Ensayo D. Civil
Ensayo D. Civil
Ensayo D. Civil
EQUIPO DE TRABAJO N° 2
INTEGRANTES:
Cancino Patricia
Gutierrez Valdizan Jairo
Nolazco Jaime
Ponte Ampuero, Verónica
Rodríguez Izarra, Cristian Alexander
2022 - II
RESUMEN
Si bien el Perú ha hecho importantes avances en términos de reducción de la pobreza en
la última década, la discriminación social continúa siendo un problema que ha vuelto a tomar
importancia en los círculos de debate académico y de políticas públicas. Efectivamente, hay
desigualdades que no desaparecen con el crecimiento económico y que son difíciles de erradicar.
Esta situación ha planteado un reto para el Estado, que se ha visto en la necesidad de asumir esta
tarea para poder continuar creciendo como país y para saldar una deuda histórica con un gran
sector de la población peruana que siente que vive en un país profundamente desigual.
Existe consenso en reconocer que la pobreza es una situación multi causal y a la vez
efecto de la pérdida de libertad en sus diversas dimensiones, tal como lo concibe el Premio Nóbel
de Economía Amartya Sen, estas son las dimensiones vinculadas a los derechos humanos, derecho
a la propiedad privada, trabajo y empleo decente, acceso a los servicios sociales básicos
(educación, salud y vivienda segura), acceso al derecho de ejercer poder, organizarse
políticamente y a la transparencia y rendición de cuentas del Estado (Sen, 2000).
El objetivo de la investigación es evaluar la incidencia de los factores estructurales y
coyunturales relacionados con la discriminación en la pobreza, ver el impacto de la capacidad
operativa del Estado.
INTRODUCCIÓN
En el artículo 2 inciso 2 de la Constitución Política del Perú, se declara que toda persona
tiene derecho a la igualdad ante la ley. Sin duda, en estos últimos años la discriminación se ha
venido planteando de manera creciente como tema de discusión pública. Aunque ésta es una
inflexión social difícil aún de valorar, lo cierto es que se ha incrementado el debate público en
torno a la discriminación y se han multiplicado también las reivindicaciones de antidiscriminación.
Debe tenerse en cuenta además que cuando nos referimos de igualdad ante la ley ello implica la
existencia de una ley de carácter universal y en principio general y abstracta; sin embargo, el
poder que tiene el Estado es la obligación de buscar la igualdad real, concreta, por lo tanto, se
podrá regular situaciones para determinados grupos sociales, o dar leyes singulares.
El pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del artículo 26: nos indica que
“Todas las personas son iguales ante la ley y tienen derecho sin discriminación a igual protección
de la ley. A este respecto, la ley prohibirá toda discriminación y garantizará a todas las personas
protección igual y efectiva contra cualquier discriminación por motivos de raza, color, sexo,
idioma, religión, opiniones políticas o de cualquier índole, origen nacional o social, posición
económica, nacimiento o cualquier otra condición social”. Revisaremos casos de trato
diferenciado ilícito. Si bien en todos se denunciaron prácticas discriminatorias, el análisis debía
verificar si el trato diferenciado era justificado (lícito) o no (ilícito). El trato diferenciado ilícito se
distingue de la discriminación por cuanto no está basado en motivos prohibidos por el
ordenamiento jurídico nacional y supranacional (raza, origen, condición socioeconómica,
etcétera), sino en una razón injustificada o no razonable, sin afectar la dignidad de las personas.
En el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en primer lugar, el ODS1
denominado Fin de la pobreza, se pretende “erradicar para todas las personas y en todo el mundo
la pobreza extrema” (Naciones Unidas, 2018). Así también, en lo dispuesto en la ODS10
denominado Reducción de las desigualdades, se pretende “potenciar y promover la inclusión
social, económica y política de todas las personas, independientemente de su edad, sexo,
discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición” (Naciones
Unidas, 2018). Es en ese menester, que resulta evidente que no es posible hablar de una
reducción de la pobreza y la discriminación sin contemplar las variables y escenarios que se
presentan en el presente ensayo.
En ese sentido, con la intención de compartir una reflexión sobre la pobreza y su
vinculación con la discriminación y en función de la labor del ensayista que asume una postura
crítica e innovadora sobre una problemática, nos planteamos la interrogante ¿Qué relación existe
entre la discriminación y la pobreza en el siglo XXI? Ante esta interrogante, asumimos la postura
de que los esfuerzos implementados para erradicar la discriminación hacia las personas
clasificadas como pobres son insuficientes. Para demostrar la consistencia de nuestra postura, se
expondrá tres premisas a modo de argumentación; ¿qué es la discriminación?, ¿porque se
discrimina?, ¿dónde se discrimina?
ARGUMENTACIÓN
¿Qué es discriminación?
Desde la perspectiva académica la definición de “discriminación” alude al trato diferenciado que
genera desventajas en ciertos grupos sociales, bien sea a partir de determinadas características,
inherentes a las personas pertenecientes a aquellos o bien por otro tipo de razones no justificadas
que al final perjudican a este tipo de personas (Blank et al 2004). También es conveniente señalar
que existe una brecha entre las concepciones populares y las definiciones legales de
discriminación. De acuerdo a la Defensoría del pueblo, la noción de discriminación alude al “trato
diferenciado basado en determinados motivos prohibidos por el ordenamiento jurídico que tiene
por objeto o por resultado la anulación o menoscabo en el ejercicio o goce de derechos y
libertades fundamentales de una persona o de un grupo de personas” (Defensoría del pueblo
2007: 29). Esa definición supone la concurrencia de tres elementos: un trato diferenciado o
desigual, un motivo o razón prohibida por el ordenamiento jurídico, y un objetivo o resultado
sobre el menoscabo del reconocimiento, ejercicio o goce de un derecho. Sin embargo, desde la
concepción popular, la discriminación tiene alcances bajo situaciones y modalidades que exceden
esta definición. En base a este último hemos buscado sistematizar en cuatro modalidades de
“discriminación”.
Una primera modalidad articula la discriminación en función del maltrato. Se expresa en
la agresión verbal o física, la estafa o el engaño, el menosprecio no verbal, etc., y no se cuestiona
el hecho que exista una diferenciación en el trato. El evento es discriminatorio porque las
acciones son indeseables o malas en sí mismas; las acciones son inmorales, así sean pocos,
muchos o todos los que las sufran.
Una segunda modalidad de discriminación, y la más frecuente, es aquella que se articula
como trato diferenciado. De acuerdo a esta concepción, la discriminación si hace referencia
directa a situaciones de desigualdades de trato motivadas por diferencias consideradas como
ilegitimas, irrelevantes, impertinentes o injustas. Son tratos desiguales, basados en diferencias o
motivos ilegítimos que de manera sistemática perjudican a unos y benefician a otros. Sin lugar a
dudas, la modalidad más frecuente de discriminación es la del trato diferenciado; es la única que
se presenta en todos los lugares de ocurrencia y en todas las localidades.
Una tercera modalidad considera la discriminación como marginación hacia las personas.
En esa línea de pensamiento, un acto discriminatorio es aquél que perjudica, relega o margina a
alguien, incluso en aquellas situaciones donde no existe un objetivo explícito dirigido a excluir a
alguien pero que plantea condiciones que no toman en cuenta la falta de oportunidades de
ciertos grupos sociales.
Finalmente, una cuarta definición de discriminación es aquella que la concibe como
perjuicio. Esta modalidad da cuenta del hecho que lo discriminatorio es que se perjudique a las
personas, y más específicamente que las haga sentirse “humilladas”, “mal”, “menos”, etc. La
discriminación no está dada por la forma o la tipificación de la acción (maltrato), tampoco por los
motivos que llevan a un trato desigual e injusto (trato diferenciado), ni por la falta de
oportunidades sociales (marginación); aquella queda definida sobre todo por las consecuencias
de la acción. Como es uno de los casos que investigo INDECOPI.
“Impedimento de ingreso por apariencia de extrema pobreza Siguiendo información del
Área de Servicio de Atención al Ciudadano, la Secretaría Técnica de la Comisión de la Oficina
Regional del Indecopi de Cajamarca inició un procedimiento de oficio contra Micaba EIRL debido a
que se había constatado que se había negado a brindar sus servicios a un consumidor aduciendo
que este no se encontraba adecuadamente vestido que estaba incluso descalzo y en condiciones
mínimas de higiene, por ser indigente. El denunciado señaló que el estado del consumidor
incomodaba a los demás clientes y que la denuncia buscaba afectar su buena imagen como
empresa. Mediante la Resolución Nº 0313-2013/Indecopi-CAJ del 22 de octubre de 2013, la
comisión halló responsable al denunciado por infringir los artículos 1.1, literal d), y 38 del código
debido a que incurrió en un acto de discriminación, al haberse negado a atender a un consumidor
en el interior de su establecimiento comercial debido a su condición socioeconómica (indigencia).
Fue sancionado con una multa de 4 UIT. La sala tomó en cuenta el acta de inspección de la
Secretaría Técnica de la comisión, en la que se constató que el consumidor acudió al local Don
Paco, de Micaba, para contratar el servicio de restaurante. No obstante, la proveedora se negó a
brindárselo dentro del establecimiento y le ofreció más bien que el pedido fuese para llevar, ya
que el consumidor “no portaba la vestimenta adecuada e higiene como para permanecer en el
establecimiento”. La sala determinó que no había medio probatorio alguno para acreditar que
Micaba hubiese informado a los consumidores de manera oportuna que era necesario vestir de
alguna forma en especial para ingresar a su establecimiento.”
¿Dónde se discrimina?
En relación a este punto tomaremos como referencia a Valdivia et al. (2003) cuyos resultados
confirman la relevancia que tiene, en la percepción de la población, la discriminación en servicios
de salud, dependencias públicas, centros educativos, y al solicitar empleo. Como es el caso de un
despido arbitrario a una mujer por estar en estado de gestación, del cual tenía un Contrato
Administrativo de Servicios en la Municipalidad Distrital de Sam Jerónimo, en el cusco, el cual el
empleador le comunicó la culminación del vínculo laboral y posteriormente la trabajadora le
comunica que se amplié su contrato ya que se encuentra en estado de gestación.
Cepal, N. U. (2018). Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible: una oportunidad para
América Latina y el Caribe.
https://repositorio.cepal.org/handle/11362/40155
Planas, M., & Valdivia, N. (2009). Discriminación y racismo en el Perú: un estudio sobre
modalidades, motivos y lugares de discriminación en Lima y Cusco. GRADE/UPCH,
mimeo, Lima, mayo.
http://www.grade.org.pe/upload/publicaciones/archivo/download/pubs/
Mimeo_DISCR_RACIS_VSFINAL2009.pdf