Novena A La Santa Capa de San José

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 18

| NOVENA A LA SANTA CAPA DE SAN JOSÉ - (Holy Cloak

of St. Joseph )
Santa novena para pedir el amparo bajo el manto sagrado
de San José, para honrarlo y pedirle su patrocinio
La Novena:
1.- Esta novena en honor de San José es llamada el Santo
Manto de San José, para merecer el patrocinio de este gran
santo de una manera particular y especial y a la vez
tributarle honor.
2.- Es para ser recitada durante treinta días consecutivos en
la memoria de los treinta años de San José en compañía de
Jesús, Hijo de Dios. Si por alguna razón usted no puede
recitar la oración de un día en particular, usted puede
compensarla al recitarla el día 30, las veces que le faltó
rezar la oración de la novena.
3.- Las gracias extraordinarias obtenidas por esta oración
son innumerables. De hecho, Santa Teresa, dijo: "Si usted
quiere realmente creer en él, pruébelo recitando la novena
y finalmente se convencerá"
4.- Es más eficaz esta novena cuando se hace oración por las
almas del Purgatorio.
Con la misma solicitud que ayudamos a secar las lágrimas
de las almas que sufren, podemos esperar que San José nos
ayudará a secar nuestras lágrimas en nuestras necesidades.
De esta manera, la Capa Santa de San José se extiende
sobre nosotros y nos servirá como un escudo contra todos
los peligros que nos acechan, de modo que podamos un día,
con la gracia de Dios, obtener la salvación eterna.
Nuestro Señor y Nuestra Señora nos invita a amar, honrar y
rezar a San José.
El mismo Jesús dijo a Santa Margarita:
"Me gustaría que todos los días se ofrezcan oraciones
especiales a mi madre y a San José, mi más dulce guardián"
La Santísima Virgen le dijo a la Venerable Sor María de Jesús
de Ágreda con relación a San José:
"Usted debe asegurarse de aumentar continuamente su
amor y dedicación a este gran santo. En todas sus
necesidades, usted debe servirse de su protección, bajo
todas las circunstancias usted debe animar a tantas
personas como le sea posible hacia esta devoción, de
hecho, lo que mi devoto esposo pide en el cielo, Dios
todopoderoso lo concederá en la Tierra"
ORACIONES DE LA NOVENA DE LA CAPA SANTA:
Se reza todo hasta el final cada día. Todo lo que sigue cada
día.
Ideal que se haga por (30) días consecutivos, pero en caso
que no se pueda, se puede hacer como novena, por (9) días
consecutivos.
Se debe reza todo lo que sigue hasta el final, todos los días.
Por (30) días o por (9) días consecutivos en caso que no se
pueda.
°°°
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
Jesús, María y José, yo les doy mi corazón y mi alma. A
nuestro Padre Celestial en acción de gracias por haber
exaltado a San José a una posición de dignidad tan
excepcional.
Decir el Gloria tres veces.
OFRECIMIENTO:
I
Oh Glorioso Patriarca San José, yo humildemente me postro
ante ti. Ruego al Señor Jesús, a tu Esposa Inmaculada, la
Virgen María, y todos los Ángeles y los Santos en la Corte
Celestial, que me acompañen en esta devoción. Te ofrezco
este Manto precioso, mientras que prometo mis más
sinceras fe y devoción. Me comprometo a hacer todo en mi
poder para honrarte a lo largo de mi vida para probar mi
amor por ti.
Ayúdame, San José. Asísteme ahora y durante toda mi vida,
pero especialmente en el momento de mi muerte, como tu
fuiste asistido por Jesús y María, para unirnos un día en el
Cielo y allí honrarte por toda la eternidad. Amén.
II
Oh Glorioso Patriarca San José, postrado, delante de ti y de
tu Divino Hijo, Jesús, te ofrezco, con sincera devoción, este
precioso tesoro de la oración, siendo siempre consciente de
las numerosas virtudes que adornan tu sagrada Persona. En
ti, Oh Glorioso Patriarca, se cumplió el sueño de tu
precursor del primer José, que de por sí parece haber sido
enviado por Dios para preparar el camino para tu presencia
en esta tierra. De hecho, no sólo te ha rodeado por el
esplendor luminoso de los rayos del Sol Divino, de Jesús,
sino que también tú fuiste espléndidamente reflejado en la
brillante luz de la luna mística, la Santísima Virgen María.
Oh Glorioso Patriarca, si el ejemplo del anciano Jacob, quien
fue personalmente a felicitar a su hijo predilecto, quien fue
exaltado en el trono de Egipto, sirvió para traer a todos sus
descendientes allí, acaso no, deben el ejemplo de Jesús y
María, que te honran con su mayor respeto y confianza,
servirme para llevarme a mi tu fiel devoto, que me presente
a ti con este Manto precioso en tu honor.
Concédeme, oh Gran San José, que Dios Todopoderoso
puede a su vez dirigir una mirada benévola hacia mí. Pues el
ancestral José no rechazó sus hermanos culpables y crueles,
sino más bien los acepto con amor y protección y los salvó
del hambre y la muerte, te lo suplico, Oh Glorioso Patriarca,
a través de tu intercesión, haz que el Señor nunca me
abandone en este exilio de valle de dolores.
Haz que él siempre me nombre como uno de sus fieles
siervos que viven tranquilos y seguros, bajo el patrocinio de
tu Manto Santo. Haz que yo pueda vivir siempre dentro de
la protección de este patrocinio, todos los días de mi vida y
sobre todo en el momento en que respire mi último aliento.
ORACIONES:
I
Yo te saludo oh Glorioso San José, tú que estás encargado
de invaluables tesoros del Cielo y la Tierra y eres el Padre
adoptivo de Aquel que nutren a todas las criaturas del
universo. Tú eres, después de María, el santo más digno de
nuestro amor y devoción. Tú solo, por encima de todos los
Santos, has sido elegido para ese honor supremo de la
crianza, orientación, de alimentar e incluso abrazar al
Mesías, a quien tantos reyes y profetas habrían deseado
mirar.
San José, salva mi alma y obtén para mí de la Divina
Misericordia de Dios la petición que te ruego humildemente
_________. Y para las almas del Purgatorio, concédeles un
gran alivio en su dolor.
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
II
Oh poderoso San José, tú fuiste proclamado patrono de la
Iglesia Universal, por lo tanto, yo pido tu auxilio, por encima
de todos los otros Santos, como el mayor protector de los
afligidos, y ofrezco incontables bendiciones a tu
generosísimo corazón , siempre dispuesto a ayudar en
cualquier necesidad.
A ti, oh Glorioso San José, vienen las viudas, los huérfanos,
los abandonados, los afligidos, los oprimidos. No hay dolor,
angustia o agonía que no has consolado. Dígnate, te ruego,
utilizar en mi nombre los dones que Dios te ha dado, hasta
que a mí también me concedas la respuesta a mi petición y
que las almas benditas del purgatorio, recen a San José por
mí.
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
III
Innumerables son aquellos que han rezado a ti antes que yo
y han recibido consuelo y paz, gracias y favores. Mi corazón,
tan triste y doloroso, no puede encontrar reposo en medio
de esta prueba que me acosa. Oh Glorioso San José, tú
sabes todas mis necesidades, incluso antes de que las
pronuncie en la oración. Tú sabes lo importante que esta
petición es para mí. Me postro ante ti mientras suspiro bajo
el peso del problema que se enfrenta a mí.
No hay corazón humano en el cual puedo confiar mi dolor, y
aunque me encuentre a un ser compasivo que estaría
dispuesto a asistirme, todavía no podría ayudarme. Sólo tú
puedes ayudarme en mi dolor, San José, y te ruego oigas mi
súplica.
Acaso No ha dejado Santa Teresa escrito en sus diálogos
que el mundo debe siempre saber: "Todo lo que pidáis de
San José, lo recibiréis."
Oh San José, consolador de los afligidos, ten piedad de mi
tristeza y compadécete de las pobres almas que ponen en ti
tanta esperanza en sus oraciones.
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
IV
Oh Sublime Patriarca San José, a causa de tu perfecta
obediencia a Dios, interceder por mí.
Por tu santa vida llena de gracia y de méritos, oye mi
oración.
Por tu nombre dulcísimo, ayúdeme.
Por tus lágrimas santísimas, confórtame.
Por tus siete dolores, intercede por mí.
Por tus siete alegrías, consuélame.
De todo mal del cuerpo y del alma, líbrame.
De todos los peligros y desastres, sálvame.
Ayúdame con tu poderosa intercesión y obtenme, por tu
poder y misericordia, todo lo necesario para mi salvación y
en particular el favor_________ que ahora te presento con
gran necesidad.
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
V
Oh Glorioso San José, son innumerables las gracias y favores
que has obtenido para las almas afligidas. Asistes a los
Enfermos de cualquier naturaleza, ayudas a los oprimidos,
perseguidos, traicionados, privado de todo consuelo
humano, incluso aquellos que necesitan del pan de vida,
todos los que implora tu poderosa intercesión son
consolados en su aflicción.
Oh querido San José, no permita que yo sea el único de
todos los que han apelado a ti, a quien niegues esta petición
que yo tan ardientemente te suplico. Demuéstrame incluso
a mí, tu bondad y generosidad, para que pueda gritar en
acción de gracias, "¡Gloria eterna a nuestro Santo Patriarca
San José, mi gran protector en la Tierra y el defensor de las
Almas Santas en el Purgatorio."
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
VI
Eterno Padre, que estás en el cielo, por los méritos de Jesús
y María, te ruego me concedas mi petición. En el nombre de
Jesús y María, me postro ante tu presencia Divina y te ruego
que aceptes mi súplica llenas de esperanzas para perseverar
en la oración para que pueda ser contado entre la multitud
de aquellos que viven bajo el patrocinio de San José.
Extiende tu bendición sobre este precioso tesoro de las
oraciones que ofrezco hoy a él como prenda de mi
devoción.
(Recitar un Gloria 3 veces a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado de San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
Súplicas en honor de la vida oculta de San José con Jesús y
María:
San José, ruega para que Jesús pueda entrar en mi alma y
me santifique.
San José, ruega para que Jesús pueda entrar en mi corazón
e inspirarme con la caridad.
San José, ruega para que Jesús pueda entrar en mi mente y
me ilumine.
San José, ruega para que Jesús pueda guiar mi voluntad y la
refuerce.
San José, ruega para que Jesús pueda dirigir mis
pensamientos y purificarlos.
San José, ruega para que Jesús pueda guiar mis deseos y
dirigirlos.
San José, ruega para que Jesús pueda mirar mis acciones y
extienda sobre mí sus bendiciones.
San José, ruega para que Jesús me inflame de amor por él.
San José, solicita de mi parte a Jesús la imitación de tus
virtudes.
San José, pide de mi parte a Jesús un verdadero espíritu de
humildad.
San José, pide de mi parte a Jesús mansedumbre de
corazón.
San José, pide de mi parte a Jesús la paz del alma.
San José, pide de mi parte a Jesús el santo temor del Señor.
San José, pide de mi parte a Jesús un deseo de perfección.
San José, pide de mi parte a Jesús una dulzura de corazón.
San José, pide de mi parte a Jesús un corazón puro y
caritativo.
San José, pide de mi parte a Jesús la sabiduría de la fe.
San José, pide de mi parte a Jesús su bendición de la
perseverancia de mis buenas obras.
San José, pide de mi parte a Jesús la fuerza para llevar mis
cruces.
San José, pide de mi parte a Jesús el desprecio por los
bienes materiales de este mundo.
San José, pide de mi parte a Jesús la gracia de caminar
siempre en el camino angosto hacia el Cielo.
San José, pide de mi parte a Jesús la gracia de evitar toda
ocasión de pecado.
San José, pide de mi parte a Jesús un deseo santo de la
felicidad eterna.
San José, pide de mi parte a Jesús la gracia de la
perseverancia final.
San José, no me abandones.
San José, ruega que mi corazón nunca deje de amarte y que
mis labios nunca dejen jamás de elogiarte.
San José, por el amor que le tienes a Jesús, haz que yo
pueda aprender a amarlo.
San José, amablemente acéptame como tu fiel devoto.
San José, yo me entrego a ti, acepta mis ruegos y escucha
mi oración.
San José, no me abandones en la hora de mi muerte.
Jesús, María y José, yo les doy mi corazón y mi alma.
(Recitar un Gloria 3 veces, a nuestro Padre Celestial en
acción de gracias por haber exaltado a San José a una
posición de dignidad tan excepcional.)
Invocaciones a San José:
I
Acuérdate, oh purísimo esposo de María y mi amadísimo
guardián, San José, que jamás se ha oído decir que alguno
de los que han implorado tu protección y pedido tu ayuda,
ha sido dejado sin consuelo. Animado con esta confianza,
acudo a ti con todo el fervor de mi espíritu, me encomiendo
a ti. No desprecies mi súplica, oh Padre Adoptivo del
Salvador, antes bien, dígnate recibirla favorablemente y
concedérmela. Amén.
II
Glorioso San José, esposo de la Santísima Virgen María y
virginal padre de Jesús, guárdame y vela por mí, llévame por
el camino de la gracia santificante, presta atención a las
necesidades urgentes que ahora te pido que envuelvas
dentro de los pliegues de tu manto paternal. Aparta de mí,
los obstáculos y las dificultades que se encuentran en el
camino de mi oración y concede que la feliz respuesta a mi
petición puede servir para la mayor gloria de Dios y mi
salvación eterna.
Como prenda de mi eterna gratitud, me comprometo a
difundir la noticia de tu gloria, mientras que dar gracias al
Señor por tener tanta bendición de tu poder y maravillas en
el Cielo y la Tierra
Recitar las letanías de San José:
Señor, ten misericordia de nosotros
Cristo, ten misericordia de nosotros.
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo óyenos.
Cristo escúchanos.
Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten misericordia de
nosotros.
Dios Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Santa Trinidad, un solo Dios, ten misericordia de nosotros.
Santa María, ruega por nosotros.
San José, ruega por nosotros.
Ilustre descendiente de David, ruega por nosotros.
Luz de los Patriarcas, ruega por nosotros.
Esposo de la Madre de Dios, ruega por nosotros.
Casto guardián de la Virgen, ruega por nosotros.
Padre nutricio del Hijo de Dios, ruega por nosotros.
Celoso defensor de Cristo, ruega por nosotros.
Jefe de la Sagrada Familia, ruega por nosotros.
José, justísimo, ruega por nosotros.
José, castísimo, ruega por nosotros.
José, prudentísimo, ruega por nosotros.
José, valentísimo, ruega por nosotros.
José, fidelísimo, ruega por nosotros.
Espejo de paciencia, ruega por nosotros.
Amante de la pobreza, ruega por nosotros.
Modelo de trabajadores, ruega por nosotros.
Gloria de la vida doméstica, ruega por nosotros.
Custodio de Vírgenes, ruega por nosotros.
Sostén de las familias, ruega por nosotros.
Consuelo de los desgraciados, ruega por nosotros.
Esperanza de los enfermos, ruega por nosotros.
Patrón de los moribundos, ruega por nosotros.
Terror de los demonios, ruega por nosotros.
Protector de la Santa Iglesia, ruega por nosotros.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo:
perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo:
escúchanos, Señor,
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo: ten
misericordia de nosotros.
V.- Le estableció señor de su casa.
R.- Y jefe de toda su hacienda.
Oremos:
Oh Dios, que en tu inefable providencia, te dignaste elegir a
San José por Esposo de tu Santísima Madre: concédenos, te
rogamos, que merezcamos tener por intercesor en el cielo
al que veneramos como protector en la tierra. Tú que vives
y reinas por los siglos de los siglos. Amén
Oración final de la Capa Santa:
Oh Glorioso Patriarca San José, tú que fuiste elegido por
Dios por encima de todos los hombres para ser la cabeza
terrenal de la más santa de las familias, te ruego que me
aceptes en los pliegues de tu manto sagrado, que llegues a
ser el guardián y custodio de mi alma.
A partir de este momento, yo te elijo como mi padre, mi
protector, mi consejero, mi Santo Patrón y te ruego que
custodies mi cuerpo, mi alma, todo lo que soy, todo lo que
poseo, mi vida y mi muerte.
Mírame como uno de tus hijos; defiéndeme de la traición de
mis enemigos, invisible o visible, ayúdame en todo
momento en todas mis necesidades, consuélame en las
amarguras de mi vida, y especialmente a la hora de mi
muerte. Di tan solo una palabra a mí favor al Divino
Redentor a quien tú fuiste considerado digno de sostenerlo
en tus brazos, y ser digno de la Santísima Virgen María, tu
castísima esposa.
Pide para mí las bendiciones que me llevarán a la salvación.
Inclúyeme dentro de los más queridos por ti y yo te
demostraré que soy digno de tu especial amparo. Amén.
Oración a San José:
A ti clamamos en las tribulaciones, Oh Bendito San José,
suplicamos con confianza tu amparo, después de la de tu
santísima esposa, la Virgen María.
Por ese enlace sagrado de devoción que te ligó a la Virgen
Inmaculada, Madre de Dios, y por el amor paternal que
prodigaste al niño Jesús, te pedimos echar una mirada sobre
los dones celestiales que el Divino Redentor ha obtenido
para toda la humanidad a través de su Preciosa Sangre y por
tu poder y misericordia, ayúdanos en nuestras necesidades.
Oh Santo protector de la Sagrada Familia, protégenos a
nosotros los niños de nuestro Señor Jesucristo, mantén lejos
de nosotros los errores y males que corrompen el mundo,
ayúdanos desde el cielo en nuestras luchas contra los
poderes de las tinieblas. Como tú una vez protegiste al
Divino Niño de la crueldad del edicto de Herodes, ahora
defiende la iglesia y mantenla segura de todos los peligros y
amenazas, reparte sobre todos nosotros tu Santo amparo,
para que siguiendo tu ejemplo y con la ayuda de tu guía
espiritual, todos podamos aspirar a una vida virtuosa, una
muerte santa y asegurar para nosotros la bendición de la
felicidad eterna en el Cielo. Amén.
Recuerde orar por las almas del Purgatorio.
Fuente:
Manantial Divino
Traducido por Angie Ware.

También podría gustarte