Taller Adrenérgicos
Taller Adrenérgicos
Una de las problemáticas más relevantes a mundial en los años recientes fue la pandemia
mundial causada por el virus SARS-CoV2, mejor conocido como COVID-19, motivo por el
cual se han explorado diversas alternativas para su tratamiento, una de estas hipótesis
está relacionada con el uso de Beta Bloqueadores en las etapas iniciales de la
enfermedad con el fin de reducir la probabilidad de desarrollar sintomatología grave.
Las hipótesis sobre el uso de beta bloqueadores para el tratamiento del COVID-19 puede
explicarse mediante los estadios de la enfermedad, para la cual se han descrito de
manera general 3 estadios, en primer lugar se observa una respuesta viral, en segundo
lugar una fase pulmonar y finalmente una fase hiperinflamatoria, siendo está última la fase
de mayor interés debido a que en esta se observan los síntomas más fatales de la
patología, por lo cual se estudian alternativas que permitan prevenir o retrasar la
progresión de la enfermedad hasta esta fase. Los autores describen como una de las
principales causas de la respuesta hiperinflamatoria la activación de la respuesta
inmunitaria mediada por Linfocitos Th-17 y a la liberación exacerbada de citoquinas
proinflamatorias.
Lo anterior es respaldado por los autores empleando estudios previos de los efectos del
uso de beta bloqueadores en cáncer y otras enfermedades autoinmunes [1], debido a que
estos cumplen un rol de vital importancia a la hora de mediar un amplio rango de
respuestas fisiológicas, dentro de las cuales destacan funciones cardiorrespiratorias, que
son particularmente de interés en el tratamiento del COVID-19. Es importante considerar
que los receptores beta-2 son el principal receptor del SARS-CoV-2, otro hecho que lleva
a plantear la inclusión de bloqueadores beta adrenérgicos al tratamiento ya que la
inhibición de los receptores implica una reducción en la entrada celular del virus. [2]
El efecto terapéutico potencial de los beta bloqueadores en el tratamiento del COVID-19
se puede enfocar desde dos perspectivas, en primer lugar, como un agente empleado
para reducir la cantidad de partículas virales en el organismo, y en segundo lugar como
un inhibidor de la respuesta inmune mediada por linfocitos Th-17 así como de la
respuesta proinflamatoria mediada por citoquinas. En base a lo anterior cabe considerar
que el uso de agonistas beta bloqueadores tendría efectos negativos ya que estaría
contribuyendo a la respuesta inflamatoria y por ende exacerbando la sintomatología en las
etapas tardías de la enfermedad; por tanto, es importante conocer si el paciente toma
algún fármaco de este grupo previamente y realizar los ajustes a la farmacoterapia
correspondientes. En cuanto al uso de bloqueadores beta adrenérgicos aún faltan más
estudios para establecerlos como un agente de primera elección para el tratamiento del
COVID-19, sin embargo, es importante tenerlos en consideración en pacientes que sean
más vulnerables a la afección de vías aéreas y al daño permanente que se puede generar
por las reacción hiperinflamatoria.
Referencias
[1] Barbieri, A., Robinson, N., Palma, G., Maurea, N., Desiderio, V., & Botti, G. (2020).
Can beta-2-adrenergic pathway be a new target to combat SARS-CoV-2
hyperinflammatory syndrome?-lessons learned from cancer. Frontiers in Immunology, 11,
588724. https://doi.org/10.3389/fimmu.2020.588724
[2] Vasanthakumar, N. (2020). Beta-adrenergic blockers as a potential treatment for
COVID-19 patients. BioEssays: News and Reviews in Molecular, Cellular and
Developmental Biology, 42(11), e2000094. https://doi.org/10.1002/bies.202000094