Ensayo Pena de Muerte

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 12

ENSAYO SOBRE PENA DE MUERTE EN EL PERU

ESSAY ON THE DEATH PENALTY IN PERU.

Autor : Brian Joffre Velasquez Huali


Universidad: Universidad Nacional Mayor de San Marcos
Correo: brian.velasquez@unmsm.edu.pe
Sumario:
Resumen: Este artículo se escribe a razón de exponer la pena de muerte en el
Perú ya que es un tema muy polémico que se debate muy a menudo cada vez que
aumenta el número creciente de casos de violación, asesinatos, entre otros
crímenes graves.
Para iniciar vamos a explicar el concepto de pena de muerte, su normativización
Internacional, y la respuesta de la legislación peruana respecto a ella, y las
diversas posturas respecto a ella.
El tema de la pena de muerte se divide principalmente en dos tipos que se vamos
a desarrollar: Primero están las muchas voces indignadas que proclaman que se
debe aplicar la pena de muerte como medida efectiva a los delincuentes con
crímenes muy graves. En el polo opuesto están las voces que dicen que tal
castigo es excesivo e inefectivo a tales criminales.

Por último la opinión de que se debe confrontar de otra manera el problema de la


delincuencia, ya que la aplicación de la pena de muerte no se constituye como el
remedio más efectivo ni a corto ni siquiera a largo plazo.
Abstract: This article is written in order to expose the death penalty in Peru since it
is a very controversial issue that is debated very often every time the increasing
number of cases of rape, murder, among other serious crimes increases.
To begin, we are going to explain the concept of the death penalty, its international
standardization, and the response of Peruvian legislation regarding it, and the
various positions regarding it.
The subject of the death penalty is mainly divided into two types that we are going
to develop: First there are the many indignant voices that proclaim that the death
penalty should be applied as an effective measure to criminals with very serious
crimes. At the opposite pole are the voices that say that such punishment is
excessive and ineffective for such criminals.
Finally, the opinion that the problem of crime must be confronted in another way,
since the application of the death penalty is not constituted as the most effective
remedy, neither in the short nor even in the long term.

Palabras Claves: Pena de muerte, delincuentes, castigo excesivo, crímenes


muy graves, normativización internacional.

Key Words: Death penalty, criminals, excessive punishment, very serious


crimes, international standardization.

Introducción:
La pena de muerte, son palabras que se escuchan a menudo en las noticias
extranjeras, películas, series, revistas, videojuegos, etc. Son palabras que
muy a menudo escuchamos cuando se produce una polémica en especial
para el castigo de violadores, pederastas, y asesinos en serie. Es recurrente
escuchar posiciones que están a favor y en contra de esta medida dando
diversos argumentos, pero que significa en realidad la pena de muerte.
Contenido Argumentativo:
La pena de muerte significa según el Diccionario Español Jurídico: ‘’Sanción
penal que consiste en matar al condenado”. Es decir, es una pena que mata
a la persona que sanciona y es considerada la pena capital (pena máxima) en
muchos países. En nuestro pais no tenemos a la pena de muerte como pena
máxima en cambio nuestra pena máxima es la cadena perpetua (pasar el
resto de tu vida en la cárcel) excepto para los delitos de traición a la patria y
terrorismo según las leyes y tratados, que vamos a ver mas adelante.
Según la normativización Internacional de la pena de muerte sólo 20 países
son responsables de todas las ejecuciones conocidas que se llevaron a cabo
en el mundo. Países como China, Irán, Arabia Saudí, Irak y Egipto continúan
liderando esta terrorífica lista. China sigue, año tras año, siendo el mayor
ejecutor mundial, aunque se desconoce la verdadera magnitud del empleo
de la pena de muerte en ese país, al estar clasificados los datos relacionados
con ella como secreto de Estado; la cifra oficial de, al menos, 657
ejecuciónes no incluye las miles de ejecuciones que, presumiblemente,
tuvieron lugar en el país asiático. Excluyendo a China, el 86% de las
ejecuciones conocidas tuvieron lugar en tan sólo cuatro países: Arabia
Saudí, Egipto, Irak e Irán.

Irán es el segundo país, sólo superado por China, que más utilizó la pena de
muerte. En 2019 ejecutó al menos a 251 personas; cuatro de ellas menores
de 18 años en el momento en que se cometió el delito. Sin embargo, la falta
de transparencia hace que resulte difícil confirmar el número real de
ejecuciones, que podría ser mucho mayor.

Arabia Saudí ejecutó a un número sin precedentes de personas en 2019. Al


menos 184 personas fueron ejecutadas, el mayor número de ejecuciones
registradas por Amnistía Internacional en un solo país en un año. La mayoría
de las ejecuciones se llevaron a cabo por delitos relacionados con las
drogas y por asesinatos, pero, además, creció el empleo de la pena capital
como arma política contra la disidencia de la minoría musulmana chií en
Arabia Saudí. Además, en abril fueron ejecutadas 37 personas, condenadas
por “terrorismo” tras juicios que se basaron en confesiones obtenidas bajo
tortura.

En Irak, casi se duplicó el número de personas ejecutadas, de al menos 52


en 2018 a, al menos, 100 en 2019, debido en gran medida a que la pena
capital se siguió usando contra personas acusadas de pertenecer al “Estado
Islámico”.

Egipto impuso el 62% de las condenas a muerte confirmadas en el Norte de


África y Oriente Medio. 32 personas fueron ejecutadas y 435 condenadas a
muerte. Las ejecuciones registradas se llevaron a cabo por asesinato, y las
condenas a muerte se impusieron por asesinato, delitos relacionados con el
terrorismo, violación, atentado contra el presidente, intento de asesinato e
incitación a la violencia.

En una nota más actual año 2019 vio como el impulso hacia la abolición
mundial de este castigo cruel, inhumano y degradante sigue su curso a
pesar de que algunos países van en contra de esta tendencia.

En comparación con 2018, las ejecuciones confirmadas disminuyeron un


5%, hasta descender a la cifra de 657 ejecuciones repartidas en 20 países, la
más baja registrada en al menos una década.

Cuando Amnistía Internacional comenzó su campaña global contra la pena


de muerte en 1977, la pena capital estaba abolida solo en 16 países. Al
terminar 2019, 106 países habían abolido la pena de muerte para todos los
delitos y 142 países la habían abolido en la ley o en la práctica.

Aunque ningún país abolió la pena de muerte en 2019, se tuvo constancia de


algunas señales positivas que indican que el deseo de mantener esta pena
disminuye entre los países que aún no la han abolido. En Estados Unidos,
New Hampshire se convirtió en el vigesimoprimer estado que abolía la pena
capital para todos los delitos y el gobernador de California —el estado del
país con la mayor población de personas condenadas a muerte— decretó
una moratoria de las ejecuciones.

Otros países, como Kazajistán, la Federación Rusa, Tayikistán, Malasia y


Gambia continuaron aplicando sendas moratorias de las ejecuciones.
Barbados eliminó la pena capital preceptiva de su Constitución, y hubo
medidas o declaraciones positivas que podrían propiciar en breve la
abolición en Gambia, Guinea Ecuatorial, Kazajistán, Kenia, la República
Centroafricana y Zimbabue.

Además, se dieron conmutaciones o indultos de la pena de muerte en 24


países: Bangladesh, China, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Estados
Unidos, Gambia, Ghana, Guyana, India, Indonesia, Irak, Kuwait, Malasia,
Marruecos y el Sáhara Occidental, Mauritania, Níger, Nigeria, Omán,
Pakistán, Singapur, Sudán, Tailandia, Zambia y Zimbabue.

Por primera vez desde 2011, disminuyó el número de países que llevaron a
cabo ejecuciones en la región de Asia y Oceanía. Por primera vez desde 2010
no se llevaron a cabo ejecuciones en Afganistán y en países como Taiwán y
Tailandia no se llevaron a cabo ejecuciones, al contrario que en 2018.
En una escala más pequeña esta la convención Americana de Derechos
Humanos (También conocida como pacto de San José) de la cual a la fecha,
veinticinco naciones se han adherido a la Convención: Argentina, Barbados,
Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Dominica, Ecuador, El Salvador,
Granada, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá,
Paraguay, Perú, República Dominicana, Surinam, Trinidad y Tobago,
Uruguay y Venezuela. Fue suscrita, tras la Conferencia Especializada
Interamericana de Derechos Humanos, el 22 de noviembre de 1969 en la
ciudad de San José en Costa Rica y entró en vigencia el 18 de julio de 1978.

Perú ratifico en julio de 1978 dicho Tratado Internacional debiendo asi


cumplir las exigencias del ámbito internacional que le asi le indican.

Hay dos puntos claves acerca de esta convención: Un primer punto es que la
Convención impide a los países extender la pena de muerte para delitos que
no estuvieran ya contemplados con anterioridad en sus territorios. Quiere
decir que la pena de muerte no puede ampliarse más allá de lo que dice la
ley antes dela ratificación.

Un segundo punto es que el tratado señala que ningún país puede


interpretar la Convención para limitar la libertad de sus ciudadanos. Quiere
decir que el Estado que ratifica no puede interpretar los artículos de la
Convencion para su propio uso.

La pena de muerte es un tema de discusión en nuestro país tanto para los


intelectuales, políticos, periodistas y gente común sobre la implementación
de esta medida con posturas muchas veces contradictorias donde cada
parte lanza sus propios argumentos. Pero antes de debatir sobre dichas
posturas, hay que ver que dice la legislación peruana respecto a la pena de
muerte.

Artículo 140° de la Constitucion Del Peru

- La pena de muerte sólo puede aplicarse por el delito de traición a la patria


en caso de guerra, y el de terrorismo, conforme a las leyes y a los tratados
de los que el Perú es parte obligada.

Esto quiere decir que no se puede aplicar la pena de muerte para nada mas que
los delitos de traición a la patria en caso de guerra y terrorismo. Esto significa que
delitos atroces como la de violación y asesinato en serie se castigarían en el peor
de los casos con cadena perpetua; esto es una de las razones porque mucha
gente quiere la pena de muerte, debido a que estos criminales no se les castiga lo
suficiente. Aunque hay argumentos en contrario, la duda seria :

¿Porque no se cambia la Legislación Actual?


Se debe principalmente a que el Perú está inscrito al Tratado de San José
(también llamado Convención Americana de Derechos Humanos) que prohíbe
dentro de su contenido que los países suscritos puedan modificar la legislación
para ampliar la pena de muerte y para interpretar el Tratado.

Cambiar la legislación requeriría un monton de pasos que involucraría retirarse de


dicho tratado, entre muchas otras consecuencias que llevarían mucho tiempo y
recursos.

Pero cuales son las posturas principales respecto a la pena de muerte:

La primera postura es la que indica que se debe implementar la pena de muerte


para los crímenes más serios como pederastia y asesinato en serie,entre otros
crímenes atroces

Según el Abogado Ricardo Bolaños Salazar afirma que “es un hecho recurrente en
nuestro país que cada vez que ocurre un abominable caso de violación de un
menor de edad se alzan las clásicas voces que exigen la aplicación de la pena de
muerte para los perpetradores de tan horrendos crímenes”.
Soy de la opinión que para combatir el problema de la delincuencia la aplicación
de la pena de muerte no se constituye como la solución más idónea ni siquiera
desde un punto de vista práctico.
De acuerdo a lo expresado por el abogado Alberto de Belaunde, Ex Congresista
de la Republica, sostiene que:
, ex Congresista de la Republica que representan la inefectividad de la pena de muerte
son:

_ NO EXISTE EVIDENCIA QUE COMPRUEBE (VERDADERAMENTE) EL


CARÁCTER DISUASIVO DE LA PENA DE MUERTE.

La pena de muerte no es una solución mágica para la problemática de la delincuencia


como muchos pueden pensar, no se puede resolver los problemas simplemente matando
al infractor de tales crímenes, al imponer la pena de muerte prescindiendo de todo
análisis, a largo plazo con el fin de aplacar a la multitud de indignados, abandonando así
la obligación de aportar a políticas públicas preventivas y penales serias, prefiriendo una
versión contemporánea de la ley del talión donde el dicho ``ojo por ojo´´ y ``diente por
diente´´ se aplique a nivel nacional donde la vida del victimario valga tanto como de la
victima, lo que seria muy absurdo si uno lo piensa tomando en cuenta las consecuencias,
pues la justicia se vería obligada a cometer los delitos que ella misma prohíbe por
inhumanos según Canelo (2017).

En primer lugar, la comprobación científica de que la pena de muerte no disuade,


especialmente en casos de esta naturaleza, puesto que aún no existen estudios
científicos que demuestren que efectivamente en países con pena de muerte el índice de
asesinatos se hubiese reducido. A modo de ejemplo, Estado Unidos de América que es
uno de los países en donde aún se permite la pena de muerte, continúa siendo uno de los
países con mayor delincuencia en el mundo y por supuesto, con mayor número de
reclusos en el mundo. Así que el argumento de que la pena de muerte disuade
efectivamente a los delincuentes no es valido hasta que se compruebe efectivamente lo
contrario.

- EN UN SISTEMA DE JUSTICIA QUE INNUMERABLES VECES NOS HA


MOSTRADO SUS FALENCIAS, LA PENA CAPITAL PODRÍA TERMINAR
SIENDO UN REMEDIO PEOR QUE LA ENFERMEDAD, ES DECIR,
CONDENANDO A UN INOCENTE.

En sistema judicial, que adolece de certidumbre y que muchos casos se han se han
sentenciado y ejecutado por error a personas por crímenes que nunca cometieron, en un
sistema judicial con procesos confusos y mediáticos, llevados a cabo dentro del contexto
de una población indignada y de medios de comunicación que suelen “dictar” sentencia a
través de sus titulares, motivados muchas veces solo para ganar la atención de las
personas y vender, es por estos factores que los juicios no siempre garantizan
resoluciones sólidas.

Un estudio publicado el 2014 por la Academia de Ciencias de Estados Unidos ha


concluido que el 4,1% de las condenas a muerte en ese país fueron por errores judiciales.
Los dos casos más sonados de ejecutados por este tipo de delito en el Perú son
demostrativos. Uno, el del Monstruo de Armendáriz, fusilado en 1957 siendo inocente.
Medicina legal lo descubrió años después. El último fusilado, en 1970, Udilberto Vásquez
Bautista, no solo es hoy considerado inocente por la población de Cajamarca, sino que su
tumba convoca fieles y procesiones en su homenaje según Garcia (2018)

Esto nos hace indicar que la pena de muerte a pesar de revisada múltiples veces, no
puede ser conducido por la fiscalía puede cometer errores como cualquier otro proceso,
pero a diferencia de cualquier otro en este proceso en ``especifico´´ si se comete algún
error la consecuencia no es patrimonial sino lo que se pierde son vidas humanas que no
se van a volver a recuperar, no es como un condenado a cadena perpetua que tras volver
a revisar su expediente se puede volver a verificar si es inocente o no.

El Perú es muy conocido por sus múltiples falencias en su sistema de justicia donde
se producen varios casos al mes de jueces que dejan en libertad a culpables y se encierra
a inocentes o viceversa. Como es el reciente caso de Keiko Fujimori donde se muestra el
error del sistema judicial según Fows (2019).

Asimismo hay que agregar al registro de errores del sistema judicial, es que la ``pena
de muerte´´ es posición o solución que no se puede aceptar ya que pueden ser
influenciadas por la corrupción de los funcionarios públicos para condenar a quien
quisieran eliminar su adversario o competencia.

Puedo concluir al respecto que la pena de muerte no es una solución idónea, es decir
que el remedio puede ser peor que la enfermedad en si.

 NO PUEDE INSTAURARSE DEBIDO A LA OBEDIENCIA A LAS


OBLIGACIONES INTERNACIONALES, TODA VEZ QUE EL ARTÍCULO 4° DE
LA CADH, QUE RECONOCE EL DERECHO A LA VIDA, QUE SE IMPONE A
LOS ESTADOS MIEMBROS, Y RECONOCIDO POR EL PERÚ A TRAVÉS DE
LA CONSTITUCIÓN DEL ESTADO.

Según el inciso 2 del artículo 4 de la convención Americana de Derechos Humanos


dice:

“2. En los países que no han abolido la pena de muerte, ésta sólo podrá
imponerse por los delitos más graves, en cumplimiento de sentencia
ejecutoriada de tribunal competente y de conformidad con una ley que
establezca tal pena, dictada con anterioridad a la comisión del delito. 
Tampoco se extenderá su aplicación a delitos a los cuales no se la aplique
actualmente”. (Luisa, 2012, p.1)

Por razones jurídicas, la mayoría abrumadora de países latinoamericanos entre ellos el


Perú tienen prohibido restablecer la pena de muerte en virtud de un tratado internacional
la Convención Americana de Derechos Humanos o Pacto de San José (solo se aplica en
caso de traición a la patria en casos de guerra exterior-Constitución de 1979) según
Vilcachagua (2018).

Para cambiar su ley penal interna se tendrían que denunciar, primero, ese tratado y,
luego de dos años, solo podrían modificar la constitución y recién ahí el código penal
para los delitos que se produjeran a partir de allí.

Para el Perú no es beneficioso porque se tendría que retirar de un tratado


internacional importante, disminuyendo de esta manera su prestigio local ante los países
de Latinoamérica con lo cuales firmo el tratado solo para aprobar una idea a favor de un
grupo de personas indignadas que aunque son victimas pero no es beneficioso en general
para el bien común del país a largo plazo.

Además, cambiar la legislación llevaría mucho tiempo en el proceso que se tendría que
retirar de la Convención Americana de Derechos Humanos y que se desperdiciaría para
hacer en vez otros proyectos de mas importancia que requiere el Perú como la lucha
contra la corrupción o la delincuencia.

Estas afirmaciones se apoyan según el Presidente del Poder Judicial Duberli


Rodríguez que afirma que es jurídicamente inviable ya que tendríamos que abandonar la
competencia de la Corte Interamericana de La Haya según Caso (2018).

Esta afirmación es cierta ya que es una instancia supranacional a la cual acudimos


para que dicha instancia pueda analizar y revisa los casos en el cual el Estado a través
del poder judicial ha conculcado derechos humanos de los ciudadanos, de retirarnos no
tendríamos una instancia más para llevar a la justicia los abusos del Estado o los errores
de nuestro Sistema Judicial que nos ha mostrado un historial de falencias.

- AFECTARÍA EL LIDERAZGO PERUANO EN ESPACIOS MULTILATERALES YA


QUE EXISTE EN EL MUNDO UNA MARCADA TENDENCIA ABOLICIONISTA.

El restaurar la pena de muerte tendría consecuencias desastrosas pues Perú iría en


contra de dicha tendencia que ha ido progresando a través de los años, lo cual afectaría
nuestro prestigio internacional que ha ido progresando a través de los años, que nos ha
permitido alcanzar espacios importantes en organismos internacionales, como el ser
miembros del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Según datos de Amnistía Internacional cuando se comenzó su campaña global contra
la pena de muerte en 1977, la pena capital estaba abolida solo en 16 países. Al terminar
2018, la habían abolido en la ley para todos los delitos 106 países, la mayoría de los
Estados del mundo, y más de dos tercios, 142 países, la habían abolido en la ley o en la
práctica. Las países donde mas se concentran la ejecuciones de pena de muerte son
China, Irán, Arabia Saudita, Vietnam, Irak países donde la democracia o libertad de
expresión son limitadas o inexistentes según Pena de muerte (2018).

Como se muestra algunos de los países que más personas ejecutan tienen sistemas
judiciales profundamente injustos donde las minorías o grupos de poder político tienen
absoluto gobierno en los poderes del Estado. Los tres países que más usan la pena
capital (China, Irán y Arabia Saudí) lo hacen en circunstancias turbias y poco claras(se
especula incluso que se logra utilizar la pena de muerte como un medio para hacer
cumplir las disposiciones del Estado como eliminar a opositores políticos) debido a que
algunos países se guardan la información de ciertas ejecuciones esto es especialmente
cierto en el caso de China ya que es desconocido la verdadera escala de la pena de
muerte ya que es un secreto de Estado.

Además muchas de estas condenas de muerte se basan en "confesiones" obtenidas


mediante tortura que violan múltiples leyes de varios Derechos humanos.

El Perú por esta ultima razón aun debe formar parte en el futuro de los parte de los
países que han abolido la pena de muerte para demostrar que es un país donde se
respetan los derechos humanos como el respeto a la libertad de expresión, el respeto a la
vida, etc. El Perú debe demostrar de que es un país justo que sigue las tendencias
mundiales y alejarse de esta manera a los modelos de países antidemocráticos como
China o Irán.

El Perú tiene cuarenta años desde que se abolió la pena de muerte en la constitución
de 1979, así que instaurar la pena de muerte después de tantos años de no aplicarla en
el Perú nos haría que dar mal ante el panorama internacional.

Se puede recapitular sobre la pena de muerte que:

1. No existe evidencia que compruebe (verdaderamente) el carácter disuasivo de la


pena de muerte.
2. En un sistema de justicia que innumerables veces nos ha mostrado sus falencias,
la pena capital podría terminar siendo un remedio peor que la enfermedad, es
decir, condenando a un inocente.
3. Debido a la obediencia a las obligaciones internacionales, toda vez que el artículo
4° de la CADH, que reconoce el derecho a la vida, que se impone a los estados
miembros, y reconocido por el Perú a través de la constitución del estado.
4. Afectaría el liderazgo peruano en espacios multilaterales ya que existe en el
mundo una marcada tendencia abolicionista.

Se puede decir con estas razones que con seguridad la pena de muerte no esta
justificada de ninguna manera ya que trae más perjuicios que beneficios el implementarla.

Lo que se debería hacer es que el Estado en lugar de responder por las penas
después de procesado el delito debería procurar en la prevención del delito y en la
transparencia del proceso judicial.

El estado debe prevenir la delincuencia lo cual provocaría que:

- Disminuirá la cantidad de delitos que se producen a diario.

- Mejoraría nuestra percepción al exterior.

- Informaría a las personas de como enfrentar los peligros que se encuentran en las
calles.

- Reduciría los costos futuros del Estado.

- Funciona como una medida a largo plazo.

La clave para esto es la educación, debido a que se podrá enseñar a los jóvenes a ser
personas correctas en vez de dedicarse a los malos caminos de la delincuencia, la
prostitución, el sicariato juvenil, etc.

El Estado debe enfocarse también en la transparencia de los procesos judiciales ya


que los delincuentes aun cuando sean capturados a pesar de los esfuerzos de prevención
o por mas penas ya sean perpetuas o de muerte que se le impongan, si los juicios
estuvieron equivocados o manipulados entonces no tiene sentido alguno. Se tiene que
invertir más en medidas anti-corrupción para resolver los casos de corrupción o
malversación en el país. .
Finalmente para terminar la pena de muerte es una medida que no solo va en contra
del derecho a la vida, Dios, sino también contra el Estado. Además implementar la pena
de muerte no es beneficioso ni viable jurídicamente para el Perú aparte que nos da una
mala imagen internacional.

También podría gustarte