Omisión Del Debido Proceso

OMISIÓN
DEL DEBIDO PROCESO EN LA PRUEBA DE ALCOHOLEMIA 1
Omisión del Debido Proceso en la Prueba de Alcoholemia como Causal de la
Nulidad de la Violación a la Norma
Tania Astudillo Victoria
Diplomado en Legislación de Tránsito y Transporte
Facultad de Derecho - Universidad Santiago de Cali
Julio del 2020
Nota del autor:
Tania Astudillo Victoria. Diplomado en Legislación de Tránsito y Transporte. Facultad de
Derecho de la Universidad Santiago de Cali.
El presente ensayo fue realizado con la corrección de estilo de la profesora
Paola Andrea Castaño. Santiago de Cali. Seccional Cali.
La correspondencia relacionada con este documento deberá ser enviada a
taniaastudillov@hotmail.com
OMISIÓN DEL DEBIDO PROCESO EN LA PRUEBA DE ALCOHOLEMIA 2
Omisión del Debido Proceso en la Prueba de Alcoholemia como Causal de la
Nulidad de la Violación a la Norma
En Colombia se presentan accidentes relacionados con el alcoholismo al volante que
terminan con quitarle la vida a los transeúntes, debido a la falta de conciencia de algunos
conductores, por esta razón la rama legislativa ha estado en continuos pronunciamientos
modificando las leyes, para superar este acontecer que marca y enluta a las familias
colombianas.
Entretanto, las autoridades colombianas están desarrollando actividades y estrategias
para disminuir los accidentes de tránsito ocasionados por parte de conductores en
estado de embriaguez o bajo efectos de drogas estupefacientes. Al respecto, se
pretende aplicar sanciones más drásticas, como la extinción del dominio sobre el
vehículo automotor, la suspensión de la licencia de conducción indefinidamente y quizás
la más importante, criminalizar a quienes conduzcan bajo los efectos de bebidas
alcohólicas, con el propósito de aplicarles medidas de aseguramiento (Buitrago et al,
2015, p. 29).
Según estadísticas “Colombia, ocupa el tercer puesto en consumo de alcohol en
Suramérica según la investigación realizada por la Facultad Latinoamericana de Ciencias
Sociales (Flacso), con sede en Costa Rica” (Silva, 2012 citado en Buitrago et al, 2015, p. 29),
por esta razón se debe implementar las medidas para que el índice de accidentalidad sea
menor en el país.
Desde los asentamientos coloniales, Colombia tiene una cultura por el consumo de
bebidas alcohólicas, por este motivo todas las celebraciones se realizan ofreciendo alcohol a
gran escala, además el impuesto de la venta de licor subsidia la salud y la educación lo que es
inverso, a mayor daño con el alcohol mas recursos para la salud y la educación, lo cual ha
llevado que Colombia siga presentando una alta cifra de sucesos viales fatales, por cuenta de
unas de las conductas o mayor responsabilidad, que es el nivel de riesgo al conducir, el

consumo de bebidas alcohólicas, mezclar gasolina y alcohol se constituye como la mayor
indignación para el pueblo colombiano.(Buitrago et al, 2015, p. 29).
Algunas de las medidas adoptadas en las leyes colombianas de tránsito y transporte
reglamentaron “que el conducir un vehículo automotor bajo efectos producidos por el alcohol
conlleva a la multa pecuniaria, suspensión de la licencia de conducción e inmovilización del
vehículo”; este tipo de controles ayudan a disminuir los índices de accidentalidad por
alcoholismo en las calles (Secretaria distrital de movilidad –SDM, 2020), y que el legislador ha
tomado para minimizar el riesgo en las vías por cuenta de conductores irresponsables, que
infringen la ley.
Por supuesto todas las leyes son importantes, para ayudar a la conservación de la vida,
al disfrutar, sin causar daño a la sociedad, asimilar de una manera responsable todas las
normas que permitan guiar para no cometer indebidas faltas que causen perjuicios a otras
personas, por esta razón fueron creadas las reglas, las leyes, las normas que son de vital
cumplimiento para un mejor procedimiento y mejoramiento.
En este ensayo se hablará de la prueba de alcoholemia y sus efectos cuando no se
cumple el protocolo o los requisitos que exige la ley, lo cual llevan a una nulidad, donde los
conductores en estado de embriaguez cometen la falta, pero no son sancionados
pecuniariamente, ya que aportan pruebas en el estrado manifestando que no se cumplió con el
debido proceso.
Inicialmente se realizará una breve recapitulación de todas las normas que rigen en
Colombia en materia de tránsito y trasporte relacionadas con el tema de la alcoholemia, se
analizará la resolución 1844 del 2015, que es el procedimiento para que esta prueba se cumpla
con todas las medidas proporcionándole al conductor ebrio el debido proceso para que esta
norma no sea inconstitucional, y es aquí donde las autoridades competentes en materia de
tránsito deben actuar con rigurosidad, proporcionando el íntegro procedimiento para que el
infractor de la norma sea sancionado.

Por consiguiente, al referirse al tema de la prueba de alcoholemia se analizará
detalladamente La Constitución Política de 1991, es la máxima norma del territorio
colombiano, es la fundamental y de mayor jerarquía, establece los derechos y
obligaciones de las personas, y genera los parámetros para el desarrollo de cualquier
normatividad. Una de sus funciones esenciales es velar y garantizar que se respeten y
se cumplan todos los derechos y garantías fundamentales de los ciudadanos. Por tal
motivo, cada organización debe tener claro lo que significa y su alcance, con el fin de no
vulnerar los derechos de los ciudadanos, como, por ejemplo, en la realización de
pruebas de alcoholemia. De existir vulneración alguna, aparece la posibilidad de que en
un proceso judicial se decrete inválida una prueba, tal y como lo consagra la
Constitución en su Artículo 29. “El debido proceso se aplicará a toda clase de
actuaciones judiciales y administrativas”. “…Es nula, de pleno derecho, la prueba
obtenida con violación del debido proceso” (ARL Sura, 2018, p, 2).
Lo anterior quiere decir que si no se realiza el debido proceso en la prueba de
alcoholemia se puede impugnar o apelar el comparendo de tránsito, en ocasiones el conductor
no esta de acuerdo con la infracción impuesta por el agente de tránsito, o también puede
suceder que el comparendo se realice por un error, o en el peor de los casos cuando se actúa
de mala fe. Este es el procedimiento en el cual se puntualizará y se analizará cuando se
ejecutó la prueba de alcoholemia y se generó omisión al debido proceso, lo cual es causal de
nulidad de la violación a la norma.
Es necesario recalcar, que se puede impugnar una infracción en el caso de alcoholemia,
cuando el o los agentes de transito no cumplen con el debido procedimiento, cuando se realiza
un comparendo por alcoholemia, sin realizarse las pruebas pertinentes que están conexas en la
Ley y en las Resoluciones emitidas por Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
Forenses.
Las medidas adoptadas por el Congreso de la República de Colombia, están reguladas
en las siguientes leyes y se configuran como las más importantes en materia de tránsito y
transporte, como la “Ley 769 de 2002 “Por la cual se expide el Código Nacional de Tránsito
Terrestre y se dictan otras disposiciones”. (Ley 769, 2002), esta fue una de las primeras leyes
sonadas en Colombia para fortalecer, orientar y vigilar.
En esta ley se contemplan los temas relacionados con la embriaguez y alcoholemia.
Estableciendo las reglamentaciones correspondientes a la movilidad o circulación de las
personas, ya sean en calidad de conductores, peatones o pasajeros. En su Artículo 150 se
faculta a las autoridades de tránsito para adelantar pruebas de embriaguez por alcohol a las
personas que conduzcan un vehículo automotor, en el Literal E3 del Artículo 131 determinan
las sanciones para estos, agrega el mismo literal que el estado de embriaguez por alcohol se
determinará por medio de una prueba que no cause lesión y que sea establecida por el Instituto
Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (Ley 769 de 2002, Art. 150).
Se debe tener en cuenta que el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
Forenses, es un establecimiento científico, técnico y rector de las ciencias forenses en
Colombia, aportando el conocimiento necesario para fortalecer el Sistema Nacional de
Medicina Legal y Ciencias Forenses, en el deber de prestar auxilio y soporte científico y técnico
a la administración de justicia en todo el territorio nacional (Concepto 0015 de 2013).
Existe una estrecha relación entre la comisión de delitos y el estado de embriaguez,
pues algunas personas consumidoras de esas sustancias se pueden ver involucradas
en procesos judiciales y administrativos, lo cual también exige el auxilio científico que
proporcionan las pruebas de embriaguez por examen clínico o la determinación de
alcoholemia por métodos directos o indirectos. Según lo establecido por la Ley 938 de
2004, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses tiene entre sus
funciones básicas la de “Definir los reglamentos técnicos que deben cumplir los distintos
organismos y personas que realicen funciones periciales asociadas con medicina legal,
ciencias forenses y ejercer control sobre su desarrollo y cumplimiento”. (Castellanos, et
al, 2015, p. 7,9).
Por consiguiente, la Resolución 414 de 2002, del Instituto Nacional de Medicina Legal y
Ciencias Forenses, estipula todo lo concerniente con la realización de pruebas de embriaguez
por alcohol.
Establece en su artículo primero, que la alcoholemia se puede determinar de tres
formas, la primera por un examen de sangre, la segunda midiendo de manera indirecta
con un equipo alcohosensor la cantidad de etanol en aire espirado, y la tercera por
medio de un examen clínico, que es aquel en el cual un médico examina la actitud,
algunos signos, presentación personal, aliento, conductas motrices, entre otras. Se da
claridad en el mismo artículo, que independiente del medio escogido para determinar el
estado de embriaguez por alcohol, debe existir idoneidad tanto en el equipo como en el
personal que la práctica (Resolución no. 000414, 2002).
Se debe agregar como tema de conocimiento que La Ley 1383 del 2010, Modifica
algunos artículos del Código Nacional de Tránsito con relación al tema de embriaguez por
alcohol, modificó el Literal D del Artículo 131, el cual sanciona al conductor en estado de
embriaguez por alcohol, pero solo en el aspecto pecuniario (económico), pasando de sancionar
de treinta (30) S.M.L.D.V a cuarenta y cinco (45). M.L.D.V. al conductor infractor. Ley 1383
(2010). Lo cual es muy favorable porque el legislador esta comprometido con consolidar las
leyes y multar a los infractores para que no transiten ebrios en la calle ocasionado accidentes
(Ley 1383, 2010, articulo 31)
A pesar de todas las reformas en Colombia se seguía presentando una tasa alta de
accidentes causados por conductores ebrios, lo cual originó que se fortalecieran las normas y
el congreso legisló la ley Merlano que es la Ley 1696 de 2013 “Por medio de la cual se dictan
disposiciones penales y administrativas para sancionar la conducción bajo el influjo del alcohol
u otras sustancias psicoactivas” (Ley 1696 de 2013).

Por lo que se hace indispensable citarla para poder comprender el ascenso que han
tenido estas normas y el esfuerzo que se ha realizado para mejorar su funcionamiento, por esta
razón el artículo 5 de la presente ley modifica el artículo 152 de la ley 769 del 2002, sumando
un grado adicional a los tres establecidos, este es el Grado Cero de alcoholemia, el cual
comprende los resultados entre 20 y 39 mg de etanol. (Ley 1696, 2013).
Por consiguiente, los niveles de embriaguez se convirtieron en cuatro: Grado Cero de
20 y 39 mg de etanol, Primer Grado de 40 y 99 mg de etanol, Segundo Grado de 100 y 149 mg
de etanol y Tercer Grado de 150 mg de etanol en adelante. (Ley 1696, 2013, Art. 5).
Los avances han sido significativos, para el año 2013, el legislador en su sabia
providencia avanza en las normas que pueden ayudar a salvar vidas y que el infractor pague la
multa pecuniaria según el grado de alcohol consumido, el cual puede ser más gravoso debido a
la cantidad de alcohol que tenga el organismo según la tabla número 1.
Tabla 1.
Sanciones establecidas según grado de alcoholemia
Nota: Tomado de. (ARL Sura, 2018, p. 5)

Es importante comentar que la ley 1696 del 2013, creó el parágrafo tercero, en el cual
se determina que, si una persona que conduce un vehículo automotor se niega a que las
autoridades de tránsito le practiquen una prueba de alcoholemia, o se da a la fuga, de igual
forma será sancionado con la multa más alta, no por estar en estado de embriaguez sino por
negarse a practicarse la misma. (Ley 1696 de 2013, parágrafo 3).
A partir de lo anterior se analizarán las resoluciones del Instituto Nacional de Medicina
Legal y ciencias Forenses donde se dictan las regulaciones para certificar que la medición
indirecta de alcoholemia a través de aire espirado se realiza cumpliendo todos los protocolos y
procedimientos para no vulnerar el debido proceso
En la Resolución 181 de 2015, del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
Forenses se genera una guía para la medición indirecta de alcoholemia a través de aire
espirado, con el fin de garantizar que la prueba de alcoholemia se realice bajo criterios y
procedimientos estandarizados, y en el marco de un sistema de aseguramiento de
calidad que le ofrezca resultados confiables a los examinados (ARL Sura, 2018, p. 6)
Es importante tener claridad sobre lo manifestado en el artículo segundo, ya que se
afirma que esta guía aplica para la ciudadanía en general, lo que puede interpretarse,
que todas las personas que realicen pruebas de alcoholemia con equipos
alcohosensores se deben ceñir a lo estipulado en esta resolución. (ARL Sura, 2018, p.
6).
Además, es necesario traer a colación, La resolución 625 de 2015, del Instituto
Nacional de Medicina Legal y Ciencias forenses donde determina que toda persona que
realice pruebas de alcoholemia con equipos alcohosensores, debe contar con un curso
que cumpla con el contenido mínimo de estudios que se relaciona en la presente, el
cual debe ser avalado por entidades universitarias o escuelas del estado que en sus
portafolios de servicios estipulen la capacitación de operadores de alcohosensores. El
plan de estudios está compuesto por cinco módulos: Legal, Médico, Químico,
Metrológico y Práctico, y cada uno de ellos está conformado por un contenido temático
bastante amplio, el cual no puede tener una intensidad horaria inferior a 24 horas (ARL
Sura, 2018, p.7).
Hasta aquí se ha realizado una breve descripción de las normas de tránsito, que
reglamentan las disposiciones en Colombia, además se realizó un resumen de las normas de
alcoholemia y sus mecanismos de control para evitar que las personas ebrias, transiten en sus
vehículos ocasionando daños, perjuicios y muertes, dejando niños sin hogar, o arrebatándoles
a los pequeños de sus familias.
Teniendo como fundamento todas las leyes, a continuación, se examinará por qué
motivos, no se cumple el debido proceso y se declara la nulidad en las multas pecuniarias
impuestas por el ministerio de tránsito y trasporte por alcoholemia. A pesar de que exista
mucha normatividad no se cumple con el objeto de pagar las multas, solo el uno punto seis por
ciento (1.6%) cancela las multas en el país, y es un tema muy grave ya que no terminaría el
abuso en las calles de Colombia (El Tiempo, 2014).
Si el infractor considera que el comparendo impuesto no es justo o no lo merece, puede
rechazarlo o impugnarlo, y para ello no debe pagarlo. Evento en el que se procede a
fijar fecha y hora para audiencia de pruebas y alegatos, en la que el inculpado podrá
aportar y solicitar pruebas, además de exponer las razones de inconformidad contra la
orden de comparendo. según lo señaló el Consejo de estado en sentencia de tutela con
radicación 76001 del 13 de febrero de 2018 (Gerencie.com, 2019).
En esa audiencia, es donde se debe consignar el expediente del certificado de
calibración del dispositivo, y todas las pruebas pertinentes y conducentes para legitimar que el
tránsito y transporte ha cumplido con el debido proceso al realizar la prueba de alcoholemia.
También se debe tener en cuenta, el tiempo con el que cuenta la autoridad de tránsito
para imponer la sanción, la cual se llama la caducidad, que es otro factor importante por el cual
no se pagan las multas de alcoholemia en Colombia, ya que la autoridad competente tiene un

término de un año contado a partir de la fecha en que ocurrieron los hechos, para lo cual solo
se interrumpe cuando interfiere la sanción, que es el momento donde se aplica la prescripción
(Velasco Abogados, 2017).
Una vez impuesta la sanción mediante una resolución, la autoridad de tránsito cuenta
con la posibilidad de iniciar acciones de cobro en contra del infractor. Sin embargo, estas
acciones no se pueden ejecutar en cualquier momento en el tiempo, sino que se deben llevar a
cabo en el término de tres años contados a partir de la fecha en que ocurrieron los hechos.
(Código Nacional de Tránsito, 2002, Articulo 159)
Hay muchas maneras de impugnar la multa y no pagar la sanción pecuniaria,
coexistiendo una grave situación para el país, porque con estas sanciones se podría rebajar la
tasa de accidentalidad por alcoholemia en el país.
Para brindar una mayor claridad se revisará la siguiente resolución donde se
especificará de manera categórica, por tanto, es conveniente exponer por qué no se cumple
con el debido proceso y se llega a la omisión por parte de los agentes de tránsito en la toma de
la prueba de alcoholemia como causal de nulidad de la violación a la norma. Se relaciona en
esta resolución los aspectos más importantes.
La Resolución 1844 de 2015, del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
Forenses, crea la segunda guía para adoptar los parámetros de la medición indirecta de
alcoholemia a través de aire espirado; su objeto es garantizar que la prueba de
alcoholemia se practique aplicando un debido proceso, y que así se pueda garantizar
que no se vulneren los derechos fundamentales en los examinados (Resolución 1844,
2015).
A continuación, se citarán los puntos más importantes de la resolución 1844 del 2015
donde se detalla los aspectos mas relevantes, donde el infractor se puede acoger al debido
proceso para no cancelar la multa, es importante conocer cual es el procedimiento que se debe
efectuar con la mayor autenticidad para hacer cumplir la ley.

La autoridad competente de tránsito y transporte debe acatar los siguientes
reglamentos:
La exhalación del aire del examinado, al momento que se le realice la prueba de
alcoholemia, debe ser profunda. Además, si esta persona manifiesta que ha ingerido
licor, que ha vomitado o utilizado enjuagues bucales recientemente se debe esperar
quince (15) minutos para realizarle la prueba, el equipo alcohosensor debe ser idóneo,
el personal que opere el equipo debe estar capacitado y anexar los certificados.
También existe la Fase pre analítica que consiste en determinar los aspectos que se
deben preparar antes de iniciar con la práctica de pruebas, la Fase analítica que
consiste en aplicar diferentes aspectos al momento de realizar las pruebas, la
Interpretación de resultados, aquí se ilustran los aspectos a tener presentes con relación
a los resultados que arrojan las pruebas de alcoholemia. (Resolución 1844, 2015).
Al analizar la Resolución 1844 (2015), se observan dos parágrafos de gran importancia,
los cuales se citan textualmente a continuación: “A partir del 2017-01-01 toda persona que
opere alcohosensores debe contar con la certificación de la capacitación establecida en el
presente anexo, la cual tendrá una vigencia de cinco años”. Este parágrafo es muy importante
ya que en las audiencias se convierte en una prueba documental donde le exigen a la autoridad
competente su certificado con el debido pensum. Además, se puede consultar en la siguiente
página, si es la persona delegada para adelantar la prueba de alcoholemia lo cual es una
prueba contundente ante el juez (Resolución 1844 de 2015, parágrafo 1).
El segundo parágrafo es fundamental porque “El Instituto Nacional de Medicina Legal y
Ciencias Forenses quien consolidará la información relacionada con las personas capacitadas
en el manejo de alcohosensores, la cual estará disponible para ser consultada por la
ciudadanía en general, a través del portal institucional (www.medicinalegal.gov.co)”. Este
procedimiento será definido mediante acto administrativo (Resolución 1844, 2015, parágrafo 2).
Lo dicho hasta aquí, tiene un amplio propósito para que se cumpla el debido proceso, la
prueba de alcoholemia es uno de los mecanismos que utilizan los agentes de tránsito para
llevar a cabo el procedimiento de control en la vía, es una evaluación que se realiza para medir
el grado de alcohol en la sangre ósea la embriaguez, la cual es realizada por el alcohosensor,
el cual se debe soplar y de esta manera, indicar el nivel de alcohol en la sangre de la persona
evaluada (Paredes, 2019)
Como se observa, el departamento del tránsito debe seguir todo lo pertinente con el
protocolo para que la prueba tenga validez, este procedimiento se describe con detalle en la
Resolución 1844 del 18 de diciembre de 2015, la cual se está analizando.
Se empezará a detallar los requisitos del operador, donde se invoca que el funcionario
que practicó la prueba de alcoholemia sea el mismo que elaboró el comparendo, la
irregularidad que más se ha detectado, es que el comparendo debe ser elaborado por el
mismo agente de tránsito que revisa el resultado de las pruebas, si está elaborado por otro
agente de tránsito, en ese caso se debe invocar la nulidad constitucional consagrada en el
artículo 29 inciso 5 de la constitución, donde se consagra que es nula de pleno derecho la
prueba obtenida con violación al debido proceso (Constitución Nacional, 1991, Art. 29).
Hay que tener en cuenta que entre las pruebas con las cuales un infractor gana el
proceso y no cancela la multa pecuniaria es porque no todas las autoridades en Colombia
como los agentes de tránsito distritales y municipales o el policía de carretera han realizado el
curso de operador de alcohosensor y no cumple con los requisitos para esta función (Ley 1844,
2015, punto 7.2.4.2).
En las pruebas se solicita que se acredite la condición o certificación del operador de
alcohosensor del funcionario que practicó la prueba de alcoholemia, se revisa el certificado de
operador de alcohosensorista que no haya trascurrido más de cinco años de vigencia, si el
certificado esta vencido no tiene legitimidad entonces se invoca el artículo 29 de la constitución

política, que consagra que la prueba es nula de pleno derecho obtenida con violación al debido
proceso (Resolución 1844 de 2015, punto 7.2.3).
Por consiguiente, el agente de tránsito debe aportar el resultado de la prueba de
alcoholemia de las muestras de alcohol en aire soplado que son las (tirillas de resultado). Para
analizar las dos tirillas con las mediciones las cuales deben estar dentro de las parejas válidas
que aparecen en la resolución, si estas parejas no concuerdan se invoca la resolución
dependiendo del grado de alcoholemia por lo cual no hay lugar a la multa pecuniaria, no tiene
valor probatorio dentro del proceso de contravención por alcoholemia. En el evento se podrá
alegar la nulidad de la prueba consagrada en el artículo 29 inciso quinto constitucional es nula
de pleno hecho la prueba obtenida con violación del debido proceso” (Constitución Política de
Colombia, 1991, articulo 29).
Se debe tener en cuenta que al verificar la validez de la prueba de alcoholemia el
resultado se debe comprobar igualmente en sentido inverso ejemplo: si hipotéticamente el
resultado de la prueba arrojó (21.25) y esta pareja de datos no aparece en la resolución
igualmente se debe verificar en el sentido inverso el cual quedaría de la siguiente manera
(25.21) (Resolución 1844, 2015, punto 7.3.3).
En todo caso se deberá solicitar la ficha técnica del mantenimiento preventivo y
correctivo del equipo del alcohosensor con el cual se realizó la prueba de alcoholemia, una vez
obtenida esta prueba se debe oficiar al laboratorio que aparece registrado como el lugar donde
se ejecutó el ultimo mantenimiento preventivo y/o correctivo al alcohosensor si se cumplió en
los últimos seis meses. (Resolución 1844, 2015, anexo 1)
En todo caso no podrá haber trascurrido más de seis meses desde la última revisión
para el mantenimiento preventivo o correctivo del alcohosensor, si eventualmente han
trascurrido más de seis meses, en ese evento se debe solicitar la nulidad de la prueba de
alcoholemia invocando el artículo 29 inciso quinto y el aparte de la resolución 1844 donde se
determina el periodo de mantenimiento y revisión de los equipos de alcohosensor, si es falso se

tipificara un delito que es la adulteración de elemento material de prueba en concurso con
falsedad material en documento público según el artículo 287 del código penal.(Resolución
1844 de 2015, Anexo 1.7)
El agente de tránsito autorizado, debe contar con la certificación vigente, dentro de los
cinco años, por lo cual se debe solicitar el plan de estudio o el pensum académico que se dictó
indicando se relacione la intensidad horaria de cada uno de los módulos o áreas ofrecidas, al
cual asistió en la capacitación de operadores y alcohosensores del cual hizo parte el agente de
tránsito o el policía de carretera, además se debe solicitar información de las características
técnicas, referencia, marca y modelo del equipo de alcohosensor con el cual se dictó la
instrucción anexando certificados de estudio, para comprobar si se dio el aprendizaje sobre el
manejo del equipo, esto con el fin de certificar que cumple con los requisitos del plan de
estudios para la capacitación de los operadores de alcohosensores, lo cual lo hace competitivo
para tomar la prueba de alcoholemia y no cometer errores, ya que se convertiría en otra prueba
para sustentar ante el juez, ya que no cumpla con lo requerido. (Resolución 1844 de 2015,
punto 7.3.2.2, anexo 2.)
Además, para comprobar que se especificó el debido proceso en la toma de la prueba
de alcoholemia se debe solicitar el video de la prueba en el cual se apreciará en detalle lo
siguiente:
 Si la autoridad de tránsito le informó y leyó en presencia del conductor el acta de
consentimiento (la cual debe estar completamente diligenciada, si no es así hay una
causal de nulidad)
 Igualmente se debe observar si ante la práctica de cada una de las pruebas de
alcoholemia la autoridad de tránsito utilizó distintas pipetas y si estas fueron
desempacadas en presencia del conductor, se debe revisar si utilizo una boquilla por
cada muestra.
 Igualmente se debe observar si el operador del alcohosensor utilizó guantes de
látex y tapabocas al momento de practicar la prueba, se alega contaminación de la
prueba (ley 769, 2002, articulo 162).
Para ultimar la resolución 1844 del 2015, enseña que las reglas a la hora de la toma de
la muestra de alcoholemia se deben cumplir con toda claridad para que se efectúe el debido
proceso, de esta manera la resolución argumenta cuales son las medidas, como el equipo
utilizado (alcohosensor) en perfectas condiciones, la boquilla debe estar nueva, el operador no
puede tener contacto directo con el equipo para asegurar la higiene, si la prueba da 20mg se
debe repetir, debe entregar copia de los resultados, si hay signos de embriaguez y lesionados
el agente debe llevar al conductor a medicina legal y solicitar resultados de sangre, el
conductor tiene derecho a contrastar los resultados del test, con un análisis de sangre.
Se ha realizado un resumen de la Resolución 1844 del 2015, mostrando sus puntos
donde el infractor puede someter a prueba que la autoridad de tránsito no cumplió con el
debido proceso, para que el juez declare nula la sanción pecuniaria, y de esta forma no
acogerse a lo firmado por la norma, y seguir conduciendo de una forma irresponsable por las
vías de Colombia, causando accidentes fatales.
A continuación, un requisito que no debe faltar para cumplir con el debido proceso.
Resolución 1206 de 2016, del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses
esta resolución estableció el ingreso y la consulta de los operadores de alcohosensores en la
página de medicina legal, tal y como lo establece la anterior Resolución 1844 del 2015. Para
ingresar a consultar los operadores registrados en la página del Instituto Nacional y Medicina
Legal y Ciencias Forenses, se deben seguir los siguientes pasos: (Resolución 1206, 2016)

Figura 1.
Requisitos para cumplir con el debido proceso.
Tomado de: (ARL Sura, 2018, p. 7)
Siguiendo las instrucciones se puede revisar por esta página para inspeccionar los
operadores de alcohosensor, con el número de cédula, se imprime la información, si no
aparece en esta página, se invoca que no esta frente a un perito idóneo, en consecuencia, se
alega la nulidad de la prueba, invocando el artículo 29 y el inciso quinto de la Constitución
Nacional (Constitución Política, 1991, Art. 29).
De esta forma se ha detallado la normatividad colombiana en materia de tránsito y
transporte, la cual los ciudadanos deben cumplir a cabalidad y la autoridad debe mostrar todo
su compromiso en hacer cumplir la ley.
Para concluir el avance en Colombia respecto a las Leyes de tránsito y trasporte, ha
partir del año 2002, ha sido fundamental para tomar conciencia sobre el tema del alcohol al
volante, estas leyes han sido acatadas en su gran mayoría , por consiguiente el índice de
accidentalidad redujo en los últimos años, es una gran ayuda la llegada de la ley 1696 del
2013, la cual dio un gran avance, aunque se necesita que los conductores ebrios, paguen las
multas pecuniarias, se precisa de una reforma a esta ley, para encontrar solución a este
problema.
Se realizó un bosquejo de todas las normas de tránsito y transporte ya que son
disposiciones fundamentales para su total cumplimiento, además se efectuó un detallado
estudio de las resoluciones y se profundizó en la 1844 de 2015, porque esta resolución hace
énfasis en el cumplimiento del debido proceso en la prueba de alcoholemia, si este protocolo
no se cumple por parte de los agentes de tránsito y los policías de carretera se estaría violando
la Constitución Política en su articulo 29, y se estaría vulnerando el debido proceso, lo cual
sería causal de nulidad para la prueba de alcoholemia.
Intensamente preocupante este escenario, donde se debe seguir todos los
procedimientos de la resolución 1844 de 2015 del Instituto Nacional de Medicina Legal y
Ciencias Forenses, y cumplirlos en su totalidad, y es aquí donde surge el gran interrogante
sobre si el Ministerio de trasporte pone en marcha todos las instrucciones del programa para la
prevención de la seguridad vial, de la mano con el tránsito y trasporte de cada ciudad, si
están preparados para realizar las pruebas de alcoholemia, o simplemente lo hacen por
cumplir sus funciones, pero no observan el gran problema que se ocasiona al multar un
conductor y que no pague la multa pecuniaria. Es de gran importancia como trabajadores
oficiales al servicio del Estado, cumplan con el deber de pertenencia por el trabajo que se
realiza ya que con este compromiso salvan vidas en las calles de Colombia.
Por esta razón se enfatizó en la prueba de alcoholemia y se analizaron los artículos de
la Resolución 1844 del 2015, donde puede haber omisión al proceso si no se hace con mesura,
se estaría hablando de que se puede seguir cometiendo faltas graves en las calles, se pregunta
de qué vale tantas leyes que el legislador en buena hora contribuyó, si los encargados de
hacerla cumplir no desempeñan sus funciones debidamente como manda la ley, lo cual
conlleva a que se infrinja la ley por parte de los conductores ebrios y se siga causando más
dolor en este país. Ayudar a Colombia, es una responsabilidad, sentirse dueño de este
hermoso país, conocer más a fondo las imposibilidades que se pueden presentar en los
organismos de tránsito y transporte, y que no han sido corregidos lo cual ocasionan graves
daños a la sociedad.
Desde el punto de vista crítico no conforme con el procedimiento proporcionado por
algunos entes de control ya que no se corrigen los ordenamientos para que no haya impunidad
y contribuyan al cuidado de la ciudadanía para garantizar el bienestar del pueblo, y que los
culpables paguen con dinero el daño ocasionado, se requiere que se realice una conveniente
revisión a todo el proceso por parte de la autoridad de tránsito y transporte relacionado con la
prueba de alcoholemia para brindar la seguridad vial en las calles de Colombia, y se puedan
cumplir todas las leyes en su esplendor.

Referencias Bibliográficas
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ley 769 de 2002 Código Nacional de Tránsito, y se dictan otras disposiciones”.

Ley 1548 de 2012, Diario Oficial del congreso de Colombia, No. 48.482 de 5 de julio de 2012,
Por la cual se modifica la Ley 769 de 2002 y la Ley 1383 de 2010 en temas de
embriaguez y reincidencia y se dictan otras disposiciones.
Ley 1696 de 2013, congreso de Colombia, Por medio de la cual se dictan disposiciones
penales y administrativas para sancionar la conducción bajo el influjo del alcohol u otras
sustancias psicoactivas.
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del 2016).
Resolución 181, (febrero 27), Diario Oficial No. 49.445 de 6 de marzo de 2015, Instituto
Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses Dirección General, Por la cual se
adopta la “Guía para la Medición Indirecta de Alcoholemia a Través de Aire Espirado”.
Resolución 1844, Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, dirección general,
"por la cual se adopta la segunda versión de la "guía para la medición indirecta de
alcoholemia a través de aire espirado"(2015).
Resolución 625, Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, “Por la cual se
establece el contenido mínimo del plan de estudios para certificar la capacitación de los
operadores de analizadores de alcohol en aire espirado (alcohosensores)” agosto 24, de
2015.
Resolución no. 000414, Congreso de Colombia, instituto nacional de medicina legal y ciencias
forenses, 27 agosto de 2002.

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las multas de tránsito? Recuperado de: https://www.velascoabogados.c
om.co/caducidad-prescripción-multas-de-transito

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OMISIÓN

Omisión del Debido Proceso en la Prueba de Alcoholemia como Causal de la

Nulidad de la Violación a la Norma

Tania Astudillo Victoria

Diplomado en Legislación de Tránsito y Transporte

Facultad de Derecho - Universidad Santiago de Cali

Julio del 2020

Nota del autor:

Tania Astudillo Victoria. Diplomado en Legislación de Tránsito y Transporte. Facultad de

Derecho de la Universidad Santiago de Cali.

El presente ensayo fue realizado con la corrección de estilo de la profesora

Paola Andrea Castaño. Santiago de Cali. Seccional Cali.

La correspondencia relacionada con este documento deberá ser enviada a

Omisión del Debido Proceso en la Prueba de Alcoholemia como Causal de la

Nulidad de la Violación a la Norma

En Colombia se presentan accidentes relacionados con el alcoholismo al volante que

conductores, por esta razón la rama legislativa ha estado en continuos pronunciamientos

Entretanto, las autoridades colombianas están desarrollando actividades y estrategias

para disminuir los accidentes de tránsito ocasionados por parte de conductores en

estado de embriaguez o bajo efectos de drogas estupefacientes. Al respecto, se

vehículo automotor, la suspensión de la licencia de conducción indefinidamente y quizás

la más importante, criminalizar a quienes conduzcan bajo los efectos de bebidas

alcohólicas, con el propósito de aplicarles medidas de aseguramiento (Buitrago et al,

Según estadísticas “Colombia, ocupa el tercer puesto en consumo de alcohol en

Suramérica según la investigación realizada por la Facultad Latinoamericana de Ciencias

unas de las conductas o mayor responsabilidad, que es el nivel de riesgo al conducir, el

consumo de bebidas alcohólicas, mezclar gasolina y alcohol se constituye como la mayor

indignación para el pueblo colombiano.(Buitrago et al, 2015, p. 29).

Algunas de las medidas adoptadas en las leyes colombianas de tránsito y transporte

conlleva a la multa pecuniaria, suspensión de la licencia de conducción e inmovilización del

cumplimiento para un mejor procedimiento y mejoramiento.

En este ensayo se hablará de la prueba de alcoholemia y sus efectos cuando no se

conductores en estado de embriaguez cometen la falta, pero no son sancionados

pecuniariamente, ya que aportan pruebas en el estrado manifestando que no se cumplió con el

Colombia en materia de tránsito y trasporte relacionadas con el tema de la alcoholemia, se

norma no sea inconstitucional, y es aquí donde las autoridades competentes en materia de

infractor de la norma sea sancionado.

Por consiguiente, al referirse al tema de la prueba de alcoholemia se analizará

detalladamente La Constitución Política de 1991, es la máxima norma del territorio

colombiano, es la fundamental y de mayor jerarquía, establece los derechos y

obligaciones de las personas, y genera los parámetros para el desarrollo de cualquier

normatividad. Una de sus funciones esenciales es velar y garantizar que se respeten y

vulnerar los derechos de los ciudadanos, como, por ejemplo, en la realización de

pruebas de alcoholemia. De existir vulneración alguna, aparece la posibilidad de que en

un proceso judicial se decrete inválida una prueba, tal y como lo consagra la

Constitución en su Artículo 29. “El debido proceso se aplicará a toda clase de

actuaciones judiciales y administrativas”. “…Es nula, de pleno derecho, la prueba

Lo anterior quiere decir que si no se realiza el debido proceso en la prueba de

alcoholemia se puede impugnar o apelar el comparendo de tránsito, en ocasiones el conductor

de mala fe. Este es el procedimiento en el cual se puntualizará y se analizará cuando se

ejecutó la prueba de alcoholemia y se generó omisión al debido proceso, lo cual es causal de

nulidad de la violación a la norma.

Es necesario recalcar, que se puede impugnar una infracción en el caso de alcoholemia,

Las medidas adoptadas por el Congreso de la República de Colombia, están reguladas

sonadas en Colombia para fortalecer, orientar y vigilar.

En esta ley se contemplan los temas relacionados con la embriaguez y alcoholemia.

Estableciendo las reglamentaciones correspondientes a la movilidad o circulación de las

personas, ya sean en calidad de conductores, peatones o pasajeros. En su Artículo 150 se