Buenas …..

Me siento muy feliz de estar nuevamente con ustedes en

este día tan especial. Hoy el señor hablara a nuestro corazón y traerá
nuevas buenas, prepárate para que el espíritu santo haga algo grande
en tu vida.
En el culto anterior el pastor José nos habló de la ciudadanía celestial,
hablo de 4 aspectos importantes imite una buena conducta,
debemos cuidar nuestra forma de hablar, debemos confiar en Dios y
busquemos a Dios.
Cuantos hemos puesto en práctica de lo que Dios nos habló para
nuestras vidas si no hay acción no habrá cambios.
Hp
Cuantos de nosotros nos hemos enamorados curado éramos jóvenes
bueno hoy quiero contarte:
Cuando era Joven tenía un amigo con quien compartía mis secretos,
siempre salíamos a jugar futbol, íbamos a la playa en verano,
pasábamos tiempo compartiendo muchas actividades, un día me
presento a su amiga la cual me gustó mucho y decidí conquistarla, le
dije a mi amigo que me ayudara ya que él era amigo de ella para
poder ganarme su corazón, le envía una poemas, cartas, el me decía
que a ella le gustaba lo que le escribía yo era feliz, un día camino a mi
casa yo veo a mi amigo que le estaba dando un beso a una chica y al
fijarme bien era la chica de quien yo estaba enamorado, me fui sin
decir nada me sentí tan traicionado, furioso, engañado que solo
quería irme lejos, y yo decía nunca más confiare en nadie y no diré a
nadie lo que siento para que no me `pase lo mismo y decidí alejarme
de mi amigo.
Hoy estamos empezando una nueva serie que la estaremos llevando
por 6 semanas que lleva por título LIBRANDOME DE LA TRAMPA DE
SATANÁS la biblia dice que el vino a robar, matar y destruir, atreves
de las diferentes predicas veremos la luz de Cristo y no caeremos en
sus manos
La predica de hoy
¡Ofendido yo!
Santiago 3:2 Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no
ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de
refrenar todo el cuerpo.
Ofender: hacer o provocar que una persona se sienta agredida,
humillada mediante palabras o acciones que hacemos que puede
herir el corazón. La ofensas traen dolor y si no la tratamos se
convierte en amargura.
Santiago dice que ofendemos con palabras como el insulto, la injuria,
la calumnia, la mentira, la humillación y todo lo malo que pueda salir
de nuestra boca, pero también tenemos conductas con miradas de
menosprecies, diferencias y todo tipo de conducta que pueden
ofender a los demás.
La ofensa es una herramienta del diablo para llevar cautivas a las
personas muchas veces nos vemos como víctimas y culpamos a los
que nos han herido. Justificamos nuestra ira, nuestra falta de perdón,
el enojo, la envidia y el rencor que surgen. Algunas veces hasta nos
resentimos con los que nos recuerdan a otras personas que nos han
herido.
Una persona ofendida construí un muro y se protege y el amor se
empieza a enfría y se enfoca en su yo que lo hace un perfecto
candidato a la traición y la traición es el máximo abandono de una
relación y sino no la reparo se convierte en odio quiere decir que no
le queda nada de amor a esa persona.
Si alguien se identifica solo arrepiéntase y cambie esa manera de vivir
saque esa raíz de amargura y permita que la LUZ DE JESUS brille
atreves de su vida
El no cuidar nuestra lengua nuestras acciones nos hacen tropezar y
cometer errores con la cual terminamos ofendiendo a los demás esto
es propios de la naturaleza humana esto incluye cristianos y no
cristianos todos porque está en la naturaleza el pecado.
1. ¿Qué debemos hacer cuando ofendemos?
Todos por lo general ofendemos hasta el pastor Carlos en algún
momento ha ofendido y digo señor perdóname.
Mateo 5:23-24 »Por lo tanto, si presentas una ofrenda en el altar del
templo y de pronto recuerdas que alguien tiene algo contra ti, deja
la ofrenda allí en el altar. Anda y reconcíliate con esa persona.
Luego ven y presenta tu ofrenda a Dios.
De que nos sirve traer ofrendas con bombos y platillos si hemos
ofendido a alguien anda ve y busaca a la persona y arréglate con él y
has las paces y después preséntate al señor con tus ofrendas y
cántale al señor.
5 cosas importantes
Debe ser honesto con sigo mismo. Quítate el yo no fui, como
piensas mal de mí.
Ponerse en lugar de la otra persona ¿cómo cree usted que se
siente la otra persona? Y quizás así nos haríamos más sensibles a
nuestras palabras
Sea sincero al pedir disculpas a la otra persona, sea transparente y
traiga un corazón humilde
No te excuses, no dé explicaciones simplemente discúlpese, pida
perdón, humíllese por que en la escusa volvemos a ofender, pida
perdón y se acabó.
Hágalo en persona si esa persona vive lejos pídale a Dios que le dé
aún oportunidad de encuentro con esa persona, Dios contestara su
pedido muchos sanaron pidiendo perdón a su padres e hijos, amigos.
Y si no puede viajar llámele por teléfono, y su padre o persona
murieron ya no está entonces usted ponga eso en manos de Jesús,
ponga eso bajo la sangre de Jesús el conoce la intención de su
corazón y él es un Dios que hace todas las cosas nuevas y él va a
borrar esa ofensa.
2. ¿Qué debemos hacer cuando nos ofenden?
A.Una ofensa sencilla
Proverbios 20:3  Honra es del hombre dejar la contienda; Mas
todo insensato se envolverá en ella.
Dios nos honra cuando no entramos en ofensa, si alguien te ofende
y puede dejar pasar por alto hágalo, si alguien viniera y redijeran
pastor CARLOS a mí me gusta más la predica del pastor que la de
usted diría amen a mí también me gusta LA PREDICA DEL PASTOR
y yo sé que predico mejor y no hay problema y si lo puedo pasar
por alto no me va hacer ningún problema además yo conozco la
verdad y la verdad me hace libre hay gente que dice cosas que ni
ellas mismas las entienden. Mira lo que dice
Proverbio 19:11 La cordura del hombre detiene su furor, Y su
honra es pasar por alto la ofensa.
Usted no deje que la ofensa se haga una raíz de amargura en su vida
que lo puede destruir. Así que deje esa ofensa y diga yo soy más
grande que esa ofensa y yo me puedo poner sobre esa ofensa porque
yo soy un hijo de Dios.

B.Una ofensa difícil, seria: si es difícil de tratar hay una formula

bíblica de tratar
Mateo 18:15-17 Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y
repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu
hermano. Más si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para
que en boca de dos o tres testigos conste toda palabra.  Si no los
oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por
gentil y publicano.
Si alguien te ofendió anda con el primero conversa con él por lo que
dijo o hizo contra ti, si lo dejas pasar al enemigo se encargara e que
guardes en tu corazón y se llene dolor y amargura, es una de las
cosas que mejor hace, así que primero busaca a la persona y dile
realmente me dijiste eso o hablaste de mí, eso da le la oportunidad
de que él se disculpe, la biblia dice que has ganado un hermano la
clave es acción y no reacción porque muchas veces reaccionamos y
terminamos peor de lo que se inició desatamos nuestra amargura y la
meta es ganar a un hermano
Por ultimo descanse en la gracia de Dios esta nos ayudara a pasar por
alto las ofensa y perdonar y vivir en tu gracia.

Recuerda
Buscar el perdón quien has ofendido
Debes perdonar al que te ha ofendido
Ser libre de toda ofensa en Cristo Jesús

Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y, donde está el Espíritu del

Señor, allí hay libertad. 2 Corintios 3:17

Oramos
Señor te necesito en mi vida para poder afrontar toda la ofensa que
durante mi vida he recibido señor necesito de tu gracia todos los días
de tu misericordia cada mañana, señor necesito de tu gracia para
perdonar todas las ofensas que eh recibito y guárdanos de toda
ofensa

Si tu no tienes paz o tu relación con Dios no está segura has esta

oración Señor Jesús tenecito entra a mi corazón, toma el control de
mi vida te doy mi vida entera quiero que tú seas mi señor y mi
salvador dios gracias por que ahora tú eres más que mi señor y
salvador tu eres mi padre celestial y me has recibido en tu familia
entrego mi vida Solo podemos tener paz si le entregas tu vida a Dios
y le permite que gobierna en tu corazón hazlo a Jesús como tu señor
y salvador de tu vida y sane todas tus heridas. Y tú eres mi padre
celestial en cristo Jesús