Peronismo
Peronismo
Peronismo
En el día de hoy vamos a recorrer un poco la historia argentina y los acontecimientos más
destacados de los primeros mandatos de Juan Domingo Perón; la intención de esta primera clase es
brindarles herramientas del contexto histórico a fin de poder rastrear elementos que posteriormente
nos permitan analizar las políticas educativas enmarcadas en estos gobiernos.
Contexto
Después de 1945, en casi todo el mundo occidental, surgió una forma de Estado que acompañó una
nueva etapa del capitalismo caracterizada por un intenso crecimiento económico. A dicha forma
política, creada para resolver la crisis del Estado liberal, se la llamó ESTADO BENEFACTOR o
ESTADO DE BIENESTAR, porque se pusieron en marcha políticas sociales que tendieron a mejorar
las condiciones de vida de los sectores populares y medios: servicios públicos gratuitos (salud,
educación), un sistema de seguridad social (jubilaciones, pensiones), derechos y beneficios
económico sociales para los trabajadores (políticas de pleno empleo, salario mínimo, vacaciones
pagas, aguinaldos, planes de viviendas, sindicalización, seguros de desempleo). Por el peso decisivo
que tuvieron las empresas públicas destinadas al sector industrial, a esta forma estatal también se la
llamó Estado industrial.
El Estado de Bienestar llegó a concebirse como un estabilizador interno de tipo económico y político
que ayudaba a regenerar las fuerzas del crecimiento económico y evitaba que la economía cayese
en espirales descendentes hacia profundas recesiones.
1. a) La obligación explícita que asume el aparato estatal de suministrar asistencia y apoyo a los
ciudadanos que sufren necesidades y riesgos específicos característicos de la sociedad
mercantil;
2. b) el reconocimiento del papel formal de los sindicatos tanto en la negociación colectiva como
en la formación de los planes públicos.
El populismo en América Latina nació como una alianza entre clases sociales antagónicas, en
proceso de formación (burguesía, por un lado, y proletariado, campesinos y clases medias, por el
otro), guiadas por el propósito de confrontar y derribar el Estado Oligárquico, heredero del
colonialismo, que desde el siglo XIX predominaba en todos los países del subcontinente. Las crisis
mundiales de principios del siglo XX, agudizaron ciertas contradicciones y provocaron convulsiones
políticas internas en los países dependientes del capitalismo, como lo eran los latinoamericanos.
Así podemos observar que las políticas sociales del peronismo no son el resultado de la
improvisación…
A modo de introducción…
Durante más de una década (1943-1955) la figura de Juan Domingo Perón dominó la escena
política argentina. Eran años de grandes cambios y profundas transformaciones. El
gobierno peronista logró la inclusión de la clase trabajadora a la vida política
nacional y la formación de una verdadera identidad obrera. Sin embargo, su manera de
manejar las cuestiones políticas y económicas le valieron muchos opositores y enemigos.
Su figura y la de su esposa María Eva Duarte de Perón generaron los más extremos
sentimientos: idolatría por una parte y rechazo visceral por la otra. A través del estudio de este
período, tan importante de la historia argentina, podrán elaborar sus propias conclusiones
El Golpe de 1943 puso fin al gobierno de Ramón Castillo. Los autores del golpe planteaban que su
objetivo era terminar con el fraude y la corrupción imperante a lo largo de la década del 30 ́. El nuevo
gobierno, del General Ramírez, limitó los derechos constitucionales. Avanzó interviniendo los
sindicatos, las universidades, persiguió y detuvo a dirigentes políticos y proscribió al partido
Comunista. Impuso la censura, clausuró el Congreso y disolvió los partidos políticos. En enero de
1944, Ramírez frente a la presión norteamericana, rompió relaciones con el eje. Esta decisión generó
descontento en algunos sectores militares del GOU y Ramírez fue reemplazado por el General
Farrell, en febrero de 1944.
El Coronel Juan Domingo Perón que participó del golpe fue ocupando diferentes cargos, Ministro de
Guerra, Secretario de Trabajo y Vicepresidente, concentrando todo ese poder en su persona. Desde
la Secretaría de Trabajo llevó adelante una importante labor en el plano de la legislación laboral.
Mencionamos entre otras:
Era innegable que, a medida que el poder y la popularidad de Perón crecían, las presiones de la
oposición se hacían más fuertes. Las corporaciones patronales, así como algunos sectores de las
Fuerza Armadas, veían con preocupación el ascenso de Perón. El gobierno militar preocupado por
los diversos cuestionamientos recibidos, decidió arrestar y encarcelar a Perón en la isla Martín
García.
Los sindicatos comenzaron a movilizarse y a convocar a los obreros a la Plaza de Mayo para pedir la
liberación de Perón. La marcha estaba convocada para el día 18 de octubre pero los sucesos se
precipitaron y el 17 de octubre de 1945 una multitud llegó hasta la plaza reclamando la presencia de
Perón.
El gobierno cedió a las presiones y Perón fue trasladado a la capital y, desde allí, a la Casa de
Gobierno. Se dirigió, desde los balcones de la Casa Rosada, a los trabajadores que lo esperaban y
aclamaban. Unos días más tarde, el gobierno militar, anunció el llamado a elecciones para el 24 de
febrero de 1946.
La preparación para las elecciones dividió a la sociedad argentina. Los sindicatos crearon el Partido
Laborista, que tuvo el apoyo de parte de las Fuerzas Armadas y de la Iglesia. Postularon a Perón
como candidato a presidente. Por otra parte, los opositores como la Sociedad Rural, la Unión
Industrial, la Bolsa de Comercio y hasta la Embajada de los Estados Unidos encabezaron la Unión
Democrática que postulaban a los radicales José Tamborini y Enrique Mosca.
“La campaña llegó a su culminación dos semanas antes de los comicios, cuando los Estados Unidos
dieron a publicidad el “Libro Azul” sobre la Argentina. El documento acusaba a Perón y a sus
allegados de colaborar con el nazismo, (...). Perón sacó provecho del ataque al presentar los
comicios como una opción entre él o Braden, el ex embajador (...) a quien se debía la publicación del
libro”.
Perón apeló al nacionalismo de los votantes con el lema: Braden o Perón. De esta manera trataba de
evidenciar la influencia de los Estados Unidos en la política Argentina. Si no ganaba el partido
laborista, el triunfo no sólo sería de la oposición sino de los Estados Unidos
Perón se propuso concretar tres grandes objetivos a partir del inicio de su mandato:
Independencia Económica
Soberanía política
Justicia Social
Es importante recordar, que el mundo estaba dividido al finalizar la segunda guerra mundial (1945),
en dos grandes bloques. Era el período de la Guerra Fría, en el que los Estados Unidos y la Unión
Soviética se enfrentaban en forma indirecta a través de conflictos o guerras periféricas.
Frente al contexto de la Guerra Fría, Perón establece entonces, su Tercera Posición, “Ni Yanquis ni
Marxistas, peronistas”, en la que instaura un claro distanciamiento de la política bipolar que dividía al
mundo.
Para lograr la soberanía política se debía promover la independencia económica. A su vez, el estado
en forma novedosa, ligaría la economía a los aspectos sociales.Se intentaba impulsar el desarrollo
de la economía generando, a su vez, el bienestar social.
Las ideas centrales del pensamiento peronista, doctrina a la que Perón llamó justicialista, se
presentaba como una alternativa ante los dos grandes sistemas políticos e ideológicos existentes, el
capitalista, liderado por los Estados Unidos y el comunista, encabezado por la Unión Soviética.
Fue muy activa su política en materia de salud, asimismo se organizaron las obras sociales basadas
en los aportes de los trabajadores, los patrones y el Estado, bajo control sindical. También se
extendió el sistema de jubilaciones.
Eva Perón desempeñó un papel muy importante a través de la Fundación Eva Perón. Desde allí se
hizo cargo de la ayuda social a los humildes.
Otro avance importante, en materia social, fue la implementación de las vacaciones anuales pagas y
el desarrollo de la hotelería gremial y el turismo social. Estos avances permitieron a muchas familias
acceder a las vacaciones en las playas o en la sierra. En la temporada de verano de 1940, Mar del
Plata recibió 380.000 turistas y en la de 1955, llegaron 1.400.000.
Perón intentó mantener el apoyo de las Fuerzas Armadas, presentándose como un hombre del
ejército y satisfaciendo sus demandas profesionales. Crecieron los cargos en los rangos más altos
del ejército, se incrementó el presupuesto y se modernizó su equipamiento.
La Iglesia apoyó a Perón durante sus primeros años de gobierno. Por su parte, Perón mantuvo la
enseñanza religiosa en las escuelas, integró a su gobierno militantes católicos a desempeñar cargos
públicos y aumentó su presupuesto.
Perón estuvo acompañado en su labor de gobierno por Eva Perón quien se fue transformando en un
verdadero nexo entre el pueblo y Perón. Esto generaba alrededor de su figura grandes odios por
parte de los sectores opositores al peronismo, la alta burguesía, sectores medios, la iglesia y parte
de las Fuerzas Armadas, que veían con recelo el carisma y los importantes espacios de poder que
iba ocupando.
Otro hecho sumamente significativo se registra en 1949 , Perón convocó a elecciones para elegir a
los futuros constituyentes. Estos integrarían la Asamblea Constituyente que tendría por objeto
reformar la Constitución Nacional.
La reforma no tocó la parte dogmática: Declaraciones, Derechos y Garantías, del texto
constitucional, pero centró sus modificaciones en la incorporación de los derechos de los
trabajadores, de la familia, de los ancianos, de la educación popular.
A pesar de toda la obra desarrollada en su gestión, Perón reforzó el gobierno con una serie de
medidas de control y represión. Los miembros de la Corte Suprema fueron reemplazados por jueces
cercanos al gobierno. Muchos profesores fueron despedidos de las universidades, las emisoras de
radio fueron paulatinamente adquiridas por personas cercanas a Perón y se impuso en ellas el
discurso oficial; además algunos periódicos fueron censurados e incluso expropiados, como La
Prensa en 1951.
Al cumplirse el primer mandato de Perón, el gobierno se preparó para presentarse en las próximas
elecciones de 1952. Eva Perón nunca ocupó un cargo político, sin embargo en 1951 fue propuesta
por los sindicatos como candidata a la vicepresidencia.
Este proyecto no llegó a buen término porque su candidatura fue impugnada por distintos sectores
de la oposición, entre ellos las Fuerzas Armadas. Por otra parte, estaba muy enferma y terminó
falleciendo el 26 de julio de 1952. Sus restos fueron despedidos por una multitud pocas veces vista.
Con su muerte Perón perdió un apoyo realmente sólido de su gestión. (Para mayor
información: Filosofía aquí y ahora - La muerte de Eva Perón - Temporada 7 Capítulo 7 - Jose
Pablo Feinmann)
Perón logra llegar a ocupar por segunda vez la presidencia, con el 62 % de los votos, antes del
fallecimiento de su esposa. Sin embargo, el contexto en el que asumía era muy diferente al del año
1946.
La oposición, sectores conservadores, parte de las Fuerzas Armadas, la Iglesia Católica, los
intelectuales entre otros, fue tomando más fuerza y hubo algunos intentos de levantamiento militar,
entre 1951 y 1952, que fueron desarticulados. Frente a estos hechos la política del gobierno se
endureció y provocó que la oposición visualizara, aún más, al peronismo como autoritario y deseara
con tenacidad su caída.
El año 1955 se inició con un clima enrarecido, se vislumbraban tensiones, sospechas y versiones
encontradas. En junio, la celebración religiosa de Corpus Christi se transformó en una marcha contra
el gobierno. Dos miembros de la iglesia, Monseñor Tato y Novoa, fueron expulsados, acusados de
haberla organizado.
Unos días después, el 16 de junio, estalló un alzamiento militar. Aviones de la Marina, bombardearon
la Casa de Gobierno y la Plaza de Mayo dejando un saldo de gran cantidad de muertos y heridos.
Civiles inocentes que circulaban por la plaza murieron por el efecto de las bombas arrojadas
impunemente. No hay coincidencia en la cifra de muertos, las oficiales hablan de 373 muertos, otros
indican que pudieron rondar los 2.000.
La reacción no se hizo esperar y esa misma noche grupos de peronistas quemaron las principales
iglesias de Buenos Aires y la Curia Metropolitana. Creían ver en el intento de alzamiento militar la
complicidad de la iglesia.
Luego de algunos días de resistencia, Perón entregó el gobierno a una Junta de militares que
negoció con Lonardi las condiciones de la renuncia. Partió entonces, en una cañonera de bandera
paraguaya, hacia un largo exilio y el General Lonardi asumió la presidencia de facto.