In Memoriam DE RAUL MARTIN CORNEJO VILCHES - Doc 1
In Memoriam DE RAUL MARTIN CORNEJO VILCHES - Doc 1
In Memoriam DE RAUL MARTIN CORNEJO VILCHES - Doc 1
VILCHES (1977-2009)
ASESINADO POR LAS OSCURAS MANOS DEL
PODER EN QUE SE MEZCLAN BURGUESES,
MIEMBROS DE CARABINEROS Y EX CNI, TODOS
LIGADOS AL NARCOTRAFICO.
Este libro se termino el día 4 de diciembre de 2009, el día sábado 5 de diciembre mi hermano Raúl Martín Cornejo Vilches
celebro su matrimonio. En aquella ocasión él aprovecho presentar este libro a los invitados, cuyo contenido había cautivado
su atención. Sin embargo, apenas 4 días después de celebrado este evento, fue trágicamente muerto. La catástrofe que se ha
vivido es indescriptible pues aquel día era el cumpleaños de su hija, la hermosa y brillante, Martina Ignacia Cornejo
Inostroza.
Quiero aprovechar este espacio para denunciar cómo las llamadas instituciones para servir a los ciudadanos, se comportan
como lo que realmente son, un instrumento al servicio de sus amos y patrones, los dueños de la riqueza de este país.
Digo esto porque el siniestro sujeto que dio muerte a mi hermano es parte de la conspicua alta sociedad santiaguina, que por
cierto goza de todas las prebendas que una sociedad de clases como la nuestra puede garantizarles. Al momento del atropello
este sujeto venía en absoluto estado de ebriedad y a exceso de velocidad. Arrolló a mi hermano y se dio a la fuga. Sólo la
acción de los testigos pudo identificar y posteriormente detener al imputado. No obstante, este individuo no ha hecho otra
cosa más que ampararse en el poder socio económico y político de su clase social, acción que se ha reflejado en el
comportamiento más que reprochable de algunos agentes y funcionarios estatales.
Sin embargo, la fatídica y luctuosa experiencia descrita, no ha sido nueva para nosotros. Ya hace 25 años, los amargos frutos
de la sociedad de clases habían cobrado la vida de mi hermano mayor, Carlos Raúl Cornejo Vilches. Similar dolor hemos
vivido con mi padre quien sufrió la mutilación de su ojo izquierdo, esto mientras defendía fieramente nuestro proyecto de
construcción comunitario en la Villa San Luis de Maipú, atacado y violentado feroz y arteramente por el lumpenproletariado
que goza de la protección de algunos miembros de las fuerzas de seguridad del Estado y ex agentes de la CNI, hoy muy
ocupados en sus tareas de tráfico de drogas.
Y pese a todo, la esperanza y convicción siguen creciendo. En este sentido, no puedo dejar de agradecer a nuestra amiga,
Erika Vargas, gracias a cuya generosidad, lealtad y valentía inquebrantable se ha descubierto la verdad tras la trágica muerte
que sufrió Raúl encubierta por los infaltables traidores y cobardes que hasta hoy pretenden seguir escondiendo sus rostros. El
problema es el mismo: el matrimonio narco-sistema capitalista ante cuyos espurios intereses se alza amenazante la convicción
sembrada entre los trabajadores, nuestra esperanza por construir una sólida plataforma social, cultural, ideológica y política
que supere al monstruo que se traga las vidas, mentes y espíritus de miles de niños, mujeres y hombres en las poblaciones.
Erika, tuvo la inteligencia y el valor que muchos otros no tuvieron. Cuando se les pidió ayuda, se apartaron con el argumento
de que lo vivido sólo era un caso personal más, que este hecho “no tenía importancia”, que había que mantenerse “neutrales”,
al margen. Cómo se equivocaron: a diferencia de muchos que hablan de la lucha de clases desde un cómodo balcón, nosotros
la hemos vivido en carne propia tal como en los duros días de Stalingrado, encarando cara a cara los rigores de la historia. El
desconsuelo y calvario vivido sólo ha reafirmado, con más ardor y fervor que nunca, la conciencia y convicciones
tempranamente forjadas y fraguadas al alero de esta despiadada e implacable historia.
Por lo tanto, este libro lo ofrendo a la memoria de mis dos hermanos fallecidos. Pero también lo dedico al sacrificio, valor y
vigor inagotable de mis padres, Yolanda y Raúl. Lo consagro a la fecunda esperanza que representa Martinita, mi sobrina,
pero para quién cultivo el amor y devoción que se tiene a una hija.
Por último, a todos quienes supieron de esta tragedia y ocultaron u omitieron la información y verdad de lo ocurrido, que
sepan que no podrán siempre esconderse en la penumbra.
Distinguido General:
De acuerdo a la reunión sostenida con usted, por gestión del Diputado Pepe Auth, en la mañana de hoy, expongo la siguiente situación,
que por ser de carácter administrativo, creemos debe ser investigada por vuestra Institución:
1.- En efecto, el día 10 de diciembre de 2009 a las 4.40 horas de la mañana, mi hermano Raúl Martín Cornejo Vilches, fue atropellado en
el cruce peatonal de la esquina poniente de la Avenida Alameda con Santa Rosa.
2.- El vehículo causante del accidente se dio a la fuga, no obstante una patrulla de la primera comisaría de Carabineros detuvo la marcha
del vehículo en la esquina de Alameda con Carmen, conminando al chofer a devolverse caminando al sitio del suceso.
3.- Dicha circunstancia no fue registrada en el parte policial, sin perjuicio que se reconoce por parte del personal policial haber recogido
parte del guardafango de la camioneta 4x4 en la esquina de Alameda con Santa Rosa.
4.- Referente al suceso se levantan tres informes policiales con el membrete de tres comisarías distintas, a saber: la 1°, la 21° y la 4°,
hecho que consta en los documentos que adjuntamos refrendados por el mismo funcionario policial, cabo primero Patricio Seguel
Vásquez, quién además incluye una lista de 5 testigos escritos informalmente en el parte policial, personas emparentadas con el conductor
y cuya presencia en el lugar no puede ser constatada toda vez que el propio copiloto señala que sólo dos personas iban en la camioneta en
dirección al oriente.
5.- El chofer, de la camioneta, Henry Anton Flefel Schiaffino es trasladado desde la primera a la cuarta comisaría, negándose en todo
momento a prestar declaración.
6.- Los funcionarios policiales sólo se auto-limitan a recoger el testimonio del copiloto del conductor causante del atropello, Andrés
Detzel, omitiendo empadronar e interrogar a los testigos presenciales que se encontraban en el sector.
7.- Una vez que el conductor está en la cuarta comisaría, recién es trasladado a las 9.45 a la Posta Central a fin de realizar la alcoholemia
de rigor. En dicho establecimiento asistencial, es ingresado a las 9.50 horas y es atendido para obtener la alcoholemia a las 11.40 de la
mañana, es decir más de 7 horas después, antecedentes que se sustentan en la documentación adjunta y que complementamos con dos
informes de médicos especialistas que corroboran la imposibilidad de encontrar cantidades de alcohol significativas en la sangre después
de transcurrido ese lapso de tiempo.
8.- Dentro del procedimiento efectuado por Carabineros, la víctima es reconocida en el mismo lugar y a la misma hora del accidente por
medio de la obtención de sus huellas dactilares, las que arrojan su identificación con toda la información relativa a su domicilio. A
continuación, los funcionarios policiales señalan en el parte policial de la cuarta comisaría que: “LOS FAMILIARES DEL OCCISO Y
TESTIGOS, QUEDARON EN ESPERA DE SER CITADOS POR PARTE DE ESA FISCALÍA”. Empero, Carabineros pese a haber
realizado el reconocimiento, no informa de su identidad a la Posta Central ni al Servicio Médico Legal, entregándolo como NN. Este
hecho de extraordinaria gravedad y de inusual ocurrencia está respaldado por la documentación adjunta.
9.-Nosotros, como familia de la víctima, jamás fuimos contactados mediante ningún tipo de medio ni procedimiento por parte de
Carabineros a fin de tomar conocimiento de tan lamentable suceso. Situación que es corroborada por mi madre quién después de dos días
buscando por postas, comisarías y hospitales no logra dar con su paradero ni obtiene información relevante de su paso por alguno de estos
establecimientos. Peor aún, yo en calidad de hermano de la víctima hice sendos llamados telefónicos a la primera y cuarta comisaría
durante la noche del jueves 10 de diciembre, recibiendo como respuesta el absoluto desconocimiento de Carabineros de alguna víctima o
detenido con ese nombre.
10.- Pero, si estos hechos parecen de extraordinaria gravedad, palidecen frente al inadecuado procedimiento del teniente Marcelino
Morales Neira, quién no contento con actuar en forma vejatoria y grosera en contra de nuestra abogada querellante, doña Erika Vargas
Abarca, emite un informe SIAT absolutamente parcial toda vez que sólo contempla la declaración y versión del copiloto del conductor,
dando por cierto dicho testimonio, y excluyendo a nuestros testigos presenciales, a los que calificó como “falsos”. Respecto a este punto
adjuntamos la declaración de nuestros testigos y el reclamo contra dicho oficial SIAT.
11.- Habida cuenta de la conducta antes denunciada, nuestra abogada solicito presurosamente copia de la grabación de las imágenes
captadas por la Cámara de la Unidad Operativa de Control de Tránsito ubicada en esa misma esquina. Para nuestra sorpresa, Carabineros
le informa a la fiscalía que a la hora de ocurrencia del hecho, la cámara no estaba operativa, por lo que perdimos otra plena prueba. Lo
extraño de este hecho es que la misma cámara sí estuvo operativa a la hora en que la SIAT realizó su peritaje.
12.- Dadas las irregularidades antes denunciadas, y que atribuyen toda la responsabilidad a mi hermano y víctima de este atropello,
actualmente la fiscalía centro norte, decretó orden de no perseverar, la que será notificada el día 7 de septiembre de 2010 a esta parte
querellante y a la justicia.
Por lo anterior, ruego a usted encarecidamente sirva tomar conocimiento de estos hechos, instruya la investigación administrativa
correspondiente y en caso de existir responsabilidad se aplique el máximo rigor de la ley en contra de los funcionarios que entorpecieron
la investigación de este hecho.
Le saluda cordialmente