Amenazas Naturales o Antrópicas
Amenazas Naturales o Antrópicas
Amenazas Naturales o Antrópicas
1. Desastre mayor ocurrido en noviembre de 1970, cuando un ciclón, seguido de una enorme
marejada, abatió la porción oriental de Pakistán en la costa de la bahía de Bengala.5 El impacto
de la marejada y la inundación subsecuente produjeron una grave destrucción. Murieron unas
500 000 personas, la mayor parte del ganado se ahogó, se destruyeron las cosechas, se
deterioró el suelo, y las fuentes de suministro de agua quedaron contaminadas.
Las exigencias impuestas a la sociedad pakistaní como resultado del desastre, surgieron en un
momento en que habla un extraordinario descontento en el país, debido a las influencias
políticas, económicas y administrativas que en ese territorio ejercía la porción occidental de
Pakistán. Los disturbios civiles que siguieron a la declaración del nuevo Estado de Bangladesh,
en marzo de 1971, obligaron a unos 10 millones de personas a emigrar hacia la India,
principalmente alrededor de Calcula, en donde recibieron alimentación y albergue en
campamentos coordinados por diversas organizaciones de voluntarios. La sobrepoblación y las
pobres condiciones de salubridad ocasionaron brotes de cólera, lo cual se sumó a los demás
problemas.
Las operaciones de auxilio para ayudar a las víctimas del ciclón se interrumpieron
temporalmente en diciembre de 1971, cuando el gobierno de la India envió su ejército a
Bangladesh para apoyar a los que luchaban por la libertad local. La guerra fue sangrienta e
intensamente destructiva, produciendo un número muy alto de heridos que requerían de
cirugía, así como la destrucción de carreteras, puentes y líneas férreas estratégicas. La guerra
también dejó otro problema grave: unas 750 000 personas no bengalíes que habían estado a
lado de la antigua administración de Pakistán Occidental, necesitaban urgentemente alimentos,
albergue y ropas.
Los efectos combinados del desastre y la guerra, de noviembre de 1970 a enero de 1972, han
afectado a toda la población de Bangladesh, unos 75 millones de personas. Más tarde, diversos
gobiernos, organismos de las Naciones Unidas, la Cruz Roja Internacional y otras organizaciones
montaron una de las operaciones de socorro más grandes desde la Segunda Guerra Mundial.
Además fue responsable de un gran impacto medioambiental, puesto que contaminó 142.000
km2 de Ucrania, Bielorrusia y Rusia. Y aunque no hay consenso, se cree que este accidente
incrementó las incidencias de ciertos cánceres en la población afectada, como el de tiroides en
niños y adolescentes.
Japón conmemora este jueves (11.03.2021) el décimo aniversario de la triple catástrofe del 11
de marzo de 2011, un terremoto, un tsunami y accidente nuclear, que ha traumatizado para
siempre al país. El gigantesco tsunami fue el principal causante del elevado número de víctimas
(18.500 muertos o desaparecidos). Olas tan altas como edificios azotaron la costa del noreste
de Japón poco después de un terremoto de magnitud 9,0. Le siguió un accidente nuclear en la
central de Fukushima Daiichi, inundada. Los núcleos de tres de los seis reactores sufrieron
fusión, dejando ciudades enteras inhabitables durante años debido a la radiación y obligando a
decenas de miles de personas a irse. Fue el peor accidente nuclear desde el de Chernóbil
(Ucrania) en 1986.
Este jueves al amanecer, Toshio Kumaki, de 78 años, oró en Hisanohama, en la ciudad costera
de Iwaki (departamento de Fukushima), sobre el muro antitsunami de hormigón construido
después de la catástrofe de 2011. "Vengo a caminar aquí todas las mañanas, pero hoy es un día
especial", afirmó, rezando hacia el sol naciente.
En la región se han previsto numerosas ceremonias públicas y privadas, al igual que en Tokio, y
se guardará un minuto de silencio a las 14H46, la hora exacta del terremoto de 2011, uno de
los más violentos registrados en el mundo.
En Miyagi, uno de los tres departamentos del noreste más afectados, los habitantes llevarán a
cabo operaciones de búsqueda con la esperanza de encontrar a algún ser querido. La
probabilidad de que tengan éxito parece escasa, pero lo cierto es que la semana pasada fueron
identificados los restos de una mujer arrastrada por el tsunami hace diez años. Su hijo quedó
liberado de una incertidumbre insoportable y puede, por fin, hacer el duelo.
Este domingo, la dirección operativa del Plan Infoca ha decretado seis desalojos preventivos en
los municipios de Jubrique, Genalguacil, Faraján, Pujerra, Júzcar y Alpandeire. Las personas que
se encontraban en estas poblaciones este domingo fueron trasladadas al Polideportivo 'El
Fuerte' de Ronda, y posteriormente fueron realojados en casas de amigos, familiares y
residencias de ancianos.
Todos los desalojos se han producido de forma anticipada y con las máximas medidas de
seguridad, de acuerdo al Plan de Contingencia diseñado y, según la Junta de Andalucía, los
alcaldes de estas seis poblaciones habían sido prealertados y han estado informados en todo
momento del minuto a minuto del operativo.
En primer lugar, se produjo el desalojo preventivo de Jubrique durante esta madrugada. A
primera hora de la mañana de este domingo, la dirección operativa del Infoca ha decretado
también el desalojo preventivo del municipio malagueño de Genalguacil, de unos 400 vecinos.
Y horas más tarde, por seguridad, han decidido desalojar Faraján,Pujerra, Júzcar y Alpandeire.
Pasadaslas 21.00 horas, más de un millar de vecinos de las de las urbanizaciones Forest Hill y
Abejeras de Estepona y de la urbanización Montemayor de Benahavís han podido regresar a
sus viviendas.
"El incendio ha tenido una evolución negativa durante la noche, si bien los trabajos durante la
madrugada han sido efectivos, han funcionado y los objetivos previstos se han cumplido", ha
dicho este domingo el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías
Bendodo.
Además, según ha explicado, las circunstancias meteorológicas han hecho que se produzca un
nuevo fuego en Jubrique provocado por el paveseo, es decir, el material incandescente
procedente del incendio.
Con este nuevo fuego, se ha complicado la situación hasta tal punto que rápidamente se han
unido los dos incendios. Por eso han decidido desalojar de manera preventiva a los vecinos de
Genalguacil y Jubrique. "Seguimos trabajando con todos los medios aéreos y por tierra, con
todos los esfuerzos de los profesionales", ha resaltado.
Las llamas han calcinado 7.400 hectáreas y 85 kilómetros de perímetro de los municipios
malagueños de Estepona, Jubrique, Genalguacil y Benahavís.
Ante esta situación, el Gobierno ha activado, tras la petición realizada por la Junta de Andalucía
este domingo, a la Unidad Militar de Emergencias para intervenir en el incendio.
Esta decisión se tomó después de que los presidentes del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la
Junta de Andalucía, Juanma Moreno, mantuvieran una conversación telefónica sobre el estado
del incendio, en la que acordaron el despliegue de la UME en el momento en que los servicios
técnicos que dirigen el dispositivo así lo considerasen necesario.
El alcalde de Jubrique, Alberto Jesús Benítez, ha señalado que la situación en relación con el
incendio en Sierra Bermeja, que ha obligado al desalojo preventivo de seis municipios, incluido
Jubrique, es "bastante grave, es horrorosa".
"La situación es bastante grave, el incendio estaba a 300 metros de la localidad", ha explicado
el alcalde, en declaraciones a Europa Press, al tiempo que ha añadido que se ha podido realizar
un cortafuegos, que "parece que ha parado el avance, al menos y de momento, hacia el
municipio", que tiene algo más de 500 habitantes. No obstante, ha dicho que la situación es
"horrorosa, es dramática".
Por su parte, el alcalde del municipio malagueño de Genalguacil (uno de los municipios
evacuados), Miguel Ángel Herrera, ha lamentado este domingo el avance del incendio de Sierra
Bermeja.
"Lo que llevamos varios días anunciando. El fuego se aproxima a Genalguacil. Es una catástrofe
medioambiental, natural, emocional y humana", ha escrito en Twitter.
En total, 41 medios aéreos se han sumado con las primeras luces del día a los trabajos para
extinguir las llamas, según informa Emergencias Andalucía.
La Guardia Civil y la Policía Nacional, con la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) y
la colaboración de las agrupaciones de Protección Civil de Yunquera, Ronda, Algatocín,
Moclinejo, Antequera, Teba y Canillas de Aceituno están realizando este desalojo preventivo,
han precisado desde el sistema Emergencias 112 Andalucía.
Durante la noche, los efectivos han continuado la lucha contra las llamas, con la intervención
de 350 profesionales, 20 vehículos pesados de extinción y tres máquinas pesadas y medios
aéreos.
Las últimas estimaciones ascienden a 6.000 las hectáreas afectadas y apuntan a que buena
parte de los 40 kilómetros de perímetro de las llamas ya se han dado por estabilizados.
En la noche del sábado quedaban cuatro zonas que preocupan al Plan Infoca por la actividad
del fuego y por ello esta madrugada han continuado los trabajos.
Este sábado, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, confirmó que el incendio
ha sido intencionado y advierte: "Daremos con los autores. Que no duerman tranquilos".