Capítulo 41 1/9

Capítulo 41

- ¡Le di el día libre!

- ¿Desde cuándo tienes derecho a darle
tiempo libre? - Esta versión de Liz no la conocía,
pero me estaba encantando.
- ¡Todavía soy el dueño de esta casa! -
Realmente lo era.
- ¡Ah! ¡No me digas! No te preocupes. -
Respira profundamente. - Me iré de aquí mañana.
- Mientras estemos casados, no habrá ninguna
diferencia. - Comienzo a caminar hacia ella mientras
hablo. -Todo lo que es tuyo es también mío, y
viceversa.
- ¡Bien, señor McNigth! - Lentamente
reduzco los pasos entre nosotros, ella da unos
pasos hacia atrás, apoyándose en la nevera. - ¿Cuál
es el motivo del retraso del divorcio?
No digo nada, sólo sigo caminando hacia ella,
cuando estoy lo suficientemente cerca, sólo pongo
mi mano en la nevera, reduciendo la distancia entre
nosotros, de manera que la dejo acorralada, y
dejando mi cara cada vez más cerca de la suya.
Empiezo a besar la comisura de su boca, ella
parece extasiada, y finalmente le beso la boca.
Nuestro beso es urgente y delicado a la vez,
podía sentir cómo uno necesitaba al otro. Tiro de su
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labio inferior con los dientes, y luego lo suelto,

deslizando mi propia lengua sobre mis labios,
saboreando el envolvente sabor de esta mujer. Liz
se limitó a observarme, pude notar que ese gesto la
conmovió de alguna manera.
Empiezo a recorrer su cuerpo con mis manos,
subo una de ellas a uno de sus pechos, lo que fue
fácil mucho porque estaba sin sujetador. Con la otra
mano aprieto y sostengo su culo con firmeza.
Liz era períecta, lo tenía todo a punto, de hecho
sus medidas eran períectas para mí, cada centímetro
de su cuerpo me dejó en las nubes.
Enreda sus brazos alrededor de mi cuello, con
este gesto me obliga a soltarla para dar un impulso,
para que pueda rodear mi cintura con sus piernas,
mi m*****o ya estaba rígido y palpitante,
necesitándola.
En respuesta a mis toques, ella arqueó su
cuerpo hacia atrás. Ella gimió y respiró
profundamente.
- Mhhh. - Sus gemidos resonaron en la
cocina.
- ¿Te gusta que te bese aquí? - pregunto,
mientras rozo con mis labios el lóbulo de su oreja, y
al mismo tiempo, aprieto mi m*****o en su
intiimidad. - ¡Respóndeme, Liz! Necesito escuchar
tu voz. - Me enfrento a ella, sólo iría más allá con
ella, con su permiso.
Capítulo 41 3/9

ella, con su permiso.

Se limitó a asentir con la cabeza.
- S... s ... Sí. - Su voz sale en un susurro.
- ¿Quieres que continúe? -Ver su cara
sonrojada fue lo mejor, más aún sabiendo que yo
era el motivo.
Me embelesaba su belleza, sus ojos negros eran
grandes, su nariz era herm1osa, pequeña y
respingona, y ese agujerito que tenía en la barbilla,
esa mujer era un pecado.
- Henry, vete. - Salí de mi trance cuando dijo
eso.
- ¿Estás segura? -Acababa de darme perm1iso
para tocar cada centímetro de su cuerpo, y ahora
me decía que me fuera.
- Sólo vete de aquí.
No discuto con ella, sólo salgo de allí. Sandra
pasa a mi lado en la entrada de la casa.
-Mi niño. - Ella amenaza con abrazarme, yo
sólo levanto la mano para que no lo haga. - ¡Está
bien! - Le hago una señal para que entre, estoy
seguro de que Liz la necesita más que yo.
Me quedo un rato en la puerta, preguntándome
si debo volver allí o no.
Finalmente vuelvo a la comisaría.
Tenía que autorizar algunas órdenes y firmar
algunos papeles.
Capítulo 41 4/9

***
- Puede entrar. - Hablo cuando alguien llama
a mi puerta.
- ¿Necesitas algo? - Era Dalila. - ¿O puedo
irme? - La perra estaba sexy con esa falda azul y
una camiseta con cuello en V. me miraba con cara de
querer ser follada.
- Cierra la puerta. - Me sonríe y hace lo que
le digo.
Se acerca a mi mesa, y yo salgo de detrás de ella
y cara a cara con Dalila, empieza a besar mi cuello.
- ¡No! -A ella no le importa, sólo empieza a
desabrochar la hebilla de mi cinturón. - ¡Date la
vuelta! - Britney podría ser así, como Dalilah, sin
cuestionar nada.
Se da la vuelta, y la empujo para que se incline
sobre mi escritorio, pongo el condón que tenía en
el bolsillo del pantalón, le levanto la falda, le saco las
bragas a un lado, y toco su intimidad, ya estaba
preparada para recibirme.
La penetro sin piedad, con cada empuje ella
gime.
- Tómatelo con calma, guapo. - No podía
controlarme, iba cada vez más rápido, quería
satisfacerme, llegué a mi clímax, no de la manera
que quería, pero lo hice.
- Hasta mañana. - dice Dalila mientras se
prepara, me da un beso en la mejilla y sale de mi
Capítulo 41 4/9

prepara, me da un beso en la mejilla y sale de mi

habitación.
- ¡Mierda, Henry! - Me grito a mí mismo.
Miro la pantalla de mi móvil y son casi las seis.
Voy a mi casa. Me doy una ducha rápida y voy a casa
de Britney.

***
En cuanto llegué a casa de Britney ya me estaba
esperando en lla puerta, casi corre cuando me ve
estacionar.
- Creía que ya no ibas a venir. - Dice
mientras sube al auto.
- Estoy aquí, ¿no es suficiente?
- ¿No me dirás el motivo de tu retraso?
- ¿Seguro que quieres empezar una discusión?
- Ella me encara.-Te he dicho que no tenemos
nada, es decir, que no te debo ninguna explicación.
-Todo bien, pero al menos podrías ser un
poco más cariñoso.
- Soy dulce cuando tú eres dulce. - Sí, mi
forma de ser frío y egocéntrico estaba volviendo,
después de Ketlin, así es como empecé a tratar a
mis polvos, era cariñoso cuando tenía que serlo,
sólo en la parte del sexo, aunque era agitado y un
poco violento, podríamos decir.
Seguimos en silencio el trayecto hasta la casa de
John. En cuanto llegamos, John y Jo vinieron a
Capítulo 41 4/9

recibirnos.
- ¿Britneyl - Jo se sorprendió de que me
-
acampanara.
- Ella es mi invitada. - Hace una "O" con la
boca pero no dice nada más.
- Sentémonos en la sala de estar. - John nos
lleva a la sala de estar. - ¿Y cómo están las cosas?
- Sabía exactamente a quién se refería.
-Andando.
- No como esperabas.
- Mucho menos de lo que esperaba.
-Aquí tienes. - Jo trae una copa de vino para
cada uno.
- Gracias. - Britney le da las gracias, no ha
abierto el pico desde que llegamos, bien, eso es
señal de que está entendiendo cuál es su lugar, en el
mundo en el que vivo.
Empezamos a hablar de cosas al azar, unos
minutos más tarde veo a Liz, se veía increíble en ese
traje, o el traje era increíble en ella, sólo sé que
puede hacer que todo se vea perfecto.
Esa falda marcaba perfectamente sus caderas y
su culo, y ese escote, ya empecé a recordar las
veces que mis labios estuvieron en sus pechos, las
veces que se pusieron rígidos con mi tacto.
Para mi ironica alegría, ella estaba de la mano
con el idiota.
Capítulo 41 7/9

- Me encantaría. -Ya no me mira.

- Si nos disculpan. - El idiota le toma la mano
y se van. - ¡Vamos, amor!
- Por supuesto, discúlpeme.
¡¿Cariño?! ¡Qué carajo!
Ambos se dirigen al patio trasero.
- Les pediré que sirvan la cena.
-Te acompañaré. - Britney me da un beso en
la mejilla y acompaña a Jo.
- ¿Qué carajo, Henry? ¿Cómo se convirtió tu
mujer en la novia de mi hijo? - me pregunta John
mientras se alejan.
-Yo ... yo ... - Respiro profundamente. -
Kevlin ha vuelto, Patrick está encima de ella, alguien
de la mafia alemana intentó matarme, y Liz estaba
allí. Kevlin está con Eric, y no sé qué hacer.
- No puedo creer que todo esto esté
sucediendo y no hayas dicho nada al respecto. -
Estábamos susurrando.
- Han pasado casi tres semanas desde que
ocurrió todo esto, así que he decidido no estar más
con ella.
- De acuerdo, pero, ¿y si Patrick se queda con
ella? - John estaba angustiado.
- No sé qué hacer todavía, pero estoy seguro
de que está involucrado con Kevlin.
- Infórmame de todo lo que está pasando,
Capítulo 41 8/9
-Infórmame de todo lo que está pasando,
necesito mantener a mi hijo y a ella a salvo, al
menos mientras dure esta falsa relación. - John se
,
r1e.
- ¿Cómo, que falsa?
- ¿Viste cómo te miraba?Y a mi hijo le gusta
Ana.
- ¿Quién es esa?
- La pelirroja. -John señala con la cabeza,
mostrándome quién era Ana.
- ¡Ahh! Es mi alumna.
- ¿Y no sabes los nombres de tus alumnos? -
Se ríe.
- No, sólo los que me interesan.
- Estás volviendo a ser el viejo Henry.
- Casi John, casi.
- ¡Pensé que habías cambiado!
- Mi cambio se llama Liz. - Miro afuera y la
veo con Pedro. - Mientras esté lejos de ella, el
viejo Henry estará allí. Si me disculpan. - Digo,
levantándome.
- Pero por supuesto. - Habla él, cuando se da
cuenta de a dónde iba.
Le sigo hacia el patio trasero, Liz estaba cerca
de la piscina, Pedro ya no estaba allí.
-Te ves deliciosa con esa ropa. - ella está de
espaldas a mí, le susurré al oído.
Capítulo 41 9/9

- ¡Tienes que verme sin ella! - ¡Upa, upa!

¿Qué está pasando con esta mujer? No era la
respuesta que esperaba, pero me sorprendió.
- ¿Puedo?
- ¿Y tu novia?
-Te dije que no es mi novia.
- ¿Estás seguro? - Entonces se da la vuelta.
-Todas las veces que tuve sexo con ella, fue
pensando en ti. - La miro profundamente a los
ojos. - Y en ningún momento ha conseguido
satisfacerme, ¿sabes por qué Liz? - Ella movió la
cabeza negativamente. - Porque ella no es tú.
- ¿Y por qué me alejas?
- Para mantenerte a salvo, te amo tanto que
prefiero verte con alguien más que muerta. - Sus
ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.
- ¿Interrumpo? - pregunta Pedr o apenas
llega.

Elena El Amor De Mi Vida

Rosali Reyes

Par.a no entrar en la trampa de su familia Elena

tenia que decidir si entregar su virginidad a...
Capítulo 42 1/12

Capítulo 42

- No. - Digo sin apartar mis ojos de los

suyos. -Ya me iba.
Le doy un beso en la mejilla y me voy, sin mirar
atrás.
Vuelvo a donde estaba, Britney parecía divertida
con Jo.
Jo nos llama a cenar. Me siento junto a Britney,
John se sienta en el extremo, yo me siento junto a
él, Jo se sienta en el otro extremo, Liz se sienta
frente a mí y Pedro junto a ella.
Ahora soy yo el que no la mira,
sorprendentemente, la compañía de Britney
empezaba a ser agradable.
Al cabo de un rato siento una pierna rozando la
mía, trago en seco, aún no estaba seguro de quién
era.
Ese pie sube hasta llegar a la mitad de mi pierna.
Miro a Liz y ella me dedica una pequeña sonrisa
traviesa.
- ¿Estás bien? - pregunta Britney. - ¡Parece
que estás tenso!
- Sí Henry, pareces tenso. - reafirma Liz.
- Sólo necesito ir al baño. - Míro fijamente a
Liz, y me pongo de pie de manera que nadie pueda
decir que mi polla estaba dura.
Capítulo 42 2/12

Parecía que el baño estaba demasiado lejos.

Entro en él y me echo agua en la cara,
necesitaba refrescarme.
Respiro profundamente, me seco la cara,
cuando abro la puerta para salir me topo con Liz.
- Pensé que iba a quedarse allí más tiempo.
- Es ... - No espera mi respuesta y me
empuja al baño, cerrando la puerta tras ella.
-Te dejaré salir en un minuto. - Dice esto y
empieza a desabrocharme el cinturón, estoy
extasiado. sorprendido. indignado. feliz, hay una
mezcla de sentimientos en mi cuerpo.
Salgo de mi trance cuando empieza a
chupármela.
¡Qué mujer! ¿Me lo esperaba? No, claro que no.
Estamos viviendo una montaña rusa de
emociones, justo cuando creo que estamos
subiendo, viene el destino y nos hace caer una vez
,
mas.
- Liz... Para... - Hablo susurrando.
Empieza a hacerlo más rápido, yo contengo mis
gemidos, puede no parecerlo pero sólo "gimo"
cuando estoy con Liz, no puedo expresar ningún
sonido cuando estoy con otra mujer.
Cuando me doy cuenta de que lo están
esperando, finjo algún tipo de sonido.
Todo mi cuerpo empieza a dar señales de que
Capítulo 42 2/12

me voy a correr, y me corro en su boca.

Liz me pasa la mano por la boca y me da un
beso, un beso tranquilo, lleno de amor.
- ¡Qué delicioso eres! - me dice y vuelvo a
besarla.
- ¡Henry! ¿Estás bien? - Me grita Britney.
- Sí, voy saliendo.
- ¡Maldita sea! - Liz me susurra al oído.
Me subo los pantalones, por suerte el baño era
grande, Liz se pone detrás de la puerta mientras la
abro.
- Estás sudando.
- Debe ser la presión. - Me sonríe, al menos
no ha intentado mirar dentro del baño. - ¿Nos
vamos?
Finjo estar mal y me apoyo en su cuerpo, y
volvemos al salón.
- ¿Estás bien, Henryr - pregunta John.
- Creo que fue la presión.
- Caramba Henry, ¿estás bien? - Liz aparece
con un vaso de vino en las manos y pone cara de
sorpresa.
- Ya estoy mejor. - Le digo a Liz, John me
mira y reprime una risa, ya sabía lo que había
pasado.
Terminamos la cena y evito mantener el
contacto con Liz.
Capítulo 42 4/12

***
- Gracias por todo, John.
- De nada, Henry, sabes que siempre eres
bienvenido aquí. - Me abraza.
-Adiós Jo.
- Hasta luego, muchacho. - Me da un beso en
la firente. -Adiós, Britney.
- Gracias por recibirnos. - Britney le dice a J.
- Nos vemos, Pedro. - Le tiendo la mano en
señal de saludo y me la devuelve, siento los ojos de
Liz sobre mí, pero no la miro.
Britney termina de despedirse de todos,
incluida Liz. Subimos al coche y nos dirigimos a la
casa de Britney.
- ¿No quieres entrarl - dice Britney cuando
llegamos. - Mis padres están fuera, estoy solita. -
Sonríe.
- Está bien. - Casi me salta al cuello cuando
escuchó mi respuesta.
La sigo. En cuanto entramos en su casa, me doy
cuenta de que era muy extravagante, como ella.
- ¿Quieres un tragot
- No, creo que he bebido demasiado. - Se
sirve alguna bebida que no presté atención a lo que
era. Observé una foto que había en la pared,
seguramente eran sus padres, él y tenía un niño que
parecía ser mayor que BrL - ¿Tu hermano? - Me
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Capítulo 42 5/12

indica que me siente en el sillón n***o del salón y

ella se sienta en el sofá de al lado.
-Sí.
- Pero ni siquiera se parecen. - Da una
pequeña sonrisa amarga. - Lo siento si he sido
inoportuno.
- Es adoptado. - Suspira honda.mente. -
Pero siempre fue el favorito de mis padres.
- ¿Y no s.e llevan bien?
- Al contrario, nos llevamos demasiado bien ...
- ¿Pero?
- Es seis años mayor que yo y nos
enamoramos.
- ¿Lo saben tus padres?
- Sospechan, así que lo enviaron a Canadá,
está cursando su segundo grado, y al final del
semestre regresa.
- ¿Está ansiosa?
- No te puedes imaginar cuánto., no sé si
podré aguantar.
- Ya eres mayor, sabes lo que quieres.
-Tiene novia, pensé que si hacía lo mismo, tal
vez lo olvidaría.
- Es complicado, pero puedo ayudarte cuando
vuelva. - Ella me mira. - Por supuesto, ¡si quieres
que lo haga!
- De auerer. si auiero. oero iaué oasa con Liz?
Capítulo 42 6/12

- De querer, si quiero, pero ¿qué pasa con Liz?

- ¿Qué pasa con ella?
-Te arriesgas a perderla con Pedro.
- Lo sé. - Nos sentamos en silencio durante
unos largos minutos, me di cuenta de que este tema
la afectaba. - Creo que voy a ir. - Ella también se
levanta y me acompaña hacia la salida.
- Gracias por la compañía y por escucharme.
- Sonríe sin ganas.
- Me gustó conocer esta faceta de Britney. -
Y me gustó mucho.
- Sólo sale con personas que me transmiten
confianza. - Me acompaña a la puerta. - En la
universidad intento ser fuerte.
- Gracias, Bri. - Le doy un beso en la mejilla
en cuanto llegamos a la puerta de su casa y me
despido.
Me dirijo a mi coche, y al entrar en él recuerdo
sus palabras.
"Corres el riesgo de perderla con Pedro.
Corres el riesgo de perderla con Pedro.
Corres el riesgo de perderla con Pedro."
- ¡Maldita sea! - Grito.
Sabía que eso era cierto, pero era el riesgo que
tenía que correr, al menos no era de ninguna mafia y
podía hacerla feliz.
Arranco el coche y acelero con todo.
Capítulo 42 7/12

Después de casi media hora llego a casa, y debía

haber alguna fiesta en el edificio, porque estaba muy
concurrido. Había una cola de coches para entrar y
otra para salir, y todavía había mucha gente
esperando para entrar en la puerta peatonal.
¡En serio! Me gustaba el apartamento
precisamente por el silencio, era lo que más
valoraba en ese momento. Tal vez incluso
participaría en la fiesta.
Después de unos cinco minutos consigo entrar,
estaciono y sigo hacia el ascensor, que por cierto
estaba lleno, había varios adolescentes, espero a que
llegue el siguiente, que estaba casi vacío, me meto y
sigo hasta el penthouse, me doy cuenta de que la
fiesta se celebraba en la quinta planta y hasta el
penthouse había unas quince plantas de por medio.
Nada más llegar al penthouse, respiro
profundamente y agarro la llave que llevaba en el
bol sillo del pantalón.
1

Hoy ha sido un día turbulento.

Llego y me dirijo directamente a mi habitación,
nada más entrar empiezo a quitarme la ropa,
dejándola esparcida por toda la habitación y me
dirijo directamente a la ducha, dejo que el agua
corra por todo mi cuerpo, no tenía prisa, hoy no
daría clase, era sábado, y sólo iría a la comisaría por
la tarde.
Mientras me relajaba por el efecto que el agua
Capítulo 42 8/12

caliente estaba causando en mi cuerpo, siento unas

manos recorriendo mi espalda, todo mi cuerpo se
puso de piel de gallina, porque sabía exactamente de
quién se trataba.
Empieza a besar mi cuerpo, cuando me doy la
vuelta, llevaba una lencería roja, toda de encaje, con
unas cintas entrelazadas por encima del pecho y
con un hobby de seda.
- Liz.
- ¿Te ha gustado la sorpresa? - Ella sonrió.
- ¿Cómo, has entrado aquí?
- Deberías cerrar la puerta con llave.
- Oh, no.
- ¿Vas a seguir haciéndome preguntas o
prefieres hacer otra cosa?
-Juré que no te tocaría s ...
-Yo te lo estoy pidiendo. - Me besa la
comisura de la boca. - Sé que me necesitas tanto
como yo a ti, Henry.
- ¿Y tu novio?
- ¿Y tu novia? - En ese momento agarra con
fuerza a mi polla, que ya estaba listo para ella.
- ¡No me respondas con otra pregunta! -
No tenía sentido.
- Está bien. - Dice y suelta mi polla. -Ya
que no quieres hacerlo. - Levanta las manos en
señal de redención. - Nos vemos.
Capítulo 42 9/12

La tiro del brazo cuando se gira para salir del

baño.
- ¡Lo sabía! - dice y sonríe.
Empiezo a besar sus suaves labios, ella se quita
el hobby, yo empiezo a pasar mis manos por todo
su cuerpo.
Abro su sujetador, dejando ver sus pechos, dejo
de besarla y observo su cuerpo.
- ¿Te gusta lo que ves? - Pregunta y se
muerde el labio inferior.
- No te puedes imaginar cuánto. - La voz me
sale en un hilo, Liz tiene el don de dejarme sin
palabras, extasiado, emocionado, enamorado, y no,
puedo decir qué más me hace esta mujer.
Termino de quitarle el sujetador y me agacho
frente a ella, besando entre sus piernas y
recorriendo su cuerpo con mis manos, le quito
delicadamente las bragas y no dejo de besarla en
ningún momento.
- ¿Vamos a la cama? - Cierro la ducha y la
cargo en mi regazo, la tumbo en la cama con
cuidado. - ¿Puedo pedirte algo?
- Lo que quieras. - Su cara está sonrojada,
seguro que es por su respuesta.
- Quiero que te toques, mirándome, deseando
tenerme dentro de ti. - Digo eso y me alejo de
ella, caminando de espaldas hacia la puerta del
dormitorio.
Capítulo 42 10/12

dormitorio.
-Yo ... - Se congela.
- Por favor, Liz. - Pongo cara de pena. -
Vuelvo enseguida, pero puedes empezar.
No espero su respuesta y me dirijo al minibar
que tenía en el apartamento, estaba arriba, de hecho
tenía dos, uno arriba y otro abajo. Tomo un trago de
whisky y vuelvo a la habitación.
Me quedé en la puerta mientras veía a Liz
tocándose, con los ojos cerrados, sentada en el
borde de la cama, pasando una de sus manos por su
inti1midad, haciendo movimientos circulares y con la
otra se apretaba uno de sus pechos, la erección no
hacía más que aumentar, verla así, expuesta y
vulnerable al mismo tiempo, me estaba volviendo
loco.
Me agarro el pene y empiezo a hacer
movimientos de vaivén, y al mismo tiempo me bebo
el whisky. Liz abre los ojos y sonríe al darse cuenta
de mi estado, empieza a morderse el labio inferior,
lo que hace que me excite cada vez más.
Cuando me doy cuenta de que está a punto de
tener un orgasmo, dejo mi bebida en la mesa que
tengo en la habitación y me acerco a ella.
- No. - Le digo y le agarro la mano.
Me agacho casi a su altura, la empujo un poco
hacia atrás, le sujeto las piernas y caigo de boca
sobre su intimidad. Su sabor era muy bueno, el
Capítulo 42 11/12
sobre su intimidad. Su sabor era muy bueno, el
mejor que había probado.
Empiezo a hacer movimientos de ocho con mi
lengua en su clítoris, y alterno dando algunos
mordiscos tirando de sus labios vaginales, Liz
empieza a suspirar profundamente, con una de sus
manos sujeta mi cabeza y con la otra uno de sus
pechos.
-Ah... ah ... - Ella gime, haciendo que me
. ,
excite mas.
Pongo uno de mis dedos dentro de ella, y no
paro de chuparla, su cuerpo empieza a dar señales
de que se va a correr, cuando intenta cerrar las
piernas la detengo, poniendo otro dedo dentro de
ella.
Liz empieza a gritar. Sí, realmente grita entre
gemidos.
- Hen ... Hen ... ¡Henry! - Finalmente grita mi
nombre y se corre en mi boca.
No dejo que recupere el aliento, simplemente
la pongo a cuatro patas. Comienzo a presionar mi
m*:,¡o¡c**o contra ella.
- Henry ...
- ¿Qué quieres Liz?
-Te quiero dentro de mí. - Habla con una
voz tan sexy.
Me encajo entre sus piernas y la introduzco
Capítulo 42 11/12
lentamente, sabía que nunca había estado con nadie
, . . ., ,
mas que conm 1go, y esa pos1c1on era aun nueva para
ella.
Me muevo lentamente dentro y fuera de ella
para que se acostumbre, hasta que me doy cuenta
de que se agarra a las sábanas de la cama. Empiezo a
acelerar, Liz no deja de gemir y yo sigo sus gemidos
y el ritmo perfecto y sincronizado que llevábamos.
Me doy cuenta de que se va a ir una vez más,
antes de que eso ocurra, con un solo movimiento, la
sostengo y le doy la vuelta, quedando ella encima y
yo sentado. Empieza a darse la vuelta, la sujeto con
fuerza en su culo, guiando sus movimientos, mi boca
mordía y chupaba sus pechos, alternando de uno a
otro. Sus gemidos eran música para mis oídos.
- Eso es, Liz. - La animo, mientras empieza a
acelerar sus movimientos.
Siento que no tardará mucho, después de unas
cuantas estocadas llegamos juntos al clímax.
Esta vez no lo evité y llegué dentro en ella, sabía
los riesgos que corría y eso no me importaba. Le
había reservado un ginecólogo el mes que viajé a
Italia, y no sé si llegó a ir.
- Henry ... - Su voz era tranquila y serena.
La pongo en mi regazo y la acomodo en la
cama, haciendo que se acueste sobre mi pecho, sentí
que su olor era algo que me tranquilizaba mucho,
jalo la sábana y nos cubro, empezando a acariciar su
Capítulo 43 1/1

cuantas estocadas llegamos juntos al clímax.

Esta vez no lo evité y llegué dentro en ella, sabía
los riesgos que corría y eso no me importaba. Le
había reservado un ginecólogo el mes que viajé a
Italia, y no sé si llegó a ir.
- Henry ... - Su voz era tranquila y serena.
La pongo en mi regazo y la acomodo en la
cama, haciendo que se acueste sobre mi pecho, sentí
que su olor era algo que me tranquilizaba mucho,
jalo la sábana y nos cubro, empezando a acariciar su
cabello y espalda.

Capítulo 43

Me despierr to con el brillo que entra por

la ventana.
Liz ~igue ciurn1iendo parece tan serena Miro el

THANKYOU!
Capítulo 52 1/4
Capítulo 52

Intento abrir los ojos, pero no puedo, es difícil.

- Mi amor, recupérate pronto, por favor. - De fondo escucho
la voz de Henry.
Intento mover mi cuerpo, pero es inútil, no puedo.
:tctc,f<

Abro los ojos con un poco de dificultad, la luminosidad me

sigue molestando, y mucho. Henry ,e stá sentado en la silla junto a la
cama en la que estoy, y su cabeza está sobre mis piernas y una de sus
manos sujeta la mía.
Intento mover mi mano, o uno de mis dedos.Y nada, intento
uno. dos, tres, cuatro más, y nada. Siiento que tengo algo en la boca y
no puedo hablar, siento la garganta seca, necesito agua, pero nadie
entra y Henry no se despierta.
Me quedo con los ojos abiertos, esperando que Henry se
despierte o que alguien entre.
Alguien abre la puerta, y para mi alegría, es una enfermera.
- ¿$ignora McNighd (¿Señora McNightl) - Ella habla en
italiano, y no puedo entender, no puedo creer que estemos en Italia.
Ella sale de la habitación y Henry se despierta cuando ella llama
a la puerta, se pasa las manos por la cara, tiene el pelo desordenado.
Cuando me mira y se da cuenta de que estoy despierto me sonríe,
sus ojos ya están llorosos y los míos también.
- ¡Liz! - Me abraza. Quiero decir algo, pero no puedo por
esta cosa en mi boca.
la enfermera vuelve con un médico.
- Mi scusi, signore, tiriamo fuori il tubo e controlllamo 1
segnali. (Perdone señor, vamos a sacar el tubo y a comprobar los
signos vitales) - Dicen algo, Henry se aleja y empiezan a comprobar
mis signos y a sacar el tubo de mi boca.
- Hen ... He... - Intento hablar pero me resulta difícil.
- Potrebbe volerci un po' di tempo per parlare di nuovo, ma
continuiamo a guardare. (Puede que tardemos en volver a hablar,
pero seguiremos vigilando.)- El médico se acerca a Henry y le
habla.
- ()k rinttnrP (()k nnrtnr\ - Sien IP h::ihl::innn rnn ~ Pnrv
Capítulo 52 2/4
- Ok, dottore. (Ok, doctor). - Sigue hablando con Henry,
pero no presto atención a lo que hablan. Siento que la garganta me
arde de estar tan seca.
- Hen ... Agu ... - Henry me mira y le dice algo a la enfermera.
espero que esta difi:cultad para hablar se le pase pronto, no lo
soporto.
- Potresti portarle dell'acqu1a, per favore. (Podría traerle agua,
por favor.) - Henry habla con la enfermera y me mira. -Volverá
con tu agua.
Me limito a asentir con la cabeza en señal de agradecimiento.
La enfermera y el médico salen de la habitación.
- ¿Cómo te sientes? - Se acerca a mí y me pregunta. Sus ojos
están hundidos, parece que no ha dormido en días, lleva un pantalón
de chándal n***o y una camiseta gris, está muy sexy con esta ropa, si
fuera cualquier otra circunstancia, habría tirado a este hombre sobre
la cama y abusado de su cuerpo.
Pero, ¿cuánto tiempo he estado aquí? Sandra, Petter y mis
amigos, ¿están bienr
- Bueno... bien. - Me siento fatal. Recuerdo que tal vez estaba
embarazada, y necesitaba saber qué había pasado, sólo recordaba
estar en un helicóptero con Henry:
-Todo irá bien, pronto podrás volver a hablar. - Intenta
abrazarme, me da un abrazo torpe. pero con mucho cariño. - El
médico dijo que esto se debe a que la bala golpeó parte de tu
esófago y el tiempo que estuviste en coma. - Hago una cara de
sorpresa. - Sólo ha pasado un mes desde que ocurrió todo esto. -
¡Dios mío! Llevo un mes en Italia.
- El be ... - Respiro profundamente e intento hablar una vez
más. - El be ... be - Es la única manera de sacar mi voz, sale en un
susurro. pero sale.
-Ah, ¿el bebé? - Henry pone una cara que no puedo
descifrar, me aprieta el corazón. - Está bien. - Siento que me quito
un peso de encima, es todo lo que quería oír. -Todavía es pequeño,
lo descubrimos pronto, y si no me equivoco estamos de casi seis
semanas. - Las lágrimas empiezan a correr por mis ojos. -Tuvimos
mucha suerte, Líz.
La enfermera vuelve con el agua, Henry me ayuda a beber, la
Capítulo 52 2/4
enfermera aplica un medicamento en la vía que está tomando y
siento que los ojos me pesan de nuevo.
""4<*
No sé cuántas horas he dormido, lo único que sé es que me
siento mucho mejor. Henry está durmiendo igual que antes.Ahora
puedo mover los brazos, están un poco entumecidos, pero todavía
puedo hacerlo. Esta vez Henry tiene su cabeza en mi vientre. Esa
escena hace que me derrita. La única certeza que tengo es que será el
mejor padre.
Acaricio su cabeza, es tan bueno sentirlo de nuevo, poder
tocarlo.
Observo la habitación, es grande, blanca con el color de la
crema, tiene una televisión enorme, una máquina de café expreso, hay
una puerta que parece ser de un armario, pero creo que es la pue·rta
del baño, y unos cuatro sillones, estoy seguro que este hospital o
consultorio debe ser la mafia.
Henry se despierta, me mira 'Y sonríe, la sonrisa que me
encanta, la sonrisa que me desarma.
- ¿Cómo estásr
- Est ... es ... - ¡Maldita sea! - Estoy bien.
-Ten paciencia. No tiene sentido ponerse nerviosa, lo
empeora todo. -Tenía mucha razón, puso su mano en mi vientre,
sólo saber que nuestro bebé estaba aquí me tranquiliza. - Les pediré
que te traigan el almuerzo. - Pulsa el timbre junto a mi cama,
segundos después aparece la enfermera del día anterior.
- Posso aiutarer (¿Puedo ayudarler) - Habla la enfermera,
sólo entonces me doy cuenta de que es morena, de ojos negros y
tiene el pelo rizado, lo lleva recogido, pero se ve que le llega a la
cintura, es guapa. pero no parece ser italiana.
-11 suo pranzo. (Su almuerzo.) - Necesito aprender a hablar
italiano, verlos hablar y no entende:r nada, me angustia mucho.
La enfermera asiente y se va.
Henry me ayuda a sentarme en la cama, ya puedo sentir todo
mi cuerpo, esto es reconfortante, la enfermera vuelve con mi
almuerzo, y el de Henry, el mío es sopa de pollo. al menos eso. y tiene
jugo de maracuyá y una manzana. El de Henry es una macarronada y
una agua.
Capítulo 52 4/4
-Aq ... Aquí... - Recupero el aliento e intento hablar una vez
más. - Es de... la ma... ¿Mafia?
- ¿Te refieres a la comidar - Él esboza una media sonrisa. yo
sólo asiento con la cabeza. - Sí, lo es. - No sé por qué todavía tenía
dudas al respecto.
Comí esa comida con gusto, no recordaba que tenía tanta
hambre.
Después de nuestra comida. me ayuda a ir al baño, consigo
cepillarme los dientes y vuelvo a la cama, aún sintiéndome muy
cansada.
Sólo que hay algo extraño, parece que estoy orinándome en la
cama, sólo que acababa de ir al baño.
- ¿Qué ocurrer - me pregunta Henry al notar mi expresión.
Levanté la sábana que me cubría y había sangre, mucha sangre.
- ¡Henry! - Nos vernos con angustia y pánico, estábamos
congelados, las lágrimas corrían por mis ojos. Sale de su trance y grita
llamando al médico.
- ¡Un dottore! (¡Un médico!) - Grita Henry. - ¡Un dottore!
(¡Un médico!)
El médico aparece en la puerta...

Capítulo 53

>1ct<* Henry ~
Ver a Liz así, vomitando, me ponía enfermo, sentía que yo era la
.
razon.
Sólo quería cuidar de ella, espero que lo sintiera cuando nos
bañáramos juntos. hacía tiempo que no disfrutábamos de un tiempo
juntos que no fuera sexo.
*>lcl<

Al cabo de unas horas me despierto y me doy cuenta de que

Capítulo 53 1/5
-- -·--- ·· -· -- · ··- --- r · -· - - , · ··- -- , --·- ·· -- -- , - -

Uz no está en la cama, me levanto y voy al baño de su habitación y

tampoco está.
Bajo a la cocina de puntillas, y ella está allí, toda guapa y
comiendo un trozo de tarta de chocolate, a las 03:00 de la mañana,
eso era una novedad.
Está concentrada en su pastel.
- ¿Me vas a decir qué pasa? - Se asusta con mi pregunta, pero
no me mira y se queda mirando el pastel.
- ¿De qué estás hablando? - Ella finge no entender y yo me
siento a su lado.
- Estás extraña. -Y realmente lo era, ya que cuando
estábamos juntos nunca la había visto levantarse de madrugada para
comer, y una vez más me ignora y vuelve a comer su pastel. -Y te
enfermas y pierdes peso de la nada.
- No estoy perdiendo peso.
- Sí que lo estás, ¿estás enferma? ¡Liz, mírame, maldita sea! -
Grito.
Se levanta de la silla y me mira fijamente.
Me echa en cara algunas cosas.
"Estás lleno de secretos y no tienes derecho a gritarme ni a
exig:irme nada. "
En el fondo tenía razón, no tenía derecho a exigirle nada, justo
cuando creo que me va a gritar una vez más, corre al baño y vuelve a
vomitar. Debe haber tenido un virus, eso no es normal. ¿Podría tener
cáncer? ,oalgo asir
Sólo sé que la voy a llevar a un médico de confianza.
- Liz. - La llamo por su nombre en cuanto termina para que
apague todo y se lave la boca. - Dime, no puedo verte así.-Y
realmente no podía, mi corazón se rompía al verla así.
- ¿Realmente quieres saber la verdad?-Asentí con la cabeza.
-Todavía no estoy seguro.
- ¿Seguro de qué?
- Creo que estoy embarazada.
No puedo decir lo que realmente sentí, fue una mezcla de
sensaciones, la mujer que amo tendrá un hijo mío, pero cómo podré
mantenerlos a salvo, no podría estar embarazada, al menos no ahora.
Capítulo 53 2/5
Comienzo a caminar de un lado a otro, me estaba poniendo
nervioso.
- ¿No fuiste a la cita que te pedí? - No lo soporto y grito la
pregunta. - ¡Maldita sea, Liz!
Sé que no es sólo culpa de ella, la última vez que nos acostamos
no me previne y me corrí dentro de ella, también sabía los riesgos
que corría, pero no había pensado en la parte de que siendo el Capo
de la mafia y estando en guerra con la mafia alemana podría poner en
riesgo a Liz y a mi hijo, la única solución sería llevarlos a Italia, todo
sería más fácil, estando en mi territorio ambos estarían seguros y no
tendría que preocuparme como aquí en NY.
Cuando me doy cuenta de que Liz ya no estaba en la cocina,
voy tras ella, y esta vez la puerta de su habitación está cerrada con
llave, eso significa que está enfadada conmigo, además, debería haber
pensado antes de hablar, debe estar pensando que soy un ogro y que
no asumo mi responsabilidad como padre, es algo en lo que está muy
equivocada, ahora necesito mantener a ambos alejados de Patrick y
Kevlin.
- Liz. - Llamo a la puerta y empiezo a llamarla. -Abre Liz.
por favor.
-Vete.
- Sabes que no lo haré. - Después de mucho insistir, decido
ir a mi habitación.
Envío un mensaje a Guilherme y le pido que cite al ginecólogo
para Liz. el lunes, a primera hora.Aprovecho y le pido que me traiga
ropa limpia, sí, además de ser abogado también me hizo pequeños
favores.
Me duermo mientras pienso en cómo será nuestro hijo, o hija,
como yo o como Liz.
Y mi padre, ¿estará contento con la noticia? Por supuesto que
sí, tendrá un heredero o heredera. ¿Es demasiado pronto para
empezar a elegir nombres?
¿Seré un buen padre? Bueno, mi madre podría estar aquí para
conocerla, estoy seguro de que amaría a Liz. Pero tengo que decirile
que soy un m***>l<>l<o de la mafia, y que ella tambiéni arriesga su vida
siendo mi esposa, espero que abandone esta estúpida idea del
divorcio y acepte vivir conmigo en Italia, además, yo puedo
Capítulo 53 3/5
encargarme de la comisaría aquí y aún puedo encargarme de sus
empresas.
:tcl<*

Me despierto con la claridad que entra por la ventana y mi

teléfono móvil sonando, un mensaje de Guilherme.
***Mensaje recibido**
- Programado a las 09:00 am Andres Myh.
*** Mensaje apagado***
Perfecto, ahora sólo tengo que decírselo.
Me levanté de la cama y fui al baño para agarrar un cepillo de
dientes que estaba empaquetado, hago mi higiene y me pongo la ropa
de la noche anterior, hasta que llegara Guilherme con mi ropa limpia.
Salgo de mi habitación y me doy cuenta de que Liz ya se ha
levantado, ya que no estaba en su habitación.
Nada más llegar a la cocina la veo terminando de freír unas
galletas, el olor era bueno, pero el del café era maravilloso.
***Comienzan los recuerdos de Henry***
- ¡Buenos días! - Se lleva un pequeño susto.
- ¡Buenos días! -Y sonríe, como si la noche anterior no
existiera. - El pastel está casi listo. - Sigue hablando como si nada
hubiera pasado realmente.-Acab:a de salir el café y hay bizcochos
recién horneados.
Habla y pone todo en la isla, me acerco a ella y le agarro la
barbilla. su olor es bueno, es suave.
- ¿Me perdonas?
- ¿De qué? -Y una vez más, Liz siendo Liz.
- Por la reacción que tuve ayer, no estoy preparado para ser
padre, y tú tampoco.
- Henry...
- Pero estoy seguro de que el amor que sentimos por él es
incondicional. - Le pongo la mano en el vientre y entonces se pone
a llorar. - Respiro profundamente y digo. -Y te lo diré.
- ¿Sobre qué? - Pregunta Liz.
- ¿Listo para saber más sobre mH - Hablo sin dejar de
mirarla.
- Es lo que más quiero.
Capítulo 53 4/5
- Soy de la mafia. - Me mira fijamente. -Y no para que te
hayas casado conmigo, Eric, trabajó con tu padre. - Hago una pausa.
-Y era un buen amigo mío, nos criamos y formamos juntos, su
padre era mi tutor, y por una broma de niños empezó a llamarme tío,
así que se convirtió en eso, la gente incluso creía que yo era su tío. -
Respiro profundamente. - Siempre le gustó estar en la mafia,
siempre le gustaron los retos, y siempre pensó que estar en medio
del peligro lo mantenía vivo, con el tiempo llegó a Nueva York y
conoció a tus padres.
- Pero no lo recuerdo.-Y realmente no lo sabía, nunca había
oído hablar de él.
- Empezó a trabajar con ellos, en una de las empresas que
tiene, y después de que tus padres murieran, él murió poco después,
y yo vine aquí en cuanto me enteré de la muerte, me quedé
descolocado. - Una lágrima comienza a formarse en el rabillo del
ojo. -Y recibí el sobre de sus padres, que en realidad se suponía que
era para Eric, y debió saber que pronto moriría, porque me dejó
como tu tutor...
- Mi tutor, ¿cómo es eso?
- Me casaría contigo en su Iugar, sólo me casé contigo por él,
sólo para averiguar quién lo mató, pero han pasado tres años y aún
no he averiguado nada c:onc:reto, y •estoy seguro de que la muerte de
tus padres no fue un accidente sino a propósito.
*"""'Terminan los recuerdos de Henry**""
Le dije lo que necesitaba saber por ahora, no le dije nada sobre
Patrick y Kevlin, espero que ambos desaparezcan, como era de
esperar no tenía ni idea de quién quería matar a sus padres y menos
a Erk, ya que no lo conocía.
Sólo entonces entendió que sólo quería mantenerla a salvo,
quedó abatida cuando mencioné que la muerte de sus padres fue
intencional..

El esposo de mi jefa
Ricarlys Morao

Sl'OSO T::,lí;) oc t 1n., if\\ 1nn rio 10 ;iñnc r,1,n lnor,

Capítulo 54 1/8

Capítulo 54

:lcl<* Recuerdo de Henry ***

- Sí Liz, no quiero... No puedo perderte. - Ya no podía vivir sin
ella.
- ¿Y nuestro bebé? En realidad, ni siquiera sé si vamos a tener
un bebé todavía. - Estaba más sensible que de costumbre.
- Tengo un amigo y me he tomado la libertad de concertar una
cita para ti. - No muestra ninguna expresión.
- ¿Cuándo?
- Mañana temprano.
- Pero tengo l a universidad.
- Yo lo arreglo. - Realmente podría manejar esto y otras cosas.
- Liz. si realmente estás esperando un bebé, deberás tener mucho
cuidado.
-Lo sé.
- No, no sabes el peligro que corres. - Se lleva la mano a la
frente y frunce el ceño al mismo tiempo. - Si estás realmente
embarazada, te vienes a Italia conmigo.
- ¿Qué?
- Eso que has oído, allí puedo cuidar de ti y de nuestro hijo o
hija.
- No puedo dejar todo aquí, tengo a mis amigos, la universidad,
Sandra y Petter.
- No te preocupes, puedes tomar clases particulares, Sandra y
Petter van juntos.
- No puedes decidir todo por los demás, ni siquiera sabes si
quieren ir.
- Liz, Sandra y Petter nacieron y vivieron la mayor parte de su
vida allí, sólo vinieron aquí cuando me mudé y les pedí que se
quedaran a cuidar mis casas. - Era realmente cierto, Sandra nunca fue
reacia a mudarse aquí, o a ir a vivir a cualquier lugar donde yo
estuviera.
- Y siendo tú un m*****o de la mafia, ¿cómo quedo yo en esa
historia?
- Sigues siendo mi esposa. - Y eso la pone en más peligro.
Capítulo 54 2/8
- ¿Podemos estar juntos? - Eso era lo único que quería oír.
- Si, si vienes conmigo a Italia, en caso contrario, no.
- Pero eres de la mafia. ¿No puedes conseguir protección en
todas partes?
- No es tan fácil Liz, cuando estoy en mi territorio, todo es más
fácíl.
- ¡Maldición Henry! Todavía tengo que hablar con Pedro ...
Me quedé frío cuando habló de Pedro, pero me sentí un poco
más reconfortado cuando me dijo que lo del noviazgo era una
fachada. Todo por un amor no correspondido.
Por supuesto que aún se quejó del beso que nos dimos Ana y
yo, sólo lo hice para provocarla, reconocí que fui muy infantil. Hablé a
medias sobre el motivo de la llegada de Hendrick.
Lo único que quería era dar la noticia a mi padre y a Hendri,ck,
que por fin tendría un hijo o una hija.
El resto del día fue muy tranquilo, preparé nuestro almuerzo,
hice strogonoff de camarones, y pasamos la tarde viendo algunas
películas románticas, yo no quería, pero no pude resistirme a sus
peticiones, estamos sentados en el sofá, con un poco de distancia
entre nosotros, no pasó nada, aparte de aquel beso.
Liz se cubre, no tiene sentido ya que hacía un calor Infernal.
"""* Fin del recuerdo ***
- Henry ... - Me despierto con Liz sacudiéndome, só lo
entonces me doy cuenta de que me quedé dormido.
- ¿Qué? - Me cuesta abrir los ojos.
- Henry, creo que hay alguien aquí
- ¿Qué? - ¡Maldita sea!
- He oído un ruido, pero no puedo decir en qué parte de la
casa.
- ¿Cerraste la puerta trasera?
- Yo... yo... no me acuerdo. - ¡Mierda!
- Quédate aquí.- Me levanto y voy de puntillas hacia la cocina.
En cuanto llego a la puerta hay un tipo con capucha, está
buscando algo en la cocina, pero me tropiezo con la silla, se vuelve
hacia mí y dispara.
- Henry. - Liz me grita, apenas oyó el disparo. El encapuchado
,.
Capítulo 54 3/8
ensancha los ojos en dirección al salón.
Apunta la pistola en mi dirección, y en la parte superior de la
isla hay un porta cuchillos, cojo un cuchillo y lo lanzo en su dirección,
le roza el brazo, esto hace que suelte la pistola, corro hacia él, y
empiezo a darle puñetazos en la cara, se defiende con los brazos.
- ¡Liz! - Le grito. - ¡Liz, corre! - Tenía que salir de allí. - Corre
Liz. - Era lo único que podía decir. - Ve a la habitación.
Otro tipo que entra en la cocina y viene en mi dirección,
esperando pasar sobre mí, pero no lo dejo, empezamos a pelear.
Uno de ellos intenta recoger la pistola del suelo, le doy una
patada, el otro agarra el cuchillo y se acerca a mí, uno de ellos agarra
una pistola de su cintura, cuando hace el primer di.sparo pongo a su
amigo delante de mí, utilizándolo como escudo humano, descarga el
cartucho de balas en su amigo, en cuanto se acaban las balas, corre a
agarrar la otra pistola que estaba en el suelo, En ese momento lanzo
a su amigo hacia él, impidiéndole el paso, en cuanto agarro la pistola,
le disparo en el brazo, no podía matarlo, necesitaba saber quién lo
había mandado aquí, agarra uno de los cuchillos y viene hacia mí,
empezamos a pelear, en ese momento intenta golpearme con el
cuchillo, sólo me deja un leve rasguño en el abdomen y me deja
alguna heridas más en la camisa.
Le doy un puñetazo en la cara y le disparo en la pierna, se
arrodilla en el suelo y empieza a gritar, corro hacia el salón y agarro
mi teléfono móvil, sigo hacia la cocina y me sitúo en la entrada de la
misma, el tipo sigue en el suelo, llamo a Hendrick.
:1c1ci1< Llamada entrante ~
Hendrick: ¡Hermanito! - Estaba feliz, seguramente seguía con
Sam.
Yo : ¡Quiero a mis hombres aquí y ahora! - Se queda sin
palabras durante unos segundos.
Hendrick: ¡Qué está pasando?
Yo: ¡No tengo tiempo para explicarlo!
Hendrick : ¡¡la casa de Liz?!
Yo : Menos de cinco minutos.
~ Llamada Finalizada ***
Hablo y apago el móvil, lo guardo en el bolsillo, el tipo al que le
dispare, se levanta con un poco de dificultad y agarra otro cuchillo
Capítulo 54 4/8
que estaba en la isla, y viene hacia mí.
- ¿Quién te envió? - Le pregunto, mientras acorta la distancia
entre nosotros.
-A che mi serve dirvi se voi due morirete presto? (¿De qué me
sirve decirles, si van a morir pronto?) - Habla con cierta dificultad,
pero puedo sentir el acento alemán en su discurso.
- ¡Parla e forse ti risparmiero la vita! (¡Habla. y tal vez te
perdone la vida!) - Comienza a reírse, y cuando está bien cerca,
habla.
- ¡Mai! (¡Nunca!) -Y se corta la garganta.
¡Mierda!
Oigo un ruido en la puerta principal, agarro la pistola y sigo de
puntillas hasta la puerta, y también oigo el ruido del helicóptero.
Eran unos cinco encapuchados que entraban y se dirigían hacia
la escalera, apunto bien a sus cabezas y los voy derribando uno a uno,
pero hay uno de ellos que esquiva el disparo, y para mi tristeza, las
balas terminaron, corro a la cocina y cojo el último cuchillo que
estaba allí, y cuando me doy la vuelta el tipo está justo detrás de mí,
simplemente me doy la vuelta y le clavo el cuchillo en el pecho, sin
darle al menos la oportunidad de defenderse, le quito el cuchillo del
pecho y vuelvo a la habitación y oigo un ruido de cristales
rompiéndose, y venfa de la habitación de liz.
Corro a la habitación de Uz y en ese momento, recibo un
mensaje de Hendrick.
:1c1c:1c Mensaje ""'°"
"Hay un camión con unos veinte tipos entrando por la puerta
del frente, acabamos de derribar un avión de combate, ¡tendrás que
salir de ahí por el balcón! "
ljqt* Fin del Mensaje ***
La puerta está cerrada con llave, golpeo la puerta y nada que Liz
abre, y todavía hay alguien disparando en dirección a la habitación.
con una sola patada consigo abrirla, tengo que reforzar las puertas de
la próxima casa. Nada más entrar veo a liz detrás de la cama
asustada, me acerco a ella y me doy cuenta de que se congela al
verme con el cuchillo lleno de sangre en las manos, voy a su
encuentro y la ayudo a levantarse
- ¿Estás bien? - Ella sólo asiente con la cabeza.
Capítulo 54 5/8
Y me pongo a pensar cómo vamos a salir de aquí, intento
descartar la opción del balcón, y al final no tenía otra opción.
- Tendremos que saltar.
- ¿Qué? ¡Te has vuelto loco? - Liz me mira con cara de espanto,
sé que era peligroso, más aún por nuestro bebé.
- Es nuestra única opción, o saltamos o morimos en medio del
tiroteo. - Respira profundamente. - Saltemos en d:irección del
helicóptero.
La cojo de la mano, el helicóptero se acerca a la ventana, damos
unos pasos atrás y corremos hacia la ventana. Se proteje la cara con
un brazo, tratando de protegerla de los pedazos que aún quedaban de
la ventana.
Saltamos y nos colgamos de los esquís del helicóptero, por
suerte la puerta estaba abierta y había dos tiradores dentro, uno le
tiende la mano a Liz y el otro sigue disparando. Ella se sienta en el
banco y yo me siento a su lado. Los disparos no cesan y la abrazo en
un intento de protegerla, ella levanta la cabeza y me mira, puedo
sentir el pavor, el miedo, la tristeza y la desesperaciión en sus ojos.
- ¿Estás bien? - Se detiene y me mira, baja los ojos hacia su
vientre y automáticamente sigo sus ojos, y hay mucha sangre, me
desespero, pero necesito controlarme.
- Henry ... - Le falla la voz, empieza a dar señales de que se va a
desmayar.
- Liz, quédate conmigo. - No podía perderlos a los dos. - No
cierres los ojos. - Empiezo a llamarla y a sacudirla. no podía cerrar
los ojos, empiezo a darle ligeras bofetadas en la cara. pero nada
funciona.
- Henry ... el ... be ... - Ella pone su mano en su vientre, sus ojos
se cierran.
- Mi amor, estarás bien, por favor. - Sigo sacudiéndola.
- ¡Andrés Myh, ahora! - Le grito al piloto, que asiente con la
cabeza, mientras nos alejamos de la casa, puedo ver varios coches en
el patio trasero y en la parte delantera de la casa.
¡Mierda!
Lo único que tenía que hacer era mantenerla a salvo, ¡y fallé!
Salí de mi ensoñación cuando aterrizamos en la finca de Andrés,
era mi médico particular, no importaba donde estuviera, llamaba y
Capítulo 54 6/8
venía.Ya estaba con la camilla y algunas enfermeras juntas.
Salgo del helicóptero con Liz en brazos, camino hacia la camilla
y la coloco con cuidado.
- Quello che e successo ? (¡Qué ha pasado?) - pregunta
Andrés.
- ¡La mafia tedesca! (¡La mafia alemana!) - Suspiro
profundamente. - ¡Voglio solo che tu la salvil (¡Sólo quiero que la
salves!).
Andrés la lleva a su mini hospital en la casa de campo. En
cuanto entré en la sala, Hendrick estaba allí con Samantha.
- Cosa ci fa qui? (¿Qué hace ella aquí? ) - ¡Tenía que estar loco,
involucrando a una más en nuestra vida de mierda! - Pregunto y
empiezo a caminar hacia él, estaba ,c erca de la puerta del pasillo.
- So che il mio atteggiamento puo essere egoísta, ma leí voleva
venire insieme. (Sé que mi actitud puede ser egoísta, pero ella quería
acompañarme ...) - Le lanzo una mirada mortal, y él se encoge, como
buen hermano, sabe que no estaba en uno de mis mejores
momentos.
- Hai visto cosa e successo a Liz? Stai vedendo?Vuoi che
succeda lo stesso con questo ? Hai della merda in testa Hendrickr! -
(¡Has visto lo que le pasó a Liz? O más bien, ¿lo ves?¿Quieres que le
ocurra lo mismo que estol ¡¿Tienes mierda en mente, Hendrick?) -
Empecé a gritarle, fui hacia él y lo agarré por el cuello de la camisa, sí,
ya e.s taba fuera de control, el miedo a perder a Liz era demasiado
grande, me costó tanto tiempo encontrar a alguien a quien realmente
amo, y ahora está tan cerca y a la vez tan lejos, todo por mi culpa. -
¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda! .... - dije varias veces, mientras daba un
puñetazo a la pared en la que estaba apoyado.
Samantha se levanta de un salto y se sobresalta por mi reacción,
sólo me conocía de la universidad y no sabía cómo era realmente.
- La portero a casa (Voy a llevarla a casa.) - El me analiza
mientras habla.
- No hará ninguna diferencia. - Suspiro y me alejo de él. - Ya
deben saber de ella. y cómo no pudieron matar a Liz. - Doy una
sonrisa triste -, lo intentarán a alguien de nuestra família.
- ¡Qué quieres decir con matar a Liz? ¡Oh, Dios mío! ¡Dónde
está ella? - pregunta Sam, asustada.
- Ell;i v mi hiio están entre l::i vid::i v l;:i muerte en ese momento.
Capítulo 54 6/8
- Ella y mi hijo están entre la vida y la muerte en ese momento.
- Las lágrimas ya caían por mis ojos.
- Lo siento. - Ahora Hendrick viene y me abraza. - Liz es una
mujer fuerte y su hijo también.
- ,Señor McNight? - La enfermera está en la puerta
mirándome. - La cirugía ha comenzado, ella está estable, el bebé sigue
vivo. - Habla y se va.
- ¿Liz está embarazada y tú eres el padre? - Sam se quedó
perpleja con la noticia.
- ¡Sí! Soy su esposo.
- ¿Desde cuándo?
- Tres años. - Abre la boca para decir algo más. - Es una larga
historia, Hendrick te la contará más tarde. - Ahora necesito que
averigües quién ordenó este ataque. - Digo, mirando a Hendrick.
- Nuestra gente ya está investigando, pero todo apunta a la
familia de Kevlin.
- ¡Maldita sea!
- Necesito volver a casa. - Samantha nos interrumpe.
- No puedes, Sam, si vuelves, toda tu familia estará en peligro.
- ¿Qué quieres decir?
- Te dije que sería mejor que te quedaras en casa. - Hendrick la
regaña. - Te dije que si venías conmigo, sería para siempre.
- Pensé que estabas bromeando. - Sonríe con ironía.
- Soy de la mafia italiana, y sólo puedo garantizar tu seguridad
aquí. ¡Estás diciendo que tenemos que dejar todo aquí?
No creo que Hendrick se haya enamorado en menos de
veinticuatro horas.
- Sí. - Mira a Hendrick y sale por la puerta.
- Sam, amor, espérame. - Sale corriendo tras ella.
Tomo mi teléfono móvil y llamo a Gomez, era la mano derecha
de mi padre, era más que eficiente.
,tqc* Llamada Saliente ***
Gomez: ¡Señor!
Yo: ¡Cómo está mi padre?
Gomez : Está en el jardín tomando el sol, está casi al cien por
cien.
Capítulo 54 8/8
Gomez: ¡Señor!
Yo: ¿Cómo está mi padrer
Gomez : Está en el jardín tomando el sol, está casi al cien por
cien.
Yo :Al menos una buena noticia.
Gomez: ¡Qué ha pasado, señor?
Yo : Cuando llegue allí te lo diré, pero necesito que la UCI de
nuestro hospital esté preparada, y prepara el jet con todo el equipo,
llevaré a alguien que acaba de ser operado.
Gomez : Considere todo hecho, espero su llegada.
:tcl<* Fin de la Llamada ***

Capítulo SS

Hace más de dos horas que Liz está en el

quirófano. la cabeza me da vueltas, mi psicología está
'"ot:i ln1ente 1od1ci;i

iGAAGIAS!
Apoya al escritor por traerte historias brillantes.
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Capítulo 67

- Pequeña... - Oigo la voz de Henry llamándome de fondo.

- Hola ...
-Ven a darte una ducha. - Me acarició el rostro.
- La bañera ya está llena. -Abro los ojos y tengo una de las
mejores visiones de mi vida, Henry está desnudo, sonríe al ver mi
mirada.
- ¿Cuánto tiempo dormí? - pregunto, mientras me siento en
la cama.
- Sólo por una hora. - Extiende sus manos hacia mí, acepto y
me ayuda a levantarme de la cama.
-Ven a relajarte.
Nos dirigimos hacia el baño, meto la mano en el agua y estaba
tibia, Henry entra y se sienta en la bañera y yo me siento de espaldas
a él, empiezo a pasarme el jabón por el cuerpo y Henry me ayuda a
lavarme la espalda.
Me acuesto en su pecho y él me abraza.
- ¿Estás bieni? - pregunta por mi silencio.
- Estaba pensando, como mi vida ha dado un giro de ciento
ochenta grados.
- ¿Eso es bueno? - Pregunta mientras me echa agua en los
brazos.
- Mientras estemos bien, sí. ·- sonrío para mis adentros. -
Esto es maravilloso, hasta parece un sueño.
- Pero esta vez no es un bebé. - Besa mi hombro. - Es la
realidad, nuestra realidad, con altibajos. - Hace una pausa. - Pero
estoy seguro de que nada nos hará caer.
Escuchar esas palabras saliendo de su boca me tranquilízó,
demostraba que estaba cambiando. o al menos tratando de hacerlo.
Nos quedamos ahí un rato, lo que me hizo sentir muy cómoda
con el cariño de Henry, me hizo muy feliz saber que no era solo sexo,
sino amor, como él siempre me decía, que me amaba.
Volvimos a la cama.
:lo!<*
Me despierto y Henry ya no está en la cama,. mi cuerpo todavía
Capítulo 67 2/4
estaba dolorido después de nuestra noche de amor, me llevó al cielo.
Me levanto y hago mi aseo personal, y luego aparece Sandra en
la habitación.
- Buenos días, mi niña.
- Buenos días, San. - Ella se acerca y me da un beso en la
mejilla, estoy frente al espejo mirando el look que elegí.
- ¿Será que está bien? - Le pregunto a Sandra.
- Ese monito te quedará hermoso. - Estaba sosteniendo un
mono largo de color rosa bebé. - El niño ya se fue a trabajar y me
pidió que te acompañe.
- ¿Me vas a acompañar? - Frunzo el ceño, tratando de
recordar. -Ah, ten.go que elegir un vestido, hoy hay un evento.
- El café ya está en la mesa. - Dice mientras abre la cortina
de mi habitación.-Y Petter es todo nuestro hoy.- Dice riendo..
- ¿Henry se fue solo? - pregunto mientras me cambio.
- El señor Rodolfo se fue con él.
- ¿Será que pasó algo?
- No lo creo, como vas a viajar y el niño Hendrick aún no ha
vuelto, tendrá que ocuparse de los negocios por un tiempo.
:tcl<*
Llevo unas dos horas paseando con Sandra y Petter y todavía
no he podido encontrar un vestido que me llame la atención. Quiero
algo deslumbrante, algo que llame la atención de Henry.
:fcl<ll<

Después de unas horas encuentro el vestido ideal.

- ¡Va a ser este! - Hablo cuando me miro al espejo, el
vestido me quedó maravilloso, es abierto por detrás a la altura de mi
cintura y por delante tiene un escote en V que llega hasta mi ombligo,
su color es verde esmeralda y tiene una hendidura que me llega hasta
el muslo. - ¿Qué les parece San y Piti? - pregunto cuando salgo del
camerino y los dos me miran y hacen una "O" con la boca.
- Estás hermosa, niña Liz. - dice Sandra cuando doy la vuelta.
-Al niño Henry le va a dar un infarto cuando te vea con ese
traje.
- Deja de decir mierda. Petter. - dice Sandra y le da una
palmada en el brazo. -Te ves deslumbrante, él estará feliz de verte
Capítulo 67 3/4
tan hermosa.
- Gracias, San. -Vuelvo al vestidor y me cambio de ropa. -
¿Vamos? - les pregunto a los dos.
- ¿Qué te parece llevar una corbata para el niño? ¡Del color
de t!U vestido! - Pregunta Sandra.
- ¿No es de mal gusto? -Arqueo una de mis cejas cuando
pregunto.
- Claro que no, niña, es super lindo. - dice Sandra con una
sonrisa en el rostro.
- Entonces está bien. - Hablo y voy detrás de la vendedora, y
le pregunto si tiene una corbata del mismo color que mi vestido, y
por suerte para mí la tenía. - ¡Vamos a tomar un café ! - Estoy
hablando con Sandra y Petter. - ¿Esa cafetería es buena?
- Sí, Henry siempre viene aquí.- Habla Pedro.
- ¿Está cerca su empresa? - Pregunto.
- Sí, queda allí. - Señala Petter con el dedo hacia el lugar
donde trabajaba Henry.
- ¿Podemos ir para allá? Quiero sorprenderlo. - Sandra y
Petter se miran.
-Sí podemos. - Habla Pedro.
- Primero voy a agarrar un poco de café para él. - Sé que
eran casi las tres de la tarde y el calor estaba matando, pero sé que a
Henry también le encanta el café como a mí, y no iba a negarse.
Entro a la cafetería y pido un capuchino para los ◄. como una
dona, Sandra y Petter se me unen.
Después de nuestro café, camino con ellos hacia el edificio en el
que trabajaba Henry, se veía muy pequeño por fuera.
-Te esperamos aquí. - Habla Pett.er y yo entro.
El salón era enorme, los detalles eran todos :rústicos, todo era
rojo y n***o, muy el estilo de Henry, al final estaba la recepción,
camino hacia allá.
- Hola, ¿cómo puedo ayudarte ? - Me pregunta una mujer
pelirroja, puedo sentir su acento arrastrando, debe tener alrededor
de 25 años, no menor que yo.
- Hola, por favor, Henry. - Me mira cuando escucha el
nombre.
- ;C-11~1 P<: t u nnmhrP 1 - 1 ltilí7:;i 11n t n nn riP vn7 :;irrncr:;intP
Capítulo 67 4/4
- ¿Cuál es tu nombre ? - Utiliza un tono de voz arrogante.
-Liz ... Liz M...
- No está ese nombre en la lista. - No me dejó terminar de
hablar.
- Puedes llamarlo y decir que su ESPOSA está aquí. - Hago
hincapié en la palabra esposa.
Me mira fijamente durante unos segundos y agarra el teléfono.

Capítulo 68

- ¡$ignore, su moglie está aquí! (Señor. su esposa está aquí!) -

Habla ella, ahora entiendo algunas cosas en Italiano, por las películas y
por vivir con Henry y el señor Rodolfo, pero pronto empezaré a dar
clases de italiano y de tiro, Henry aún no lo sabe. - Echiaro. (Está
claro.) - Habla y cuelga el teléfono, me mira fijamente. - ¡Por aquí,
señora McNigth! - Señala en dirección al ascensor que estaba justo
detrás de su mesa.
- Gracias. - Le doy una sonrisa, veo que está avergonzada y
me meto en el ascensor. Ella solo asintió con la cabeza.
Segundos después, la puerta del ascensor se abre y encuentro a
Henry en la puerta, esperándome.
- Mia ragazza. - Dice, me toma del brazo y me besa. - Qué
agradable sorpresa. - Salgo de su abrazo.
- Estaba de paso y decidí visitarte y traerte un capuchino. -
Levanto una de mis manos, mostrando el vaso.
- Lees mis pensamientos. - Sonrió. - ¿Ya elegiste tu vestido?
- Sí. - Me hace señas para que entre a su habitación, y qué
habitación. Era muy grande, era todo de vidrio ahumado, su mesa era
enorme de color n***o, detrás hay un armario y una librería llena de
libros, y sobre su mesa hay un Mcbook en blanco.
- ¿Y cómo es? - Por una fracción de segundo, me había
Capítulo 68 1/4
olvidado de que estaba allí.
- Sorpresa. - Hablo y sonrío. - ¿Esta es tu oficina? - Estoy
de pie en medio de su habitación.
- ¡Una de ellas! - Lo miro con cara de asombro. - Sólo
bromeo.
- ¡Nos vemos! -digo y empiezo a caminar hacia la puerta.
- ¿Te vas? - Me gusta su pregunta.
-Sí.
- Pensé que haríamos algo diferente.
- La próxima vez. - Me giro y camino hacia él, tratando de
ser lo más sexy posible. - Si tu recepcionista no me hubiera
anunciado. - Pongo mi mano en su pecho y lo voy empujando
lentamente, hasta que toca su mesa. - Incluso habría hecho lo que
yo quería. - Me puse de puntillas y mordí su labio inferior y al
mismo tiempo, puse una de mis manos en su polla. sobre su pantalón,
ya lo sentía duro. Henry tiene los ojos cerrados. -Adiós cariño. -
Hablo y me voy.
- ¡Liz! - Me grita y no miro atrás.- ¡Liz!Vuelve aquí y
termina lo que empezaste. - Sigo ignorándolo. - Me las pagarás. -
Simplemente salgo de su habitación.
***
Después de llegar de la oficina de Henry, me fui a la piscina a
refrescarme, ahora estoy en nuestra habitación solo con un bikini,
acababa de quitarme la toalla que me cubría, en ese momento entra
Henry.
Mi bikini no era combinado, la parte de arriba era media copa
en amarillo y la parte de abajo era casi un hilo de color blanco.
Henry se acerca y me mira.
- Estás maravillosa. - Dice eso y me levanta en sus brazos,
agarrando mi cabello para darme un beso, comienza a besar mi cuello,
y me tira sobre la cama. sólo jala la parte de abajo de mi bikini hacia
un lado y me pone un dedo dentro de mí. - ¡Ay, Dios mío, Liz! Su
voz salió en un susurro. - Estás lista para mí.
Escucho a Henry suspirar y cuando me doy cuenta, ya está
dentro de mí, haciéndome gemir y suspirar, sigue besando mi cuello y
no detiene sus mov·imientos de ida y vuelta, nunca me cansaré de
este hombre.
Capítulo 68 2/4

Hemos llegado a nuestro punto máximo, todavía estamos en la

cama tratando de recuperar el aliento.
-Vamos al baño. - Henry me tira del brazo mientras habla.
Y volvemos a hacer el amor, sale de la ducha antes que yo,
termino de lavarme y luego me voy.
Henry ya no estaba en la habitación, pero todavía puedo oler s
perfume en el aire.
Me seco el cabello y lo trenzo de lado, porque Henry me dejó
varias marcas en el cuello, aunque me apliqué base, aún quedaban
algunas marcas.
Aplico una sombra de ojos en crema con n*"°"o ahumado,
completo con un delineador de ojos de gato, preparo mi piel, termino
y aplico un labial rojo.
Me puse el vestido y noto que las bragas están marcadas,
decido ir sin bragas, ya no llevaba sostén, porque el vestido era co:n
relleno, y sabía que Henry se volvería loco cuando supiera que solo
llevaba el vestido, me puse unos zapatos negros de gamuza con tacón
de 15 cm.
Me miro en el espejo y estoy hermosa, agarro mi bolso n*,tc,tc,o y
bajo.
Apenas llego a lo alto de las escaleras veo a Henry parado
hablando con Sandra, Rodolfo y Petter, ellos me miran fijamente y
cuando Henry se da la vuelta hace una "O" con la boca y esboza una
sonrisa, esa hermosa sonrisa que amo y que me desarma toda.
Acompaña cada escalón que bajo.
- ¡Te ves maravillosa señora McNight! - Habla y besa mi
mano.
- ¡Usted tampoco está nada mal, señor McNight! - Hablo y
sonrio.
El chofer ya nos estaba esperando, Petter no nos iba a
acompañar esa noche, nos subimos al auto y manejamos en silencio,
Henry seguía usando su celular.
Segundos después llegamos a. la fiesta, el lugar era grande, me di
cuenta que todos los que estaban allí eran de la alta sociedad, lo que
me incomodó un poco, no por el dinero, sino por la forma en que
algunas personas me miraban.
Henry está hablando con un hombre calvo de mediana edad ,
Capítulo 68 3/4
nos presenta a su esposa, que por cíerto es mucho más joven que yo,
ella pone cara de asco cuando él la llama amor, lleva puesto un
vestido rojo corto con escote en V. el vestido acentuaba cada curva
de su cuerpo.
- ¿Tomamos un trago? -La esposa de él me invita.
- ¿Por qué no ? - Habla Henry, cuando se da cuenta de que
estaba indecisa.
- ¡Está bien! - Suelto su brazo y sigo a la chica.
- ¿Cuál es tu nombre? - Me pregunta ella.
- Liz, ¿y tú?
-Marcela.
- ¿Cuánto tiempo llevas casada con él? - Pregunto por
curiosidad.
- Sí, pero sólo por poco tíempo. - Llegamos al bar que tienen
y ella pidió dos tragos.
- ¿Cómo así ? - Me pasa un trago.
- Pronto morirá, y seré dueña de todo lo que tiene. - Me
ahogo con la bebida cuando dice eso. Ella comienza a reír. - Puedes
tranquílizarte, no lo voy a matar. tiene cáncer.
A pesar de todo, Marcela era una buena mujer, me dijo que se
casó con él porque sus padres necesitaban dinero y que un día se iría
a vivir con Roger, un amor de la infancia.
Henry me presenta a todos los que estaban allí.
Al rato veo llegar a una pareja, y para mi sorpresa, era Patrick
con la rubia de mi antiguo departamento.
- ¿Henry? - Se congela cuando ve a los dos cruzar la puerta.
- ¡¡¡Henry!!!

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Capítulo 69 3/3

Capítulo 69

Patríck y la chica Kevlin se nos acercan, al menos creo que es

ella.
- Espera. - Hablo mientras la distancia entre nosotros se
hace cada vez más pequeña. - Esa no es Kevlin. - Digo y Henry se
queda paralizado, esta otra mujer tiene rasgos más finos que Kevlin.
- ¡Oh, mierda! - Era su hermana muerta.
- liz. Henry. - Habla Patrick cuando la distancia entre
nosotros es la menor posible. - Quiero presentarles a mi invitada
de honor, Ketlin.
- Encantada de conocerte. - Ella dice eso y me tiende la mano,
le correspondo, pero no digo nada. - Hola, Henry. - Habla ella y le
tiende la mano. Henry tampoco dice nada y apenas le devuelve el
gesto. -Te extrañé.
- ¿Cómo es que eres tú? - Ella habla como si yo no estuviera
allí.
- ¡Él sabe de lo que estoy hablando! - Ella me responde, pero
sigue sosteniendo su mano y mirándolo fijamente.
-Vamos, caríño. - Habla Patrick, ella suelta la mano de Henry
y lo sigue sin decir nada.
- ¿Henry? - Me mira fijamente, su mirada está perdida, sólo
da la vuelta y se dirige hacia la salida, camino justo detrás de él.
Se va del evento y ya pregunta por el auto, apenas aparece el
valet despide al chofer y se sube, me paro al lado del auto, aún no se
si debo subir o no, arranca el auto y empieza a acelerar. ya no puedo
contener las lágrimas, y Henry vuelve a acelerar y sale de allí,
dejándome sola.
Paso las manos por mi rostro, secando mis lágrimas, salgo de allí
y empiezo a caminar sin rumbo fijo. Después de caminar un rato, ya
me dolían los pies, me quito los tacones y más adelante, veo un bar.
- ¡¿Por qué no?! - me digo, antes de entrar miro mi bolso y
me doy cuenta que tengo dinero para unos tragos. miro la pantalla de
mi celYlar y no había ninguna llamada de Henry.
Entro al bar y por suerte para mí, estaba vacío, me paro en la
entrada y la decoración es toda rústica, en las esquínas hay algunas
mesas con sofás de esquina, sólo entonces me doy cuenta que el
Capítulo 69 2/3
lugar estaba casi vacío, solo había un hombre sentado en una de las
mesas de la esquina,, y para mi alegría, era Martín.
- ¡Liz! - Habla en cuanto me ve y se acere.a. - ¡Qué
sucedió? - Parece preocupado.
- Martín! - Mi voz sale en un hilo y empiezo a llorar.
- Oh, Liz. vamos. - Me abraza y me guía para sentarme a su
lado en la mesa.
Nos sentamos un rato, Martín no soltaba su abrazo, y poco a
poco mi llanto se fue calmando.
- Un tequila, por favor. - Martín le pide al mesero que
enseguida lo trae.-Toma. te sentirás mejor. - Martín me suelta de
su abrazo.
Tomo el vaso de su mano y lo tomo de un trago, sin limón y sin
sal, solo el líquido caliente corriendo por mi garganta.
- ¡Gracias! -Vuelvo a poner el vaso en la mesa y Martin toma
un sorbo.
- ¿Ahora quieres decirme qué pasó? - Me mira fijamente. -
¿Y entonces? ¡Fue Henry? - Me mira fijamente.
-Así es. - Seguro estoy llorando. - Camarero, uno más por
favor. - Hablo y levanto el vaso en cuanto me mira.
- ¿¡Supongo que estabas en una fiesta!? - Martin sigue
disfrutando de su vaso de cerveza, pero no me quita los ojos de
encima.
- Sí. - Me detengo por unos segundos y luego, recuerdo
cómo estaba vestida.
- ¿Y se pelearon?
- Sí, en realidad no.
- Espera, estoy un poco confundido. - Él ríe. - ¿Se pelearon
o no?
- No. - Me pregunto si debo o no contarte lo que pasó. -
Bueno... Estábamos en una fiesta de negocios y apareció una antigua
novia suya ...
- ¿Y? - Martín me anima a seguir.
- Se suponía que estaba muerta, al menos eso pensaba Henry.
- ¿Reencarnó de entre los muertos? - Martin se ríe y yo
también me río.
Capítulo 69 3/3
- Cuando nos saludó, Henry se quedó paralizado, no se movió,
solo extendió su mano para aceptar su saludo. - La escena volvió a
mi mente. - Después de eso se fue de ahí, y no me dijo nada más, y
aquí estoy. - Me encojo de hombros, como si eso ya no importara.
- ¿Viniste caminando a esta hora de la noche aquí?
- Sí. - Estaba tan desorientada, que ni siquiiera me había dad
cuenta de cuánto había caminado. - Quiero otra dosis.
Pasé el resto de la noche en el bar con Martín, él había ido a
una cita, pero lo plantaron y por suerte para mí, decidió quedarse allí
bebiendo.
Me habló de la propuesta de vivir en Grecia, aún tenía algunas
dudas, lo animé a ir, a arriesgarse, eso sería bueno para su vida.
- Creo que es hora de que nos vayamos. - Habla Martín. -
¿Quieres que te deje en casa?
- No lo sé. - ¿A dónde iría?, el apartamento que tenía, Henry
lo había vendido y no pensaba en comprarme otro por aquí.
- ¿Están viviendo juntos?-· pregunta Martín.
- Sí, pero no quiero ir allí, no sé si sería buena idea.
- Puedes ir a mi casa. - Me sugiere.
Saco mi celular y me doy cuenta de que ya no tiene batería.
- Hay una habitación de inví:tados allí.
- Entonces vamos.
Seguimos el camino en silencio, recuerdo que íbamos a viajar al
día siguiente por la tarde, pero no creo que este viaje se dé.
Mil cosas pasan por mi cabeza, ¿por qué Henry estaba tan
molesto con ella? ¿Todavía la amaba?
Podría haber sido sincero desde el principio, podría haberme
dicho que a pesar de que ella estaba muerta, todavía la amaba, no me
entristecería escuchar eso, pero no sé qué pensar ·y mucho menos
qué hacer.

SALDO DE MONEDAS O Monedas + 13 Bonus

19 monedas para leer este episodio
Capítulo 79 1/4
Capítulo 79

- ¿Fue Henry? - Pregunta y se sienta en la cama.

- Si y no - Martín frunce el ceño. - Fue porque él es un idiota y
no porque yo soy una idiota.
- ¡Ah ya! - Martín habla y se ríe. -Acuéstate. - Golpea con su
mano la cama para que me acueste a su lado y sin dudarlo me
acuesto, estamos abrazados, y para mi sorpresa, Bella comienza a
saltar.
- Creo que ahora le gusto. - Dice Martín y sonríe.
-A ella siempre le gustaste. - Estuvimos en silencio hasta que
nos quedamos dormidos.
Me despierto con las manos de Martín en mi cintura, me doy
cuenta de que está lloviendo y aún es de madrugada.
Me levanto con cuidado para no despertarlo y bajé a la cocina,
porque tenía hambre. Nada más llegar a la cocina estaba Hendrick. de
espaldas a la puerta y mirando por la ventana.
- ¿Sin sueño? - Le pregunto.
-Ah. . . Hola, Liz. - Habla mientras se da la vuelta. - No
exactamente, solo vine a buscar un vaso de agua. - Levanta una de
sus manos mostrando el vaso que sostenía. - ¿Y tú?
- Tenemos hambre. - Hablo y pongo mi mano en mi vientre y
me siento a la mesa.
- No puedo negar que Bella es de la familía. - Habla Hendrick y
se ríe. - Sam siempre comía algo a esa hora. - Habla y mira el reloj en
su muñeca. - Morgana hizo marquesa de chocolate, ¿quieres? - me
pregunta Hendrick mientras camina hacia la nevera.
- Se ve deliciosa. - Hablo y saca el bol de la nevera.
- ¿Nunca lo has probado?
- No. - Se ríe . - Entonces te va a encantar, Morgana tiene
manos mágicas. - Habla Hendrick y corta un trozo del pastel para mí
y otiro para él.
- Qué delicia. - Hablo tan pronto como me tragué el primer
pedazo. - Este choc.olate semiamargo con estas galletas son una
maravilla.
- Te lo dije. - Hendrick se sienta en el lado opuesto de la mesa
y también disfruta de su pedazo.
Capítulo 79 2/4
- ¿Cuándo regresas a NY?
-Aún no lo sé, Martín tiene que arreglar algunas cosas aquí. -
Hablo y vuelco mi atención a mi plato.
- ¿Él y tú?
- ¿Él y yo qué? - Pregunto un poco recelosa.
- ¿Estan juntos? - Hendrick sonríe de refilon, algo avergonzado.
- No exactamente, tenemos una amistad col,orida. - Siento que
se me calientan las mejillas cuando digo eso, más aún a Hendrick.
- ¿Entonces te gusta? - Termino de comer y lo miro.
- Fue él quien estuvo a mi lado en los momentos turbulentos
de mi vida.
- ¿La turbulencia llamada Henry?
- Sí, eso mismo. - Me río de la forma en que habla de su
hermano. - Martin no es bipolar y que yo sepa no me oculta cosas y
al menos no es el Capo de alguna mafia por ahí.
- ¿Sabes que esa no es nuestra elección? - pregunta y yo solo
asentí, realmente sabía de eso.
-Todavía puedo renunciar a todo esto, pero Henry no, como es
el hijo mayor, es su obligación continuar con el negocio familiar. -
Hendrick nos sirve otro trozo de tarta. - Y eso aplica a Bella. - Todo
mi cuerpo se estremeció, de solo pensar en que mi pequeña niña
tendría un destino como el de su padre.
-A menos que ella renuncie, entonces Dante se encarga de
todo.
- Pensé que las mujeres no podían tener un puesto tan
importante en la mafia. - dije
-Antes no, pero hoy los tiempos han cambiado, Liz y con mi
padre, eso no es problema, el nuevo jefe sólo tiene que pasar por el
entrenamiento adecuado.
- ¿Podemos cambiar de tema? Todo esto me da asco.
- Por supuesto. - Habla Hendrick y se ríe.
- ¿Puedo hacerte una pregunta? - Hendrick me mira y asiente
con la cabeza.
- ¿Me prometes que no hablarás de eso con nadie? Promételo.
- Habla y levanta la mano en señal de promesa.
- ¿Dónde está la esposa de tu hermano? ¿Qué pasó realmente
Capítulo 79 2/4
- Habla y levanta la mano en señal de promesa.
- ¡Dónde está la esposa de tu hermano? ¿Qué pasó realmente
el día que la vio? - pregunto en voz baja.
- Ella ya no vive aquí, Sam no lo sabe, cree que está de viaje. -
Hace una pausa, pone los codos sobre la mesa y apoya la cara entre
las manos. - La verdad, hasta la familia de ella cree eso.
- ¿Y por qué?
- Mira, Henry no puede saber que te estoy contando esto, s1no
él me mata, y yo todavía tengo un hijo que criar. - Nos reímos juntos.
- Ketlin no murió el día que se iba a casar con Henry, todo eso fue
un montaje para que ella se fuera con Eric.
- ¡Hablas del Eric que tenía que casarse conmigo? - pregunto
asustada.
- El mismo. - Hendrick hace una pausa y continúa. - Eric
siempre fue la mano derecha de Henry, y Henry siempre confió
mucho en él, Patrick siempre intentaba contarle algo sobre Eric, pero
Henry siempre pensaba que era mentira, o incluso pura envidia. Y
ahora que Ketlin ha resucitado, le dijo algunas cosas a Henry, pero él
no me contó todo.
- ¡Qué te dijo? - Ya tenía curiosidad.
- Que Eríc no está muerto y que se unirá al padre de Ketlin
para una emboscada, aún no sabemos cuándo sucederá eso y si
sucederá, todavía estamos recelosos con Ketlin, y no sé si podemos
confiar en ella o incluso en Kevlin.
- ¡Y por qué los traicionaría Eric?
- Esa es la pregunta que nos hacemos todos los días. -
Hendrick se acomoda en su silla. - Siempre fue tratado como un
hermano, alguien de la familia. - Habla con una voz. llena de
decepción. - No sé sí fue por celos, por Ketlin o incluso por miedo a
que Henry se enterara de su romance.
- ¿Pero ella no tenía un romance con Patrick?, Henry una vez
me dijo que los dos estaban teniendo sexo.
- Todavía no lo sé, esa parte no me la ha querido contar Henry,
está muy decepcionado con Eric.
-¿Y tú? - pregunto.
- Mira Liz. yo no compartí mucho con él, pero también siento
un poco de decepcion, por Henry, solo por él.
Capítulo 79 4/4
- Mira Liz, yo no compartí mucho con él, pero también siento
un poco de decepcion, por Henry, solo por él.
- Ya veo. - Me levanto, tomo mi plato, el de Hendrick y lo
pongo en el fregadero.
- Pero pronto todo esto terminará, Liz. - Se levanta y agarra
una botella de leche de la nevera. - Y pronto tú y Henry podrán estar
juntos. - Toma un vaso de uno de los armarios y llena su vaso.
- No sé si todavía lo esperaré. - Digo.
- Él hizo lo que hizo, solo para mantenerte a salvo.
- Incluso tú, Hendrick, con esa pequeña historia. - Forcé una
risa.
- Kevlin amenazó con matarte si no se casaba con su hermana.
- Siento un escalofrío recorriendo mi espalda, - Mi hermano puede
ser un hijo de puta jodido, pero de lo único que estoy seguro es de
que te ama.
- Pero pudo haberme dicho 1:a verdad desde el principio, tardó
demasiado en hablarme de Patrick. - Ya se me estaban formando
lágrimas en los ojos.
- Henry siendo Henry, nunca. quiere involucrarnos en sus cosas,
especialmente cuando uno de nosotros está en pelligro. - dice
Hendrick.
Ahora me confundí más, esta historia de Ketlin es un poco rara,
primero le gustaba Patrick y ahora está con Éric, ¡¿qué diablos estaba
pasando?!

Capítulo 80

Otro día en la mansión McNight, estoy de pie

Capítulo 80 1/4
Capítulo 80

Otro día en la mansión McNight, estoy de pie frente al espejo

con una falda larga rosa de punto y un crop top blanco,
afortunadamente, Sandra tiene buen gusto.
- Martin! - Le hablo.
- ¡Qué! - Grita desde el baño.
-Vamos, quiero volver al hotel.
- Sólo un momento.
Llevaba un rato en el baño.
Decido bajar por un vaso de leche, tengo hambre y no tengo
tiempo para esperar a Martin.
- Buenos días, niña. - Dice el señor Rodolfo apenas entro a la
cocina, estaba tomando café.
- ¡Buen día! - Hablo y me acerco a él para abrazarlo, estaba
sentado en la mesa.
- Que hermosas estan ustedes dos. - Habla y sonríe.
- Gracias.
- ¡Vas a desayunar?
- Sí, comeré en el camino. - Le digo.
- ¿Y cómo está mi nieta?
- Muy bien y con un poco de hambre. - digo y paso la mano
por mi barriga.
- Morgana puede prepararte algo. - Dice, en cuanto ella entra
en la cocina.
- No hace falta, tomaré un vaso de leche. - hablo y me dirijo
hacia la heladera, ag~rro la jarra de leche.
- Gracias. - Hablo cuando Morgana me pasa un vaso.
- Uz... ¡Puedo sentir a mi nieta? - pregunta Rodolfo, mientras
lleno mi vaso.
- Claro que sí. - Hablo y camino hacia él.
Tan pronto como estoy a su lado, coloca su mano en mi
estómago y Bella lo patea.
- ¡Ups! - el Sr. Rodolfo habla y ríe. - ¡Cómo estás, pequeña? El
nono está ansioso por conocerte, y estoy seguro de que tu nona
también lo estaría. - Sus ojos ya están llorosos.
Capítulo 80 2/4

- ¿La extraña~ - Pregunto.

- No te imaginas cuánto. - Quita su mano de mi estómago y
suspira. - Por mucho que hayan pasado los años, la sigo amando,
mucho.
Me conmueven sus palabras, contengo una lágrima y bebo la
leche.
- ¿Vamos? - Pregunta Martin apenas entra a la cocina. - Ah.
buenos días, señor Rodolfo.
- Buenos días, Martín. - Habla Rodolfo y frunce el ceño, me río
de su actitud.
- ¡Vamos! - Le doy un beso en la mejilla al señor Rodolfo. -
¡Adiós! Y lo espero en NY, y se lleva a Morgana com usted - le digo y
le sonrío a ella, quien me devuelve la sonrisa toda fuera de lugar.

***
Regresamos a.l hotel, nos escabullimos. sólo le envié un mensaje
a Sandra diciendo que íbamos a desayunar en otro lugar. también le
dije que disfrutara el día con Petter, ya que no habían tenido tiempo
solo para ellos durante días.
"'**
Pasé todo el día con Martin, pensando en lo que Hendrick había
dicho sobre su hermano, no había ninguna razón para que mintiera, lo
que me dejó con un rayo de esperanza. ¿Podría estar siendo una
tonta? ¡Sí, lo soy! Pero todavía lo amaba, y mucho.
***
Han pasado algunas horas desde que llegamos a NY.Todavía es
domingo.
- ¿Vamos? - llamo a Martín.
- ¿Para donde? - Pregunta, mientras caminamos hacia su auto.
Sandra y Petter no quisieron acompañarnos.
- No sé, solo sé que quiero a cualquiera que tenga Donas de
Chocolate. - De repente sentí ganas de comer donas.
- Entonces no podemos demorar. - Habla y salimos en el
coche.
- ,Tienes problemas que resolver? - Pregunto.
- No exactamente. - Sigue mirando la carretera.
- ¿Entonces que? - Pregunto con curiosidad.
Capítulo 80 3/4
- Es solo que ... - Quita una de sus manos del volante y se rasca
la cabeza. - Es que .. .
- Habla de una vez, Martín. - Hablo irritada.
- Yo... yo invité a Pa... Paola a dar un paseo. - Habla
tartamudeando. - En realidad, ella me invitó hace unos días, y decidí
aceptar después de nuestra conversación.
- ¡De verdad~ - Hablo eufóri:ca. - Estoy feliz por ti.
- ¿En serio? - pregunta receloso.
- Claro que sí, Martín, me gustas, me gustas mucho y quiero
que seas muy feliz. - me acerco y le doy un rápido beso en la mejilla.
- ¿Y sí no funciona? ¿O si no le gusto? - Pregunta.
- Estaré aquí. - Le digo y me da una sonrisa de soslayo. -
Siempre estaré aquí.
- Gracias, Liz.
- Oye Martín, ya no quiero comer donas, sino unas papas de
Me. - Hablo cuando veo una "M" enorme.
- ¡Dios mío mujer! - dice Martín - ¡Estás segura?
- ¡Sí!
- Ok, entonces vamos.
Pasamos por el drive-thru, compramos mis papas y un batido.
- ¿Ya sabes a dónde van? - Pregunto toda curiosa.
- No sé muy bien. - Habla y se ríe. - No he sacado su
expediente. - Nos reímos juntos.
Martin me deja en casa. le deseo suerte en su cita. en el fondo
siento un poco de celos, pero eso es egoísta de mi parte. Merece ser
feliz.
Sandra y Petter tampoco están en casa.
Decido tomar un baño para relajarme, pongo la tina a llenar y
voy a separar un camisón.
Mientras miro a través de mi armario, escucho el timbre de tia
puerta.
"¿Será que Sandra olvidó sus llaves?", me pregunto.
Tan pronto como abro la puerta, me encuentro cara a cara con
Henry.
- ¿Henry? - pregunto sorprendida, y como siempre, vestía su
traje n:tcto1:o con una camisa blanca, su cabello esta peinado hacia atrás.
Capítulo 80 3/4
voy a separar un camisón.
Mientras rniro a través de mi armario, escucho el timbre de la
puerta.
"¿Será que Sandra olvidó sus llaves?", me pregunto.
Tan pronto como abro la puerta, me encuentro cara a cara con
Henry.
- ¿Henry? - pregunto sorprendida, y como siempre, vestía su
traje n,tc,1<:1<0 con una camisa blanca, su cabello esta peinado hacia atrás.
- Sí, soy yo. - Dice y me da esa media sonrisa que me deja toda
empapada. ¡Mierda! Tengo que dejar de pensar sólo en sexo cuando
veo a este hombre.
- ¿Qué haces aquí?
-Vine a pasar unos días con mi hija. - Habla y señala con el
dedo su maleta.
- ¡Espera ahí! ¿Qué dijistel
- Vine a pasar unos días con mi hija. - Habla y entra sin ser
invitado. - Recuerda que me dijiste que podía participar en su vida.
- Sí Henry, lo recuerdo. - Cierro la puerta y camino detrás de
él por el pasillo. - Pero eso es sólo cuando ella nazca.
- Pero quiero empezar desde ahora. - Habla, deja su maleta en
la esquina de la habitación y se sienta en el sofá.

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The Alpha's Feisty Mate

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Capítulo 81 1/4

Capítulo 81

- Mira, Henry, tengo muchas cosas que hacer. - Se abre lo,s

botones de su traje y cruza las piernas. - Una de ellas es tomar una
ducha.
- Perdona si te interrumpí. - Dice, saca su celular del bolsillo
y empieza a teclear.
- ¡Sí! Me interrumpiste. - Digo con rabia. - Luego
hablaremos sobre tus visitas. - Digo y salgo hacia mi habitación,
recordando que dejé la bañera llena.
- ¡Uf! - digo, apenas me doy cuenta de que la bañera no se
ha llenado mucho. - ¡Mierda, Henry! - murmuro para mis adentros.
Me quito la ropa, echo unas sales en la bañera para relajarme y
me meto en la bañera, el agua caliente hace que me relaje.
Después de unos minutos salgo de mi baño, me envuelvo en mi
toalla y nada más abrir la puerta del baño, me encuentro a Henry en
mi habitación deshaciendo su maleta.
- Espera un momento. - Hablo, pero me ignora y sigue
sacando su ropa de la maleta. - ¡Henry McNight! - Le grito.
- Cálmate, Liz. - Habla con calma y deja de revisar sus cosas.
- Cálmate, es malo para nuestra pequeña Bella.
- ¿Qué estás haciendo exactamente en mi habitación? - Sólo
entonces me doy cuenta de que mi armario está abierto y él había
apilado parte de mi ropa a un lado, dejando un espacio para sus
cosas.
-Voy a guardar mi ropa si voy a cuidar a mi hija. - Hace una
pausa y señala mi vientre. -Tengo que estar cerca de ella.
- Mira Henry, puedes participar en la vida de nuestra hija. -
Me pongo y cuento hasta diez para. no asustarme por eso. - Pero
eso será cuando nazca, no hay mucho que puedas hacer ahora.
- ¿Cómo que no, Liz? - Ca.mina hacia mí. -Tiene que sentir
mi presencia a partir de ahora, ya es suficiente con que hayamos
estado alejados el uno del otro durante meses. -Acorta el pequeño
espacio que nos separa y me pone la mano en el v,ientre, en el mismo
momento Bella empieza a saltar co,mo una palomita de maíz. - ¡Lo
ves?, ella me necesita tanto como yo a ella.
- Puedes venir conmigo a mis citas para ver cómo está. - Le
Capítulo 81 2/4
digo y me mira fijamente. - De hecho, he programado otra ecografía
para verla una vez más. - Sonríe.
- Le pedí a Sandra que trajera una lasaña. - Dice Henry.
- ¿Traer? - Pregunto.
- Sí, le envié un mensaje para pedirle que la trajera. - Díce y
sonríe.
- Pero no puedes quedarte aquí. - Retiro su mano de mi
estómago y me dirijo hacia mi armarlo para quitarle la ropa.
- ¿Cómo que no? ¡Vamos a tener una hija! - Dice.
- Exactamente, Henry. - Digo, mientras empiezo a meter su
ropa en la maleta. -Vamos a tener una hija, eso es todo y nada más.
- Empieza a sacar su ropa de la maleta. Sí, yo la pongo y él la quita.
- ,,Q uieres parar? ¡Parecemos dos niños! - Le vuelvo a gritar, me
siento en la cama y él se me queda mirando.
- ¡Por qué, Liz? Sólo quiero estar cerca de ustedes dos. -
Dice y se encoge de hombros.
-Ya te dije que sólo va a pasar cuando nazca. - Hago una
pausa y pienso cuidadosamente en las palabras que voy a usar. -Y
no puedes quedarte aquí en casa, no podemos vivir juntos.
- Claro que podemos, Liz, no interfiere en nada.
- ¿Qué te pasa? ¿Te has tomado unos últimos minutos para
reírte en mi cara? - Saca su maleta de la cama y se sienta a mi lado.
- ¿Por qué no vas a tu casa y luego hablamos? ¿Qué te parece?
- No he comprado otra casa.
- No puedo creer que el señor Henry McNight no haya
comprado una casa en Nueva York, como si fuera imposible. - No
me contengo y mi ironía habla más fuerte. - ¿Qué hiciste con tus
casas?
- Las vendí todas, y no tuve tiempo de comprar otra, te fuiste
y no me lo dijiste, me alegro de que Sam me lo dijera. - Habla, como
si no tuviera la culpa de nada.
- Puedes quedarte aquí hasta que compres otra casa. - Sé
que me estaba timando, porque le he visto hacer una sola llamada y
tener una casa disponible en menos de media hora.
- Gracias Liz, creo que me iré de aquí en un par de semanas.
- Dice y vuelve a guardar su ropa en mi armario.
-Te quedarás en la habitación de invitados. - Le digo y se ríe.
Capítulo 81 3/4
- No quiero crear problemas con tu mujer.
- ¿Mi esposal - Es irónico.
- Sí, Henry, tu esposa. - Lo vuelvo a decir, ,e sperando que diga
algo sobre ella, pero es en vano porque no lo menciona. lo que me da
aún más miedo.
- Está bien. - Dice y vuelve a meter su ropa en la maleta. mi
subconsciente se echa a reír.
- Cuando llegue Sandra te ayudará con la organización. - Me
levanto y agarro el primer babydolll que veo delante de m{ y vuelvo al
baño cerrando la puerta tras de mí.
Respiro profundamente para no enloquecer y cambiar.
Esta vez Henry se ha superado a sí mismo, ¡y de qué manera!
Salgo del baño y ya no está en mi habitación, lo que me alivia.
Necesitaba contarle a Martin lo que estaba pasando, agarro mi
celular y le envío un mensaje.
tt* Mensaje ***
Yo : Martín, ¡estás ahí?
Yo : ¿Puedes hablad
Martin : Hola.
Martln : Sí puedo, Paola fue al baño.
Yo : ¡Adivina quién está en mí casa?
Martin: Mira, podría hacerme el tonto . ..
Martín : ¡El señor McNight! - Envía un mont ón de emojís
riendo.
Yo : Sí.
Martín : ¿Qué quiere?
Yo : Ha dicho que quiere participar en la vida de Bella.
Martín : Pero ella ni siquiera había nacido ...
Yo : Para que veas.
Martín : Me pasaré más tarde, Paola está regresando.
Yo : Besos.
tt* Mensaje apagado ***
Vuelvo a respirar profundamente y voy a la cocina, ya puedo
oler la lasaña.
- ¡Señorita! - dice Sandra y sonríe.
• 1
Capítulo 82 2/5
- No puedo creer que haya perturbado tu paseo con Petter
por una lasaña, - digo sentada en la mesa.
- Por supuesto que no, estábamos regresando. - Dice,
mientras agarra algunas naranjas para preparar el jugo. - y vamos a
cenar todos juntos. - Sonríe.
- ¿Y dónde están?
- Petter está en la ducha y Henry está terminando de arreglar
las cosas en su habitación.
- Hum. - Fui al salón a ver algo, me tumbé en el sofá y
cambié de canal, no había ningún canal interesante. puse una película
al azar y me acomodé en el sofá, estaba agotada, aún no había
descansado después del viaje, incluso Bella estaba t.ranquila.

Capítulo 82

- Liz... Liz... - Despierto cuando Henry me llama.

- ¿Qué ocurre? - Pregunto medio adormilada.
-Vamos a cenar. - Dice y me acomodo en el sofá.
- ¡Maldita sea! Acabé dormitando. - Me siento en el sofá y
veo que Henry llevaba una bandeja en las manos. - No tenías que
hacerlo.
- Decidimos cenar aquí en el salón. - Sonríe y me entrega la
bandeja, sólo con oler la lasaña, Bella ya empezó a saltar en la barriga.
- Huele de maravilla. - Digo.
En seguida Petter y Sandra se sientan en el sofá de al lado, y
Henry se sienta a mi lado.
- ¿Qué película es esa, niña? - pregunta Petter.
- No sé, espera. - Digo y agarro el control para ver lo que
estaba pasando. - El nombre de la película es "Antes de que acabe el
d ."
'ª .
- ¿Es un romance?- pregunta Petter y pone cara de asco..
Capítulo 82 1/5

- Sí, y es muy bonito. - Me río. - ¿No te gusta?

-No.
-A mí tampoco. - Habla Henry.
- Me encantan las películas así. - Dice Sandra.
- La mayoría ganó, sigamos observando. - Hablo y pongo el
control en la mesita.
- ¿Qué quiere decir con la mayoría? - pregunta Petter.
- Sandra. Bella y yo. - Le digo.
- Eso no cuenta. - Comenta Henry.
- No puedo hacer nada al respecto. - Hablo y vuelvo a
comer.
- Pero ...
- Henry, por favor, cállate, queremos mirar. - Digo y Sandra
se ríe.
Terminamos la cena y seguimos viendo la película, Henry y
Petter no se quejaron más.
Al final de la película estaba ll!orando, Henry me abrazó y yo
lloré más.
-Yo me encargo - dijo Petter en cuanto sonó el timbre.
-Voy a organizar las cosas, niña, y preparar un poco de té para
ti - dice Sandra y va a la cocina.
Henry me dejó ir y tomar la copa de vino que estaba bebiendo,
sí, tenían un buen y agradable vino y yo un buen zumo de naranja.
- Liz, ¿qué pasó? - pregunta Martin en cuanto me ve llorar.
- Hola Martín. - Me seco las lágrimas con las manos. - No
fue nada.
- ¡Fue este ídiota! - dice Martin y se dirige a Henry, que no
hace ninguna reacción.
- ¡Martin! - Le grito, pero es demasiado tarde, ya le ha dado
un puñetazo a Henry en la cara, lo que ha hecho que se le caiga la
copa de vino al suelo, y ¡mierda! El vino cayó justo en mi alfombra
blanca.
Quiero llorar, pero es porque amo mi alfombra.
- ¡Señor Henry! - Oigo la voz de Petter. - Doctor Martin.
- Intenta separarlos, pero es en vano. Sandra no reacciona.
- ¡Paren! - Doy un grito que resuena en la habitación. -
Capítulo 82 2/5
Henry y Martin me miran.
Me siento un poco mareada y mi visión empieza a oscurecerse.

Intento abrir los ojos pero me cuesta un poco por la

luminosidad y cuando lo hago, me doy cuenta de que estoy en el
hospital.
- ¡Oh, mierda! - Me digo a mí misma. Estoy sola en la
habitación, lo que me hace aún más feliz.
Aprieto el botón y enseguida aparece un médico, es alto,
moreno, de ojos azules, con el pelo peinado hacia atrás y con una
sonrisa encantadora.
- ¡Señorita Navarro! - Habla y se acerca. - Soy el doctor
Jack Smith. - Se presenta. - ¿Y cómo se siente?
- Bien. - Digo, estirándome en la cama.
- Con permiso. - Habla y empieza a comprobar mis signos
vitales. - Realmente fue sólo una caída de presión. - Dice y sonríe.
- Necesita descansar y evitar el estrés. - ¿Cómo haría eso con
Henry y Martin?
- ¿Qué hora es, doctor?
- Casi las dos de la mañana. - Dice, mirando la pantalla de su
teléfono móvil.
- ¡Dios mío! - Se ríe y se dirige a la puerta.
- Le diré a sus familiares que está bien y que puede recibir
visitas. - Dice.
- No, doctor. - Se detiene, se vuelve hacia mí y frunce el
ceno.
- ¿Por qué razón?
- Ellos son la razón por la que estoy aquí.
-A ver si lo entiendo. - Se acerca y se apoya en el extremo
de la cama. - Por cierto, hay dos jóvenes, un caballero y una dama
que esperan saber de usted. - Hace una pausa y me mira fijamente.
- ¿Y los dos jóvenes que entraron aquí discutiendo, son la razón de
su bajada de presión?
- No puedo creer que hayan hecho un escándalo aquí... -Ya
estaba avergonzada.
- Uno dice que es el padre de su hija y que tiene todo el
Capítulo 82 3/5
derecho a estar a su lado y que él no es el motivo de su llanto. - El
doctor se ríe. -Y otro dice que es el padrino de su hija y que tiene
todo el derecho a protegerlos de él.
- Qué vergüenza, doctor. - Podía sentir que mis mejillas se
calentaban de vergüenza.
- Señorita Navarro, lo único que puedo decir es que los dos la
aman mucho. - Empieza a masajearse las sienes. - Pero puedo
ayudarle con eso, les decimos que su estado es delicado y que no
puede estar nerviosa, lo que por cierto no es mentira.
- Gracias, doctor. - Le doy las gracias y le sonrío.
-Ya está dada de alta, pediré a alguien que le ayude a
cambiarse. - Se da la vuelta y se dirige a la puerta.-Y si necesita
algo. llámeme. - Levanta su celular y me lo enseña, pero no lo
entiendo.
En cuanto se va me levanto de la cama y me cambio.
poniéndome el babydoll que llevaba antes de desmayarme y para mi
alegría, tenía un hobby al lado y mi teléfono móvil, no recuerdo haber
estado con él antes de caer.
El médico entra en la sala en una silla de ruedas.
- ¡Señorita Navarro! - Habla él.-Veo que está muy bien y
que no necesita más ayuda.
- Lo siento. - Le digo.
-Vamos, siéntese. - Habla y señala la silla de ruedas.
- ¿Es realmente necesario? - Pregunto.
- Sí, si quiere darles una lección. - Habla el doctor y se ríe.
- Lo que hago por unos minutos de paz. - Hablo y me siento
en la silla.
El médico me lleva a la sala de espera, ya puedo ver a los cuatro
esperándome.
- ¡Pequeña! - Henry casi grita cuando me ve y camina hacia
nosotros.
- ¡Liz! - Martines otro, y hace lo mismo que Henry.
Sandra y Petter se quedan lejos, mirándome.
- Doctor, ¿cómo está? - pregunta Henry.
- Su estado es delicado y no puede estar nerviosa. - El
médico habla con toda la serenidad.
Capítulo 82 4/5
médico habla con toda la serenidad.
- Lo siento, pequeña. - dice Henry y se agacha. poniéndose
casi a mi altura y me agarra las manos. Observo que tiene un corte
en la boca y que un lado de la cara está rojo por el puñetazo que l e
dio Martin.
Una ola de deseo recorre todo mi cuerpo ante su contacto.
-Yo también lo siento, Liz. - Habla Martin, pero Henry no le
deja espacio para acercarse. Uno de los ojos de Martin está
enrojecido.
-Tiene que descansar durante los próximos dos días. -
Habla el doctor y pone una de sus manos en mi hombro, puedo ver
el odio que surge en los ojos de Henry. -Y ho se estrese, siga mis
pautas, si no quiere que la bebé nazca antes.
- Gracias, doctor. - Oigo esto y suelto mis manos de las de
Henry para colocar las mías encima de las del doctor, como forma de
agradecimiento. Henry se levanta rápidamente, me doy cuenta de que
no le ha gustado nada mi actitud.
Henry ocupa el lugar del médico y comienza a guiar la silla
donde yo estaba.
Llegamos al aparcamiento y me carga en su regazo poniéndome
en el asiento del copiloto y luego toma posesión del asiento del
conductor, Martín va detrás con Sandra y Petter.
,tete*
Hace casi una hora que llegamos a casa, le expliqué a Martin lo
que había pasado de verdad, que estaba llorando por la película y no
por Henry. Finalmente, uno se disculpó con el otro y Martin se fue a
su casa.
Henry se empeñó en quedarse conmigo en mi habitación.
- Prometo que no dormiré aquí. - Dice y yo frunzo el ceño.
- Me iré a mi habitación en cuanto te duermas.
- No es para tanto, Henry. - Le digo.
- Sí, lo es, y tengo un porcentaje de culpa de que hayas ido al
hospital. - Hace una pausa. - No quiero que le pase nada a los
amores de mí vida. - Habla y sonríe, momento en el que suena su
teléfono móvil y puedo ver el nombre de Ketlin en la pantalla. -
Vuelvo enseguida. - Dice y sale de la habitación.
Entonces entra Sandra con una taza de té.
Capítulo 82 4/5

Llegamos al aparcamiento y me carga en su regazo poniéndome

en el asiento del copiloto y luego toma posesión dlel asiento del
conductor, Martin va detrás con Sandra y Petter.
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Hace casi una hora que llegamos a casa, le expliqué a Martin lo

que había pasado de verdad, que estaba llorando por la película y no
por Henry. Finalmente, uno se disculpó con el otro y Martin se fue a
su casa.
Henry se empeñó en quedarse conmigo en mi habitación.
- Prometo que no dormiré aquí. - Dice y yo frunzo el ceño.
- Me iré a mi habitación en cuanto te duermas.
- No es para tanto, Henry. - Le digo.
- Sí, lo es, y tengo un porcentaje de culpa de que hayas ido al
hospital.- Hace una pausa. - No quiero que le pase nada a los
amores de mi vida. - Habla y sonríe, momento en el que suena su
teléfono móvil y puedo ver el nombre de Ketlin en la pantalla. -
Vuelvo enseguida. - Dice y sale de la habitación.
Entonces entra Sandra con una taza de té.
-Toma niña, esto te hará bien y dormirás mejor. - Dice y me
entrega la taza.
- ¿Te he dicho lo mucho que te amol - Le digo y la atraigo
en un abrazo un poco torpe.
-Yo también te amo, niña. - Dice y sus ojos ya están llenos
de lágrimas.

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Capítulo 82 3/5
Capítulo 83

Sandra fue una de las mejores personas que Henry puso en mi

vida,, no sé qué haría sin ella.
-Ahora voy a dejar que tú y nuestra pequeña descansen - dice
Sandra y se dirige hacia la puerta.
- Gracias Sandra, Bella agradece por el té. - Hablo y levanto la
copa, mientra.s ella sale de la habitación.
Termino mi té y nada que Henry regresa.
No negaré que me muero de curiosidad y celos cuando vi el
nombre de Ketlin en la pantalla del celular de Henry, pero qué puedo
hacer, ella sigue siendo su esposa.
Termino mi té y me acuesto, necesitaba descansar.

***
Me despierto con una flojera inmensa para abrir los ojos,
todavía estaba cansada y recuerdo que era lunes. Paso mi mano por
mi cama tratando de encontrar mi teléfono celular, y accidentalmente
paso mi mano sobre alguien que me hace saltar.
Me siento en la cama y Henry estaba muy tranquilo y sin camisa
durmiendo en mi cama, ignoro su existencia, paso mi mano debajo de
su allmohada y busco mi celular.
- ¡Mierda! - me quejo cuando miro la hora en la pantalla, eran
más de las 08:00 de la mañana, y tenía que ir a la empresa.
- Liz. - Henry se da vuelta en la cama. mientras me habla.
No digo nada. solo lo observo.
Se da vuelta un poco más en la cama y abre los ojos.Y no
puedo dejar de mirar esos hermosos ojos, a pesar de todo sigo
amando a este estúpido bipolar.
- Pensé que ya te habías levantado. - Habla y sonríe, ¿saben?',
esa sonrisa que amo y que me hace sentir empapada. - Liz? - Me
habla una vez más.
- ¿Qué pasó?
- ¿Me escuchas? - pregunta y sonríe.
- Claro que te escucho. - digo y me levanto de la cama.
- ¿A dónde vas?- Se sienta en la cama y me mira.
- Necesito trabajar. - Hablo y me dirijo hacia mi armario para
Capítulo 83 2/5
elegiir un atuendo.
- El doctor dijo que necesitas descansar. - Díce y se levanta de
la cama.
- No puedo, tengo unos contratos que firmar. - No lo miro y
sigo buscando qué ponerme.
- SI quieres, lo haré por ti. - Para y lo encaro.
- ¿Disculpa? Sólo podrías hacer eso cuando estábamos
casamos. -Vuelvo a mirar mi ropa, hasta que encuentro un vestido de
punto n***o todo pegado y sus mangas son estilo gitano, mi barriga
realmente se resaltará en él.
- Lo había olvidado. - Dice y se pasa las manos por el pelo.
- ¿Y ya le dijiste? - pregunto y paso una de mis manos por mi
estómago.
- Todavía no. - Habla y mira hacia abajo.
- Espero que mi hija no corra ningún ríesgo cuando se entere, y
por cierto, ¿sabe que estás en mi casa? - No me mira y no insisto en
una respuesta, solo voy al baño.
Termino de ducharme y cuando abro la puerta del baño Henry
sigue ahí, sentado en el borde de la cama, tiene los dedos
entrelazados y los mira fijamente.
Ignoro su existencia, voy al armario y tomo un par de sandalias
color nude, me seco el cabello solo para eliminar el exceso de agua,
aplico lápiz labial rojo y exagero con el rimel.
- No me casé con Ketlin. - Habla, pero sigo ignorándolo.
porque ya sabía a dónde iba esta historia. No quiero escuchar
historias vacías. - Eric nos traicionó.
- ¿Cómo así r - Hendrick ya me había contado la mitad de esta
historia y pensé que Henry nunca lo mencionaría.
- Eric siempre quiso ser el Capo, pero como no es heredero,
no puede. - Henry respira hondo. - Una de las únicas formas para
que él sea un Capo, es casarse con mi esposa en caso de que muera,
y matar a Hendrick, entonces él podría encargarse de todo.
- ¿Y cómo llegó a ese punto? - pregunto asustada. - ¿No lo
trataste como a una familia? ,Y su padre? - Empiezo a hacer muchas
preguntas.
- Ha pasado un tiempo desde que hablé con su padre. - Henry
se pasa las manos por el pelo. - La última vez que hablamos fue hace
Capítulo 83 3/5
poco más de un año, dijo que quería un descanso de todo, pues ya
había perdido la esperanza de encontrar con vida a su hijo, al
principio también pensó que todo esto podía ser una trampa, pero
cuando nada pasó, se rindió.
- ¿Y crees que está muerto? - pregunto angustiada.
-Aún no lo sé, averigué que también usaron a Patrick. - Veo
que Henry está nervioso. - Ketlin nos sedujo a los dos, pero en el
fondlo, estaba enamorada de Eric.
- ¡Ella te cont6 todo esto?
*** Henry ***
- Sí Liz, te voy a contar todo lo que me dijo Ketlin. - Llz se
sienta a mi lado en la cama.
"- Según Ketlin, su padre quería dominar la mafia italiana, lo que
ya todos sabemos. Pero necesitaba un aliado para acabar con mi
familia.Y como Eric siempre ha tenido sed de poder, si que fue fácil
convencerlo. Eric se volvió en mi contra y también lo hizo seducir a
Ketlin, no tengo dudas de que al principio ella estaba enamorada de
mí. Eric consiguió el amor de Ketlin, quien también se acercó a
Patrick, el pobre era solo una llanta de refacción, por si yo
sospechaba algo.Y como terminé enterándome de la supuesta
traición antes de la boda, su plan salló mal, y el odio mortal hacia la
familia de ella solo aumentó para mí. Patrick desculbrió que Ketlin no
había muerto con ese disparo, ella inventó toda la historia, diciendo
que el culpable era Eric, y que al final, Patrick había bombardeado el
avión en el que estaban tus padres y que se suponía que Eric también
estaría en el.
- ¿Patrlck mató a mis padresl - pregunta Liz con voz
temblorosa.
- Sí, Liz. - Las lágrimas comienzan a correr por su rostro. -
Patrick estaba cegado por el amor, de hecho, todavía cree en todo lo
que dice Ketlin. - Ella comienza a llorar, y la jalo en un abrazo,
acurrucándola contra mi pecho.
- Con ... Con ... - Respira hondo y dice. - Por favor, continua. -
Su voz sale en un hilo.
- Después de eso, Eric fingió su propia muerte, y esperó todo
este tiempo esperando el momento adecuado para atacar.
- ¿Y cuándo era el momento adecuado?
Capítulo 83 4/5
- Cuando me enamoré de ti. - Se suelta de mi abrazo y me
mira. - Desde ese momento descubrió que eres mi punto débil, por
eso siempre quise alejarte, no quería y no quiero perder a la única
persona que realmente amo en esta vida. Me paso todos los días
culp,á ndome por la muerte de nuestro pequeño, y no puedo imaginar
de lo que sería capaz si te pasara algo a ti y a nuest.ra pequeña. -
Hablo y pongo mi mano en su vientre. - Ustedes dos son lo más
preciado que tengo. - Cuando me doy cuenta, las lágrimas ya corren
por mi rostro, y Liz trata de secarlas con sus manos.
- Fue Eric quien hizo colocar la bomba en el auto de mi padre,
y él fue quien mató al padre de Patrick, desde entonces, él piensa que
fui yo quien mató a su padre, por eso me odia tanto. Están planeando
un ataque, Kedin ya no quiere ser parte de todo eso, así que me
busco. Nos pidió que fingiéramos un matrimonio y si me divorciaba
de tii, su familia creería todo eso.
- ¡Pero todavía quieren matarte~ - Liz sostiene mi rostro entre
sus manos.
- Sí, Ketlin quiere matar a Erlc y a su padre.
- ¡Cómo puede alguien querer matar a su propio padre? - Liz
suelta mi rostro y se acurruca de nuevo en mi abrazo.
- De hecho, é,I no es su verdadero padre, se acaba de enterar.
Jorge Campelo es tu tío mayor¡ se casó con tu madre después de la
muerte de su padre y mi familia dominó toda la mafia italiana, le tiene
un odio mortal a mi padre después: de todo esto que paso y como
prueba, además mató a mi madre. - Siento un odio mortal por él. -
Se mudaron a Alemania y dominaron la mayor parte de allá. Ketlin
descubrió que su tío mató a su propio hermano.Y ahora mismo mis
hombres los están atacando.
- ¡Por eso viniste aquír
- Sí, no podía dejarte sola, más aún si su familia sospechara
todo lo que está pasando. Con todos muertos, Ketlln puede hacerse
cargo del negocio familiar y dejarme en paz.Antes de todo eso.Jorge
tomó una decisión, diciendo que mi padre había matado a su padre, el
odio de ella solo aumentó.
- ¿Y su hermana?
- Kevlin tiene sed de venganza, odia a toda mi familia, nos culpa
por la muerte de su padre, sigo pensando que intentará matar a su
propia hermana cuando muera su tío.
Capítulo 83 5/5

Lo único que me consuela es saber que después de que todo

esto termine, podremos tener a nuestra familia junta, y no tendré que
seguir pensando que en cualquier momento podemos tener un
ataque mayor".
~uz~
Escuchar todo eso de Henry no fue fácil, especialmente
sabiendo que Patrick mató a mis padres por celos, si no fuera por el
ansia de poder, mis padres estarían aquí.
- ¿Estás bienr - Pregunta Henry.
- Creo que sí.

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The Alpha's Feisty Mate 1 \J

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Eti··· alpha dark possessive shifter

Capítulo 84

~uz,t:,l:,t:
Escuchar todo eso de Henry no fue fácil, especialmente
sabiendo que Patrick mató a mis padres por pura envidia, si no fuera
por el ansia de poder, mis padres estarían aquí.
- ¿Estás bien ~ - Pregunta Henry.
- Creo que sí.- Escuchar todo eso me hizo muy mal, lo único
que se me pasó por la cabeza fueron mis padres, eso fue todo. - Sólo
necesito absorberlo todo.
-Vamos, te haré un poco de té. - dice Henry y tira de mí del
brazo.
Vamos a la cocina, donde Sandra ya había preparado nuestro
desayuno.
Capítulo 84 1/4

- ¿Qué pasó, mi niña? - pregunta Sandra en cuanto entramos

en la cocina. - Estás más blanca que el papel. - Habla ella y viene hacia
mí.
- Después te cuento lo que pasó. - Le comenta Henry.
Como Sandra. prácticamente lo crió, sabía toda la historia.
Tomé mi té de manzanilla que ella preparó y decidí quedarme
en casa, no estaba de humor para ir a trabajar.
Le pedí a Paola que se encargara de todo, ella ya se había
convertido en mi mano derecha, y fue Henry quien la contrató
cuando se hizo cargo de mi negocio familiar.
Pasé toda la tarde acostada y Henry estaba a mi lado, de hecho
estaba y no estaba conmigo, porque no dejo el celular esperando
noticias.
Hendrick se había ido para ejecutar la "operación", lo que dejó
a Henry mas nervioso.
Y lo peor de todo es que Sam no sabía nada. le iba a dar un
infarto si algo le pa.saba a él.
- ¿Estas mejor? - Incluso perdí la cuenta de cuantas veces me
hizo esa pregunta, ya me estaba empezando a enfermar de tanto que
me preguntaba.
- Sí Henry, por décima vez sí. - Respiro hondo y me levanto del
sofá . - Estoy bien.
- No te enfades conmigo Liz, por favor. - Dice y se aleja
andando detrás de mí.
Subo a mi cuarto y cuando voy a cerrar la puerta, la bloquea
con el pie.
- ¿Qué pasó f - Pregunto.
En una fracción de segundo nos estamos besando.
Por supuesto, le correspondo con todo el amor, el cariño y la
lujuria que ya estaba sintiendo. Cuando me doy cuenta, ya estamos sin
ropa, quedando solo la ropa interior, y con mi cuerpo al desnudo,
Henry comienza a besarme los hombros hasta mi cuello, estoy tan
emocionada y su polla comienza a crecer contra mi vientre.
Me empuja suavemente contra la pared, me sujeta los muslos
haciéndome cruzar las piernas a su alrededor, sus fuertes brazos me
aprietan no tan fuerte por mi barriga, y exploran mi cuerpo, me
vuetve loca.
Capítulo 84 2/4
- Henry... - Le hablo.
- ¿Qué quieres, Liz? - Me preg~nta.
- Quiero... a ... a . .. -Antes de que termine de hablar, Henry
aprieta mi intimidad y me hace gemir en su boca.
Besa mi cuerpo posesivamente, como si lo necesitara y no e.reo
que esté mal, lo quiero todo para mí, sólo para mí. Sólo entonces me
di cuenta de cuánto lo extrañaba.
Henry aprieta mi trasero y lo golpea fuerte, no puedo
contenerme y dejo escapar otro gemido, sonríe y me quita el sostén,
agarrando uno de mis senos con cíerta urgencia, y con la otra mano
jue~ con mi intimidad.
Se siente tan bien, como si supiera cada paso para dejarme con
ganas de más y más.
- Henry... - hablo cuando deja de tocarme.
- Dime qué quieres. - Henry habla con una voz sexy y vuelve a
tocar mi intimidad.
-Ahhhh... - Otro gemido sale de mi boca.
- Respóndeme, Liz. - Me golpea el trasero.
- Te quiero a ti ... - Hablo, tratando de reprimir un gemido.
- ¿Sólo eso ? - Siento que su respiración se acelera.
- Te quiero dentro de mí. - Digo, abro los ojos y él sonríe.
Esa sonrisa diabólica reaparece.
Me acuesta en la cama con delicadeza y se inclina sobre mí, con
algo de dificultad y se acerca mucho a mi oído y deja un rastro de
besos, baja por mis pechos, vientre hasta llegar a mi intimidad.Tira de
mis bragas a un lado y su boca está tan caliente y húmeda. hace ochos
con su lengua, tirando de mis labios y mordisqueando.
- ¡Ahhh! - Grito por él, es tan delicioso. - ¡Ahhh!
Pronto se deshace de mis bragas y se mete entre las piernas y
me penetra.
Me va metiendo todo, con cierto cuidado, le sostengo con
fuerza su espalda clavandole las uñas y cada embestida doy un
gem1ido.
- ¡Ahh ... Henry! - Cada vez que su nombre sale de mi boca,
sonríe.
Disfruto cada segundo, es una mezcla de tantas cosas.
• 1 , 1
Capítulo 84 3/4
Ahora estamos uno frente al otro y él sostiene mi cuello para
más embestidas.
- Disfrútalo, mía raga.na. - Pide él.
Hizo que me excitara más y más con esas palabras. Me
recuerda a los momentos de amor que alguna vez tuvimos.
Después de unas cuantas estocadas, llegamos al clímax, Henry
cayó a mi lado, tirando de mí para acostarme sobre su pecho con
cierta dificultad a causa de mi barriga y me llena de besos.
lfot<ll<

Ha pasado poco más de un mes desde que ocurrió el ataque a

la familia Campelo y Henry me dijo la verdad.
Eric realmente está muerto, Patrick está desaparecido, Ketlin
está al mando de la mafia, y Kelvin está en coma, hubo un tiroteo, le
dieron en el vientre y en la cara, lograron sacarle las dos balas, tuvo
algunos paros cardíacos y por suerte no murió.
Martín está saliendo con Paola, lo que me hace muy feliz, él ya
está enamorado de ella.
Rodolfo vino aquí la semana pasada, él y Morgana se llevan muy
bien, casi están saliendo lo cual me hace muy feliz, su quimio está
comenzando a hacer efecto, incluso dejó de usar oxígeno.
- Puede entrar. - Hablo cuando alguien llama a la puerta.
- Señorita Liz. - Paola abre la puerta y entra con un enorme
ramo de rosas rojas. -Acaban de llegar.
- Póngalo sobre la mesa, por favor. - Estaba en mi oficina, el
negocio familiar estaba viento en popa. - Son lindas.
- Mucho. - dice Paola. - Hay una tarjeta. - Ella toma la tarjeta y
me la trae, abro el sobre n>folcl<o que tiene las iniciales "H M'' en el
exterior.
Y con una nota.
"Estoy deseando que llegue nuestra cena. Te amo."
- ¿Del Sr. McNight? - pregunta Paola.
- ¡¿Y todavía tienes dudas?! - Ella sonríe, todos los días Henry
me enviaba algo, flores, chocolates, lencería o incluso una simple
tarjeta que me hace derretirme por él.
¡Ya se han dado cuenta de que volvimos, verdad? Nuestra
relación se siente más como una telenovela mexicana.
Capítulo 85 5/8
Somos solo novios, solo se queda en mi casa los fines de
semana.
Por él ya estaríamos viviendo juntos, quiero esperar a que nazca
Bella. y luego pensar en mudarnos juntos o algo así. Henry incluso me
hizo una propuesta de matrimonio, de hecho me pidió que me casara
con él de nuevo y opté por solo ser novios.
Quedamos en ir a cenar hoy, de hecho sólo me enteré de la
cena con la nota que me llegó, y no me quiso decir a donde lbamos,
dijo que era una sorpresa.

Capítulo 85

- ¿No vas a decirme a qué restaurante vamos a ir?-Vuelvo a

preguntar.
-Todavía no. Llz. - Estamos en su auto de camino a casa.
- ,Y cómo voy a saber qué ponerme~ -Vuelvo a pregunta.r.
- Lo veremos en casa. - Dice Henry, me echa una mirada
rápida y me sopla un beso.
Como Bella se estiró de un momento a otro, lo único que me
queda bien son mis vestidos, gracias a Dios estamos en verano, así
que no necesito comprar pantalones y blusas, claro que uso algunas
camisas de Henry en casa, que por cierto me hacen ver muy sexy.
Cuando me doy cuenta, Henry se detiene en el aparcamiento
de su piso.
- ¿No íbamos a mi casa? - Pregunto.
- Sí, necesito conseguir algunas cosas. - Dice Henry, me
abraza por detrás y nos metemos en el ascensor.
Llegamos al último piso y Henry tantea un poco con las llaves.
- ¿Está todo bien?
- Sí, lo está. - Me da un beso en la frente y abre la puerta,
dándome paso para entrar delante.
Capítulo 84 4/4
- ¡SORPRESA! -Todos hablan juntos mientras abro la puerta
y enciendo la luz de la habitación.
Sólo puedo hacer una "O" con la boca y me pongo las manos
en el pecho.
Empiezo a observar la decoración, había globos por toda la sala,
algunos rosas y otros transparentes con algunos destellos y en todos
ellos tenía el nombre de BELLA.
- Qué bonito. - Henry se acerca y me abraza por detrás.
- Sorpresa. - Me susurra al oído.
- Liz. - Lo siguiente que sé es que Sam está de pie frente :a
mí con Dante.
- ¡Sam, Dios mío! - Digo, miro a Dante que está enorme. -
Cuánto ha crecido.
-Ya tiene casi cinco meses. - Los abrazo a los dos y cargo a
Dante en brazos, sus ojos verdes son preciosos y tiene algunas pecas
en la cara como Hendrick y Henry, es precioso.
-Vamos, Líz. - Joana se acerca y me abraza, luego me Jala del
brazo y caminamos hacia el cuarto de juegos de Henry, el cuarto de
jueg,o s estaba lleno de ropa y regalos para Bella.
- Me he quedado sin palabras, no sé qué decir. - Hablo con
los ojos llorosos.
- Sólo di que te ha encantado todo. - Dice Ana.
- Gracias, muchas gracias. - digo y empiezo a secar las
lágrimas que empiezan a caer.
-Te mereces lo mejor, mi niña.- Habla el señor Rodolfo y
me abraza.
- ¿Cómo está mi ahijada? -Aparece Martín con Paola.
- ¿Incluso tú lo sabías? - Utilizo un tono de severidad en mi
voz y al mismo tiempo de broma.
- Fue una sorpresa. - Habl:a Martin y ambos me abrazan. -
¿Y c.ó mo está la pequeña Bella?
- Cada vez más grande. - Hablo y Martín me pone la mano
en la barriga, me doy cuenta de que a Henry sigue sin gustarle mi
proximidad a Martin, pero no se queja.
- Hola, pequeña Bella. - Martín habla y ella empieza a saltar.
-Ahora estoy seguro de que le gusto. - Habla y se ríe.
Capítulo 85 2/8
- ¿Vamos a hablar con John? - dice Henry queriendo alejar a
Martin.
- ¡Está bien! - Hablo. - Hasta luego. - Nos alejamos de
ellos.
Henry tira de mí y me abraza.
- ¿No querías hablar con John?
-Ahora mismo no. - Sonríe de lado.- Me aburría ver a
Martin tan cerca de ustedes dos.
- ¿Celoso, señor McNight? - pregunto riendo.
- ¿Has visto lo queridos que somos por todos los que nos
rodean? - Me da un beso en la frente y cambia de tema.
- Siento molestar a la pareja. - Dice Sandra y yo me salgo, del
abrazo de Henry. - Hay tarta y algunos dulces. - Dice y miro el
reloj que lleva en la muñeca. -Y para entonces, la señorita Bella ya
tiene hambre.
Nos reímos juntos, Sandra siempre sabía cuando Bella y yo
empezábamos a tener hambre.
- ¡Vamos! -Tomo la mano de Henry y nos dirigimos a una
mesa cerca de la ventana que estaba llena de dulces, algunos
bocadillos y un pastel con el nombre de mi niña, la decoración era
rosa con algunos tonos de azul.- ¿De quién fue la idea?
- Mía y de Sam. - Habla Henry. - Estaba a punto de venir de
visita, y le pedí que me ayudara a comprar algunas cosas para Bella, y
fue entonces cuando tuvo esta idea y me gustó.
- Me encanta, ahora sólo queda decorar su habitación. -
Henry frunció el ceño. - ¿Qué?
- ¿Va a tener dos dormitorios? - Pregunta.
- ¿Por qué lo haríal - No tenía sentido.
- ¿Entonces nos mudamos juntos? - Pregunta.
- ¡Vaya! Ahon lo entiendo. - Hablo mientras agarro un
caramelo y lo pruebo. - Bella tendrá sólo una habitación. - Digo y
Henry me mira fijamente. -Todavía no he decidido cómo vamos a
hacer.
-Te dije que lo mejor es el matrimonio.
-Ya estuvimos casados una vez y no funcionó.
- No entremos en ese tema una vez más. - Habla y agarra un
trozo de la tarta y empieza a comerla, queriendo cambiar de tema.
Capítulo 85 3/8

- ¡Me gusta cómo estamos! -Y no era una mentira.

- Pero yo no. - Comienza a masajearse las sienes. - Me
molesta mucho dormir allí sólo los fines de semana, me siento como
un niño que recibe órdenes de mamá. - No puedo evitarlo y
empiezo a reírme. - ¿Crees que esto es divertido?
- Un momento... es ... - No podía calmarme porque su forma
de hablar era muy divertida. ¿Conocen a esos niños con rabietas?
Entonces, Henry parecía uno de ellos. - Espera, espera, espera. -
Digo, mientras se gira para dejarme solo. - Lo siento, no quería
actuar así.
- Estoy esperando. - Me mira seriamente, mete una de sus
manos en el bolsillo del pantalón, lo que le hace muy sexy, en serio
mucho, y la otra mano se la pasa por el pelo, sí, empieza a ponerse
nervioso.
Arquea una de sus cejas esperando una explicación, y yo sólo
puedo observar su belleza, lo hermoso y maravilloso que es, sus
ligeras pecas que lo acompañan só lo lo hacen más y más sexy. En el
fonc!lo tuve la suerte de tener un hombre como él, la consecuencia es
la carga que lo acompaña. ¡Y quién no tiene cargas en esta vida!
- Me pareció divertida la fo rma en que lo dijiste, eso es todo.
- Contuve una carcajada en mi interior.
- Es gracioso, ¿mi desgracia te hace gracial - Henry ya estaba
muy nervioso.
-Tienes que, mantener la calma, mi consagrado.- Hablo c,o n
un to no de autoridad. - Esto no es una desgracia, ¿de acuerdo?, sólo
me estoy previniendo.
- ¿Previniendo de qué? - Pregunta sorprendido.
- De tu bipolaridad. - Hablo serena.
- Sé que hay veces que incluso yo no lo soporto. - Respira
profundamente. - No voy a hablar más de ello.
-Ya. Henry, ganaste -Tomo un trozo de la tarta.- Bella sólo
tendrá una habitación, y estará en mi casa.
- ¿Y todavía dices que gané? - Habla con un tono regañón.
-Todavía no he terminado de hablar. - Oigo con la boca llena.
- Puedes vivir conmigo y con Bella. - Sonríe.
- ¿Así que nos vamos a casarl - Pregunta eufórico.
- No. sólo seremos novio y novia viviendo íuntos. - Die:o.
Capítulo 85 4/8
- No, sólo seremos novio y novia viviendo juntos. - Digo,
mientras termino de comer mi delicioso pastel.
- No estoy de acuerdo, pero es mejor que nada. - Habla con
un aire resignado. - Le pediré a Petter que me ayude con las
maletas.
- Si quieres te ayudo a empacar.
- No es necesario. - Dice, mientras acepta una copa de vino
que el camarero pasa ofreciendo. -Ya están listas.
- ¿Qué quieres decir?
- Nunca los desempaqué, sólo esperaba esta invitación. -
Henry siendo Henry. - No me imaginaba que tardaría tanto.
-Y tú no cambias, ¿verdad? - Sonríe y sella nuestros labios.
- Henry. - Lo llama Hendrick. - ¿Podemos hablad
- ¿Ha pasado algo? - Pregunto con ansiedad.
- No, no es nada serio. - Hendrick está nervioso. - Es una
cosa de hombres. -Asiente con la cabeza a Henry, que ya entiende
su mensaje.
- Sí, Liz, no es nada serio, es una cosa de hombres. - Dice,
mirando fijamente a su hermano.-Vuelvo enseguida.- Me da un
beso y se dirige a su despacho.
Camino hacia Sam, ella estaba hablando con Ana y Pedro.
- Liz, estamos eligiendo una fecha para nuestra boda. - Dice
Ana..
- ¿Y el compromiso? - Pregunto.
- Dice que no lo necesita. - Habla Pedro y rueda los ojos.
- Sí lo necesitas Ana, al igual que nosotros necesitamos una
despedida de soltera. - Hablo y Pedro me mira fijamente.
- No, entonces no necesitamos un compromiso. - dice Pedro
y empezamos a reírnos.
- Realmente no quiero tener una fiesta de bodas. - Dice Ana
- Quería usar el dinero para ir de viaje.
- Es una buena Idea. - Dice Sam.
- Me gustaría conocer Braslil.- Dice Ana.
- Les digo algo, ustedes organizan la fiesta de la boda y mi
regalo será un viaje a Brasil. - Les digo a los dos.
- No podemos aceptarlo. - Habla Ana y Pedro asiente,
Capítulo 85 5/8
moviendo la cabeza.
- Claro que pueden, son mis amigos. Bella y yo estaríamos
muy tristes si dijera.n que no. - Di,go y pongo cara de enfado.
-Aceptamos. - Dicen y me abrazan.
-Ahora sólo falta la fecha. - Dice Ana. - No sé si
esperamos terminar la universidad, faltan poco más de dos años.
-Todo depende de la prisa que tengas. - Dice Sam dice y
Dante empieza a llorar.
- Dámelo. - Lo agarro en brazos y empiezo a acurrucarlo, y a
hablarle.
- Creo que tengo que cambiarle el pañal. - dice Sam y
recoge su bolsa del sofá.
-Voy contigo, hay una habitación que Henry no usa, pero está
limpia. - Digo y empiezo a caminar hacia el pasillo. - ¡No van a
Véñir? - Lés prégunto a Aña y a Pedro.
- No, gracias. - Dicen y ponen cara de asco, Sam y yo nos
reímos.
Sam y yo entramos en la habi:tación que era grande y de color
verde musgo y blanco, tenía pequeños muebles en ella como la
enorme cama con una sábana negra, la funda de la almohada también
era negra. Un armario enorme, no :sé para qué sirven tantos armarios
y habitaciones si él sólo utilizaba una habitación y pasaba la mayor
parte del día en el trabajo y la noche en mi casa.
No puedo entender el gusto de la gente rica, no es que yo no
lo fuera. pero ahorraba dinero y no salía a derrochar como él.
- Sam, ¡sabes qué pasó?
- No, ¡por qué? - Pregunta, mientras deja a Dante en la
cama.
- Hendrick llamó a Henry para que hablara y parecía nervioso.
- Hablo y me siento en la cama.
- Hendrick recibió una llamada, pero fue a contestar en otra
habitación. Me di cuenta de que estaba tenso cuando miró el nombre
de la persona en la pantalla de su teléfono móvil, pero no pude leerlo.
- Habla y empieza a cambiar a Dante. - Dijo que era un asunto de
trabajo y que volvería enseguida.
-Ahora me has puesto más nerviosa. -Y realmente estaba
nerviosa por esa historia.
Capítulo 85 6/8
-Voy a presionar a Hendrick, en cuanto me diga lo que pasa te
cuento. - Dice Sam y sonríe tratando de mantener la calma. a
diferencia de Henry, Hendrick funcionó estupendamente cuando Sam
estaba siendo chantajeado emocionalmente, yo sólo me estresaba
cada vez más.
Al final de la fiesta abrí algunos regalos de Bella. Sííííí, Bella tiene
muchas cosas.
Martín le regaló un cochecito con la sillita de bebé en n***o y la
cuna en rosa con blanco.
Me he dado cuenta de que el color de su habitación será rosa
con blanco a juego con la cuna.
La ropa es lo que más tiene, creo que no compraré ropa hasta
dentro de un par de años, y me alegro de que tengamos varios
pañales.
Me sentí muy agradecida con todos por tan hermoso gesto.
- ¿Nos vamos a casa? - Me llama Henry.
- Por supuesto. - Cuando miro cerca de la puerta, veo que
hay unas 6 maletas suyas. - ¡Dios mío, Henry! Tanta ropa para un
solo hombre. - No dice nada y sólo sonríe.
-Adiós, Liz.- Dice Sam y se acerca a abrazarme con Dante,
se iban a quedar en el apartamento de Henry unos días, aún no tenía
fecha para volver a Italia.
- Nos vemos mañana. - Quedamos en comer en mi casa, ya
que era sábado.
- Por supuesto. - Se despidió de Sandra y Petter. El señor
Rodolfo y Morgana deciden quedarse con ellos, parr a ayudar a Dante.
- Déjenme ayudarles. - Habla Hendrick cuando se da cuenta
de la cantidad de maletas que tehía Henry.
Caminamos hacia el ascensor.
- Mi niña. ¿cuándo va a emp,e zar a preparar la habitación de la
pequeña? - pregunta Sandra. mientras esperamos a que suba el
ascensor.
-Todavía no lo sé, San.- Dije y nos metimos en el ascensor
con mucha dificultad, además, Henry tenía muchas maletas, eran muy
pesadas.
- Debes darte prisa. - Dice Petter. - Pronto va a llegar.
- Lo sé. - Digo y me río, pasando la mano por mi vientre y
Capítulo 85 7/8
- Lo se. - u1go y me no, pasanao ta mano por m1 vientre y
sintiendo a mi pequeña saltar como palomitas de maíz en mi vientre.
- Creo que está de acuerdo contigo, Piti. - Le digo y se ríe.
- Henry y yo podemos empezar a pintar su habitación. -
sugiere Hendrick.
- No sería u na mala idea. - Digo.
-Tú y Sam podrían quedarse en el piso de Henry o tomarse
unas mini vacaciones. - Habla Hendrick y yo lo miro fijamente. -
Hablo por el olor de la pintura, es malo para ambos. - Dice antes de
que le pregunte.
- Eso es verdad, niña. - dice Sandra y Petter asiente.
- Está bien. - Digo en cuanto el ascensor abre las puertas.
Los chicos meten las maletas en el maletero y Sandra y yo
esperamos en la parte tra.sera, Petter sube y se sienta en el asiento
del conductor.
Henry y Hendrick están fuera, hablando.
Noto que Henry está muy irritado, empieza a pasearse de un
lado a otro y se pasa las manos por el pelo.
- ¿Sabes de algo, Petter? - Pregunto, mientras los tres
tratamos de entender lo que estaba pasando fuera del coche.
- No lo sé, niña, todavía no lo sé. - Dice Petter.
Hendrick se da cuenta de nuestra curiosidad y empieza a
disimularla.
Él y Henry se despiden.
- ¿Ha pasado algo? - Pregunto, mientras Henry sube al auto y
se sienta en el asiento del conductor junto a Petter.
- No, mi pequeña. - Puedo sentir la inseguridad en su voz.
- No es lo que parece. - Sabe que estos cabos sueltos me
ponen muy nerviosa.
-Tuvimos una desviación en los negocios y aún no hemos
atrapado a los culpables. - Dice.
- ¿Y por qué no me lo dijiste antes?
- No quiero molestarte con los problemas de la mafia. -
Dice y empieza a aflojarse la corbata. -Ya tienes demasiadas cosas
que pensar y resolver.
No digo nada más, vamos a mi casa, era más de la una de la
mañana, Bella y yo estábamos muertas de cansancio.
Capítulo 85 8/8
- Eso es verdad, niña. - dice Sandra y Petter asiente.
- Está bien. - Digo en cuanto el ascensor abre las puertas.
Los chicos meten las maletas en el maletero y Sandra y yo
esperamos en la parte trasera, Petter sube y se sienta en el asiento
del conductor.
Henry y Hendrick están fuera, hablando.
Noto que Henry está muy irritado, empieza a pasearse de un
lado a otro y se pasa las manos por el pelo.
- ¿Sabes de algo, Petter? - Pregunto, mientras los tres
tratamos de entender lo que estaba pasando fuera del coche.
- No lo sé, niña, todavía no lo sé. - Dice Petter.
Hendrick se da cuenta de nuestra curiosidad y empieza a
disimularla.
Él y Henry se despiden.
- ¿Ha pasado algo? - Pregunto, mientras Henry sube al auto y
se sienta en el asiento del conductor junto a Petter.
- No, mi pequeña. - Puedo sentir la inseguridad en su voz..
- No es lo que parece. - Sabe que estos cabos sueltos me
ponen muy nerviosa.
-Tuvimos una desviación en los negocios y aún no hemos
atrapado a los culpables. - Dice.
- ¿Y por qué no me lo dijiste antes?
- No quiero molestarte con los problemas de la mafia. -
Dice y empieza a aflojarse la corbata. -Ya tienes demasiadas cosas
que pensar y resolver.
No digo nada más, vamos a mi casa, era más de la una de la
mañana, Bella y yo estábamos muertas de cansancio.
Petter ayuda a Henry con las maletas, mientras Sandra nos
prepara un aperitivo y un té.
- Sandra, ¿crees lo que dijo Henry? - Pregunto y observo su
.,
reacc1on.
- Sí. - Dice con serenidad. - Esto es lo que más ocurre en
este negocio, Henry se frustra cuando tardan en darse cuenta de lo
que estaba pasando.
- Hmm. - Ella no parecía mentir, o Henry tampoco le había
dicho la verdad.