Manual Test de Los Temperamentos
Manual Test de Los Temperamentos
Manual Test de Los Temperamentos
El temperamento está relacionado con la influencia endocrina (que se debe a los genes, y que se
manifiesta en determinados rasgos físicos y psicológicos). El temperamento y el carácter definen
la personalidad del ser humano; y la diferente combinación e intensidad que éstos se manifiesten
en sus diferentes áreas, nos hacen únicos y humanos. Los temperamentos o el temperamento es el
rasgo descriptivo del estilo de actuar que nos distingue de los demás como únicos e
irreemplazables, de modo que podamos armonizar con ellos.
Actualmente, tiene su gran valor cotidiano y de utilidad para las personas en búsqueda de mayor
sentido a su vida mediante su expresión temperamental.
Temperamento sanguíneo
Este temperamento está basado en un tipo de sistema nervioso rápido y equilibrado que se
caracteriza por poseer una alta sensibilidad, un bajo nivel de actividad y fijación de la
concentración y una moderada reactividad al medio; es característico del sistema nervioso una
moderada correlación de la actividad a la reactividad; es extrovertido y manifiesta alta flexibilidad
a los cambios de ambiente.
Se trata de una persona cálida, campante, vivaz y que disfruta de la vida siempre que se
pueda.
Es receptiva por naturaleza, las impresiones externas encuentran fácil entrada en su interior
en donde provocan un alud de respuestas.
Tiende a tomar decisiones basándose en los sentimientos más que en la reflexión.
Es tan comunicativo que es considerado un extrovertido.
Tiene una capacidad insólita para disfrutar y por lo general contagia a los demás su espíritu
que es amante de la diversión.
Este tipo de personas por lo general, hablan antes de pensar, son extrovertidas, muy activas e
intuitivas.
Temperamento flemático
Basado en un tipo de sistema nervioso lento y equilibrado que se caracteriza por tener una baja
sensibilidad pero una alta actividad y concentración de la atención; es característico de su sistema
nervioso una baja reactividad a los estímulos del medio, y una lenta correlación de la actividad a la
reactividad, es introvertido y posee baja flexibilidad a los cambios de ambiente.
Es tranquilo, nunca pierde la compostura y casi nunca se enfada. Por su equilibrio, es el más
agradable de todos los temperamentos. Trata de no involucrarse demasiado en las actividades de
los demás. Por lo general suele ser una persona apática, además de tener una buena elocuencia. No
busca ser un líder, sin embargo puede llegar a ser uno muy capaz.
Temperamento melancólico
Basado en un tipo de sistema nervioso débil, posee una muy alta sensibilidad, un alto nivel de
actividad y concentración de la atención, así como una baja reactividad ante los estímulos del
medio, y una baja correlación de la actividad a la reactividad; es introvertido y lo caracteriza una
baja flexibilidad a los cambios en el ambiente.
Está basado en un tipo de sistema nervioso rápido y desequilibrado, posee baja sensibilidad y un
nivel alto de actividad y concentración de la atención, aunque tiene alta reactividad a los estímulos
del medio y una muy alta correlación, también es flexible a los cambios de ambiente. Cuando se le
describe o dice algo que le fastidia o desagrada, trata de callar de forma violenta a las personas que
se lo dicen. Es rápido, muy activo, práctico en sus decisiones, autosuficiente y sobre todo
independiente. Es extrovertido, pero no tanto como la persona de temperamento sanguíneo. Se fija
metas y objetivos. Es muy ambicioso. Valora rápida e intuitivamente y no reconoce los posibles
tropiezos y obstáculos que puede encontrar en el camino si busca lograr una meta.2
Ejemplo:
Si su evaluado contesto la opción A en la actividad de al Caminar, coloque así en la matriz de
calificación:
A B C D
Al caminar x
A B C D C S M F
Al caminar x x
Al caminar:
A: Tiene un paso firme, resuelto. Pisa fuerte, camina rápido y seguro en una dirección
determinada. No se deja desviar fácilmente.
B: Su paso es ágil. Salta, trota, camina en zig-zag y descuidadamente. Se deja desviar fácilmente.
C: Camina silenciosamente, concentrado, lento, arrastradamente. En ocasiones da la impresión de
estar muy cansado o apesadumbrado.
D: Camina pausadamente, perezosamente. Su andar es tranquilo y constante. Nunca anda grande
distancias.
La mirada:
A: Tiene una mirada punzante, resuelta, firme y crítica. Mira calculadoramente y en ocasiones
amenazadoramente.
B: Tiene una mirada plácida, lánguida e inexpresiva. A menudo cierra los ojos para dormir. Puede
llegar a ser una mirada curiosa, pero de una curiosidad lenta, calmada.
C: Mira seria, preocupada o tristemente. En ocasiones parece “mirar a las nubes”, pero suele estar
“mirando hacia adentro”. Su mirada es bonachona, profunda y refleja admiración. Le gusta cerrar
los ojos y meditar.
D: Su mirada es alegre, vivaz, amigable. A menudo curiosa.
El vestir:
A: Sigue la moda pero recatadamente. Viste siempre pulcramente y expresando algo. Sin embargo
llama a veces la atención porque lleva un botón desabrochado, la camisa fuera o el pañuelo
sobresaliendo del bolsillo y a punto de caérsele.
B: Elige colores oscuros, no le gustan los colores chillones ni las formas estrambóticas. Su ropa es
siempre impecable.
C: Le gusta la ropa elegante, llamativa. Suele ir a la moda, puede llegar a gastar demasiado en
ropa; o andar descuidado, desprolijo.
D: Le gusta la ropa buena, usar la que corresponde en cada caso. Quiere decir algo conla forma de
vestir sin querer ser llamativo ni demasiado elegante. Su ropa es práctica.
Al saludar:
A: Quisiera saludar a todos, pero no se atreve. Cuando saluda lo hace en forma cortés y amigable.
Se entrega todo al saludar.
B: Saluda recién cuando ya se ha pasado diez metros. Entonces lo hace cortés y amigablemente.
En ocasiones puede pasar silenciosamente sin saludar a nadie.
C: Sólo saluda cuando le parece necesario y apropiado. Cuando lo hace es notoriamente, en forma
calculada y clara, sin ser impertinente.
D: Saluda según su estado de ánimo, a todo el mundo o a nadie. Chilla de una acera a la otra, se
lanza al cuello del otro para abrazarlo efusivamente. Saluda a menudo y a mucha gente.
Escribiendo cartas:
A: Escribe sólo cosas importantes y profundas. Piensa bien lo que quiere escribir. No se contenta
con lo escrito, rompe la carta y la empieza de nuevo. Termina la carta y la despacha. Le preocupa
saber si escribió realmente lo que debía y si lo hizo correctamente.
B: Escribe poco, pausadamente y con detalles. Sus palabras no son emotivas, pero sí sinceras y
correctas. Puede ser que sus cartas nunca lleguen a destino... ¡aún están sobre su escritorio!
C: Comienza a escribir según su estado de ánimo. Interrumpe la frase y comienza con algo nuevo.
Sigue escribiendo al día siguiente. Olvida cosas importantes. Escribe entretenidamente. Se acuerda
de la carta una semana después de terminarla y la despacha.
D: Escribe sólo cuando hay una razón clara y es necesario hacerlo. Calcula lo que escribe y cómo
lo escribe. Sus cartas son objetivas, frías, determinantes. Las termina y las despacha.
Ante un obstáculo:
A: No “arruga”, piensa rápidamente, agarra el obstáculo y lo quita del camino.
Pequeños obstáculos (p. ej. una piedra) los despeja de una patada. Le gusta superar las
dificultades.
B: Se siente tentado a saltar sobre el obstáculo o bien rodearlo para seguir su camino.
Procura “sacarle el cuerpo” a las dificultades, no las toma en serio o se mete en “camisa de once
varas”.
C: Medita seria y un tanto preocupadamente la situación. Después elimina el obstáculo consciente
de su responsabilidad. Le entristecen las dificultades y teme encontrar tarde la solución.
D: El obstáculo le permite hacer una pausa, siempre saludable. Una vez solucionado por sí solo el
problema sigue pausadamente su camino. De ser absolutamente necesario, comienza poco a poco
a solucionarlo.
En el tránsito:
A: Se lo toma con calma. Espera tranquilamente hasta que la masa se ponga en movimiento.
Entonces se deja empujar por ella. Se siente seguro y protegido de esta forma. No se molesta
tampoco cuando se convierte en un obstáculo y todos le recriminan.
B: Va con cara seria, pero abierta; sin sentirse a gusto entre la multitud. Le molesta el ruido de la
circulación. Se preocupa de ir a la defensiva y con cuidado para no molestar, no atropellar, no
llamar la atención.
C: Reacciona nerviosa e imprudentemente, anda zigzagueando, choca con las personas y está en
permanente peligro de acabar encima de algún radiador.
D: Observa fria y señorialmente el tráfico, las luces y la masa. Va con seguridad entre la multitud
y, si es necesario, se abre camino a codazos.
En las comidas:
A: Llega puntualmente, comienza sin preámbulos. No se alarga en la sobremesa, vuelve
rápidamente a sus ocupaciones.
B: Llega ceremoniosamente a la mesa. Come silenciosamente, concentrado en lo que hace. Come
poco. Come también lo que no le gusta. Habla poco. Se retira con gusto a descansar.
C: Llega a cualquier hora. No se rige demasiado por los modales. Juega con los vasos, platos,
cubiertos. Come sólo lo que le gusta. Habla y gesticula. Alarga las comidas indefinidamente.
D: Llega demasiado pronto o demasiado tarde. Come tranquilo. Habla pausadamente. Siempre es
el último en terminar. A veces da la impresión de que dormir y comer fuesen para él las cosas más
importantes.
En un micro o tren:
A: Se abre camino con seguridad, desafiante pero con tacto. Sólo habla si es necesario; prefiere
que le hablen a él primero.
B: Provoca una conversación amena, de vez en cuando distrayendo a todos los pasajeros. Se
sonroja fácilmente, pero está siempre dispuesto a entablar conversación y hacer amistades con
desconocidos.
C: Esta ocupado pensando en lo que quiere hacer. De entrar en conversación, puede llegar a ser un
interlocutor muy agradable, ¡si no se queda dormido!
D: Prefiere sentarse en un rincón. No habla con extraños, pero sí contesta amablemente si es
interpelado.
En el trabajo:
A: Nunca se sabe cuando llega ya que se distrae o entretiene por el camino. Trabaja
irregularmente. De tanto en tanto sueña o silba, conversa, desaparece para buscar comida o bebida.
Le cuesta “un mundo” la constancia y la continuidad.
B: Llega puntualmente. Comienza su trabajo con decisión y firmeza. Racionaliza siempre.
Presiona su ambiente hacia un mayor rendimiento. Quiere alcanzar nuevos “records”.
C: Se dirige al trabajo en silencio, concentrado y consciente de su deber. Siempre es puntual. Es
responsable y tranquilo en su ocupación. No le gustan los charlatanes o los “histéricos”.
D: Se hace esperar con frecuencia. Con toda tranquilidad... suele quedarse dormido. Tiene un
ritmo de trabajo lento y tranquilo, pero es constante y de fiar. Si se deja llevar puede llegar a ser
un holgazán de categoría.
La risa:
A: Se ríe sólo con motivo. Su risa no es fuerte, prefiere sonreir. Su risa es más bien interior, así
como su alegría.
B: Le gusta reírse y lo hace calmadamente. Puede pasar una hora antes de que “capte” la situación
y comience a reírse. Lo hace sin llamar la atención pero contagiosamente.
C: Ríe solamente cuando hay un motivo fundado para hacerlo. Entonces lo hace fuerte, de
corazón. A veces estrepitosamente pero nunca muy largo.
D: Es capaz de reírse en cualquier lugar y por cualquier cosa, a veces incluso sin motivo. Recorre
todas las octavas, canturrea, se ríe “para adentro”, se contorsiona, aulla, no puede dejar de reir.
Los gastos:
A: No gasta un centavo en cosas innecesarias. Todo gasto debe ser calculado y provechoso. No es
gastador si no cae en fumar, beber o jugar con exceso. En ese caso puede llegar a derrochar todo
su dinero.
B: Por naturaleza ahorrador, no gasta nunca impulsivamente. Suele necesitar dinero a menudo, ya
que se toma “tiempo libre” con frecuencia. Le salva el que suela tenderse a menudo para descansar
un poco...
C: Es incapaz de distribuir su dinero. Lo gasta según sus apetencias o estados de ánimo.Le gusta
“ser caballero” e invitar. Es incapaz de resistir una buena propaganda. Su cuota mensual nunca
llega hasta fin de mes.
D: Es el ahorrador por excelencia. Es muy crítico con sus gastos. No se deja seducir fácilmente
por la propaganda. Da parte de su dinero a obras sociales o de caridad. Le gusta que sus
posesiones sirvan al bien físico y espiritual de los demás.
Al dar la mano:
A: No termina nunca de dar la mano, pero a veces la da sólo tímidamente. A menudo golpea en los
hombros.
B: Aprieta firme y fuerte al dar la mano.
C: No sabe lo que es dar la mano con efusividad. Su apretón de manos es tranquilo y sincero.
D: Da la mano plenamente convencido de lo que hace. Quiere expresar su cercanía y amistad más
profunda.
Hablando:
A: Habla antes de pensar. Habla rápido, exagera, fanfarronea, señala, gesticula con pies y manos.
Le gusta ser el centro y llamar la atención. No es duro al hablar; sí sabe galantear y adular.
B: Habla poco, piensa y reflexiona. Cuando habla sus palabras son profundas y con
sentido. Habla bajo. Elabora en silencio sus experiencias compartiéndolas comedidamente.
Cuando se siente defraudado o afligido puede hacer duras críticas.
C: Es objetivo y parco al hablar, de voz clara y dominante. Su expresión es clara, decidida, a
menudo dura. Piensa antes de hablar. No habla innecesariamente.
D: Normalmente habla poco. Sus palabras son comedidas y bien escogidas. Habla “al grano” sin
agobiarse. No hace valoraciones ni da juicios prematuramente. Habla con cierta monotonía. A
veces es bueno para conversar.
Cómo ve la vida:
A: Valora la vida según la posición que ocupa y lo que rinde en ella. Su objetivo es vencer en la
“lucha” por la vida. La Historia Universal es a sus ojos la historia de la lucha por la vida.
B: Valora la vida según el cobijamiento y la paz que le brinde. Equilibrio y tranquilidad son lo
principal. Opina que muchas cosas deberían aceptarse tal y como son. El sentido de la vida es
alcanzar el mayor grado de paz interior y exterior.
C: Valora la vida según las alegrías que ésta le depara. Si no encuentra alegría tampoco le
encuentra sentido a la vida, ya que este consiste en dar y recibir alegría y felicidad.
D: Juzga la vida de acuerdo a la medida de la culpa y la gracia. La Historia es para él una historia
de pecado y conversión. El sentido de la vida es superar el pecado con la virtud y la santidad.
Cómo reza:
A: Da la impresión de estar distraído y ser superficial. Reza saltando de una cosa a otra,
entremezclando la gratitud con el perdón y las peticiones. Lo hace con buena intención y quiere
llevarse con Dios tan bien como con los hombres.
B: Reza seguro, con orgullo y sopesadamente. Siempre orienta su oración para beneficio propio.
Se presenta decidido y exigente ante Dios.
C: Presenta como su intención más grande el hecho de estar en desventaja con los demás. Pide
paciencia y aguante, energía y rendimiento. Reza en silencio, meditativamente, sin exigir y nunca
atropelladamente.
D: Tiene un impulso interior, profundo y sincero de hablar con Dios. Se sabe pecador y se siente a
menudo como “hijo pródigo”. Su oración más frecuente es la petición, muchas veces interior, por
otros.
En la confesión:
A: Se prepara bien y con exactitud, acercándose seguro de sí mismo a la confesión. Se confiesa
tranquilo, recibe la penitencia y se retira igualmente seguro de sí mismo.
B: Llega con recogimiento y bien preparado a la confesión. Se siente abatido por lo grave de sus
culpas y se acusa detalladamente de ellas. Agradece sinceramente cada palabra de aliento. Se
siente aliviado y cumple exactamente la penitencia.
C: Se siente intranquilo, le cuesta ordenar sus pensamientos, habla nerviosamente y sin orden, se
olvida con frecuencia de la penitencia.
D: Se deja tiempo, pero es sincero y exacto. No está especialmente excitado ni es superficial.
Agradece sinceramente la absolución. Cumple exactamente la penitencia... ¡cuando se acuerda de
ella!
A B C D
Al caminar
La mirada
El Vestir
Al saludar
El tiempo libre
Escribiendo cartas
Ante un obstáculo
En el tránsito
En las comidas
En la sala de espera del dentista
En un micro o tren
En el trabajo
La risa
Los gastos
Al dar la mano
Hablando
Cómo ve la vida
Como reza
En la confesión
Cómo se imagina el cielo
Nombre:
Fecha:
Edad:
Sexo: