1) Veblen analiza la evolución de la cultura y la educación desde una perspectiva social y económica. Ve la cultura como el resultado de la lucha del hombre por mejorar sus condiciones de vida.
2) Propune que las primeras sociedades eran pacíficas pero evolucionaron hacia sociedades depredadoras con clases ociosas que frenaban el progreso.
3) Explica que la cultura patriarcal generó una división sexual del trabajo y una condición subordinada para la mujer, dando origen a la propiedad priv
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1) Veblen analiza la evolución de la cultura y la educación desde una perspectiva social y económica. Ve la cultura como el resultado de la lucha del hombre por mejorar sus condiciones de vida.
2) Propune que las primeras sociedades eran pacíficas pero evolucionaron hacia sociedades depredadoras con clases ociosas que frenaban el progreso.
3) Explica que la cultura patriarcal generó una división sexual del trabajo y una condición subordinada para la mujer, dando origen a la propiedad priv
1) Veblen analiza la evolución de la cultura y la educación desde una perspectiva social y económica. Ve la cultura como el resultado de la lucha del hombre por mejorar sus condiciones de vida.
2) Propune que las primeras sociedades eran pacíficas pero evolucionaron hacia sociedades depredadoras con clases ociosas que frenaban el progreso.
3) Explica que la cultura patriarcal generó una división sexual del trabajo y una condición subordinada para la mujer, dando origen a la propiedad priv
1) Veblen analiza la evolución de la cultura y la educación desde una perspectiva social y económica. Ve la cultura como el resultado de la lucha del hombre por mejorar sus condiciones de vida.
2) Propune que las primeras sociedades eran pacíficas pero evolucionaron hacia sociedades depredadoras con clases ociosas que frenaban el progreso.
3) Explica que la cultura patriarcal generó una división sexual del trabajo y una condición subordinada para la mujer, dando origen a la propiedad priv
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La sociología de la educación de Veblen
Bettsy Yanella Abad Timaná
Facultad de Ciencias Sociales y Educación, Universidad Nacional de Piura
Sociología de la educación
Dr. Manuel Burgos Cabrejos
Enero del 2022
La sociología de la educación de Veblen Es preciso iniciar mencionando que, Veblen a partir de una visión social y económica de la cultura esboza un esquema de evolución de la misma, además, nos dice que la sociología del sistema de enseñanza y la sociología del curriculum surgen de manera coherente gracias a marco teórico general de la sociología de la educación y la cultura. 1. Sociología de la cultura y de la educación Thorstein Veblen se formó inicialmente en la vivienda rural de su padre, en medio de un grupo social coherente, dinámico y muy eficiente, lamentablemente esté estuvo marcado por la inmigración social. Debido a esto, comenzó a cuestionar la intemporalidad del sistema clásico de economía política, mostrando así, que su idea del “hombre económico” no es más que una creación artificial con un fondo de verdad. Dentro de sus obras más reconocidas tenemos, La teoría de la clase ociosa: un estudio sobre la evolución de las instituciones. La teoría de la empresa de negocios, la cual, ahonda en el conflicto actual entre la cultura y la educación “pecuniarias” del capital financiero y la cultura u la educación realistas y “eficientemente” industriales de los hombres de ciencia, los ingenieros y todos los grupos sociales realmente productivos. Otra obra destacada es El instinto del trabajo eficaz y el estado de las artes industriales, esta también, desarrolla sus hipótesis sobre la importancia social y la continuidad histórica de la “cultura industrial”. Por otro lado, en la obra La enseñanza superior en América, se denuncia el control de los colegios universitarios y de las universidades estadounidenses por las grandes empresas capitalistas. 1.1. Evolucionismo tecnológico y darwinismo social Es indispensable mencionar que, para Veblen, el hombre es ante todo homo faber, y el trabajo, la nota distintiva de la acción y experiencia propias de nuestra especie. Dado esto, surgen sucesivamente el régimen de status patriarcal y la sociedad dominada por la clase ociosa, la cual, es esencialmente conservadora y que usualmente frena el progreso histórico. Además, el autor nos menciona que, como animal humano, trata de mejorar en lo posible sus condiciones de vida con el apoyo precisamente de la cultura, la organización sociocultural y su evolución son el resultado de esa lucha permanente. Asimismo, recalca que, la sociedad se compone de individuos y de instituciones, los cuales, los primeros son los agentes reales de la vida social y, las instituciones son el resultado objetivo de la actividad social de los agentes humanos. Otro aspecto que destaca, es que la evolución de la cultura depende fundamentalmente del progreso del conocimiento objetivo de la naturaleza y de la técnica capaz de dominar el ambiente físico-natural específico del hombre para ponerlo a su servicio. Como último punto, nos menciona que, el cambio de la sociedad y la dirección principal del desarrollo histórico dependen del cambio de los intereses materiales y de la medida en que las diferentes clases sociales acusen su influencia.
1.2. Esquemas de evolución de la cultura, la educación y la psicología
Es preciso mencionar que en este aspecto Veblen distingue también entre la educación general común a todos los individuos y grupos de una determinada sociedad y su educación diferencial. Asimismo, nos dice que, la cultura, la educación y la psicología humanas han evolucionado de forma diferencial, siendo su forma de estructuración más básica de tipo dual.
1.3. De la cultura pacífica a la cultura depredadora
Es de suma relevancia, destacar que, la sociedad primitiva era una comunidad pacífica, solidaria e instintivamente inclinada hacia cuanto facilitara la supervivencia del grupo y, por tanto, intransigente con la más mínima inhibición del individuo en la continua, dolorosa y difícil lucha común por la supervivencia. Dado esto, a partir de los instintos comunes de los animales superiores, fue plasmándose una psicología (personal y social) definida por un sistema de hábitos mentales y prácticos básicos.
1.4. Hazaña varonil y “tráfago femenino: código de género de la cultura patriarcal
La diferenciación de la cultura resulta de la división sexual del trabajo: la hazaña del varón en la caza o en la lucha se contrapone al tráfago constante de la mujer; y la honorabilidad, dignidad y prepotencia de la actividad del primero acaba por transmitirse a sus instrumentos y a sus armas. Asimismo, para Veben, la clase ociosa surge ya en la barbarie superior a partir de la evolución del régimen de status patriarcal. Recalca que, Los hombres están exentos de esas tareas vulgares y se reservan para la guerra, la caza, los deportes y las prácticas devotas. En esta materia se hace con frecuencia una discriminación rigurosa. 1.5. Condición bárbara de la mujer y origen de la propiedad de la clase ociosa Según Veblen, para que surja una clase ociosa tienen que darse antes algunas condiciones sociales fundamentales. A saber: 1) la existencia de una cultura depredadora, especializada en la guerra y/o en la caza mayor; 2) la producción de un excedente económico suficiente; 3) la discriminación ideológica entre trabajos dignos y trabajos indignos; y 4) el origen y consolidación de la propiedad privada de las personas y de las cosas. 2. La educación de la clase ociosa y sus códigos culturales
2.1. El derroche del tiempo como código ceremonial y mecanismo de dominación
simbólica En este apartado, es indispensable mencionar que, la lógica de una sociedad regulada por el hábito del ocio ostensible determina la estructuración en cascada de la clase ociosa hasta el límite de la privación y, casi, de la mendicidad del caballero o la dama venidos a menos. Asimismo, para legitimarse socialmente, la clase ociosa tiene que admitir la prueba sistemática de su capacidad de derroche de tiempo como una ley social y un código de conveniencias que regula su educación, su honorabilidad pecuniaria y su buena reputación en general. 2.2. Educación especial de la clase ociosa vicaria: La dama noble y los sirvientes del señor Es necesario recalcar que, la ociosidad de la esposa y de los sirvientes se produce en función de la del señor. La liberación de la mujer del trabajo servil, su reconocimiento como transmisora de sangre hidalga y el desarrollo, crecimiento y diferenciación funcionales y piramidales de las diversas capas de esta clase ociosa dependiente constituyen una prueba funda mental de la alta posición social, de la distinción personal y del decoro pecuniario del señor. Asimismo, la nobleza de sangre de la mujer es, producto de su contacto prolongado con la riqueza y los privilegios del señor. De igual manera, el ocio de la dama no es igual al del caballero. Este está totalmente exento de toda clase de trabajo industrial o productivo. En cambio, en el de la esposa hay que incluir el cuidado diligente del señor y determinados trabajos caseros que, en función de su carácter ceremonial, no pueden ser considerados nunca como productivos. En cuanto al ocio servil, está igualmente en función de la comodidad personal y de la respetabilidad social del señor. 2.3. El consumo ostensible y diferencial como código de respetabilidad social El desarrollo del servicio doméstico y de la clase ociosa vicaria en general implica también el de un consumo creciente de alimentos, vestidos, habitación, mobiliario y otros bienes económicos. Pero el consumo diferencial es incluso más antiguo. Así, desde los orígenes de la cultura patriarcal, el guerrero disfrutaba de alimentos y artículos raros de adorno, que eran, en cambio, tabú para las mujeres y para los niños. Asimismo, en la civilización esclavista y/o servil, una parte de la clase trabajadora no alcanza a satisfacer más que las necesidades más elementales. En cambio, ciertas vituallas, bebidas y narcóticos son exclusivas de los señores y caballeros (de la clase ociosa) y tabú para todos los demás. En otras palabras, consumir más y mejor es ahora el signo honorífico principal. Consumir pocas cosas y de mala calidad es signo de inferioridad social y un demérito moral. 2.4. Educación del sentido del gusto y consumo devoto En función de la unidad del sistema de hábitos mentales y prácticos de la mente humana, los principios del ocio y del gasto ostensible acaban extendiéndose a todos los aspectos importantes de la vida: el sentido del gusto o la religión. Se prefiere el trabajo imperfecto realizado a mano al perfecto acabado del producto fabril; se encomia incluso lo defectuoso, y hasta se reclama la vuelta al taller artesanal y a la industria doméstica frente a lo impecable del remate fabril. El ocio vicario de una mujer medianamente adinerada tiene que contar con un cuerpo importante de senadores domésticos. Se trata de una necesidad impuesta por el código de las conveniencias sociales. Por otra parte, en tanto que el trabajador común permanece oculto para la divinidad, el sacerdote, liberado del trabajo industrial, tiene al menos el privilegio de servir directamente a su señor. Además, como la mujer y el criado de librea, el sacerdote participa también vicariamente del ocio y del consumo ostensibles de su señor.
3. Estructuración dual de la cultura y la educación en la sociedad industrial avanzada
3.1. Educación realista y solidaria de la clase trabajadora asalariada de la gran industria moderna Además, durante esas dos etapas de la evolución social, la cultura y la educación se han visto dominadas por un esquema general de la vida que incluía el desprecio del trabajo productivo de las mujeres y de las capas sociales dependientes. 3.2. Culto al dinero o producción y distribución racionales solidarias de la riqueza Es preciso recalcar que, se debe distinguir dos tipos culturales y educativos distintos y contrapuestos entre sí. A saber: la cultura dineraria del capital y de todos los grupos sociales que comparten sus intereses materiales: y la cultura industrial de los obreros y los técnicos que trabajan en la gran industria moderna. La primera es esencialmente egoísta y «depredadora»: busca ante todo la «eficiencia dineraria». La segunda, producto de la «eficiencia industrial», es esencialmente solidaria y racionalista. Por otro lado, la cultura industrial educa la mente para la “eficiencia industrial”. La cultura dineraria la modela con vista a la «eficiencia pecuniaria», apoyándose para ello en las tradiciones y en la psicología social de la cultura depredadora primitiva y de la cultura especial de la clase ociosa. Otro punto a mencionar es, en la moderna sociedad industrial acaban por contraponerse dos visiones de la realidad y dos tipos antagónicos de hombre: el hombre económico y el hombre industrial. 3.3. Resistencia social de la clase ociosa y carácter incierto del futuro histórico El autor en este punto menciona que, hasta ahora, la reacción de la clase ociosa ha sido básicamente defensiva, y se ha producido en todos los dominios fundamentales de la cultura (social y económico, político e ideológico). Por otro lado, la alternativa entre el culto al dinero o la producción y la distribución racionales y solidarias de la riqueza constituye, sin duda, la clave principal del presente histórico. Y la fuerza de la primera de estas dos opciones es tan grande, que podría imponer de forma definitiva su ideal particular del ser humano: el hombre económico, que no tiene más móvil para su conducta que el afán de riqueza. Otro aspecto en el que hace hincapié el autor es que, el hombre de negocios es el responsable del patrioterismo nacionalista y del armamentismo en ascenso, esencialmente conservadores y que restablecen de hecho la cultura, la educación y la psicología social estamentales. 4. Sociología del sistema de enseñanza 4.1. Estructuración dual del sistema de enseñanza moderno y del saber escolar Veblen en este punto nos explica que, mientras en los países industriales avanzados la ciencia y los conocimientos prácticos penetran en la enseñanza elemental y en las escuelas técnicas profesionales, la educación de tipo tradicional, pese a ciertos cambios, continúa dominando la enseñanza secundaria y la enseñanza superior. De igual manera, nos menciona que estos hechos acontecen debido a que, el sistema educativo se halla todavía bajo el control de la clase académica tradicional y constituye la base material de su distinción social como una clase ociosa dependiente más. 4.2. Universidad sexuada y Kindergarten En este apartado, el autor recalca, la educación tan desigual que existía, nos menciona también pues, que, la educación superior de la mujer siempre fue marginada, y que las puertas de la universidad no se abren para ella sino de forma tardía y siempre discriminatoria. Cuando finalmente se produce, esa admisión tiene lugar por la puerta de servicio de los estudios profesionalmente menos prometedores, mientras, de un modo o de otro, continúa viéndose excluida de las "carreras" realmente "superiores". 4.3. Educación como forma de consumos ostensible y de distinción social Veblen nos menciona que, el control del sistema escolar es, por tanto, el arma cultural básica de la clase académica y erudita. Esa es la clave de la transformación del sistema escolar en un mecanismo de distribución jerarquizada de la distinción social y del prestigio académico. Por otro lado, explica que el consumidor de educación y de cultura que se opone al progreso científico-técnico, a la modernización del sistema escolar y a la eliminación de la desigualdad entre el varón y la mujer y entre las clases sociales en general. Para él, el sistema de enseñanza constituye un mecanismo eficaz de distinción social y de distribución del poder. Permitir el acceso de la mujer en igualdad de circunstancias es aumentar la competencia y dificultar relativamente la función de selección y de movilidad social del sistema. 5. Sociología del Curriculum 5.1.Formalismo pedagógico, consumo de erudición y oposición a las ciencias de la clase académica Es importante mencionar en este aspecto que, el sistema escolar funciona como un mecanismo de dominación cultural orientado a la inculcación de un sistema de hábitos mentales y morales determinado. Asimismo, se menciona que el control del sistema de enseñanza por la clase académica es el factor clave en orden a explicar la composición y la evolución de los contenidos básicos del curriculum escolar. Por otro lado, Veblen aborda el estudio de los clásicos en tanto que modelador de una mentalidad aristocrática, como prueba del derroche de ocio ostensible y de consumo erudito, y como garantía de distinción social, por más que se disfrace con el culto formal del rigor. 5.2.Mercantilización del curriculum, la pedagogía y el sistema de enseñanza en general Como último aspecto que explica Veblen, resalta las consecuencias principales de la enseñanza media y superior por el poder económico sobre los nuevos planes de estudio, los métodos de enseñanza y la orientación general de la política educativa de los distintos centros. Menciona, además, que todas las deficiencias parciales son solo una pequeña parte del un proceso de mercantilización creciente y general del sistema de enseñanza: los centros compiten duramente para conseguir los alumnos más pudientes y los mejores medios financieros, se adaptan a la psicología social conservadora de sus principales benefactores y ponen incluso la dirección en manos de los hombres de negocios.