y porque esto es res varones. Otros tuvieron que hecho trascendental que se expli-
ban lo suficientemente bien cons- claro y manifiesto a todos los que alguna parte sería habitada, si- ca por la importancia histórica y
truidos y existía una marinería habemos visto la fertilidad de la guiendo a Ptolomeo que dice: “No cartográfica del paralelo 0 grados.
capaz de navegar hacia cualquier tierra y abundancia de las cosas conviene que pensemos que la Los barcos de todo el mundo
lugar del planeta. Naturalmente, para la sustentación de los hom- tórrida zona totalmente sea in- realizan un festival al cruzar el cír-
las exploraciones siguieron, los bres pertenecientes, y porque habitada”. Otros tuvieron que allí culo ecuatorial, con vitalidad y en-
mares árticos y antárticos no se desta línea equinoccial se toca en no solamente era templada y sin tusiasmo, la tradición y cultura
exploraron hasta el siglo XIX. La pe- algunas partes desta historia, por demasiado calor sino templadí- marítima perdura como en la Ar-
netración europea por tierra ha- tanto daré aquí razón de lo que sima. Y esto afirma San Isidoro mada de México:
cia el ecuador por los continen- della tengo entendido de hombres en el primero de las Etimologías
tes americano y africano fue más peritos en la cosmografía; lo cual donde dice que el paraíso terre- Todo buque que cruce la línea del
lenta de lo que fue la colonización es, que la línea equinoccial es una nal es en el Oriente, debajo de ecuador terrestre por mar, entra
de sus costas. Las exploraciones vara o círculo imaginado por la línea equinoccial, templadísi- en el reino de Neptuno, interrum-
por tierra no consideraban tan re- medio del mundo. Dícese equi- mo y amenísimo lugar. La expe- piendo su descanso, por lo que el
levante la latitud ecuatorial para noccial porque pasando el sol por riencia agora nos muestra que no rey de los mares junto con su cor-
sus travesías, como lo fue para las ella se hace equinoccio, que quie- sólo debajo de la Equinoccial, te submarina detiene al buque y
exploraciones por mar, esto se re decir igualdad del día y de la más toda la tórrida zona, que es lo aborda. Neptuno se presenta
explica porque en cada una noche. Esto es dos veces en el año de un trópico a otro, es habitada, como hijo de Saturno y Rea, her-
se guardan severas diferencias rica y viciosa, por razón de ser mano de Júpiter y Plutón, dice
dimensionales, los puntos de re- 21
Pedro Cieza de León fue conquistador todo el año los días y noches casi que rapto a su esposa cabalgan-
ferencia en el espacio geográfico pero, sobre todo, cronista e historia- iguales. De manera que el fres- do en un delfín y que construyó
dor del Perú. Su Crónica del Perú, la es-
son distintos, las distancias difie- cribió en tres partes. En América y sobre cor de la noche tiempla el calor Troya junto con Apolo y le indi-
ren, así como las condiciones para todo en Cartagena de Indias desempeñó del día, y así tiene la tierra sa- can al capitán por medio de un
una gran actividad en expediciones, fun-
determinar una ruta. Tal vez, la in- daciones, encomiendas gubernamenta-
zón para producir y criar los fru- comunicado lo que significa su
tervención más relevante en la his- les y otros cargos. tos. Esto es lo que de su propia interrupción para el reino de

EL ECUADOR
22

Neptuno, por lo que deberán pagar tributo de la siguiente manera. To- cuya precisión estuvo de acuerdo con las exigencias que planteaban
dos los neófitos que se encuentren en el buque que nunca han cruzado los descubrimientos ultramarinos como hemos visto páginas atrás, y
el Ecuador deberán de ser bautizados, bañados con agua de mar y de- de las nuevas expectativas que exigían los intercambios comerciales
berán beber un brebaje marino. En la ceremonia participan una corte que, entonces, se desarrollaron en el sistema económico mundial. Fue
marina, sirenas, tritones, nereidas, peces, hipocampos, monstruos mari- así, como se consolidó la geografía científica, amparada en la astrono-
nos, así como pescadores, marineros, y piratas que han muerto en el mía y las matemáticas. Fue en este contexto cuando se alimentaron las
mar, junto con la tripulación del buque en un festival. Luego de ser exigencias de las políticas estatales respecto al levantamiento de ma-
bautizados se les expide un certificado que indica fecha, hora del cru- pas y planos que permitieran conocer con precisión las característi-
ce y posición geográfica del buque en que se navega y qué tipo de viaje cas de territorios y definir sus fronteras e intereses comerciales. La
efectuaban; a partir de ese momento pueden llamarse hijos de Neptuno geodesia y la astronomía náutica fueron, así, constituyéndose en téc-
y veteranos de mar. En adelante podrán navegar libremente por todos nicas sofisticadas de los “saberes” geográficos como elementos de cien-
los mares del mundo gozando de la protección de Neptuno, pero debe- cia experimental y geométrica (Rodas, 2003).
rán exaltar el espíritu de sacrificio y camaradería marinera, promoverán En medio de esos avances, la geografía y la astronomía formaron
el amor por el mar, el respeto por los grandes marinos y los buques que parte de la polémica en la cual se introdujeron las academias de
en él navegan.22 Ciencias de París y de Londres entre 1730 y 1740. Aquella polémica se
fundamentó en la discusión y las críticas a las tesis de Newton y de
1.1.3 M ISIÓN GEODÉSICA FRANCESA 23 Huygens sobre la figura de la Tierra y el debate central se focalizó,
entonces, en las tesis de Newton y de Cassini (Wolfgang, 1987: 76). En
De las exploraciones del apartado anterior, pasamos al primer trabajo esa forma, las academias de Londres –cuyo núcleo científico había
científico que se realizó específicamente sobre el círculo ecuatorial,
su objetivo era determinar la verdadera figura del planeta: un globo
achatado por los polos, o un esferoide fusiforme en dirección a los
polos. Los trabajos se realizaron en la longitud que ocupan los Andes
septentrionales, justamente en un corredor interandino próximo a lo
que en el siglo XVIII se denominaba la Real Audiencia de Quito. Las
condiciones geográficas y culturales permitieron los trabajos de la
Misión Geodésica Francesa, en la que también participaron españoles
y vecinos de la ciudad de Quito.
En las primeras décadas del siglo XVIII , la Revolución Científica se
produjo en medio de la vigorización de antiguos métodos de observa-
ción, y junto a las circunstancias en el uso de nuevos instrumentos de
medición que dieron como resultado el nacimiento de la geografía,

22
Según tradición del buque escuela de la Armada de México ARM Cuauhtémoc BE -01.
23 En este apartado atendemos a la primera Misión; una segunda Misión Geodésica Fran- Figura 15. Sello postal de la República Francesa que conmemora 250 años (1986) de
cesa arribó al ecuador de 1899 a 1906 a cargo del Servicio Geográfico del ejército francés, la Misión Geodésica Francesa al ecuador. Destacan los rostros de Maupertuis (iz-
dirigida por el coronel J. Perriet, en ella participó el célebre antropólogo Paul Rivet, quierda) y La Condamine (derecha). Se completa la estampilla con la alegoría de un
fundador del Museo del Hombre en París. En esa oportunidad midieron un arco de 5° octante, instrumento para medir en ángulos la altura de los astros y así determinar
53' 34", comprendido entre Tulcán al norte y el puerto peruano de Paita, al sur. la latitud.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


23

propuesto la iniciativa teórica de co, en la cual tenía cabida un deba- co; Juan Senierges, cirujano y botá- necesidades culturales y científi-
discusión– y la de París empren- te filosófico entre la oposición de nico; Verguin, ingeniero de marina cas locales americanas, pues los
dieron una discusión que logró su las ideas nuevas de Newton sobre y dibujante; Couplet, capitán de trabajos se iniciaron en colabora-
posterior dilucidación con los via- las actitudes antiguas, acompa- fragata; Jean Louis Morainville, in- ción de ilustrados quitenses. Cuan-
jes de reconocimiento de la Tie- ñado de un trasfondo político de geniero; Godin de Odonais, instru- do llegaron a Quito se encontra-
rra y sus mediciones mediante el oposición entre las potencias eu- mentalista y Théodore Hugot, re- ron con enormes diferencias y
uso de los nuevos instrumentos. ropeas de Francia e Inglaterra. La lojero e instrumentalista. Además registraron los detalles y las carac-
Dichas contradicciones en litigio figura de la Tierra se constituyó en- del vecino de Quito, Pedro Vicen- terísticas de las adversidades que
tomaron cuerpo hacia 1730, que- tonces en una polémica de moda te Maldonado (ibidem, 436). En la tuvieron que enfrentar como las
dando efectivamente enfrentados de las elites cultivadas. Así pues, expedición se integraron dos ma- enfermedades que contrajeron
los seguidores de Newton y Cassi- este viaje pronto fue reconocido rinos españoles, Jorge Juan y San- producidas por el clima, el agres-
ni. Fue en Francia, sin embargo, como una necesidad de carácter e tacilia, y Antonio de Ulloa, envia- te terreno, y las dificultades eco-
donde los científicos se mostraron interés universal para tender puen- dos por la Corona española a fin nómicas extremas, debido a lo
más combativos. En esa línea so- tes entre el mundo conocido y los de facilitar las actividades cientí- cual sus trabajos se extendieron
bresalieron las figuras de Alexis mundos lejanos (Rodas, 2003). ficas impulsadas por Francia.25 hasta 1743. En junio de 1736 em-
Claude Clairaut, Pierre Louis Mo- La Academia de Ciencias de Pa- Cuando los geodésicos arriba- piezan las mediciones tomando
reau de Maupertuis y Charles- rís en 1733 aprobó el proyecto de ron a la Real Audiencia de Quito como extremo el norte de la región
Marie de La Condamine (fig. 15); 24 Louis Godin, para medir un grado el 9 de marzo de 1736, fueron reci- de Caraburo, zona de Yaruquí, si-
de esta manera, la Academia de Pa- de meridiano en las proximidades bidos con afecto y distinción. Los tuada al este de Quito; y en Oyam-
rís emprendió un enorme compro- del ecuador. En 1734, obtuvieron expedicionarios abrieron espacios baro el extremo sur, alcanzando un
miso con la obra de Newton, acom- permiso de la Corona española de conocimiento y aprendizaje, total de 12 226 metros. La medi-
pañada de un interés y curiosidad para ingresar al territorio ameri- legitimando las inquietudes cultu- ción constó de 32 triángulos en el
por el conocimiento del mundo, cano correspondiente en la Real rales de algunos criollos de la callejón interandino (fig. 16), en-
de sus singularidades antropológi- Audiencia de Quito. La Misión época. En ese sentido, se puede contrando que el arco del meridia-
cas y etnográficas, así como res- Geodésica Francesa se transformó aseverar que el esfuerzo expe- no tenía 3°7’11" (Crespo, 2000).
pecto a las particularidades natu- entonces en una empresa científi- dicionario produjo una experien- La misión inicialmente fijó su
rales del planeta. ca estatal sobre la que Francia y cia científica internacional que no atención en el valle de Cayambe,
Esta expedición, obra racional España proyectaron sus intereses, sólo involucró a Francia y el resto destinó a Verguin y Couplet para
de la Ilustración, se transformó en más allá del objetivo geodésico de Europa, sino que alimentó las reconocer el terreno, sabemos que
una empresa de carácter científi- principal, Francia se encontró fren- se hospedaron en la Hacienda de
te a una tarea de gran futuro geo- Guachalá, hecho que es anecdóti-
25
Las relaciones de su viaje fueron publi-
24
Charles de La Condamine (1701-1774),
político (ibidem, 436). cadas en la época bajo los títulos: Plan
co para esta publicación, pues co-
geodesta y naturalista francés. A su vuel- El cuerpo científico constitui- del camino de Quito al río Esmeraldas rresponde al mismo campamento
ta del ecuador publicó la Relation abrégée do como la Misión de la Academia según las observaciones astronómi- que utilizó la expedición mexica-
d’un voyage fait dans l’Amérique cas 1736-1742; Las noticias secretas de
méridionale (Viaje a América Meridional de Ciencias de París lo conforma- América, 1735-1745; Relación histórica del na 0° / 0°C para el año 2009, cuyo
por el río Amazonas, 1745). A él se debe ron: Louis Godin, Pierre Bouguer viaje a la América Meridional hecha de objetivo fue alcanzar el punto más
el descubrimiento de la quinina y el cau- y Charles Marie de La Condamine. orden de S. Mag. para medir algunos gra- alto del ecuador terrestre como
cho, también determinó la velocidad de dos de meridiano terrestre, y venir por
propagación del sonido en función de la Como académicos: Joseph de Jus- ellos en conocimiento de la verdadera fi- veremos en el capítulo siguiente.
temperatura. sieu, médico y naturalista botáni- gura y magnitud. Pues bien, cuando Bouguer se dio

EL ECUADOR
24

Figura 16. Mapa de los Triángulos de la


Meridiana de Quito. La Condamine,
Journal du Voyage (1749). Colección
Matthias Abram. Se ha incorporado una
línea roja para destacar la trayectoria
del ecuador terrestre.

a la tarea de verificar los informes de septiembre de 1736 (Vargas, ...la voz que había corrido entre sultados de la Misión Geodésica
de Verguin y Couplet, llegó a la 2005). De esta región tan sólo se los indios por boca interesada de Francesa, era considerado como el
conclusión de que el terreno era valieron del cerro Pambamarca 26 latifundistas, mayordomos y capo- marcador por excelencia de la mi-
desigual en Cayambe, además de ubicado en los terrenos de la Ha- rales, era la de que los académi- tad del mundo (Emilio Bonifaz, co-
ser atravesado por dos ríos, lo cual cienda de Guachalá, su cima fue cos habían venido a la Real Au- municación oral, 2009).
complicaba la precisión en las utilizada como punto de referen- diencia de Quito para quitarles El valor del grado del meri-
mediciones. Desechado el valle cia distal de la misión. sus tierras y entregarlas a los la- diano calculado por Bouguer fue
de Cayambe, La Condamine, Relata La Condamine que des- tifundistas españoles. Según ellos, de 110 598 metros, es decir, sólo
Bouguer y Godin optaron por las pués de largas jornadas de traba- las estacas servían para delimi- 22 metros más que la distancia
llanuras de Yaruquí, convenidos jo científico colocaban las estacas tar los dominios de cada propie- que se llegó a conocer hasta el
en el puesto de la base, comenza- que les servirían para realizar las tario español, despojando la poca siglo XX . Su desviación fue ínfima,
ron las operaciones técnicas: la mediciones y éstas eran robadas tierra que quedaba de propiedad inferior a 0.02 %, lo que comprue-
línea de medida básica estaba por los indios en las noches. Al de los indígenas, corriendo cual- ba la precisión conseguida por es-
comprendida entre Caraburo y investigar el motivo de este suce- quier riesgo, hacían desaparecer tos eminentes científicos del si-
Oyambaro. Lamentablemente so, se percataron de que: las estacas cada noche. glo XVIII (García y Francou, 2004:
Cayambe abrió la tumba de 28). Además, este resultado con-
Couplet, el más joven de los 26
El cual tiene una importante trascenden-
Valiéndose de este engaño, Anto- firmó la propuesta de Newton
geodésicos. Couplet había co- cia arqueológica, ya que es el mirador nio de Ormaza y Villacis logró com- comprobándose que la deforma-
menzado a trabajar con el entu- por excelencia de la región. También fue prar tierras a sus vecinos indíge- ción de la Tierra es achatada en
visitado por la Expedición 0° / 0°C, para
siasmo de sus años, pero una fie- realizar fotografías astronómicas de la
nas. Por cierto, el volcán Cayambe, los polos, en una variación que
bre maligna le cortó la vida el 19 bóveda celeste. antes de que se publicaran los re- corresponde tan sólo a una parte

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


25

en 300,27 se sumaron series de observaciones sobre eclipses de Sol, de En el año de 1836, el geógrafo ecuatoriano Luis Tufiño ubicó los
Luna, y de los satélites de Júpiter; también se realizaron estudios de la hitos dejados por la Misión Geodésica Francesa. Para conmemorar el
oblicuidad de la elíptica, la celeridad del sonido, la refracción de la luz, centenario de la visita de la expedición científica se erigió un obelisco
las oscilaciones del péndulo, la altura del barómetro, la atracción de las de 10 metros de altura en San Antonio de Pichincha, y que luego fue
montañas sobre la plomada, observaciones acerca de vulcanología, trasladado a Calacali por el Consejo Provincial (fig. 19 a). Para 1936,
investigaciones zoológicas y botánicas, registros históricos y el con motivo del segundo centenario se construyó un nuevo monumen-
levantamiento de cartas geográficas de diversas regiones de las que to cerca de Quito.
destaca el Amazonas. En Manta, aprovecharon para observar el equi- En 1979 se inicia la edificación del espacio turístico designado como
noccio por un método innovador propuesto por Bouguer, y por su parte, Ciudad Mitad del Mundo, a 13 kilómetros al norte de la capital. La
La Condamine difundió sus descubrimientos de productos tan relevan- construcción principal de la Ciudad Mitad del Mundo corresponde a
tes como el caucho, que revolucionaría la industria mundial, y la quini- un monumento de 30 metros de altura que guarda en su interior un
na para aliviar la malaria (Vargas, 2005). Finalmente, es necesario apun- museo etnográfico dispuesto en nueve niveles, donde se aprecia la
tar que la Misión Geodésica Francesa instauró las bases de un sistema variedad de grupos étnicos que habitan en las cuatro regiones del
métrico global, como precursor para la adopción de la medida universal país. Este monumento piramidal revestido de andesita tallada, está
de longitud que sería el metro, definido en 1791 por la Academia de orientado en cada uno de sus lados a una dirección cardinal, el edificio
Ciencias Francesa como la diezmillonésima parte del cuadrante del me- está rematado por un globo de 4.5 m de diámetro y cinco toneladas de
ridiano terrestre.28 peso, que parece “acostado” pues no presenta como acostumbramos
al eje de rotación de la Tierra de manera vertical, sino horizontal, en-
1.1.4 L A R EPÚBLICA DEL E CUADOR contrando los polos en los extremos para dar relevancia a la trayecto-
ria ecuatorial (fig. 17). Desde la terraza del museo se puede contem-
Para algunos historiadores, el primer grito de independencia en Hispa- plar el entorno andino de la Mitad del Mundo. Junto al edificio se
noamericana sucedió en 1809, en la ciudad de Quito. Independizados levantó una villa recreativa recurriendo a trazos arquitectónicos colo-
de España, los territorios de los Andes septentrionales se forjaron como niales; contiene entre otras atracciones un planetario, una plaza de
una federación a la que se denominó Gran Colombia, cuando ésta se toros, la única iglesia en el mundo atravesada por el ecuador, una pla-
disgregó, los territorios del sur eligieron por nombre para la nueva na- za central donde se realizan presentaciones culturales, pabellones y
ción el de República del Ecuador, así lo determinó su Asamblea Consti- hay espacios para el comercio artesanal, restaurantes, y cafeterías.
tuyente, convocada por el general Juan José Flores el 14 de agosto de La Mitad del Mundo es el principal atractivo turístico del Ecuador
1830, en Riobamba. El nombre hace alusión, obviamente, a la línea continental, que congrega a miles de visitantes de todo el mundo con
equinoccial que pasa muy cerca de Quito, su capital, y que cruza el el ánimo de fotografiarse sobre los hemisferios Norte y Sur a la vez. Sin
territorio de este a oeste, pues con el título de Tierras del Ecuador se embargo, realmente la estructura principal se encuentra desviada
conocía en Europa desde el siglo XVIII a la provincia que ocupaba la Real 239.50 metros al sur del verdadero ecuador, el cual fue ubicado con
Audiencia de Quito, éste era el tratamiento habitual que se guardaba en más exactitud en fechas recientes mediante el uso de la tecnología de
los informes de la Misión Geodésica Francesa, motivo por el cual deci- posicionamiento satelital (GPS , por sus siglas en inglés). El acceso al
dieron que el nombre apropiado para el país era República del Ecuador. conjunto arquitectónico es por la Avenida de los Geodésicos, donde
se levantan 13 bustos que representan a los científicos miembros de la
27
Misión Geodésica Francesa.
Para más detalles véase en este volumen el apartado 1.2.1 La forma de la Tierra y su
variación en el ecuador. Durante su recorrido, los turistas son abordados por guías que
28
Considérese como la diezmillonésima parte de la distancia entre el ecuador y alguno de
prometen realizar experimentos científicos que ostensiblemente sólo
los polos. son posibles en el ecuador. Sin embargo, la mayoría de esas afirma-

EL ECUADOR
26

Figura 17. La Avenida de los Geodésicos,


al fondo el monumento-museo de la Mi-
tad del Mundo.

encuentra 100 metros más allá de


la simbólica recta de cobre que
pasa por el observatorio de Green-
wich, que millones de turistas vi-
sitan y fotografían con asidui-
dad.30 Estas variaciones existirán
siempre que la tecnología encuen-
tre instrumentos cada vez más
precisos, mas no debe alejarnos
del gusto por visitar estos monu-
mentos de la geografía universal.
Fuera del ámbito de la Ciudad
Mitad del Mundo, una propuesta
más acorde con el conocimiento
de lo que implica el ecuador te-
rrestre lo tenemos en el centro
turístico-cultural Quitsato, con
un reloj solar de 52 metros de diá-
metro en las afueras de la ciudad
de Cayambe.
ciones son cuestionables y en al- Deseo abrir un paréntesis para ridiano de Greenwich permitió Esta obra está elaborada con un
gunos casos adquieren un sesgo aliviar la inquietud que pueda que desde 1884, el Reino Unido se gran mosaico de piedra que marca
de engaño. Por ejemplo, se puede significar entre los lectores y los convirtiera en el centro del tiem- las líneas de los solsticios y equi-
asistir a una ”demostración cien- visitantes a la Ciudad Mitad del po, a pesar de la genial y consen- noccios, así como las horas del día,
tífica didáctica” sobre el efecto Mundo la desviación de 239.50 suada norma, la precisión de su señaladas mediante la proyección
Coriolis, y las aceleraciones cen- metros para un monumento erigi- origen no llegó a durar ni un siglo, de la sombra de un gran poste de
trífugas; además del balance de do a la exactitud, argumentando ya que desde la década de 1960 se diez metros de altura, que se en-
un huevo sobre la cabeza de un que esto no sólo sucede en Ecua- empezó a medir el tiempo utilizan- cuentra exactamente en el centro
clavo en el “centro magnético de dor. Algo similar ocurre en Ingla- do los muy precisos relojes atómi- de la gran plataforma circular (fig.
la tierra”, comprobándose en esta terra con el hito geográfico del cos, y se descubrió que debido a 18). El emplazamiento es el único
forma la peculiaridad de la “lati- meridiano de Greenwich.29 El me- la ralentización de la rotación te- monumento en el mundo que ha
tud cero magnética” donde los rrestre el tiempo se estaba sepa-
cuerpos pesan menos. Efectos, to- rando lentamente. Hoy sabemos, 30
29
Es el meridiano de origen, o longitud 0° Véase en línea <http://www.todo
dos estos, que se tratan en el apar- a partir del cual se mide la longitud del gracias a la tecnología GPS, que la interesante.com/2009/11/greenwich-me-
tado 1.2 Consideraciones físicas. planeta. verdadera línea del meridiano se dida-orden-tiempo-espacio.html>.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


27

sido construido, según los cálcu-


los más modernos sobre la línea
equinoccial y en donde se ofrece
una explicación geográfica y
astronómica de la latitud 0°.
Cristóbal Cobo y Gustavo Gua-
yasamín son investigadores ecua-
torianos, cada uno desde diferen-
te postura sostienen la hipótesis
de que en la cima del cerro Cate-
quilla de 2626 m/nm, tres kilómetros
al este de la Ciudad Mitad del Mun-
do se levantó en la antigüedad un
observatorio intencionalmente
posicionado en la mitad del mun-
do; resultado de un profundo co-
nocimiento astronómico de los
Figura 18. Centro turístico-cultural Quitsato.
sabios del periodo preincaico.
Sorprende el hecho de que su
ubicación es justamente sobre la
línea ecuatorial. Sin embargo, tad del mundo” fue registrada ordenadora del mundo, un espa- que la línea equinoccial se aden-
debido a las condiciones actua- antes de que los sabios incas, y cio donde la geografía universal tra por intrincadas selvas atrave-
les del sitio , poco se puede los científicos de Francia del si- es conmemorada y con ello, los sando el continente americano
concluir en términos arqueastro- glo XVIII llegaran al ecuador, y alcances del conocimiento huma- hasta encontrarse con la desem-
nómicos por la ausencia de ele- con una exactitud sólo com- no, pues la noción de ecuador es bocadura del río Amazonas en la
mentos arquitectónicos bien de- parada con los modernos ins- producto de un proceso matemá- costa Atlántica, donde posible-
finidos. 31 trumentos de posicionamiento tico, astronómico, geográfico y mente Américo Vespucio, en 1499,
En cualquier forma, para los satelital. de exploración que ha ocupado a fue el primer europeo que navegó
investigadores y un amplio públi- la humanidad por varios siglos. por su estuario.
co, el emplazamiento arqueoló- 1.1.5 MONUMENTOS Y REMEMBRANZAS POR EL MUNDO Hemos mencionado que en la Una intransitable selva ecuato-
gico de cerro Catequilla adquie- República del Ecuador se han le- rial, que hoy se conoce con el
re importancia en un sentido de Los espacios arquitectónicos que vantado tres importantes monu- nombre de Amazonas fue el esce-
identidad para los ecuatorianos, señalan la trayectoria del ecuador mentos: Calacali (fig. 19 a), la Ciu- nario de travesías memorables.
con la afirmación de que la “mi- por el planeta se distribuyen por dad Mitad del Mundo y el centro Primero, las que tenían por obje-
algunos de los países que gozan turístico-cultural Quitsato. Si- to la codicia con la búsqueda de
31
En el apartado 2.2.3 (p. 55), del capítulo de esta distinción. 32 Estas cons- guiendo la trayectoria del ecuador El Dorado, mítico lugar con calles
II, se ofrece más información de este caso trucciones son hitos de la visión al este, hasta Colombia donde no pavimentadas de oro, donde el
según el dictamen de la Misión Arqueo-
astronómica Mexicana (Galindo y
se levanta ningún hito, pues trans- metal era tan común que se des-
Montero, 2009). 32
El ecuador atraviesa 15 naciones. curre por lugares deshabitados, ya preciaba. En busca de este reino

EL ECUADOR
28

legendario, Francisco de Ore- sándose en los mapas de Thomas to; en su expedición participaron viaje de 5 mil kilómetros por los
llana33 y Gonzalo Pizarro partieron Hariot (1595) y Henricus Hondius 47 canoas y 1 270 hombres (Smith, Andes, el río Marañón y la cuenca
de Quito en 1541 en una de las más (1599) lo sitúa en el lago Manoa 1994). Pero, sin duda, la más evo- del río Amazonas en busca de su
fatídicas y famosas expediciones. entre Brasil y Guayana. Destaca cativa experiencia fue la sucedida esposo, una historia trágica de
Posteriormente en 1560, incur- entre los exploradores de la Ama- en 1769 a la ecuatoriana Isabel valentía y coraje, que afortunada-
sionó Lope de Aguirre, el conquis- zonia ecuatorial Pedro Teixeira, Grandmaison de Godin, esposa del mente tuvo un final feliz al reen-
tador demente que construyó una quien en 1638 realizó el recorrido célebre astrónomo Louis Godin, contrarse años después con su
república flotante sobre el Ama- a contracorriente, esto es, nave- uno de los integrantes de la Misión marido en la Guyana Francesa.34
zonas y el Orinoco con un ignomi- gando el río Amazonas hasta el río Geodésica Francesa. Madame Regresando al delta del Amazonas,
nioso y deshonrosos final que ha Napo y de ahí ascendió hasta Qui- Godin realizó un sorprendente el ecuador secciona la ciudad de
sido magistralmente narrado en la
novela histórica La aventura equi-
noccial de Lope de Aguirre, de Ra-
món Sender (1998). A finales del
siglo XVI, Walter Raleigh fue el pri-
mer explorador inglés en empren-
der la misma búsqueda. Raleigh
partió de la Guyana, como deno-
minó a este territorio en 1595, na-
vegó a lo largo del Orinoco río arri-
ba, encontró algunos objetos de
oro, pero nada de las dimensiones a) Calacali, República del Ecuador. b) Macapá, Brasil. c) Isla de Rolas, Rep. Dem. de São Tomé
e Príncipe.
de la leyenda, después de lo cual
publicó un libro sobre su viaje, ti-
tulado El descubrimiento de la
Guyana. Las especulaciones y los
buscadores de tesoros se han re-
petido por siglos, algunos dicen
haber encontrado El Dorado; re-
cientemente, en 1987, Roland W.
Vermehren Stevenson, quien ba-

33
La voz Amazonas proviene de río de las
Amazonas, dado al Marañón por Fran- d) Mbandaka, Rep. Dem. del Congo. e) Nabasunke, Uganda. f) Pontianak, Indonesia.
cisco de Orellana luego de enfrentarse el Figura 19. Monumentos al ecuador terrestre alrededor del mundo. 35
24 de junio de 1542, a una etnia local en
la cual hombres y mujeres se defendían
por igual. Orellana derivó el nombre 34
Un estudio reciente sobre este sorprendente viaje fue publicado por Robert Whitaker (2004).
del mito griego de las guerreras amazo-
35 Para mayor detalle sobre estos monumentos, véase en Internet: http://armchairtravelogue.blogspot.com/2009/06/equatorial-monuments-
nas de Asia y África, narrado por Heró-
doto y Diodoro. around-world.html

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


29

Macapá, capital del estado brasileño de Amapá, ahí se levanta un reloj atrozmente administrado por el rey Leopoldo II de Bélgica a través de
solar de 20 metros de altura, un enorme bloque de hormigón que sim- la Association Internationale du Congo (Asociación Internacional del
boliza la división hemisférica de la Tierra y es una de las principales Congo), una organización establecida para sentar las bases de la crea-
atracciones turísticas de la región (fig. 19 b). De Brasil continuamos ción de una colonia centroafricana. Entre 1879 y 1884, Leopoldo II
por el Atlántico hasta el golfo de Guinea, donde el ecuador se encuen- contrató al explorador Henry Morton Stanley en la primera expedición
tra con el meridiano de Greenwich, formando el eje cartográfico de la transafricana por la región ecuatorial para que consiguiera de los je-
Tierra. Continua por mar y toca tierra en un islote de la República fes locales, mediante tratados que no entendían o que eran coaccio-
Democrática de São Tomé e Príncipe, es la isla Ilhéu das Rolas, ahí hay nados a firmar, extensiones a lo largo del río Congo y sus afluentes. La
otro monumento (fig. 19 c). Es interesante mencionar que en esas cos- asociación también estableció puestos a lo largo del río. En un congre-
tas del golfo de Guinea, uno de los países más pequeños del continen- so internacional celebrado en Berlín el 15 de noviembre de 1884, y que
te africano ostenta en su nombre al ecuador, la República de Guinea concluyó el 26 de febrero de 1885, los poderes europeos y Estados
Ecuatorial, una antigua colonia española que obtuvo su independen- Unidos reconocieron que la asociación gobernara de facto una vasta
cia en 1968; paradójicamente, el ecuador no cruza por su territorio, extensión de ese territorio. El 1 de julio de 1885 se constituyó el Esta-
del cual dista 100 km de su frontera austral. Retornando a la trayecto- do Libre del Congo, con Leopoldo como su soberano. Leopoldo II afir-
ria, esta ingresa al continente africano por la República Gabonesa, 45 maba que la Association Internationale du Congo se había estableci-
km al sur de su capital Libreville, en lo que antiguamente se denomina- do para beneficiar a la gente del Congo, pero en realidad era un
ron los territorios de la Afrique Équatoriale Française, en esta región gobierno explotador y, en pocos años, dio lugar a una protesta inter-
selvática sólo algunos señalamientos por los caminos distinguen el nacional por las atrocidades cometidas contra la población nativa.
cruce ecuatorial. Transitando más al este, se llega a la República del Los atropellos de las potencias europeas en África encontraron sin-
Congo, donde no hay mayor rastro entre las espesas selvas y las regio- gular respuesta a principios del siglo XVIII en la región del Congo, per-
nes afectadas por el virus Ébola, la pobreza y el aislamiento. sonificada en la heroína doña Beatriz Kimpa Vita, que enfrentó la bru-
En Zaire, hoy República Democrática del Congo (que no debemos talidad del colonialismo portugués, convirtiéndose en mártir de una
confundir con la antes citada República del Congo), justamente a ori- religión sincretista que suponía un Cristo nacido en las regiones
llas del río Congo 36 cerca de la confluencia con el río Ruki, está la equinocciales del África; tras su sentencia a morir en la hoguera, acusa-
ciudad de Mbandaka, capital de la provincia del Ecuador. Mbandaka da por la Iglesia católica de brujería. Su memoria ha perdurado duran-
fue fundada en 1883 por el afamado explorador sir Henry Morton te siglos, como un símbolo de la independencia del Congo.38
Stanley,37 con el nombre de Ecuador. Stanley colocó una gran piedra De la República Democrática del Congo pasamos a la República de
cerca de la orilla del río al sur de la ciudad para marcar el punto donde Uganda. En este país, sencillos monumentos conmemoran el paso del
él creía que el ecuador pasaba, la roca persiste y se acompaña actual- ecuador en su intersección por dos de sus principales carreteras: en
mente de un señalamiento que la distingue (19 d), debido a la simbólica Kikorongo y en Nabasunke; ambas estructuras presentan el mismo di-
congruencia entre el ecuador y el río Congo hubo planes para edificar seño (fig. 19 e), por cierto, Kampala, la capital del país, dista 30 km al
ahí la capital del Estado Libre del Congo, que entre 1885 y 1908 fue norte de la línea del ecuador.
Muy interesante resulta que la región que hoy ocupa el norte de
36
Es necesario destacar que el río Congo es el principal afluente del África central, cruza Uganda y el sur de Sudán, durante el siglo XIX fue el centro de atención
la línea del ecuador en dos oportunidades: una en Mbandaka, y otra 800 kilómetros al para la fundación de una nación modelo que se denominaría Equatoria.
este en Kisangani. Sus afluentes recorren la segunda selva más grande del mundo
después del Amazonas.
Equatoria comenzó como una provincia de Egipto, situada a lo largo
37
del curso alto del Nilo Blanco, en la que también se incluía el lago
Actualmente una montaña en la frontera de la República Democrática del Congo y
Uganda lleva su nombre, es el Monte Stanley de 5 106 m/nm, se encuentra 45 km al norte
de la línea ecuatorial: 0° 23´ 09" / 29° 52´18". 38
Para más datos sobre esta rebelión véase Thornton, 1998.

EL ECUADOR
30

Alberto; fue un esfuerzo idealista con la intención de forjar un estado equinoccial en los Montes de la Luna, hoy denominadas Montañas
prototipo al interior de África. En sus inicios se asentó como un pues- Rwenzori.41 Encontrar las fuentes del Nilo ocupó a egipcios, griegos,
to fronterizo aislado que estaba ocupado por un puñado de aventu- romanos y misioneros jesuitas; asimismo, fue el centro de acaloradas
reros y soldados. Como provincia del Sudán Anglo-Egipcio, Equatoria discusiones de las sociedades geográficas europeas durante el siglo
fue constituida por sir Samuel White Baker en 1870 ,39 a partir de una XIX ,42 y lo es hasta nuestros días al tratar de demostrar cuál es el río más
expedición militar que trasladó 1 700 soldados egipcios a las regiones largo del mundo, el Amazonas o el Nilo. Años atrás se consideraba que
ecuatoriales del Nilo, con el propósito de abrir camino al comercio, la el Nilo era el río más largo del mundo, hoy corresponde al Amazonas
civilización y suprimir la trata de esclavos. Para 1874, Charles George según los científicos del Instituto Geográfico Nacional de Perú y del
Gordon asumió el cargo de gobernador de esta región y extendió sus Instituto Brasileño de Geografía y Estadística que encontraron su na-
territorios hasta Gondokoro; fue seguido en el cargo por Emin Pasha, cimiento en el Nevado de Mismi. Sin embargo, la reciente expedición
en 1878. Con la revuelta mahdista40 de la década de 1880 se puso fin a de Neil McGrigor (2006) reclamó haber descubierto que el Nilo es 107
la pretensión europea, y Equatoria dejó de existir como un puesto de kilómetros más largo siguiendo una nueva fuente por el río Kagera en
avanzada de Egipto en 1889, por lo que nunca se concretó como nación. la selva tropical de Nyungwe en Ruanda. Con estos datos la discusión
Actualmente estos territorios corresponden a la región autónoma persiste en cuál de estos dos ríos es el más largo.
de Sudán del Sur, conservan el nombre de Equatoria tres estados de la Continuando por el este, pasando por algunas islas del lago Victo-
nación sudanesa: Equatoria del Oeste, Equatoria Central y Equatoria ria, seguimos con la República de Kenia, donde se levantó un monu-
Oriental. La región se ha mostrado inestable, con brotes de guerra mento por el Club de Leones de Siriba, en la población de Maseno. Al
civil por más de dos décadas, que han culminado en un acuerdo de paz este, en la ladera norponiente del Monte Kenia (5 199 m/ nm), en las calles
firmado en el año 2005 y se tenía previsto para el año 2011 un refe- de la ciudad de Nanyuki, diferentes anuncios comerciales recuerdan
réndum sobre la constitución de la región como un país indepen- al visitante que se encuentra sobre la línea ecuatorial.
diente. Por último, el ecuador deja el continente africano por Somalia, una
El Nilo y la región del ecuador comparten una historia que se re- región actualmente devastada por la guerra civil, la hambruna y el
monta al antiguo Egipto, las evidencias arqueológicas así lo demues- caos. Durante el siglo XIX y la primera mitad del XX , la región ecuatorial
tran con representaciones de pigmeos en Asuán durante la Sexta Di- somalí fue un protectorado italiano, que durante el siglo XX fue deno-
nastía, unos 2 mil años aC (Warren, 1938: 185), se presume el contacto minado África Oriental Italiana. Sobresale en esta región la desembo-
entre ambos polos culturales. ¿Acaso estas regiones ecuatoriales del cadura del río Jubba en el océano Índico, explorada en 1624 por el
África serán las enigmáticas tierras de Punt y Ofir?, ¿a las que se envia- jesuita portugués Jerónimo Lobo. Jubaland, como también se conoce
ron expediciones durante el mandato del faraón Sahure y de donde se a esta región, se declaró independiente de Somalia entre 1998 y 1999,
obtuvieron resinas aromáticas, ébano, marfil y esclavos? Dos mil años actualmente el territorio está bajo el control del movimiento islamista
después de la Sexta Dinastía, en tiempos de Ptolomeo, durante el siglo Al-Shabaab.43
II dC, se asentaba que el Nilo tenía su fuente más allá del círculo de la Por el océano Índico, el ecuador atraviesa la República de Maldivas,
un país insular constituido por 1 196 islas, ninguna de las cuales es
39
tocada por la línea, es el país más bajo del mundo en altitud con un
Sir Samuel White Baker es recordado como el descubridor del lago Alberto, explorador
del Nilo y por sus hazañas como cazador. A su memoria, en la región ecuatorial de
Uganda encontramos el Monte Baker de 4,844 m /nm localizado 40 km al norte de la línea 41
Sobre la ubicación histórica y mítica de los Montes de la Luna, véase Relaño, 1993.
ecuatorial: 0° 22´ 00" / 29° 54´00".
42 Tal vez la más memorable sea la disputa en 1864 entre John Hanning Speke y Richard
40 Sublevación nacionalista islámica de los clanes Beggara, fue liderada por Muhammad Francis Burton, ante la Royal Geographical Society por asignarse los créditos del descu-
Ahmad Ibn Abd-Allâh, quien ocupó Jartum y derrotó al general inglés Charles George brimiento de las fuentes del Nilo.
Gordon, provocando una intervención inglesa que alteró la geografía política de la
43 Datos obtenidos en Internet de la enciclopedia Wikipedia.
región. Esta jihad fue sometida hasta 1898.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


31

promedio 2 m/nm, y también uno de km por la zona ecuatorial atrave-


los más dispersos por la distancia sando también la tercera isla más
entre sus islas. Este antiguo reino grande del mundo: Borneo.
budista, hoy de mayoría islámica, Antes de entrar a Borneo, el
fue colonia portuguesa, holande- ecuador toca tierra en un par de
sa y británica, que en 1965 obtuvo islotes en el estrecho de Karimata.
su independencia. Tres mil kilóme- En Borneo, el ecuador atraviesa
tros al este de las Maldivas están por la ciudad industrial de Pontia-
las costas de Indonesia, el ecua- nak46 en el delta del río Kapuas,
dor toca primero el archipiélago donde un obelisco señala el paso
Batu y se adentra por Sumatra, que de la línea equinoccial, este monu-
es la sexta isla más grande del mento denominado Tugu Khatu-
orbe. Un monumento conmemora listiwa (fig. 19 f) es el símbolo de
el ecuador a su paso por el pueblo la pujante urbe comercial que tie-
de Bonjol,44 donde la línea divide ne por lema “La ciudad de la mi-
oblicuamente a la isla por su mi- tad del mundo” Kota Khatulistiwa.
tad. Sumatra es la célebre isla que La ubicación del punto fue deter-
Figura 20. Bandera de la República de
bordeó Marco Polo en 1292 duran- minada por una expedición holan- 120 metros al norte con respecto Nauru, la línea horizontal representa al
te su segundo viaje a través de la desa de 1928 para determinar la al ecuador. 47 ecuador.
península de Malaca, en la litera- posición del ecuador, actualmen- Siguiendo la trayectoria de
tura occidental antigua se le con- te en el sitio se levanta una cons- nuestro interés, al este de Borneo
funde con la isla de Trapobana, trucción de 12 metros de altura el ecuador toca varias islas ape- dor, y una estrella blanca que sim-
rica en oro y especias, y en los tex- que data de 1990. Durante los equi- nas habitadas entre los mares de boliza la propia isla (fig. 20).
tos árabes del siglo IX se le conoce noccios de primavera y otoño el Célebes, Molucas y Halmahera. Llegando al antimeridiano o lí-
como Al-Ramni.45 El 26 de diciem- lugar es el foco cultural de la ciu- Ya en el océano Pacífico, en la nea internacional de cambio de
bre de 2004, la costa oeste de la dad, debido a la celebración de Micronesia, que fue escenario de fecha en el meridiano 180°, en el
isla fue azolada por un devastador ceremonias tradicionales duran- cruentas batallas durante la Se- centro del océano Pacífico encon-
tsunami de trágicas consecuen- te el medio día durante el paso gunda Guerra Mundial, una dimi- tramos la República de Kiribati,
cias. La República de Indonesia cenital del Sol. Recientemente la nuta isla de apenas 23 km² se ha país insular que junto con otras
engloba la mayor parte del archi- Agencia de Evaluación y Aplica- constituido como nación, es la islas del Pacífico inspiró la
piélago malayo y todas las anti- ción de Tecnología de la Repúbli- República de Nauru, aunque el narrativa de Robert Louis
guas Indias Neerlandesas; la na- ca de Indonesia, ha realizado co- ecuador dista de sus costas 50 km Stevenson, para escribir En los
ción se extiende a lo largo de 5 150 rrecciones a la ubicación del hito, al norte, la bandera del país mues- mares del sur (1908), en la cual el
encontrando una desviación de tra un campo azul con una línea temido rey Tembinok’ y Equator
44
Bonjol es el lugar de nacimiento del Imam amarilla que representa al ecua- city son referentes centrales de
Tuanku Bonjol, un héroe nacional en la 46
El nombre de Pontianak proviene de un la novela. En este amplio océano
lucha contra el gobierno neerlandés.
mito malayo en donde las mujeres que campo de pruebas nucleares en
45
Una obra fundamental sobre la historia murieron durante el parto se convierten
47
Datos obtenidos en Internet de la enci-
la última mitad del siglo XX , des-
de Sumatra es el texto del siglo XIX de en vampiros que buscan venganza y ate-
William Marsden (2005). rrorizan a los pueblos. clopedia Wikipedia. tacan las Espóradas Ecuatoria-

EL ECUADOR
32

día y cada nuevo año, no obstante que tienen la misma hora que Hawái, Archipiélago de Colón, este nom-
pero difieren en un día después. bre se sumó al de islas Encanta-
El 20 de abril del año 2009, la compañía Sea Launch realizó el lanza- das, como también se conocía a
miento de un satélite de telecomunicaciones de fabricación italiana, este archipiélago.
desde la plataforma flotante Ocean Odyssey (fig. 21) en las aguas de las Destaca en 1835 el arribo del
Espóradas Ecuatoriales ( 0° / -154°). El proyecto de la OTAN denomi- bergantín HMS Beagle, comandado
nado SICRAL 1B, demuestra cómo un lanzamiento al espacio desde el por el capitán Robert Fitz Roy, en
ecuador es más conveniente, 49 ya que la rotación terrestre permite él viajaba el joven naturalista Char-
aumentar la carga útil, alcanzando más de seis toneladas en un cohete les Darwin, quien realizaba estu-
de sólo tres etapas. 50 dios de geología y biología. El go-
Figura 21. Plataforma Ocean Odyssey,
El ecuador, en su trayectoria por el océano Pacífico, y aunque pasa bernador de la colonia de presos
durante el lanzamiento del satélite SICRAL
1B, en aguas ecuatoriales. por los países de Nauru y Kiribati, no toca tierra en 15 mil kilómetros, en Floreana dijo a Darwin que el
en un recorrido por mar que va de Indonesia hasta las islas Galápagos, caparazón de las tortugas difería
encuentra su límite oriental en la isla Isabel, donde el volcán Wolf, aún en su forma, dependiendo de su
les,48 un archipiélago de 11 islas de en actividad, se levanta imponente a más de 1600 metros sobre el nivel isla de origen.
las cuales sólo tres están habita- del mar. La primera misión científica que visitó las Galápagos fue la Luego de su retorno a Inglate-
das, se extienden 2,410 km en expedición Malaspina,51 una empresa de la Ilustración española alre- rra, Darwin se dio cuenta de que
dirección noroeste-sureste sobre dedor del mundo dirigida por Alejandro Malaspina, que arribó a las los especímenes de aves captura-
la línea del ecuador con una su- islas en 1790. Sin embargo, los registros de la expedición nunca llega- das en las Galápagos no eran sino
perficie de 680 km². La mayoría ron a ser publicados en su totalidad, debido a un proceso que se le variedades de pinzones, que tam-
pertenecen a la República de siguió a Malaspina en España. bién diferían de isla a isla. Estos
Kiribati, excepto tres que son po- Para 1793, James Collnet describió la flora y fauna de las islas y datos fueron cruciales en el desa-
sesión de los Estados Unidos de sugirió que podían ser utilizadas como base para los balleneros que rrollo de la teoría de la evolución
América. De todo el archipiélago, operaban en el océano Pacífico. Collnet también dibujó las primeras que presentó en El Origen de las
la más cercana al ecuador es la cartas de navegación de las Galápagos. Los balleneros capturaron y Especies, obra que ha revoluciona-
deshabitada isla Baker ( 0°11´41" sacrificaron miles de tortugas52 del archipiélago para extraer su acei- do la ciencia y los principios reli-
/ -176°28´ 46"). Por su posición te; a la par de los balleneros, llegaron los cazadores de focas peleteras. giosos de la humanidad (Idrovo,
en el antimeridiano, las Espóradas La República del Ecuador anexó las islas Galápagos el 12 de febrero de 2005).
Ecuatoriales son el primer lugar 1832, bajo el gobierno del general Juan José Flores, bautizándolas como
del mundo en saludar cada nuevo
49
Particularidades de este proyecto en línea <http://danielmarin.blogspot.com/2009/04/
48
Deriva su nombre del adjetivo sporas lanzamiento-de-un-zenit-3sl-sicral-1b.html>.
(genitivo sporados), que se traduce del 50
griego antiguo como esparcidas, disper- Apuntes sobre lanzamientos espaciales en esta latitud en este volumen el apartado
sas, como geográficamente lo están. Tam- 1.2.9 Un ecuador que mira al espacio exterior (p. 47).
bién se les conoce como islas de la Lí- 51 Un comentario al margen: cuando la expedición Malaspina se adentró por América del
nea, porque el archipiélago se dispersa a Norte en el estrecho de Fuca, participó una goleta, la cual tenía por nombre Mexicana.
lo largo de la línea ecuatorial. Se locali-
52 Las tortugas podían sobrevivir por meses sin alimento ni bebida, por lo que se las
zan al norte de las islas de la Sociedad,
al sur de Hawái y al oeste de las islas transportaba en los barcos a manera de alacenas vivientes que al ser sacrificadas
Fénix. proveían proteína fresca.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


33

1.2 Consideraciones físicas Circunferencia ecuatorial 40´ 075 014 metros.


Circunferencia polar 40´ 007 832 metros.
Los apuntes del apartado anterior nos han permitido destacar la im- Radio ecuatorial 6´ 378 137 metros.
portancia histórica y geográfica del ecuador, es pues el esbozo de un Radio polar 6´ 356 752 metros.
ecuador humanizado. Pero en un sentido físico, la latitud cero marca
una diferencia trascendental con el resto del planeta. Este contraste Según estos parámetros, determinamos que la circunferencia ecuato-
se hace manifiesto con interesantes fenómenos, como las perturbacio- rial con sus 40´ 075 014 metros, es la trayectoria recta más larga que
nes en la forma de la Tierra, las variaciones en las corrientes marinas, puede dibujarse sobre la superficie terrestre,55 pero en esta línea traza-
y los cambios en el clima que son algunas de las particularidades que da sobre el ecuador no se toma en cuenta la superficie irregular deter-
se tratan a continuación. minada por la topografía, o las deformaciones de océanos y mares por
las mareas, pues se asume la adopción de un determinado elipsoide
1.2.1 L A FORMA DE LA T IERRA Y SU VARIACIÓN EN EL ECUADOR (WGS 84),56 que como modelo geométrico guarda propiedades conoci-
das. La forma matemática de un elipsoide resulta útil para la fijación
Históricamente se supusieron diversas formas para el Mundo.53 Homero de medidas, distancias y de un sistema de ejes a los cuales se refieren
opinaba que era como un disco plano rodeado por el río Océano, así habitualmente las posiciones de los distintos puntos de la superficie
también lo era para algunas culturas de Mesoamérica, pero con un terrestre, valiéndose de la longitud y la latitud geodésicas. En este
contorno rectangular u oval, de cualquier forma ya hemos menciona- sentido, tenemos que la Tierra es un elipsoide (superficie curva) en
do que la esfericidad es esencial para determinar el ecuador, y que revolución, esto determina que su forma se asemeje a un esferoide
esta geometría fue planteada desde el siglo VI a. C. por los geómetras oblato,57 donde el eje de simetría es menor por efecto del movimineto
griegos, aunque su redondez fue cuestionada ocasionalmente aún has- de rotación de la Tierra.
ta la Edad Media, no fue sino hasta el siglo XVIII, que la Misión Geodésica Por otra parte, cuando se define a la Tierra como un geoide, se hace
Francesa demostró que la forma real de la Tierra es la de un esferoide, referencia a la superficie equipotencial del campo gravitatorio terres-
noción que ya había sido predicha por Isaac Newton en sus Principia tre que coincide con el nivel medio del mar. Por lo tanto, el geoide es
desde el año de 1687. Newton se valió de un sencillo experimento: una forma teórica determinada que difiere de la superficie orográfica
hacer girar velozmente un cuerpo viscoso en un fluido líquido, de este y de la simetría de un esferoide oblato, pues como geoide adopta la
modo expresó que: la forma de equilibrio que tiene una masa bajo el forma de una pera, si exagerásemos sus proporciones (Seeber, 1993).
influjo de las leyes de gravitación y girando en torno a su eje es la de un El lector encontrará que tratamos dos categorías diferentes: una geo-
esferoide aplastado en sus polos.54 Estudios recientes apuntan a que la métrica con el esferoide oblato, y otra gravitacional con el geoide;
Tierra está achatada en un 0.336% con respecto a su eje de rotación, conviene en la figura 22 agregar un corte topográfico58 en el recuadro
un consenso de especialistas de la Unión Astronómica Internacional
( UAI), del Sistema Geodésico de Referencia (GRS), del Sistema Geodésico 55
Se induce que este abultamiento ecuatorial se produjo en periodos de la historia geológica
Mundial ( WGS) y del Servicio Internacional de Rotación Terrestre (IERS ) de nuestro planeta, en los que su temperatura era mayor, por lo que tenía una especie
de consistencia mucho más plástica y fácil de deformar.
postulan las siguientes dimensiones para el planeta:
56 El WGS 84 es un sistema de coordenadas cartográficas mundial que permite localizar
cualquier punto de la Tierra. WGS 84 son las siglas en inglés de World Geodetic System 84,
que significa Sistema Geodésico Mundial de 1984.
57 Cuando el eje de simetría es mayor (alargado) se denomina esferoide prolato.
53
Mundo, nombre dado a la Tierra desde el punto de vista humano 58 La topografía se limita a pequeñas extensiones de terreno, utilizando la denominación
54
Los trabajos posteriores de Gauss y Helmert durante el siglo XIX ratificaron los descubri- de geodesia para áreas mayores. De manera muy simple, puede decirse que para un
mientos de la Misión Geodésica Francesa, que ya hemos tratado en el apartado 1.1.3. topógrafo la Tierra es plana, mientras que para un geodesta no lo es.

EL ECUADOR
34

Figura 22. Diferentes perfiles que adopta la


forma de la Tierra según el planteamiento
teórico para representarla, adaptación al
Figura 23. Si determinamos la altura desde el centro de la Tierra, el volcán
modelo de Seeber (1993).
Chimborazo es más alto que el monte Everest por 2200 metros, esto obedece a que
la forma de la Tierra no es la de un círculo perfecto.

de la izquierda, con lo cual quedan contrastados diferentes perfiles debe esta distinción? A la forma elipsoidal del planeta donde las
que adopta la forma de la Tierra. regiones ecuatoriales están más distantes del centro de la Tierra,
La forma de la Tierra nos conduce a una opinión relevante al así que la admirable altura del Monte Everest no es suficiente para
reflexionar sobre cuál es el punto más alto en el planeta, automática- remontar la forma de la Tierra. La cumbre del Chimborazo se en-
mente pensamos en la cima del Monte Everest de 8848 m/ nm. Sin em- cuentra 2 200 metros más cerca del “cielo” que el legendario Everest,
bargo, si por altura concebimos el punto más alejado del centro de y con ello acredita ser la superficie terrestre más próxima a la bóve-
la Tierra y no el correspondiente al nivel del mar, la cumbre del da celestial. De hecho, hay tres montañas más: el Huascarán, el
Everest no es el punto extremo, este corresponde a la cima del vol- Cotopaxi y el Kilimanjaro que sobrepasan al Everest. En la revista
cán Chimborazo en la República del Ecuador (fig. 23). 59 ¿A qué se National Geographic del mes de enero de 2002:4, se muestra un diagra-
ma de corte transversal de la Tierra donde el monte Chimborazo es
59
Alexander von Humboldt, en 1802, consideró que la montaña más alta del mundo era el más alto que el Monte Everest cuando se mide desde el centro de la
Chimborazo. Fue hasta 1852 que se le dio este lugar al monte Everest. Tierra.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


35

Sitio Latitud Longitud Altitud Distancia al centro de la Tierra60


Cima del volcán Chimborazo -01° 28´ 11" -78° 49´ 02" 6267 m/nm 6´384 450 metros
Arista del Águila y el Cóndor, Ecuador61 00° 00´ 00" -77° 59´ 58" 4740 m/nm 6´382 877 metros
Cima del Monte Everest 27° 59´ 18" 86° 55´ 30" 8848 m/nm 6´382 250 metros

Una diferencia más en la com- do diferencias. Actualmente el uso


paración entre el monte Everest y de satélites permite mediciones
el volcán Chimborazo: si en la cima más precisas; por lo tanto, la pro-
del Chimborazo instalamos una porción del metro como una diez-
plomada encontraremos una míni- millonésima no corresponde a los
ma deflexión entre su vertical y la valores modernos, y tampoco fu-
que teóricamente corresponde turos, pues no obstante que éstos
por la forma geométrica de la Tie- se modifiquen por el manejo de
rra. Si realizamos el mismo ejer- instrumentos más precisos, la for-
cicio en la cima del Everest, resul- ma de la Tierra se encuentra en
ta una diferencia considerable, constante cambio por factores
como apreciamos en la figura 24, naturales. En efecto, hay modifi-
con la desviación de la vertical caciones, y éstas obedecen al cam-
entre la latitud geográfica ( ) que bio climático. El fenómeno meteo-
obedece a la perpendicular del es- rológico conocido como El Niño
feroide oblato, y la latitud geocén- (El Niño Oscilación Sur, ENOS) de-
trica ( ´) que apunta al centro de forma la superficie del planeta y
la Tierra. En suma, sólo en el ecua- altera el campo de gravedad. Una
dor y en los polos, la vertical local investigación realizada en la Uni-
apunta con precisión al centro de versidad de Texas con el apoyo de
la Tierra. los datos del satélite láser Ran-
En este ámbito de variaciones ging de la NASA, ha comprobado que
naturales, tenemos que en 1738, Figura 24. Deflexión hipotética entre la latitud geocéntrica y la latitud geográfica la Tierra se ha abombado a la altu-
Pierre Bouguer y Charles Marie de desde la cima del monte Everest. ra del ecuador y que se ha estre-
La Condamine como parte de los chado en los polos durante los úl-
trabajos de la Misión Geodésica debidas a la atracción gravitatoria de una montaña cercana, en su mo- timos 28 años, como consecuencia
Francesa, eligieron el volcán Chim- mento sus resultados fueron desestimados por las dificultades técni- de los cambios que se producen
borazo en la cota de 4 680 m/nm para cas y sus propias desavenencias (Lafuente y Mazuecos, 1992:165).
realizar el experimento de Schie- Retomando las dimensiones terrestres, es conveniente mencionar
hallion o de la desviación del pén- que la más convencional medida de longitud en el mundo que corres- 60
Resultados obtenidos según parámetros
IERS 2000.
dulo, y así determinar la densidad ponde al metro, fue inicialmente adoptada por la Academia de Cien-
media de la Tierra. El experimen- cias francesa a finales del siglo XVIII , como la diezmillonésima parte de 61
La Arista del Águila y el Cóndor, sitio
propuesto por la Expedición 0° / 0°C
to consistía en medir las ligeras la distancia que separa el polo de la línea del ecuador terrestre. Con el como el vértice del ecuador. Detalles de
variaciones que sufre un péndulo paso de los años, instrumentos cada vez más precisos han determina- este descubrimiento en el capítulo II .

EL ECUADOR
36

Sitio Latitud Altitud Gravedad Peso de una persona con masa de 80 kg en N64
Nueva York 40° 10 m/nm 9.80166 m/seg2 784.132 N
México, D. F. 19° 2413 m/nm 9.77835 m/seg2 782.268 N
Costa de Ecuador 0° 10 m/nm 9.78029 m/seg2 782.423 N
Ciudad Mitad del Mundo 0° 2478 m/nm 9.77267 m/seg2 781.813 N
Arista del Águila y el Cóndor 0° 4740 m/nm 9.76570 m/seg2 781.256 N

en los niveles de agua de los océa- vez cambios en el nivel del campo cuadrado de la distancia. En una La altura del Monte Everest nos
nos, los continentes y la atmósfera. de gravedad de la Tierra, que tam- esfera el radio desde cualquier aleja tanto del centro de la Tierra
Se pudo comprobar que durante bién ha sufrido variaciones signi- punto es siempre el mismo, pero que equipara nuestro peso con el
el fenómeno del ENOS, las grandes ficativas en los últimos 28 años en un esferoide no. Retomando el del vértice del ecuador terrestre
precipitaciones asociadas a las (Cheng y Tapley, 2004).62 parámetro del radio ecuatorial de en la Arista del Águila y el Cóndor,
aguas más cálidas derivaron en un la Tierra que es de 6´378 137 m y el compensando así la diferencia de
aumento de los desplazamientos 1.2.2 L A INTENSIDAD DEL CAMPO radio polar de 6´356 752 m, entre latitud entre ambos lugares. Sin
de agua hacia el Pacífico central, GRAVITATORIO EN EL ECUADOR ellos hay una diferencia de 21 385 embargo, hay un factor más a fa-
lo que provocó asimismo una se- metros, así que, a medida que nos vor de la ligereza en el vértice
quía en Australia e inundaciones Resulta atractivo aceptar que en vayamos desplazamos al sur o al ecuatorial, se trata del movimien-
en Perú. el ecuador se pesa menos. En efec- norte del ecuador, la fuerza de gra- to de rotación. Los cuerpos expe-
Parecido al fenómeno del ENOS, to, una persona que en la Ciudad vedad se va incrementando, pues rimentan una fuerza centrífuga
la oscilación que afecta al Pacífico de México tiene una masa de 80 kg la distancia con el centro de la que varía según la latitud: es máxi-
se caracteriza por una fluctuación pesa 782.268 N, al desplazarse el Tierra se va acortando. También, la ma en el ecuador y nula en los po-
de temperatura a largo plazo. Esta vértice del ecuador terrestre en la altitud repercute en el peso, pues los (véase fig. 26). Esta fuerza cen-
oscilación provoca otros cambios Arista del Águila y el Cóndor, su a mayor altura, mayor es la distan- trífuga hace disminuir el efecto de
en la localización de masas de peso es de 781.256 N, ha disminui- cia con el centro de la Tierra y por lo la atracción gravitatoria, y la des-
agua fría y caliente. En consecuen- do 1.012 N, algo así como 100 gra- tanto, un punto más a considerar vía de su dirección original hacia
cia, se producen periódicamente mos. Es necesario señalar que la en la variación del campo gravita- el centro de la Tierra aproximada-
redistribuciones de masas de agua masa en ambos casos es la misma, torio. En la tabla superior, valién- mente en 0.03 m/seg2 para el ecua-
presentes en los océanos, los con- lo que difiere es el peso, pues el donos de un algoritmo en función
tinentes y la atmósfera. Según los peso no es una propiedad intrín- de la latitud y la altitud, publica- 62
Reseña en español de este artículo en
investigadores, lo que ha podido seca del cuerpo, sino que depende do por el Instituto Nacional de línea < http://www.tendencias21.net/La-
verificarse con este instrumento de la intensidad del campo gravi- Metrología de Alemania, 63 se ha forma-de-la-Tierra-ha-cambiado-en-los-
ultimos-28-anos_a528.html>.
de observación espacial (satélite tatorio. Esta pequeña variación en calculado la gravedad local y el
63
láser Ranging), es que el desplaza- el campo gravitatorio está deter- peso, teniendo como el valor más Proyecto de gravimetría del Schwere-
Informationssystem ( SIS) en línea para el
miento de masas de agua a gran minada en primera instancia por bajo el de la Arista del Águila y el 2 de julio de 2010 <www.ptb.de/en/org/
escala está asociado a los cambios la forma de la Tierra, que al no Cóndor. En resumidas cuentas, 1/11/115/_index.htm>.
climáticos globales de larga dura- ser la de una esfera uniforme, sino ¿hay otro lugar del mundo donde 64 N, Newton, unidad de fuerza en el Siste-
ción. Una de las consecuencias un esferoide, encuentra variacio- podríamos pesar menos que en el ma Internacional de Unidades, se define
como la fuerza necesaria para propor-
apreciadas en estos desplazamien- nes, ya que la fuerza de atracción vértice del ecuador terrestre o en cionar una aceleración de 1 m/seg 2 en un
tos de agua es que provocan a su es inversamente proporcional al la cima del Monte Everest? objeto de 1 kg de masa.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


37

dor.65 En suma, tomando en cuenta la latitud, la altitud y la fuerza cen- Manhattan.66 En 1947, el físico japonés Ukichiro Nakayama propuso
trífuga, si estamos en el vértice ecuatorial, nuestro peso será inferior una explicación a partir del centro de la masa del huevo y de las
en un 0.75%, si lo contrastamos con valor medio para la gravedad del rugosidades de ambas superficies. Por cierto, recientemente se ha ba-
planeta determinada en 9.81 m/seg2. Existen otros factores que provo- tido el récord del mundo de mantener 439 huevos en equilibrio al mis-
can anomalías en el campo gravitatorio y, por lo tanto, fluctuaciones mo tiempo,67 y si desea conocer trucos para realizar esta habilidad
en el peso; se trata de variaciones locales en la topografía, la presen- consulte el libro Egg Balancing Secrets (Stockdale y Geyer, 2006) y se
cia de volcanes y aspectos geológicos con la presencia de rocas de sorprenderá. En conclusión, la fuerza electromagnética y la gravita-
mayor densidad, pero estas variaciones son tan pequeñas que tan sólo cional son considerablemente más débiles que un buen truco para
se pueden detectar con instrumentos de gran precisión como lo está equilibrar un huevo en el ecuador.
realizando el satélite GOCE (siglas en inglés de Explorador del Campo
Gravitatorio y la Circulación Oceánica) de la Agencia Espacial Euro- 1.2.3 E L ECUADOR MAGNÉTICO
pea, puesto en órbita recientemente (2009), el cual está detallando
modelos únicos de los campos de gravedad de la Tierra. La Tierra es un gigantesco imán que genera un campo magnético inter-
Cuando abordé la coordinación de la Expedición 0° / 0°C, uno de no que es semejante al producido por un dipolo situado en el centro
los objetivos del proyecto era investigar sobre los sucesos extraordi- de la Tierra, guarda una inclinación de 10.5° respecto al eje de rotación.
narios que acontecen en la línea ecuatorial y que son exclusivos de Los polos geomagnéticos, Polo Norte magnético y Polo Sur magnético,
esta latitud geográfica. Mucho me habían sorprendido las demostra- son los puntos en los que el eje del dipolo alcanza la superficie terres-
ciones que se presentaban al turismo en la Ciudad Mitad del Mundo, tre, de tal suerte que el ecuador magnético es el plano perpendicular a
sobre los “misterios del ecuador”, obviamente esas exposiciones para dicho eje, el cual describe una línea de fuerza que le da la vuelta a
los visitantes carecían de una explicación científica válida, y en algu- todo el planeta, esta línea sinuosa no coincide necesariamente con el
nos casos eran tan especulativas que apuntaban al esoterismo. Una de ecuador geográfico y se manifiesta en lugares donde una aguja imanta-
las que más llamó mi atención y que en su momento admití, se relacio- da libre o aguja de inclinación se mantiene horizontal (Muniz, 1997:
na con la gravedad, y por eso hago este comentario. Para quien así me 12). Como el ecuador magnético responde a variaciones constantes de
lo explicó, es cuestión del “punto gravitacional y magnético” que en intensidad y dirección, anualmente es posible registrar diferencias.
esta latitud equilibra los objetos como no sucede en ningún otro lugar En la figura 25 se aprecia la inclinación magnética para el año 2010
del mundo, lo demostró parando un huevo sobre la cabeza de un cla- según el modelo del National Geophysical Data Center (NGDC) de EUA. El
vo. Investigando sobre ese hecho encontré que no es exclusivo del ecuador magnético determinado en su posición por un modelo teóri-
ecuador, pues hay datos que lo remontan a China, en la ceremonia que co permite establecer los hemisferios Norte y Sur magnético, así como
se realiza el día Li Chun, primer día de primavera, cuando según la la latitud magnética que describe líneas semejantes a los paralelos
tradición ancestral resulta más fácil equilibrar huevos, al menos así geográficos y que se denominan isóclinas. Al ecuador magnético, por
aparece publicado en la revista Life de marzo 1945 (Jacoby, 1945: 36- tanto, le corresponde el grado cero o punto de partida, y por su ubica-
37), Albert Einstein comentó al respecto que no creía que la fecha ción también es usual denominarlo “ecuador de inclinación”.
influyera en modo alguno en el equilibrio de los huevos. Sin embargo Por arriba del ecuador magnético, en la ionosfera, a una altura
en EUA se generó una fiebre por parar huevos el día del equinoccio, aproximada de 100 km, se mantiene una corriente magnética conocida
desde 1983 se efectúan en Nueva York, congregaciones de pacifistas
que se pronunciaban por la armonía mundial manifestando su propó- 66
Véase artículo publicado en The New Yorker, del 4 de abril de 1983 sobre la activista
sito equilibrando huevos durante el equinoccio en diversos sitios de Donna Henes.
67 En Melbourne, Australia, el estadounidense Brian Spotts batió el Récord Guiness, al
65
Según datos de Karen Masters y Dave Rothstein de la Universidad de Cornell, EE . UU . mantener por 15 horas 439 huevos en equilibrio vertical.

EL ECUADOR
38

Tendencias de salud geoambiental apuntan a la importancia del


campo magnético terrestre. En efecto, un estudio reciente 68 demues-
tra que la anulación del campo magnético terrestre provoca agresivi-
dad en ratas de laboratorio. Aunque el comportamiento no es un sín-
drome definido como tal, la posibilidad de que el aislamiento destroce
la conducta y la pérdida de la memoria de los astronautas por ejemplo,
sale a relucir. Según científicos rusos, el riesgo en este caso no se limi-
ta a estrés psicológico, sino que podría existir además un factor bioló-
gico en los astronautas. Controversia, y una clara oposición de médicos,
han provocado la propagación de las noticias que alertan de altera-
ciones en el metabolismo y el reloj biológico, con afectación a la salud
por un aumento en ciertas regiones del planeta debidos a la actividad
geomagnética, pues hasta la fecha no se ha demostrado tal mecanis-
mo. Según Montenegro (2006:5), se conoce muy poco sobre los efectos
Figura 25. Dirección del campo magnético de la Tierra para el año 2010 según el en la salud del geomagnetismo terrestre y de sus variaciones, pero
NGCD . La línea sinuosa en color verde corresponde al ecuador magnético. apunta que hay variaciones en la intensidad de este campo dipolar
que es de alrededor de 60.000 nanoteslas (nT) en los polos y de unos
30.000 nT en el ecuador, con fluctuaciones determinadas por el Ciclo
como electrochorro ecuatorial. El electrochorro ecuatorial es una for- Solar; además, de los posibles efectos de la radiación cósmica que
ma de magnetismo, consistente en la electrificación atmosférica que proporciona una dosis efectiva anual media por persona de 0,36
es producida por el flujo de electrones en contacto con los rayos sola- miliSievert (mSv), dicha dosis aumenta hacia los polos con la altura, y
res que pasan por el ecuador magnético. En otras palabras, es una disminuye en el ecuador.
cinta estrecha de energía que fluye hacia el este durante el día en la
región ecuatorial. El fenómeno fue identificado inicialmente en 1922, 1.2.4 U N PLANETA EN MOVIMIENTO
en el observatorio geomagnético peruano de Huancayo (Onwumechili,
1998), su estudio es reciente y aunque se cuenta ya con información Aunque estemos sentados en nuestra casa, aparentemente inmóviles,
específica ofrecida por el satélite geodésico alemán CHAMP, aún que- estamos viajando por el universo a una velocidad pasmosa. Nuestro
dan muchas incógnitas por resolver sobre su composición e influen- planeta gira sobre sí mismo, a su vez, circula alrededor del Sol y se
cia en el clima. En la literatura esotérica que presta atención a los mueve velozmente en torno a la Vía Láctea. Los principales movimien-
campos de energía en el Cusco y en otras regiones de los Andes, se tos de la Tierra son: traslación, rotación, precesión y nutación.
otorga especial interés en la intensidad del ecuador magnético sobre En la traslación, que es su viaje alrededor del Sol, la Tierra se des-
la región, pues consideran que existe un eje sensitivo de conductividad plaza a una velocidad orbital media de 107 278 km/h, algo nada desdeña-
máxima que es generado por el electrochorro ecuatorial, el cual se ble y de lo cual no nos damos cuenta en absoluto. Pero un asunto
intensifica justamente durante los equinoccios, y que paradójicamen-
te encontrará un momento preponderante junto con las profecías del
año 2012 (véase Chávez et al., 2006), pero más allá de las ideas místi-
68
cas, el electrochorro ecuatorial promete aplicaciones tangibles que Estudio publicado por la agencia rusa RIA Novosti, en octubre de 2008 en entrevista a la
directora del Instituto de Biología y Biofísica de la Universidad de Tomski, Natalya
permitirán instalar en un futuro sistemas no convencionales de comu- Krivova. En línea para julio de 2010, en <http://www.Ecuadorciencia.org/
nicaciones a muy altas frecuencias. noticias.asp?pg=15&sn=1629>.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


39

diferente es la rotación terrestre,69 pues la velocidad varía según el


lugar donde nos encontramos. De tal suerte que en los polos tiene un
valor de cero, pero en el ecuador se incrementa a 1 670 km/h, esto signifi-
ca que los cuerpos experimentan una fuerza centrífuga que varía según
la latitud: es máxima en el ecuador y nula en los polos (fig. 26). Así que
una persona parada sobre el ecuador se mueve más rápido que en
cualquier otro punto de la Tierra, como si viajara en el borde exterior
de un carrusel.70 Por ejemplo, en la Ciudad Mitad del Mundo se mueve a
razón de 1670 km/h, mientras que en la Ciudad de México, a 1569 km/h, una
diferencia nada despreciable de 101 km/h. Así que en el ecuador se vive a
una velocidad de vértigo que afortunadamente es imperceptible.71
Pasemos ahora al movimiento de precesión, que es muy parecido al
de un trompo (fig. 27). Se debe a que la Tierra no es una esfera perfecta,
sino un esferoide oblato en el que el diámetro del ecuador es mayor
que el de los polos, produciéndose un abultamiento ecuatorial. Como
el abultamiento está más cerca del Sol, se ejerce mayor fuerza gravita-
toria sobre esta región. Con esto, el Sol trata de “enderezar” a la Tierra,
que se encuentra inclinada en 23.5° con respecto a la eclíptica. Este
efecto, junto con la rotación, produce un pequeño bamboleo de los
ejes de rotación en la Tierra, dibujando un círculo imaginario con un
periodo o vuelta completa de 25 780 años, conocido como año plató-
nico o ciclo equinoccial. La consecuencia más importante de este mo-
vimiento es la precesión de los equinoccios que produce un cambio
de orientación alrededor del Polo Norte y del ecuador con respecto a Figura 26. Velocidades alcanzadas por el movimiento de rotación en diversas
la esfera celeste, así que los puntos de equinoccio y solsticios cam- latitudes.
bian de posición, haciendo que las fechas de estación se atrasen algu-
nos días como resultado de que una mitad del abultamiento ecuato- ce momento de fuerza.72 En cambio, todo el resto del tiempo, y sobre
rial se sitúa de un lado de la eclíptica y la otra mitad del abultamiento, todo en los solsticios, el abultamiento de uno de los lados de la
del otro lado. Durante los equinoccios, las protuberancias de cada eclíptica no se encuentra a la misma distancia que del otro lado. Debi-
lado de la eclíptica están a la misma distancia del Sol y éste no produ- do a la precesión, las coordenadas de los astros en la esfera celeste
cambian, pues están basadas en la proyección de los meridianos y
69
paralelos terrestres sobre esta esfera, además el movimiento de prece-
Es el movimiento que efectúa la Tierra girando sobre sí misma, determina el día y la
noche. sión produce importantes modificaciones en el clima.
70 Si no percibimos esta vertiginosa velocidad es porque formamos parte del mismo
A la precesión de la Tierra se le superpone un segundo desplaza-
sistema. Es decir, nos encontramos en movimiento al igual que el planeta, y como la miento que es más ligero e irregular y que asemeja una vibración, es el
velocidad de giro es constante, no hay aceleraciones que nos den sensación de movi- movimiento de nutación. Éste es producido principalmente por el efec-
miento. Un efecto similar es cuando viajamos al interior de un avión.
to gravitacional de la Luna sobre el abultamiento ecuatorial, de la
71 Detalles de cómo realizar el cálculo de la velocidad según la latitud geográfica por Matt
Rosenberg, en línea para el mes de julio de 2010 < http://geography.about.com/od/
learnabouttheearth/a/earthspeed.htm?nl=1> 72
Véase en la mecánica newtoniana como una magnitud vectorial.

EL ECUADOR
40

Figura 27. El movimiento de precesión de la Tierra es similar al de un trompo.

misma manera como el Sol produce el movimiento de precesión. La


nutación consiste en un vaivén del eje polar, desplazándolo nueve
segundos de arco en 18.6 años (Martínez, 2005: 68).

1.2.5 E L EFECTO C ORIOLIS

En 1835, el físico francés Gaspard-Gustave Coriolis matematizó la fuer-


za que se ejerce sobre cualquier masa que se desplace sobre un cuer-
po en rotación; desde entonces, a este fenómeno se le denomina efec-
to Coriolis. Un objeto en movimiento sobre la superficie terrestre
soporta un leve desvío de su trayectoria en sentido horario en el he-
misferio Norte y antihorario en el sur (fig. 28). A pesar de tener una
Figura 28. Hipotética situación del efecto Coriolis a escala global sobre cuerpos de
consecuencia muy leve en los objetos que manejamos comúnmente,
agua y aire.
el efecto Coriolis se trata de un impulso muy importante a escala glo-
bal. En escalas pequeñas, no se puede percibir sin ayuda de instru-
mentos, así que la demostración acerca de la diferencia en la vorticidad Para ilustrar el efecto Coriolis73 imaginemos que estamos sobre un
de remolinos en desagües entre los dos hemisferios de la Tierra, que se carrusel en movimiento, si tratamos de caminar alejándonos del eje de
ofrece a los turistas en el ecuador, no tiene fundamento, porque en la rotación siguiendo una trayectoria radial con destino al extremo distal,
realidad no es determinante, pues el agua contenida en un recipiente sentiremos una fuerza que nos empuja en el sentido contrario a la
con desagüe gira a varias revoluciones por minuto, por ende, el efecto rotación, ese es el efecto Coriolis. Veamos otro ejemplo: imaginemos
Coriolis será demasiado débil para ser notado en un giro que es dema- que disparamos un proyectil desde el ecuador con dirección al norte,
siado rápido, pues el efecto Coriolis requiere sistemas enormes, acu-
mulados y muy extendidos en el tiempo, como sucede con un huracán 73
Ejemplos obtenidos de la enciclopedia Wikipedia, efecto Coriolis, en línea para el mes
(véase un estudio detallado en Emili, 2007). de julio de 2010.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


41

el cañón gira con la Tierra hacia el ciones o modificaciones de este estas perturbaciones para la re- centrífuga se ejerce por igual en
este y, por tanto, imprime al pro- patrón en la circulación tienen gión de nuestro interés. toda la circunferencia ecuatorial,
yectil esa velocidad, conside- que ver con la disposición de las Una marea es un cambio perió- mientras que las mareas sólo au-
remos que sobrevuela amplias costas y la compensación introdu- dico en el nivel del mar, produci- mentan de nivel cuando se en-
distancias sobre la Tierra, su velo- cida por las corrientes cálidas que do principalmente por las fuerzas cuentran con el paso de la Luna y
cidad lineal hacia el este va dismi- van, en los océanos, de las costas gravitatorias que ejercen el Sol y el Sol.
nuyendo conforme se acerca al orientales de la zona intertropical la Luna. En las áreas próximas al Dos veces al año, entre los me-
polo como vemos en la figura 26, hacia las occidentales de las zo- ecuador, las mareas suelen ser muy ses de febrero y marzo, las aguas
la inercia del proyectil hacia el este nas templadas de los continentes. débiles, casi imperceptibles, sal- del océano Atlántico penetran en
hace que su velocidad angular au- Lo mismo que sucede en la atmós- vo en las desembocaduras de los la desembocadura del río Amazo-
mente y que, por tanto, adelante a fera, se produce una especie de ríos, donde el ascenso de las aguas nas, alcanzado hasta cuatro me-
los puntos que sobrevuela. Si el convergencia en las latitudes marinas puede dar origen al repre- tros de altura y logran avanzar más
vuelo es suficientemente largo, ecuatoriales por la fuerza centrí- samiento de las aguas fluviales, de 15 kilómetros río arriba. Para
el proyectil caerá en un meridia- fuga del movimiento de rotación. produciéndose un oleaje río arri- que este fenómeno natural se pro-
no situado al este de aquél desde Tanto el océano como la atmósfe- ba cuando las crestas de la marea duzca un factor astronómico es re-
el cual se disparó, a pesar de que ra tienen un abultamiento ecuato- entrante rompen contra el agua de levante, la marea es más fuerte
la dirección del disparo fue exac- rial por la rotación terrestre, es de los ríos. Este oleaje produce un cuando la atracción del Sol se
tamente hacia el norte. Análoga- algunos metros de altura en el mar, ruido característico74 que recibe agrega al de la Luna en plenilunio
mente, una masa de aire que se y de varios kilómetros en la atmós- el nombre de macareo en el delta o novilunio, así que cuando el Sol
desplace hacia el este sobre el fera. A su vez, este abultamiento del río Orinoco y pororoca o sizigia y la Luna se encuentran sobre un
ecuador aumentará su velocidad ocasiona una especie de obstácu- en el río Amazonas. El motivo de mismo plano en relación con la
de giro con respecto al suelo, en lo a la libre circulación y al libre la escasa amplitud de las mareas Tierra, es el momento de la sizigia
caso de que su latitud dismi- intercambio de energía oceánica en la zona ecuatorial se debe a que o marea de agua viva (fig. 29).
nuya. y atmosférica entre los dos hemis- es la zona donde los efectos del Otro fenómeno importante en
Al actuar sobre masas de aire o ferios. movimiento de la rotación terres- el ecuador por el efecto de la rota-
agua en latitudes intermedias, el tre son mayores por la fuerza ción, de una gravedad más débil y
efecto Coriolis induce un giro al 1.2.6 L OS OCÉANOS Y EL ECUADOR centrífuga generada por dicho mo- de una baja en la presión baromé-
desviar hacia el este o hacia el vimiento. Debido a la fuerza cen- trica, es el caso de las “calmas
oeste las partes de esa masa que Las grandes concentraciones de trífuga, el nivel del mar es mucho ecuatoriales”, que en lengua ingle-
ganen o pierdan latitud. En las agua marina se ven alteradas por mayor en el ecuador que en las sa se denominan doldrums. El aire
cuencas que tienen la forma apro- la mecánica de la naturaleza pro- zonas templadas y, sobre todo, en caliente produce el aumento de
piada, como la del Atlántico norte pia del ecuador. Se suscitan cam- las polares. Como resulta obvio, la los vientos flojos y calmas infa-
y la del Atlántico sur, el efecto bios en la intensidad de las mareas, mayor altura de las aguas ecuato- mes, por lo cual muchos marineros
Coriolis desvía las corrientes ma- en el contenido salino de los océa- riales por la fuerza centrífuga im- a vela odian esta región, ya que es
rinas hacia la derecha en el hemis- nos, en la densidad media de sus pide que las mareas sean claramen- una zona muerta de la navegación
ferio Norte y hacia la izquierda en aguas, y además un aumento en la te notorias, ya que esa fuerza sin viento para alimentar las ve-
el hemisferio Sur, de la misma ma- temperatura que determina varia- las, como mencionamos que acon-
nera que sucede con la circulación ciones importantes en el clima. 74
El ruido antecede al fenómeno hasta teció a la expedición de Magalla-
general de los vientos. Las excep- Brevemente apuntaremos sobre media hora antes de que suceda. nes-Elcano. Estas zonas se sitúan

EL ECUADOR
42

temperatura es, por supuesto, ma-


yor alrededor del ecuador, donde
hay mayor radiación solar; esto
provoca un aumento en la evapo-
ración del agua de mar y, por tan-
to, un incremento en la precipita-
ción que, por cierto, excede a la
evaporación. La alta precipitación
es notoria, pues tres de los más
caudalosos ríos del planeta se ori-
ginan en la región ecuatorial: el
Amazonas, el Congo y el Nilo. La
disminución en la salinidad, como
apreciamos en la figura 31, está
relacionada directamente con una
disminución significativa de la
densidad del agua oceánica, lo que
Fig. 29. Adaptación del autor al diagrama de Lizano (2001, fig. 9.6) sobre la marea de agua viva. influye en la dirección de las co-
rrientes oceánicas. La salinidad se
incrementa en la región de los tró-
entre los vientos alisios de los hemisferios Norte y Sur, entre las latitu- y altas, las corrientes se mueven picos y disminuye hacia los polos
des 10° N y 10° S. El aire caliente de la superficie terrestre sube y fluye de oeste a este, debido al mismo por el derretimiento de hielo en
hacia el noreste y suroeste a alturas que oscilan entre los 800 y 600 principio de inercia, aunque en esas zonas. El mínimo relativo de
metros para formar los vientos antialisios. En el ecuador, las calmas este caso, se trata de un efecto salinidad y el máximo de tempera-
tienen presiones bajas, mientras que en latitudes entre 30° y 40° son inercial que va aumentando pro- tura está alrededor de 7 y 10° N.
altas (Fraume, 2007: 460). gresivamente su velocidad en la Estas latitudes corresponden con
Consideremos la interacción de las corrientes marinas con el ecua- medida en que se incrementa la la- el promedio de la presencia de la
dor. Este movimiento permanente y constante de aguas superficiales titud. La circulación del agua es Zona de Confluencia Intertropical,
desplaza grandes masas de agua, el fenómeno responde a diferentes determinante en el clima global, donde los vientos ascienden a la
causas, de ellas, la más importante es el movimiento de rotación te- pues ayuda a dispersar la energía atmósfera cargados de humedad
rrestre que actúa de manera opuesta entre la superficie y el fondo; solar que calienta las aguas en el para generar un cinturón de nu-
además intervienen los vientos planetarios y la configuración de las ecuador conduciéndolas, junto bes y, por tanto, la precipitación
costas, así como la ubicación de los continentes. Un factor más se ha con su temperatura, a latitudes tan abundante en estas regiones
demostrado recientemente, y corresponde al relieve submarino, así más frías (fig. 30). (Lizano, 2001).
como a la densidad del agua, que trataremos más adelante. Por otra parte, las aguas oceá-
Como ya se ha reiterado, por efecto de la rotación terrestre hay una nicas en el ecuador presentan me- 1.2.7 E L CLIMA ECUATORIAL
tendencia a abultar el nivel oceánico en el ecuador, produciéndose nor salinidad, este fenómeno es
así una corriente ecuatorial, la cual se dirige por inercia en sentido producido por dos factores: la tem- El clima ecuatorial se caracteriza
contrario a la rotación terrestre, mientras que en las latitudes medias peratura y la precipitación. La por temperaturas superiores a 25° C

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


43

Figura 30. Corrientes


oceánicas.

Fig. 31. Distribución de temperatura,


salinidad y densidad en la superficie de
los océanos (Lizano, 2001, fig. 5.1).

EL ECUADOR
44

como media anual a nivel del mar, con lluvias abundantes y regulares clo meteorológico anual, justamente en las regiones donde ocurren
durante todo el año superiores a 1 500 o 2 000 mm, conforma un cintu- los cambios climáticos más dramáticos de la Tierra. Entre el clima ecua-
rón latitudinal entre 10° N y 10° S que corresponde a la Zona de Con- torial y el tropical, se suele considerar el clima subecuatorial, que se
fluencia Intertropical o Zona de Convergencia Ecuatorial (ZCIT). En esta caracteriza por tres meses de estación seca y lluvias muy abundantes.
región de baja presión atmosférica, los vientos alisios de los hemisfe- Corresponde al clima subecuatorial la isla de Madagascar, Centroamé-
rios Norte y Sur convergen a nivel de superficie, se calientan y ascien- rica, el archipiélago Indonesio y el sur de la península de Malaca. Las
den por convección, permitiendo la formación gradual de perturba- intensas lluvias del clima subecuatorial producen bosques extensos,
ciones tropicales que producen abundantes lluvias75 y, eventualmente, pero el terreno accidentado impide el desarrollo de grandes ríos como
tormentas eléctricas y granizadas (Fraume, 2007: 460). Es posible apre- sucede en África y América del Sur.
ciar un ciclo diurno, donde se desarrollan cúmulos convectivos a me- Las abundantes precipitaciones y elevada temperatura generan
diodía y tormentas por la tarde. Las variaciones de posición de la ZCIT densas forestas en el ecuador, que se denominan pluviselvas; su vege-
afectan las precipitaciones en los países ecuatoriales, produciendo tación está formada por especies de hoja perenne y ancha. Es un
estaciones secas y húmedas, en lugar de frías y cálidas como en latitu- ecosistema con una gran riqueza y variedad de especies y de gran inte-
des superiores. Como el efecto Coriolis es mucho menor en las lati- rés por su biodiversidad, ya que es fuente de muchos recursos: alimen-
tudes cercanas al ecuador terrestre, el movimiento principal de la at- tos, medicinas, y sustancias de interés industrial. Aunque ocupan me-
mósfera se genera por la célula de Hadley76 sin vientos muy intensos. nos de 7% de la superficie de las tierras emergidas, contienen más de
El ecuador señala también el límite de otros sistemas eólicos trascen- 50% de las especies animales y vegetales del mundo. Una hectárea de
dentes, como los ciclones de Mauricio y de Bengala en el océano Índico, pluviselva tropical puede contener más de 600 especies arbóreas. El
los willy-willies de Australia y los huracanes del Mar del Sur, así como suelo de estas selvas es muy pobre, en comparación con la riqueza de
los cordonazos de Centroamérica (Guadalupi, 2006). vida que soporta, ya que la mayor parte de los nutrientes se encuen-
Las manifestaciones más representativas del clima ecuatorial son tran en los seres vivos y no en el suelo. Cuando este ecosistema es
la selva del Amazonas y la selva del Congo, ambas con frondosos bos- destruido, por la tala o el fuego, su recuperación es muy difícil porque
ques casi impenetrables. El clima ecuatorial es muy similar al tropical el suelo desnudo se hace costroso y duro, sufriendo un proceso de
por sus cálidas temperaturas, pero difiere en el periodo de lluvias que laterización. Los suelos pobres de estas selvas no son aptos para la
en el tropical es irregular y menos intenso. El clima ecuatorial se lo- agricultura, porque en tres o cuatro cosechas pierden sus nutrientes.
caliza en la mayoría de países que bordean el ecuador: la cuenca El ecuador recibe más luz solar que cualquiera otra zona de la Tie-
del Amazonas, la del Congo y la costa del Golfo de Guinea, además del rra, esta insolación incrementa la temperatura (Kaku, 2009:9), por lo
sureste de Asia. En África, en su zona central, desde el Golfo de Guinea que en meteorología se acuña el concepto de Ecuador térmico, que
hasta el Cuerno de África, que es una excepción, degenerando por difiere en su ubicación con el ecuador geográfico (Vicuña, 2009: 57). El
completo el clima ecuatorial. ecuador térmico –en ocasiones llamado Ecuador cálido– es un cintu-
Somalia, una parte de Kenia y Etiopía soportan un clima desértico y rón de temperaturas máximas atmosféricas que rodea a la superficie
árido, con temperaturas extremas, pues el monzón impide el desarro- del planeta; su posición varía durante el año según cada estación. Sin
llo de las lluvias (fig. 32). El monzón es un viento estacional que se embargo, el clima y, por tanto, las temperaturas locales son sensibles a
produce por el desplazamiento del cinturón ecuatorial, su definición la altitud, como sucede en los Andes y muy específicamente, con el
se ha ampliado para incluir todos los fenómenos asociados con el ci- volcán Cayambe, donde la Expedición 0° / 0°C registró un glaciar. Por
tanto, establecer de modo fijo una línea para el ecuador térmico no es
75
Las regiones situadas en esta zona presentan más de 200 días al año con precipitación. posible, como probablemente pudiera hacerse si la superficie de la
76
Es una célula de circulación cerrada de la atmósfera terrestre que domina la circulación Tierra fuera uniforme en composición y sin relieve. Podemos apuntar
global atmosférica en las latitudes ecuatoriales y tropicales. que la variación en la temperatura responde a un gradiente térmico, la

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


45

Figura 32. Mapamundi climático.

EL ECUADOR
46

temperatura desciende conforme ganamos altitud. Este gradiente va-


ría según sea la zona geotérmica, pero en promedio es de 6.5° por cada
mil metros de altitud, es decir, un grado centígrado de disminución de la
temperatura por cada 154 metros. No sorprende entonces la existen-
cia de glaciares sobre el ecuador terrestre, siempre y cuando se en-
cuentren a gran altura. Consideremos la temperatura media anual para
el clima ecuatorial de 25° c, sobre el nivel del mar; ahora tomemos en
cuenta la altura de 4 650 m/nm del glaciar descubierto por la Expedición
0° / 0°C,77 si tomamos en cuenta el gradiente térmico promedio de 6.5°
por cada mil metros, resulta una temperatura de -5° C, con lo que se
explica la presencia de masas de hielo justamente sobre la línea que
marca el ecuador terrestre. Sin embargo, estas masas de hielo apenas
por debajo del punto de congelación se ven amenazadas por el cam-
bio climático y el calentamiento global.

1.2.8 E L ECUADOR CELESTE

El ecuador celeste es un gran círculo en la imaginaria esfera celeste


en el mismo plano que el ecuador y, por tanto, perpendicular al eje de
rotación de la Tierra (fig. 33). En otras palabras, es la proyección del
ecuador terrestre en el espacio. Como resultado de la inclinación que
presenta el eje de rotación de la Tierra, el ecuador celeste tiene una
Figura 33. Esfera celeste.
inclinación de 23.5° con respecto a la normal del plano de la eclíptica.
Los dos puntos de la esfera celeste en los que se corta la eclíptica con
el ecuador celeste son denominados equinoccios. A partir del ecua- el norte el curso del Sol tiene sentido horario, es un movimiento retró-
dor celeste y el equinoccio vernal se determina la posición de un obje- grado, mientras que desde el hemisferio Sur el Sol parece moverse en
to en la esfera celeste por medio de los coordenadas ecuatoriales: sentido antihorario; hecho que nos recuerda el asombro de la expedi-
declinación para el ecuador (similar a la latitud geográfica), y ascen- ción enviada por el faraón Necao II al ver el Sol en sentido opuesto de
sión recta para el equinoccio vernal (longitud terrestre). quien proviene del hemisferio Norte al cruzar el ecuador y adentrarse
Según estemos en el hemisferio Norte o en el Sur, el sentido del en el hemisferio Sur (véase pp. 15-16). En lo que ambos observadores
movimiento diurno del Sol será visto de distinta manera. Imaginemos coincidirán es en que amanece por el este, y el ocaso sucede en el
dos observadores que desde hemisferios distintos miran el movimien- oeste.
to aparente del Sol. El observador norte ve el Sol en dirección sur, En la latitud ecuatorial, el Sol y las estrellas tardan el mismo tiempo
mientras que el observador sur lo ve en dirección norte. En el hemisfe- en estar por encima del horizonte que por debajo. Todos los días del
rio Norte la luz del Sol y su calor proceden del sur, mientras que en el año en el ecuador, los días y las noches duran lo mismo, 12 horas. De
hemisferio Sur proceden del norte. Hay otra diferencia más: desde noche, todas las estrellas trazan una media circunferencia entre el
punto más austral y el más septentrional del horizonte. La región del
77
Se hace referencia al glaciar que la expedición denominó Ecuador, localizado en las
ecuador terrestre representa, en términos astronómicos, un lugar pri-
coordenadas 0° 00´ 00" / -77° 59´32", apartado 3.3.2 Segundo ascenso (p. 86). vilegiado porque es el único donde es posible observar la totalidad

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


47

Figura 34. El ecuador es el único lugar en


el mundo donde se puede apreciar por
completo todas las estrellas del firma-
mento.

del firmamento, es decir, desde el


Polo Norte astronómico hasta
el Sur. Además es la única zona
donde uno puede registrar los días
del paso cenital del Sol, justamen-
te durante el equinoccio. Sólo en
esta región las trayectorias de los
astros son verticales al surgir en el
horizonte, como al ponerse.78
Los únicos puntos de la esfera
celeste que permanecen fijos son
los polos celestes; todos los de-
más y las estrellas con ellos, pare-
cen girar en círculos concéntricos
alrededor de los polos. El Polo
Norte celeste está situado sobre
el punto cardinal norte a una altu-
ra que coincide con la latitud del
observador.
Situado en el Polo Norte, un ob-
servador verá la Estrella Polar en
el cenit, y para otro situado en el la Expedición 0° / 0°C, montó un las nubes. En la roca más saliente sea la velocidad con que se im-
ecuador terrestre, el Polo Norte campamento astrofotográfico en dejó esta inscripción: Observa- pulsa, menor es la curvatura de la
estará apenas sobre el horizonte la cima del cerro Pambamarca a tionibus Astronomicis [...] hocce pro- trayectoria de caída y mayor el es-
(fig. 34). Para superar una visión 4050 m/nm.79 Es tan impresionante montorium Aequatori subjacere pacio recorrido. Entonces imagi-
rasante de los polos celestes des- ver las estrellas del firmamento en compertum est, 1736. nemos que arrojamos la canica
de el ecuador es recomendable in- el ecuador, que recordamos a La con la suficiente velocidad para
crementar en altura el punto de Condamine, quien pasó cinco no- 1.2.9 U N ECUADOR QUE MIRA que la curvatura de la caída sea
observación, la cima de una mon- ches en Palmar, hasta conseguir el AL ESPACIO EXTERIOR igual a la curvatura de la Tierra. Si
taña es el lugar idóneo. Por ello, guiño de las estrellas a través de lo logramos, la trayectoria de la ca-
Consideremos lanzar una canica nica será tal que girará alrededor
por una mesa y que cuando llega de la Tierra sin tocar el suelo. Esta
78
Agradezco la contribución del doctor 79
También utilizado por la Misión Geodé-
Jesús Galindo de la UNAM para este apar-
al borde cae al suelo, describien- teoría de Newton, que es ilustrada
sica Francesa del siglo XVIII para sus ob-
tado. servaciones. do una parábola; cuanto mayor por la NASA en su portal de Inter-

EL ECUADOR
48

Figura 35. Una canica hipotéticamente es proyectada al espacio desde la cima del
volcán Cayambe sobre el ecuador terrestre, ésta describe diferentes trayectorias,
según el impulso con que es lanzada.

net,80 le he realizado algunas modificaciones –según la intensión de propuesta, la canica se lanza con una fuerza muy superior a las ante-
este volumen en la figura 35– instalando una plataforma de lanzamien- riores, con lo cual escapa por completo de la gravedad terrestre y se
to para la hipotética canica en la cima del volcán Cayambe, aquí la queda en órbita.
montaña se representa exagerada en su altura y en la parte superior Para que una nave espacial alcance el espacio exterior necesita
del planeta por fines explicativos. Apreciamos que la Tierra se obser- primero vencer la gravedad terrestre, al igual que la canica de la figura
va por encima del Polo Norte, a 16 mil kilómetros de distancia, resalta anterior, se requiere cierta cantidad de energía para lograr su objeti-
en su contorno un círculo en rojo que representa al ecuador. En la vo. Con la intención de hacer más eficiente el lanzamiento de un cohe-
figura se consideran tres sucesos: en el primero a la izquierda, la cani- te, se ha propuesto que despegar desde cualquier sitio sobre el ecua-
ca describe una trayectoria representada como el arco en color verde, dor permite un ahorro significativo de combustible, a diferencia de
finalmente la canica cae a consecuencia de la gravedad; en el segun- hacerlo en otra latitud. En efecto, ya se ha señalado en el apartado
do, se aplica más fuerza, se alcanza más velocidad y, por tanto, mayor 1.2.4 Un planeta en movimiento, que un objeto colocado en el ecuador
distancia, pero inevitablemente se desploma; por último, en la tercera viaja en el espacio a más velocidad que en cualquier otro punto de la
Tierra, alcanzando 1670 km/h; también se ha apuntado que la forma de
80
Ejemplo animado en Internet por la N A S A en línea, julio de 2010 <http:// la Tierra hace que ese mismo objeto por estar más alejado del centro
spaceplace.nasa.gov/en/kids/orbits1.shtml> del planeta tenga un peso menor. Ambas conjeturas pueden parecer

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


49

como una ayuda mínima pero en pués de la desaparición de la binas presurizadas, similares a un según Pérez-Castrejón y Cruces,82
términos reales es significativa. Unión Soviética, RKK Energía efec- ascensor que comunicaría al mun- la instalación del anclaje para el
Por eso la Agencia Espacial Euro- tuó estudios similares, pero que do con el espacio. Se supone que ascensor espacial debe ser exac-
pea ahorra más combustible que hacían uso del cohete Soyuz 2. pueden subir y bajar por el ascen- tamente sobre el ecuador, pues en
la NASA , que lanza sus cohetes des- En el futuro, el ecuador puede sor naves y cargas a un costo mu- cualquier otro lugar del planeta el
de Cabo Cañaveral ( 28°), a com- ser la puerta de salida de la huma- cho menor que al lanzarlos por me- cable no ascendería recto, sino
paración de la base instalada en nidad al espacio exterior, con el dio de un cohete. Los cohetes no formando un ángulo. Además, en
Kourou en la Guyana Francesa ( proyecto Ascensor espacial.81 La son los vehículos ideales para salir cuanto mayor sea la altura sobre
5°). Por último, un detalle que en propuesta de un elevador al espa- de la Tierra, son caros, delicados, el nivel del mar en que se instale el
la figura 35 se resalta, los lanza- cio es extraordinaria y difícil de peligrosos, contaminantes, y ade- anclaje, más eficiente será el fun-
mientos hay que realizarlos hacia creer, pero asombrosamente sim- más, la carga útil que son capaces cionamiento del ascensor al dis-
el este, que es hacia donde gira la ple. Consideremos que hacemos de transportar es reducida. minuir las pérdidas debido al
Tierra. girar rápidamente una piedra ata- Es cierto que no veremos en las rozamiento atmosférico que sufri-
La iniciativa de lanzamientos da con una cuerda, es un concepto próximas décadas un ascensor es- rían los vagones. Esto significa que
ecuatoriales ha sido adoptada por básico en el que la piedra ejerce pacial; sin embargo, el proceso ya cuanto más alto sea el punto de
el consorcio multinacional Sea tensión sobre la cuerda por la fuer- se ha iniciado. En noviembre de partida, menor será la fricción que
Launch, que desde 1999 a la fecha za centrífuga que lleva a la piedra 2009, un proyecto desarrollado en se deba compensar. Esta propues-
ha puesto en órbita 27 satélites en a ser despedida. La idea es similar, los EUA ganó un concurso patroci- ta nos contagia de una fantasía al
telecomunicaciones desde la pla- al colocar un peso importante en nado por la NASA , que tiene el imaginar, a la manera de una no-
taforma flotante Ocean Odyssey órbita, que en este caso sería un objetivo de diseñar un ascensor vela de ciencia ficción, 83 que el as-
(fig. 21) en aguas ecuatoriales, asteroide lastre a 100 mil km con espacial. La máquina ganadora, censor espacial que nos eleve has-
pero su intención no es nueva, una estación espacial a 36 mil kiló- llamada LaserMotive Llc logró as- ta la astrópolis de Arthur C.
pues ya en la década de 1960 se metros de altura sobre el ecuador, cender 899 metros a lo largo de un Clarke,84 se instale en la ladera sur
habían llevado a cabo estudios la estación se enlaza a la Tierra riel que colgaba desde un heli- del volcán Cayambe, por el año
tanto en los EUA como en la URSS, mediante un cable suficientemente cóptero, el artefacto fue impulsa- 2035, en los terrenos explorados
para comprobar la posibilidad de resistente, pero más que un cable do por un motor eléctrico, el cual en 2009 por la Expedición 0° /
lanzamientos desde plataformas es un riel de nanotubo de carbono. recibía su carga a partir de un con- 0°C.
en el ecuador. En 1967, Italia efec- En este proyecto se aprovecha el junto de celdas voltaicas que con-
tuó el lanzamiento de un cohete equilibrio entre la fuerza centrífu- vierten en energía eléctrica la luz
scout desde la plataforma San Mar- ga de la rotación de la Tierra y la emitida por un láser en tierra que
cos, cerca de la costa de Kenia. En fuerza gravitatoria, ahí el riel que- apuntaba directamente al Laser- 82
Ponga un ascensor en su planeta, en lí-
1977, siguiendo órdenes del go- da enhiesto y la estación espacial Motive Llc. nea para el 1 de julio de 2010
bierno soviético, la oficina de di- fija a una órbita geoestacionaria. Aunque la construcción de un <www.arrakis.es/~cris/ascensores.htm>.
seño KB Yuzhnoe estudió la posi- Sobre el riel subirían y bajarían ca- ascensor espacial no deja de ser 83 La novela de ciencia ficción La telaraña
bilidad de lanzar el Zenit desde en estos días una quimera, ya hay entre los mundos, de Charles Sheffieeld
plataformas en el ecuador. Des- propuestas sobre su ubicación, (1979), ya ensaya sobre la instalación
81
del ascensor espacial en el ecuador.
Agradezco a Alejandro Lamothe colabo-
rador de Universum, Museo de las Cien- 84 Astrópolis, puerto espacial imaginado
cias de la UNAM , el haberme proporciona- por Arthur C. Clarke (1997) en su novela
do datos específicos sobre este proyecto. de ciencia ficción 3001: Odisea final.

EL ECUADOR
50
51

2. La Expedición 0° / 0°C
2.1 Introducción

E N REPETIDAS OCASIONES , al viajar por Sudamérica, pedía a las tripulaciones de las aeronaves que me avisa-
ran cuando pasáramos sobre el ecuador terrestre, una fascinación me invadía por la conjugación de la
geografía, la astronomía y la historia. Siempre quise conocer Ciudad Mitad del Mundo en la República del
Ecuador, y fue hasta el año 2009, gracias a la invitación de Enrique Aguilar que pude arribar a las Tierras
equinocciales. Era el Año Internacional de la Astronomía, nos convocaba un dictamen arqueoastronómico
sobre el cerro Catequilla. En ese viaje conocí a Cristóbal Cobo, que generoso me confió cómo la trayectoria
de la línea ecuatorial se adentraba en la ladera sur del volcán Cayambe y tocaba las nieves de la montaña
(fig. 36). A mi regreso a México, no pude apartar de mi mente las nieves equinocciales, imaginando un
campo de hielo resistiéndose a la insolación y la temperatura. Era una manifestación de la naturaleza
extraordinaria, pues al igual que a muchos, el ecuador me remitía a la exuberancia vegetal del Amazonas y
el Congo: con lluvias torrenciales y calor extremo. Aunque en alguna ocasión escuché sobre glaciares

Izquierda: Nevado Cayambe, conjunto de


datos vectoriales destacando las eleva-
ciones del área de interés.

Figura 36. Alineado al gnomon de


Quitsato se aprecia cómo la trayectoria
ecuatorial se proyecta en la ladera sur
del volcán Cayambe.
52

ecuatoriales en África, la referencia se hacía a una región, y no a que la En los últimos años se han contado historias maravillosas sobre la ex-
línea ecuatorial pasara exactamente sobre una masa de hielo, pues ploración de los techos del mundo (los Polos Norte y Sur), pero los
distan por decenas de kilómetros del trayecto ecuatorial. acontecimientos relacionados con el ecuador se han mencionado sólo
Para que un glaciar pueda prosperar en una región calurosa requie- por encima, o se han pasado por alto completamente…
re una formidable altura y suficiente humedad, los Andes ecuatoria- El ecuador es, en cierto modo, la creación humana de mayor ta-
les poseen estas características: la altura de la cordillera y la hume- maño de la Tierra.
dad del Amazonas. Entonces me pregunté si el trayecto ecuatorial
sobre el volcán Cayambe sería el de más altura en el orbe y, de ser así, Ignota ha sido esta región del planeta, no sólo por su exploración, sino
quién habría comprobado tal maravilla. Las primeras indagaciones también por sus letras, no obstante que alberga toda clase de fenóme-
me dejaron impávido y con un reto formidable. Era un territorio inex- nos interesantes, como hemos visto en el capítulo anterior. Esta larga
plorado, un hito de la geografía que aún no había sido descubierto, línea trazada en tierra y agua, que escala montañas, atraviesa océanos,
una empresa esperando que mexicanos y ecuatorianos la enfrentára- lagos y ríos, ha querido ser recorrida en su totalidad por el sudafricano
mos y así medir nuestras posibilidades. Fue entonces cuando convo- Mike Horn, realizando a través de ella la vuelta al mundo, lección apren-
qué a destacados exploradores y científicos de ambas naciones a la dida de Julio Verne en La vuelta al mundo en ochenta días, pero si en la
expedición Cero grados latitud, cero grados Celsius (0° / 0°C). afamada novela Phileas Fogg y su ayudante Passpartout se valen de
medios mecánicos, Horn no ha querido hacerlo así. En su circunvala-
ción realizada entre los años 1999 y 2000, se propuso ser el primer hom-
2.2 Antecedentes bre en alcanzar tal hazaña sin utilizar ningún tipo de vehículo motoriza-
do. Obviamente, su travesía no podía dejar fuera el ascenso a la cima del
2.2.1 P RIMICIAS LITERARIAS volcán Cayambe, cumbre que alcanzó junto con sus tres acompañantes,
después de siete horas y media soportando fuertes ráfagas de viento.
La búsqueda de información previa a la expedición fue intensa, y den- Entendemos que consideró más relevante ascender a la cima del
tro de las posibilidades de bibliotecas y acervos que no se especiali- Cayambe, que seguir la trayectoria específica del ecuador sobre la lade-
zan en temas ecuatoriales, pues desde la Ciudad de México la distan- ra sur. Mike descendió de la cima en ala delta, para después tomar una
cia con el ecuador es considerable, no sólo en kilómetros sino también bicicleta de montaña y llegar al Pacífico. Con esta proeza deportiva a
en información. Antes de iniciar el viaje, la lectura fue obligada. Se través de bicicleta, velero, canoa o a pie, se hizo de fama internacional,
antecede por el pensamiento, por la literatura. El apasionante libro recibiendo numerosos premios y galardones. Sus memorias pueden ser
Latitud Cero. Viajeros, exploradores y aventureros alrededor de la línea consultadas en su libro Latitude zéro (Horn y Chartrier, 2004).1
del ecuador, de Gianni Guadalupi y Anthony Shugaar (2006), fue el pun- Lejos de protagonismos por la aventura y de exaltaciones deporti-
to de partida. En sus páginas presenta una sugestiva gama de persona- vas, la BBC de Londres presentó la serie para televisión Ecuador, de Simon
jes e historias, que nos llevan por la fascinación ecuatorial a lo largo Reeve, que fue emitida en agosto de 2006,2 con una magnífica produc-
de dos mil años, así desfilan Magallanes y el descubrimiento de la ruta ción que costó años de esfuerzo. La serie da la vuelta al mundo por la
occidental hacia el Pacífico, los buscadores del mítico El Dorado como región ecuatorial para mostrarnos su biodiversidad e invitarnos a
Orellana, y los exploradores de la ignota África Stanley y Livingston,
entre muchos otros. El resultado es un mosaico de extraordinarios
1
protagonistas enfrentados a la aventura de lo desconocido, sus vidas La referencia de esta obra se hace sin consultar el volumen, pues sólo se puede adquirir
en Europa, por tanto los datos referidos se desprenden de artículos publicados en
forjaron las leyendas de la línea que circunvala la Tierra en su máximo otros medios, algunos de los cuales cuestionan sus hazañas.
alcance. Como señalan los autores: 2 Si desea ver este documental lo puede hacer en línea en <http://www.mazalien.com/
equator-latin-america.html>.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


53

la reflexión sobre los conflictos sociales que soporta la humanidad y en teoría podría ir a esquiar…3 Supongo que los datos se obtuvieron
que se agudizan extrañamente sobre el cinturón de la Tierra, pues como cartográficamente, ya sea por mapas publicados años antes (fig. 37) o
lo afirma el conductor del programa: es la región con mayor biodi- en Internet a través de Google Earth, ya que su altitud no corresponde
versidad natural y tal vez la mayor concentración de sufrimiento huma- a la registrada por la Expedición 0° / 0°C de 4740 m/nm, pero sí a lo que
no. El viaje comienza en Gabón en el oeste de África, continúa por la se desprende de estas consultas. Vale la pena apuntar que este valor
República Democrática del Congo, Uganda, Kenia, Indonesia, Sumatra, de 4690 m, también aparece en Wikipedia en su versión en inglés para
Borneo, las Islas Galápagos, Ecuador, Colombia y culmina en Brasil. A el apartado sobre el ecuador, en la enciclopedia digital se establecen
su paso por la República del Ecuador, la entrega otorga especial aten- para este punto las coordenadas 00° 00´ 00" / -77° 59´ 31", que
ción a los volcanes en actividad que están próximos a la vulnerable tampoco concuerdan con los resultados de nuestra exploración.4
ciudad de Quito; en compañía de un geólogo, Simon Reeve asciende al
volcán Pichincha para conocer sobre los riesgos volcánicos en la re- 2.2.2 L A EXPEDICIÓN C OBO - B OADA , 2007
gión. En un enlace por Internet para esta serie se menciona: existe un
único punto en el ecuador donde encontrará nieve. El punto más alto en Según nuestros datos, los primeros en haber intentado alcanzar los
el ecuador es de 4690 m, en la ladera sur del volcán Cayambe, así que glaciares del volcán Cayambe sobre la línea ecuatorial, fueron los ecua-
torianos Pablo Boada y Cristóbal Cobo, que en el año 2007 llegaron
hasta el punto 00° 00´ 00" / -78° 00´ 11.4" a una altitud de 4564 m/nm el
día 22 de septiembre, a las 15:13 horas, en un paraje cercano al lugar
denominado Diablopongo. La exploración se publicó en Internet con
el título Todavía hay nieve en la línea equinoccial: 5

Aunque sabíamos de la existencia de un glaciar en la línea equinoccial


en el nevado Cayambe, pensábamos que por efecto del cambio climático
quizá estuviera en riesgo o, peor todavía, hubiera desaparecido.
Este último 22 de septiembre, y por iniciativa de Cristóbal, di-
rector del proyecto de investigación Quitsa-To, emprendimos una ex-
pedición en busca de estos nevados territorios en el volcán Cayambe.
La invitación se presentaba aún más especial, estábamos a un día del
equinoccio.
Por su amplia base, la línea equinoccial atraviesa la parte sur del
volcán, donde existe un glaciar. En principio el camino a seguir es el
mismo que lleva al cerro Saraurco. Las dificultades del terreno son
evidentes: suelo pantanoso y clima casi siempre húmedo y nublado. La
expedición contó con dos guías de la zona y caballos. La ruta era muy
difícil…

3
Sorprende el desconocimiento de la vertiente al apuntar sobre la práctica del esquí. En
línea para julio de 2010 < http://uktv.co.uk/eden/stepbystep/aid/596811>.
Figura 37. Detalle de la carta topográfica OII-E3 NEVADO CAYAMBE 4094 III publicada por 4
En línea para el 18 de julio <http://en.wikipedia.org/wiki/Equator>.
el Instituto Geográfico Militar de Ecuador, 1996, equidistancia entre las curvas de
40 metros. Se ha insertado la escala y la trayectoria ecuatorial. 5 En línea para julio de 2010 <http://quitense.wordpress.com/2007/09/26/hola-mundo>.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
54

metros al sur de la línea equinoc-


cial y a unos 4200 metros de al-
tura. Mientras caminábamos, vi-
mos un venado saliendo desde la
nieve…
Finalmente, arribamos a la
latitud 0. A poco menos de 4600
metros de altura, el paisaje fue
sobrecogedor y el frío intenso.
Observamos que la línea
equinoccial cruza por un amplio
territorio nevado en el Cayambe.
Sin embargo, una enorme pared
nos hizo imposible seguirla (fig.
38).
Construimos un montículo de
piedras, nuestra versión de la
apachita, en señal del posiciona-
miento y también en recuerdo de
los habitantes que desde hace mi-
les de años han poblado estas tie-
rras. En agradecimiento a ellos
también, por habernos legado una
cultura, que aunque a veces apa-
rece distante (por nuestros pro-
pios prejuicios y a veces por la
“falta de evidencia”) sigue inspi-
rando y alimentando nuestro pre-
sente.

Figura 38. Integrantes de la expedición


De haber seguido por la línea
ecuatoriana Cobo-Boada, en la ladera ecuatorial 400 metros rumbo al
sur del volcán Cayambe. Fotografía cor- Tras alcanzar los 4000 metros Tras seis horas de travesía lle- este, y superando los 200 metros
tesía de Pablo Boada, 2007. de altura, aproximadamente, es gamos al pie de la nieve, junto a de altura de ese farallón que se re-
posible divisar varias lagunas unos enormes farallones en el lata, hubieran encontrado una
(dieciocho, afirman nuestros lado sur occidental del volcán. arista, que es el vértice del ecua-
guías), la mayoría de ellas gran- Desde ahí en adelante avanza- dor, y de ahí a un kilómetro más
des charcos rodeados de pan- mos únicamente a pie. Estábamos en la misma dirección y entonces
tanos. aproximadamente a unos 1200 habrían encontrado el glaciar que

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


55

se buscaba. Visto desde afuera no parecen muchos metros, pero en ese


terreno accidentado y agreste las cañadas son un verdadero obstácu-
lo. Pasaron dos años, y afortunadamente las experiencias de Cristóbal
Cobo y Pablo Boada se sumaron a las intenciones de la Expedición 0°
/ 0°C, pues su conocimiento sobre el terreno, el clima y las vías de
acceso fueron determinantes para el logro que se pone a considera-
ción del lector en el capítulo siguiente.

2.2.3 TRABAJOS ARQUEOASTRONÓMICOS EN EL CERRO C ATEQUILLA , 2009

En mayo de 2009, el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural de la


República del Ecuador ( INPC), solicitó a la Universidad Nacional Autó-
noma de México, asesoría arqueoastronómica para el sitio arqueológi-
co Catequilla, pues estudios previos no eran puntuales sobre la inter-
pretación histórica y la relevancia astronómica del sitio, en el cual se
pretendía edificar el Calendario Luni Solar Quiteño, un proyecto del
señor Gustavo Guayasamín. Participaron en la misión científica (fig.
39), además de los interesados y autoridades del INPC, el documentalista
ecuatoriano Enrique Aguilar y los doctores mexicanos Jesús Galindo
Trejo e Ismael Arturo Montero García. Detalles sobre el proyecto del
monumento calendárico pueden confrontarse en Guayasamín (2007),
y sobre el sitio arqueológico y sus posibilidades arqueoastronómicas,
Figura 39. Distintivo para los trabajos arqueoastronómicos realizados en el año
en Cobo (2004: 115-130). 2009 en el cerro Catequilla e Ingapirca. Al centro y vertical, con una línea segmentada
Desde la cima del cerro Catequilla el paisaje es impresionante, con se destaca el ecuador, a su derecha, otra línea en un ángulo de 23° 26´ apunta al
el volcán Cayambe de fondo protagonizando la equinoccial a través trópico de Cáncer sobre la nación mexicana. La alegoría se complementa con el Sol,
de los tiempos. Con la visita y el estudio de este sitio arqueológico la Luna y Venus.
edificado con suma precisión sobre el ecuador se alentó mi interés
por esta trayectoria y sus implicaciones culturales. Esta fue mi prime- cultural del cer ro Catequilla provee de numerosos elementos
ra intervención en Ecuador y sirvió de preámbulo para adentrarme en señalizadores para armar un calendario de horizonte al seguir el movi-
la geografía y la historia, que me llevaría siendo fiel, a esta línea, a miento anual del Sol. No obstante estas características tan peculiares,
recorrer el estrecho camino trazado por el Sol hasta su límite un análisis arqueoastronómico requiere necesariamente la existencia
altitudinal. Como el informe entregado al INPC por mi colega Jesús de un espacio de trabajo arqueológicamente bien definido a través de
Galindo Trejo se encuentra inédito, creemos oportuno incluirlo en una excavación controlada y en su caso, de la restauración de los ves-
esta edición: tigios arqueológicos. En las condiciones actuales de la cima del cerro
Catequilla poco se puede concluir en términos arqueastronómicos de-
La posición privilegiada, desde el punto de vista geográfico y bido a la ausencia de elementos arquitectónicos bien definidos. Duran-
observacional, del cerro Catequilla sugiere su utilización en la anti- te la visita al sitio (mayo 29 y 30 de 2009) se realizaron mediciones
güedad como un sitio ideal para el seguimiento del movimiento apa- arqueoastronómicas desde los escasos indicios arqueológicos reconoci-
rente de los astros. A esto hay que añadir que el entorno orográfico y bles en la actualidad. Inicialmente se examinó el estado arquitectóni-

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
56

co de la plataforma de arco loca- roeste. Sin embargo, ambas direc- y acceso con respecto a los va- obstante los significativos avan-
lizada en la cima del cerro. Re- ciones corresponden a acimutes lles que le rodean. ces de Yurevich y Egred (1994),
sulta claro que sus extremos visi- fuera de la trayectoria solar. A Asumiendo el criterio de que y las recientes aportaciones de G.
bles no corresponden al de un saber, 351° 52’ para la parte cen- estamos frente a un espacio ritual Guayasamín y C. Cobo (ambos co-
remate arquitectónico cuidadoso, tral de Rumicucho y 301° 27’ para de la antigüedad, no debemos municación oral, 2009).
sino más bien se puede percibir la plataforma circular en la que- ajustar su importancia a una ar- La ocupación arqueológica de la
un fuerte deterioro de la plata- brada señalada. La altura angu- quitectura monumental, pues en cima del cerro Catequilla está
forma que no permite determinar lar de ambos sitios es negativa su sentido más general, es el lu- documentada para la tradición
de una manera certera el final de pero la del horizonte montañoso gar y no un monumento el que se Caranqui tardía e Inca por la ce-
esta misma. Por tanto, el consi- arriba de ellos alcanza aproxima- sacraliza dadas las característi- rámica registrada por Fresco
derar que la línea que une a di- damente 2°30’ y 2° 57’ respecti- cas de dominio de paisaje que se (2009:39), y la posible relevan-
chos extremos está señalando la vamente. Con estos datos puede tienen desde la cima con respec- cia arqueoastronómica, observa-
dirección de la salida y de la descartarse cualquier alineación to a toda la región. da desde el somonte, fue pro-
puesta del disco solar en el día que involucre al Sol, a la Luna o Por tanto, podemos apuntar puesta por Yurevich y Egred
de ambos solsticios parece bas- a cualquier planeta. Eventual- que el cerro Catequilla, además (1994: 39-40) quienes definen
tante arbitrario (Cobo, 2004: mente se podría buscar alguna co- de su calidad orográfica que lo como monumentos con sentido
117). Por otra parte, un elemen- rrelación con algún objeto es- ubica según los patrones actuales astronómico las construcciones
to arqueológico de posible signi- telar del cielo nocturno. No obs- de la ciencia en la línea ecuato- de la cima:
ficado astronómico es una peque- tante, para una búsqueda de este rial, adquirió en la antigüedad La otra área arqueológica
ña plataforma circular, formada tipo se requiere tener una da- cierta relevancia como discurso donde existen direcciones que
por gran cantidad de piedras co- tación arqueológica lo más pre- social por las evidencias arqueo- probablemente tiene sentido
locadas siguiendo un patrón ra- cisa posible, debido a que la lógicas que se tienen de su cima.6 astronómico está en el sector
dial. Esta pequeña plataforma, de apariencia del cielo cambia no- Es en este sentido que asimilamos de la Mitad del Mundo. Allí se
apenas tres metros de diámetro, tablemente a lo largo de pocos un paisaje donde la proyección encuentran monumentos ar-
se localiza casi tangencialmente siglos como consecuencia de la discursiva de la sociedad se di- queológicos de tipo especial:
al extremo norte de la gran pla- precesión del eje de rotación de buja en el espacio. En este espa- son plataformas o ruedas de
taforma de arco citada anterior- la Tierra. cio, que es paisaje, la naturaleza piedras ubicadas a nivel de
mente. Utilizando un tránsito se Con referencia a la platafor- se socializa y ciertos elementos suelo, con algunos diámetros
realizaron mediciones del disco ma de arco que se encuentra en conspicuos pasan a ser puntos cla- marcados, construidos de pie-
solar para referenciar astronómi- la cima del cer ro Catequilla, ve y de referencia, desde los cua- dras más grandes y rojizas.
camente cualquier dirección res- bien parece una construcción les se organizan las prácticas so- Círculo de piedra Catequilla:
pecto al centro de la plataforma que intenta eliminar declives y ciales y cognitivas que aún no han ( 0° 0’ 13" / -78°25.6’, h =
pequeña. Se analizaron los pocos presentar un espacio sin pen- quedado del todo esclarecidas, no 2633 m/nm).
elementos arqueológicos recono- dientes, que pudo ser destinada Está formado por un em-
6
Los únicos textos a los que hemos te-
cibles a simple vista en la cerca- para fines rituales. Considerar pedrado circular entero sin
nido acceso, que apuntan sobre eviden-
nía del Cerro Catequilla, es de- esta construcción para la habi- cias arqueológicas en el sitio son la pu- diámetros marcados, de apro-
cir, el sitio de Rumicucho en el tación o para algún proceso pro- blicación de Yurevich y Egred (1994); ximadamente 3 m de tamaño.
Cobo (2004); Guayasamín (2007), y el in-
norte y otra plataforma circular ductivo no parece pertinente forme que obra en el INPC del doctor An-
Se encuentra justo al lado del
en la quebrada Colorada en el no- dadas las condiciones de altura tonio Fresco (2009). muro de un gran bohío hecho

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


57

de tierra. El bohío, quizá se puede considerar como un pucará, tidumbre la “mitad del mundo” con más exactitud que la lograda en
tiene forma casi circular, de 60 m de diámetro y la altura de su siglos posteriores, ya que no han demostrado desde la evidencia ar-
pared de cerca de 1 m; la rueda de piedra está desplazada en su queológica cómo se logró dicho acierto. Pensamos que estas respeta-
lado occidental. Parece que la rueda fue dañada para usar su ma- bles interpretaciones vertidas sobre el cerro Catequilla ofrecen ele-
terial en la construcción de una pirámide levantada en el centro mentos suficientes para integrar una investigación interdisciplinaria
del bohío. sobre el caso, pues sería lamentable dada la importancia que se ha
Tomando en cuenta los criterios anteriores entendemos que la naturale- suscitado, no otorgar continuidad a la investigación, sobre todo cuan-
za en el cerro Catequilla ha sido sociabilizada y es probable que desde do aún quedan por resolver varias incógnitas como la relación que
esta cima en términos ceremoniales se realizara una clasificación y puede guardar el sitio con las pirámides de Cochasquí y con las es-
ordenamiento del territorio, donde todo el Universo respondía a una tructuras de Pambamarca con las cuales se encuentra alineado para
necesidad intrínseca de categorización. Esta propuesta se sustenta ade- los solsticios (Cobo, 2004: 119).
más en que se han registrado hasta la fecha diez plataformas circulares
en la región aledaña (Fernando Mejía, comunicación oral y referencia RECOMENDACIONES
cartográfica, 2009), lo cual nos lleva a suponer que en este espacio se
proyectó una cultura ancestral, integrada con y en la naturaleza, convir- A partir de la excepcional situación geográfica en la que se encuentra
tiendo el territorio no en un actor mudo, sino en un testimonio cosmo- el cerro Catequilla y considerando el reducido número de vestigios
lógico del cual aún no podemos explicar con claridad todos sus alcances. arqueológicos en superficie en la actualidad, podemos afirmar que un
La interpretación del caso que nos ocupa, es que los dos emplaza- dictamen arqueoastronómico definitivo de este sitio sólo podrá reali-
mientos perceptibles en la cima: el denominado bohío circular, con zarse después de una exploración arqueológica a la profundidad ade-
una cuerda de 67 metros entre los extremos del arco y el de la platafor- cuada.8 Por lo tanto, se hace necesario un proyecto arqueológico el
ma empedrada circular con diámetro de tres metros, es que ambos cual sea definido en sus alcances, objetivos e hipótesis por un cuerpo
pudieron ser parte de una categoría ordenadora del mundo prehispá- académico interdisciplinario.
nico, que es prevaleciente y puede adquirir distintas pautas de codifi- Con el ánimo de apoyar la investigación sugerida, integramos
cación, las cuales como ya se apuntó no han sido descifradas satisfacto- algunos objetivos que consideramos útiles que pueden servir para la
riamente7 y por lo tanto, dada la importancia de este caso requieren discusión del proyecto.
una adecuada investigación interdisciplinaria y una intervención ar-
queológica. • Identificar la cultura material en las dimensiones de área cultural y
Estamos ciertos que para las comunidades de la antigüedad, como temporalidad del denominado bohío circular y de la plataforma em-
para la actual sociedad ecuatoriana, en esta región (Mitad del Mun- pedrada adjunta .
do) se define una identidad, donde el cerro Catequilla es un rasgo • Estudio integral del cerro Catequilla, como un complejo cultural.
concreto. Aunque no compartimos del todo el entusiasmo demostrado • Determinar el tipo de ocupación precisando en lo posible el uso ritual
por los investigadores C. Cobo y G. Guayasamín, quienes asumen cada de cada cultura y época (preinca e inca).
uno desde su postura, que en este emplazamiento se registró con cer- • Con base en el estudio de los materiales, establecer una secuencia
cronológica de ocupación y uso del cerro Catequilla.
7
Encontramos en el trabajo de Yurevich y Egred (1994:42) un dato que no concuerda con • Con base en el estudio de los materiales establecer su función.
nuestros cálculos al suponer que uno de los diámetros circulares de la plataforma de la
quebrada Colorada está dirigido hacia el punto de la salida máxima austral de la Luna
sobre el emplazamiento arqueológico del cerro Catequilla con acimut de 118° 36’. 8
Antes de realizar cualquier excavación recomendamos aplicar métodos de detección
Nuestro planteamiento es de 121° 47’ tomando en cuenta la elevación del cerro Catequilla remota ocasionando la menor perturbación posible a sus alrededores valiéndose de
con respecto a la quebrada Colorada en 10°. instrumentos como el magnetómetro y el gradiómetro.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
58

• Trabajos de prospección en el tieron a los investigadores mexi- reflexión sobre los alcances que Para responder al primer cues-
área para identificar las estruc- canos conocer las exploraciones esto podría tener para la Expedi- tionamiento, utilizamos como he-
turas empedradas circulares. de Cristóbal Cobo y Pablo Boada, ción 0° / 0°C, pues además de ex- rramienta de consulta en la Red
• Investigar la importancia ritual en la búsqueda de un glaciar so- plorar un glaciar sobre el ecuador, Informática Mundial, el software
que aún guarda el cerro Catequi- bre la trayectoria del ecuador. también podría ser éste el sitio a Google Maps, que es tan eficiente
lla entre los pobladores de la Cobo me invitó a realizar una más altura de toda la circunferen- como la cartografía analógica,
región. prospección, era el mes de mayo cia haciendo de éste su vértice.9 pero de más fácil manejo.10 El am-
• Completar las observaciones de 2009, y los planes se trazaron Contábamos con una hipótesis por plio acervo de imágenes y datos
arqueoastronómicas. para un ascenso formal durante comprobar, si la registrábamos del soporte permitió tener una mi-
• Apuntar a partir de la historia y el equinoccio de septiembre de adecuadamente, utilizando instru- rada confiable del mundo, aunque
la etnografía, si existieron o per- ese mismo año; se daba inicio al mentos especializados e integran- entendemos que los perfiles oro-
sisten criterios que delimiten al proyecto de la Expedición 0° / do un proyecto de investigación gráficos inferiores a 100 metros
cerro Catequilla como un espa- 0°C. interdisciplinaria, podríamos ser son suavizados por el programa
cio sacralizado. los primeros en descubrir este informático; sin embargo, el ran-
• Integrar en lo posible al trabajo hito geográfico. Dos cuestio- go es suficiente para tener un pa-
de gabinete la revisión bibliográ- 2.3 Un proyecto namientos surgieron como prio- norama certero de la altitud del
fica sobre el área cultural, toman- interdisciplinario ritarios a responder antes de par- ecuador por todo el globo. De esa
do en cuenta la etnografía y la tir: primero, localizar cartográfica- prospección digital resultó que el
histórica, con énfasis en los te- 2.3.1 F ORMULANDO UNA HIPÓTESIS mente el punto a más altitud de
mas propios de la cosmovisión, DESDE LA CARTOGRAFÍA toda la línea ecuatorial en su tra-
el calendario y la astronomía. yectoria terrestre, y posterior- 9
Vértice, en su acepción como la parte
Las nieves equinocciales que ha- mente, indagar si ya se había al- más elevada.
Los trabajos arqueoastronómi- bían recorrido los colegas ecuato- canzado, si estaba registrado y, 10 Con equidistancia entre las curvas de 20
cos en el cerro Catequilla permi- rianos en 2007, obligaron a una por tanto, publicado. metros.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


59

volcán Cayambe no tiene par, pues el lugar que le sigue en altitud está de Cayambe, Diego Rafael Bonifaz Andrade, a vecinos de la región, a
1 300 metros por debajo, en la cota de 3430 m/nm, en un paraje que se prestadores de servicios turísticos, a grupos de montañismo locales,
encuentra en la ladera norte del monte Kenia, próximo al río Marania a guías de montaña de la comunidad indígena del Hato12 y guardias
Oeste, en las coordenadas 00° 00´ 00" / 37° 22´ 17.4". La investiga- forestales de la Reserva Ecológica Cayambe-Coca. En conclusión: efec-
ción sugiere otras elevaciones interesantes para el África ecuatorial, tivamente, seríamos los primeros en hacer una búsqueda sistemática
pero se encuentran distantes de la estrecha línea equinoccial, se trata del vértice de la latitud cero.
de algunas de las cimas más importantes de las Montañas Rwenzori. Los datos recabados orientaron la Expedición 0° / 0°C a la búsque-
Ajustándonos a los parámetros de la hipótesis, presentamos en la ta- da precisa del vértice ecuatorial, ya no se trataba solamente de una
bla de la página anterior las más altas cumbres de la latitud 0° en Áfri- exploración por los hielos equinocciales, ahora se integraba un pro-
ca con alturas superiores a 4600 m/nm. yecto de investigación interdisciplinario, que como trabajo científico
Si el gradiente fuera relevante para nuestro objetivo, el más espec- incorporaba diferentes disciplinas en colaboración de especialistas
tacular se encuentra en las islas Galápagos con el volcán Wolf en la procedentes de diversas áreas. Se elaboró entonces un proyecto de
isla Isabela, que emerge del océano a 1670 metros de altura, exhibien- investigación que atendió los aspectos ambientales, históricos y cul-
do así la portentosa actividad volcánica de la región. En la figura 40, se turales del volcán Cayambe (Montero, 2009b). Antes de partir, se en-
resume nuestro estudio trazando el perfil orográfico del cinturón ecua- tregó este proyecto a la embajada de la República del Ecuador en Méxi-
torial sobre un mapamundi, donde la primacía del volcán Cayambe co, gracias a la gestión de Enrique Aguilar. El documento también
queda demostrada. Por encontrarse a tal altura y posición, desde nues- circuló entre los participantes, colaboradores y patrocinadores, una
tra perspectiva, el Cayambe debería ser considerado como un ícono versión en Internet de éste se puso en línea el 15 de agosto de 2009.13
distintivo y de elocuencia para la nación ecuatoriana, como bien lo Las áreas y los resultados preliminares de esa investigación compo-
apuntó Alexander von Humboldt, en 1878: …que el Ecuador atraviesa nen el capítulo IV de este volumen.
la cima del Cayambe, que puede considerarse como uno de esos monu-
mentos eternos por medio de los cuales ha señalado la Naturaleza las 2.3.2 O BJETIVOS
grandes divisiones del globo terrestre. Aunque esta apreciación de
Humboldt en su tiempo no era innovadora, ya que aún antes de que él Objetivo de la Expedición 0° / 0°C: alcanzar y registrar el lugar más
recorriera los Andes, o de que la Misión Geodésica Francesa redactara alto en el mundo por donde cruza la línea ecuatorial.
sus primeros resultados, el Cayambe ya era considerado como el mar- En su momento, se establecieron los siguientes objetivos subalternos:
cador de la mitad del mundo.11 Sin duda alguna, el Cayambe con su • Ampliar nuestro conocimiento sobre la historia y cultura de las so-
impresionante altura y geométrica apariencia siempre ha impresiona- ciedades asentadas al somonte del volcán Cayambe desde el punto
do a sus visitantes, que fascinados con el volcán como testigo se sa- de vista de la antropología, la etnohistoria y la cosmovisión (arqueo-
ben en la mitad del mundo. astronomía); realizar visitas a museos, poblaciones, sitios arqueo-
La búsqueda de respuestas para el segundo cuestionamiento se rea- lógicos y entrevistar a promotores de la cultura indígena. Lo ante-
lizó también en los acervos bibliográficos de la Red Informática Mun- rior, para fortalecer los lazos que unen a Ecuador y México, animados
dial, sus resultados son los mencionados en las páginas del apartado por el estudio de la diversidad y paralelismo cultural entre los An-
2.2.1 Primicias literarias. No obstante, para confirmar en campo esos des y Mesoamérica.
primeros resultados alentadores entrevistamos al alcalde del cantón

12
Localizado en el cantón de Cayambe, provincia de Pichincha.
11
Ecuador Ciencia, página en línea para el 20 de julio de 2010 < http://www.ecuadorciencia. 13 Actualmente se puede consultar en línea en la dirección <www.montero.org.mx/
org/portal.asp?portal=38&id=44>. cayambeanterior.htm>.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
60

Figura 40. Proyección del perfil orográ-


fico ecuatorial sobre un mapamundi que
destaca también las naciones por las que
atraviesa el ecuador con sus principales
monumentos.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


61

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
62

• Aplicar la Cédula de Registro Ambiental (CRA) 14 como una herramien- 2.3.3 METODOLOGÍA
ta para la captura de datos en los diferentes puntos del recorrido
según instrumentos y estrategias específicas. En la CRA se asientan El punto de partida fue hacernos de un banco de información lo más
datos puntuales sobre el ambiente y la actividad antrópica. Éstos completo posible con la recopilación bibliográfica, cartográfica y fo-
pueden ser de interés para instituciones e investigadores en Ecua- tográfica de la montaña, esto dio inicio a un proceso de identificación
dor y México. En la CRA se da énfasis especial a la vulcanología, me- y clasificación de datos lo cual permitió la elaboración de un plan de
teorología, glaciología, edafología y geografía. La CRA está orientada aproximación y exploración, en el que se tomaron en cuenta las posi-
al cuidado del ambiente en la inteligencia de la fragilidad de los bilidades y los riesgos de la expedición. Posteriormente se procedió a
entornos de alta montaña en el mundo. la toma de decisiones y se redactó un documento base (Montero,
• Tomar muestras para instituciones que así lo soliciten; por parte de los 2009b), que fue puesto a consideración de un selecto grupo de espe-
integrantes de la expedición no se contempla ninguna recolección. cialistas. Se lanzó entonces una convocatoria15 para integrar el cuerpo
• Proporcionar a los interesados fotografías de la bóveda celeste, expedicionario, reuniendo a destacados montañistas en México y Ecua-
como sólo puede ser admirada desde el ecuador a una altura supe- dor, quienes comprometidos con los objetivos asumieron los riesgos,
rior a cuatro mil metros. Estas imágenes constituyen una contribu- aceptaron las tareas y financiaron sus propios gastos de operación. En
ción específica para el Año Internacional de la Astronomía. repetidas ocasiones realizamos video conferencias con los colegas
• Entregar los datos puntuales de las CRA a las autoridades de la Reser- ecuatorianos Cristóbal Cobo y Pablo Boada, para consultarlos en la
va Ecológica Cayambe-Coca (RECC) para contribuir al plan de manejo toma de decisiones.
ambiental que realizan. Una vez integrado el equipo de participantes, y antes de partir a los
• Documentar la expedición por medio de fotografía y video, con la Andes septentrionales, se hizo del conocimiento de nuestro viaje a las
intención de promover el turismo regional. autoridades ecuatorianas, primero presentándonos en la Embajada
• Publicar un libro que permita la integración intelectual entre la de la República del Ecuador en México, donde fuimos recibidos por el
comunidad iberoamericana a través de las experiencias, resultados excelentísimo señor embajador doctor Galo Galarza Dávila, posterior-
e imágenes obtenidas. mente se presentó el proyecto de investigación por medio de correo
• Reforzar la conciencia internacional acerca del alto valor cultural y electrónico y se hizo la gestión de la parte ecuatoriana, y se puso a
natural que significa el volcán Cayambe publicando en Internet los consideración de las autoridades de la Reserva Ecológica Cayambe-
resultados de la expedición. Coca (RECC ), y del Instituto Ecuatoriano Forestal y de Áreas Naturales y
• Sumarse a la divulgación de la ciencia que promueve el Primer En- Vida Silvestre (IEFANVS ) para su visto bueno. Se procedió entonces a la
cuentro Internacional de Arqueoastronomía. adquisición de los pasajes aéreos, a la contratación de seguros, a
• Promover entre la niñez y juventud latinoamericana el gusto por la la firma de cartas excluyentes de responsabilidad, se integraron expe-
exploración del medio ambiente con fines de conservación, educa- dientes con datos médicos, estados financieros y disponibilidad de
ción, deporte y recreación. equipos, se realizaron ejercicios de evaluación fisiológica, se gestio-
• Ampliar nuestro conocimiento sobre la fisiología de montaña apli- naron los patrocinios, se realizaron reuniones técnicas para detallar
cando distintos modelos de evaluación. las protocolos de travesía sobre terrenos mixtos (roca-hielo). Los com-
• Ofrecer un banco de datos que resulte útil al pueblo ecuatoriano y promisos y obligaciones quedaron asentados, se reunieron materia-
a la comunidad científica internacional. les, equipos e instrumentos de investigación. Se preparó la partida.

14
La CRA es un instrumento diseñado para sistematizar las observaciones ambientales en
15
el volcán Cayambe. Es producto de años de investigación en las montañas mexicanas Agradezco el empeño que tuvo para esta tarea el ingeniero Juan Martínez, presidente
por parte de Arturo Montero y colaboradores (2004 y 2005). del Socorro Alpino de México.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


63

Al efectuarse la expedición en superficies agrestes y alejadas de las debía estar siempre disponible durante las exploraciones en las lade-
vías de comunicación, se requirió que los investigadores y montañistas ras y también era necesaria, como uno de los campos del registro de la
contaran con una buena condición física, capacidad de aclimatación CRA para cada uno de los sitios en donde se realizaban las lecturas. Se
para sobreponerse al mal de montaña, dominio de las técnicas de pro- recurrió al método de posicionamiento absoluto, realizando la toma
gresión en terrenos mixtos, además del equipo especializado para afron- de coordenadas desde un GPS (Global Positioning System), del tipo
tar estas travesías en terrenos característicos de los deportes extre- navegador con antena de alta sensibilidad.18 En este método no se
mos o de aventura. Como medida de seguridad se incorporaron hizo intervenir un receptor base, es decir, las coordenadas no se corri-
modernos sistemas en telecomunicaciones, telefonía satelital 16 y ra- gieron diferencialmente, así que obtuvimos resultados que iban de
dios banda UHF FM con el uso de frecuencias de radioaficionados; asi- tres a 15 metros de error, dependiendo de las alteraciones en la señal y
mismo, se implementó un plan de contingencia para afrontar alguna la presencia de obstrucciones en el lugar. Utilizamos varios aparatos
situación de emergencia que pudiera presentarse en colaboración con con la intención de confrontar datos y evitar un margen de error supe-
la Cruz Roja Ecuatoriana. rior a una décima de segundo, que equivale a 3.09 metros. Es necesario
Para los trabajos de investigación de campo, se comisionó a tres apuntar que este es el valor asignado para la longitud de la latitud 0,
integrantes la captura de datos ambientales a intervalos precisos ya que en el ecuador la distancia entre los meridianos es de 30.92
valiéndose de la CRA , con este instrumento se operó un acervo que metros para un segundo de longitud.19 Para la latitud no hay variación,
compiló todas las observaciones realizadas en la montaña. La CRA fue pues sus valores son constantes desde los polos hasta el ecuador. De
elaborada según un modelo relacional 17 para desempeñarse en el cualquier manera, aunque obtuviéramos variaciones superiores a cin-
software Access 2003 y versiones posteriores de la suite Office XPTM de co décimas de segundo, los datos conseguidos podrían ser empleados
Windows. Con esta herramienta se facilitó el mantenimiento y acce- para la captura de inventarios en proyectos a escalas de 1:50 000 a
so a los datos de forma estándar. La información se organizó en cam- 1:10 000 o menores, con la plena confianza de que los puntos caerían
pos y registros. El campo se destinó a un tipo o atributo de informa- en el lugar que les correspondería cartográficamente. La aplicación
ción específico, y el registro a toda la información sobre un sitio. Los del equipo GPS para el levantamiento de elementos fue una solución
datos podían aparecer en forma de texto, números, gráficos e incluso accesible para la configuración de las grandes extensiones de terreno
imágenes. Así que era posible consultar los datos por registro, o de recorrido durante los trabajos de captura y prospección. La toma de
una serie de registros según las condiciones solicitadas por el usua- coordenadas se realizó con tres equipos GPS de diferentes modelos
rio. También se pudieron ordenar los datos para realizar sencillas marca Garmin. Los datos se transfirieron por un cable o link a una
operaciones desde una hoja de cálculo (Excel). La introducción de computadora personal donde eran visualizados con el software
los datos se realizó por medio de un formulario que a la vez confor- MapSource 6.14. De ahí se trasladaron como un archivo de datos for-
maba la ficha de registro de la CRA ; por medio de la CRA se pudieron mato “dxf” a un sistema de información geográfica (SIG ), que en este
elaborar e imprimir de manera instantánea informes específicos so- caso fue el ArcView 3.2, poderoso conjunto de herramientas para obte-
bre los datos almacenados. ner, almacenar, recuperar, transformar y desplegar datos espaciales
Para atender al objetivo fundamental de la expedición de descubrir para determinados propósitos. Este software cuenta con la capacidad
el sitio a más altitud en el mundo por donde pasa la línea del ecuador, de conectar los datos a mapas digitales tipo raster, cartografía vectorial,
era necesario determinar durante cada prospección con el mayor ran-
go de exactitud, la posición geográfica y la altitud. Esta información
18
Que recibe la señal de los 24 satélites operativos de la constelación NAVSTAR , los cuales se
hallan distribuidos en seis órbitas elípticas, cada una con 55° de inclinación respecto
16
Agradecemos el patrocinio de GlobalStar por dotarnos de tiempo libre para nuestras al ecuador, los satélites tienen un periodo de casi doce horas y orbitan aproximada-
comunicaciones. mente a 20 mil km de altitud.
17 Los datos se almacenan en tablas y se accede a ellos mediante consultas escritas en SQL. 19 A diferencia de la Ciudad de México, que es de 29.06 metros, por ejemplo.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
64

ortofotos, fotografía satelital georreferenciada y banco de datos, brin- sincronización. Todos los resultados fueron cotejados con las cartas
dando una herramienta que nos permitió visualizar y analizar la infor- topográficas para homologar criterios.
mación de una manera versátil, de fácil interpretación y amplia divul- Para la elaboración de nuestros mapas, el registro de posiciones y
gación cuando exportamos los datos al Google Earth. la toma de decisiones sobre las rutas a seguir se consiguió la cartogra-
Para determinar con precisión la altitud, el ingeniero José de la fía vectorial del volcán Cayambe, que se aplicó digitalmente desde un
Herrán, de Universum, Museo de las Ciencias de la UNAM, nos suministró SIG . Además, en el Instituto Geográfico Militar de Ecuador, fueron ad-
un altímetro/barómetro marca Thommen de 19 joyas, el cual fue cali- quiridas la carta topográfica y la fotografía aérea de la región.
brado al llegar a Ecuador en las instalaciones del Instituto Nacional Entre los instrumentos incorporados para trazar en terreno el rum-
de Meteorología e Hidrología (INAMHI ) de Quito, donde también realiza- bo ecuatorial destaca una brújula tipo Brunton acimutal montada en
mos la consulta del clima, con la asesoría del glaciólogo Bolívar Ernes- un trípode, es necesario señalar que estimamos el valor de la declina-
to Cáceres Correa. Indispensable era comparar los datos del altímetro/ ción magnética en 02° 36´ oeste, con una tasa de variación anual de 0°
barómetro Thommen, con otros instrumentos para validar nuestros 8´ hacia el oeste, para confirmar este ajuste se comprobó el rumbo en el
resultados, fue así como incorporamos cinco aparatos más: uno de sitio Quitsato, donde está trazada una línea ecuatorial avalada por
bolsillo de la misma marca (también del ingeniero De la Herrán), otro el Instituto Geográfico Militar de Ecuador (fig. 41). 20 Para comprobar
de mecanismo electrónico marca Kastrel (donado por Deep Sky), y en campo el trayecto ecuatorial siguiendo la elevación del Sol duran-
tres GPS de diferentes modelos que proporcionaban la altitud por te el día de equinoccio, y visar las principales elevaciones sobre esta
línea en la ladera del Cayambe, se contó con un teodolito electrónico
marca Grome, facilitado por el Instituto de Geofísica de la UNAM.
La publicación de la cartografía además de ser impresa, como en su
momento se hizo para una conferencia de prensa en el Centro Cultural
Mexicano de Quito, se agregó en un archivo de formato “kmz” para
Google Earth, el cual fue entregado a las autoridades ecuatorianas de
manera inmediata al terminar la expedición en ese mismo evento.
El manejo de datos es recomendable por medio del software, pues la
escala en que los mapas pueden ser impresos hace difícil la visualiza-
ción a detalle. Procedimientos concretos de las técnicas y métodos
aplicados en campo y gabinete son detallados según cada disciplina
en el capítulo IV de este volumen.
Para la toma de datos climáticos instalamos en el campamento base
una estación portátil modelo Davis II, durante la prospección registra-
mos lecturas con una estación de bolsillo marca Kastrel 4000; ambos
instrumentos se conectan por un cable o link a una computadora per-
sonal. Detalles sobre el uso de estos equipos, la toma de muestras de
Tierra, la implementación de un sismógrafo, las especificaciones
de las cámaras fotográficas para la astronomía, y los criterios climáticos
son detallados en su oportunidad.

Figura 41. Hito geodésico del Instituto Geográfico Militar que señala el ecuador
terrestre con suma exactitud, ubicado en el centro turístico cultural Quitsato. 20
Agradecemos las facilidades prestadas para este ajuste a Cristóbal Cobo.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


65

2.3.4 M ATERIALES , EQUIPOS Y FINANCIAMIENTO

La Expedición 0° / 0°C, fue mo-


derna y adecuadamente equipada,
dentro de las posibilidades de los
participantes, tanto en el equipo
de montaña como el científico. El
más solicitado de los instrumen-
tos de campo fue la computadora
portátil en dos modalidades: note-
book, para Windows Vista marca
Acer Aspire y MacBook de Apple.
Ambos equipos intentamos conec-
tarlos a celdas solares para abas-
tecernos de la energía suficiente
Figura 42. Selección de equipos colectivos de progresión exhibidos por la Expedición 0° / 0°C, durante la exposición montada
que permitiera una considerable en la Casa del Risco, Ciudad de México, diciembre de 2009.
independencia, lamentablemente
el mal tiempo, siempre nublado
hizo imposible activar las celdas. pedición y proyectarlo en car- implementos de progresión según equipos más delicados transpor-
Por otra parte, con los programas tografía vectorial y ortofotos normas internacionales de la EN- tados en contenedores especiales
adecuados para la notebook fue georreferenciadas para su análisis UIAA (Normas Europeas-Unión In- hasta la cima del cerro Pamba-
posible estimar la posición del dis- espacial. ternacional de Asociaciones de marca de 4050 m/nm están los teles-
co solar o de cualquier cuerpo ce- Para los ascensos en la monta- Alpinismo), ropa térmica, botas, copios y el equipo de fotografía
leste para cálculos arqueoastro- ña sobre roca y hielo se contó con equipo de protección y acceso- astronómica del Centro Astronó-
nómicos, y así establecer los material colectivo de travesía pro- rios. Los combustibles, agua y die- mico Clavius. Y en su caso, hasta
alineamientos y la elevación en- porcionado esencialmente por dos tas específicas para las estancias al campamento base en la ladera
tre lugares distantes sin el uso de integrantes de la expedición: Je- prolongadas en alta montaña sig- sur del Cayambe a 4400 m/nm, se lle-
teodolito. En el campamento base, sús Montesa de Rapelando y Mi- nificaron un volumen cuantioso; varon binoculares, la cámara de
entre las agrestes laderas de la guel López (fig. 42). Entre los ma- la Expedición 0° / 0°C, en su mo- video profesional modelo Canon
montaña, era posible trabajar en teriales más importantes tenemos mento desplazó media tonelada XL 1, proporcionada por la Univer-
el SIG , integrar la base de datos, el equipamiento para el campa- en equipo desde la Ciudad de sidad Iberoamericana, además del
completar el registro fotográfico mento, los anclajes, las cuerdas di- México a Ecuador. Sobre la capa- equipo de fotografía especializa-
y de video digital, además de man- námicas hidrófugas, los sistemas cidad de equipar y armar una ex- da de Juan Rivera; todas estas uni-
tener actualizado el diario de cam- de autorrescate, los tornillos para pedición, los coordinadores de dades se acarrearon cuidadosa-
po y toma de notas en audio. El hielo, las anclas para nieve, los esta misma han publicado manua- mente con sus lentes, accesorios
ordenador portátil al conectarse botiquines y los anillos de cinta les al respecto (véase Montero, y pilas extras.
a un GPS , permitió determinar en para roca, entre otros. Cada expe- 2000; Montesa y García, 2005). Para cubrir los gastos de la ex-
tiempo real la ubicación exacta dicionario se hizo cargo de su equi- Además de los instrumentos pedición, que consistieron en
en donde se encontraba la ex- po personal, contando con sus científicos mencionados, entre los equipamiento, imagen pública,

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
66

gastos de representación, trans- amigos, colaboradores e investiga- 2.4.2 L A EXPEDICIÓN SE INCORPORA


portación, telefonía local e inter- dores motivados por el conoci- A LOS TRABAJOS DEL A ÑO I NTERNACIONAL
nacional, alojamiento, combusti- miento y la construcción de un DE LA ASTRONOMÍA
bles, arrendamientos de equipos mundo mejor desde la perspecti-
y alimentación; además de los im- va del cuidado ambiental. Fue en Con motivo del Año Internacional
puestos pagados en Ecuador, las este sentido que se marcó una dis- de la Astronomía (AIA ) declarado
cuotas a la Reserva Ecológica Ca- tancia necesaria con intereses po- por la UNESCO (fig. 43), se celebró
yambe-Coca y los haberes de los líticos o de alguna organización en la ciudad de Quito, Ecuador, del
guías, porteadores y arrieros de no gubernamental ( ONG). La expe- 20 al 24 de septiembre de 2009, el
las bestias de carga, se conside- dición se conformó como una em- Primer Encuentro Internacional de
raron necesarios alrededor de 40 presa no lucrativa, sus recursos Arqueoastronomía.21 Una de las ac-
mil dólares, los cuales fueron cu- provinieron del autofinancia- tividades científicas de dicho
biertos de manera equitativa en- miento, logrando un ejemplo de evento fue la Expedición 0° / 0°C.
tre cada uno de los 16 expedicio- altruismo, administración y trans- El AIA, constituyó una celebración
narios que partieron de la Ciudad parencia. Los intereses de los par- global de las contribuciones de la
de México. ticulares no se contrapusieron y se astronomía a la sociedad y la cul-
integraron desde los fines deporti- tura. Entre los objetivos principa-
vos de los montañistas hasta los les se propuso estimular en todo
2.4 Integrando la estéticos de la fotografía y la pin- el mundo, no sólo el interés por
expedición tura paisajista de Jorge Obregón, la astronomía, sino el de la cien-
planteando que los resultados son cia en general, especialmente en-
2.4.1 U NA EMPRESA AUTOFINANCIADA , parte de un trabajo colectivo que tre la juventud. El AIA fue, ante
NO LUCRATIVA Y DE AUTOGESTIÓN puede ser compartido dando su todo, una actividad de los ciuda-
crédito al autor. Si bien es cierto danos del planeta Tierra, en el que
La Expedición 0° / 0°C, se inte- que orientados por los fines cientí- se transmitió la emoción del des-
Figura 43. Distintivo para el Año Interna-
gró como un viaje de exploración ficos el proyecto mantuvo contac- cubrimiento personal, el placer de cional de la Astronomía, declarado por la
e investigación que incorporó a to con instituciones paraestatales compartir los conocimientos fun- UNESCO .
particulares que voluntariamente y académicas en México que pro- damentales sobre el Universo y el
apoyan las investigaciones de porcionaron algunos instrumentos lugar que ocupa la humanidad en
montaña. La propuesta lejos de científicos como ha quedado deta- él y, en última instancia, el valor
cualquier alcance institucional, llado, esto no significo injerencia de la cultura científica.22
comercial y mucho menos guber- alguna ni dependencia, y mucho Un hecho más, que fue trascen-
namental planteó sus posibilida- menos algún subsidio. dente desde la astronomía para la
des, alcances y objetivos. Como
una empresa de autogestión esta-
bleció sus metas, su planificación
y la programación eficaz de tareas 21
Coordinado y promovido atinadamente por el documentalista ecuatoriano Enrique Aguilar.
partiendo de la simple articula- 22 Tomado del manifiesto declarado por la UNESCO para el Año Internacional de la Astrono-
ción de intereses de un grupo de mía.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


67

Expedición 0° / 0°C, es que el ascenso se programó para el equinoc-


cio de septiembre, 23 fecha en que el disco solar pasa cenitalmente so-
bre la línea ecuatorial, ofreciendo una posibilidad extraordinaria de
marcar la trayectoria del ecuador por medio del Sol, y no sólo por
instrumentos electrónicos. Este fenómeno fue decisivo para determi-
nar la fecha de exploración, aún más importante que las condiciones
meteorológicas o las necesidades logísticas, pues seguir la línea ecua-
torial durante el equinoccio nos parecía significativo. Recordemos que
en los tratados antiguos por equinoccial se nombraba al ecuador, por
hallarse el Sol sobre éste durante los equinoccios de primavera (ver-
nal) y de otoño (autumnal). El Sol durante el amanecer del equinoccio
aparece semejante en todo el mundo, pero a diferencia de otros luga-
res, sobre el ecuador se eleva de manera recta y no oblicua. Hace una
trayectoria perfecta en la orientación este-oeste a través de la bóveda
celeste. El camino del Sol por el ecuador desde hace milenios es de la
misma sincronía, y esta particularidad otorgó a la región andina una
categoría simbólica relevante en relación con otras culturas prehispá-
nicas del continente.

2.4.3 C ONMEMORANDO EL B ICENTENARIO DE LA I NDEPENDENCIA

La Expedición 0° / 0°C fue programada también para realizarse den-


tro de otro periodo primordial: las fiestas del Bicentenario de la Inde- Figura 44. Emblema para el Bicentenario de la Independencia de la República del
Ecuador.
pendencia de la República del Ecuador (fig. 44). Así que los explorado-
res ecuatorianos con el descubrimiento del vértice ecuatorial pudieron
conmemorar de manera muy significativa y notable a su nación; como
coordinador de la expedición consideré tan importante este hecho,
que al primer glaciar descubierto le puse por nombre Bicentenario. El mo moral de La raza cósmica ensayada por José Vasconcelos, y con el
esfuerzo que ha significado publicar este volumen a un año de con- anhelo por la unidad de las naciones del continente24 en esta entrega
cluida la expedición, en el mes de septiembre de 2010, conduce a una compartimos con el lector nuestro apego por el estudio y la preserva-
afortunada casualidad con el mes patrio en que México celebra tam- ción del patrimonio cultural y natural de Latinoamérica.
bién su Bicentenario.
Las conmemoraciones de los bicentenarios en el continente nos
invitan a congregarnos simbólicamente en el vértice ecuatorial, y des- 24
Entre las plataformas de integración tenemos multiples propuestas: la Alianza
de ahí insistir en un destino común para Iberoamérica. Con el optimis- Bolivariana para América, en su momento Asociación Latinoamericana de Libre Co-
mercio (1960-1980), la Asociación Latinoamericana de Integración, el Mercado Común
del Sur o Mercosur, la Comunidad Andina, el Grupo de Río, la Comunidad de Estados
Latinoamericanos y Caribeños, la Organización de Estados Iberoamericanos para la
Educación, la Ciencia y la Cultura, la Carta Cultural Iberoamericana, y la Unión de
23
Por tratarse de la latitud ecuatorial y no de alguno de los hemisferios, hacemos referen- Naciones Suramericanas, entre otras organizaciones internacionales y regionales del
cia al equinoccio por su fecha, y no porque sea autumnal o vernal. continente.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
68

2.4.4 E MBLEMA sus glaciares. En la base, a la iz- tro por el horizonte. Hemos colo- tre los hemisferios Norte y Sur, de
quierda, tenemos al mundo como cado el Sol a la derecha y por afue- tal manera que a la izquierda te-
Masas de hielo y nieve que se con- un planeta azul, en una clara pro- ra del triángulo para representar nemos la Estrella Polar del hemis-
traponen a la insolación ecuato- puesta ambientalista, a su alrede- la ladera sur del volcán Cayambe, ferio Norte, y a la derecha, la Cruz
rial es el hecho relevante, por eso dor resaltamos una órbita en rojo que es donde se localiza el vértice del Sur. Las cuatro estrellas de
cuando Cristóbal Cobo compartía que representa al ecuador te- ecuatorial y que corresponde a la mayor magnitud que dibujan la
su experiencia del año 2007, la rrestre que se proyecta al ecuador Arista del Águila y el Cóndor; este Cruz del Sur, son las estrellas que
narraba de manera retórica: es un celeste, esta línea es también el re- es el sitio por donde el Sol apare- Dante Alighieri en La Divina Co-
lugar localizado a cero grados de corrido del Sol, con esto denota- ce al amanecer del día del equi- media, relaciona con las cuatro vir-
latitud, con una temperatura infe- mos el “Camino del Sol” a la mane- noccio visto desde la línea ecua- tudes: prudencia, justicia, fortale-
rior a cero grados Celsius, de ahí ra en que los antiguos sabios torial al somonte. El “Camino del za y templanza. Como lo afirmaba
tomamos el nombre. Ya con un nom- describían el movimiento del as- Sol” marca también la división en- la concepción medieval del espa-
bre, se procedió a diseñar un dis- cio, la Estrella Polar marca el ca-
tintivo que pudiera distinguir a la mino del mundo conocido, en tan-
expedición. En el emblema se re- to la Cruz del Sur, el mundo por
únen elementos simbólicos que conocer y por explorar. Este crite-
son significativos, todo se con- rio de un norte conocido y un sur
grega en una figura triangular. Pri- por descubrir conduce a una re-
mero, el nombre es reducido, se flexión geográfica y cosmológica
recurre únicamente a la represen- donde el ecuador determina los
tación geográfica de latitud con hemisferios. Si atendemos la orien-
la letra griega (phi) antecedida tación de las estrellas y la posi-
por el valor cero grados; separado ción del Sol, encontraremos que
por una barra oblicua, se agrega esta alegoría se encuentra orien-
el valor cero grados Celsius tam- tada, pues apreciamos el amane-
bién de manera abreviada. Todos cer sobre el Cayambe para el día
los caracteres se armonizan en equinoccial. En los colores del
color rojo en la base del triángulo. emblema: amarillo, azul y rojo,
El triángulo representa al vol- manifestamos nuestro apego a la
cán Cayambe con una base oscu- República del Ecuador, nación
ra que muestra la media montaña que guarda esta maravilla de la na-
y en azul, la alta montaña con tex- turaleza para la humanidad (fig.
turas que recuerdan las grietas de 45).

Figura 45. Distintivo de la Expedición 0° / 0°C.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


69

2.4.5 P ARTICIPANTES, COLABORADORES


Y PATROCINADORES

La Expedición 0° / 0°C, fue una propuesta coordinada por Ismael cienda de Guachalá. Para consolidar la estructura organizacional
Arturo Montero García, quien desde la estancia posdoctoral auspiciada se destinaron dos participaciones desde la Ciudad de México, ade-
por el CONACYT en la Universidad Iberoamericana, armó conjuntamente más se integraron dos asesores para las labores de investigación
en México y en Ecuador el proyecto; con la participación de medio también desde la Ciudad de México. En total se sumaron 32 inter-
centenar de personas entre montañistas, asesores, y científicos. To- venciones directas, de las cuales 20 fueron de ciudadanos mexica-
dos ofrecieron generosamente su tiempo, experiencia y recursos para nos, 11 ecuatorianos, y un español. Por parte del grupo mexicano
lograr el objetivo colectivo de alcanzar las nieves equinocciales. participaron ocho mujeres y 12 hombres, demostrando que entre
Para la prospección de la trayectoria del ecuador sobre la ladera géneros no existen diferencias sino equidad, pues cada miembro
sur del volcán Cayambe, y el ascenso a su cima, se comprometió un del grupo fue elegido según sus capacidades y aptitudes. En las
equipo de 22 expedicionarios compuesto por dos investigadores, dos siguientes líneas presentamos el destacado equipo que conformó
artistas, y 18 montañistas repartidos en diferentes comisiones. Para la expedición, donde la conducta colectiva, la calidad moral y el
los trabajos de fotografía astronómica realizados en la cima del vol- entusiasmo superaron cualquier contradicción personal que pu-
cán Pambamarca se ocuparon cuatro colaboradores, y dos más se de- diera presentarse bajo las extremas condiciones en que se desarro-
dicaron a la logística, uno en la ciudad de Quito y otro desde la Ha- lló la permanencia por 15 días en la montaña.

• Aguilar, Enrique, cuenta con una filmografía de 13 videos de cine documental realizados en Ecuador, Guatemala, Bolivia, Perú y México,
muchos de los cuales han sido oficialmente seleccionados en festivales internacionales. Dirige una organización dedicada a temas de la
antropología y la diversidad de culturas en el continente americano.
Cargo: Coordinador del nodo Ecuador.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Pueblos de América, México-Ecuador.
• Arias, Lorena, licenciada en física con posgrado en ciencias por la UNAM. Especialista en nebulosas gaseosas y actualmente coordinadora
asesora del Centro Astronómico Clavius de la Universidad Iberoamericana. Aficionada a caminar entre cañones y observar el cielo nocturno
desde las diferentes regiones del planeta. Forma parte del equipo científico de la expedición.
Cargo: Coordinadora del equipo astronómico.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Centro Astronómico Clavius, Universidad Iberoamericana, México.
• Boada, Pablo, cofundador y actual director ejecutivo de la Fundación Quito Eterno, una organización que promueve el conocimiento del
arte, historia y cultura de Ecuador. Con estudios en derecho, tiene experiencia y formación en la creación y gestión de proyectos culturales.
Aficionado al montañismo, ha realizado diversos ascensos en los Andes.
Cargo: Guía en la expedición.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Fundación Quito Eterno, Ecuador.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
70

• Campos, Karla, estudiante de etnología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Participa en proyectos de investigación sobre
el culto a la montaña en el Altiplano central mexicano. Su primera publicación la realizó en el libro titulado 100 Historias de Linaje de
Graniceros del Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Forma parte del equipo de antropólogos de la expedición.
Cargo: Equipo de investigación antropológica.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Escuela Nacional de Antropología e Historia, México.
• Cano, Jesús, montañista, con amplia experiencia en servicios de emergencia.
Cargo: Logística, Ciudad de México.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Socorro Alpino de México.
• Candiani, Bruno, estudiante de ingeniería física en la Universidad Iberoamericana.
Cargo: Equipo de fotografía astronómica.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Centro Astronómico Clavius, Universidad Iberoamericana, México.
• Carrillo, Marcelo, vecino de la ciudad de Cayambe, su conocimiento sobre la montaña fue trascendental para el éxito de la expedición.
Cargo: Guía de la expedición.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Sin adscripción.
• Cobo, Cristóbal, coordinó la primera expedición al punto 0° en 2007. En esta fue ocasión guía y copatrocinador. Es director del proyecto
Quitsato, dedicado al estudio y puesta en valor de lo concerniente a la Mitad del Mundo, es también promotor de la gestión cultural.
Cargo: Coordinador del equipo de guías de la expedición.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Proyecto Quitsato, Ecuador.
• Coyaguillo, Alex, destacado montañista vecino de la ciudad de Cayambe.
Cargo: Grupo de apoyo.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Proyecto Quitsato, Ecuador.
• Díaz, Miriam, tiene amplia experiencia en las montañas andinas y mexicanas, además de ser espeleóloga, es experta en terrenos agrestes y
en competencias extremas donde ha participado y ganado varios premios.
Cargo: Armadora de rutas en hielo.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Socorro Alpino de México.
• Eyssautier, Lysette, bióloga egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana, docente de la Universidad del Valle de México, paracai-
dista, técnico en urgencias médicas y voluntaria en la Brigada de Rescate del Socorro Alpino de México, es además instructora de buceo,
guardavidas, e imparte cursos de protección civil.
Cargo: Paramédico.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Universidad del Valle de México.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


71

• Galindo, Jesús, licenciado en física y matemáticas, por el Instituto Politécnico Nacional, doctorado en astrofísica teórica por la Ruhr
Universitaet Bochum. Fue investigador titular en el Instituto de Astronomía, UNAM en las áreas de plasmas astrofísicos y física solar. Actual-
mente es investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas, UNAM.
Cargo: Asesor científico.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Universidad Nacional Autónoma de México.
• Larrea, Julián, montañista ecuatoriano, asesor en la expedición, reside en Quito.
Cargo: Grupo de apoyo.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Colaborador de la organización cultural Quito Eterno.
• López, Miguel, ingeniero, destacado montañista con amplia experiencia internacional, es guía y monitor de barranquismo, además de
rescatista en aguas vivas.
Cargo: Armador y guía.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Socorro Alpino de México.
• Lucero, Luis, guía de montaña y guardabosque.
Cargo: Supervisor de la expedición por parte de las autoridades del Gobierno de la República del Ecuador, a través de la Reserva
Ecológica Cayambe Coca.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Corporación Indígena Campesina de la Comunidad del Hato.
• Martínez, Gabriela, realiza estudios de psicología en la UNAM, es técnica en urgencias médicas y rescatista.
Cargo: Logística.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Grupo SOS .
• Martínez, Jesús, cuenta con estudios de doctorado y se dedica a la investigación en ciencias médicas.
Cargo: Médico.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Sin adscripción.
• Martínez, Juan, ingeniero mecánico, con experiencia como socorrista y rescatista urbano, de montaña y de caverna por más de 15 años.
Especialista en rescate vertical e instructor de esta materia en varias instituciones.
Cargo: Logística, Ciudad de México.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Socorro Alpino de México.
• Medina, Adriana, licenciada en arqueología, profesora de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, se encuentra realizando su
posgrado en la UNAM. Participa en proyectos colectivos de investigación acerca de las manifestaciones rupestres y arqueología del paisaje.
Cargo: Asesor científico.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Universidad Nacional Autónoma de México.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
72

• Montero, Arturo, arqueólogo de alta montaña, se especializa en investigaciones arqueoastronómicas en los Andes y Mesoamérica, recien-
temente culminó una estancia posdoctoral en la Universidad Iberoamericana, con una beca auspiciada por el Consejo Nacional de Ciencia
y Tecnología. Coordina el centro de investigaciones de montaña Ipan tepeme ihuan oztome.
Cargo: Coordinador de la expedición.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, México.
• Montesa, Jesús, montañero aragonés, guía e instructor de alpinismo, escalada y descenso de barrancos. Lleva más de 12 años dedicado a
la formación en los cuales ha impartido más de 200 cursos. Actualmente reside en México, donde se dedica por entero al turismo de aventura
en todas sus facetas.
Cargo: Coordinador técnico.
Nacionalidad: Español.
Institución: Empresa turística Rapelando.com, México.
• Montesinos, Manuel, licenciado en educación física, técnico en urgencias médicas y rescatista agreste de la Cruz Roja Mexicana, graduado
del curso técnico de alta montaña de la UNAM y salvamento acuático del Ejército Mexicano, ha realizado cursos de paracaidismo estático y
libre, así como el de buceo open water padi.
Cargo: Fisiólogo.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Secretaría de Educación Pública, México.
• Moreno, Jazmín, realizadora, documentalista y productora audiovisual. Ha participado en proyectos de auto-sustentabilidad en comuni-
dades indígenas y brigadas de rescate, protección civil, emergencias, atención y prevención de desastres.
Cargo: Producción audiovisual y enlace con los medios de comunicación.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: Casa 12 Producciones.
• Obregón, Jorge, destacado artista plástico, su obra paisajística ha sido expuesta en importantes galerías y museos a escala internacional.
Cargo: Ilustra desde la pintura paisajista la expedición.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Sin adscripción.
• Olguín, Adrián, fotógrafo profesional egresado de la Universidad Complutense.
Cargo: Equipo de fotografía astronómica.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Centro Astronómico Clavius, Universidad Iberoamericana, México.
• Ordóñez, Alfredo, destacado montañista andino, colaboró como guía y copatrocinador de la expedición, vecino de Quito.
Cargo: Asesor y guía.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Nuevos Horizontes.
• Ortiz, Diego, estudiante de diseño industrial en la Universidad Iberoamericana.
Cargo: Equipo de fotografía astronómica.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Centro Astronómico Clavius, Universidad Iberoamericana, México.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


73

• Pasmiño, Rómulo, destacado montañista andino, vecino de Quito.


Cargo: Asesor y guía.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Nuevos Horizontes.
• Rivera, Juan, su trayectoria profesional destaca en formatos fotográficos para la publicidad.
Cargo: Fotógrafo oficial de la expedición.
Nacionalidad: Mexicano.
Institución: Latitud 357.
• Rolland, Lizette, experta en navegación terrestre y cartografía, guía y consultora especializada en proyectos de turismo rural y de natura-
leza desde hace 15 años. Ha participado en raids de aventura nacionales e internacionales como CAMDEX, EAH, Eco-challenge y Fiji, entre otros.
Cargo: Navegante.
Nacionalidad: Mexicana.
Institución: MexGeo.
• Tapia, Álvaro, montañista ecuatoriano experto en la región andina septentrional, vecino de la ciudad de Quito.
Cargo: Guía y asesor.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Sin adscripción.
• Tinajero, Julio, experto montañista andino, vecino de Quito.
Cargo: Asesor y guía.
Nacionalidad: Ecuatoriano.
Institución: Nuevos Horizontes.

La estructura de la expedición fue dinámica, con un modelo administrativo que contempló tres momentos: el antes, el durante y el después de
la permanencia en la montaña. Así que los cargos, responsabilidades, obligaciones y relaciones entre los participantes se modificaron, como
se aprecia en las figuras 35 a la 37, donde se ilustra gráficamente esta organización.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
74

Figura 35. Esquema de la administración previa a la permanencia en la montaña.

Figura 36. Esquema de la administración durante la permanencia en la montaña.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


75

Figura 37. Esquema de la administración posterior a la permanencia en la montaña.

Los patrocinios recibidos no estuvieron orientados a promover la ven- durante la conferencia de prensa previa a la partida de la expedi-
ta de productos a través de la expedición ni significaron alguna obli- ción.
gación económica por las partes, no se realizó ninguna campaña pu- Instituciones y organizaciones que en México participaron: Universi-
blicitaria, pues eventos de investigación científica cuentan con dad Iberoamericana, a través del Departamento de Ciencias Socia-
reducida audiencia en los medios. El patrocinio fue en especie, con les y Políticas, con apoyo a la investigación y en programas de difu-
instrumentos, servicios y descuentos, que si hubieran sido costeados sión; Centro Astronómico Clavius, participó con investigadores y
por la expedición hubieran significado 10% de la inversión. Es un por- equipos; Universum, Museo de las Ciencias de la Universidad Nacio-
centaje mínimo, sin embargo, es significativo, porque representa la nal Autónoma de México, a través del ingeniero José de la Herrán,
solidaria contribución a un proyecto que no tiene alcance comercial, con el suministro de equipo especializado; Brigada de Rescate del
lo cual demuestra la confianza y amistad entre particulares. El marco Socorro Alpino de México, que colaboró en la logística; Instituto
territorial de las colaboraciones abarcó los dos países, y se enlistan Nacional de Antropología e Historia, a través de la doctora Margari-
por separado. ta Loera, y el Centro Cultural Isidro Fabela, en el proceso de difu-
Patrocinadores en México: Deep Sky, empresa que proveyó y donó sión.
equipo científico; Globalstar de México, aportó de manera gratuita Patrocinadores en Ecuador: Hacienda Guachalá, centro turístico y
tiempo aire para las comunicaciones por telefonía satelital; Pue- hotel, facilitó amplias instalaciones, servicios y descuentos en el
blos de América, fundación dedicada a la difusión de la cultura, hospedaje; Nuevos Horizontes, club de montañismo andino genero-
aportó recursos para la logística; Ipan tepeme ihuan oztome, orga- samente colaboró en la logística y planificación, brindó además
nización particular de difusión científica, contribuyó en la logísti- transporte gratuito y hospedaje sin cargo, contribuyó también en
ca y con aportes para gastos de operación; Assist-card, compañía la prospección de la montaña; y Budget Car Rental, proporcionó a la
de seguros para el viajero, amplió la cobertura del seguro y ofreció expedición una camioneta 4x4 sin cargo y con kilometraje libre.
significativos descuentos; Casa 12 Producciones, firma dedicada a Instituciones y organizaciones que en Ecuador apoyaron a la expe-
productos audiovisuales contribuyó en el enlace con los medios de dición: Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, Instituto Nacio-
comunicación y participó activamente en las relaciones públicas; nal de Meteorología e Hidrología, Instituto Geográfico Militar, Di-
Foto América Estudio, S.A. de C.V. colaboró con descuentos en la rección Provincial de Pichincha del Ministerio del Ambiente,
impresión de las fotografías presentadas en las exposiciones poste- Reserva Ecológica Cayambe-Coca, Quitsato (proyecto cultural), y
riores a la expedición; Hotel María Isabel Sheraton, Hotel and Towers, la Cruz Roja Ecuatoriana, Junta Provincial Pichincha, delegación
brindó descuentos en el arrendamiento y servicios de un auditorio Cayambe.

LA EXPEDICIÓN 0° / 0°C
76
77

3. El descubrimiento
1

3.1 Introducción

P y la altura de un sitio en la ladera de una


ARA DETERMINAR LA POSICIÓN
montaña, sobre una trayectoria imaginaria, se requiere la prospección
sistemática del área, además de un banco de información cartográfico
adecuado e instrumentos especializados. El registro del vértice ecua-
torial y de los sitios aledaños prospectados por la Expedición 0° /
0°C fueron elaborados por un equipo mexicano-ecuatoriano que re-
presenta la suma de esfuerzos sucesivos que se venían dando desde el
año 2007. Este éxito histórico no se debió a la serendipia o el azar; es
el fruto de un proceso de investigación y exploración sistemático, cons-
ciente y prolongado. Estamos seguros de que los trabajos continua-
rán, y nuevos investigadores y exploradores se sumarán a lo ya realiza-
do, por eso es que publicamos el acervo cartográfico en Internet, aun
antes de que este volumen se imprimiera, como demostración de nues-
tro compromiso por la divulgación de los resultados.2

3.2 Aproximación

En un tiempo considerablemente corto se organizó y equipó la expedi-


ción. En tan sólo 50 días, a partir del 26 de julio de 2009, cuando se
realizó la primera reunión del grupo, se logró el financiamiento,
se elaboró el proyecto de investigación; se reunieron los instrumen-
tos científicos, se ofrecieron conferencias de prensa y se publicó una
página web para presentar el plan de exploración y sus objetivos. Los
planes de prospección fueron consultados con colegas de Ecuador,
por medio de videoconferencias, que permitió un significativo avance

1
Agradezco a Karla Campos el cuidado que asumió para llevar el diario de campo de la
Sobre la línea ecuatorial. expedición y de los registros del CRA .
Glaciar Ecuador, ladera sur del Nevado 2 Una versión resumida de los resultados se encuentra publicada en Internet desde
Cayambe. Fotografía de Miguel López. diciembre de 2009, en <http://www.montero.org.mx/cayambe.htm>.
78

Figura 46. Nevado Cayambe, 65 km al


noreste de Quito, la línea ecuatorial se
denota con la latitud 0° 00’ 00".

caso de la ladera sur, que es el lu-


gar por donde cruza la línea ecua-
torial. Aunque su cima fue alcan-
zada desde el siglo XIX, ascender a
la cumbre no deja de ser un reto, y
en ocasiones el sólo recorrer sus
laderas puede acarrear lamenta-
bles accidentes, como ha sucedi-
do recientemente.3
La Expedición 0° / 0°C partió
de la Ciudad México, el 14 de sep-
tiembre de 2009, dedicó dos días al
aprovisionamiento, y administra-
ción de recursos en la ciudad de
Quito, donde contó desde su arri-
bo con el apoyo en transporte, hos-
pedaje y logística, de la agrupación
de excursionismo Nuevos Horizon-
tes (fig. 47). En su oportunidad ofre-
cimos entrevistas a medios masi-
vos de comunicación, calibramos
desde México. La tarea no fue fá- la ladera oeste de la montaña; en torianos, accidente que ha alimen- instrumentos, y visitamos el con-
cil, fueron necesarios 15 días en la este refugio de montaña se pue- tado la fama del Cayambe como sulado mexicano, donde el 15 de
montaña con cinco intentos para den alojar más de 20 personas. Es una prominencia peligrosa. septiembre fuimos invitados a la
lograr el objetivo. una impresionante construcción El Cayambe es un volcán activo ceremonia oficial con motivo de
El acceso a la montaña desde con todos los servicios, conside- de 5 790 m/nm que mantiene un cli- la conmemoración del Día de la In-
la ciudad de Quito es por una mo- rando la extraordinaria altitud en ma extremo, pues soporta inten- dependencia de México.
derna carretera (vía colectora de que se encuentra (4 620 m/nm). Del sos vientos húmedos provenien- Terminado el aprovisionamien-
peaje E-28B), que en menos de dos albergue parte la ruta tradicional tes del Amazonas, que a más de to, el día 16 de septiembre, se mon-
horas comunica la capital del país que la mayoría de los montañistas cuatro mil metros desarrollan ven- tó en la Hacienda de Guachalá el
con la ciudad de Cayambe (fig. 46). siguen para alcanzar la cima, lo tiscas que dificultan su explora-
Desde la ciudad de Cayambe por cual se logra entre siete y diez ho- ción. Es una montaña agreste con
una brecha de 25 km, es posible ras. El albergue fue llamado así fastuosos glaciares, por lo que al- 3
Según nota publicada en varios diarios
de Quito el 10 de agosto de 2009 <http:/
llegar en vehículo doble tracción tras la muerte provocada por una gunas de sus laderas aún perma- / w w w. u l t i m a s n o t i c i a s . e c /
al albergue Ruales-Oleas-Berge en avalancha de tres andinistas ecua- necen inexploradas, como es el noticiaUN.asp?id_noticia=31264&id_seccion=7>.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


79

centro de operaciones con seis habitaciones, sala de juntas y bodega, bre las técnicas de arqueoastro-
gracias al auspicio de Diego Bonifaz y Cristóbal Cobo. El día 17 se co- nomía en la Escuela Politécnica
misionó a cuatro integrantes para regresar a Quito, con la finalidad de Nacional de Quito, durante los
ofrecer una conferencia de prensa en el Centro Cultural Mexicano para trabajos del Primer Encuentro In-
promocionar el Primer Encuentro Internacional de Arqueoastronomía. ternacional de Arqueoastronomía.
Mientras tanto, el cuerpo técnico transportado en un vehículo de la Finalmente, una de nuestras cor-
Cruz Roja Ecuatoriana, aprovecho el día para dirigirse a la comunidad dadas realizó el ascenso a la cum-
de Sayaro, y ahí realizar las contrataciones de guías, porteadores y bre posible5 del Nevado Cayambe,
bestias. los sitios visitados y de referencia
Sayaro es una comunidad indígena en la ladera SW del Cayambe, la están marcados en el mapa de la
experiencia y destreza de sus guías es reconocida en el medio andino figura 48.
para realizar los ascensos al Cayambe. El plan era seguir en vehículos Fig. 47 Distintivo de la agrupación ex-
doble tracción la ruta de la expedición de 2007 hasta un paraje desola- cursionista Nuevos Horizontes.
do y asilado conocido como Diablo Pungo, que algunos denominan La 3.3 En el vértice
Dormida o Rasochupa, a 3740 m/nm.4 De ahí, seguir una corta vereda que
se pierde en la cota de 4000 m/nm, mantener la ruta al norte en lo posible, 3.3.1 P RIMER ASCENSO , GLACIAR B ICENTENARIO en día éstos han retrocedido de-
hasta encontrar un espacio apropiado para montar el campamento rretidos por el calentamiento glo-
base por arriba de la cota de 4300 m/nm, en las mejores condiciones El 18 de septiembre se inició la bal; sin embargo, estas alturas fre-
posibles, trasladando hasta ese punto media tonelada en equipo y permanencia en la montaña, que cuentemente amanecen nevadas,
provisiones. Elegir una ruta de aproximación y un lugar apropiado se extendería hasta el primer día haciendo de este punto el único
para el campamento base fue un cálculo complicado, porque los ma- de octubre. La incertidumbre do- en la superficie del planeta don-
pas topográficos, las fotografías aéreas e imágenes satelitales no mos- minaba el ánimo al preguntarse en de latitud y temperatura alcan-
traban en escala y detalle los datos requeridos; se dependía, por tan- dónde se encontraba exactamen- zan cero grados.
to, de la visibilidad, pero ésta era mínima ante la neblina permanente te el vértice ecuatorial, si a la tra-
que cubre la montaña por la humedad proveniente del Amazonas, y yectoria que seguía la latitud cero A muchos parecerá que estas pre-
cuando el viento arrecia son frecuentes las tormentas de nieve. Según pasaba por un glaciar o si lo escri- guntas no cabrían si consultába-
las tablas de sensación térmica si los vientos son superiores a 60 km/h to por el reconocido andinista mos adecuadamente los moder-
con una temperatura oscilante en 0°C, el efecto de enfriamiento en Anhalzer (2005: 26) era veraz: nos y accesibles recursos de la
una persona es similar a - 20° C sin viento. fotografía satelital georreferencia-
La exploración no se limitó únicamente a cinco intervenciones, tam- La cumbre del Cayambe se levan- da, la fotografía aérea y las cartas
bién nos ocupamos de actividades complementarias, como los traba- ta apenas al norte de la línea topográficas, pero encontramos
jos de astrofotografía en el cerro Pambamarca, un par de prospeccio- equinoccial. Hasta hace poco la que cada uno de los documentos
nes para apreciar el medio ambiente circundante a la montaña en sus línea atravesaba los glaciares consultados ofrecía datos diferen-
flancos norte y sur, se visitaron tres sitios arqueológicos de interés meridionales de la montaña, hoy tes. Por ejemplo, en la figura 49, el
para complementar nuestra visión cultural del área, además de parti- área de nuestro interés, según cua-
cipar activamente con una ponencia y la impartición de un curso so- tro mapas, todos en la misma esca-
5
Recientemente, los desprendimientos de la y con límites similares, el lector
hielo ocurridos hacen imposible llegar a
4
En fuentes históricas a Diablo Pungo se le denomina La Dormida, pero preferimos la cima, por lo que sólo es pertinente
encontrará que al interpretar cada
llamar al lugar Rasochupa, porque así nos lo indicaron los guías locales. llegar a la zona precumbrera. uno la posibilidad de un glaciar

EL DESCUBRIMIENTO
80

E N EL V48.
Figura ÉRTICE E CUADOR y de referencia.
DELvisitados
Sitios
81

sobre la línea equinoccial es dis- o de ablación que se desprenden de un cuerpo mayor; finalmente en no por un estrecho sendero, con
tinta. Para resaltar el hecho, se ha Google Earth, la imagen es poco nítida pero nos remite a un 60% de escasa visibilidad, viento y perti-
marcado con puntos en color azul factibilidad. naz lluvia se fue ganando altura,
donde es factible encontrar un gla- En las dos cartas que nos servían de referencia, la equidistancia –algunos perdieron la ruta y la re-
ciar, los mismos puntos se compa- entre las curvas de 40 metros hace parecer el área de nuestro interés cuperaron con esfuerzo–, el uso de
ran con los restantes, pero si el co- como una ladera de suaves pendientes, por lo cual un ascenso resultaría los GPS servía de poco, y los mapas
lor cambia a rojo, es que esa factible sin mayores recursos técnicos. Sin embargo, los guías del Hato, no podían auxiliarnos, pues nues-
posibilidad está descartada. El Cristóbal Cobo y Pablo Boada nos referían que esto en la realidad no tras necesidades demandaban
análisis se basa en cuatro fuentes: era así. También estábamos conscientes de que el clima durante la mayor detalle. Por la tarde se lle-
carta topográfica OII - E 3 N E VA D O temporada equinoccial de septiembre no es adecuado: lluvias, neva- gó a un valle a 4380 m/ nm ubicado
CAYAMBE 4094 III , publicada por el das, ventisca, neblina y viento predominan. Con estos factores que en la -0° 0' 28.20" / - 78° 0' 5.03",
Instituto Geográfico Militar de aumentaban la incertidumbre, lo mejor que podíamos intentar para el donde instalamos el campamento
Ecuador (IGM ) en 1996, con equi- primer ascenso era trazar una ruta confiable hasta lo que sería el cam- base y era justamente la frontera
distancia entre las curvas de 40 pamento base, el cual estaría instalado en una zona segura y cercana, entre un territorio conocido por
metros; fotografía aérea del IGM , en lo posible, a la línea ecuatorial. Este era el objetivo principal del los guías locales, y las extensas
tomada en el año 1999 a 30 mil primer ascenso: de reconocimiento, instalación y abastecimiento. porciones de la montaña por ex-
pies de altura; Mapa de los Peligros Desde el centro de operaciones, establecido en la Hacienda de plorar. Ese día no pudimos ver la
Potenciales del Volcán Cayambe Guachalá a 2790 m/nm, se inició la mañana del 18 de septiembre el ascen- montaña, era un enigma que nos
( MPPVC), publicado en 2002, por el so, siguiendo un trayecto de 30 km por un camino de terracería. Nos angustiaba; si el clima continuara
Institut de Recherche pour le Déve- trasladamos con todo el personal y equipo en tres vehículos doble cerrado, de nada serviría todo este
loppement (IRD ), y el Departamen- tracción hasta Rasochupa a 3740 m/nm, ubicado en la -0° 1' 32.63" / - esfuerzo, no podríamos encontrar
to de Geofísica de la Escuela 78° 0' 58.74", un aislado páramo donde también arribó la expedición el vértice, porque no lo veríamos.
Politécnica Nacional de Quito, de 2007, y que históricamente fue registrado e ilustrado por la expedi- Tradicionalmente en la región se
con equidistancia entre las curvas ción de Edwar Wimper, cuando se aproximó al Saraurco en 1878 (fig. dice referente a la neblina que cu-
de 40 metros; finalmente, una ima- 50). En Rasochupa termina la brecha para vehículos y se inicia el as- bre al Cayambe: que en el año sólo
gen satelital de Google Earth con- censo a pie por la región denominada Yangureal del Hato. Ahí Karla en 12 ocasiones se ve la montaña
sultada en 2009. Si atendemos la Campos, antes de iniciar la marcha, realizó una singular ofrenda a la sin nubes, un día por cada mes.
carta topográfica de 1996, las posi- Pachamama (Madre Tierra en la tradición andina), desde su propuesta Algunos llegaron extenuados,
bilidades son mínimas con 20% de tradicional mesoamericana, que es completada por los criterios ritua- la mayoría con frío y mojados, el
certeza; la fotografía aérea de 1999 les a la montaña aconsejados por el promotor de la cultura indígena campamento quedó bien instala-
aparece más optimista con 60% de en Cayambe, Pablo Guaña. do para el anochecer, una mere-
probabilidad, aunque no podemos Luis Lucero, guía de montaña y guardabosque, fue asignado por las cida y completa cena fue el regoci-
discernir con precisión si se trata autoridades de la Reserva Cayambe-Coca para supervisar nuestros tra- jo de todos. Los siete porteadores6
de glaciares o de campos estacio- bajos, en esta ocasión, el guía principal que nos conduciría hasta un montados en sus bestias bajaron
nales de nieve; los sitios marcados alto valle en el límite de las nieves donde instalaríamos el campamen-
en la fotografía aérea son diame- to base. Luis Lucero nos ayudó a conseguir porteadores y bestias de 6
Equipo de porteadores: Wilson Lucero,
tralmente opuestos a los del MPPVC, carga en la Corporación Indígena Campesina de la Comunidad del Hato, Pedro Tuquerres (padre), Pedro Tuque-
que muestra al oriente dos len- para transportar la media tonelada en equipo y provisiones (fig. 51). El rres (hijo), Juan Carlos Farinango, Diego
Farinango, Miguel Cabezas y Darwin
guas de hielo en su parte terminal 18 de septiembre, antes del medio día, el grupo empezó a abrirse cami- Vinicio.

EL DESCUBRIMIENTO
82

Figura 49. Comparación de cuatro documentos geográficos de la misma área con una escala similar para discernir la existencia de uno o varios glaciares sobre la
trayectoria ecuatorial en la ladera sur del volcán Cayambe: los puntos en azul asumen esta posibilidad; aparrecen en rojo cuando está descartada.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


83

al anochecer. Por la tarde, antes en la -0° 0' 24.32" / - 77° 59' 58.39".
de oscurecer, Luis Lucero y Mar- El ibón ocupa una hectárea, su bati-
celo Carrillo salieron en busca de metría es desconocida, pero la su-
una “puerta”, esto es, un paso en- pusimos somera. Fue el primer ha-
tre las cañadas aledañas que se llazgo de un sitio que no aparecía
abriera al norte del campamento en mapas, ni por referencias de los
base. Por la noche ni el viento o la guías locales o fotografías aéreas y
neblina amainaban, y las nueve satelitales, el nombre asignado nos
casas de campaña, con sus 18 ocu- pareció apropiado, porque sor-
pantes, se resistían al viento, el prendentemente encontramos so- Figura 50. En abril de 1880, Edwar Figura 51. Porteadores de la comunidad
constante ruido debido al flujo de bre el espejo de agua una gaviota Wimper ilustra La Dormida a 11 805 pies del Hato, con sus bestias, transportando
aire arremetiendo contra los tol- andina (Larus serranus), que inten- de altura (3598 m/nm) durante la aproxi- el equipo al campamento base. Fotogra-
dos de las tiendas causaba insom- taba el vuelo sobreponiéndose a la mación al cerro Sara-Urco (sic). fía de Jorge Obregón.
nio y desesperación. ventisca; por otra parte, en la ori-
A la mañana siguiente, 19 de sep- lla oeste encontramos huellas de
tiembre, el grupo se preparó desde venado (Pudu mephistophiles), que
antes del amanecer, la neblina no nos llevaron a considerar el lago
se había disipado y las condicio- como un abrevadero.
nes del tiempo empeoraron con Apreciar la fauna andina en su
ráfagas de viento de más de 50 km estado natural es un espectáculo.
por hora (fig. 52). Con optimismo y Dos años atrás, Cobo y Boada
equipados adecuadamente para vieron multitud de conejos, un ve-
afrontar obstáculos en roca o hie- nado en un campo nevado y sobre-
lo, transportando los instrumentos volándolos, cuatro cóndores, apa-
científicos, de fotografía, video y rentemente dos adultos y dos
con escuetas raciones –pues el jóvenes.8
plan era regresar ese mismo día al Conforme se va ascendiendo, la
campamento–, el grupo partió si- capa vegetal disminuye y también
guiendo la ruta que el día anterior la fauna, la temperatura baja drás-
marcaron Luis y Marcelo. Primero ticamente. Después del lago, se
al oriente, por el cauce de un arroyo encuentra un estrecho valle direc-
Fig. 52. Sorteando la adversidad en terreno mixto, uno de los integrantes durante el
hasta encontrarse con un cuerpo tamente al norte sobre un terreno
ascenso del día 19 de septiembre. Fotografía de Jorge Obregón.
de agua, un ibón 7 que la expedi- pedregoso, de mediano gradiente,
ción denominó Lago del Venado acercándose al ecuador; en la
y la Gaviota (fig. 91), a 4417 m/ nm, cota de 4 500 m/nm se abre un valle

7
Ibón, término aragonés para definir pe- 8
Más detalles sobre la fauna de la región
queños lagos de montaña de origen gla- en este volumen en el apartado 4.1.6 Flo-
ciar. ra y fauna (p. 122).

EL DESCUBRIMIENTO
84

divisaba y entonces ascender por


lo que parecía un glaciar. Estába-
mos en línea recta a 420 metros
del ecuador. Le correspondía de-
cidir a Jesús Montesa, quien era el
coordinador técnico, según el or-
ganigrama: se prosiguió al norte.
Este contexto de valoraciones es
característico de las exploracio-
nes por terrenos incógnitos, y no
implicó que el grupo compro-
metiera su seguridad, pues la ex-
periencia, capacidad técnica y
equipamiento de los montañistas
de Ecuador, México y España ofre-
cían las garantías para proseguir.
Siguiendo la ruta determinada
por Montesa, que fue avalada por
Figura 53. Resguardado por agrestes riscos y oculto detrás de la neblina se encuen- el cuerpo de guías, se llega a un Figura 54. Lectura de instrumentos en la
tra el Circulus Æquinoctialis. Fotografía de Juan Rivera. campo de nieve, estando a sólo latitud cero grados. Fotografía de Pablo
130 metros al sur del ecuador en Boada.
donde se acumulan sedimentos. Imaginamos que aquí se forma un lago la cota de 4600 m/ nm, las condicio-
de temporal durante el periodo de lluvias, ya que recientemente había nes meteorológicas se tornan ad- La Expedición 0° / 0°C, con 18
terminado el estiaje y por eso en ese momento se encontraba seco. versas, es un ascenso a ciegas, no de sus integrantes alcanzó por pri-
Era el momento de detenerse para consultar los mapas, considerar hay visibilidad a más de 50 me- mera ocasión la línea ecuatorial
posición y proponer ruta, desde ese sitio al que denominamos Via tros. El GPS señalaba la proximi- el 19 de septiembre de 2009 a las
Lactae9 en la -0° 0' 13.76" / - 77° 59' 45.94", la neblina se disipó, pero dad, estábamos a minutos de lle- 10:00 AM. Se dieron cuenta de que
no era posible ver la cumbre, la temperatura era de 1° C y el viento había gar, son las 09:45 AM , consideré, no estaban sobre un glaciar, era
amainado a 20 km por hora. Para mí era pertinente virar al este, subir como coordinador de la expedi- un campo de nieve, remanente de
por una ladera rocosa a través de una zona de derrumbes, ganar altura ción, que los que debían ir por de- un glaciar en retroceso, la masa de
y desde ahí alcanzar el glaciar equinoccial que supone mil metros al lante en esta última fase, y llegar hielo había quedado rezagada 50
oriente detrás de una arista que esconde la supuesta masa de hielo; primero al ecuador eran los guías metros al norte. No había duda de
para Jesús Montesa, era una ruta riesgosa, consideraba más conve- ecuatorianos Luis Lucero y Mar- que en este sitio descansaba un
niente seguir al norte, por el cauce que se venía siguiendo, enfrentar celo Carrillo, los demás les segui- glaciar desde hacía unos meses o
una ligera escalada para seguir a un campo de nieve que apenas se rán, todos querían que fueran los un par de años a lo más. Se consul-
ciudadanos de esta nación los taron las cartas topográficas con-
9
Al llegar a este sitio, surgió el comentario de que durante la noche anterior por unos que primero lograran alcanzar el juntamente con los GPS para con-
minutos se disiparon las nubes y se pudo observar la Vía Láctea, con un esplendor
como sólo es posible en el ecuador a más de 4 mil metros. Via Lactae, del latín, camino
Circulus Æquinoctialis a tal altitud firmar posición; en efecto, se
de leche. (fig. 53). estaba sobre la latitud cero en la

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


85

posición 0° 0' 00.00" / - 77° 59'


44.29" (fig. 54). Al momento de de-
terminar la altitud, se observó que
cada instrumento consultado ofre-
cía datos diferentes, la variación
entre los altímetros barométricos
y los radioeléctricos de los GPS obe-
decía a los cambios meteorológi-
cos que en ese momento impera-
ban. Las lecturas determinadas por
la presión atmosférica proporcio-
naban valores que variaban hasta
100 metros, finalmente, en gabine-
te, confrontando los datos de to-
dos los instrumentos y apoyados
en tres fuentes cartográficas 10 se
determinó que la altura corres-
pondía a 4640 m/ nm.
La expedición se encontraba al
interior de una cañada orientada
sur-norte, por tanto, la trayecto-
ria ecuatorial les era perpendicu-
lar. Así que el vértice ecuatorial
se encontraba sobre algunas de las
paredes laterales que cerraban el
espacio. Para determinar con exac-
titud el punto más alto era nece-
sario seguir con precisión la tra-
yectoria ecuatorial, para esto se
instaló una brújula tipo Brunton
acimutal montada en un trípode;
no obstante, la niebla era tan es-
pesa que no permitía distinguir
Figura. 55. Conmemoración en la posición 0° 0' 00.00" / - 77° 59' 44.29" a 4640 m /nm. Fotografía de Pablo Boada.
con detalle a más de 60 metros,
aunque por momentos se disipa-

10
Las fuentes examinadas son: Carta topográfica OII -E3 N EVADO C AYAMBE 4094 III , publicada por el Instituto Geográfico Militar de Ecuador (1996); Mapa de los Peligros Potenciales del Volcán
Cayambe, publicado por el Institut de Recherche pour le Développent, y el Departamento de Geofísica de la Escuela Politécnica Nacional de Quito (2002); y un conjunto de datos
vectoriales operados por el software ArcView 3.2 en un sistema de información geográfica.

EL DESCUBRIMIENTO
86

ba y dejaba ver que llegar a los espacios más altos sería una difícil
empresa. Para visar con exactitud la latitud, y confirmar que no hay
elevación mayor sobre el horizonte ecuatorial se tenía destinado un
teodolito. La propuesta contemplaba valerse del ascenso del Sol du-
rante el equinoccio, con un propósito: determinar con precisión
astronómica la latitud cero. El tiempo constantemente nublado nos
hizo desistir de este instrumento. Tocaba el turno a la estación climática
(fig. 88), la lectura meteorológica apuntó: 100% de humedad, presión
atmosférica de 877.9 hPa (hectopascal), velocidad del viento 43 km/h y
temperatura de 0° Celsius. Este último dato hizo estallar en júbilo al
grupo, fue un momento de euforia, pues se confirmó el nombre de la
expedición: cero grados latitud, cero grados Celsius (fig. 55).
Esta aproximación era un éxito, en el primer intento y ya se había
llegado al ecuador en una cota altitudinal record.11 Es cierto que aún
no se alcanzaba el vértice ecuatorial y que no se había determinado si
el ecuador cruza o no por un glaciar. Esos descubrimientos requerían
de más ascensos y más días de prospección en la montaña; por el mo-
mento el ánimo era suficiente para intentar un nuevo ascenso el si-
guiente día. Al glaciar próximo le han puesto por nombre Bicentena- Figura 56. Descendiendo del Glaciar Bicentenario. Fotografía de Miguel López.
rio, para conmemorar el año 2009, cuando la República del Ecuador
celebraba el Bicentenario de su Independencia.
Marcelo Carrillo, Jesús Montesa, Miriam Díaz y Miguel López realiza- 3.3.2 S EGUNDO ASCENSO , GLACIAR E CUADOR
ron una aproximación al glaciar Bicentenario, subieron más de 100
metros y regresaron ante la falta de visibilidad. El coordinador técni- Durante la noche del 19 de septiembre se planteó una nueva estrate-
co de la expedición, Jesús Montesa, decidió al mediodía que era con- gia en el campamento base: ahora el contingente no sería tan numero-
veniente descender, una ventisca azotaba la vertiente y todo se cubrió so, ya que se requería mayor velocidad, técnica e independencia. El
de un manto blanco (fig. 56). objetivo era remontar el Glaciar Bicentenario, ganar altura y dejar atrás
Esa noche, Álvaro Tapia y Alex Coyaguillo dejaron el campamento la rocosa arista que impedía el paso al oriente, suponemos que sobre la
base, se incorporaron Alfredo Ordoñez, Julio Tinajero y Rómulo cota de 4 700 m/nm encontraríamos un amplio glaciar, según datos obte-
Pasmiño, de la agrupación excursionista ecuatoriana Nuevos Horizon- nidos después del primer ascenso y de estudiar con detenimiento la
tes. En Rasochupa, la Cruz Roja Ecuatoriana, Junta Cantonal Cayambe, fotografía aérea. En este caso, las cartas topográficas eran un recurso
había montado un campamento con personal de rescate y una ambu- limitado, pues la equidistancia entre las curvas de 40 metros no permi-
lancia, dispuestos a prestar sus servicios en caso de cualquier contin- tía apreciar variaciones orográficas.
gencia (fig. 57); el sitio se convirtió en una estación intermedia entre El 20 de septiembre, antes del amanecer, aún en la oscuridad y con
el campamento base en la alta montaña y el centro de operaciones en un clima adverso, pues los vientos se incrementaron durante toda la
la Hacienda de Guachalá. Había concluido el primer ascenso y todos noche, Pablo Boada, Marcelo Carrillo, Miriam Díaz, Lysette Eyssautier,
pernoctamos en el campamento base. Miguel López, Manuel Montesinos, Alfredo Ordoñez, Rómulo Pasmiño,
Lizette Rolland y Julio Tinajero partieron del campamento base, si-
11
Superando con 80 metros de altura a la expedición de 2007. guiendo la ruta del día anterior. Afortunadamente, al alba se registró

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


87

un cambio repentino en el tiem- posible realizar porque a las 10:00


po: era un día despejado. No cabe am el tiempo cambió, de nuevo
duda en lo dicho por los habitan- viento y neblina, y la necesidad de
tes del somonte: el Cayambe es retornar al campamento base. Por
una montaña exigente, pone a la tarde toda la expedición regre-
prueba a sus visitantes durante só a la Hacienda de Guachalá.
los primeros días, quien quiera Suponemos que al oriente del
subir tiene que ganarse la confian- Glaciar Ecuador, a menor altitud
za de este anfitrión temperamen- se encuentra otro glaciar más pe-
tal, que ahora al descubierto, sin queño y en retroceso, muy similar
el manto de la neblina, se mostra- al Bicentenario; en esta oportuni-
ba impresionante (fig. 58). dad no pudimos llegar tan lejos, y
Remontando la arista rocosa se esta suposición deberá ser resuel-
abre un amplio glaciar que se des- ta por expediciones posteriores;
prende de la cumbre, tiene aproxi- en caso de existir, ya tiene asigna-
madamente 800 metros de ancho do un nombre: Glaciar del Sol.
en la latitud cero. El objetivo esta-
ba cumplido, se comprueba que el 3.3.3 T ERCER ASCENSO :
Figura 57. La Cruz Roja Ecuatoriana en Rasochupa apoyando a la Expedición 0° /
ecuador terrestre atraviesa por un MAL TIEMPO Y FRUSTRACIÓN
0°C. Fotografía de Lizette Rolland.
glaciar, siguiendo la trayectoria se
registra el punto más alto a 4 681 Ya en la Hacienda de Guachalá, la
m
/nm en la posición 0° 0' 00.00" / - noche del 20 de septiembre, los probar la altitud de cada arista, es cierto que se trataba de una diferen-
77° 59' 32.1". Esta gran masa de integrantes estábamos satisfe- cia de unos cuantos metros, pero era suficiente –en palabras de Jesús
hielo, a la que nombré Ecuador chos, pues habíamos alcanzado Montesa– para regresar. Esto significaba más gastos, incrementar es-
(fig. 59), se resiste estoicamente al los objetivos, el descenso fue sin fuerzos y prolongar la estancia. Se convocó a una junta y la resolución
calentamiento global, pues la contratiempos, y algunos ya des- fue unánime: regresamos, pero antes, un descanso. El día 21 de sep-
zona de ablación aún está a dece- cansaban, parecía que todo había tiembre, el grupo visitó las aguas termales “El Pisque”, ubicadas cerca
nas de metros por debajo de la lí- terminado. Sin embargo, los coor- de Guachalá. Este intermedio permitió a Arturo Montero y colabora-
nea ecuatorial. De haber tenido ca- dinadores –al revisar los datos, fo- dores regresar a Quito para ofrecer una conferencia y un taller dentro
racterísticas similares, el Glaciar tografías y pasando los registros de los trabajos del Primer Encuentro Internacional de Arqueoastronomía.
Bicentenario, hubiera sido regis- de los GPS a la computadora para Otro grupo se separó con la intención de lograr la cumbre del Cayambe
trado como paso de la línea ecua- su análisis espacial–, encontra- por la ruta tradicional y registrar desde las alturas el equinoccio. Divi-
torial. Se tenía la intención de ofre- mos un hecho sorprendente y des- dida en tres compromisos, la Expedición 0° / 0°C demostró su capaci-
cer a los glaciólogos de Ecuador y alentador: al oeste había un par dad de respuesta al adaptarse sin contratiempos a requerimientos que
México datos precisos sobre la de aristas que superaban en altu- demandaban su atención en diferentes lugares.
cota altitudinal de la zona de abla- ra al Glaciar Ecuador. Esto signifi- Para registrar la altura de las aristas, el 22 de septiembre partieron
ción y registrar el perímetro de la caba que no se había llegado al de la Hacienda de Guachalá, Lizette Rolland, Lysette Eyssautier, Ma-
masa de hielo recorriendo los con- punto más alto del ecuador. Era nuel Montesinos y Jesús Montesa. Su ascenso vespertino fue agrada-
tornos con un GPS. Tarea que no fue necesario otro ascenso para com- ble, con un tiempo excepcional, que les permitió ver desde el campa-

EL DESCUBRIMIENTO
88

Figura 58. Vertiente sur del Nevado


Cayambe; en la parte inferior, el glaciar
Bicentenario. Se aprecia el ascenso de
la Expedición 0° / 0°C, tratando de re-
montar los riscos orientales para seguir
la trayectoria ecuatorial rumbo al este
(derecha). Fotografía de Juan Rivera.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


89

Figura 59. Dos expedicionarios recorren


la línea ecuatorial atravesando una am-
plia masa de hielo, a la que denominé
Glaciar Ecuador en la ladera sur del
Cayambe a 4681 m/ nm. Un hecho extraor-
dinario de la naturaleza descubierto por
la Expedición 0° / 0°C, el 20 septiembre
de 2009. Fotografía de Jesús Martínez.

EL DESCUBRIMIENTO
90

Figura 60. El cerro Saraurco visto desde


el campamento base, en la ladera sur
del Nevado Cayambe. Fotografía de
Lizette Rolland.

dadero axis mundi (véase fig. 82),


de ahí su nombre. Sin duda, un lu-
gar que puede ser muy significati-
vo para quien lo visite, sobre todo
para aquellos que buscan puntos
extremos en el mundo. Sería emo-
cionante saberse en el lugar exac-
to donde opuestos tan colosales,
como son los hemisferios norte y
sur, y los dos océanos más impor-
tantes del planeta, el Pacífico y el
Atlántico, de alguna manera con-
vergen. Incorporar la Arista Axis
Mundi al turismo sostenible13 es
una propuesta que pueden aprove-
char las comunidades del somon-
te. El punto se localiza a 4 660 m/nm
en las coordenadas 0° 0' 00.00" /
- 77° 59' 40.9" (fig. 61).
mento base al cerro Saraurco, ella se desprenden y que le han vali- piernas en diferente hemisfe-
pues más que el Cayambe, el Sara- do por parte de esta investigación el rio, pues se levanta sobre la lí-
urco permanece continuamente nombre de Arista Axis Mundi, 12 dada nea ecuatorial. Ahora imagine-
cubierto por nubes (fig. 60). Al día su particularidad. Imaginemos que un mos una perpendicular al trazo
siguiente, al pretender llegar a las observador parado en este sitio diri- ecuatorial, resaltando la tra-
aristas, las condiciones meteoro- ge su mirada al este, al amanecer yectoria norte-sur de la Arista
lógicas se volcaron en su contra y –igual que miles de turistas que visi- Axis Mundi, que es un parte-
no pudieron hacer nada, por lo tan el monumento en la Ciudad Mitad aguas natural que divide el dre-
que regresaron a la Hacienda de del Mundo–, posa cada una de sus naje de la montaña en dos
Guachalá, abatidos por un esfuer- vertientes: en la del este las
zo infructuoso. aguas desembocan al Amazo- 13
El turismo sostenible o responsable es
La arista que se eleva entre los 12
Axis mundi, traducido del latín al español nas a través del río Napo y de una industria comprometida con un re-
glaciares Bicentenario y Ecuador, como “eje del mundo” es un símbolo ubicuo ahí al Atlántico; al oeste dre- ducido impacto sobre el ambiente y la
presente en numerosas culturas, expresa un cultura local, al tiempo que contribuye
resulta particularmente interesan- punto de convergencia, un sitio que está por
nan al Pacífico, a través del río a generar ingresos y empleo para la po-
te al estudiar los drenajes que de encima. Pisque. Es, por tanto, un ver- blación local.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


91

Pasada la medianoche del 26 de treza técnica salvo una ligera es-


septiembre parte un equipo redu- calada, aunque se está por enci-
cido, por la arista oeste: Jesús ma de glaciares, se puede acceder
Montesa, Miguel López y Lizette por un camino libre de hielo (fig.
Rolland; por la arista oeste: Cris- 62).
tóbal Cobo, Pablo Boada y Marcelo El vértice se registra a 4 740 m/nm
Carrillo. El 27 de septiembre de en las coordenadas 0° 0' 00.00" /
2010, antes del mediodía ambas - 77° 59' 58.6" (fig. 63). En una reu-
cordadas se encuentran en el vér- nión posterior decidimos nombrar
tice del ecuador terrestre, el sue- el sitio como Arista del Águila y el
ño se ha consumado, el objetivo Cóndor. El nombre obedece al en-
se ha concretado, el Cayambe ge- cuentro entre la nación ecuatoria-
neroso y magnánimo nos muestra na, que representa al hemisferio
su ladera sur en todo su esplen- Sur con el cóndor, y México, con el
dor, es un día magnífico, diáfano. águila, para el hemisferio Norte; se-
Partiendo del campamento base, gún una tradición popular de la
la ruta en realidad no requiere des- región, cuando estas aves simbóli-

Figura 61. La Arista Axis Mundi, punto de convergencia para extremos de la geogra-
fía tan colosales como los hemisferios Norte y Sur separados por la línea del ecua-
dor (en rojo), y también donde nacen drenajes que desembocan en el océano Atlán-
tico por el este a través del Amazonas, y al oeste por el río Pisque al océano
Pacífico.

3.3.4 C UARTO ASCENSO , A RISTA DEL Á GUILA Y EL C ÓNDOR

Debemos insistir: si el ascenso anterior fue en vano, éste no lo será.


Hay optimismo, aun cuando los recursos materiales y el tiempo se re-
ducen. Doce integrantes de la expedición se han retirado ya de la Ha-
cienda de Guachalá, para incorporarse a sus obligaciones en Quito y
México. Esta puede ser la última oportunidad; por tanto, la estrategia
será diferente, para economizar recursos se realizará el ascenso dividi-
do en dos grupos o cordadas que seguirán rutas diferentes. Uno entra-
rá por el este, al Glaciar Bicentenario hasta llegar a la Arista Axis Mundi
para registrar su altitud precisa; el otro, por el oeste subirá en direc-
ción de la arista poniente por el campamento base, prosiguiendo al Figura 62. La bandera de Ecuador en el vértice del ecuador terrestre. Fotografía de
norte hasta encontrarse con el ecuador. Miguel López.

EL DESCUBRIMIENTO
92

Figura 63. El vértice del ecuador terres- cas se reúnan y vuelen juntas se
tre es la Arista del Águila y el Cóndor. La dará inicio a una era de prosperi-
imagen destaca la trayectoria ecuatorial
señalando el punto más alto a 4740 m/ nm dad, que enaltecerá a Latinoamé-
valiéndose de una brújula tipo Brunton rica.14 Para nosotros el nombre es
acimutal. Fotografía de Cristóbal Cobo. una metáfora en la que el Ecuador,
país y línea geográfico-astronó-
mica, no divide al Mundo por la
mitad, sino por el contrario, lo
une.
Del recorrido que ha realizado
Figura 64. Corte lateral de la ladera
la Expedición 0° / 0°C por la la-
sur del Nevado Cayambe, siguiendo la dera sur del Nevado Cayambe, se
trayectoria del ecuador, se destacan los destacan cuatro lugares que son
sitios registrados por la Expedición 0° significativos (figuras 64 y 65):
/ 0°C.

1. La Arista del Águila y el Cóndor,


el punto más alto en el globo
terráqueo por el que cruza el
ecuador terrestre.
2. El Glaciar Ecuador, la única
masa de hielo registrada en el
orbe que es segmentada por la
línea ecuatorial.
3. La Arista Axis Mundi, un punto
extremo de la geografía, en el
que convergen colosales extre-
mos del planeta.
4. El Glaciar Bicentenario, lugar
donde se conmemora a la na-
ción ecuatoriana y, con ello, a
la América libre y soberana.

Sitio Altitud Coordenadas geodésicas UTM

Arista del Águila y el Cóndor 4740 m/nm 0° 0' 00.0" / - 77° 59' 58.6" 18 M 166065 0
Glaciar Ecuador 4681 m/nm 0° 0' 00.0" / - 77° 59' 32.1" 18 M 166885 0 14
Existe una amplia bibliografía al respec-
to, desde estudios antropológicos (v.g.
Arista Axis Mundi 4660 m/nm 0° 0' 00.0" / - 77° 59' 40.9" 18 M 166613 0 Rodríguez, 2005: 248, Aguilar, 1998), y
proféticos-identitarios (v.g. Monachesi,
Glaciar Bicentenario 4650 m/nm 0° 0' 01.5" / - 77° 59' 44.3" 18 M 166508 1 2008: 123-125), además de una arraigada
Datum WGS84, EPE de 5 m. tradición oral.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


93

Figura 65. Ladera sur del Nevado Cayambe, destacando los sitios registrados por la
Expedición 0° / 0°C. Fotografía de Juan Rivera.

EL DESCUBRIMIENTO
94

3.3.5 Q UINTO ASCENSO , BUSCANDO UNA NUEVA RUTA

Al refugio de alta montaña Ruales-Oleas-Berge, en la vertiente ponien- que mejore la ruta que se ha se- cos, y así contribuir al desarrollo
te del Nevado Cayambe, se puede llegar cómodamente en automóvil guido desde Rasochupa por el sur económico de la región.
doble tracción. Una distancia de dos kilómetros separa el albergue de (fig. 67), cuatro integrantes de la El 29 de septiembre, Arturo
la Arista del Águila y el Cóndor; además, están casi a la misma cota, expedición se dan a la tarea de bus- Montero, Lysette Eyssautier, Je-
sólo que la arista sobresale tan sólo por 140 metros. Existe un obstácu- car un paso entre los derrumbes y sús Montesa y Karla Campos visi-
lo: una profunda cañada se interpone con un valle que ha sido labrado el desnivel de la cañada, confían tan el albergue Ruales-Oleas-
por los despojos del Glaciar Hermoso, ahí son constantes los derrum- en trazar un camino seguro y cor- Berge; sin embargo, su intención
bes de roca y hielo (fig. 66). Considerando este riesgo, pero con la to que pueda ser ofertado por los de abrir una ruta, y compartir esta
recompensa de abrir una vía rápida a la Arista del Águila y el Cóndor prestadores de servicios turísti- maravilla de la naturaleza con más
personas se ve frustrada. De nue-
va cuenta, el mal tiempo les hace
imposible explorar, feroces ventis-
cas de más de 60 km/h los confinan
al albergue, esperan por horas
pero es inútil, el tiempo no mejo-
rará, será mejor regresar a Guachalá
y preparar el retorno a México. Ya
en la camioneta de regreso, lejos
del albergue, el tiempo se disipa y
la montaña se muestra espléndida.
El Cayambe les ha jugado su últi-
ma broma, pero los despide con
un arco iris extraordinario, que
sólo en esta región del mundo se
puede apreciar, porque el Sol
camina vertical en las alturas ne-
vadas, acompañado de la hume-
dad de las selvas.

Figura 66. Barrera de seracs del glaciar


Hermoso, vista desde la Arista del Águi-
la y el Cóndor. Fotografía de Miguel
López.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


95

3.4 Actividades
complementarias

3.4.1 TRABAJOS DE ASTROFOTOGRAFÍA


EN PAMBAMARCA

En la latitud ecuatorial, el Sol y las


estrellas tardan el mismo tiempo
en estar por encima del horizonte
que por debajo. Todos los días del
año en el ecuador los días y las
noches duran lo mismo, 12 horas.
De noche, todas las estrellas tra-
zan una media circunferencia en-
tre el punto más austral y el más
septentrional del horizonte. La
región del ecuador terrestre repre-
senta, en términos astronómicos,
un lugar privilegiado para la ob-
servación astronómica, porque es
el único lugar en el mundo donde
es posible observar la totalidad
del firmamento; es decir, desde el
polo Norte astronómico hasta
el polo Sur (fig. 68 y fig. 34, en la p.
47). Además, es la única zona don-
de se pueden registrar los días del
paso cenital del Sol justamente al ecuador ( -0° 04' 50.2" / -78° astronomía y divulgación de la cien- Figura 67. Mapa general de las rutas y
durante el equinoccio. Sólo en 12' 30.6"), la altitud (a 4050 m/ nm ) y cia y, de esta manera, incrementar puntos registrados por la Expedición 0°
/ 0°C.
esta región las trayectorias de los el aislamiento. Estos factores de- la afición entre el amplio público
astros son verticales al surgir del terminan una atmósfera tenue por la astronomía durante el Año
horizonte, así como al ponerse (Je- donde se reduce el efecto perni- Internacional de la Astronomía.
sús Galindo, comunicación oral, cioso de la turbulencia y se evita Antonio de Ulloa (1748: 325), en
2009). La intención es montar una la contaminación lumínica. Se su Relación histórica del viaje a la instaló en su cima uno de los pun-
estación astrofotográfica en la presume que será posible alcanzar América Meridional …, describe las tos trigonométricos más impor-
cima del cerro Pambamarca y des- con detalle los objetos celestes complicaciones que tuvo la Mi- tantes. Quién podría pensar que
de ahí capturar imágenes en video valiéndose de técnicas digitales. sión Geodésica Francesa durante 270 años después la Expedición
y fotografía de cuerpos celestes, Se espera que los resultados pue- sus observaciones en el cerro Pam- 0° / 0°C, toleraría la misma com-
teniendo por aliados la cercanía dan servir a proyectos de arqueo- bamarca de 1738 a 1739, cuando plicación: el viento (fig. 69).

EL DESCUBRIMIENTO
96

El 18 de septiembre, el equipo gún algunos arqueoastrónomos,


del Centro Astronómico Clavius de con otros sitios como Catequilla,
la Universidad Iberoamericana, Quito, Quinche, Rumicucho y Coto-
compuesto por Lorena Arias, Die- collao (Zambrano, 2006: 49).
go Ortiz, Adrian Olguín y Bruno En la estación de Pambamarca
Candiani, acompañados por Cris- se montaron, además de las cáma-
tóbal Cobo, Gabriela Martínez y ras fotográficas, dos telescopios:
guías de Quitsato, pernoctaron en uno reflector Schmidt-Newton de
la cima del cerro Pambamarca para cinco pulgadas de diámetro f/8 de
realizar fotografías nocturnas de 910 mm con montura ecuatorial, y
la bóveda celeste. La primera par- otro refractor de 100 mm de diá-
te del ascenso estuvo favorecido metro f/6, con 600 mm de distan-
por un vehículo doble tracción cia focal, también con montura
hasta una altura considerable; fi- ecuatorial, pero asistido por un
nalmente, fue necesario un esfuer- motor guiador. Los investigadores
zo extraordinario para remontar pudieron observar y fotografiar las
caminando los últimos 300 metros constelaciones de Escorpión y
de altura, cargando el pesado equi- Casiopea, también observar cúmu-
po de telescopios y cámaras foto- los globulares, cúmulos abiertos
gráficas con sus accesorios. Des- y nebulosas (fig. 70).
de que montaron el campamento Realizar las fotografías fue por
percibieron fuertes vientos, nubo- demás difícil, ya que el viento
sidad, lluvia y baja temperatura. movía el equipo –que es necesa-
En la cima del Pambamarca pu- rio permanezca inmóvil durante
dieron apreciar uno de los comple- las exposiciones por tiempo de-
jos arqueológicos más grandes de terminado. Los trípodes con las cá-
la región, compuesto de diferentes maras caían continuamente y, sin
escarpaduras y estructuras con- importar si se ajustaban con pie-
céntricas que siguen la topografía dras, fue necesario hacer más de
de la cima y zona precumbrera don- 50 pruebas para lograr unas cuan-
de se asientan. Para algunos inves- tas fotografías. Después de cinco
tigadores, estas estructuras han horas, llegó el amanecer y la hora
sido identificadas como fortalezas de volver a la Hacienda de Guacha-
incas; sin embargo, presentan ves- lá. El equipo de astronomía retor-
tigios preincaicos, como los ali- nó a la Ciudad de México el 21 de
neamientos que se relacionan, se- septiembre.

Figura 68. El polo norte celeste, desde la latitud cero grados. Fotografía de Adrián
Olguín.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


97

IV. Señal en el páramo de Pambamarca.

En este páramo de Pambamarca donde habíamos esta-


do el año de 1736, cuando se acabó de medir la Base de
Yaruqui, según queda ya advertido, se hizo segunda es-
tación; y subí con los de mi compañía el 26 de enero de
1738 permaneciendo hasta el 8 de febrero; y aunque ni
los hielos, ni las nieves nos incomodaban, como en Pi-
chincha, y en otros donde estuvimos después, los vien-
tos eran tan fuertes, que con dificultad podían mante-
nerse en pie las personas, haciendo oposición a su
fuerza; y esta fue una gran penalidad para ejecutar las
observaciones con la delicadeza y prolijidad que era
necesario; porque todos los abrigos que se formaban,
no bastaban a tener en sosiego los Cuartos de Círculo.

Figura 69. Fragmento original de la Rela-


ción Histórica del Viaje a la América Meri-
dional... (Ulloa y Jorge Juan, 1748: 325).
A la derecha, el mismo fragmento en es-
pañol actual.

Figura 70. La Vía Láctea desde la cima


del cerro Pambamarca. Fotografía de
Adrián Olguín.

EL DESCUBRIMIENTO
98

3.4.2 RECONOCIMIENTO AMBIENTAL AL SOMONTE

La biodiversidad que rodea al Nevado Cayambe es extraordinaria; al municaciones, conocida como Las y, en general, una topografía acci-
oeste, el altiplano andino; al este, la selva; por los lados norte y sur, la Antenas; desde ahí se aprecia el dentada. Este contraste sugiere
zona de transición que va del páramo a la selva. En el capítulo IV se cono del Angureal, que correspon- claramente una diferencia de edad
aborda con detenimiento y desde nuestras posibilidades el ambiente, de a la zona de transición geoló- entre las dos partes: la parte occi-
así que este apartado tan sólo apunta a comentar las dos jornadas que gica entre el Viejo Cayambe y el dental está constituida por los
se dedicaron para conocer la riqueza de la zona de transición. Nevado Cayambe, ahí los flujos de restos de un antiguo volcán ahora
El 26 de septiembre, al salir de la Hacienda de Guachalá seguimos la lava son muy evidentes (fig. 71). extinto; mientras que la mitad
carretera que va a Olmedo. Esta ruta del norte que conduce a La Chimba Desde el punto de vista morfo- oriental, incluyendo la cumbre
llega hasta la laguna de San Marcos, una importante estancia del siste- lógico existe una división clara máxima corresponde al edificio jo-
ma hidrográfico, área protegida por la Reserva Ecológica Cayambe- entre la parte occidental y la parte ven, es decir, el volcán potencial-
Coca. La laguna se encuentra circundada de elevaciones, ríos, exten- oriental del complejo volcánico. mente activo.
sos pajonales y manantiales apacibles. Es de interés turístico para la En efecto, la mitad occidental pre- El 29 de septiembre nos dirigi-
pesca deportiva, cabalgatas y excursionismo. Al avanzar, llegamos por senta pendientes suaves y valles mos a Oyacachi, para conocer el
una brecha hasta el río Azuela, tributario del río Coca y éste, del Ama- profundos producto de una inten- lado opuesto del volcán, desde el
zonas. A 3 300 m/nm la masa forestal y la temperatura se incrementan sa erosión glaciar. Por el contrario, altiplano descendimos altitudi-
considerablemente. Subiendo por la cara norte a través de un camino la mitad oriental se caracteriza por nalmente; es un itinerario que va
de terracería se llega a más de 4 mil metros a una estación de teleco- tener pendientes más acentuadas desde amplio páramo subandino,
hasta el bosque húmedo montano
alto (incluyendo el bosque de tipo
Alnus), llegando en cotas inferio-
res a 1 800 m/nm al bosque húmedo
montano bajo. Son tres zonas
perhúmedas, lo cual significa que
reciben una precipitación por lo
menos dos veces mayor que su
evapotranspiración potencial. En
el valle de Oyacachi, la transición
entre el páramo de suelos anega-
dos y el bosque húmedo montano
ocurre a 3300 m/nm, la vegetación
de esta transición es principal-
mente páramo arbustivo. Fue jus-
to en esta zona donde la mañana
del 30 de septiembre, siguiendo
los consejos de los guardabos-
Figura 71. La cara norte del volcán Cayambe desde Las Antenas. A la derecha, los restos del cono El Angureal, con depósitos ques de la Guardiania Yuracfaccha
en sus laderas de ceniza y lapilli. Fotografía de Lysette Eyssautier. (sic) de la Reserva Ecológica Ca-

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


99

yambe-Coca, pudimos observar en estado natural un venado a corta


distancia. Oyacachi es la entrada a la selva, un corredor entre las tie-
rras bajas y la sierra. Pueblo Viejo fue el límite de este viaje, un asenta-
miento tan antiguo que se presume fue una ocupación prehispánica.
Muy cerca de este emplazamiento, en la cota de 2 800 m/nm en un abrigo
rocoso en la confluencia de los ríos Oyacachi y Cedro (fig. 72), los
vecinos del lugar aseguran que este es el lugar original donde se apare-
ció la Virgen del Quinche, patrona de Ecuador. Antes de ser llevada a
El Quinche, en 1598, era conocida con el nombre de Nuestra Señora de
la Presentación de Oyacachi. Los pobladores dicen que la virgen libró
a la población indígena de los estragos sufridos por los ataques de
osos (Baéz, 2000).

3.4.3 R ECORRIDO CULTURAL

Cuando recomendamos a los miembros de la Expedición 0° / 0°C visi-


tar sitios arqueológicos, recorrer poblaciones, acercarse a los museos,
conocer las tradiciones, y entrevistarse con los promotores de la cul-
tura indígena, intentamos un proceso de integración y no necesaria-
mente un proyecto de investigación antropológica. La fértil cultura de
los Andes septentrionales posee un valor trascendental,15 la búsqueda Figura 72. Las aguas provenientes de los
del vértice ecuatorial guardaba también la búsqueda de nosotros mis- na del 28 de septiembre, con el cie- Andes toman cauce al Amazonas por el
mos como latinoamericanos. Como Pueblos de América, la introspec- rre de carreteras en Cayambe,16 nos río Cedro en Oyacachi a través de un
ción se hace necesaria, somos un continente de identidades semejan- impresionó la libertad de expre- bosque húmedo.
tes y diversas que se conjugan indistintamente, nos constituyen en sión y la participación de tantas
una unidad más allá de las fronteras, que se fortalece con este tipo de comunidades en demanda de una por todos los lugares que visita-
proyectos. Desarrollar entre los expedicionarios la sensibilidad justa distribución del agua, de ba, ya en Ibarra, en Otabalo, o en
intercultural fue el eje de las actividades realizadas, como lo fue el manera pacífica. Quito. En el Glaciar Bicentenario,
reportaje fotográfico de Juan Rivera, en Quito (16 de septiembre), la La riqueza cultural latinoame- se entrevistó al guía Luis Lucero
visita al parque arqueológico y museo de Cochasqui (17 de septiem- ricana en su pluralidad de diálogo sobre los mitos y las leyendas que
bre), el ascenso a las fortificaciones prehispánicas del cerro se nutre de sus raíces, y se desa- surgen del volcán Cayambe. La
Pambamarca (19 de septiembre), la permanencia en el emplazamiento rrolla en contacto con las demás singularidad del clima andino, el
arqueológico del cerro Catequilla para apreciar el amanecer el día del culturas; es por ello que la estu- lugar y el momento hacen del vi-
equinoccio (22 de septiembre), y nuestra presencia en el paro indíge- diante de etnología Karla Campos deo levantado una muestra del in-
se dio a la tarea de realizar entre- terés que la expedición mantuvo
15
Dentro del área de nuestro interés, la República del Ecuador ante la UNESCO prevé estable- vistas, de conversar con la gente por las tradiciones, por ejemplo:
cer un sistema nacional de Tesoros humanos vivos, que favorezca la transmisión de los el respeto a la costumbre andina
conocimientos y las técnicas tradicionales; además, ha propuesto para la lista de
monumentos históricos del Patrimonio de la Humanidad el complejo de fortificaciones 16
En la Bola de Guachalá, carretera Pana-
de pedir permiso y ofrendar a la
precolombinas de Pambamarca y el Camino Principal Andino Qhapaq Ñan. mericana Norte. montaña antes del ascenso, según

EL DESCUBRIMIENTO
100

los conocimientos ancestrales pantes sobre la metodología y el se en el horizonte y el Cayambe mino, en partes marcadas y en
compartidos por Pablo Guaña software utilizado por la expedi- mostrando sus grandes macizos partes adivinando. Llegamos a
Quimbiulco, vecino de Cayambe. ción para realizar las investigacio- de hielo y roca, las espectacu- una zona que tenía al parecer
nes de arqueoastronomía. La clau- lares grietas. Todo el escenario camino hacia abajo; dudando,
3.4.4 P ARTICIPACIÓN EN EL sura del encuentro se realizó el 24 contrastado por la tonalidad del Miguel se adelantó a ver si era
PRIMER CONGRESO INTERNACIONAL de septiembre en la Hacienda de cielo al atardecer en los Andes la ruta, pero bajaba a lo que al
DE ARQUEOASTRONOMÍA Guachalá, teniendo por anfitrión equinocciales. A las cinco de la amanecer vimos que era una la-
a Cristóbal Cobo. Es significativo tarde se retiraron a dormir, porque guna de deshielo, Jesús y yo re-
Con motivo del Año Internacional cómo la expedición se mantenía el ascenso se iniciaría a la media visamos por el otro lado, y al
de la Astronomía, declarado por la en el campo y, a su vez, discutía noche: 17 confirmar el trayecto correcto
UNESCO, se celebró el Primer Encuen- resultados preliminares en un foro esperamos a Miguel y continua-
tro Internacional de Arqueoastro- académico y, al mismo tiempo, Las condiciones de las montañas mos rodeando un macizo de roca
nomía en la ciudad de Quito, del compartía protocolos de investi- en esta zona son muy especia- llegando al glaciar.
21 al 24 de septiembre de 2009. El gación, es decir, a la par que se in- les, hay que ascender de noche, Nos pusimos los crampones y to-
evento, coordinado por Enrique vestigaba, se obtenían resultados mientras la temperatura no es mamos los piolets,18 nos encami-
Aguilar, se realizó en las instala- satisfactorios. elevada y el glaciar se mantie- namos a la empinada cuesta de
ciones de la Escuela Politécnica ne estable por la baja tempera- hielo y sin parar demasiado,
Nacional. Una de las actividades 3.4.5 A SCENSO A LA CUMBRE tura, pues, durante el día el gla- para no enfriarnos, continuamos
científicas del encuentro fue la Ex- DEL NEVADO C AYAMBE ciar comienza a derretirse por con una ligera pero continua
pedición 0° / 0°C. Justamente el el incremento en la temperatu- marcha. Librando grietas y
día de la inauguración, al inicio de El cuerpo de guías de la expedi- ra y podría tornarse peligroso. puentes de hielo, llegamos a un
la ponencia de Arturo Montero, ción anhelaba la cumbre del Ca- Dormimos, o mejor dicho dormi- farallón llamado los Picos Ja-
“Calendarios de horizonte en Me- yambe, los entusiasmó la experien- tamos hasta las 22:00 horas, en rrín, donde Jorge ya un poco
soamérica” se abrió un paréntesis cia estética y deportiva. el momento en que pretendía- cansado manifestó que quería
para informar a los asistentes que El 22 de septiembre, Miguel mos salir del refugio, nos dimos descansar por un momento, la
sólo dos días antes se había alcan- López, Jesús Martínez, Jorge Obre- cuenta de la tormenta eléctrica respuesta evidentemente fue
zado el ecuador en los límites del gón y Miriam Díaz partieron al al- que había por la zona donde es- negativa, al tomar en cuenta que
Glaciar Bicentenario, y que tam- bergue Ruales-Oleas-Berge para taba la otra cordada de la expe- al quedarse ahí por mucho tiem-
bién se había registrado el Glaciar ascender por la ruta habitual. Des- dición [véase el apartado 3.3.3 po podría sufrir de hipotermia.
Ecuador como la masa de hielo a pués de cuatro horas de camino Tercer ascenso: mal tiempo y Continuamos los cuatro y la
mayor altura; valiéndose de la fo- por terracería arribaron al refugio frustración]. Con un poco de cuesta cada vez se tornaba más
tografía y cartografía digital fue y quedaron sorprendidos por la preocupación, pero con la con- empinada. Llegamos a la zona
posible presentar imágenes del confortable y amplia edificación, fianza de que estarían bien nues- de mayor exigencia casi al ama-
alcance y los propósitos de la ex- teniendo como escenario la in- tros compañeros, abandonamos necer, veníamos Miguel, Jesús,
pedición. El público se sintió com- mensa montaña. Una vez instala- el refugio en medio de la oscuri- Jorge y yo, en ese orden en la
placido por la designación de Bi- dos, salieron a reconocer los alre- dad y tratando de seguir el ca-
centenario para el primer glaciar dedores; todo era espectacular: el
18
Bastón de alpinista, con contera puntia-
registrado. El 23 de septiembre se volcán Illimani asomándose entre 17
Agradezco los apuntes de Miriam Díaz guda de metal en un extremo y una espe-
impartió un taller entre los partici- las nubes, la cordillera perdiéndo- para completar este apartado. cie de piocha en el otro.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


101

cuerda, aunque en momentos


me adelantaba para dar un poco
de apoyo a Jorge.
Buscando el camino, pasamos
muchas grietas, una de las cuales
ya casi en la cima, hizo presa de
Jorge, quien al brincar con un
poco de temor por lo impactante
de la abertura en el hielo, cayó
hasta la cintura, apoyando los co-
dos y el piolet consiguió salir,
mientras que con Miguel y Jesús
lo asegurábamos; la última en
brincar fui yo, los demás atentos
me aseguraban. Así continuamos
enfrentando las experiencias que
el Cayambe nos daba. Lo último
fue una gran grieta con una pa-
red que debíamos subir antes de
que incrementara la temperatu-
ra con la insolación. Después de
tomar algunas fotografías y con
la emoción del logro, continua-
mos con la siguiente y más difícil
tarea, el descenso. Un largo y ca-
luroso camino nos esperaba.
Figura 73. Descendiendo de la cumbre
Bajamos durante más o menos Comimos, bebimos, preparamos gística de la expedición. Un poco del Nevado Cayambe por la ruta oeste.
tres horas, al terminar el glaciar nuestras cosas y las bajamos, ya más tarde llegaría la otra cor- Fotografía de Miguel López.
ya había muchos hoyos por el que la camioneta llegó a reco- dada que habían ido por el flanco
calor, los cuales nos hicieron gernos antes de las dos de la tar- sur al vértice ecuatorial, afortu- en las instalaciones de la agrupa-
trastabillar sobre el camino [fig. de. Nos despedimos del encarga- nadamente, todos bien y comple- ción excursionista Nuevos Hori-
73]. Descansamos un poco, nos do, quien con una sonrisa nos tos nos reunimos para cenar y pla- zontes, donde todos los guías y
hidratamos y tomamos más fotos; brindo ayuda para cargar el ve- ticar las experiencias vividas en montañistas ecuatorianos esta-
al comenzar a bajar por las rocas hículo y partir hacia la Hacien- esos días. ban presentes para una despedi-
el calor ya era sorprendente, así da de Guachalá. Tomando nue- da fraternal. El regreso del último
que nos quitamos el exceso de vamente el camino de terracería Finalmente, la expedición se re- contingente a la Ciudad de Méxi-
ropa y continuamos, llegando de en la camioneta tras un largo unió en Quito el primero de octu- co fue el 2 de octubre, una vez que
nuevo al refugio alrededor de las rato llegamos a la hacienda, en bre, por la noche, festejamos el se habían logrado las aspiracio-
12 del día. donde nos esperaba la parte lo- éxito alcanzado colectivamente nes establecidas.

EL DESCUBRIMIENTO
102
103

4. El volcán Cayambe
4.1 Medio ambiente

E LCAYAMBE ES UN VOLCÁN ACTIVO en la Cordillera Real en el norte de


Ecuador.1 Es la tercera montaña más alta de la nación ecuatoriana detrás
del Chimborazo de 6310 m/nm y el Cotopaxi de 5898 m/nm. Según medicio-
nes topográficas del Instituto Geográfico Militar de Ecuador,
el Cayambe tiene una altitud de 5790 m/nm y encuentra su cima en la
00° 01´ 72" / -77° 59´ 13". Al pie occidental del volcán se asienta la
ciudad de Cayambe, nombrada así por el volcán. La montaña
administrativamente corresponde a la provincia de Pichincha, can-
tón de Cayambe. Desde la capital de Ecuador, en un día despejado,
se puede apreciar su cumbre, pues se localiza a tan sólo 65 km al
noreste de Quito.

4.1.1 G EOLOGÍA 2

Dos cordilleras y dos tipos de volcanes conforman la región de nues-


tro interés. Los volcanes ecuatorianos han sido clasificados según sus
características morfológicas, la química de sus rocas y el tipo de su
erupción, ya que diferencias notables aparecen entre las montañas de
ambas cordilleras. La cordillera Oeste, donde se sitúa, entre otros, el
Pichincha, constituye el frente volcánico de cara al Pacífico, sus erup-
ciones se caracterizan por lluvias de ceniza que cubren extensos terri-
torios, los cuales afectan en gran medida a poblaciones aledañas. Del
Barrera de seracs en la zona de ablación
del glaciar Hermoso, vertiente occiden-
otro lado del valle Interandino, la actividad durante los últimos 10 mil
tal del volcán Cayambe. Fotografía de años ha sido más intensa. La cordillera Real está constituida de gran-
Jorge Obregón. des estratovolcanes, es decir, conos formados por la acumulación de
capas de lava, piroclasto y cenizas volcánicas, como el Cayambe y el

1
La Cordillera Real es uno de los cordones principales que rodea la hoya de Quito.
2
Agradecemos al vulcanólogo Pablo Samaniego su disposición para esta investigación.
104

Figura 74. El volcán Cayambe se encuen- tremo oriental, denominado Cono


tra en la parte norte de la Cordillera Real de la Virgen.
de los Andes septentrionales.
El Viejo Cayambe es el edificio
basal, corresponde a la parte oc-
cidental del complejo, es decir la
bre secundaria u oriental de 5 487 parte junto a la planicie de la ciu-
m
/nm ubicada a 1.5 km de la cima más dad de Cayambe, está constituido
alta. El complejo volcánico Cayam- por los restos erosionados de un
be cubre un área de 24 km, en di- antiguo volcán que alcanzó una
rección este-oeste por 18 km en altura de al menos 4 500 m/nm, y una
dirección norte-sur, constituyen- sucesión de flujos de lava, mayo-
do uno de los más grandes com- ritariamente de composición an-
plejos volcánicos del arco ecua- desítica. El final de este edificio
toriano (JPSCyDCP, 2006). estuvo marcado por una serie de
El Cayambe, según Samaniego eventos de volcanismo con la for-
y colaboradores (2004b), es un mación de importantes flujos de
estratovolcán andesítico cubierto lava de composición dacítica en
con un casquete glaciar, que al pa- la parte suroriental, y una impor-
recer presenta un cráter doble en tante actividad piroclástica de
su cima con orientación norte-sur, composición riolítica que originó
acompañado por un complejo de la formación de una caldera en la
puntos de emisión. Por el momen- parte central del edificio. Resulta-
to, los glaciares que lo cubren no do de varias dataciones radio-
Cotopaxi. Estos volcanes produ- gráfico y la urbanización del valle permiten confirmar esta hipótesis. métricas, se ha podido estimar que
cen periódicamente nubarrones Interandino (Johnson J.B., Sama- El edificio volcánico está forma- este edificio fue construido por la
ardientes que pueden recorrer niego P., Hall M.L. et al., 2008). do sobre una caldera anterior de acumulación de los productos vol-
distancias de hasta 50 km hacia los Si apreciamos al Cayambe des- la cual aún se conservan algunas cánicos de erupciones sucesivas
valles. Estas erupciones van acom- de el occidente, establecemos que murallas. Flujos de lava y piroclas- ocurridas durante el Pleistoceno,
pañadas de lluvia de cenizas y de se trata de un cono, con fuertes tos han formado el nuevo cono hasta hace aproximadamente un
piroclastos que los vientos domi- pendientes que culminan en una volcánico (fig. 75). De manera millón de años (Samaniego et al.,
nantes del este transportan hacia cima de forma plana, que es la cum- general, el complejo volcánico 2004a: 19).
el valle Interandino y sus grandes bre máxima. Sin embargo, si se le Cayambe está constituido por tres El Nevado Cayambe es el edifi-
ciudades. La parte andina de Ecua- observa desde el norte como lo elementos: a) un antiguo edificio cio actual, concierne a un estra-
dor vive con incertidumbre junto vemos en la figura 71 (p. 98), en el efusivo, el Viejo Cayambe; b) el tovolcán compuesto, construido
a sus numerosos volcanes (fig. 74). sitio Las Antenas encontramos volcán joven Nevado Cayambe ca- luego de un periodo de reposo y
Una configuración, prácticamen- que se trata de un volcán com- racterizado por una historia mu- de erosión importante. Sobre los
te única en el mundo, en la cual el puesto, conformado por varias cho más compleja y dinamismos remanentes orientales del Viejo
riesgo para la población civil se cumbres, destacando la más alta eruptivos más explosivos; c) un Cayambe. Los estudios geoló-
acentúa por el crecimiento demo- de 5 790 m/nm al oeste; y una cum- cono satélite construido en el ex- gicos han permitido determinar

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


105

Figura 75. Mapa Geológico del Cayambe, las líneas oscuras representan
colapsos en superficie, las líneas punteadas, colapsos soterrados. Equidis-
tancia entre las curvas de 200 m (Samaniego et al. 2005, fig. 3, p. 2229).

que su actividad se inició hace aproximadamente 400 mil años. El combros que cubren la planicie de Cayambe que afloran en los va-
comienzo de esta efervesencia estuvo marcado por la construcción lles de los ríos Blanco, Granobles y Guachalá. Por su parte, los pro-
de un edificio volcánico señalando la transición entre el antiguo y el ductos del colapso del flanco norte, constituyen el depósito de
nuevo volcán. Este volcán se ha denominado el cono El Angureal, los avalancha del río San Pedro, junto a la laguna de San Marcos. Final-
vestigios de este edificio son escasos, pues han sido erosionados o mente, un tercer edificio forma la cumbre secundaria o cumbre
cubiertos por los productos volcánicos posteriores (fig. 71). A conti- Oriental de 5487 m / nm , construida sobre el flanco del edificio
nuación se desarrolló el edificio que constituye la cumbre máxima precedente; este edificio no fue afectado por la erosión glaciar que
que hoy conocemos del complejo de domos en la cumbre. Este edifi- se le asigna una edad del Holoceno menor a 10 mil años antes del
cio ha presentado diferentes fases de construcción, con emisión de presente (ibídem: 20).
flujos y domos de lava, y de destrucción del edificio con erupciones El Cono de la Virgen es un satélite, en efecto, en el extremo oriental
piroclásticas altamente explosivas y colapsos sectoriales. En parti- del complejo se encuentra un pequeño edificio de 3882 m/nm. Este cono
cular se debe señalar la ocurrencia de dos colapsos sectoriales que tiene una edad holocénica, y fue el responsable de la emisión de una
afectaron los flancos occidental y norte. El colapso del flanco occi- muy importante serie de flujos de lava que viajaron cerca de 12 km
dental es evidente por la estructura en forma de herradura de la ca- hacia el oriente, llenando el valle del río Hualaringo, célebre por arras-
becera del río Blanco, los depósitos de avalancha y los flujos de es- trar tanta arena y algo de oro, según afirma Anhalzer (2007:152).

EL VOLCÁN CAYAMBE
106

Una característica del volcán por la formación de domos o flu- vada, presenta a la vista por to- que esta montaña no era volcán,
Cayambe es que no existe un crá- jos de lava en la cima y flujos das partes un aspecto quasi igual, y la llamaban Cerro pacífico o
ter visible, esto se explica por el piroclásticos que cubrieron los a excepción de la que mira al NND manso. En las historias de la Con-
tipo de erupciones que han ocu- flancos norte y oriental, así como ( NNW) este lado se ve desde el quista que he leído, tampoco se
rrido en esta montaña. En cada lahares que viajaron por los ríos vértice del cerro, hasta su falda habla de este suceso, aunque se
ocasión se abre una nueva chime- al oriente y al occidente, acompa- en que acaba la nieve, una sec- dice algo de las reventazones,
nea o conducto volcánico, el cual ñados de caídas de lapilli y ceniza ción, o hendidura como si se hu- fuegos y humaredas de otros ce-
al final del ciclo eruptivo es sella- que se han presentado en casi to- biese sumergido para su interior, rros; por lo que es natural, supo-
do por el nuevo magma que se en- das las erupciones y han cubierto rompiéndose las peñas bronca- ner que este acaecimiento fue
fría en el cráter, formando lo que especialmente la parte superior mente, y quedando por esto va- mucho tiempo antes de la Con-
se denomina un domo de lava. del volcán; de manera muy ocasio- rias puntas, al modo de las que quista de estos dominios.
nal, avalanchas de escombros que resultan cuando se rompe impe- El 8 de febrero del año de
4.1.1.1 H ISTORIA ERUPTIVA han afectado los flancos norte y tuosamente una masa de materia 1785, tercer día de carnestolen-
occidental del volcán en épocas cristalizada [se refiere a la aris- das [carnaval], amanecieron los
Previo a los trabajos de Hall y remotas (JPSCyDCP, 2006).3 ta de Santa Bárbara en el flanco campos de Cayambe espolvorea-
Mothes en 1994, se consideraba De la historia eruptiva recien- norte del volcán]. A más de esto dos con tierra que había caído del
que este gran edificio estaba te, encontramos una relación tras- se ve un arenal estéril lleno de cielo... la yerba se veía blan-
inactivo. Pero estudios recientes cendental en la obra Alexander pedrones y peñascos como roda- quizca... mi primer cuidado fue
demostraron lo contrario, en los von Humboldt, Briefe aus Amerika. dos [se trata de los depósitos examinar el grosor... de la tierra
últimos cuatro mil años se ha man- 1799-1804, que es una recopilación del último flujo piroclástico del que había caído, y le encontré
tenido una actividad constante, de la correspondencia de Hum- volcán], y un cauce a continua- como de una línea [13 mm]... era
presentando tres ciclos de inten- boldt con diferentes personas de ción de la hendidura que mani- piedra quemada, y reducida cua-
sidad con 300, 600 y 900 años de las Américas. El autor de esta car- fiesta muy bien, que en algún si a polvo... Como no se tenía idea
duración, separados por periodos ta es el señor J. J. Ascásubi, pro- tiempo corrió por él un gran vo- de que Cayambur fuese volcán,
de calma de 600 y 1000 años, res- pietario de la Hacienda de Gua- lumen de agua, y últimamente la se atribuyó esta tierra al Coto-
pectivamente. El último periodo chalá, quien fue testigo de una vaza [sic] de donde salía el paxi... quedó la duda si sería
eruptivo, que se inició hace 100 erupción en los años 1785 y 1786: arranque de la bóveda, o copa del cuando por el mes de julio del
años, se ha caracterizado por el cerro hundida, en términos que mismo año empezó Cayambur a
crecimiento de domos de lava, la Esta montaña, bien conocida a V. si no hubiese habido este estra- echar humo por dos bocas que
generación de flujos piroclásticos S. por su situación, y altura, ter- go, presentaría a la vista un as- tiene, y descubrió sin estrago ni
de colapso del domo, la produc- mina en una copa semejante a la pecto igual al resto de su circun- movimiento alguno al SE cuasi en
ción de lahares (flujos de lodo y de un alambique, y la parte ne- ferencia; señales todas evidentes, línea recta, aumentándose algu-
escombros) asociados a la fusión al parecer, de una formidable nas veces esta especie de explo-
del casquete glaciar y una limita- erupción. sión hasta por otra tercera que
3
da distribución de piroclastos Puede consultarse en línea el Plan de con- El tiempo en que sucedió no tiene más alta en línea curva con
tingencia para afrontar el proceso erup-
(Samaniego et al., 2004b). tivo del volcán Cayambe, preparado por se puede conjeturar, por que tan las dos primeras, todas en el cuer-
Las investigaciones demues- la Junta Provisional de Seguridad Ciuda- lejos de encontrar alguna tradi- po del cerro desde poco más arri-
dana y Defensa Civil de Pichincha, en lí-
tran que las erupciones recientes nea 2009: <www.municipiocayambe.gov.
ción entre los indios, y blancos, ba de la mitad para abajo: el
del volcán se han caracterizado ec/pdf/plan_volcan_cayambe.pdf>. se ha perdido tanto, que creían humo era a veces tan denso, y

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


107

cargado de materias combustibles, que por las noches se veía inflama- 4.1.1.2 R IESGO VOLCÁNICO
do. Últimamente en marzo de 1786, hizo por la boca más baja una
erupción de una materia muy espesa, y negra, que la tuve por lodo, y Si el volcán vuelve a entrar en una fase eruptiva violenta que genere
cubrió como dos leguas de largo, y una de ancho y no se pudo examinar flujos de lodo intensificados por la fusión del casquete glaciar, se ve-
por qué no salió de las faldas nevadas, y hay riesgo inminente de la ría seriamente afectada la ciudad de Cayambe, sus 20 mil habitantes y
vida en caminar por encima de la nieve, a causa de que repentinamen- poblaciones circunvecinas (fig. 76). La catástrofe podría ser de gran-
te se hunde esta... Es notable que antes, ni en la explosión misma se des proporciones, alcanzando el valle Interandino que limita al norte
hubiese sentido en el Pueblo de Cayambe temblor de Tierra, ni oído con Ibarra y con la ciudad de Quito al sur. Las urbes serían afectadas
bramido, o ruido alguno: Esto hace ver que estas bocas estaban abier- por la caída de ceniza; dirigiendo el escenario al oriente por el sistema
tas antes de ahora: lo único que se notó en las alturas de Tupigachi, y fluvial Saldo-Quijos podría alcanzar el sector de Cascada de San Ra-
Tavacundo... que están al frente del cerro por la parte diametralmente fael, afectando la principal vía de acceso al sector nororiental del país,
opuesta a la de las bocas.4 al Sistema de Oleoductos Trans-Ecuatoriano y el Oleoducto de Crudos
Ahora diez días vino a verme el Mayordomo de dicha mi hacienda, Pesados. Si además la dirección dominante de los vientos es de orien-
y me dijo que, actualmente estaba echando humo a la citada montaña te a occidente, las zonas densamente pobladas de la parte occidental
por la boca más baja... Estas son las noticias que puedo dar a V. S. de la podrían ser afectadas por la caída de ceniza y flujos de lodo secunda-
montaña de Cayambur. rios, asociados con la re-movilización de la ceniza depositada en los
flancos superiores del Cayambe (JPSCyDCP, 2006: 8-11).
En una relación de 1860, de F. Hassaurek (1993), encontramos lo si- Hall y Mothes (1994) reportaron varios niveles de ceniza volcánica
guiente: que los asociaron con la actividad del volcán durante el Holoceno
(últimos 10 mil años). Posteriormente, estudios geológicos recientes
Me dijeron que el Cayambe era un volcán que aún estaba en actividad, (Samaniego et al., 1996; Samaniego, Monzier et al., 1996; Samaniego et
que en el flanco oriental hay dos cráteres que han erupcionado (sic) al., 1998) permitieron conocer la historia geológica. Con base en estos
frecuentemente según dicen los mayordomos de las haciendas vecinas estudios se define que las erupciones pasadas de este volcán se carac-
que han llegado a la parte posterior de la montaña en busca de anima- terizan por la formación de domos o flujos de lava en la parte superior
les extraviados... Los cráteres no están en la cima sino en el flanco del volcán; flujos piroclásticos que cubrieron los flancos norte y este,
oriental de la montaña, y arrojan cenizas y agua en dirección de la flujos de lodo y escombros que viajaron por los ríos al oriente y occi-
selva del Napo, uno de los famosos tributarios del Amazonas. Actualmen- dente; caídas de lapilli y ceniza que han acompañado casi a todas las
te prevalece la creencia en los círculos científicos de que si el Cayambe erupciones pasadas y han cubierto especialmente la parte superior
fue alguna vez un volcán, ahora ya está apagado. Esta creencia se apo- del volcán, y de manera ocasional, avalanchas de escombros por sus
ya en el hecho de que desde sus flancos norte, este y sur, que dan a las flancos desde épocas remotas.
partes habitadas de Ecuador, no se han notificado erupciones. Parece El estudio del volcán Cayambe revela cuatro unidades de flujos
extraño que los viajeros científicos que examinaron la montaña, su piroclásticos de bloques y cenizas, oleadas y lahares asociados. El
botánica y su geología, nunca hayan ido a su parte posterior. análisis de uno de los depósitos de una turbera muestra 23 niveles
de caída de cenizas y lapilli, que corresponden a tres ciclos de acti-
vidad de 7 a 10 siglos de duración cada uno, durante los últimos 4
mil años. El ciclo más reciente puede no haber terminado todavía,
4
como lo sugiere la pequeña erupción ocurrida en 1785-1786. Estos
Tupigachi y Tabacundo están situados al W del volcán, por lo que los centros de
emisión estarían entonces en la parte oriental del edificio; sin embargo, es confuso si
resultados enfatizan el peligro del volcán, cubierto por un espeso
se trata de la parte NE o SE. casquete glaciar que puede representar un riesgo para las pobla-

EL VOLCÁN CAYAMBE
108

Figura 76. Mapa de los peligros volcáni- do un acelerado descenso de los


cos: Caídas de piroclastos y avalanchas lahares que destruirían todo lo
de escombros, Institut de Recherche pour
le Développement, y el Departamento de que se encontrara a su alcance,
Geofísica de la Escuela Politécnica Na- pudiendo incluso mover y arras-
cional de Quito, 2002. trar objetos de gran tamaño y peso
como puentes, vehículos y árbo-
al interior del edificio, el registro les. Las edificaciones y la vegeta-
ha sido menor a 19 eventos por ción a su paso podrían ser destrui-
mes, todos ellos tuvieron magni- das o seriamente afectadas, las
tud menor a cuatro, razón por la personas que habitan en las zonas
cual no se recibieron reportes de de riesgo se verían alcanzadas por
que hayan sido percibidos por la estos flujos con pocas posibilida-
población. Es importante resaltar des de sobrevivir, por lo que se
que durante el año 2009 no se re- recomienda por parte de las auto-
gistraron enjambres sísmicos, ni ridades que la población evite ha-
señales de tremor. En el año 2008 bitar en el fondo de los valles y
se localizaron cuatro eventos sís- quebradas.
micos, de los cuales tres se ubi- Conociendo estos factores de
caron a 15 km al este de la cum- riesgo, la Expedición 0° / 0°C con-
bre del volcán, y uno sobre el sideró pertinente contribuir al
flanco oeste. Todos fueron produ- monitoreo del volcán Cayambe
ciones e infraestructuras del somonte (Samaniego, Monzier y Robin, cidos por fracturas de rocas al in- que realiza el Instituto Geofísico
1996: 389). terior del edificio. Acerca de las de la Escuela Politécnica Nacio-
Durante el año 2008, el volcán Cayambe registró 4262 eventos, 97.5% manifestaciones superficiales, se nal.5 Según el Instituto Geofísico,
de estos episodios están relacionados con señales generadas por la recibió el 28 de febrero un repor-
movilización o vibración de fluidos y 2.5% con procesos de ruptura te señalando la presencia de fuer-
5
El Instituto Geofísico de la Escuela
de rocas al interior del edificio. De acuerdo con el periodo 2002-2007, te olor a azufre (Troncoso y Vira- Politécnica Nacional, constituye el pri-
el año 2008 representa un pico de actividad, similar a lo observado cucha, 2009). mer centro de investigación sísmica y
en 2006, con un promedio de 355 sismos por mes. De manera general Los lahares y escombros cons- volcánica en Ecuador. A partir de enero
de 2003, mediante Decreto Presidencial,
la actividad mensual en el año 2008 osciló entre 256 y 459 eventos, tituyen el fenómeno volcánico tiene a cargo en forma oficial el diagnós-
siendo los meses con mayor sismicidad noviembre, marzo, abril y más peligroso para las personas tico y vigilancia de los peligros sísmicos
mayo. En el mes de noviembre se registró el mayor número de even- que viven en zonas próximas a los y volcánicos de todo el país. El Instituto
Geofísico mantiene un activo programa
tos relacionados con la movilización de fluidos, principalmente del ríos que descienden del volcán de monitoreo instrumental en tiempo
tipo LP , en este mes se registraron entre ocho y 25 eventos diarios, Cayambe. La peligrosidad de este real, que asegura la vigilancia científica
permanente sobre volcanes activos y fa-
con un promedio de 15 sismos por día. Respecto a eventos híbridos, fenómeno es determinado por el
llas tectónicas. A lo largo de su corta
el mayor número de sismos se contabilizó en el mes de enero, a partir volumen de agua y de los materia- vida, el Instituto se ha hecho acreedor a
de entonces disminuyó paulatinamente su número hasta llegar a va- les sueltos disponibles, así como importantes premios y reconocimientos,
a escala local e internacional, por su tra-
lores inferiores a cinco eventos por mes, en los tres últimos meses por las pendientes y por el enca- bajo en el diagnóstico y prevención de
del año. Referente a las señales producidas por las fracturas de rocas ñonamiento de los valles, generan- los desastres naturales.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


109

los andinistas pueden aportar da- vapor de agua (H2O) y el dióxido de carbono (CO2),9 lamentablemente
tos llenando una ficha de obser- no pudimos adquirir el equipo en ninguno de los dos países. De cual-
vación, que ha sido publicada en quier forma, durante nuestra estancia en la montaña del 16 de sep-
el libro Los peligros volcánicos aso- tiembre al 1 de octubre, no percibimos aroma a azufre, no detectamos
ciados con el Cayambe, de Sama- alguna anomalía y tampoco sismos. Es necesario señalar que el gobier-
niego y colaboradores (2004a: 89- no ecuatoriano ha instalado una red de monitoreo alrededor del
90). Incluimos los campos de esa Cayambe, conformada por cinco estaciones sísmicas, una línea de con-
ficha en nuestros registros de la trol de la deformación del flanco norte (base EDM con su correspon-
CRA , para mayor puntualidad de las diente prisma) y un inclinómetro electrónico, entre otros equipos. La
observaciones nos valimos de ins- información generada por las estaciones es transmitida por radio en
trumentos como una computado- tiempo real a la base del Instituto Geofísico en Quito (Samaniego et
ra personal MacBook habilitada al., 2004a: 54-56).
con el software SeisMac, 6 el cual
permite que los sensores de movi- 4.1.2 GLACIOLOGÍA10
miento del equipo realice la fun-
ción de un sismógrafo portátil (fig. Los glaciares situados entre el trópico de Cáncer y el trópico de Capri-
77), nuestro interés por la cornio son poco habituales, aún más los que están próximos a la lati-
sismicidad obedece a que nos ins- tud cero, varias razones: es una de las regiones más cálidas del plane-
talamos sobre la región tectónica ta, en la latitud ecuatorial prácticamente las estaciones no existen y la
del Sistema Transcurrente temperatura es de templada a cálida durante todo el año, así que son
Chingual-Cayambe, lineal y dex- Figura 77. MacBook acondicionada como escasas las nevadas y, por tanto, es difícil que se acumule hielo. Final-
tral, 7 justamente en uno de sus es- sismógrafo portátil es utilizada en el cam- mente, a lo largo de la trayectoria ecuatorial hay pocas montañas que
calones, denominado Sistema pamento base. Al fondo, el risco más alto sean suficientemente altas para mantener temperaturas bajas, que
corresponde a la Arista del Águila y el
Oyacachi-Machachi; por otra par- permitan a un glaciar establecerse. Todos los glaciares ecuatoriales
Cóndor. Fotografía de Juan Rivera.
te, para registrar los cambios de tanto en África como en América son relativamente pequeños y se
temperatura en el suelo utilizamos encuentran en las cotas más altas de montañas aisladas. Por esta ra-
una estación climática portátil de fumarolas, cambios morfoló- zón son especialmente sensibles a los cambios climáticos.
modelo Davis II. Para la detección gicos y detección de derrumbes, Justamente, para que una masa de hielo como los glaciares Bicente-
observamos el volcán continua- nario y Ecuador registrados por la Expedición 0° / 0°C, pueda prospe-
mente con unos binoculares 25- rar se requiere una formidable altura y suficiente humedad, de tal suer-
6
Aplicación para Mac OS X . Según sus
125 x 80;8 intentamos la detección te que la precipitación en forma de nieve se compacte y cristalice en
desarrolladores, SeisMac 3.0 tiene un al- de gases sulfurosos (SO2) por me-
cance de dos gravedades de aceleración, dio de un analizador de atmósfe-
mostrando 256 valores para la gravedad,
con una muestra de hasta quinientas ras, que serviría para detectar el 9
Se había considerado un medidor para la calidad del aire, o un analizador de gas portátil
veces por segundo para cada eje. Actual- marca Gasman N.
mente existen versiones para equipos 10
más ligeros como el iSeismograph HD Agradecemos la atención que ha tenido para este proyecto al glaciólogo Bolívar Ernesto
para la iPad. Cáceres Correa, responsable del Programa Glaciares Ecuador, Instituto Nacional de
8
Binoculares de 80 mm de diámetro en el Meteorología e Hidrología ( INAMHI ) y los certeros comentarios vertidos por el doctor
7 Se refiere al movimiento horizontal a la objetivo y magnificación 25-125, cortesía Lorenzo Vázquez Meyer, glaciólogo del Instituto de Geografía de la Universidad Nacio-
derecha de los bloques de una falla. de Deep Sky, S. A. de C .V . nal Autónoma de México.

EL VOLCÁN CAYAMBE
110

Figura 78. Retroceso del glaciar Hermo- tado fotográficamente por Jorge
so en la ladera occidental del volcán Anhalzer en un lapso de 24 años.
Cayambe en 24 años, el triángulo verde
marca la trayectoria del ecuador por el Los glaciares ecuatoriales debi-
flanco sur (Anhalzer, 2008: 84). do a que son muy sensibles a las
variaciones de parámetros clima-
un ambiente extremadamente frío tológicos, son buenos registros de
durante un periodo amplio de las oscilaciones climáticas, como
tiempo. Podríamos decir que es el calentamiento global (que para
sorprendente como el Cayambe algunos investigadores viene su-
mantiene tan excepcionales hele- cediendo desde 1850), coincidien-
ros, mientras que en México con do con el final de la Pequeña Edad
montañas de alturas similares y de Hielo, aunque el incremento de
más al norte apenas contamos con la temperatura se ha ido acentuan-
unos campos de hielo dispersos en do en las últimas décadas. No son
la Iztaccíhuatl, el Popocatépetl y pocos los estudios que se han
el Pico de Orizaba. realizado en los Andes con el ob-
Los glaciares tropicales cu- jetivo de comprender la relación
bren una pequeña superficie del glaciar-clima, que permita cuan-
globo del orden de 2500 km 2 , tificar los recursos hidráulicos,
pero son particularmente impor- así como una mejor interpreta-
tantes, principalmente por los ción de los archivos glaciares que
recursos hídricos que otorgan a contribuya a las poblaciones a
los poblados próximos, pero prevenirse frente al cambio
también con el nivel científico. climático y la consecuente reduc-
En América Latina, están ubica- ción de sus campos de hielo.11 La
dos mayormente en la Cordillera importancia de los glaciares an-
de los Andes: 71% en Perú, 20% dinos es tal, que el Banco Mun-
en Bolivia, 4% en Ecuador y 4% dial lanzó un programa para en-
en Colombia. Estos glaciares tro- frentar las consecuencias de la
picales son particularmente sen- disminución de los glaciares en
sibles a las variaciones climá- Bolivia, Ecuador y Perú por el
ticas, en particular al fenómeno
de El Niño ( ENOS ), todos presen-
tan un retroceso acelerado des- 11
Confróntese el artículo “Glaciares y re-
de mediados de la década de cursos hídricos en los Andes tropica-
les”, Instituto de Investigación para el
1970. En la figura 78 mostramos el Desarrollo en América Latina, en línea
retroceso del glaciar Hermoso en para agosto de 2010 <www.peru.ird.fr/
spip.php?page=article_programmes_r
el flanco occidental del Cayambe egionaux&id_article=744&id_rubrique=
en la cota de 4600 m/nm documen- 460>.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


111

Figura 79. Aspecto de la zona de ablación del glaciar Hermoso, flanco occidental del volcán Cayambe. Fotografía de Jorge Obregón.

EL VOLCÁN CAYAMBE
112

cambio climático, con un financiamiento de 32 millones de dólares en La literatura científica que se ocupa de los glaciares de Ecuador
mayo de 2006.12 atiende principalmente a otras montañas, 13 como el Antisana, el
Se considera que a mediano plazo, el aumento previsto de la tem- Carihuayrazo y el Chimborazo, por lo cual nos es particularmente difí-
peratura atmosférica y oceánica de la cintura tropical, debería cil apuntar más sobre este caso. Sin embargo, podemos compartir la
traducirse en un aumento de la evaporación y de la humedad relati- experiencia de la Expedición 0° / 0°C, que es alarmante y desalenta-
va, acompañada de una activación de las transferencias de calor, cuya dora. En la comparación de fotografías de la figura 80, apreciamos el
consecuencia debería ser, como ya apuntamos, la generalización del área de intervención destacando los glaciares Bicentenario y Ecuador,
retroceso glaciar, bastante observada durante el fenómeno ENOS . La así como la Arista Axis Mundi. Las fotografías fueron captadas desde
disolución de los glaciares es un fenómeno alarmante, pues las aguas el mismo sitio en el vértice del ecuador sobre la Arista del Águila y el
de deshielo alimentan con agua potable a las principales capitales Cóndor, con una diferencia de dos meses. La imagen de la izquierda
de la región. Además, proporcionan gran parte de la electricidad con- corresponde al ascenso del 27 de septiembre de 2009, la flecha señala
sumida. Por otra parte, el agua de riego también proviene de las mon- a los expedicionarios ganando altura por el Glaciar Bicentenario, de-
tañas, provee a la agricultura y la industria. De esta manera, los jando atrás la trayectoria equinoccial; en la imagen de la derecha se
glaciares desempeñan el papel de gigantescos reservorios. Finalmen- aprecia como para el 29 de noviembre ya se ha perdido una porción
te, los glaciares tropicales andinos también representan riesgos con- considerable del glaciar, resaltando el área con una línea punteada en
siderables para las poblaciones que viven en los alrededores por po- rojo. Cierto es que estamos acostumbrados por diferentes medios de
sibles avalanchas de hielo inducidas o no por temblores o erupciones comunicación a ver denuncias fotográficas por el deshielo global, pero
volcánicas, sobre todo por el vaciado catastrófico de los lagos natu- contemplar un caso tan acelerado, que tan sólo tomó dos meses, es
rales glaciares, por ende, son un foco de atención por investigadores impresionante. Más aún cuando tenemos entendido que durante el
y autoridades de la región (Bernard, Pouyaud, B. Francou, P. Chevallier mes de noviembre en ocasiones en los Andes ecuatoriales se
y P. Ribstein, 1998: 595). incrementa la precipitación pluvial (Maisincho, Cáceres, Manciati et
Sobre los 4 800 m/nm, el volcán Cayambe está cubierto por un impor- al. 2007: 72).
tante casquete glaciar que cubre un área aproximada de 22 km2 alcan- El ascenso de noviembre del 2009 por Cristóbal Cobo y Pablo Boada,
zando un espesor de 30 a 50 m en la cumbre. Grandes lenguas glaciares a la Arista del Águila y el Cóndor permitió contar con esta evidencia, a
descienden desde este casquete hasta alturas de 5000 a 4800 m/nm en continuación, se presenta el informe de Pablo Boada:
los flancos norte y oeste (fig. 79). Para los flancos occidental y sur, los
glaciares se desprenden a cotas inferiores alrededor de 4450 m/nm, esta Un pintoresco, delgado, ruidoso riachuelo atraviesa el lugar en el que
diferencia en la cota responde a la acción favorable de vientos húme- solamente hace dos meses estaba un resto de glaciar bautizado como
dos provenientes de la Amazonía que estimulan la pervivencia del hie- Bicentenario por la expedición cero-cero. Dos de los miembros de la
lo (Samaniego et al., 2004a: 15). Para el propósito de nuestra explora- expedición hemos regresado a la zona ecuatorial del volcán Cayambe,
ción, intervenimos el área de ablación de la ladera sur sobre el paso de dos meses después. Pienso ahora, al ver el cambio de los paisajes docu-
la línea ecuatorial, la zona de ablación es particularmente interesante mentados, que no se posicionó únicamente importantes puntos geográ-
para el estudio del retroceso glaciar, pues es el lugar donde la masa de ficos para la ciencia, sino que también se ha puesto en dramática evi-
hielo pierde volumen por acción de la fusión, la evaporación y el des- dencia la fragilidad de estos glaciares, una de las principales fuentes
prendimiento de los témpanos. de agua de los valles interandinos.

13
Véase por ejemplo a Smith et al. (2008) para el Rucu Pichincha y el Chimborazo; así
12
En línea para agosto de 2010 <www.elespectador.com/noticias/elmundo/articulo-bm- como el completo estudio para el Antisana y Carihuayrazo de Luis Maisincho, Bolívar
lanza-plan-contra-perdida-de-glaciares-bolivia-Ecuador-y-peru>. Cáceres, Carla Manciati et al. (2007).

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


113

Figura 80. El deshielo


acelerado del Glaciar
Ecuador para el perio-
do de septiembre a no-
viembre de 2009. Foto-
grafía izquierda de
Miguel López; derecha,
de Pablo Boada.

Ya durante la expedición constatamos que uno de los neveros por los perímetros y delinear la geometría de los glaciares para reconocer las
que atraviesa la línea equinoccial, posicionado hace dos años, había morrenas correspondiente a la Pequeña Edad de Hielo. Sin embargo,
desaparecido. Ahora, muchos de los lugares que constan en las fotogra- las condiciones climáticas adversas lo impidieron. La glaciación en el
fías de los expedicionarios y en las pinturas de Jorge Obregón han Cayambe ha sido más amplia en el pasado de lo que es hoy, evidencia
desparecido también. son las abundantes morrenas que se extienden más allá de los actua-
Evidentemente, la sequía que asola esta región ha afectado de mane- les límites del hielo. Sería conveniente en investigaciones futuras des-
ra singular estos grandes depósitos de agua. Pero si sumamos a este hecho cifrar la historia glaciar del Cayambe, aunque sabemos que sería com-
al cambio climático podemos imaginar que la pérdida de estos glaciares plicado por el vulcanismo activo que cubre los registros con tefras14 y
será permanente, o al menos pasará un largo periodo en su recuperación. sedimentos volcánicos (cangagua). La investigación se compromete
De ahí, que la expedición sea importante por su aporte científico y aún más porque cada vertiente ofrece factores ambientales, climáticos
por crear una ventana al drama del deshielo en los Andes, que es tam- y mecanismos geomorfológicos muy diferentes.
bién el del mundo entero. El Cayambe, considerado Apu (dios) para La recesión de los glaciares del Cayambe nos hace llegar un mensa-
los indígenas de estas tierras, se ha vuelto frágil en su blanco manto je inequívoco de alerta. Son los últimos reductos de los hielos
frente a los impactos de la actividad humana. ¿Celebraremos entonces equinocciales que los sabios de la antigüedad jamás hubieran podido
el dominio del hombre sobre la naturaleza o empezaremos a aceptar aceptar, pues entendían un calor insoportable sobre esta región. En
nuestra responsabilidad como especie frente a estos desastres? África, el calor ha hecho sucumbir todos sus hielos, casi desaparecen.
El área cubierta por glaciares en 1987 era de 6.48 km2, para 2003 se
Es necesario intensificar los trabajos de investigación y las acciones había reducido a la mitad, actualmente apenas cubre un kilómetro
para preservar estos colosales campos de hielo instalados en tan mag-
nífico asiento. No es un trabajo fácil, la Expedición 0° / 0°C, tenía 14
La tefra es el material expulsado por un volcán a través de la columna eruptiva que se
previsto medir el ancho de cada lengua glacial, así como cartografiar distribuye por el viento, cuando su tamaño es menor a 2 mm se denomina ceniza.

EL VOLCÁN CAYAMBE
114

sas ni las pautas del deshielo para 4.1.3 G EOMORFOLOGÍA


determinar que peso tienen los
factores antropogénico y natural, El área de nuestro interés presen-
ya existen propuestas. La princi- ta un intenso proceso tectónico,
pal asume que el factor antro- desarrollado desde el pre-Cretáci-
pogénico es decisivo, por tanto, co, acentuado durante el Tercia-
es preponderante reducir la emi- rio con la emersión generalizada
sión de gases de efecto inverna- de la cordillera de los Andes, lo
dero para frenar el calentamiento que, a su vez, está determinado
global, sobre todo en las grandes por esfuerzos compresionales,
urbes. El Protocolo de Kyoto es provocados por el empuje de la
una propuesta, que tiene por ob- Placa Oceánica de Nazca, hacia el
jetivo reducir las emisiones de los este, y de la Placa Sudamericana
principales gases 16 que causan hacia el oeste. Las formas del relie-
el calentamiento global en un por- ve del Nevado Cayambe están re-
centaje aproximado de al menos lacionadas con la edificación de
un 5%, dentro del periodo que va la cordillera de los Andes y es-
Fig. 81. El mapa muestra la tasa media anual de adelgazamiento desde 1970; de desde el año 2008 al 2012, en com- pecíficamente, con los procesos
amarillo a ocre el adelgazamiento, el engrosamiento en color azul (según Robert A.
Rohde, citando los trabajos de Dyurgerov y Meier, 2005). paración con las emisiones del endógenos y exógenos desarrolla-
año 1990. También hay propuestas dos sobre la Cordillera Real, don-
que resultan extravagantes, como de el vulcanismo y los glaciares
cuadrado.15 Si atendemos la figura ciado a la reducción de la cubierta proteger los glaciares con una fun- generados durante el Pleistoceno
81 veremos cómo la amenaza de de nubes, lo cual ha contribuido a da, un método que se ha puesto y el Holoceno y las condiciones
derretimiento de los glaciares una tasa más alta de la sublima- en práctica en Suiza cubriéndolos climáticas influenciadas por la hu-
ecuatoriales en África es mayor ción, que es la vaporización del entre mayo y septiembre, que has- medad proveniente de la Amazo-
que en los Andes. Los glaciares de hielo sin derretirse. Los investiga- ta el momento ha dado buenos nía, han dado lugar a una diversi-
las montañas Rwenzori están por dores estiman que los glaciares de resultados, con el fin de garanti- dad de relieves (Mejía, 1997).
desaparecer. Comparando las imá- África desaparecerán en los próxi- zar el turismo glacial y los depor- El Cayambe constituye uno de
genes de satélite de 1987 y 2005, mos 20 años. Por ello debemos in- tes de nieve. Obviamente, su cos- los más grandes complejos volcá-
se demuestra una disminución en tensificar nuestra atención hacia to y aplicación no lo hace un nicos del arco ecuatoriano, ocu-
la extensión de los glaciares en los los glaciares del Cayambe, y hacer método recomendable para nues- pa 24 km de este a oeste, y 18 km
picos Speke, Stanley y Baker entre del Glaciar Ecuador un hito emble- tro caso. de sur a norte. Desde el punto de
Uganda y la República Democráti- mático para la preservación de vista morfológico, existe una divi-
ca del Congo. Recientemente se ha todos los glaciares tropicales en 16
sión clara entre la parte occiden-
Se hace referencia al dióxido de car-
sugerido que el deshielo está aso- el mundo. bono ( CO 2), al gas metano ( CH 4) y el óxi-
tal y la oriental. En efecto, la mi-
Para frenar la fusión de los gla- do nitroso ( N2O ); además de dos grupos tad occidental se caracteriza por
ciares es necesario adoptar medi- de gases industriales fluorados: los pendientes suaves y valles profun-
15
Según datos de Richard Taylor del Depar- hidrofluorocarbonos ( HFC ), los perfluo-
tamento de Geografía de la Universidad
das realmente efectivas. Aunque rocarbonos ( PFC ) y el hexafluoruro de dos producto de una intensa ero-
College de Londres. no se conocen con certeza las cau- azufre ( SF 6). sión glaciar. Por el contrario, la

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


115

mitad oriental se caracteriza por de la montaña, las quebradas de 1) Sierra alta, fría y húmeda, de 3400 m/nm a 4600 m/nm se caracteriza por
tener pendientes más acentuadas la parte norte y nororiental del la presencia de relieves medios a altos, poco a moderadamente
y, en general, una topografía acci- Cayambe drenan por las partes jó- disectados, con cimas agudas y/o redondeadas, vertientes rectilíneas y/o
dentada. Este contraste sugiere venes del volcán formando el río convexas y pendientes que varían de suaves a escarpadas. Dentro de
claramente una diferencia de edad Azuela; mientras que las quebra- este paisaje se distinguen algunas formas típicas de erosión glaciar, como
entre las dos vertientes: la parte das de la parte suroriental forman son los circos que constituyen verdaderos anfiteatros caracterizados
occidental está constituida por el río Hualaringo y posteriormen- por presentar paredes rocosas circulares o en forma de media luna con
los restos de un antiguo volcán te el río Coca, que desemboca al pendientes muy escarpadas. Sobre estas formas de relieve se alojaron
ahora extinto; mientras que la mi- río Napo y de ahí al Amazonas, con- los glaciares cuaternarios que descendían hacia las partes más bajas, a
tad oriental, incluyendo la cum- secuentemente llegando al océa- través de los valles o artesas en forma de “U”, encajándose siempre en
bre, corresponde al edificio joven, no Atlántico. Otro sistema fluvial los drenajes preexistentes; estos valles presentan relieves bajos con
es decir, el volcán potencialmen- importante pero con menor cau- pendientes dominantes que varían entre 12 y 70%; además, existen cu-
te activo. dal es el que parte las quebradas chillas rocosas y relieves aborregados. Todas estas formas se han desa-
El volcán es drenado por dos del flanco noroccidental y que for- rrollado sobre las lavas indiferenciadas y piroclastos, correspondientes
sistemas principales (fig. 82), uno ma el río La Chimba (Samaniego et
al occidente que corresponde al al., 2004b: 16-17).
río Pisque; y el otro al oriente, con La variedad de formas orográ-
el río Salado. Si atendemos al caso ficas del Nevado Cayambe puede
occidental, encontramos que el resumirse en los siguientes apar-
principal drenaje corresponde a la tados:17
ladera suroccidental que está li-
mitada por el río Guachalá, que re-
cibe los aportes de numerosos 17
Este apartado se desprende del Plan de
Manejo de la Reserva Ecológica Cayambe-
drenajes del sector, entre los que Coca (PMRECC, 1998), elaborado por la Fun-
destaca el río Monjas. A menor dación Antisana, Quito, 1998.
cota, entre los valles de la parte
occidental, el profundo valle del
río Blanco desciende directamen-
te de la cumbre del Cayambe y atra- Figura 82. Modelo digital del Nevado
viesa la ciudad homónima para Cayambe destacando sus principales
desembocar en el río San José, a afluentes; la flecha roja indica la posi-
partir de este punto se le conoce ción de la Arista Axis Mundi de la que
parten drenajes para ambos océanos, y
como río Granobles. La unión de se ubica sobre el ecuador terrestre.
los ríos Granobles y Guachalá ocu-
rre al sur de la planicie de Ca-
yambe, dando origen al río Pisque,
que posteriormente formará el río
Guayllabamba que drena al océa-
no Pacífico. Por el otro extremo

EL VOLCÁN CAYAMBE
116

a la formación geológica Pisayam- y ocupando las depresiones que presentan relieves de topografía plana Figura 83. La aproximación al campamen-
bo del Plioceno. Sobre este am- a ondulada es común encontrar lagunas, humedales y depósitos de to base desde Rasochupa se da a través
de extensos valles que se abren en el
biente morfológico y litológico se glaciares, constituidos por bloques de diverso tamaño y arenas, distri- páramo andino, limitados por escalones
han depositado proyecciones vol- buidos en forma caótica. En el sector noreste del volcán Cayambe y a lo geológicos donde son comunes las cas-
cánicas recientes que han dado largo de los ríos Cusungo, Quiebra Canillas y Clavadero existen dos flu- cadas.
lugar a la formación de suelos ne- jos de lava, con una superficie de tipo pahoehoe; sobre el flujo que se
gros, húmedos y orgánicos, taxo- encuentra en la parte sur se han formado pequeñas lagunas. Este paisa-
nómicamente identificados como je se halla protegido, casi en su totalidad, por una vegetación herbácea
Cryandepts. En las partes más altas de altura identificada como páramo.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


117

Al sur del Cayambe tan vastos agrestes soledades… sujetas al embate constante de tremendas tem- Abriendo un paréntesis, fue jus-
suelen ser los páramos que la vis- pestades… región revuelta, azotada día y noche por la furia de los tamente en esta orografía de la
ta se pierde en el horizonte sin vientos y la lluvia de granizo, envuelta en nubes, escasa luz, casi “Sierra alta, fría y húmeda”, donde
obstáculo al frente (fig 83). “Tie- nunca acariciada por un sol tibio y despejado. Loma rocallosa, inhos- la Expedición 0° / 0°C tuvo su ma-
rras inhóspitas” dice el dicciona- pitalaria, casi desarbolada por la inclemencia de los elementos, en la yor injerencia, pues la explora-
rio acerca de la palabra páramo, y cual frecuentes nevadas estorban el paso al viajero (cit. por Anhalzer, ción arrancó de Rasochupa a 3 740
el barón Von Humboldt lo compar- 2008:34). m
/nm y culminó mil metros arriba en
te al referirse a ellos como: la Arista del Águila y el Cóndor. A
lo largo del ascenso, a intervalos

EL VOLCÁN CAYAMBE
118

Sitio Altitud m/ nm ubicación (datum WGS 84)


Rasochupa 3740 -0° 01' 32.6" / -78° 00' 58.7"
Encino de Guadalupe 3796 -0° 01' 25.6" / -78° 00' 55.5"
Sisgsi 3999 -0° 01' 17.3" / -78° 00' 27.6"
Lucero 4091 -0° 01' 04.5" / -78° 00' 25.7"
Chiquiragua 4224 -0° 00' 50.2" / -78° 00' 15.1"
Vatiacocha 4340 -0° 00' 43.0" / -78° 00' 07.6"
Campamento base 4380 -0° 00' 28.2" / -78° 00' 05.0"
La Curva 4380 0° 00' 24.2" / -78° 01' 15.6"
Lago del Venado y la Gaviota 4417 -0° 00' 24.3" / -77° 59' 58.4"
Figura 84. El guardabosque Luis Lucero,
de la Reserva Ecológica Cayambe-Coca, Arcoiris 4482 0° 00' 28.0" / -78° 00' 52.9"
supervisa la colecta de suelos por Karla Via Lactae 4500 -0° 00' 13.8" / -77° 59' 45.9"
Campos, en la orilla oeste del Lago del Refugio Ruales-Oleas-Berge 4615 0° 00' 30.9" / -78° 00' 34.9"
Venado y la Gaviota a 4 417 m/nm. Fotogra-
fía de Juan Rivera. Glaciar Bicentenario 4640 0° 00' 01.5" / -77° 59' 44.3"
Arista Axis Mundi 4660 0° 00' 00.0" / -77° 59' 40.9"
Glaciar Ecuador 4681 0° 00' 00.0" / -77° 59' 32.1"
altitudinales de 100 m se tomaron Arista del Águila y el Cóndor 4740 0° 00' 00.0" / -77° 59' 58.6"
nueve muestras de suelo de 250 g
cada una, para una investigación
que realiza la UNAM conjuntamente
con la NASA. Para la colecta, se pi-
dió autorización a las autoridades Figura 85. Teniendo como
ecuatorianas de la Dirección Pro- referencia el Mapa de los
Peligros Potenciales del
vincial del Ambiente en Pichin- Volcán Cayambe (IG-2002)
cha. 18 La Reserva Ecológica Ca- se han sobrepuesto con
yambe-Coca, destinó al guía de el software OxiExplorer
montaña Luis Lucero como veri- (versión 3.95.4S) los sitios
de interés. Encuadrados
ficador, indicando que no se co- en rojo, los lugares des-
lectaran especímenes, de modo cubiertos sobre la tra-
que se evitaron las raíces y demás yectoria ecuatorial; en
restos vegetales o animales. Las amarillo, las estancias, y
en blanco, los espacios
muestras fueron obtenidas de un de colecta de suelos. La
ruta en amarillo marca el
18
camino al refugio Ruales-
Se ingresó solicitud y pago de derechos a
Oleas-Berge; en blanco,
la instancia oficial el 17 de septiembre
de 2009. Se tuvo como respuesta la auto- el acceso al Glaciar Ecua-
rización y especificaciones de investiga- dor y en rojo, el recorri-
ción científica con el registro 18-2009- IC - do a la Arista del Águila
SUE - DPAP / MA . y el Cóndor.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


119

estrato a 10 cm de profundidad, utilizando una cucharilla para la toma ción, donde las condiciones fisiográficas (laderas escarpadas),
de suelos y guantes (fig. 84); los suelos se transportaron en bolsas de litológicas (rocas muy fracturadas y alteradas), edáficas (suelos sus-
plástico transparente, herméticas y con autocierre de 20 × 20 cm. Los ceptibles a las remociones en masa) y climáticas (altas precipitacio-
sitios de colecta se registraron altitudinalmente y cartográficamente nes), son las más indicadas para que se produzcan desprendimientos y
(fig. 85); la primera muestra se obtuvo del último espacio arbóreo y la posterior acumulación de los materiales en las partes bajas de las
continuaron hasta la ausencia visible de suelos en una morrena gla- vertientes y a lo largo de los drenajes (ibidem: 6-7).
ciar a 4500 m/nm. Los suelos fueron solicitados por el astrobiólogo Ra-
fael Navarro-González, para destinarse al Laboratorio de Química de 4.1.4 P ISOS ALTITUDINALES TÉRMICOS
Plasmas y Estudios Planetarios del Instituto de Ciencias Nucleares
de la UNAM, para un estudio sobre la vida vegetal en los ambientes extre- El Nevado Cayambe es parte de la Reserva Ecológica Cayambe-Coca,
mos a ser aplicados en un futuro para la creación de una atmósfera en conjunto con otras estribaciones es el área protegida con mayor
con agua en el planeta Marte a partir de bacterias (terraformación). El diversidad vegetal y animal de la República del Ecuador. En la reserva
doctor Navarro-González ha realizado estudios en muestras provenien- se han identificado 10 zonas de vida que de alguna manera explican la
tes del Pico Bolívar, en Venezuela, y el Pico de Orizaba en México, diversidad climática, paisajística y biológica de la región. La zona está
entre otras regiones del orbe. conformada por el Bosque Nublado Andino y el Bosque Húmedo Tropi-
2) Continuando con la descripción geomorfológica del Nevado cal. Cuenta además con una amplia variedad en su fauna, ya que alber-
Cayambe, al este tenemos las Estribaciones exteriores de la cordillera ga 900 especies de aves, 110 especies de anfibios, 140 de reptiles y más
oriental, que es una franja con dirección NNE-SSW que se caracteriza por de 200 especies de mamíferos. Un estudio sistemático sobre esta
presentar relieves montañosos, heterogéneos, escarpados, muy disec- biodiversidad se puede consultar en el PMRECC (1998). En esta oportuni-
tados, que presentan cimas agudas, vertientes rectilíneas y pendien- dad tan sólo enfocaremos nuestra atención al área de intervención de
tes dominantes. Estos relieves se han desarrollado sobre los materia- la Expedición 0° / 0°C que corresponde al Sistema alto-andino ama-
les metamórficos (esquistos, gneis, cuarcitas); semi-metamórficos zónico, compuesto por los siguientes pisos altitudinales térmicos:
(metavolcanitas, lutitas, filitas) e intrusivos (granodioritas). Como el • Bosque muy húmedo montano, en la cota de 3000 a 4000 m/ nm, el
caso anterior, estas formas de relieve se encuentran cubiertas con pro- bioclima en esta zona es subtemperado perhúmedo. Los rangos de
yecciones piroclásticas, que han formado suelos francos a franco temperatura y precipitación son los siguientes: de 6 a 12° C y de
limosos, taxonómicamente identificados como Distrandepts e 1000 a 2000 mm. La relación de Evapotranspiración Potencial (ETP)
Hidrandepts. La meteorización de las rocas, las pendientes y el clima, va de 0.50 a 0.25, con cero a dos meses secos al año.
han influenciado para que en este conjunto se generen fenómenos de • Páramo pluvial sub andino, en altitudes de 4000 a 4600 m/nm. La tempe-
movimientos en masa (deslizamientos y derrumbes), que han formado ratura oscila entre 3 y 6°C, el rango promedio de precipitación total
coluviones y coluvio-aluviales, en la mayoría de los casos, de gran anual está entre 1000 y 2000 mm, la ETP con la precipitación es de
magnitud. Por otro lado, a lo largo del río Papallacta, en los sectores 0.25 a 0.125. Esta zona de vida está expuesta a los vientos cargados
aledaños a Cuyuja, se hallan terrazas desarrolladas sobre materiales de humedad que vienen del este. Dichos parámetros confirman un
volcánicos recientes, que han formado grandes superficies y profun- clima frío de páramo superhúmedo. Los glaciares han tallado pro-
dos escarpes rocosos (PMRECC, 1998). fundas quebradas o valles en “U” y morrenas terminales converti-
Al somonte del volcán destacan los conos de deyección, coluviones, das en pantanos que permiten la formación de pequeñas lagunas
y formaciones coluvio-aluviales que son depósitos acarreados por las que por momentos quedan congeladas.
corrientes fluviales; este fenómeno ha dado lugar a la formación de • Piso altitudinal nival, corresponde a las nieves del Cayambe entre
relieves bajos a medios, poco a moderadamente disectados y pendien- los 4600 y 5790 m/nm. Constituyen la parte más alta y de clima gélido
tes moderadas a fuertes. Se generan en pequeñas cuencas de recep- de la RECAY, con temperaturas por debajo de 0° C (fig. 86).

EL VOLCÁN CAYAMBE
120

4.1.5 C LIMA

Al igual que en todo el país, el periodo lluvioso comienza entre los


meses de abril y mayo, los caudales máximos se registran en los meses
de junio y julio. El periodo menos lluvioso va desde agosto hasta abril,
en el cual los caudales de los ríos descienden significativamente. Sin
embargo, se pueden registrar precipitaciones anormales durante todo
el año. Con referencia a los caudales de alta montaña, éstos se presen-
tan constantes casi todo el año por efecto del deshielo de los glaciares.
La ladera prospectada por la expedición corresponde a un ambiente
definido como Clima ecuatorial frío de alta montaña, que prevalece
por arriba de los 3000 m/nm en el que se incluye las estribaciones medias
y altas de la cordillera. La altitud determina las temperaturas medias
que fluctúan alrededor de los 8° C. Las temperaturas máximas raras
veces pasan de 20° C y las mínimas alcanzan generalmente valores
bajo 0° c. Los totales de lluvia anual son irregulares, comprendidos
entre 800 y 2000 mm, según la altura y la exposición de la vertiente. Los

Figura 87. En Rasochupa a 3 740 m/ nm, se denota el límite de la vegetación de mato-


rral que es sustituida altitudinalmente por el páramo. Fotografía de Manuel
Montesinos.

aguaceros son generalmente de turada de agua; por cierto, una llo-


larga duración, con débiles inten- vizna pertinente con hielo es fre-
sidades y la humedad relativa es cuente y los lugareños la llaman
casi siempre mayor a 80% (PMRECC, papacara (fig. 87).
1998). La vegetación natural del Por su situación geográfica, la
piso más bajo es de tipo arbóreo región está influenciada por el lla-
bajo o matorral y es sustituida en mado Régimen Oriental, que se
el piso inmediatamente superior caracteriza por la ocurrencia de la
por el páramo, con una espesa temporada lluviosa desde el mes
capa herbácea constantemente sa- de abril hasta el mes de agosto. En
estas áreas bajo el Régimen Orien-
tal, las masas de aire caliente hú-
Figura 86. Formación de lagunas por des-
medo procedentes de la llanura
hielo en la ladera oeste de la montaña en
el Piso altitudinal nival. Fotografía de Jor- amazónica y arrastradas por los
ge Obregón. vientos alisios son las causantes

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


121

Figura 88. Valores meteorológi-


cos anotados por la expedición
en la vertiente meridional.
Izquierda, instalando estación
meteorológica portátil modelo
Davis II en el campamento base.
Derecha, mapa donde destacan
en rojo los símbolos meteoroló-
gicos que esquematizan los va-
lores adversos registrados: ve-
locidad con dirección del viento
y visibilidad. En las tablas infe-
riores: las columnas en gris con
los valores extremos de cada es-
tación, las columnas en azul y
verde sirven para calcular la
sensación térmica por efecto del
frío y la velocidad del viento, re-
saltando dentro de un cuadro los
valores mínimos de cada esta-
ción. A la derecha en café, los
criterios de visibilidad vertidos
en el mapa.

EL VOLCÁN CAYAMBE
122

de las lluvias sobre las estribaciones exteriores orientales de la cordi- 4.1.6 F LORA Y FAUNA
llera andina, alcanzando valores que superan los 4 mil mm por año. De
manera general podemos apuntar que los meses de noviembre y di- La flora y la fauna del bosque siempre verde montano alto correspon-
ciembre son los más temperados, mientras que julio y agosto son los de al piso altitudinal térmico del bosque muy húmedo montano (3 000
más fríos. En relación con la humedad, tanto en las estribaciones al- a 4 000 m/nm) que hemos mencionado páginas atrás. Aquí el tipo de vege-
tas, medias y bajas, pueden considerarse la ocurrencia de valores de tación es similar a la del bosque de neblina; en cuanto a la cantidad de
humedad relativa que superan 85% durante todo el año, con variacio- musgos y epífitas, el suelo tiende a estar cubierto de una densa capa
nes mensuales mínimas (PMRECC, 1998). Este factor se encuentra influen- de musgo, los árboles miden de 6 a 9 m de alto, presentan troncos muy
ciado por los efectos producidos por la densa vegetación oriental, las ramificados desde la base y tienden a crecer irregularmente en forma
altas y constantes precipitaciones, así como por la incidencia constan- inclinada, este fenómeno se debe, principalmente, a la acción de los
te de nubosidad o garúa19 y que se refleja en la abundancia de epífitas fuertes vientos que se producen en las partes altas de la cordillera. El
presentes en la vegetación. límite superior de este tipo de vegetación es conocido como
La expedición registró meteorológicamente su estancia (fig. 88), el subpáramo, es decir, es una zona de transición entre el bosque andino
objetivo era mantener un monitoreo de las variaciones del tiempo para y el páramo, se trata de un mosaico formado por especies de bosque y
planear los ascensos y, de alguna manera, comprender la interacción pajonal con pequeños grupos de arbustos y árboles enanos (PMRECC,
de la atmósfera con el volcán Cayambe. Dos factores fueron los más 1998: 42).
adversos: las constantes ráfagas de viento y la escasa visibilidad. No Por arriba del bosque siempre verde montano alto, prospera el
fue posible determinar si los vientos que más nos afectaban eran geo- páramo entre 3500 y 4500 m/nm. El páramo es un ecosistema tropical de
gráficos, o si se trataba de vientos catabáticos que responden a las montaña que generalmente se desarrolla por encima del área del bos-
interacciones de los movimientos atmosféricos creados por un cuer- que y tiene su límite en las nieves perpetuas. En este espacio se pre-
po glaciar, donde las masas de aire al contacto con una masa de hielo sentan especies vegetales adaptadas a vivir bajo fuertes cambios de
se enfrían y bajan por gravedad a lo largo de las pendientes. Sin embar- temperatura, radiación y presión atmosférica. Los páramos presen-
go, por la dirección predominante del noreste, su persistencia y su tan especies con varias formas de crecimiento como rosetas, pena-
humedad, consideramos que se trataba de vientos alisios que en su chos, almohadillas, arbustos y árboles enanos. Las hojas de este tipo
aproximación a la cordillera se aceleran y producen precipitaciones. de vegetación tienden a ser más pequeñas y gruesas. A esta altitud,
Los datos desprendidos del registro que fueron vaciados de la CRA se el crecimiento de las plantas es lento, la descomposición y sucesión
sintetizan en las siguientes tablas, en las que se anexan los criterios natural de la vegetación toma largo tiempo, así que la recuperación
integrados para medir la visibilidad, la velocidad del viento y la sensa- del ecosistema luego de ser alterado tarda mucho. En Rasochupa,
ción térmica. punto de partida para el ascenso, llamó nuestra atención un aislado
encino, Weinmannia fagaroides, de 5 m de altura que se sobreponía a
los arbustos circundantes, de alguna forma nos pareció estoico. Los
encinos tienen aprovechamiento apícola y se usan para fabricar car-
bón, su tallo es maderable. La madera es de buena calidad, se usa
para elaborar vigas, cabos, arados y para la construcción de vivien-
das. La corteza tiene taninos que sirven para curtir pieles y formar
suelas. Las flores y yemas se emplean para el baño medicinal que
19
Es un tipo de precipitación que se caracteriza por tener un tamaño de gota pequeño realizan las mujeres al mes de dar a luz en la región andina.
(usualmente menor de 0.5 mm de diámetro) dando la impresión de que las gotas flotan
en vez de caer. Esta llovizna se origina en nubes relativamente bajas y de poco desarro-
Medicinalmente, la flor se usa para tratar afecciones nerviosas (Agui-
llo vertical como son los estratocúmulos. lar et al., 2009: 33).

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


123
Subpáramo Páramo verdadero Páramo superior
3 400 a 3 600 m/nm 3 600 a 4 000 m /nm 4 000 a 4 500 m/ nm

Flor del alpaturi (Lupinus pubescens sp.). Fotografía de Flor de los Andes o flor de los caminantes (Chuquiragua Huira huira o senecio (Culcitium canescens). Fotografía
Jorge Obregón. insignis). de Miguel López.
El fruto y las semillas son comestibles. Las semillas tie- La planta del páramo por excelencia, para algunos flor Tiene uso medicinal como expectorante. El extracto
nen alcohol triterpénico llamado lupinol, de propieda- emblemática de la nación ecuatoriana, dice la leyenda de metanol de esta planta tiene efectos analgésicos.
des insecticidas. Con las hojas se preparan emplastos que sólo florece cada siete años, de uso medicinal como
para curar sarpullidos (Aguilar et. al, 2009: 47). diurético, febrífugo y tónico.

Hapapu (Valeriana microphylla) Yurak Tane (Achicoria blanca). Fotografía de Jorge Dedos de dios o cola de caballo (Lycopodium crassum).
Planta comestible y utilizada en aguas aromáticas. Sir- Obregón. Fotografía de Jorge Obregón.
ve también como forraje de animales. Medicinalmente Sin datos sobre su aprovechamiento. Tiene uso medicinal para males de los riñones.
y en cocción con otras plantas tiene funciones relajantes
y diuréticas. La flor y el extracto de la raíz se usan
para tratar afecciones nerviosas, cardiacas y estoma-
cales. Tiene propiedades antiespasmódicas y es efec-
tiva para tratar fiebre, sarpullidos y reumas. Se usa
como purgante y también para tratar heridas. Es se-
dante del sistema nervioso. La infusión de la corteza y
de la raíz es usada para curar el espanto, el mal aire, el
enfriamiento, las penas de amores, la ira y los malos Figura 89. Especies vegetales observadas durante la prospección de la ladera meridional del Nevado Cayambe.
espíritus, según la tradición popular. La planta, en sis-
temas agroforestales, se emplea como protector climá-
tico (Aguilar, et al, 2009: 93). EL VOLCÁN CAYAMBE
124

Algunos autores subdividen bustible, además de plantas que mo tenemos el Páramo superior, Fig. 90. El campamento base fue instalado
altitudinalmente al páramo en producen frutos de los que se ali- que se encuentra sobre la cota de en un Páramo superior o de almohadilla
en el límite altitudinal de la vegetación.
tres zonas claramente diferencia- mentan las aves y plantas medici- 4 000 m/ nm, la vegetación en esta
das: Subpáramo, en el límite infe- nales; posteriormente encontra- zona es pobre, los arbustos son
rior que parte de los bosques mos el Páramo verdadero, por raros, abundan las rosetas o plan- apenas prosperan algunas espe-
altoandinos en cotas de 3400 a arriba de la cota de 3 600 m/nm, des- tas bien pegadas al suelo, a mane- cies como la Werneria rígida y
3600 m/nm, el Subpáramo al ser una tacan pajonales de los que emer- ra de almohadones, que se encuen- Culcitium nivale, con algunas es-
zona de transición está formado gen con frecuencia algunas espe- tran en sectores planos y húmedos pecies de líquenes. Un estudio
por algunas especies de arbustos cies de bromelias conocidas como tal y como sucede en las llanuras pormenorizado sobre la biodi-
comunes del bosque andino, achupallas y piñuelas del género pantanosas. A mayor altitud, la ve- versidad de los páramos en el que
es común encontrar arbustos Puya (Bromeliaceae) que son ali- getación tiende a desaparecer, se destaca el endemismo, que por
como el romerillo (Hipericum mento para algunos animales para dar paso al suelo desnudo y cierto alcanza 60% de la capa ve-
laricifolium) utilizado como com- como el oso de anteojos; por últi- rocoso de la alta montaña, donde getal del entorno, es la contribu-

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


125

ción de Mena y Medina (2001). En mohadilla, en él se destacan las queñas y están ramificadas densa- Distichia muscoides y Xenophyllum
la figura 89 se muestran algunas macollas de gramíneas, que empie- mente con entrenudos muy cor- humile. También prosperan arbus-
de las plantas que más llamaron zan a disminuir en densidad a los tos, de manera que se forma un tos pequeños que se encuentran
nuestra atención durante el ascen- 4000 m/nm y son reemplazadas por montículo con forma de almoha- esparcidos: Chuquiraga jussieui,
so por su calidad estética y, sobre plantas en almohadilla, plantas da. Esta forma de vida es eviden- Pernettya prostrata, Baccharis
todo, por su trascendencia medi- arrosetadas acaulescentes y por temente una adaptación a las he- latifolia y Gynoxys buxifolia, ade-
cinal en algunos casos. pequeños arbustos. La cubierta ladas nocturnas; la superficie de más entre las plantas arrosetadas
El campamento base fue insta- vegetal generalmente no es conti- una planta en almohadilla está está el Lupinus alopecuroides y el
lado en el límite altitudinal del Pá- nua; un suelo arenoso desnudo se menos expuesta a los extremos de L. nubigenus.
ramo superior, donde la presencia expone entre las plantas (fig. 90). temperaturas que en el suelo des- Con referencia a la fauna, en las
vegetal es escasa. En el Catálogo La forma de vida de planta en al- nudo. Varios géneros forman plan- laderas sólo pudimos ver dos es-
de plantas vasculares de Ecuador, mohadilla es una característica tas en almohadilla; entre los más pecies de aves, un cóndor Vulthur
editado por Jørgensen y León- notable en este tipo de vegeta- comunes están: Azorella aretioi- gryphus y una gaviota andina, Larus
Yánez (1999), este espacio se de- ción. Las plantas en almohadilla des, A. corymbosa, A. pedunculata,
nomina Páramo arbustivo y de al- tienen hojas esclerófilas muy pe- Plantago rigida, Draba aretioides, Figura 91. Lago del Venado y la Gaviota.

EL VOLCÁN CAYAMBE
126

serranus. Si bien es común apreciar cóndores, no lo es tanto apreciar Sorprende que ciertas especies de anfibios puedan prosperar en los
una gaviota a más de 4 400 m/nm, sobre todo para los que somos visitan- fríos páramos, como es el caso de las ranas acuáticas del género
tes y asociamos estas aves con las costas, por eso dimos por nombre al Telmatobius, que son típicas del bosque andino pero que también ha-
lago donde hicimos el avistamiento Lago del Venado y la Gaviota (fig. bitan en los páramos; y qué decir del sapo de los páramos (Eleutherodac-
91); del venado tan sólo encontramos unas huellas que suponemos tylus whymperi), que vive en el pajonal, cerca de los arroyos, pudiendo
por su tamaño son de un soche (Mazama rufina). La gaviota vive y sobrevivir hasta el límite con las nieves, otra de sus características es
anida durante el verano en los lagos y lagunas de agua dulce en la alta que no se aprecia durante su crecimiento una fase de renacuajo, pues
cordillera de los Andes. A la llegada del invierno baja hacia los secto- los sapitos nacen directamente del huevo. Otro batracio de las alturas
res pre-cordilleranos e incluso hasta la zona costera en busca de tiem- es la rana marsupial (Gastrotheca riobambae), la cual tiene una forma
pos menos rigurosos, donde se le puede ver en pequeñas bandadas especial de reproducción, cuando los huevos salen de la cloaca de la
paseándose por el litoral. Muy característico durante el verano es su hembra son fecundados, y el macho con sus patas posteriores los in-
cabeza con un capuchón negro hasta el cuello que la identifica fácil- troduce en una bolsa en la espalda de la hembra. En esta bolsa se
mente; sin embargo durante el invierno, la cabeza queda casi blanca, desarrollan los renacuajos que, al nacer, son depositados en el agua.
con unas ligeras manchas oscuras detrás de los ojos. La época de Es fácil ver las espaldas de las hembras llenas de los huevos durante el
nidificación, cuya postura la realiza entre los meses de diciembre y mes de septiembre.
enero, la realiza exclusivamente en las lagunas de la alta cordillera, en En cuanto a los reptiles, el grupo de herpetofauna es escaso en el
donde generalmente construye un nido flotante con las plantas acuá- páramo y está representado solamente por las lagartijas llamadas
ticas del sector, alejado de la ribera y anclado a otras plantas. También guagsas (Stenocercus guentheri), que llegan hasta los 4100 m/nm, pues
nidifica en el suelo en rocas o pequeños islotes donde los nidos son son los únicos reptiles que soportan las inclemencias del páramo.
menos voluminosos. Los mamíferos en el páramo son difíciles de observar, los más comu-
En el páramo hay especies que se encuentran en peligro de extin- nes de ver son los conejos Sylvilagus brasiliensis (Mena y Medina, 2001).
ción como el tapir o danta de montaña (Tapirus pinchaque); el oso de Los grandes mamíferos de la región son el oso de anteojos y el tapir. El
anteojos (Tremarctos omatus); y el cóndor andino (Vulthur gryphus), el oso de anteojos es el único oso verdadero que habita en tierras andinas
ave voladora más grande del mundo y símbolo de Ecuador (fig. 92). y tiene poblaciones más o menos grandes en algunos páramos y bos-

Oso de anteojos (Tremarctos Tapir (Tapirus pinchaque). Ciervo enano (Pudu mephisto- Gaviota andina (Larus serranus). Cóndor andino (Vulthur gryphus).
omatus). philes).

Figura 92. Fauna representativa del páramo ecuatoriano.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


127

ques andinos. Su nombre se debe dades campesinas. También son bién la destrucción de su hábitat cabra joven. Destaca también el
a que muchos de ellos tienen man- cazados por su carne y porque de ha disminuido notablemente sus lobo de páramo (Pseudalopex cul-
chas blancas en la cara que con- ellos se extrae la grasa, produc- poblaciones. paeus), de hábitos nocturnos y
trastan nítidamente contra el co- tos medicinales y rituales. Los Hay tres especies de venados, pelaje amarillo negro, y el zorro
lor oscuro, generalmente negro, osos de anteojos habitan usual- uno de ellos, el venado cola blan- andino (Lycalopez culpaeus). Entre
del resto del cuerpo. Como todo mente en los bosques andinos ca (Odocoileus virginianus), lo pudi- los felinos destaca el puma (Puma
oso, son omnívoros pero prefieren pero visitan los páramos para ali- mos apreciar en estado natural en concolor), y otros felinos menores
frutos y las hojas de las achupa- mentarse y trasladarse dentro de los alrededores de Oyacahi, de la como el gato del pajonal (Oncifelis
llas, que devoran como si fueran sus extensos territorios (ibidem). especie del soche, cervicabra o ve- colocolo). Finalmente, entre las es-
alcachofas gigantes. Son animales El tapir es un pariente lejano nado de páramo (Mazama rufina), pecies domésticas tenemos a los
muy difíciles de advertir, pero sus del caballo, tienen un color oscu- tan sólo registramos huellas cerca- camélidos, de ellos el más común
huellas y heces son relativamente ro y labios y orejas claras, están nas al campamento base y del cier- es la llama (Lama glama), las alpa-
comunes. Ante el avance de la cubiertos de pelaje denso y corto vo enano (Pudu mephistophiles), no cas (Lama pacos), y el guarizo, que
frontera agrícola y la destrucción y alcanzan tamaños cercanos a los tuvimos cercanía alguna. El soche es un híbrido entre las dos. La vi-
de su hábitat natural, los osos se de un burro. Son vegetarianos, es del tamaño de un perro grande y cuña (Vicugna vicugna), es una es-
han dedicado a comer maíz, lo que más bien nocturnos y pueden per- es de color rojizo, el Pudu es más pecie que continúa en estado sil-
causa conflictos con las comuni- manecer largo rato en el agua. Tam- pequeño y tiene el aspecto de una vestre o semisilvestre.

Piso alto andino


Especies Endémicas
Anfibios 22 9
Reptiles 3 0
Aves 169 48
Mamíferos 27 6

EL VOLCÁN CAYAMBE
128

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


129

4.2 Sociedad y montaña

4.2.1 SEMBLANZA HISTÓRICA

Dos cordilleras paralelas con más de 30 volcanes –ocho de ellos


activos– dominan el altiplano ecuatoriano. Al interior de las cor-
dilleras Oeste y Real, quince cuencas fértiles han promovido el
desarrollo de la civilización por siglos, una de esas cuencas es la
de Quito donde se encuentra el valle de Cayambe. El cantón de
San Pedro de Cayambe toma su nombre de la montaña homónima.
Diferentes son las propuestas que traducen al español la palabra
Cayambe, la que nos parece más significativa por su relación con
el Sol proviene de la lengua cayanqui-caranqui, que denomina al
volcán como Cayamburu: cayan, sol, y buru, montaña: Montaña del
Sol. 20 Esta asignación es confiable si consideramos el nombre de
Cayambur con que se designa durante el siglo XVIII según consta
en la obra Alexander von Humboldt, Briefe aus Amerika 1799-1804.
En 1786, figura con el nombre Caiamburo en el Diccionario Geográ-
fico-Histórico de Antonio de Alcedo (1967, I: 195). La terminación
buru, con algunas variantes, aparece en varios topónimos de la
Sierra Norte. Además del Cayan-Buru, se podrían mencionar el monte
Imba-Buru (a), que da el nombre a la provincia de Imbabura. En
otras fuentes como Wikipedia, el nombre Cayambe proviene del
idioma quitu: cay, joven; y bi, agua: Agua joven. También podría
provenir del caranqui: kayan, hielo; o del quechua, cajan significa
lugar alto y frío. Pablo Guaña (comunicación oral, 2009), propone
otras acepciones: Yarac-Urcu, como Cerro Blanco, y Taita Cayambi,
como Padre Cayambe. Según Herrera y Costales (cit. por Becker y
Tutillo, 2009: 12) los primeros cronistas coloniales se referían a
Cayambe como: Cayambi, Cayamba, y Caxamba. Todas ellas varia-
ciones del español de la palabra cayapa compuesta de cayla,
padrecito, y amby, río grande: Padrecito Río Grande. Finalmente,

20
En la Historia de las misiones franciscanas y narración de los progresos de la geogra-
fía en el oriente del Perú, de Izaguirre y Sals (1930: XXXVIII ) se menciona un centro
Diálogo ancestral. Fotografía de Lysette misionero en Bolivia con el nombre de Cayamburu. Ignoramos a qué se debe esta
Eyssautier. similitud.

EL VOLCÁN CAYAMBE
130

Anhalzer (2008:58) propone caya, mañana, jambi, curandero: el Cu- Figura 94. La tradición cerámica de La
randero del Mañana. Las alternativas son muchas, no hay consenso, Chimba se destaca por estilizadas for-
mas, como esta pieza asociada al estilo
el tiempo y la corrupción de la lengua han hecho efecto. Cotocollao que corresponde a la fase For-
San Pedro Cayambe cubre un terreno de 1350 km2, en su rico suelo mativo tardío (1500-350 aC).
volcánico se cultivan frutas, flores, maíz, trigo y otros cereales, ocupa
desde los cálidos valles del río Pisque a 2400 m/nm, hasta el frío páramo
de la montaña con su cima a 5790 m/nm. En medio de estos territorios interés se ha especulado sobre
contrapuestos, los pastizales son aprovechados por la ganadería, tal un yacimiento cerámico tempra-
diversidad y riqueza ha promovido una próspera y trascendental his- no en los alrededores del lago
toria cultural, que para los fines de este ensayo se ha dividido en seis San Pablo, con una antigüedad
etapas: 1) Primeros habitantes, 2) La era indígena caranqui, 3) Ocu- de 2200 aC que corresponde
pación inca, 4) Vida colonial, 5) Etapa republicana y 6) Viajeros ilus- estilísticamente a la fase Val-
trados. divia VI (Gutiérrez, 2002: 47). Por
otra parte, evidencia agrícola
4.2.1.1 PRIMEROS HABITANTES para el valle Interandino se ha re-
gistrado con una antigüedad de
Los vestigios culturales de mayor antigüedad para la región al momen- mil años aC en La Chimba, al
to apuntan a 10 mil años aC, se localizan en la Hoya de Quito. Los somonte del Cayambe en su la-
hallazgos comprenden diversos utensilios de cazadores recolectores dera norte, es el sitio cerámico
de los que tenemos poca evidencia pues las continuas fases eruptivas más temprano de los Andes sep- ños. A pesar de que se pueden
han borrado muchas huellas. A esta ocupación se le conoce como El tentrionales, y es representativo advertir ciertas diferencias, de-
Inga. Los estudios identifican al Inga como un campamento taller, en del periodo Formativo en su últi- be aceptarse que el estilo cerá-
el que habitaron hordas que deambulaban por la región en busca de ma etapa (350 aC). 21 Según los tra- mico de La Chimba se relaciona
medios de subsistencia y materia prima para elaborar armas e instru- bajos de John S. Athens y Alan J. con la tradición estilística de
mentos. En las primeras excavaciones del sitio en la década de 1960 se Osborn, efectuados en las déca- Cotocollao, como se aprecia en
obtuvieron multitud de artefactos líticos, la mayoría de ellos de das de 1970 y 1980, La Chimba sus piezas y recipientes. En efec-
obsidiana, lo que revela que este sitio fue ocupado permanentemente tuvo sus inicios hace 2650 años, to, en La Chimba aparecen bote-
durante los primeros milenios de adaptación del hombre a los valles y desde entonces el lugar fue con- llas elaboradas en cerámica, de
páramos andinos. Se deduce que los cazadores de las tierras bajas tinuamente habitado hasta 1700 pico recto con asa cinta, simi-
subían a los yacimientos de obsidiana, lo que les obligaba a ocupar o 1950 antes del presente. Sus lares a las de Cotocollao, cuyos
cuevas y abrigos rocosos en el páramo. El Inga pertenece al período habitantes establecieron contac- antecedentes se remontan a la
Paleolítico o Paleoindio, que corresponde al estadio cultural de caza, to con varios pueblos de la cos- tradición Chorrera de la costa
pesca y recolección (Almeida, 1977). ta y de la sierra, manteniendo ín- ecuatoriana (fig. 94). Además,
Valdivia es la primera cultura alfarera de América, su origen se tima cercanía con la cultura existen materiales de esta tradi-
remonta 3500 aC en la costa occidental de Ecuador. Valdivia apare- Cotocollao, localizada en la me- ción cultural costeña, que junto
ce como una verdadera cultura del periodo Formativo, aunque con- seta de Quito y sus valles aleda- a la presencia de conchas mari-
serva un modo de producción de cazadores recolectores a los que
se incorpora paulatinamente una agricultura incipiente, que es tam-
bién de las más tempranas en el continente. En la región de nuestro 21
Para más datos sobre la temporalidad de la región, véase Scott y Burger (2003).

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


131

nas, sugieren que los contactos continuaron por largo tiempo. construcción de tolas (montículos), pirámides, y viviendas de planta
Con la erupción del volcán Pululagua 500 aC es posible que algunas circular tipo bohío. Profesaban un culto esencialmente lunar pero tam-
poblaciones del valle de Quito migraran al somonte del Cayambe. Para bién consideraban al Sol como un importante marcador de los ritmos
el periodo de Desarrollo Regional del año 350 aC al 500 dC las aldeas de la Tierra. La Luna era su madre, y el Sol, su padre.
de la región se organizaron en señoríos regidos por autoridades ema- Su principal actividad era la agricultura, seguida por la cacería y
nadas del sistema religioso, se percibe una mayor densidad demográfi- la crianza de animales domésticos. Al haber trascendido la organiza-
ca instalada en asentamientos urbanos, que actuaron como centros ción tribal, seguramente tenían una economía de subsistencia y prac-
de poder político y religioso que darían paso a la era de integración ticaban un comercio incipiente. Debemos destacar que estos seño-
caranqui. ríos contaban con una población numerosa y altamente organizada,
que había desarrollado un conocimiento sistemático en cuanto a
4.2.1.2 L A ERA INDÍGENA CARANQUI cuestiones agrícolas y de construcción, conocimiento que se ve re-
flejado en los diferentes complejos arqueológicos que eran centros
Durante el periodo de Integración (500-1500 dC) en la región se desta-
có la agricultura intensiva con sistemas de riego, la fundición de meta-
les y la estratificación social con la aparición de centros urbanos com-
plejos. Es necesario apuntar que el altiplano fue ocupado por seis
grandes grupos lingüístico-culturales: el pasto, el cara o caranqui, el
panzaleo, el puruhá, el cañarí y el palta. De ellos, el caranqui ocupó
amplias extensiones entre las que se encuentra el somonte del
Cayambe. Los caranqui fueron probablemente una frágil federación de
pueblos muy diversos, si bien parecen haber intentado una formación
a nivel de Estado en la época de la ocupación inca (Becker y Tutillo,
2009: 12). El nombre original de la civilización caranqui se ha perdido;
el término cara fue una aportación del historiador del siglo XVIII Juan
de Velasco. Lamentablemente, la breve pero intensa ocupación inca
borró todo resquicio de las culturas anteriores, la mayor parte de los
cronistas españoles no acertaron en diferenciar entre las tradiciones
incas y las locales.
Los caranqui pueden haber sido una confederación de varios gru-
pos que incluía a los cayambis y los otavalos; para Lozano (2007) los
cayambis tienen su simiente histórica en los caranquis con una anti-
güedad que se remonta a 3 mil años. En el altiplano, los cayambis con-
vivían con otros grupos tribales y señoríos en una organización social
homogénea, entre los que destacan: los cotacachi, los quitu-cara, los
perucho, los atuntaqui, los pimampiro, los otavalo, los yuruquí y los
cochasquí. Se piensa que estos señoríos mantenían relaciones de pa-
rentesco y que eran grupos matrilineales. Compartían rasgos cultu-
rales como una misma lengua, costumbres rituales, ceremoniales y fu- Figura 95. Emplazamientos arqueológicos alrededor del Cayambe según Ontaneda
nerarias; modo de vida, artesanía, vestuario y alimentación; (1998).

EL VOLCÁN CAYAMBE
132

poblacionales, religiosos, administrativos e vos; el enfrentamiento causó una mortandad


incluso militares como Pambamarca, Qui- exorbitante, tanto que las aguas se tiñeron
toloma, Puntachil y Cochasquí, que atende- de sangre, según se dice.
remos con más detalle en el apartado 4.2.3 Las fuentes históricas destacan 17 años de
Arqueoastronomía. luchas intensas entre incas y caranquis, esta
Para Lynn (2003: 20), los cayambis consti- expansión sucedió en tres momentos. El pri-
tuyeron el principal cacicazgo de la región y mero ocurrió con Tupac Yupanqui, el décimo
fueron inicialmente la resistencia contra los inca, quien inicia la expansión del Tahuan-
incas, desde la serie de fortalezas en las cimas tinsuyo, es decir, la expansión del Estado inca
de los cerros que circundan el territorio. El por cada uno de los suyu o rumbos: el Chinchay-
hecho de que los cayambis pudieron organi- suyo al norte; el Collasuyo al sur; el Antisuyo
zar y controlar una milicia local sugiere que al este y el Contisuyo al oeste. El segundo pe-
ellos conformaban el señorío más poderoso riodo ocurrió con Huayna Cápac, el undécimo
en el país Caranqui. y penúltimo emperador inca y el primero no
cuzqueño, pues nació en Tomebamba, ciudad
4.2.1.3 O CUPACIÓN INCA fundada por Tupac Yupanqui, su padre. El úl-
timo periodo tuvo lugar con Atahualpa, hijo
Los incas fueron un fenómeno intrusivo tar- de Huayna Cápac, considerado por algunos
dío en la región. Empezaron su expansión des- como el último gobernante inca.
de el siglo xv. Algunos historiadores señalan La lucha entre incas y caranquis terminó
que la importancia que tenía el territorio de con una alianza matrimonial entre el inca
nuestra atención residía en dos aspectos fun- Huayna Cápac y una mujer caranqui llamada
damentales para los incas: uno económico-po- Quilango Túpac Pall. Según algunas versiones,
lítico y el otro mítico-religioso. El primero se Atahualpa pudo haber nacido de esta unión.
refiere a que estas tierras son fértiles y abun- Este sería el motivo por el que Atahualpa, aun-
dantes en minerales. El otro, se sustenta en la que perteneciente a la nobleza inca, sea con-
idea de que para los incas esta era la tierra Figura. 96. Dibujo 131 de la Primera nueva coronica y siderado símbolo nacionalista para algunos
gobierno (1615), de Guamán Poma de Ayala, donde se
donde estaba el asiento del Sol recto, por su- ecuatorianos (Becker y Tutillo, 2009: 22). Se
ilustra las andas del Ynga para la guerra en la conquis-
ceder el paso cenital del astro durante el equi- ta de los cayambis. desconoce el lugar exacto donde nació
noccio, según lo refiere Garcilaso de la Vega Atahualpa, de hecho resulta un tema polémi-
para el siglo XVII, como ya lo hemos citado en co, pues en torno a él gira incluso la justifica-
la página 19. Esta alianza fue liderada por Nazacota Puen- ción y legitimación del traslado del centro de
Con la llegada de los incas a territorio ecua- to, un caudillo indígena de la región de Ca- poder político y religioso de Cuzco a Quito.
toriano, los señoríos localizados en el alti- yambe, quien murió en la batalla de Yagua- Algunos, como Guamán Poma y Garcilaso de
plano formaron alianzas presentando férrea rcocha “lago de sangre”, de acuerdo con el la Vega, dejan entrever que Atahualpa debió
resistencia (fig. 96). Las alianzas más repre- cronista fray Martín de Murúa (1616), Huayna haber nacido en Perú. Otros argumentan que
sentativas se formaron entre los cayambis, Cápac ordenó que 40 mil guerreros del ejérci- nació en alguna región cercana a Quito, pues
caranquis, cochasquis y otavalos, que duran- to inca rodearan la laguna, y que 30 mil de su madre era, como ya señalamos, una prince-
te un largo periodo permanecieron unidos. ellos arremetieran contra los soldados nati- sa caranqui.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


133

[Atahualpa]… fue a la Provincia de los mantelaron para emplearlos en sus construc-


cañaris a persuadir a aquella gente, que fuese ciones. De hecho, el periodo inca en Cayambe
de su parte, dando a entender que no pensaba tuvo un claro carácter de ocupación militar y
dar a su hermano pesadumbre, sino hacer otro no lograron, a diferencia de los españoles, ins-
Cuzco en el Quito, donde nació (Zúñiga, taurar sus prácticas rituales y cultura. Muchas
1945:165). de las prácticas religiosas y de las estructuras
de autoridad que aparecen de modo habitual
Reimers (1990), basándose en la Primera Parte en cualquier parte de los Andes, apenas tie-
de la crónica de Cieza de León (cap. XXXVIII) de- nen importancia o no existen en Cayambe
termina que Atahualpa era caranquí. Es inte- (Becker y Tutillo, 2009: 22-23).
resante como años más tarde, los caranquis y
cayambis, entre otros, se sumaron al ejército 4.2.1.4 V IDA COLONIAL
de Atahualpa, que pelearía contra su herma-
no Huáscar por el control político del Tahuan- En julio de 1534, después de la captura y eje-
tinsuyo. El poder de Atahualpa aún no se ha- cución de Atahualpa en Cajamarca, Sebastián
bía consolidado, cuando en Cajamarca, el 16 de Benalcázar, un lugarteniente del ejército de
de noviembre de 1532, se encontró con Fran- Pizarro, se dirigió hacia el norte y comenzó la
cisco Pizarro (fig. 97). conquista española del territorio caranqui. El
Uno de los estragos de la ocupación inca cacique de Cayambe, Jerónimo Puento, nieto
más evidentes hasta nuestros días es el éxodo de Nasacota Puento, al enterarse de la muerte
forzado que sufrieron miles de personas. Los de 12 mil mujeres y niños en Quinche y de la
incas trasladaron al territorio caranqui a co- destrucción de Puntachil en busca de los te-
lonos llamados mitmaes, que eran súbditos soros perdidos de Atahualpa, negoció con los
incas leales, con la intención de aleccionar a españoles la conversión al cristianismo de su
la indómita población y enseñarles el idioma pueblo y el pago de tributos al rey de España a
quechua, la religión oficial del Estado y para través de una encomienda. Los caranquis poco
Figura 97. Dibujo 154, de la Primera nueva coronica i
incorporarlos al imperio inca. Los incas tras- bven gobierno (1615), de Guamán Poma de Ayala, don- pudieron hacer, ya habían sido debilitados por
ladaron igualmente a millares de caranquis al de se ilustra a don Diego de Almagro, don Francisco los incas, el éxodo masificado los había alte-
corazón del imperio, donde serían asimilados Pizarro y fray Vicente de Valverde, de rodillas ante rado en su composición social; por otra parte,
y educados para ser súbditos leales. Waldernar Atahualpa en Cajamarca, mientras que el indio Felipillo los españoles hábilmente incorporaron a las
ejerce de intérprete.
Espinosa describe esta situación como un te- elites indígenas para mantenerlas en posicio-
rrible exilio que erradicó a toda la población nes privilegiadas a través de alianzas con los
de Cayambe, dejando sólo a los muy viejos y a haber sido mitmaes y sólo un tercio, de extrac- intereses españoles. Los españoles manipula-
los muy jóvenes. Aunque no hay datos segu- ción caranqui. Como los incas ocuparon este ron con éxito las estructuras locales elevan-
ros, los incas llevaron a la región caranqui a territorio por un periodo reducido, muchas do a los caciques en una posición privilegia-
unos 20 mil mitmaes. Según un estudio sobre instituciones incas nunca llegaron a formar da, en detrimento de la comunidad campesina.
los apellidos de trabajadores indígenas en la parte del modo de vida caranqui. Los incas Por ejemplo, Quimbia Puento, cacique de los
zona sur del cantón de Cayambe en 1685, casi construyeron fuertes, templos y tambos en la cayambis que había luchado contra los incas,
dos tercios de la población indígena pueden región que posteriormente los españoles des- se alió rápidamente con los españoles. En

EL VOLCÁN CAYAMBE
134

1578, su hijo Gerónimo Puento or- tón de Cayambe como parte del unos fueron encarcelados, otros de explotación, que ahora era ejer-
ganizó un ejército de 200 cayam- corregimiento de Otavalo, dentro castigados con trabajos forzados cido por un teniente político,24 los
bis y se unió a las fuerzas con don de la Audiencia de Quito y bajo el y sufriendo el castigo del látigo hacendados y el párroco de la igle-
Francisco Atahualpa (hijo de Virreinato de Perú. Durante todo (ibidem, 29-30). Esta era la vida sia. En 1860, Friedrich Hassaurek
Atahualpa) para ayudar a dominar el periodo colonial la población colonial en Cayambe. (1993:174) escribía:
un levantamiento indígena en la indígena de Cayambe fue explota-
selva oriental (ibidem, p. 27). da, vivían en condiciones deplo- 4.2.1.5 E TAPA REPUBLICANA los indios sufren tres clases de
La encomienda en Cayambe fue rables, donde unos cuantos espa- opresores cotidianos: el gobierno,
de corta permanencia, surgió en ñoles mandaban a centenares de El diez de agosto de 1809 en Quito los hacendados y los curas; estos
1535 y para finales del siglo XVI , miles de indígenas. Los abusos lle- se dio el primer grito de indepen- últimos, sin embargo, se dice son
Martín de Arisaga devolvió la en- varon a una serie de revueltas con- dencia de toda Hispanoamérica. El los peores de todos.25
comienda al rey a cambio de 100 tra la confiscación de tierras, el régimen colonial comenzaba su
caballerizas unas 1100 ha en Gua- pago de tributos, los trabajos for- fin por todo el continente, habían Cuando Friedrich Hassaurek
chalá. Para la segunda mitad del zados y censos. sido 300 años de ocupación. Para –quien era ministro de Abraham
siglo XVII, encontramos en la región En 1777, la Iglesia católica ha- 1824, Cayambe era una parroquia Lincoln—, visitó las haciendas de
la coexistencia de estancias, en su bía ordenado un censo a la Au- de la provincia de Imbabura, den- Cayambe durante las fiestas de san
mayor parte como propiedad de diencia de Quito, y los indígenas tro de lo que en su momento fue Juan, describió a la ciudad como
las órdenes religiosas,22 con ejidos temían, fundados en experiencias la Gran Colombia.23 Cuando Ecua- un lugar frío, inclemente, hosco y
y tierras de pastos pertenecientes anteriores, que el censo termina- dor se separó en 1830, Cayambe sucio, con estrechas callejuelas y
al cabildo de Quito. Ejemplos ra aumentando el pago de tribu- fue anexado al cantón de Quito casuchas de tierra o adobe. Las
ilustrativos son las 40 caballerías tos. La revuelta empezó en Cota- antes de establecerse como inde- anotaciones son poco afortuna-
del Ejido de la Ciénega, con tres cachi, se extendió a Otavalo, y así pendiente en 1883. Las condicio- das, pues describen a indígenas
pedazos destinados al pastoreo de llegó a Cayambe entre el 14 y el 15 nes de vida para los comunes de que viven endeudados:
ovejas ubicadas al norte del río de noviembre. Los cayambis des- Cayambe no cambiaron en mucho
de Pesillo y contiguas a Tupigachi; truyeron algunas haciendas, in- con la independencia. Los indíge- realmente suponen que será po-
y las 50 caballerías del Ejido de las cendiaron talleres y casas. nas continuaron bajo un régimen sible en el futuro mantener a
Ovejas, cercanas al pueblo de Cuando los rebeldes entraron a Ca- miles de seres humanos, de cuyo
Cayambe, situadas entre el río yambe desfilaron por la plaza cen- trabajo, duro y mal pagado, vive
Blanco y el río de las Ovejas (Mo- tral, mientras que sus opresores se 23
Territorialmente estaba conformada todo el país, en un estado de la-
reno y Borchart, 2009: 8). refugiaban en la iglesia, cuando por las actuales repúblicas de Colom- mentable servidumbre y opresión
bia, Venezuela, Ecuador, Panamá y pe-
En 1653 los españoles incorpo- los cayambis la atacaron mataron queñas partes del territorio que corres-
(ibidem, 1993: 171).
raron lo que hoy es la provincia a varios europeos, finalmente, a la ponde a Costa Rica, Perú, Brasil, Guyana
de Pichincha, incluyendo el can- llegada de tropas de Quito los sol- y Nicaragua. Es interesante mencionar De este escenario surge la novela
que la Gran Colombia hizo frontera con
dados mataron a decenas de indí- el Primer Imperio Mexicano de 1821 a Huasipungo, de Jorge Icaza, donde
genas. 1823, antes de que se separaran de la
22 Para el 8 de diciembre, Joseph nación mexicana los territorios centro-
Las más rentables fueron las compañías americanos.
jesuitas y las estancias dominicas de Diguja, presidente de la Audiencia
24 24
Santo Domingo y Paquiestancia, así tam- Autoridad civil que tenía diversas facul- La Iglesia poseía haciendas al norte del
bién las mercedarias de La Chimba,
de Quito, viajó a Cayambe, para tades, por lo general, un mestizo era el Cayambe, para 1908 mereció la expropia-
Pesillo, Cariaco, Moyurco y Pisambilla. juzgar a los líderes de la revuelta, encargado de la administración pública. ción de estas tierras.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


135

salía del aislamiento con el ferrocarril; posteriormente, con una carre-


tera que después sería la autopista Panamericana; con estas vías se
integró a la esfera nacional. Por estos caminos también llegaron
innovadoras ideas, como la ideología marxista, que encuentra claro
que el problema del indio es un problema de tierras que requiere una
reforma agraria; se buscaba un socialismo indio-americano surgido de
la cultura y lenguas andinas. Los indios que estaban excluidos del
ejercicio formal del poder político, con ayuda de la izquierda empeza-
ron a insertarse en el discurso político,27 véase el estudio detallado
Una revolución comunista indígena: movimientos de protesta rurales en
Cayambe, de Becker (1999), y de Becker y Tutillo (2009), Historia agraria
y social de Cayambe.
Sobre este entorno de modernidad llegamos al siglo XXI, encontra-
mos que la movilización de las organizaciones indígenas actualmente
se sustenta en la identidad y la cosmología ancestral, estos son los
soportes de la lucha de la cual fuimos testigos el 28 de septiembre de
2009, con el paro indígena en protesta por la Ley de Aguas, que cerró
las principales carreteras de la región por un par de días. Hoy Cayambe
cuenta con 200 comunidades rurales que representan 70% de la pobla-
ción, la vida democrática es evidente, nuevos actores se suman al cam-
Figura 98. La Hacienda de Guachalá fue el centro de operaciones de la Expedición po político con la incorporación de miles de inmigrantes que llegan
0° / 0°C. Fotografía de Gabriela Martínez.
por la producción de flores. Actualmente, la principal actividad eco-
nómica de Cayambe es la floricultura, de hecho, las rosas que se culti-
se narra la situación de peonaje que por deudas se vivía.26 Según Becker van y exportan a Europa y Estados Unidos son consideradas las más
y Tutillo (2009: 35) los indígenas vivieron durante todo el siglo XIX y bellas del mundo.
mediados del XX en la más absoluta pobreza y en la marginalidad polí- En tan sólo un siglo –el XX–, las haciendas como Pesillo pasaron de
tica, enfrentando años de incomprensión cultural y racismo por parte ser propiedad de la Iglesia a manos del Estado, luego devinieron en
de la sociedad dominante. cooperativas y, finalmente, quedaron en manos de los trabajadores
Cada vez con más fuerza, durante el siglo XIX en Ecuador se sucedie- agrícolas. Antes, haciendas privadas como Guachalá (fig. 98) eran un
ron las revueltas indígenas contra el capitalismo liberal que intentaba mundo en sí mismo; pero la fuerza de movilizaciones indígenas y el
desde sus propios métodos modernizar al país. Célebre es en Cayambe apoyo de hacendados modernos como la familia Bonifaz, abrieron paso
el caso del asesinato del terrateniente Carlos Klinger y la rebelión que a nuevas formas de trabajo como la floricultura. Recientemente –mar-
le siguió, que acabó en la ejecución de 40 rebeldes. Para 1928, Cayambe zo de 2010– 375 hectáreas de la Hacienda Zuleta fueron vendidas a 120
familias indígenas de Cayambe en condiciones de crédito favorables,
según el Banco Nacional de Fomento. Alguien dijo durante el evento:
26
Fragmentos del libro fueron publicados en inglés en la Unión Soviética, donde fueron
recibidos con entusiasmo. Tiempo después Icaza fue nombrado embajador ecuatoriano
en ese país. La primera edición completa de Huasipungo fue traducida al inglés en 1962,
y fue publicada posteriormente en Inglaterra. Una traducción fue publicada en EE. UU . 27
Por ejemplo, las acciones campesinas permitieron que el líder comunista local Rubén
con el título de The Villagers. Actualmente ha sido traducida a más de 40 idiomas. Rodríguez fuera electo al consejo municipal de Cayambe.

EL VOLCÁN CAYAMBE
136

Estas tierras fueron cultivadas en día contribuyen a crear una


desde hace décadas por las fami- imagen, a hacer una mitología y a
lias, en calidad de huasipungue- forjar una historia, donde se pue-
ras,28 pero ahora, son propietarias. den encontrar resquicios para una
identidad. Bien apunta el poeta
4.2.1.6 VIAJEROS ILUSTRADOS Andrés Henestrosa: 29

Por andar y ver, viajeros, explora- Porque siempre fue verdad que
dores, artistas y científicos reco- de fuera ha de venir quien vea
rrieron con álgido interés las tie- aquello que nosotros, por sernos
rras americanas desde el siglo XVIII, cercano y cotidiano, no vemos.
motivados ya no por la conquista,
sino por el conocimiento, recorrie- Para verificar si era verdad tanta
ron y exploraron conducidos por belleza y maravilla de las tierras
guías locales espacios geográficos americanas, muchos llegaron a los
inexplorados. Exóticos les pare- Andes equinocciales. Sin duda, el
cían estos territorios, en los cua- más afamado de todos es Alexan-
les, estaban seguros, se guardaban der von Humboldt, para muchos,
profundos secretos de la Natura- padre de la geografía moderna. Na-
leza. De los viajeros ilustrados he- turista de polivalencia extraordi-
mos heredado sus observaciones, naria y de una curiosidad sin lími-
pinturas y relatos. Se puede con- tes, quería describir el mundo
sultar una amplia bibliografía en físico en su totalidad, esta visión
diversos idiomas. Cada visitante de conjunto le permitió elaborar
oriundo de una cultura y tiempo cuadros comparativos que deja-
distinto observó con asombro ras- ron profunda huella, como los tan
gos que para los locales eran recurridos esquemas fitogeográfi-
inadvertidos, tanto cualidades cos, donde la asociación entre cli-
positivas como negativas. Los ex- mas, vegetación y altitudes cam-
tranjeros las percibieron con ma- biaron la visión que se tenía de las
yor claridad y al relatarlas en sus montañas tropicales (fig. 99).
escritos aportaron una riqueza Humboldt llegó a Quito en
cognoscitiva. Por eso los “otros”, 1802, fue recibido por los nobles
los viajeros, artistas y científicos, locales, entre ellos, la familia de
con sus luces y sus sombras, hoy Figura 99. Muy cercanas aparecen las ciudades de Quito y México en esta imagen, Juan Pío Montúfar, marqués
se encuentran acompañadas por sus montañas emblemáticas. Ilustración del siglo
XIX , según los trabajos de Humboldt, Bonpland y Pentlandl. Se destacan niveles
ecológicos que hoy denominamos pisos altitudinales térmicos. Geographical
28
Se hace referencia a la novela Huasipungo, distribution of indigenous vegetation, publicada por William Blackwood & Sons,
de Jorge Icaza. Ediburgo, 1854. 29
En Iturriaga, 1988, p. 9.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


137

Figura 100. Litografía de Louis Bouquet, en el Vues des Cordillères et monuments des peuples indigènes de l’Amérique, placa 42.

EL VOLCÁN CAYAMBE
138

de Selva Alegre. Junto con el hi- ments des peuples indigènes de los contornos; su estilo narrativo, gia fue seguir la ruta de Humboldt
jo de éste, realizó varias ascensio- l’Amérique, publicación con la que a diferencia de los paisajes des- y encontrar lugares ideales para
nes a los Andes ecuatorianos, en- logró situar la naturaleza y la his- criptivos de Humboldt, expresa- montar su caballete, se dio cuenta
tre ellos al Chimborazo, hazaña toria de América en el centro mis- ban su entusiasmo por los volca- de que las ilustraciones de Hum-
que le diera renombre mundial.30 mo del debate intelectual y cien- nes. Apreciar sus pinturas nos boldt no eran muy reales, se trata-
Recorrió en ocho meses en com- tífico europeo (fig. 100). invita a considerar que la plástica ba de superficies desiguales, bo-
pañía de Carlos Montúfar, Aimé Según Moreno y Borchart (2009) por sí sola es suficiente para expre- cetos apresurados que fueron
Bonpland y asistentes, práctica- es posible determinar que el bo- sar de manera condensada, el sen- interpretados por artistas en Pa-
mente toda la sierra de los Andes ceto fue dibujado desde la peque- timiento de la naturaleza que la rís, esas interpretaciones carecían
equinocciales, realizando medi- ña planicie de la Hacienda Gua- ciencia con su discurso objetivo de detalles. El reto de Church era
ciones en las montañas y recolec- chalá, perteneciente entonces a y lineal es incapaz de transmitir dedicar atención exclusiva a esos
tando plantas. Para Humboldt, el Ramón Borja y Freyre (Bonifaz, en toda su subjetividad y su rique- paisajes. Para el caso del Cayambe,
Cayambe no pasó desapercibido, 1970: 343-344), donde actualmen- za. Church fue un experto en pin- tomó otra perspectiva, esto le
su visión estética le permitió ase- te se encuentra una esfera terres- tar la naturaleza desmesurada y permitió mostrar segmentos de un
verar: es la más bella y majestuosa tre, como monumento que señala efervescente de los grandes Andes río, un lago, plantas tropicales y
cúspide de cuantas rodean cubier- el paso de la línea equinoccial. septentrionales; las montañas lo hasta una cualidad misteriosa me-
tas de nieves perpetuas la ciudad Desde ese lugar son visibles la transportaron de inmediato a la diante la colocación de un des-
de Quito.31 A este espectáculo dig- cumbre máxima y el Viejo Cayam- contemplación y al pensamiento cuidado y antiguo monumento,
no de admiración por su encanto, be, conocido también como cerro propio de una concepción román- ¿acaso un hito geográfico propio
se añade el hecho, según Hum- Yanaurco. En primer plano, delan- tica de la naturaleza. Su estrate- de la latitud equinoccial? (fig. 101).
boldt, que el ecuador atraviesa la te de la llanura, tres personajes
cima del Cayambe, que puede con- avanzan: Humboldt, Bonpland y
siderarse como uno de esos mo- un acompañante indígena vestido
numentos eternos por medio de los con una cushma; les preceden tres
cuales ha señalado la Naturaleza las sujetos que descienden ya hacia
grandes divisiones del globo terres- la planicie, mientras dos personas
tre. Cita con la que iniciamos este parece que se acercan a unas vi-
volumen, y que es el pie de ima- viendas. Estos datos comproba-
gen que acompaña la vista del vol- rían que Humboldt y Bonpland si-
cán Cayambe que aparece en su guieron la ruta oriental del Camino
obra Vues des Cordillères et monu- Real que, desde Ibarra y Otavalo,
pasaba por Cayambe y Guachalá,
antes de llegar a Quito.
30
El explorador recordó siempre con gran Los viajes de exploración y cien-
cariño este episodio y clamó hasta cerca cia de Humboldt atrajeron la crea-
de su muerte que: De todos los mortales tividad artística de Edwin Frederic
yo era el único que había alcanzado lo
más alto del mundo (Anhelzer, 2008:48). Church, quien en 1853 visitó la re-
31 Humboldt, 1878: 77; 2004: 306 cit. por
gión. La obra de Church se centró Figura 101. Cayambe, Frederic Edwin Church, 1858, aceite sobre canvas, 76.2 x
Moreno y Borchart, 2009: 5. en los contrastes de colores y en 121.9, The New York Historical Society.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


139

Figura 102. Volcán Cayambe al atardecer,


Jorge Obregón, 2009, óleo sobre lino, 50
× 90 cm. Colección de Luis Angoitia Be-
cerra.

Otra versión de Church para el


Cayambe se encuentra en el Mu-
seo de Bellas Artes de Boston,
nuestra un lago con más claridad
pero el monumento no aparece y
la fecha de su realización es incier-
ta (Baron, 2005).
Abriendo un paréntesis en este
espacio dedicado a la pintura, re-
saltamos que la Expedición 0° /
0°C contó con un artista plástico:
Jorge Obregón. Discípulo de la es-
cuela paisajista mexicana quiso
acompañar y ascender hasta las
nieves para encontrar junto con
sus colegas exploradores e inves-
tigadores la diversidad del am-
biente andino. Obregón acepto el
desafío de mostrar al Cayambe (fig.
102) en su resplandor. En los cin-
co oleos realizados nos presenta
un paisaje que se abstrae de lo que
se ve, que reclama la sensibilidad las inclemencias de la montaña, y Ésta sería la primera subida a la abundante fuente de información.
y el sentido de la proporción en la en compañía de los fotógrafos de cumbre en la historia. Su aproxi- Describió a Antonio Jarrín de Es-
manera de componer una escena. la expedición que ilustran esta mación fue de dos días por una pinosa, el jefe político de Cayambe
La luz es, en buena medida, el per- obra, juntos abrieron una venta- ruta de grandes paisajes desde y a un rico hacendado que decía
sonaje principal de sus composi- na a los Andes equinocciales, para Quito a Cayambe. Pernoctó en la ser propietario de los volcanes
ciones, pues como afirmaba Hum- mostrarnos un paisaje magnífico hacienda de Guachalá, donde re- Cayambe, Saraurco y de 5 mil ca-
boldt en consonancia con Goethe desde el lente de una cámara y por cogió 40 especies de insectos y es- bezas de ganado (Becker y Tutillo,
sólo el arte y la pintura –en parti- los trazos de una pintura. carabajos, 11 de los cuales eran 2009: 37-38). Los montañistas ini-
cular– pueden dar cuenta de los pro- Regresando al tema que nos desconocidos en ese entonces ciaron su ascenso el 30 de marzo
fundos sentimientos que emanan de ocupa, en marzo de 1880, el explo- para la ciencia. Whymper quedó por la hacienda de Chuarpongo,
un paisaje. 32 Sobreponiéndose a rador y alpinista inglés Edward muy impresionado por las tradi- durmiendo en un incómodo cam-
Whymper viajó a Cayambe con la ciones y estilos de vida de la elite po de papas antes de subir al vol-
32
En García y Francou (2009: 49). intención de escalar el nevado. de Cayambe, sus memorias son una cán, lo acompañaban Antonio

EL VOLCÁN CAYAMBE
140

aclarar con la gente del Hato, de Guaña-Moya, que tomaba altura


que la Expedición 0° / 0°C no por el sur, partiendo de Sayaro,
tenía intereses en la explotación para continuar por La Dormida, y
mineral del Cayambe, afortunada- luego a Laguna Blanca (hoy desa-
mente el siempre estar acompaña- parecida), prosiguiendo a la Grieta
dos de guías locales aclaró cual- y de ahí, a la cima. En la actuali-
quier suspicacia. dad ambas rutas están práctica-
En la reseña histórica prepara- mente olvidadas (ibidem).
da por Guaña (2007) del Nevado Los andinistas contemporá-
Cayambe, para la primera mitad neos, que se cuentan por decenas
del siglo XX , se tienen dos regis- y muy bien equipados, a diferen-
tros de ascensos relevantes, el del cia de siglos anteriores (fig. 104),
alemán Wilfrid Kuehm, en 1939, y para su ascenso al Cayambe siguen
posteriormente en 1940 el de la ruta que parte del refugio Rua-
James Engle, quien fue acompa- les-Oleas-Berge que se encuentra
ñado por el cayambeño Segundo en la ladera occidental a 4 600 m/nm,
Figura 103. Mapa de Edward Whymper que ilustra sus rutas de ascenso para los
volcanes Cayambe y Saraurco en 1880.
Gavino Mera Freire. Desde media- ahí se llega en vehículo. Desde el
dos del siglo xx se ha intensifica- refugio se puede contemplar y
do el deporte del andinismo, y acceder fácilmente al glaciar Her-
Jarrín como guía, dos montañistas Cayambe como un lugar de no gran cada vez más personas se entre- moso, lugar ideal para realizar
italianos Juan Antonio Carrel y tamaño, somnoliento y en ruinas, gan a la hazaña de ascender has- prácticas de escalada en hielo. La
Luis Carrel (tío y sobrino), y los describe al volcán como una mon- ta la cima. En sus primeros tiem- ascensión del Cayambe que pasa
ecuatorianos Verita y Cevallos. Al taña majestuosa que se eleva has- pos la ruta era por el norte, aún por Laguna Verde y las Puntas Ja-
día siguiente tomaron ruta por la ta el cielo sobre las sombrías ca- no existía el albergue Ruales- rrín, no requiere mayores exigen-
vertiente oriental, pasaron por el lles de la población. Franck, al Oleas-Berge, así que partiendo del cias técnicas, a no ser que se quie-
río Blanco, ganando altura hasta igual que Hassaurek, describe la pueblo de Olmedo se empezaba a ra llegar a la cumbre Oriental de
llegar a las hoy denominadas Pun- vida de los indígenas como silen- subir por la hacienda de La Chim- 5 487 m/nm, de cualquier forma es
tas Jarrín, y finalmente alcanzaron ciosos y abstraídos, de tempera- ba, en donde se contrataban mu- obligación ser sumamente cuida-
la cima días después, que a partir mento flemático, melancólicos y las que conducían a los andinistas doso con las innumerables grietas,
de entonces algunos denominan reservados, que habían adquirido hasta Chiri Dormida a 4237 m/nm, de especialmente al principio y al fi-
Espinosa (fig. 103). una desconfianza natural a los ex- ahí continuaban por El Arenal, nal de la ascensión. La ruta princi-
Posterior a la hazaña de Whym- traños debido a los siglos de pri- llegando poco después al Abra pal transcurre por un terreno de
per no hay más relatos de ascen- vaciones desde la llegada de los Norte, y entonces accedían a las poca inclinación y sólo en su par-
so. Para 1910, Harry Franck, un tro- españoles. Este sentimiento aún Puntas Jarrín a 5 100 m/nm, para pos- te final ve aumentada su pendien-
tamundos de profesión recorrió persiste, y no faltan las descon- teriormente llegar a la cumbre. te y el número de grietas y seracs
los Andes, dibujó el vecindario de fianzas como las que tuvimos que Otra variante antigua es la de Arias- que se deben sortear.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


141

4.2.2 E L CULTO A LA MONTAÑA su verdadero nombre. De tal suer-


te que la voz urcu en lengua qui-
No tengo duda en considerar al chua se traduce como macho de
volcán Cayambe como la matriz los animales, cerro o monte. 33 Una
del grupo étnico cayambi. Esta propuesta que parece arraigada en
montaña es su lugar mítico de ori- la región, pues para el guía de nues-
gen y, por tanto, su divinidad an- tra expedición, Luis Lucero, y para
cestral. La alteración cultural que todos sus vecinos de la comuni-
sufrieron los cayambis por parte dad del Hato, el volcán es masculi-
de los incas, españoles y terrate- no, de mediana edad y muy tem-
nientes hace difícil recuperar su peramental.
memoria histórica. No quedan Si bien es cierto que durante el
huellas materiales de ídolos, tem- ascenso no encontramos eviden-
plos o ceremonias en honor a la cia arqueológica alguna como su-
montaña. Es necesaria una inves- cede en los Andes centrales o en
tigación arqueológica y etno- Mesoamérica,34 sí nos enfrentamos
histórica para ahondar sobre su con un hecho relevante: el Ca-
cosmovisión. La destrucción cons- yambe da nombre como pocas
ciente y sistemática de la cual fue montañas lo pueden hacer en el
objeto la cultura ancestral está continente. En efecto, así se auto-
bien descrita en esta cita del clé- Figura 104. Montañistas del siglo XIX: David Beltrán, Jean-Antonie Carrel y Francisco denomina un grupo étnico, una
rigo del siglo XVI, Cristóbal de Al- Javier Campaña, en la cima del Chimborazo, el 3 de julio de 1880. Grabado de provincia y una ciudad. Es un
bornoz (1989): Whymper (García y Bernard, 2004: 34). arraigo tan fuerte que se ha resis-
tido históricamente al cambio. En
…todas las más guacas Sin embargo, aún es posible re- del Cotacachi (Moreno Yánez, 1884, a la entidad se le puso por
questan en los cer ros y en lla- cuperar resquicios de narraciones 2007: 103-110). En estas cuestiones nombre Cantón Bolívar, eso duró
nos tienen alrededor de sy unas ancestrales. Para los otavaleños se de género, se hace innegable la tan sólo nueve meses, pues a pedi-
señales que se llaman seques o cuenta que el Tayta Imbabura tie- humanización de la naturaleza do de sus pobladores se restituyó
cachaves que son señales de los ne amores no exentos de peleas desde una estructura primordial el denominativo ancestral, según
ofrecimientos que a las tales con su esposa la montaña Co- que sirve para transformar el es-
guacas hazian y tienen sus nom- tacachi; para los cayambis, es La pacio geográfico en signos inteli-
bres en nombre cada señal de Cayambe la verdadera esposa del gibles y asimilables para la comu- 33
Cfr. el Vocabulario de la lengua general
el que alli ofreció hijo o carne- Tayta Imbabura, por lo que el cer- nidad. Para la tradición inca, esta de todo el Perú llamada Lengua Quichua
o del Inca, de 1608 (González Holguín,
ro de oro o plata o de mollo y cano cerro Cusín se preocupa de montaña sería masculina, así le 1989: 357).
hallaran los ofrecimientos en ocultar a La Cayambe al vástago parece a Moreno y Borchart (2009: 34
Desde finales del siglo pasado se cuenta
los tales seques o cachavis es de las relaciones adúlteras entre 7) al apuntar que los académicos con una amplia bibliografía sobre la ar-
necesario destruyrlos juntamen- el Imbabura y la Cotacachi: el pe- franceses llamaron equivocada- queología de alta montaña en América,
se puede citar, p. e. Schobinger, 1998;
te con las guacas y con todo queño monte Yanaurcu, que se mente a la montaña Cayambur, en Reinhar, 1994; Ceruti, 1997; Vitry, 1998;
cuidado. eleva sobre los páramos al norte lugar de Cayambe-Urcu, que sería Iwaniszewski, 1986, y Montero, 1988.

EL VOLCÁN CAYAMBE
142

consta en la Ley de División Territorial del 17 de abril de ese año. De he- bezares para el aumento del y finalmente para todas sus cosas
cho, la toponimia y gentilicio de los grupos del Altiplano ecuatoriano tienen ydolos particulares.
está determinado por los nombres asignados a los colosos de piedra, en
su mayoría, de fonética preincaica. Fray José María Vargas (1953: 23), hace Entendemos que los antiguos pobladores alrededor del Cayambe
referencia a este hecho: se establecieron esencialmente al somonte en las laderas norte y
oeste, guardando una estrecha relación con sus principales recur-
Las poblaciones indígenas se extendían sobre el dorso interandino y toma- sos y elementos como lagunas, ríos, páramos y bosques. Esta rela-
ban su nombre del monte más cercano que las dominaba. Hoy ese nombre ción, para Becker y Tutillo (2009: 28) se sacralizó, y es evidente
designa, a la vez, el monte y la provincia. De norte a sur se escalona la hasta nuestros días para el solsticio de junio, durante la cosecha,
avenida de volcanes bautizando a las provincias de Imbabura, Cayambe, cuando se le rinde culto al Sol, que siguiendo la tradición inca es la
Pichincha y Cotopaxi… solemnidad del Inty Raymi. A Friedrich Hassaurek (1993) en 1860, le
impresionó la indumentaria y coreografía de la fiesta de san Juan,
Es posible que desde épocas tempranas, a finales del periodo Formático celebrada por los indios. Actualmente esta fiesta se promociona
500 aC el Cayambe fuera ya venerado, ocupando un papel central en la turísticamente como la Fiesta del Sol en la Mitad del Mundo.
cosmología y religión de las sociedades asentadas en sus alrededores, y Es relevante que la solemnidad del solsticio de junio, con su
aunque no tenemos evidencias materiales como ya señalamos, se asume consabido culto al Sol pudiera estar relacionada con la montaña, y
que las creencias y prácticas relacionadas con la veneración de monta- de esta manera es coherente la denominación para el volcán como
ñas tienen raíces temporales profundas, remontándose siglos antes de la Cayamburu, traducido como Montaña del Sol, de la lengua cayanqui-
presencia inca, aunque las formas de esta veneración en la región andina caranqui: cayan, sol; y buru, montaña. A diferencia de los casos inca
aún no son bien conocidas (Leoni, 2005). y mesoamericano, donde la montaña en sus cimas y laderas guarda
En relación con los lugares sagrados del pueblo Cayambi, Lozano (2007: adoratorios, enterramientos y ofrendas, parece ser que para los
72) afirma que el dios de las montañas se llama A-Chili. El Cayambe era un cayambis, el culto a la montaña no está circunscrito a adoratorios,
monte sagrado, punto cardinal del viento, tumba de dioses y objeto de parece que se diluye por contornos fluctuantes que se dispersan
culto, donde se realizaban peregrinaciones de pueblos próximos y leja- entre los valles y se inserta en la lejanía del horizonte; aparentemen-
nos que venían a rendirle adoración, junto con el Sol. Se sustenta en una te, el pilar espiritual no está en la cúspide, sino que encuentra múl-
cita de 1617 que consta en los archivos notariales del Fondo Jacinto Jijón y tiples ejes que se dispersan por las aldeas campesinas del somonte.
Caamaño, que se conserva en el Archivo Histórico del Banco Central en Así pues, la montaña está más allá del espacio que ocupa, y arreme-
Quito (AHBC/Q FJC), ff. 22r: te con su prominencia en el imaginario colectivo forjando una iden-
tidad colectiva y una integración regional que fortalece. Es en este
Adoran los indios dos géneros de ydolos unos fijos como son cerros y sentido, que el Cayambe ha funcionado como un escenario metafó-
peñascos y cumbres altas de la sierra nevada, y al sol, luna y a las rico que ha marcado los confines de lo mundano y lo sagrado, y ha
estrellas las siete cabrillas y las tres Marías y al trueno y rayo y a la mar podido trascender hasta nuestros días en diversas formas, como
a los manantiales, otros son móviles de las cuales unos tienen en sus un artefacto cultural que ha demostrado un alto valor utilitario.
chacaras y labranzas en medio como abogados dellas que en su lengua Las deidades andinas residen en cerros nevados, promontorios,
llaman guaca y otros en las estancias de sus ganados los quales más colinas, cuevas y lagunas de montaña. Su valor simbólico se
ordinariamente son de figuras de carneros de la tierra que llaman incrementa si ciertos fenómenos físicos que de ahí emanan tienen
caullamas y a los del maiz zaramama o zara conupa que quiere decir influencia sobre las comunidades. Este sería el caso del Cayambe
dios maiz y tiene figura de un choclo y otros de figura de persona y la que ha mantenido su actividad volcánica. Para 1582, Paz Ponce de
vivienda de los hombres y los que tienen ganado adoran las piedras León, uno de los primeros corregidores de la región, encontró acti-

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


143

vo el volcán al afirmar que echaba cultural se acumula y se hace más puesta, como Expedición 0° / 0°C
humo y fuego. Sin duda que los extensa con la suma de los tiem- apuntaba a relacionar el Sol, el Ca-
tremores procedentes de la mon- pos. La memoria colectiva hace de yambe y los sitios arqueológicos
taña cubierta de nieve con la cima la naturaleza una gran metanarra- dentro de un sistema cosmovi-
constantemente ceñida de nubes ción de la cual se deriva un reper- sional andino destacando el paso
y en actividad reforzaron su signi- torio particularmente rico que aún cenital del Sol para el equinoccio.
ficado religioso (Becker y Tutillo, pervive, y que es evidente en el ac- Durante el amanecer de cual-
2009: 20). Estas eminencias del tual escudo de armas del cantón quier equinoccio, el Sol aparece
paisaje también controlaban los de Cayambe (fig. 105). semejante en todo el mundo, por
fenómenos meteorológicos, se les el oriente a 90° z, pero a diferen-
consideraba dueñas de animales 4.2.3 ARQUEOASTRONOMÍA cia de otras latitudes, sobre el
y plantas. Las entrevistas realiza- ecuador se eleva de manera recta
das por Karla Campos de la Expe- No se tiene la intención de abor- y no oblicua. Realiza una trayec-
dición 0° / 0°C constatan esta dar el amplio campo de la arqueo- toria perfecta en la orientación
propuesta, aquí una selección: astronomía andina para el caso de este-oeste a través de la bóveda
la equinoccial, eso está más allá celeste. El camino del Sol por el
Antiguamente, o sea, traían una de las pretensiones de esta entre- ecuador desde hace milenios es de
imagen de Cayambe, del pueblo, Figura 105. Escudo de armas del cantón ga. La atención se enfoca a la ele- la misma sincronía, y nos pregun-
de los católicos, ¿no?, en este de Cayambe. Se destaca el omnipresen- vación volcánica que es el Cayam- tamos si esta particularidad dotó
te Nevado Cayambe. Una esfera terres-
caso. La traían a caminar en las tre corona el nevado representando la
be, el cual consideramos que a esta región de los Andes septen-
comunidades, al volcán no, sólo ubicación de la montaña bajo el círculo iluminado por el Sol en momentos trionales de una categoría simbó-
hasta las comunidades y parece máximo de la Tierra: la línea equinoccial. clave, daba sentido a la renova- lica trascendental con referencia
que si daba resultados, pero últi- El color verde de los campos y colinas ción de la vida determinando un a otras culturas prehispánicas del
representa la fertilidad y riqueza del
mamente ya no se ha hecho eso
valle.
calendario agrícola. La experien- continente, pues el día del equi-
y… toca buscar el agua de río cia que hemos tenido en Meso- noccio en el ecuador correspon-
que tiene, es lo único. américa (Montero, 2008, 2009a), de al paso cenital del disco solar.
Segundo Turunango, Provincia advierte que la verticalidad de las Seguramente los pueblos prehis-
de Pichincha. evangelios que eso es de made- montañas constituyó un punto pánicos se percataron de lo sin-
ra, que eso no sirve. prominente e ineludible para ob- gular de esta región y adecuaron
Para llamar la lluvia le sacan a María Pilcachuraco, Provincia servar el cielo en la antigüedad, sus asentamientos, aún antes de
las imágenes como la Virgencita de Pichincha. en el que se integraron construc- que a los incas les pareciera rele-
del Quinche, San Juan, San Pe- ciones cosmovisionales como par- vante, como ya hemos menciona-
dro, San Miguel, le saben hacer El capital simbólico del Cayambe te del pensamiento religioso que do páginas atrás con la cita de
bañar, le llevan al cerro más no se agota, perdura, aunque su dio sentido no sólo a la disposi- Garcilaso de la Vega (p. 19). Si en
alto, le hacen bañar, ahí cae el intensidad puede variar, ya que ción de muchos asentamientos periodos preincaicos esta relación
agua. Ya no lo hacen todavía cada generación le otorga nuevos con arquitectura monumental, fue trascendental, como afirma
creo, por eso no llueve. Un gru- sentidos y significaciones. A las sino también a pautas del compor- Cristóbal Cobo (2004) para el ce-
po de gente sale, bastantísima y narraciones de la antigüedad se tamiento en función de las nece- rro Catequilla, entonces es posi-
le hacen bañar. Aunque dicen los les añaden historias; la gramática sidades económicas. Nuestra pro- ble encontrar más evidencias para

EL VOLCÁN CAYAMBE
144

los sitios de Cochasqui, Puntachil nuestra atención en la orienta- Osa Mayor, y en particular, de la neamiento arquitectónico del
y Pambamarca. Por ser los em- ción primero de Cochasquí. estrella Benetnash, que se en- emplazamiento con el volcán Ca-
plazamientos más cercanos al En Cochasquí 36 ubicado en la cuentra en su cola, la cual se ali- yambe, como se aprecia en la fi-
Cayambe con arquitectura monu- 00° 03´ 25" / -78° 18´ 26" a 3100 nearía exactamente con la direc- gura 106.
mental, nos valimos de algunos m
/nm, fueron descubiertas en 1932 ción de las rampas al momento de Imaginemos un observador en
instrumentos para hacer los cál- quince pirámides con una altura su primera aparición al ocultarse alguno de los sitios arqueológicos
culos. 35 Según Lozano (2007) y máxima de 30 metros. Nueve de el Sol. Este evento coincidiría con de Cochasqui o Puntachil, duran-
Guaña et al. (2008), los conoci- las cuales tienen una rampa. To- la época del comienzo de las llu- te el amanecer de algún equinoc-
mientos astronómicos ancestrales das están construidas en barro vias a finales del mes de octubre, cio. En cualquiera de los sitios
no están a discusión, una cita de rojo seco o toba volcánica y se que sería el comienzo del año verá salir el Sol por la ladera norte
Fernando de Montesinos (2010: encuentran cubiertas por una agrícola. Sin embargo, para el de la montaña, nunca sobre la
40) es fundamental para esta pro- delgada capa de tierra con hier- tema de nuestro interés encon- cumbre, hay varios días de diferen-
puesta: ba. Las pirámides tienen una base tramos que no existe ningún ali- cia, 13 para Cochasquí y 11 para
cuadrada con graderíos hacia arri-
Y también tuvieron noticia del ba, las paredes externas recrean
bisiesto, por la observación que cada una la forma de un trapecio.
hicieron los astrólogos del apar- Por su parte, las rampas se diri-
tamiento del sol de la línea, que gen de sur a norte y se amplían
señalaron junto a Quito, por don- conforme alcanzan la parte supe-
de nosotros decimos pasa, con rior de la pirámide. Para Yurevich
unos paredones que hoy se ven. y Egred (1994), su ordenamiento
y arquitectura permiten deducir
Partiendo de los trabajos de Yure- que la cultura quitu-cara alcanzó
vich y Egred (1994), Cobo (2004), conocimientos técnicos, matemá-
Guaña y colaboradores (2008) y ticos y astronómicos bien desa-
Lozano (2007), como también de rrollados, y plantean que casi to-
nuestra experiencia anterior en das ellas con un azimut de 25° a
cerro Catequilla, durante los tra- 35° puede deberse a la observa-
bajos del año 2009 centramos ción hacia el norte de la salida
helíaca de la constelación de la
35
Una brújula tipo Brunton acimutal colo-
cada en un trípode; un gnomon monta- 36
Actualmente en Cochasquí hay un mu-
do sobre un proyector solar tipo seo etnográfico y arqueológico. El par-
Solarscope con focal de 9 mm, y calidad que arqueológico Cochasquí abarca una
de imagen de 1 lambda en el frente de superficie de 84 ha, en un lugar de tem-
onda, con la capacidad de proyectar la plado a frío de magnífico paisaje que
imagen del Sol en 80 mm. Además del despierta el interés del turismo con casi
software especializado y una cámara fo- dos mil visitas mensuales. En ocasiones
tográfica réflex con filtro solar y telefoto especiales sirve de sede para festejos en Fig. 106. Planta del sitio arqueológico de Cochasquí, según el CPP, destacan las
de 200 mm para exposiciones durante el los cuales se celebran y reviven antiguos pirámides con sus singulares rampas de acceso. La cima del Cayambe se localiza 35
amanecer y el ocaso. mitos indígenas y tradiciones. km al oriente con rumbo de 95°z.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


145

Puntachil. Desde Cochasquí, el Sol sitio está conformado por al me-


se levanta sobre la cumbre del nos 17 fortalezas en la cima, deno-
Cayambe los días 4 de octubre y 9 minadas pucaras que al parecer
de marzo; desde Puntachil, el 6 de los caranquis construyeron para
octubre y el 7 de marzo (fig. 107). defender el territorio de la in-
Es importante señalar que desde vasión inca. Tienen una forma
Puntachil para el ocaso del equi- espiral sin parecido a ninguna
noccio el Sol se oculta exactamen- construcción inca. Aunque posi-
te sobre el volcán Pululagua. Se- blemente durante el conflicto con
gún Lozano (2007: 76), la palabra los incas, éstos ocuparan el empla-
Pululagua contiene el comple- zamiento. El mayor puede haber
Fig. 107. Perfil orográfico destacando al Cayambe para el amanecer del equinoccio
mento lagua, corrupción de ragua, servido como puesto de mando, desde el sitio arqueológico de Puntachil según modelo digital elaborado con Google
traducido del quichua como se- conocido como Quito Loma; Juan Earth.
ñal, sostiene que la relevancia de y Ulloa hicieron una breve descrip-
su nombre está asociado con la ción del lugar. En lo particular, me
dirección del eje norte para la ciu- inclino más por una función reli- dados sus reyes. Se reducían es- rante el equinoccio, aunque tal
dad de Quito. El volcán Pululagua giosa del emplazamiento, pues tos a dos bien fabricados y altas vez si lo fue para el solsticio de
hizo erupción en el año 500 aC y acantonar y abastecer tropas a 4 columnas, a los dos lados de la junio. Cabe la suposición que su
se supone que provocó el éxodo mil metros de altura con las incle- puerta, los cuales eran perfectos función no fue equinoccial con
de los habitantes de la región cen- mencias del tiempo, la distancia y Gnomones, para observar los dos respecto al Sol, y sí con los demás
tral al somonte del Cayambe. una arquitectura en espiral invi- solsticios en que se hacían las dos planetas u otros cuerpos celestes.
Esto nos lleva a considerar que tan a ahondar más en el caso. fiestas principales del año. En Pero esto no significa que los co-
el Cayambe no funcionó como un Desde la ciudad de Quito, el Sol torno de la plaza del templo, es- nocimientos astronómicos de los
marcador de horizonte para el se levanta para el solsticio de ju- taban otras doce pequeñas colum- antiguos pobladores de la región
equinoccio. Si este fuera el caso, nio sobre el volcán Cayambe, si la nas, o postes de piedra que indi- fueran precarios. Por el contrario,
tal vez el sitio inca de Rumicucho observación la hacemos desde el caban los 12 meses del año, y los recientes trabajos del doctor
ofreciera una oportunidad, pero la histórico cerro El Panecillo, cada uno señalaba, con la som- Adolfo Holguín (2009) de la Es-
orografía de la región deja escasa- el hecho es aún más trascenden- bra, el principio del mes que le cuela Politécnica Nacional de
mente visible al Cayambe, por otra tal debido a la cita del padre Juan correspondía. Ecuador, apoyados en fuentes his-
parte su uso militar no invita a una de Velasco (1981: 10-11): tóricas y en modelos digitales, de-
precisión astronómica. Sin embar- Retomando el caso que nos ocu- muestran la erudición alcanzada
go, para el solsticio de junio –Inty Quito tenía dos templos. El uno pa, todo parece apuntar que la en Cochasquí y que sin duda fue
Raymi– tenemos una posibili- dedicado al sol y el otro a la luna prominente altura del Cayambe compartida en Puntachil.
dad con el sitio arqueológico de y a las estrellas. El del sol, que cercano a los seis mil metros, su Sobre Puntachil 37 podemos
Pambamarca, pues el Sol se levan- ocupaba el pequeño plano en la ubicación sobre la línea equinoc- apuntar que fue un centro admi-
ta muy cerca de la cumbre del cumbres del panecillo… Fue muy cial, y su valor nominativo para
Cayambe para esta fecha. Para al- obstante muy celebre este tem- una región y una etnia no fueron
37
Al parecer significa Casa sagrada del po-
gunos investigadores, Pamba- plo, por sus observatorios astro- suficientes para elegirlo como un deroso, véase en Becker y Tutillo
marca tenía una función militar. El nómicos adjuntos, a que eran muy marcador de horizonte solar du- (2009:17).

EL VOLCÁN CAYAMBE
146

nistrativo de aldeas circunvecinas que ocupó el actual espacio de la señales que se reparan en su construcción, pues al ser aquella pieza
ciudad de Cayambe, mucho antes de que españoles e incas llegaran a circular y sin ninguna separación en lo interior da a entender haver
la región. Puntachil comprende dos pirámides enfrentadas la una a la sido lugar público destinado para concurrencia y no para servir de ha-
otra acompañadas por diminutas tolas que al parecer tenían rampas. bitación; la puerta que es muy pequeña en todas sus proporciones hace
La pirámide más grande se llama Pirámide del Sol y la pequeña, Pirámi- creer que, aunque los reyes ingas entraban a sus palacios y andaban
de de la Luna. El emplazamiento se utiliza todavía para celebrar el siempre en andas, como se verá adelante, allí lo hacian por su pie pues
solsticio de verano conocido como Fiesta del Sol, en ocasiones con el la cortedad de ella no daba lugar a haverlo de ejecutar en otra forma,
nombre inca de Inty Raymi, o también conforme al santoral católico circunstancias que solo practicaban en los templos por veneración; y
como la fiesta de san Pedro (Becker y Tutillo, 2009: 17). La primera siendo por lo que ya dexo dicho en aquella inmediación donde tenían
noticia de este sitio se debe a la descripción de los marinos españoles uno de sus mayores o el principal adoratorio, parece que debemos con-
Antonio de Ulloa y Jorge Juan, integrantes de la Misión Geodésica Fran- cluir lo fuesse este edificio...
cesa, que en aquella época, 1740, al pasar por el pueblo de Cayambe
identificaron un templo o adoratorio hecho de adobes (fig. 108): De esta cita e ilustración se puede inferir que aquel adoratorio, de
forma cilíndrica, probablemente construido de cangagua, se hallaba
Hacían aquellos indios obras que consagraban a la posteridad y de que en la cima de una plataforma artificial, que Ulloa denomina “monteci-
se hallan llenos los campos por todas partes... Aunque, como tengo di- llo”. De esta estructura no queda evidencia contemporánea por la ex-
cho, se encuentra semejante especie de monumentos en todo aquel pansión urbana de la ciudad y la incontrolable actividad de los
territorio, es con más abundancia en las jurisdicciones del pueblo ladrilleros, que desde hace más de treinta años, utilizan la tierra de las
Cayambe, cuyos llanos se ven llenos de ellos, siendo la causa el haver tolas y pirámides. De este asentamiento, que debió estar conformado
tenido allí uno de sus mayores adoratorios o templos y mirar como por dos o tres pirámides truncadas, sólo se conserva parte de una de
lugares sagrados todas aquellas vecinas campañas, por lo que en ellas
se enterraban los reyes y caciques de Quito y, a su imitación, los de los
pueblos de la comarca.
Una de estas obras se mantiene existente por la mayor parte en el
pueblo de Cayambe y consiste en un adoratorio ó templo hecho de
adoves; su fábrica es en una eminencia, donde se levanta el terreno
del mismo pueblo y forma como un montecillo no muy alto; su figura
perfectamente circular; y la capacidad bastante pues su diámetro será
de 8 tuessas, que hacen de 18 a 19 varas con corta diferencia, y a su
respeto tiene 60 varas de circuito. De este edificio no han quedado más
que las paredes, que se mantienen todavía en buen estado de firmeza;
y su altura es como de dos tuessas a dos y media, ó de 5 a 6 varas; su
ancho o gruesso de quatro a cinco pies, esto es como una vara y dos
tercias; y la unión o trabazón de los adoves es de la tierra con que
hazian estos mismos, una y otra tan dura como si fuera de piedra, pues
no la vencen las injurias del tiempo a que esta expuesta por la falta de
cubierto.
Además de las noticias antiguas que se conservan de haver sido Fig. 108. Edificio prehispánico en Puntachil, lámina XVI de la Relación Histórica del
este edificio uno de los templos de aquellos tiempos, lo acreditan las Viaje a la América Meridional (Ulloa y Juan, 1748).

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


147

ellas, ubicada al oriente del ce- Este templo á pesar de la mez- za, pues a excepción de la ima- ción del hito geográfico en Ciudad
menterio de la ciudad. Otra inte- quina construcción que se le su- gen del sol, que era de oro, fue- Mitad del Mundo, considero que
resante valoración de este templo pone, gozaba de tanta celebridad ron de pura plata todas las plan- el parámetro de certidumbre des-
la encontramos en El nuevo viaje- como el de Cuzco. chas de puertas y paredes, sino de una astronomía posicional ca-
ro universal en América: o sea his- por su singularísima estructura di- rente de instrumentos ópticos
toria de viajes sobre el antiguo Juan de Velasco (1981:46-48) en su ferente de todas las demás que puede ser muy amplio, quedando
Perú, (M. E. Y L. C., 1832: 107), donde Historia del Reino de Quito mencio- celebraron mucho los académicos dentro de este rango Cochasquí,
se registra con el nombre de Ca- na (ca. 1760): modernos al verla casi entera. Pambamarca y Puntachil. Como
yamba: 38 bien apunta Aveni (1991: 257) para
Templos modernos hechos por los Con todo esto, y retomando los es- el caso mesoamericano de Alta
El templo de Cayamba. Se han Incas en el Reyno de Quito, los tudios de Holguín (2009) encon- Vista, donde astrónomos teoti-
hallado en la provincia de Quito templos mayores o menores que tramos que los pueblos andinos de huacanos alcanzaron el trópico de
cerca de la población de Ca- fabricó, y dedicó al sol, en todas la región tenían plena conciencia Cáncer calculando el paso cenital
yamba unas ruinas, que se cree las provincias del Reyno, fueron de su ubicación equinoccial, de del Sol durante el solsticio de ve-
son las de cierto templo antiguo. muchos y varios de ellos célebres ahí la construcción de las pirámi- rano:
Consisten en un lienzo de pared por la riqueza o por la estructu- des de Cochasquí y por toda la re-
de ladrillos sin cocer, de cuaren- ra. Aun los que su padre Tupac gión, pero este concepto no debe … a simple vista no debe sorpren-
ta y ocho pies de altura, que for- Yupanqui había levantado en las ser interpretado desde el punto de dernos encontrar un error de 10
maba parte de un recinto circular primeras provincias, los amplió vista geográfico actual del ecua- a 20 kilómetros en la determina-
de diámetro de igual dimensión. y enriqueció mucho más. Los prin- dor para un planeta esférico, sino ción del punto más septentrional
La entrada de este edificio pare- cipales en las cabezas de gobier- como el conocimiento empírico en que el Sol puede alcanzar el
ce que era solamente por una no, fueron ocho, con adjuntos que poseían sus habitantes, prin- cenit. Dos kilómetros en la super-
puerta muy pequeña, que servía monasterios de vírgenes consagra- cipalmente la clase gobernante, de ficie ter restre equivalen a un
al mismo tiempo de ventalla; das a su servicio, esto es, en que estos lugares mantenían una minuto de arco (1/30 del diáme-
porque no se observa en la pa- Caranqui, Quito, Latacunga, ubicación privilegiada en cuanto tro angular del Sol). Más aún:
red la menor señal de otras aber- Riobamba, Atún Cañar, Tome- al movimiento regular y simétrico como el Sol es un objeto extendi-
turas, y es de pensar que recibía bamba, Huancabamba, y Tumbez. del Sol, lo cual era manifiesto en do, no proyectará una sombra
la luz solamente por el techo. En las demás provincias fabricó que los equinoccios coinciden fuerte. Finalmente, aunque para
tal cual suntuoso y rico especial- con los días de verticalidad del Sol resolver el problema se emplee
mente en Cayambe y en las otras y dividen el año solar en un núme- alguna técnica de proyección de
los templos menores, o a lo me- ro igual de días y lunaciones; esta sombra o una visión directa
38
Como Cayamba se reconoce la región de nos adoratorios con la imagen del característica no es común a otras de la imagen solar a través de un
Cayambe desde el siglo XVI, como un be-
neficio de la diócesis de Quito (Albuja, sol que era siempre de oro. latuitudes. tubo, se necesita determinar la
1998: 468), también se menciona en The Después de ése, era el de Caran- Al respecto, deseo agregar que vertical de manera muy precisa
Indian and Antiquities of America 1897, qui, uno de los más ricos, no sólo si bien se ha planteado la suma para encontrar el punto exacto.
al citar el relato de Ulloa (Shipp, 2004:
92). Llama la atención que una misión del Reyno, sino también del im- exactitud en la ubicación equi-
franciscana en Bolivia sea homónima perio. Entre los de segundo or- noccial del cerro Catequilla, supe- Con esto nos queda claro que la
(Izaguirre, 1930: 282) sin poder apuntar
al momento qué relación guarda con el
den, fue singularísimo el de rior a la de los geodestas franceses diferencia entre el ecuador y
tema de nuestro interés. Cayambe, no tanto por la rique- del siglo XVIII y la misma construc- Cochasquí de seis kilómetros es

EL VOLCÁN CAYAMBE
148

insignificante ¿Cómo pudieron alcanzar tal confirmaba con mayor exactitud las fechas de equinoccios y solsticios. Es probable, inclu-
precisión? La propuesta de Holguín es cardi- la verticalidad meridiana de la luz solar y so, que en este sistema se llevara un registro
nal: a través de la sombra. En efecto, en la par- de los pasos del Sol por sus extremos y puntos de los días de desfase entre los dos ciclos es-
te superior de las pirámides se encontraron medios. El gnomon central, con sus sombras a telares.
pisos de barro cocido, bastante bien consoli- lo largo del año, dibuja un esquema simétrico En conclusión, al momento no contamos
dados, sobre los pisos se trazaron canales y alrededor de su centro, muy similar a la llama- con evidencia arqueológica alguna para seña-
marcaron orificios. Los principales orificios da cruz andina, frecuentemente representada lar al volcán Cayambe como un marcador na-
están ordenados simétricamente de manera en la iconografía de la región. Holguín consi- tural de horizonte utilizado por las culturas
triangular, sobre éstos se encontraron conos dera que el conjunto de orificios, canales y antiguas para el equinoccio. No obstante,
de piedra que funcionaron como gnomon que sombras funcionaba como un ábaco calendá- debe entenderse que las construcciones de
sirvieron para marcar solsticios y equinoccios rico que permitía contar sistemáticamente las Puntachil y sobre todo Cochasquí fueron
(fig. 109). En el centro de las plataformas es lunaciones comprendidas en un año solar, levantadas por una civilización consciente de
posible que existiera un cilindro como el de ajustando dichos periodos dentro del ciclo la privilegiada ubicación geográfica de su
Puntachil, a manera de un gran gnomon que solar anual, mediante la constatación de los asentamiento.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


149

Figura 109. Propuesta de Holguín (2009)


para Cochasquí. Sobre la pirámide un
cilindro, similar al que se levantó en
Puntachil (véase fig. 108), a la derecha
detalle del piso de la pirámide desta-
cándose la sombra proyectada por los
gnomon: en la imagen superior para el
solsticio de diciembre; abajo la proyec-
ción para el día de equinoccio.

Panorámica del Parque Arqueológico de


Cochasquí.

EL VOLCÁN CAYAMBE
150

Abajo:
La Arista del Águila y el Cóndor, óleo so-
bre lino, 75 × 250 cm, Jorge Obregón,
2009.

E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


151

Conclusiones
E STA ENTREGA ES UN TRABAJO preliminar, una invitación a se-
guir, a entrar por la puerta que está en el volcán Cayambe y
continuar por el camino que circunda al mundo, por la vía
más estrecha y larga del planeta que nos muestra tantas
luces y sombras de la humanidad. El ecuador, suma de geo-
grafía y astronomía ha guiado con su trayectoria al obsesi-
vo pensamiento de griegos, fenicios, cartagineses, caran-
quis, incas, españoles, ingleses, portugueses y de tantos
más; ahora lleva a los ecuatorianos y a los mexicanos por
igual a proseguir por el camino equinoccial, para llegar
juntos hasta la Arista del Águila y el Cóndor, y descubrir el
vértice del ecuador terrestre.
Las ciencias de la tierra nos demuestran que el ecuador
es evidente en la naturaleza, que no se desprende única-
mente de un imaginario, que es tangible, eso lo hemos que-
rido compartir por todo el capítulo I. El ecuador es tras-
cendente para nosotros, dedicamos nuestro esfuerzo en
una expedición autogestionada, no necesitábamos nada
más que ser los primeros en llegar a su parte más alta. Por
andar y ver nos fuimos al Cayambe, para comprobar cómo
lo imaginario se hace real.
Ahora, sitios como la Arista del Águila y el Cóndor, a
4 740 metros sobre el nivel del mar; la Arista Axis Mundi, en
la aproximación de colosales geográficos; el Glaciar Bicen-
tenario, conmemorando a la América libre; y el Glaciar
Ecuador, resistiéndose al cambio climático,1 son referen-
cia emblemática que deseamos compartir. Para nosotros,

1
Por cambio climático se entiende un cambio de clima atribuido directa
o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la
atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima
observada durante periodos comparables. Artículo 1, párrafo 2, de
la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
152

estos sitios de la Línea no marcan la división de hemisferios, represen- da, vierta valores y otorgue responsabilidades para revertir el daño
tan la convergencia de patrias. ¡Qué fortuna que la nación iberoameri- ambiental. Un refrán africano dice: si quieres ir rápido ve solo, si quie-
cana que lleva por nombre República del Ecuador guarde en su territo- res ir lejos ve acompañado. Tenemos que ir juntos, fomentando el de-
rio la cúspide de quien le da el nombre! sarrollo sustentable, la ciencia nos dice que el futuro no es bueno,
Con esta entrega, desearía aliviar a tantos amigos de la nación rondan ya los ciclones desproporcionados, ahí están las inundacio-
fraterna de su pesar, que como el poeta Xavier Oquendo2 encuentran nes fuera de temporada, el aumento en el nivel del mar ya ahoga linde-
que: la historia nos condenó a llamarnos como la línea imaginaria, Ecua- ros, las sequías extremas se suceden cada vez más, y el desabasto de
dor. Lo imaginario, lamentablemente, no existe. Desde allí tuvimos que agua potable ya es perceptible. Es necesario enfrentar al cambio
inventar nuestra identidad, recomenzar nuevitos en el panorama, tratan- climático fomentando por todo el orbe los cultivos sustentables, el
do de no olvidar que por nuestra tierra ya había pasado una historia con cuidado de los bosques, la conservación de los suelos, y disminuyen-
pies de gigante y fuego de los antepasados. No veo condena, veo trascen- do la emisión de gases contaminantes. Los efectos secundarios son
dencia, y encuentro justamente en el Cayambe, al gigante de fuego impredecibles.
equinoccial que en sus nieves incandescentes reúne la veneración Desde el vértice ecuatorial se asoma una causa común, escuche-
ancestral, la admiración de viajeros, el estudio de naturistas y el centro mos, aprendamos a vivir. Tomemos la lección. Que las conmemoracio-
del mundo. Pero quién soy para opinar de algo que no me es propio. nes de los bicentenarios y el Acercamiento de las Culturas declarado
Pero si con gigantes estamos, hay algo preocupante que estimo, si por las Naciones Unidas, sirvan para construir una nueva conciencia
nos convoca a todos: revertir la desnudez que deja sin sus galas albinas global, somos la nueva generación, declaremos a los glaciares ecuato-
al volcán. El coloso equinoccial pierde sus glaciares, el bióxido de riales patrimonio de la humanidad, ese es un destino histórico de lla-
carbono, dicen los que saben, provoca un incremento en la temperatu- marse y estar en Ecuador.
ra. Se derrite. Tenemos que adoptar nuevos patrones en el consumo de
energía en todo el mundo. El planeta es una formidable máquina tér-
mica en la cual el ecuador es el engrane central y el Cayambe es el
indicador de esa máquina, por eso no debemos apartar nuestra aten-
ción de sus heleros.
El descubrimiento del hito geográfico desmerece si no aporta algo
para muchos; que sea un mensaje de conciencia ambiental nuestra
propuesta. Como humanidad hemos vivido creyendo, si no lo veo no
existe, ha sido un mundo feliz –para algunos– de consumo indiscrimi-
nado que tiene que concluir. Ahora estamos viendo los efectos del El símbolo astronómico y astrológico para representar a la Tierra es un círculo con
el ecuador y un meridiano.
calor industrial, estas son las evidencias que debemos conocer: el he-
cho de que los hielos del planeta se disuelven es factual. Estamos en
una crisis que nos brinda la oportunidad de conformarnos en una ciu-
dadanía ambiental que teniendo a la educación como punto de parti-

Derecha: Relación histórica del viaje a la América Meridional hecha de orden de S.


Mag. para medir algunos grados de meridiano terrestre, y venir por ellos en conocimien-
to de la verdadera figura y magnitud de la Tierra, con otras varias observaciones
2
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E N EL VÉRTICE DEL E CUADOR


161

Créditos fotográficos
y de ilustraciones

Las figuras que no se insertan en esta lista se Figura 13. En línea junio 2010 <http:// lia, Bureau of Meteorology, publi-
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gen, o corresponden al autor. Figura 14. En línea junio de 2010 <www. <http://alpoma.net/carto/
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CRÉDITOS
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